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I NVIERNO, 1985.- Hace unos días, me ofreció Panchito Ramos una “pirámide”: entregar tres mil pesos, recibir tres hojas para venderlas más adelante y así recuperar los tres mil entregados y esperar a recibir miles de pe- sos más. Esta complicada o sencilla forma de ganar, estafar o ilusionar me da la idea de apoyar y favorecer “cadenas” de buena voluntad y ayudas, además de sugerir una de inter- cambio de opciones, remedios y resultados sobre dolencias o enfermedades que nos aquejan por igual, es decir, formar, por ejemplo, una “cadena” o “club” de artríticos, neuróticos o alcohólicos que mediante intercambio de corresponden- cia, se informen mutuamente sobre el remedio que los ha mejorado y opiniones al respecto, en n, datos que mucho les podrán servir, mejorando sus males. Ahora, sobre las de buena vo- luntad y ayudas, me recuerda lo pasado en una tarde de junio, allá por los años cuarenta, ya pa- sada la tempo- rada de baños de Cuyutlán. El pa- dre De Alba, pos- teriormente jefe de los jesuitas en la Cuba de Cas- tro, don Pancho Parra, ex gober- nador de Naya- rit y un servidor, conversábamos en la desolada te- rraza del Hotel Ceballos. En un momento dado, presentóse una persona con evidentes signos de embriaguez, implo- rando con su mano temblorosa una ayuda para curarse. Yo le entregué cinco centavos que el hombre recibió con su marcado agradecimiento. Cuando se alejaba, el padre lo llama y nos dice: este hombre enfermo debe tener familia y éste debe tener tanta o más necesidad que él, mientras tanto el borrachito sonriendo, asentía por lo que oía, así es que vamos a pedirle que nos lleve a su casa y veremos por su familia. Don Pancho y yo nos interrogamos con la mirada, pero el movimiento del padre al levantarse nos hizo aceptar. De inmediato nos encaminamos al pueblo, cruzamos callecitas arenosas y en las afueras encontramos su hu- milde hogar. La señora salió con dos niñas cogidas de su falda. “Mire, señora –díjole el padre–, aquí los señores le ayudarán con cincuenta pesos para que se ayude y duerma tranquila. Cuando su marido se ponga bien, empiece a juntar en una alcancía los cincuenta pesos y en la misma forma que los recibió, es decir, sin requisitos, entréguelos a otra familia que se encuentre en apuros”. Don Pancho y yo, más que sorprendidos por la cantidad, asentimos, le entregamos doce pesos que entre ambos traíamos, reco- mendándole que al día siguiente pasara por el hotel para completarle la cantidad. Nos despedimos, y al regreso, platicándonos, nos re- comendó que procuráramos hacer una cadena de ayuda al prójimo. Cuando alguien les pida una cantidad prestada para enfermedad o cualquier imprevisto familiar y estén en condiciones de hacerlo, es decir, que tengan aquella suma, entréguenla sin más requisitos y sin mayores preguntas, recomendándoles que sea en las mismas condiciones que a la señora que acabamos de visitar. Cuando llegamos a la terraza iluminada por los últimos destellos del sol poniente y contemplábamos el mar, el padre nos preguntó: “¿En qué piensan que están sin plati- car?”, a lo que don Pancho le respondió: “En usted y en su lección. De verdad que es me- jor dar que recibir, lástima que muchos ciegos no lo veamos y no lo comprendamos los tontos y envanecidos”. Y ya en la noche en mi cuarto y cavilando sobre lo mismo, me propuse hacer votos para que los tontos y ciegos tratemos de disimular nuestros defectos, procuran- do en desterrar la chocante y prejuiciosa avaricia, que tan apegada está a nuestras vidas, “embobados”, pensando que nuestra “partida” está muy lejana, cuando de verdad la tenemos a la vuelta de la esquina y que denitivamente nuestros bienes se quedarán en la supercie, mientras que nosotros iremos a descansar un poco más abajo. Han transcurrido los años, lo del padre De Alba lo he platicado y comentado teniendo el gusto de oír algunos amigos del DF, Guadalajara y dos de esta ciudad que lo han practicado, desde luego no les consta si los “eslabones de la cadena” están intactos, pero ellos la han iniciado y han palpado y sentido la gran satisfacción de servir. Ojalá y otros aprovechemos las oportunidades que suelen presentarse para obtener aquí en la tierra, las sa- tisfacciones y gustos que sólo la largueza y la comprensión nos pueden otorgar, sirviendo desinteresadamente a la persona o a la familia aigida o necesitada. ¡Y todo tan fácil! Solamente decidirnos a practicar la frase sublime de Amado Nervo: “Es mejor dar que recibir”. * Empresario, historiado r y narrador. (10 de junio de 1956) Un elogio a Colima PLAZA CULTURAL Carlos Carlos Caco Caco Ceballos Silva Ceballos Silva DIRECTOR GENERAL: ARMANDO MARTÍNEZ DE LA ROSA COORDINADORA: ÉRICKA MARGARITA TREJO Imágenes: Fotos de Archivo. Correo: [email protected] Las cadenas DOMINGO 21 DE OCTUBRE DE 2018 2517 VIÑETAS DE LA PROVINCIA 4 De lejos y a mi alrededor 8 Ágora PLAZA CULTURAL DE ESCRIBEN: Alejandro Pérez, Verónica Zamora, Gabriel Araico, Marcela Gómez, Jaime Obispo, Leopoldo Barragán, Miguel Ángel León, Armando Martínez Orozco y Carlos Caco Ceballos. Pintura de Remedios Varo. Alegoría del alma, Salvador Dalí. me faltó estar desnuda en un río abrazarme a un cuerpo más eterno nos faltó llegar a la edad de permitirnos nuestros cuerpos nos faltó llegar a cualquier edad a cualquier tiempo. Miguel Ángel León Govea Nos faltó llegar

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cru

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ya

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mi

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obre

lo

mis

mo,

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cieg

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nem

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do, d

esde

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ctos

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ilia

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ida

o ne

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fras

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mad

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dar

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(10

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el d

ibuj

o, e

l gr

abad

o, la

ilus

trac

ión

de li

-br

os,

la e

scul

tura

, la

ce-

rám

ica

y el

dis

eño

de

esce

nogr

afía

y v

es-

tuar

io p

ara

mon

taje

s te

atra

les.

1938

.- S

e su

icid

ó en

Mar

del

Pla

ta la

poe

ta

Alfo

nsin

a St

orni

, es

crit

ora

arge

ntin

a de

l m

oder

nism

o.

De

acue

rdo

a su

s cr

ític

os,

sus

letr

as m

uest

ran

a u

na

exce

len

te p

oeta

del

am

or,

una

muj

er l

ucha

dora

por

la

igua

ldad

fem

enin

a qu

e no

se

la

pued

e ub

icar

en

el fe

min

ism

o ra

-di

cal.

Tuvo

inte

nsa

part

icip

ació

n en

el

gre

mia

lism

o lit

erar

io e

inte

rvin

o en

la

cre

ació

n de

la S

ocie

dad

Arg

enti

na

de E

scri

tore

s.

27 d

e O

ctu

bre

1782

.- N

ació

Nic

coló

Pag

ani-

ni, v

iolin

ista

, vio

lista

, gui

tarr

ista

y

com

posi

tor

ital

iano

, con

side

ra-

do e

ntre

los m

ás v

irtu

osos

mús

icos

de

su

tiem

po y

rec

onoc

ido

com

o un

o de

los

mej

ores

vio

linis

tas

que

haya

n ex

isti

do; c

on o

ído

abso

luto

y

ento

naci

ón p

erfe

cta,

técn

icas

de

arco

exp

resi

vas

y nu

evos

uso

s de

cnic

as d

e st

acca

to y

piz

zica

to.

pres

ente

s en

mus

eos

y co

lecc

ione

s de

toda

Eur

opa

y de

lab

ordó

otr

os g

éner

os c

omo

el d

ibuj

o, e

l gr

abad

o, la

bros

, la

rám

ies

ctu

ate

at 19en

Mar

Alfo

nsin

a ar

gent

ina

dD

e ac

uerd

sus

letr

asex

cele

nte

pun

a m

ujer

ig

uald

ad fe

me

pued

e ub

icar

en

dica

l. Tu

vo in

tens

ael

gre

mia

lism

o lit

era

la c

reac

ión

de la

So

de E

scri

tore

s.

27 d

e O

ct17

82.-

Nac

ni, v

iolin

ista

, vy

com

posi

tor

ita

doen

tre

losm

ásv

de s

u ti

empo

yr

uno

de lo

s m

ejor

haya

n ex

isti

do; c

y en

tona

ción

per

arco

exp

resi

vas

técn

icas

de

sta

AN

TE

S de

196

8, e

l ro

ck s

ólo

eran

co

vers

que

int

erpr

etab

an a

lgun

os

cant

ante

s co

mo

Enr

ique

Guz

mán

, C

ésar

Cos

ta o

Alb

erto

Váz

quez

, qu

iene

s só

lo le

dab

an u

na tr

aduc

ción

a a

lgu-

nas c

anci

ones

que

est

a ban

de

mod

a en

Est

ado

Uni

dos,

hac

iénd

olo

un r

ock

para

“ni

ñas

y ni

ños

bien

”.E

ran

poco

s lo

s gr

upos

o s

olis

tas

que

se

aven

tura

ban

a to

car

un r

ock

prop

io, u

no d

e el

los f

ue e

l gra

n X

avie

r Bat

is, p

ues s

e ve

ía co

mo

algo

que

no

esta

ba p

erm

itid

o, p

or c

onsi

dera

se

una

mús

ica

que

inci

taba

a l

a so

cied

ad a

la

viol

enci

a y

las

drog

as, q

ue v

eía

a es

tos

chav

os

en u

na to

tal r

ebel

día.

