manual de retorica

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17 1. Datos históricos Este primer capítulo constituye una reseña de algunos datos fundamentales entresacados de una larga historia de dos milenios y medio de antigüedad. No se ha intentado hacer un esbozo, ni tan siquiera sumario, de la historia 'de la retórica: era imposible, en tan pocas páginas, delinear las características y los movimientos paralelos o correlativos respecto del desarrollo de la filosofía y, especialmente, de la dialéctica, así como de los avatares de la elocuencia política y forense, y, en el ámbito filosófico y literario, de lás elaboraciones de la estética, de la poética y de las teorías litera-riasi, Nos ha pirecido oportuno, sin embargo, recordar algunos datos pre- liminares e indispensables sobre la retórica *griega y latina, y, especialmen- te, sobre la sistematización aristotélica, que se ha mantenido como el fun- 1 Referencias bibliográficas fundamentales para la historia de la retórica: son de cómodo manejo, para las épocas griega y romana, el original esbozo de Earthes 1972 y el 'ágil de Plebe 1988, además de Riposati 1951 (para la época griega) de Leeman 1963 (para la época romana) y de los,clásicos Kelinedy 1974 6 .y 1972; Ba-rilli 1979, importante también por la Guía

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1. Datos histricosEste primer captulo constituye una resea de algunos datos fundamentales entresacados de una larga historia de dos milenios y medio de antigedad. No se ha intentado hacer un esbozo, ni tan siquiera sumario, de la historia 'de la retrica: era imposible, en tan pocas pginas, delinear las caractersticas y los movimientos paralelos o correlativos respecto del desarrollo de la filosofa y, especialmente, de la dialctica, as como de los avatares de la elocuencia poltica y forense, y, en el mbito filosfico y literario, de ls elaboraciones de la esttica, de la potica y de las teoras litera-riasi, Nos ha pirecido oportuno, sin embargo, recordar algunos datos preliminares e indispensables sobre la retrica *griega y latina, y, especialmente, sobre la sistematizacin aristotlica, que se ha mantenido como el fun-1 Referencias bibliogrficas fundamentales para la historia de la retrica: son de cmodo manejo, para las pocas griega y romana, el original esbozo de Earthes 1972 y el 'gil de Plebe 1988, adems de Riposati 1951 (para la poca griega) de Leeman 1963 (para la poca romana) y de los,clsicos Kelinedy 19746.y 1972; Ba-rilli 1979, importante tambin por la Gua Bibliogrfica;,es una densa historia de conjunto, desde los griegos hasta hoy, completada y prottindizada recientemente con los artculos de BarIlli 1984. Florescu 1971 es una pinera visin de conjunto. Para la Edad Media, es rico en informacin Murphy 1983, pero vanse en primer lugar Curtius 19655 y Fanal 19622, adems de Zumthor 1973 (1963). Para el Humanismo, remitimos por ahora a Garin / Rossi 1953, a Garin 19582, a Vasoli y a Ga-rin 1976. Se indicarn en su momento los estudios espeeficos sobre los periodos sucesivos. Para un amplio panorama de las retrias y poticas dominantes.en Ita7 ha desde la Edad Media hasta hoy, s recomienda Battistini Raimondi 1990. Bat-tistini (1985) ofrece ua revisin sinttica y bien dOcunientada de las direcciones, temas, mtodos y prospectivasi y lista las principales revlsas especializadas: Quar-terlyJournal of $peecb, Spelh Monograpb, Philoso.pY and Rhetoti, betorik, a las que han de aadirse, al Menos, Argurnentation y Rbektica, Ihetoic News Letter es el boletn de la International Society for the History of Rhetoric.

damento principal dl lOs tratados posteriores. De ella ofrecemos algunas instantneas: apuntes de hechos a los que han de referirse tanto la descripcin del corpus clasiCO 'Tlas apostillal ocasionales sobre las neorretricas de las que se ocupa el Segundo captulo, como los temas tratados en el captulo tercero.1.1. LA RETRICA ANTIGUA. Los ORGENESSiracusa, primeros decenios del siglo V a. C.: dos tiranos, Geln y su sucesor Gern 1, Ilevaty cabo expropiaciones masivas de terrenos para distribuir lotes soldados mercenarios. Cuando, en el 467 41.a. C., una insurreccin d .,.' oca la tirana, comienza una larga serie de procesos para reclamar,' s propiedades confiscadas. Con una inclinacin ;natural a la argtilpentacin y a los enfrentamientos judiciales. (cuin esset cuta illa Ois et controversiae nata, escribira Clern cuatrocientos aos desp4, los litigantes saban atacar y defenderse con una eficacia y 1?.'reisin instintivas. Slo faltaba proVeer-les de un'mtodo y de una tcnica codificados, y es sta la tarea que habran llevado a cabo Cl4, ya en actividad en tiempos de la tirana, y su discpulo Tisias, fatisiderdos por ello, segn una tradicin muy difundida, como lbs fundadores de la retrica. Su preceptiva se apoyaba en el principio siguiente:16 que parece verdad cuenta much ms que lo que es verdad; de ah la bsqueda sistemtica &las pruebas y el estudio de las.tcnicas adecuadas pala demostrar la verosimilitud de una tesis. 'Los primeros pasos de lmetrita estn marcados por oposicio- . nes elementales: como sistema de teoras, tcnicas y preceptos, va unida y, a la vez, se contrapone a la elocuencia como virtud espontnea, y se.rige, en su interior, por la confrontacin y el contraste entre lo que es y lo que se cree que es verdad.Simultneamente, y tambin en Sicilia, se desarrollaba otro tipo de retrica, llamadapsicalgica. o conductora de almas, que hunda sus races en los conocidos como discursos pitagricos, que se remontaban a los primeros siglos del pitagorismo. Esta no pretenda convencer de que un argumento dado era verosmil (eik,s) mediante una demostracin tcnicamente impecable, sino mediante la atraccin que la, palabra, sabiamente manipulada, pOd.a ejercer so. bre los espectadores. El efecto que pretenda alcanzar era la reac- : 2 Briaus, XII, 46.

cin..erntiVa,::nolalidhesiti.tacirtaklos aspectos' nis caraCteriza-cloresle-estatspteledeinagiaSelaplabra son el-razonamiento:por 'anttesis, relacionado Ch. lattlijitagrica de los contrarios; yla pOittijiiai o capacidad d halli tipos distintos de discuopta:los difelentes tinos de auditorio ,.(jvenes.,:iiiiijers, magistrados, -efe-'hos...).SeeStableiatvnalgas,C6flattedicina, en la *vela:poli= trOplatnIStilerteficlitrar:elreitedioadectiado para lassdiVersas condiciones y. prediSpOSkioned, ls pitites.,1 con la magia,. pa-lente de la tina y de la:otra:Una tradicin a laque prestar crdito el mismo AriSttles.COnsidera a.Eilipdoles de Agrigerito,:fil-Sfo. con .farna de niago,,e1 .verdadero 'fundador de la rtica.Frie Aristteles el qUe ttibily al ambiente:pitagrico la defin-ciit del concepto-de 16opoinnico (k4irs)en.trtriirts de

prpttidtitirtierica: Las idea .tle la Oportunidad de un discurso s .:gnIs:Ciretihstaticisllds:intellOcliteites:habla estado sieriiprere-lacionada coli la nocin depolitrpa y:tena implicacioneledticati-vas' y: sOCial s ctl n largo fintiro.En la Magna-Greciarntes. 'de' Cristo, deben, 'pites,btilrse los Ins:del la 'retrica deeidtital.:Si pal-de".latpre-teptiVa.;.'de; 16s . ptdrittiti6s: itrfilitos,' de la ttotliacin atekaleilos tneidrdells filtes;jalla,116enridadthoilapacidad'riattakybiltfprattica,1 littltin.deilikllgeriest dilata hasta lts-finilii61:4ritittillnba: lal.pieginfita.,:de los .coiiltjdosbilettrOs-del`lie'n hablardelitlnrics;' la obligacin s-

tillC14-pbrS616ierii41.1.(ei),Filelit likctilabldiiindeltedler discursos folenks para:quien' no supiera hcelo.por si lairttSticazen-t1 mundo:lleg unida al deltrll ifiltittitin de! lidbibtria:''eltots;contjuiltl el:favr: d la asadlo ls debates blt:Ves-iolies.:deintets Otnn:itnixteriqueSesepa defender la tesislito-jia..Vdlnkef la:de loscdtrio eipreSiOwdea libertadplabra,.1.1..jerticio autoritariadel 4,,sotler.111'nieiffilentoktie, la ,ittridaunido 'tambinedticatiVostle; la'klh'ilre'ialiilia..Val&kiltinira: la-concepcin; dellth-19

dencia pitagrica, de la arbitrariedad de los signos lingsticos (los nombres se asignan por convencin a las cosas), ya se pensase en una relacin por naturaleza entre el nombre y las entidades designadas, se consideraba que para conocer la realidad era esencial co- , nocer los signos lingsticos que la expresaban. De ah el aspecto, muy pronto evidente, .de la retrica como ciencia, adems de como prctica, del lenguaje, aspecto que caracteriza el pensamiento y la actividad de Protgoras y Gorilas.1.2. LA RETRICA DE. LOS SOFISTASDe Sicilia a Atenas. Mediados del siglo y a. C. Edad de Peficles. Los maestros de sofstica realizan la mediacin de la enseanza de los legendarios Crax y Tisias y de las doctrinas retricas que maduraron dn ls ambientes pitagricos. Contrario a la interpretacin en sentidO moral, como hacan los pitagricos, de lo que es oportuno en un discurso, Protgoras de Abdera da al kairr una aplicacin formal: pueden ser oportunas, segn los casos, la concisin y la abundancia, y una misma materia puede constituir el objeto d un discurso conciso o de uno amplsimo. Formal, esto es, estilstica, es tambin su idea de la ortholteia como propiedad de la expresin, talento en el que competa con Pedes. La eficacia demostrativa obtenida con la excelencia del decir poda as lograr hacer del discur-i so ms dbil el ms potente.Protgoras desarroll con originalidad y xito. la doctrina de la anttesis Como idea-fuerza de una argumentacin, mostrando cmo un.mismo argumento puede tratarse desde puntos de vista optieltolEra ,la, tcnica de la contradiccintik la: la aportacin ms

ese4osynente innovadora de la retrica sofstica.Son nu rosos ls testimonios literarios, desde Eurpides hasta Atlifanes y Platn, sobre las competiciones retricas, concursos1.119'sistrio erStico3 que se desarrollaban segn la tcnica anti-,1.4rstica, del griego erizo,. disputo, contiendo: arte de conducir al adversa-rio aura cla disputa, .y de identificar las debilidades internas de

una argumentacin no con el fin de contribuir a la bsqueda de la verdad, sino para poner al..adversario en dificultades. La erstica, considerada como un artificio dialctico estril, peto como una ipvitacine,TcleC7-'1-17;71lel enJbLia ser,VIO histricamente. en las disputas cientficas' (pot ejemplo, . ellas discusiones

nmica enseada por Protgoras. En el despreocupado relativismo que la inspiraba y que tanto indign. a los enemigos de los sofistas (en primer lugar, a Platn, que reprob en el Eutidema la prctica de la anulo a) pueden hallarse, sin ei"lrgo, sorprendentes intuici-, nes acerca de la organizacin formal del discurso, as como acerca de la facultad probatoria, opuelta a presuntas verdades absolutas. Recuerdan, aunque lejanamente, la nocin moderna de relativism cientficb, ..que, aplicada a las experiencias 411-nanas, significa tansl6-7jue, 1materia de hechorojiiiffs(iiWesignifica

