1Junio de 2013

Edición 8 – junio de 2013 - 10.000 ejemplares - www.asoguayaquil.com - asoguayaquil1@gmail.com - Distribución Gratuita

Vitrina

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“Guayaquil era la reunión del universo todo en unas pocas cuadras. Era la posibilidad de tener todos los paisajes, todos los gritos, las voces, las músicas y la gente de todas partes…” Reinaldo Spitaletta.

Foto: Yimmer Rincón Herrera.

Tango Colombiano: DESDE LAS RAÍCES

MISMAS DE GUAYAQUIL Y

ANTIOQUIA

Columnista invitado: Reinaldo Spitaletta:

GUAYAQUIL O LA ALGARABÍA DEL ÁNIMA SOLA.

Desde la Universidad: Nos escribe Omar Flórez Vélez: EL

CENTRO: UN HOGAR PARA LA VIDA.

La Columna del Concejal - Bernardo Alejandro Guerra Hoyos: “NO ES

FALTA DE INVERSIÓN, SINO UNA ADECUADA INVERSIÓN

PARA EL CENTRO”.

Reflexiones: NUESTRO

“AMIGO” EL LICOR.

Una realización de: VitrinaEspacio Público Vs

Comercio Organizado: EL ESTADO DEBE ATENDER LOS

DERECHOS DE TODOS.

2 Junio de 2013

A los típicos a n t i o q u e ñ o s “berracos” nos conocen porque somos capaces de “vender bu-ñuelos en el de-sierto”. Decía mi viejo profesor de geografía de ba-chillerato que al Parque Berrío lo

habían vendido tres veces, y ni qué decir de Margarita, no mi tía, sino la culebra….“Quieta margarita! / quieto animal feroz, / primero nació el niño Jesús que vos”“Llevando la pomada real/ para atraer al ser amado / se lo vuelve hombre leal / y lo deja locamente enamorado / pero nunca tarado”.Aquella retahíla típica de antioqueños expertos en vender es cachivaches o un-güentos que “pa´ nada sirven”. Pero además de ellos, sí encontramos en nuestra historia antioqueños “be-rracos” como un don Diego Calle Res-trepo, quien fue presidente de Fenalco, Gobernador de Antioquia, Director de Planeación Nacional, y Ministro de Hacienda. Según cuentan muchas his-torias, en su paso como Gerente de las Empresas Púbicas de Medellín entre 1976 y 1985, no solo sacó a esta em-presa de unos de sus momentos más difíciles generados particularmente por el desarrollo del proyecto Guata-pé, sino que su gestión fue clave para un cambio fundamental. Y nuevamente, gracias al berriondo apoyo que todos los habitantes de este territorio le hemos dado, podemos lle-nar nuestra boca con palabras de orgullo cuando la Revista Semana, en el informe especial de las cien empresas más gran-des de Colombia en el 2013, EPM figura como la segunda, después de Ecopetrol; en el club de las cuatro empresas, junto a Ecopetrol, Terpel y Almacenes Éxito que podrían tener un capítulo aparte en este informe especial, pues sobrepasan los

10 billones de pesos en ventas. Y es que EPM, según Juan Esteban Calle Restrepo, Gerente General, tiene activos con un va-lor de 34 billones de pesos, ventas de 12 billones y unas utilidades superiores a 3,4 billones, genera más de 5.000 empleos correspondientes a su planta de personal y 17.000 originados en la dinámica de su contratación externa. Por eso me nace una duda bien “tesa” con la fusión UNE – Millicom (Tigo). ¿Los antioqueños no somos pues los “putas” (perdón a la Academia) pa’ montar negocios y empresas? ¿Y es que solos no hemos sido capaces de llevar a esta empresa al puesto donde está? El sector de las comunicaciones representa el 14% de esta empresa y tenemos que tener en cuenta que la suma, que por impuestos y contribuciones paga EPM, es superior a los 970.000 millones de pe-sos lo que la ubica hoy como el segundo mayor contribuyente de la Nación des-pués de Ecopetrol, por encima, según datos del periódico El Tiempo el 23 de abril, a las transferencias del mismo Mu-nicipio de Medellín. ¡Eh ave María pues!, platica pa’ la salud, pa’ la educación, pa’ mejorar el medio ambiente, ¿será que al fin parte de ese dinero no se quedará en manos privadas para beneficio de particulares? Y es que si Millicom fuera empresota, sin manto de dudas frente a su solidez financiera…Volviendo al culebrero… no pocos así parecían cuando promovieron esta venta…“Quieto, quieto caballero, mire atenta señorita, va salir a la venta, esta fabulosa compañía, que está en apuros señor…. Echése la bendición, que está es la solu-ción a toda su preocupación. “Señor, señora, señorita… anda preocupado/ pues detrás de nuestra gran empresa está un avispado/ pero ustedes tranqui que no nos están tras-quilando/ que más vale pájaro en mano que cien volando…Por eso pregunto, con esta fusión ¿dónde queda nuestra berraquera antioqueña?

LA COLUMNA DE FORTUNATO GÓMEZEL COMERCIANTE “BERRACO”

VENTA DE UNE A LO PAISA

Doris Jaramillo MartínezPresidenta

Centro Comercial Gran Plaza

Wilmer Edilson Guauque GuarínVicepresidente

Asociación de Perfumeros de Medellín

Luz Adriana Agudelo GaviriaSecretaria

Centro Comercial Metrohueco

Carlos Alberto Rico TapiasTesorero

Centro Comercial FénixLuz Miriam Yepes Pérez

Centro Comercial Paseo Metrópolis

DiSEño Y DiAGRAMACiónCasa Editorial El Mundo

FoToGRAFíA E iLUSTRACionESYimmer Rincón Herrera

ASoGUAYAQUiLAsociación de Comerciantes de Guayaquil

Teléfonos: 511-20-74 - Celular: 317.429.3017Edificio Nuevo Guayaquil Carrera 52 Número 45-92 piso 6

oficinas 605-606Web: asoguayaquil.com

Correos: asoguayaqui1@gmail.com, Hotmail: Asoguayaquil@hotmail.es

Facebook: asoguayaquil1@gmail.comTwitter: @Asoguayaquil

Carmenza ZuluagaCentro Comercial El Hacendado

Juan Carlos Gómez GiraldoCentro Comercial El Hueco n°1

Jaime Alberto Dávila VélezCentro Comercial Venaver

Luis Fernando CastañedaCentro Comercial San Andresito

Principal

Miguel Efraín Yepes AristizábalCentro Comercial Metrohueco

Rubén Darío Gómez AristizabalCentro Comercial el Dorado n°2

CoMiTÉ EDiToRiALDoris Jaramillo Martínez

Wilmer Edilson Guauque GuarínCarlos Alberto Rico Tapias

DiRECToR EJECUTiVoJavier Gaviria Betancur

DiRECToRJuan Carlos Sánchez González

PUBLiCiDAD Y VEnTASKarla García Vera

Las opiniones expresadas en este artículo son libres y de ellas son responsables sus autores.

Editorial

Por: DoRiS JARAMiLLo MARTínEZPresidenta Asoguayaquil

Por suerte para el Sector de Guayaquil, se ha comenzado por el primero de estos corredores, es decir, por el comprendido entre Plaza Botero pasando por el Pasaje Carabobo y terminando en la Plaza de Cisneros, donde también se ha intervenido ya la seguridad y realizado algunas obras de infraestructura que han transformado esta hermosa Plaza en un sitio habitable pues gracias a las acciones de la Secretaría de Educa-ción y Cultura y a entidades como la Fundación EPM - quienes vienen realizando allí activida-des artísticas y culturales, ya se comienza a ver personas recreándose en estos espacios que se construyeron precisamente para el esparci-miento y el encuentro de los ciudadanos.

Aún cuando desde la llegada de Gran Plaza a este sector - Centro Comercial que transformó este espacio, que en palabras de muchos, era deso-lado, mal habitado y por ende poco o nada fre-cuentado - hemos venido solicitando a la Admi-nistración Municipal estas intervenciones, nada tuvimos que ver en el orden en que se iniciaron las actividades pero sí hemos acogido con mucho entusiasmo la propuesta tal como la concibieron , porque entendemos la importancia que para los diferentes sectores tiene el que se recupere la confianza del ciudadano en los Parques y Plazas que como la de Cisneros, es la Puerta de Entra-da al Sector del Hueco y de Guayaquil. En unión del Museo de Antioquia, del Hotel Nutibara y de Corbolívar, estamos trabajando de la mano de la Gerencia del Centro en las actividades cultura-les que nos permitan enlazar a estas importantes Plazas: Botero y Cisneros, para que se conviertan en paseo obligado de propios y extraños que a sa-biendas de la riqueza cultural y artística que tan-to estas Plazas como el Pasaje Carabobo encie-

rran, estamos convencidos de que contribuirán en gran medida en esa recuperación que tanto deseamos los que conocimos el antiguo Guaya-quil, cuando era lugar de encuentro de quienes vivían en Medellín y fuera de ella.

