operacionalización del modelo función disfunción del movimiento humano
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OPERACIONALIZACIÓN DEL MODELO FUNCIÓN-DISFUNCIÓN:
Un acercamiento hacia la “pretensión” de la autonomía profesional
*P. MEDINA G. – **I. REBOLLEDO P. – ***M. ESCOBAR C .
RESUMEN
La disponibilidad de un modelo epistemológico que permita orientar a una mejor práctica, es una necesidad que demanda la exposición transparente de las bases teóricas que lo sostienen en diversos contextos con el fin de generar un discusión disciplinar en el más amplio espectro de las rutinas profesionales.
ABSTRACT
The availability of an epistemological model that allows a better practice guide, is a needle that demands a transparent explanation of the theoretical bases that hold it in different contexts in order to generate a disciplinary discussion in the broader spectrum of professional routines.
*Licenciado en Kinesiología, Estudiante Regular del Programa de Magíster en Kinesiología, Profesor Instructor y Académico del Departamento de Kinesiología de la Universidad Católica del Maule.
**Magíster en Educación©, Kinesióloga, Profesora Auxiliar y Académico del Departamento de Kinesiología de la Universidad Católica del Maule.
***Magíster en Kinesiología, Profesor Auxiliar y Académico del Departamento de Kinesiología de la Universidad Católica del Maule.
Correspondencia:
Prof. Máximo Escobar Cabello Departamento de Kinesiología, Facultad de Ciencias de la Salud - Universidad Católica del Maule Av. San Miguel N° 3605. Talca, Chile Tel.: +56 71 203496; Fax: +56 71 203399 E-mail: [email protected]
INTRODUCCIÓN
Los procesos de innovación curricular son oportunidades para incorporar estrategias
metodológicas que el actual paradigma de la enseñanza propone en todos los niveles
formativos de la educación1. Sin embargo, en la Universidad no se trata de enseñar lo de
siempre con nuevas herramientas, la innovación debe al menos intentar una mirada
coherente y actualizada con el objeto de estudio declarado a partir del cual se modificarán
sustantivamente las prácticas. En este sentido las consideraciones disciplinares del qué,
para qué y el cómo actuar en un contexto complejo, permiten dilucidar que los modelos de
acción profesional necesitan incorporar soportes frente al desarrollo de roles sustantivos
tales como el diagnóstico y la autonomía. Es posible que si estos núcleos problemáticos no
son abordados adecuadamente desde las estrategias formativas de las Escuelas, podemos
sospechar que se hará muy trabajosa la tarea de enseñar actuaciones profesionales de orden
social superior. Es desde este imperativo pedagógico que intentaremos describir las
acciones de razonamiento que hemos plasmado en los primeros años de nuestro curriculum
innovado. El ejercicio desde el marco conceptual derivado del modelo Función Disfunción
del Movimiento Humano (FDMH)2, es una consideración académica generada por la
necesidad de articular complejos espacios de acción en el aprendizaje de los estudiantes y
en la práctica profesional. El primero está caracterizado por todas aquellas actividades
críticas que reportan al conocimiento del problema que debe enfrentar y resolver el
Kinesiólogo. El segundo continúa con las decisiones que emergen de la síntesis lograda a
partir de la utilización del modelo, este proceso sistemático considerado un producto del
razonamiento clínico representa un aporte sustantivo insustituible que se puede ofrecer al
usuario, cliente o paciente subsidiario de la actuación profesional.
1
FDMH : Presentado en el II Congreso Nacional de Educación en Kinesiología, Concepción 2006 y en el 2do Congreso Latinoamericano de Educación en Kinesiología, Pehuenche Talca, 2008.
