misioneros nº 134

El presidente venezolano HugoChávez fallecía el pasado 5 demarzo. Miles de compatriotas llo-raron su pérdida en un país que sepresenta profundamente dividido.

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en este número...

y además...

EDITA OBRAS MISIONALES PONTIFICIASC/ Fray Juan Gil, 5 28002 - Madrid Tfno: 91 590 27 80 Fax: 91 563 98 33 E-Mail: [email protected]://www.omp.eshttp://www.domund.org

Nº 134 . ABRIL, 2013

AGUSTINOS RECOLETOSPaseo de La Habana, 167. 28036 Madrid.Tel. 91 345 34 60 COMPAÑÍA DE JESÚSAvda. de la Moncloa, 6. 28003 Madrid. Tel. 91 534 48 10 COMPAÑÍA MISIONERA DEL SAGRADO CORAZÓNEstocolmo, 9. 28022 Madrid. Tel. 91 313 56 40 FRANCISCANAS MISIONERAS DE MARÍACardenal Marcelo Spínola, 38. 28016 Madrid.Tel. 91 302 61 99 MISIONERAS DE NUESTRA SEÑORA DE ÁFRICA(HERMANAS BLANCAS)Asensio Cabanillas, 39. 28003 Madrid. Tel. 91 553 82 60 MISIONEROS CLARETIANOSClara del Rey, 6. 28002 Madrid. Tels. 91 415 23 61 y 91 415 21 99 INSTITUTO ESPAÑOL DE MISIONES EXTRANJERASFerrer del Río, 17. 28028 Madrid. Tel. 91 355 23 42 MERCEDARIAS MISIONERAS DE BÉRRIZFereluz, 2. 1ª A 28039 Madrid. Tel. 91 571 63 03MISIONERAS CRUZADAS DE LA IGLESIAMadre Nazaria, 7. 28044 Madrid. Tel. 91 525 32 04 MISIONERAS DE CRISTO JESÚSPeñuelas, 18. 5º A. 28005 Madrid. Tel. 91 517 41 78 MISIONERAS DOMINICAS DEL ROSARIOGeneral Kirkpatrick, 44. 28027 Madrid. Tel. 91 367 36 71 MISIONEROS ESPIRITANOSSanta Engracia, 149. 1º B. 28003 Madrid. Tel. 91 554 21 57 Olivos, 12. 28003 Madrid. Tel. 91 553 36 16 MISIONEROS DE MARIANNHILL Arturo Soria, 249. 28033 Madrid. Tel. 91 359 07 40 MISIONEROS DEL VERBO DIVINO Corazón de María, 19. 5º B. 28002 Madrid. Tel. 91 415 43 55 MISIONEROS OBLATOS DE MARÍA INMACULADA Diego de León, 36. 28006 Madrid. Tel. 91 411 12 12 Pozuelo de Alarcón, Madrid. Tel. 91 352 34 16 PADRES BLANCOSMenorca, 3. 28009 Madrid. Tel. 91 574 04 00SOCIEDAD DE MARÍA - MONFORTIANOSGarabay, 7. 2º. 28850 Torrejón de Ardoz(Madrid). Tel. 91 677 69 11 SOCIEDAD DE MISIONES AFRICANAS Asura, 34. 28043 Madrid. Tel. 91 300 00 41

coeditores

T E R C E R M I L E N I O

IGLESIA A FONDO

PRIMER PLANO

Los llamados territorios de misión son,desde hace tiempo, la tierra más fértilpara las vocaciones al sacerdocio y a lavida religiosa. Estos jóvenes constituyenuna "señal de esperanza" para la Iglesia.

INFORMEEl arzobispo de Buenos Aires, Jorge MarioBergoglio, es, desde el 13 de marzo, elnuevo Papa de la Iglesia católica. El primer

Pontífice latinoamericano ha sido reci-bido con ilusión por el pueblo de Dios.

7 TRIBUNA Papa Francisco. Más alláde las propias fronteras

10 EL OBSERVADORCUBA - PAKISTÁNSUDÁN DEL SUR EL SALVADOR

20 ASÍ VA EL MUNDOIRAK - CHINAR. D. DEL CONGO

36 ENTREVISTAP. CCeessáárreeoo HHooyyuueellaa, misionero en Burkina Faso

39 ANIMACIÓN MISIONERA

43 CARISMASFranciscanas de Ntra. Sra. del Buen Consejo

46 CULTURABye-Bye Kabul

54 MISIÓN VIVABBeeaattrriizz CCaavveessttaannyy,,misionera en Japón

56 MISIÓN VIVAMons. ÁÁnnggeell FFlloorroo,,obispo de Gokwe (Zimbabue)

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A la sorpresa inicial,habría que añadir la“señal de esperanza”que ha supuesto para

la Iglesia universal, y muy espe-cialmente para el mundo misio-nero, la elección como Papa, elpasado 13 de marzo, del cardenalarzobispo de Buenos Aires, JorgeMario Bergoglio. Son muchos losrasgos misioneros que, ya comocardenal, y por supuesto tambiéncomo papa Francisco, presenta elnuevo Santo Padre. A comenzarpor ese hecho, que se podría cali-ficar de histórico, de que sea unpapa procedente del Sur, de quelos cardenales hayan tenido queir a buscarlo, como él mismo di-jo, “al fin del mundo”. Curiosa-mente, esa “señal de esperanza”resalta ahora, en significativacoincidencia, en el lema con queha querido presentarse este añola celebración de la Jornada deVocaciones Nativas.

No es el único aspecto misio-nero que presenta el papa Fran-cisco. Su deseo de “una Iglesiapobre y para los pobres” cuadra ala perfección con la opción prefe-rencial por los últimos, por losmás necesitados y débiles, decualquier vocación entregada a lamisión ad gentes. Su voluntad deservicio, su sencillez, su humil-dad, su estilo cercano, afable, di-recto y llano encajan asimismocon el sentir y la forma de actuar

del misionero. También, su preo-cupación por atender las realida-des más dramáticas, en las quees más necesario dar a conocerlos valores del Evangelio. “No ig-nores –ha dicho– tantos rostrosde hombres y mujeres débiles, quetambién necesitan de tu mirada”.

Por eso, en las CongregacionesGenerales previas al cónclave quelo eligió como “Obispo de Roma”,el entonces cardenal Bergoglio

apuntaba un plan de acción parala Iglesia, que constituye toda unareivindicación misionera. “La Igle-sia –apuntaba con precisión– estállamada a salir de sí e ir hacia lasperiferias, no solo las geográficas,sino también las periferias exis-tenciales: las del misterio del pe-cado, las del dolor, las de la injus-ticia, las de la ignorancia y pres-cindencia religiosa, las del pensa-miento, las de toda miseria”. Y aligual que no nos cansamos de re-petir que una Iglesia que no esmisionera es una Iglesia estéril,yerma, condenada a desaparecerencerrada en sí misma, el futuropapa Francisco añadía: “Cuando laIglesia no sale de sí misma para

evangelizar, deviene autorreferen-cial y entonces se enferma”.

Desde entonces, el Santo Pa-dre, como si estuviese describien-do el terreno en el que habitual-mente se mueven nuestros misio-neros y misioneras, ha invitado alos sacerdotes “a experimentarnuestra unción, su poder y efica-cia redentora, en las ‘periferias’donde hay sufrimiento, sangrederramada, ceguera que desea

ver, donde hay cautivos de tan-tos malos patrones”. Y a los jó-venes les ha pedido: “¡No os de-jéis robar la esperanza! Esa quenos da Jesús. [...] ¡Id y llevad laesperanza! ¡Llevad a Cristo, queen la cruz nos ha dado el abrazode Dios!”. Y al resto de fieles lesha animado a no “esconderse”, ano “autojustificarse”, a no tener“miedo de las sorpresas de Dios”,a la novedad “que nos trae y nospide”, a no preferir “nuestras se-guridades”. Todo ello, sin olvidarque el diálogo ha de ser el ins-trumento idóneo que “ayude aconstruir puentes entre todos loshombres”. Papa Francisco, laIglesia misionera te espera.

