Domingo 15 de marzo de 2015Acaso no saben ustedes que, cuando se entregan a alguien para obedecerlo, son esclavos de aquel a quien obedecen? Claro que lo son, ya sea del pecado que lleva a la muerte, o de la obediencia que lleva a la justicia. Romanos 6.16LIBRES O ESCLAVOSAl llegar las vacaciones disfrutamos de paz y libertad relajndonos, cambiando nuestra rutina; pero esa experiencia, no se compara con la libertad espiritual del pecado, de la culpa y de la vergenza. Luego nos preguntamos: Por qu tantos cristianos hacen caso omiso de este regalo? Quieren alejarse de su trabajo o del estrs de la casa por un tiempo, pero no del pecado. Pueden trabajar varias horas para salir ms temprano el fin de semana. Sin embargo, titubean para pasar tiempo en oracin, humillarse ante el Seor y pedirle que transforme sus vidas. Tal vez sea el momento de examinarse. Hay pensamientos, emociones o hbitos que le agobian? Ha dejado que la sociedad moldee su manera de pensar? La manera como usted responda estas preguntas es crucial, porque sus pensamientos determinarn lo que sienta y haga. Romanos 6.16 nos dice que somos esclavos de aquel a quien obedecemos. Esto significa que tenemos que cambiar nuestra lealtad. En vez de ceder a nuestros deseos, encontramos la libertad solo cuando estamos dispuestos a elegir el camino de Jesucristo, negarnos a nosotros mismos y seguirle a l.Reflexin: DEBEMOS AGRADECER LA LIBERTAD TERRENA QUE GOZAMOS Y HACER UNA ENTREGA COMPLETA EN OBEDIENCIA AL SEOR.