PROGRAMA MUNICIPAL DE GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS SÓLIDOS

PMGIRSHONORABLE ALCALDÍA DE TIQUIPAYA

INFORME EJECUTIVO DE CONSULTORÍA:

TASA DE ASEO PARA LA REDUCCIÓN Y EL RECICLAJE EN LA GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS SÓLIDOS DEL MUNICIPIO DE

TIQUIPAYA

Alvaro Erik Martinelly Zeballos

erikmartinelly@gmail.com

Noviembre de 2005

ÍNDICE DE CONTENIDO

1 INTRODUCCIÓN 22 EL CONTEXTO DE LA SITUACIÓN ACTUAL 32.1 La insostenibilidad del sistema 32.2 Las alternativas que brinda el marco legal 32.3 La voluntad política y social para enfrentar el déficit 33 CONDICIONES GENERALES DE UN TARIFARÍO PARA GIRS 43.1 Las condiciones sociales 43.2 Las condiciones ambientales 43.3 Las condiciones Técnicas 43.4 Las condiciones económicas 4

3.4.1 Rentabilidad frente a sostenibilidad 44 ALCANCES Y OBJETIVOS 54.1 Determinación de la perspectiva de la población 54.2 La Voluntad de pago 54.3 La capacidad de pago 54.4 Los requerimientos económicos de la GIRS 54.5 La forma de cobro de la tasa de aseo 55 METODOLOGÍA 65.1 El enfoque utilizado 65.2 El proceso metodológico 6

5.2.1 Pre – diagnostico 65.2.2 Análisis del marco legal tributario nacional 65.2.3 Análisis de la percepción social nacional sobre servicios y tasas 65.2.4 Análisis local de la percepción sobre servicios y tasas 65.2.5 El diseño del estudio de campo 6

6 LOS RESULTADOS DEL TRABAJO DE CAMPO 66.1 El análisis del contexto nacional y local acerca del cobro de tasas 66.2 El marco legal como algo inminente 76.3 La voluntad de pagar con condiciones previas 86.4 Montos de pago sugeridos y capacidad de pago 86.5 Las necesidades financieras de la GIRS en Tiquipaya 86.6 Forma de pago con mayor aceptación 87 ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS 97.1 El circulo vicioso del déficit del servicio 97.2 El desconocimiento de la dimensión de los gastos del servicio de aseo 107.3 Consideraciones a los montos sugeridos para el tarifarío 107.4 La debilidad institucional del municipio 117.5 La necesidad de una tasa orientada a la reducción 118 PROPUESTAS PARA UN TARIFARÍO CON SOSTENIBILIDAD EN TIQUIPAYA 128.1 Participación ciudadana: un plan de información ambiental 128.2 Un diseño de tarifarío decreciente 128.3 El tarifario debe brindar una sólida base financiera 128.4 Las condiciones técnicas de la propuesta de forma de cobro 138.5 El papel ambiental del Tarifarío 139 LAS PROPUESTAS CONCRETAS DE MODALIDADES DE COBRO 139.1 Las alternativas descartadas 13

9.1.1 El cobro indexado al servicio de agua potable 139.1.2 El cobro por el uso de contenedores 149.1.3 El cobro a través de los impuestos de bienes inmuebles 149.1.4 El cobro de “tarifa plana” en el servicio de electricidad 15

9.2 Las alternativas para Tiquipaya 159.2.1 El pago por bolsa con recojo selectivo 149.2.2 El pago junto al servicio eléctrico con categorías y recojo selectivo 15

TASA DE ASEO PARA LA REDUCCIÓN Y EL RECICLAJE EN LA GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS SÓLIDOS DEL MUNICIPIO DE

TIQUIPAYA

1 Introducción

La problemática del deterioro medioambiental es efecto del proceso de intervención humana en el ecosistema natural. Esta situación se agrava en un país como Bolivia donde a la debilidad estatal hay que sumarle las prácticas agresivas con el entorno derivadas de la situación de pobreza generalizada. En este marco se mueve el municipio de Tiquipaya, donde la crisis ambiental afecta a este territorio involucrado socio económicamente en el ámbito metropolitano de la ciudad de Cochabamba.

Uno de los síntomas de la crisis ambiental que atraviesa Tiquipaya es el problema de la basura. La basura o residuo sólido, ha desbordado la capacidad municipal de atención al tema, debido al fuerte incremento poblacional.

El crecimiento poblacional viene aparejado al cambio en la matriz económica y funcional del territorio. Se esta pasando de la agricultura como base económica actividades económicas relacionadas con el comercio y los servicios. El resultado es la modificación en los hábitos de consumo que tienden a generar cada día mayor cantidad de residuos.

Los síntomas más claros de lo descrito son la proliferación de basurales clandestinos en los cursos de agua y lotes baldíos, el aumento de la contaminación del aire por la quema de basura y, en otro nivel, la insatisfacción generalizada de la población, respecto a sus estándares ideales de calidad de vida.