Si analizamos detenidamente cada uno de es-tos corredores y los lugares que atraviesan, po-dremos concluir que en sentido figurado, son vertientes principales del Centro y que su recu-peración va a irradiar a los ríos (entiéndase ca-lles) que nacen de ellas. Debemos comprender que el Centro de la Ciudad es uno solo y si nos unimos todos en el propósito de remediar los problemas que lo aquejan sin mirar nuestros intereses particulares o a quiénes se está bene-ficiando de primera mano, podremos aprove-char las intervenciones que está dispuesta a ha-cer la Administración Municipal y que, como ya hemos visto, se han comenzado a notar por ejemplo en la seguridad que se respira. Confia-mos que también en temas como la ocupación del espacio público y la movilidad logremos los resultados que esperamos del trabajo que ya ve-nimos haciendo desde ASOGUAYAQUIL con las mesas de trabajo que estamos liderando y donde se ha dado participación a instituciones públicas y privadas que tienen interés en sacar avante estos asuntos de ciudad.

Nuestros problemas son muchos y de muy variada índole y sólo podremos solucionar-los, aprovechando las oportunidades que nos ofrece el momento y comenzando a trabajar con los recursos que tenemos. La queja sólo sirve para crear desánimo. Echemos pa´lante con entusiasmo y optimismo y confiemos en que las ganas y la buena energía de todos aquellos que estamos comprometidos con la solución a la problemática del sector, dará los frutos que anhelamos.

UN BENEFICIO PARA TODOSLA INTERVENCIÓN DEL CENTRO

En el Plan de Desarrollo “Medellín un Hogar para la Vida” del presente cuatrienio en nuestro municipio se establece como Plan Bandera la intervención integral del Centro que se llevará a cabo a través de varias estrategias, entre las que se encuentran los Corredores de Vida que permitirán hacer

dicha intervención desde lo cultural y lo social. La Administración Municipal ha establecido que estos corredores están comprendidos por los cinco parques principales que hacen parte del Centro Histórico: Plaza Botero a Plaza de Cisneros pasando por Carabobo, Parque San Antonio llegando por Junín hasta el parque Bolívar y desde San Juan por todo el corredor Bolívar, hasta el Parque

Berrío, corredores que también obedecen al interés de la alcaldía por la recuperación de los parques de la Ciudad.

3Junio de 2013

Por Javier Gaviria BetancurDirector Ejecutivo Asoguayaquil

El pasado 29 de mayo fue admitida la demanda de nulidad que presenté contra la Resolución 004 del 26 de di-ciembre de 2012, expedida por el Sub-secretario de Catastro Municipal de Medellín y por medio de la cual se or-denó renovar la inscripción catastral de la totalidad de los bienes inmue-bles, urbanos y rurales, de la ciudad de Medellín.

Recordemos que desde principios de año, cuando apenas comenzaban a lle-gar las primeras facturas del impuesto predial a los establecimientos comer-ciales y a los hogares, se fue cuajando una importante agrupación de fuer-zas de muy variada condición social, económica y territorial, especialmente lideradas por nuestra organización ASOGUAYAQUIL y la Asociación An-tioqueña de Ligas de Usuarios de los Servicios Públicos, y que más adelan-te tomó el nombre de COMITÉ CIU-DADANO PREDIAL JUSTO. Varias marchas multitudinarias fueron con-vocadas, con especial participación de los comerciantes de Guayaquil, como también foros, reuniones en muchos barrios de la ciudad y una Sesión Espe-cial en el Concejo de Medellín. A pesar de la insistente y legítima solicitud de revisión de la actualización catastral, la administración nunca atendió ni la de los comerciantes ni la de los secto-res residenciales. Enfatizando, como lo hemos hecho desde entonces, que la anterior actualización catastral, la del año 2005, agravó más la situación de los establecimientos comerciales de Guayaquil, asistimos a todas las protes-tas en demanda de que se nos escuche porque es claro para todos que no hay quien sea capaz de soportar el avalúo catastral que se ha determinado para nuestros locales.

Muy conveniente la presentación de esta demanda de nulidad porque cons-

tituye una brecha para mantener el de-bate ciudadano a tan injusta medida y a muy buena hora ha sido admitida por-que vuelve a poner en primer plano la exigencia nunca renunciada de revisión total de los avalúos del sector comercial de Guayaquil.

Esta demanda pretende que el Juez Administrativo de Medellín declare la nulidad de la Resolución 0004 del 26 de diciembre de 2012, por expedición en forma irregular del acto administrati-vo, es decir, violando normas constitu-cionales y legales, que explicamos breve y sencillamente para el conocimiento y la comprensión de todos.

Para efectos de establecer la vigen-cia fiscal durante la cual se aplica el nuevo avalúo catastral, la Resolución 70 de 2011 del Instituto Geográfico Agustín Codazzi ordena que el acto administrativo sea publicado en la Gaceta Municipal antes del 31 de di-ciembre del año en que se termina el proceso de actualización catastral. En la ciudad de Medellín se actualizó, como dijimos arriba mediante Reso-lución del 26 de diciembre de 2012, entonces legalmente debía publicarse en Gaceta Municipal de esos días si-guientes y anteriores al 31 de diciem-bre. Sin embargo aparece publicada la Resolución en Gaceta Municipal del 19 de diciembre, lo que constituye un caso inentendible y, también fue publicada en Gaceta Municipal del 11 de febrero de 2013, lo que constituye un hecho inaceptable porque la nor-ma legal exige que esa publicación se haga antes del 31 de diciembre. Es este el resumen de lo que llamamos expedición irregular de la Resolución que nos actualizó los avalúos catas-trales de nuestros predios.

En manos de los Jueces Administrativos está la decisión de confirmar si hubo o no ilegalidad en este procedimiento y en manos de la ciudadanía está la decisión de persistir en su justa reclamación.

En la lucha contra la actualización catastral y el impuesto predial

una extraordinaria noticia: admitida demanda de nulidad

4 Junio de 2013

Por Javier Gaviria BetancurDirector Ejecutivo Asoguayaquil

No es tema local, es tema planetario, en ciertos paises más grave que en otros. Por ejemplo, en el Distrito Federal, capital de la República mejicana se dice que las economías de subsistencia soportadas en el uso intensivo del espacio público son la base del sustento de gran parte de su población, es decir, de millones de seres humanos, que han tornado este en un es-pacio laboral de tiempo completo. Se re-fiere al uso del parque, la plaza, la avenida y el medio de transporte público como espacios tradicionales del comercio.

El historiador Jorge Orlando Melo Gon-zález en su libro “Espacio e historia en Medellín” cuenta que a partir de 1950 empezó a regir un plano regulador, que hizo algunas propuestas radicales, que poco se siguieron, como crear un cin-turón verde en los cerros de la ciudad, que cada plan de desarrollo corre un poco más arriba. Definió “...un centro valioso, lleno de elementos culturales, expandido hasta La Alpujarra...el centro se deterioró por el caos de la circulación vehicular, la congestión y el abandono creciente de los usos institucionales...”

Analistas económicos e investigadores sociales fijan una relación de causa - efec-to entre este creciente fenómeno de inva-

Espacio público y comercio organizadoEL ESTADO DEBE ATENDER LOS DERECHOS DE TODOS

No es tema nuevo, la historia

reconoce cientos de conflictos sociales

y económicos en el uso desordenado

del espacio público, lo nuevo es la

dimensión que hoy ha alcanzado.

sión del espacio público y deterioro de las condiciones de vida y empleo, provocado por la desaparición de las fábricas de la ciudad. Se argumenta que la industria por esto viene perdiendo participación en el Producto Interno Bruto del país, pues en 1996 era el 20% y en 2012 fue del 12%, una reducción de casi a la mitad. Los re-sultados de la industria colombiana en el primer trimestre de 2013 son los más ne-gativos en los últimos 48 meses. La indus-tria textil antioqueña cayó en un 24.6% y la de prendas de vestir y confecciones en 16.4%. Son observaciones para tener en cuenta a la hora de definir estrategias pues, para nosotros, siendo el problema de raices estructurales, al Estado es al que corresponde estampar soluciones en sus Planes de Desarrollo, no cargar a otros sectores productivos peso que no son ca-paces de soportar.

A propósito de estos debates de ciudad, ASOGUAYAQUIL ya ha fijado posición desde hace rato. A principios de este año, recordó que desde la administración de Sergio Naranjo se han expedido decre-tos para reglamentar el uso del espacio público, lo mismo que durante las ad-ministraciones de Juan Gómez y Luis Pérez. Pero la tendencia reguladora fue modificada, y a partir de la administra-ción de Sergio Fajardo, todas, han deci-dido carnetizar masivamente, provocan-do un uso más intensivo y extensivo del

espacio público. Y más recientemente, a propósito de la citación en el Concejo Municipal del debate “Espacio público y temporada decembrina”, expresamos que se debía armonizar la acción de la Alcaldía de manera tal que no se impac-tara negativamente al Comercio estable-cido, formal, que no sólo realiza grandes inversiones en infraestructura, trans-formando positivamente el centro de la ciudad, sino que además crea riqueza productiva y empleo decente, y consti-tuye el sector que más recursos traslada directamente de los establecimientos de comercio a la Tesorería Municipal, con

su pago de los Impuestos de Industria y Comercio y Predial, ¡más aún, mucho más, con el impuesto predial!

Justo es, en consecuencia, reiteramos a través de esta columna de nuestro perió-dico, exigir que la temporada decembrina permita al Comercio formal ejercer ade-cuadamente su actividad, sin obstáculos en el espacio público, que garantice el libre acceso de los ciudadanos de Mede-llín a los locales de quienes desde siem-pre han ajustado su conducta a lo que la página de la Alcaldía enumera: Legalidad, convivencia, seguridad, movilidad.

Gremial

5Junio de 2013

Javier Gaviria Betancur Director Ejecutivo.