OPERACIONALIZACIÓN
Una de las tareas de la Kinesiología como ciencia que estudia el movimiento de los seres
vivos con particular atención hacia el ser humano, reside en consolidar un lenguaje propio
de manera que tenga fundamento teórico y que complemente la aplicación práctica con el
razonamiento clínico. Así, la hermenéutica establecida presentará matices con relación a
la caracterización de diferentes contextos de FDMH. Para ello existen modelos que intentan
dar cuenta de esta necesidad, una de las primeras grandes teorizaciones conocida como
Patokinesiología3,10 plantea que en diferentes niveles sistémicos interdependientes se
pueden contextualizar disfunciones del movimiento. La operacionalización sugiere que para
analizar los productos de las distintas estratificaciones incorporadas desde lo celular hasta
lo social, hacen imprescindible disponer de indicadores atingentes a la expresión del
movimiento para cada uno de los niveles propuestos, tal como lo expresara años más tarde
la Teoría del Movimiento Continuo4 (TMC). A partir de estos ejes epistémicos disponibles
consideramos un aporte significativo cuando se adiciona la propuesta del Modelo FDMH.
A pesar de los antecedentes disponibles en la literatura y considerando los valiosos aportes
hacia la disciplina y profesión de los modelos epistemológicos, no se dispone de una
aplicación en base a un paradigma profesional para la reflexión en relación a la
caracterización clínica del movimiento humano. En este sentido, el presente documento
intenta construir, proponer y ejemplificar una metodología práctica basada en los principios
teóricos declarados, fundamentalmente en el Paradigma FDMH1 la cual considera
dominios, dimensiones y herramientas para cada vector propuesto, por lo que se busca la
caracterización del movimiento humano según perfiles interrelacionados de acuerdo a
estados de función, movimiento y salud (Figura 1).
Es posible que en este ejercicio utilicemos de manera necesariamente reducida algunos
conceptos a fin de optimizar los alcances pedagógicos de la propuesta, sin embargo, estas
concesiones operativas tienen el único propósito de mejorar la aplicación de las
metodologías procedimentales. La primera de ellas comprenderá los niveles de análisis
sobre los cuales trabajaremos dado que la pretensión es configurar la propuesta en entornos
clínicos con personas y basándonos en su funcionalidad. La segunda y a modo fundacional
corresponde declarar que para nosotros Kinesiólogos, las fuentes centrípetas del ejercicio
profesional implican que no existe vida sin movimiento2, 4.
Constructo para el contexto funcional.
A nuestro juicio una de las claves para el desarrollo del razonamiento clínico se encuentra
en la definición del Contexto Funcional (CF), el cual es caracterizado por diferentes
expresiones de cantidad y calidad movimiento que encontrándose asociadas a estados de
Salud y/o Enfermedad, nos permiten colegir que indefectiblemente siempre serán
interdependientes. Para intentar dar una definición del CF, es necesario recurrir a la
propuesta de la RAE*2: “Capacidad de actuar propia de los seres vivos y de sus órganos, y
de las máquinas o instrumentos.” De esta definición se rescata la mención hacia el
concepto “capacidad de actuar” lo que se puede extrapolar hacia movimiento e intención de
este. Ahora bien, modelos epistémicos para Kinesiología y/o Terapia Física llegan a un
común denominador en relación a la propuesta planteada por Hislop durante la décima
lectura McMillan en al año 19753, la cual contempla como ya lo señaláramos que la
expresión del movimiento humano se da en diferentes niveles jerárquicos que comprenden
desde lo celular a lo social, complementando esto, TMC incorpora esta propuesta como un
principio general de continuidad de movimiento anexando los niveles molecular y persona
en la sociedad4, esta acción es considerada por el modelo FDMH como un elemento
fundamental de reflexión2. En consecuencia, el CF se entenderá como “expresión de
movimiento que posee una intención fundamental”. En estas condiciones, la
determinación del CF es relevante pues entrega los elementos centrales para el desarrollo
del razonamiento clínico según el modelo propuesto, independientemente del nivel
jerárquico (Figura 1).
2 *RAE: Real Academia de la Lengua Española año 2012
Dominio Función-Disfunción
El dominio Función-Disfunción (F-D) tiene una relación cercana y directa con el
constructo de evaluación dado por el CF, en este sentido, aquí se encuentra el motor del
razonamiento. Como se plantea en el algoritmo de la Figura 1, el dominio F-D considera
dimensiones basadas en los niveles de jerarquización propuestos por el modelo de
Patokinesiología3 y complementados por la TMC4 de este modo encontramos las
dimensiones en los niveles de molécula, célula, tejidos, órgano, sistema, persona en la
familia (ambiente) y sociedad.
