Edita HOAC - Nº 150 - DICIEMBRE 2013 - III ª Época - 0,60 ! - Suscripción anual: 6 !

Muerte en la minaLas limpiadoras

de Cádiz no se rinden

El reto sigue siendo laCooperación IntegralEl reto sigue siendo laCooperación Integral

NNNN o nos alegramos de la desaparición de Fagor. Alcontrario, nos duele porque entendemos que elcooperativismo actual, con sus limitaciones, es

parte de la mejor tradición del movimiento obrero y de suinteracción con el humanismo cristiano. Guillermo Roviro-sa, primer militante y fundador de la HOAC, apostó por la«Cooperación Integral» (COPIN), un proyecto con muchascoincidencias con las casas del movimiento católico de tra-bajadores norteamericanos fundadas por Dorothy Daydedicadas al «culto, cultura y cultivo» o la Economía deComunión de los focolares, por citar ejemplos de hoy.

Creemos en la vigencia de la propuesta COPIN, que no es «unmovimiento, ni una organización, ni un método, ni nada similar,sino un esfuerzo por ayudarnos mutuamente a purificar nuestrocristianismo en el terreno económico». No aspiramos a modifi-car las condiciones en que se realiza «la lucha por la existencia»,para beneficio de un determinado grupo de intereses, sino quesoñamos con llegar a la «colaboración por la existencia» y des-terrar la instrumentalización de las relaciones humanas, que nospermita satisfacer la sed de trascendencia, el ejercicio pleno dela vocación profesional y el respeto a la propiedad personal, rec-tamente entendida, de todas las personas, sin exclusión.

aaaa ssss íííí llll oooo vvvv eeee mmmm oooo ssss

2

EE l 26 de diciembre de2011 las limpiado-ras decidieron, des-

pués de muchas protestas, iral pleno municipal paramostrar su enfado porqueno habían cobrado ni lapaga del mes ni la extra. Laalcaldesa, Teófila Martínez,ordenó su desalojo delpleno y la policía local cum-plió esa orden, al grito, se-gún una testigo, de «¡A porellas!». Agentes y limpiado-ras acabaron denunciándosemutuamente por los alterca-dos. En el juicio de faltas ce-lebrado hace ahora un año,la justicia se inclinó a favorde la versión de los policíasy las limpiadoras fueroncondenadas.

Las trabajadoras pertene-cen a la empresa Limasa,cuyos directivos, a su vez,justificaban el impago y losretrasos de las nóminas porla demora del Ayunta-miento en pagar las cantida-des acordadas. Entre las tra-bajadoras sancionadas, seencuentran una militante dela HOAC, Toñi Guardado,una antigua militante, AnaCamelo, y una simpatizante,Elvira Gil. «Estamos indig-nadas al ver que los del casoMalaya, por poner un ejem-plo, se van casi de rositas y a

nosotras, madres de familiaque nos levantamos a la seisde la mañana para ganar700 u 800 euros, nos tratancomo delincuentes por pe-dir simplemente lo que esnuestro», explica Guardado.

Las asalariadas condena-das, decidieron cumplir unode los dos días «de localiza-ción permanente» decre-tado por la Justicia reunidasen la sede de la asociaciónde vecinos María Auxilia-dora del barrio Trille (elotro, lo pasaron en sus casasesperando la visita del per-sonal del juzgado encargadode supervisar el cumpli-miento del arresto). El obje-tivo era protestar pública-mente ante lo que

consideran una injusticia,fortalecer los vínculos entrelas luchadoras y recibir lasadhesiones de otros colecti-vos solidarios con su causa.«Este arresto lo vamos acumplir y toda España nostiene que oír», coreaban laslimpiadoras que agradecie-ron las numerosas muestrasde apoyo: desde la Federa-ción Local de AMPAS a laHOAC, pasando por laAsamblea San Mateo 15-My Palillero 15-M, PSOE,IU, Autonomía Obrera, Iz-quierda Anticapitalista y elcolectivo de trabajadoresdel Metal. Guardado insiste:«cuando hay que estar en lalucha hay que estar».

