Área temática: diseÑo de vÍas para una...

35
Página 1 de 35 Área temática: DISEÑO DE VÍAS PARA UNA MOVILIDAD MÁS SEGURA Diseño de infraestructuras más seguras. Título del trabajo: Patrones de demarcación vial como medida de bajo costo para el control de la velocidad Autores Erick Acosta Hernández* Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales Universidad de Costa Rica Código Postal 11501-2060 San José, Costa Rica Tel: (506) 2511-2533 - Fax: (506) 2511-4440 Email: [email protected] Javier Zamora Rojas Email: [email protected] Junior Araya Villalobos Email: [email protected] Didier Fonseca Obando Email:[email protected] * Autor de correspondencia

Upload: truongthu

Post on 07-Oct-2018

221 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Página 1 de 35

Área temática:

DISEÑO DE VÍAS PARA UNA MOVILIDAD MÁS SEGURA

Diseño de infraestructuras más seguras.

Título del trabajo: Patrones de demarcación vial como medida de bajo costo para el

control de la velocidad

Autores

Erick Acosta Hernández*

Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales

Universidad de Costa Rica

Código Postal 11501-2060 San José, Costa Rica

Tel: (506) 2511-2533 - Fax: (506) 2511-4440

Email: [email protected]

Javier Zamora Rojas

Email: [email protected]

Junior Araya Villalobos

Email: [email protected]

Didier Fonseca Obando

Email:[email protected]

* Autor de correspondencia

Página 2 de 35

Resumen

Este trabajo tiene como objetivo presentar una comparación de los resultados obtenidos en

Costa Rica y otros países, sobre la colocación de patrones de demarcación vial en el

pavimento como medida de bajo costo para el control de velocidad en carretera, y su

factibilidad técnica para ser utilizados como complemento de los sistemas de gestión de

velocidad en carreteras.

Se realizó una investigación bibliográfica sobre la experiencia científica desarrollada en otros

países, en cuanto al efecto que tienen diferentes patrones de demarcación vial

específicamente diseñados para influir en la percepción que el conductor tiene de la vía, y

provocar una disminución significativa de su velocidad de circulación.

En Costa Rica, para evaluar el comportamiento del conductor ante este tipo de medida de

mitigación, se probaron dos patrones diferentes de demarcación con franjas transversales

del ancho del carril, con material termoplástico, en una vía sinuosa de velocidades medias y

en una carretera de alta velocidad. Un patrón se diseñó con espaciamientos constantes

entre franjas y grupos de franjas, y el otro patrón se diseñó con método de cálculo

logarítmico. La evaluación se realizó por medio de un estudio antes-después, donde se

ejecutó un muestreo de velocidades en cada uno de los sitios de estudio y un análisis

estadístico para determinar la validez de los resultados.

Finalmente, se concluye que existe evidencia sobre la obtención de reducciones

estadísticamente significativas en la velocidad promedio y en la velocidad del percentil 85 de

los conductores en los sitios de estudio, alcanzando porcentajes de reducción de velocidad

media de hasta un 23 %, por lo que es factible implementar este tipo de medida de

mitigación para la gestión de la velocidad en otras rutas del país.

Página 3 de 35

Introducción.

El objetivo de demarcar estas líneas en el pavimento es afectar directamente la percepción

del conductor sobre la velocidad de circulación y alertar sobre la presencia de un sitio

peligroso con el menor costo, facilidad de implementación y sin dañar la superficie de ruedo.

Los resultados obtenidos por diversos autores consultados coinciden en que este tipo de

líneas en el pavimento son eficaces para reducir la velocidad de los vehículos,

especialmente en situaciones donde se presenten tramos de carretera peligrosos, como

curvas cerradas, , puentes, rampas de acceso y salida de autopistas, zonas de trabajo, entre

otros. Algunos de los estudios revisados muestran resultados contradictorios en cuanto a la

magnitud de la disminución de la velocidad. Las diferencias se podrían deber a varias

razones: el diseño del experimento, tamaño de la muestra, el tipo de patrón utilizado, tipo de

vía, configuración de la ruta, y factores culturales como el comportamiento de los

conductores, entre otros.

Alrededor del mundo se han probado diversos patrones y diseños de líneas reductoras de

velocidad, con diferentes combinaciones de tasas de desaceleración, espaciamiento entre

líneas, longitud total del área tratada, formas y tamaños de los tratamientos, entre otros. Los

patrones transversales sobre el pavimento a través de todo el carril de circulación han

demostrado ser más eficaces en la reducción de la velocidad que las marcas más

pequeñas, tal como los patrones periféricos.

El uso de este tipo de demarcación vial, también conocido como líneas auxiliares de

reducción de velocidad ha sido estudiado desde finales de 1970 y principios de 1980, hasta

la fecha. Los estudios se han enfocado en las marcas transversales y perimetrales que se

colocan en la superficie de rodamiento y han tratado de evaluar una serie de patrones de

demarcación transversales y perimetrales, con distintos espaciamientos, ya sean constantes

o progresivos. En este último caso principalmente se utilizan escalas semilogarítmicas, lo

que produce la sensación de que se está aumentando la velocidad de circulación o la

disminución del ancho del carril, por ende, el conductor aprecia este efecto visual (aunque

maneje con la misma rapidez), y reduce la velocidad de circulación debido a la sensación

que crean este tipo de líneas auxiliares.

En Costa Rica, la efectividad de esta medida no se conoce con rigor científico, dado que

nunca se han implementado, por lo que antes de hacer intensivo su uso se realizó un trabajo

de tesis en Ingeniería Civil para evaluar su deñempeño.

Página 4 de 35

Estado del arte sobre líneas reductoras de velocidad.

Se denominan líneas auxiliares para la reducción de velocidad a una sucesión de líneas

demarcadas a lo largo del pavimento. Este tipo de líneas reductoras de velocidad tienen

como fin alertar a los conductores sobre condiciones de riesgo o alguna otra situación en

particular e incentivar la reducción de la velocidad (Hallmark, 2007; Katz, 2007; Meyer, 2007;

Zamora, 2011).

La colocación de este tipo de demarcación se da en aquellos lugares que debido a su

peligrosidad requieren un complemento de la señalización vertical y horizontal para la

reducción de velocidad, como por ejemplo: curvas, entradas a poblados en vías no urbanas,

proximidades a áreas comerciales, zonas escolares u otras actividades donde se concentre

alto flujo peatonal, entre otros.

El Manual Venezolano de Dispositivos Uniformes para el control de tránsito (2011), define:

“las líneas auxiliares transversales son normalmente de color blanco, con un ancho

aproximado de 10 a 30 centímetros, que pueden ocupar todo el ancho o una parte del carril”.

Además, el manual indica que: “se dispondrán de conjuntos de líneas, de un número y

separación variable que serán función de la velocidad máxima permitida del tramo que se

esté estudiando”.

Las marcas transversales pueden tener diferentes formas como cuadrados o triángulos, su

espaciamiento y dimensiones son variables, dando en algunos casos la sensación de que el

carril se hace cada vez más pequeño, gracias a la geometría de diseño y en otros casos,

debido a su espaciamiento variable produce la sensación en el conductor de que la

velocidad de circulación está aumentando, por lo que se procede a disminuir la velocidad.