conjunto de lo reary-lo posible), lo ue cuenta es encontrar la razn ms convincente. :,-.....,La retrica aparece fundida inextricablemente con la potica del primer autor (rti y filsofo) del que poseemos un tratamiento xplcito'de temas retricos: Gorgias de Lentini, el otro gran Sofista, alumno de Empdocles, empapado'de pitagorismo, que lleg a Atenas, desde Sicilia, en el 427 a. C., ao del nacimiento de Platn. En el Encomio de Elena, uno dlos dos discursade Gorgias que han llegado hasta nosotros, se exalta el poder psicggico de lapersua--sin (Pith.). sta acta. a travs del engao (apte); de la ilusin o fascinacin potica que el /tos (la palabra, el discurso) es capaz de.'. provocar: acercndose a la opinin del-. alma, su. poder encantato-rio la fascina, la persuade, la seduce y la.modifica con una ilusin mgica4.Gorgias distingui, en primer lugar, varios tipos de discurso: los /tolde los filsofos de la naturaleza, la oratoria judicial y la dialctica filosfica. Es tambin de Gorgias la primemidentificacin de 'figuras':' recursos formal como el isocolon (correspondencia del nMero .y.disposicin.de laspalabral,entre los :miembros de un pe. nodo) y el homotleuton (igual terminacin de palabras en las distintas partes del.isocolon),.:ingredientes de la prosa potica, dela composicin a la manera de 91~), y, sobre todo, laanttesis, base . de la dialctica.. - : ... -.Cinco siglos ms :tarde, Plutarco escribira la definicin ms compleja de la 'retrica gorgiana,. atribuyndole la virtud: de haber anticipado sus desarrollos futuros: La retrica es el arte de hablar; ' su fuerza. reside en. ser el artfice dela perSuasin en los discursoslos lgicos y de los matemticos sobre las nociones de dnfinito y de totalidad) para poner en evidrlos un os oscuros confusos.atoo o Helena, trad. Rostagni 1955,

2021

polticos sobre ,cullq4er materia; crea -conviccin y no -enseanza;sus ornemos propios son:sobretodo, lo justo y lo injusto, el bien01,!bao Yl feoh5.Y!CoN'rmJSOTISTAS:. PLATNEj..bito dedos iltoreofistas le enorme; el mismo Scrates ilio de ellos, :hasta tl punto de queNubes de

fue consideracloAriltbnes lo5caricaltiriza como maestro de sofstica. identerneiite:SOcratestraduCho en una especial y personalsima lihtie .rhetoil, ya que ?latn, su .discpulo y exgeta, se le pleiteyrnuypronto.el problema de la relacin entre la retrica y la 1 Tstiltado ittetna :seye rsitria condena de la reriCa filosfa.;por lossotts y la tinacin de su .Contrapartida filo-prac slita.:dialOica..:A la :ptimera, entendida y rechazada

corno,to:jerdcio.:meratnente :fortnil persuasin-que no 'repara tricilteniasslikeItilluest..aplica,dedicada.distraeni.latnulti.-ulasedueckde suilegancilencantatotia y de ,sus so-

nolitjaaoricuas, le ,opus.o filn. la dIlctica como :arte de la dis-ttillnjottnnetiteldectiada unos tontenidos espedfitos y des-tiitnentos le los discursos, a. sudesnomp-sitititirdleinentositinditheritiles y a su reordervacin en tate:o-las deloik:s.1iltn1apine!prevaece'cbre la ixac11,ela

, teltidutibleideedad sobre la Tnutibilidd .tle..opi-tiik,ktiaiitiverSikdekpolidnxle lossfiStas. Erpel Euti-...d",tioffilelllaillQgos.P.Olitizis:dlpericidojjuv:lo:socrtico,:selenio a lattliiiiloniinio de la ikixa tio

161.0.:porctilercilicia, l tutilevbvio huta para los sofistas, sino stariibitr 1de t rae, el delftew:o tcnica, 'que los sofistas leatildan, Y. cornotiv l lutiitmo,;111001We:1m

dqeli.ltn,destitilatsprOftindamentb.aprobbiladelaiesen-tia,lt letrica, istst.ofinetotto una i abilidad'emprica: yaque.-meceiacional dela maturlleza de las to-

slale qiiesse tdigtel.:14prdibuosIbe iindicarlatausadecosa guila. (Golas, .465a),tattelosdilogollatnicos,i1(Gotgiasts,eltscerbairien-s O:1k '1916U33.

te antirretrico y antisofstico: al.igual que la sofstica es el remedo y la contrahechura de la actividad legislativa, la retrica es el reme.: do del arte :de dispensar justicia; estas pseuclotcnicas pertenecen a un nic tipo de habilidad:la ackldn (kalokia) capaz de persuadir.La persuasin retrica no repara en la materia sobre la que disputa: lulo es necesario que la retrica conozca los contenidos; le basta descubrir una cierta tcnica de persuasin de modo que los le-gOs crean saber ms que los entendidos (Golas, 459a). Peto esta afirmacin no corresponda a los principios enunciados por el sofista Gorgias, que, en s clasificacin de los discursos, requera del rtor un conocitnient seguro de los argumentos, tanto o los 1(ni.e-teorowcos (esto es, de ciencias naturales) como de lol judiCialeso filos6cos.'En el Fedro, el dilogo que pertenece al periodo de madurez y de influencia' pitagrica, Platn vuelve a' ocuparse de la retrica. No par condenarla globalmente, sino pira distinguir la verdadera retrica de la falsa mediante la. anttesis entre ser y apariencia. Es falsa la retrica que hace ostentacin de una apariencia de verdad; que sigue y lisonjea la opinin del juez y no pretende aprehender lo que es realmente justo. Es verdadero el tipo de arte que dirige las almas mediante la palabra, no slo en los tribunales en las reuniones publicas, sino tambin en la conversacin privada [...] y tanto en las cuestiones pequeas como en las grandts (Fedro 261), el que es capaz de conducir al oyente hasta la verdad y hacer que la verdad acte en el oyente (Garin 1971100), El componente psicag-gico de la retrita verdadera lograra que el conocimiento de las ideas se correspondiera con el conocimiento de los nimos:iina vez que se, hubieran descubierto las correspondencias exactas, lo opinable se evaporara, y, con ello, la elecCin, las probabilidades, lo contingente. Lo propio de la retrica, es decir, la sombra de la verdad, no puede dejar de disiparse ante la luz de la verdad; y as ser, segn la tesis de Platn, cuando la psicologa cientfica haya expulsado a lo verosmil de su ltimo refugio. La verdadera retrica no es sino el conocimiento del mundo ideal ms la ciencia de las almas.(Garin 1970:101)Un discurso 'persuasivo fundado en estos principios tiene un mtodo preciso, el de la dialctica. Sin la dialctica (relultado de una sntesis que extrae la definicin del argumento de la revisin de23

las distintas nociones que conciernen a una idea y del anlisis que descompone la idea.en sus elementos constitutivos.) no puede existir ningn tipo de discurso que no la ftil o reprobable6..La posicin antisofstica de Platn, que, como es habita!, se vuelve ms rgida en sus momentos ms sobresalientes, acta en el fondo de todas las denigraciones posteriores de la retrica, en la desconfianza hacia las teoras y la prctica del arte del decir que ha conformado *una parte notable de los prejuicios que se han sedimentado en el curso, de los siglos: las llamadas ideas recibidas sobre las que se fundamentan las acepciones negativas del trMino retrica. He aqu una lista provisional; la retrica no es un arte veraz, sino un conjunto de artificios (de falacias, de formas hueras), y, por ende, un engao, lo opuesto a la espontaneidad y a. la sinceridad; la. persuasin', que es una manipulacin, del consenso por parte del qu es ms astuto y sabe cmo embaucar ajos ingenuos, se ejecuta en materia de dudosa consistencia, sobre las que el acuerdo no es general, y usa a menudo los trcos del prestidigitador; la mullid es su destinatario.natural, mientras que la bsqueda de la verdad y del conocimiento requiere un intercambio dialctico entre los interlocutores; por ello, la: retrica es una actividad esteril..desde el punto de vista cognoscitivo.1.4. EL ARTE DE LA PROSAMica, siglo iv antes de Cristo, siglo de la filosofa y la elocuen-cia...La forma literaria dominante es la prosa. latn; filsofo artista, da;'ulbaSinsuperab.les; los grandes oradores polticos (Iscra-ESquines) acrecientan la elocuencia, para la que la rellig.,,gpeFialmenles.por.pbra de Gorgas, haba ya establecido esquemas de tcnicas argumentativas y reglas para la expresin que podanenstipir,un:`prosa d arte' capaz de competir con la poe-nsleti.illiiiiiniOldisposiCin dlas partes, en los ritmos y en las Aigifilks. ' '1Srates, que haba sido discpulo de Gor-gie:yliaba seguldo tImbien las:epselanzas de Scrates, tuvo una escuela de :lcuencia, una escuela famossima, muy frecuentada...6. Fue, paradjicamente, undiscpulo de Platn, Teodectesde.FaSlide (mediados del siglo i at), al illie.cohocenlos por testimonios indirectos, el que compuso el primer tratado sistemtico de retrie,, anterior a los tratados Ati aximents dr limpsado y dAriltteles .(vase Plebe 1988:49-51).24

Iscrats conciliaba el adiestramiento en el hablar elegante y Persuasivo con la educacin para l vida civil, la bsqueda terica y prctica del primor formal y de la eficacia demostrativa con las instancias morals y filosficas sobre las que fundar la direccin de las conciencias y de las conductas sociales. Platn, rival de Iscrates en la formacin de los jvenes, le fue hostil, y tambin Aristteles fue un critic severo que le reproch que se ocupara exclusivamente de formas hueras.Aunque se interesaba por problemas *tico. y de 'cultura general", como se dira hoy (el buen orador, sean Iscrates, deba tener una excelente reputacin y una vasta culla), la retrica isocrtica no produCa filosofa, pero, en conipensacin, reforzaba el bagaje instrumental necesario' para la teora y la prctica del discurso. Segn una pinin bastante difundida, la competencia de esta escuela de recursos estilsticos fue la que indujo al mayor terico de la disciplina, Aristteles, a dedicar una parte de sus reflexiones (el tercer libro de l Retrica) a la ix4 sto es, al `modo de expresarse'.1.5, LA RETRICA ARISTOTLICALa gran sistematizacin aristotlica de la retrica comprende: una teora de la argumentacin que constituye el eje principal y que proporciona, al mismo tiempo, el nudo de su articulacin conla lgica demostrativa y la filosofauna teora de la elocucin y

una teora de la composicin dele cliscursol.Al comienzo del tratado, Aristteles escribe:La retrica es anloga a la dialctica. Ambas se ocupan de objetos cuyo

conocimiento es, en cierto modo, propio de todos los hombres, y no deuna ciencia especfica.(Ret., 1, 1, 1354a)Su funcin no es persuadir, sino encontrar los medios de persuasin para cualquier argumento. La tarea del terico es ocuparse de los argumentos probantes o probatorios (pisteis): no de los artificiales (tech-noi), que se utilizan como datos de partida y que son los testimonios; las confesiones logradas mediante tortura, los documentos escritos, etc, (cfr. ms adelante, 2.6), sino de los tcnicos (ntechnoi), que han de ha-7 Ricoeur 1981:9.25

