Feminus SapiensLas máscaras de la violencia

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La geografía de la violencia y la lucha de las organizaciones

Feministas

Número 0 Noviembre 2012

Prohibida su ventaDistribución gratuitaCombate con la información, tu mejor arma

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Leticia urbinaEditor:

Mercedes MartínezConsejo editorial:

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Acatlán, naucalpan Esatdo de México.México, 2012.

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INDICE

Las máscaras de la violencia....5

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EDITORIAL...............4

El levantamiento de la efigie de la violencia... 6

FEMINISMO...7Geografía de la violencia...9...en México .... 13

diez puntos de la ley mexicana

contra la violencia a muejeres

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EditorialSe trata de un problema universal que alcanza cualquier rincón del universo, de un defecto social en

cualquiera de las sociedades, de un fiasco moral en cualquiera de las ideologías de cada familia, de un crimen que debiese pagar cualquiera de los gobiernos que lo solapen, y una aberración en cual-quier religión que sirva de ello para cimentar sacrilegios a sus propios sortilegios; la violencia contra la mujer es una trasgresión a los derechos humanos, más que derechos deben ser obligaciones para

evitar corromper aún más a las sociedades.

Las características que se han generado en torno a la imagen de una mujer, son etiquetas sujetas a años de antigüedad; la violencia se ha incrementado pero nada nuevo es la discriminación y los

prejuicios alrededor del género femenino.

Los libros de historia de educación primaria de nuestro país se encuentran plagados de protagonis-tas masculinos, de personajes valientes, aguerridos y decididos, líderes y temerarios, todos ellos con bigotes espesos, largos sombreros y pantalones que solo un hombre podría enfundarse. Aunque así fuese, las mujeres también tuvieron un papel importante, sin embargo, no sobresal en páginas. La desigualdad ha sido el muro inhumano que se ha construido en años de injusticia. Costumbres, apa-riencias, “el que dirán”, “el rosa porque es niña”, y un sinfín de frases, son los ladrillos exponenciales

de las bardas que deben derrumbarse.

La visión social que se ha tenido sobre las féminas, las coloca frente a la leña que crispa, hasta hacerla encender y hervir las ollas ya negras. Esta leña se apaga y se enciende, la lucha se ejerce y

se condena.

Por mencionar otro ejemplos históricos que refieren a tal situación, existían los corsés que apenas permitían a las mujeres, respirar, moverse o caminar; pues la apariencia era lo que determinaba su valor, desafortunadamente ésta terminación copretérita tiene actualizar y seguir usándola en el pre-

sente.

A pesar de todo ello, la mujer ha poco a poco enfrentado toda una historia de patriarcado absoluto, actualmente las mujeres han cambiado de rol, por necesidad o por anhelo propio; lo que muestra su

capacidad no merece en absoluto ser subestimada durante más tiempo.

Ante todo esto, ha surgido movimiento como el feminismo y demás movimientos y cambios nece-sarios, más que conmemorara el día de la mujer o el día contra la violencia intrafamiliar o hacia la mujer; se debe trabajar en que más mujeres sean conscientes de su entorno y que no justifiquen las

agresiones de cualquier índole que se cometan en su agravio.

Ésta publicación pretende abarcar el tema de la violencia contra las mujeres de la manera más completa y profesional, sin llevar el tema como una sección complementaria, sino de una manera constante con el objetivo por el que nace, el de querer erradicar el problema. Los medios no pueden cambiar por sí solos a las sociedades y a las masas, pero si son guías importantes para mostrar la in-formación que ilumine el sendero que se ha perdido. En éste caso las mujeres y lectores son el motor más importantes para lograrlo, la información es el arma más importante que se les pudiera otorgar: dar el arma a esas mujeres que han sido deshonradas por la ignorancia milenaria, maltratadas por la manipulación de la discriminación y ofendidas justificadamente en nombre dela desinformación. Con dicha arma, las y los lectores pueden llevar a cabo el siguiente paso de los objetivos para un medio comunicacional como éste, tener las herramientas para ejercer la acción, llevarla al plano práctico en una plataforma donde la realidad es oculta. Es necesario conocer lo que conlleva la violencia y todo lo que le rodea: machismo, discriminación, violación de leyes y derechos humanos, al mismo tiempo conocer éstos últimos no solo para saber que están siendo violados sino para saber como defender-los, para saber que existen y que la consecuencia de atacarlos no debe quedar en una escrita teoría

legislativa.

