hojaparroquial4 de julio de 2010Semanario de la Diócesis de Segorbe-CastellónNº 2.523

Portadores de CristoSan Cristóbal (Christophoros). Taller de Muñóz de Pablos (1999). Vidriera de la Concatedral de Santa María de Castellón

2 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

Santos sobre ruedasEste domingo es la Jor-nada de Responsabilidad en la Carretera. Dentro de seis días, el 10 de julio, San Cristóbal, patrón de los conductores. Según la tradicion, San Cristobal, cuyo nombre significa “Portador de Cristo”, llevó a Jesús a hombros al vadear un río. La fecha cae bien a la víspera de los miles de desplazamientos que se harán durante las vacacio-nes de verano, pero, ¿qué tiene que ver la carretera con la Iglesia? Pues resul-ta que uno de los prime-ros nombres que la Iglesia se da a sí misma, incluso antes de llamarse cristia-na, fue “el Camino” (ver Hch 9,2; 19,9.23; 22,4 y 24,22). Hoy quizás diría-mos la “autopista”.

A nivel diocesano, des-de tiempos de los romanos hemos estado marcados por la Vía Augusta que nos recorre de norte a sur, como un corredor medi-terráneo milenario. Pero sobretodo, la carretera es el espacio de una pastoral específica, reconocida e impulsada tanto desde la Santa Sede como desde la Conferencia Episcopal.

En un documento del 2007, titulado Pastoral para los Usuarios de la Ca-rretera, se afirma que la ca-

rretera “ya no es sólo una vía de comunicación; llega a ser un lugar de vida, en el que se pasa gran parte del propio tiempo”. Entre sus virtudes está la posibi-lidad de desplazamientos rápidos, facilitando la vida

social y el desarrollo eco-nómico, así como unir a las personas, dando lugar a procesos de socialización y de enriquecimiento per-sonal mediante descubri-mientos y nuevas relacio-nes.

Virtudes espiritualesLa carretera también es

importante a nivel espiri-tual, pues permite socorrer a enfermos y heridos, ejercer virtudes cristianas -como la prudencia, la paciencia y la caridad-, acercarse a Dios al descubrir la belleza de la creación, y elevarse al ritmo de los testimonios de religio-sidad que pasan, como cam-panarios de iglesias, cruces o metas de peregrinaciones. Es una buena costumbre enco-mendarse a los ángeles y san-tos al iniciar un viaje, o hacer la señal de la cruz. Además, los desplazamientos dan la ocasión de orar, por ejemplo con el Rosario.

Todo ello, exige del conductor una actitud ade-cuada: “El que conoce a Je-sucristo es prudente en la ca-rretera -afirma el documento citado-. No piensa sólo en sí mismo y no está siempre apremiado por la prisa de llegar. Se fija en las personas que lo acompañan por el ca-mino, cada una con su pro-pia vida, el deseo de llegar y sus propios problemas. Las ve a todas como hermanos y hermanas, hijos de Dios. Esta es la actitud que conno-ta al automovilista cristiano”. De esta consideración, se de-rivan obligaciones morales tan concretas como respe-tar el código de circulación o mantener el vehículo en buen estado.

G. FARRÉ.

Reportaje

“Decálogo” del conductorI. No matarás. II. La carretera sea para ti un instrumento de comu-

nión entre las personas y no de daño mortal. III. Cortesía, corrección y prudencia te ayuden a

superar los imprevistos. IV. Sé caritativo y ayuda al prójimo en la necesidad,

especialmente si es víctima de un accidente. V. El automóvil no sea para ti expresión de poder y

dominio, y ocasión de pecado. VI. Convence con caridad a los jóvenes, y a los

que ya no lo son, a que no se pongan al volante cuando no están en condiciones de hacerlo.

VII. Brinda apoyo a las familias de las víctimas de los accidentes.

VIII. Haz encontrar a la víctima con el automo-vilista agresor en un momento oportuno, para que puedan vivir la experiencia liberadora del perdón.

IX. En la carretera, tutela la parte más débil. X. Siéntete tú mismo responsable de los demás.

La Iglesia en la carreteraLa Pastoral de la Carretera es un servicio que la Igle-sia ofrece para alentar el anuncio y la vivencia de la fe cristiana de los profesionales, conductores, peatones y viajeros, en el uso de la vía pública y de los vehículos, que están generando una nueva forma de convivencia y de relaciones humanas.

