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POEMARIO PARA UNA DESPEDIDA Todos tenemos una oportunidad para vivir y una oportunidad de muerte, ambas necesarias; alguien que te salude a tu llegada y alguien que te despida en tu partida. A los que no tienen quien los despida van estas letras. HERNESTO PAZLIBER

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La poesía como medio para decir lo que no se puede decir con otras palabras. Este poemario habla de situaciones que aluden a la constante despedida del ser humano como ser pasajero, de tránsito por la vida y en las vidas de otros. Puedes visitar Pazliber en www.pazliber.cl

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POEMARIO PARA UNA DESPEDIDA

Todos tenemos una oportunidad para vivir y una oportunidad de

muerte, ambas necesarias; alguien que te salude a tu llegada y

alguien que te despida en tu partida. A los que no tienen quien los

despida van estas letras.

HERNESTO PAZLIBER

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HE MUERTO

¡He muerto! ¡Qué duda cabe de ello! Hasta en los ojos de mis enemigos Se cruzan los mares del extravío.

Así es ¡no hay más! Lo que antes fue templanza Ahora no es más que recuerdo Lo que antes fue lanza Ahora es paz sin puerto.

¡He muerto! Como el gran Cesar en su tiempo Como el Cristo del sublime madero Como el sencillo vecino cartonero; Ya sea poeta o analfabeto del polvo al polvo he vuelto Qué más da: para muchos o pocos… ¡He muerto!

Y todo fue tan simple De tanto pedirla y sin buscarla… Invisiblemente visible como la mentira. Ella estaba a mi lado para tocarla Nació conmigo, germen, semilla.

¡He muerto! Y conmigo tus recuerdos ¡Qué duda cabe de ello! Pues antes de que falleciera En ti ya habían muerto Y sólo faltaba este último De mi descanso eterno.

H. Pazliber Julio 2015.

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CREYENTE

Te creo porque si Porque no temo en creerte Y sólo me basta mi voz Para en la oscuridad mirarte Y la claridad de mis ojos Para desde el silencio hablarte.

Te creo porque si Porque necesito creerte Como el pasto al rocío Como la idea a mi mente Te creo tanto y tanto Como creo cierta mi muerte

Te creo porque si Porque no hay razón en no creerte Porque aunque falsa fuese tu mirada Bastaría sólo mirarte para volver a creerte Porque aunque falsa fuese tu voz El sólo escucharla bastaría para creerte

Y ahí está mi perdición creyente: Creer en ti porque elegí creerte Pues nada me convence de lo contrario Incluso si haces sufrir mi mente: Que si tocas mi llagas simplemente Yo no podré odiarte sino sólo quererte.

Te creo porque me es más fácil para quererte Aunque algún día de mí soñar despierte Y sólo crea en el dolor de ser creyente.

HERNESTO PAZLIBER AGOSTO 2014

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PARA UNA ROSA UNA ROSA

Para una rosa una rosa Aunque no creo que encuentre dos cosas Que se comparen en el universo. Siempre he pensado que aquella flor Es menos que ella en este verso.

Para una rosa una rosa Aunque lejana esté la mañana del amor Y más cercana la guitarra y su dolor en este verso… Porque siempre he pensado que aquel beso Fue un adiós, un pétalo al viento.

¡Para una rosa una rosa! Aunque no creo que encuentre dos cosas En el jardín de mi huerto… Siempre he pensado que sus espinas y sus pétalos, Son el amor y el dolor juntas en un puerto

Hernesto Pazliber. 2009.

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¿UBI SUNT?

¿Dónde estás? reclama el viento por entre el follaje de estrellas grita el río serpenteante por entre los montes la lluvia en los rostros ¿Dónde estás? tu mente, corazón y cuerpo tu historia de frutas y juegos los secretos y la complicidad de niña todos los íntimos esfuerzos para nacer la primavera ¿Dónde estás? cuando el sol se entrega y la luna se esconde; cuando la noche señorea?