José Luis Palacios

la calle

Arresto por exigirel salario debido

Quiénes hacemos el ¡Tú!Coordina: Mª Dolores Medina

Colaboran: Roge Torres, A. A. Maestre, Francisco Porcar, José Luis Palacios, Cristina López, Gregorio Burgos, Antonio Hernández y Chipola.El ¡Tú! se imprime en papel couché de 100 gr/m2, ecológico, 100% libre de cloro y de otros compuestos sulfurosos.

Nuestra dirección: Periódico ¡Tú!, Alfonso XI, 4 -4º, 28014 Madrid, y nuestros teléfonos son: 91 701 40 80, y 91 522 74 03 (fax)Edita: Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC). Depósito legal: M.40919–1996

La tirada de este número ha sido de 10.000 ejemplares.

SS u mirada es la miradaque traspasa la reali-dad para ver más allá.

Juani, rodeada de policías yde funcionarios del juzgado,es capaz de sentir al Dios delos pobres en este intento,una vez más, de resistenciaante un desalojo. No la mue-ven ni sus ideas, ni el afecto auna familia a la que no cono-ce, ni sus opciones políticas…Todo ello siempre viene des-pués. A ella la conmueve,como fuerza original, el Diosque la habita. Mano conmano con las víctimas afecta-das, con los vecinos indigna-dos, con los militantes deStop-desahucios de los queforma parte… Juani experi-menta que es Cristo quienaprieta las suyas. Siente ra-bia, la rabia del Dios compa-sivo que escucha el grito delas familias desahuciadas y laenvía, junto a otros, a su libe-ración. Ella, a sus años, sabede la cruz y de los sinsaboresdel compromiso. Pero aquíestá, con un nudo en la gar-ganta, revelando al Dios delos desahuciados. Este día, eldesalojo se evita. Pero solopor ahora.

Teresa Jiménez Zamorano

El grito de losdesahuciados

Exigir el cobro del salario debido les ha valido dos días de arresto y una multade 30 euros a las trabajadoras de la empresa Limasa, una contrata del ayun-tamiento de Cádiz encargada de la limpieza de los colegios públicos y otrasdependencias municipales.

con Diosen la vida obrera

EE l socialismo surge como un proyec-to ético-moral contra la degrada-

ción humana que el capitalismo inci-piente estaba provocando. Hombres ymujeres enamorados de un ideal, lo con-vierten en un proyecto de vida, que irra-dia justicia, libertad y dignidad en el pe-queño mundo en el que viven; y en unproyecto político para gobernar.

El carácter ético-moral del plantea-miento une indisolublemente proyectode vida y proyecto político. La acciónpolítica descansa en militantes que yaviven el socialismo. El proyecto de vidasocialista descansa en una acción políti-ca que anticipa una nueva sociedad. Asíbrota la coherencia entre ideal y vida, yde ella surge el testimonio que interpelae invita al cambio personal y social.Cuando esto ha sido así, ha producidofrutos de esperanza. Cuando se ha trai-

cionado nos ha dejado páginas tristes dela historia.

La situación actual es distinta y preci-sa una nueva definición del proyectopersonal y del proyecto político adapta-dos a los tiempos que vivimos. No es via-ble construir una alternativa socialistasin proyecto político, sin proyecto perso-

nal, o sin los dos. Cuando esto ocurre, enel mejor de los casos, el discurso socia-lista se concreta en políticas neolibera-les; y el proyecto de vida socialista dejaen pañales al de los antiguos señoritosandaluces.

La solución no es hacer un programapolítico para ganar unas elecciones, seexige un nuevo proyecto ético-moralcentrado en los empobrecidos (la O deobrero), que destierre la mentira, la co-rrupción, la doble moral, el oportunis-mo, el arrivismo y todos los ismos pro-vocados por la ruptura entre el proyectopersonal y el político.

Es posible que la última conferenciapolítica del PSOE haya seguido empe-ñada en un imposible: hacer socialismosin socialistas.