Este panorama es la cuna de una iniciativa ciudadana que logra insertarse en la agenda municipal para solucionar la problemática de la basura: el proyecto GIRS. El proyecto de Gestión Integral de Residuos Sólidos es el primer paso hacia un programa municipal (PMGIRS) que permita responder el reto de brindar un servicio de aseo económica y ambientalmente sostenible. Esta consultoría responde a la necesidad de fijar una tasa de aseo municipal que de base a la reducción de los residuos generados, sirva para promover el aumento del reciclaje y de los ingresos propios que permitan mejorar el precario sistema de recolección de basura que existe en el municipio.

2 El contexto de la situación actual

2.1 La insostenibilidad del sistema

Actualmente el manejo de los residuos sólidos se realiza con fondos municipales sin que la población haga directamente un aporte económico (pagando un tasa) para el funcionamiento del servicio.

Se crea así una situación de iliquidez que a derivado en un servicio que tiene un presupuesto insuficiente. El resultado es una deficiente recolección y disposición final de los residuos sólidos.

La insostenibilidad del sistema se traduce en un déficit económico que se transfiere al presupuesto municipal. Este presupuesto que es desbordado por los pedidos de las OTB, se encuentra imposibilitado de hacer inversiones que permitan mejorar el servicio.

Como ejemplo, se prevé que para atender al número creciente de usuarios y responder a las demandas mínimas de ampliación y mejora del servicio se requieren al menos 400.000 Bs. del presupuesto municipal.

2.2 Las alternativas que brinda el marco legal

Las leyes que regulan los ingresos municipales obligan a cobrar por servicios prestados por la municipalidad que no pueden ser cubiertos por la iniciativa privada y que son de recepción obligatoria1. Estas tasas, por ley, deben fijarse con un estudio previo que justifique su necesidad, dimensión y forma de cobro, estudio a ser aprobado por el Vice Ministerio de Servicios Básicos. Esta consultoría se refiere precisamente a este requisito legal.

2.3 La voluntad política y social para enfrentar el déficit

Para responder a este déficit financiero el Gobierno Municipal toma la iniciativa política de estudiar la implantación de una tasa municipal de aseo que sea un ingreso que permita cubrir (en parte) el sistema de manejo integral de residuos sólidos.

Esta iniciativa tiene su correlato en la voluntad de participación en la solución del problema de la basura que muestran los distintos sectores de la población tiquipayeña. Sin embargo la aplicación de una tasa de aseo implica más variables que las voluntaristas, en un sistema de GIRS se habla de condiciones sociales, económicas, técnicas y ambientales.

1 Véase al respecto la Ley de municipalidades, Ley del medio ambiente. De manera más concreta refiérase al Anteproyecto de Ley de Residuos Sólidos (Disponible en www.sias.gov.bo)

3 Condiciones generales de un Tarifarío para GIRS

3.1 Las condiciones sociales

Las condiciones sociales están regidas por varios principios, el primero es la transparencia en el cobro, que concretamente significa que solo los vecinos que reciben el servicio paguen por el mismo.2 El segundo es que se enmarque en la capacidad de pago que tienen los usuarios, para evitar el rechazo que se podría generar a la aplicación de una tarifa. Y finalmente, el punto más importante, que el servicio por el que se pretende cobrar cubra las expectativas de calidad en cuanto a eficacia y eficiencia para atender a los ciudadanos.

3.2 Las condiciones ambientales

Cualquier tasa por el servicio de aseo debe estar diseñada de manera tal que fomente en la población la necesidad de separar los residuos en origen (vale decir en sus domicilios o negocios) porque al separar la basura esta tiene posibilidades de reciclarse. Pero sobre todo la tasa pretende influir en la reducción en origen colocando un monto económico mayor a aquellos usuarios que generen mayor cantidad de residuos, es decir en justa medida debe pagar más el que más contamina el medio ambiente.

3.3 Las condiciones Técnicas

Este sistema tarifarlo debe ser eficaz y operativo evitando la formación de burocracia innecesaria. Debe Garantizar el mayor cumplimiento posible de la población en el pago del servicio, minimizando el número de usuarios en mora y la evasión en el pago por el servicio de aseo.

3.4 Las condiciones económicas

La principal característica económica es que el sistema de tarifas de aseo debe cubrir, en condiciones ideales, totalmente el costo del servicio de aseo o aproximarse al total del costo global.

3.4.1 Rentabilidad frente a sostenibilidad

En este punto, es preciso aclarar, que la búsqueda de sostenibilidad financiera no redunda automáticamente en la generación de rentabilidad que permita tener excedentes económicos.

La rentabilidad del servicio es una proyección de largo plazo que puede requerir más de una década, haciendo las inversiones necesarias (en educación ambiental, en equipamiento, en plantas de reciclaje), para generar este plus económico.