En otros términos, el Director Ejecutivo es responsable de cuidar el censo de asociados, generando las condiciones de permanencia de quienes han tomado soberanamente tan importante decisión, estimulando de manera concreta su continuo aporte y par-ticipación; pero, no hay organización que resista el paso del tiempo o que sea capaz de soportar el reto cada vez mayor que se le impone a su existencia a través de miles de decisiones económicas, políticas y sociales, si no se nutre de manera constante y con-sistente con quienes aún no se han asociado y con los nuevos elementos que se incor-poran a la actividad económica comercial. He aquí la primera y principalísima tarea de todo Director Ejecutivo de ASOGUA-YAQUIL, a no ser que renunciemos a la esencia de nuestra organización: entidad gremial de carácter civil, sin ánimo de lu-cro, para la defensa de los derechos de los comerciantes asociados.

Actuando en concordancia con este supe-rior principio parte de las labores de este primer mes han consistido en organizar un equipo, una oficina, un personal y unos instrumentos de trabajo que garanticen la capacidad de crear, desarrollar y ejecutar un PLAN ORGANIZATIVO DE CRECI-MIENTO Y CONSOLIDACIÓN. Digamos que en este sentido más corresponde este tiempo a la elaboración de unas ideas para luego sugerir a los órganos de dirección unos pasos de prospectiva de la Asociación, para una más vigorosa, más consciente, más representativa y más reconocida orga-nización gremial. Aspiramos a convertir a ASOGUAYAQUIL, con todo derecho, en el

www.loschechos.com

nueva estrategiaUn mes en busca de una

Estatutariamente corresponde al Director

Ejecutivo la Representación Legal de la Asociación, así como la función de disponer en cada

momento las tareas que orientan la vida de la Asociación, en armonía con

las decisiones de la Asamblea y de la Junta Directiva, encargo que implica una

actitud protagónica, pues en realidad es quien asume en el día a día, la labor

de ORGANIZAR. Se organiza lo no organizado y se custodia lo

organizado.más importante punto de concentración de los comerciantes del centro de la ciudad.

Anotando pues que esas legítimas ambi-ciones demandan tiempo, esfuerzo, apoyo, conocimiento del sector, aptitud y actitud, es inaplazable ir tejiendo mientras llega el telar. Por ello de manera directa, el Direc-tor Ejecutivo y el personal a su cargo, han atendido todas las solicitudes de acompa-ñamiento que han llegado de los distintos Centros Comerciales, especialmente en los siguientes aspectos: 1. Visitas de la DIAN y de Policía Fiscal y Aduanera. Asunto para el cual hemos solicitado a la Jefe de Fiscali-zación Aduanera, la observancia de las nor-mas del procedimiento y del debido proce-so. 2. Quejas de seguridad, atendidas con personal experto. 3. Quejas por invasión de espacio público y por ruido. Tema que ya tratamos de manera directa durante más de una hora con el Subsecretario de Espacio Público, Doctor Gabriel González, a quien indicamos los sitios más críticos. 4. Quejas por basuras y solicitudes de poda de árbo-les . Tramitadas con la Directora Técnica Operativa de Empresas Varias. Ya hemos recibido llamadas de varios comerciantes quienes reconocen avances en la solución de algunos de estos problemas.

En el proceso de incrementar la presencia de la Asociación hemos hecho presentacio-nes a los comerciantes de Junín con Pichin-cha, de Palacé y de la Avenida Oriental y a los de Cúcuta entre Colombia y Pichincha.

Muy variadas han sido las formas de rela-cionarnos institucionalmente con la Admi-nistración Municipal. Podemos destacar las siguientes: 1. Con la Gerencia del Centro, en cabeza del Doctor Jorge Iván Giraldo, con

quien hemos convenido actividades que pue-den aportar a la mejora de las condiciones de vida empresarial y laboral y en compañía de otras entidades también del centro de la ciudad, como el Hotel Nutibara, el Museo de Antioquia, Corbolivar y Salón Málaga, se han identificado otras acciones más para que esta Gerencia coor-dine recursos de otras Secretarías en este cami-no de tornar más agradable el centro. 2. Con la Subsecretaría de Espacio Público, la Secretaría de Gobierno, otras Secretarías de la Administración Municipal y el Concejo de Mede-llín, se ha creado la Mesa Asesora de Espacio Público, escenario im-portante para debatir tantas in-quietudes que preocupan a los co-merciantes organizados del centro de la ciudad.

Ya hemos dado inicio a esta labor organizativa de los comerciantes de Guayaquil, ya hemos conecta-do nuestro interés al suyo, ya he-mos identificado su fortaleza. Aho-ra debemos diseñar un plan que desarrolle su estrategia y elaborar, para su ejecución, unos ele-mentos de comunicación constante,diaria, con to-dos y cada uno de los comerciantes. Que el comerciante reciba de manera directa y con-creta los beneficios de la ASOCIACIÓN: re-presentación, capacita-ción, formación, infor-mación, integración, orientación, desarrollo. En esto consiste la nue-va estrategia.

Dirección Ejecutiva

6 Junio de 2013

Vieja calle San JuanEras larga y angostaComo una mascota el tanguero de ayerTe mimaba, en las mesas de tus bares y cafésMiles de historias quedaron hechas para el olvidoEl olvido también nos iremos los dosVieja calle San Juan Como un tango.

Vieja calle San JuanAntigua y de siempreTe recuerdo en mis noches buscando un bebéY me acuerdo cuando ibas desnuda de lujuria y placerVieja calle de ayerY ya ves Gozaba como una amplia avenida Como mecha encendida y te saludaba

ReportajeTANGO

COLOMBIANO

Entrevista a Horacio Arbeláez, cantautor de tango colombiano.Por Juan Carlos Sánchez González.

Desde aquel ritmo de esclavos que tra-jeron los negros bantúes hasta nuestra época la historia del tango es muy com-pleja. ¿Cómo entró este ritmo? La Reina Isabel autorizó en 1502 el tráfico de es-clavos y con ellos un ritmo polizón. En el proceso de decantación los argentinos lo reconocen y en realidad tienen razón, ellos lo van a decantar al punto que el tango se vuelve un producto argentino, pero fueron incapaces de borrar la hue-lla de los negros.Se instaura y difunde luego por todo el Río de la Plata, es decir, Uruguay y Argentina, pero en Rosario tiene de-sarrollo especial. Antes de 1917 y por los lados de 1880, el tango se llamó precontursiano, fue el tango de Ángel Villolto, es el tango de la familia Golbi, el que cantó Ramón Ochoa, el Choplo,

DESDE LAS RAÍCES MISMAS DE GUAYAQUIL Y ANTIOQUIA

Una muestra de lo nuestro, de nuestro tango antioqueño,

que hoy por hoy no reconocemos. Con la entrevista

al compositor y cantante Horacio

Arbeláez, se descubre una

intensa historia del tango, de Guayaquil

y la importancia que ha tenido el tango

colombiano.

EL TANGO: EL RITMO POLIZÓN DE LOS BANTÚESincipiente y sin estructura. Es a partir de 1917, con Notas Tristes, primer tango que graba Gardel, que inicia un tango contursiano, que adquiere una estruc-tura, es más rítmico, más cuadrado, más perfeccionado, con unas medidas muy marcadas y presentes en la milonga con un ritmo que va ser 4x8, con unos cam-pases muy marcados, muy precisos, y luego se va llamar poscontursiano.

Sos Mi Tirador Plateado 1912 - Mi Noche triste

1917 como tangoEntre 1910 y 1914 el tango es conoci-do en París, genera toda una historia, fue una época de evolución. Ricardo Guiraldes, autor de Don Segundo Som-bra, fue un bailarín que dio a conocer el tango en Argentina y en estos años tuvo mucho auge. Tras su aceptación se escribió un libro en 1913 que se llamó “El Tango en París”, de Luis Veloso, es decir, los parisinos les devolvieron a los

argentinos el tango como un producto acabado.

La aristocracia antioqueña y el tango colombiano

La historia del tango colombiano se re-monta a 1857 y tuvo origen italiano, es-pañol y francés. En 1900 la aristocracia antioqueña había ido a París y conoció el tango, entre ellos Colorario Amador, el fundador de la Plaza de Mercado en Cis-neros, también fue don Ricardo Olano en 1906 entre otros. Desde 1870 Alva Edison inventó el fonógrafo y por ABC le llegó la música a Alemania, a Londres, a París y le llegó a todas partes, por tanto Medellín ya tenía música grabada, aquella aristocracia la trajo de París y de Argentina. Y es que se inició una época de producción de discos entre los que estaba los de la Orquesta de los Pachos en Argentina. Entre 1905 y 1915 todos los músicos co-lombianos más importantes de la época como Luis A Calvo, José A Morales, Mu-rillo y Cristancho hicieron tangos. Aún