2627liarse mediante la aplicacin de un mtodo. Una pstis es una demostracin, de la que hay dos tipos: el ejemplo y el entimena. Dialctica y re, trica se sitan as en paralelo: esto es, lo que en la primera es la indupcin, en la segunda es el ejemplo:demostrar, partiendo de una multitud de casos semejantes, que algo es de un modo determinado(Re t., 1, 2,13566)

lo que en la primera es el silogismo, en la segunda es el entimema:cuando, dadas ciertas premisas, resulta de ellas una cosa diversa y ulte-tior-por el hecho de que son as universalmente o en la mayor parte d los Casos(Ibid.)La diferencia reside en que el silogismo lgico proporciona una verdad irrefutable, mientras que el entimema llega a conclusiones probables y refutables,Los ejemplos pueden ser histricos o inventados (los que an hoy se llaman, con denominacin latina, exempla 'ida). De entre estos ltimos, Aristteles distingue dos especies: las parbolas,son parbolas los discursos socrticos. Por ejemplo, si uno dice que no es necesario sortear los magistrados; sera, de hecho, como si se nombrase a los atletas no porque saben participar en las competiciones, sino porque los designa la suerte(Ret., II, 20, 1393b)y las fbulas (como las espicas), que aun componindose como las parbolas, evidencian las analogas.Hay que recurrir a los ejemplos slo cuando se carece de entime-mas. Un entimema aristotlico es el siguiente:si ni siquiera los dioses saben todas las cosas, con mucha ms dificultad las sabrn los hombres(Ret., II, 23, 1397b)que est basado en el lugar comn de lo ms y lo menos:si no se puede atribuir un predicado a la cosa a la que le es ms propio, es evidente que no puede atribursele a aquella para la que es menos apropiado(Ibid.)una de las premisas est sobreentendida, a saber, que los dioses sepan ms que los hombres.

La expresin concisa y sinttica es el rasgo estilstico que Aristteles, es tambin uno de los rasgos que caracterizan las: tee. asigna al entimema;nicas modernas de persuasin, y, en primer lugar, las publicitariaS, en las que abunlan los iargiimentos basados en premisas implcitas. Omitir tina premisa significa dar por descontado lo que en ella se afirma, y, por tanto, no someterlo a duda o discusin, con el fin de influir de manera directa y penetrante en las decisiones de los destinatarios. Muchos mensajes publicitarios podran de hecho corresponderse con lo que Aristteles enteridla por entimemas aparentes, semejantes a las argumentaciones dialcticas que parecen silogismos pero no lo son. El siguiente es Un caso que pertenece a uno de los nueve tipos establecidos por el filsofo:pionisio es un ladrn, porque es malvadoque muestra la ausencia de silogismo, porque no todo hombre malvado es un ladrn. si bien todo ladrn es un hombre malvado (Ret., II, 24, 140artculo de-Eco (1976:3) se desenmascara el falso silogismo so-El bn ) un sobre el que se ha construido un mensaje publicitario. Una parte del mensaje en cuestin deca as: Quieres saber cmo distinguir un Bic Cristal con punta de diamante de los bolgrafos comunes Con punta metlica? El imn atrae al bolgrafo con punta metlica. No atrae a Bic Cristal porque:el dia, mante no es atrado por los imanes. Premisa del razonamiento: Slo Bic tiene la punta de diamante (y por eso escribe mejor). Eco argumenta: Para probar las premilas se sugiere una prueba inductiva, esto es, la verificacin del imn. Pues bien, el Bic no resulta atrado por el imn (y estoy dispuesto a creerlo). En este punto, sin embargo, se ofrece una deduccin implcita del tipo: Los diamantes no son imantables Bic no es imantable- por tanto, Bic es de diamante lo cual es manifiestamente falso, en primer lugar, porque ninguna afirmacin puede deducirse de dos negaciones, y,:en segundo., porque el hecho de que los diamantes no sean imantables no excluye que haya. otras :cosas no imantables, como los conejos, las peras, los licenciados en Derecho, Gina Lollobri-gidaLas premisas de los silogismos, dialcticos y retricos, se extraen de los tpoi, lugares (cfr., ms adelante, 2.6), que son de dos tipos: comunes y propios. Un ejemplo de los primeros es el lugar de lo ms y de lo menos ya recordado:de hecho, a partir de l se podrn formar silogismos y formular entime-mas tanto acerca de la justicia como de la fsica, o acerca de cualquier argumento; y sin embargo, estos argumentos difieren en cuanto a la especie.(Re!., 1, 2, 1358a)

2627Estas especies tienen sus lugares propios; conocerlos y saber usarlos es la prerrogativa de los expertos d cada uno, de las disciplinas.La descripcin de los gneros del, discurso persuasivo es previa al tratamiento de las premisas de las que han de extraerse los enti-mems. De los tres elementos de los que consta el discurso -7quin habla, d qu habla y a quin se dirige el tercero es el que determina la clasificacin (ntese que este criterio manifiesta por s mismo el carcter pragmtico de la tipologa que de l se deriva). Como hay tres tipos de auditorio (segn la prctica ateniense de la poca), hay otros tantos tipos de discurso persuasivo, esto es, de gneros de la retrica. Las primeras dos clases de auditorio tienen una caracterstica comn: su juicio puede alterar una situacin. Deben pronun4. ciarse sobr/ acciones futuras o sobre acciones pasadas. El oyentd que decidefsobre el futuro es miembro de una asamblea poltica; el que decidelsobre el pasado es el juez de un proceso. La tercera clase est formada por los espectadores. Estos no influyen sobre la situacin, cuyos cambios se presentan como ya sucedidos. El espectador se pronuncia nicamente sobre el talento del orador. Al primer tipo de oyente le corresponde el gnero deliberativo, al segundo, el gnero judicial, al tercero, el gnero epidectieo (o demostrativo, de epidi4nci muestro, hago ver, presento). En el discurso delibe-rativo, el orador aconseja lo til y desaconseja lo daoso. El discurso judicial, de acusacin .y defensa, se ocupa de lo justo y lo injusto. El discurso pidectico, de alabanza o vituperio, se centra esencialmente sobre lo bello y Su contrario, lo feo.La triparticin de los gneros retricos haba sido propuesta anteriormente por Anaicmenes de Lampsaco en el mismo siglo, el iv a.C., pero fue Aristteles el que la sistematiz y el que estableci una tipologa correspondiente que constituira el modelo de la preceptiva posterior. De este modo, el examen del gnero deliberativo consiste en un tratamiento sinttico de los argumentos sobre los que ha de decidir una asamblea (beneficios, guerra y paz, defensa del territorio, importaciones y exportaciones, legislacin), de los fines (el bien pblico y privado) y de los mltiples medioS para conseguirlos, de las causas de los bienes, de lo til en todos sus aspectos y gradaciones y, por ltimo, de las distintas formas de gobierno. El gnero epidectico est ilustrado con un compendio de tica en el que se analiza qu es y cmo se manifiesta la virtud, objeto de alabanza, puesto que es buena, y, por tanto, tambin bella. El examen del gneto judicial contiene una minuciosa descripcin psicolgica28

tanto de los motivos por los que se acta .y de lo que mueve al hombre a la accin esto es, el experimentar placer, como de los tipos de hombres inclinados al delito y de los propensos a ser vctimas de l. Hay, adems, un compendio de jurisprudencia que distingue entre el derecho natural y el positivo y los procedimientos oratorios propios de cada uno.La enseanza retrica de los siglos siguientes se centr muy pronto en el gnero judicial:. quien supiera d#10 una situacin procesal sera capaz, sin duda alguna, de actuar con destreza en cualquier otra circunstancia. El gnroidelibetativo, como tambin le sucedi al judicial, pas a participar del carcter ficticio de ficcin literaria propio del gnero epidectico cuando, al convertirse en ejercicio escolar, fue perdiendo con el tiempo su carcter propedutico ala poltica activa y reducindose al nico fin de la mera exhibicin :oratoria. La 'retrica escolar' englobaba bajo el gnero epidectico todos los discursos posibles, haciendo patente, el avance de la restriccin generalizada en la que consistira, segn Genette (1976), la historia de la retrica desde Crax'hasta hoy. La trasposi-cin de la nocin de lo 'bello' (coincidente con la de lo 'bueno') del objeto del discurso al discurso mismo termin por asimilar el gnero epidectico a la literatura. El resultado final fue la llamada litera-turizacin de l retrica, de una retrica ya disgrlada, en la que el gnero deliberativo estaba unido a la teflexilfilosfica y el judicial englobado en la dialctica.El segundo libro de la Retrica de Aristteles sienta los conceptos destinados a alimentar la didctica y la praxis de la disciplina en los siglos posteriores: thos esto es, el carcter, los modos de comportarse del orador, tanto en su-profesin como en la vida, y, por tanto, su moralidad y pthos es decir, el conjunto de pasiones que han de suscitarse, la vida emocional que se convierte en el objeto de anlisis y el motivo de la argUmentacin. Este desarrollo psicolgico de la retrica (idado que h retrica existe en una situacin judicial [...] no slo es necesario 'Atender a que el discurso sea probatorio y convincente, sino tambiln a presentarse uno mismo de una manera determinada y a poneij al juez en una determinada disposicin, tanto en la deliberiCin tomo durante el proceso) se basa en las cualidades qu confieren 'credibilidad y, por tanto, poder persuasivo al orador (la prudencia, la:Virtud y la benevolencia) y procura al autor la ocasin para realizar un breve tratado acerca de las pasiones (la ira y su contrario, esto es, la mansedum-29

262701

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Hacia el fin del siglo iv a. C., Zenn; fundador de la escuela es-toica, se pregunta a su vez por la relacin entre la retrica y la dialctica. Su respuesta' est encerrada eh un gesto, acorde con la con,8 Para la nocin de plibnon y las doctrinas de la Nueva Academia, en relacin tambin con las interpretaciones ciceronianas, vase Nonvel Pieri 1978.32ciertamente, Aristteles no se pregunta por qu ste no es un caso general de la maravilla suscitada por la unin de cosas remotas, y por qu, en cambio, nos provoca la reaccin espefica de la risa: se le escapa la agresin a los valores bajos, libidinosos o insolentes, sobre los que Freud fundara su interpretacin muchos afros mas tarde.Aristteles no alude apenas a las connotaciones de la comicidad, pero, aun as, determin su tratamiento, que llegara a ser inexcusable, en los tratados posteriores de arte oratoria. Es interesante que el tema de la comicidad del discurso haya sido rtomado, en nuestros das, por Olbrechts-Tyteca (1977),,colaboradora de Perel-man en la construccin de una neorretrica de ascendencia aristotlica.Tefrasto fue el continuador directo de Aristteles en la elaboracin de aspectos parciales de la doctrina retrica, entre las ltimas dcadas del siglo iv y las primeras del siglo ni a. C. Teofrasto, cuya obra e ha perdido (tenemos noticias de ella por citas fragmentarias y, especialmente, por los comentarios y parfrasis de Cicern), introdujo una triple divisin del estilo (sublime, medio, humilde) que tuvo una gran difusin en pocas posteriores, y que constitua un desarrollo del precepto aristotlico de atenerse a lo 'conveniente' (prepon), esto es, de encontrar, para cada materia y situacin (circunstancias, destinatarios), el modo ms apropiado de expresarse.Dentro de la escuela platnica se produce un cambio de perspectiva respecto de la retrica, La Nueva Academia, al sustituir el principio de la verdad por el de lo persuasivo (pithann), se inclina hacia el mbito de la dxa. Un razonamiento persuasivo es ms creble cuantas ms contradicciones supera. Este es el clima en el que se formarn las concepciones epistemolgicas de Cicerns.1,6. DE LOS ESTOICOS AL AGOTAMIENTO DE LA RETRICA EN GRECIA