2 El cobro a través de la electricidad en la ciudad de Cochabamba es un ejemplo de poca transparencia, no se explica porque zonas residenciales utilizan contenedores y camiones recolectores de última generación y las zonas periféricas que tienen un servicio de menor calidad paguen un monto porcentual similar en el consumo de electricidad.

El servicio de aseo como los demás servicios públicos es de obligatoriedad legal para la municipalidad, por lo que no puede tener como objetivo central obtener beneficios económicos sino brindar atención pública.

4 Alcances y objetivos

La presente consultoría parte de la necesidad de cumplir con los estudios necesarios de acuerdo a requerimientos legales para la aplicación de una tasa de aseo.

El objetivo principal del trabajo es identificar un sistema de implantación de tarifas asequible a la voluntad y capacidad de pago de la población.

El alcance de este trabajo se limita a una primera propuesta técnica, que responda a las necesidades financieras del servicio de aseo de la municipalidad de Tiquipaya. Respuesta que debe ser profundizada en una segunda etapa de trabajo.

4.1 Determinación de la perspectiva de la población

El conocer las opiniones de la población y transformar estas opiniones en tres guías de acción: voluntad, capacidad y forma de pago para una tasa de aseo.

4.2 La Voluntad de pago

La voluntad de pago es la actitud que podría asumir la población ante una nueva tasa de servicios básicos que debe pagar cada mes.

Entonces, la pregunta clave es: ¿La población tiene voluntad de pagar?. Y en caso de una respuesta negativa cuales las razones y que acciones tomar para remediar este rechazo.

4.3 La capacidad de pago

La capacidad de pago es la que determinar la carga económica (costo) que pueden pagar los usuarios del servicio.

El nuevo cobro por el manejo de basura, que tiene como antecedente que ha sido gratuita por diez años, lo que puede haber generado una expectativa en los usuarios de que el servicio no cobrará a corto plazo una tasa en el futuro.

4.4 Los requerimientos económicos de la GIRS

La GIRS en Tiquipaya tiene costos de operación3 . Además necesita proyectar costos de inversión que tienen que ser sopesados con la voluntad y capacidad de pago de la población.

4.5 La forma de cobro de la tasa de aseo

3 Para dar un parámetro los montos necesarios para la inversión y funcionamiento de la GIRS en la gestión 2006 son de 900.000 Bs.

Los resultados obtenidos identifican las posibles formas de cobro de la tasa de aseo. Asumiendo la existencia de varias opciones que viene aplicándose en municipios similares a Tiquipaya, se busca encontrar una forma de pago adecuada a la realidad socioeconómica, técnica, ambiental y políticamente aplicable en este municipio.

Metodología

4.6 El enfoque utilizado

El enfoque de análisis relaciona las opiniones y condiciones económicas de la población contrastándolas con los requerimientos sociales, técnicos, económicos y ambientales necesarios para establecer el Programa Municipal de GIRS en Tiquipaya. Es decir, está enfocando la aplicación con un criterio previo.

4.7 El proceso metodológico

4.7.1 Pre – diagnostico

El pre diagnostico ha estado integrado por un conjunto de actividades de observación participante que han dado como resultado la identificación de una posible aceptación a la aplicación de un tarifario para el servicio de aseo.

4.7.2 Análisis del marco legal tributario nacional

El segundo paso consiste en la revisión del marco legal que rige la aplicación de nuevos tributos en forma de impuestos o tasas de aseo. Se ha usado la revisión bibliografíca; como resultado se tiene identificadas las potencialidades y limitaciones que norman las leyes nacionales.

4.7.3 Análisis de la percepción social nacional sobre servicios y tasas

La revisión bibliografíca y hemerográfica recuperando hechos y comparando las experiencias de municipios similares a Tiquipaya. Los resultados generan un conocimiento de la realidad nacional en este tema específico.

Este paso es importante para recuperar el marco mayor en el que la realidad de Tiquipaya se reproduce

4.7.4 Análisis local de la percepción sobre servicios y tasas

A través de la observación participante y la confrontación de lo observado con la realidad nacional permite decir con cierta fiabilidad el estado de aceptación / rechazo y la percepción de la calidad de estos servicios básicos, además de los costos que representan para el ingreso per cápita que tiene la población.

4.7.5 El diseño del estudio de campo

Se ha aplicado un estudio de campo, utilizando una encuesta muestral a informantes clave (dirigentes de OTB). Los resultados se traducen en información estadística y narrativa incluida en el informe base de este documento.

5 Los Resultados del trabajo de campo

5.1 El análisis del contexto nacional y local acerca del cobro de tasas

A nivel nacional el fenómeno más importante relacionado con los cobros por servicios básicos ha sido la “guerra del agua”, fruto de la resistencia de la población al “tarifazo” impulsado por la empresa extranjera Aguas del Tunari. Existen problemas similares de rechazo a los aumentos en las tarifas de la empresa Aguas del Illimani en La Paz y El Alto. A este panorama se suma la “guerra del gas”, que reivindicaba, en uno de sus puntos, el acceso al gas natural más barato que el gas licuado.

