/

La felicidad es como un “traje a medida

de cada uno” dependiendo de sus

características propias, sus actividades, su

entorno y/o sus propósitos.

(01)

HAPPINESS ABILITIES

FELICIDAD: MÁS ALLÁ DE LA EMOCIÓN POSITIVA

En el ámbito empresarial actual el desarrollo del concepto de Felicidad es

considerado como secundario debido a la falta de una visión ampliada de la propia

noción y sus implicaciones.

La realidad es que la felicidad puede ser entendida bajo diversas perspectivas, pero

todas ellas afectan tanto al terreno personal como al profesional. Algunos científicos y

divulgadores como Eduardo Punset (economista, abogado y comunicador científico)

la definen como la ausencia de temor; otros como Tal Ben- Shahar (profesor de

Felicidad de la Universidad de Harvard, doctor en comportamiento organizacional) la

definen como la vivencia de una vida con propósito y que al mismo tiempo se

disfruta; otros como Luis Rojas Marcos (psiquiatra) la entienden como la vivencia de

una vida satisfactoria en general. Lo que es cierto es que, según los resultados del

estudio de la doctora Lyubomirsky, e independientemente de la definición por la que

nos inclinemos, la felicidad es como un “traje a medida de cada uno” dependiendo de

sus características propias, sus actividades, su entorno y/o sus propósitos. Deriva en

un 40% de nuestras actividades intencionales y tan sólo en un 10% de factores

externos: la genética no se puede cambiar, ¡los niveles de felicidad sí!.

El hecho de que los factores genéticos sean inmodificables no significa que no se

puedan mejorar los niveles de felicidad. Podemos aprender y entrenarnos para

incrementar nuestros niveles de felicidad, a pesar de tener un valor de referencia

dado por factores genéticos.

01/201611/07/2016

By Andrés Aljure SaabMiembro del Advisory Boardde Branward

Según Martin Seligman, padre de la Psicología Positiva, en su "Teoría del bienestar”, la

obtención del bienestar depende de cinco grandes elementos que se consolidan en el

acróstico PERMA:

· Positive Emotion: emoción positiva o placentera.

· Engagement - Entrega: actividades que nos hacen fluir en las que

perdemos la noción del tiempo.

· Relationships: relaciones positivas.

· Meaning: significado o sentido.

· Achievement: logro de tener la posibilidad, como individuos o como

profesionales de cualquier disciplina, de aplicar los hallazgos que los

científicos en este campo obtienen.

En 2008 la profesora, Sonja Lyubomirsky de la Universidad de California y Ph. D de la

Universidad de Stanford, en su obra El cómo de la felicidad estableció cuáles son los

factores generales que inciden en los niveles de felicidad de las personas,

llegando a los siguientes datos:

· Factores genéticos

· Actividades intencionales

· Situaciones y sucesos externos a la vida

Se formula la pregunta: ¿qué influencia tiene el dinero en la felicidad y el bienestar? La

respuesta necesita la siguiente aclaración y explicaría por qué países con mayor PIB

no son los más felices en el ranking mundial.

Cuando las personas han superado niveles básicos de calidad de vida, obtener mayor

ingreso no es significativamente importante en el aumento de niveles de felicidad. El

dinero influye significativamente cuando el ingreso es bajo o cuando existen

dificultades económicas que no permiten un nivel mínimo suficiente de calidad de

vida. De hecho, en algunos casos, se observa una diminución de los niveles de

felicidad a pesar del aumento del ingreso.

Al dinero se le da un valor de un 10% entre los factores que inciden en los niveles

de felicidad: existen algunos de mucha más alta influencia que el dinero/riqueza.

Entre estos factores están la existencia de relaciones positivas, sentido de logro,

sentido de propósito y creencias y comportamientos/hábitos de cada individuo.

10 Consideraciones sobre la felicidad y el bienestar personal

1. La felicidad tiene su día. El Día Internacional de la Felicidad, decretado por la ONU,

se celebra el 20 de marzo cada año desde 2013.

2. La felicidad se puede aprender al igual que como se hace con un deporte.

Dado que cerca del 50% de los factores que inciden en los niveles de felicidad de las personas

se centran en sus hábitos, comportamientos y creencias, y estos son susceptibles de ser

modificados, la felicidad se puede aprender a través de la mejora de éstos.

3. Los factores externos solo determinan la felicidad en un 10%. El jefe,

el salario, el tráfico, el dinero, el clima, entre otras circunstancias, tan sólo tienen una incidencia

del 10% en los niveles de felicidad. Aprender a pensar y desarrollar hábitos y actividades a su

medida es mucho más poderoso.

4. La felicidad es también cuestión de foco. El 95% de nuestras decisiones son

irracionales (inconscientes y subconscientes) y el 5% son racionales (conscientes). Muchas

veces no somos conscientes de gran cantidad de aspectos favorables en nuestra vida dado

que nuestro cerebro nos centra en aspectos que debemos solucionar.

5. “Felicidad es ausencia de miedo”. Esto lo afirma el científico español Eduardo

Punset. Ahora bien, en este sentido, los miedos sin causa aparente, que generan ansiedad, son tal

vez el principal enemigo de la felicidad. ¿Para qué preocuparnos por lo que no podemos controlar?

6. La felicidad no es sólo disfrutar del momento presente como algunos

lo quieren creer para liberarse de sus responsabilidades. Si bien es cierto que es deseable y

apropiado buscar placer en el momento presente, que es el único que realmente tenemos, no

debe ser contrario a pensar en el futuro.

7. El estilo explicativo es determinante de la felicidad. Hablamos cerca de

14 horas al día con nosotros mismos generándonos opiniones y autoevaluaciones. Según

cómo las hagamos, seremos o no felices. No hay opinión más importante que la que forjemos

sobre nosotros mismos.

8. Equilibrio. Cada persona es un ser integral con muchas facetas. El desequilibrio en la

atención y desarrollo de cada una de ellas atenta contra la felicidad. Un ejemplo de

desequilibrio, de entre muchos otros, se refleja en el olvido que muchas organizaciones tienen

sobre un motivador importante del empleado: su vida familiar.

9. Desarrollar relaciones positivas con familiares, amigos y colegas. Las personas que mantienen 5 o más relaciones de amistad a lo largo de su vida son 60%

más propensos a decir que son muy felices. Nuestras relaciones también nos permiten

comunicarnos sobre las emociones negativas haciendo que estas pierdan su intensidad.

10. El uso del dinero para favorecer la felicidad. El dinero sí puede influir en

los niveles de felicidad, aunque de una manera muy poco significativa (menor al 10%) en

comparación con otros aspectos como las relaciones positivas, el sentido de propósito o el

sentido de logro, excepto en los casos en que la situación económica sea complicada.