Al momento de operacionalizar la propuesta, emerge la necesidad de disponer de
herramientas que permitan cuantificar y/o describir los fenómenos biofísicos que traducen
el estado de función-disfunción del movimiento asociado a los diferentes niveles
jerárquicos propuestos. Cabe reconocer que existe una gran cantidad de información
encriptada en la literatura disponible que expone los niveles de acción en donde se
concentran los esfuerzos de intervención de la Kinesiología y/o Terapia Física, al respecto
se propone que el impacto de la Terapia Física se encuentra entre los niveles de tejido y
persona3, lo que sin lugar a dudas plantea una brecha para el resto de los niveles. En este
sentido, es necesario completar con pertinencia interpretativa y creativa los espacios
concernientes a las herramientas que traducen los estados de función y disfunción del
movimiento humano para los restantes niveles jerárquicos. De este modo, se han
identificado herramientas que caracterizan diferentes estados de F-D para el nivel de
persona, sin embargo, el espectro es aun reducido concentrándose básicamente el análisis
en el ciclo ontogénico dado por el envejecimiento mediante la descripción de Actividades
de la Vida Diaria (Figura 2).
Dominio Movimiento + / -
Durante el año 2007, Allen propone un modelo multidimensional para especificar la
expresión de movimiento humano, este constructo reafirma el planteado en la TMC. La
base es genérica para la medición clínica por lo que especificar mediante subdivisiones o
dimensiones puede ayudar a identificar constructos medibles clínicamente que tendrían una
relación cercana y directa con las capacidades de movimiento5. Asumiendo tales
consideraciones, podemos definir el dominio de movimiento como un “gesto motor
específico e inducido”.
El dominio de movimiento comprende básicamente calidad y cantidad de éste, al respecto
es aquí donde la pertinencia del Kinesiólogo con sus herramientas de medición cobra un
valor fundamental. Paralelamente si observamos el modelo de prácticas propuesto por
APTA6, 7 la etapa denominada “test y mediciones” correspondería con la caracterización de
este eje.
Las dimensiones del movimiento propuestas en el modelo incorporan: fuerza, flexibilidad,
velocidad, precisión, adaptabilidad y tolerancia a la fatiga5. Cada una de estas dimensiones
puede ser caracterizada en base a los Test y Mediciones conocidos, sin embargo, no es
menor señalar que las herramientas disponibles exhiben un proceso de maduración
permanente sobre todo en lo concerniente a propiedades clinimétricas de confiabilidad,
validez y aplicabilidad8. Un punto anexo que propone necesidades y desafíos en el campo
de la Epidemiología en Kinesiología se concentra en el proceso de evaluación de los datos
obtenidos en test y mediciones pues se dispone de escasa información acerca de la
expresión de movimiento para diferentes niveles jerárquicos así como contextos dados por
la demografía, antropometría e historial “motor” del sujeto (Figura 3).
Dominio Salud-Enfermedad
En una primera instancia, se considera para el manejo del dominio salud-enfermedad, lo
expuesto por S. Sahrmann9. En este sentido, los sistemas al servicio del movimiento cobran
relevancia desde una mirada asociativa de prevención hasta el punto de vista de
compromiso sistémico agudo o crónico, al respecto, los sistemas propuestos son el cardio-
pulmonar, músculo-esquelético, neuro-muscular y tegumentario.
Es importante aclarar que “esta mirada” sistémica permite establecer el aporte de salud-
enfermedad con una marcada limitación en relación a lo ofrecido por el dominio función-
disfunción pues involucra sólo un nivel de análisis (Figura 4). Asumiendo estas
limitaciones y considerando que el indicador de resultados más sensible para determinar el
estado de salud enfermedad se encuentra en la percepción sintomática o asintomática del
sujeto, el dominio salud-enfermedad se puede definir como “ estado dinámico a nivel de
sistemas el cual tiene su categorización en base a la percepción del sujeto”.
