la lectura estrategias de comprension de textos

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LA LECTURA ESTRATEGIAS DE COMPRENSIÓN DE TEXTOS EXPOSITIVOS Profesora Gladys Stella López J. Escuela de Ciencias del Lenguaje Universidad del Valle

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comprensión de textos

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  • LA LECTURA

    ESTRATEGIAS DE COMPRENSIN DE TEXTOS

    EXPOSITIVOS

    Profesora Gladys Stella Lpez J.

    Escuela de Ciencias del Lenguaje

    Universidad del Valle

  • 2

    LA LECTURA

    INTRODUCCIN

    Investigaciones recientes que se han adelantado sobre la lectura desde

    distintas disciplinas preocupadas por este fenmeno tan complejo, conducen a la

    revisin tanto de las bases conceptuales como de las prcticas escolares que se

    han utilizado en su enseanza y que la han convertido en un acto mecnico y de

    decodificacin, de reproduccin oral de los signos escritos, reduciendo la lectura

    slo a la recuperacin memorstica de la informacin de un texto, sin que haya

    comprensin de lo ledo.

    Dichas investigaciones muestran que para leer no es suficiente el

    reconocimiento de cada una de las letras ni de su correspondiente valor sonoro,

    ya que la lectura es un proceso complejo de produccin de sentido, caracterizado

    por Goodman (1980) como un "juego psicolingstico de adivinanzas", o como un

    tratamiento complejo de ndices del texto, que exige la coordinacin de todos

    ellos en una compleja actividad cognitiva (Goodman 1982), en la cual intervienen

    tambin el conocimiento previo del mundo en general, del rea y del tema, la

    afectividad y las relaciones sociales y culturales del sujeto. Sin embargo, para

    muchos nios leer sigue siendo considerado como "descifrar".

    Es claro que el inters en la lectura y la comprensin de textos no es algo

    nuevo, pero su estudio se ha abordado con mayor intensidad en las ltimas dos

    dcadas. Se ha avanzado bastante en cuanto al conocimiento del proceso de

    lectura y de los subprocesos o componentes del mismo. Al respecto hay diversas

    posiciones, perspectivas y definiciones que corresponden a diferentes formas de

    enfocar el asunto, pero es innegable que nos hemos enriquecido con aportes

  • 3

    tericos y prcticos muy valiosos y el conocimiento en el rea se ha profundizado

    y mantenido en evolucin. Nuevas herramientas y nuevos instrumentos de

    anlisis y conceptos han contribuido a una mejor explicacin del proceso, de

    cmo se representan los contenidos del texto y de qu subprocesos y estrategias

    entran en juego.

    A pesar del camino recorrido y de los avances logrados, parece ser que

    an no se evidencia del todo su aplicacin en el saln de clase, donde la calidad

    de los procesos de lectura an deja mucho que desear. La preocupacin por

    encontrar puntos de coincidencia y un verdadero compromiso entre la teora y su

    aplicacin sigue vigente. Se necesita un examen cuidadoso de las distintas

    metodologas en curso, ya que los nuevos enfoques no se reflejan en la prctica,

    las clases siguen siendo tradicionalistas con una visin muy simplista de un

    proceso tan complejo como el de la lectura, la cual sigue siendo considerada

    como la simple extraccin de informacin, o la comprensin literal de lo escrito.

    LEER PARA APRENDER En relacin con los ltimos desarrollos tericos, especficamente en lo

    que concierne al proceso de leer para aprender (de Beaugrande: 1980), la

    lectura se constituye en la mediacin en el continuo conformado por la

    comprensin en un polo y por el aprendizaje en el otro. Cuando comprendemos

    lo que leemos estamos aprendiendo, lo que nos permite decir que toda lectura,

    dentro de los trminos que aqu planteamos, es un proceso de aprendizaje.

    Siempre que leemos, de alguna manera aprendemos y construimos

    conocimiento en mayor o menor grado.

  • 4

    La habilidad de leer es el camino por excelencia al conocimiento, por lo

    tanto, es esencial para el aprendizaje y para un buen desempeo acadmico.

    Una gran parte de la actividad acadmica est organizada en torno al discurso

    escrito, el cual es una de las formas ms usuales de vehiculizar el

    conocimiento. Comprender un texto, interpretarlo adecuadamente y usarlo es

    una condicin indispensable en el mundo acadmico y en

    cualquier sociedad letrada. La lectura se constituye, entonces, en un medio

    para desenvolverse en ese mundo. Los estudiantes tienen que leer,

    comprender, valorar lo ledo y retener la informacin relevante para su posterior

    recuperacin y uso. Aprender a leer, como a escribir, son pues, objetivos

    prioritarios de la educacin y se espera que los estudiantes puedan leer textos

    adecuados a su edad de manera autnoma y que, progresivamente, aprendan

    a usar la lectura con fines no slo de informacin sino como medio de acceso

    al aprendizaje de contenidos nuevos y de creacin de conocimiento.

    Ahora bien, dentro del enfoque comunicativo de la enseanza de la

    lengua es claro que el desarrollo de la competencia comunicativa no se

    produce en general, sino en relacin con determinados usos discursivos de la

    lengua que corresponden a distintas intenciones comunicativas, dentro de

    situaciones de comunicacin especficas. Cada rea de conocimiento, cada

    mbito de uso produce distintas formas textuales y exige el dominio de ciertos

    elementos lingsticos y elementos de cohesin y de coherencia que son los

    que permiten organizar y presentar los contenidos de manera tal que logren

    expresar determinadas finalidades comunicativas a una audiencia en particular.

    En cuanto a la lectura, los estudiantes no slo "leen textos", sino que leen

    textos de Ciencias Naturales, de Matemticas, de Sociales, etc. para aprender

    de ellos. Se hace necesario, entonces, que la escuela ponga la comprensin de

    lectura en un verdadero contexto de uso, conectndola explcitamente con una

  • 5

    de sus finalidades primordiales como es la de aprender a partir de los textos y

    de acceder al conocimiento: expandindolo, modificndolo, creando

    conocimiento nuevo y difundindolo y para esto es necesario ensear

    estrategias especficas para enfrentar los distintos tipos de textos, tpicos de las

    distintas reas de contenido.