A.A. Maestre

¿Socialismo sin socialistas?

AA finales del pasado mes de septiembre, el PapaFrancisco tuvo un encuentro con el mundo deltrabajo en la ciudad italiana de Cagliari, muy cas-

tigada por el paro.Allí dijo: «Dios quiso que en el centro delmundo no hubiera un ídolo, sino el hombre y la mujer, paraque saquen adelante, con su trabajo, el mundo. Pero ahora,en este sistema sin ética, en el centro hay un ídolo, y el mun-do se ha convertido en idólatra de este “dios-dinero”. ¡Man-da el dinero! Mandan todas las cosasque le sirven a él, a este ídolo».

En el funcionamiento de nuestraeconomía la persona no es lo primero,en el trabajo la persona no es lo pri-mero. Su lugar lo ha ocupado el ídolode la rentabilidad. Los trabajadores ytrabajadoras han sido convertidos eninstrumentos de un ídolo que exigesacrificios humanos, en víctimas de unídolo de muerte. Todo lo que no seareconocer que la persona debe sersiempre lo primero, es un camino de muerte. El ídolo deldinero niega a la persona y a Dios, que son la vida. Eso eslo que nos pasa y eso es lo que hemos de cambiar.

Nuestro mundo está lleno de ejemplos de lo que esto sig-nifica.Vamos a fijarnos en lo que ocurre con la producciónde artículos de consumo tan corriente como la ropa o los

aparatos electrónicos (ordenadores, móviles…), comoocurre con otros muchos.

Gran parte de la ropa que se consume en el mundo seproduce, en particular para las grandes marcas, en fábricascomo las de, por ejemplo, Camboya. Allí es frecuente quelos trabajadores y trabajadoras se desmayen en sus pues-tos de trabajo, porque se les obliga a hacer jornadas inter-minables, en lugares con mala ventilación y altas tempera-

turas, expuestos a productos tóxicos, y,sobre todo, cobrando sueldos tan mise-rables que no les permiten ni alimentar-se adecuadamente.

Lo mismo ocurre con gran parte de losproductos electrónicos de consumo ma-sivo y que venden las grandes marcas. Seproducen en países como, por ejemplo,China, en fábricas donde trabajadores ytrabajadoras están sometidos a ritmosde producción infernales, en jornadaslarguísimas, a veces siete días a la sema-

na, expuestos a productos químicos sin protección adecua-da, con salarios miserables, viviendo muchas veces hacina-dos en los mismos polígonos industriales donde trabajan.

Así se gana dinero, a costa de la vida de las personas.

Francisco Porcar

3

política en zapatillas

cultura

UUUUnnnn ííííddddoooolllloooo ddddeeee mmmmuuuueeeerrrr tttteeee

EE l 28 de octubre unafuga de grisú mató porintoxicación a seis mi-

neros y dejó heridos a otroscinco en el Pozo Emilio delValle, de la empresa HulleroVasco-Leonesa propiedad dela familia del Valle, en la loca-lidad de Santa Lucía, en elmunicipio leonés de Pola deGordón.

Se llamaban Carlos, Ma-nuel, Antonio, Orlando, JoséLuis y Roberto. Uno de losmineros con más experiencia,con lágrimas en los ojos, ycon el rostro encendido defuria clamaba: «hay que des-montar el mito de que esto escasual, imprevisible, malasuerte, que la mina tiene queser un matadero de gente.Hay una relación muy directacon los recortes que el Minis-terio ha aplicado en las cuen-cas mineras, y ahora vienen ala foto. Hay que decirle al PPque hay una relación directaentre los recortes en seguri-dad y las muertes de los mi-neros. Que las empresas, si las

recortas, recortan en seguri-dad, porque ellas van al bene-ficio, están a sacar carbón. Esalgo que todos sabemos. Yahabía reventado el gas, habíaestallado un tapón de seguri-dad que se había hecho y

todo sigue igual, exigiéndo-nos que entremos una y otravez, porque hay que aumen-tar los márgenes de producti-vidad para competir en esemercado de la precariedad yla inseguridad con que obli-

gan a trabajar en Indonesia oen Sudáfrica».