Pero

fue

jus

to e

n 19

68 c

uand

o un

gru

po

form

ado

por

cuat

ro c

havo

s se

ave

ntur

ó a

to-

mar

la b

atut

a de

mos

trar

que

el r

ock

era

más

qu

e só

lo r

uido

y g

rito

s. A

sí fu

e có

mo

nace

la

agru

paci

ón T

hree

Sou

ls in

My

Min

d, fo

rmad

o en

ese

ent

once

s po

r A

lex

Lora

, Car

los

Hau

p-tv

ogel

, E

rnes

-to

de

Leó

n y

S

ergi

o M

an-

cera

, qu

ien

es

infl

uen

ciad

os

po

r g

rup

os

com

o lo

s R

o-lli

ng S

tone

de-

cidi

eron

tom

ar

el r

ock

com

o al

go m

ás p

ro-

pio,

más

mex

i-ca

no,

dánd

ole

su p

ropi

o es

ti-

lo y

son

ido.

En

la

se-

cun

dar

ia f

ue

cu

an

do

s

e u

nie

ron

par

a fo

rmar

la a

gru-

paci

ón,

y au

nque

su

inic

io s

e di

o só

lo e

n to

cada

s pa

ra j

unio

rs c

apit

alin

os,

fue

en e

l fe

stiv

al d

e ro

ck y

en

Avá

ndar

o qu

e di

eron

a

cono

cer

sus

prim

eros

tem

as e

n es

paño

l. E

n es

e en

tonc

es,

sus

prim

eras

rol

as f

uero

n en

in

glés

, par

a as

í em

peza

r a fo

rjar

una

iden

tida

d qu

e lo

s lle

vara

fuer

a de

lo c

otid

iano

y te

ner a

sus

segu

idor

es.

Com

o el

Thr

ee S

ouls

in M

y M

ind

saca

ron

un t

otal

de

12 d

isco

s co

n la

agr

upac

ión

ini-

cial

, m

ezcl

ando

let

ras

tant

o en

ing

lés

com

o en

esp

añol

, sie

ndo

así l

a pr

imer

a ag

rupa

ción

en

tom

ar y

dem

ostr

ar q

ue s

e po

día

hace

r un

ro

ck t

otal

men

te m

exic

ano,

per

o so

bre

todo

co

n le

tras

que

par

a es

os d

ías

serí

an c

ríti

cas

haci

a el

sist

emas

de

gobi

erno

, más

cua

ndo

fue

reci

ente

la m

atan

za d

e jó

vene

s es

tudi

ante

s y

obre

ros

en la

pla

za T

late

lolc

o, e

l 2 d

e oc

tubr

e,

por

lo q

ue l

a ju

vent

ud e

stab

a m

uy d

olid

a y

ham

brie

nta

de ju

stic

ia.

Lleg

a A

vánd

aro,

el c

onci

erto

que

dio

pas

o

para

pod

er e

xpre

sar a

ún m

ás lo

s ini

cios

de

una

ola

de jó

vene

s que

veí

an a

l roc

k co

mo

una

ma-

nera

de

dem

ostr

ar q

ue h

abía

ren

unci

a so

cial

co

ntra

el r

égim

en d

e go

bier

no, d

onde

la b

anda

de

El T

ri, j

unto

a o

tros

gra

ndes

roc

kero

s, d

e lo

s cu

ales

alg

unos

sig

uen

vige

ntes

, est

uvo

en

la h

isto

ria

al so

brev

ivir

a u

na h

orda

de

ataq

ues

por

part

e de

l sis

tem

a.A

lgo

muy

sing

ular

se d

io, y

a qu

e la

may

oría

de

las

toca

das

se d

aba

en h

oyos

fonk

y, e

n lo

s qu

e co

mpa

rtía

tar

ima

con

grup

os d

e aq

uel

ento

nces

, co

mo

los

Dug

s D

ugs

y E

nigm

a, y

pr

ecis

amen

te f

ue c

on e

l se

gund

o co

n el

que

m

ás c

ompa

rtió

car

tele

ra e

n lo

s añ

os 7

0.Pe

ro c

omo

todo

pas

a po

r al

go, l

a ag

rupa

-ci

ón d

ecid

e se

para

rse,

y e

s así

com

o A

lex

Lora

de

cide

form

ar lo

que

hoy

es

El T

ri, y

a qu

e lo

s m

edio

s leg

ales

los g

ana

Hau

ptvo

gel y

se q

ueda

co

n el

nom

bre

orig

inal

, per

o es

o no

le im

pide

a

Lora

em

peza

r a fo

rmar

su p

ropi

a id

enti

dad

y a

darl

e vi

da a

sus

cre

acio

nes

mus

ical

es.

Es

así

que

en 1

984 fi r

ma

con

la d

isqu

e-ra

War

ner

, y

vie

nd

o

qu

e da

ba r

esul

ta-

dos

pos

itiv

o,

ya q

ue

par

a es

e en

tonc

es e

l ro

ck m

exic

ano

empe

zaba

a se

r m

ás a

cept

ado,

ta

nto

por

los

m

edio

s co

mo

por

la

soci

e-d

ad,

saca

lo

que

fue

su p

ri-

mer

dis

co,

ga-

nado

incl

uso

el

Dis

co d

e O

ro,

por

el b

uen

núm

ero

de v

enta

s, d

esta

cand

o la

ca

nció

n de

Tri

ste

canc

ión,

con

lo c

ual l

e di

o co

ntra

to p

ara

ir a

Sud

amér

ica.

Pero

no

fue

su ú

nico

logr

o, y

a qu

e co

n es

e m

ism

o di

sco

le d

io p

ara

saca

r un

seg

undo

se

ncill

o, q

ue p

or i

gual

se

conv

irti

ó en

otr

o éx

ito,

tant

o pa

ra q

ue M

igue

l Río

s lo

s in

vita

ra

a pa

rtic

ipar

en

el P

rim

er E

ncue

ntro

de

Roc

k Ib

eroa

mer

ican

o, e

n M

adri

d, E

spañ

a, d

onde

ap

rove

chan

par

a pr

esen

tar s

u se

gund

o ál

bum

, tit

ulad

o H

echo

en

Méx

ico,

el cu

al sa

lio e

n el

85.

El p

asad

o 13

de

octu

bre,

Ale

x cu

mpl

ió 5

0 añ

os d

e ro

dar p

or e

l roc

k. P

ara

muc

hos q

uizá

s es

un

grit

ón m

ás, p

ero

para

muc

hos

más

es

un íc

ono

de la

mús

ica

en M

éxic

o en

muc

hos

otro

s pa

íses

, pe

ro a

dem

ás u

n hé

roe

de u

na

gene

raci

ón, q

ue ju

nto

a ot

ros

gran

des

le d

ie-

ron

liber

tad

a un

a gr

an p

arte

de

la ju

vent

ud

que

tom

ó co

mo

band

era

de p

rote

sta

el r

ock.

E

nhor

abue

na a

est

e gr

an m

úsic

o y

¡que

viv

a el

roc

k an

d ro

ll!

León

Men

doza

Ale

x Lo

ra, m

edio

sig

lo d

espu

és

PA

RA

par

lar

de fi

loso

fía e

n el

aul

a la

com

unid

ad

fi los

ófi c

a bi

en sa

be q

ue lo

fund

amen

tal d

el m

odel

o de

Lip

man

y S

harp

sob

re F

iloso

fía p

ara

Niñ

os n

o es

nov

edos

o, d

e he

cho,

tien

e m

ileni

os u

sánd

ose,

su

ori

gen

data

de

la G

reci

a C

lási

ca y

Sóc

rate

s la

nom

bró

may

éutic

a, p

orqu

e se

com

paró

así

mis

mo

con

su m

adre

pa

rter

a, p

ues

decí

a qu

e ig

ualm

ente

ayu

daba

a “

pari

r” la

ve

rdad

por

med

io d

e pr

egun

tas

en u

n pr

oces

o di

alóg

ico;

es

e m

étod

o es

clá

sico

en

la e

nseñ

anza

fi lo

sófi c

a, p

ues b

ien

sabe

mos

que

hac

er p

regu

ntas

es

un a

rte

y es

la p

rim

er v

ía

para

viv

enci

ar e

l pen

sam

ient

o fi l

osófi

co

y ge

nera

r refl

exi

o-ne

s a

part

ir d

e la

pre

gunt

ader

a.La

may

éutic

a es

tan

orgá

nica

, que

des

de la

infa

ncia

la

preg

unta

dera

se

ejer

ce a

mod

o de

com

pren

der

lo q

ue s

e m

ira,

lo q

ue se

sien

te, l

o qu

e se

viv

e, lo

que

se d

ice

sobr

e la

na

tura

leza

, sob

re la

s co

stum

bres

, sob

re la

s in

tera

ccio

nes

soci

ales

, sob

re lo

s se

ntir

es y

pen

sare

s. B

ien

sabe

mos

que

la

pre

gunt

a pa

rte

del a

som

bro

y de

lo q

ue ig

nora

mos

y

dese

amos

sabe

r; a

nte

esta

situ

ació

n –

muc

has

vece

s m

oles

tota

–, o

bie

n no

s ofr

ecen

resp

uest

as ce

rrad

as, a

l-gu

nas o

tras

resp

uest

as m

ás b

ien

son

para

dar

le s

alid

a al

mom

ento

, y e

n ot

ras o

casi

ones

reci

bim

os si

lenc

io…

si

n ol

vida

r el

rot

undo

“cá

llate

… n

o m

oles

tes…

no

preg

unte

s”.