H. Pazliber

Agosto 2012

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DISCURSO APOLÓGICO PARA MIS MANOS

Señoras y señores

Viajando desde el centro de la vida misma humana, humanos, les presento una mano. No viene sola, curioso, viene con otra amiga que por siempre la ha acompañado. La primera dice que tiene muchos dedos, orgullosa dice que tiene cinco y quizás más que su amiga, la otra mano. La primera dice con orgullo, llamarse izquierda y la segunda… ¡ja! La segunda por entre el cuerpo se ha arrancado. Estimados amigos y amigas, la mano que nos queda, la primera, nos dice, en silencio silencioso, que es dócil como el aire que ondea en los valles del mar donde algún héroe ha viajado; en cambio las segunda, si la hallamos, gusta de escribir versos, además de jugar sobre las cabezas, por dolor o alguna vergüenza que le ha dado… allá va con sus cinco dedos… ¡gritadle para que aparezca la sinvergüenza y así quedar mano a mano! Estimados caballeros y caballeras, les informo, para sus sorpresa, que siempre fueron manos y que juntas trabajan a veces como locas en el campo o sobre una mesa, que desde pequeñas se acariciaron y se perdonaron; que entre ellas, y que de vez

en cuando y de cuando vez, cargaron con rosas para sus amores, otras manos, más suaves que ellas pero al fin simples y complejas manos; que cargaron tantas cosas y otras tantas que han olvidado, por entre los rincones de palacio y de lesas. Dice la leyenda que entre las dos alguna vez la tierra sostuvieron; dicen que ellas, al mismo sol apagaron, con un sólo dedo y que los otros les han sobrado; que arrastraron y cargaron un gran baúl, lleno de colores y sueños sorpresas… Dicen que una vez las crucificaron, sin tener culpa, solo por pensar en el dolor ajeno, una en cada extremo de un añoso palo. Dicen que juntas, que cosas dicen, que juntas con Dios hablaron, en las noches oscuras con llanto amargo, que hablan con dios, que cosas dicen estas manos. Señores y señoras, la primera, como recordáis, dice que es más limpia que su otra, la compañera, pero también dice que ambas al corazón limpiaron (y en ello tienen mucha razón) pues allí

anida el amor que con tus manos se entrega de mano en mano. Por favor, no contéis a nadie, que el índice marque el silencio de lo que me han contado, pero estas manos han sostenido entre ellas a su amor, manos de princesa en una población, y ella sus lágrimas de amor han secado, con paños púrpura y encaje de estrellas, para convertirlas en flor, en una madrugada sin castillos ni emblemas. Señores y señoras, esas manos de príncipe, que Dios te ha dado, son para que ames y trabajes lo amado, me dicen estas dos manos. La que tiene tantos dedos y la otra que está a su lado. Azulado es el cielo donde dicen estas manos que han trabajado: Acuarelas de multicolores, multicolores esculturas, esculturales aviones de papel en las que han viajado; dicen tanto y tanto lo que ellas han logrado, que ni las letras de este poema, ni las letras todas de los alfabetos, podrían enumerarlo…Señoras y señores ahora en silencio absoluto esta historia escuchemos o estrechemos, de estas dos…mis únicas, tus únicas, manos.

Hernesto Pazliber junio 2012

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CUANDO TE VAYAS

Cuando te vayas quedará una puerta abierta

día y noche. Entrará el sonido del mundo

y quebrará el silencio de tu partida; entrará el frío, el viento

y a veces el sol. Cuando te vayas

los cortinajes quedarán abiertos y nuestra vida se mostrará vacía

y las miradas ajenas verán la soledad y el dolor,

verán mi desnudez mi humana debilidad.

En las murallas el grafiti de tu nombre encadenado a tu pequeña historia,

el aroma de niña inocente en mis ropas y las marcas de mi odio perturbado, del dolor ante mi propia cobardía…

nunca terminaré de oír tu adiós ¡Nunca!

Cuando te vayas intentaremos sonreír y soñar

de noche y de día el nuevo día sin tu amanecer

la noche sin tu bendición. Cuando te vayas

un ángel se dormirá en tu cama preguntándome por qué;

y yo tomaré su blanca mano para caminar y descubrir

los rincones de tu vida. Cuando te vayas

quedará una puerta abierta por donde saldré a buscar tu vida que un día partió

sin querer decir adiós entre lágrimas por una

decisión que no fue tuya ni mía.

Nada se pierde ni nada se olvida hija mía

nada en esta vida niña.