Este ámbito está atendido en el Vaticano desde el Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes. En la Conferencia Episcopal Española hay una Comisión de Migraciones que, a imagen de la institución romana, engloba diversos departamen-tos: pastoral de la carretera, pastoral de ferias y circos, pastoral gitana, pastoral del mar, pastoral de la emi-gración y pastoral de la inmigración (con la sección de refugio).

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 3

Conducir con prudenciaQueridos diocesanos: Cada primer domingo de julio cele-bramos la Jornada de Respon-sabilidad en el Tráfico. Es una invitación a fijar nuestra aten-ción en el significado y la im-portancia de la conducción, así como en la urgente necesidad de esmerar nuestra prudencia.

La conducción se ha con-vertido en un hecho habitual en nuestra vida cotidiana.

Los desplazamientos de un lugar a otro tan frecuentes y tan propios de la vida moderna son expresión de la vida como viaje y como camino. En estos días del verano, millones de perso-nas se desplazan de un lugar a otro para iniciar sus vacaciones o regresar de ellas; no olvidemos tampoco a los millones que dia-riamente lo hacen por motivos laborales y sociales. Cuando nos ponemos en camino, tenemos la esperanza de llegar felizmente a nuestros destinos. Pero esto, por desgracia, no siempre suce-de así.

Es cierto que en una sola década el nú-mero total de acciden-tes y de víctimas mor-tales ha descendido notablemente. Con todo, es preciso seguir redoblando los esfuer-zos, por parte de cada uno y desde todas las instancias públicas y privadas, para seguir reducien-do dichas cifras hasta donde sea posible. Salvar una sola vida humana bien merece la pena.

No olvidemos que condu-cir quiere decir ‘convivir’. Esto pide de todos los implicados hacer que la carretera sea más humana. El automovilista, al volante, no está nunca solo, aunque no haya nadie a su lado. Conducir un vehículo es, en el fondo, una manera de relacionarse, de acercarse y de integrarse en una comunidad de personas. Esto supone, sobre todo en el conductor, ser due-ño de sí mismo, la prudencia,

la cortesía, un espíritu de servicio adecuado, el conocimiento de las normas del código de circulación, y también estar dispuesto a prestar una ayuda desinteresa-da a los que la necesi-tan, dando ejemplo de caridad.

Conducir quie-re decir también controlarse y dominarse, no dejarse llevar por los impulsos. Hemos de cultivar esta capacidad personal de control y dominio tanto en lo que afecta a la psicología del conductor cuanto para evitar los gravísimos daños que se pueden causar a la vida y a la integridad de las personas y de los bienes, en caso de accidente.

El conductor, cuando sale en automóvil, debe ser cons-ciente, sin fobias, de que en cualquier momento podría su-ceder un accidente. La actitud al volante debería ser la de una gran atención. La mayor parte

de los accidentes es provocada, precisamente, por la impruden-cia. Por eso la prudencia es una de las virtudes más necesarias e importantes en relación con la circulación. Esta virtud exige un margen adecuado de precaucio-nes para afrontar los imprevis-tos que se pueden presentar en cualquier ocasión. Desde luego, no se comporta según la pru-dencia el que se distrae, al volan-te, con el móvil, el que conduce a una velocidad excesiva o el que descuida el mantenimiento de vehículo.

El Papa Benedicto XVI ha recordado “el deber para todos de la prudencia en la guía y en el respeto de las normas del códi-go vial. ¡Unas buenas vacaciones comienzan precisamente por esto!”. Redoblemos nuestros es-fuerzos y nuestro sentido de res-ponsabilidad como conductores y también como peatones.

Con mi afecto y bendición,

Tribuna

Mons. CasiMiro López LLorente *

(*) obispo de segorbe-CasteLLón

por Juan ManueL giL

Melanía y Maximino, dos videntes desconocidosEmpezaremos por decir que también es desconocida la aparición de la Santísima Virgen en la Salette (Francia), aparición aprobada por la Iglesia. Es unos tiempo en que por fin se están dando a conocer los mártires españoles muertos por su Fe en la última contienda española, he percibido en mí el deseo de recordar a estos también hu-mildes pastorcillos, Melanía y Maximino, que como antaño los videntes de la Virgen de Lourdes y de Fátima, deben ser admira-dos como cristianos privilegiados.

