observador semanal del 29/12/2011

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E stamos en tiempos de Navidad y es moda y cos- tumbre compartir buenos deseos: tarjetas, mensajes telefónicos, reflexiones en el facebook y ahora tam- bién carteles y publicidad que estimu- lan al perdón, a la bondad y a la alegría. Paralelamente, cada vez se experi- menta más desencanto y tristeza en las familias y los jóvenes, tanto que ni las farras, ni las drogas, ni el sexo desordenado, ni las muchas compras de fin de año logran aminorarlos. ¿Qué ha pasado con el famoso espí- ritu festivo de los latinos? ¿De dónde viene la paz y la alegría de la que hemos sido siempre testigos y emba- jadores en el mundo? Fijémonos por unos momentos en la música, en las expresiones maravillosas del arte en nuestra rica tradición. Toda esa belle- za, todo ese gusto por la vida, son fru- tos de la experiencia del perdón de los pecados en el sacramento de la recon- ciliación. Es notable, cómo en los países de tradición cristiana católica se desco- nocía hasta hace poco esa epidemia de depresiones y sinsentidos de los que la literatura da cuenta desde hace siglos en los países anglosajones. Justamente en estos sitios surgió el psicoanálisis como un paliativo de la necesidad de reconciliación con la vida, la naturaleza, Dios y la propia historia, como deseo voluntarista de aliviar los dolores y encontrar la paz pero en la huida del dolor y en la bús- queda reduccionista de la satisfacción de los deseos carnales. Experiencia de reconciliación que los cató- licos, sin embargo, siempre hemos asociado al sacramento de la penitencia. Pero hoy parece un contrasentido hablar de peni- tencia y alegría. Y esto por la carga negativa que la modernidad ha puesto en todo lo que admita de algu- na manera la realidad del dolor, del límite y de la res- ponsabilidad ante el mal; también se ha extendido esta mentalidad por la falta de práctica que muchos cristianos tienen de la confesión y por el desencanto que varios pastores trasmiten hacia este fabuloso “signo visible” de la reconciliación del hombre con Dios a través de Jesucristo. Nuestra alegría no viene de las terapias externas, ni de las prédicas, ni de los mensajes positivos, ni de los mantras, ni de las autoliberaciones interiores, ni mucho menos de la discoteca o la pornografía, ¡nuestra alegría nos viene del corazón! Un corazón inundado, sorprendido, extasiado por una luz inmensa y, al mismo tiempo, siempre nece- sitado, siempre débil, siempre dependiente de Otro que lo ayude a palpitar. “Un corazón contrito y humillado, Tú no lo desprecias, Señor”. Ciertamente duele y avergüenza reconocer nues- tra culpa, nuestra responsabilidad. Sería más fácil culpar al sistema, a los traumas, a los sinsabores de la vida que parecen impulsarnos al mal. “¿No somos de carne y hueso? ¿Por qué entonces tanta exigen- cia?” ¡Justamente porque Dios nos conoce en nues- tras limitaciones se ha hecho carne! ¡Esto es la Navidad! ¡Esto el Año Nuevo! No unas fechas en el calendario, sino un memorial, un hacer presente aquí y ahora que somos amados de Dios en nuestra pequeñez, en cada detalle, en cada segmento de nues- tro ser. Y esto lo vivimos en la confesión donde el Espíritu Santo sana nuestro yo de su fragmentación, de su imposibilidad de aceptar la vida y nos anima a aventurarnos a vivirla con entusiasmo, con pasión. El pecado de orgullo, la autonomía moral que todo lo condiciona al “yo puedo” nos llevan a la tris- teza. Es una siembra forzosa donde todo se reduce a la ley, al discurso políticamente correcto, al purita- nismo que no fuma, ni bebe, ni cruza la calle fuera de la franja peatonal, pero tampoco ama, tampoco per- dona porque no experimenta la gratuidad del per- dón de Dios a través de Cristo. Así, morimos en vida. Detrás de esa fachada de felicidad superflua del siem- pre “pasarla bien” se esconde la frialdad de los sepulcros. Ya no hay calor en nuestras relaciones, no hay profundidad y Dios debe gritarnos de nuevo: Pero si es tan fuerte la experiencia de Dios en este sacramento, ¿por qué está tan arrinconado? ¿Por qué no se ven filas como las que for- maban los penitentes ante el confesio- nario del san Juan María Vianey (con- virtiendo a su pueblito Ars en 'el gran hospital de las almas' de Francia y Europa) o del Padre Pío que aún con severidad atraía a miles hacia la con- fesión? ¿No será que, como decía el padre Cantalamessa predicando a Juan Pablo II y a sus colaboradores en el 2004: Y sobre la necesidad de que los mis- mos pastores renueven su práctica recordamos al beato Juan Pablo II que en el 2002 escribía: A ellos habría que recordarles lo que decía a San Leopoldo a sus feligreses en el confesionario: Ojalá en este tiempo de Navidad experimentemos la confesión y la vivamos como decía Claudel en este poema: "¡Talita kumi, niña, a ti te digo, levántate!" “Renovar el sacramento en el Espíritu quiere decir vivir la confe- sión no como un rito, una costumbre o una obligación canónica, sino como un encuentro personal con el Resucitado… La Iglesia latina ha intentado explicar este sacramento con la idea jurídica de un proceso del que se sale absuelto, o no… Pero en la parábola del hijo pródigo el padre no se comporta como juez, sino precisa- mente como padre; antes aún de que el hijo haya terminado de hacer su confesión, le abraza y ordena la fiesta. El Evangelio es el verdadero `ma- nual para confesores`”. “es evi- dente que los sacerdotes, como receptores del Sacramento de la penitencia, están llamados a apli- carse en primer lugar a sí mismos estas certezas con sus relativas orientaciones prácticas”. «Estamos aquí dos pecadores: ¡que Dios tenga piedad de ambos!». «¡Dios mío, he resucitado y estoy otra vez Contigo! Dormía y estaba tumbado como un muerto en la noche. Dios dijo: Hágase la luz y me he despertado ¡como se lanza un grito! ¡He resucitado y me he despertado, estoy en pié y comienzo el día que empieza! Estoy absuelto de todos mis pecados que he confesado uno por uno. El anillo nupcial está en mi dedo y mi rostro está limpio. Soy como un ser inocente en la gracia que me has concedido». Observador Semanal El perdón es imposible sin la confesión RESPONSABLES: Guillermo Lesmes - Nathalia Lemir - www.sanrafael.org.py - mail: [email protected] - AÑO VII - Nº 338 - JUEVES 29 DE DICIEMBRE DE 2011 2 4 2 4 6 7 PALABRAS DE CERTEZA Y ESPERANZA OBSERVAD SEMANAL R Educar a los jóvenes en la justicia y la paz Amigos que buscan la verdad y “una historia que continuar” La crisis como conciencia de la justicia y camino hacia la paz La novedad de esta Navidad

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Observador Semanal del 29/12/2011

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Page 1: Observador Semanal del 29/12/2011

Estamos en tiempos deNavidad y es moda y cos-tumbre compartir buenos

deseos: tarjetas, mensajes telefónicos,reflexiones en el facebook y ahora tam-bién carteles y publicidad que estimu-lan al perdón, a la bondad y a la alegría.Paralelamente, cada vez se experi-menta más desencanto y tristeza enlas familias y los jóvenes, tanto que nilas farras, ni las drogas, ni el sexodesordenado, ni las muchas comprasde fin de año logran aminorarlos.