Fre

nte

a a

lgu

nos

por

qu

és,

muc

has

vece

s sa

le “

porq

ue s

í y y

a,

porq

ue a

sí es

, así

deb

e ser

, por

que y

o so

y tu

pad

re, o

un

porq

ue a

sí d

iosi

to

quis

o”;

ento

nces

la

capa

cida

d de

pr

egun

tar

y, p

or ta

nto,

de

refl e

xio-

nar

sobr

e el

mun

do e

s ac

alla

da –

a m

uy c

orta

eda

d– p

or la

fam

ilia,

la

escu

ela

y la

soci

edad

toda

, dej

ándo

-no

s con

muc

has r

espu

esta

s dad

as d

e m

odo

auto

rita

rio

y do

gmát

ico

que

las

asim

ilam

os s

in m

ás.

Apr

ende

mos

a h

acer

opi

nion

es

a m

uy c

orta

eda

d a

part

ir d

el le

n-gu

aje,

las c

ostu

mbr

es y

la e

duca

ción

re

cibi

da e

n ca

sa,

en l

a es

cuel

a y

hast

a en

cen

tros

rel

igio

sos,

seg

ún

sea

nues

tro

cont

exto

pri

mar

io; p

or

tant

o, m

ucha

s de

esa

s op

inio

nes

son

impu

esta

sins

taur

adas

, com

o si

fuer

an p

rodu

cto

de la

so

cied

ad q

ue h

abita

mos

.Lu

ego

vien

e un

pro

ceso

de

cues

tiona

mie

nto

al p

ropi

o pe

nsam

ient

o m

ás o

men

os le

nto

cuan

do n

os e

nfre

ntam

os

a un

a re

alid

ad d

istin

ta a

la n

uest

ra –

en s

ilenc

io m

ucha

s ve

ces,

lo v

amos

sen

tipen

sand

o–, y

a se

a qu

e al

guna

con

-ve

rsac

ión

nos a

trap

a, cu

ando

un

libro

nos

caut

iva,

cuan

do

algu

na p

elíc

ula

nos

mue

stra

una

otr

a re

alid

ad, c

uand

o en

la

cot

idia

nida

d de

nue

stra

vid

a al

go “r

aro”

nos

vio

lent

a la

nu

estr

a no

rmal

idad

o ir

rum

pe la

mon

oton

ía, o

blig

ándo

nos

a re

pens

ar m

ucho

s su

pues

tos

y ju

icio

s-pr

ejui

cios

apa

-re

ntem

ente

pro

pios

; alg

unas

vec

es te

nem

os h

erra

mie

nta

para

inte

grar

lo, m

ucha

s ot

ras

vece

s se

que

da e

n el

lim

bo,

espe

rand

o se

r co

mpr

endi

do, p

ero

poca

s ve

ces

lo p

arla

-m

os-p

regu

ntam

os, y

cuan

do n

os a

trev

emos

a co

mpa

rtir

lo,

quiz

á –c

omo

posi

bilid

ad d

e un

eco–

enco

ntre

mos

nue

stro

s es

pejo

s de

la in

fanc

ia, e

sa in

fanc

ia c

ensu

rada

, ent

once

s en

cont

rar

el m

odo

de e

xpre

sar

nues

tros

pen

sam

ient

os

sent

ient

es im

plic

a de

sapr

ende

r la

cen

sura

de

la in

fanc

ia,

porq

ue e

n la

s cas

a y

en la

s aul

as n

os e

nseñ

an a

mem

oriz

ar

para

rep

etir

.Lo

s co

noci

mie

ntos

fi lo

sófi c

os q

ue n

os o

frec

e la

aca

-

dem

ia y

las

herr

amie

ntas

met

odol

ógic

as-p

edag

ógic

as d

e lo

s m

últip

les

ism

os, a

sí c

omo

sus

para

digm

as q

ue e

n la

hi

stor

ia d

e la

hum

anid

ad s

e ha

n cr

eado

se

nos

pres

enta

n en

el a

ula

(com

o te

xto

y co

ntex

to)

desd

e un

a ed

ucac

ión

form

al/t

radi

cion

al q

ue se

sost

iene

a p

artir

de

una

rela

ción

de

sab

idur

ía-c

aren

cia,

a p

artir

de

ello

se

fund

a un

mod

o de

apr

ende

r a

ense

ñar,

que

aun

que

se e

nseñ

e de

sde

la

may

éutic

a lo

s te

mas

fi lo

sófi c

os, l

a re

laci

ón d

e po

der

do-

cent

ealu

mno

s no

se

rom

pe, ¿

quié

n pr

egun

ta, p

ara

qué,

mo,

en

qué

cont

exto

, sob

re q

ué te

xto,

cuá

nto

vale

n la

s re

spue

stas

?E

l seg

uim

ient

o de

los m

anua

les d

e los

pro

gram

as so

bre

La C

omun

idad

Dia

lógi

ca q

ue d

esde

los

70 n

os o

bseq

uian

ce

rtez

as s

iem

pre

duda

ntes

y u

n m

arco

teór

ico-

met

odol

ó-gi

co q

ue n

os p

erm

ite te

ner u

na b

rúju

la p

ara

ver e

l sur

nos

da

rum

bo;

el p

robl

ema

es q

ue t

odo

lo q

ue a

pren

dem

os

desd

e la

pri

mer

a in

fanc

ia, l

o ha

cem

os e

n un

con

text

o de

ed

ucac

ión

trad

icio

nal

form

al e

inf

orm

al,

en d

onde

las

re

laci

ones

de

pode

r so

stie

nen

toda

la

cult

ura,

por

tan

to,

lo

repr

oduc

imos

al

cans

anci

o,

choc

ando

en

la p

raxi

s co

n la

s te

oría

s qu

e qu

erem

os-d

esea

-m

os i

mpl

emen

tar,

por

que

de p

or s

í, so

mos

obl

igad

os a

ev

alua

r baj

o cr

iteri

os q

ue c

on-

trad

icen

nue

stra

pra

xis.

Tene

mos

una

brú

jula

par

a si

tuar

nos f

rent

e al a

ula,

por

que

tene

mos

los

man

uale

s pa

ra

mov

erno

s de

ntro

del

mét

odo,

no

s dan

los p

asos

que

deb

emos

se

guir

, inc

luso

nos

obs

equi

an

rece

tas

con

not

as a

pie

de

pági

na

de c

ómo

hace

r di

s-tin

tas

activ

idad

es o

del

cóm

o ad

apta

rlo

a la

s ne

cesi

dade

s de

l gr

upo,

de

tal

suer

te q

ue

nos

sir

ven

par

a gu

iarn

os y

ap

rend

er d

e nu

estr

as p

ropi

as

duda

s y c

aren

cias

par

a no

per

-de

rnos

; si

n em

barg

o, c

uand

o re

aliz

amos

nue

stra

pro

pia

met

acog

nic

ión

, cu

ando

re-

fl exi

onam

os lo

viv

ido

en a

ula,

se

sión

por

ses

ión

y no

s sa

bem

os d

esco

nect

adas

por

que

no se

ntip

ensa

mos

la c

omun

idad

dia

lógi

ca, b

ien

sabe

mos

qu

e fa

lta

lo q

ue fa

lta,

pue

s se

r y

esta

r en

com

unid

ad d

e in

vest

igac

ión-

inda

gaci

ón im

plic

a de

sapr

ende

r un

a cu

l-tu

ra d

e re

laci

ones

de

pode

r: a

llí s

e co

nstr

uyen

-cre

an lo

s nu

evos

mod

os d

e in

tera

ctua

r “de

sde

y co

n” la

otr

edad

; sin

es

a ru

ptur

a de

par

adig

ma,

el a

ula

sigu

e si

endo

un

luga

r de

adi

estr

amie

nto

soci

al y

no

un e

spac

io d

ialó

gico

par

a ap

rend

er-e

nseñ

ar-a

pren

der.

En

la c

alle

, en

la c

asa

y en

el a

ula,

la p

regu

ntad

era:

¿E

n qu

é pa

rte

del “

ser”

se

guar

dan

las

duda

s no

exp

resa

-da

s?, ¿

por

qué

la e

duca

ción

se

pres

enta

com

o un

cúm

ulo

de c

erte

zas

inm

óvile

s?, ¿

cóm

o es

que

cam

inam

os la

vid

a ba

jo s

upue

stos

y v

erda

des

incu

estio

nabl

es?,

¿po

r qu

é lo

s di

plom

as y

títu

los n

os d

a la

imag

en d

e mej

ores

per

sona

s y a

qu

ién

benefi c

ia e

sa il

usió

n?, ¿

por q

ué e

n la

com

unid

ad-c

a-sa

el

cues

tiona

mie

nto

es t

omad

o co

mo

deso

bedi

enci

a?,

¿cóm

o es

que

la p

erso

na d

udan

te s

e pu

eda

sent

ir m

al a

l cu

estio

narc

ontr

adec

ir u

na c

erte

za-v

erda

d fa

mili

ar?,

¿qu

é no

s im

pide

def

ende

rnos

de

la v

iole

ncia

soci

al, i

nstit

ucio

nal

y fa

mili

ar?,

¿có

mo

se p

uede

la c

otid

iani

dad

y có

mo

pode

-m

os h

acer

de

lo c

otid

iano

una

prá

ctic

a du

dant

e?

EN

la p

arte

más

leja

na d

el d

ía, e

n la

hor

a m

ás a

iros

a,

una

muj

er e

n la

pue

rta.

-He

vuel

to.

-¿C

uánd

o te

fuis

te?

–pr

egun

to.