Algunos otros patrones pueden ser una combinación de las distintas demarcaciones

transversales y longitudinales que se presentan en la Figura 1.

Página 5 de 35

Figura 1: Patrones de demarcación para pavimentos

Nota: Tomado de Zamora, 2011; modificado por Fonseca, 2014.

Otro tipo de marcas viales para la reducción de velocidad que han sido estudiadas son las

conocidas como tipo “chevron”, que constan de grupos de chevrones dispuestos en bloques,

bloques se encuentran unos más cerca de otros, que dan la sensación visual de que se

transita a una alta velocidad superior. En varios países como España, Japón, Estados

Unidos y Reino Unido se han probado, dando resultados muy positivos y efectivos como

método de reducción de velocidad.

Drakopoulus y Vergou (2003) realizaron este tipo de demarcación en Wisconsin, Estados

Unidos; dentro de los resultados obtuvo una disminución en la media y en el percentil 85 de

24 km/h y 27 km/h, respectivamente. La Figura 2 muestra este tipo de patrón.

Página 6 de 35

Figura 2: Patrón tipo Chevron

Nota: Tomado de Katz, 2007

De las investigaciones realizadas se han obtenido resultados y conclusiones muy diferentes

entre sí, esto debido a la cantidad de variables que se deben tomar en cuenta, como por

ejemplo el lugar donde se realizan las mediciones y la metodología que se elige para

efectuar este tipo de proyectos.

Otras variables que se deben tomar en cuenta son (Zamora, 2011):

Tipo de marcas y patrones de las líneas auxiliares de reducción de velocidad

Diseño de las marcas: dimensiones y espaciamiento

Área donde se instalan

Tipo de via: urbana o rural

Diseño geométrico y configuración de la vía

En Denton, Escocia durante el año de 1980, realizó un estudio donde se colocaron marcas

transversales amarillas de borde a borde de la calzada y se realizaron mediciones de

velocidad de los vehículos que circulaban a lo largo de la autopista durante tres semanas

antes y tres semanas después de la demarcación. Estas líneas tenían 60 cm de ancho y se

colocaron un total de 90 líneas en toda el área de estudio, el espaciamiento de las líneas

disminuía progresivamente de 6 a 3 metros. Los resultados obtenidos fueron una reducción

significativa, tanto en la velocidad promedio y percentil 85, la velocidad promedio pasó de 57

a 44 km/h (22% de reducción), y para el percentil 85 pasó de 75 a 53 km/h (30%. reducción)

Página 7 de 35

En Kentucky, Estados Unidos en 1980, se colocaron marcas transversales en una curva

pronunciada donde en los 6 años previos a la colocación de las marcas habían ocurrido 36

accidentes relacionados con velocidad. El espaciamiento de las líneas pretendía crear una

ilusión de aceleración lo que provocaría que los conductores manejaran a menor velocidad,

esto debido a que principalmente la velocidad a la que se conduce se percibe por el sentido

de la vista.

En zonas rurales, este tipo de dispositivos deben de ser colocados aproximadamente a 230

m antes del peligro. Se utilizó además la siguiente fórmula para determinar la distancia

adecuada total de las líneas reductoras:

(1)

Donde:

D= distancia recorrida en desaceleración de V1 a V2

V1= velocidad al inicio de las marcas

V2= velocidad al final de las marcas (inicio de la curva)

d= tasa de desaceleración (0,9 m/s2)

El muestreo de la velocidad de los vehículos fueron tomadas por un radar de velocidad, con

mediciones antes, una semana después y seis meses después de la instalación de las

líneas auxiliares de reducción de velocidad, además, se decidió tomar estas medidas al

inicio y al final de las marcas en el pavimento. Se hicieron mediciones tanto de día como de

noche.

Los resultados obtenidos fueron los siguientes:

Durante el día, se obtuvieron reducciones de velocidad entre los 25 y 20 km/h, tanto a la

semana después y como a los seis meses después

Página 8 de 35

Durante la noche, las reducciones en las velocidades oscilan entre los 15 y 11 km/h, una

semana después y seis meses después, respectivamente.

En Japón, en el puente Yodagawa en la ciudad de Osaka en el año 1993, se utilizó otro tipo

de patrón de demarcación sobre el pavimento. Se colocaron marcas convergentes tipo

“chevron”, con líneas discontinuas, crear la ilusión óptica de estrechamiento del carril y que

el vehículo circula a una mayor velocidad y provocar una reducción de la velocidad real del

vehículo. En la Figura 3, se muestra el patrón utilizado.

Lamentablemente, no se dispone de las especificaciones de diseño de las marcas tipo

“Chevron” utilizadas sobre el puente ni de los beneficios cuantitativos. Sin embargo, los

estudios revisados indican que no se produjo ningún accidente en un período de seis meses

después de la colocación de estas marcas sobre el pavimento, mientras que para el año

anterior de la instalación de estas marcas se dio la ocurrencia de 10 accidentes sobre esta

misma área.

Figura 3: Patrón tipo Chevron utilizado sobre el puente Yodagawa

Nota: Tomado de Voigt, 2007

Meyer (1999) menciona otro tipo de aplicación de las líneas reductoras de velocidad en

zonas de trabajo en autopistas en el estado de Kansas, Estados Unidos, El diseño utilizado

consto de tres patrones:

El primero consistió en líneas uniformemente espaciadas, un espaciamiento uniforme de

15,8 m entre cada marca del pavimento, longitud de líneas de 2,75 m y ancho de 1,05 m, su

Página 9 de 35

función es dar una referencia o advertencia a los conductores para que observen el patrón

siguiente.

El segundo patrón de línea con un espaciamiento de la líneas reductoras disminuyen

gradualmente conforme se acerca a la zona de trabajo, en donde por efectos ópticos, lo

conductores deberán reducir la velocidad de los vehículos que transitan por la zona.

Un último patrón en la zona de trabajo con grupos intermitentes de seis barras

uniformemente espaciadas con espacios más grandes entre los grupos. Ver Figura 4.

Figura 4: Esquema preliminar del patrón.

Nota: Tomado de Meyer, 2004; modificado por autor

Para el diseño final del patrón delantero se utilizó un espaciamiento uniforme de 15,85 m

entre cada marca del pavimento, con un largo de las líneas de 2,75 m y ancho de 1,05 m.

Este tipo de patrón se utilizó a lo largo de 332 m y está compuesto por 20 barras. Para el

patrón secundario también se utilizaron líneas reductoras de 2,75 m de largo, en este caso

si se varió el ancho de las líneas, el mismo oscila entre 1,05 m y 0,60 m, con un total de 29

marcas en el pavimento para una longitud total de este patrón de 279 m. El espaciamiento

entre cada marca del pavimento varía desde los 15,7 m hasta los 9 m aproximadamente.

Finalmente para la zona de trabajo se cuenta con cuatro juegos de 6 líneas reductoras, con

un espaciamiento de 152 m entre cada juego de barras. Cada barra tiene un espaciamiento

entre ellas de 6 m, además tienen 0,6 m de ancho y 2,75 m de largo.