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Abril 2003

DÉJAME SERVIR Déjame servir el té de la vida con el agua de mis años. Tú, coloca el dulce y el pan como antaño. El agua ya hierve en el mundo y el hambre se derrama: faltan milagros como tú: gente que ama. Quiero tomar este té contigo y saborearlo trago a trago como mendigo hasta que reviente la primavera en tu ventana. Déjame servir el té de la vida a veces simple otras amargo y si quieres llorar con leche o chocolate entre vientos de serpentinas hazlo, yo cantaré tu vida. Yo, hermana , pondré las servilletas mi sentimiento para tu alegría y la mía; porque estoy contento como las galletas y esta vieja tetera que nos mira. Déjame recordar tus años y servir en tu vida la hermandad que nos une en la magia de la noche de todos nuestros días. Septiembre 1998

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ODA AL OMBLIGO MATERNO Mamá, mamita, madre, madre mía. Algo quedó entre nosotros recordando aquellos días, algo más que una cicatriz en el centro de la vida, una profusa cavidad llena de tristeza y alegría, un nudo encubierto que sello la independencia de nuestras vidas. ¡Míralo madre! Y recordarás las madres pariendo madres; y en tu mente aparecerán esos nombres inmortales, aparecerán mujeres rasgando la húmeda tierra, hombres blandiendo metales; mujeres y hombres surcando los cielos, los mares. Ahora, déjame llorar y reír contigo, deja que con suave mano acaricie tu ombligo; para recordar aquel tibio paraíso de flores y árboles frutales; deja abrazarme a tu regazo de amores maternales. ¡Vamos madre, amiga, esposa y compañera! ¡Vamos madre! santa y abuela… déjame volver al umbral que llevas consigo, obrera de la creación suprema, ¡déjame volver hacia aquel tiempo perdido! Porque algo quedó entre nosotros como emblema, algo más que una cicatriz, un recuerdo de ti y de mi y el amoroso lazo que nos une en esta tierra. Cómo decirlo: Madre, luz, hijos, universo, semblanza eterna y tu ombligo, madre mía, que se hace estrella. Mayo 2006

Ilustración Francesca Chessa

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PROCESOS Érase una vez una princesa en capullo crisálida hirviente y colorada. Érase una vez una flor princesa pétalo vivo, rojo ardiente, helada. Érase la primavera. Érase una princesa de porcelana luna blanca, espuma, dorada. Erase un cristal de princesa sutil, frágil, suave y enamorada. Érase la belleza. Érase una vez, luego, Reina acongojada de palacios y soldados de cristal y porcelana. Érase una vez una reina de un rey, princesa, con sueños de flor y capullos. Érase la tristeza. Érase una reicesa, hoja seca liviana quebradiza, tosca y plateada. Érase una de tantas, sin brisa, sin nada, pequeñeza Érase una princesa llena de amor de reina frustrada. Érase la pobreza. Érase una vez un capullo cristal de su tristeza; Érase una tristeza hoja vieja por el tiempo olvidada, que se llevó el viento junto con su mirada.

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PADRES

Como madero viejo que con el tiempo se desgasta y se roe que recuerda su tiempo en que fue semilla y algo de tierra fina vara y hasta viga angular de catedrales añosas y desgastadas; que sueña con su follaje verde, incrustado en lo más alto del celeste cielo allí donde en las noches nortinas de niño dialogaste con las estrellas. Viejo madero que recuerda el sacrificio del Cristo, clavado en el corazón de la historia. ¿Raído o tallado, padre? Pues quien talla en madera solo busca lucir lo mejor de la veta aquella nobleza que crece solo con los siglos. Recuerdo juvenil donde la brisa mece los nidos de las aves sin nombre pues en tu cresta solo ofreces el solidario refugio del fruto y la sombra. Como viejo madero que se mece en las turbulentas aguas liviano por el tiempo y frágil por la vida… ya no están las vetas pero en tus ojos brilla el espíritu. Nosotros los vástagos, herederos del primer árbol sembrado en el paraíso tendremos que ser Roble, Mañío, luma o ébano para soportar esta enseñanza así como antes nos enseñasteis a sonreír y llorar hoy tendremos que ser la nueva viga angular. El madero que soportó los sufrimientos de la humanidad será nuestro ejemplo entre tantos que se levantan sin éxito. Entre tus ramas viejo árbol en tu sabia escondida en tus raíces lejanas y mustias está nuestra historia…tomaremos el ejemplo y como carpinteros del futuro construiremos tu casa. Como viejo madero que se mece en las turbulentas aguas liviano por el tiempo y frágil por la vida… ya no están las vetas pero en tus ojos brilla el espíritu de mi padre y de los infinitos padres ancestrales que en ti brillan y se encumbran con sus hojas hasta las vetas del cielo.