Te f

uist

e y

pens

arás

aca

so.

Pens

ará

uste

d qu

e si

dig

o “c

uánd

o te

fuis

te”

es c

omo

deci

r: ja

más

dud

é de

tu r

egre

so.

Pens

arás

que

soy

tod

avía

esp

erán

dote

. ¿P

ensa

rás

que

espe

ro lu

ego

exis

to?

Esp

eré

a qu

e to

cara

s la

pue

rta

de r

egre

so, ¿

toca

rás

la

puer

ta d

e re

gres

o?, l

a pu

erta

del

reg

reso

.-H

e vu

elto

, soy

la ú

nica

. En

la p

arte

leja

na d

el d

ía. E

n la

ho

ra m

ás a

iros

a. T

oma

la c

arta

-dic

es-.

Y a

mí l

o pr

ofét

ico

me

revu

elve

el e

stóm

… s

oy a

lérg

ico

a cr

eer

que

lo q

ue s

erá,

ser

á.La

car

ta. ¡

Cie

rto!

De

mi p

uño

y le

tra.

O p

eor

aún.

De

mi

puño

com

o de

mi l

engu

a. D

e m

i let

ra co

mo

de m

i lla

nto.

Am

o.

Am

o, lo

sé.

Lo

adm

ito.

No

con

la c

abez

a. S

on lo

s oj

os

los

que

adm

iten

. Po

r el

bri

llo d

e m

is o

jos

lo s

é de

cie

rto.

Am

o. N

unca

br

illar

on a

sí.

El b

rillo

dir

á de

mí q

ue so

y ot

ro, p

orqu

e te

fuis

te, c

ambi

é.

Me

cam

bias

te.

A ti

. A u

sted

dig

o: si

n du

da e

s am

or, p

orqu

e te

fuis

te a

mo.

Est

a gr

amát

ica

mar

avill

osa,

impl

ícita

mar

avill

osa

plas

ma

lo q

ue n

o pu

edo

deci

r.

Si d

igo:

des

de q

ue t

e fu

iste

, ¿q

ué e

stoy

dic

iend

o? “

Te

recu

erdo

, muj

er, l

a re

cuer

do”.

Y m

ujer

, rec

uerd

o qu

e al

irte

, al i

rse

me

cam

bió

el n

om-

bré.

Otr

o m

e no

mbr

aste

.A

llá e

n la

par

te m

ás le

jana

del

día

. La

hora

más

air

osa.

C

arta

, ¿cu

ál?

Nad

a.N

ada

hubo

por

que

deci

dist

e y

con

otro

nom

bre

me

lla-

mas

te. D

ecid

iste

.E

ra y

o en

tonc

es A

leja

ndro

. Al i

rte

al ir

se m

e no

mbr

aste

A

leja

ndo.

Ale

jand

o y

di fr

uto.

Ale

jand

o y

crec

í fl o

res

y aú

n av

es d

e to

das

part

es v

enía

n y

me

decí

an re

fugi

o, y

sin

sab

er d

i vid

a.

Ala

do, A

leja

ndo.

Ale

jand

o m

e no

mbr

aste

, me

cam

bió

uste

d, y

fui v

iña

y vi

no y

ust

ed, t

ú no

est

abas

, es c

iert

o, e

s del

día

la p

arte

leja

na

con

su h

ora

airo

sa si

n ca

rta

y t ú

, ust

ed, l

a m

ujer

, te

recu

erdo

, pe

ro n

o la

con

ozco

. Ale

jand

ro, n

o ex

iste

, te

fuis

te, s

e fu

e.

Y pa

ra t

i, pa

ra u

sted

que

me

cam

bias

te e

l nom

bre,

me

llam

o ah

ora

Ale

jand

o.A

leja

ndo,

Ale

jado

, Ala

do y

no

te c

onoz

co. A

leja

do. N

o la

con

ozco

.

No

la c

onoz

coA

leja

ndro

Pér

ez

Pin

tura

de

Rem

edio

s V

aro.

Mar

cela

Góm

ez G

utié

rrez

De

la m

ayéu

tica

a la

com

unid

ad d

ialó

gica

Esc

ale

ras

cru

zan

el c

ielo

azu

l en

u

na

ru

eda

de

fueg

o, J

oan

Mir

ó.

Page 3: 4 Un elogio a Colima › contenido › suplementos › ... · I NVIERNO, 1985.- Hace unos días, me ofreció Panchito Ramos una “pirámide”: entregar tres mil pesos, recibir tres

6Ágora

PLA

ZA C

ULT

UR

AL

DE

Ágora

PLA

ZA C

ULT

UR

AL

DE

3

Leop

oldo

Bar

ragá

n M

aldo

nado

Got

ero fi

losó

fi co

EL

pórt

ico

de u

na a

ntol

ógic

a m

ansi

ón e

s ce

lebr

ado

a un

lust

ro d

e di

stan

-ci

a, c

on e

l est

ilo r

omán

tico

y es

ponj

ado

de la

épo

ca, d

ice

don

Gre

gori

o M

aced

o Ló

pez

que

“en

hist

óric

a re

unió

n la

sec

ción

XX

X d

el S

indi

cato

de

Red

acto

res

de P

rens

a, q

ue a

grup

aba

a la

may

oría

de

los

peri

odis

tas

colim

ense

s, a

cord

ó es

a no

che

lluvi

osa

de s

eptie

mbr

e de

l año

196

4, la

edi

ción

de

la A

ntol

ogía

Poé

tica

Colim

ense

”.

Esa

noc

he, R

igob

erto

Lóp

ez R

iver

a ap

enas

pod

ría

dorm

ir p

ensa

ndo

en la

tare

a qu

e él

mis

mo

se h

abía

enc

omen

dado

; hab

ría

que

resp

onde

r a la

s ex

pect

ativ

as d

e lo

s bar

dos y

los “

lírid

as co

limen

ses”

, com

o le

s lla

mab

a el

pro

pio

Gre

gori

o M

aced

o.

Hab

ía h

urga

do e

n lo

s vie

jos p

erió

dico

s y re

vist

as, y

bus

cado

y h

alla

do m

anus

crito

s en

tre

los p

arie

ntes

y fa

mili

ares

de

los p

oeta

s. S

abía

que

incl

uir a

los n

o na

cido

s en

el te

rruñ

o, p

ero

que

habí

an cr

eado

la m

ayor

par

te d

e su

obr

a aq

uí, c

omo

él m

ism

o qu

e vi

no d

e Ta

mau

lipas

, era

más

que

just

o.

Fue

su in

icia

tiva,

y a

quel

la n

oche

le o

torg

aron

la ta

rea

de h

acer

se c

argo

de

la

edic

ión

y pa

ra el

lo d

ebía

reun

irse

con

don

Juan

Her

nánd

ez, a

quel

labo

rios

o ho

mbr

e pr

opie

tari

o de

la li

notip

ográfi c

a “A

l lib

ro m

ayor

”, u

bica

da e

n la

cal

le P

rogr

eso,

ah

ora

Álv

aro

Obr

egón

(o

no r

ecue

rdo

bien

, por

que

muc

has

vece

s ca

mbi

aron

el

nom

bre

a es

a ca

lle).

En fi n

, que

el b

uen

mae

stro

Rig

o, e

l aut

or d

e po

emas

de

un f

ogos

o lir

ism

o co

mo

“pal

abra

s vi

olen

tas”

o “

los

niño

s m

uere

n en

vuel

tos

en

notic

ias…

”, h

izo

un re

paso

de

sus

auto

res:

pen

só e

n el

man

uscr

ito p

erfu

mad

o de

m

irto

s de

Agu

stín

San

tacr

uz q

ue le

hab

ía s

ido

confi

ado

y e

n el

eni

gmát

ico

por

extr

avag

ante

poe

ma

La c

anci

ón d

e la

lluv

ia, r

ecor

dó s

u br

eve

com

unic

ació

n co

n G

rise

lda,

la h

acen

dada

y g

uapa

muj

er q

ue v

ivía

en

la c

apita

l y q

ue e

scri

bía

com

o ni

ngun

a, d

e el

la in

clui

ría

en u

n ap

arta

do e

spec

ial,

La m

ujer

col

imen

se e

n la

poe

-sí

a, d

e la

mis

ma

edic

ión;

el s

onet

o Fl

or, t

omad

o de

Mil

y un

son

etos

mex

ican

os

de S

alva

dor

Nov

o y

Un

cant

o a

ti m

aíz,

de

su li

bro

Dos

can

tos

(195

9). T

ambi

én

le p

ublic

aría

a la

est

imad

a C

uqui

ta M

oral

es s

u te

xto

poét

ico

Cost

umbr

ista

, ded

i-ca

do a

la F

eria

de

Todo

s lo

s Sa

ntos

…o

Todo

s Sa

ntos

; a R

osa

Cas

tillo

de

Fuen

tes

y a

Gab

riel

Váz

quez

Shi

affi n

o; d

espu

és d

e to

do, n

o er

an m

ucha

s au

tora

s, a

pena

s un

as c

uant

as s

e av

entu

raba

n a

tom

ar la

plu

ma.

