28 julio, 2013 NÚMERO 37

LUNES 29: Santa Marta Jn 11, 19-27. “Creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios.” MARTES 30 Mt 13, 36-43. “La cizaña se arranca y se quema; así será al fin del tiempo”. MIÉRCOLES 31: San Ignacio de Loyola Mt 13, 44-46. “Vende todo lo que tiene y compra el campo”. JUEVES 1 Mt 13, 47-53. “Reúnen los peces buenos en cestos y los malos los tiran”. VIERNES 2 Mt 13, 54-58. “¿No es el hijo del carpintero? Entonces, ¿de dónde saca todo eso? SÁBADO 3 Mt 14, 1-12. “Herodes mandó decapitar a Juan, y sus discípulos se lo contaron a Jesús”.

DIOS NOS HABLA

Parroquia Santa María Micaela

Avenida de la Juventud, 29

52005 – Melilla

Tfno: 952 673 760

micaelamelilla@diocesismalaga.es

parroquiasantamariamicaela.wordpress.com

PADRE Le llamo “Padre” haciendo un acto de fe desde lo hondo. La palabra Padre, ¡papá!, es tan primaria que pocas palabras se nos hacen más inteligibles por próximas. Tan sólo la fe me hace entonces posible esta confesión tan más allá de toda sensatez”. Tú ¡mi Padre!, lo creo. NUESTRO Le añado “nuestro”, y respiro tas el esfuerzo anterior, porque digo que su paternidad es compartida, que puedo y debo apoyarme en todos para llamarle así. Es pues “cosa nuestra”, no sólo mía, y arropado y abrazado con todos, la difícil fe se me convierte en comunidad. Y me figuro que corro gritando con el mundo… ¡Padre! QUE ESTÁS EN EL CIELO He aquí la expresión que digo con cierta frialdad. Es como afirmar que no sé dónde está, que está lejos, yo que le quisiera y le sé tan cerca, aquí, y por eso le digo, le llamo. Nuevo acto de fe desde la tierra, con un esfuerzo semejante al de quien sepultado en la mina, saca sus manos por un agujero… ¡tú! SANTIFICADO SEA TU NOMBRE Lejos, cerca, aquí, allí, surge el único piropo que el Maestro nos enseñó. Un piropo gratuito, sin más sentido que el de confesarle a él por encima de toda nuestra porquería. Santificado, es decir, no salpicado por esta suciedad que nos salpica a todos, más allá, en lo limpio, donde se podrá respirar, donde tan sólo le llegarán nuestros gemidos, donde está el bien -¡que no te toquen, Padre,

PARROQUIA SANTA MARÍA MICAELA

Horario de verano

Recordamos los horarios de misas durante estos meses de verano:

Diario: a las 20:00h.

Domingos: a las 10:30h y a las 20:00h.

nuestras cosas, ni te ensucien nuestros pecados! VENGA A NOSOTROS TU REINO Al llegar aquí se me abre el pecho, y la oración se me hace beso. “Ven”. Que venga el Padre, porque de esperanza vivimos. Te pido, te pedimos, que vengas, que sigas viniendo. Que venga tu Reino, que se rompa tu silencio, que esta tierra se haga habitable y humana. Que vengas, que vayamos. Esto tan nuestro y tan querido no nos gusta hasta que vengas Tú. HÁGASE TU VOLUNTAD EN LA TIERRA COMO EN EL CIELO Es decir, que yo, que usted, acertemos con asimilar esa norma abierta de vida que llamamos Evangelio, y ese toque impalpable y tremendo del Espíritu. Entonces la voluntad de Dios, la voluntad suya, dejará de ser un frío proyecto sobre el que hay que acertar, para convertirse en un compromiso de vida. DANOS HOY NUESTRO PAN DE CADA DÍA El pan, la gracia, el apoyo. No me basta ir entreviendo la voluntad divina, necesito ganas, sangre y pulso para hacerla, empeño y humildad. Necesito Eucaristía en todos sus sentidos misteriosos, fuerza de Dios que se me haga coraje en mí y decisión. Tengo miedo a quedarme con mis ideas sólo y con mi responsabilidad, y ¡Él tan cerca! Ven y dame el pan. PERDONA NUESTRAS OFENSAS Así, ofensas, deudas; que me suena mejor que lo de pecados, porque me dice mucho lo de sentirme deudor, saber que le debo, que lo fatal y más sucio de mi vida es la omisión: Perdona las deudas, perdona las ofensas, ponme al día. Quiero que sea posible otra vez el comienzo, nuestro entendimiento para hablar cara a cara, ¡por fin!, serenamente. ¿Es esto ser el hijo pródigo? Sea. COMO TAMBIÉN NOSOTROS PERDONAMOS A LOS QUE NOS OFENDEN Al llegar aquí concretizo y paso revista a todos aquellos que me hicieron algo y a los que dije con ligereza “te perdono”. ¿De verdad que no queda en mí ni rastro de amargura, de deseos de revancha?, ¿de verdad que me siento tan libre que he podido olvidar todo lo que me debían? Y al analizar, siempre suelo encontrar algo y me da rabia.

