Tras largos años de investigación y técnicas de alquimia avanzada, los alquimistas consiguieron contener el Ajementum en un reactor especial. Más adelante, decidieron jugar a ser dioses y pretendieron crear el arma definitiva: una humana. Para ello, se creó el proyecto

«Alchemist Project». Sabían que estos experimentos generarían una gran oposición ciudadana. Pero eso no les frenó, pensaron que lo más sensato sería mantener este ambicioso proyecto en secreto a espaldas de los ciudadanos y de otros gobiernos.

Al principio, los cruces más extremos entre Homúnculos y Quimeras Salvajes no salieron bien, la mayoría morían a los pocos días de su creación por deformidades y numerosas disfunciones orgánicas.

Años después, los alquimistas encontraron la fórmula adecuada: la transmutación Áurea o Filosofal. Las deformidades seguían ahí, pero la mayoría de estas indomables criaturas ya eran capaces de sobrevivir

a su propia existencia y a las pruebas a las que eran sometidas. Las dividieron en cuatro categorías, según el tamaño (de menor a mayor) y nivel de fiereza: Daimon, Epigea, Endiolón y Mantícora.

Para poder dominarlas casi en su totalidad, les implantaron chips electrónicos para subyugarlas a voluntad de sus creadores.

En el interior del cráter de Ascent Gatza, donde los niveles de radiación son extremos, surgió una extraña planta inteligente que los alquimistas catalogaron como Mandrágora.

Mediante el mismo procedimiento alquímico que utilizaron en Daimones, usaron ADN de Mandrágora en Homúnculos. De esta manera la SAG creó las Epigeas, cuya fuerza y resistencia son aún mayores mientras estén expuestas a la luz solar.

Experimento 000: Aryenne.

Aryenne fue la prueba que demostró que era posible crear el arma biológica perfecta…, o eso pensaron Lysander y los alquimistas de la SAG.

Ebrios de poder y orgullo, los alquimistas rediseñaron todo el genoma humano y crearon la evolución perfecta, sometiéndola a todo tipo de pruebas tóxicas y radioacti-vas para poner a prueba su pureza y resistencia.

Aryenne demostró poseer unas capacidades extrema-damente poderosas en comparación con el resto de Ho-múnculos y Quimeras. Pero hubo un problema durante una de las últimas pruebas: Aryenne sufrió un shock de-vastador que la dejó en coma durante varios meses. Al despertar, había sufrido una despigmentación total de piel y cabellos. Su mente, gravemente dañada, la con-virtió en un ser dependiente y autista, incapaz de valerse por sí misma. Fue un golpe muy duro para todos, habían conseguido crear su juguete, pero era un juguete roto.