Había una vez un niñito que se crió frente al televisor. Su mamá usaba el tele como chupete pacificador del niño desde que éste era bebé, le molestaba mucho que su hijo llorase. El niño se acostumbró tanto a mirar tele que todas sus actividades las hacía frente al aparato. El niño creció y creció y de tanto mirar la caja boba nunca aprendió a hablar.

En la escuela aprendió a leer. Fue así como descubrió un nuevo hobby. Ahora pasaba las horas leyendo y leyendo.

En la escuela tenía maestros tan estrictos que no los dejaban hablar en clase, sólo escuchar. Fue así que nadie

del cole se dio cuenta que el niño no sabía hablar.

Cuando creció, encontró una sola forma de comunicarse, la cual, años más tarde se convertiría en su profesión. Se

convirtió en un mimo profesional que recorrió el mundo por muchos años.

A pesar de sentirse completo profesionalmente, siempre sintió la necesidad de comunicar todo el conocimiento que

la tele, los libros y los viajes le habían dado. Entonces, como por arte de magia, un día conoce la Internet y las

NTICs.

Desde ese día, pasa la mayoría de sus horas contando en su blog anécdotas de su vida, comparte vivencias y

opiniones en un foro y ha encontrado en facebook muchas personas que conoció en sus viajes. También postea

videos en youtube mostrando su performance como mimo los cuales le sirven para su plataforma moodle donde dicta

clases de mimo a muchas personas del todo el mundo.