Foto Yimmer Rincón Herrera

Foto Yimmer Rincón Herrera

7Junio de 2013

existen los fonogramas y las partituras, como por ejemplo el tango de Luis A Calvo que se llama “Cecilia”. En 1923 una delegación antioqueña que viajó a Buenos Aires a ver la obra “María” de Jorge Isaacs, además disfrutó de Carlos Gardel y José Rasano quienes les cantaron. Esta fue encabezada por Guillermo Misas Echavarría, uno de los fundadores de la aviación, del teatro Pa-blo Tobón Uribe, del Teatro Junín, del Teatro Circo España y del Club Unión. Y fue uno de los primeros que apren-dió a bailar tango. Esta atención se dio quizá porque Ciro Mendía, el poeta cal-dense, ya escribía sobre el tango y sobre poetas argentinos, nada menos que so-bre Evaristo Carrieto, cosa que llamó la atención a Carlos Gardel.En 1927 Argentina le devuelva la visita a Medellín. Camila Quiroga viene con el trío de guitarras de Peberto, con la misma obra de teatro “María” y otras de Argentina, que se presentaron en el Teatro Bolívar. Peberto ya había hecho el tango, creado varios pasos entre esos la Payanca, y “Dónde Estás Corazón”.Esta es una prueba más de la fuerza que tenía el tango en Medellín que se refuerza con la película “Bajo el Cielo Antioque-ño” de Gonzalo Mejía filmada en 1925, y en la que trabaja un tío de Agustín Jaramillo, el abogado que aparece bailando tango con Berta Hernández de Ospina, ella al parecer fue una de las que hizo parte de la delegación que fue a Argentina.1933 el Caratejo Vélez escribió un tango que se llamó “La De-manda”, es un tango incipien-te, comparado con el argentino tiene las carac-terística de antio-queño, tango simple, sencillo, que no va a tener la fuerza del tango argentino, pero en 1933 y 1934 nos van a visitar el Quinteto Buenos Aires, en 1934 José Borz, aquel que cantó “Farolito”. Cuando llegó Gardel en 1935, ya cono-cía de Colombia, y ya había cantado seis temas colombianos: dos bambucos, “De Perros” y “Me Llama El Vagabundo”,

“Rumores” que tiene un nombre de “Mi Serenata” de Alejandro Flórez el herma-no de Julio Flórez, única serenata que cantó Gardel de toda su discografía en la que aparecen tangos, milongas, vals y sólo una serenata y es colombiana. Tam-bién cantó dos tangos colombianos: “El Truco”, tango que había ganado un con-curso y en 1925 cantó “El Brujo”.Se resalta en esta historia del tango co-lombiano que Tartarín Moreira com-puso dos tangos para Gardel “En la Ca-lle” y “En Son de Campana” con música del maestro Carlos Vieco. Pero para la RCA Víctor se demoraba mucho en la fila Gardel y se lo dieron a Magaldi, y pese a que Magaldi los cantó muy bien, a Tartarín Moreira no le gustó porque había muy mala pronunciación, se le cambiaron algunas letras a los tangos pues por ejemplo la palabra co-ger para los argentinos tiene una connotación sexual, que para nosotros es simplemente recoger.A partir de ahí se hizo tango colombia-no hasta 1955 en cantidades, reconoci-do por glorias del tango argentino como Edmundo Riveros y Carlos Bermúdez, el primero conocido por “Controlbo” vino aquí en el 62, en el 68 para el fes-tival del tango. El segundo vivió aquí y cantó con la orquesta de Pedro Laurel y formaron un grupo que llamaron “Los Cantares del Valle” y cantaron tangos colombianos, entre ellas Carta Infa-

me. Entre los años 50 y 60 José Barros, Ruiz del Castillo, el

mismo maestro Joaquín Mora, acompañaron a

muchos cantores co-lombianos y fue así como salieron tan-gos colombianos como “Mandada”, “Falsaria”, “Canti-nero Sirva Tanda”

y “Tu Recuerdo me Persigue”.

Guayaquil vs el tango en Medellín

De término Quechua: Gua que signi-fica gente, ya: que significa alrededor y quil: que es río. Nuestro Guayaquil significa Gente alrededor del río y Al-pujarra significa Pantano. Algo que casi no se menciona, antes de 1850, Guayaquil era un puerto made-rero ubicado cerca del mismo río, con

una entrada del río madre cerca de tres cuadras y así Medellín solo llegaba has-ta Amador. Aquí se hacía la feria de la fruta y la madera y es por ello que aún se puede ver a Barrio Triste como barrio maderero. La Alpujarra era un pantano y de hecho Alpujarra significa Pantano, pero los grandes industriales lo secaron. Colorario Amador mandó a construir la plaza en 1894, la plaza quedaba ubi-cada junto a la iglesia de La Candela-ria. Para 1900 Guayaquil era un barrio con plaza de mercado, con tranvía, con coches, con carros, con coliseo. Y el proceso de urbanización se dio a partir de 1902 y calle Alhambra se constituye en el centro, en esta vivió hasta 1914 el poeta Carlos Mazo. Guayaquil fue por tanto una ciudad dentro de la ciudad, y la que le dio la vida y la identidad a Me-dellín, porque al desaparecer la plaza de La Candelaria todo se trasladaba a este sector. Para 1927 Medellín tiene más de 230 café y cabarets. En 1942, tenía 480 café y para 1950 tenía más de 1.000.A esta zona fue donde vino el Quinteto de Peberto con tres músicos extraordi-narios, con el tallador argentino Luis

Valiente, con dos guitarristas más, entre ellos Agustín Cornejo, con un bandoneísta de tipo Fachin y con San Bolini que era un violinista argentino.Y en Guayaquil los guitarreros nuestros crearon su propio tango antioqueño, no con la estructura del tango argentino sino con rasgos antioqueños que cuajó en las pensiones, en las cantinas, en los bares y tiendas, tango que pegó demasiado en la clase obrera, en el lumpen, en el comer-ciante, en el negociante, en el mecánico, en el hombre que pobló Medellín y se quedó en Guayaquil, no el que fue para el cam-po, sino el que creó lo urbano. Los fogo-neros, lustrabotas, vendedores de prensa, putas, ladrones, pícaros y maliciosos, toda esa gente del montón, esa gente… pero la idiotez nuestra dejó por fuera el talento colombiano, nos dejó con el tango argen-tino, no tuvimos una actitud crítica, y nos quedamos esclavizados escuchando solo el tango argentino, somos unos acríticos frente al tango porque nos falta una visión de identidad por lo nuestro…

8 Junio de 2013

Página Central

Columnista invitadoPor Reinaldo Spitaletta

1. Preliminares para una breve nostalgia

Las primeras imágenes que tengo de Guayaquil están relacionadas con camiones de escalera, con la luminosidad de las pianolas Wurtlitzer y Seeburg, con unas señoras gordas que espe-raban en las escaleras de las pensiones y con un pandemónium desconcertante en la que yo veía mucha gente grande y casi a ningún niño y me asfixiaba en medio de la algarabía y la confusión. Había avisos de cacharrerías, de agencias de abarrotes, de almacenes de discos, de ventas de guitarras, de bazares y cantinas; y las casas de La Alhambra, esa calle inevitable con evocación morisca, parecían residencias de fantasmas y de desterrados.

A veces me veo cogido de la mano de mamá, que era una señora gorda y rubia, que no es-peraba en las escaleras, sino que iba rá-pido, casi arrastrándome para que yo no me detuviera a mirar

Guayaquil o la algarabía del

Ánima Solaa las damas de labios muy pintados y escotes amplios que entonces a mí me parecían más una carencia en la tela o un defecto de confec-ción que una atracción fatal.Recuerdo el Almacén Sin Nombre –que así se llamaba- y después la fantasía que era entrar a la Plaza de Mercado de Cisneros. Las galerías tenían ellas sí nombres y había un mundo de cosas, olores a legumbres y carnes, a tomates y coles, a maíz trillado y a mil productos más. Mamá, que tenía la extraña capacidad de na-rrar historias, me decía a veces que sobre esos techos hacía muchos años un tipo que viajaba en globo se había desplomado sobre ellos y causado el pánico en la plaza y sus alrededo-res. Se trataba, claro, del célebre Salvita.

Guayaquil tenía todas las atracciones para un chico, porque por ejemplo, en Pichincha, en el almacén Caravana (fundado por Víctor Orre-go), estuvo la primera escalera eléctrica de la ciudad y entonces había que estar ahí, subien-do y bajando. O había que entrar a las cacha-

rrerías, en las que había juguetes y botones, telas y muñecas,

hilos y pedrerías. O em-belesarse en el alma-

cén La Cita lleno de guitarras,

donde a ve-ces entraba

mi abuelo a comprar los encordados para sus instrumentos.

Guayaquil era la reunión del universo todo en unas pocas cuadras. Era la posibilidad de tener todos los paisajes, todos los gritos, las voces, las músicas y la gente de todas partes. Era sentir en directo el pito largo del tren y las bocinas alegres de los camiones (buses) de escalera… Otra imagen que tengo de aquellos tiempos de infancia tiene que ver con el partido entre las selecciones de Colombia y la Unión Soviética, en el Mundial de Chile. Como siempre, mamá estaba comprando verduras y yerbajos en la plaza, y en las radios de algunos puestos se es-cuchaba la narración serena de Jaime Tobón de la Roche. Había hombres con caras tristes que luego iban cambiando en la medida en que Colombia anotaba goles y de pronto toda la plaza estalló en una especie de cataclismo. Mamá, sin embargo, seguía mirando mercan-cías y curioseando entre bultos de bastimentos. ¡Colombia acaba de empatar el partido! ¡Cua-tro a cuatro! Había –digo- una especie de enso-ñación colectiva, pero mamá estaba al margen de aquello. Recuerdo, sí, que alguien dijo que los porteros de ambos equipos eran animales: se trataba de la Araña Negra, Yashin, el ruso, y del Caimán Sánchez, el colombiano. Creo que me empezó en aquella plaza gigantesca, en la que cabían muy cómodas sesenta mil perso-nas, el gusto por ser portero. Después abando-né aquella posición cuando comprobé que era más emocionante hacer goles que evitarlos.