A la

mañ

ana

sigu

ient

e, R

igo

cam

inó

por

la M

ader

o, u

n m

echó

n de

cab

ello

le

caía

por

la fr

ente

a p

esar

de s

us es

fuer

zos d

e man

tene

rlo

engo

min

ado

con

Glo

stor

a:

Salu

dó a

la s

eñor

a de

la “C

asa

Roj

as”,

dio

uno

s pa

sos

más

par

a pa

sar f

rent

e a

“La

muñ

eca”

, y r

ecor

dó a

Jos

efi n

a A

rreo

la, q

ue ta

mbi

én e

scri

bía

vers

os, p

arie

nte

no

muy

leja

na d

el g

ran

Juan

Jos

é. A

l fi n

ent

ró a

l res

taur

ante

La

fuen

te y

pid

ió u

n ca

fé a

mer

ican

o. L

o be

bió

conv

ersa

ndo

un p

oco

y si

guió

con

sus c

avila

cion

es. T

enía

qu

e pe

dirl

e al

guna

s vi

ñeta

s a

Jesú

s E

nríq

uez

Cas

illas

par

a ilu

stra

r la

ant

olog

ía

que

serí

a un

ref

eren

te p

ara

las

futu

ras

gene

raci

ones

. No

pret

endí

a ha

cer

juic

ios

sobr

e la

s di

fere

ntes

obr

as, e

l tie

mpo

se

enca

rga

al fi

n de

bor

rar

o en

gran

dece

r el

rec

uerd

o de

los

hom

bres

y la

s m

ujer

es q

ue h

abita

mos

el m

undo

bre

vem

ente

.Sa

lió d

el ca

fé d

ejan

do ta

ntas

sonr

isas

com

o pu

do, e

l cab

alle

resc

o y

jove

n R

igo.

U

n tu

bero

lo s

alud

ó co

n gr

an s

impa

tía: b

uena

s ta

rdes

mae

stro

, y le

ext

endi

ó el

fr

esco

elix

ir d

e la

pal

ma

de c

oco.

Un

año

desp

ués,

la a

ntol

ogía

ser

ía p

rese

ntad

a co

n al

gara

bía

prov

inci

ana.

(M

is p

adre

s aú

n no

se

cono

cían

, per

o el

lib

rito

ya

esta

ba e

n m

is m

anos

.)Anto

logí

a po

étic

a B

ardo

s y

poet

as d

e la

mus

a de

las

palm

as

Veró

nica

Zam

ora

Barr

ios

1.- P

AR

A u

n ho

mbr

e so

lo, i

nmer

so e

n la

infi n

itud

de

l uni

vers

o, n

ada

le s

ería

pos

ible

, ni s

iqui

era

su

pens

amie

nto,

por

que

éste

se

perd

ería

en

el v

acío

, al

no

exis

tir e

lem

ento

alg

uno

que

fuer

a ob

jeto

par

a su

per

cepc

ión

y re

pres

enta

ción

men

tal.

La s

oled

ad a

b-so

luta

no

exis

te.

2.- C

oexi

stim

os c

on u

na d

iver

sida

d de

sere

s, a

nim

a-do

s e

inan

imad

os, i

nclu

sive

has

ta im

agin

ario

s, q

ue s

e co

nvie

rten

en

com

pañe

ros

circ

unst

anci

ales

de

nues

tro

tray

ecto

de

vida

.3.

- La

s pe

rson

as y

las

cosa

s so

n el

pri

mer

con

tact

o co

n la

rea

lidad

y s

e co

nvie

rten

en

mot

ores

de

toda

s la

s id

eas. 4.

- La

alt

erid

ad e

ncar

nada

en

el “

otro

” co

mo

prój

i-m

o, y

la “

otra

” en

nat

ural

eza,

con

stit

uyen

los

ento

rnos

a

part

ir d

e lo

s cu

ales

con

cebi

mos

la v

ida.

5.-

Sin

ento

rnos

no

hay

apre

ndiz

aje,

sin

plu

ralid

ad

no e

xist

e si

ngul

arid

ad. A

pren

dem

os lo

sing

ular

. Ock

ham

te

nía

razó

n.6.

- Soy

uno

y ú

nico

en

la m

edid

a en

que

me

rela

cion

o co

n lo

s de

más

y p

rocu

ro a

l “ot

ro”

com

o co

mpl

emen

to

sust

anci

al.

7.- S

oy u

no y

úni

co c

uand

o m

i ex

iste

ncia

con

vive

con

la

“otr

a”,

enti

énda

se la

nat

ural

eza.

8.-

¿Aca

so e

l de

sbor

de d

e lo

s rí

os n

o ge

neró

el

cono

cim

ient

o de

la g

eom

etrí

a en

la c

ivili

zaci

ón

egip

cia?

¿E

nton

ces p

or q

ué so

mos

ap

átic

os p

ara

cons

erva

r lim

pio

el

cauc

e de

nue

stro

s río

s? ¿

Rep

udia

-m

os la

cie

ncia

?9.

- L

a fi

loso

fía

grie

ga n

ació

co

n el

ole

aje

del M

ar E

geo,

si l

as

corr

ient

es m

arin

as d

espi

erta

n el

in

geni

o, e

nton

ces

volv

amos

a l

a m

ar. 10

.- Z

arat

ustr

a, e

l pro

feta

del

su

perh

ombr

e na

ció

en l

as o

rilla

s de

un

lago

, ¿po

r qu

é en

tonc

es n

o de

ambu

lar p

or n

uest

ras

lagu

nas

y es

pera

r al

guna

rev

elac

ión?

11.-

¡H

uye

de l

os e

ntor

nos

a cu

atro

par

edes

, cor

re a

l cam

po, a

la

mon

taña

, al r

ío o

a la

pla

ya, e

n la

na

tura

leza

hab

ita e

l con

ocim

ient

o!12

.- E

l trá

nsit

o en

tre

lo p

sico

-ló

gico

y lo

fi lo

sófi c

o de

la v

iven

cia

radi

ca e

n la

cat

egor

ía

del r

ecue

rdo.

13.-

Tod

o re

cuer

do e

s co

nten

ido

de c

onci

enci

a y

sopo

rte

biog

ráfi c

o.14

.- S

in r

ecue

rdos

no

hay

cono

cim

ient

o. P

lató

n fu

e ce

rter

o.15

.- L

as d

isti

ncio

nes

por

esta

blec

er p

rior

idad

ent

re

la e

senc

ia y

la

exis

tenc

ia s

on p

reju

icio

s añ

ejos

de

la

fi los

ofía

, po

rque

en

la v

ida

sólo

los

mom

ento

s vi

tale

s co

nsti

tuye

n la

ese

ncia

de

la e

xist

enci

a.16

.- L

a vi

venc

ia ti

ene

su p

erím

etro

en

la e

xper

ienc

ia.

17.-

¿Q

ué e

s fi

loso

fía?

La

expr

esió

n re

flex

iva

de

nues

tras

viv

enci

as, u

na c

onfe

sión

per

sona

l de

nues

tras

ex

peri

enci

as m

unda

nas.

Nad

ie s

e es

capa

del

fi lo

sofa

r.18

.- L

a vi

venc

ia p

or s

u di

men

sión

esp

acio

-tem

pora

l es

múl

tipl

e y

por l

o ta

nto

disc

onti

nua,

no

exis

te u

na so

la

fi los

ofía

, sin

o m

ucha

s, y

toda

s so

n in

term

iten

tes.

19.-

Una

cos

a es

la m

arch

a ir

reve

rsib

le d

el in

stan

te

y ot

ra d

ifere

nte

la d

urac

ión

del m

omen

to, a

quí n

o ha

y ló

gica

, sól

o vo

lunt

ad y

pas

ión.

20.-

La

pasi

ón e

s la

lógi

ca d

e la

vol

unta

d.21

.- L

os fi

nes d

e se

man

a so

n ro

mán

tico

s, so

bre

todo

lo

s do

min

gos,

por

que

el im

pera

tivo

del

reg

reso

a la

na-

tura

leza

cob

ra v

igen

cia.

22.-

La

natu

rale

za e

s si

gno

del A

bsol

uto.

Dio

s no

s ha

bla

en la

s m

onta

ñas.

¿Ya

lo e

scuc

hast

e?23

.- L

os p

rinc

ipio

s qu

e ri

gen

el m

étod

o ló

gico

son

re

glas

de

jueg

o co

nven

cion

ales

y a

rbit

rari

as. L

a ló

gica

es

cap

rich

osa

y no

s ha

ce d

esat

inar

en

la p

erce

pció

n de

la

rea

lidad

.24

.- E

l hec

ho b

ruto

de

la m

uert

e es

ilóg

ico,

por

que

no r

equi

ere

plan

eaci

ón. D

iseñ

amos

pro

yect

os d

e vi

da,

no d

e m

uert

e.25

.- L

a “n

eces

idad

mor

al” d

e la

que

hab

laba

n G

roci

o y

Pufe

ndor

f reb

asa

su si

gnifi

cado

éti

co-j

uríd

ico,

por

que

lo m

oral

tien

e se

ntid

o ec

ológ

ico,

es n

eces

ario

el a

rmón

ico

equi

libri

o en

tre

razó

n y

natu

rale

za, a

l más

pur

o es

tilo

de

los

esto

icos

.26

.- L

os p

erro

s ex

peri

men

tan

haci

a su

s am

os c

elos

as

exua

dos

y, p

or lo

tant

o, n

o in

stin

tivo

s. S

i el c

ompo

r-ta

mie

nto

perr

uno

va m

ás a

llá d

e la

cir

cuns

crip

ción

del

in

stin

to,

ento

nces

pue

den

inst

alar

se e

n el

cam

po d

el

disc

erni

mie

nto,

y s

i di

scie

rnen

, ra

zona

n. K

ant d

ecía

que

dis

cern

ir

era

juzg

ar.

¿Cuá

l es

ent

once

s la

co

nclu

sión

?27

.- E

ntre

un fi l

ósof

o y

un ca

m-

pesi

no n

o ha

y di

fere

ncia

alg

una,

am

bos

siem

bran

y c

ulti

van.