    Para que lo anterior se cumpla, planteamos una concepcin de la

    comprensin de lectura como un proceso que es intencional, interactivo,

    gradual y estratgico orientado a la bsqueda de los significados del texto y a

    la construccin de su sentido.

    Como proceso intencional la lectura implica partir de unos propsitos o

    metas especficos de lectura, establecidos previamente, que se pretenden

    lograr durante el proceso lector. Estos propsitos nos permitirn no slo hacer

    la seleccin adecuada del texto a leer, sino tambin, una vez seleccionado el

    texto, decidir cmo vamos a leerlo y, adems, ir evaluando durante el proceso

    mismo si se estn logrando o no los objetivos pretendidos con la lectura. Por

    ejemplo, si nuestro propsito es saber qu temas desarrolla determinado libro,

    hacemos una lectura rpida, "de vistazo", de su tabla de contenidos,

    recorrindola de comienzo a fin y as logramos este objetivo. Si nuestro

    propsito es saber en qu captulo del libro se trata un tema especfico que nos

    interesa, tambin hacemos una lectura rpida de la tabla de contenidos hasta

    encontrar la informacin requerida, muchas veces sin necesidad de recorrer

    toda la tabla. Si lo que nos interesa es entender cmo define el autor del texto

    cierto concepto, buscamos rpidamente el captulo pertinente y, una vez

    localizado el concepto, nos detenemos a leer con ms cuidado esa parte y,

    seguramente, la leeremos varias veces hasta tener una idea clara de lo que

    necesitamos.

  • 6

    La construccin de significados es el resultado de la interaccin entre el

    texto, el lector y el contexto en sus varios niveles: lingstico, situacional,

    actitudinal, etc. y todo esto hace de la comprensin un proceso interactivo. Esta

    nueva visin del proceso no se centra, entonces, ni exclusivamente en el texto,

    ni en el lector, aunque s da a ste ltimo el papel esencial que, como

    constructor activo de significados, verdaderamente desempea. El lector,

    entonces, hace uso de su conocimiento del mundo, del tema del texto y del

    texto mismo para, simultneamente, procesar la informacin que el texto

    provee y construir su representacin de los contenidos. En este sentido, la

    activacin, y uso adecuado del conocimiento previo del lector que le permite

    involucrarse activamente en la elaboracin de inferencias, son actividades

    fundamentales a las cuales necesita acudir permanentemente el lector durante

    la lectura para el procesamiento y comprensin del texto (Lpez: 1997c) Sin la

    participacin de los esquemas previos y de los procesos inferenciales no sera

    posible llegar a una interpretacin adecuada de los contenidos del texto. Una

    mayor familiaridad con los contenidos facilita el procesamiento del texto y su

    mejor comprensin, mientras que un menor conocimiento hace que el proceso

    sea ms lento y ms difcil o que llegue a imposibilitar el procesamiento del

    texto.

    Como proceso gradual, la comprensin se va construyendo desde el

    momento mismo en que el lector se enfrenta al texto y an antes, desde que

    ste toma la decisin de leerlo y comienza a crearse expectativas y a formular

    hiptesis sobre sus contenidos. Por ejemplo, a partir del ttulo nos vamos

    formando una idea de lo que va a tratar el texto. La interaccin del lector con el

    texto le permitir llevar a cabo una serie de operaciones cognitivas en su

    intento de construir el significado del texto y de elaborar una representacin

    coherente de sus contenidos. La representacin, inicialmente vaga, incompleta

  • 7

    y, a veces, hasta incorrecta, va completndose, revisndose y refinndose

    durante el proceso mismo hasta llegar a ser una representacin adecuada de

    los que el texto dice. Para que el proceso pueda llevarse a cabo de esta

    manera, se necesita, como decamos, de la permanente interaccin y

    confrontacin del conocimiento previo que el lector trae consigo con lo que el

    texto le ofrece. Es claro, entonces, que la comprensin no se obtiene

    automticamente: hay que construirla y para esto no hay que esperar a

    terminar de leer el texto, sta se va construyendo en el proceso mismo.

    Finalmente, para que lectura cumpla su objetivo, el lector necesita

    involucrarse en un proceso estratgico, planificado, pero lo suficientemente

    flexible, que le permita la consecucin de las metas previstas, as como

    tambin la permanente supervisin y evaluacin del proceso mismo durante su

    ejecucin. Este proceso es posible en la medida en que el lector haga uso

    consciente de estrategias adecuadas para el procesamiento, la comprensin y

    supervisin de su propio proceso.

    Hasta aqu hemos tratado de establecer las caractersticas bsicas que

    definen la comprensin de textos como un verdadero proceso y no como un

    mero producto final o acto mecnico de "descifrado". Se trata de un proceso

    que es intencional y no "incidental" o "accidental", que es interactivo y, por lo

    tanto, no depende exclusivamente de lo que el texto dice, que es gradual, se va

    construyendo desde un comienzo y refinndose durante el proceso mismo y

    que es estratgico, orientado al logro de unos propsitos especficos.

    Pasaremos ahora a desarrollar, ms especficamente, aquellos factores

    que consideramos van a determinar la posibilidad de un proceso de lectura y

    comprensin de textos como se ha expuesto hasta ahora.

  • 8

    LOS CONOCIMIENTOS PREVIOS Y LA LECTURA

    De acuerdo con lo planteado hasta ahora, en el proceso de comprensin

    de lectura el lector es tanto o ms importante que el texto mismo y el

    procesamiento del texto se logra slo a partir de la relacin interactiva y

    simultnea entre los esquemas cognitivos del lector todo su conocimiento

    previo- y la informacin nueva provista por el texto. Es claro que el significado

    no reside en el texto mismo, sino que ste es construido por el lector

    (Widdowson: 1978) y esto es posible a partir de la activacin de sus esquemas

    de conocimiento apropiados, ya que construimos sentido no slo en funcin de

    lo que leemos, sino en funcin de lo que sabemos sobre lo que leemos. Los

    esquemas nos permiten hacer predicciones cognitivas acerca de los contenidos

    y, en el proceso mismo, atendemos simultneamente a lo que el texto describe

    para, entonces, confirmar o revisar las predicciones cognitivas que nos

    permiten ir construyendo la representacin mental de lo expresado en el texto.