En el contexto departamental se encuentra los constantes reclamos vecinales por las altas tasas cobradas por EMSA4 y el mal servicio que presta esta empresa.

En tanto que, Tiquipaya que ha tenido su propia “guerra” del agua, por el proyecto EPSA MACOTI, donde las cooperativas de agua potable se enfrentaron al Gobierno Municipal de turno para evitar la transferencia de sus activos y fuentes de agua a una nueva entidad que debía centralizar el servicio de agua y alcantarillado.

Otro dato, es el enfrentamiento de la Asociación de Regantes con la empresa ELFEC, por el precio del consumo eléctrico de los pozos utilizados para riego.

Ya específicamente sobre los residuos sólidos, el conflicto en Ciudad del Niño5 donde la empresa EMSA empezó a prestar servicios en la década pasada. Pero tuvo que suspender su servicio porque cuando realizo el cobro de una tasa por ELFEC, los vecinos se negaron a pagar. Actualmente el carro basurero de la municipalidad es el que presta un servicio de recolección gratuito en la zona.

De todo lo expuesto se concluye que la población boliviana, cochabambina y en particular la Tiquipayeña tiene una cultura de resistencia a cualquier cobro nuevo (y excesivo) en los servicios básicos. Encontrándose además que el servicio más sensible para la ciudadanía a aumentos tarifarlos es el agua potable.

Por lo que finalmente de realizarse la implementación de una tasa para el servicio de aseo esta debe tomar en cuenta este antecedente.

5.2 El marco legal como algo inminente

Actualmente existen normas legales para la gestión de los residuos sólidos en las leyes de Municipalidades y Medio Ambiente, ambas reconocen la competencia municipal sobre el manejo de los residuos sólidos.

4 Al respecto el periódico Opinión del 9 de noviembre de 2005, se cita un artiu

5 El municipio de Cercado invade territorio municipal a través de EMSA, colocando contenedores a pedido de los vecinos de esta zona. (Fuente entrevista con dirigente de la OTB.) En la misma fecha EMSA registra como límite municipal con Tiquipaya el río Taquiña por lo que ELFEC cobro por dos años a zonas como Chilimarca por un servicio que nunca presto y que dejo una mala experiencia en la memoria colectiva de la zona con las tasas de aseo.?

Este contexto legal pronto se modificará por el Anteproyecto de Ley de Residuos Sólidos (ALRS), basándose en la recientemente publicada Estrategia Nacional de Gestión Integral de Residuos Sólidos (ENGIRS) gestión que viene impulsando el Viceministerio de Servicios Básicos.

El ALRS tiene en su capítulo tercero limita las formas de pago de tasas de aseo a dos modalidades: una junto a los servicios de agua y la otra a través del pago del servicio eléctrico.

Estas formas de cobro no ayudan a la reducción de la basura generada en las viviendas. Por lo que debido a los objetivos ambientales de la GIRS se debe adaptar estas formas sugeridas por la ALRS para la reducción de residuos.

5.3 La voluntad de pagar con condiciones previas

Aunque se tenga este contexto adverso (ausencia de una cultura de pago, de una legislación de un sistema de cobro específico) al parecer la población esta dispuesta a pagar con condicionantes, que se refieren a la mejora (en nuevos carros basureros) y ampliación (en rutas , en frecuencias) del servicio. Estas mejoras deben establecerse paralelamente a la aplicación de la tarifa, lo contrario puede desembocar en un clima de inestabilidad política, debido al posible rechazo de la ciudadanía al nuevo cobro.

5.4 Montos de pago sugeridos y capacidad de pago

De acuerdo a la población los pagos debe realizarse por categorías que sean un reflejo de que a mayor uso del carro basurero (en cantidad de basura y en frecuencia), mayor el importe de económico.

Un monto de pago promedio es de (+/-)5 Bs. mensual, este es el centro a partir del cual a mayor generación de basura mayor pago y menor generación menor pago.

Este monto está dentro de la capacidad de pago de la población que tiene un ingreso mensual promedio de 800 Bs. De este salario promedio, el consumo eléctrico promedio representa 50 Bs. mensuales en la categoría residencial6. Asumiendo que es 5 Bs. el cobro mínimo este representaría el 12.5 % de aumento en la factura de luz.

5.5 Las necesidades financieras de la GIRS en Tiquipaya

A partir del trabajo realizado por el Ing. Mondaca, contabilizando los costos que cubre el municipio por el servicio de aseo se desprende que la tarifa técnica tiene un umbral mínimo de 5 bolivianos y un máximo de 8 Bs.

Debido a la necesidad de diferenciar a los usuarios por categorías de pago aportar información relevante que permita diferenciar entre domicilios.