¿Qué ha pasado con el famoso espí-ritu festivo de los latinos? ¿De dóndeviene la paz y la alegría de la quehemos sido siempre testigos y emba-jadores en el mundo? Fijémonos porunos momentos en la música, en lasexpresiones maravillosas del arte ennuestra rica tradición. Toda esa belle-za, todo ese gusto por la vida, son fru-tos de la experiencia del perdón de lospecados en el sacramento de la recon-ciliación.

Es notable, cómo en los países detradición cristiana católica se desco-nocía hasta hace poco esa epidemia dedepresiones y sinsentidos de los que la literatura dacuenta desde hace siglos en los países anglosajones.Justamente en estos sitios surgió el psicoanálisiscomo un paliativo de la necesidad de reconciliacióncon la vida, la naturaleza, Dios y la propia historia,como deseo voluntarista de aliviar los dolores yencontrar la paz pero en la huida del dolor y en la bús-queda reduccionista de la satisfacción de los deseoscarnales. Experiencia de reconciliación que los cató-licos, sin embargo, siempre hemos asociado alsacramento de la penitencia.

Pero hoy parece un contrasentido hablar de peni-tencia y alegría. Y esto por la carga negativa que lamodernidad ha puesto en todo lo que admita de algu-na manera la realidad del dolor, del límite y de la res-ponsabilidad ante el mal; también se ha extendidoesta mentalidad por la falta de práctica que muchoscristianos tienen de la confesión y por el desencantoque varios pastores trasmiten hacia este fabuloso“signo visible” de la reconciliación del hombre conDios a través de Jesucristo.

Nuestra alegría no viene de las terapias externas,ni de las prédicas, ni de los mensajes positivos, ni delos mantras, ni de las autoliberaciones interiores, nimucho menos de la discoteca o la pornografía,¡nuestra alegría nos viene del corazón!

Un corazón inundado, sorprendido, extasiado poruna luz inmensa y, al mismo tiempo, siempre nece-sitado, siempre débil, siempre dependiente de Otro

que lo ayude a palpitar.

“Un corazóncontrito y humillado, Tú no lo desprecias, Señor”.

Ciertamente duele y avergüenza reconocer nues-tra culpa, nuestra responsabilidad. Sería más fácilculpar al sistema, a los traumas, a los sinsabores dela vida que parecen impulsarnos al mal. “¿No somosde carne y hueso? ¿Por qué entonces tanta exigen-cia?” ¡Justamente porque Dios nos conoce en nues-tras limitaciones se ha hecho carne! ¡Esto es laNavidad! ¡Esto el Año Nuevo! No unas fechas en elcalendario, sino un memorial, un hacer presenteaquí y ahora que somos amados de Dios en nuestrapequeñez, en cada detalle, en cada segmento de nues-tro ser. Y esto lo vivimos en la confesión donde elEspíritu Santo sana nuestro yo de su fragmentación,de su imposibilidad de aceptar la vida y nos anima aaventurarnos a vivirla con entusiasmo, con pasión.

El pecado de orgullo, la autonomía moral quetodo lo condiciona al “yo puedo” nos llevan a la tris-teza. Es una siembra forzosa donde todo se reduce ala ley, al discurso políticamente correcto, al purita-nismo que no fuma, ni bebe, ni cruza la calle fuera dela franja peatonal, pero tampoco ama, tampoco per-dona porque no experimenta la gratuidad del per-dón de Dios a través de Cristo. Así, morimos en vida.Detrás de esa fachada de felicidad superflua del siem-pre “pasarla bien” se esconde la frialdad de lossepulcros. Ya no hay calor en nuestras relaciones, nohay profundidad y Dios debe gritarnos de nuevo:

Pero si es tan fuerte la experiencia de Dios en estesacramento, ¿por qué está tan arrinconado? ¿Por

qué no se ven filas como las que for-maban los penitentes ante el confesio-nario del san Juan María Vianey (con-virtiendo a su pueblito Ars en 'el granhospital de las almas' de Francia yEuropa) o del Padre Pío que aún conseveridad atraía a miles hacia la con-fesión?

¿No será que, como decía el padreCantalamessa predicando a JuanPablo II y a sus colaboradores en el2004:

Y sobre la necesidad de que los mis-mos pastores renueven su práctica recordamos albeato Juan Pablo II que en el 2002 escribía:

A elloshabría que recordarles lo que decía a San Leopoldo asus feligreses en el confesionario:

Ojalá en este tiempo de Navidad experimentemos laconfesión y la vivamos como decía Claudel en estepoema:

"¡Talita kumi, niña, a ti te digo, levántate!"

“Renovar el sacramento en elEspíritu quiere decir vivir la confe-sión no como un rito, una costumbreo una obligación canónica, sino comoun encuentro personal con elResucitado… La Iglesia latina haintentado explicar este sacramentocon la idea jurídica de un proceso delque se sale absuelto, o no… Pero en laparábola del hijo pródigo el padre nose comporta como juez, sino precisa-mente como padre; antes aún de queel hijo haya terminado de hacer suconfesión, le abraza y ordena la fiesta.El Evangelio es el verdadero `ma-nual para confesores`”.

“es evi-dente que los sacerdotes, como receptores delSacramento de la penitencia, están llamados a apli-carse en primer lugar a sí mismos estas certezascon sus relativas orientaciones prácticas”.

«Estamos aquídos pecadores: ¡que Dios tenga piedad de ambos!».

«¡Dios mío, he resucitado y estoy otra vezContigo!

Dormía y estaba tumbado como un muerto en lanoche.

Dios dijo: Hágase la luz y me he despertado

¡como se lanza un grito!

¡He resucitado y me he despertado,

estoy en pié y comienzo el día que empieza!

Estoy absuelto de todos mis pecados

que he confesado uno por uno.

El anillo nupcial está en mi dedo y mi rostro estálimpio.

Soy como un ser inocente en la gracia

que me has concedido».

Observador Semanal

El perdón esimposible sin la confesión

RESPONSABLES: Guillermo Lesmes - Nathalia Lemir - www.sanrafael.org.py - mail: [email protected] - AÑO VII - Nº 338 - JUEVES 29 DE DICIEMBRE DE 2011

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PALABRAS DE CERTEZA Y ESPERANZA

OBSERVAD SEMANALR

Educar a los jóvenesen la justicia y la paz

Amigos que buscan laverdad y “una historiaque continuar”

La crisis comoconciencia de la justiciay camino hacia la paz

La novedad de esta Navidad

Page 2: Observador Semanal del 29/12/2011

OBSERVADOR SEMANALOBSERVADOR SEMANALJueves 29 de diciembre de 20112

TRECHOS DEL MENSAJE DE SU SANTIDAD BENEDICTO XVI, PARA

Educar a los jóvenes1. ¿Con qué actitud debe-

mos mirar el nuevo año? En elsalmo 130 encontramos unaimagen muy bella. El salmistadice que el hombre de fe aguar-da al Señor «más que el centi-nela la aurora» (v. 6), lo aguar-da con una sólida esperanza,porque sabe que traerá luz,misericordia, salvación. Estaespera nace de la experienciadel pueblo elegido, el cual reco-noce que Dios lo ha educadopara mirar el mundo en su ver-dad y a no dejarse abatir por lastribulaciones. Os invito a abrirel año 2012 con dicha actitudde confianza. Es verdad que enel año que termina ha aumen-tado el sentimiento de frustra-ción por la crisis que agobia a lasociedad, al mundo del trabajoy la economía; una crisis cuyasraíces son sobre todo cultura-les y antropológicas. Parececomo si un manto de oscuridadhubiera descendido sobre nues-tro tiempo y no dejara ver conclaridad la luz del día.