Junio 2009

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LAS PALABRAS ESTÁN DE FIESTA Las palabras andan de juerga están levitando cerveza halan suspiros de fresa en blancas montañas, humean como espuma negra, como vino antaño y robado se resbalan y cantan entre comas, puntitos…y punto. (Infinitos que se corren sin voluntad) Hacen trencitos en papel trencitos alocados una tras otra como lluvia de serpentinas como infinita challa.. Las palabras están parando las chalas Y rebotan en las paredes imaginarias De un margen que las acaba. Se disfrazan… Se miran de mesa a mesa Se ojean con tinta verde y roja Se susurran ideas tiernas Y malvadas Se tambalean en una hoja blanca Se aíslan entre paréntesis Para no ser advertidas por los ojos Se estiran a descansar en una línea Invisible y planetaria No dicen lo que quieren No quieren lo que dicen La cerveza borró sus memorias Y olvidaron hasta su nombre (Como un día olvidé el tuyo). Las palabras se despiden de la noche La música de acaba en la partitura Se juran un retorno En una canción para una amada A veces las palabras mienten O callan Las palabras en fiesta Son palabras vanas. Febrero 2009

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TE AMARÉ EN SILENCIO

Cuando la primavera estalle en los botones de las blancas rosas, cuando la calle seque su rocío invernal en silencio, entre las cosas te amaré con este cuerpo otoñal. Mirad el verde talle que sostiene la rosa ¡que nunca le falle! el alimento vivo y terrenal ni el agua, ni el aire ni de Dios, el sol celestial… Mirad su belleza sobre la calle brotando de la fría loza ¡qué nadie hable! que escuche que alguien solloza en el silencio otoñal amándola entre las cosas en su silencio final. Y tú amigo, si sabes no hables de estas cosas, que el silencio te calle de este amor vivo y mortal que de noches y lunas solloza en su silencio otoñal.

Diciembre 1995

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MUERTE REBELDE

Y se encadenó a una flor como una mariposa cósmica para esperar la llegada del sol invernal; y un río amazónico recorría su corazón. Cuando vinieron a buscarlo entre dragones guerreros, pisaron su llanto exiliaron con golpes su sonrisa mientras un río amazónico recorría su mejilla. El levantó su mano hasta el cielo y con sus pies arrastró algunas palabras… (Eran tantas y juntas como una cordillera) …La justicia estaba en algún recóndito lugar del mundo drogada, pagada, dormida o seducida en algún lugar mezquino donde el río amazónico es placer de explosiones y disparos… Nadie contestó desde el cielo mientras que una lluvia de ácido lavaba su cara… Eran muchas las horas, eran muchas las luchas… Lo desencadenaron sin gloria televisiva y lo arrastraron sin vida, también por los diarios. Así es la muerte no mejor que otras pero al fin muerte.

Corpus Cristi 2000

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PARA AQUELLOS QUE LES GUSTA EL DRAMA

Allá está Julieta colgada de su ventana sin poder mirar más que su nariz. Romeo es cualquier joven que la descubra si es capaz de alzar su vista al cielo. El problema es grave y ya cae la tarde de noche todos los gatos son negros, pero también es ganancia: Julieta baja de su balcón improvisado y en la puerta mira como distraída como distraído un joven la mira (mil veces se habían visto) Bajan la vista ante el relámpago de sus corazones sólo el céfiro criollo habla en la ya caída noche. Es lunes selenita y sin nubes una ventana juletiana se abre llena de emociones más allá de “una punta de nariz” se asoma una mirada otra que camina como distraída busca estrellas inexistentes las miradas se miran – chocan de mentira- y se esparcen sonrisas y como murmuradas se saludan unas corteses palabras. Ahora si que ella se siente Julieta Y él se siente Romeo: el que halló la ventana. Luego viene la otra parte de la historia que siempre es drama o nadie, absolutamente nadie, conocería y seguiría la clásica historia.

Marzo del 2006.

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FINAL DE BESOS

Un beso quebradizo murió En un labio accidental Fue como espantapájaros Pues ningún beso posterior llegó Y el fantasma del beso Recorría el barrio como leyenda Entre sonrisas que alguna vez Anhelaron un beso bravo se erigió una estatua de oro bronce y lata que recuerde el beso aquel una misa por su descanso en labios pasajeros que no lo supieron apreciar “no me importa” dijo el dueño(a) del beso que murió en la cavidad que sepulta las letras que nunca van a sonar ¡qué historia, qué beso! Nunca nadie supo qué beso Olvidó en el pergamino Su nombre anotar De aquellos besos lerdos, tardos y quietos Que mueren sin brillar… Un fantasma recorre el pueblo Y un par de labios quieren descansar. En tu beso. Abril 2006.