El dominio salud-enfermedad para el Kinesiólogo debe evolucionar hacia una mirada de
autonomía que se fundamenta en buscar respuestas tanto a nivel disciplinar como
interdisciplinar en donde la derivación a otras profesiones de la salud cobra relevancia y
pertinencia, no obstante operacionalmente se propone que la determinación de salud o
enfermedad dependa de la percepción del sujeto en donde amerita plantear la siguiente
pregunta: ¿Cuál es su percepción de salud? (Figura 4).
Como se señala al mencionar y definir la dimensiones del eje salud-enfermedad, nos
encontramos con los sistemas al servicio del movimiento: cardio-pulmonar, músculo-
esquelético, neuromuscular y tegumentario (Figura 1). La caracterización de los sistemas
propuestos se plantea de manera descriptiva, por tanto, dependen en primera instancia del
grado de percepción del sujeto en relación a sintomatología (enfermedad) o asintomatología
(salud) de los últimos tres meses, (Figura 4). Cuando se refiere un contexto asintomático
(percepción de salud buena), es importante definir los factores de riesgo, los cuales se
entienden como los fenómenos biofísicos que pueden comprometer uno o más sistemas al
servicio del movimiento, en concordancia, el grado de severidad categorizada dependerá
del número de sistemas potencialmente comprometidos por cada factor de riesgo (Figura
4).
Por su parte, el contexto de sintomatología surge de una respuesta “regular” o “mala” en
relación a percepción de salud y su categorización (leve-moderado-severo) no depende
necesariamente del número de sistemas comprometidos sino que de los estados de
evolución temporal (crónico-agudo), progresión, compensación y reversibilidad. (Figura
4). En consecuencia, se proponen las categorizaciones para el contexto de enfermedad las
cuales se fundamentan en el complemento de los elementos descritos. Es importante
destacar que a pesar de que el modelo busca caracterizar al sujeto independiente del
diagnóstico de otros profesionales de la salud, se debe considerar este antecedente como un
elemento complementario para la toma de decisiones. Un aspecto relevante considera el
aporte de un tutor cuando la comunicación del paciente no lo permite (Figura 4).
Extremos e Intersección del Modelo FDMH
Para avanzar en esta propuesta en base a un marco conceptual y epistémico propio para el
razonamiento hipotético deductivo, es importante complementar cuestionamientos críticos
que ayudan a orientar la operacionalización. Es así como surgen dos interrogantes:
1) ¿Qué contexto representa el punto central del modelo? y
2) ¿Cuáles pueden ser las expresiones extremas de los dominios propuestos?
En este escenario, el producto obtenido del flujo de información fluido y atingente debe
establecer consensos clínicos que permitan la comunicación intradisciplinar y la toma de
decisiones capitalizada en un plan de intervención (Tabla 1 y Figura 5).
PROYECCIONES Y DESAFÍOS
• Si bien se dispone de estrategias de razonamiento hipotético deductivo, es necesario
ampliar la discusión mediante el desarrollo de más y nuevos modelos epistémicos
vinculados a la acción de la disciplina para resolver de manera amplia problemáticas
concernientes a función-disfunción del movimiento humano, considerando los
espacios sociales que la profesión desea ocupar.
• La disponibilidad de modelos que permitan focalizar las problemáticas
profesionales de manera consistente con el objeto de estudio contribuyen
efectivamente a progresar en la autonomía profesional.
• La necesidad de traductores en todos los niveles jerárquicos, es un desafío
tecnológico y creativo para la generación de herramientas pertinentes al
Kinesiólogo.
• Las representaciones gráficas y matemáticas son incorporaciones fundamentales
para la didáctica de los profesores de Kinesiología.
AGRADECIMIENTOS
A todas las generaciones de estudiantes de la Escuela, que desde el año 2006 en adelante
vienen contribuyendo con sus hermosas preguntas en torno a los desafíos que los van
haciendo propios, en esos significativos espacios que nunca han sido y serán los horarios
establecidos por el Curriculum.
REFERENCIAS
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FIGURAS Y TABLAS.