Eran los propios minerosquienes recordaban que hacíados meses la empresa habíaechado a dos ingenieros deseguridad por oponerse a laspolíticas de seguridad de laempresa, no avalando las ac-tuaciones que se iban a hacer.La empresa se limitó a susti-tuirles por otros ingenieros«menos díscolos».

Iba a pasar

Sabían que tarde o tempranoiba a pasar. Decía otro de losmineros, recordando un dichode su padre: «Cada medida deseguridad es una bola blanca,que se mete en una bolsa don-de hay una bola negra. Si metesun millón de bolas blancas enla bolsa tienes muchas posibili-dades de que no salga la bolanegra. Pero si recortas, es decir,si sacas millones de bolas blan-cas cada día tienes más proba-bilidades de que salga la negra.Y esto es lo que ha pasado».

Los recortes y las nuevas prioridades en la lucha contralas familias trabajadoras de nuestro país. La minería leola loca carrera por abaratar los costes sigue resultando

la ventana del mes

4

Dejarse la vida en el trabajo

En los seis primeros meses de este año a punto de finalizar, seregistraron 260 accidentes mortales. En todo el año 2012, la ac-tual organización del trabajo se llevó por delante a 555 asalaria-dos (444, durante la jornada de trabajo y los 111 restantes, en eltrayecto de casa al trabajo y viceversa). Los accidentes mortaleshan descendido, es cierto. En gran medida, debido a la bajada dela actividad económica (con menos gente trabajando, menor nú-mero de accidentes).

Un estudio del sindicato CC.OO., con más de 2.500 encuestasentre delegados de prevención de Andalucía y desarrollado encolaboración con la Universidad de Huelva, muestra que sietede cada 10 personas percibe un empeoramiento de su salud trasla aprobación de la reforma laboral y el 50,2% de los encuesta-dos muestra miedo por la posible pérdida de su empleo.

«Uno de los hechos que nos ha llamado la atención es eldescenso de casi el 20% en la notificación de accidentes labo-rales leves en 2012, pero es porque se está dando un presen-tismo muy fuerte en las empresas: la gente acude a trabajar es-tando enferma, máxime cuando la reforma laboral admite eldespido incluso con bajas justificadas», expone la secretariade Salud Laboral y Medio Ambiente de CC.OO. de Andalu-cía, Nuria Martínez Barco.

«Debemos mejorar en materias como la reducción de la si-niestralidad, que se podrá conseguir cuando actúen de formaconjunta los trabajadores, los empresarios y las administracio-nes. En general debemos desarrollar una cultura de preven-ción, o como dicen en Europa, una cultura de bienestar labo-ral», apunta el presidente de la Asociación Andaluza deTécnicos en Prevención de Riesgos Laborales (ASTEP), An-tonio Pérez Chacón. La vida de un trabajador vale siempremás que la cuenta de resultados de una empresa.

El malestar laboral

Cuando nos preguntamos qué pone en juego cada uno enla empresa suena a broma de mal gusto pensar que es elpropietario el que corre con más riesgo. Máxime en gran-des empresas donde los dueños son anónimos e invierten ydesinvierten según el olor de los beneficios.A lo peor pier-den dinero –casi nunca todo su dinero–. Pero el llanto y lamuerte en el pozo Emilio del Valle en Llombera de Gor-dón, nos habla de cómo siguen siendo los hombres y muje-res del trabajo los que más se juegan por menos. Son sus vi-das, su salud, sus familias, su futuro… Mucho tienen quecambiar las cosas para que el trabajo sea para la vida. Ymucho tiene que cambiar nuestra sociedad para que se or-ganice respetando la dignidad humana. ¡Descansen en paz!