En esta oscuridad, sinembargo, el corazón del hom-bre no cesa de esperar. [...]

Así pues, quisiera presentarel Mensaje para la XLVJornada Mundial de la Paz enuna perspectiva educativa. [...]Prestar atención al mundo juve-nil, saber escucharlo y valorar-lo, no es sólo una oportunidad,sino un deber primario de todala sociedad, para la construc-ción de un futuro de justicia yde paz.

Se ha de transmitir a los

jóvenes el aprecio por el valorpositivo de la vida, suscitandoen ellos el deseo de gastarla alservicio del bien. Éste es undeber en el que todos estamoscomprometidos en primerapersona.

Las preocupaciones mani-festadas en estos últimos tiem-pos por muchos jóvenes endiversas regiones del mundoexpresan el deseo de mirar confundada esperanza el futuro.En la actualidad, muchos sonlos aspectos que les preocu-pan: el deseo de recibir una for-mación que los prepare conmás profundidad a afrontar larealidad, la dificultad de for-mar una familia y encontrar unpuesto estable de trabajo, lacapacidad efectiva de contri-buir al mundo de la política, dela cultura y de la economía,para edificar una sociedad conun rostro más humano y soli-dario. […]

Quisiera dirigirme tambiéna los responsables de las insti-tuciones dedicadas a la educa-ción: que vigilen con gran sen-tido de responsabilidad paraque se respete y valore en todacircunstancia la dignidad decada persona. Que se preocu-pen de que cada joven puedadescubrir la propia vocación,acompañándolo mientras hacefructificar los dones que elSeñor le ha concedido. Que ase-guren a las familias que sushijos puedan tener un caminoformativo que no contraste consu conciencia y principios reli-giosos. […]

Me dirijo también a los res-ponsables políticos, pidiéndo-les que ayuden concretamentea las familias e institucioneseducativas a ejercer su derechodeber de educar. Nunca debefaltar una ayuda adecuada a lamaternidad y a la paternidad.Que se esfuercen para que anadie se le niegue el derecho ala instrucción y las familias pue-dan elegir libremente lasestructuras educativas que con-

sideren más idóneas para elbien de sus hijos. […]

Los responsablesde la educación

Educar en la

verdad y en la

libertad

2. La educación es la aven-tura más fascinante y difícil dela vida. Educar que viene de

en latín significa con-ducir fuera de sí mismos paraintroducirlos en la realidad,hacia una plenitud que hacecrecer a la persona. Ese proce-so se nutre del encuentro dedos libertades, la del adulto y ladel joven. Requiere la respon-sabilidad del discípulo, que hade estar abierto a dejarse guiaral conocimiento de la realidad,y la del educador, que debe de

estar dispuesto a darse a sí mis-mo. Por eso son más necesa-rios que nunca auténticos tes-tigos y no simples dispensado-res de reglas o informaciones,son más necesarios que nunca;testigos que sepan ver máslejos que los demás, porque suvida abarca espacios másamplios. El testigo es el prime-ro en vivir el camino que pro-pone. […]

educere

3. San Agustín se pregunta-ba: «Quid enim fortius deside-rat anima quam veritatem? -¿Ama algo el alma con másardor que la verdad?». El rostrohumano de una sociedaddepende mucho de la contribu-ción de la educación a mante-ner viva esa cuestión insoslaya-ble. […] «Cuando contemplo elcielo, obra de tus dedos, la lunay las estrellas que has creado.¿Qué es el hombre para que teacuerdes de él, el ser humano,para que de él te cuides?» (Sal8,4-5). Ésta es la cuestión fun-damental que hay que plan-tearse: ¿Quién es el hombre? Elhombre es un ser que albergaen su corazón una sed de infini-to, una sed de verdad no parcial,sino capaz de explicar el senti-do de la vida porque ha sidocreado a imagen y semejanzade Dios. Así pues, reconocercon gratitud la vida como undon inestimable lleva a descu-brir la propia dignidad profun-da y la inviolabilidad de todapersona. Por eso, la primeraeducación consiste en apren-der a reconocer en el hombre laimagen del Creador y, por con-siguiente, a tener un profundorespeto por cada ser humano yayudar a los otros a llevar unavida conforme a esta altísima

dignidad. […]

Es cometido de la educaciónel formar en la auténtica liber-tad. Ésta no es la ausencia devínculos o el dominio del librealbedrío, no es el absolutismodel yo. El hombre que cree serabsoluto, no depender de nadani de nadie, que puede hacertodo lo que se le antoja, terminapor contradecir la verdad delpropio ser, perdiendo su liber-tad. Por el contrario, el hombrees un ser relacional, que vive enrelación con los otros y, sobretodo, con Dios. La auténticalibertad nunca se puede alcan-zar alejándose de Él.

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Jóvenes de la compañía “Los

buscadores de la tierra sin

mal” (Ensayo de teatro)

Jóvenes de la escuela Pa'i Alberto (Clausura de año),

Jóvenes en la JMJ

La educación es laaventura más fascinantey difícil de la vida.

Page 3: Observador Semanal del 29/12/2011

Si no me equivoco, fue en 1996.Entonces yo trabajaba como cronistaen el “Corriere della Sera” (el másgrande diario italiano) y escribíatambién sobre asuntos eclesiales.Alberto Savorana, director de larevista de Comunión y Liberación,“Tracce”, me organizó un encuentrocon Giussani. Savorana vino arecogerme en coche al “Corriere” yme llevó a su residencia junto a laplaza Corvetto, en Milán, donde donGiussani pasaba parte de su tiempo.Dejo al lector imaginar el estupor delque suscribe cuando, estando yacerca de la residencia, vi a aquelanciano sacerdote, un pocoencorvado, esperándome a laentrada, en la acera. No sé cuántotiempo llevaría allí. Pero allí estaba,en la calle, esperando a un periodistacualquiera. Me recibió así, con suvoz ronca: “Es un gran honor recibirla,un gran honor. Un periodista del“Corriere della Sera” que viene averme aquí, a mi casa. Es unprivilegio”.

Apenas conseguí balbucir “¡Peroqué dice, el honor es mío, es más,estoy emocionado…!” El que hayaconocido a don Giussani sabe queu n a d e s u s p r i n c i p a l e scaracterísticas era precisamenteesta: cualquiera a quien tuviera

delante era para él, en aquelmomento, la persona másimportante del mundo. Cualquiera.Cualquier persona era para él algoque debía tratarse como único eirrepetible, era la ocasión de unencuentro destinado a ser parasiempre. Cuando se encontrabacon alguien nunca hablaba de símismo. Te hacía hablar de ti, teescuchaba, a tendía a tusproblemas. Durante todo el tiempodel encuentro lo único que contabapara él eres tú. Incluso más tarde,cuando nos sentamos a comer,tuve la misma impresión. Junto aotro: para don Giussani Jesucristosiempre estaba allí, siemprepresente. En un momento dado medijo: “El cristianismo es verdaderoporque corresponde a todas lasnecesidades del hombre: lanecesidad de justicia, de amor y deperdón, de belleza e infinito”. Intentéreplicar, exteriorizando mis dudas depobre creyente inseguro.