    Los esquemas cognitivos son como paquetes estructurados de

    conocimiento y procedimientos de accin en distintos mbitos especficos,

    almacenados de manera organizada en la memoria a largo plazo (Rumelhart:

    1980). De acuerdo con lo planteado por Rumelhart, los esquemas vienen a ser

    las teoras informales privadas que cada uno de nosotros va formando de la

    naturaleza de los objetos, eventos o situaciones que enfrenta. Ante cada

    situacin o texto particular utilizamos los esquemas pertinentes que nos

    permiten formar una especie de "modelo" interno de la situacin en ese

    momento (Rumelhart: 1984). Podramos hablar, entonces, de un proceso en

    espiral en el uso que hacemos de nuestros esquemas: a partir de la teora

    privada de la realidad es como llegamos a interpretar una situacin o un texto

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    en particular y, a la vez, esa interpretacin la integramos nuevamente como

    parte de nuestros esquemas que se van, entonces, completando y refinando

    sucesivamente (Lpez 1997c).

    Los esquemas son fundamentalmente de dos tipos:

    1. CONCEPTUALES: (Esquemas de contenido) De tipo general: conocimiento del mundo, de lo social, de lo

    histrico, de lo cultural, por ejemplo, todo aquello que sabemos

    de las cosas, de la naturaleza, de los otros y de nosotros

    mismos como resultado, por una parte, de nuestra experiencia

    diaria y de nuestro contacto con los dems y por otra parte,

    ms formalmente, a travs de la escuela; el conocimiento del

    cdigo lingstico, por ejemplo, el conocimiento que tenemos

    de nuestra lengua materna. Los esquemas generales incluyen

    adems los valores convencionalmente aceptados por el grupo

    social en un perodo determinado, as como las actitudes, las

    expectativas y las motivaciones personales.

    Especficos: del rea de conocimiento, por ejemplo, lo que sabemos de ciencias naturales o de sociales; del tpico del

    cual trata el texto, por ejemplo, si estamos leyendo un texto

    sobre los seres vivos, lo que sabemos de su clasificacin nos

    puede ser de mucha utilidad para entender mejor el texto.

    2. FORMALES: (Esquemas formales o estructurales) El conocimiento sobre las estructuras de organizacin

    discursiva, las marcas retricas y todas aquellas claves

  • 10

    textuales como el uso de distintos tipos de letras (negrita,

    bastardilla, maysculas, subrayados, etc.) para resaltar lo

    esencial, los ttulos y subttulos, aspectos que caracterizan a

    los distintos tipos de textos; por ejemplo, aquellos rasgos del

    texto que nos permiten distinguir una receta de un cuento, un

    cuento de una descripcin, una descripcin de un poema, etc.

    De acuerdo con la teora de los esquemas (Adams y Collins; 1979;

    Bransford: 1985; Rumelhart: 1980, 1997), en el momento en que el lector se

    enfrenta a un texto, la confrontacin de los contenidos con sus esquemas

    previos le permite crearse ciertas expectativas sobre lo que el texto trata, en un

    procesamiento ascendente, es decir, desde el texto hacia el lector. A medida

    que avanza en la lectura, si la informacin del texto encaja en sus esquemas, el

    lector va confirmando esas expectativas iniciales y entonces puede codificar la

    informacin nueva que le ofrece el texto para irla integrando a los esquemas

    existentes, en un procesamiento descendente, es decir desde el lector hacia el

    texto. Si sus expectativas no se cumplen, si la informacin no encaja en sus

    esquemas, puede ser que no haya codificacin y en consecuencia, no se podr

    dar la comprensin del texto o se podra llegar a una distorsin de la

    informacin en el intento del lector de acomodarla en sus esquemas previos.

    Sin embargo, en estas situaciones es posible tambin, y deseable, que el lector

    decida revisar de alguna manera sus esquemas existentes, completndolos,

    amplindolos, precisndolos, para poder interpretar de modo adecuado los

    contenidos del texto.

    En trminos generales, los esquemas no slo incluyen conocimiento

    organizado estructuralmente, sino que, adems, especifican las redes de

    interrelaciones entre sus constituyentes, es decir, la manera en que las

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    diferentes unidades de conocimiento se relacionan entre s, as como tambin

    indicaciones sobre cmo utilizar ese conocimiento. Es importante precisar,

    adems, que se trata no slo de poseer el conocimiento adecuado para

    manejar con propiedad los contenidos del texto, sino adems de saber activar

    esos conocimientos y de saber cmo utilizarlos de manera eficiente en el

    procesamiento y comprensin de textos.

    Tenemos, entonces, que los esquemas tienen que ver con el

    conocimiento, con su representacin mental en unidades estructuralmente

    organizadas, con la red de interrelaciones entre estas unidades y entre sus

    constituyentes y con su activacin y uso en el procesamiento y comprensin de

    textos. Pero los esquemas tienen que ver, adems, con la posibilidad ilimitada

    de construir conocimiento en un mundo siempre cambiante. Cada vez que

    activamos un esquema y lo confrontamos con la informacin nueva del texto, lo

    que guardamos posteriormente no es exactamente el mismo esquema

    inicialmente activado, sino uno ms completo, ms preciso, ms sofisticado que

    resulta de la integracin del conocimiento viejo con lo nuevo del texto (Lpez,

    1997c). Una caracterstica fundamental de nuestra estructura de conocimientos

    es su carcter constructivo; los esquemas cognitivos, ms que estructuras

    predeterminadas fijas, estn en evolucin permanente y esto es posible por la

    interaccin de sujetos que pertenecen a una misma comunidad, lo cual le da as

    un carcter sociocultural a la formacin y evolucin de los esquemas cognitivos

    (Martnez: 1991).

    Los esquemas nos proporcionan, entonces, los marcos de referencia a

    partir de los cuales interpretamos y construimos la realidad. Si el lector no

    posee los esquemas adecuados, no los activa o no los usa de manera

    apropiada, no lograr involucrarse en un verdadero proceso de comprensin.