6 Con datos extraídos de la pagina Web de la Superintendencia de Electricidad.

SERVICIO DE BAJA CALIDAD

NO PAGA POR MAL SERVICIO

MAL SERVICIO POR FALTA DE

PAGO

Con respecto a los comercios e industrias , de acuerdo a las experiencias similares, deben pagar el valor real del servicio o de lo contrario el municipio debe obligar al uso de servicios privados, si es que así lo ve por conveniente.

5.6 Forma de pago con mayor aceptación

La población indica que el cobro anexado a la factura eléctrica es un sistema que permite un bajo nivel de mora debido al mecanismo de presión (corte de luz).

Sobre otras alternativas, el cobro por impuesto predial no es aceptado porque no existe una correlación entre el impuesto y la generación de basura (el caso de los lotes baldíos). Sobre la tasa anexada al servicio de agua potable existe conciencia del elevado nivel de mora que se tiene por el pago de este servicio, que al ser autogestionario no tiene fuerza coactiva de cobro (los cortes de agua se posponen entre vecinos).

6 Análisis de los resultados

6.1 El circulo vicioso del déficit del servicio

El circulo vicioso que atraviesa actualmente el sistema de manejo de la basura, alimenta la baja calidad del servicio (limitada cobertura y baja frecuencia), debido a que no se pueden realizar inversiones que comprometan excesivamente los fondos municipales, si no existe una contraparte económica de los vecinos.

Los vecinos argumentan, a su vez, la necesidad de mejorar la calidad y frecuencia del servicio antes de cualquier cobro. Esto se convierte en un círculo vicioso, que para romperse requiere que el Gobierno municipal tome la iniciativa, invirtiendo en la mejora del servicio antes de implementar una tasa de aseo que reponga la inversión realizada.

Esta inversión por los resultados del “Estudio del servicio de Recolección”7 debe concentrarse en la compra de nuevas unidades de recolección. Justamente las mayores observaciones de la ciudadanía nacen del lamentable estado de los vehículos recolectores, que derivan en una constante necesidad de mantenimiento correctivo que repercute en el incumplimiento de las fechas y horarios en los que los vecinos esperan el servicio.

6.2 El desconocimiento de la dimensión de los gastos del servicio de aseo

La población ignora los costos que representa el servicio de aseo. Muchas veces piensa que este costo debe ser totalmente asumido por el municipio, aunque esta posibilidad no esta respaldada por ley alguna. Lo que si tiene respaldo legal es la posibilidad de realizar un cobro por el servicio, aspecto que debe ser difundido en una campaña informativa.

La realidad cotidiana del usuario es que, solamente, esta en contacto directo con los carros del servicio de recolección, ignorando las etapas de disposición final (la mayoría de la población no sabe donde se ubica el botadero municipal) y los costos que esta última implica.

Este desconocimiento general, repercute en demandas que son económicamente inviables, por ejemplo la dotación de contenedores similares a los de la ciudad de Cochabamba.

Este desconocimiento es el principal problema, para superarlo se debe recurrir a una amplia campaña de educación ambiental (medios de comunicación, puerta a puerta, escuelas, etc.).

6.3 Consideraciones a los montos sugeridos para el tarifario

Los montos sugeridos por los vecinos coinciden con las demandas mínimas de funcionamiento de la GIRS (5 Bs.), sin embargo tienen requisitos previos.

Los requisitos mínimos son identificar las características de la basura de cada usuario para implementar una tarifa en dos secciones:

o Un monto fijo referida a los costos (por ejemplo de disposición final) que deben ser cubiertos por todos lo vecinos.

o La otra parte variable que recarga el cobro de una tarifa alta a los usuarios que mayor cantidad de basura produzcan. Esto obedeciendo al principio ambiental: “el que más contamina paga”, que significa que el usuario que más basura produce debe hacerse responsable económicamente por los costos de evitar que estos residuos sólidos dañen el medio ambiente.

7 Estudio realizado por el Ing. Gonzalo Mondaca en el marco del Proyecto Girs.

De esto se deriva la pregunta clave ¿cuál es el número de usuarios del servicio de recolección? ¿Cómo determinar a que categoría corresponde cada usuario? ¿Cuántas categorías deben haber? ¿A que criterios deben responder las categorías? ¿Cuánto se recaudará mensualmente con la nueva tasa?.

La respuesta a estas preguntas solo pueden responderse (como muestran experiencias similares a Tiquipaya) en la necesidad tener un catastro de usuarios del servicio de recolección. Este catastro debe contemplar los tipos de usuario: residencial, comercial, industrial, etc.; además debe contener información precisa sobre la cantidad y cualidad de los residuos generados por cada vecino.

La información recabada debería, en condiciones ideales, terminar en un Sistema de Información Geográfico (SIG), que ayude a centralizar la información recolectada.

6.4 La debilidad institucional del municipio

El hecho de que el Gobierno Municipal sea el principal ente público comprometido, cuya imagen pública es la confiabilidad en las acciones a realizarse, tiene dificultades propias de las nuevas gestiones municipales.