A ellos la Virgen María les agració con su visita en la Salette. La Iglesia jerárquica acepta la validez de esta aparición y apenas se hallan conocedores del acontecimiento un pequeño grupo de creyentes. En tiem-pos de tanto descuido religioso como nos toca vivir, recordar a niños y niñas distin-guidos por el cielo para proclamar que la Virgen sigue siendo la Madre de la Iglesia, y que por eso quiere de vez en cuando de-jarse ver en el mundo, es toda una fineza que debemos agradecer al Señor Jesucristo, nuestro Redentor y Salvador.

Y se lo agradecemos. Y por eso vamos a enterarnos un poco de quienes eran Mela-nía y Maximino y qué nos ha querido ma-nifestar el Cielo a través del testimonio de estos sencillos pastorcitos, limpios de alma como los puros ángeles.

Los dos niños, descansando en su “pa-raíso”, su recinto modestísimo en el cam-po, nos cuentan lo que un día, después de despertarse de un sueño, pero ya totalmen-te despiertos, escucharon a una bellísima Señora que les hablaba: “Acercaos, hijos míos. No tengáis miedo. Yo estoy aquí para anunciaros una gran noticia”. El relato completo de la conversación lo pueden en-contrar en la revista Sol de Fátima, de julio-agosto de 2007. Y de él voy a entresacar algunos párrafos que son auténtica invita-ción a renovar o corregir la vida cristiana de nuestros fieles.

Así se expresó la Señora: “¿Hacéis bien vuestra oración, hijos míos?” Respondieron los dos: “Oh, no Señora. No mucho”. Y Ella contestó a su vez: “Ah, hijos míos. Hay que hacerla bien mañana y tarde. Cuando

no podáis hacerla mejor, rezad un Pater y un Ave Maria, y cuando tengáis tiempo y podáis hacerla mejor, rezaréis más”.

El diálogo con ambos niños fue largo y copioso en temas prácticos. Y al final del encuentro, la bellísima Señora terminó con estas palabras: “Yo dirijo un apremiante lla-mamiento a la tierra, llamo a los verdaderos discípulos del Dios vivo que reina en los Cielos. Llamo a mis hijos, a mis verdaderos devotos, que han vivido en el menosprecio del mundo y de sí mismos, en la pobreza y la humildad, en la oración y en la morti-ficación, en la castidad y unión con Dios, en el sufrimiento. Ya es hora de que salgan y vengan a iluminar la tierra. Que vuestro celo os haga hambrientos de la gloria d Dios y de la honra de Jesucristo.”

No tengo más salida que omitir mu-chos más extremos de esta celestial alocu-ción, pero con lo que llevo expresado creo que hay materia más que abundante para que realicemos un examen de conciencia, que nos ayude a cumplirlo en positivo, a ser esos cristianos que necesita la Iglesia.

4 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

Vida Diocesana

Encuentro del Obispo con las religiosas contemplativas

Como ya va siendo ha-bitual en la Diócesis, cada año el Obispo re-úne a las monjas de los distintos monasterios de clausura alrededor de los días en que celebramos la solemnidad de la San-tísima Trinidad, día “pro Orantibus”. Este año el Encuentro tuvo lugar el sábado 29 de Mayo, vís-pera de la solemnidad, en el Monasterio de Monjas Agustinas Ntra. Sra. De Mirambel de Benicasim. Acudieron las abadesas y prioras acompañadas de algunas monjas de sus monasterios.

Por primera vez, par-ticiparon las hermanas de

la Fraternidad Monástica de la Paz, con una pre-sencia de ya 20 años en Castellón. Nos reunimos 37 monjas, celebramos en

primer lugar la Eucaristía presidida por el señor Obispo acompañado por su secretario, D. Tomás y por el visitador diocesa-

no D. Juan Manuel Gil, con Laudes cantados. En su homilía D. Casimiro insistió en tener fe y con-fianza en la Providencia amorosa del Señor.

Después de la misa, D. Casimiro reunió a las prioras de los distintos monasterios, mientras las demás monjas reflexioná-bamos sobre el tema que él mismo nos propuso: Causas Internas y Exter-nas del descenso vocacio-nal y Posibles Propuestas. A continuación, rezo de Sexta, puesta en común con el señor Obispo y la comida. Nuestro Pastor expresó su satisfacción al finalizar la jornada que realmente fue una bendi-ción del Señor.