  • 12

    Precisamente, en esto radica una de las diferencias cruciales entre lectores

    eficientes y no eficientes. Diversos autores (vase Garner: 1987a) han

    encontrado que los lectores no eficientes no llegan a involucrarse en un

    proceso verdaderamente interactivo de comprensin, debido, entre otras cosas,

    a que no poseen el conocimiento previo adecuado con el cual puedan asociar

    lo nuevo que les ofrece el texto. Este tipo de lector tiende, entonces, a centrar

    su atencin en lo conocido y procesa superficialmente lo no conocido. Adems,

    debido tambin a su falta de esquemas adecuados, no son flexibles en su

    manera de procesar el texto y tienden a confiar excesivamente en un

    procesamiento ascendente, a partir exclusivamente de los datos del texto, sin

    ajustar el procesamiento a sus conocimientos, a sus necesidades y a un

    propsito de lectura previo. Los lectores no eficientes, en consecuencia, no

    logran comprender los contenidos del texto o llegan a interpretaciones no

    adecuadas o incoherentes de los mismos.

    En sntesis, los esquemas cognitivos son esenciales, entonces, para el

    procesamiento, la comprensin y el aprendizaje de textos, puesto que el lector

    interpreta el texto no slo a partir de sus contenidos, sino de las implicaciones

    de esa informacin en sus esquemas; es decir, en funcin de lo que lee y

    tambin en funcin de lo que sabe sobre lo que lee. Si el lector no usa

    activamente sus esquemas, una parte muy significativa del proceso de

    comprensin no se puede dar y por lo tanto, la construccin del significado del

    texto ser deficiente, incompleta o errnea y sin una adecuada comprensin no

    ser posible el aprendizaje.

    La teora de los esquemas nos da luces, adems, sobre la posible

    explicacin de las dificultades en el procesamiento y comprensin de textos.

    Segn Rumelhart (1984) stas pueden ser originadas por tres factores:

  • 13

    1. No existen los esquemas relevantes: la comprensin del texto no es posible.

    En este caso, si se considera necesaria la lectura del texto, tenemos que

    hacer un trabajo previo a la lectura del texto, conducente a la formacin de

    los esquemas pertinentes que permita a los estudiantes procesar el texto. La

    otra alternativa es, simplemente, buscar un texto que est ms al nivel de

    conocimiento de nuestros estudiantes.

    2. A pesar de la existencia de esquemas relevantes, la falta de indicios

    adecuados en el texto no permite su activacin: la comprensin no es

    posible. En este caso, habra que llevar a cabo un trabajo con el texto,

    resaltando de alguna manera los aspectos esenciales, claves del texto que

    permitan que los estudiantes activen sus esquemas pertinentes y puedan,

    entonces, procesar y comprender el texto.

    3. El lector hace una interpretacin de los contenidos que no coincide con la

    pretendida, es decir, hay una mala interpretacin del autor, debido a la

    activacin de esquemas que no son los pertinentes para la adecuada

    interpretacin del texto. En este caso, habra que orientar a los estudiantes

    hacia aquellos elementos ms importantes del contenido del texto para que

    puedan, entonces activar los esquemas pertinentes.

    As pues, la comprensin como proceso de construccin de significados

    depende, en gran medida, de la existencia, de la accesibilidad y del uso

    apropiado de los esquemas -de todo tipo- del lector. Pero estos esquemas no

    slo permiten el procesamiento y la comprensin del texto durante el proceso

    lector, sino que a la vez, como resultado, se actualizan durante el mismo

    proceso, permitiendo as al lector la adquisicin, revisin o ampliacin de

    conocimiento y capacitndolo para crear nuevo conocimiento a partir de ellos

    (Bransford: 1985). Una vez actualizado el conocimiento, se da la integracin

  • 14

    semntica y este nuevo conocimiento resultante se almacena nuevamente de

    manera organizada en la memoria a largo plazo donde queda disponible para

    su uso en situaciones posteriores.

    EL TEXTO Y LA LECTURA

    El proceso de comprensin de lectura, tal como se ha venido

    planteando, se fundamenta en la interaccin permanente del lector con el texto,

    por lo tanto, ste ltimo y sus caractersticas contribuirn tambin a hacer que

    el proceso sea ms o menos difcil.

    Alrededor de los aos setenta, a raz del surgimiento del inters por el

    estudio del texto, de las caractersticas comunes a los mismos y de los rasgos

    distintivos entre ellos, se hace evidente que un texto es ms que la suma de las

    palabras o de las oraciones impresas en una pgina, es un modo de expresin

    que cumple una funcin comunicativa en la interaccin humana (Petoffi: 1979,

    citado por de Beaugrande y Dressler, 1983) y para que el texto cumpla dicha

    funcin debe reunir ciertos rasgos de textualidad.

    Varios autores se ocupan de describir los rasgos que hacen que un texto

    sea un texto, es decir, los que le dan su textura o textualidad, por ejemplo, de

    Beaugrande y Dressler en su trabajo de 1972, que se publica por primera vez

    en ingls en 1981, plantean que un texto es "una ocurrencia comunicativa que

    cumple siete estndares de textualidad y si alguno de stos no se considera

    satisfecho, el texto no ser comunicativo" (de Beaugrande y Dressler, 1983:3).

    Es importante aclarar que estos estndares, o rasgos estn definidos no

    por el texto en s, sino por ste y la situacin de comunicacin en que es

    producido y recibido. As, tenemos unos rasgos ms directamente dependientes

  • 15

    e internos al texto, que son operativos puesto que son necesarios para que los dems se den y son: la cohesin, que tiene que ver con la manera en que los

    componentes de la estructura superficial estn conectados y de cmo estas

    relaciones estn marcadas lingsticamente y la coherencia, que tiene que ver

    ya con el texto como un todo e indica cmo los conceptos e ideas subyacentes

    estn relacionados entre s, a veces explcitamente, otras veces de manera

    implcita. Los dems rasgos estn ms relacionados con la interaccin comunicativa: los participantes y el contexto. En relacin con los participantes tenemos: la intencionalidad, que depende del emisor y nos permite identificar su actitud e intencin comunicativa, la aceptabilidad, la

    relevancia que el texto tiene para el lector y la informatividad, el grado en que el texto contribuye a la interaccin; estos dos ltimos rasgos como respuesta

    del receptor. Finalmente, en relacin con el contexto, tenemos la situacionalidad que determina la relevancia del texto en relacin con la situacin

    de comunicacin y la intertextualidad que establece la dependencia del texto

    con otros textos.