Factores importantes para empresas y organizaciones sobre felicidad y bienestar

• Asegure que los procesos de selección, y procesos subsecuentes relacionados, buscan la coherencia entre habilidades/fortalezas con retos/requerimientos. Cuando un empleado ve superadas sus habilidades por el reto u objetivo, se frustra y cuando siente que sus habilidades superan el reto u objetivo, se aburre. En ambos casos, su felicidad y bienestar se ven minados.

• Tanto a trabajadores como a clientes es importante hacerles notar las cosas buenas con las que cuenta como empresa. Según el índice Losada, llamado así por el apellido del psicólogo investigador Martín Losada, las empresas que crecen económicamente se caracterizan por tener una comunicación en la que la relación entre feedback positivo y feedback negativo es de 3 a 1.

• Hágale saber a sus colaboradores cómo su trabajo impacta en el resultado esperado. Investigaciones realizadas en Estados Unidos, referencias por la publicación Harvard Business Review en 2010, han mostrado que el factor motivador #1 para los trabajadores, es saber que lo que hacen tiene un impacto positivo en los indicadores/metas que se buscan.

• Velar por la felicidad de los trabajadores aumenta la productividad y refuerza positivamente el posicionamiento de marca. Según la consultora Total Rewards de Argentina, las organizaciones que gestionan la felicidad de sus trabajadores, obtienen incrementos en productividad de hasta 76% y fortalecen su posicionamiento de marca en un 29%.

• Por incrementos en el 10% del compromiso (engagement) de trabajadores, se obtienen incrementos de lealtad del 4% entre los clientes. Luego, definir qué significa el engagement para una determinada organización, y gestionarlo apropiadamente, redunda en aumento de ventas.

branward.com © 2016 Branward® All rights reserved.

• Haga de los errores una oportunidad para reafirmar la sensación de control de sus clientes. Aunque no buscamos cometer errores, indudablemente estamos expuestos a tenerlos. Sin perjuicio de las correcciones que deban hacerse y de las compensaciones que podamos ofrecer, cuando se comenten errores es de vital importancia que la explicación que entreguemos dé al cliente la sensación de control. Frases tan simples como: “indíquenos cómo podemos compensar nuestro error” y actuar en consecuencia, por supuesto, le permiten sentir a nuestro interlocutor que mantiene el control.

• Facilite espacios para que el cliente se manifieste. Las personas que tienen la sensación de control son dadas a actuar, a manifestarse y a buscar soluciones. Por eso, además de gestionar apropiadamente el servicio, y como complemento a la anterior recomendación, es fundamental que usted promueva y facilite las oportunidades para que el cliente se manifieste, ayudándole así a sentir que sigue manteniendo el control. Por supuesto, actúe en coherencia con lo manifestado.

• Cuide la selección de los parámetros de evaluación. En un ámbito laboral o de relación con clientes, la fijación y comunicación de metas, y por ende la generación de expectativas, hacen que la evaluación frente a un mismo resultado pueda ser positiva o negativa. Por ejemplo: si usted promete un resultado de 5 y obtiene 4, será juzgado como no cumplidor. Ahora, si obtiene exactamente el mismo 4 pero con una promesa de 3, será evaluado como outstanding o Excepcional.

• Contemple celebrar con el cliente los logros que ha conseguido con su participación. Celebrar aumenta la conciencia de lo logrado, de lo positivo que se tiene, del valor del esfuerzo realizado y, además, favorece la sensación de logro y el sentido de propósito. Todos los anteriores han sido demostrados como elementos que favorecen la felicidad y el bienestar.

Andrés Aljure SaabCOACH, CONSULTOR, CATEDRÁTICO Y CONFERENCISTAMiembro del Advisory Board de Branward

Andres Aljure ha colaborado con Coca-Cola Company en Latinoamérica en temas de felicidad. Es consultor y coach de comunicación y felicidad personal y organizacional. Profesor de posgrado y maestría en Colombia, España, México, Perú y Ecuador. Se desarrolla como profesor de Felicidad en Universidad de La Sabana y UIS en Colombia y ESADE en España. Entre su experiencia ha prestado sus servicios a más de 100 compañías como Coca-Cola Company, Nokia, Telefónica, Toyota, Abbott, Diageo, Siemens y Boehringer Ingelheim, entre otras. Aljure es autor y coautor de distintos libros de comunicación.

/

Los países con mayor PIB no son los más felices en

el ranking mundial.

HAPPINESS ABILITIES

FELICIDAD: MÁS ALLÁ DE LA EMOCIÓN POSITIVA

En el ámbito empresarial actual el desarrollo del concepto de Felicidad es

considerado como secundario debido a la falta de una visión ampliada de la propia

noción y sus implicaciones.

La realidad es que la felicidad puede ser entendida bajo diversas perspectivas, pero

todas ellas afectan tanto al terreno personal como al profesional. Algunos científicos y

divulgadores como Eduardo Punset (economista, abogado y comunicador científico)

la definen como la ausencia de temor; otros como Tal Ben- Shahar (profesor de

Felicidad de la Universidad de Harvard, doctor en comportamiento organizacional) la

definen como la vivencia de una vida con propósito y que al mismo tiempo se

disfruta; otros como Luis Rojas Marcos (psiquiatra) la entienden como la vivencia de

una vida satisfactoria en general. Lo que es cierto es que, según los resultados del

estudio de la doctora Lyubomirsky, e independientemente de la definición por la que

nos inclinemos, la felicidad es como un “traje a medida de cada uno” dependiendo de

sus características propias, sus actividades, su entorno y/o sus propósitos. Deriva en

un 40% de nuestras actividades intencionales y tan sólo en un 10% de factores

externos: la genética no se puede cambiar, ¡los niveles de felicidad sí!.

El hecho de que los factores genéticos sean inmodificables no significa que no se

puedan mejorar los niveles de felicidad. Podemos aprender y entrenarnos para

incrementar nuestros niveles de felicidad, a pesar de tener un valor de referencia

dado por factores genéticos.

(02)

Según Martin Seligman, padre de la Psicología Positiva, en su "Teoría del bienestar”, la

obtención del bienestar depende de cinco grandes elementos que se consolidan en el

acróstico PERMA:

· Positive Emotion: emoción positiva o placentera.

· Engagement - Entrega: actividades que nos hacen fluir en las que

perdemos la noción del tiempo.

· Relationships: relaciones positivas.

· Meaning: significado o sentido.

· Achievement: logro de tener la posibilidad, como individuos o como

profesionales de cualquier disciplina, de aplicar los hallazgos que los

científicos en este campo obtienen.

En 2008 la profesora, Sonja Lyubomirsky de la Universidad de California y Ph. D de la

Universidad de Stanford, en su obra El cómo de la felicidad estableció cuáles son los

factores generales que inciden en los niveles de felicidad de las personas,

llegando a los siguientes datos:

· Factores genéticos

· Actividades intencionales

· Situaciones y sucesos externos a la vida

Se formula la pregunta: ¿qué influencia tiene el dinero en la felicidad y el bienestar? La

respuesta necesita la siguiente aclaración y explicaría por qué países con mayor PIB

no son los más felices en el ranking mundial.