Justamente una dificultad ha sido que no se ha roto la lógica de enfrentamiento entre las organizaciones sociales y el gobierno municipal, por ejemplo en un seminario reciente8, se pudo observar que no ha existido ,en el imaginario popular, una ruptura entre la forma de hacer y de trabajar de las anteriores y la actual gestión municipal.

Esta imagen debe ser revertida marcando hitos que hablen de “otra cosa” en el manejo de los asuntos públicos, y no necesariamente se habla de obras sino de cambios de actitud en el relacionamiento con el público, en el cambio de actitud laboral de los servidores públicos, en suma cambios de fondo acompañados de efectos simbólicos9

que permitan dar pie a una renovada percepción ciudadana sobre el papel y el trabajo del municipio, además de agilidad administrativa y adecuada planificación, puntos requeridos, en el seminario citado.

6.5 La necesidad de una tasa orientada a la reducción

8 Seminario organizado por el Centro Agua y el proyecto NEGOWAT sobre el avance de la urbanización en terrenos agrícolas llevado adelante en Octubre del presente año en las Cabañas Tolavi.9 Al hablar de efectos simbólicos me refiero específicamente a recuperar los avances de la lógica privada en cuanto al manejo de la imagen institucional, concretamente el uso de uniformes, la obligatoriedad de la solicitud y amabilidad en la atención de los ciudadanos, el uso de los medios de comunicación para informar de estas mejoras. Incluso a modo de reflexión solo decir que en la mayoría de las oficinas municipales no existen espacios destinados a la espera que el ciudadano pueda utilizar para sentarse, tomar un vaso de agua, o distraerse, en suma pequeña cosas que logran un gran impacto psicológico.

Pensar una tasa que no contemple la reducción de la basura que se recoge de domicilios, comercios e industrias puede ser muy contraproducente.

Una tasa optima, que no reduzca la cantidad de basura que cada usuario produce, requeriría gravar con un 18% el consumo de energía eléctrica (el alumbrado público grava un 10%), casi duplicando lo que el ciudadano debe pagar por servicios municipales en una sola factura.

Seguramente este porcentaje sería considerado excesivo por la población y que lo rechazaría y resistiría.

Reducir aporta sustanciales rebajas en los costos del servicio, sobre todo en lo referido a la disposición final. Considerando que el botadero no tiene una vida útil más allá de un año y medio de uso. Que, además, cualquier nuevo sitio para el relleno sanitario municipal (incluyendo Esquilan o Arrumani) tiene una vida útil que depende directamente de la cantidad de residuos que deben ser necesariamente enterrados.

Por estas razones un diseño de tasa que fomente la separación y el reciclaje incidirá directamente en la reducción de la cantidad de residuos irrecuperables que lleguen al botadero municipal, alargando la vida útil de este último y reduciendo los costos de: apertura de nuevos rellenos sanitarios, recolección y reducción en origen (en los domicilios) de la basura generada.

7 Propuestas para un tarifarío con sostenibilidad en Tiquipaya

Lograr implementar un tarifarío que responda a la sostenibilidad (cuyo elemento central es la reducción de residuos y por ende la reducción de costos) requiere de una secuencia de componentes que obedecen no solo a los planteamientos de la GIRS, sino que estén adecuados a la realidad local a través de la recuperación de las reflexiones precedentes.

7.1 Participación ciudadana: un plan de información ambiental

Un elemento de control del sistema de tasas es el componente de educación ambiental, enfocada a informar a la ciudadanía sobre los costos que representa el manejo de los residuos sólidos. El papel que los usuarios deben jugar en un nuevo servicio, un servicio que debe relanzarse (una fase importante es colocar una fecha de relanzamiento y publicitarla masivamente).

Un servicio renovado que tiene la premisa de estar solventado por una “tasa justa”, a menor generación de basura irrecuperable, menor el importe de la tasa (aunque el límite inferior no puede ser menor que el costo mínimo para el funcionamiento de la GIRS).

7.2 Un diseño de tarifarío decreciente

El diseño debe responder a la necesidad de un tarifarío decreciente a mayor separación, reutilización y reciclaje de la población menor la tasa. A menor separación, reutilización y reciclaje le corresponde una mayor tasa.

La forma de determinar estas proporciones de generación no puede ser otra que el pesaje de los residuos irrecuperables al ser recolectados de las viviendas y locales de la población en general.10

7.3 El tarifarío debe brindar una sólida base financiera

Cualquier tasa a aplicarse debe minimamente cubrir los costos del sistema, encontrando un balance entre la capacidad de pago y las necesidades presupuestarias del servicio.

Además debe garantizar un bajo grado de morosidad, como un elemento de estabilidad financiera que posibilite respaldar, por ejemplo, créditos para la inversión en equipamiento que mejore el servicio.

Por último esta tasa, si corresponde, no debe pagar altos costos en caso de utilizarse el servicio de la empresa de electricidad. Se deben negociar mejores términos contractuales que permitan fiscalizar directamente a la empresa encargada del cobro.