E D I T O R I A L

DIRECTOR Alfonso Blas REDACCIÓN Rosa Lanoix, Rubén Azuara DISEÑO Antonio Aunés COLABORADORES Anastasio Gil, Rafael Santos, DoraRivas, Montserrat Vilaseca, Antonio José Molina, José Beltrán, José Carlos Ro-dríguez, José Ignacio Rivarés, Volusiano Calzada, José Ramón Carvallada, María

Jesús Sahagún, Carmina Sofía Fernández, Juana Gómez, Joaquín Martínez, Juan Lázaro Sánchez, Vicente MarquésRuiz, Lourdes Gabilondo DOCUMENTACIÓN Ana Fernández ARCHIVO FOTOGRÁFICO Antonio Aunés, Rafael SantosFOTOGRAFÍAS Efe, Missio SUSCRIPCIONES Roberto Murga DEPÓSITO LEGAL M-48558-1999 ISSN 1695-1034 IMPRESIÓN Gráficas Dehon. PP. Reparadores. C/ La Morera, 23-25. Torrejón de Ardoz, Madrid. Tfno: 91 675 15 36

T E R C E R M I L E N I O

“La Iglesia está llamada a salir de sí e irhacia las periferias, no solo las geográficas,

sino también las periferias existenciales.

Toda una señal de esperanza

La evangelización estápermanentemente enlos gestos y en las pala-bras del nuevo papa

Francisco. Esta reiterada invita-ción a salir de nosotros mismoses una interpelación para descu-brir el alcance de la pregunta so-bre qué tipo de evangelización es-tá preconizando el Papa. Una pri-mera apreciación parecería indicarque la tarea se circunscribe única-mente a los más próximos, a losinmediatos, a los de aquí, paradar la razón a quienes reiteran:“¡La misión está aquí!”. Pero susintervenciones llevan a compren-der que evangelizar es ir más alláde las propias fronteras, salir alencuentro de los que están lejos.A quienes aceptan este compro-miso los calificó en época recientecomo “un fuerte signo del Espíri-tu en la gesta evangelizadora”.Son también signo del Evangelioy portadores de la Buena Noticia,como lo fueron los evangelizado-res de la primera hora.

La dimensión universal de laevangelización se percibe con cla-ridad en la exhortación del enton-ces arzobispo de Buenos Aires alos fieles de esta Iglesia local aliniciar el Año de la Fe: “Cruzar elumbral de la fe es vivir en el espí-ritu del Concilio y de Aparecida,Iglesia de puertas abiertas no solo

para recibir, sino fundamentalmen-te para salir y llenar de Evangeliola calle y la vida de los hombresde nuestros tiempo”. Cuando ha-bla del hombre de nuestro tiempoapela al pensamiento del beatoJuan Pablo II, citándole en una desus cartas pastorales: “El hombrecontemporáneo cree más a los tes-tigos que a los maestros; cree más

en la experiencia que en la doctri-na, en la vida y los hechos que enlas teorías” (RM 42); más que nun-ca, es importante ser sal y ser luz.

La invitación a salir de unomismo, del grupo de pertenencia,de la misma parroquia, es una au-téntica propuesta misionera. Enestas palabras se esconde un co-razón ardiente para que los cris-tianos sean “luz y sal”, tal y co-mo interpelaba a los grupos mi-sioneros. Es en el decreto conci-liar Ad gentes donde el cardenalBergoglio encuentra la radicali-dad de la vocación a la misión:“La Iglesia agradece con inmensogozo el don inestimable de la vo-cación sacerdotal que Dios haconcedido a tantos jóvenes entrelos pueblos convertidos reciente-

mente a Cristo” (AG 16). “Piensoen cada uno de los jóvenes queintegran los grupos misioneros ylos animo a no tener miedo a so-ñar, a tener ideales grandes, a sertestigos de Jesús muerto y resuci-tado por amor, a ser constructo-res de esperanza”. Palabras claras,dirigidas a los jóvenes, que abrennuevos y arriesgados horizontes.

Para superar la tentación dequedarse mirando sólo a los lími-tes geográficos de una diócesis ode una parroquia, el cardenal Ber-goglio asume como propio el pen-samiento de Aparecida: “El mundoespera de nuestra Iglesia latinoa-mericana y caribeña un compromi-so más significativo con la misiónuniversal en todos los continentes.Para no caer en la trampa de ence-rrarnos en nosotros mismos, debe-mos formarnos como discípulosmisioneros sin fronteras, dispues-tos a ir ‘a la otra orilla’, aquella enla que Cristo no es aún reconocidocomo Dios y Señor y la Iglesia noestá todavía presente” (n. 376). Se-guro que pronto veremos estospensamientos plasmados en unmensaje misionero.

NÚM. 134, ABRIL DE 2013 misioneros 1

Por D. Anastasio Gil. DDiirreeccttoorr NNaacciioonnaall ddee OOMMPP

T R I B U N A

Las intervenciones del papa Francisco llevan acomprender que evangelizar es ir más allá de

las propias fronteras, salir al encuentro del otro.

Más allá de las propias fronterasPapa Francisco

Michael es nigeriano.Yohanes, indonesio. Elpasado 19 de marzo,día de San José, mien-

tras el papa Francisco iniciaba ofi-cialmente su pontificado, ellostambién daban un “sí” a Dios. Enla iglesia del Colegio Claret de Se-govia, estos dos jóvenes eran or-denados diáconos. Al finalizar laeucaristía, se mostraron agradeci-dos por haber sido llamados a ser-vir como misioneros claretianos.Un agradecimiento que no deja deser “señal de esperanza”.

Precisamente este es el lemade la Jornada de Vocaciones Nati-vas, que este año se celebra el 28de abril. Una Jornada volcada enayudar a aquellos jóvenes de losterritorios de misión que decidendar el paso y hacer de su vida un“hágase”, como signo para el mun-do de la presencia viva de un Diosque sigue llamando a construir

14 misioneros NÚM. 134, ABRIL DE 2013

Un Iglesia viva que mira al Sur. Los países tra-dicionalmente considerados territorios de mi-sión se han convertido desde hace años en latierra más fértil para las vocaciones al sacerdo-cio y a la vida religiosa. De ahí que la Jornadade las Vocaciones Nativas de este año presentea estos jóvenes que dan un paso al frente co-mo "señal de esperanza"; un florecimiento queaporta frescura y novedad al anuncio del men-saje del Evangelio, y que requiere un cuidado yuna formación en materia teológica y pastoralque no hay que descuidar.

SEÑAL DE ESPERANZASEÑAL DE ESPERANZA

28 de abril, Jornada de Vocaciones Nativas

IGLES IA A FONDO


una nueva realidad. Lo asegurabaBenedicto XVI en el Mensaje parala Jornada Mundial de Oración porlas Vocaciones, al destacar que “te-ner esperanza equivale, pues, aconfiar en el Dios fiel, que mantie-ne las promesas de la alianza”. Pe-ro también hay que subrayar lanecesidad de responder con fideli-dad a lo que el santo padre Fran-cisco pidió, en un mensaje que en-vió pocos días después de ser ele-gido Papa, a seis diáconos que fue-ron ordenados en la que hasta ha-ce unas semanas era su diócesis.Con firmeza, les exhortó que nofueran “diáconos de alquiler” nifuncionarios. Les recordó que “laIglesia no es una ONG. Pongan lacarne en el asador”. Y les invitó areafirmar su compromiso cuando,en un breve plazo de tiempo, denun paso más en su respuesta aDios: “Que la existencia sacerdotalde ustedes sea servicio: servicio aJesucristo, servicio a la Iglesia, ser-vicio a los hermanos, especialmen-te a los más pobres y necesitados”.