28.-

La

foto

graf

ía e

s bu

en

recu

rso

para

hac

er h

isto

ria

de l

a fi l

osof

ía, c

apta

la re

alid

ad y

gen

era

inte

rpre

taci

ones

.29

.- N

o es

hom

bre

el q

ue n

o en

tra

a la

coc

ina.

La

coci

na e

s un

a vi

sión

del

mun

do.

30.-

No

es lo

mis

mo

un b

oti-

quín

de

prim

eros

aux

ilios

que

un

boti

quín

fi lo

sófi c

o: e

n el

pri

mer

o en

con

tram

os m

ater

iale

s p

ara

cura

cion

es d

e em

erge

ncia

, mie

n-tr

as q

ue e

n el

seg

undo

ten

emos

re

med

ios

perm

anen

tes

para

la

vida

prá

ctic

a.31

.- E

l m

onót

ono

ritu

al d

e la

m

isa

nos

invi

ta a

dar

nos

la m

ano

con

el p

rójim

o y

dese

arno

s la

paz

de

l Señ

or, p

roba

blem

ente

la e

xten

dem

os n

o po

r fi la

ntro

-pí

a, si

no p

or e

xige

ncia

del

pro

toco

lo re

ligio

so; p

ero

en lo

s de

sast

res n

atur

ales

nos

dam

os la

man

o vo

lunt

aria

men

te

sin

prot

ocol

os y

en

auté

ntic

a so

lidar

idad

soc

ial.

¿Cuá

l de

las

dos

será

más

sin

cera

?32

.- S

i vi

vier

a Jo

sé V

asco

ncel

os m

e at

reve

ría

a pr

egun

tarl

e có

mo

llega

ría

a ha

blar

el e

spír

itu

cuan

do la

ra

za ti

ene

ham

bre.

33.-

Men

ospr

ecia

r lo

s pr

inci

pios

del

sen

tido

com

ún

cond

ucen

al

frac

aso

de l

a fi l

osof

ía q

ue,

com

o m

omia

eg

ipci

a, s

e re

fugi

a en

la te

nebr

osa

oscu

rida

d de

l sar

có-

fago

esc

olar

, est

rech

ando

sus

mir

as y

cub

rién

dose

con

el

pet

ulan

te c

amufl

aje

del

rig

or a

cadé

mic

o.34

.- E

l do

min

go l

a na

da h

ace fi e

sta:

cin

e, p

laza

s,

mon

taña

, pla

ya, r

euni

ones

con

amig

os y

fam

iliar

es, t

odo

se v

ale

con

tal d

e lle

nar

el v

acío

de

la e

xist

enci

a qu

e se

m

anifi

esta

en

el te

dio,

el a

burr

imie

nto,

la d

eses

pera

ción

y

el s

uici

dio.

35

.- ¿

Qué

opi

no d

e N

ietz

sche

? U

n pr

ofet

a de

l sui

-ci

dio.

Cuan

do e

stoy

tris

te si

empr

e cr

eo e

star

en

Acap

ulco

Jaim

e O

bisp

o M

artín

ez

Ocu

rre

de la

nad

am

ient

ras

me

esto

y ca

yend

o de

mod

orro

por

la

tris

teza

tr

emen

da d

el d

ía

me

sien

to d

e pr

onto

en

las c

osta

s de

Gue

rrer

o.

A p

esar

de

sabe

r pe

rfec

tam

ente

qu

e pi

so e

l sue

lo d

el R

ey

de C

olim

ány

pued

e ve

rse

el v

apor

del

pav

imen

to

y el

can

to d

e la

s pr

imav

eras

sie

nto

de to

dos

mod

os

que

mue

vo m

is n

euro

nas

en A

capu

lco.

Sabr

á D

ios

por

qué

suce

den

est

as

cosa

s.y

por

qué,

ade

más

,m

e da

por

pen

sar

en e

l cal

ado

de lo

s ba

rcos

.

¡La

mat

eria

san

ta d

e D

ios

algo

tien

e qu

e ve

r co

n la

es

lora

de

los

barc

os!

Y lu

ego

teng

o es

ta c

lase

de

pre

gunt

as:

¿A d

ónde

fue

la m

iel,

a dó

nde,

el t

uéta

node

la o

sam

enta

ale

gre?

¿Nad

ie i

mp

edir

á q

ue

sole

s cu

elgu

en c

omo

trap

os,

que

enfl a

quen

has

ta l

a ri

sa o

el h

orro

r?Y

si e

stán

rob

ando

todo

, ¿p

or q

ué n

o ro

ban

mi

tris

teza

?

Ade

más

, de

sobr

a es

sab

ido

que

Aca

pulc

o he

reda

la

s ag

uas

de C

olim

a:el

mar

baj

a es

cale

ras

y se

olv

ida

de s

ubir

las

¡Así

de

exqu

isito

se

pone

co

n la

s na

os!

Oja

lá p

ase

pron

tola

des

com

posi

ción

y

un n

uevo

bar

niza

do m

e re

gres

e la

ale

gría

.So

y un

ilu

so,

lo s

é de

so

bra.

Lo

del s

ubsu

elo,

lo

de la

s ar

ruga

squ

e ce

lebr

an fi

esta

s de

shoj

adas

.

Mas

no

se c

ompa

dezc

an,

com

padr

es

yo e

nam

oré

a la

luz d

e la

s to

rmen

tas

y el

seg

undo

que

dur

ó su

qu

emad

ura

está

en

mi l

engu

a, e

n m

i an

emia

fúne

bre

y es

o es

sufi

cie

nte

para

más

de

mil

años

.

Hay

qui

enes

tie

nen

las

cert

ezas

com

iend

o de

su

man

o yo

me

enor

gulle

zco

de

mis

dud

as.

No

sé s

i est

oy e

n C

olim

a o

Aca

pulc

ojú

zgue

me

uste

d co

mo

a un

idio

ma

mue

rto

com

o a

un le

trer

o de

sahu

ciad

o ya

nad

a im

port

a si

no

dorm

ir s

obre

la ti

erra

com

o aq

uello

s ar

bust

os

que

no d

ejan

reg

istr

o en

los

libro

s sa

cros

de

la

hist

oria

.

Pa

isa

je, J

oan

Mir

ó.

El T

era

peu

ta, R

ene

Mag

ritt

e.

Page 4: 4 Un elogio a Colima › contenido › suplementos › ... · I NVIERNO, 1985.- Hace unos días, me ofreció Panchito Ramos una “pirámide”: entregar tres mil pesos, recibir tres

EN

1932

, el g

ener

al G

abri

el R

. Gue

vara

se p

rese

ntó

com

o ca

ndid

ato

al g

obie

r-no

de

Gue

rrer

o, e

n op

osic

ión

al l

icen

ciad

o E

zequ

iel

Padi

lla, q

ue t

ambi

én

aspi

raba

al c

argo

.G

ueva

ra s

e ro

deó

de u

n gr

upo

form

ado

por

muc

hach

os i

ntel

igen

tes,

am

bici

osos

y e

ntus

iast

as, e

n el

que

fi gu

raba

n A

lfons

o M

asta

che,

Man

uel M

. Rey

noso

, B

ulm

aro

Tapi

a, M

anue

l Sán

chez

H.,

Ale

jand

ro G

ómez

Mag

anda

y o

tros

. Nin

guno

lle

gaba

a lo

s 25

año

s.E

n es

a ép

oca

yo tr

abaj

aba

en e

l P.N

.R.,

y el

gen

eral

Man

uel P

érez

Tre

viño

, pre

-si

dent

e de

esa

org

aniz

ació

n, m

e co

nfi r

ió la

com

isió

n de

rep

rese

ntar

al p

arti

do e

n lo

s pr

epar

ativ

os y

eje

cuci

ón d

e lo

s fa

mos

os “

pleb

isci

tos”

, que

se

efec

tuab

an e

n to

das

las

cont

iend

as e

lect

oral

es p

ara

dete

rmin

ar la

fuer

za p

opul

ar d

e lo

s ca

ndid

atos

en

jueg

o.Po

r las

muy

nat

ural

es ra

zone

s de

eda

d y

tem

pera

men

to c

oste

ño, s

impa

ticé

des

de

lueg

o co

n el

gru

po d

e G

ueva

ra, s

inti

éndo

me

espe

cial

men

te a

traí

do h

acia

Rey

noso

y

Góm

ez M

agan

da, c

on q

uien

es h

ice

estr

echa

y le

al a

mis

tad

que

se h

a co

nser

vado

a

trav

és d

e lo

s añ

os.

Am

bos

prov

enie

ntes

de

las

más

hum

ildes

cap

as s

ocia

les,

pob

res

de s

olem

nida

d y

de u

na f

eald

ad fi

sonó

mic

a en

gra

do h

eroi

co –

en c

uya

com

para

ción

nue

stro

“fe

o Sc

hmid

t” re

sult

aba

un a

doni

s de

Mac

k Se

net–

, Man

uel y

Ale

jand

ro c

oinc

idía

n en

las

exce

lenc

ias

de s

u ta

lent

o, d

e su

boh

emia

y fe

stiv

a al

egrí

a de

viv

ir y

de

la c

onfi a

nza

de s

u pr

opio

val

er.

Una

noc

he, e

n Ig

uala

, el g

rupo

aco

rdó

burl

ar la

vig

ilanc

ia p

ater

nal q

ue e

jerc

ía e

l ge

nera

l Gue

vara

y s

alir

se “d

e ga

llo”.