En ese Guayaquil de esos días una vez a mi abuelo materno, un campe-sino de Rionegro, le sacaron la billetera que guardaba en el bolsillo de atrás, le extraje-ron el dinero y le volvie-ron a echar la cartera, ya vacía. Fue entonces cuando supe de los fa-mosos “cosquilleros” o carteristas, los tipos de las manos brujas, los dos dedos que algún tan-go cantaba. El pobre hom-bre no sé cómo consiguió los pasajes para irse hasta Bello, hasta mi casa, en el barrio Manches-ter, donde mamá le escuchó la historia de la cartera no sin carcajearse pero a su vez conmo-verse con la ingenuidad de su padre.

Más adelante volveré con otras evocaciones, como las de cafetines de tango y otros dedica-dos a la música bailable, como el Jai Alai, en

un sótano de Maturín, o para hablar de un barrio que durante muchos años fue el úni-co de la ciudad que tuvo vida nocturna y los borrachitos trasnochados veían salir el sol por entre mostradores y mesas de bar. Guayaquil en cualquier caso es mito y es historia, es la radiografía de las características del antio-queño, nos representa con nuestras almas de prenderos, de cacharreros, de comerciantes, de gentes pujantes con habilidades infinitas para el negocio, o para la estafa, o para buscar riqueza con base en el trabajo o en el hurto, que en Guayaquil todo estaba permitido. Era un lugar de vértigo, un sector de turbulencias, especial para los amores de emergencia, para conseguir desde una aguja hasta un inodoro importado o para sentir que se estaba en un mundo distinto al del resto de la ciudad.

2. De putas, cantantes y algún disparo

Quisiera ahora hacer un corto recorrido his-tórico para ubicar a Guayaquil y relacionar-lo con lo que fue la ciudad a finales del siglo XIX y parte del siglo XX. Precisamente, en el ocaso del Diecinueve la parroquial villa de Medellín iluminaba sus noches no solo con la luz temblorosa de las estrellas, sino con los muy novedosos brillos de las bombillas eléc-tricas, cuando todavía en ciudades de Europa se alumbraban con lamparitas de petróleo y aceite. La bucólica aldeíta iniciaba su despa-cioso despertar de chimeneas fabriles mien-tras –muy febriles- los comerciantes y los prestamistas y los usureros, todos de misa de

seis de la mañana y muy cumplidos en el pago de diezmos se repar-

tían alrededor del parque de Berrío. Todos entonces

demostraban su innato talento para conseguir plata y practicar no-venarios. Tenían ha-bilidad para montar cacharrerías y para re-zar en público. De ese

modo, agitándose de a poquitos, iba creciendo

el arcadiano villorrio, con sus chismes de atrio y su olor

a almacén.

El siglo XX trajo las industrias que transfor-maron el paisaje económico no solo de Mede-llín sino de sus alrededores. Y aparecieron los obreros. Los pitos de las nacientes factorías llamaban con sus cantos de sirena a los mo-radores del campo, que así se urbanizaban. Y advinieron los trenes y los tranvías y los pri-

Foto Yimmer Rincón Herrera

9Junio de 2013

Página Central

Guayaquil o la algarabía del

Ánima Solaun sótano de Maturín, o para hablar de un barrio que durante muchos años fue el úni-co de la ciudad que tuvo vida nocturna y los borrachitos trasnochados veían salir el sol por entre mostradores y mesas de bar. Guayaquil en cualquier caso es mito y es historia, es la radiografía de las características del antio-queño, nos representa con nuestras almas de prenderos, de cacharreros, de comerciantes, de gentes pujantes con habilidades infinitas para el negocio, o para la estafa, o para buscar riqueza con base en el trabajo o en el hurto, que en Guayaquil todo estaba permitido. Era un lugar de vértigo, un sector de turbulencias, especial para los amores de emergencia, para conseguir desde una aguja hasta un inodoro importado o para sentir que se estaba en un mundo distinto al del resto de la ciudad.

2. De putas, cantantes y algún disparo

Quisiera ahora hacer un corto recorrido his-tórico para ubicar a Guayaquil y relacionar-lo con lo que fue la ciudad a finales del siglo XIX y parte del siglo XX. Precisamente, en el ocaso del Diecinueve la parroquial villa de Medellín iluminaba sus noches no solo con la luz temblorosa de las estrellas, sino con los muy novedosos brillos de las bombillas eléc-tricas, cuando todavía en ciudades de Europa se alumbraban con lamparitas de petróleo y aceite. La bucólica aldeíta iniciaba su despa-cioso despertar de chimeneas fabriles mien-tras –muy febriles- los comerciantes y los prestamistas y los usureros, todos de misa de

seis de la mañana y muy cumplidos en el pago de diezmos se repar-

tían alrededor del parque de Berrío. Todos entonces

demostraban su innato talento para conseguir plata y practicar no-venarios. Tenían ha-bilidad para montar cacharrerías y para re-zar en público. De ese

modo, agitándose de a poquitos, iba creciendo

el arcadiano villorrio, con sus chismes de atrio y su olor

a almacén.

El siglo XX trajo las industrias que transfor-maron el paisaje económico no solo de Mede-llín sino de sus alrededores. Y aparecieron los obreros. Los pitos de las nacientes factorías llamaban con sus cantos de sirena a los mo-radores del campo, que así se urbanizaban. Y advinieron los trenes y los tranvías y los pri-

meros carros, y todo ese estropicio del progre-so acabó con el silencio de convento de la Villa. Que en todo caso seguía siendo una aldea más bien apacible. Con decir que en 1914 se co-metieron seis homicidios. Bueno, digamos que esos son los costos que tiene el progreso.El caso es que los aires mo-násticos se fueron trans-formando y aumentaron las tiendas de abarrotes y los bancos, también las iglesias, y ya había poetas que no solo ar-maban vocinglería en el café El Globo sino que escribían buenos versos. Los Panidas estremecían con su canto este aldea de “gente necia y local y chata y roma” en trance de urbe, y cuyo modelo económico excluía, como era obvio, el arte y la literatura, quizá por consi-derarlos rubros muy improductivos y porque en aquellos días no se podían vender novelas en las cacharrerías. Claro que después, sí. Al-gunos se acordarán que en la cacharrería La Campana (en Amador con La Alhambra) ven-dían poesía en unos folletos denominados El Parnaso.

Detrás del humo de las locomotoras arribaron más negociantes y curas; trabajadores y putas, malandros y embaucadores. La romántica dé-cada de los años veinte -también llena de al-cohol y lujuria- trajo cafetines y tertuliaderos. Y llegaron máquinas y libros y pianos y circos y compañías teatrales y modas de muy lejos. Para entonces ya se notaba con mucho ímpetu ese fenómeno surgido en los albores del siglo XX en Medellín, cuando los pelados pasaban con prodigiosa precocidad y sin muchos trau-matismos, del biberón a la copa de aguardien-te; de las canicas y los trompos al indescifrable azar de las barajas; de la escuela a la casa de ci-tas, y por supuesto de las caricias y los mimos de mamá a las más emocionantes sobaditas de las rameras.

Y así, entre ambientes bursátiles y de plaza de mercado, ese pueblo pacato y cristero tam-bién dedicaba parte del reloj a la bohemia y la poesía, al baile y los asuntos secretos de la piel. Para 1920 había en Medellín seis fábricas de tejidos, cinco de cigarros y cigarrillos, tres de fósforos, quince tejares, once trilladoras de café, ocho fábricas de velas y jabones, dos cervecerías y seis fábricas de chocolates. Y al

mismo tiempo la ciudad derivó de las camán-dulas y los telares hacia los tertuliaderos de esquina, a los bares de Guayaquil, a los clubes de sociedad. Y entre ventorrillos de revuelto y prenderías la ciudad fue cambiando su cara de monja, aunque Medellín era entonces y es todavía una ciudad de doble sentido: pagana y religiosa a la vez. En aquellos días más de un feligrés llegó a comulgar con un atroz tufo de aguardiente.

También quisiera referirme muy rápido a otro asunto. La República Liberal que advino en los años treinta marcó asimismo ciertos comportamientos ciudadanos, se rompió un poco la represión religiosa y se le dio rienda suelta a los placeres mundanos. En el puerto

seco de Guayaquil se daba la economía formal mezclada con las rutinas

de los vividores y los tahúres. Y como lo definiera un cro-

nista, este turbulento y llamativo sector llegó a convertirse en una ciu-dad dentro de otra.

En esta parte de la ciu-dad, donde en otros días se movieron más

negocios y cuentas que en Wall Street, había tan-

tos cafés y pensiones como puticas llegadas casi siempre

del campo, muchas de ellas se me-tían a ejercer el oficio apenas recién bajadas del tren. El paisaje de Guayaquil estaba pin-tado de lunfardos, estafadores (aquí nació el paquete chileno), negociantes, buhoneros, carretilleros, prestamistas, guapos, cuchille-ros como el que después crearía Manuel Me-jía Vallejo en su novela Aire de tango; en esa conjunción de asombros y despelotes había vendedores de arepas y natillas, morcilleras, transportadores, importadores, abarroteros, barberos, es decir, Guayaquil era el centro de todos los oficios. Era mucho más que sus ba-res con traganíquel y sus mujeres tristes que esperaban de pie junto a las escaleras de las pensiones.