En cuanto a la toma de datos de velocidad de los vehículos, se colocaron diez sensores

para medir la velocidad y fueron recogidos durante un periodo de 30 días, para periodos de

día y de noche que se analizaron por separado, además se hace una separación entre

vehículos de pasajeros y vehículos pesados. Es importante recalcar que las líneas

reductoras de velocidad fueron pintadas sobre la carretera y se les añadió microesferas de

vidrio para brindarle una mejor retrorreflectividad a las líneas reductoras.

Página 10 de 35

Con respecto a algunas de las conclusiones que se obtuvieron de este estudio se pueden

mencionar:

Se observaron reducciones en las velocidades medias y en el percentil 85.Las

magnitudes de las reducciones eran pequeñas pero estadísticamente significativas

(nivel de confianza del 95%).

Se dieron muchas variaciones de velocidades a lo largo de la zona de prueba, por lo

que el autor concluye que estas variaciones eran producto de la colocación de las

líneas gracias a la advertencia y efectos de percepción que inducen las líneas

reductoras de velocidad, pero debido a que los cambios eran muy pequeños, no se

logró realizar una comparación entre las magnitudes de estos efectos.

Se encontró que la disminución en la velocidad de los vehículos se da en la primera

mitad del patrón primario, aunque generalmente se pierde la velocidad en la segunda

mitad de este patrón, donde el espaciamiento es generalmente uniforme.

Las barras intermitentes en la zona de trabajo no produjeron ninguna disminución en

las velocidades de los vehículos.

Los departamentos de transporte de Nueva York, Mississippi y Texas decidieron utilizar este

tipo de medida para el control de velocidad en carretera. El tratamiento se probó en tres

sitios, una rampa en la Interestatal 690 en Syracuse, Nueva York y en una carretera de dos

carriles en Jackson, Mississippi y en una carretera rural del pueblo de Waller, Texas. (Katz,

2007)

En el primer sitio el tratamiento utilizado consistió en marcas en el pavimento de 30,5 cm de

ancho y 45,7 cm de largo con espaciamiento gradual colocadas perpendicularmente al carril

de circulación en los bordes derecho e izquierdo del carril. En este sitio después de

realizado el análisis “antes-después”, se encontró una reducción de 6 km/h en las

velocidades promedio y una reducción en el percentil 85 de 8 km/h. Ver Figura 5.

Página 11 de 35

Figura 5: Demarcación realizada en Nueva York

Nota: Tomado de Katz, 2007

En el segundo sitio el tratamiento consistió en marcas de 46 cm de largo espaciadas cada

vez más cerca unas de otras y colocadas perpendicularmente en el carril de circulación en

los bordes izquierdo y derecho. Se obtuvo una reducción de velocidad de 7,4 km/h.

El tercer tratamiento fue colocado en una carretera rural del pueblo de Waller, Texas, en

donde era necesario disminuir la velocidad a la que se ingresaba a la curva que era

alrededor de 105 km/h a una velocidad recomendada de la curva de 64 km/h. Se obtuvieron

observaciones muy interesantes como que los vehículos que circulaban antes o sobre las

líneas reductoras tendían a disminuir sus velocidades, mientras que los vehículos que

circulaban después de las líneas tendían a mantener las velocidades con las que circulaban

antes de que se realizara la demarcación.

El estudio concluye que las reducciones se dan en alguna medida para todos los vehículos,

siendo Nueva York el sitio donde las velocidades se reducen levemente al igual que en

Mississippi (ver Figura 6), mientras que para Texas las reducciones solo se dan antes de las

líneas reductoras.

Página 12 de 35

Figura 6: Demarcación realizada Mississippi

Nota: Tomado de Katz, 2007

Arnold (2007), realizó dos estudios la ciudad de Virginia, el primer estudio se realizó en el

condado de Fairfax, ver Figura 7, donde se instalaron líneas reductoras de velocidad un

tramo de carretera cercano a la Capilla Lee, que es conocido por ser un tramo peligroso

debido a que tiene un alineamiento horizontal y vertical inadecuado, calles estrechas y

espaldones pequeños. En este tramo de carretera se han presentado una cantidad

importante de accidentes a lo largo de los años, donde las excesivas velocidades son un

factor contribuyente en la mayoría de los casos.

Se colocaron un total de 31 líneas para una longitud total de las mismas de 162 metros y un

espaciamiento que varía entre los 7,36 y 3,66 metros. Se utilizó material termoplástico en la

instalación de estas líneas las cuales tenían aproximadamente 46 cm de largo por 31 cm de

ancho.

Página 13 de 35

Figura 7: Demarcación realizada en Fairfax

Nota: Tomado de Arnold, 2006

Las líneas reductoras de velocidad tuvieron un impacto positivo, ya que las velocidades de

los vehículos disminuyeron en los lugares más críticos. Sin embargo los diferenciales de

velocidades fueron pequeños, entre los 2 y 4 km/h para el primer período de 7 días de

análisis después de la instalación de las líneas. Luego de un periodo 90 días se obtiene una

disminución entre 3,3% y 5% de las velocidades de los conductores.

Otras conclusiones determinadas para este tramo fueron:

Para otras estaciones, como la del inicio de las líneas en el acceso norte, se

encontraron disminuciones de alrededor de 10 km/h.

Existió una tendencia de aumento en las velocidades de los vehículos conforme

aumentaba el tiempo del estudio

Se concluyó que los conductores se acostumbraron a las líneas reductoras, sin

embargo, las velocidades todavía eran menores a las velocidades de los vehículos

antes de la instalación.

El segundo estudio fue realizado en la Ruta 460 en el pueblo de Zuni, en un tramo de

carretera recto de cuatro carriles, dos por sentido, donde en un periodo de 2 años hubo 15

accidentes registrados en este sitio debido a excesos de velocidad.

Para la demarcación de este sitio se utilizó material termoplástico, se colocaron 32 líneas

reductoras, en uno de los sentidos de circulación con un espaciamiento que variable entre

Página 14 de 35

7,32 y 5,18 m, mientras que hacia el oeste se utilizaron 40 líneas con espaciamientos entre

7,32 y 4,57 m. Las barras eran de 30,5 cm de ancho y aproximadamente 2,60 m de longitud,

cubriendo casi todo el carril.

Las principales conclusiones que se obtuvieron del análisis estadístico fueron:

El impacto de estas líneas reductoras fue positivo para este sitio, debido a que se logró

disminuir la velocidad de circulación de los vehículos al límite establecido para este tramo en

los periodos de tiempo analizados (7 y 90 días después de la instalación).

Se dieron disminuciones en uno de los sentidos de circulación de 6 km/h en promedio,

mientras que para el otro sentido el descenso en las velocidades de circulación fue de

alrededor 15 km/h.

La disminución de la velocidad de los vehículos fueron mayores en la ciudad de Zuni, donde

las líneas fueron colocadas a lo largo del carril, mientras que en el tramo de la Capilla Lee

las líneas fueron colocadas únicamente a 46 cm del borde de carril. Además, la utilización

de material termoplástico probablemente mejora la eficacia de las líneas reductoras debido

al ligero golpe y sonido que emiten cuando se transita sobre ellas.

En el estudio realizado por Hallmark (2007), en Iowa, Estados Unidos, se trata de evaluar la

utilización de tratamientos de bajo costo para la reducción de velocidad en comunidades

rurales, las cuales se han desarrollado en torno a autopistas o carreteras principales del

condado, en donde como resultado, la calle principal a través de las pequeñas comunidades

es a menudo parte de una carretera de alta velocidad.

