Para el estudioso de la creatividad Ken Robinson (2009), el elemento creativo es el valor singular de cada individuo en el que puede explotar su creatividad. Todos podemos hallarlo, no sólo las personas que creemos son ‘creativas por naturaleza’. Para entenderlo, debemos primero de identi�car dos tríadas en la concepción de Robinson: imaginación, creatividad e innovación; y aptitud, habilidad y actitud.

Para Robinson (2017), la imaginación sólo supone traer a la mente aquello que no está en la realidad. Cuando imaginamos lo que haríamos en caso de ganar la lotería, o imaginamos criaturas fantásticas, lo único que hacemos es pensar en aquello que no está en el mundo exterior. La creatividad,

Por otro lado, para el mismo autor (con Lou Aronica, 2013), la aptitud es aquella actividad para la que estamos físicamente o mentalmente posibilitados a hacer. Somos, ciertamente, muy aptos para muchas cosas: saber usar un horno o manejar un auto supone que conocemos el mecanismo para hacerlos funcionar, aunque como bien sabemos, eso no signi�ca que seamos grandes cocineros o corredores de carreras. Así, la habilidad supone tener destreza, gracia

El elemento creativo para Ken Robinson

para Robinson, es lograr materializar la imaginación, es decir, lograr traer de nuestra mente al mundo exterior aquello en lo que estamos pensando, y para ello, hacemos uso de los medios que tenemos a nuestro alcance. La diferencia fundamental entonces, entre alguien con mucha imaginación y alguien que ejerce su creatividad está en el hacer algo con ella. Finalmente, la innovación es la sistematización de la creatividad: encontrar los modos de siempre poder materializar aquello que imaginamos.

y capacidad de llevar a un muy buen término algo para lo que somos aptos. Un chef reconocido mundialmente no sólo es apto para usar los utensilios de cocina (como muchísimas más personas en todo el mundo), sino que también ha desarrollado destreza en su trabajo. Y claro, no sólo ha desarrollado esa habilidad, sino que lo ha hecho por la gran actitud que tiene hacia esa actividad, es decir, el estado afectivo y emocional que lo dispone a disfrutar de esa actividad.

Teniendo en cuenta estas distinciones, podemos caracterizar el elemento creativo para Robinson (2013) como aquella actividad que ejercemos creativamente y en la que tenemos habilidad y actitud positiva (pasión). Es decir, es una actividad que desarrollamos con creatividad pues nos satisface afectiva y emocionalmente, y por la que hemos desarrollado habilidades especí�cas que nos colocan en una posición diferente de quien sólo tiene la aptitud para hacerlas.

Podemos ser muy buenas o buenos en algo, pero si no tenemos la pasión por ello, no estamos en el elemento

creativo. También podemos tener mucha pasión por algo que apenas vamos conociendo o formándonos, pero en lo que aún somos principiantes, así que será

hasta que desarrollemos habilidad para ello que podremos decir que estamos en el elemento creativo.

Referencias

Robinson, Ken. (2009). El elemento. Descubrir tu pasión lo cambia todo. Colección getabstract.

Robinson, Ken & Aronica, Lou. (2013). Finding Your Element. How to Discover Your Talents and Passions and Transform Your Life. Colección getabstract.

Robinson, Ken. (2017). Producto de nuestra mente. La fuerza de ser creativos. Colección getabstract.