“Perdone, pero con esas mismaspalabras se podría argumentartambién la principal objeción alcristianismo. Se podría decir: comoel hombre tiene exigencia de justicia,de amor y de perdón, de belleza einfinito, se inventa un Dios quecorresponda a todos estos deseos.

Es decir, Jesucristo podría ser unainvención del hombre para aplacarsus angustias, en primer lugar la quele produce la muerte”.

Entonces cambió su tono, vi alsacerdote casi vehemente del quealgunos me habían hablado. Apretóel puño y luego comenzó a agitarlo,se inflamó, levantó un dedo yfijándome me dijo: “Pues, entonces,¡contéstame a esta pregunta! Si elcristianismo es ilusión y el ateísmorealidad, ¿cómo es posible que elque sigue una ilusión esté sereno ysea capaz de afrontar la vida incualquier circunstancia, incluso en elsufrimiento, mientras que el que está

en la realidad esté angustiado yacabe siempre perdido? ¿Cómoes posible que el que sigue unailusión resuelva el problema de lavida y el que está en la verdad no locons iga? ¿Le parece esorazonable? ¿Le parece razonableque con una llave equivocada sepueda abrir una puerta y que con laverdadera no se consiga? Que elcristianismo es verdadero lodemuestra la experiencia: el quesigue a Cristo responde a todossus problemas; el que lo rechazapuede engañarse durante muchotiempo creyendo que es feliz, peroen realidad lo único que hace es

demorar sus preguntas másprofundas, y al final se pierde”.

Esta referencia continua a laracionalidad de la fe cristiana, junto aun reclamo insistente a la realidad,ha sido uno de los puntos deGiussani. Le gustaba citar unapoesía de Montale: “Quizás unamañana…” en la que el gran poetaimagina que por unos instantes se dacuenta de que todo lo que le rodeaárboles, casas, colinas- son tan solouna ilusión y que el mundo entero esun engaño, no existe más que lanada. Una visión desesperada, quecomparte la mayoría de la culturaactual.

“ E x t r a o r d i n a r i a p o e s í acomentaba don Giussani-, refleja laangustia del hombre de hoy.Impresionante, pero tiene undefecto: lo que dice no correspondea la realidad, porque los árboles, lascasas y las colinas existen, ynosotros existimos. Negarlo puedeser poesía, pero no tiene nada quever con la realidad”.

Otro motivo por el que en tiempode gran secularización- Giussani haatraído a tantos jóvenes a la Iglesiaes que ha insistido en un conceptotan simple como olvidado: que elcristianismo no es una doctrina, nisiquiera es una religión creada por elhombre, sino el anuncio de un hecho.En un determinado momento de lahistoria, un hombre dijo ser Dios.Esta es la definición del cristianismoafirmaba- en la que incluso un nocreyente puede reconocerse: unhombre que dijo ser Dios, y los quec reen e l é l dan o r i gen a lacontecimiento que llamamosIglesia. Esta concreción, estereclamo a algo que se ve y se toca,es lo que ha fascinado a tantosjóvenes de todo el mundo, porqueuno se enamora de una persona decarne y hueso, no de una imagen ode una idea.

OBSERVADOR SEMANALJueves 29 de diciembre de 2011 3

La libertad es un valor precioso,pero delicado; se la puede entender yusar mal. «En la actualidad, un obs-táculo particularmente insidioso parala obra educativa es la masiva presencia,en nuestra sociedad y cultura, del relati-vismo que, al no reconocer nada comodefinitivo, deja como última medidasólo el propio yo con sus caprichos; y,bajo la apariencia de la libertad, setransforma para cada uno en una pri-sión, porque separa al uno del otro,dejando a cada uno encerrado dentro desu propio “yo”. Por consiguiente, den-tro de ese horizonte relativista no esposible una auténtica educación, puessin la luz de la verdad, antes o después,toda persona queda condenada a dudarde la bondad de su misma vida y de lasrelaciones que la constituyen, de la vali-dez de su esfuerzo por construir con losdemás algo en común».

Para ejercer su libertad, el hombredebe superar por tanto el horizonte delrelativismo y conocer la verdad sobre

sí mismo y sobre el bien y el mal. En lomás íntimo de la conciencia el hombre

descubre una ley que él no se da a símismo, sino a la que debe obedecer ycuya voz lo llama a amar, a hacer el

bien y huir del mal. […]

Es importante no separar el con-cepto de justicia de sus raíces transcen-dentes. La justicia, en efecto, no es unasimple convención humana, ya que loque es justo no está determinado origi-nariamente por la ley positiva, sino porla identidad profunda del ser humano.La visión integral del hombre es lo quepermite no caer en una concepción con-tractualista de la justicia y abrir tam-bién para ella el horizonte de la solidari-dad y del amor. […]

La paz es fruto de la justicia y efec-to de la caridad. Y es ante todo don de

Dios. Los cristianos creemos queCristo es nuestra verdadera paz: en Él,en su cruz, Dios ha reconciliado consi-go al mundo y ha destruido las barre-

ras que nos separaban a unos de otros.[…]

[…] Deseo decir con fuerza a todos, yparticularmente a los jóvenes: «No sonlas ideologías las que salvan el mundo,sino sólo dirigir la mirada al Diosviviente, que es nuestro creador, el

garante de nuestra libertad, el garantede lo que es realmente bueno y auténti-co. [...]

Queridos jóvenes, vosotros sois undon precioso para la sociedad. No osdejéis vencer por el desánimo ante lasdificultades y no os entreguéis a las fal-sas soluciones, que con frecuencia sepresentan como el camino más fácilpara superar los problemas. No tengáis

miedo de comprometeros, de hacer fren-te al esfuerzo y al sacrificio, de elegir loscaminos que requieren fidelidad y cons-tancia, humildad y dedicación. Vividcon confianza vuestra juventud y esosprofundos deseos de felicidad, verdad,belleza y amor verdadero que experi-mentáis. Vivid con intensidad estaetapa de vuestra vida tan rica y llena deentusiasmo. […]

Educar en la

Justicia y la paz

Levantar los ojos a Dios

[…]

[…]

LA CELEBRACIÓN DE LA XLV JORNADA MUNDIAL DE LA PAZ

en la justicia y la paz

TESTIMONIO

Michele Brambilla

Aquel día en una acera de Milán

Page 4: Observador Semanal del 29/12/2011

Ca d a m a ñ a n a ,durante el mes dediciembre, 176

niños divididos en cincogrupos por edades que vandesde los 3 hasta los 13 años,comienzan la jornada conun canto, un grito de guerray una oración frente alSantísimo Sacramento.Este “ritual” que ya se havuelto una tradición,comenzó en 1998, cuandoen una homilía el padreAldo Trento pedía volunta-rios que quieran compartir

un tiempo con los niños dela “Parroquia San Rafael”,en la época de vacaciones.D e s d e e s e e n t o n c e s ,Carolina Cristaldo, unamaestra parvularia y madrede familia, se dedica delleno a esta actividad quehoy no sólo incluye a los chi-cos de la escuela parroquialsino a todos los que quieranvivir esta “Compañía al des-tino que busca la verdad”,como dice uno de los lemas.

Junto a Carolina, estánNorma Jara de Rojas,

encargada de la secretaría ylos educadores, que casual-mente, fueron los “niños”con los que se inició estaobra hace ya 13 años. Hoyellos ya son jóvenes univer-sitarios o estudiantes de lamedia quienes guían a losniños.