Guayaquil era una “ciudad” cosmopolita en la que recalaron gentes de todos los confines de Antioquia y Colombia. Era un mundo de alucinación, de voces numerosas, en medio de una plaza de mercado y una estación de trenes. Por sus calles y laberintos era posible hallar a Tartarín Moreira fungiendo de detec-tive o al Ánima Sola, inventada por un cacha-rrero de la ciudad. Con su olor a fritangas y a dinero sudado, era, hasta fines de la década del setenta, el alma de Medellín, un centro de bohemias y negocios, convocador de obreros y campesinos recién “desmusgados” y oloro-sos a tierra de capote. A todos los sedujo Gua-yaco con su música y con sus ritmos. En la muy bulliciosa calle de los Tambores los aires del Caribe y de México soplaron con ardorosa fuerza. Se oían la Sonora Matancera, Charlie Figueroa, Los Panchos, Toña La Negra, Ce-lia Cruz, Leo Marini, Pedro Infante, Agustín Lara, Juan Arvizu y Daniel Santos.

De sus pianolas emanaban rancheras, boleros y guarachas, al tiempo que en otros bares del sector se escuchaban bambucos, pasillos ecua-torianos y por supuesto tangos. Guayaquil era una auténtica babel musical. La canción de Buenos Aires se tornó muy popular por estos lados, hasta el punto de que en ciertos cafés se alumbraba con velitas la sonrisa eterna de Gar-del tal como si se tratara del Corazón de Jesús.

Los bohemios de entonces -bueno, tal vez ya muchos estén “chupando anturio”- recuerdan con particular cariño y con nostalgia cafetines como el Armenonville, el Patio de Tango, el Pigal, el Martini, la Payanca, la Gayola, el Perro Negro y muchos otros.

Quisiera tributarle un breve homenaje a un señor que fue un personaje de la ciudad, el Gordo Aníbal. Él tenía su Patio de Tango en Junín con Amador (ustedes saben que después y por muchos años lo tuvo en el Barrio Antio-quia). Bueno, una noche estaba actuando allí un cantor llamado Guillermo del Coral, que era además un buen imitador de Gardel. En el momento en que interpretaba Volver, un con-currente ebrio y muy emocionado gritó: “¡Ya no necesitamos más a Gardel. Con vos, pibe, tenemos!”. Y entonces desenfundó un revólver y cuando toda la espantada asistencia creía que le iba a disparar al cantante, el hombre baleó un enorme cuadro del Zorzal Criollo. Un tiro atravesó el corazón de papel del artista que de esa manera misteriosa volvía a morir, sí, moría por segunda vez en Medellín. El Gordo Aníbal conservó el cuadro durante muchos años en su Patio del Tango.

Guayaquil, la del mito y la de la historia, conti-núa en el imaginario colectivo, en la memoria de una ciudad de la cual cada uno, cada ciu-dadano, tiene una visión propia. Guayaquil sigue siendo, digamos para mí, aquel universo múltiple, el cielo y la tierra juntos, en el cual una señora gorda y rubia hace muchos años me llevaba de la mano tal vez para que no me perdiera en aquel laberinto de cacharreros, malandrines, putas y poetas. O para que no subiera las escaleras de las pensiones en bús-queda de aventuras. O de la “carne en polvo” que llamó algún poeta guayaquilero.

10 Junio de 2013

Institucional

A trabajar conjuntamente por la sala de recibo de nuestra ciudad.

Jorge iván Giraldo JimenezGerente del Centro

El pasado 29 de abril la alcaldía de Me-dellín presentó, en la Plaza Cisneros, el Programa Bandera “Intervención Integral del Centro” como uno de los instrumen-tos que permitirá sentar las bases sobre las cuales se soportara el centro de ciudad que todos soñamos.

La Gerencia del Centro, adscrita a la Vi-cealcaldia de Gestión Territorial, tiene como tarea articular los diferentes entes centralizados y descentralizados del or-den local, regional y estatal en procura de lograr el objetivo propuesto por el señor alcalde en el Plan de Desarrollo, es así que por medio de un denodado esfuerzo lide-rado por esta Vicealcaldia se logró aglu-tinar los esfuerzos de la institucionalidad en el Plan del Centro cuyos frutos se vie-nen reflejando con la recuperación de la Plaza de Cisneros, el mejoramiento en las pirámides de la Oriental, intervenciones de aseo y ornato en diferentes sectores y controles en la movilidad, espacio públi-co, entre otros. En seguridad, las acciones operativas, las dotaciones tecnológicas y logísticas que desde la Secretaría de Segu-ridad conjuntamente con la Policía Nacio-nal han realizando y vienen desplegando en todo el territorio centro.

La tarea apenas comienza, el compromiso de la Alcaldía es total y permanente, con-tamos con el apoyo constante de nuestro Concejo Municipal, de los gremios co-merciales y empresariales, del sector cul-tural, y académico, del financiero, organi-zaciones comunales, líderes locales y de la ciudadanía en general. Desde esta tribuna es imperioso resaltar que para lograr el objetivo común de mejorar las condicio-nes de legalidad, convivencia, seguridad y movilidad del centro de la ciudad, debe-mos consolidar la dupla institucionalidad y ciudadanía en tal sentido agradecemos el respaldo obtenido e invitamos a seguir apoyando la recuperación de la sala de re-cibo de nuestra ciudad y así entre todos seguir construyendo Medellin, “Un Hogar Para La Vida”.

DESDE LA GERENCIA DEL CENTRO…

Foto Yimmer Rincón Herrera

11Junio de 2013

Opinión

Por Wilmer Edilson Gouque GuarínAsociación de Perfumeros

Es común escuchar en medio de cualquier conversación el pesar que se siente al ir por la calle y ver a tantas personas en la indi-gencia. Basta con parar en algún semá-foro para contemplar la triste realidad de muchos seres humanos que comparten a diario nuestra vida. Siempre me he pre-guntado por qué el mundo es tan desigual y por qué a otras personas les toca una vida más dura. De lo anterior se desprende que muchas personas crean que esta difi-cultad es por falta de interés y de ganas de salir adelante pues todos los seres huma-nos –de proponérnoslo-, somos capaces de superar las contrariedades de la vida. Si bien es cierto que en muchas ocasiones las oportunidades para unos fueron esca-sas, hay un sinnúmero de personas que habiéndose cruzado con la oportunidad y el momento preciso no lo lograron apro-vechar; me refiero yo a los que teniendo todo para ejercer una carrera y tener un trabajo digno y por ende estar acompaña-do de una familia que lo apoye y lo valore ha preferido mejor deambular en las calles soportando inclemencias y necesidades que podría tranquilamente haber evitado. Muchas veces creemos que todo el que está en la calle es persona que ha nacido en la pobreza desde la infancia o que ha nacido drogadicto, pues eso es lo que creemos de todo el que vemos en la calle. La calle al-berga en su seno miles y miles de seres hu-manos provenientes de grandes familias, con carreras prestantes y futuros promiso-

“NO ES FALTA DE INVERSIÓN, SINO UNA ADECUADA INVERSIÓN PARA EL CENTRO”.

Por: Doctor Bernardo Alejandro Guerra HoyosConcejal de Medellín.

En las grandes ciudades los cen-tros siempre se han restaurado, se han remodelado, han mante-nido la dignidad de sus comer-ciantes y de los que en ellos viven, por ejemplo el Times Square de Nueva York que se recuperó con un proceso de vigilancia fuerte, con una patrulla de reacción in-mediata por cada esquina de la manzana, pero esto no sucede en el centro de Medellín, es lamenta-ble el deterioro del mismo que ha llevado a que sean más difíciles las condiciones de sus comerciantes y de sus habitantes.

No se trata sólo de cargas impositi-vas sino del entorno. No es falta de inversión es falta de una adecuada inversión, por ejemplo en materia de seguridad. Por lo anterior, el Concejo de Medellín insistió mu-

La columna del concejal.

cho en que en el Plan de Desarrollo quedara la intervención del centro como un Plan Bandera, el cintu-rón verde no es lo único, al centro de la ciudad se le debe seguir in-virtiendo, no es solo en transporte masivo, nuevas rutas de Metroplus y tranvía, sino el mejoramiento del espacio público, por el bien de los transeúntes y de los comerciantes que pagan impuestos, es necesario entregarles un espacio público de

manera organizada, no a grupos ilegales que no son prenda de ga-rantía para una ciudad innovadora y competitiva a nivel internacional.

Hemos insistido en la necesidad que se declare el distrito cultural, comercial y turístico del centro. Ya existe un estudio hecho por académicos, en el que se muestra la necesidad de un Plan Maestro del centro de la ciudad de Mede-

llín que en su diagnóstico confir-mó que es necesaria la inversión de 1.500 millones de pesos para aplicar y recuperar el centro para el peatón

Dicho estudio estuvo patrocinado por el Museo de Antioquia y fue liderado por Gustavo Restrepo, docente de la UPB, por la Empre-sa de Desarrollo Urbano –EDU- y Planeación Municipal, y define un eje peatonal que iría desde el Tea-tro Pablo Tobón Uribe, baja por

la avenida La Playa, hasta la Plaza Minorista y reactivaría sectores tan importantes como el Hotel Nuti-bara, la Plaza Botero, y el Museo de Antioquia, y que a su vez se co-nectaría con Carabobo. Este plan contempla también reactivar habi-tacionalmente este sector.

Finalmente, para hacer realidad esto se requiere que todos lo ja-lonemos y manejemos el mismo discurso y nuestro accionar debe apuntarle hacia lo mismo.