cisin extrema que perseguan los estoicos (quien quiera aprender a callar, que vaya a la escuela de los estoicos, comentar Cicern ms tarde): con el puo cerrado, indicaba Zenn el carcter preciso y conciso de la dialctica, con la mano abierta, la palma extendida y los dedos estirados, los modos verbosos y difusos de la retrica. De nuevo (como en Platn y Aristteles), reaparece la contraposicin entre braquiloga y macrologa, con la nica y sustancial diferencia, con respecto a Platn, de que la retrica se estimaba no como una prctica, sino como una parte de la lgica (la otra era la dialcticuya funcin es la de regular la exposicin del discurso cientfico mediante una tcnica rigurosa.En la misma lnea de la tradicin estoica, pero con elementos extrados de otras doctrinas contemporneas y, particularmente, del eclecticismo de la Academia, se impuso a mediados del siglo u a. C., el sistema retrico de Hermgoras de Ternos, que tuvo un gran eco, posterior, especialmente en sus aspectos jurdicos.Hermgoras dividi el mbito de las competencias retricas en thseis (tesis), cuestiones generales, e h3pcthseis (hiptesis), controversias sobre casos particulares. Los latinos, que adoptaron rpidamente las innovaciones terminolgicas de Hermgoras, tradujeron el primer trmino comogenus infinito (o quaestio infinita/ monis / generalis, o tambin propositum), cuestin indefinida / general, referida a clases de individuos y situaciones tpicas, y el segundo trmino como genus definituin (o quaestio finita/ specialis, o tambin causa), cuestin definida, esto es, que concierne a personas, circunstancias, lugares y momentos. Ejemplos de quaestio monis en los tres gneros oratorios aristotlicos: en el judicial, si es justo que una mujer que ha asesinado a su esposo sea asesinada por su hijo; en el deliberativo, si se han de sortear los magistrados; en el epidecti-co, por qu las bellas artes son de utilidad pblica:La biparticin en tesis e hiptesis corresponda a la distincin aristtelica entre lugares comunes y lugares' propis o especficos, y estaba destinada a reavivar el debate entre rtores y filsofos, dado que.aqullos pasaban a ocuparse de argumentos de mbito general que los filsofos consideraban su patrimonio especulativo.Otra innovacin de Hermgoras fue una clasificacin de los discursos que tuvo especial importancia en el mbito judicial, ya que se basaba en la nocin de stsis (en latn status causa, determinacin de la33

cuestin sobrela que trata una causa). La.priinera divisin separaba el gnero racional: (que depende del. sentido comn) del gnero legal (que depende de la legiSlacin dila materia), que, a su.vz, se .subdivi-den de la 'manera siguiente:a) tipos de gnero racilnal:1. conjetural: quin 4 el autor de la accin.encausada?2, definitorip'(que conlierne a la definicin del hecho): la accin, es o no es delictiva?3. cualitativo: ton qu intencin se actu? . . .4. traslativocoinpetes a este juez entender est caso?b) tipos del gnero legal:1. la letra y.01 espritu de la ley, cuando ambos parecen contravenirse;2. las lyes Contrarias., cuando una ley contradice a otra;3. la aliglie.dad, cuando es posible ms de una interpretacin de la norma;4: el silogiliO, cuando se quiere inferir, a partir de las leyes existentes, 'las normas -para los casos no previstos explcitamente.La clasificacin.de Hermgoras convivi,:en la retrica griega y latina, con la. triparticin -aristotlica de los gneros, a pesar de que sus criterios tipolgicos diferan radicalmente; se desarrollo de forma paralela a ella y lleg a englobarla, pero no a sustituirla, y permaneci vinculada, por t rigurosa tcnica.casustica, als mbitos d los estudios jurdicos y de la prctica judicial.Desde comienzos del siglo 1 a:C., las dos alternativas frmales del discurso, la amplitud y la breVedad, a las que Se. uni muy pronto la amplitud moderada; evolucionaron en direcciones distintas que tomaron el nombre de sus respectivas escuelas. El estilo asitico, exuberante y grandilocuente, se afirm desde el siglO in a. C. como .un producto tpico y vivaz de la helenizacin de Oriente. El estilo rodio (o roden-se), ms tempirado, caracteriz la clebre escuela de elocuencia que inici Esquines, adversario. de DeMostenes. El estilo tico, conciso, lineal y elusiVolnaci como reaccin l asianismo, como su contrapartida pilla y.cOnservadota, hacia el final del periodo helenstico, en el siglo i a. C. Los aspectos estilstiCos de la retrica aumentan progresivamente en la preceptiva y en la prctica oratoria, cuyas* relaciones'conla gramtica son cada vez' ms patentes.. ,El purismo lingstico del aticismo conjuga el principio de la imitacin. de autores cailnicos (incluidos n una lista o canon) desposita, nos de la pureza del lengua, con el principio de la regularidad de134

la escritura, y se adhiere a l,teora. gramatical de la analoga (la lengua se desarrolla y se organiza segun reglas definidas rigurosamente), contraria a la doctrina de la anomala (el cambio incesante del sistema depende de la imprevisibilidad de los usos), ala que se remitan los seguidores del asianismo, que, en abierta polmica con el criterio aticista de la imitacin, defendan la originalidad (es decir, el componer segn los impulsos de la pasin) en el plano estilstico y literario. Dos maestros de retrica griega, Cecilio de Clate (Sicilia) y Dionisio de Halicar-naso (Asia Menor), cuya actividad se desarroll en Roma en los tiem-pos de Augusto, dedicaron su esfuerzo a exponer detalladamente lasnormas gramaticales y estilsticas: de este tipo son los estadios de Dio,nisio (famoso tambin tomo historigrafo) sobre el estilo de Demste,nes y de TuCdides. El mismo Dionisio nos dej una obra de extraordi-nario interS acerca del orden de las. palabras en el discurso,. Al anlisis y a la preceptiva d la elocucin se opona, en el frente aticista, la creciente rigidez tcnica de la estructura argumentativa: elpreceptor de Augusto, Apolodoro de Prgamo, exclua los elementosemocionales de las demostraciones, que deban fundamentarse en hechos desnudos. El debate que suscitaron estas cuestiones determin laltima, en el tiempo, de las obras ms importantes de la retrica griega: el annimo Peri hipsous (De lo sublime, que, tras una larga controversia, se ha datado en la primera mitad del siglo t a. C.), el nico tratado de, retriea compatible con la enseanza platnica (Barilli1979: 29).

Harold Bloom ha escrito:en rigor, el trmino Sublime o osos del ttulo debera traducirse como grandeza, o punto ms alto e incluso alta escritura, o bien, comoyo, dira, poesa fuerte.(Bloom 1987:145)El hroe de esta obra, la encarnacin ejemplar de la idea que la inspira, es, de hecho, Hornero, el Hornero de la hilada, porque en ella la fuerza del poeta no desfallece (ibid., 146). Las caractersticas de la grandeza formal estn comprendidas en la idea de lo sublime, pero no constituyen su esencia: sta depende, en cambio, de la grandeza interior, que se refleja en los rasgos de los personajes, en el lenguaje, en la accin, es un modo de ser, o de comportarse, msque en un estilo de escritura:lo sublim es el eco de url alma grande. Est all donde un pensamiento desnudo, que carece de voz, es admirable por s mismo, por su grandeza,35

cisma), en nombre del desbordamiento de la pasin y de la urgencia de la fantasa:En puridad, d advertir la presencia de figuras infunde sospecha y suscita la duda sobre la:existencia de una trampa, una insidia, un engao [...] PM ello, la figura ms lograda es la que oculta su condicin de tal. Ahora bien, lo sublimey el pathos son, precisamente, un remedio y un auxilio admirables contra los prejuicios sobre el lenguaje figurado: la habil': dad tcnica, rodeada de belleza y grandeza, lo invade todo y se sustrae acualquier sospedia.( lo sublime, 17, 1-2)precisamente: lo es el gran silencio de Ayax en la Ne4ya9, ms sublime que cualquier discurso.(De lo sublime,,9; 2)La retriCa del silencio es la que alimentar los grandes momentos de la creacin artstica: la poesa de lo inefable y la fuerzaevocadora del callar que eyresa muchas ms cosas que la palabra(como cilla Divina Comedia: 01 giornopis; non 'Pi leggemino mute [aquel da no seguimos leyendo, l'Orno,. V,1381)>0La aptitud para concebir pensamientos graneles es la pritnera y ms importante de las fuentes de lo sublime, Es una cualidad inna-ta, al igual que lo es la segunda, el patho.inspirado y arrebatador.

1.7, ORATORIA Y RETRICA EN ROMA. LOS PRIMEROS TR/dADOS LATINOSLa retrica romana y Sus productos :tericos principales (desde la beton' c4 ad Herennid hasta Quintiliano) son una reelaboracin de la retrica griega, y, en concreto, de las teoras aristotlicas y pos-taristotlical .Son originales, en Cambio, la disposicin de laS materias, las interpretaciones jurdicas y las proptiests procesales, el valor educativo (de formacin .cultural 'y moral, adems de especial y tcnica) asignado al estudio y a la prctica de la elOcuencia y la siste-Maticidad de las formulaciones didcticas'.El BrUtus de Cicern traza un panorama de la oratoria precice-ronigia, Los oradores recogidos en l solan yubliCar sus discursos con fines de propaganda poltica y moral. tos l hizo, a principiosdelfliglo ra. G., Catn el Ceniot, cuyasque no han llega-

do hasta nosotros, deban disimular todo rastro de artificio para parecer lo Ms:`naturales' posible y libro:dt co :Clibes a la tcnica retrica.-y, por consiguiente, a la cultura_lega. El orador,: segn el famoso precepto de Catn,,deba tlillloffibre probo y recto, hbil con la palabra (vir bous dicendideritiis);;Imiiii de la-ma-teria procuraba habilidades setnejntes (rVerba seOritgi).En la larga tesela que halelrlfge-stillredetesorl.M todos los plticosoprincipaldde 141 republicana..fiiertittienos Oradores), sobresalen ESCipin Ernillap;9111:elio,-Servi Sulpi-cOalba; Cecili Mell Maull: Tiberio TCayo Graco; ms tarde, Marco Antonio y 1411111p cos0,-ltie,se.on los interlocutores principales del De Oratore cicIroiligii;(0 Aurelio Cota, y el gran RortenSio. Una ratril arill,',110:enocemos slo de ma-nera indirecta.37Las tres restantes se adquieren, en cambio, por medio del arte: Soitla especial composicin de las figuras (de pensamiento y d cin), la potencia expresiva en la eleccin de las palabras y de lostropol y, por ltimo, la quinta cansa, de la grandeza es el compendio de todas las.que la preceden, el decoro y la elevacin de la com-posicin (de la ynthesis, esto es, de los procedimientos rtmico-eufnicos y de la sintaxis pOtica, la adecuaCin y opOrtunidad de cada deniento del estilo)...EI pibas. es lo que une poesa y oratoria, pero mientras la poesa tiene como fin el extraamiento, la prosa, busca la claridad y la evi-dencia. Ambas se nutren de la fantasa, de la que se: ice, con ala-bras car as de sugerencias:ppor lo comn, la fantasa se define como todO aquello que.produce una idea de la que nice.un disdso; el nombre se ha impuesto ahora, sin embarg, para designar a los discursos en los que las cosas se dicen en elentusiasmo de la pasin parece como si e vieran ose pusieran ante los ojos de los espectadores.(De la sublime, 15, 1)El anlisis de las figuras retrieas y,.en general; de losprocedi-mientas de estilo manifieSta una atencin consciente ala diferencia entre el artificio y el arte que parece dsinentir, en principio, los furores antirretricos de pocas posteriores.(pinzse en.elyomauti-lel desculo a los ififkrnos de Ulises en Odisea, XI, 541-564i Ulises. intentacon palabras derniell hacerSe perdonar,por Ayax por haberle sustrado,: con suhabilidad oratoria; el premio de las armas de Aquiles.!0 El lenguaje de lb inefable en la Edad Media ha sido objet de un agudo estu-mbo. 1987.36