Cuando las personas han superado niveles básicos de calidad de vida, obtener mayor

ingreso no es significativamente importante en el aumento de niveles de felicidad. El

dinero influye significativamente cuando el ingreso es bajo o cuando existen

dificultades económicas que no permiten un nivel mínimo suficiente de calidad de

vida. De hecho, en algunos casos, se observa una diminución de los niveles de

felicidad a pesar del aumento del ingreso.

Al dinero se le da un valor de un 10% entre los factores que inciden en los niveles

de felicidad: existen algunos de mucha más alta influencia que el dinero/riqueza.

Entre estos factores están la existencia de relaciones positivas, sentido de logro,

sentido de propósito y creencias y comportamientos/hábitos de cada individuo.

10 Consideraciones sobre la felicidad y el bienestar personal

1. La felicidad tiene su día. El Día Internacional de la Felicidad, decretado por la ONU,

se celebra el 20 de marzo cada año desde 2013.

2. La felicidad se puede aprender al igual que como se hace con un deporte.

Dado que cerca del 50% de los factores que inciden en los niveles de felicidad de las personas

se centran en sus hábitos, comportamientos y creencias, y estos son susceptibles de ser

modificados, la felicidad se puede aprender a través de la mejora de éstos.

3. Los factores externos solo determinan la felicidad en un 10%. El jefe,

el salario, el tráfico, el dinero, el clima, entre otras circunstancias, tan sólo tienen una incidencia

del 10% en los niveles de felicidad. Aprender a pensar y desarrollar hábitos y actividades a su

medida es mucho más poderoso.

4. La felicidad es también cuestión de foco. El 95% de nuestras decisiones son

irracionales (inconscientes y subconscientes) y el 5% son racionales (conscientes). Muchas

veces no somos conscientes de gran cantidad de aspectos favorables en nuestra vida dado

que nuestro cerebro nos centra en aspectos que debemos solucionar.

5. “Felicidad es ausencia de miedo”. Esto lo afirma el científico español Eduardo

Punset. Ahora bien, en este sentido, los miedos sin causa aparente, que generan ansiedad, son tal

vez el principal enemigo de la felicidad. ¿Para qué preocuparnos por lo que no podemos controlar?

6. La felicidad no es sólo disfrutar del momento presente como algunos

lo quieren creer para liberarse de sus responsabilidades. Si bien es cierto que es deseable y

apropiado buscar placer en el momento presente, que es el único que realmente tenemos, no

debe ser contrario a pensar en el futuro.

7. El estilo explicativo es determinante de la felicidad. Hablamos cerca de

14 horas al día con nosotros mismos generándonos opiniones y autoevaluaciones. Según

cómo las hagamos, seremos o no felices. No hay opinión más importante que la que forjemos

sobre nosotros mismos.

8. Equilibrio. Cada persona es un ser integral con muchas facetas. El desequilibrio en la

atención y desarrollo de cada una de ellas atenta contra la felicidad. Un ejemplo de

desequilibrio, de entre muchos otros, se refleja en el olvido que muchas organizaciones tienen

sobre un motivador importante del empleado: su vida familiar.

9. Desarrollar relaciones positivas con familiares, amigos y colegas. Las personas que mantienen 5 o más relaciones de amistad a lo largo de su vida son 60%

más propensos a decir que son muy felices. Nuestras relaciones también nos permiten

comunicarnos sobre las emociones negativas haciendo que estas pierdan su intensidad.

10. El uso del dinero para favorecer la felicidad. El dinero sí puede influir en

los niveles de felicidad, aunque de una manera muy poco significativa (menor al 10%) en

comparación con otros aspectos como las relaciones positivas, el sentido de propósito o el

sentido de logro, excepto en los casos en que la situación económica sea complicada.

Factores importantes para empresas y organizaciones sobre felicidad y bienestar

• Asegure que los procesos de selección, y procesos subsecuentes relacionados, buscan la coherencia entre habilidades/fortalezas con retos/requerimientos. Cuando un empleado ve superadas sus habilidades por el reto u objetivo, se frustra y cuando siente que sus habilidades superan el reto u objetivo, se aburre. En ambos casos, su felicidad y bienestar se ven minados.

• Tanto a trabajadores como a clientes es importante hacerles notar las cosas buenas con las que cuenta como empresa. Según el índice Losada, llamado así por el apellido del psicólogo investigador Martín Losada, las empresas que crecen económicamente se caracterizan por tener una comunicación en la que la relación entre feedback positivo y feedback negativo es de 3 a 1.

• Hágale saber a sus colaboradores cómo su trabajo impacta en el resultado esperado. Investigaciones realizadas en Estados Unidos, referencias por la publicación Harvard Business Review en 2010, han mostrado que el factor motivador #1 para los trabajadores, es saber que lo que hacen tiene un impacto positivo en los indicadores/metas que se buscan.

• Velar por la felicidad de los trabajadores aumenta la productividad y refuerza positivamente el posicionamiento de marca. Según la consultora Total Rewards de Argentina, las organizaciones que gestionan la felicidad de sus trabajadores, obtienen incrementos en productividad de hasta 76% y fortalecen su posicionamiento de marca en un 29%.

• Por incrementos en el 10% del compromiso (engagement) de trabajadores, se obtienen incrementos de lealtad del 4% entre los clientes. Luego, definir qué significa el engagement para una determinada organización, y gestionarlo apropiadamente, redunda en aumento de ventas.

branward.com © 2016 Branward® All rights reserved.

• Haga de los errores una oportunidad para reafirmar la sensación de control de sus clientes. Aunque no buscamos cometer errores, indudablemente estamos expuestos a tenerlos. Sin perjuicio de las correcciones que deban hacerse y de las compensaciones que podamos ofrecer, cuando se comenten errores es de vital importancia que la explicación que entreguemos dé al cliente la sensación de control. Frases tan simples como: “indíquenos cómo podemos compensar nuestro error” y actuar en consecuencia, por supuesto, le permiten sentir a nuestro interlocutor que mantiene el control.

• Facilite espacios para que el cliente se manifieste. Las personas que tienen la sensación de control son dadas a actuar, a manifestarse y a buscar soluciones. Por eso, además de gestionar apropiadamente el servicio, y como complemento a la anterior recomendación, es fundamental que usted promueva y facilite las oportunidades para que el cliente se manifieste, ayudándole así a sentir que sigue manteniendo el control. Por supuesto, actúe en coherencia con lo manifestado.