“En 1998, el padre Aldoen un sermón había pedidola ayuda de alguien a quienle gusten los niños y comoestudié para maestra par-vularia, entonces, acepté yvine feliz. En ese entonces,la que dirigía la Colonia, erala mamá de Santi, Marta ydesde 1999 quedé comocabeza de coordinación”,explica Carolina.

Asegura que para ella laColonia de Vacaciones “esla continuación de una his-toria, porque a partir deesta experiencia comenzóla propuesta educativa delcolegio Pa'i Alberto de laParroquia San Rafael.Entonces, para mí laColonia es un desafío todoslos años que digo sí, porquea veces nos cuesta decir sí.Pero mantenerme fiel a estapropuesta, a esta historiaque comenzó, es la que nome hace dudar aunque aveces me crea bastantes

inconvenientes porquetengo otras actividades, por-que de repente coordinartodo es complicado. Pero alfinal tengo que decir que síy es lo que me ayuda aseguir, así como el rostro delos chicos”.

Recuerda que son precisa-mente estos chicos los quecomenzaron con ella siendoniños. “Fue una provoca-

ción ver que estos chicosque comenzaron conmigoen Primer Grado de laEscuela Pa'i Alberto estánahora como educadores.Por eso, para mi la coloniaes siempre un desafío por-que me muestra cosas y me

hace estar siempre agrade-cida por haber dicho sí.Nunca me arrepentí dehaber dicho sí, porque mehace estar más atenta a lascosas más verdaderas”, ase-gura Carolina.

UNA HISTORIAQUE CONTINÚA

Grupo Sagrada Familia

Grupo Chiquitunga Guggiari

Grupo Teresa de Calcuta

Grupo Don Luigi Giussani

Grupo San Pio de Pietrelcina

(niños de 3 años):

(4-5 años):

(6-7 años):

(8, 12 y 13 años):

(9, 10 y 11años):

“Con la llegada de Jesús, nació el amor”

“Sed tengo de una entrega total”

“La pazcomienza con una sonrisa”

“La fe aumenta en los pequeños detalles”

“Compañeros al destino que buscan laverdad”

LOS GRUPOS Y SUS LEMAS

COLONIA DE VACACIONES

OBSERVADOR SEMANALOBSERVADOR SEMANALJueves 29 de diciembre de 2011

Ladrillo cerámico

Amigos que buscan la verdad y

4

La colonia de verano de la parroquia San Rafael, que desde 1998 durante el mes de diciembre involucra a algunos adultos y alrededor de unos 20 secundarios -catequistas, es un gesto educativo para con los niños y chicos desde 3 a 13 años.

Un gesto donde se quiere acompañar a los niños y adolescentes en una experiencia de fe , para que ellos puedan descubrir que la experiencia cristina hace másbella y más alegre la vida también en sus vacaciones. A continuación publicamos el relato de cómo inicio esta colonia de vacaciones y unos testimonios de loscatequistas

La Colonia de Vacaciones es la con-tinuación de una historia .

“”

Actividades en el club Mbigua

¡Impresionante!... como niños de 3 a13 años, provocados por la belleza,se ponen en silencio a contemplarla.

En la cumbre del cerro

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OBSERVADOR SEMANALJueves 29 de diciembre de 2011

“una historia que continuar”DE LA PARROQUIA “SAN RAFAEL”

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CERRADO: EL 24/12/2011 Y 31/12/2011

David Delgado (20), estudiantede Odontología

“El lema surgió cuando estábamosleyendo con los chicos de la Colonia la vidade don Giussani y en una parte, el papá dedon Giussani desde pequeño le inculcabaa mirar las cosas más importantes de lavida a través de la música, la poesía, la cul-tura y sobre todo a fijarse en los pequeñosdetalles. Fue así que uno de los chicos dijo“la fe aumenta en los pequeños detalles”.

Cuando dijo esto, todos nos miramos y ele-gimos esa frase. Yo hace seis años queestoy en la Colonia. Yo en agosto aproxi-madamente ya me preparo para la Coloniay cada año es algo diferente, una historianueva que se inicia. Este año por ejemploes algo muy diferente para mí porque metocó trabajar con los niños más grandes.Siempre me tocó trabajar con los niños de8 y 9 años, y este año se están iniciandonuevos educadores. Siempre estoy dis-puesto a ayudar”.

“El papá de Giussani le inculcabaa fijarse en los pequeños detalles”

“Yo nací aquí en laparroquia”

Santiago Martínez (18)“Yo nací aquí en la parroquia”, afirma,

puesto que desde que tiene memoria, estáen el lugar, ya sea como alumno de laescuela “Pa'i Alberto”, monaguillo y cate-quista. Ahora como uno de los educadoresde la Colonia de Vacaciones. Nunca falté alas Colonias de Vacaciones desde queempezaron, la única vez fue cuando teníacursillo de ingreso para la facultad”.

“Este año me ofrecieron un trabajo deoficina que me coincidía con la colonia,pero por razones personales, a las dossemanas de estar en el trabajo decidírenunciar y finalmente, aparecí dos sema-nas después. Realmente este año es dife-rente para mí porque vinieron más chicosy hay que educarles a ellos. En mi grupoelegimos la música “Compañía hacia eldestino”, que nos gustaba a muchos ya quesomos una compañía en busca de la ver-dad”.

“La opción que teníaera venir o quedarme

en casa a dormir”

Carlos Picaguá (16)Es el guitarrista del grupo y no iba a

estar este año porque terminó el segundode la media y estaba por hacer una pasan-tía laboral. “Lo que me incomodaba eraque había mucha gente nueva y no teníamucha confianza pero, al final vine llegan-do.

La colonia va mucho más allá de com-partir con los niños, porque es finalmentedemostrar lo que uno es y ellos aprendende vos. Somos el ejemplo para ellos.Tenemos que tener mucha atención de loque decimos y es relativamente estresantepero entre quedarme en mi casa y dormir,o venir a estar con mis amigos, creo quesiempre salgo ganando. La música es algoque me encanta y estoy muy contento.Creo que es el tercer año que vengo comoeducador”.

LA JORNADARespecto a la metodología

utilizada, la coordinadoraexplica que siempre tratan deponer un poco de cultura conun poco de disciplina, muchaalegría y juegos. “Por eso, siem-pre procuramos que los nom-bres de los equipos sean alusi-vos a algo importante, por ejem-plo en los años anterioresh e m o s h a b l a d o d e l a sReducciones, el año pasadohablamos de los santos patro-nos de las obras de la Parroquia,y este año, por indicación de lospadres, la Colonia se refiere a

Chiquitunga Guggiari, que es lanueva obra que se hizo, asícomo Teresa de Calcuta, PadrePío de Pietrelcina, Don LuigiGiussani y la Sagrada Familia”,explica. “Es una manera de mez-clar los juegos con algo educati-vo para que ellos aprendan.Nuestro lema de este año es“Sólo una compañía que mira aCristo, puede ver la belleza quesalvará al mundo”, añade.

Cada grupo tiene un lemaalusivo al nombre del equipoque lleva. “La elección de loslemas es algo que hacen los pro-pios chicos cuyos líderes nopasan de 13 y 14 años, la mayo-ría de ellos se están por ir yluego ya empiezan como educa-dores, como dice la canción,hay “una historia que conti-nuar”. Ellos tienen que seguirotro camino y lo que más quie-ren es que los niños vieran enellos el ejemplo de una amistadque perdura en el tiempo”, con-cluye Carolina.