17i.Los A1. rl' p ..'larb htdk d Ilios ,,,.,1,0T,SM,131 .1. QIINIgn , . ec ne r e ode igrie-gos asis '-.'. ndo a sus tTy .,, 1 11Ielebrespecialm'ente la asirla y la rodia; . : ay que llegar, lid embargo, al segundo decenio del siglo i (entre el..82,y el 85.1:.1)i y po Ihtet, para encontrar tina obra retri ca escrita eh latn: la Olio 41iierennittin, atribuida hoy, con slidos argumentos; 'a un retOr JlaMiclo .CornifietO, .,}7: no a Cicern, como haba hecho errneamente una tradiCin tarda. Es un manual amplio, en ctio-ii:41;:r0;'quealiadi la cialilkin de Herma'-goras a la tipologa aristoOlita de los disCiirSos y ata diVisin, de stos en partes y Ciiyadesc10h.,de las figuras denuncia la influencia de las doctrinas aliano-heleniSticas. El tratamiento tcnico est sub ,clinado a la definicin Previa de los oficios del oradon) y del:',roiniso. inOrakl Civir.,11.e sti.actividad.La ghetorica ad Heretoul realiz una tarea importante la de instituir W nomenclatura retrica latina mediante traducciones o cal-cds del/griego; son mninias las variantes que introdujo la tradicin posterior ,ES tambin notable la adicin de la oori. a 1 las cuatropartes organizativas de los discursos (lbentio ii hallo de los argu-Mentos; 49.sitici O dispositin, de ls mismos; ellutio o .expresin; pronunciatio deciamaCin y presentacin). La moda es la capaci-dad de recordar, que se obtiene y se refuerza con procedimientos tcnicos especficol, de.los que: l autor del tratado ofrece.una relacin minuciosa, predecesora de las artes mnemnicas medievales yrenacentistas. El De kventiohe, en dos libtollcfr. ms adelante, 2.2), es un tra., bajo juvenil de Cicern contemporneo dela Rhetoricaad 'lerendo, a la que se asemeja en el tratamiento de temas comunes. Ambos tuvieron la fortuna d ser los nicos vehculoS de transmisin de laretrica antigua a la Edad Mediaii,1.8. CICERN: EL TRIUNFO DL ARTE ORATORIADe la preceptiva al, debate filosfico; es ste el salt cualitativo que tiene lugar en Ja retrica romana con lo obras del periodo de madurez de Cicerk el DrOriitore, en tres libro, la obra maestra dePara la Rbetotic ad lieremito son fundamentales la introduccin y el cnien-tario de Calboli (cfr. la edicin crtiCa de la obra), a la que se remite tambin para una revisin analtica de las figuras.

1 Brutas,- revisin elegante de la oratoria la-tinal ; retrica cel ooi.ieocr; oni a importante paral: teora de la prosa y del ritmo; y,adems, los tratados menores: el De optimo genere oratorm, las Partio-nes oratiiae, sntesis manillstica y clara mediante preguntl y res-puestasly lOs Topica, reformulacin de los Topica de Aristteles para su utilizacin en la prctica jurdica.En .la secular polmica, que reavivaron los, estoicos, sobre las fronteras entre la retrica y la filosof101gunOs devaluaron h pti-mera :por ser nociva para la administracin d_estado e intil Para la oratoria misma. La autntica elocuencia, argumentaban, no necesita secos preceptos y artificios, ni stos capacitan para el conocimiento y la prctica,jurdiCa.: Ya se la considere como una prctica .o como una tcnica, la retrica queda confinada'a un mbito especia-izado y restiringidO, ya que no puede pretender ocuparse de ciiestio, nes tericas reservadas a la indagacin filosfiCa. En contra de estas afirmaciones, Cicern_ realiz una vigorosa defensa de la retrica como arte (ars) histricimente deterniinada, esto es, 'variable eti el tiempo yeti el espacio, y Complementaria de la filosofa, ms con, citainetite, -de la lgica y .de la dialctica.El debate dramatizado en el De Oratore (los interlocUtores principales son L LiCinio Craso y M. Antonio, qu dominaron l foro en la.gentrcin anterior 'ala de Cicern) pone en contraposicin la tesis de la relacin.intitua entre ciencia y elocuencia (el iapere y el di-cere) y la pretensin de restringir la competencia del orador a la posesin y manipulacin del arte verbal. Craso, portavoi de CiCern, sostiene (en 101 libros primero y tescero) que el orador debe tener una preparacin encidopdica y debe conocer los Indamentos doctrinales de las artes principales (si bien se excluyen las disciplinas tcnico-cientficas) si realmente desea incidir en la realidad de su tiempo. La separacin entre res (cosas, heChos, argumentos, esto es, contenidos) y verba (palabras, expresin) no es pertinente cuando la retrica :se_ impone tareas prcticas, no ejercitaciones es-colsficas, sitio Verdaderas batallo procesales y acciones polticasresponsables.En el segundo libro, se confa a M. Antonio la exposicin de la inventio, de la diipositid y d la memoria. De acuerdo con el carcter. de Antonio; se asigna a tngeniitm (a predisposicin innata) y a la dili-(Infla (la atencin eschiptilosa a la causa y las circunstancias anejas) un mayor pso.' que :a la aplicaCin mecnica de los preceptos escolares. Ensear, conmover, deleitar (docere, Royere, detectare) son los39 r14. .

mayor esfuerzo, era un ejercicio de oratoria'forense en el gnero judicial. Lucio lineo Sneca el Viejo public diez libros de con-trversias y uno de suasorias en el primer cuarto del siglol d. C, ofreciendo as un rico ejemplario de argumentos y de mtodos para tratarlos.El abandon del compromiso poltico, sus orgenes y sus consecuencias, son los temas de una obra, el Dialogas- de oratotibus, atribui-da a Tcito (que la habra escrito cuando contaba unos treinta aos de edad). En ella se discuten las cuestiones siguientes: si es mejor dedicarse a la oratoria o a la poesa; si es superior la oratoria antiguao la moderna; y, una vez- resuelta la disputa a favor de la primera, cules son ;las causas (le la decadencia de la segunda. Los tres inter-lOcutores del dilogo son portavoces de tesis distintas. La defensade la modernidad se sustenta en una ampliacin cronolgica de sus lmites (ralmente, el modelo ejemplar delos antiguos, Cicern, po-dra haber sido escuchado por personas que an vivan en el mo-mento de la. disputa), en el elogio de la sobriedad del estilo tico (opuesta .a la ampulosidad espectacular del estilo ciceroniano), enlos beneficios del tium literario, que es la consecuencia debbando-no del ejercicio activo del poder poltico (ventajas del estudio tranquilo frente a las turbulencias de la lucha poltica, y de la vida en laquietud del campo, en soledad meditativa, frente al trastorno de laconfusin ruidosa y competitiva de la ciudad). La sunrioriClad de los antiguos sobre los modernos (defendida por el portavoz 44 au-tor); que se .sustenta en valores ticos, ideolgios y estilsticsi invita a considerar que los responsables de la actual decadecia son lag deficiencias del sistema educativo y la'vaCiedad de las declamaciones elcolares, cuya causa es, en ltima instancia, la desaparicinde la libertad poltica.;.Es importante, en el plano terico, la concepcin de qu la eio-gula (o .capacidad de expresarsel) abarca Mol los gneros del discnrso prosaico y potica Vuelve, jes, si bien renovada en la forma yen los fundamentos conceptuales, la teora del sofista Gor-gias segn la cual tanto la poesa como l prosa eran logos: emmetros la primera, sometida a las leyes de la Mtrica,:401trs la segunda, ca-rente de metro, Segn Tcito, lay, por tanto, los fines socia-

id, distinguen la oratoria de la poesa, cuyas caractersticas son la voluptas, esto es, el placerl, la belle4 desinteresada, y el carcter in-dividual que va unido a s cOldicinoperacin fantstica.fines, inseparables entre s, que han de perseguirse de forna coherente en todas las partes de la oracin (exordio, proposicin o narracin, argumentacin) conclusin). Unadisquisicin acerca de lo cmico, intercalada en el monlogo de Antonio y en bca de Csar Vopisco, retorna los temas y las tcnicas que ya haba tratado Aristteles, lo que confirma la importancia dla teora de la comicidad en el anlisis de los mecanismos discursivos.Eh el tercer libro del De Oratore, le corresponde a Craso tratar la elocutio la .ronundatio. La disquisicin tcnico-preceptista, sin embargo, est introducida mediante una repeticin rotunda del tema inicial de la obra: el contenido (res) es inseparable de la expresin (verba), del Mismo modo que la 'cultura general', el saber en su glo-balidad, es inseparable de la palabra que l manifiesta y del arte de comunicarlo: La revisin ciceroniana de las propiedades de la elocucin, de los elementos constitutivos del matas (tropos y figuras) y de la is cualidades exigidas al perfecto orador (la agudeza del dialctico, la profundidad de los filsofos, la habilidad verbal de los poetas, la memoria de los jurisconsultos, la voz dedos trgicos, el gesto de los mejores actores, De Oratore,1, 48), fundamentar el desarroll de la retrica disida y la constitucin del modelo educativo que la Antigedad transmite a la Edad Media, en el que la retrica ocupa el centro de las tres priMeras artes liberales (entre la gramtica y ladialctica).1.9. LA DISPUTA SOBRE LA DECADENCIA DE LA ORATORIA. LA PEDAGOGA RETRICA DE QUINTILIANOCon la cada de la repblica y al consolidacin del absolutismo imperial, la elocuencia, tambin en Roma, se refugia en las escuelas; con las exhibiciones artificiosas de las declamaciones, el ejerciciode' los preceptos retricos abandona el compromiso poltico y civil..El inters por las declamaciones caracteriza el periodo comprendido entr la primera mitad del siglo 1 y el siglo v d. C, que se conoce con el nombre de Sgunda Sofistica. La declamado, ejercicio escolar de composicin y recitacin, era de dos tipos., la suasoria, propia'del gnero deliberativo, se consideraba la ms simple, y, por ello, era anterior en el currculum; la controla:a) que quera un40