Las autopistas y carreteras locales se caracterizan por su alta velocidad fuera de los límites

de las ciudades, luego se da una transición a una sección de baja velocidad a través de la

comunidad rural, pero debido a que los conductores a menudo entran a gran velocidad y

mantienen las velocidades a medida que viajan a través de la comunidad, por lo que es

necesario la implementación de medidas que permitan disminuir las velocidades de

circulación en estos tramos de las ciudades. Es por ello, que se implementaron y evaluaron

siete distintos tratamientos de bajo costo, entre ellos, líneas reductoras de velocidad, en

diversas comunidades rurales de Iowa para la disminución de la velocidad de los vehículos.

Para la escogencia de los sitios a los cuáles aplicarles algún tratamiento se tomaron en

cuenta que los vehículos circularan a muy altas velocidades y el uso del suelo donde

hubiera escuelas, zonas de juego o presencia de peatones en el tramo a analizar. Se tomó

Página 15 de 35

en cuenta factores como la geometría, composición de la flota vehicular e historial de

accidentes.

Los datos fueron recopilados inmediatamente después de la demarcación, y en condiciones

del clima y pavimento secas. Es importante destacar que se apartaron del análisis de datos

los vehículos que circulaban con velocidades bajas.

El primer sitio donde se utilizaron las líneas reductoras fue en Union, Iowa, en donde se

presentan altas velocidades en la ruta principal de la ciudad. Se aplicaron varios

tratamientos para la reducción de velocidad y uno de ellos fue la colocación de marcas

transversales periféricas en el pavimento, espaciadas de manera que proporciona la

sensación al conductor de que está aumentando la velocidad. Se utilizaron líneas de 30 cm

de ancho por 46 cm de largo, las mismas fueron colocadas perpendicularmente al borde de

la carretera.

Se encontraron para este sitio pequeñas diferencias en las velocidades media y percentil 85

de los vehículos. A manera de ejemplo, el porcentaje de vehículos que circulaban entre 8 y

16 km/h sobre el límite de velocidad se redujo hasta un 5,3 % y 8,5%, respectivamente, en

los periodos analizados. Para los vehículos viajando a 15 km/h y 20 km/h las reducciones

fueron de 8,3% y 7% respectivamente. En otro sitio de esta ciudad donde se colocaron estas

líneas reductoras se produjo un efecto contrario al deseado, es decir, las velocidades

sufrieron un leve aumento para todos los periodos analizados, no se encontró una causa

concreta para explicar este comportamiento en los conductores.

El segundo sitio que se analizó fue en Rowland, donde los vehículos transitan a altas

velocidades sobre la Ruta E-18, de cuatro carriles, dos por sentido. En este sitio se decidió

colocar como tratamiento de disminución de velocidad, marcas en el pavimento conocidas

como “Chevron”. Al igual que las líneas reductoras colocadas en Union, las marcas

“chevron” fueron colocadas con espaciamientos que disminuían conforme se acercaban los

vehículos a la zona peligrosa. Se recogieron datos únicamente para un periodo de seis

meses, esto debido a que en época de invierno, las bajas temperaturas y tormentas de

nieve no permitieron la recolección de datos.

Según el estudio, para los periodos analizados se presentaron disminuciones en las

velocidades de los vehículos en comparación con los datos recolectados antes de la

instalación de las marcas. Estas marcas parecen tener una alta efectividad debido a que los

Página 16 de 35

vehículos frenan y disminuyen su velocidad, manteniendo relativamente constante la

velocidad de circulación a lo largo del tiempo de análisis.

En Wisconsin, Estados Unidos Gates, (2008) probó el desempeño de las líneas

transversales en el pavimento en una curva peligrosa de un tramo de la ruta I-43/94. El

tratamiento de líneas reductoras es de alrededor de 300 metros de longitud. Cada una de

las marcas tiene 46 cm de largo por 30 cm de ancho, con espaciamiento decreciente. Estas

mediciones fueron hechas en tres lugares distintos de la curva, para ambos sentidos de

circulación.

Según los resultados obtenidos para corto plazo, se observaron reducciones en las

velocidades medias de aproximadamente 4,5 y 4,2 km/h, esto para la dirección norte, en el

punto intermedio y final de la demarcación. En el sentido sur, las disminuciones fueron de 2

km/h para el punto intermedio de la demarcación y de 8 km/h al final de la demarcación en

este sentido. Las disminuciones a corto plazo para el percentil 85 fueron menores que las

anteriormente mencionadas, ya que oscilan entre los 1,61 y 4,83 km/h, para ambos sentidos

de circulación.

Para el análisis de los datos a largo plazo (6 meses) muestran una disminución en la

velocidad media de los vehículos de 6 km/h en el punto intermedio de la demarcación, esto

únicamente para el sentido de circulación hacia el norte, debido a que por problemas

externos no fue posible tomar datos del sentido sur de circulación. Para el punto final de la

demarcación se dio un aumento en la velocidad media de los vehículos en alrededor de 7

km/h, esto podría asociarse a que los conductores se acostumbraron al tratamiento, según

el autor de este estudio.

Sospedra, (2009) en Valencia decidió implementar marcas en el pavimento tipo “Chevron”

en un tramo recto de carretera con buena visibilidad, con dos carriles de circulación, gran

presencia de peatones debido a la presencia de colegios y zonas residenciales. Ver Figura

8.

La longitud total de las marcas en el pavimento fue de 206 metros. Se registraron los datos

de velocidades durante catorce días, antes, y después, específicamente a los tres y seis

meses de la demarcación de las marcas en el pavimento.

Página 17 de 35

Figura 8: Demarcación realizada en Valencia

Nota: Tomado de Sospedra, 2009

Se observaron disminuciones de las velocidades de los vehículos al inicio del tramo en

estudio, esto inmediatamente después de la implementación de las marcas. Las

disminuciones fueron de 3,46 km/h en la velocidad media y alrededor de 9 km/h en el

percentil 85.

Durante las horas de día, la velocidad observada de los vehículos fue ligeramente menor en

todos los momentos tras la intervención, durante las horas de noche no se observaron

disminuciones en la velocidad. Estas disminuciones dependen del período de tiempo

observado, pero oscilan entre 3,34 km/h inmediatamente después de colocar las marcas y

4,85 km/h después de los tres meses.

En Nueva Zelanda, Martindale, (2010) condujo una investigación para determinar cómo las

líneas transversales para la reducción de velocidad afectan el comportamiento de los

conductores y las velocidades de circulación en entornos diferentes y cómo se pueden

reducir el riesgo a los usuarios por exceso de velocidad.

Página 18 de 35

El estudio se ejecutó en dos sitios, el primero se localiza cerca de la ciudad de Levin, donde

se da una geometría particular debido a la presencia de curvas peligrosa en varios sentidos

de la intersección. El segundo sitio se localiza en el puente Waihenga entre las ciudades de

Featherston y Martinborough. En este sitio se presenta altas velocidades de los vehículos y

es necesario reducir la misma para una mayor seguridad sobre el puente.