    Otros autores coinciden en asignar al texto cuatro caractersticas bsicas

    que le dan su carcter comunicativo, al margen de cualquier estructura dada

    (vase, por ejemplo, Alliende: 1982, Vidal-Abarca y Gilabert :1991). Estas

    caractersticas, que de alguna manera estn recogidas en lo que plantean de

    Beaugrande y Dressler, son: la estructura u organizacin de las ideas en el

    texto y la naturaleza de las relaciones que conectan dichas ideas, la coherencia

    o cualidad de los textos por la cual las ideas se relacionan unas con otras, la

    unidad o grado en que el texto tiene un propsito nico y la adecuacin a la

    audiencia en funcin del conocimiento previo de los lectores.

    Por otra parte, los trabajos orientados al anlisis de los distintos tipos de

    textos han mostrado que la manera como se organiza y estructura la

  • 16

    informacin, las formas lingsticas escogidas para expresar esa informacin y

    las marcas o seales retricas o discursivas que se usen van a depender de la

    intencin comunicativa del autor y de la audiencia que ste tiene en mente. Al

    respecto, distintos autores plantean distintas tipologas textuales, resultantes de

    diferentes criterios de clasificacin, pero, en trminos generales, la mayora

    coinciden en clasificar los textos como narrativos, expositivos, descriptivos,

    instruccionales y argumentativos. Aunque no podemos hablar de una tipologa

    textual nica, porque no hay acuerdo entre los especialistas (Ciapuscio, 1994),

    sino de tipologas, lo que s parece claro es que en el mbito acadmico el

    aprendizaje ocurre fundamentalmente a partir de textos expositivos.

    En relacin con los tipos de textos, merece la pena aclarar que, de

    acuerdo con desarrollos recientes, parece ms adecuado hablar de textos

    prototpicos (Adam, 1992), ya que se ha encontrado que los textos autnticos

    no son puros. En un mismo texto pueden ocurrir, en distintos momentos,

    estructuras discursivas propias de diferentes tipos textuales. Por ejemplo, un

    texto que pretenda convencer puede incluir algunas estructuras discursivas

    tpicamente narrativas y tambin algunas tpicamente descriptivas, dentro de

    una estructura predominantemente argumentativa. Un poema, por ejemplo,

    puede presentar instancias discursivas descriptivas y argumentativas, sin dejar

    de ser predominantemente narrativo.

    En cuanto a la comprensin de textos expositivos, autores como Davies

    y Green (1984), Lunzer y Gardner (1984), Martnez (1994), Vidal-Abarca y

    Gilabert (1991), Sol (1992), entre otros, han mostrado que el trabajar con una

    diversidad de textos en el aula con el propsito de los que los estudiantes se

    familiaricen y reconozcan las estructuras discursivas caractersticas de distintos

    tipos de textos les facilita el procesamiento y comprensin.

  • 17

    Snchez (1993) plantea que la comprensin de textos es posible a partir

    de la identificacin de su estructura organizativa, la cual nos sirve de gua para

    recomponer el orden de ideas o progresin temtica del texto. Sin embargo,

    establecer el orden de ideas no es suficiente, puesto que no todas las ideas son

    igualmente importantes. As que poder establecer el orden jerrquico de las ideas

    expresadas y las relaciones entre ellas, es decir, su macroestructura o

    representacin semntica (Kintsch y van Dijk: 1978; van Dijk y Kintsch: 1983), nos

    permite construir el sentido global del texto. La macroestructura est formada por

    macroproposiciones, proposiciones que representan la idea general del texto y es

    inferida por el lector en su proceso de lectura a partir de la microestructura o base

    del texto, es decir, del conjunto de proposiciones formadas por un predicado y uno

    o ms argumentos conectados entre s. En este proceso, el lector hace uso de las

    macrorreglas de supresin, generalizacin y construccin que le permiten reducir

    la informacin del texto y organizarla de manera que de cuenta de su sentido

    global:

    Supresin: de una secuencia dada de proposiciones se suprimen las que no son esenciales para la interpretacin del texto. Si en el texto

    aparece de manera explcita una proposicin que exprese la idea

    general, se selecciona sta y se descartan las que no aadan

    informacin fundamental.

    Generalizacin: en una secuencia de proposiciones sustituimos los conceptos expresados en la secuencia por uno supraordenado. Se trata

    de construir la generalizacin ms pequea posible que incluya a todos

    estos conceptos.

    Construccin: una secuencia de proposiciones es reemplazada por otra, totalmente nueva, implicada por el conjunto de proposiciones

    sustituidas.

  • 18

    Segn Kintsch y van Dijk (obras citadas), existe otro tipo de estructura

    global, estrechamente ligada con la macroestructura, que hace referencia a la

    estructura retrica global del texto, es decir, la superestructura. Estas estructuras

    generales o esquemas del texto, diferentes segn el texto -narrativo, expositivo,

    argumentativo, etc.- tambin cumplen un papel importante en el procesamiento

    de los textos, por lo tanto, es importante que el lector pueda identificar las

    distintas superestructuras posibles y sus rasgos caractersticos. El conocimiento

    de las distintas organizaciones superestructurales le facilita al lector el

    establecimiento o construccin de la macroestructura del texto, durante su

    lectura.

    En los textos expositivos entre las superestructuras ms comunes, que

    ponen de manifiesto los propsitos del autor, segn distintos investigadores

    (Martnez: 1994; Snchez: 1993; Vidal-Abarca y Gilabert: 1991) tenemos las

    siguientes:

    Enumeracin: La relacin de una serie de rasgos o componentes de un mismo nivel de importancia sobre un determinado asunto o tema.

    Secuencia temporal: Serie de acontecimientos presentados en orden temporal.

    Causal: Presentacin de la relacin de causalidad entre dos ideas, la una como causa o antecedente y la otra como consecuencia.

    Comparacin Contraste: Confrontacin entre dos ideas o acontecimientos, estableciendo sus semejanzas y diferencias.

    Respuesta/ Problema-Solucin: Presentacin de un problema, para el cual se proponen soluciones.

  • 19

    Descripcin: Agrupacin de la informacin en torno a una entidad, como rasgos, atributos o caractersticas de la misma.