El gran tratado de Quintiliano los'sloce libros de la InsSuttoOratoria escritos nWo sigloC.,:esTorireffiporatiZa esta

obtrCjImpendia de forma didctica y envidiablemente clara todas las tesis principales que han determinado el desarrollo de la retrica antigua. No se trata, pues, de una nueva teora, sino de una suma de las doctrinas precedentes, reelaboradas pedaggicamente y confrontadas con precisin y sistematicidad, cuya intencin fundamental es la de documentar e incluso conciliar los diversos puntos de vista, sin que ello implique, no obstante; una disminucin de la actitud y la conciencia crticas.Con el apoyo complementario de agudas observciones.psicolgicas, Quintiliano expone detalladamente todo aquello que Coadyuva, desde la infancia, a la formaCin del orador: la eleccin delasprsonas que se han de ocupar d.e l en los N'inicios aos, desde el ay al preceptor (examinando pro's y contras de la instruccin domstica de carcter privado y de la escuela pblica), la atencin a las condiciones naturales del nio; los m= todos para inculcarle los rudimentos gramaticales, las nociones de cultura.general, la pronunciacin y el modo de geSticulic..Se pasa .entonces a la

instruccin :retrica propiamente dicha (lectura y comentario de oradores e liltriadores, composicin y Correccin,.inemotizaciky declamacin). Uno el conocimiento de lbs preceptos del arte resulta indisPensable,los ltimos captulos del libr II emprenden su descripcin sistemtica, comenzando por la delimitacin del campo y por su divilin: Etiel libro III, tras una detallada relacin histriCa del nacimiento de la disciplina y de sus cultivadores, se tratan los gneros, los estados deja causa y sus partes, la cuestin, la razn y el ncleo de la causa:- son loS* elementos de procedimiento civil ypenal, cuyaexPosicin prosigue en los cuatro libroS siguien: tes. Los libros IV, V y VI tratan la ine/tio,. que se describe segn las partes del discurso persuasivo (exordio, narracin, argumentacin, 'etc.; cfr. 2.2-7) en las que se distribuye la materia, conesprittleittifirscies, al uso de lis pruebas y A los tipos de razonamiento; en el libro VII, junto a las que hoy el cdigo civil llama disposiciones generales de la ley, se examina la d' itio cfr. 2.8). Los libros VIII y IX se dedican a la docitio: los tropos, las iguras y la fitirip:o (cfr. 2.9-20). El libro X (quizelmis conocido, junto al .1 y el XII) contiene tina. relacin dpoetas y prosistas griegos y latihol, cuya lectura recomienda 'Quintiliano al futuro orador. Sobre cada uno de ellos se ofrecen juicios sinteticoque, adems de su importancia objetiva, son un fiel testimonio de la, mentalidad y laforMacin cultural del qu los realiza; nos muestran en qu consisteel punto de vista retrico en la valoracin de autores y textos literarios. Sigue la descripcin de los ejercicios;basados en la imitacin de modelos: se trata, sin em-

bargo, de una imitacin activa, que, en competencia con antecesores ilustres, aspira a .superarls Mediante la emulacin; slo m podr tomar cuerpo la figura del perfecto orador (del vir bous dicendijeritus, d catoniana y ciceroniana memoria)' que Quintilano esboza en el ltiMo libro, .tras 'haber tratado, en el XI, las dos partes restantes de la oratoria: la memorizacin dedos discursos y su recitacin.Los tratadistas posteriores; a partir del Humanismo, se reconocen en el modelo de Quintiliano, que gozar de un extraordinario prestigio y que determinar; para bien y para mal, lo que se define como retrica.clasical: determinar tanto la claridad como la incoherencia de las divisiones, el dominio equilibrado de materiales diversos (de la sofistiCa, de Aristteles, de Hermgoras, etc.) y la debilidad del pensamiento, por ej., respecto a la cuestid(doctririal y deohtolgica) del comportamiento del orador cuando ha de defender lo falso), ms an, la visin global de la cultura y la concepcin, peligrosamente reductiva, de la retrica como ciencia del hablar bien.1.10. DE LA ANTIGEDAD A LA. EDAD MEDIALa Edad Media, hereda l conjunto de los sistemas retricos y poticos greco-romanos .como un bloque nico, sin advertir ls hiatos, y, menos an, el fin de una poca, en la ininterrumpida transmisin d la cultura antigua.En la cultura clsica, ' partir del` siglo u de la'era vulgar, haba tomado cuerpo la opoSicin entre la tradicin pigana y la naciente teologa cristiana. Los elementos ms destacables son (1) en el plano jurdico y dialctico, la dolencia combativa de los apologistas; (2) en el plano.de la comunicacin, la antirrettica del sermo evanglica(1) La tarea de los Padres apologiltas es la defensa de la religin cristiana frente a las acusaciones e incomprensiones de los paganos; 'el gnero retrico ms acorde con la apologtica es el gnero judicial. El Apketiaiin de Tertuliano; escritor prolfico y de sobresaliente 'destreza retrica y jurdica, Ofrece, hacia fines.del siglo II, la requisitoria ms pderosa.y vehemente contra los mtodos inquisitivos que conducen a inicuas persecuciones y repugnan tanto al derecho natural como al positivo porque dan lugar a acusaciones ne-43

sus correspondientes hbitos retricos no sigui, por parte cristiana, ningn intento de corregir la lengua y el estilo bblicos segn las formas literarias cultas griegas o latinas.Resulta ejemplar, como ensea Auerbach, el testimonio de Agustn (35.4-430) sobre esta materia. Hombre de elevada cultura y rtor de profesin (como tambin lo fueron Cipriano, Arnobio y Lactancio), haba manifestado, antes de la conversin, una repulsa total hacia el estilo de las Escrituras; comprendi despus, bajo la influencia de Ambrosio, qu la humildad del estilo bblico tiene la finalidad de hacer entender a todos la palabra de Dios, a la vez que la profundidad de los conienidoS y de lds sentidos ocultos es tal que pone a prueba el vigor intelectual de aquellos que no son superfi-c'tales12En la' relacin entre forma y contenido, entre estilo y sentidodel mens'aje, la dialctica de lo humilde y lo sublime surge de la esencia misma de la revelacin:' la encarnacin del Verbo divino esel mximo grado de sublimidad en la humildad.Los Padres de la Iglesia, educados en las teoras y en la prcticadel arte retrica clsica, asimilan enteramente los ingredientes bblico-cristianos de la expresin: la nueva retrica viva, la oratoria vital del sermo humilis, que va consolidndose poco a poco, encuentra en la Biblia el arquetipo de todas las retricas paganas. Impregnar sustancialmente toda la cultura sucesiva con contenidos nuevos y con una nueva organiiacin y expresin lingltica, vivificando las formas que, en el 'mundo clsico, estaban en Vas de agotarse.En la obra De Doctrina allana, Agustn Se pregunta cmo puede aplicarse la retrica escolar en la predicacin, dado que no es justo privar a los defensores de la verdad de las municiones oratorias ms eficaces. para la persuasin educativa y la exhortacin.al bien. Siguiendo la concepcin ci-ceroniana de los tres niveles de estilo;. Agustn recomienda el estilo humilde, desnudo, pero no inculto, para la exgesis de los textos, bblicos y, engeneral, para la explicacin de la., clowia,:tristialiaket1),.el estilomedio, adornado con figuras, para el disirso epideiCticovituperaresive ladee; ejemplo el elogio de la virginidad); el estilo elevado, para indu-cira la accin (fin: ilectere) con o sin el apoyo de figuras, pero siempre con gran tensin emotiva. Los tres niveles deben utilizarse en una misma pre-dicacin.(QUintiliano habla ya recomendado la alternancia de estilos en el mismo discurso), pero el tono elevado no debelprevalecer sobre los otros,12 it exerceis ido:timo oro qui noilli)eves torile (Confessious, 6, 5).cas y absurdas (de infanticidio, de canibalismo, de prcticas incestuosas, etc.) sin pruebas ni fUndamento alguno. La argumentacin en defensa de los perseguidos est reforzada por la confutaCin de ls principios y prcticas rituales del paganishib: de stas, observaba Tertuliano, se haban alejado ya las inejores tradiciones filosficas griega. y romana, sin quepot ellolubieranabandonado la alabanza formal y oportunista de las creencias religiosas tradicionales. Junto a la intransigencia de la apologtica ms rigida, se esbozaban conductas ms conciliadoras respecto de los pensadores pre, cristianos: es sta la lnea moderada que va desde Minucio Flix -.-a-bogado en Roma, Contemporneo de Tertuliano, ciceroniano en la escritura y en el estilo de argumentacin filosfica hasta Lactancio (el Cicern cristiano). Testigo de la ltima persecucin diocleciana (303-311) y del edicto conitantiniano de conciliacin (313), Lactancio pretende el mutuo fortalecimiento de la sabidura humana y de la fe. Entre los siglos iv y y, la cultura clsicalacristiana florecen sin excluirse mutuamente.y(2) En la transmisin del mensaje cristiano, la desnuda eficacia de la verdad de la palabra, manifiesta en las Sagradas Escrituras, se contrapone a los tecnicismos de la antigua. arte del decir, cuyO desarrollo fue ajeno a la revelacin divina y, pOr ello, no recibi la ilu- minacin del Verbo. En el. bando contrario; la mayor parte de los paganos cultos (citamos por el autorizado volumen de Auerbach,19832: 48-49):.consideraba ridcula, confusa y carente de atractivo la prodccin cristiana primitiva, tanto en sus formas griegas como, sobre todo, en sus primeras formas latinas. No slo les pareca que el contenido era una . supersticin pueril y absurda, sino que tambin la forma era tina ofensa al buen gusto: el lxico y.la sintaxis denunciaban impericia, eran vulgares y de bajo nivel, 'y, a menudo, llenos delebraisiuos; muchos elemen-ts parecan bufonescos e incluso grotescos. Los pocos pasajes que, por su furia, posean un innegable poder de atraccin parecan ua mezcolanza turbia, el producto depila subcultura fantica y sectaria. Reaccionaban, pues, con 'decisin, con desprecio, disgusto y rechazo. Les pareca inconcebible e intolerable que escritos de esa clase trataran los pro-blemas ms profundoS,.,y que ellos' encerraran la iliiinInaci!S9 y la salvacin de los hombres.La autoridad y el poder formativo de los textos sacros eran tfuertes que a las reacciones del gusto y de la mentalidadentalidad clansacos y de