7.4 Las condiciones técnicas de la propuesta de forma de cobro

Las condiciones técnicas necesarias pasan por tener un catastro de usuarios centralizado en un banco de datos y un sistema informático especializado (SIG), que permita controlar el ingreso de nuevos usuarios y su empadronamiento constante, debido al elevado crecimiento poblacional (4.11% anual).

Debe además tener un control eficaz, claro y directo de parte de la unidad municipal responsable.

7.5 El papel ambiental del Tarifarío

Este es el papel más importante que debe jugar la tasa diferenciada por cantidad y calidad de los residuos entregados, servir de incentivo directo y no perecedero para la separación, reutilización y reciclaje de todos los residuos recuperables y para reducir la cantidad de residuos irrecuperables.

8 Las propuestas concretas de modalidades de cobro

10 También existen métodos estadísticos que permiten un acercamiento indirecto al volumen generado por ejemplo a mayor consumo de agua, mayor renta per cápita o mayor cantidad de metros cuadrados por vivienda corresponde un mayor porcentaje de producción de residuos domésticos. Sin embargo para conocer estos datos con precisión (sobre todo diferenciar lo recuperable de lo irrecuperable) se requiere un volumen de trabajo similar que, por ejemplo, pesar casa por casa con una romana la cantidad exacta de residuos irrecuperables generados. Para un detalle Vea .Puig Ventosa “Tasas municipales de gestión de residuos para incidir en la reducción y el reciclaje”, Mayo del 2000. (Extraído de Internet)

En este acápite conclusivo se analizarán paso a paso las distintas alternativas de cobro que existen para la tasa de aseo. Se desea primero explicar las alternativas descartadas y las razones de este descarte.

8.1 Las alternativas descartadas

Para descartar una de las alternativas se han tenido en cuenta los factores sociales, económicos, técnicos y ambientales que hacen inviable su adopción.

8.1.1 El cobro indexado al servicio de agua potable

A nivel social este cobro es el más resistido como se ha visto en el acápite destinado al análisis del contexto local y nacional. En términos económicos presenta dificultades debido a que en Tiquipaya no existe una sola entidad prestadora del servicio, sino que son varias cooperativas, que tienen sistemas financieros independientes; pero que al ser organizaciones de vecinos tiene una alta mora en el pago (por ejemplo COAPAT) lo que no garantiza el cobro de la tasa de aseo. Técnicamente este opción se presenta complicada debería implementarse una entidad centralizada de cobro que tuviera capacidad coactiva de cobro (corte de agua), lógicamente esto atraviesa por largas y difíciles negociaciones con cada unos de los comités. Ambientalmente es una alternativa similar en condiciones a la del servicio de energía eléctrica.

8.1.2 El cobro por el uso de contenedores

A nivel social es una alternativa que encuentra alta aceptación; pero representa altas inversiones económicas para el municipio, técnicamente se puede cobrar directamente, aunque no hay forma de obligar a que el usuario pague, o que al no pagar utilice el contenedor de otro vecino que si cumple con sus pagos. A nivel ambiental es una mala opción porque no alienta la reducción, ni la separación, sino la entrega mezclada.

8.1.3 El cobro a través de los impuestos de bienes inmuebles

Esta alternativa (que se ha esta utilizando en el municipio11) a nivel social encuentra rechazo debido a que incrementa los impuestos a pagarse; técnicamente tiene la ventaja que ya existe un sistema en funcionamiento que puede ser aprovechado; económicamente es inviable porque tiene un alto índice de mora lo que no permitiría hacer inversiones en el servicio y por último ambientalmente no es útil para influir en la separación y en la reducción de los residuos.

8.1.4 El pago por bolsa con recojo selectivo

El proceso mecánico, si este sistema es aprobado en el Gobierno municipal es el que se detalla en los siguientes puntos:

Se realiza una campaña de educación ambiental haciendo hincapié en que la bolsa a entregarse solo debe utilizarse para residuos irrecuperables (pañales de bebe, bolsas sucias), y que el resto de los residuos debe separarse en un tacho de plástico para los residuos orgánicos (cáscaras, restos de comida, tierra, huesos) y en otro tacho lo inorgánico (plástico, vidrio, metal, papel).

Solamente se cobra por los residuos irrecuperables. El resto se recoge en el camión y se lleva lo orgánico a la compostera municipal y lo inorgánico al centro de acopio en el parque Kjora.

Debe existir un supervisor en el camión encargado de la venta de bolsas y el control de la entrega separada a los operarios de carro selector12.

Este sistema es rápidamente aplicable previa campaña de educación ambiental y es independiente de otros servicios.

La principal debilidad de esta opción para la tasa de aseo es su recaudación económica es limitada y sensible al fraude de los vecinos reticentes a pagar por el servicio.

11 Se cobra 2 Bs. por cada trámite que realiza un ciudadano en la municipalidad.12 Se propone este Neologismo para diferenciarlo de los carros recolectores.