Frutos visiblesLa invitación lanzada a las

jóvenes Iglesias para que, en suspaíses, tomen el relevo a la entre-ga infatigable que durante los úl-timos siglos han realizado los mi-sioneros procedentes de las Igle-sias de vieja tradición, ya comien-za a dar frutos visibles. Es el casode René Leigue Cesari, el primerindígena del oriente boliviano que

es ordenado obispo, en este caso,como prelado auxiliar de SantaCruz de la Sierra. Es el mayor dediez hermanos de una familia hu-milde de la región de Warnes. Trasdiez años de formación en los se-minarios del Espíritu Santo y deSan Lorenzo, fue ordenado sacer-dote en 1999 por el cardenal JulioTerrazas, quien ha confiado tam-bién en él para su nuevo ministe-rio. “Les pido que por ser obispono me miren de otro modo; espe-ro que siempre me consideren suamigo y que sean parte del traba-jo que voy a realizar”, comentabacon humildad, consciente de la ne-

cesidad de que su nombramientono sea una anécdota dentro del ca-mino recorrido por la Iglesia boli-viana: “El trabajo es bastante, lamies es mucha, los obreros pocos.Que sea Él quien nos ilumine yquien nos dé la palabra oportunapara que podamos hacer ver aotros hermanos y hermanas québonito es seguir al Señor”.

Lo cierto es que las nuevasgeneraciones de sacerdotes, reli-giosos y religiosas nacidos en paí-ses identificados tradicionalmentecon la misión ad gentes se estánconvirtiendo en la nueva prima-vera de la Iglesia frente, por

Gracias a los países de misión,la Iglesia asiste hoy a

una nueva primavera vocacional.

ejemplo, a una Europa seculari-zada, donde las vocaciones pare-

cen estancadas. Una tierra dondela semilla germina, como ilustra elcartel de la Jornada de este año,frente a un campo que parece al-go seco. Es precisamente la ObraPontificia de San Pedro Apóstol laque se preocupa de responder alas múltiples, y a menudo serias,necesidades que han de afrontarlas vocaciones nativas surgidas enpaíses que sufren graves caren-cias, a las que estos jóvenes quequieren ser sacerdotes, religiososy religiosas no son ajenos. Porello, esta Obra Pontificia trata deproporcionar a seminaristas, novi-cios y novicias una ayuda espiri-tual y económica que les permitapoder formarse en sus comunida-des de origen. Basta con una apor-tación de 350 euros para sufragarun curso académico de un futurosacerdote y con poco más de 2.000para completar los gastos de losseis años de formación. En total,según el informe más reciente dela Secretaría General de San PedroApóstol en Roma, en el último añose ha podido becar a un total de80.297 jóvenes.

La contribución de España en2012 (con las aportaciones que losfieles hicieron para esta Obra du-rante el año 2011) fue de 1,68 mi-llones de euros, siendo África laprincipal beneficiaria, con más de1,37 millones, seguida de Asia yAmérica. Dentro de la realidad delcontinente negro, ha sido la Repú-blica Democrática del Congo laprincipal receptora de estas ayu-das, con 275.732 euros, seguida deNigeria y Costa de Marfil. En Asia,India ha recibido a través de estasbecas 162.321 euros, mientras queEcuador –con 42.462– se convierteen el principal país receptor delcontinente americano. Durante elaño 2012, la Dirección Nacional y

las Diocesanas de las OMP de Es-paña recaudaron algo más de dosmillones de euros para respondera estas necesidades al sacerdocio yla vida religiosa emergentes, frutode donaciones que proceden fun-damentalmente de la Jornada deVocaciones Nativas. En los próxi-mos meses esta suma se pondrá adisposición de la Secretaría Gene-ral de San Pedro Apóstol.

En la mayoría de los casos, eldinero repartido se destina a la for-mación de seminaristas, novicios ynovicias de las comunidades loca-les, lo que se conoce como subsi-dios ordinarios. Véanse los cerca de57.000 euros que el seminario ma-yor San Pedro Claver, de la diócesisde Bobo-Dioulasso (Burkina Faso),ha recibido para financiar los estu-dios de 80 seminaristas. En otroscasos, los subsidios extraordina-rios, se trata de una inversión que

busca precisamente construir osostener centros formativos en es-tas comunidades locales que sonfermento vocacional, como ocurrepor ejemplo con el préstamo sinintereses de unos 32.000 euros alseminario menor Saint AloysiusKitiwun de Camerún, que buscaponer en marcha un cultivo agrí-cola para la autofinanciación deeste centro educativo.

Oportunidad únicaNo resulta extraño que sea

una nación como la R. D. del Con-go la mayor beneficiaria de estegesto de cooperación. Precisamen-te, el cardenal Fernando Filoni,prefecto de la Congregación parala Evangelización de los Pueblos,visitó el pasado verano el país y,en unas palabras dirigidas a los se-minaristas y a sus formadores enKinshasa, les recordó que “el se-

I G L E S I A A F O N D O


minario es como un granero al quese debe prestar la máxima aten-ción, porque de este depende elsustento de la familia, que es laIglesia”. Así, a los aspirantes al sa-cerdocio les insistió en la necesi-dad de vivir este tiempo de prepa-ración con “un gran sentido decompromiso y responsabilidad”,como una oportunidad “única yvaliosa para adquirir conocimien-

tos intelectuales y para el creci-miento humano y espiritual”.Unos días más tarde también sedirigió a los formadores de los jó-venes desde Bangui, en la Repúbli-ca Centroafricana, donde les instóa intensificar la formación espiri-tual, para que los jóvenes que tie-nen encomendados “adquieran unprofundo espíritu misionero, delas virtudes humanas y el sentidode la Iglesia”, de modo que seanconscientes de que “convertirse ensacerdote significa ser mandado amisión, lo que consiste principal-mente en dar testimonio de su fey de su caridad”. Un especial hin-capié hizo el cardenal Filoni en lanecesidad de trabajar con ellos la“madurez emocional” y mostrarlescon claridad las dificultades quesurgen en torno a su vocación, pa-

ra que sean conscientes de la na-turaleza indivisible del celibato, lacastidad y la gracia del sacerdocio,que “requiere una entrega total desí: cuerpo, corazón, voluntad y to-da capacidad de amar a Dios”.

“Mi experiencia me invita atrabajar cada vez más el sentidocomunitario en aquellas jóvenesque deciden apostar por una vidaconsagrada misionera, en descu-

brir el sentido de la comunidad pa-ra Jesús, como una necesidad devivir unidos, independientementede nuestro origen o punto de par-tida”, reflexiona Isabel Gómez,formadora de las Misioneras Cru-zadas de la Iglesia. “Las vocacio-nes nacidas en territorio de misiónaportan a la Iglesia su frescura, sudeseo incansable de servir al Señory a su pueblo. Me sorprende espe-cialmente cómo son capaces de su-perar las dificultades que se lespresentan para responder a la lla-mada. Y no me refiero al aspectoeconómico, sino a las barreras físi-cas, a esos kilómetros y kilómetrosque se ven obligadas a recorrerpara alimentar su fe”, comenta es-ta misionera, que ahora mismo ca-mina con cinco jóvenes camerune-sas, una peruana y una argentina.“Las jóvenes de África están sien-do un ejemplo para mí en su sen-tido de relacionarse con lo sagra-do. Quizá nosotros, en la sociedadsecularizada en la que nos move-mos, hemos dejado a un lado elponer en valor, por ejemplo, el he-cho de descalzarnos ante la tierraque consideramos sagrada. Se tra-ta de una imagen visual, que re-fleja esa pasión con la que vivensu fe”, explica Isabel, quien preci-samente reconoce que “hemos deentrar más en la profundidad desus ritos, de aquellos valores cul-turales que les han acercado a lafe cristiana, para trabajar desdeahí, algo que sin duda nos permi-tirá ir a lo esencial, a lo que es elcentro de su vocación”.