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Las máscaras de la violencia

El maquillaje solo cubre las marcas temporales, pero la violen-cia no se ejerce solo mediante la agresión física, existen varias formas de llevarla a cabo y es importante que las conozcas. Aprende a identificarlas. La violencia contra la mujer ocurre en diferentes ámbitos y de diversas formas: física, psicológica, laboral, sexual e ideológi-ca; en el hogar, en el lugar de trabajo, en el entorno social y cul-tural, en los dogmas religiosos y las relaciones sentimentales.

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El levantamiento de la efigie de la violencia

El entorno donde la agresión se da desde una edad más temprana es en el hogar del núcleo familiar. Físicamen-te cuando los padres o tutores llevan actos agresivos contra los infantes con motivo de reprenderlos; cuando estas acciones son continuas llegan o registrarse en los afectados como una acción en su contra “normal o mere-cida”. Las marcas son fácilmente bo-rrables gracias a la regeneración de piel en los niños sin embargo dan más tiempo a una coagulación interna di-fícil de desvanecer. Psicológicamente, la violencia se presenta de igual ma-nera temprana en el hogar, las agre-

siones verbales, insultos, aunados con expresiones ofensivas a los infantes son factores importantes que pueden llegar a definir la personalidad futura en un ser humano. Las costumbres, la moral, la preocupación del qué dirán; son espinas nada novedosas, de hecho a pesar de los cambios de estructura en una familia y nuevos modelos de formación que han aparecido para for-mar, existe aún muchas contemporá-neas ligadas a las de la antigüedad, de la época de la inquisición. En este entorno la discriminación y la

desigualdad de género se da de mane-ra inconsciente e involuntariamente, y desafortunadamente automática e ins-tintivamente, al mismo tiempo es más visible: se separa en los juegos infan-tiles a los niños de las niñas, siendo en ésta edad cuando la diferencia de fuerzas no es aún tan marcada bioló-gicamente, los niños son inscritos en las equipos de futbol varonil, los cua-les abundan en su tipo; sin embargo este interés también aparece en las niñas, el cual es opacado y paulatina-mente sustituido por el interés de las muñecas, lo platitos y los cubiertos de

Por: Mercedes Martínez Morán

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El levantamiento de la efigie de la violencia

mesa. “Los niños no lloran”, aunque el ejemplo suene arcaico, se ejecuta aún en gran parte de las familias así como destinar la ropa de color rosa para el uso de las niñas, mientras que resulta impensable colocarlo en la fa-cha de algún niño, para este el azul es el más correspondido, el indicado. Esta selección se hace bajo un régi-men cultural y popular mexicano: el machismo.

Éste último nace de una organización de orden patriarcal que crea una postu-ra basada en el principio del Absoluto Masculino (Único, solo) y que exclu-ye a la mujer. La antropóloga Dolo-res Reguant dice que el patriarcado es

una forma de organización política, económica, religiosa y social basada en la idea de la autoridad y liderazgo del varón; en el que se da el predo-minio de los hombres sobre las muje-res… Sin embargo, en la actualidad se siguen elevando los casos familiares en los que es la mujer quién sustenta económicamente el hogar, quien sale a laborar, quién tiene opiniones y roles importantes sobre la política del país, quien es atea, y quien además de lo-grar anteponer su apellido de segundo a primero en los hijos, mantiene a toda una familia siendo viuda, separada, soltera o divorciada; o simplemente sin necesidad de estar relacionada en ningún momento, sentimentalmente o bajo contrato, ligada a otra persona.

Fotos de:Juliana Ramírez

Por: Mercedes Martínez Morán

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FEMINISMO

El Patriarcado sigue haciendo historia, pero el feminismo se sigue contraponiendo.

Por: Mercedes Martínez

Malala Yusufzai tiene 15 años, y desde los 11 hace campaña por el acceso de las niñas a la educación en su región. En oc-tubre de este año sufrió un ata-que, del que dos balas afectaron directamente cntra su cuerpo.