Las líneas transversales utilizadas fueron 1,0 m de largo y 10 cm de ancho en la vía de

circulación con un ángulo de 60°, desde el borde del carril; y la línea de centro con un

espaciamiento entre líneas de 3 metros. El tratamiento tiene una longitud aproximada de

300 metros. La Figura 9 muestra el patrón propuesto.

Figura 9: Demarcación realizada en punto de estudio de Nueva Zelanda

Nota: Tomado de Martindale, 2010.

Los datos de velocidad y tipo de vehículos se recogieron de forma continua durante siete

días, dos semanas antes y dos semanas después de la demarcación, así como seis meses

después de la instalación del tratamiento en cada sitio. Se instalaron 3 equipos de medición

de la velocidad, aproximadamente al inicio, en el medio y al final de la demarcación para

registrar el comportamiento de los vehículos y sus velocidades a lo largo de las marcas de

reducción de velocidad.

Se encontró que las velocidades medias y el percentil 85 disminuyeron en ambos sitios

donde se aplicó este tratamiento. En el primer período de medición, se comprobó que al

Página 19 de 35

inicio del tratamiento las velocidades medias disminuyeron entre 1 y 2,6 km/h. Para los sitios

al medio y después de la demarcación, a corto plazo se encontró una tendencia a mantener

las velocidades o un leve aumento de las mismas, a la hora de compararlas con las

velocidades antes de la demarcación.

Los resultados para el largo plazo variaron significativamente, para el primer sitio la

velocidad promedio disminuyó 4 km/h (al inicio del tratamiento) con respecto a las

velocidades antes de la demarcación de las líneas en el pavimento. Para el resto del

tratamiento (al medio y al final de las marcas), la tendencia a la baja se mantiene, solo que

en estos sitios las reducciones de velocidad son en menor magnitud, 2,7 y 2,8 km/h,

respectivamente. En el segundo sitio de análisis, se observaron disminuciones de velocidad

al inicio del tratamiento del orden de los 12,2 km/h y para el final del tratamiento de 8,1 km/h.

Para el sitio localizado en el medio del tratamiento, las velocidades fueron similares a las

velocidades de circulación antes de la colocación del tratamiento.

En la ciudad de Fredericton, Canadá, durante los años 2009-2010, Zamora (2011) realizó un

análisis de 5 intersecciones en las cuales se evidencian altas velocidades de circulación de

los vehículos. Dichas intersecciones tenían geometrías similares y velocidades de

circulación similares, estas características que fueron tomadas en cuenta para lograr una

mejor comparación de los datos que se obtuvieron posteriormente. Ver Figura 10.

Se diseñaron patrones de líneas reductoras de velocidad diferentes para cada sitio, esto

debido a que cada uno de los mismos se encontraba en autopistas de alta velocidad, cuyo

límite de velocidad era de 90 km/h. Los patrones utilizados se detallan a continuación para

cada uno de los sitios escogidos:

Patrón 1: Marcas cuadradas periféricas.

Patrón 2: Marcas rectangulares con ancho variable.

Patrón 3: Marcas transversales rectangulares.

Patrón 4:Marcas cuadradas periféricas escalonadas

Patrón 5: Marcas triangulares periféricas.

Se utilizó cinta adhesiva (preformada) para la creación de los diversos patrones en cada

punto de análisis y se obtuvieron alrededor de 10000 datos en un estudio cuya duración fue

de casi 4 meses en cuanto a la toma de datos en campo.

Página 20 de 35

Para la recolección de datos, las lecturas de velocidad fueron realizadas en cinco puntos

diferentes a lo largo de la prueba, mediante el uso de un radar de velocidad. Para cada

punto de observación se tomaron 50 lecturas de velocidad, tanto para el día como para la

noche. Las mediciones fueron realizadas antes de la demarcación. Además, para el período

posterior a la instalación de los patrones para la reducción de la velocidad se realizaron

mediciones a los cinco días, tres semanas y siete semanas después de la colocación de

estas líneas reductoras de velocidad.

Figura 10: Instalación de marcas viales en Fredericton, Canadá

Nota: Tomado de Zamora, 2011

Se encontró que para todos los sitios estudiados, las disminuciones en las velocidades de

los vehículos eran estadísticamente significativas. En general, los patrones reducen en

promedio un 7,3% las velocidades de los vehículos durante el día en el punto medio de la

demarcación realizada, excepto en el sitio 4, donde no se encontraron disminuciones de

velocidad significativas.

Además, se encontró que las marcas en el pavimento, en este caso, tuvieron un efecto

mayor durante el día que en la noche para casi todas las condiciones ensayadas, en

términos de reducción de velocidad.

Experiencias en Costa Rica

En la provincia de Puntarenas Costa Rica, en la zona de Parrita en la costa pacífica, la

Dirección General de Ingeniería de Tránsito (DGIT, 2012) colocó líneas de demarcación

Página 21 de 35

transversales a lo largo de un tramo de la Ruta Nacional No. 34, específicamente cerca de la

Escuela Los Ángeles, con el fin de disminuir la velocidad de los vehículos que circulan en

frente de la escuela. Un análisis preliminar de estos datos determino que las velocidades de

circulación han disminuido entre un 4% y 12% para los vehículos que transitan por esta

zona. Ver Figura 11.

Figura 11: Demarcación transversal en tramo de Ruta Nacional 34, Parrita

Nota: Tomado de Arroyo, 2012

Fonseca (2014), en su trabajo final de graduación estudia con mayor rigor científico otro

patrón de líneas reductoras de velocidad, a partir de la metodología utilizada por Zamora

(2011) con el objetivo de evaluar la efectividad de esta medida para controlar la velocidad.

Los sitios de estudio se eligieron a partir de datos de accidentalidad el periodo 2001-2012

recopilados por la Dirección General de Policía de Tránsito y vistas de campo para la toma

de muestras de velocidad en Rutas Nacionales a partir de los cuales se decidieron colocar

las líneas reductoras en Ruta Nacional 2, específicamente en dos puntos de la Autopista

Florencio del Castillo, y en Ruta 230, en Cipreses de Cartago.

En este experimento se eligieron dos patrones para ser analizados, uno para dos sitios

sobre una vía de alta velocidad, y un patrón distinto para un sitio ubicado en carretera rural

de menor velocidad de operación. El material utilizado para la demarcación es termoplástico

en los tres sitios.

Página 22 de 35

Con el fin de poder comparar los resultados obtenidos para los puntos de estudio 1 y 2

sobre una vía de alta velocidad, se utilizó el mismo patrón de demarcación de las líneas

reductoras de velocidad. La Figura 12 muestra un esquema del patrón que se diseñó.

Figura 12: Diseño del patrón de líneas transversales para los sitios de estudio 1 y 2.

Nota: Esquema no a escala

El patrón se diseñó utilizando un espaciamiento logarítmico entre las líneas reductoras de

velocidad, con el fin de dar un efecto en el usuario de que se aumenta la velocidad por

medio de la disminución del espaciamiento entre las líneas (Normativa Mexicana de

Señalamiento Vertical y Horizontal para Carreteras (2010), Manual Venezolano de

Carreteras (2004), entre otros. Las líneas cubren la totalidad de los dos carriles de

circulación (3,50 m de longitud), para cada uno de los sitios; además, tienen 10 cm de ancho

y aproximadamente 6 mm de espesor.