V5º.Que venga el Padre, porque de espque vengas, que sigas viniendolencio, que esta tierra se haga habitmos.

HÁGASE TU VOLUNTAD EN LA TIERRA COMO ENEL CIELO6º.ta de vida que llamamos EvangelioEspíritu. Entonces la voluntad de Dios, la voluntad suya, dejará de ser un fríoproyecto sobre el que hay que acevida.

DANOS HOY NUESTRO PAN DE CADA DIA7º.na, necesito ganas, sangre y pulso para hacerla,cesito Eucaristía en todos sus sentme haga coraje en mí y decisión. Telo y con mi responsabilidad, y ¡El tan cerca!

PERDONA NUESTRAS OFENSAS8º.

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Hoy en el evangelio

Fijaros que los discípulos sienten curiosidad por orar cuando ven a Jesús orar. También las personas que están a nuestro alrededor pueden sentir curiosidad por orar, o por conocer a Jesús porque nos vean a cada uno de nosotros hablar, hacer y orar como Jesús nos pidió que hiciésemos.

Y Jesús también nos invita a que lo que oremos luego lo hagamos verdadero en nuestra realidad. Y pone el ejemplo del amor que llama en plena noche para pedir unos panes. Jesús quiere que seamos cristianos cuando rezamos y que lo que rezamos lo hagamos real en nuestra vida y de los que nos rodean.

Pero muchas veces nos olvidamos de los demás, no los tenemos en cuenta…

Misa de niños

Recordamos que, aunque las misas de niños no continúen durante estos meses, estamos invitados a participar de la eucaristía dominical en otros horarios junto a nuestros padres y familiares.

H O JA PA R RO Q U I A L 28 de Julio de 2013

Depósito legal TF 1926-2006

De domingo a domingo17º del Tiempo Ordinario

¡Tan cerca que hasta lopuedo tocar!

Año 15 – Nº 779

http://perso.wanadoo.es/argelio/Hoja parroquial.html

Quiero suponer que ya no lo reza usted por rutina, ni como tranquilizanteespiritual, como un cumplido o un rito sin más... No insisto, y entonces pregunto:¿cómo? La respuesta tendrá que partir de mi limitada y personal experiencia. Po-siblemente a Vd. le diga más el cómo lo rezo yo desde mi rincón, o cómo juzgodebieran rezarlo los cristianos de hoy. Pues lo rezo así, y ¡una vez al día!, despa-cito, despacito, en silencio...

cómo reza usted elpadrenuestro

PADRE1º Le llamo "Padre" haciendo un acto de fe desde lo hondo. La palabra Padre, ¡papá!, es tan primaria que pocaspalabras se nos hacen más inteligibles por próximas. Tan sólo la fe me hace entonces posible esta confesión tan másallá de toda "sensatez". Tú, ¡mi Padre!, lo creo.

NUESTRO2º Le añado "nuestro", y respiro tras el esfuerzo anterior,porque digo que su paternidad es compartida, que puedo ydebo apoyarme en todos para llamarle así. Es pues "cosanuestra", no sólo mía, y arropado y abrazado con to-dos, la difícil fe se me convierte en comunidad. Y me fi-guro en corro gritando con el mundo... ¡Padre!

QUE ESTAS EN EL CIELO3º. He aquí la expresión que digo con cierta frialdad. Es co-mo afirmar que no sé dónde está, que está tan lejos, yoque le quisiera y le sé tan cerca, aquí, y por eso le digo, lellamo. Nuevo acto de fe desde la tierra, con un esfuerzosemejante al de quien sepultado en la mina -en esta tierra-,saca sus manos por un agujero... ¡tú!

