los diálogos - eduardo j. carletti
TRANSCRIPT
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
1/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
Titulo: Los dilogos
Autor: Eduardo J. Carletti
Fuente: Biblioteca Digital Ciudad Seva
Difusin Biblioteca Digital Oculus Littera
El contenido de sta obra est protegida por Creative Commons Licenses. Todos los derechos
sobre sta obra son propiedad del autor de la misma. Bajo la Licencia CC (Creative Commons) sta
obra puede ser difundida, siempre y cuando se respeten las condiciones establecidas en los
estatutos legales que ampara la licencia Creative Commons:
Distribucin con Reconocimiento al Autor No Comercializacin No Obras Derivadas
Attribution (BY)
Non-Commercial (NC)
No Derivate Works (ND)
www.ciudadseva.com
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
2/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
Los dilogosEduardo J. Carletti
Hay un momento en la creacin literaria cuando un escritor, con descripcin y otros
recursos, ya ha llevado a la vida a sus personajes. En ese momento stos toman vida ycomienzan a actuar frente al lector. Es un momento crtico. Las descripciones del personaje
pueden ser ms o menos detalladas: el lector llenar los huecos con su imaginacin. El
movimiento fsico de un personaje se puede "disfrazar" usando ms o menos detalle en el
relato. Quiero decir que, como en el cine, se puede enfocar su accin fsica con variados
recursos, que involucrarn, a voluntad del escritor, diferentes "tomas" o puntos de vista de
cmara. Se ve todo de lejos, por ejemplo. O el hecho lo ve un personaje y slo se cuentan
algunas de sus impresiones. En otros casos una accin se puede describir, por ejemplo, con
un breve prrafo: "Lucharon y en la refriega el ladrn le clav un cuchillo en el vientre", en
lugar de con una larga y detallada escena de movimientos, con su coreografa y
descripciones. En el primer caso se logra decir, con poco texto, lo que en el segundo caso se
muestra, recurso que evita un excesivo compromiso con la accin (uno podra ser un mal
coregrafo de peleas) y permite que los detalles sean creados por la imaginacin del lector.
Pero llega un momento en que los personajes deben actuar en un nivel que ya no es
tan fcil de dibujar: los dilogos.
Dice Umberto Eco: Hay un tema muy poco tratado en las teoras de la narrativa:
[...] los artificios de los que se vale el narrador para ceder la palabra al personaje. Los
dilogos son lo ms difcil de la literatura escrita: no hay un estndar, cada tipo de personase expresa de diferente manera; no se puede llenar la brevedad de texto con gestos y
expresiones, como en el teatro (donde los actores deben ser buenos, adems del escritor);
los textos demasiados largos pasan a ser discursos y poca gente -excepto los polticos,
cuando quieren convencernos de que los votemos- habla con discursos.
Para tener una buena idea de cmo es en un dilogo real es un buen experimento
grabar la conversacin de un grupo sin que ellos lo sepan; se sorprendern al ver cmo se
expresa la gente en realidad.
La forma de expresin de un personaje, si est bien lograda, indica qu y quin es.Si se sabe llevar un dilogo y se sabe condimentar su contenido, se pueden obviar
parrafadas de explicaciones y pesada descripcin. El otro extremo es algo parecido a un
teatro de tteres: el autor habla a travs de muecos, intentando darles vida, pero se nota que
son muecos porque todos hablan igual. O hablan de un modo que -se nota de inmediato-
nadie hablara. En alguna parte le, como ejemplo, que los personajes hablan a veces como
"si recitasen papeles aprendidos de memoria en una mala obra de teatro". Lo de "mala
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
3/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
obra" es clave aqu: los personajes de un texto no pueden apelar a la expresin corporal
como lo hara un buen actor en una obra con un pobre guin. En una obra escrita, si el texto
del dilogo es malo no hay solucin, se nota de inmediato: el dilogo es malo, por ende la
historia es mala.
El dilogo se puede analizar cientficamente, intentando hacer un completa
diseccin. Intentar enumerar algunos elementos que me parecen clave:
Lenguaje y modo:
Las personas hablan de muy diferente modo segn su:
Origen: nacionalidad, provincia, ciudad, barrio, clase social;
Formacin: cultura nacional y local, entorno familiar, estudios, lecturas;
Edad: fsica, mental y cultural;
Inclinaciones: polticas, sexuales, de gustos, culturales;
Emocin que lo domina.
Se suele trabajar en base a "tpicos" o ideas ya hechas sobre los tipos de personas,
las franjas de edad y las clases sociales. Pero todo esto es terreno pantanoso: las costumbres
de las clases sociales, las formas de expresin de las diferentes franjas de edad, incluso el
lenguaje en general de un entorno cultural, cambian continuamente. No se puede basar un
dilogo en dilogos ledos en un libro, a menos que todos los parmetros (poca, lugar,
clase, tipo de persona) coincidan plenamente. Mucho menos de pelculas u obras de teatro,
donde la expresividad de los actores ayuda a lograr lo que no pueden lograr los textos de
los dilogos. El escritor debera hacer un "trabajo de campo", procurando escuchar dilogos
entre personas de diferentes grupos, al efecto de compenetrarse o al menos comprender que
existen formas extremadamente diferentes de expresarse y llevar una conversacin.