El desafío de la interculturalidad

“Nuestra apuesta pasa por lainterculturalidad”, relata AtilanoRodríguez Martín, formador delos Misioneros del Verbo Divino,que explica cómo el último capí-tulo general de la congregación,


celebrado el pasado año, subra-yó, a través de unas orientacio-

nes, la necesidad de avanzar en loque él considera un “auténticodesafío”. “Supone un reto para to-dos nosotros comprender las cul-turas de aquellos que están llama-dos a la misión. Exige una mayorescucha de la realidad de dondeproceden y un respeto a sus raíces.Desde ahí se puede descubrir la ri-queza de las vocaciones nativas”,apunta Atilano, que acompaña acinco jóvenes de África y Américacon votos temporales, además deconvivir en la misma comunidadcon otros tantos religiosos deotras congregaciones y países. “Esuna forma de dar testimonio de la

comunidad universal que es laIglesia. Además, interpela a todoaquel que nos ve y nos preguntacómo es posible que vivamos jun-tos”. “La realidad es que el futurode las comunidades religiosas enmisión pasa por ahí, por la convi-vencia de personas en el lugar don-de están destinadas, procedentesde lugares muy dispares, pero quecomparten una fe y un carisma”.“A la Iglesia europea, los jóvenesque vienen de los conocidos comoterritorios de misión nos aportanuna vitalidad en las celebracionesque nosotros no tenemos. Esa for-ma de vivir la liturgia, con sus ri-tos y cantos, puede hacer que unaeucaristía dure tres horas, frente a

la media hora a la que a menudoreducimos la nuestra”, señala elresponsable de formación de lacongregación fundada por el ho-landés san Arnoldo Janssen.

Con relación a las lagunas quepresentan estas nuevas generacio-nes, Atilano Rodríguez, hace hinca-pié en la necesidad de fomentar elestudio de la Teología: “La parteexperiencial la tienen muy trabaja-da, y de hecho nosotros tenemos elcompromiso social con un come-dor como parte de la dinámica co-tidiana. Por eso mi prioridad es elestudio; tienen que apretar los co-dos. Si ahora no fundamentan su fede manera sólida, más adelante lespasará factura. O dicho de una ma-nera más coloquial, no hay quedarles leche condensada, sino ali-mento consistente, como ya plan-teaba san Pablo”. Y añade otro as-pecto que podrían tener en común


Según el informe más reciente,en el último año se ha podido

becar a un total de 80.297 jóvenes.

I G L E S I A A F O N D O

con los demás jóvenes de su ge-neración y que tiene que ver connuestro mundo global de comuni-caciones en tiempo real. “Las re-des sociales han hecho que el con-tacto con sus familias y sus pa-rroquias en sus países sea perma-nente. Eso dificulta que tanto lamente como el corazón estén ple-namente volcados con el lugar enel que están destinados, algo queno pasaba con nuestra genera-ción. La experiencia me dice quehay que zambullirse en la culturaa la que somos enviados para po-der evangelizar desde el conoci-miento de primera mano de laspreocupaciones de la gente y de larealidad del país. Recuerdo misnueve años como misionero enBrasil y cómo me decían que pa-recía más brasileño que ellos, porel modo en que me identifiquécon su forma de vida”, señala.

En cualquier caso, estamos an-te un goteo incesante de vocacio-nes, especialmente en aquellospaíses donde el primer anuncio delmensaje del Evangelio es relativa-mente reciente y la mayoría de lapoblación no conoce a Cristo. Ahíestán los tres diáconos de la con-gregación china de los PequeñosHermanos de San Juan Bautista or-denados en Vietnam. No es de ex-trañar que el obispo de la diócesisde Taichung, Martín Su Yao-wen,les dijera durante la homilía de lacelebración, que tuvo lugar en ene-ro: “Sois el mejor regalo del Año dela Fe”. Doce años lleva el procesode formación de estos jóvenes; enpalabras del prelado, “respondien-do a la llamada del Señor, habéisconvertido un pequeño amor en ungran Amor”. Y, además, en espe-ranza para la Iglesia.

JOSÉ BELTRÁN

or Ana Rosa Sivori nolo duda: "Francisco va adar un impulso al au-

mento de las vocaciones, es-pecialmente en América Lati-na, donde se concentra elmayor número de católicos",comenta a Misioneros, para,a renglón seguido, asegurarque "el testimonio de un Pa-pa que habla en su mismoidioma y conoce las inquietu-des de los jóvenes de la re-gión de primera mano, sinduda alguna tocará muchoscorazones". Esta misionera sa-lesiana, que lleva 46 añosdestinada en Tailandia, hablacon conocimiento de causa.Entre otras cosas, porque esprima del hasta hace unas se-manas cardenal Jorge MarioBergoglio. "En Tailandia se haacogido su elección con granentusiasmo, especialmenteentre la comunidad budista,además de entre las alumnasy familias de nuestro colegio",comenta sor Ana Rosa pocodespués de asistir a la misade inicio de pontificado, con-

vencida deque "Fran-cisco nece-sita la luzdel Espíri-tu Santopara poderhacer todoel bienque él pre-tende ha-cer por la

Iglesia y por el mundo. Estáhablando mucho de confra-ternidad en la Iglesia y en elmundo entero y, al mismotiempo, pido al Señor paraque ilumine al papa Franciscoy lo guíe en su misión de lamejor manera posible".

S

El impulso vocacionaldel papa Francisco


Caracas. 5 de marzo. Un com-pungido Nicolás Maduro, a lasazón vicepresidente de la Re-pública, comparece por televi-

sión rodeado de ministros y mi-litares. Pese a lo previsible de

su intervención, esta deja alpaís conmocionado. El coman-dante presidente Hugo Chávezha fallecido a las 16.25 horas,

anuncia con voz entrecortada yentre sollozos. Cientos de milesde personas se echan inmedia-tamente a las calles. La policía

y el ejército son desplegadospara prevenir posibles distur-

bios que no se producen. Con58 años, acaba de desaparecerel último caudillo de América.


EL ÚLTIMO CAUDILLOCHÁVEZCHÁVEZ

P R I M E R P L A N O

Rodeado de ministros ymilitares, Nicolás Madu-ro anunció el óbito des-de el vestíbulo del Hos-

pital Militar Carlos Arvelo de Ca-racas, donde el presidente se ha-llaba internado desde su sorpresi-vo retorno a Venezuela, el pasado18 de enero. La versión oficial diceque Hugo Chávez falleció en esecentro. Algunos medios, como eldiario ABC, aseguran, sin embargo,

que el mandatario murió realmen-te en Cuba, adonde habría sido lle-vado de urgencia y de incógnitoante la gravedad de su estado, ydevuelto posteriormente a Caracastras el deceso. Una hipótesis másque plausible, en vista de la totalfalta de transparencia del régimensobre la enfermedad y el estado desalud del presidente.

Chávez murió, finalmente, sinllegar a jurar su última reelección,

obtenida el pasado 7 de octubre.Eso sí, dejó heredero político. An-tes de coger en diciembre un aviónpara someterse en La Habana a lacuarta operación contra el cáncer–sin más precisiones– que le fuedetectado en 2011, se dirigió alpaís en estos términos: “Si algoocurriera, que me inhabilitara dealguna manera, Nicolás Maduro nosolo debe concluir el periodo comomanda la Constitución, sino que


mi opinión firme, plena como laluna llena, irrevocable, absoluta,total, es que en ese escenario, queobligaría a convocar eleccionespresidenciales, ustedes elijan a Ni-colás Maduro como presidente”.