REDACCIÓN. BENICASSIM.

A partir del curso próxi-mo, la asociación Salus Infirmorum organizará unos talleres de aprendi-

zaje de la lengua de signos para las asociadas y simpa-tizantes. El objetivo es dar recursos que mejoren la comunicación con los en-fermos y mayores a los que

acompañan en hospitales y domicilios. Este ha sido el resultado de la conferencia que se impartió a mediados de junio, por el sacerdote diocesano Raúl López. Los

asistentes manifestaron su satisfacción por esta ini-ciativa, que tuvo una parte práctica, en la que se rezó el Padre Nuestro con el len-guaje de signos.

REDACCIÓN.

Salus Infirmorum organizará talleres de lenguaje de signos

Velada por la Vida

Esta tarde, a las 20h, la asociación Derecho a Vi-vir de Castellón convoca a una velada por la Vida en la Plaza de la Paz para protestar por la entrada en vigor de la nueva ley del aborto que liberaliza su práctica en las primeras semanas y que contiene medidas polémicas como el procedimiento para que una menor pueda abortar. Al mismo tiempo que en Castellón, se organizarán otras veladas en diversas

ciudades de Es-paña aunadas por el lema “Un día de luto, 365 días de lucha por la vida”.

Esta mo-vilización res-ponde a que mañana, lunes 5 de julio, entra en vigor la nue-va ley, “si Dios no lo remedia”, apuntaba Lla-nos Massó, de-legada de Dere-cho a Vivir en

Castellón. Massó asegura que “no podemos perma-necer impasibles ante el horror del aborto, ya que en este mismo día morirán antes de nacer 500 niños; y el día 5, y el 6… hasta que paremos esa masacre”. Desde esta entidad pro-vida se insiste que, a pesar de la entrada en vigor de la ley, seguirá activa por-que están convencidos que “antes o después el aborto será abolido y la sociedad tendrá que avergonzarse por haber permitido este horror”.

REDACCIÓN.

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 5

Vida Diocesana

Durante el mes de julio, la exposición conmemo-rativa de los 50 años de la actual configuración de la Diócesis recorre las pobla-ciones del arciprestazgo de la Costa. Del 1 al 7 está en Benicàssim. A continua-ción se desplazará a Oro-pesa hasta el 15 de julio. En la segunda quincena del mes, estará del 16 al 22 en Torreblanca, y del 23 al 27 en el Grao de Caste-llón. Coincidiendo con el inicio de la temporada va-cacional, los paneles de la historia de Segorbe-Caste-llón aportarán un elemen-to más a la compleja pas-toral con los veraneantes que marca profundamente este arciprestazgo.

Su arcipreste, José Aguilella, explica que en estas fechas la población

se puede multiplicar por diez, respecto al periodo de invierno. Esto significa que el púlpito de las parro-quias es “una plataforma de expansión del Mensa-je”, ya que llega a gente de

todos los puntos de Espa-ña y del extranjero. Esta labor se realiza, a veces, con la celebración de hasta 10 misas el fin de semana en una sola parroquia. Por suerte, desde hace años

siempre hay sacerdotes que, aprovechando unos días de descanso, ayudan a los párrocos.

De todos modos, es el arciprestazgo con más habitantes por sacerdote. Con cinco parroquias y 7 sacerdotes, a cada pres-bítero le corresponden 6.052 habitantes, situán-dose muy por delante de grandes poblaciones como Castellón, con 3.991 ha-bitantes por sacerdote. Respecto a la particular pastoral con veraneantes, Aguilella subraya “el ser-vicio y la atención sacra-mental, el confesionario y celebrar bien la Eucaristía, con predicación inteligible para la gente que viene”. Al mismo tiempo, reco-noce que no suele ser fácil implicar los veraneantes en actividades “porque vienen a descansar”.

REDACCIÓN.