Figura 1. Algoritmo que muestra la relación entre el constructo, dominios, dimensiones y herramientas que comprende la operacionalización del Modelo Función-Disfunción. Las herramientas representan las acciones concretas de indagación, exploración, examinación, medición y evaluación que caracterizan los pasos específicos del razonamiento hipotético-deductivo o clínico. (Las herramientas requieren de una estrategia de transformación permanente que las hagan cada día más pertinentes a los Kinesiólogos incluyendo la consideración de apoyos técnicos y tecnológicos para el diagnóstico y la intervención).
Figura 2. Algoritmo que ejemplifica el razonamiento para la ubicación del punto azul en el Dominio (vector) Función-Disfunción para un caso en particular obtenido desde los datos de Test y Mediciones. (Se asume que el contexto funcional deriva de las Actividades Básicas de la Vida
Diaria según el índice de Barthel).
Figura 3. Algoritmo que identifica el razonamiento para la ubicación de los puntos azules en el Dominio (vector) Movimiento obtenidos de los Test y Mediciones. (Análisis hipotético en base a un sujeto Adulto Mayor de género masculino con IMC normal y edad de 64 años).
Figura 4. Algoritmo que describe la categorización del Dominio (vector) Salud-Enfermedad en toda la extensión de sus sistemas al servicio del movimiento, el esquema es para caracterizar a cualquier sujeto iniciando el flujograma desde la percepción de su salud. La pregunta inicial estará condicionada por el nivel cognitivo y/o comunicacional del sujeto. La expresión de sintomatología se relaciona con las respuestas: “regular” o “mala.” Los sistemas al servicio del movimiento son el Cardio-pulmonar, Músculo-esquelético, Neuro-muscular y Tegumentario. Se entiende por Factor de Riesgo (FR) como todo fenómeno que impactaría negativamente en un estado de asintomatología (salud). Se entiende por Factor Pronóstico (FP) como todo fenómeno que condiciona o potencia un estado de sintomatología (enfermedad). A.=Asintomático; S.=Sintomático. Agudo=A; Crónico=C; compensado=c; descompensado=d; Progresivo=P; No progresivo=NP;
Figura 5. Diagrama aplicado del Modelo Función-Disfunción. El rectángulo azul define a un sujeto que se encuentra en el cuadrante superior derecho con indicadores de función, movimiento y salud límite. (Además se representan las características de sujetos que manifiestan
valores extremos en relación a intersección de vectores).
Dominio Extremos del Vector Punto Central de Intersección
F-D
Extremo Superior determinado por la capacidad funcional máxima definida para cada contexto.
Extremo Inferior: determinado por el proceso de disfunción incompatible con la vida. “Estado de
disfunción máxima irreversible”
Intersección ejes: determinado por la capacidad funcional mínima, en donde la función se desarrolla en el límite inferior de independencia.
M(+)-M(-) Análisis Cuantitativo*
Extremo Superior: determinado por dispersión de datos sobre el promedio observado en la población de interés.
Extremo Inferior: Determinado por la expresión de movimiento incompatible con la vida. “Estado
irreversible de inmovilismo”
Intersección ejes: determinado por el límite inferior del movimiento positivo, el cual comprende 1 desviación estándar bajo el promedio observado en la población de interés.
S-E
Extremo Derecho: determinado por el contexto asintomático y sin factores de riesgo (FR).
Extremo Izquierdo: determinado por el contexto de falla multisistémica la cual es incompatible con la vida.
Intersección ejes: determinado por el contexto asintomático y FR que comprometen a los 4 sistemas.
Tabla 1. Descripción de extremos e intersección según Modelo Función-Disfunción.
*En el eje de movimiento es importante considerar que el análisis en base a una desviación estándar es arbitrario por lo que perfectamente se podría recurrir a otras pruebas estadísticas para determinar dispersión de datos (Ej: Intervalos de confianza o Percentiles). Cabe destacar que los extremos de disfunción, movimiento negativo y enfermedad se manifiestan en el proceso de muerte para el sujeto. Esta apreciación es necesaria pues establece niveles de acercamiento entre los ejes lo que demuestra que existe convergencia en puntos críticos.