El delfín, vicepresidente delpaís desde octubre, asumió ipsofacto su papel de adalid del “so-cialismo del siglo XXI”. Para em-pezar, encabezó la “marea roja” (elcolor del chavismo) que acompañóel ataúd con los restos mortalesdel caudillo –ABC informó de queel féretro iba vacío– por las callesde Caracas. Siete horas tardó la co-mitiva en recorrer los poco más deocho kilómetros hasta su destino,tal era el gentío. Siete horas de re-transmisión en directo, y otras

tantas de loas al “gigante de Amé-rica” y “líder eterno de la revolu-ción”, como lo calificaban las locu-toras de la televisión.

Maduro tuvo también un pro-tagonismo principal en el funeralde Estado que se ofició el día 8. Ex-cepto Federico Franco (Paraguayestá excluido de los organismos re-gionales, tras el golpe de Estado le-galizado en que fue apartado delpoder el presidente Fernando Lu-

go), allí estuvieron todos los presi-dentes latinoamericanos, así comoalgunas de las “amistades peligro-sas” del fallecido: el iraní MahmudAhmadineyad, el bielorruso Ale-xander Lukashenko, objeto desanciones por parte de EstadosUnidos y de la Unión Europea, yObiang Nguema, en el poder enGuinea Ecuatorial desde hace 34años. En representación de Espa-ña acudió el príncipe Felipe.

En Venezuela fueron decre-tados siete días de luto oficial.

En Cuba y Ecuador, tres. El cuerposin vida fue expuesto durante unasemana en la academia militardonde reposan los restos de SimónBolívar, el héroe de la indepen-dencia en el que siempre se miróChávez. Y allí estaba previsto quedescansara siempre este, embalsa-mado. Sin embargo, al régimen nole ha quedado más remedio quedesechar esa opción, por los pro-blemas de conservación que pre-sentaba el cadáver. “Más que sucuerpo físico, debemos tenerlo enel recuerdo eterno”, reconocía Ma-duro, tras anunciar que los exper-tos rusos habían desaconsejado elembalsamamiento. Por lo pronto,y a la hora de redactar estas lí-neas, Chávez reposa en el MuseoHistórico Militar, el lugar desde elque comandó la intentona golpis-ta de 1992, si bien los planes paraconstruir un sitio reservado y de-finitivo para él siguen su curso.

¿Quién era Chávez?Pero ¿quién era realmente Chá-

vez? ¿Un revolucionario? ¿Un idea-lista? ¿Un iluso? ¿Un demagogo?¿Un caudillo que enarboló la ban-dera de los pobres? ¿Un dictadorcon maneras de demócrata? Proba-blemente todo eso, y mucho más.

Nacido el 28 de julio de 1954en la localidad de Sabaneta (esta-do de Barinas), en el seno de unafamilia humilde cuyos padreseran profesores, Hugo Rafael Chá-vez Frías fue un perfecto desco-nocido hasta ese 4 de febrero de1992 en que tuvo lugar “el cara-chazo”, el golpe de Estado queencabezó contra el presidenteCarlos Andrés Pérez. El entoncesteniente coronel de paracaidistasfracasó en la intentona, y fue en-carcelado, pero su acción no pasóinadvertida para los millones de

venezolanos, hartos y empobreci-dos, que clamaban en vano aten-ción de unos partidos tradiciona-les (Copei, democratacristiano, yAcción Democrática, socialdemó-crata) desprestigiados hasta el in-finito y que llevaban alternándo-se en el poder desde 1958.

Chávez fue indultado dosaños después de su asonada. Lacondición para el perdón presi-dencial que le otorgó Rafael Cal-dera fue que abandonara el Ejér-cito. Chávez aceptó. Lo que nadiese imaginaba, empero, es que esemilitar de aspecto bravucón y ver-bo fácil diera el salto a la política.Su desembarco fue tan exitosoque el 6 de diciembre de 1998–seis años después de fallida in-tentona, por tanto– llegaba al po-der por la vía de las urnas y seconvertía en el presidente más jo-ven de la historia de Venezuela.Contaba tan solo 44 años.

Lo primero que hizo nada másjurar el cargo fue anunciar un re-feréndum para reformar la CartaMagna, consulta que ganó sin difi-

cultad. Nació así, el 15 de diciem-bre de 1999, la Constitución Boli-variana, un texto que fue respal-dado por el 71% de los votos...,aunque, eso sí, solo acudieron adepositar la papeleta el 45% de loselectores. Con los triunfos poste-riores –en las legislativas y presi-denciales– llegaron también nue-vos poderes especiales para unpresidente que en ocasiones legis-laba por decreto. Hasta 49 nuevasleyes vieron la luz solo en 2001,casi una por semana.

Eran los días del “torbellinoChávez”, en los que tan pronto or-denaba expropiar edificios ante lascámaras de televisión, como insul-taba y denigraba desde su progra-ma semanal Aló Presidente a quie-nes osaran cuestionar sus políti-cas, ya se tratase del presidenteestadounidense George Bush, deobispos o de periodistas críticos...Eran días también de descontento,de recortes de libertades y, sobretodo, de polarización de la socie-dad. Era evidente la existencia yade dos Venezuelas.

Y en estas llegó el golpe. Endiciembre de 2001, el presidentetuvo que hacer frente a unahuelga general, y en abril de2002, a una segunda. En esta úl-tima se registraron gravísimosenfrentamientos, que costaron lavida a 19 personas. Tres días des-pués, el 12 de abril de 2002, lle-gaba la intentona contra su Go-bierno, que fracasó. Veinticuatrohoras estuvo tan solo en el poderel empresario títere colocado altimón por los conspiradores. Chá-vez regresó triunfante y más re-suelto que nunca a implantar surevolución bolivariana.

El giro hacia la izquierda se hi-zo cada vez más pronunciado. Enoctubre de 2005 el mandatarioaseguraba aún a los periodistasextranjeros –con la boca pequeña,eso sí– que el pueblo venezolanoera “consumista, no comunista”.En 2006, sin embargo, tras ganarunas nuevas presidenciales (estascon el 62% de los apoyos), gritabaya sin reparos “patria, socialismo ymuerte”. El salto era cualitativo.

Hasta entonces, su régimen no sehabía identificado abiertamentecon el socialismo. A su muerte ytras 14 años de mandato, el nú-mero de empresas expropiadasronda las 1.100.

¿Un demócrata?Las semejanzas, paralelismos

y sintonía con Cuba eran cada vezmás evidentes. Pero, a diferenciade lo que ocurre en la isla, en Ve-nezuela sí se celebran eleccionespluripartidistas. Y más que en nin-gún otro país, seguramente. “Nun-ca en la historia de América La-tina un líder político tuvo una le-


Chávez supo ganarse la confianzade millones de seguidores que creían

en él para acabar con la pobreza.

gitimidad democrática tan in-contrastable”, ha afirmado, ro-

tundo, en la agencia Misna, el doc-tor Salim Lamrani, especialista enEstudios Hispánicos y Latinoame-ricanos de la Universidad La Sor-bona de París. “Desde su llegada alpoder en 1999 –justificaba–, enVenezuela se llevaron a cabo 16elecciones, y él siempre derrotó asus rivales con una diferencia deentre diez y veinte puntos”.

¿Convierte ello a Chávez enun demócrata? Muchos creen queno. Le otorgaba legitimidad paragobernar, ciertamente, pero la de-mocracia es algo más que deposi-

tar una papeleta. Es también res-peto al adversario político y laaceptación de sus planteamientosy opiniones. Y en este punto Chá-vez dejó siempre mucho que de-sear. Ya en la primera rueda deprensa que convocó en 1994, po-co después de ser indultado, que-daron claros sus métodos y su nu-lo respeto al discrepante. Hacien-do gala de su verborrea habitual,el entonces candidato presiden-cial habló ante los periodistas du-rante hora y media. Cuando final-mente comenzó el turno de pre-guntas, uno de los corresponsalesextranjeros le interrogó sobre si

era posible compaginar la luchademocrática con un pasado gol-pista. La respuesta de Chávez seprolongó durante otros 45 minu-tos, durante los cuales llamó “ig-norante” al informador en dosocasiones, “analfabeto” en otra, ysugirió en una tercera que pudie-ra ser un “agente de la CIA”. Lamayoría de los corresponsales selevantaron y se fueron.