La periodista Lydia Cacho, de-fensora de los derechos huma-

nos, quien reside en Cancún, al sureste de México, ha sido ame-

nazada de muerte.

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Marisela Escobedo Ortiz, activista tras el asesinato de su hija Rubí Marisol, fue ejecutada frente a Palacio de Gobierno cuando rea-lizaba una más de sus protestas para exigir justicia.

Leymah Roberta Gbowee, de 39 años, es una activista conocida por haber organi-zado el movimiento paci-fista que logró poner fin a la segunda guerra civil en Liberia en 2003, lo que po-sibilitó la elección demo-crática de Johnson Sirleaf.

El feminismo es un conjunto de teorías sociales y de prácticas políticas en abierta oposición a concepciones del mundo que excluyen la experiencia femenina de su horizonte epistemo-lógico y político. El feminismo revela y critica la desigualdad entre los sexos y entre los géneros a la vez que reclama y pro-mueve los derechos e intereses de las mujeres. El movimiento feminista surge como consecuencia de la conciencia de las mujeres respecto de su estatus subordinado en la sociedad.

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Geografía de la violencia

nacional contra la violencia de géne-ro (25 de noviembre) AI denuncia las trabas que encuentran en los juzgados de España todas aquéllas mujeres víc-timas de violencia de género que deci-den denunciar. También se encuentran con graves obstáculos en el acceso y en la obtención de justicia y protección. El número de cancelaciones, aplaza-mientos y suspensiones de los casos es muy elevado, 48.000 sólo en 2011, y el de denuncias sigue reduciéndose ante la falta de confianza de las muje-res víctimas de violencia de género en la justicia. AI destaca que no todas las mujeres son informadas adecuadamen-te sobre sus derechos, la falta de dili-gencia en la investigación judicial, la contradenuncia como estrategia de im-punidad o el déficit en la disponibilidad y la calidad de la asistencia letrada.

“El 70 por ciento de las mujeres que son víctimas de asesinato mueren a manos de su compañero”

Por: Mercedes Martínez

“...En Egipto se practica la mutilación genital femenina y está prohibido el aborto, incluso en el caso de muje-res y niñas sobrevivientes de violación e incesto, o de em-barazos que entrañan grave riesgo para la salud...”

La agresión contra las mujeres no es un indicio de países económicamente tercermundistas, atañe como un velo de novia parecido al velo de un entie-rro, capaz de cubrir el orbe completo. Al menos una de cada tres mujeres ha sido golpeada, obligada a mantener re-laciones sexuales o sometidas a algún otro tipo de abusos en su vida.

Éste onceavo mes del año en curso la organización no gubernamental de re-sistencia internacional, Amnistía Inter-nacional (AI) dio a conocer un reporte en el que expone la desprotección que la ley española ha provisto con su in-cumplimiento respecto a la violencia de género. En el marco del Día Inter-

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El resultado, como en nuestro país: impacto negativo en el proceso de re-cuperación de las mujeres, pérdida de confianza en la justicia, la falta de eva-luación de los Juzgados de Violencia consolida las malas prácticas profesio-nes.

“Las mujeres han decidido expresarse mediante marchas y manifestaciones en sus ciu-dades, de las que han sufrido hostigamiento, acoso, tortu-ras y malos tratos, como agre-siones sexuales y amenazas de violación...”

La impunidad de la violencia contra las mujeres es frecuente en Afganis-tán. A pesar de contar con una ley pro-mulgada en agosto del 2009 que dicta eliminación de la violencia contra las mujeres, los delitos como el matrimo-nio forzado, la violación, las palizas y otros actos de violencia contra las mu-jeres están presentes a la orden del día. Uno de los casos más recientes que aconteció el mes de septiembre en di-cho país fue el de una adolescente de 16 años, flagelada de manera brutal e ilegal en público por mantener una "relación ilícita" con un muchacho. La

niña fue condenada a recibir 100 lati-gazos frente al público, por tres hom-bres denominados mulás.*

Los derechos de las mujeres en Orien-te Medio y Norte de África siguen es-tancados, brillando por su ausencia como en otras partes del mundo. Ante ésta problemática las mujeres han de-cidido expresarse mediante marchas y manifestaciones en sus ciudades, de las que han sufrido hostigamiento, acoso, torturas y malos tratos, como agresio-nes sexuales y amenazas de violación, relacionados específicamente con su condición de mujeres; un caso muy notorio fueron las “pruebas de virgini-dad” a las que fueron sometidas algu-nas manifestantes en Egipto.