Teresa Jiménez Zamorano

desde el otro lado

Seis mineros muertos

Pero la responsabilidad escompartida con los responsa-bles políticos que desde juliode 2010 no habían vuelto areunir la comisión de seguri-dad minera, donde se anali-zan los accidentes de seguri-dad grave, para ver quéresponsabilidades hay y cómoprevenirlos, para que no sevuelvan a producir.

Uno de los mineros queperteneció a ella recordabaque en esa comisión ni siquie-ra se habían abordado, en es-tos más de tres años, tres acci-dentes mortales. Uno enPalencia, otro en Bembibre yel tercero en el Pozo de SantaCruz. Ahora son nueve. Ade-más de bastantes accidentesgraves. «Tres muertes en tresaños y ni dios se ha dignadoen convocar esas reuniones, apesar de que los sindicatos es-tán hartos de ir incluso a lacomisión nacional a reclamar-los», clamaba uno de los mi-neros.

Dejadez mortal

Esa dejadez de la adminis-tración, de no darle importan-cia a la seguridad, a la preven-ción, a analizar por qué se

producen esos accidentes, estambién responsable de estatragedia. Porque son trabaja-dores. Nadie va a trabajarpara arriesgar la vida como sila mina fuera una ruleta rusa.

Por eso las mujeres del car-bón increpaban al MinistroJosé Manuel Soria, por acer-carse en un viaje relámpago aLeón, «sin dar la cara», y des-pués de un año y medio recla-mando su presencia en lascuencas mineras.

Al igual que denuncian elpésame de la vicepresidentadel Gobierno, Soraya Sáenzde Santamaría, mientras apli-ca los recortes que cuestan lasvidas de sus maridos y com-pañeros.

Y reprochaban a la presi-denta de la Diputación deLeón, Isabel Carrasco, la delos múltiples sueldos, que nohubiera pasado a ver a los en-cerrados cuando estuvieronen el Palacio de los Guzma-nes reclamando sus derechosy el mantenimiento del traba-jo en la cuenca minera, mien-tras ahora convocaba unaconcentración de apoyo.

Enrique J. Díaz Gutiérrezes profesor de

la Universidad de León

5

a la crisis están incidiendo, y mucho, en el bienestar deonesa se ha cobrado seis vidas. En el resto del mundo,

o mortal para la población asalariada.

Días después del accidente en la minería leonesa, desde laIndia llegó la noticia de que el incendio en una fábrica detextil, más precisamente de bolsos de cuero, en el centro dela capital india de Nueva Delhi, en el área de New RanjitNagar, se había saldado con la muerte de seis empleados,cuatro de ellos mujeres, y diez heridos de gravedad. Un cor-tocircuito, por falta de mantenimiento, pudo ser el causantedel siniestro. Es un accidente muy común, sus motivos sue-len ser problemas técnicos de maquinarias o fallos del siste-ma eléctrico de los edificios. Hacía apenas unos días de otroincidente muy similiar en Dhaka, capital de Bangladesh, enel que diez trabajadores murieron y más de 50 habían resul-tado heridos cuando un incendio arrasó la fábrica AswadComposite Mills.

El incendio y derrumbe en abril de este año, del RanaPlaza, donde murieron más de 1.200 personas atrajo elfoco de los medios de comunicación por unos días sobrelas deplorables condiciones de trabajo y de seguridad quesoportan los trabajadores del sector textil de Asia. Ya en2005 se produjo el primer derrumbe de una empresa deeste sector y desde entonces, ha habido miles de muertos.Es estos seis meses transcurridos, las familias de las vícti-mas del Rana Plaza no han recibido las indemnizacionesíntegras prometidas.

La muerte ronda lasfábricas textiles de Asia

Los mineros protestan ante los recortes y dificultades paramantener la actividad en el sector.

Los edificios donde se concentran las fábricas textiles de Bangladesh no suelen reunirlas mínimas condiciones de seguridad.

–La pregunta es obligada auna mujer, que ha estado enla brecha obrera y en la ecle-sial desde su juventud: ¿cuá-les son sus recuerdos más vi-vos?