Las maneras de ese acto se in-tensificarían con el tiempo (conamonestaciones oficiales, recrimi-naciones públicas, etc.), para inti-midar y tratar de controlar a laprensa. Con el apoyo mayoritario

de su pueblo, Chávez hizo de Ve-nezuela un sistema autocráticocon disfraz de democracia, en elque el populismo y la demagogiade su presidente alcanzaron mu-chas veces niveles sonrojantes. Lagran duda que dejaron las últimaselecciones es la de saber si el cau-dillo habría cedido el poder –y sa-crificado su revolución bolivaria-na– en caso de haber sido derro-tado en octubre pasado por sucontrincante, Henrique Capriles.Porque en esa campaña llegó a ad-vertir de que una victoria de laoposición podría provocar inclusouna guerra civil.

Adorado por los pobresEso sí, Chávez actuó siempre

respaldado por millones de segui-dores incondicionales, que vieronen él a una suerte de mesías queiba a acabar con la pobreza y el ol-vido seculares que padecen. Y locierto es que, en parte, cumpliócon ellos. Al menos, esto es lo quehay que concluir, de ser ciertos losdatos de la CEPAL (Comisión Eco-


P R I M E R P L A N O

nómica para América Latina y elCaribe) que aseguran que en 1999la pobreza afectaba al 49% de losvenezolanos y que en 2011 (últimoregistro de este organismo) se ha-bía reducido al 30%.

Si no la riqueza en sí, Chávezsí llevó esperanza y desarrollo alos más desfavorecidos. Y lo hizo,sobre todo, a través de las llama-das “misiones”, programas socia-les en materia de educación, aten-ción médica, vivienda, etc., finan-ciados con el “maná” de los in-gresos del petróleo.

El crudo precisamente le per-mitió convertirse también en unaauténtica referencia regional. Chá-vez fue un entusiasta de la unidadlatinoamericana y caribeña. Fue elprincipal impulsor de la AlianzaBolivariana de las Américas (ALBA)–constituida como oposición a lafracasada ALCA, el Área de LibreComercio impulsada por EstadosUnidos– y de la Comunidad de Es-tados Latinoamericanos y del Cari-be (CELAC), respuesta regionaltambién a la Organización de Es-

tados Americanos (OEA), para evi-tar las injerencias de Estados Uni-dos y Canadá. El presidente co-lombiano Juan Manuel Santos hareconocido asimismo el papel delpresidente venezolano en las con-versaciones de paz que desde haceunos meses su Gobierno mantienecon la guerrilla de las FARC, la máslongeva del continente.

Difícil legadoChávez, no obstante, deja a su

sucesor un legado complicado, condos problemas de primerísimamagnitud: la violencia y la econo-mía. A día de hoy, en efecto, Vene-zuela es uno de los países más vio-lentos de todo el continente, conaltísimas tasas de criminalidad. Elaño pasado se registraron un totalde 16.072 homicidios, 44 diarios.En junio el Gobierno prohibió laventa de armas de fuego para tra-tar de revertir la situación, pero lamedida no ha dado hasta ahoragrandes resultados. Por lo que ata-ñe a la economía, el Ejecutivo sevio obligado en febrero último adevaluar el bolívar en un 32%. Lainflación en 2012 fue igualmentealtísima, de un 25%.

Las dos principales bazas deChávez fueron siempre los petro-dólares y el carisma. Maduro, sudiscípulo, aparenta carecer de estaúltima cualidad y de las dotes desu mentor para sintonizar con elpueblo. Con todo, parece pocoprobable un triunfo de la oposi-ción –nuevamente unida y lidera-da por Henrique Capriles– en laselecciones presidenciales que ten-drán lugar el 14 de abril. La fechaelegida para la nueva cita con lasurnas no es casual. Ese día es elaniversario de la vuelta de Chávezal poder, tras el fracaso del golpede Estado de 2002. Chávez se haido... pero no del todo.

NACHO JAVIERRE

erá recordado por ha-ber acercado la granriqueza de ese país a

las personas más pobres. Dehecho, las personas han teni-do más acceso a la salud, a laeducación, al servicio de asis-tencia... Sobre todo, los máspobres. Si lo ha hecho de lamanera correcta o equivocada,es otro discurso". Así valorabael venezolano monseñorGerald Cadieres, oficial de laCongregación para la Doctrinade la Fe y asistente espiritualde la embajada de su país an-te la Santa Sede, la figura deHugo Chávez, tras su falleci-miento el pasado 5 de marzo.

La Iglesia católica, cuyosmiembros en ocasiones se lastuvieron tiesas con el manda-tario, manifestó su "más sin-cera condolencia" a los fami-liares, amigos y partidariosdel "ciudadano presidente".El arzobispo de Caracas,Card. Jorge Liberato UrosaSavino, que se hallaba poresos días en el cónclave, oficióen la tarde del 8 de marzo unfuneral en Roma. Además decon un comunicado oficial, laConferencia Episcopal Venezo-lana expresó también su pesarpor boca de su presidente,Mons. Diego Padrón, quienhizo asimismo un llamamientoa la unidad nacional.

En enero pasado, al concluirla Asamblea Plenaria y pocoantes de que expirase el pla-zo establecido para la jurapresidencial, los obispos ha-bían pedido al Gobierno queinformase "con claridad y ve-racidad" a la sociedad sobreel estado de salud de Chávez,y que se cumpliera de mane-ra escrupulosa la normativaconstitucional.

S


Oraciones por el“ciudadano presidente”

“


I N F O R M E

rgentino. Jesuita. 76 años.Estos fueron los tres ras-gos que destacaron losmedios de comunicación

de todo el mundo cuando, a eso delas ocho y veinte de la tarde del 13de marzo, el cardenal francés Jean-Louis Tauran anunció desde elbalcón de la basílica de San Pedroel nombre del cardenal argentinoJorge Mario Bergoglio como 266.ºPapa de la Iglesia católica. La sor-presa en ese instante fue monu-mental. Todo el mundo daba porhecho que a Benedicto XVI le iba asuceder alguno de los cardenalesque estaban en todas las apuestas:el italiano Scola (gran favorito), elcanadiense Ouellet, el brasileñoSchërer, los estadounidenses Dolanu O’Malley... Pero no. Lo que la fu-mata blanca anunció ese segundodía de cónclave era que, en laquinta votación, como poco los 77votos necesarios para salir elegido

A

"Que Dios os perdone por lo que habéis hecho". Esto es lo primero queel arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio, dijo a los carde-nales en la tarde del 13 de marzo. Sus hermanos de púrpura acababande cometer la "osadía" de elegirle Papa. Tímido, cercano, sencillo y aus-tero, Francisco, el primer Pontífice latinoamericano y jesuita de la his-toria, ha dejado claro desde el primer día que sueña una Iglesia pobrey para los pobres. Muchos han visto su acceso a la cátedra de Pedrocomo un soplo de aire fresco. Y se nota en el ambiente. El pueblo deDios le ha acogido con una ilusión y una esperanza inusitadas.

blo II), cuando en 2.000 años decristianismo todos los Papas ha-bían sido europeos.