SANTIFICADO SEA TU NOMBRE4º. Lejos, cerca, aquí, allí, surge el único piropo que elMaestro nos enseñó. Un piropo gratuito, sin más sentidoque el de confesarle a él por encima de toda nuestra por-quería. Santificado, es decir, no salpicado por esta sucie-dad que nos salpica a todos, más allá, en lo limpio, dondese podrá respirar, donde tan sólo le llegarán nuestros gemi-dos, donde está el bien -¡que no te toquen, Padre, nues-tras cosas, ni te ensucien nuestros pecados!

Una tarde melancólica puede ser un raro pla-cer si nosotros elegimos la melancolía y noella a nosotros.Para provocarla, mira viejos álbunes de fo-tos y reconstruye lugares y situaciones. Tam-bién puedes escuchar discos de tu infancia orevisar tus cuadernos escolares.

“Pero, cuidado con la tristeza; es un vicio.”

Dice una linda leyenda árabe que dos amigos viajaban por el de-sierto y en un determinado punto del viaje discutieron.

El otro, ofendido, sin nada que decir, escribió en la arena:

HOY, MI MEJOR AMIGO ME PEGOUNA BOFETADA EN EL ROSTRO.Siguieron adelante y llegaron a unoasis donde resolvieron bañarse. Elque había sido abofeteado y lastima-do comenzó a ahogarse, siendo sal-vado por el amigo. Al recuperarse to-mó un estilete y escribió en una pie-dra:

HOY, MI MEJOR AMIGO ME SAL-VO LA VIDA.Intrigado, el amigo preguntó:

- ¿Por qué después que te lastimé, escribiste en la arena y ahoraescribes en una piedra?

Sonriendo, el amigo respondió: «Cuando un gran amigo nos ofen-de, deberemos escribir en la arena donde el viento del olvido y elperdón se encargarán de borrarlo y apagarlo; por otro lado, cuandonos pase algo grandioso, deberemos grabarlo en la piedra de lamemoria del corazón donde viento ninguno en todo el mundo podráborrarlo».

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PARROQUIA SANTA MARÍA MICAELA 28 JULIO 2013 – número 37

Evangelio según San Lucas (Lc 11, 1-13)

Jesús estaba orando en cierto lugar. Cuando acabó, uno de sus discípulos le dijo: “Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos”. Él les dijo: “Cuando oréis decid: Padre, santificado sea tu nombre; venga tu reino; danos cada día nuestro pan cotidiano; perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe, y no nos dejes caer en la tentación”. Y les dijo: “Suponed que uno de vosotros tiene un amigo que acude a él a medianoche y le dice: Amigo, préstame tres panes, pues un amigo mío ha venido de viaje a mi casa y no tengo qué darle; y que él le responde desde dentro: No me molestes; la puerta esta cerrada, y yo y mis acostados; no puedo levantarme a dártelos. Yo os aseguro que si no se levanta a dárselos por ser su amigo, al menos para que deje de molestarle se levantará y le dará todo lo que necesite. Pues bien, yo os digo: Pedid y se os dará; buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá. Porque el que pide recibe; el que busca encuentra, y al que llama se le abre. ¿Qué padre de entre vosotros, si su hijo le pide un pan, le dará una piedra? ¿Y si le pide un pez, le dará en lugar de un pez una serpiente? O si le pide un huevo, ¿le dará un escorpión? Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¿cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a quienes se lo piden?”

Señor, tal vez no tenga muchas cosas para dar, pero he recibido muchos dones para compartir con los demás. Enséñame a no ser egoísta, a pensar primero en los demás y a compartir con alegría. Enséñame a compartir

28 DE JULIOXVII DOMINGO

DEL TIEMPO ORDINARIO

Pedid y se os dará

Señor, tal vez no tenga muchas cosas para dar,pero he recibido muchos donespara compartir con los demás.Enseñame a no ser egoísta,a pensar primero en los demásy a compartir con alegría.Enseñame a compartirlo que soy y lo que tengo.Que no me apeguea mis cosas y me las guarde,sino que aprenda a ofrecerlas,para que todos puedan disfrutar con lo que he recibido.Tengo mucho para dar,y lo que tengo se puede multiplicar si lo comparto.Jesús, cambia mi corazóny que comparta lo que tengoporque dando se recibey compartiendo se descubretu presencia en nuestro corazón.

¡Que así sea, Señor!

Acción Católica GeneralSector de Infanciawww.accioncatolicageneral.es

lo que soy y lo que tengo. Que no me apegue a mis cosas y me las guarde, sino que aprenda a ofrecerlas, para que todos puedan disfrutar con lo que he recibido. Tengo mucho que dar, y lo que tengo se puede multiplicar si lo comparto.