Cantervill

“El ejemplo deuna amistad queperdura en eltiempo”

Los educadores en su mayoría sonjóvenes, que antes fueron niños ...

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El panorama del mundoestá oscuro

No se sabe dónde va a terminar.Grecia o Italia o España puedendeclararse insolventes y arrastraral resto de Europa. Y al mundo. Enese contexto, desear un prósperonuevo año para muchos no seríasino un chiste de mal gusto. Míresesólo un ejemplo; España, la mecad e i n m i g r a n t e s d e t o d aLatinoamérica, tiene una tasa dedesempleo de jóvenes que llega amás del treinta casi cuarenta porciento. El crecimiento económicode nuestro continente, también, nodeja de ser un espejismo para milesde ciudadanos que no puedenacceder a los bienes vitales de lavida. La realidad es tan dura queparecería no admitir buenosaugurios. No podría ser menos. Seinicia un nuevo año y el año quenos deja no hizo sino alimentarfrustraciones, sueños incumplidos,nostalgias de un tiempo mejor quenunca nos mostró su rostro.

El futuro parece esquivarse denuestras manos sin asidero firmedonde afianzarse.

La Iglesia parece no estarmejor. Denuncias de abusos ydeserciones. Desier to devocaciones en países, comoFrancia, hija predilecta de laIglesia por siglos donde laconocidas Hermanas de la Caridad,cuyas vocaciones se esparcían porel mundo, apenas llegan a unadocena entre los treinta y cincuentaaños. La mayoría, más de cien, soncasi octogenarias. Las minoríascatólicas en los países árabes, Irako Egipto, apenas sobrevivenamenazadas por la intolerancia desus estados fundamentalistas

r e v o l u c i o n a r i o s . E n l a sdemocracias liberales, como la deEstados Unidos, la intoleranciacobra otro lenguaje; el de laintransigencia contra el lenguajede la verdad y la realidad. Laexclusión y la marginación de loscatólicos a menos que los mismosse avengan a lo políticamentecorrecto y a una postura ambigua e

aceptada por las élites noes permitida. Se los condena a lascatacumbas del olvido en nombrede la democracia procedimentalsin contenidos.

¿Por qué desear algo que nodeja de ser más que un sueño?¿Para qué esperar?

Porque existe la aurora cuyosdestellos brillan en el corazón delhombre que espera. Y esaesperanza, nos resistimos a creer,brotadas de un ser racional serfelices es racional después de todopues hasta los ateos lo proclaman-no puede no serlo. Por eso, el serhumano espera, quiere, busca algomás; ansía el amanecer con ese ríoque le colme la sed de justicia quepadece. Nadie, razonablemente,desea algo que no le colme defelicidad, o al menos, le alivie unapizca de ella. ¡Qué más se podríaesperar!!! Se aguarda así la vueltade página de un año que en muchosaspectos no ha sido el mejor, o almenos no ha sido así para muchos.

Pero, a la oscuridad de la nochesigue la aurora de la esperanza.

Es que el corazón del hombrenos recuerda Benedicto XVIrezando el salmo 130 en sumensaje de fin de ano- no cesa deesperar la aurora. Y esa aurora sepercibe en los jóvenes para loscuales el mundo aparece -contrariamente a lo que diría lanovela del escritor Ciro Alegría-ancho, pero propio. El futuro es delos jóvenes pues ellos son el futurode la Iglesia y el presente, y a pesar

de la crisis de lo humano y de laeducación y la pérdida del sentidode la realidad. ¿No será esto meraexpresión de deseos, voluntarismobarato, de creer que las cosas sonbuenas cuando las circunstanciasno lo son?

No es mero capricho: es larealidad. Y lo es por la grandezadel ser humano mismo y larealidad. ¿Por qué entonces la faltade esperanza? Por el olvido de unaeducación que no enfatiza lacuestión humana. Este es unelemento que Benedicto XVI nosrecuerda. No nos percatamos losuficiente de que la educaciónprimera es reconocernos yaprender que nuestra existencia esfinita, limitada, y que no sabemostodo y necesitamos aprender,cultivarnos a nosotros mismos.Nuestra imagen, similar al creador,nos hizo inteligentes y libres, pero

no cultivamos la inteligencia comodeberíamos. No contemplamos lascosas pues ya no guardamossilencio para el estudio serio ysereno de los clásicos que nosmuestran el rostro de la realidad.¿Cuántos de nosotros ha leídodurante el año a Dante o T.S. Eliotto tal vez a Sábato o leído la poesíade nuestro José Luís Appleyard?¿O escuchado con reverencia unasinfonía clásica para darnos cuentade la inteligencia de la realidad?

Una inteligencia que nos llevaa la paz, como la conciencia dedescanso, de reposo de nuestro ser.Se presenta como una forma de“ajustarnos” a lo que noscorresponde a nuestra humanidad.De ahí que la paz no sea sino frutode ese “ajuste” de la justicia con lascosas. La paz no puede como con-tinua diciendo Benedicto XVIalcanzarse en la tierra sin la

salvaguarda de los bienes de laspersonas, de su razón, su dignidad,de su libertad. La paz será, en suma,el fruto maduro de la justicia y laconsecuencia de la caridad. Así, laverdad y el amor a la justicia, sedan la mano como fundamentos dela sociedad.Yde la vida.

El panorama del mundo estáoscuro. O mejor será decir, parece,oscuro, pero no lo está.

Es que la realidad es buena,pues viene de Dios: es nuestra vistala que no está bien y nuestra miradase nubla con las dudas de unacultura apegada a la mentalidadcomún. Esto me vino a mimemoria esta semana al leer elfallecimiento del gran luchador yex presidente de la RepúblicaCheca, el escritor Vaclac Havel,católico y militante de laresistencia anti-totalitaria, a quientuve la dicha de verlo en la ciudadde Praga hace quince años. Havel,lleno de fe en Cristo y la Iglesiadecía, en los oscuros pasadizos delos años setenta y ochenta cuandoel túnel del totalitarismo estabacerrado, que la única estrategia erael “amor y la verdad”.Ytuvo razón.

Y la sigue teniendo, pues la cri-sis del totalitarismo ideológicocomo las del totalitarismorelativista actual comparten lamisma raíz: el olvido del espírituque no es sino el descuido de larealidad, y que no muestra sino elabandono de Dios, la raíz y elsostén de toda la realidad. Havel lovivió y murió, pero vive en laesperanza, por eso mismo que SuSantidad Benedicto XVI pide a losjóvenes: que miren a la crisis comouna forma de darnos cuenta de lanecesidad de justicia: el únicocamino seguro

.

irenista

hacia la paz.

Mario Ramos-Reyes

[email protected]

OBSERVADOR SEMANALOBSERVADOR SEMANALJueves 29 de diciembre de 2011

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REFLEXIONES

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La crisis como conciencia dela justicia y camino hacia la paz

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Cada año la Navidades una novedad enmedio de su ritual

antiquísimo. Su riqueza hoyestá adornada con elementosculturales de especialísimovalor, des-preciados, es decir,no apreciados en todo su valor.El pesebre, la vigilia de laespera, la reunión familiar, lasluces, los deseos de paz yalegría, los villancicos… Sinembargo, tanta riqueza ent r a d i c i o n e s n o s i e m p r ec o m p e n s a l a t r e m e n d aexpectación que puede llegar agenera el deseo de bien yverdad que brota de nuestroscorazones. No bastan lastradiciones, aunque tampocos e l a s p u e d e d a r p o rdescontadas.