• Cuide la selección de los parámetros de evaluación. En un ámbito laboral o de relación con clientes, la fijación y comunicación de metas, y por ende la generación de expectativas, hacen que la evaluación frente a un mismo resultado pueda ser positiva o negativa. Por ejemplo: si usted promete un resultado de 5 y obtiene 4, será juzgado como no cumplidor. Ahora, si obtiene exactamente el mismo 4 pero con una promesa de 3, será evaluado como outstanding o Excepcional.

• Contemple celebrar con el cliente los logros que ha conseguido con su participación. Celebrar aumenta la conciencia de lo logrado, de lo positivo que se tiene, del valor del esfuerzo realizado y, además, favorece la sensación de logro y el sentido de propósito. Todos los anteriores han sido demostrados como elementos que favorecen la felicidad y el bienestar.

Andrés Aljure SaabCOACH, CONSULTOR, CATEDRÁTICO Y CONFERENCISTAMiembro del Advisory Board de Branward

Andres Aljure ha colaborado con Coca-Cola Company en Latinoamérica en temas de felicidad. Es consultor y coach de comunicación y felicidad personal y organizacional. Profesor de posgrado y maestría en Colombia, España, México, Perú y Ecuador. Se desarrolla como profesor de Felicidad en Universidad de La Sabana y UIS en Colombia y ESADE en España. Entre su experiencia ha prestado sus servicios a más de 100 compañías como Coca-Cola Company, Nokia, Telefónica, Toyota, Abbott, Diageo, Siemens y Boehringer Ingelheim, entre otras. Aljure es autor y coautor de distintos libros de comunicación.

/La felicidad se

puede aprender a través de la

mejora de los hábitos,

comportamientos y creencias.

HAPPINESS ABILITIES

FELICIDAD: MÁS ALLÁ DE LA EMOCIÓN POSITIVA

En el ámbito empresarial actual el desarrollo del concepto de Felicidad es

considerado como secundario debido a la falta de una visión ampliada de la propia

noción y sus implicaciones.

La realidad es que la felicidad puede ser entendida bajo diversas perspectivas, pero

todas ellas afectan tanto al terreno personal como al profesional. Algunos científicos y

divulgadores como Eduardo Punset (economista, abogado y comunicador científico)

la definen como la ausencia de temor; otros como Tal Ben- Shahar (profesor de

Felicidad de la Universidad de Harvard, doctor en comportamiento organizacional) la

definen como la vivencia de una vida con propósito y que al mismo tiempo se

disfruta; otros como Luis Rojas Marcos (psiquiatra) la entienden como la vivencia de

una vida satisfactoria en general. Lo que es cierto es que, según los resultados del

estudio de la doctora Lyubomirsky, e independientemente de la definición por la que

nos inclinemos, la felicidad es como un “traje a medida de cada uno” dependiendo de

sus características propias, sus actividades, su entorno y/o sus propósitos. Deriva en

un 40% de nuestras actividades intencionales y tan sólo en un 10% de factores

externos: la genética no se puede cambiar, ¡los niveles de felicidad sí!.

El hecho de que los factores genéticos sean inmodificables no significa que no se

puedan mejorar los niveles de felicidad. Podemos aprender y entrenarnos para

incrementar nuestros niveles de felicidad, a pesar de tener un valor de referencia

dado por factores genéticos.

(03)

Según Martin Seligman, padre de la Psicología Positiva, en su "Teoría del bienestar”, la

obtención del bienestar depende de cinco grandes elementos que se consolidan en el

acróstico PERMA:

· Positive Emotion: emoción positiva o placentera.

· Engagement - Entrega: actividades que nos hacen fluir en las que

perdemos la noción del tiempo.

· Relationships: relaciones positivas.

· Meaning: significado o sentido.

· Achievement: logro de tener la posibilidad, como individuos o como

profesionales de cualquier disciplina, de aplicar los hallazgos que los

científicos en este campo obtienen.

En 2008 la profesora, Sonja Lyubomirsky de la Universidad de California y Ph. D de la

Universidad de Stanford, en su obra El cómo de la felicidad estableció cuáles son los

factores generales que inciden en los niveles de felicidad de las personas,

llegando a los siguientes datos:

· Factores genéticos

· Actividades intencionales

· Situaciones y sucesos externos a la vida

Se formula la pregunta: ¿qué influencia tiene el dinero en la felicidad y el bienestar? La

respuesta necesita la siguiente aclaración y explicaría por qué países con mayor PIB

no son los más felices en el ranking mundial.

Cuando las personas han superado niveles básicos de calidad de vida, obtener mayor

ingreso no es significativamente importante en el aumento de niveles de felicidad. El

dinero influye significativamente cuando el ingreso es bajo o cuando existen

dificultades económicas que no permiten un nivel mínimo suficiente de calidad de

vida. De hecho, en algunos casos, se observa una diminución de los niveles de

felicidad a pesar del aumento del ingreso.

Al dinero se le da un valor de un 10% entre los factores que inciden en los niveles

de felicidad: existen algunos de mucha más alta influencia que el dinero/riqueza.

Entre estos factores están la existencia de relaciones positivas, sentido de logro,

sentido de propósito y creencias y comportamientos/hábitos de cada individuo.

10 Consideraciones sobre la felicidad y el bienestar personal

1. La felicidad tiene su día. El Día Internacional de la Felicidad, decretado por la ONU,

se celebra el 20 de marzo cada año desde 2013.

2. La felicidad se puede aprender al igual que como se hace con un deporte.

Dado que cerca del 50% de los factores que inciden en los niveles de felicidad de las personas

se centran en sus hábitos, comportamientos y creencias, y estos son susceptibles de ser

modificados, la felicidad se puede aprender a través de la mejora de éstos.

3. Los factores externos solo determinan la felicidad en un 10%. El jefe,

el salario, el tráfico, el dinero, el clima, entre otras circunstancias, tan sólo tienen una incidencia

del 10% en los niveles de felicidad. Aprender a pensar y desarrollar hábitos y actividades a su

medida es mucho más poderoso.

4. La felicidad es también cuestión de foco. El 95% de nuestras decisiones son

irracionales (inconscientes y subconscientes) y el 5% son racionales (conscientes). Muchas

veces no somos conscientes de gran cantidad de aspectos favorables en nuestra vida dado

que nuestro cerebro nos centra en aspectos que debemos solucionar.

5. “Felicidad es ausencia de miedo”. Esto lo afirma el científico español Eduardo

Punset. Ahora bien, en este sentido, los miedos sin causa aparente, que generan ansiedad, son tal

vez el principal enemigo de la felicidad. ¿Para qué preocuparnos por lo que no podemos controlar?

6. La felicidad no es sólo disfrutar del momento presente como algunos

lo quieren creer para liberarse de sus responsabilidades. Si bien es cierto que es deseable y

apropiado buscar placer en el momento presente, que es el único que realmente tenemos, no

debe ser contrario a pensar en el futuro.