En Yemen, país asiático, las mujeres carecen de libertad para casarse con quien deseen, y algunas son obliga-das a contraer matrimonio cuando son menores de edad, a veces con tan solo ocho años.

En Arabia Saudí o Arabia Saudita, las mujeres no pueden viajar, ni tener tra-bajos remunerados, se les niega recibir educación superior, y se les prohíbe ca-sarse sin el permiso de un tutor varón. Tampoco pueden conducir, aunque ten-gan permisos internacionales con los que sí pueden hacerlo en otros países.

En Egipto se practica la mutilación ge-nital femenina y está prohibido el abor

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to, incluso en el caso de mujeres y niñas sobrevivientes de violación e incesto, o de embarazos que entrañan grave ries-go para la salud. Su representación en el Parlamento es incluso menor ahora que cuando la reinaba la represión del dictador Mubarak.

En Estados Unidos, aproximadamente el 85 por ciento de las víctimas de vio-lencia en el ámbito familiar son muje-res. Según informes de la Organización Mundial de la Salud, el 70 por ciento de las mujeres que son víctimas de

asesinato mueren a manos de su com-pañero. Las armas pequeñas y las

armas ligeras son los principales ins-trumentos de casi todos los conflictos. Según el secretario general de Nacio-nes Unidas, las mujeres y los niños re-presentan casi el 80 por ciento de las bajas.

La cultura del machismo en Latino-américa dificulta el avnce contra la violencia en contra de las mujeres, este tipos de ideologías populares fomen-tar además la violencia de otros tipos, como la psicológica, lo que lleva al cmainno directo de la discriminación, y por ende la violación de derechos.

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... en Méxicobargo, gran parte del problema radica en la no apli-cación efectiva de estas leyes y en la debilidad de las instituciones. Estado mexicano no hace justicia a los derechos de las mujeres, como la discriminación de género, las amenazas y ataques contra mujeres activistas, la violencia que sufren las mujeres mi-grantes, la no aplicación total de sendas sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre la violación de dos mujeres indígenas en el estado de Guerrero y sobre el secuestro y homi-cidio de mujeres jóvenes en Ciudad Juárez en el Campo Algodonero, así como los obstáculos que dificultan el acceso efectivo de la mujer a la salud sexual y reproductiva.Según un informe publicado por UNIFEM (Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mu-jer) y varias organizaciones locales de derechos humanos, entre 1985 y 2009 fueron asesinadas en México al menos 34.000 mujeres; 2.418 solamente en 2010. En el estado de Chihuahua, donde hubo un gran aumento de los asesinatos, en 2010 una de cada 11 víctimas era mujer, cuando en 2008 era una de cada 14. En Ciudad Juárez fueron asesina-das 320 mujeres en 2010. El número de homici-dios disminuyó ligeramente en 2011. En el primer semestre de 2012 hubo más de 130 homicidios de mujeres en el estado de Chihuahua. Sólo en 2009, el Ministerio Público recibió 14.829 denuncias de violación de todo el país, una cifra alarmante te-niendo en cuenta que la mayoría de las mujeres no denuncian estos delitos. Sólo se lograron 2.795 condenas en los tribunales.

En los últimos años, México ha apro-bado varias leyes y creado instituciones destinadas a proteger a la mujer de la discriminación y la violencia. Sin em-