Si es Dios mismo el queviene en el calor de este ladodel mundo, en el caos de unpaís que ha perdido su dulzuray donde reina el canibalismod e l m b a r e t e , ¿ p o r q u éprefieren nuestros ojos ladistracción de las compras, delos cajones de cerveza, de lamúsica estridente? ¿Qué hafallado en la evangelizaciónque el pueblo sencillo se ha

vuelto complicado y superfluocon el correr de los años?

Los gestos se pierden en laoscuridad de la noche. Y todo elruido del mundo se desata paratratar de aniquilar el silencioque exige su Presencia.

Si dependiera de nuestrab ú s q u e d a , e s t a r í a m o sperdidos como Confucio en sumar de buena voluntad, comoB u d a e n s u d e s a p e g oinhumano, como Stalin en sudictadura proletaria…

¡Por suerte, no depende denosotros este encuentro! EsDios mismo el que ha decididomanifestarse, Él traza elcamino con su estrella, Élacrecienta nuestro deseo yhace palpitar de expectación elcorazón.

Esta es la dulce novedadcristiana en medio de unacultura de caramelo concáscara cristiana pero conrelleno de hiel. El Emanuel esD i o s c o n n o s o t r o s .V e r d a d e r a m e n t e . É l s emanifiesta misteriosamenteentre los pobres del mundo. Nosolo los que calzan sandalias.No solo los que han dejado

todo por buscarlo. Estásucediendo una vez más ahoramismo con aquellos quereconocen su pequeñez, sudependencia, su necesidad.Con aquellos que sufren, conaquellos que ya no pueden más.

Cada año la Navidad es unanovedad en medio de su ritualantiquísimo. Se da, porejemplo, en estos días en que laabuela visita mi casa ypodemos sentarnos juntos ytenemos algo de qué hablar porlargo rato. Se dio, por ejemplo,cuando en la Nochebuenarecorrimos pesebres con missobrinitos y las santas señorasdel barrio nos comentaban quesomos los únicos que ellasesperan porque ya nadierecorre pesebres. ¡Todos loscaramelos y confites nos losllevamos bajo la bonitallovizna a casa! La casa que enotro tiempo fue destruida porla división y la tristeza. Hoyvuelve a brillar con 9 niñoscargados de caramelos y unaabuela que se está despidiendodel mundo. Está sucediendoahora que escribo estas líneasluego de un día de lucha en quehe podido confesar mis

pecados a un sacerdote quelleva años viviendo lejos de suAlemania natal por amor aCristo.

No la hemos inventadonosotros. No es un derecho. Noes una utopía. No es un sueño.E s u n a c o n t e c i m i e n t oexcepcional que ha cambiadoel rumbo de mucha gente comola filósofa Edith Stein, como elescritor Lewis, como la exguerrillera Amparo Medina,

como el actor Verásategui…Como mi familia que era uncaso perdido y está siendoreconstruida por la gracia deDios.

Es Cristo el que se hacecarne. La Palabra eterna estáhablando con voz humana.“Ojalá hoy escucháramos suvoz y no endureciéramos elcorazón”.

Jueves 29 de diciembre de 2011 OBSERVADOR SEMANAL 7

EDUCACION

TESTIMONIO DE LA CLINICA

Primer Centro Educativo del Paraguay paraNiños/as con Discapacidad Física y otras asociadas

Servicios:

° Estimulación Temprana

° Educación Inicial

° Jardín y Pre-escolar

° Educación EscolarBásica

° Psicología

° Deportes, recreación ycultura

El Programa Educativo para Niños conDiscapacidad Física - PENDIF, funciona desde elaño 1991, con autorización del Ministerio deEducación y Cultura por Resolución N° 27/91.

El objetivo principal del PENDIF es educarpromoviendo el desarrollo cognitivo, afectivo ysocial de cada niño y niña, de acuerdo a susposibilidades y necesidades especiales.

Turnos: Mañana y Tarde.

www.fundacionsolidaridad.org.py - tel.: +595.21.293.381 - Asunción - Paraguay

Mi hija es un milagroCon mi hija Eli, llegamos a

l a C l í n i c a D i v i n aP r o v i d e n c i a p o r

equivocación, tenían que traer a unenfermo y la trajeron a ella. Antes devenir la doctora me había dicho quehabía un lugar reservado para Eli, yole pregunté dónde, y me dijo: “En SanRafael, apenas llegue la ambulancia,nos vamos”.

Llegamos a esta Clínica y todosnos miraban extrañados porquevenía una mujer en lugar de un hom-bre , y mien t ras yo l lo rabadesconcertada, un enfermero seacercó, se dispuso rápidamente aatender a mi hija, esto me alivióenormemente y le di las graciasinfinitamente. Mi hija no hablaba, sinembargo yo la percibí más aliviada,

como si se hubiese despertado,ahora, después de ocho meses deinternación en este lugar, la veomejor, más estable, los médicosdicen que su caso es un verdaderomilagro.

Lo que puedo decir es que ellaaquí está muy bien atendida en todoslos sentidos, yo también me sientomuy a gusto. Desde que le ví mejor ami hija le prometí a la Virgencita y aDios todopoderoso asistir siempre ycuando me sea posible, al rezo delrosario ó a la santa misa.

Lo más grande que nos pasó, fueque sus dos hi jos pudieronbautizarse en esta Clínica, y estoymuy agradecida al Padre Aldo poreso, gracias a Dios mis nietos se

hicieron cristianos, ese día todos misamigos y vecinos vinieron acompartir con nosotros.

Sí estoy muy preocupada porqueEli tiene tres hijos, gracias a Dios mishermanos me ayudan con ellos. Mivida es bastante agitada, cuando voya casa, cuido también a mi mamá de97 años, y a mis nietos; le veo a mimarido de 92 años, y lo que nosayuda bastante es que el compañerode mi hija nos pasa la manomensualmente con víveres.

Desde que estoy cuidando de mihija en la Clínica, me siento más enpaz conmigo misma, cada vez querezo encuentro tranquilidad. Ya va aser un año que mi hija se enfermó yestoy muy agradecida por todo lo quehacen por ella, y por nosotros, losfamiliares de los pacientes, aquienes nos regalan todos los días eldesayuno, el almuerzo y la cena,toda una bendición, estoy muyagradecida por eso. Además aquíaprendí a rezar el rosario.

En esta Navidad, mi única hija yyo vamos a pasar juntas en la Clinica,no la puedo dejar sola, ya meorganicé con toda mi familia, y estoycontenta con la decisión.

Mamá de Eli.

La novedad de esta Navidad

CCL

Page 8: Observador Semanal del 29/12/2011

Se expande la noche en el mundoComo una nube negra cubre el cieloObnubila la esperanza de los pobres

Y los pobres derraman su penaEn las sombras desnudas de la noche

En las serranías, las ovejasHan dejado de balar, duermen los pastores

El sueño domina la razón, y el corazónEstá henchido de suspiros, el corazónEstá durmiendo un sueño sin ilusión…

Una joven encinta está buscando en el rancheríoUn sitio pequeñito, un lugar donde descansarSu esposo busca también, no hay respuestaA las preguntas en la noche, nadie responde

Decretos mueven a los hombres a caminary un rey extraño domina al pueblo de la alianza

Gobierna y hace caminar a los pobres en la oscuridadLa joven encinta va a tener al hijo en un pajonal

Varios hombres montados en dromedarios del desiertoLlegan a las serranías y preguntan a los pastores

Al despertar, los pobres ven una luz en el firmamento¿No son tesoros los que llevan los extraños que siguen

la estrella?