7. El estilo explicativo es determinante de la felicidad. Hablamos cerca de

14 horas al día con nosotros mismos generándonos opiniones y autoevaluaciones. Según

cómo las hagamos, seremos o no felices. No hay opinión más importante que la que forjemos

sobre nosotros mismos.

8. Equilibrio. Cada persona es un ser integral con muchas facetas. El desequilibrio en la

atención y desarrollo de cada una de ellas atenta contra la felicidad. Un ejemplo de

desequilibrio, de entre muchos otros, se refleja en el olvido que muchas organizaciones tienen

sobre un motivador importante del empleado: su vida familiar.

9. Desarrollar relaciones positivas con familiares, amigos y colegas. Las personas que mantienen 5 o más relaciones de amistad a lo largo de su vida son 60%

más propensos a decir que son muy felices. Nuestras relaciones también nos permiten

comunicarnos sobre las emociones negativas haciendo que estas pierdan su intensidad.

10. El uso del dinero para favorecer la felicidad. El dinero sí puede influir en

los niveles de felicidad, aunque de una manera muy poco significativa (menor al 10%) en

comparación con otros aspectos como las relaciones positivas, el sentido de propósito o el

sentido de logro, excepto en los casos en que la situación económica sea complicada.

Factores importantes para empresas y organizaciones sobre felicidad y bienestar

• Asegure que los procesos de selección, y procesos subsecuentes relacionados, buscan la coherencia entre habilidades/fortalezas con retos/requerimientos. Cuando un empleado ve superadas sus habilidades por el reto u objetivo, se frustra y cuando siente que sus habilidades superan el reto u objetivo, se aburre. En ambos casos, su felicidad y bienestar se ven minados.

• Tanto a trabajadores como a clientes es importante hacerles notar las cosas buenas con las que cuenta como empresa. Según el índice Losada, llamado así por el apellido del psicólogo investigador Martín Losada, las empresas que crecen económicamente se caracterizan por tener una comunicación en la que la relación entre feedback positivo y feedback negativo es de 3 a 1.

• Hágale saber a sus colaboradores cómo su trabajo impacta en el resultado esperado. Investigaciones realizadas en Estados Unidos, referencias por la publicación Harvard Business Review en 2010, han mostrado que el factor motivador #1 para los trabajadores, es saber que lo que hacen tiene un impacto positivo en los indicadores/metas que se buscan.

• Velar por la felicidad de los trabajadores aumenta la productividad y refuerza positivamente el posicionamiento de marca. Según la consultora Total Rewards de Argentina, las organizaciones que gestionan la felicidad de sus trabajadores, obtienen incrementos en productividad de hasta 76% y fortalecen su posicionamiento de marca en un 29%.

• Por incrementos en el 10% del compromiso (engagement) de trabajadores, se obtienen incrementos de lealtad del 4% entre los clientes. Luego, definir qué significa el engagement para una determinada organización, y gestionarlo apropiadamente, redunda en aumento de ventas.

branward.com © 2016 Branward® All rights reserved.

• Haga de los errores una oportunidad para reafirmar la sensación de control de sus clientes. Aunque no buscamos cometer errores, indudablemente estamos expuestos a tenerlos. Sin perjuicio de las correcciones que deban hacerse y de las compensaciones que podamos ofrecer, cuando se comenten errores es de vital importancia que la explicación que entreguemos dé al cliente la sensación de control. Frases tan simples como: “indíquenos cómo podemos compensar nuestro error” y actuar en consecuencia, por supuesto, le permiten sentir a nuestro interlocutor que mantiene el control.

• Facilite espacios para que el cliente se manifieste. Las personas que tienen la sensación de control son dadas a actuar, a manifestarse y a buscar soluciones. Por eso, además de gestionar apropiadamente el servicio, y como complemento a la anterior recomendación, es fundamental que usted promueva y facilite las oportunidades para que el cliente se manifieste, ayudándole así a sentir que sigue manteniendo el control. Por supuesto, actúe en coherencia con lo manifestado.

• Cuide la selección de los parámetros de evaluación. En un ámbito laboral o de relación con clientes, la fijación y comunicación de metas, y por ende la generación de expectativas, hacen que la evaluación frente a un mismo resultado pueda ser positiva o negativa. Por ejemplo: si usted promete un resultado de 5 y obtiene 4, será juzgado como no cumplidor. Ahora, si obtiene exactamente el mismo 4 pero con una promesa de 3, será evaluado como outstanding o Excepcional.

• Contemple celebrar con el cliente los logros que ha conseguido con su participación. Celebrar aumenta la conciencia de lo logrado, de lo positivo que se tiene, del valor del esfuerzo realizado y, además, favorece la sensación de logro y el sentido de propósito. Todos los anteriores han sido demostrados como elementos que favorecen la felicidad y el bienestar.

Andrés Aljure SaabCOACH, CONSULTOR, CATEDRÁTICO Y CONFERENCISTAMiembro del Advisory Board de Branward

Andres Aljure ha colaborado con Coca-Cola Company en Latinoamérica en temas de felicidad. Es consultor y coach de comunicación y felicidad personal y organizacional. Profesor de posgrado y maestría en Colombia, España, México, Perú y Ecuador. Se desarrolla como profesor de Felicidad en Universidad de La Sabana y UIS en Colombia y ESADE en España. Entre su experiencia ha prestado sus servicios a más de 100 compañías como Coca-Cola Company, Nokia, Telefónica, Toyota, Abbott, Diageo, Siemens y Boehringer Ingelheim, entre otras. Aljure es autor y coautor de distintos libros de comunicación.

/

Velar por la felicidad de los trabajadores

aumenta la productividad

y refuerza positivamente el posicionamiento

de marca.

HAPPINESS ABILITIES

FELICIDAD: MÁS ALLÁ DE LA EMOCIÓN POSITIVA

En el ámbito empresarial actual el desarrollo del concepto de Felicidad es

considerado como secundario debido a la falta de una visión ampliada de la propia

noción y sus implicaciones.

La realidad es que la felicidad puede ser entendida bajo diversas perspectivas, pero

todas ellas afectan tanto al terreno personal como al profesional. Algunos científicos y

divulgadores como Eduardo Punset (economista, abogado y comunicador científico)

la definen como la ausencia de temor; otros como Tal Ben- Shahar (profesor de

Felicidad de la Universidad de Harvard, doctor en comportamiento organizacional) la

definen como la vivencia de una vida con propósito y que al mismo tiempo se

disfruta; otros como Luis Rojas Marcos (psiquiatra) la entienden como la vivencia de

una vida satisfactoria en general. Lo que es cierto es que, según los resultados del

estudio de la doctora Lyubomirsky, e independientemente de la definición por la que

nos inclinemos, la felicidad es como un “traje a medida de cada uno” dependiendo de

sus características propias, sus actividades, su entorno y/o sus propósitos. Deriva en

un 40% de nuestras actividades intencionales y tan sólo en un 10% de factores

externos: la genética no se puede cambiar, ¡los niveles de felicidad sí!.