NUESTRO “AMIGO” EL LICORrios que algún día estuvieron bien. Es por este motivo que he querido compartir con los lectores este artículo. Y no quiero que mi mensaje despierte lástima en ninguno, simplemente quiero hacer una reflexión a todos los seres humanos que podamos evi-tar caer en nuestra vida en desgracia. Es común hoy día –y creo que más común lo era antes-, el que los hombres compar-tieran un trago entre amigos…común era escuchar a nuestras madres decir que los hombres se lo merecían que porque trabajaban muy duro y ese era su descan-so. El papá la mayoría de los días, sobre todo en el fin de semana llegaba borracho, eso sí, por lo menos el mercado lo llevaba a la casa. Hoy ya no son solo los hombres los que parecieran te-ner el “derecho” a des-cansar tomándose un tra-go. Dese un paseo un fin de semana por muchas de las calles de nuestra ciudad y observe cómo en todas partes se consume de manera exagerada li-cor y en muchas ocasiones sus drogas acom-pañantes sin distinción de género ni edad. Lo más triste de esta realidad es que este es el ejemplo que le estamos dando a las próxi-

mas generaciones, pues es muy “normal” para muchos que los jóvenes a temprana edad se inicien en el consumo de licor como la primera droga que prueban; no en vano ocupamos los primeros lugares en el mundo en donde los jóvenes consumen más altas dosis de licor. Que escándalo suscita en la sociedad y en las familias la noticia de que un miembro de ellos consume droga, pero si el joven llega

embriagado no levanta muchas veces ni el más mínimo re-

proche. Comúnmen-te dejamos pasar de

largo la causa y la puerta de entra-da a un mundo miserable como el que describí al principio. Que-rido amigo lec-

tor, una copa de vino no hace daño,

antes hace provecho, pero tómese la botella

entera para que comprue-be que lo que le estoy dicien-

do es verdad. El licor es un enemigo silencioso que nos va embaucando y nos va enterrando cada día más en un abismo del cual quizás nunca podamos escapar. Por citar solo unos ejemplos quiero que pien-sen en las personas que en medio de los tra-

gos se han convertido en asesinos al volante que han acabado la vida de muchos y por ende en una cárcel; pensemos en los matri-monios acabados por causa del licor des-medido, niños abandonados y maltratados en muchos de los casos. Y qué decir de los trabajadores que reciben un sueldo y se lo gastan en un fin de semana sin ni siquiera dejar lo necesario para su sustento…, no piensen que soy amargado o que ya estoy prostático, he querido hacer esta reflexión a mis queridos y apreciados comerciantes y a quien le pueda servir, para que pensemos y tomemos cartas en el asunto y si de pronto estamos equivocados y este mensaje logra tocar el corazón de alguno, y logra hacerlo cambiar de pensamiento, no dejemos que nuestra vida se convierta en una vida per-dida. Dios nos ha dotado de todo para ser felices; cada día nos bendice con una nueva oportunidad. Hagamos de nuestra vida una realidad constructiva, próspera y pujante. Cada día que pasa la vida se nos escapa como el agua entre los dedos, pues cada día que pasa jamás volverá ya que per-tenece al pasado. Compartamos con nues-tras familias, conversemos con nuestros amigos, hagamos deporte, leamos un buen libro, realicemos una obra buena y veremos cómo nuestra vida toma un nuevo sentido que nos brindará más paz y más regocijo. SI EL MISMO LICOR TOMARA, SEGU-RAMENTE YA LO HUBIERA DEJADO.

Reflexiones

12 Junio de 2013

Sector educativo

omar Florez, Decano Facultad Ciencias Económicas, Administrativas y Contables.

El Centro de nuestra ciudad preocupa a diversos sectores de opinión ciudadana y obviamente a las autoridades. La importancia que tiene el centro en todas las ciudades del mundo, por ser referentes urbanísticos, históricos y económicos. Por fortuna se dispone de un plan de “In-tervención Integral del Centro de Medellín”, ampliamen-te discutido por el Concejo de Medellín. Las cifras son elocuentes:1.200.000 personas visitan diariamente el Centro * 300 mil personas trabajan en el Centro * 110 mil personas vi-ven en el centro * 122 mil personas estudian en el Centro * 107 Bienes de Interés Cultural * 22.500 establecimien-tos comerciales * 29 Parques y Plazas * 14 salas abiertas de 21 en Medellín * 12 Teatros * 8 Museos * 5 Bibliotecas * 18 Colegios y Escuelas Públicas * 19 Parroquias* 2.902 venteros/as ambulantes regulados en el Centro, de un total de 8.282 en Medellín * 14 centros comerciales po-pulares * 160 Centros Comerciales *20 clínicas y centros de salud públicos y privados, universidades. Por fortuna se cuenta con un Plan liderado por la Al-caldía, que pretende acciones efectivas que mejoren la calidad de vida de los residentes, seguridad y conviven-cia de residentes, comerciantes y comunidad en general que desarrolla sus actividades cotidianas en el centro de la ciudad, el cual involucra tareas de las secretarías de Gobierno y Derechos Humanos, de Seguridad, de Mo-vilidad y Participación Ciudadana, así como de la Policía Nacional, coordinadas a través de la Gerencia del Centro.La seguridad, sin duda, es un objetivo fundamental. Para

ello los responsables de esta labor disponen de vehícu-los, sistemas de comunicación y el apoyo de las cámaras de vigilancia y seguridad para el desarrollo de sus acti-vidades. La ciudadanía exige más eficiencia de la Policía Nacional en sus diferentes servicios: vigilancia, investi-gación criminal, inteligencia, grupo Infancia y Adoles-cencia, carabineros, Policía Comunitaria, Policía de Tu-rismo, Policía Ambiental y Ecológica, Fuerza de Control Territorial, Policía Fiscal y Aduanera y el Gaula. Se pasó de 13 cuadrantes para labores de vigilancia y control te-rritorial de la Policía a 40 cuadrantes, su labor comple-menta la acción pedagógica y cívica entre la ciudadanía que permita una cultura tipo Metro, en relación con el uso, disfrute y apropiación del espacio público, la movi-lidad de peatones y vehículos. Se precisa de acciones que mejoren la movilidad tanto de vehículos como de los peatones. El control severo a los venteros ambulantes, labores de aseo y ornato; el control a los establecimientos abiertos al público, las sanciones a quienes disponen mal las basuras, y algo muy importan-te: Programas de salud, inclusión y familia a cargo de la Alcaldía con los habitantes de calle. Control estricto a los venteros ambulantes, acompañado de una dignificación de su trabajo logrando su afiliación a la seguridad social; la intervención en viviendas com-partidas -inquilinatos- para mejorar las condiciones de vida y de salubridad de quienes allí habitan.El Centro debe ser un lugar privilegiado para la cultu-ra, pues es sede de importantes organizaciones artísticas y con las cuales el Municipio debe apoyarlas mediante convenios. Con base en los cuadrantes priorizados en el Plan del Centro, a la Alcaldía se le facilita la intervención cultural en cinco sitios claves: Plaza de Cisneros (Parque

de las Luces), Parque de San Antonio, Parque Berrío, Plaza Botero y Parque Bolívar; además de los corredores que vinculan dichos espacios: Carrera Carabobo, Aveni-da Oriental, Avenida San Juan, Carrera Junín y Avenida Primero de Mayo.La recuperación del centro, su control y la creación de una de una cultura ciudadana que contribuya a que sea atractivo para los habitantes de la ciudad y para los tu-ristas, es una causa congregante: Gremios, Cámara de Comercio, instituciones educativas, juntas de acción comunal, medios de comunicación, ONG´s, entre otras instituciones, no solo de las autoridades.Para el éxito de esta acción es muy importante la cola-boración ciudadana que facilite el seguimiento de las actividades, su control, ajuste y medición de los impactos que permitan mejorar la efectividad de las acciones em-prendidas y una mayor coordinación interinstitucional, labor encomendada a la Gerencia del Centro, hoy en ma-nos del Dr. Jorge Iván Giraldo. Con la recuperación del Centro de nuestra ciudad, ga-namos todos, menos los delincuentes y personas anticí-vicas, que nos les duele la ciudad, que no tienen sentido de pertenencia. Además, se dinamizará la economía, se generará mayor empleo y se reorganizará el transporte en este importante sector de la ciudad. Si somos la ciudad más innovadora del mundo, tenemos que ser capaces de recuperar el centro de Medellín, para que sea un atractivo turístico que aumente la autoestima colectiva.*: Exalcalde de Medellín y actual decano de la Facultad de Ciencias Económicas, Administrativas y Contables Cor-poración Universitaria Americana.