El escritor jams debera dejarse llevar por sus necesidades de expresin: el dilogo
pertenece al personaje, no al autor. El resultado de un error as suele resultar grotesco: los
personajes -para ayudar al escritor a informar al lector- se explican entre ellos las cosas que
acaban de vivir (algo que nadie hace), o cuentan sucesos que los emocionan como si fueran
doctores en biologa que describen una diseccin, o se mandan un largo discurso ms
parecido a una clase de Historia que a cualquier tipo de informacin que se puedaintercambiar entre personas.
Otra falla muy comn es repartir un discurso entre varios personajes, este pedazo
para Juan, este otro para Pedro, aquel otro para Ignacio, en fragmentos de dilogo
encadenados entre s y llevados siempre en el mismo estilo y con la misma entonacin, y en
un acuerdo total de intencin y expresin, logrando que se note claramente que en realidad
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
4/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
habla un solo interlocutor a travs de las bocas de varias personas, como si se tratara de un
extenso espectculo de ventriloqua. Este tipo de dilogos se encuentra muy habitualmente
en las obras de ciencia ficcin.
Estado emocional:
No es fcil expresar el estado emocional de un personaje que dialoga. Las
acotaciones constantes pueden quitar ritmo o resultar molestas, y cualquier descripcin del
estado mental del personaje al principio de la conversacin es olvidada rpidamente por el
lector si los dilogos tienen contenido de importancia y si los personajes se expresan de un
modo neutral que no refleje sus emociones. Y esto ltimo es la clave: las personas se
expresan de muy diferente modo segn su estado emocional. Si el texto del dilogo no
refleja ese estado mental es intil bombardear al lector con descripciones y aclaraciones. Es
necesario aqu, de nuevo, un "trabajo de campo" que nos permita observar de un modo
imparcial la manera en que una persona habla si est feliz, o enojada, o nerviosa, o
asustada, o se siente mal, o est embobada con su interlocutor, o lo odia, etc. Veremos que
las frases se cortan, que el flujo de pensamiento lleva a la persona a saltar de tema y luego
volver, que no siempre -o pocas veces- el interlocutor apoya el texto del otro, ayudndolo a
seguir, sino que muchas veces interrumpe, complica y deforma el sentido, o habla de otra
cosa "descolgada", etc. Un buen dilogo debe tener un poco de este tipo de estructura -
demasiado puede hacer confusos los dilogos-, tan habitual en la vida real.
Estructura de las frases y lenguaje:
Justamente, la estructura de las frases de un dilogo est en relacin directa con los
dos puntos anteriores. El autor debe esforzarse en reflejar caractersticas en la
estructuracin de los textos de dilogo que seran normales en el habla de una persona
segn cul sea la extraccin social, econmica, de edad, etctera, del personaje que tiene la
palabra. Frases ms cortas -telegrficas- o extensas y farragosas; oraciones que se cortan;
mal uso de algunas palabras o una estructuracin ms pulcra; reiteracin de algunas
palabras; uso de trminos relativos a un grupo cultural; conjugaciones incorrectas; etc.
Adems, segn el estado mental del personaje, es imprescindible mostrar algn cambio en
su forma de expresarse. La variacin en la expresin caracteriza y da vida a los personajes
mucho ms que lo que hacen cuando se mueven por la escena y mucho ms que lo que el
autor quiera "vender" en las descripciones.
Contenido del texto:
Hay que tener mucho cuidado en los contenidos de un dilogo. Uno debe
preguntarse todo el tiempo: Hablara as? Lo dira as? No siempre es posible responder
desde la subjetividad, hay que preguntarse tambin si nuestro personaje, tal como lo hemos
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
5/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
delineado, dira eso y de esa manera. Hay que imaginarlo en una esquina de nuestro barrio,
o en el colectivo que toma todos los das, o en su trabajo, diciendo eso que ponemos en su
boca. Lo dira as? Qu gestos hara? Se cortara, largara un exabrupto en el medio,
esperara la afirmacin de su interlocutor antes de terminar? Hay que observar, observar,
observar. Insisto, observar gente real, no actores. Cuidado con el cine, cuidado con las
novelas, cuidado con las series. Hay mucha, muchsima falsedad.
Explicaciones:
Un defecto muy comn es el de introducir excesivas explicaciones en los dilogos:
los personajes aparecen explicando lo que el autor desea -o necesita- explicar. Esto suele
ser muy malo para los climas. Se debe evitar toda vez que se pueda. Las explicaciones debe
hacerlas el autor fuera de los dilogos. O intercaladas. Nunca poner un personaje dando
discursos en un dilogo. Es recomendable, en estos casos, extraer la explicacin fuera,
como en el ejemplo que sigue:
Dentro del dilogo:
-Son muy agresivos -dijo Jorge con odio-. No sabemos de dnde vienen. Tienen naves
gigantescas, del tamao de una ciudad, que se mueven con algn sistema de antigravedad.