Al fi

lo d

e la

s 2

de la

mañ

ana,

el g

rues

o de

am

igos

y

los

com

pone

ntes

de

un c

onju

nto

mus

ical

se

colo

caro

n ba

jo u

n ba

lcón

y e

mpe

zaro

n a

ento

nar

las

canc

ione

s de

mod

a. A

poc

os m

etro

s de

dis

tanc

ia y

en

la e

squi

na d

e la

ac

era,

Ale

jand

ro y

yo

fum

ábam

os e

n si

lenc

io. L

a os

curi

dad

era

com

plet

a, p

ues

en e

se

tiem

po e

l ser

vici

o el

éctr

ico

de I

gual

a se

sus

pend

ía a

las

11 d

e la

noc

he.

De

pron

to, m

ás q

ue v

er, p

rese

ntim

os u

na p

rese

ncia

ext

raña

. Alg

uien

lleg

aba,

in-

visi

ble,

fero

z y

trem

endo

, com

o un

a m

aldi

ción

no

expr

esad

a. E

se a

lgui

en, q

ue re

sult

ó se

r un

méd

ico

sem

iloco

, afe

cto

a em

bria

gars

e y

a qu

ien

el v

ino

pert

urba

ba la

raz

ón,

lleva

ba u

na p

isto

la e

n la

man

o y,

segu

ram

ente

pos

eído

de

un e

spír

itu

de p

erse

cuci

ón,

al ll

egar

junt

o a

noso

tros

leva

ntó

el b

razo

arm

ado

y lo

dej

ó ca

er so

bre

la fo

rma

hum

ana

que

entr

eveí

a. A

leja

ndro

rec

ibió

el p

isto

lazo

en

plen

a fr

ente

y c

ayó

al s

uelo

, bañ

ado

en s

angr

e, m

ient

ras

el a

gres

or fa

ntas

mal

huí

a de

svan

ecié

ndos

e en

las

tini

ebla

s.R

ecog

í al h

erid

o, v

inie

ron

los a

mig

os, y

en

tant

o qu

e un

os se

lanz

aban

a p

erse

guir

al

sal

vaje

alc

ohol

izad

o, o

tros

me

ayud

aron

a s

oste

ner

a A

leja

ndro

y c

ondu

cirl

o ha

sta

la c

asa

de u

n bo

tica

rio,

qui

en d

esin

fect

ó la

her

ida

y la

cos

ió s

in e

l pal

iati

vo d

e ni

ngún

an

esté

sico

, pue

s su

exi

sten

cia

de m

edic

amen

tos

no ib

a m

ás a

llá d

el b

icar

bona

to d

e so

sa, d

el a

ceit

e al

canf

orad

o y

de la

s pa

still

as d

e cl

orat

o.¡C

ómo

adm

iré,

en

esa

ocas

ión,

la p

rese

ncia

de

ánim

o de

Góm

ez M

agan

da! M

ient

ras

las i

nháb

iles m

anos

del

bot

icar

io le

pes

punt

aban

los l

abio

s de

la le

sión

, Ale

jand

ro m

e re

ferí

a su

s an

danz

as d

e bo

xead

or a

mat

eur,

de

vend

edor

de

peri

ódic

os, d

e es

tudi

ante

ir

regu

lar

suje

to a

la n

eces

idad

de

inte

rrum

pir

una

lecc

ión

para

bus

cars

e lo

s m

edio

s qu

e le

per

mit

iera

n co

mpr

ar u

n pa

mba

zo p

ara

enga

ñar

el h

ambr

e.A

l día

sig

uien

te s

alim

os a

Hui

tzuc

o, d

ista

nte

de I

gual

a tr

es h

oras

a c

abal

lo. A

le-

jand

ro y

yo

nos

reza

gam

os d

e la

com

itiv

a, e

ludi

endo

inte

rrup

cion

es a

nue

stra

plá

tica

de e

voca

cion

es s

enti

men

tale

s y

confi

den

cias

. Mi o

rige

n co

limen

se d

espe

rtab

a en

él

viej

as e

moc

ione

s. A

ños

atrá

s se

hab

ía e

nam

orad

o de

una

muc

hach

a co

limot

a, c

uya

tier

na a

ñora

nza

le h

acía

sus

pira

r. A

l pas

o ta

rdo

de la

s be

stia

s, m

e co

ntó

la h

isto

ria

rom

ánti

ca d

e aq

uel c

ariñ

o fr

ustr

ado.

De

pron

to, e

mpe

zó a

llov

er y

a lo

s po

cos

min

utos

se

form

aliz

ó un

agu

acer

o, e

m-

papá

ndon

os la

rop

a y

espe

cial

men

te la

ven

da e

nrol

lada

alr

eded

or d

e la

cab

eza

de

Góm

ez M

agan

da, q

ue c

omen

zó a

got

ear m

ercu

rio

crom

o...

Por l

a fa

z ás

pera

-cut

ánea

le

cor

rían

innu

mer

able

s ve

rtie

ntes

enr

ojec

idas

, que

pro

voca

ron

nues

tra

hila

rida

d...

¡Oh,

div

ina

juve

ntud

, que

tran

sfor

mas

en

risa

has

ta lo

s go

lpes

dad

os a

man

salv

a!Po

co a

ntes

de

llega

r a

Hui

tzuc

o, A

leja

ndro

par

ó en

sec

o su

cab

alga

dura

:–

¿Sab

es lo

que

ven

go p

ensa

ndo?

Voy

a h

acer

un

elog

io d

e tu

tie

rra

de C

olim

a,

ahor

a qu

e ha

ble

en e

l mit

in.

–¡M

agnífi c

o!, p

ero

no im

agin

o có

mo

pued

as r

elac

iona

r el

rec

uerd

o ge

ográfi c

o y

sent

imen

tal d

e C

olim

a, c

on la

pro

paga

nda

elec

tora

l del

gen

eral

Gue

vara

.–

Ya lo

ver

ás.

Y lo

vi.

Mej

or d

icho

: lo

esc

uché

. Cho

rrea

ndo

agua

, per

o co

n el

esp

írit

u lig

ero,

lle

gam

os a

Hit

zuco

y n

os a

dent

ram

os p

or e

ntre

la m

uche

dum

bre

de p

arti

dari

os, y

cu

ando

tocó

turn

o a

Góm

ez M

agan

da, p

ronu

nció

el m

ás lí

rico

, apa

sion

ado

y he

rmo-

so d

e to

dos

los

disc

urso

s di

chos

en

esa

gira

. Con

mag

istr

al h

abili

dad,

al e

xalt

ar la

s vi

rtud

es d

e la

muj

er g

uerr

eren

se a

ludi

ó a

la s

ensi

bilid

ad, a

bneg

ació

n, d

esin

teré

s y

nobl

eza

de to

das

las

muj

eres

de

la c

osta

, y c

itó

com

o ej

empl

o a

la m

ujer

col

imen

se.

Y er

a de

ver

aqu

el co

ntra

dict

orio

esp

ectá

culo

pre

sent

ado

por u

n m

ucha

cho

heri

do,

con

la ri

dícu

la a

pari

enci

a qu

e pr

opor

cion

aban

las r

opas

moj

adas

y a

rrug

adas

, erg

uirs

e en

la e

moc

ión

del p

ensa

mie

nto

habl

ado

y ce

ntra

r la

ate

nció

n de

sus

oye

ntes

con

las

mag

nifi c

enci

as d

e su

ora

tori

a, q

ue lo

eng

rand

ecía

n y

agig

anta

ban.

Por

las

circ

unst

anci

as e

n qu

e se

pro

dujo

ese

hom

enaj

e a

mi t

ierr

a, lo

rec

uerd

o co

mo

el m

ejor

de

los

elog

ios

para

Col

ima.

Ágora

PLA

ZA C

ULT

UR

AL

DE

5

Un e

logi

o a

Col

ima

Don

Man

uel S

ánch

ez S

ilva

Don

Man

uel S

ánch

ez S

ilva

VIÑ

ETA

S D

E LA

PR

OV

INC

IAV

IÑET

AS

DE

LA P

RO

VIN

CIA

(10

de ju

nio

de 1

956)

4Ágora

PLA

ZA C

ULT

UR

AL

DE

* Pe

riod

ista

, esc

rito

r y

fund

ador

de

Dia

rio

de C

olim

a.†

Mi o

rigen

colim

ense

despe

rtaba

en él

viejas

emoci

o-ne

s. Año

s atrá

s se ha

bía en

amora

do de

una m

ucha-

cha co

limota

, cuya

tiern

a año

ranza

le ha

cía su

spi-

rar. A

l paso

tard

o de la

s best

ias, m

e con

tó la

histor

ia rom

ántic

a de a

quel c

ariño

frust

rado

.

JOSÉ

Rev

uelt

as,

en e

l pr

imer

lib

ro

de la

s Evo

caci

ones

req

ueri

das,

en

el

capí

tulo

titu

lado

“Por

tier

ras d

e M

é-xi

co: I

slas

Mar

ías”

, nar

ra, s

egún

su

dulc

e m

emor

ia, e

l mom

ento

en

que

es ll

eva-

do a

las I

slas

Mar

ías e

n el

“buq

ue-m

otor

” de

nom

bre

Sina

loa,

junt

o co

n su

s com

pañe

ros

de lu

cha

de a

quel

ent

once

s.Lo

s m

uros

de

agua

-no

s di

ce J

osé

Re-

vuel

tas-

reco

ge a

lgun

as d

e m

is im

pres

ione

s du

rant

e do

s fo

rzad

as e

stan

cias

que

deb

í pa

sar e

n la

s Isl

as M

aría

s, la

pri

mer

a en

1932

y

la s

egun

da e

n 19

34.