EL CENTRO: UN HOGAR PARA LA VIDAPlan de Intervención Integral

del Centro de Medellín

Foto Yimmer Rincón Herrera

13Junio de 2013

Tips Comerciales

Una papelería completamente llena, personas esperando a ser atendidas. Me pregunto ¿me devuelvo o me quedo? Pero al instante una cabeza se asoma por encima del grupo de personas que estaba esperando y me dice: “Muy buenas tardes señor, ¿qué necesita? … dame unos minutos que con mucho gusto ya te atiendo”. Me sentí amarrado y que no me podía devolver pero fue una persona muy activa y sin tener que esperar mucho fui atendido muy amablemente. Salí con una sonrisa y me dije a mí mis-mo: pues con razón se mantiene tan llena esta papelería.Y es que no hay nada más desespe-rante que llegar a negocio, sea cual fuere, y que nadie lo atienda. Cómo lo muestran las cifras, este es el fac-tor más influyente para la pérdida de clientes y ésta a su vez un factor de vital importancia para que un nego-cio se vaya a la quiebra.La calidad en atención al cliente solo se logra con entrenamiento y creando una cultura de Calidad Humana, Motivación y Pensamien-to sistémico. Es por ello que, como propietario o administrador, debe brindar cursos de capacitación en atención al cliente de manera frecuente a todos sus empleados y como empleado estar siempre bus-cando la forma de cualificarse, pre-pararse y mejorar la prestación de su servicio todos los días.No hay empleo que por humilde que sea, podamos mejorar cada día más. Me sorprendió un portero de un edi-ficio con su atención: En mi primera vez, con una amable sonrisa me preguntó: Muy buenos días, ¿cuál es su nombre? … ¿a qué apartamento se dirige? Puedes subir, es muy bienvenido, qué tenga muy buen día don Juan Carlos. Al día siguiente el portero me ve lle-gar es cerca de 25 metros desde abajo a donde se encuentra la portería y cuando llego a ella me dice: Buenos días don Juan Carlos, ya tiene la au-torización para subir, qué tenga muy buen día.Y así sucesivamente una docena de ve-ces que tuve que ir a dicho apartamento. Llama la atención: La sonrisa siempre amplía, sincera y amable.Grabarse el mi nombre y llamarme siempre por él.El destino: no tuvo que volver a preguntar ¿a dónde es que va us-ted? Ya, cuando estaba junto a él tenía la autorización.Los constantes saludos y despedi-das cordiales.Todo estos factores marcaron en él, un humilde portero, la diferencia, en-tre incluso personas de altos cargos.

Jairo Augusto Sánchez GonzálezPsicólogo de la Universidad de Antioquia.

En diferentes conferencias sobre el buen vendedor se suele decir “a todos nos gus-ta comprar pero a nadie nos gusta que nos vendan” ¿qué significa esto? Pues que a los compradores no les gusta que otra persona les diga que es lo que le conviene, que ne-cesita y que le gusta. Pues hay vendedores que se presentan ante el cliente con el pro-ducto milagroso que el comprador necesita y desea sin antes escuchar que demanda el comprador. Lo mínimo que se le puede ofrecer a un cliente para darle un buen servicio (esto significa que la transacción llegue a buen término, es decir que el cliente decida hacer la compra) es darle un buen trato y la in-formación adecuada sobre el producto que desea llevar.El buen trato es fundamental pues con él no solo se pretende lograr la venta, sino además fidelizar y que éste nos recomien-de a otros potenciales clientes, lo que ha de beneficiar a la empresa a largo plazo. Pero el concepto de buen trato es muy general y confuso, así que hagamos una reflexión y definamos más exactamente qué signi-fica el buen trato, pues a la final no todos los clientes pueden ser tratados del mismo modo, pues el temperamento y genotipo de cada cual varia, tanto como las circunstan-cias que se presentan al momento de reali-zar la transacción. El buen trato va más allá de la amabilidad y zalamería del vendedor, es además la es-cucha atenta a la demanda del comprador para comprender que necesita y orientar-lo en la compra. Por ejemplo, en la com-pra de un jabón para la ropa un vendedor puede suponer que el cliente lo necesita para limpiar. Pero tal vez el cliente busca algo que le dé un buen olor a su ropa, que no dañe sus prendas o no las destiña en-tre muchas otras opciones que ofrecen los jabones ahora, de tal manera que el ven-dedor debe estar atento a escuchar y en-tender que es lo que busca el cliente, em-patizar con él, es decir, comprender cuál es su deseo y necesidad de un determinado jabón para que con su conocimiento de su oferta de jabones poder ofrecer el que mejor se acomode al gusto del cliente. La escucha atenta de la necesidad del cliente permite que la gestión de la atención sea flexible para adaptarse a la demanda y de esa forma satisfacer al comprador.

Así que el buen trato se expresa mostrando un verdadero interés por el cliente, que se manifiesta con gestos simples como sonreír, mirar a los ojos, asentir con la cabeza dán-dole a entender que le comprende y le sigue en su conversación, además dando respues-ta oportuna a sus inquietudes y sobre todo mostrándose siempre dispuesto a ayudarlo (este es un punto muy importante, pues si se encuentra, por ejemplo, con que el clien-te pregunta algo que el vendedor no sabe, éste debe ofrecer alternativas de buscar la ayuda adecuada para dar respuesta a la in-quietud y no simplemente cerrar la conver-sación con un “no sé). De esta manera el cliente se sentirá que está siendo escuchado atendido en su necesidad.En cuanto a la información, es de vital im-portancia que el vendedor sepa todo so-bre los productos y servicios que tiene en la tienda, y si no lo sabe por lo menos ser bastante recursivo para buscar y encontrar aquella información que requiere al mo-mento de prestar atención a un cliente. Por supuesto y en con la idea de brindar al cliente un valor agregado por su compra, la información que se le da a éste puede ser solo con respecto a lo que busca y desea en-contrar en el producto, y tal vez al hacer la compra o como refuerzo para garantizarla informarle sobre otras ventajas que obtie-ne con el producto. Con el ejemplo de los jabones, puede que el cliente busque uno que limpie y le dé buen olor a las prendas; en tal caso le brindamos ese jabón con esas características, pero luego se le puede de-cir sobre otras ventajas como que cuida el color y protege las fibras de la ropa, que se-rían otras características que el cliente no esperaba de su compra. En este sentido el cliente sentirá que obtiene algo mucho más valioso de lo que esperaba.Así que el buen trato se refleja en la capa-cidad del vendedor de reconocer la impor-tancia que tiene el cliente para el negocio y, en esa medida, hacérselo saber al mostrarse dispuesto a ayudarlo en encontrar eso que realmente quiere comprar sin que sienta que es acosado por un vendedor zalamero.Claro que la evaluación de un buen servicio es subjetiva y depende de la empresa buscar mantener a sus empleados satisfechos con su labor para que su servicio sea de cali-dad. Esto se logra creando estrategias para mejorar la atención al cliente por medio de encuestas y estudios de mercadeo, capacita-ción entre otros beneficios que ha de brin-dar la empresa a sus clientes internos.

POR QUÉ SE QUIEBRAN LOS NEGOCIOS

Porque se mueren.

1%

Porque se mudan a otra

parte.

3%

Porque se hacen amigos

de otros.

5%

Por la mala calidad de los productos/servicios.

14%

Por la indiferencia y la mala atención del personal de

ventas y servicio, vendedores, supervisores, gerentes, telefonistas, secretarias,

despachantes, repartidores, cobradores y otros en contacto

con los clientes.

68%

Por los precios bajos de la

competencia.

9%

¿Por qué se pierden los clientes?

SERVICIO AL CLIENTE

14 Junio de 2013

15Junio de 2013

REDACCIÓN COMERCIAL

La importancia de expresar con exactitud lo que se desea

Por: Juan Carlos Sánchez González.Comunicador Social Universidad de Antioquia.

Esta columna ha tenido y tiene como objetivo brindar una serie de herramientas para mejorar nuestra comunicación y para obtener mayores éxitos en los negocios, muchos de ellos fracasan por la forma de cómo se escribe y se expresan las propuestas.

En este artículo sólo los invito a reflexionar, en nuestro lenguaje coloquial es frecuente escuchar frases como: “Señor deme una bolsa con leche. Es que la bolsa no es de leche, es de plástico”. La reflexión apunta a que tendemos a pensar que preposiciones tan usadas y necesarias como de, sólo se utiliza para hacer mención al material con que está elaborado un producto, pero resul-ta que esta preposición tiene 27 significados en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, y que hay que analizar, de acuerdo al contexto, cuál es la más precisa.

En el caso de “Bolsa con leche o vaso con agua” la preposición con hace referencia al contenido pero sin importar la cantidad, la bolsa o el vaso pueden tener dos o tres gotas del producto, un poquito o estar casi llena, pero para expresar el contenido total del producto, como en el caso de la leche que

compramos en la tienda la expresión correc-ta es “Bolsa de leche”.

Pese a ser esta una frase muy cotidiana incide en la forma como nos expresamos, delatamos el grado de cultura que tenemos y, en numerosos casos, nuestros interlocutores nos malinterpre-tan porque la frases que usamos no son las ade-cuadas ni las más precisas.

Escribir una carta parece muy simple, pero tiene detalles de gran importancia que inciden en el éxito de la misma, vale la pena analizar la forma cómo se saluda, el cargo de la persona a quien se escribe, los nombres y apellidos completos, la extensión de la carta y las normas técnicas que se siguieron entre otros aspectos que posteriormente podemos analizar.

Ya en esta columna se trató el tema de “Poner y colocar” con el artículo titulado “¿Sólo ponen las gallinas? Coloque Atención Mi Querido Amigo”, y se explicó como la frase “No se dice poner sino colocar, porque solo las gallinas ponen”, es total-mente errónea, si tenemos en cuenta que poner no sólo tiene 44 significados en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española sino que es casi indispensable su uso diario. En la segunda oportunidad trató sobre los errores más frecuen-tes en el uso de los correos electrónicos.

Formúlenos preguntas y háganos recomendaciones porque la redacción es uno de los elementos más muy

importantes en nuestro quehacer comercial.

Correos: asoguayaquil1@gmail.com y sistemapi@gmail.com.

Escríbanos

16 Junio de 2013