La exposición de los 50 años recorre las parroquias de la Costa

Vista de la costa de Benicassim desde el Desierto de las Palmas

6. Ntra. Sra. Virgen del Carmen (Costa)

Número de parroquias: 5Sacerdotes en activo: 7Religiosos: 0Media de edad: 49Población: 43.365Habitantes por sacerdote: 6.052Arcipreste: D. José Aguilella Mateu

• Parroquia Santo Tomás de Villa-nueva de Benicasim Párroco: Yago Gallo Martínez Vicario: Héctor Samuel Calvo / Marc Estela Pujals

• Parroquia San Pedro Apóstol de Grao de Castellón Párroco: Francisco Martí Gasulla Vicario: José-María Marín Sevilla

• Parroquia San Jaime Apóstol de

Oropesa del Mar / Orpesa Párroco: José Aguilella Maneu

• Parroquia La Asunción de Ntra. Sra. de Ribera de Cabanes (Caba-nes) Párroco: Eloy Villaescusa Mañas

• Parroquia San Bartolomé de To-rreblanca Párroco: Nuno-Miguel Carvalho Vieira

La semana pasada, la Delegación Diocesana de Juventud mantuvo una reunión con representan-tes de arciprestazgos y de movimientos y entidades que trabajan con juven-tud, para constituir una comisión preparatoria y comenzar a programar los actos diocesanos para

la Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ) del año que viene en Madrid. Segorbe-Castellón aco-gerá a 5.000 jóvenes del mundo los días previos al encuentro con Benedicto XVI, por lo que se han trazado las grandes líneas de las propuestas que se harán.

Domingo Galindo, delegado de Juventud,

explicó que “las activi-dades serán tanto de ora-ción, como culturales, lúdicas y de involucra-ción en aspectos sociales de la Diócesis”, y prevé que puede ser interesan-te hacer descubrir espa-cios como la Cueva Santa -donde tradicionalmente ya peregrinan los jóvenes de la Diócesis- o proyec-tos como los de Caritas.

Para las jornadas previas, ya hay varios grupos de Francia e Italia que se han interesado por venir a Segorbe-Castellón. Sin embargo, antes de agosto del 2011, la Cruz de las JMJ visitará la Diócesis del 6 al 11 de febrero, para lo que también se están programando acti-vidades para sensibilizar los jóvenes.

REDACCIÓN.

Se constituye la Comisión Diocesana para las JMJ

6 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

Descubierto un retrato del Obispo ClimentNuestro Patrimonio

Difícilmente encontra-remos en la historia de la Iglesia local castello-nense, un personaje que iguale al Obispo Josep Climent en proyección nacional, en prestigio y en doctrina. Nace en Castellón de la Plana en 1706, en una casa que todavía se conserva en la calle que lleva su nom-bre. Domina la filosofía y la teología de su tiempo, la patrística, la exégesis bíblica, el latín, el griego y el hebreo. A los treinta años es nombrado canó-nigo Magistral de la Ca-tedral de Valencia.

Obispo de BarcelonaEn 1766, la Santa Sede

le destina como obispo de Barcelona. Antes de su consagración episcopal, practicó Ejercicios Espi-rituales en el Desierto de las Palmas. Climent dejó un recuerdo imborrable en su diócesis, llevando una vida “seria, retirada y laboriosa”. Esta austeridad y simplicidad de vida no era más que el reflejo de la reforma en profundidad que pretendía realizar: volver a la práctica del cristianismo primitivo. El obispo Climent pasa por ser la cabeza de un mo-vimiento reformador, no tan sólo de la iglesia de Barcelona sino de la igle-sia española. Más aún, su labor pastoral fue admi-rada por una parte de los episcopados de Europa.

Obligado por presio-nes políticas a dimitir del obispado de Barcelona, y habiendo renunciado al de Málaga, se retiró a su casa de Castellón, donde

murió en 1781. Por deci-sión propia fue enterrado en Santa María de Caste-llón. El obispo Climent, gloria de la iglesia local castellonense, es un per-sonaje clave del que no se puede prescindir para entender la historia de nuestra iglesia diocesana y para conocer la religio-sidad renovadora de la Iglesia Española en el si-glo XVIII.