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mo de primer libr de texto. Quintiliano haba separado las competencias del gramtico de las del rtor;.Donato incluye el anlisis de las figuras en. el programa .de formacin lingiiisticopamatical, como un medio para adiestrar la inteligencia del estudiante en las sutilezas del lenguaje(Murphy 1983: 42).En los primers decenios del siglo y, el tratado alegrico pnaptiis Phi-lologiae et 'Venni de Marciano Capella seala la intrOducdon de las sieteartes liberales en la Edad Media.Aunque los Disciplinamoshoyen' de Varrn 14 introdujeron nuevas dis-ciplinas en el currculum de los romanos, la medicina y la arquitectura haban sido dejadas de lado a partir del siglo v, mientras que se conservaron siete disciplinas, que Capella presenta en el siguiente orden: gra-tntiea, dialctica, retrica, geometra, aritmtica, astronoma, msica 15. En el siglo siguiente, las enciclopedias de Isidoro y Casiodoro con-lirnian esta sucesin general, consolidando as el modelo tpico del tri-viudt y el quadripium Las tres primeras disciplinas conciernen a las palabras, y las cuatro ltimas a conceptos matemticos, de modo que el conjunto puede considerarse un currculum completo.(Murphy 1986:49)En el De nuptiis..., el tercer libro est dedicado ala gramtica (que ensea a leer y a escribir), el IV a la dialctica y el V ala retrica, que se presentacomo,una mujer d gran estatura y noble porte, con el rostro nimbado por un resplandor luminoso. Tocada con un yelmo y coronada con regia majestad, sostena en una mano las armas con las que acostumbra a defenderse y a herir al adversario, y resplandeca con un fulgor semejante al del rayo. Las vestiduras que llevaba' bajo la armadura estaban cubiertas, como es costumbre entre los romanos, por un peplo que le envolva los hombros, 'y que desprenda diversos destellos de las luces de todas lasfi-gurae y de todos los schemata.(De nuptiir, V, 425, apud. Murphy 1986:50)La obra, un prontuario enciclopdico de las nociones fundamentales d las siete artes liberales, tuvo gran difusin y gran fama en la Edad Media, si bien el compendio de retrica (derivado de Cicern en la parte judi-14 Verrn Reatino (116-27 a.C,), erudito romano, amigo de Cicern. La obrade la que trata se ha perdido.15 En la ordenacin medieval, la gramtica ocupa siempre el primer lugar, y la retrica precede algunas veces a la dialctica. La secuencia trivium-quadduiton, entodo caso, permanece constante incluso cuando cambian de lugar sus componentes (nota 9, en Murphy 1963:52).47antes bien, ha de ser el sermo humilis el que debe cletert'iina;r tanto la andadura didctica como la vivacidad dramtica que iiinta',ebuso cotidiano de la lengua; es el que pone ante los ojos de los oyetes el objeto del discurso, elque simula la accin y el que proporciona nervio y poder persuasivo y en-cantatorio a la predicacin,Lo que se aplica a la divisin de los estilos no rige con los argumentos: las gradaciones paganas de stos ltimos no pueden aplicarse alos contenidos de la catequesis: el objeto del orador cristiano es siempre la revelacin cristiana, y sta no es nunca un objeto de grado medio o humilde (Auer-bach, 1983:50). Tpdos los argumentos son grandes cuando, como sucede en la predicacin, se trata la salvacin eterna de los hombres, y a todos les conviene el estil elevado; inversamente, los mas altos misterios de la fe pueden expresarse con las palabras simples del estilo humilde, accesibles a todas las inteligencial'(ibfd,). Esto es una infraccin del principio que prescriba la,adecuacin de los estilos a la naturaleza de ls distintos tipos de argumentos, principio vivo de toda la tradicin retrica y potica de la clasicidad y destinadd a persistir durante la Edad Media y a resurgir con el clasicismo renacentista. Para Agustn, en cambio, la gradacin estilstica se adecua'solamente a los fines (ensear, alabar o vituperar, inducir a laaccin): se mantiene, por su valor pedaggico,. pero slo se aplica a la expresin.Una visin esquemtica de la retrica de ste periodo debe reflejar la separacin, ya crnica, entre el arte oratoria como conjuntode medios destinados a inducir a la accin y la preceptiva de la.ex-presin. Esta ltima no deja lugar a las poticas autnomas: incluyea la potica como arte de componer en prosa y en'verso, y, a la vez,

invade el campo de la gramtica ose deja absorber parcialmente porella, segn las circunstancias pedaggicas y el prestigio de sus cultivadores '3.En el siglo tv, el Ars Grammatica del prncipe de esta disciplina, Elio Donato, destina una seccin (el libro tercero, conocido como Barbatismns por ser sta su primera palabra) a las figuras retricas: esto equivale a afirmar que la normativa para escribir correctamente incluye tambin los preceptos para escribir ornadamente..EI Ars Grammatica constituye el Ars menor, dedicado, en la parte restante, a profundizar en las ocho partes gramaticales del discurso, de las que el Ars minor, un breve manual titulado De pamba orationis, contiene una descripcin elemental. Este ltimo tuvo tal divulgacin que el trmino Donatnr, o Donet, fue en la Edad Media sinni-13 La preceptiva de la expresin literaria contaba, entre las obras clsicas, con el Ars Poetica de Horacio (escrita entre el 23 y el 13 a.C.).46

cial y de Aquila Romano16 en la teora del ornatus) carece de originalidad y de peso doctrinal,El sincretismo nocional en la elaboracin del saber clsico culmina en la actividad enciclopdica de lloecio (480-524). Su traduccin del Organon aristotlico constituye la llamada logka vetara ( la que ms tarde, en el siglo xiii, se aadir la logica nova). Los cuatro libros de comentarios de los Topica de Cicern tuvieron una difusin extraordinaria en toda la Edad Media bajo el nombre d 41'0. Boethii. El libro cuarto afronta las diferenias entre la dialctica, que se ocupa de la thesis (cuestin sinlas circunstancias), y la retrica, que se dedica a la hypotheris (cuestin (le incluye una gran cantidad de circunstancias). La primera procede dialgicamen te porre-guntas y-respuestas;se sirve-de .silogismos perfectos, y su fin es abatir, mediante el razonamiento; al interlocutor- adversario; la segunda, en eambio, produce 'discursos extendidos y continuos, le basta el uso de entimenias, esto es, ,1de silogismos abreviados; y su finalidad es la de conmover a,uno o ms jueces. El tratamiento beciano del ars rhetorica comprende prin-cipalinente la doctrina de los status causae y menciones Someras de los nuncitio'gner4 partes del discurso; fi trata ni la elocutio, ni la Memoria, ni la ros(480-575), el primer enciclopedista cristiano, se remite a Boca. y a Aristteles para la dialctica; para la retrica, a Fotunatino y ViCtorino17, adems de a Cicern; para la gramtica, Donato. De todo . ello resulta una obra poderosa, las Institutiones divkarirm et secularium 'littera-no; destinada a la educacin de los monjes, que tuvo una duraderain-flo Mauro.fluencia en los autores posteriores, y, particularmente, en Isidoro y Raba-El gramtico Prisciano fue contemporneo deBoecio y Casiodoro y su nombre lleg a ser equivalente arde instruccin (gramatical) superior del mismo modo que el d Donato lo era de instruccin elemental. Su his-/tilo de arte grammatica tuvo una vasta resonancia. Tuvieron una influencia comparable sus ejemplificaciones mtricas extradas de Terencio, de Plau-to y de otros poetas latinos y griegos, su traduccion latina de una parte de los Progymriasmata de Hermgenes18 y, poiltimo, su anlisis de Ice ver-Edad Mdia, sos virgilianos, que contribuy al conocimiento y al culto de Virgilio en la Un siglii'despus, el obispo Isidoro de Sevilla (570-636) compuso eltimo compendio enciclopdico de la edad patrstica:Origines, pronto l

conocidos como Etimologiae por el meticuloso trabajo etimolgico que los16 Rtor latino del siglo ni.17 En actividad entre los siglos ni y iv.18 Hermgenes de Tarso (ca. 160-225), rtor y sofista cuyos escritos forman, enridad pedaggica.conjunto, un curso completo de retrica, no original, pero s sistemtico y con cla-.48caracteriza. La, obra presenta, in nace, el diseo del currculum de los estudios universitarios medievales, al situar las siete artes liberales (en el orden siguiente: gramtica, retrica, dialctica; aritmtica, msica, geometra-y astronoma) como propedutica del estudio profundo de materias tanto profanas como religiosas. Sus fuentes principales son Donato para la gramtica y la retrica (con ecos de la, kbelorica ad Herennium y de Quintiliano, y con ejemplos de Cicern y de Virgilio) y Casiodoro para la dialctica. Una observaCin de Murphy (1986:87) puede servir como conclusin:Las Etydlogiae son [....]un punto de referencia en el paso del pensamien-taantigno.al medieval. en .1Q.que respecta: a lasytes .del discurso. Estas conservan, ante Mdo,'. la estructura de la tradicin antigua. Desde est perspectiva, se encuentrn asociadas a las /intim/iones de Casiodoro y alDede Marcilim, pero fueron, con mucho, las ms divulgadas de

la Id Media [...], y [...]las que ejercieron un influjo mayor:y mS du-rader1.11. NOTAS SOBRE LA EVOLUCIN POSTERIOREl conjunto de noticias fragMentarias de los prrafos precedentestiene una justificacin utilitaria: se pretenda sealar (someramente; para atenerse a la economa de este volumen) de dnde provenan los elementos que fundamentan el armazn cuyos principios generales intentaremos describir en el captulo 2. En lo que concierne:a los sucesivos avatares de la retrica a partir de la Edad Media, no tendra sentido ni utilidad prcti-ca seguir un procedimiento semejante.,Para las pocas griega y romana, e incluSo para el periodo patrstico, la eliminacin de prblemas y el empobrecimiento del panorama general podan producir el espejismo de que se haban seleccionado los datos ms importantes par.una ulterior presentacin analtica del imponente corpus de anlisis del discurso que se conoce con el nombre'de retrica clsica. La justificacin o el espejismo no s sostendra en el case, de una revisin sistemtica de los avatares que tvieron lugar en los siglos que presen-ciaron el alineamiento de este corpus en polcines-de'dependenciliespec-to del universo de la cultura contempornea (afirmacin que es tambin vlida para la retrica antigua). La nOtificacin no se sostendra aunque slo fuera porque, a partir de la Edad Media, tenemos que vrnoslas con un conjunto consistente y.ya bien definido, cuyas eventuales fluctuaciones afectan a mbitos y prblemasparticulares (los gneros, la clasificacin relativa de los textos), ya atribuciones y sustracciones:de competencias: desde la inclusin de la retrica en, la gramtica general durante la Edad Media hasta la ruptura renacentista etk las dos 'primeras y las tres t'al;49