La sorpresa, eso sí, es menos sise tiene en cuenta el empeño y latenacidad que debió de poner elEspíritu Santo en la elección deBergoglio, toda vez que este, alparecer, ya recibió abundantesapoyos en el cónclave anterior. Enapenas un mes, y por primera vezen la historia, una institución bi-milenaria como la Iglesia, en laque tanto pesa la tradición, havisto, primero, renunciar a un Pa-pa (Benedicto XVI será recordadosobre todo por este hecho) y, des-pués, llegar a la sede de Pedro aun jesuita. La imagen de los dosPapas, el titular y el emérito, re-zando juntos en Castelgandolfo,el 23 de marzo, figurará en los li-bros de historia.

“Rezad por mí”En seguida pudo verse que el

papa Francisco apuntaba mane-ras nuevas. Para empezar, salió albalcón con la misma cruz pecto-ral de plata que luce desde 1992,año de su consagración episco-pal, y no con la de oro que sue-len llevar los Pontífices. Tampocose limitó a bendecir a la multitudcongregada en la plaza de San Pe-dro, como es tradicional, sino queprimero rezó por Benedicto XVI ydespués fue él quien pidió a losfieles que oraran por él.

habían recaído en la persona delarzobispo de Buenos Aires. Unavez más, volvía a cumplirse la má-xima de que, en el cónclave, quienentra Papa sale cardenal.

En verdad, había motivos parael asombro. La primera sorpresaera la edad. Se había dicho que elpróximo pontificado sería largo, yno de transición, por lo que se es-peraba un Papa relativamente “jo-ven”. Sin embargo, el elegido te-nía ya 76 años, los mismos que elcardenal Ratzinger cuando salióen el cónclave de 2005. La segun-da razón para la maravilla era queestábamos ante un jesuita y, co-mo es sabido, en la espiritualidadde los hijos de san Ignacio se ha-lla muy interiorizado el rechazode las dignidades y cargos de po-der. Y por último, se trataba de unPapa llegado de América Latina(“el continente de la esperanza”,como lo calificó el beato Juan Pa-


Los gestos de humildad no ha-bían hecho más que comenzar. Ala mañana siguiente, acudía enpersona a la Casa Internacionaldel Clero a pagar la cuenta de suestancia en Roma previa al cón-clave. Más tarde “se escapaba”también a una clínica a visitar alcardenal argentino Jorge Mejías,que había sufrido un infarto. Ca-da día que pasaba, los católicosde todo el mundo se maravillabany emocionaban al conocer de pri-mera mano la cercanía, sencillezy austeridad de las que hacía ga-la. “Antes del cónclave le compra-mos unos zapatos nuevos, porquelos que llevaba estaban ya muygastados y solo tenía esos”, rela-taba un sacerdote argentino. “EnBuenos Aires solía viajar en metroy autobús”, añadía otra fuente deaquel país. “Los Jueves Santo va alavar y besar los pies al hospitalpsiquiátrico, al de enfermos de si-da, a la cárcel y a las villas mise-ria”, abundaba una tercera. Pocoantes del cierre de este númerode Misioneros se conocía una nue-va noticia sorprendente: el papaFrancisco había optado por re-nunciar, al menos por el momen-to, a vivir en el apartamento pon-tificio del Palacio Apostólico. Unadecisión sin precedentes, desdeque en 1903 san Pío X se instala-ra en sus dependencias. En su lu-gar, el Papa seguirá viviendo en laresidencia de Santa Marta.

En el encuentro que el día 16mantuvo en el Aula Pablo VI conlos más de 5.000 periodistas quehabían cubierto el cónclave, el pa-pa Bergoglio explicó que había es-cogido el nombre de Francisco porsan Francisco de Asís, “el hombrede la pobreza y de la paz, que amay cuida lo creado”. En ese acto seganó a los informadores cuandorecordó que muchos de los allípresentes no eran católicos ni


creyentes, y dijo que los bende-cía “ respetando la conciencia de

cada uno, pero sabiendo que cadauno de vosotros es hijo de Dios”.

En los primeros cinco días depontificado pudo verse a un Papacampechano y jovial, que en se-guida se ganó el corazón de todos,tanto creyentes como no creyen-tes. Un Papa que tan pronto plan-taba un beso en la cara a la presi-denta de su país, cuando esta ad-vertía que estaba tocando al suce-sor de Pedro y que eso atentabacontra el protocolo, como que,cual si de un párroco cualquierase tratase, salía a las puertas de laiglesia a saludar a los fieles queacababan de asistir a misa. Un Pa-pa que irradiaba simpatía y bon-dad. Un Papa que, llegado el mo-mento, dejaba a un lado los pape-les del discurso preparado parahablar desde el corazón.

Los mensajes que transmitió enesos días no fueron baladíes. Elprimero –ya apuntado– supone to-da una declaración de intenciones.Lo dejó caer en el citado encuen-

tro con los periodistas, y desenca-denó una salva de aplausos. “¡Ay–dijo–, cómo me gustaría una Igle-sia pobre y para los pobres!”.

Misa de inicio de pontificado

Entre 150.000 y 200.000 perso-nas asistieron en la plaza de SanPedro, el día 19, solemnidad deSan José, a la misa de inicio depontificado, en la cual Franciscorecibió los atributos papales: elanillo del Pescador, el palio (la es-tola de lana que simboliza la ove-ja perdida que lleva sobre sushombros el Buen Pastor) y el evan-geliario. La noticia, ese día, no fueel gran gentío congregado; ni laasistencia al acto de representan-tes de 132 países (seis soberanosreinantes, tres príncipes herede-ros, 31 jefes de Estado o de orga-nismos internacionales, 11 jefesde Gobierno, etc.); ni siquiera queel Pontífice recorriera la plaza enun jeep descubierto, y no en el “pa-pamóvil” habitual, o que mandasedetener el vehículo para confortar

y besar a un hombre minusválidoque era sostenido en brazos... Laauténtica noticia de la jornada fueel mensaje que el nuevo Papatransmitió a los poderosos de estemundo allí presentes. “El verdade-ro poder –dijo– es el servicio”. Yañadió: “El Papa debe mirar al ser-vicio humilde, concreto, rico de fe,y abrir los brazos para acoger conafecto y ternura a la humanidadentera, especialmente a los máspobres, a los más débiles, a los máspequeños, a quien tiene hambre,sed, quien es extranjero, está des-nudo, enfermo, en la cárcel”. Fue laprimera vez que se refirió a sí mis-mo como “Papa”, pues hasta en-tonces se había calificado de “obis-po de Roma” o “sucesor de Pedro”.

El tono de su intervención nopudo ser más optimista. “No de-bemos tener miedo de la bondady de la ternura”, dijo en la homi-lía, que, esta vez sí, llevaba escri-ta y leyó. Pero, al mismo tiempo,aludió a los “herodes” de nuestrosdías que “traman esquemas demuerte”. E hizo un llamamiento a

I N F O R M E P A P A F R A N C I S C O


cuantos ocupan puestos de res-ponsabilidad en el ámbito econó-mico, político o social, a quienesdijo: “Somos custodios de la crea-ción, del diseño de Dios inscritoen la naturaleza, custodios delotro, del medio ambiente... No de-jemos que señales de destruccióny muerte acompañen el camino deeste nuestro mundo”.

El Papa, por cierto, como ya hi-ciera cuando Juan Pablo II lo creócardenal en 2001, pidió a los ar-gentinos que se disponían a viajara Roma para asistir a la ceremonia,que no acudiesen y dedicasen esedinero a los pobres. Tres de susallegados no le hicieron caso y sepresentaron en la plaza de San Pe-dro: sor Ana Rosa, una prima her-mana suya, religiosa de las Hijasde María Auxiliadora, misioneraen Tailandia; el profesor José Ma-ría Corral, que dirige desde haceaños el programa educativo “Es-cuela de vecinos”, con el que sepromueve la integración educativay racial; y Sergio Sánchez, líder delos “cartoneros” de Buenos Aires.