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El caso de San Salvador Atenco es emblemático. Más de 26 mujeres su-frieron agresiones sexuales a manos de la policía tras ser detenidas en ma-nifestaciones en 2006. La denegación del acceso a la justicia tanto por parte de las autoridades del estado como por las federales, a pesar de las investiga-ciones y recomendaciones de la Comi-sión Nacional de los Derechos Huma-nos y de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ha hecho que nueve mu-jeres elevaran sus casos a la Comisión Interamericana de Derechos Huma-nos.“La situación de los derechos de la mujer en México es alarmante —dice Rupert Knox, investigador mexica-no—. En los últimos años hemos pre-senciado no sólo un aumento de los homicidios de mujeres, sino una con-tinua y habitual ausencia de investiga-

ciones efectivas y de justicia.”Las muertas de MéxicoEn México las mujeres son tratadas como mercancía en la trata de blancas, la prostitución y la venta de su perso-na como tal incluso por sus propios progenitores, algunos pueblos indíge-nas recurren a éstas actividades ilícitas pero “argumentados” en sus tradicio-nes y costumbres.Cuerpos torturados, mutilados y con violencia lanzados a las calles, cana-les, vías del tren, cunetas de carretera, desagües… el saldo de Felipe Calde-rón: 4 mil 112 asesinatos de mujeres y 3 mil 976 desaparecidas sólo en los últimos dos años: las muertas de Juá-rez se volvieron las muertas de todo México. Sólo en Nuevo León, este año fueron asesinadas 132 mujeres, y más de 500 niñas y jovencitas de entre 10 y 20 años están desaparecidas.

Foto: El Universal

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diez puntos de la ley mexicana contra la violencia a muejeres

1. La Federación, las entidades federati-vas y los municipios prevendrán, sancio-narán y erradicarán la violencia contra las mujeres, garantizarán bienestar conforme a los principios de igualdad y de no dis-criminación.2. Los tipos de Violencia contra las Mu-jeres son violencia psicológica, violencia física, violencia patrimonial, violencia económica, violencia sexual...

3. Las órdenes de protección: Son actos de protección y de urgente aplicación en función del interés superior de la Víctima y son fundamentalmente precautorias y cautelares.4. Vigilar que los medios de comunica-ción no fomenten la violencia contra las mujeres y que favorezcan la erradicación de todos los tipos de violencia...

5. Realizar a través del Instituto Nacional de las Mujeres y con el apoyo de las ins-tancias locales, campañas de información, con énfasis en la doctrina de la protección integral de los derechos humanos de las mujeres...

6. Integrar el Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de Violencia contra las Mujeres.

7. Garantizar el derecho de las niñas y mu-jeres a la educación: a la alfabetización y al acceso, permanencia y terminación de estudios en todos los niveles.

8. Establecer como un requisito de contra-tación a todo el personal de no contar con algún antecedente de violencia contra las mujeres.

9. Promover la formación y especializa-ción de Agentes de la Policía Federal In-vestigadora, Agentes del Ministerio Pú-blico y de todo el personal encargado de la procuración de justicia en materia de derechos humanos de las mujeres.10. Los refugios deberán ser lugares se-guros para las víctimas, por lo que no se podrá proporcionar su ubicación a perso-nas no autorizadas para acudir a ellos.

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Instituto Nacional de las MujeresPrograma: Vida sin violencia, servicio nacional,

confidencial y gratuito 24 horas, los 365 días del año.Alfonso Esparza Oteo No. 119 Col. Guadalupe

Inn. Delegación Álvaro Obregón. Teléfono: 01 800 911 25 11Procuraduría General de Justicia del Distrito

FederalPrograma: CAVI, Centro de Atención a la Vio-

lencia Intrafamiliar.Gabrie lHernández No. 56, planta baja. Col.

Doctores Delegación Cuauhtémoc DF.Teléfono: 52 00 90 00.LOCATEL: Línea MujerTeléfono: 56 58 11 11Agencia del Ministerio Público más cercano al

domicilioTeléfono: 52 00 90 00, las 24 horas del díaInstituto de la Mujer del Distrito FederalSan Antonio Abad 122, 5º piso Col Transito.

DFTeléfono: 53 41 96 91Unidades de Atención a la Violencia Familiar.

(UAVIF)Existe una en cada delegación,Unidad Álvaro Obregón, 52 76 68 87Unidad Azcapotzalco, 53 53 97 62Unidad Benito Juárez, 91 80 10 43Unidad Coyoacán, 56 58 22 14 y 56 58 21 67Unidad Cuajimalpa, 21 63 12 25Unidad Cuautémoc, 55 46 58 14méstica. (CAVIDA)Av. México No. 191 Col. El Carmen CoyoacánTeléfono: 55 54 56 11 y 56 59 05 04