    Es muy comn encontrar distintas superestructuras alternadas en un

    mismo texto expositivo, por lo tanto, el conocimiento de las diferentes

    superestructuras le permitir al lector un mejor procesamiento y comprensin

    del texto, facilitndole, adems, la adquisicin y construccin de

    conocimientos. En el caso especfico de los textos expositivos, que se

    caracterizan por la inclusin de informacin nueva, poder identificar la

    estructura del texto, le ayudar al lector a conectar ms fcilmente esta

    informacin con conceptos e ideas ya conocidos y a elaborar resmenes

    adecuados a medida que avanza en su proceso lector.

    Como se expres en el apartado anterior, el conocimiento sobre los

    textos, sobre la manera en que se organizan, sobre sus marcas discursivas

    constituye nuestros esquemas estructurales, formales o textuales y estos

    esquemas cognitivos previos, como lo expresamos, son esenciales para la

    construccin del significado del texto. Aunque una parte de esos esquemas

    formales se adquieren por la experiencia con una diversidad de textos que

    circulan en el entorno desde antes de empezar la escolaridad formal, es

    importante desarrollar un trabajo sistemtico de estrategias de lectura de

    distintos tipos de textos acadmicos que redunde en un mejor proceso de

    comprensin y aprendizaje. y, por lo tanto, le permitan al estudiante

    involucrarse de manera autnoma en la lectura de distintos tipos de textos con

    el fin de construir su significado y aprender de ellos.

    Volviendo al concepto de leer para aprender, a manera de resumen,

    podemos decir que comprensin y aprendizaje se dan cuando se puede asociar

  • 20

    la informacin previa de los esquemas del lector con la informacin nueva del

    texto. El aprendizaje ocurre cuando se puede interpretar la informacin nueva

    en trminos de conocimientos y conceptos adquiridos previamente. Son stos

    los que permiten al lector entender e interpretar la informacin y elaborar una

    representacin mental coherente de lo que el texto describe, de su sentido.

    Como decamos antes, es claro que el sentido no est ya hecho en el texto para

    que el lector simplemente lo "extraiga" del mismo, pero tampoco podemos decir

    que reside exclusivamente en el lector quien lo impone al texto. Se trata de un

    proceso de construccin que es posible, precisamente, en la interaccin del

    lector con el texto, interaccin que, adems, pone lmites a esa posible

    construccin. Es esta caracterstica simultneamente retrospectiva la

    activacin del conocimiento previo- y prospectiva la bsqueda de lo nuevo que

    ofrece el texto- del proceso de lectura la que permite que el conocimiento y la

    lengua misma evolucionen permanentemente (Martnez: 1991).

    ESTRATEGIAS DE COMPRENSIN DE TEXTOS

    De la misma manera que los esquemas cognitivos, las estrategias cumplen

    un papel fundamental en los procesos de comprensin y aprendizaje de textos,

    ya que permiten el uso orientado y coordinado del conocimiento relevante para

    establecer relaciones significativas con los contenidos, as como el desarrollo

    de mejores procesos de retencin y aprendizaje de textos. En este proceso

    estratgico de comprensin y de aprendizaje es importante la adecuada

    seleccin y uso flexible de estrategias, que van a estar determinadas por los

    propsitos de lectura, por el texto mismo y por la tarea propuesta.

    Debido a que la lectura es un proceso tan complejo, constituido por una

    diversidad de procesos cognitivos, al verse afectado cualquiera de stos puede

  • 21

    verse afectada la comprensin. Investigaciones recientes han podido establecer

    diferencias entre lectores competentes y menos competentes en trminos de

    estrategias (Brown: 1985; Garner 1987 b). Conocer estas diferencias es de

    gran utilidad en el diseo de actividades orientadas a la optimizacin del

    proceso lector, el procedimiento a seguir depender de los factores en los

    cuales los estudiantes presentan dificultades especficas.

    Entendemos por estrategia la secuencia de actividades intencionales y

    deliberadas en las cuales se involucra conscientemente el individuo para lograr

    las metas que se ha propuesto. Weinstein y otros (1988) sealan las siguientes

    como caractersticas del aprendizaje estratgico, las mencionamos aqu ya que

    creemos que son vlidas para el procesamiento y comprensin de textos:

    1. Est bajo el control del sujeto.

    2. Requiere mayor esfuerzo y recursos atencionales suficientes.

    3. Responde a una tarea especfica.

    4. Las actividades a desarrollar se seleccionan de una serie de alternativas

    posibles.

    5. El xito de las actividades est determinado por condiciones especficas

    acerca de cundo, dnde y cmo usarlas.

    6. Permite determinar sobre qu hacer nfasis durante el proceso.

    7. Es un proceso flexible que se puede ir ajustando de acuerdo con el logro de

    las metas.

    En el caso de la comprensin de textos, podemos decir, entonces, que las

    estrategias son los procedimientos a seguir para la eficacia del proceso. Se

    trata de alcanzar unas metas especficas, de una manera ptima, a travs de

  • 22

    acciones especficas encaminadas al procesamiento y comprensin adecuados

    del texto.

    Segn Garner (1987b) si bien no es fcil caracterizar al buen lector en

    cuanto a qu estrategias utiliza en su proceso de lectura, lo cierto es que algo

    que s lo caracteriza es la forma en que se relaciona e interacta con el texto:

    tiene conciencia y control sobre sus actividades durante todo el proceso y

    adems hace uso flexible de estrategias para ajustar las distintas actividades a

    su propsito de lectura, a la tarea(s) especfica(s) y al tipo de texto. De acuerdo

    con la autora, diversas investigaciones han demostrado que existen diferencias

    marcadas entre lectores eficientes y no eficientes alrededor de aspectos cruciales

    para el proceso lector, a partir de stas podemos mencionar como las deficiencias

    ms comunes las siguientes:

    1. Poca o ninguna conciencia de que tienen que establecer el sentido de lo que

    leen, es decir, no han asumido que leen para construir el significado del texto

    y se quedan en la mera decodificacin.

    2. No ven la necesidad de confrontar permanentemente los contenidos del texto

    con sus conocimientos previos, contentndose con el ejercicio mecnico de

    "traducir" los smbolos grficos, impresos en el papel, a sonidos.

    3. No son conscientes de la necesidad de hacer inferencias durante la lectura,

    como si el texto expresara todo de modo explcito.