A nivel social este sistema es nuevo y requiere una mayor preparación de la población a través de la educación ambiental. Económicamente ofrece un sistema de pago claro y eficaz (aunque probablemente alguna gente bote al río o queme para evadir el pago), sin embargo su recaudación no se acerca a la que se puede obtener a través del servicio de energía eléctrica. Técnicamente requiere la puesta en funcionamiento de una flota de camiones para recogida selectiva. A nivel ambiental es el mejor sistema para fomentar la reducción y la separación de residuos.

8.1.5 El cobro de “tarifa plana” en el servicio de electricidad

Esta modalidad que se aplica en las ciudades de Cochabamba, Santa Cruz y La Paz presenta a nivel social su principal debilidad el cobro no tiene relación con la cantidad de basura generada (un porcentaje fijo del consumo eléctrico), existen fuertes críticas de lugares que tienen un alto consumo de energía eléctrica pero pocos residuos (el mejor ejemplo un aserradero) y otros que tienen gran producción de residuos, pero un bajo consumo eléctrico (almacenes y restaurantes) por lo que es inequitativa.

A nivel técnico es de fácil aplicación, pero no todos los usuarios del servicio eléctrico son usuarios del servicio de aseo por lo que se realizan cobros injustos; a nivel económico es un sistema óptimo que solo presenta la dificultad de fiscalizar el trabajo de ELFEC, problema que es común en Santa Cruz con la CRE. A nivel ambiental es tal vez la peor opción no solo que no genera actitudes tendientes a la separación y la reducción, sino que al ser inequitativo e injusto crea una pésima imagen del servicio.

8.2 Las alternativas para Tiquipaya

Como toda forma de pago las dos alternativas que se han seleccionado tienen factores positivos y negativos que deben ser analizados. No existe una alternativa perfecta, por lo que ambas deben ser tomadas en cuenta con seriedad y cautela.

8.2.1 El pago junto al servicio eléctrico con categorías y recojo selectivo

Esta propuesta contempla dos tiempos uno a corto plazo (1 a 3 años) y otro a mediano a plazo (De 3 a 6 años). Por lo que se propone la aplicación del esta tasa de aseo en dos fases:

PRIMERA FASE (2006-2008)

El proceso mecánico de este cobro se detalla a continuación:

I. Primero se requiere la elaboración de una campaña de educación ambiental para concienciar a la población de la necesidad de pagar por el servicio. Esta campaña debe capacitar a los usuarios en la separación de la basura en sus casas para que la entreguen separada al carro selector.

II. Se requiere la compra de unidades de carros selectores que permitan la recogida selectiva. Esta compra se pagará con los fondos recaudados por la tasa.

III. Se debe contratar microempresas que amplíen el servicio de recolección a todas las OTB de los 3 distritos del valle.

IV. En tercer lugar se aplica una tasa fija mínima de 5 Bs. (previa Ordenanza remitida para su aprobación al Senado Nacional) junto al servicio de energía eléctrica y paralelamente se pone en funcionamiento nuevos carros basureros.

V. El recojo de basura se realizará puerta por puerta porque esta demostrado (experiencia en España) que esta facilidad para la entrega de basura eleva la separación de los residuos en las viviendas, habilitando la posibilidad de reciclar esta basura.

VI. Se procederá en el año 2006 a identificar zonas por la calidad de las viviendas para elaborar una primera categorización a aplicarse en el 2007 a 2008.

SEGUNDA FASE – PROPUESTA PRELIMINAR (2009-2012)

I. Debe ejecutarse un catastro de usuarios (paralelo al catastro municipal) que brinde información espacial (mapas) de la cantidad total de usuarios cantidad (peso, volumen) y calidad de la basura generada.

II. La tasa a cobrarse deberá tener un monto fijo y otro variable. El monto fijo se cobra a todos los usuarios y el monto variable se aumenta o disminuye de acuerdo al volumen y peso de los residuos irrecuperables de cada usuario. Estas categoría requieren un diseño final que requiere un estudio de factibilidad.

III. Se debe evaluar el desempeño del cobro junto al servicio eléctrico para recomendar su continuidad o la búsqueda de otro sistema.

A nivel social este sistema introduce la claridad y equidad en su cobro la población apreciará el hecho de que se cobre solo por lo que se tiene que enterrar y no así por lo recuperable. Técnicamente es el sistema más complejo, y esa es su principal dificultad , sin embargo de tener éxito en su aplicación puede significar para Tiquipaya el ser un hito a nivel nacional y latinoamericano; a nivel económico representa ingresos que provienen no solo de la tasa sino de la venta de los residuos orgánicos como abono y la recuperación de material inorgánico, no alcanza las recaudaciones de la “tarifa plana” ; pero cubre el servicio, a nivel ambiental es una alternativa positiva para la separación y reutilización de residuos influyendo también en la reducción de la basura que debe ser enterrada.