–A nivel eclesial, aun ariesgo de que me llamen nos-tálgica –contesta–, recuerdomuy especialmente el Patro-nato de Sestao. Estoy ha-blando a partir de 1957.Tam-bién cuando se convocó elConcilio Vaticano II, la JOC,la HOAC. Años después, laAsamblea Diocesana, lapuesta en marcha del Secre-tariado Diocesano de Pasto-ral Obrera… Este es unbuen momento para dar gra-cias por la cantidad de genteque me ha ido acompañandoy me acompaña en el ca-mino.

En el plano laboral, ahoraque vamos viendo cómo sepierden derechos y cómocada vez hay más recortes ensanidad, recuerdo todo loque luchamos para que se re-conocieran la dignidad de lostrabajadores y de las perso-nas enfermas. Las celebracio-nes del 1º de mayo, multitu-dinarias y preparados paracorrer por si acaso…

En el plano político, me hatocado vivir las consecuen-cias de la dictadura, los en-

cierros en las iglesias, las lu-chas por conseguir la demo-cracia, que se viera recono-cida la realidad del PaísVasco, los distintos referén-dums y las diferentes elec-ciones. Hay que reconocerque nuestra realidad ha sidocompleja. Y ahí hemos es-tado y estamos.

–¿Qué le impulsó a colabo-rar con IU y después a afi-liarse?

–Al principio, durante unosaños, colaboré en la Comi-sión Municipal. Más tarde meafilié. Pensé que era mejorpara poder tener mayorcampo de acción e interveniren las decisiones. Ya jubiladame pidieron salir en las listaspara el Ayuntamiento. Lopensé mucho y accedí. Vi elmomento. Podía dar unosaños al pueblo, ponerme a sudisposición. Es un medio muybueno para tener contactocon personas, asociaciones.También para escuchar, aten-der y tratar de poner en prác-tica eso que siempre defen-demos, «la participaciónciudadana», e intervenir tra-tando de solucionar situacio-nes. Los problemas no sonsólo personales, en la mayo-ría de los casos son políticos:vivienda, bienestar social,mujer, cooperación…

–¿Es difícil compaginarvida cristiana y compromisoobrero?

–La HOAC me ha ayudadoen todo momento. Tener unaformación, un equipo, unProyecto de Vida. Esto tehace tener medios para serfiel en lo que crees: Jesu-cristo, su Evangelio, la op-ción por los pobres, por laspersonas, mi opción por elmundo obrero. Te anima abuscar la justicia, denunciarlas injusticias, en lo social yen lo político. Buscar espa-

cio, dedicar tiempo, compar-tir con otros. La celebraciónde la eucaristía, la oraciónpersonal y en grupo…

Desde sus 72 años llenos devida, con un largo recorridode compromiso obrero, sindi-cal, político y eclesial, no hacefalta decir que Clara Zabaloestá entusiasmada con elPapa Francisco.

Félix García Olano.Colaborador de revista

«Comunicación/Alkarren Barri»

6

¿quién es?

Clara Zabalo, veterana militante de JOC, HOAC y Pastoral Obrera

Clara Zabalo, auxiliar de enfermería en el hospital de Cruces, hoy jubilada, empezó en la JOC,luego pasó a la HOAC y ahora colabora con Pastoral Obrera de Bilbao. Aunque en la escena pú-blica fue conocida por su participación en el grupo municipal de IU de Sestao, también ha desta-cado por su trabajo en sanidad, en colonias de Verna, en Cáritas o con el grupo de parados enmedio de la crisis industrial.

«Hay que denunciar este sistemaeconómico y construir desde

los valores del Evangelio»

7

NN os estamos acostumbrando a laslas desigualdades económicas ysociales entre la personas. Es una

pena. Y lo peor es que esas desigualdadesaumentan cada año. Hay cada vez más ri-cos y cada vez hay muchos más empobre-cidos. Y no reaccionamos. Algunos calcu-lan que, cuando salgamos de la crisis(algún día habrá que salir), habrá un 40%de la población estará en la casilla de lapobreza. Le rebajan los sueldos a muchosde los que trabajan, los parados y paradasse quedan sin ayudas, otros encuentranempleos pero con salarios bastante másbajos que antes, los abuelos cargan conuno o dos o tres hijos en paro y sus fami-lias y quedándose sin ahorros.... ¿Este em-pobrecimiento no va a poner la democra-cia en peligro?