    4. Poca o ninguna conciencia de que tienen bloqueos de comprensin: no caen

    en cuenta de que no han entendido el texto. Parecen asumir que una buena

    decodificacin es garanta de comprensin. En consecuencia, hacen poco o

    ningn uso de estrategias compensatorias para solucionar dificultades o fallos

    de comprensin.

  • 23

    En trminos generales, los lectores no eficientes usualmente no participan

    activa ni estratgicamente en el proceso lector, no disponen de estrategias

    adecuadas, o no las usan, o al usarlas no lo hacen flexiblemente intentando

    ajustarlas a la consecucin de sus metas de lectura. Estos lectores se limitan,

    entonces, a la mera decodificacin del texto. Es importante, por lo tanto, llevar a

    cabo un trabajo sistemtico y explcito de enseanza de estrategias de

    comprensin del texto que permitan al lector procesar el texto y comprenderlo de

    manera adecuada a sus propsitos y que le faciliten el control, la supervisin y

    evaluacin de su propio proceso durante la ejecucin del mismo.

    Una de las situaciones ms comunes durante la lectura son las

    interpretaciones erradas o los vacos de comprensin. A este respecto, es

    importante el trabajo sistemtico de estrategias especficamente orientadas al

    control y evaluacin de la comprensin durante el proceso mismo. Sin embargo,

    no es muy comn que durante el proceso de lectura nos estemos preguntando si

    estamos comprendiendo o no lo que leemos. Esto sucede slo cuando lo

    hacemos de manera consciente y cuidadosa para observar que dificultades

    encontramos en el proceso.

    El darse cuenta o no del grado de comprensin parece estar estrechamente

    ligado con el propsito que perseguimos con la lectura. Es bastante usual que los

    estudiantes no tengan claridad sobre el propsito de su lectura, no saben qu es

    exactamente lo que se espera de ellos, por lo tanto, difcilmente van a darse

    cuenta de sus errores o vacos de comprensin durante la lectura de un texto. A

    este respecto, una de las estrategias fundamentales a trabajar es el

    establecimiento de un propsito claro, preciso de lectura que oriente el proceso

    de lectura y que permita al lector darse cuenta de su estado de comprensin

    mientras va leyendo. Un aspecto muy importante, entonces, en relacin con la

  • 24

    deteccin de errores es asumir la posibilidad de tener fallas de comprensin, algo

    de lo cual la mayora de los estudiantes no es consciente.

    Ahora bien, en relacin con las estrategias compensatorias que permiten

    solucionar las dificultades de comprensin, su utilizacin depende, como

    decamos, del propsito de lectura, de nuestro conocimiento previo y del texto

    mismo. Si durante el proceso de lectura encontramos dificultades o vacos de

    comprensin es muy importante identificar con precisin cul es exactamente la

    dificultad, qu es exactamente lo que nos causa problema. Una vez identificada la

    fuente de dificultad, podemos optar por alguna de las siguientes estrategias

    (Lpez: 1997a).

    No hacer nada y seguir leyendo. En muchas ocasiones lo que consideramos inicialmente como dificultad no interfiere con una

    comprensin del texto que responda de manera adecuada a nuestros

    propsitos iniciales, por lo tanto, la mejor estrategia es ignorar la dificultad y

    continuar con el proceso.

    Seguir leyendo con el propsito de buscar ms informacin que nos permita resolver la dificultad ms adelante.

    Hacer una hiptesis tentativa que nos permita resolver la dificultad y revisarla, confirmndola o rechazndola, con base en lo que el texto dice.

    Devolvernos a hacer una relectura selectiva, slo de la parte que nos presenta dificultad.

    Acudir a otra fuente, un compaero, el profesor, el diccionario. Esta estrategia implica la interrupcin de la lectura y la desconexin con el

    proceso que venamos desarrollando, por lo tanto, es mejor utilizarla slo

    cuando sea indispensable.

    Como decamos, el propsito de lectura, nuestro conocimiento previo y el

    texto determinan la estrategia a utilizar, distintas dificultades demandan distintas

  • 25

    soluciones. Es muy importante, entonces, el trabajo con diferentes estrategias

    segn la necesidad

    El proceso concebido tal como se ha descrito, supone un lector activo

    que sabe qu lee y por qu lee, que se involucra e interacta con el texto, en

    un contexto especfico y con unos propsitos determinados, para procesarlo e

    interpretarlo. Un lector que participa activamente en la construccin y

    refinamiento gradual de una representacin mental coherente del texto, en su

    intento de llegar a la construccin de su sentido, a partir de la constante

    interrelacin de los contenidos del texto con lo que l sabe sobre esos

    contenidos.

    Para terminar, si queremos formar verdaderos lectores activos y

    autnomos es necesario que nos propongamos reducir esa gran distancia entre

    lo que se ensea y las necesidades que los estudiantes necesitan satisfacer a

    travs de la lectura. Al respecto, y a manera de sntesis, las siguientes

    acciones son fundamentales:

    1. Propiciar muchas oportunidades de contacto directo, natural y

    espontneo de nuestros alumnos con una diversidad de textos en las

    distintas reas de contenido.

    2. Promover situaciones de lectura, con propsitos previos significativos

    para los alumnos, en las que sientan la necesidad de leer y

    comprender lo que leen.

    3. Plantear la lectura como la construccin del sentido de los

    contenidos, ms que como la simple decodificacin del texto.

  • 26

    4. Orientar la construccin del sentido a partir de la confrontacin

    permanente de los esquemas cognitivos del lector con lo que el texto

    expresa.

    5. Implementar actividades que generen la utilizacin de diversas

    estrategias, cuya seleccin y uso dependern del texto y de los

    propsitos de lectura.

    6. Estimular la lectura como una oportunidad de dialogar con el texto y

    no slo como procedimiento para adquirir informacin; como la

    posibilidad de cuestionar el texto y de construir nuevos conocimientos

    con la transformacin y creacin de nuevos esquemas cognitivos.

    7. Trabajar con textos y material de inters de los estudiantes, con una

    dificultad moderada que, sin representar una gran carga para ellos, les

    implique un reto a su alcance.