aliadas en los dilogos de Platn) puede considerarse a su vez el antece-nte de la Oputa.tio escolstica del siglo xii. La didctica oratoria dla con-wersia,. perteneciente al gnero judicial, y el estudio del mtodo dialctico Aristteles influyeron 'en el surgimiento y consolidacin del gnero d disputado, cuya estructura adquiri una rigurosa fornializacin: 1) pro-ema; 2) propuesta de solucin; 3) objeciones a la propuesta; 4) soluCin maestro; 5) respuesta a las eventuales objeciones.La tcnica de la rputatio imper en las escuelas medievales: en la in-rpretacin de los textos; en las demostraciones de tesis, en las pruebas de amen de ls estudiantes:. Transferida a los tratados, dej su huella no lo en las argumentaciones tcnicas, sino tambin en los textos poticos:origen,,entre lossiglos-xin y xiv, al gnero literario de ladisputatio,k-t o disputa (cfr Coal, 1973).) Funcin de ila retrica en el hum.anismo, Escisin quinientista itre la gumCntacin y laexprsin, En el periodo humanista, la re-rica, por su condicin pragmtica, desplaza a la dialctica (cfr. Orvieto 181100): Lorenzo Valla caracteriza el silogismo retrico, frente al dia-['tico, por su plicabilidad a las situaciones prcticas y por su aspecto rayente (adornado de prpura y gemas). El rico epistolario de Coluc-Salutati informa acerca de las razones principales que determinaron el xecimiento de la retrica a fines del 'siglo xiv; como observa Orvieto'981:103)el verdadero bien del hombre es la verdad; la verdad no consiste en una serie de dogmas y de preceptos impuestos desde arriba, sino en una fatigosa conquista personal; esta conquista implica primeramente el dominio de la elocuencia, y, ms an, la reconquista de la poesa [...] Slo mediante la valoracin de la dolo, la relectura de los textos y la asimilacin de la gran tradicin potica podr el hombre reconstruir el nudo deshecho entre res y verba.En el programa educativo de los ms famosos pedagogos del siglo xvi 'ter Paolo Vergerio, Gtiarino Veronese, Vittorino da Feltre); la retrica presenta la culminacin de la formacin integral del hombre.en la tica aprendemos lo que conviene hacer, mientras que de la historia extraemos los ejemplos que debemos seguir. Una expone los deberes de todos los hombres. y lo que conviene que haga. cada uno; la otra, al narrar dichos y hechoS, ensea lo qu debemos hacer o decir eri las di1-tintas circunstancias. Una tercera disciplina viene tras estas ds, la elocuencia, que es tambin parte/ de la ciencia civil.(Vergerio, en Garin 1976:120)51timas partes del arte del decir, ylasta 11restriccioneS modernas de la. retrica en d Marco de la teoranliteial. Tambin se ver esto en el captulo 3.La.renunciaa exponer con:orden y pulcritud los pisodios;las etapas e inflexiones de un camino al que smuchos especialistas han dedicado una atencin que no es ni fragmentaria id apresurada 19, no impide, al menos, enumerar algunos de los tenias:a los:que nos referiremos en el curso del anlisis de los captulos sucesivos.(i) Relaciones entre las disciplinas del trivium. En el siglo mi, la retrica cristaliza en diversas artes;' kg. de la versificacin (ars pettiae), de la epistolografia (ars- diconinis) Y d'l predicacin (ars pral-d.:Candi). El ars gramatica:se convierte en ftindaniento de las derns:...ho esta ya subordina da, cmo ars recte leguen& Cande hablar correctamente') y con funcin propedutica, a la oratoria (ars tiene loquendt),- sino que ocupa un plano general y superior como sede de todas las doctrinas que conciernen al lenguaje y a sus usos. En esta posicin de absoluta preeminencia, la gramtica monopliza el arte verbal, y, especialmente, el estudio de las exornationes o figuras, llamadas tambin flores y colores rbetorici, a la vez que conserva sus antiguas competencias, entre ellas, el ejercicio clsico de la enarrati poeta-non (anlisis e interpretacin de las obras literarias). En el Doctrinale (1199) de Alejandr de Villedieu, la gramtica aparece definida comologkae ministra, rhetorlie magiro, theolgiae intapres, medicina refrigerio et ladabile fundatnentiolLa contrapartida clsica de la retrica, la dialctica, desde los inicios del siglo o hasta el fin del xtv, tuvo un desarrollo riguroso e independiente de la lgica: era la tcnica del debate, destinada a alcanzar no la verdad, sino una conclusin ante dos posiciones contrarias pero ambas plausibles. La traduccin, obra de Jacopo di Venezia, de las cuatro obras aristotlicas que constituyen la Nueva Lgica Analytica Aora, Attalltica. Pis-tetiora, Topica y De Sophisticir Elenchis impuls definitivamente la dialcti-. ea. En el tercer libro del Metalogicon (1159), Juan de Salisbury incluy el' elogio de los Topica: Sin esta obra se disputa no segn el arte, sino segnel azar. .La declantatio de las escuelas romanas de retrica (cuyos antecedentes son las tcnicas pedaggicas de Protgoras e Iscrates y las disputas clOcu-11.A los ttulos citados en la nota t. han de aadirse al menos Preti 1968, los trabajos reunidos en AAVV 1975, Goldin. (ed.) 1979.y 1980 y, naturalmente, los sealados con asterisco en las referencias bibliogrficas.al final 'de este manual.20 tal servicio de la lb, maestra de la retrica, intrprete de la teologa, re- . frigetio de la medicina y fundamento glorioso" del Cuadrivio.50

53La formacin integral del hombre era el ideal de la sntesis de artes, ciencias naturales y filosofa que persegua Alberti (cuyos tres libros acercade la Farniglia son una prueba ejemplar de retrica civil y de compenetracin entre teora y prctica).Una fecha importante de la historia de la retrica es el ao 1416, en el que el humanista Pggio Bracciolini descubre en un monasterio de San Gal, en Suiza; una copia completa de la Institutio Oratoria de Quintiliano. La obra, que se copi y difundi rpidamente, se convirti en un punto de referencia vital de la educacin humanista para una mayora de estudiosos que haba echado abajo el muro divisorio entre retrica .y lgica, entre re-trica y especulacin cientfica y filosfica y que haba restaurado la cen-tralidacl de- la-inventio y la dignidad de las forinal:La culminacin del proceso puede estar representada por la elegante peripinatardicursiva de los dilogos y epstolas, resultado de la evolucin de la ratio pretenciosa y del rudo estilo medieval hacia una retrica dis-cursivaiprctica y til para el ministerio del hombre.(Orvieto 1981:105)La recuperacin de la dialctica que lleVarn a cabo otros humanistas (destaca el De Inventione dialectica de Rodolfo Agrcola, en la segunda mitad del siglo xv) anticipa, en sus puntos principales, el ramismo del siglo siguiente (cfr. Barilli 1979:78-82). Para Pierre de la Rame (Petrus Ramus, 15151572) las artes logical comprenden la dialectica (o lgica) y la rheloricaLa inventio y la dispositio Son partes de la dialctica; la docutio y la pronunciado, partes de la retrica;es funcin de la menuda, segn Rifas, realar una tarea concreta, dado que constituye un instrument indispensable para introducir orden en el conocimiento yen el discurso. Como tal, no puede omitirse ni tratarse con negligencia.(Rossi 1960:139)La escisin ramista de la dialctica y la retrica rompa en dos el dominio clsico de la segunda. Esta fue la primera gran reduccin dela retrica a teora de la elocucin, una vez que se haba sustrado ala antigua arte del discurso la jurisdiccin y el control sobre la argumentacin. La retrica se dispona as a fragmentarse y a especializarse obsesivamente en la normativa del lenguaje figurado21.(iii) La petica contra la retrica. La concepcin barroca del ingt. nitem. A mediados del siglo xvi se descubre y traduce la Potica de Aristteles. Su lectura parcial, destinada, principalmente, a extraer preceptos 21 Para el talsmo, vase el fundamental RolSi 1960...52

acerca de la verosimilitud de los personajes, disuade a los comentaristas de la solidez de la relacin instituida por Aristteles entre 1 retrica y los diversos aspectos de la composicin:la inentio y la dispositio .de las composiciones extensas (la pica, la tragedia, la comedia) responden a criterios estructurales de construccin de la labia, de la trama; paralelamente, los aspectos de la elocutio, e incluso de la gramtica, aunque estn desarrollados parcialmente en la Alca, remiten, en gran medida, a la Retrica(Barilli 1979:83)y los lleva a riiinusvalorarlis tardas de ti retrica en favor de a potica cuya funcin sera exclusivamente instrumental. El criterio de la verosi, Militud de las conductas ylis palabras de los personajes induce a Luclovico Castelvetro,1 el gran comentarista de la Potica aristotlica, a reprochar a Boccaccio ttl haber puesto en boca de la suicida Ghismonda un elocuente discurso que ctidena los perjuicios nobiliarios del padre, que haba matado a su amante (Decameron,IV , 1). Para Boccaccio no cabe la menor duda de que el Poeta deba conferir la mXima elocuencia a la tempestad emocional que experimenta su criatura (Barilli 1979:83). C,astelvetro, en cambio, apelando al criterio de verosimilitud psicolgica, sostiene que los casos extremos de pthos se valen mejor del silencio que de las palabras ornadas: no hay, pues, lugar para la retOtica, salvo para la que sabe callar o hablar con Mesura.La devaluacin de la retrica, entendida ya predominantemente como doctrin del ornatos, colma las pginas de la Eramimione sopra la ritotica a Caio Ennio de Castelvetro, que sostiene la preeminencia de las palabras absolutas (de los trminos propios) sobre las expresiones figuradas: el hablar. Con claridad, con exactitud cientfica, con fines precisos, es preferible a los traslados, los ornamentos, las circunlocuciones. Todo esto parece anticipar, a un siglo de distancia, el razonamiento de Port-Royal y de Descartes.Desde la ribera opuesta del platonismo y del neoplatonismo, Frances-co Patrizi, figura representativa del Renacimiento italiano tardo, llega tambin al rechazo de la retrica. La.idea del furor divino (lel poeta le lleva a afirmar la potencia de la fantaia y del desahogo emocional y casi a anticipar el xito moderno del De lo sublime (cfr. aqu 1.6). A la retrica, como observa Brilli (1979:85); se le niegan una a una sus partes tradicionales; la inventio y la dispositio son demasiado importantes para dejarlas a la administracin del rtor: cul es ya la ciencia que puede prescindir de ellas, que no deba basarse en lugares propios? En cunto a la elocutio, es el motivo escandaloso de que los significados. figurados se alejen de una precisa y neta descripcin de las cosas.Atin ms radical es la devaluacin de la retrica llevada a cabo por

53Giordano Bruno, que, en su polmica contra las tesis humanistas, antepone la metafska de los escolsticos, aunque sea itrilura. y est con vanas conclusiones y teoremas a toda la eloctiencia..ciceroniana y al arte declamatorio: de este tiempo (cit. en Barilli 1979:86)4Con la teora barroca del ingenio (Emanuele Tesauro, Matteo Sforza, Pallavicino, Matteo Petegrini). lis artes de la palabra vuelven a tener auge, puesto que de ellas se sirve la.capacidad ingeniosa.parapenetrar las cunstancis ms menudas lejanas de todo. sujeto (Tesauro, Il Cannocchi ale alirtotelico, 51). Se invocan las tcnicas. de. la inventio clsica (cfr. aqu 2.2-7) para extraer das cosas sus propiedades ocultas,.de manera que la versatilidad del ingenio pueda confrontarlas, unirlas y separarlas, aumentarlas o-disminuirlas, y-ponerlas-una-.en lugar-deotra-con maravill-onericia, corri los talikes. sus tabas. El conceptismo barroco invierte la mxima aristotlida inspirada en el sentido de la mesura, segn la cual el trabajo metafrico no deba ejercerse con entidades excesivamente lejanas: ser ms ingehioso el que mejor sepa emparejar las.circunstancias ms distantes, conectar las cualidades Tobjets ms ajenos: es el gran.admoron perpetuo de la ideologa y las producciones barrocas. En .esto ,consiste laagudeza teorizada por Baltasar Gracin (primera mitad del sigloen

el tratado Aguda: y arte de ingenio, y puesta eh prctica en los aforismos del.Orctdo manualy arte de prudencia n los que la destreza y. lalispiracin determinan las reglas del saber vivir.(iv) Rain retrica y tazn analtica. Al describir lol distintos aspectos y momentos del.conflicto entre. las dos culturas, hturianilta y cientfica, Preti (19741:145-210) redujO la oposicin letral/ciencial.a la oposicin retrica/lgica, tomando como punto de partida el momento central (que es el ms relevante para el anlisis fenomenolgic de la cultura): el tipo de discurso (ibid,; 147). La histofia de la retrica, a partirdel siglo xvi.122; puede contemplarse baj este prisma: partir de sViCo, valedor de la razn retrica -1---que l desgaja. de l lgica, es un intento de asegurar a los discursos dla d'oca, a las cuestiones opinables, un fundamentacin metodolgica de igual dignidad que la de