Los cartoneros son las personas sinempleo que se ganan la vida reco-giendo papel para reciclar; solo enBuenos Aires hay más de 4.000 deellos. “Nos saludó como a su fami-lia”, dijo Sánchez, emocionado. Po-cos Papas podrán decir que su ami-go “cartonero” asistió a la eucaris-tía de inicio de pontificado.

La otra buena nueva de esa jor-nada fue la presencia en la misadel patriarca ecuménico de Cons-tantinopla, Bartolomé I. Si bien eshabitual que el primus inter paresde ese patriarcado acuda a Romaen determinadas festividades, erala primera vez que lo hacía para latoma de posesión de un Papa ro-mano, un hecho que invita al opti-mismo en lo que al ecumenismorespecta. El papa Francisco se refi-rió a él como “mi hermano An-drés”, en alusión al hermano de

san Pedro, sobre el que se funda-menta la Iglesia constantinopolita-na. Los medios de comunicaciónhan llamado la atención sobre elhecho de que el Papa utilizó una si-lla igual a la dispuesta para el pa-triarca. La Iglesia ortodoxa rusa,que es la que peor relación mantie-ne con la romana, estuvo represen-tada por su número dos, Hilarión,el encargado de Relaciones Exterio-res del patriarcado de Moscú.

Los anglicanos también han sa-ludado positivamente la llegadade Francisco. Nada más salir elegi-do, la Comunión Anglicana hizopúblico un comunicado en el quedaba “su más cálida bienvenida”al nuevo Pontífice, y le expresabasu deseo de “caminar y trabajarjuntos para construir sobre el le-gado consistente de nuestrospredecesores”. El texto lo firma-

Según sus propias palabras, el Papa eligióel nombre de Francisco por san Franciscode Asís, el hombre de la pobreza y la paz.


ba el nuevo arzobispo de Can-terbury, Justin Welby. El arzo-

bispo anglicano Philip Aspinall,por su parte, afirmó que el nuevoPapa tiene “una maravillosa repu-tación en justicia social, atencióna los pobres y humildad”.

Por su parte, el judaísmo, va-rios de cuyos líderes asistierontambién a la misa de inicio depontificado, ha expresado igual-mente su satisfacción por la llega-da del cardenal Bergoglio a la Cá-tedra de Pedro. El presidente delCongreso Judío Mundial, RonaldLauder, dijo que el arzobispo deBuenos Aires, con quien se reunióen 2008, “siempre tuvo un oídoatento para nuestras preocupacio-nes”. “Estoy seguro –añadió– deque [...] seguirá siendo un hombreque es capaz de construir puentescon otras religiones”.

El nuevo Papa, por último, ya hadicho –en un encuentro con elcuerpo diplomático acreditado antela Santa Sede– que “es importanteintensificar el diálogo entre las dis-tintas religiones, en primer lugarcon el islam”. “He apreciado mucho–añadió– la presencia, durante lamisa de inicio de mi ministerio, detantas autoridades civiles y religio-sas del mundo islámico”. Duranteel pontificado de Benedicto XVI larelaciones con los creyentes en Alá,ciertamente, no han pasado por sumejor momento.

Grandes retosLa mejora de relaciones con los

hermanos cristianos separados ycon las otras religiones se atisba,por tanto, como uno de los objeti-vos que se ha marcado el nuevo Pa-pa. Pero, siendo importante, no pa-

rece ni el primero ni el más urgen-te de los retos que tiene ante sí. Losobservadores coinciden en afirmarque su mayor desafío será la refor-ma pendiente de la curia (tarea ur-gente, al parecer, tras los últimosescándalos: Vatileaks, Instituto pa-ra las Obras de Religión...) y, sobretodo, acercar a la Iglesia al hombremoderno, un hombre globalizado ydescreído –al menos en Occidente–,que nunca ha tenido tanto acceso ala información y que, paradójica-mente, nunca ha estado tan con-fundido y desorientado.

Para esta última tarea, para lle-gar en las sociedades desarrolla-das al hombre de hoy, el papa Ber-goglio parece el hombre adecua-do. Es un pastor más que un teó-logo; habla –así lo está haciendopor ahora, como lo hiciera Jesús ensu día– con palabras sencillas quebrotan del corazón, y tiene siem-pre muy presente que los pobresocupan un lugar preferente en elReino de Dios que predicó Cristo.(A este respecto, convendría que ellector viese en YouTube la confe-

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En pocos días Francisco se ha ganado elcorazón de todos, gracias a su cercanía ya sus gestos llenos de sencillez y humildad.


rencia que dirigió en 2009 al en-cuentro nacional de la Cáritas ar-gentina, en la que glosa la Decla-ración de Aparecida).

En estas primeras semanas, lagente está entusiasmada con elnuevo Papa. Simpatiza con él por-que sabe que es un hombre de ba-rrio –del bonaerense de Flores, enconcreto–, porque le gusta el fút-bol –se confiesa seguidor del SanLorenzo de Almagro– y porque co-mo cardenal rehusó vivir en el pa-lacio episcopal para hacerlo en unhumilde apartamento situado al la-do de la catedral. Valora tambiénque sea hijo de inmigrantes italia-nos, que no le guste el oropel yque pidiera siempre a sus interlo-cutores que lo llamasen “padreBergoglio”, y no “eminencia”, co-mo se designa a los cardenales. Yse siente confortada también al sa-ber que, además de afable y cerca-no, el papa Francisco es un hombrede una gran espiritualidad, de mu-cha oración y de un gran compro-miso misionero. “Sé que es la per-sona que nuestra amada Iglesia ne-

cesita para los retos de la NuevaEvangelización”, ha dicho el obispode Comodoro Rivadavia (Argenti-na), el turolense Joaquín Gimeno,que lo conoce desde hace 15 años.“No solo cuida a las ovejas, sinoque las hace salir del corral paraser una Iglesia misionera”, añade.

Hay quien ve ya en él a un nue-vo Juan XXIII, el Papa que abrió lasventanas de la Iglesia al convocarel Concilio Vaticano II, hoy tan ol-vidado y hasta denostado en se-gún qué ambientes eclesiales.Quienes lo conocen bien no llegana tanto, pero aseguran que van asoplar vientos de cambio en Roma,y que al nuevo Pontífice no le fal-tarán enemigos por ello. Dicen quees un hombre prudente y que sa-be gobernar. Suave en las formas,pero firme en el fondo. Y enérgico.Para manejar la barca de Pedro ne-cesitará también valor y audacia,así como las fuerzas que, ya en susútimos días como Sumo Pontífice,parece que le faltaron a BenedictoXVI. Que Dios le ayude.

JOSÉ IGNACIO RIVARÉS

l nuevo Papa –y segu-ramente los que lle-guen en adelante– es

también "tuitero". "Queridosamigos, os doy las graciasde corazón y os ruego quesigáis rezando por mí", es-cribió dos días después desalir elegido en el cónclave.Francisco, en cuanto a redessociales, retoma, por tanto,el camino que había inicia-do Benedicto XVI en diciem-bre de 2012. Un caminoemprendido para llegar so-bre todo a los jóvenes des-de ese nuevo areópago lla-mado Internet.El Pontífice jesuita heredatambién, por un lado, elcompromiso de viajar a Ríode Janeiro para asistir, enjulio, a la Jornada Mundialde la Juventud, y por otro,la curia de su predecesor, acuyos responsables ha con-firmado en el cargo... hastanueva disposición. Una delas tareas pendientes quedebe afrontar, asimismo, elPapa argentino es el de loslefebvrianos, los seguidoresdel arzobispo cismático Mar-cel Lefebvre (ya fallecido),que se niegan a reconocerel Vaticano II. A día de hoy,la Fraternidad SacerdotalSan Pío X sigue sin dar unarespuesta a la propuesta deingresar de nuevo en laIglesia católica a través deuna prelatura personal,siempre y cuando, claro es-tá, reconozca el Concilio.

E

TUITEROy VIAJERO

misioneros nº 134

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