Se lanzan sobre nosotros desde rbita, sin previo aviso, y en segundos matan a decenas de
miles. Dicen los cientficos que su comportamiento agresivo se debe a un arrastre gentico,
que en la parte primitiva de su evolucin eran depredadores al estilo de los carnvoros
cazadores de la Tierra. Parece que conservan gran parte de esa agresividad que produce la
adrenalina (o lo que sea que se vuelca en sus sistemas circulatorios) cuando pretenden
obtener algo. Es el instinto de cacera, un estado excitado parecido al que deben sentir los
animales que persiguen en jaura cuando se lanzan en carrera tras una presa. Seguramente
has visto documentales de lobos: cuando alcanzan la presa entran en una especie de frenes
que los lleva a destrozar la presa en pedazos en instantes, e incluso pelearse feo entre ellos.
Fuera del dilogo:
-Son muy agresivos -dijo Jorge con odio-. No sabemos de dnde vienen.
Explic que esos seres tenan naves gigantescas, del tamao de una ciudad, movidas
por algn sistema de antigravedad, y se lanzaban sobre ellos desde rbita, sin previo aviso,
matando en segundos a decenas de miles. Segn los cientficos, un comportamiento
agresivo que se debe a un arrastre gentico.
En la parte primitiva de su evolucin esos seres eran depredadores al estilo de los
carnvoros cazadores de la Tierra. Al parecer conservan gran parte de esa agresividad que
produce la adrenalina, o lo que sea que se vuelque en sus sistemas circulatorios cuando
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
6/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
pretenden obtener algo. Son arrastrados por el instinto de cacera, un estado excitado
parecido al que deben sentir los animales que persiguen en jaura cuando se lanzan en
carrera tras una presa.
-Seguramente has visto documentales de lobos: cuando alcanzan la presa entran en una
especie de frenes que los lleva a destrozar la presa en pedazos en instantes, e incluso
pelearse feo entre ellos.
Hemos visto un ejemplo breve, donde no parece haber gran diferencia en el
resultado. Sin embargo, en algunos casos es esencial. Este tipo de trabajo de "extraccin"
de las explicaciones es muy efectivo cuando se hace en parrafadas muy extensas de
discurso.
El apoyo de los dilogos:
Le llamo apoyo a las acotaciones que se hacen en o entre los textos que hablan los
personajes, tales como "dijo Pedro", "explic Juana" o "dijo con tristeza", o a veces antes
de la lnea de dilogo: "Jorge se levant y dijo con decisin:". Parece que hubiera, en la
lengua hispana, alguna contrariedad a estas acotaciones. Suele ocurrir que los autores
hispanoamericanos se vayan a los extremos y no pongan absolutamente ninguna acotacin,
volviendo difcil seguir las conversaciones. Ocurre en un dilogo ms o menos intenso que
de pronto uno se ha perdido, que de repente el personaje que uno crea era Juana dice algo
que slo puede decir Pedro. Hay que volver atrs y resincronizarse. Considero que esto es
lo peor que le puede ocurrir a una historia en la parte de los dilogos. El lector debe saber
en cada momento quin habla, sin esforzarse. Y adems debe saber cmo habla: si
gesticula, si levanta la voz, si lo dice en un tono ms bajo, si se emociona, si se nota la
agresividad, si aprieta los dientes entre frases, si sus ojos brillan o si mira con enojo; si se
respalda en su silla o est tenso, inclinado hacia delante, etctera. He ledo cuentos
impactantes, poderosos, excelentes, giles pero colmados de acotaciones, sin notar que
stas estaban ah. Slo las vi cuando analic el texto, no al leerlo. No es cierto que el lector
se traba con estas acotaciones o que stas frenan o quitan fluidez a la lectura: todo lo
contrario, las acotaciones ayudan a leer con mayor claridad y sin "tropezones".
Conclusin:
Por ltimo, es importante acotar que los dilogos son un elemento fuerte e
imprescindible en una historia. Jams hay que evitarlos, porque le dan vida a un historia.
No es concebible imaginar una novela sin un dilogo, aunque s hay cuentos que no los
tienen. Los cuentos sin dilogo suelen ser pesados o aburridos. Slo se salvan aquellos
escritos en primera persona porque en realidad funcionan como un dilogo (un monlogo)
entre el escritor y el lector.
-
8/7/2019 Los dilogos - Eduardo J. Carletti
7/7
Biblioteca Digital Oculus Littera www.oculus-littera.com
El dilogo da vida y fluidez a una historia. Quita el centro de atencin del discurso
del escritor y lo lleva a los personajes. Permite que el lector sienta los hechos junto a los
personajes, apartndose un poco del autor. Si el lector se identifica con los personajes, esta
vida se convierte en sentimiento y emociones. A pesar de que los dilogos sean difciles de
trabajar y nos asusten las dificultades, esforzarse en ellos puede producir un efecto final
mucho ms intenso que cualquier otro elemento de una obra literaria.
Es un buen ejercicio releer obras que hemos disfrutado mucho buscando los
dilogos y analizndolos en estructura y contenido, para ver cmo han sido manejados por
el autor.