¡Despiertan los pastores de su rudo silencio!En medio de la noche reciben otra extraña visita

Los agobios del pesado trajín se disipan,Las nubes oscuras retroceden ante una luz excepcional

Pequeño despierta a esta vida, mecido por su madreÉl la mira y ella lo mira, se asemejan mucho

Y el padre vela en la quietud de la madrugadaAl niño que no lleva su sangre, al niño que buscan los

hombres

Los ángeles guían a los pastores que bajan de lasserranías

Están llegando al portal donde a los magos condujo laestrella

Nos son los tesoros lo que atraen su vista, está envueltoEn pañales, duerme el niño cuyo corazón hace latir los

de ellos

Se colma el deseo que despertó esta nocheLa tierra y el cielo se encuentran en un pajonal

La jovencita es ahora madre y el niño es reyNada es como parece, nada como antes es

¿De dónde nos vendrá el auxilio?

¿Por qué esta noche es diferente?

¡El auxilio nos viene del Señor!

Esta noche es diferente de todas las otras noches

Oh, noche maravillosa, oh, noche excepcional

Esta noche es diferente de todas las otras noches¿De dónde nos vendrá el auxilio?

¡El auxilio nos viene del Señor!

OBSERVADOR SEMANAL8 Jueves 29 de diciembre de 2011

CULTURA Y FE

LA AVENTURA HUMANA DE LOS SANTOSCULTURA Y FE/ POESíA

ORGANIZA: LA AGENCIA SAN RAFAEL PEREGRINACIONES S.R.L.

CRUZ DEL CHACO 1703; TEL 623 496 - 662 758; CEL.: 0971 954 480

EMAIL: [email protected]

A LA VIRGEN

DE GUADALUPE

Visitando:TEOTIHUACÁN - ACAPULCO - CANCÚN -

PLAYA DEL CARMEN - RIVIERA MAYA - TULUN

Salida: 3 de febrero de 2012 Regreso: 13 de febrero de 2012

PEREGRINACION

Los Santos inocentes

“Dice Dios: pues lo que hacefalta es precisamente una vida queno esté entera. Que sea inclusoexactamente lo contrario de entera.Que sea vivida lo menos posible,que apenas haya comenzado. Quéesté lo menos empezada posible.Los únicos que podían cantar esecántico nuevo, (fueron los SantosInocentes). ¿Qué hicieron de espe-cial?

Admirad aquí el orden de Migracia. Hicieron esto: haber venidoal mundo. Y punto, eso es todo. O,si preferís, hicieron que eranpequeños recién nacidos. Eran unaespecie de pequeños lactantesjudíos. Niños y niñas. Sus madresdecían como en todos los paísesdel mundo: el mío es el máshermoso. A ellos les daba igual serhermosos. Con tal de dormir ymamar. Cuando tenían ganas dedormir, dormían; cuando teníanganas de mamar, mamaban;cuando tenían gana de gritar,gritaban. Estas eran sus principalesocupaciones. Así es comoconsiguieron no sólo encontrar Mireino y la vida eterna. Sino tambiénser los únicos en llevar escrito en lafrente Mí nombre y el nombre de MiHijo…

Tantos otros han muerto ennombre de Mi Hijo. Tantos otros hanmuerto para salvar el honor delnombre de Mi Hijo, y ellos losúnicos que llevan ese nombreescrito en la frente y los únicos quepueden cantar ese cántico nuevo,seguro que son también los únicosen toda la tierra que ignorabantotalmente el nombre de Mi Hijo. Tales Mí decreto. Ese nombre por elque murieron, no lo conocían.Nunca lo conocieron en la tierra,eso es lo que me gusta, dice Dios.Sólo lloraban, y reían, y mamaban,y gritaban, y dormían, esa era suenorme, su más seria ocupación. Yllegó un día, en que a ellos elnombre de Herodes no les decíamás que el de Jesús, y no les decíamás el nombre de Jesús que el deHerodes. Me atrevo a decir, diceDios, que esos dos hombres leseran igualmente indiferentes, y sinembargo, esos dos hombres, Jesús,Herodes, antagonistas, iban aprocurarles, sencillamente la gloriade Mí paraíso, el reino de los cielosy la gloria eterna.

Llegó un día en que una hordade brutos soldados, que hacían su

oficio. Pasó una oleada de brutos,como gendarmes, como los ogrosde los cuentos de hadas, llevandosables que eran como grandesmachetes, y eran los soldados deHerodes. Una avalancha, untumulto, un estruendo. Gritos,mujer que huían, mujeres quemordían, como muerden siemprecuando no son las más fuertes. Y yano hubo en la sangre y en la lechemás que una gran alfombra decuerpos muertos. Un cementeriode bebés y de jóvenes mujeresjudías…

Sabéis, dice Dios, lo quehicimos con eso. Esos ojos queapenas se habían abierto a la luzdel sol carnal, para toda laeternidad fueron cerrados a la luzdel sol terrenal. Esas voces, esoslabios que nunca habían cantandolas alabanzas de Dios sobre latierra, que nunca se habían abiertomás que para pedir de mamar, hoyson los únicos, son los únicos quepueden cantar ese cántico nuevo…

Es el momento de decirlo, esosinocentes ganaron en la peleasencillamente Mi Reino y la vidaeterna. Fueron los únicos quizá detoda la tierra que no sólo no habíancantado jamás las alabanzas deDios, sino que ni siquiera habíanpronunciado nunca Mi nombre ni elnombre de Mi Hijo…

Ellos eran contemporáneos demi Hijo, de la misma edad y nacidosal mismo tiempo. Ellos erantambién semejantes a mi Hijo, y Élera semejante a ellos…

Así es Mi paraíso, dice Dios. Miparaíso es lo más sencillo que hay.Estos simples niños juegan con supalma y con sus coronas demártires. Eso es lo que pasa en miparaíso. A qué se puede jugar conuna palma y con coronas demártires”.

En la noche

Los cristianos, son los pecadoresque tienen claro el camino

“Entonces llegó, en unmomento predeterminado,un momento en el tiempo ydel tiempo, un momento nofuera del tiempo, sino en eltiempo, en lo que llamamoshistoria: cortando, bisecandoel mundo del tiempo, unmomento en el tiempo perono como un momento deltiempo, un momento en eltiempo, pero el tiempo se hizomediante ese momento, puessin el significado no haytiempo, y ese momento deltiempo dio el significado.

Entonces pareció como sil o s h o m b r e s d e b i e r a navanzar de la luz a la luz, en laluz de la Palabra, a través de laPasión y el Sacrificio salvadosa pesar de su ser negativo,bestiales como siempre,

carnales, buscándose a sím i s m o c o m o s i e m p r e ,egoístas y cegatos comosiempre, pero s iemprel u c h a n d o , s i e m p r ereafirmándose, siemprereanudando la marcha por el

camino iluminado por la luz.

A menudo deteniéndose,vagueando, perdiéndose,retardándose, volviendo,pero sin seguir otro camino”.

CCL

T.S.Eliot, Los Coros de la Roca

C. Péguy, trechos de “El Misteriode Los Santos Inocentes”