Localizada una pintura inédita

En 2006 Ayuntamien-to, Obispado, la Univer-sitat Jaume I y l’Asociació

Josep Climent celebraron el III Centenario de su nacimiento. Con este motivo se organizaron numerosos actos de todo tipo, entre ellos una Ex-posición de patrimonio que fue comisariada por David Montolio y por el autor de estas notas. Una de las obras expuestas fue un retrato de Climent, de finales del siglo XVIII, que localicé de forma ca-sual en la parroquia de Castalla (Alicante) con motivo de la boda de un familiar. Allí el personaje era un perfecto descono-cido. A su lado, otro lien-

zo de pintura del mismo autor y época que el retra-to de Climent, represen-taba a José Rico, hijo de Castalla y Vicario Gene-ral del obispo Climent en la diócesis de Barcelona. Tras complicadas gestio-nes el retrato de Climent llegó a Castellón. Con-siderando su mal estado de conservación y aten-diendo a mi petición, la pintura fue restaurada en el Instituto Valenciano de Conservación y Restaura-ción de Bienes Culturales, con sede en Castellón. Una vez concluido el proceso, la pintura se ex-pone ahora durante todo el verano, como pieza del trimestre, en el Museo de Bellas Artes de la Avenida del Mar. Al mismo tiem-po se inician las gestiones para que la obra pueda quedar en depósito en nuestra ciudad, tal vez en la Iglesia Concatedral, donde fue bautizado y reposan sus restos mor-tales.

J. M. FRANCÉS. DELEGACIÓN DIOCESANA

DE PATRIMONIO CULTURAL.

Pieza del trimestre en el Museo de Bellas Artes de Castellón

De izquierda a derecha, Vicente Farnós, director de Castellón Cultural, Josep Miquel Francés, Delegado Diocesano de MCS, y Carmen Pérez, directora del Institut Valencià de Restauració

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 7

El Evangelio del Domingo

“Rogad al dueño de la mies que envíe obreros a su mies”

Primera LecturaIs 66,10-14c.

Salmo responsorialPs 65. R/. Aclamad al Señor tie-rra entera. R/.

Segunda LecturaGal 6, 14-18.

EvangelioLc 10, 1-12.17-20. En aquel tiempo el Señor designó otros setenta y dos, y los envió delante de él, de dos en dos, a to-dos los pueblos y lugares adonde él pensaba ir. Y

les dijo: «La mies es mu-cha, pero los obreros son pocos. Rogad al dueño de la mies que envíe obreros a su mies. ¡Andad!; mi-rad que yo os envío como corderos en medio de lo-bos. No llevéis bolsa, ni alforja, ni sandalias; no saludéis a nadie por el ca-mino. Cuando entréis en una casa, decid primero: Paz a esta casa. Si allí vive gente de paz, vuestra paz reposará sobre ellos; si no, se volverá a vosotros. Quedaos en esa casa, co-miendo y bebiendo lo que tengan, porque el obrero tiene derecho a su salario.

No andéis de casa en casa. Si llegáis a un pueblo y os reciben bien, comed lo que os sirvan; curad a los enfermos que haya y decidles: El reino de Dios está cerca de vosotros. Pero si llegáis a un pue-blo y no os reciben, id por las calles diciendo: Hasta el polvo de vuestro pue-blo que se nos pegó a los pies nos lo sacudimos. Yo os digo que en el día del juicio habrá más toleran-cia para Sodoma que para ese pueblo». Los setenta y dos volvieron llenos de alegría, diciendo: «Señor, hasta los demonios se nos

someten en tu nombre». Y Jesús les dijo: «Yo veía a Satanás cayendo del cie-lo como un rayo. Ved que os he dado poder de pisar serpientes y escorpiones, y sobre todas las fuerzas del enemigo, sin que nada os dañe. Pero no os alegréis de que los espíritus os es-tén sometidos; alegraos más bien de que vuestros nombres están escritos en el cielo». Palabra del Señor.

Próxima semana: Dt 30,10-14 / Sal 68 / Col 1,15-20 / Lc 10,25-37

Domingo XIV del Tiempo Ordinario (2ª Semana del Salterio)

Santoral

4 de julio.Santa Isabel de Portugal.Nació el año 1271, hija del rey Pedro III de Aragón. Cuando era aún casi un niña, fue dada en matrimo-nio al rey de Portugal, del que tuvo dos hijos. Fortale-

cida con la oración y la práctica de la caridad, soportó infinidad de tribulaciones y dificulta-des. Al morir su esposo, distribuyó sus bienes entre los pobres y recibió el hábito de terciaria franciscana. Murió el año 1336, mientras se esforzaba por restablecer la paz entre su hijo y su yerno.