    8. Ocuparnos ms del proceso de lectura de nuestros alumnos -antes,

    durante y despus del mismo- y preocuparnos menos por la mera

    comprobacin del producto obtenido una vez hayan terminado de

    leer.

    ESTRATEGIAS SUGERIDAS A continuacin, se presentan algunas estrategias que permiten un

    trabajo de lectura como el planteado. No se trata de utilizar todas y cada una

    en cada situacin de lectura. Su utilizacin depende del propsito de lectura,

    del tipo de texto y de las necesidades especficas de los estudiantes

    1. Prelectura: Activacin de esquemas cognitivos

    - El propsito es la incitacin a la lectura, pidindoles que aporten los conocimientos y experiencias propias.

  • 27

    1.1. MUESTREO

    Abarcar globalmente el texto para identificar su tema y propsito, a partir de los

    ttulos, subttulos, ilustraciones, marcas grficas y tipogrficas, tipos de letra,

    formato, etc.

    1.2. MAPAS/ REDES SEMNTICO(A)S a) LLUVIA DE IDEAS: Anunciar el tema y pedirles que hagan una lista de

    todas las palabras relacionadas con el mismo.

    b) CATEGORIZACIN: Pedirles que junten las palabras en distintos grupos,

    cada cual debe buscar aquella caracterstica que le permite formar cada

    grupo. Sugerir la red como representacin grfica de la informacin.

    c) LECTURA RPIDA DE VISTAZO: A partir del ttulo, de los subttulos, los

    grficos, dibujos y de otras claves del texto (negrita, cursiva, etc.):

    Revisin de la informacin que se ha surgido en las actividades previas. Prediccin de lo qu va a tratar el texto, de su propsito.

    1.3. LO QUE S, LO QUE QUIERO SABER (tabla)

    LO QUE S LO QUE QUIERO SABER

  • 28

    a) Darles el ttulo del texto que van a leer y pedirles que llenen las columnas de la tabla.

    b) LECTURA RPIDA DE VISTAZO (Como en la estrategia anterior).

    2. Durante la lectura: confrontacin de los esquemas con la informacin del texto.

    El propsito es ir asociando lo que dice el texto con lo que ya se sabe,

    integrar en un todo coherente la informacin y recapitular las distintas

    informaciones.

    2.1. CONVERSAR CON EL TEXTO

    Pedirles que, a medida que leen, vayan expresando en voz alta o por escrito los comentarios que se les ocurran en relacin con lo que van

    leyendo: asociaciones, imgenes, predicciones sobre lo que sigue,

    preguntas y posibles respuestas.

    2.2. PREGUNTAS Y RESPUESTAS

    Aadir en los sitios pertinentes del texto preguntas sobre aspectos especficos del contenido que se quieren resaltar, as como sobre

    informacin implcita que es necesario inferir para una comprensin

    adecuada del texto. El estudiante dar posibles respuestas que luego

    revisar con el texto mismo.

    2.3. PREDICCIN Y VALIDACIN

  • 29

    Adelantarse al contenido que se tratar, elaborando hiptesis que se probarn con el texto mismo, rechazndolas o confirmndolas. Aunque esta

    estrategia puede conducir a hiptesis errneas, tambin permite la

    autocorreccin, actividades propias y muy importantes en todo proceso de

    lectura.

    2.4. INFERENCIAS

    Deducir informaciones y relaciones entre unidades de informacin que aunque no estn explcitamente en el texto, si estn sugeridas por algunas

    pistas que aparecen en texto y a las cuales el conocimiento previo nos

    permite llegar.

    3. Despus de leer: integracin de informacin en un todo coherente.

    El propsito es lograr una representacin global e integrada de los

    contenidos del texto con lo que se saba previamente.

    3.1. LO QUE APREND, LO QUE AN ME FALTA (Completar la tabla propuesta en la etapa de prelectura)

    LO QUE S

    LO QUE QUIERO

    SABER

    LO QUE

    APREND

    LO QUE AN ME

    FALTA

  • 30

    Pedirles que aadan dos columnas ms a la tabla anterior para que escriban lo que aprendieron y lo que an les queda por averiguar (posibilidad

    de acudir a otras lecturas).

    Adems de lo anterior se les pide revisar (completar, cambiar, aadir) la informacin consignada previamente en las dos primeras columnas de la

    tabla.

    3.2. VOLVER A CONTAR

    Pedirles que cuenten de manera oral o por escrito lo que deca el texto. Una de las estrategias ms utilizadas es la elaboracin de resmenes.

    3.3. PRODUCCIN DE UN NUEVO TEXTO

    Con el texto ledo como base y como modelo de escritura, escribir un nuevo texto sobre un tema similar.

    Con base en los contenidos del texto ledo, escribir un texto de otro tipo, determinando un nuevo propsito y la audiencia a quien va dirigido.

    IMPORTANTE

    Recordemos que el objetivo fundamental de las distintas actividades debe ser siempre el de ayudar a los estudiantes a que comprendan los contenidos del texto. Se trata de llevarlos a que construyan el significado de lo que el texto dice, a partir de la interaccin permanente entre el texto -sus contenidos- y el lector: sus esquemas cognitivos previos -lo que saben sobre los contenidos- y lo que creen, piensan y esperan del tema expuesto, para que lleguen as a formarse una representacin mental coherente de lo que el texto, como un todo, expresa.

  • 31

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  • 35

    Revista Universidad del Valle, N 16: La Lectura, Abril de 1997, Cali.

    Revista Universidad del Valle, N 19: La Escritura, Abril de 1998, Cali.

    LEER PARA APRENDER LOS CONOCIMIENTOS PREVIOS Y LA LECTURA EL TEXTO Y LA LECTURA ESTRATEGIAS DE COMPRENSIN DE TEXTOS

    ESTRATEGIAS SUGERIDAS 1.3. LO QUE S, LO QUE QUIERO SABER (tabla) a) Darles el ttulo del texto que van a leer y pedirles que llenen las columnas de la tabla. 2.1. CONVERSAR CON EL TEXTO

    2.2. PREGUNTAS Y RESPUESTAS 3.1. LO QUE APREND, LO QUE AN ME FALTA (Completar la tabla propuesta en la etapa de prelectura) 3.2. VOLVER A CONTAR 3.3. PRODUCCIN DE UN NUEVO TEXTO