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Puño
El monstruo Malacresta(Todos menos uno)
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Puño
El m
onst
ruo
Mal
acre
sta
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135 Todas las noches desde hace muchos,
muchos años, Todos los monsTruos
salen a Trabajar. dan un beso de des-
pedida a sus familias, salen de sus
escondiTes en el fondo de la GruTa
féTida, aTraviesan el bosque oscuro
Y lleGan hasTa los armarios de los
dormiTorios de los niños de la ciudad
de bodenburG. Todos menos uno:
el monsTruo malacresTa. ¿cómo con-
siGuió malacresTa escapar de su vida
de monsTruo?
puño escribe y dibuja esta historia
para niños valientes, a los que no les
importa dormir a oscuras siempre
que alguien les lea un cuento antes
de apagar la luz.
primeros lecTores
puñoel monsTruo malacresTa
Dirección editorial: Elsa Aguiar Coordinación editorial: Berta Márquez
© David Peña Toribio (Puño), 2013© Ediciones SM, 2013
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A Guadalupe, Carmen y Eusebio.
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Como todas las noches desde hace muchos, muchos años, un poco antes de las nueve en punto, todos los monstruos salieron a trabajar.
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Como todas las noches, dieron un beso de despedida a sus familias y salieron de sus escondites en el fondo de la Gruta Fétida.
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Como todas las noches, los monstruos atravesaron el Bosque Oscuro y encontraron el camino mágico que lleva hasta los armarios de los dormitorios de los niños de la ciudad de Bodenburg.
Y así, como todas las noches a las nueve en punto, las puertas de los armarios de los dormitorios de los niños de la ciudad de Bodenburg se abrieron a la vez y los monstruos salieron para hacer su trabajo.
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Un soplido frío en las orejas, un tirón viscoso de las sábanas...
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... o un profundo gruñido debajo de la cama, bastaban para que todos los niños de la ciudad de Bodenburg sintieran cómo un escalofrío de miedo les subía por la espalda.