Para los puntos de estudio 1 y 2 se utilizó el mismo diseño, con una longitud total del

tratamiento de aproximadamente 157 metros. El Cuadro 1 muestra el detalle de los

espaciamientos entre las líneas reductoras de velocidad para cada punto de estudio.

Página 23 de 35

Cuadro 1: Espaciamientos entre las líneas reductoras de velocidad para los puntos de

estudio 1 y 2.

Número de Línea Punto de estudio 1

(metros)

Punto de estudio 2

(metros)

1 16,00 16,00

2 13,09 13,10

3 11,38 11,40

4 10,17 10,20

5 9,24 9,20

6 8,47 8,50

7 7,82 7,80

8 7,26 7,30

9 6,77 6,80

10 6,32 6,30

11 5,92 5,90

12 5,56 5,60

13 5,22 5,20

14 4,91 4,90

15 4,62 4,60

16 4,35 4,35

17 4,09 4,10

18 3,85 3,85

19 3,62 3,60

20 3,41 3,40

21 3,20 3,20

22 3,01 3,00

23 2,82 2,80

24 2,64 2,60

25 2,47 2,50

Página 24 de 35

En el punto de estudio 3, en la Ruta Nacional 230, se utilizó un patrón con cuatro grupos de

seis líneas cada uno, con un espaciamiento entre líneas de 0,50 metros, y un espaciamiento

entre grupos de líneas de 30 metros.

Figura 13: Diseño del patrón de líneas transversales para el sitio de estudio 3

Nota: Esquema no a escala

Las líneas cubren la totalidad del carril de circulación (3,10 m de longitud), además tienen 10

cm de ancho y aproximadamente 6 mm de espesor. La longitud total del tratamiento es de

aproximadamente 103 metros.

Los tramos de estudio utilizados por Fonseca (2014) fueron:

Punto de Estudio 1: Ruta 2, Puente sobre río Tiribí:

Se localiza en el sentido Cartago-San José, antes del puente sobre el río Tiribí,

aproximadamente 1 km antes del peaje. A partir de los estudios de tránsito realizados por el

Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), el tránsito promedio diario anual

(TPDA) registrado para este tramo de carretera es de 44230 vehículos, de los cuales 8000

son vehículos pesados. Ver Figura 14.

Este tramo se compone de cuatro carriles, dos por cada sentido, con un ancho de carril de

3,50 m. El tipo de terreno es plano en su mayoría, la vía cuenta con espaldones en ambos

Página 25 de 35

lados de la superficie de rodamiento, además posee una franja de terreno o medianera que

divide ambos sentidos. Presenta una superficie de pavimento con mezcla asfáltica densa, y

una superficie de ruedo en buen estado. La señalización que existe en este punto es

únicamente una señal vertical a unos 300 metros antes del sitio de la demarcación indicando

que la velocidad de circulación es de 90 km/h. A continuación se presentan unas figuras del

sitio elegido así como una ficha resumen del sitio a analizar.

Figura 14: Localización del punto de estudio 1

Es importante destacar la presencia de zonas residenciales a ambos lados de la carretera,

lo cual explica la necesidad de cruce de los vecinos de la zona. En este sector no existen

facilidades para que los peatones crucen la autopista, tal como puente peatonal o alguna

otra facilidad que permita cruzar a los peatones y usuarios del transporte público. Las

facilidades existentes (túnel a unos 50 metros del puente sobre el río Tiribí) no son utilizadas

por los peatones, debido a su peligrosidad por el tránsito de vehículos o incluso porque los

peatones no desean caminar más de lo necesario.

Punto de Estudio 2: Ruta 2, sector cruce de Taras:

El segundo punto que se localiza en esta Ruta Nacional en el sentido San José-Cartago,

aproximadamente 600 metros antes del cruce de Taras, en las cercanías del plantel de

Recope. En general, este segundo tramo de la Autopista Florencio del Castillo es en terreno

Página 26 de 35

montañoso, con curvas horizontales y verticales pronunciadas. Cuenta con cuatro carriles,

dos por sentido, de aproximadamente 3,50 metros de ancho cada uno. Al igual que en el

punto de estudio 1, existe una única señal de tránsito que indica una velocidad de

circulación de 60 km/h. Ver Figura 15.

El Transito Promedio Diario Anual (TPDA) registrado para este punto es de 45253 vehículos,

de los cuales 9400 son vehículos pesados. Las siguientes figuras muestran la ubicación

exacta de este punto de estudio.

Se presentan altas velocidades de los vehículos que circulan por esta zona, además de que

se encuentra en una parte de la ruta con pendiente negativa, lo que incentiva un aumento en

la velocidad de circulación de los vehículos. Debido a estas condiciones y por tratarse de

una zona cercana al cruce de Taras, se decide colocar las líneas reductoras de velocidad en

este punto, con el fin de analizar si reducen o no la velocidad de los vehículos que por ahí

circulan.

Figura 15: Localización del punto de estudio 2

Punto de Estudio 3: Ruta 230, Escuela de Cipreses:

El sitio a analizar se localiza en las cercanías de la escuela de la comunidad de Cipreses, en

Oreamuno de Cartago, por lo que se trata de una zona escolar, en donde las facilidades

peatonales son escasas. Además, existe una combinación de curvas verticales y

horizontales moderadas, en donde los vehículos tienden a aumentar la velocidad cuando se

circula en el sentido hacia Cartago, debido a la pendiente negativa presente en el sitio. Este

Página 27 de 35

tramo de la ruta consiste en un carril de circulación por sentido, con un ancho de 3,10

metros. Ver Figura 16.

Por ser una zona escolar, existe señalamiento horizontal y vertical que indican una velocidad

de circulación restringida de 25 km/h, alertando a los conductores sobre la presencia de

usuarios vulnerables en dicho tramo, como es el caso de los niños de la escuela.

El Transito Promedio Diario Anual (TPDA) registrado para este punto es de 3020 vehículos,

de los cuales 544 son vehículos pesados. Las siguientes figuras muestran la ubicación

exacta de este punto de estudio, así como la ficha resumen.

Figura 16: Localización del punto de estudio 3

Recolección de datos

Se tomaron datos de las velocidades de circulación de los vehículos que transitan por los

puntos donde se colocaron las líneas reductoras de velocidad. Se tomaron lecturas de

velocidad en cuatro puntos a lo largo del sitio a analizar, con el fin de desarrollar un perfil de

velocidad.

En los sitios de estudio 1 y 2, se eligieron los siguientes puntos para tomar las muestras de

velocidad. Estos puntos se detallan a continuación:

Aproximadamente 100 metros antes de la primera línea

Entre las tres primeras líneas de reducción de velocidad

Página 28 de 35

Entre las últimas tres líneas de reducción de velocidad

Aproximadamente 50 metros después de la última línea

En cada punto se tomaron 30 lecturas de velocidad. Una muestra fue tomada antes de la

demarcación de los puntos, y durante un periodo aproximado de cinco meses se tomaron

mediciones para observar el comportamiento de los conductores después de la colocación

de las líneas reductoras de velocidad.

Para el sitio 1 se tomaron un total de 2050 lecturas de velocidad, mientras que para el sitio 2

se tomaron alrededor de 1100 muestras de velocidad. Las siguientes figuras muestran las

ubicaciones donde se tomaran las muestras de velocidad para los sitios de estudio 1 y 2.