Hace tiempo, 50 años, el Concilio Vati-cano II denunciaba como escandaloso elhecho de las excesivas desigualdades eco-nómicas y sociales. Y soñaba con que la

humanidad pondría como guía y motor dela economía el Destino Universal de losBienes. Todos los bienes (dinero, alimen-tos, productos, viviendas…) son para usode todos los hombres y mujeres y pueblos,deben llegar a todos en forma equitativa.Nunca debe perderse de vista este princi-pio del destino universal de los bienes.Está claro que pobreza y las desigualdadesson una puñalada asesina de este princi-pio.

Habrá que seguir soñando con la vidadigna y feliz de todos. Sin este sueño la hu-manidad hundida no se podrá levantar. Ha-brá que seguir denunciando la injusticia delas desigualdades, habrá que exigir y lucharpor la justicia social para que se pongan re-medios legales y políticos, habrá que vivirsolidariamente compartiendo los bienes yel trabajo. Entre todos podemos. No estaríamal que en el tiempo de navidad avanzára-mos algo en esta línea.

Gregorio Burgos

La mirada justa

Las desigualdades nos hunden

LL os conflictos laborales últimamentellenan los espacios en los medios decomunicación. La mayoría de las cade-

nas y cabeceras se muestran comprensivas conlos responsables de empresas y administracio-nes (no pueden hacer otra cosa que la que ha-cen, dicen) y muy duros con los trabajadores ysus organizaciones (les acusan de mirar solopor sus privilegios y de no saber cómo funcionael mundo). Si media algún acto vandálico depor medio, no digamos... La lucha sindical en elsiglo XXI también sejuega en el campo de laopinión pública.

No se comprende quelos sindicatos, a estas al-turas, permitan actos deviolencia que ponen alos ciudadanos en sucontra y pueden llegara convertir en antipáti-cas sus justas reivindi-caciones. Pero hay que

entender –nunca justificar– que debe resultardifícil a un trabajador desesperado a punto deperder su medio de vida ajustarse escrupulosa-mente a las normas de urbanidad. Cuando, ade-más, el conflicto afecta a un millar o más de tra-bajadores no debe ser fácil asegurarse el buencomportamiento de todos los implicados. Loque se entiende peor es que no se pidan, con lamisma rotundidad, responsabilidades a los ge-rentes por su mala gestión y peor actuación antelos conflictos. Si son políticos, con más medida,porque están elegidos para encontrar solucio-nes negociadas, no para desentenderse del fun-cionamiento de los servicios pagados por los

contribuyentes. En vez deeso, se aferran a sus cargos,salen premiados con ascen-sos y hasta vuelven a dirigirotras empresas distintas. Ladebida imparcialidad de losinformadores exige utilizarla misma vara de medir contodos. Lo que no es justo esmarcar las cartas antes decada partida.

Cristina López

Según una encuesta reali-zada por la OCU, el

25% de las familias de Es-paña debe hacer frente a losgastos fijos de cada mes conentre 1.000 y 1.500 euros yel 18% con menos de 1.000euros.

Los ingresos medios delas familias rondan los

1.900 euros, mientras quesus gastos superan los 1.700euros al mes. La mayor par-te de los ingresos se desti-nan a alimentación (438 eu-ros), vivienda (353 euros) yrecibos del hogar (227 eu-ros).

Apartir de la encuestade la organización de

consumidores (realizada a1.705 familias con cabezasde familia de entre 25 y 74años), se ha detectado queel 16% de las mismas estáen riesgo de exclusión.

Sin embargo, el 61% delos encuestados ha ma-

nifestado no llegar a fin demes alguna vez (el 13%,rara vez, mientras que el16%, siempre).