El hecho de que los factores genéticos sean inmodificables no significa que no se

puedan mejorar los niveles de felicidad. Podemos aprender y entrenarnos para

incrementar nuestros niveles de felicidad, a pesar de tener un valor de referencia

dado por factores genéticos.

Según Martin Seligman, padre de la Psicología Positiva, en su "Teoría del bienestar”, la

obtención del bienestar depende de cinco grandes elementos que se consolidan en el

acróstico PERMA:

· Positive Emotion: emoción positiva o placentera.

· Engagement - Entrega: actividades que nos hacen fluir en las que

perdemos la noción del tiempo.

· Relationships: relaciones positivas.

· Meaning: significado o sentido.

· Achievement: logro de tener la posibilidad, como individuos o como

profesionales de cualquier disciplina, de aplicar los hallazgos que los

científicos en este campo obtienen.

En 2008 la profesora, Sonja Lyubomirsky de la Universidad de California y Ph. D de la

Universidad de Stanford, en su obra El cómo de la felicidad estableció cuáles son los

factores generales que inciden en los niveles de felicidad de las personas,

llegando a los siguientes datos:

· Factores genéticos

· Actividades intencionales

· Situaciones y sucesos externos a la vida

Se formula la pregunta: ¿qué influencia tiene el dinero en la felicidad y el bienestar? La

respuesta necesita la siguiente aclaración y explicaría por qué países con mayor PIB

no son los más felices en el ranking mundial.

Cuando las personas han superado niveles básicos de calidad de vida, obtener mayor

ingreso no es significativamente importante en el aumento de niveles de felicidad. El

dinero influye significativamente cuando el ingreso es bajo o cuando existen

dificultades económicas que no permiten un nivel mínimo suficiente de calidad de

vida. De hecho, en algunos casos, se observa una diminución de los niveles de

felicidad a pesar del aumento del ingreso.

Al dinero se le da un valor de un 10% entre los factores que inciden en los niveles

de felicidad: existen algunos de mucha más alta influencia que el dinero/riqueza.

Entre estos factores están la existencia de relaciones positivas, sentido de logro,

sentido de propósito y creencias y comportamientos/hábitos de cada individuo.

10 Consideraciones sobre la felicidad y el bienestar personal

1. La felicidad tiene su día. El Día Internacional de la Felicidad, decretado por la ONU,

se celebra el 20 de marzo cada año desde 2013.

2. La felicidad se puede aprender al igual que como se hace con un deporte.

Dado que cerca del 50% de los factores que inciden en los niveles de felicidad de las personas

se centran en sus hábitos, comportamientos y creencias, y estos son susceptibles de ser

modificados, la felicidad se puede aprender a través de la mejora de éstos.

3. Los factores externos solo determinan la felicidad en un 10%. El jefe,

el salario, el tráfico, el dinero, el clima, entre otras circunstancias, tan sólo tienen una incidencia

del 10% en los niveles de felicidad. Aprender a pensar y desarrollar hábitos y actividades a su

medida es mucho más poderoso.

4. La felicidad es también cuestión de foco. El 95% de nuestras decisiones son

irracionales (inconscientes y subconscientes) y el 5% son racionales (conscientes). Muchas

veces no somos conscientes de gran cantidad de aspectos favorables en nuestra vida dado

que nuestro cerebro nos centra en aspectos que debemos solucionar.

5. “Felicidad es ausencia de miedo”. Esto lo afirma el científico español Eduardo

Punset. Ahora bien, en este sentido, los miedos sin causa aparente, que generan ansiedad, son tal

vez el principal enemigo de la felicidad. ¿Para qué preocuparnos por lo que no podemos controlar?

6. La felicidad no es sólo disfrutar del momento presente como algunos

lo quieren creer para liberarse de sus responsabilidades. Si bien es cierto que es deseable y

apropiado buscar placer en el momento presente, que es el único que realmente tenemos, no

debe ser contrario a pensar en el futuro.

7. El estilo explicativo es determinante de la felicidad. Hablamos cerca de

14 horas al día con nosotros mismos generándonos opiniones y autoevaluaciones. Según

cómo las hagamos, seremos o no felices. No hay opinión más importante que la que forjemos

sobre nosotros mismos.

8. Equilibrio. Cada persona es un ser integral con muchas facetas. El desequilibrio en la

atención y desarrollo de cada una de ellas atenta contra la felicidad. Un ejemplo de

desequilibrio, de entre muchos otros, se refleja en el olvido que muchas organizaciones tienen

sobre un motivador importante del empleado: su vida familiar.

9. Desarrollar relaciones positivas con familiares, amigos y colegas. Las personas que mantienen 5 o más relaciones de amistad a lo largo de su vida son 60%

más propensos a decir que son muy felices. Nuestras relaciones también nos permiten

comunicarnos sobre las emociones negativas haciendo que estas pierdan su intensidad.

10. El uso del dinero para favorecer la felicidad. El dinero sí puede influir en

los niveles de felicidad, aunque de una manera muy poco significativa (menor al 10%) en

comparación con otros aspectos como las relaciones positivas, el sentido de propósito o el

sentido de logro, excepto en los casos en que la situación económica sea complicada.

Factores importantes para empresas y organizaciones sobre felicidad y bienestar

• Asegure que los procesos de selección, y procesos subsecuentes relacionados, buscan la coherencia entre habilidades/fortalezas con retos/requerimientos. Cuando un empleado ve superadas sus habilidades por el reto u objetivo, se frustra y cuando siente que sus habilidades superan el reto u objetivo, se aburre. En ambos casos, su felicidad y bienestar se ven minados.

• Tanto a trabajadores como a clientes es importante hacerles notar las cosas buenas con las que cuenta como empresa. Según el índice Losada, llamado así por el apellido del psicólogo investigador Martín Losada, las empresas que crecen económicamente se caracterizan por tener una comunicación en la que la relación entre feedback positivo y feedback negativo es de 3 a 1.

• Hágale saber a sus colaboradores cómo su trabajo impacta en el resultado esperado. Investigaciones realizadas en Estados Unidos, referencias por la publicación Harvard Business Review en 2010, han mostrado que el factor motivador #1 para los trabajadores, es saber que lo que hacen tiene un impacto positivo en los indicadores/metas que se buscan.

• Velar por la felicidad de los trabajadores aumenta la productividad y refuerza positivamente el posicionamiento de marca. Según la consultora Total Rewards de Argentina, las organizaciones que gestionan la felicidad de sus trabajadores, obtienen incrementos en productividad de hasta 76% y fortalecen su posicionamiento de marca en un 29%.

• Por incrementos en el 10% del compromiso (engagement) de trabajadores, se obtienen incrementos de lealtad del 4% entre los clientes. Luego, definir qué significa el engagement para una determinada organización, y gestionarlo apropiadamente, redunda en aumento de ventas.