6 de julio.Santa María Go-retti, virgen y mártir.Nació en Corinaldo (Italia) el año 1890, de una familia hu-milde. Su niñez,

bastante dura, transcurrió cerca de Nettuno, y durante ella se ocupó en ayudar a su madre en las tareas domésticas; era de índole piadosa, como lo demostraba su asiduidad en la oración. El año 1902, puesta en trance de defender su castidad,

prefirió morir antes que pecar: el jo-ven que atentaba contra ella puso fin a su vida agrediéndola con un punzón.En su canonización, Pío XII decía: “No todos estamos llamados a su-frir el martirio, pero sí estamos to-dos llamados a la consecución de la virtud cristiana. Pero esta virtud requiere una fortaleza que, aunque no llegue a igualar el grado cumbre de esta angelical doncella, exige, no obstante, un largo, diligentísimo e ininterrumpido esfuerzo, que no ter-minará sino con nuestra vida”.

Justino García Díaz, taxista

Dep. Legal: CS97-1960Suplemento del B.O. del Obispado

Edita: Obispado de Segorbe-Castellón Director: Juan Manuel Gil Coordinador: Josep Miquel Francés Redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: Teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / mcssegorbecastellon@planalfa.es / hpsegorbecastellon@hotmail.com / www.obsegorbecastellon.es

Impresión y reparto: Gràfiques Color Imprés, s.l.u. Pol. Ind. Fadrell, nave 75. 12005 Castellón / Teléfono 964 255 100

hojaparroquial

“Una vez llevé dos prostitutas en una carrera de 7 minutos, les cité el Evangelio,

y al llegar se les caían las lágrimas”Justino García Díaz, (Ma-drid, 1962) viudo con un hijo de 18 años, ha sido probado por la vida. Se alejó de la Iglesia a los 14 años, y “el Buen Pastor lo recuperó” a través de las catequesis del Camino Neocatecumenal en los 90. Hace unos años, en su itinerario con Cristo se ha acercado espiritual-mente al Císter. Y todas estas experiencias son las que comunica con pasión a todo el que sube a su taxi: un “confesionario” sobre ruedas.

- ¿Cómo es un taxista católico?

- Es como cualquier ca-tólico: alguien que se sien-te amado. Esa es una de las claves de la felicidad, porque cuando te sientes amado, puedes amar y ser feliz.

- ¿Cómo dar testimo-nio a través de una acti-vidad cotidiana como el trabajo en el taxi?

- El rostro es el reflejo del alma, y cuando uno tiene el corazón contento, la cara

tiene que estar alegre. Al taxi sube toda clase de gente, y cuando la alegría está en tu corazón, no se puede es-conder. Como dice el Evan-gelio, no puedes esconder la luz bajo el celemín (Mc 4,21). Eso lo nota la gente que sólo va preocupada por el dinero y el éxito.

- ¿Surgen ocasiones de hablar de Dios en el taxi?

- Yo evangelizo en el

taxi. Se puede evangeli-zar de cientos de maneras. Cuando ves dos ancianos que quieren subir, sales, les das los buenos días, les pre-guntas qué tal, les abres las puertas… ellos sonríen, y eso es dar testimonio. Ama-bilidad viene de amor: si eres amable ya estás dando testimonio de amor.

- Algún testimonio.- Una vez llevé dos pros-

titutas en una carrera de 7 minutos. Y sólo subir al taxi ven la Virgen del Pilar que llevo colgada del retrovisor. Les pregunté si eran ruma-nas y ortodoxas. Me dijeron que sí. Les cité el Evangelio cuando dice que “las prosti-tutas os precederán en el rei-no de los cielos” (Mt 21,31). A ellas se les cambió la cara y empezaron a escucharme con mucha atención. Lle-gábamos al destino, y a las dos se les caían lágrimas. La gente busca a Dios sin sa-berlo.

- Y cuando no hay clientes, ¿cómo llena los tiempos muertos de espe-ra?

- Tengo cinco libros en el coche: la Biblia, uno de historia, y otros tres sobre el inicio de los cistercienses. ¡Ah! y Camino de San José María Escrivá de Balaguer. También escribo.

- ¿Cómo debe conducir un católico?

- El auténtico católico es el mejor ciudadano de to-das las sociedades, y el que siempre cumple las normas y la legalidad.

G. FARRÉ. CASTELLÓN.