José

Rev

uelt

as c

uent

a có

mo

se v

io fa

s-ci

nado

por

la fi

gura

hip

ervi

ril d

el c

apit

án

de a

quel

bar

co:

un h

ombr

e ta

tuad

o, q

ue

escu

pía

taba

co c

on u

nos

dien

tes

durí

sim

os

com

o el

ham

bre

de la

s ca

lles:

“to

dos

aque

-llo

s ra

sgos

-afi

rm

a R

evue

ltas

- co

nsti

tuía

n pa

ra n

osot

ros

lo

que

esen

cial

men

-te

cor

resp

onde

a

aque

llo q

ue s

e ha

d

ado

en l

lam

ar

‘lobo

mar

ino’

, por

lo

cua

l se

ntía

mos

un

agr

adab

le s

o-br

ecog

imie

nto…

”.

Per

o, d

ice

José

R

evu

elta

s: “

con

todo

, L

os m

uros

d

e a

gu

a n

o so

n un

refl

ejo

dir

ecto

, in

med

iato

de

la

real

idad

. So

n un

a re

alid

ad li

tera

ria,

un

a re

alid

ad i

ma-

gina

da”.

Ant

es d

e lle

gar

a la

s Is

las

Mar

ías,

aq

uel

ad

mir

ado

capi

tán

de b

arco

, “s

eñal

ando

con

el

índi

ce l

as l

ínea

s un

idas

de

dos

ce-

rros

, az

ules

tod

a-ví

a…”,

e i

nd

ica:

“a

llí q

ueda

el c

am-

pam

ento

a d

onde

va

n, A

rroy

o-H

ondo

”. C

omo

dire

ctor

de

la

“col

onia

pen

al”,

tend

rían

al g

ener

al G

axio

la;

y Jo

sé R

evue

ltas

dic

e: “

era

una

exce

lent

e pe

rson

a, m

uy b

ueno

”. J

osé

Rev

uelt

as y

sus

co

mpa

ñero

s, p

reso

s po

lític

os,

trab

ajab

an

“och

o ho

ras

al d

ía”,

ade

más

de

que

reci

-bí

an “

…un

sal

ario

de

cinc

uent

a ce

ntav

os

a un

pes

o, s

egún

el

com

port

amie

nto…

”.

Incr

eíbl

e, p

ero

verd

ader

o, J

osé

Rev

uelt

as

se m

ostr

aba

dem

asia

do p

ositi

vo: “

la co

mid

a no

pod

ía s

er m

ejor

: pe

scad

os,

verd

uras

, ar

roz,

car

ne lo

s ju

eves

y d

omin

gos,

frijo

les,

et

céte

ra”.

Rec

orde

mos

que

la

llega

da a

las

Isl

as

Mar

ías,

en

la n

ovel

a Lo

s m

uros

de

agua

, R

evue

ltas n

arra

cada

situ

ació

n co

n ex

trem

a ce

leri

dad.

Uno

sup

one,

gra

cias

a la

nar

ra-

ción

, que

más

de

una

pers

ona

es s

ubid

a a

un c

arro

y lu

ego

tran

spor

tada

a o

tro

lado

y

desp

ués,

la

imag

en i

mpa

ctan

te d

el a

r-ch

ipié

lago

. ¿V

enda

dos

tal

vez

los

ojos

de

quie

nes

abor

dan

aque

l veh

ícul

o? ¿

Esp

osa-

dos?

¿E

ncad

enad

os ta

mbi

én d

e la

s pie

rnas

? R

evue

ltas s

e pr

egun

ta: “

¿A q

ué lu

gar p

odrí

a se

r? E

l rel

oj a

mar

illo

de la

torr

e, lo

s árb

oles

, ap

arec

iero

n co

mo

un ro

mpe

cabe

zas…

”. P

or-

que

desp

ués,

leem

os: “

…y

lueg

o to

do q

uedó

os

curo

, im

pene

trab

le y

sile

ncio

so d

entr

o de

l car

ro, c

uya

puer

ta so

nó c

on u

n ru

ido

de

cade

nas”

. Ya

que

“más

tar

de n

o er

an s

ino

los

edifi

cios

de

la c

iuda

d, e

ntre

vist

os p

or

la e

stre

cha

clar

aboy

a…”.

Las

Isl

as M

aría

s,

son

vist

as e

n R

evue

ltas

com

o un

esp

acio

en

orm

e, u

nifo

rme,

abu

rrid

o, s

ubli

me

y fa

scin

ante

a la

vez

, por

que

los

edifi

cios

de

las

Isla

s er

an “

edifi

cios

de

erig

ida

ceni

za,

rect

os,

unit

ario

s,

pues

ya

no h

abía

es

quin

as y

todo

se

habí

a to

rnad

o un

m

uro

, u

na

call

e so

la y

larg

a, c

arga

-da

de

infi n

ito”

.Si

aca

so la

his

-to

ria

que

cono

ce-

mos

en

Los

mur

os

de a

gua,

es

un

a si

tuac

ión

inve

nta-

da o

una

“re

alid

ad

imag

inad

a”, c

omo

dice

Jos

é R

evue

l-ta

s, t

enem

os e

n cu

enta

y m

ás q

ue

obvi

o, q

ue

tod

o en

Los

mur

os…

se

nutr

e de

la

expe

-ri

enci

a ca

rcel

aria

de

Rev

uelt

as.

El

capi

tán

de b

uque

qu

e m

enci

onáb

a-m

os a

trás

, apa

rece

en

Los

mur

os…

, no

com

o un

hom

-br

e ad

mir

ado

por

Rev

uel

tas,

más

bi

en a

pare

ce a

nte

nues

tros

ojo

s co

mo

el p

erfe

cto

dict

ador

de

san

gre

fría

, ase

sino

por

gus

to y

, es

para

R

evue

ltas

, un

sarg

ento

.M

ient

ras

los

mili

tant

es c

omun

ista

s so

n lle

vado

s a

las

Isla

s M

aría

s, s

uced

e qu

e “n

o po

día

vers

e na

da. E

l sar

gent

o er

a de

l tam

a-ño

de

las

tini

ebla

s y

todo

s se

enc

ogie

ron,

es

quiv

ando

las

cabe

zas

com

o si

una

man

o pl

ural

fues

e a

caer

les

enci

ma

desd

e lu

ego.

” Ya

que

, des

pués

, los

com

pañe

ros

com

unis

-ta

s “r

espi

raro

n fu

erte

, si

n de

tene

rse,

a l

a ca

rrer

a, c

omo

a pu

nto

de ll

orar

”.A

segu

ra, o

mni

pres

ente

, Rev

uelta

s: “e

ra,

quiz

ás, u

n lla

nto

inve

rso,

un

llant

o ha

cia

las

entr

añas

, hac

ia e

sas

otra

s ti

nieb

las

inte

rio-

res

dond

e la

s lá

grim

as,

acas

o, n

o ha

rían

ta

nto

daño

”.

VIA

JÁB

AM

OS

a bo

rdo

del

taxi

en

el a

sien

to t

rase

ro,

con

un v

acío

en

orm

e en

tre

los

dos,

mie

ntra

s ve

íam

os c

ada

uno

el e

xter

ior.

¿Rea

lmen

te e

stab

a to

do d

icho

? Sa

bía

muy

bie

n qu

e no

. Fal

taba

po

r de

cirt

e y

mos

trar

te t

anto

s se

ntim

ient

os q

ue n

o m

e at

reví

a. E

n ca

mbi

o, tú

tan

sólo

dec

ía c

osas

abs

urda

s si

n vo

ltea

r, v

iend

o a

trav

és d

e la

ven

-ta

na e

l nom

bre

de la

s ca

lles

que

avis

aban

el fi

nal

de

mi o

port

unid

ad. E

l fi n

al d

e to

dos

esos

mom

ento

s ta

n m

arav

illos

os q

ue p

asam

os ju

ntos

.V

aria

s ve

ces

giré

con

dec

isió

n ha

cia

ti, p

ero

las

pala

bras

sim

plem

ente

no

llega

ban.

Ten

ía ta

nto

mie

do d

e su

frir

tu r

echa

zo, d

e se

r co

nsid

erad

o un

pob

re

loco

con

fund

ido

resp

ecto

a m

is e

moc

ione

s.

El p

oco

valo

r que

sent

í se

debí

a al

hec

ho d

e qu

e ni

ngun

o de

los d

os sa

bíam

os

si v

olve

ríam

os a

ver

nos.

Así

que

sup

use

serí

a m

ejor

sab

er s

i sen

tías

lo m

ism

o po

r m

í, qu

e m

orir

con

la d

uda.

¿Deb

ería

bes

arte

?, m

e pr

egun

taba

mie

ntra

s im

agin

aba

cóm

o se

ría

hace

rlo

mie

ntra

s te

abr

azar

ía c

on fu

erza

.D

iste

nue

vas

indi

caci

ones

al c

hofe

r qu

e m

e de

sper

taro

n de

mi l

etar

go. J

alé

mis

cab

ello

s con

des

espe

raci

ón y

te v

eía

ahí,

tan

tran

quila

e in

dife

rent

e, v

iend

o po

r la

ven

tana

, cas

i pre

sum

iend

o tu

her

mos

o pe

rfi l

y al

ocad

o ca

bello

. Sen

tist

e m

i mir

ada

y vo

lteas

te. M

ient

ras m

e pe

rdía

en

tu m

irad

a m

e re

gala

ste

en si

lenc

io

una

sonr

isa

que

me

hizo

enl

oque

cer

aún

más

.Pe

nsar

en

todo

s lo

s añ

os q

ue h

abía

esp

erad

o aq

uel m

omen

to m

e de

jó s

in

alie

nto,

sin

pal

abra

s. A

lgun

a fu

erza

sup

erio

r m

e de

tuvo

.La

s ca

lles

pasa

ban

con

tal v

eloc

idad

que

me

ater

raba

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