(04)branward.com © 2016 Branward® All rights reserved.

• Haga de los errores una oportunidad para reafirmar la sensación de control de sus clientes. Aunque no buscamos cometer errores, indudablemente estamos expuestos a tenerlos. Sin perjuicio de las correcciones que deban hacerse y de las compensaciones que podamos ofrecer, cuando se comenten errores es de vital importancia que la explicación que entreguemos dé al cliente la sensación de control. Frases tan simples como: “indíquenos cómo podemos compensar nuestro error” y actuar en consecuencia, por supuesto, le permiten sentir a nuestro interlocutor que mantiene el control.

• Facilite espacios para que el cliente se manifieste. Las personas que tienen la sensación de control son dadas a actuar, a manifestarse y a buscar soluciones. Por eso, además de gestionar apropiadamente el servicio, y como complemento a la anterior recomendación, es fundamental que usted promueva y facilite las oportunidades para que el cliente se manifieste, ayudándole así a sentir que sigue manteniendo el control. Por supuesto, actúe en coherencia con lo manifestado.

• Cuide la selección de los parámetros de evaluación. En un ámbito laboral o de relación con clientes, la fijación y comunicación de metas, y por ende la generación de expectativas, hacen que la evaluación frente a un mismo resultado pueda ser positiva o negativa. Por ejemplo: si usted promete un resultado de 5 y obtiene 4, será juzgado como no cumplidor. Ahora, si obtiene exactamente el mismo 4 pero con una promesa de 3, será evaluado como outstanding o Excepcional.

• Contemple celebrar con el cliente los logros que ha conseguido con su participación. Celebrar aumenta la conciencia de lo logrado, de lo positivo que se tiene, del valor del esfuerzo realizado y, además, favorece la sensación de logro y el sentido de propósito. Todos los anteriores han sido demostrados como elementos que favorecen la felicidad y el bienestar.

Andrés Aljure SaabCOACH, CONSULTOR, CATEDRÁTICO Y CONFERENCISTAMiembro del Advisory Board de Branward

Andres Aljure ha colaborado con Coca-Cola Company en Latinoamérica en temas de felicidad. Es consultor y coach de comunicación y felicidad personal y organizacional. Profesor de posgrado y maestría en Colombia, España, México, Perú y Ecuador. Se desarrolla como profesor de Felicidad en Universidad de La Sabana y UIS en Colombia y ESADE en España. Entre su experiencia ha prestado sus servicios a más de 100 compañías como Coca-Cola Company, Nokia, Telefónica, Toyota, Abbott, Diageo, Siemens y Boehringer Ingelheim, entre otras. Aljure es autor y coautor de distintos libros de comunicación.

HAPPINESS ABILITIES

FELICIDAD: MÁS ALLÁ DE LA EMOCIÓN POSITIVA

En el ámbito empresarial actual el desarrollo del concepto de Felicidad es

considerado como secundario debido a la falta de una visión ampliada de la propia

noción y sus implicaciones.

La realidad es que la felicidad puede ser entendida bajo diversas perspectivas, pero

todas ellas afectan tanto al terreno personal como al profesional. Algunos científicos y

divulgadores como Eduardo Punset (economista, abogado y comunicador científico)

la definen como la ausencia de temor; otros como Tal Ben- Shahar (profesor de

Felicidad de la Universidad de Harvard, doctor en comportamiento organizacional) la

definen como la vivencia de una vida con propósito y que al mismo tiempo se

disfruta; otros como Luis Rojas Marcos (psiquiatra) la entienden como la vivencia de

una vida satisfactoria en general. Lo que es cierto es que, según los resultados del

estudio de la doctora Lyubomirsky, e independientemente de la definición por la que

nos inclinemos, la felicidad es como un “traje a medida de cada uno” dependiendo de

sus características propias, sus actividades, su entorno y/o sus propósitos. Deriva en

un 40% de nuestras actividades intencionales y tan sólo en un 10% de factores

externos: la genética no se puede cambiar, ¡los niveles de felicidad sí!.

El hecho de que los factores genéticos sean inmodificables no significa que no se

puedan mejorar los niveles de felicidad. Podemos aprender y entrenarnos para

incrementar nuestros niveles de felicidad, a pesar de tener un valor de referencia

dado por factores genéticos.

Según Martin Seligman, padre de la Psicología Positiva, en su "Teoría del bienestar”, la

obtención del bienestar depende de cinco grandes elementos que se consolidan en el

acróstico PERMA:

· Positive Emotion: emoción positiva o placentera.

· Engagement - Entrega: actividades que nos hacen fluir en las que

perdemos la noción del tiempo.

· Relationships: relaciones positivas.

· Meaning: significado o sentido.

· Achievement: logro de tener la posibilidad, como individuos o como

profesionales de cualquier disciplina, de aplicar los hallazgos que los

científicos en este campo obtienen.

En 2008 la profesora, Sonja Lyubomirsky de la Universidad de California y Ph. D de la

Universidad de Stanford, en su obra El cómo de la felicidad estableció cuáles son los

factores generales que inciden en los niveles de felicidad de las personas,

llegando a los siguientes datos:

· Factores genéticos

· Actividades intencionales

· Situaciones y sucesos externos a la vida

Se formula la pregunta: ¿qué influencia tiene el dinero en la felicidad y el bienestar? La

respuesta necesita la siguiente aclaración y explicaría por qué países con mayor PIB

no son los más felices en el ranking mundial.

Cuando las personas han superado niveles básicos de calidad de vida, obtener mayor

ingreso no es significativamente importante en el aumento de niveles de felicidad. El

dinero influye significativamente cuando el ingreso es bajo o cuando existen

dificultades económicas que no permiten un nivel mínimo suficiente de calidad de

vida. De hecho, en algunos casos, se observa una diminución de los niveles de

felicidad a pesar del aumento del ingreso.

Al dinero se le da un valor de un 10% entre los factores que inciden en los niveles

de felicidad: existen algunos de mucha más alta influencia que el dinero/riqueza.

Entre estos factores están la existencia de relaciones positivas, sentido de logro,

sentido de propósito y creencias y comportamientos/hábitos de cada individuo.

10 Consideraciones sobre la felicidad y el bienestar personal

1. La felicidad tiene su día. El Día Internacional de la Felicidad, decretado por la ONU,

se celebra el 20 de marzo cada año desde 2013.

2. La felicidad se puede aprender al igual que como se hace con un deporte.

Dado que cerca del 50% de los factores que inciden en los niveles de felicidad de las personas

se centran en sus hábitos, comportamientos y creencias, y estos son susceptibles de ser

modificados, la felicidad se puede aprender a través de la mejora de éstos.