Para el sitio de estudio 3, se eligieron los siguientes puntos para tomar las muestras de

velocidad en la zona del tratamiento. Estos puntos se detallan a continuación:

Aproximadamente 50 metros antes del primer grupo de líneas

Entre los primeros dos grupos de líneas

Entre el tercer y cuarto grupo de líneas

Aproximadamente 30 metros después del último grupo de líneas transversales

Se tomaron un total aproximado de 600 mediciones de velocidad para este sitio de estudio.

La siguiente figura muestra las ubicaciones donde se tomaron las muestras de velocidad

Resultados

Los aumentos significativos en las velocidades se dan principalmente en la zona anterior a

las líneas reductoras de velocidad. Las disminuciones en las velocidades medias para los

tres sitios se dan principalmente en la zona final del tratamiento y después del tratamiento.

Para los sitios de estudio 1 y 2, en la zona anterior a las líneas reductoras de velocidad se

dan aumentos en las velocidades medias del 3% al 4% Para el sitio 3 se obtiene más bien

una disminución en la velocidad del 5%.

En cuanto a la zona media del tratamiento, las disminuciones en la velocidad promedio

oscila entre 4% y 15%, en donde para el sitio 2 se dan disminuciones de hasta 15 km/h.

Área de tratamiento

Página 29 de 35

Las reducciones en las velocidades medias se dan principalmente en la zona posterior al

tratamiento, en donde se dan reducciones de hasta el 18%, esto para el sitio de estudio 2.

En cuanto a la velocidad de percentil 85 o velocidad de operación de los vehículos, para

cada uno de los sitios de estudio se presentan disminuciones entre 2% y 17% para todas las

zonas del tratamiento.

Únicamente se observa un aumento del 8% en la zona anterior del tratamiento en el sitio de

estudio 2. Al analizar únicamente las velocidades medias y de percentil 85, los mejores

resultados se observan en el sitio de estudio 2, esto se puede deber principalmente al

diseño geométrico y curvas verticales presenten en el sitio, que ayuden a que la percepción

del conductor sobre el aumento en la velocidad sea mayor que para los otros sitios.

El análisis estadístico de la comparación entre la velocidad promedio de entrada y salida del

tratamiento se obtuvieron resultados muy interesantes. Para cada una de las muestras

realizadas a lo largo de las 27 semanas para el sitio 1, se dieron disminuciones en las

velocidades medias que oscilan entre 2% y 11%, donde las disminuciones más grandes se

dan en las primeras semanas luego de la colocación del tratamiento. Para el sitio de estudio

2, los porcentajes de reducción oscilan entre 12% y 23% (8 km/h-18 km/h), una vez que se

comparan las velocidades medias de entrada y salida.

Finalmente, para el sitio de estudio 3, las reducciones en las velocidades medias de entrada

y salida son significativas únicamente para las primeras dos muestras, siendo estas de 14%

y 8%, respectivamente. Es importante mencionar que aunque las disminuciones para las

otras dos muestras tomadas para este sitio no fueron estadísticamente significativas, se

dieron disminuciones de 3% y 5%.

Conclusiones

Se debe tomar en cuenta el efecto de novedad, que consiste en que los conductores llegan

a acostumbrarse a la presencia de las líneas reductoras con el paso del tiempo. Esto sucede

más en zonas rurales que en autopistas donde el tránsito tiende a ser más de paso. Los

experimentos que mostraron mejores resultados es donde existe la necesidad de reducir la

velocidad, esto debido a que se entra a una curva cerrada, a una rampa de acceso o salida,

a un puente, etc. En caso de que el cambio en la geometría no sea significativo, los

Página 30 de 35

conductores no perciben la necesidad de disminuir la velocidad, pero al menos las marcas

generan un efecto de advertencia ante un peligro potencial o condición particular de una vía.

Las reducciones de velocidad se han observado en la mayoría de los estudios, y aunque

estas reducciones son estadísticamente significativas, son menores a las reducciones

esperadas. Se ha observado en algunos casos una disminución significativa de las tasas de

accidentes de tránsito registradas luego de la instalación de las líneas reductoras de

velocidad. Esto permite mitigar en alguna medida las consecuencias económicas y sociales

que causan los accidentes de tránsito, como la cantidad de muertes y personas lesionadas

producto de estas colisiones.

En el caso de Costa Rica Fonseca (2014) determinó diferencias estadísticamente

significativas entre la muestra de velocidades antes y después de la demarcación en cada

uno de los sitios analizados. Estas diferencias significativas se dieron tanto en aumentos

como en decrementos en la velocidad media de los vehículos que circulan sobre el

tratamiento.

En cuanto al comportamiento del conductor es importante mencionar que es muy difícil de

medir cuando se trata de contramedidas de seguridad vial. En el contexto de este estudio la

velocidad es la única medida cuantificable que nos puede dar una idea de los efectos de las

marcas. Esta reducción se utiliza para aproximar y estimar una mejora en la seguridad.

Un aspecto muy importante que no se puede medir es la conciencia o la atención del

conductor, ya que las marcas sirven para alertar a los conductores de situaciones riesgosas

o particulares. Inclusive si no se presentan diferencias significativas en las velocidades

medias, los conductores podrían haber experimentado mayor conciencia de la velocidad a la

que circulaban y de las condiciones particulares presentes en cada uno de los sitios

analizados. En estos sitios de estudio, no se observa un efecto de acostumbrarse a las

líneas reductoras de velocidad por parte de los usuarios que circulan por estos sitios de

estudio.

Una vez analizados los resultados obtenidos para los sitios de estudio en donde se

implemento este tipo de tratamientos, se concluye que este tipo de medidas para la

reducción de velocidad se podrían implementar en otras rutas o puntos del país, esto debido

a que son de bajo costo y se observa, en la mayoría de los casos, reducciones significativas

tanto en la velocidad promedio como en la velocidad percentil 85 de los usuarios de la ruta.

Página 31 de 35

Su uso no debe restringirse solo a la redición esperada de la velocidad, también puede

considerarse como un complemento de la demarcación preventiva

El patrón que ha mostrado los mayores porcentajes de disminución de velocidad se obtuvo

con el patrón logarítmico, aplicado a una vía de alta velocidad; sin embargo, se recomienda

realizar más estudios con este patrón para poder comparar resultados.

Los costos de los tratamientos para los sitios son bajos (US$ 750 en promedio), por lo que

deben de ser tomados en cuenta como medida de reducción de la velocidad en carretera

para puntos con condiciones problemáticas. En cuanto al estado de las líneas reductoras

después de la finalización del tratamiento es de bueno a muy bueno. Únicamente se

presentan problemas en algunas de las líneas con desprendimientos y resquebrajamientos

de material termoplástico en sitios donde el estado del pavimento es malo.

Página 32 de 35

Referencias

Agent, K, (1980).Transverse Pavement Markings for Speed Control and Accident Reduction.

Department of Transportation of Kentucky. Kentucky, Estados Unidos.

Arnold, E; Lantz, K, (2007). Evaluation of Best Practices in Traffic Operations and Safety:

Phase I: Flashing LED Stop Sign and Optical Speed Bars. Virginia Transportation Research

Council. Virginia, Estados Unidos.