Al 56% de las familiasle resulta muy difícil o

imposible pagarse una se-mana de vacaciones; al23%, hacer frente al pagode la hipoteca o el alquiler;al 21%, los gastos relaciona-dos con la educación y al18%, los relacionados con lasalud (médico, dentista, me-dicamentos...).

¿Sabías que...?Marcar las cartas

Aparato crítico

evangelioen la calle

El supertifón «Haiyan» («Yolanda») sacudió Filipinas (algu-nas zonas ya fueron devastadas por el terremoto de octubre)obligando a 4,5 millones de personas a buscar refugio enalbergues de emergencia y dejando, al menos, 10.000 muertos.Se diría que una vez más la naturaleza carga contra los másdébiles, aunque no conviene despreciar la influencia de acciónhumana en el cambio climático y en la indefensión de ciertoslugares del planeta. Lo peor es el estado de apatía social en elque nos movemos. El 60% de los votantes de una encuesta deldiario francés «Le Figaro» habían respondido en un primermomento que no estaban dispuestos a ayudar a los filipinos.Algunos alegaban su desconfianza en las ONG. Gracias aDios, hay entidades y personas que siempre responden. Cári-tas Española (www.caritas.es) destinó 200.000 euros para apo-yar las primeras acciones de respuesta, mientras que ManosUnidas (www.manosunidas.org) está en contacto con sussocios en la zona, algunos viejos conocidos de hace 25 años.

Así va el mundo

Dirección, redacción y administración: Alfonso XI, 4 - 4º. 28014 Madrid. Telf.: 917 014 080. Fax: 915 227 403

MM e resulta llamativo que en el relato del naci-miento de Jesús de Nazaret (Lucas 2, 1-21)aparezca en tres momentos distintos el lugar

en que nació: un pesebre.Así en el vers. 7 dice: «lo acos-tó en un pesebre», en el 12 se les anuncia a los pastoresque la señal de su presencia es que está «acostado en unpesebre» y poco después vuelve a repetir que estos pas-tores lo encontraron «acostado en el pesebre» (vers. 16).Esta machaconería por subrayar el pesebre, ¿será unasimple repetición o tendrá alguna intencionalidad?

Sea lo que sea, lo cierto es que Jesús nace en dondehay escasez, su presencia es anunciada en lo más bajode la vida y se adora en los lugares más inesperados ysorprendentes. Todo eso es el pesebre: escasez, bajuray sorpresa.

Hace unos días me encontré con unos hijos casados alos que había muerto la madre pensionista y me dicencon toda naturalidad que, lógicamente, sienten el falle-cimiento, pero que también sienten, y mucho, habersequedado sin la comida de cada día.Ahí está la riqueza-escasez del pesebre y de la Navidad.

El vecino del barrio está hecho polvo por su hígadodestrozado y sin poder dejar la «litrona». Esta bajura estal que lleva inmediatamente al misterio del pesebre-Navidad.

Lo que no puede pasar, y por desgracia ocurre, es queesta escena del pesebre, a fuerza de tanto y tanto repe-tirla, se convierta en algo exclusivamente infantil, tier-no y bonito que ya nos resulte tan normal y que noshaga insensibles a la sorpresa que entraña: nuestroDios nace en un comedero de animales.

Esa adoración profunda a Cristo nacido en un pese-bre es fuente de energía y es un criterio de honradez yde verdad. Lo demás…, son, a veces, tradiciones, inclu-so, buenas que se pueden convertir en ñoñerías.

¡Vayamos a Belén! ¡Vayamos al pesebre! ¡Vayamos ala calle! ¿Dónde pones tú la fuerza de la Navidad?

Antonio Hernández-Carrillo

El pesebre de Belén

Conocer la realidad es el primer paso para disponerse a cambiarla

Pedidos: Ediciones HOAC. Calle Alfonso XI, 4, 4º28014 Madrid

☎ 91 701 40 83www.hoac.es - www.edicioneshoac.es

2ª Edición

NOVEDAD