3. Los factores externos solo determinan la felicidad en un 10%. El jefe,

el salario, el tráfico, el dinero, el clima, entre otras circunstancias, tan sólo tienen una incidencia

del 10% en los niveles de felicidad. Aprender a pensar y desarrollar hábitos y actividades a su

medida es mucho más poderoso.

4. La felicidad es también cuestión de foco. El 95% de nuestras decisiones son

irracionales (inconscientes y subconscientes) y el 5% son racionales (conscientes). Muchas

veces no somos conscientes de gran cantidad de aspectos favorables en nuestra vida dado

que nuestro cerebro nos centra en aspectos que debemos solucionar.

5. “Felicidad es ausencia de miedo”. Esto lo afirma el científico español Eduardo

Punset. Ahora bien, en este sentido, los miedos sin causa aparente, que generan ansiedad, son tal

vez el principal enemigo de la felicidad. ¿Para qué preocuparnos por lo que no podemos controlar?

6. La felicidad no es sólo disfrutar del momento presente como algunos

lo quieren creer para liberarse de sus responsabilidades. Si bien es cierto que es deseable y

apropiado buscar placer en el momento presente, que es el único que realmente tenemos, no

debe ser contrario a pensar en el futuro.

7. El estilo explicativo es determinante de la felicidad. Hablamos cerca de

14 horas al día con nosotros mismos generándonos opiniones y autoevaluaciones. Según

cómo las hagamos, seremos o no felices. No hay opinión más importante que la que forjemos

sobre nosotros mismos.

8. Equilibrio. Cada persona es un ser integral con muchas facetas. El desequilibrio en la

atención y desarrollo de cada una de ellas atenta contra la felicidad. Un ejemplo de

desequilibrio, de entre muchos otros, se refleja en el olvido que muchas organizaciones tienen

sobre un motivador importante del empleado: su vida familiar.

9. Desarrollar relaciones positivas con familiares, amigos y colegas. Las personas que mantienen 5 o más relaciones de amistad a lo largo de su vida son 60%

más propensos a decir que son muy felices. Nuestras relaciones también nos permiten

comunicarnos sobre las emociones negativas haciendo que estas pierdan su intensidad.

10. El uso del dinero para favorecer la felicidad. El dinero sí puede influir en

los niveles de felicidad, aunque de una manera muy poco significativa (menor al 10%) en

comparación con otros aspectos como las relaciones positivas, el sentido de propósito o el

sentido de logro, excepto en los casos en que la situación económica sea complicada.

Factores importantes para empresas y organizaciones sobre felicidad y bienestar

• Asegure que los procesos de selección, y procesos subsecuentes relacionados, buscan la coherencia entre habilidades/fortalezas con retos/requerimientos. Cuando un empleado ve superadas sus habilidades por el reto u objetivo, se frustra y cuando siente que sus habilidades superan el reto u objetivo, se aburre. En ambos casos, su felicidad y bienestar se ven minados.

• Tanto a trabajadores como a clientes es importante hacerles notar las cosas buenas con las que cuenta como empresa. Según el índice Losada, llamado así por el apellido del psicólogo investigador Martín Losada, las empresas que crecen económicamente se caracterizan por tener una comunicación en la que la relación entre feedback positivo y feedback negativo es de 3 a 1.

• Hágale saber a sus colaboradores cómo su trabajo impacta en el resultado esperado. Investigaciones realizadas en Estados Unidos, referencias por la publicación Harvard Business Review en 2010, han mostrado que el factor motivador #1 para los trabajadores, es saber que lo que hacen tiene un impacto positivo en los indicadores/metas que se buscan.

• Velar por la felicidad de los trabajadores aumenta la productividad y refuerza positivamente el posicionamiento de marca. Según la consultora Total Rewards de Argentina, las organizaciones que gestionan la felicidad de sus trabajadores, obtienen incrementos en productividad de hasta 76% y fortalecen su posicionamiento de marca en un 29%.

• Por incrementos en el 10% del compromiso (engagement) de trabajadores, se obtienen incrementos de lealtad del 4% entre los clientes. Luego, definir qué significa el engagement para una determinada organización, y gestionarlo apropiadamente, redunda en aumento de ventas.

/

Celebrar aumenta la conciencia de lo

logrado, de lo positivo que se tiene, del valor del esfuerzo

realizado y, además, favorece la sensación de logro y el sentido

de propósito.

branward.com © 2016 Branward® All rights reserved.

• Haga de los errores una oportunidad para reafirmar la sensación de control de sus clientes. Aunque no buscamos cometer errores, indudablemente estamos expuestos a tenerlos. Sin perjuicio de las correcciones que deban hacerse y de las compensaciones que podamos ofrecer, cuando se comenten errores es de vital importancia que la explicación que entreguemos dé al cliente la sensación de control. Frases tan simples como: “indíquenos cómo podemos compensar nuestro error” y actuar en consecuencia, por supuesto, le permiten sentir a nuestro interlocutor que mantiene el control.

• Facilite espacios para que el cliente se manifieste. Las personas que tienen la sensación de control son dadas a actuar, a manifestarse y a buscar soluciones. Por eso, además de gestionar apropiadamente el servicio, y como complemento a la anterior recomendación, es fundamental que usted promueva y facilite las oportunidades para que el cliente se manifieste, ayudándole así a sentir que sigue manteniendo el control. Por supuesto, actúe en coherencia con lo manifestado.

• Cuide la selección de los parámetros de evaluación. En un ámbito laboral o de relación con clientes, la fijación y comunicación de metas, y por ende la generación de expectativas, hacen que la evaluación frente a un mismo resultado pueda ser positiva o negativa. Por ejemplo: si usted promete un resultado de 5 y obtiene 4, será juzgado como no cumplidor. Ahora, si obtiene exactamente el mismo 4 pero con una promesa de 3, será evaluado como outstanding o Excepcional.

• Contemple celebrar con el cliente los logros que ha conseguido con su participación. Celebrar aumenta la conciencia de lo logrado, de lo positivo que se tiene, del valor del esfuerzo realizado y, además, favorece la sensación de logro y el sentido de propósito. Todos los anteriores han sido demostrados como elementos que favorecen la felicidad y el bienestar.

Andrés Aljure SaabCOACH, CONSULTOR, CATEDRÁTICO Y CONFERENCISTAMiembro del Advisory Board de Branward

Andres Aljure ha colaborado con Coca-Cola Company en Latinoamérica en temas de felicidad. Es consultor y coach de comunicación y felicidad personal y organizacional. Profesor de posgrado y maestría en Colombia, España, México, Perú y Ecuador. Se desarrolla como profesor de Felicidad en Universidad de La Sabana y UIS en Colombia y ESADE en España. Entre su experiencia ha prestado sus servicios a más de 100 compañías como Coca-Cola Company, Nokia, Telefónica, Toyota, Abbott, Diageo, Siemens y Boehringer Ingelheim, entre otras. Aljure es autor y coautor de distintos libros de comunicación.