Balde, A, (2002). Speed Management in Rural Communities Using Optical Speed

Bars.(Tesis Maestría). Universidad de Kansas, Kansas, Estados Unidos.

Balde, A; Dissanayake, S, (2011).Effectiveness of Optical Speed Bars in Reducing Approach

Speeds to Rural Communities. Journal of the Transportation Research Board.(s.l.).

Bolaños, S, (2012). Espejo Preventico (Revista Electronica del Instituto Nacional de

Seguros).Recuperado de:http://www.ins-cr.com/Preventico/Edicion40/index_00.html

Manual Venezolano de dispositivos uniformes para el control de tránsito. Capítulo 3:

Demarcación (s.f). Recuperado de:

http://www.inttt.gov.ve/docs/MVDUCT%202011C%20Clave/3_MVDUCT_Cap%203%20Dem

arcaciones.pdf.

Manual Colombiano de Señalización. Capítulo 5: Otros dispositivos para la regulación del

Tránsito (2004). Recuperado

de:http://www.medellin.gov.co/transito/archivos/tecnica/senalizacion/manual_senalizacion/ca

p5_otros_dispositivos.pdf

Manual Venezolano de dispositivos uniformes para el control de tránsito. Capítulo 6:

Reductores de velocidad (s.f).Recuperado

de:http://www.intt.gob.ve/repositorio/pagina_nueva/carrusel/manual_venezolano_de_disposit

ivo_uniformes/6_mvduct_Cap6_reductores_de_velocidad.pdf

Carvajal, F, (2008). Manual Centroamericano de Seguridad Vial. Primer Congreso Ibero-

Americano de Seguridad Vial. Recuperado de:http://www.institutoivia.com/cisev-

ponencias/medicion_gestion_gs/Fredy_Carvajal.pdf

Gómez, N; Castro, F, (2012). Estudio de la Distribución Espacial de Accidentes de Tránsito

con Víctimas en el Cantón de San José. San José, Costa Rica.

Página 33 de 35

Dirección de Planificación Sectorial, (2012). Anuario de Información de Transito 2012.

Ministerio de Obras Públicas y Transportes, San José, Costa Rica.

Fonseca, D, (2014).Ptrones de demarcación vial como medida de bajo costo para el control

de Velocidad (Tesis Licenciatura).Universidad de Costa Rica, San José, Costa Rica.

Gates, T. J; Qin, X; and Noyce, D, (2008).Effectiveness of experimental transverse-bar

pavement marking as speed-reduction treatment on freeway curves. National Research

Council. Washington DC, USA.

Guevara, M, (2012, 31 de mayo). Escuelas de Parrita protestan por medidas de seguridad

en Costanera Sur. Diario La Nación. Recuperado de: http://www.nacion.com/2012-05-

31/ElPais/Escuelas-de-Parrita-protestan-por-medidas-de-seguridad-en-Costanera-Sur.aspx.

Griffin, L; Reinhardt, R, (1995). A review of Two Innovative Pavement Marking Patterns that

have been Developed to Reduce Traffic Speeds and Crashes.Texas Transportation

Institute.Texas, USA.

Hallmark, S, (2007).Evaluation of Gateway and Low-Cost Traffic-Calming Treatments for

Major Routes in Small Rural Communities. University of Iowa. Iowa, EstadosUnidos.

Katz, B, (2007).Peripheral Transverse Pavement Markings for Speed

Control.(TesisDoctorado).Virginia Polytechnic Institute and State University. Virginia, USA.

Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales, (2009). Análisis de Facilidades

Peatonales en Autopistas: Autopista General Cañas (Ruta 1) y Autopista Florencio del

Castillo (Ruta 2). Informe de Auditoría Técnica Externa. San Jose, Costa Rica.

Figueres, M; Lloret, C; Sospedra, M; Toledo, F, (2011). Control Pasivo de Velocidad:

Intervencion en Tramos de Acceso a Entornos Urbanos. Valencia, España.

Martindale, A; Urlich, C, (2010). Effectiveness of Transverse Road Markings on

ReducingVehicle Speeds.Nez Zeland Transport Agency.Nueva Zelanda.

Meyer, E, (2004). Evaluation of Data from Test Application of Optical Speed Bars to Highway

Work Zones. University of Kansas. Kansas, EstadosUnidos.

Ministerio de Obras Públicas y Transportes, (2012). Informe Final de Gestión de Accidentes

Automovilísticos. Recuperado

de:http://mopt.go.cr/%5Cdocumentos%5Cpoliciatransito%5Cinformecesar.pdf

Página 34 de 35

Retting, R; Farmer, C, (1998). Use of Pavement Markings to Reduce Excessive Traffic

Speeds on Hazardous Curves.ITE Journal. EstadosUnidos.

Rodríguez, L, (2007). Probabilidad y Estadística Básica para Ingenieros. Recuperado de:

http://archuto.files.wordpress.com/2011/02/probabilidad_y_estadistica_basica.pdf

Rothenberg, H, (2004).Report on Passive Speed Control Devices. Massachusetts Traffic

Safety Research Program (MaaSAFE).Massachusetts, EstadosUnidos.

Sáenz, A, (2012). Apuntes de Estadística para Ingenieros. Recuperado de:

http://www4.ujaen.es/~ajsaez/recursos/EstadisticaIngenieros.pdf

Secretaria de Comunicaciones y Transportes, (2011). Señalamiento Horizontal y Vertical de

Carreteras y Vialidades Urbanas.Recuperado

de:http://www.dof.gob.mx/normasOficiales/4305/sct/sct.htm

Sospedra, M, (2009). Eficacia de las Marcas Viales Transversales Tipo Chevron en la

Reducción de Velocidad de vehículos Ligeros en Intersección. Universidad de Valencia.

Valencia, España.

Storm, R, (2000).PavimentsMarking and Incidents Reduction. MTC Transportation Scholars

Conference.Iowa, USA.

Transportation Research Board, (2008).NCHRP Report 613: Guidelines for selection of

speed reduction treatments at High-Speed Intersection. National Cooperative Highway

Research Program.Washintong DC, USA.

Transportation Research Board, (2010).NCHRP Synthesis 412: Speed Reduction

Techniques for Rural High-to-Low Speed Transitions.National Cooperative Highway

Research Program.Washintong DC, USA.

Transportation Research Board, (2012).NCHRP Report 737: Design Guidance for High-

Speed to Low-Speed Transition Zones for Rural Highways. National Cooperative Highway

Research Program.Washintong DC, USA.

Villegas, J, (2012, 02 de enero). 303 personas murieron en el 2011 por accidentes de

tránsito. Diario La Nación. Recuperado de: http://www.nacion.com/2012-01-02/Sucesos/303-

personas-murieron-en-el-2011-por-accidentes-de-transito.aspx.

Página 35 de 35

Voigt, A; Kuchangi, S, (2007).Evaluation of Chevron Markings on Freeway to Freeway

Conector Ramps in Texas.Texas Transportation Institute.Texas, USA.

Zamora, J; Hildebrand, E, (2011).Design and Evaluation of Transverse and Peripheral

Pavement Markings.(TesisMaestría).University of New Brunswick, Fredericton, Canada.