estructura y dinámica del recurso humano médico de la...

38
OBJETIVOS El presente trabajo pretende describir y analizar den- tro de las posibilidades que brinda la información dis- ponible, la estructura y composición de la población médica de la Provincia de Buenos Aires al año 1981, en base a las variables biológicas de sexo y edad y su comparación con la población general de la Provincia a través del censo de 1980. Asimismo se harán las comparaciones facti- bles con datos publicados del mismo tenor de años anteriores, tanto de nuestra provincia como de otras provincias o jurisdicciones del país. LIMITACIONES La primera limitación es la dificultad de obtener infor- mación. La segunda es la fidedignidad de la misma: en el caso que nos ocupa el 5 % del total de los médicos no tenía declarada la edad, lo que debió tenerse en cuenta para no tergiversar las frecuencias relativas de los grupos etáreos. Sin embargo, dado que el 93 % de los casos sin discriminar la edad son varones es presumible que se trate de médicos de más de 55 años, ya que a partir de ese grupo etáreo se observa una distribu- ción asimilable por sexo alrededor de 93 % de varo- nes y sólo 7 % de mujeres (Cuadro N° 3 ****). No obs- tante se prefirió no redistribuirlo equitativamente por no considerárselo imprescindible para al análisis. Por lo que se dejó constancia del grupo sin discriminar en todos los cuadros ****. Lamentablemente no se pudo analizar el dato referido a las causas de muerte, por no estar consig- nado adecuadamente en la mayoría de los casos. Este hecho merece destacarse ya que —si bien hay un déficit importante en el país en lo referente a la registración de la causa de muerte— nos debe llevar a replantear algunos de los programas relacionados con el certificado de defunción, que en su momento permitieron tener una idea aproximada de las causa- les de mortalidad en general y relacionarlos con las variables de edad y sexo. Actualmente no sólo nos encontramos con esa limitante a nivel población total, sino que en este grupo tan selectivo como es el de los médicos, tampoco podemos analizarlo ya que adole- cemos de la misma falencia. Aunque parezca insólito se ha encontrado en los certificados de defunción de los médicos como causas más frecuentes de muerte, paro cardíaco y paro respiratorio. METODOLOGÍA Se ha clasificado la población médica tanto en grupos decenales como quinquenales —para facilitar su comparatividad con otros universos— pero en ambos casos partiendo de los 25 años de edad, ya que si bien existen 73 médicos de menos edad, sólo repre- sentan un 0,3 % del total, lo que hace muy desparejo incluirlos en un grupo quinquenal o decenal, por lo que se consideró pertinente incluirlos en el primer grupo etáreo de 25 a 29 o de 25 a 34 años según la clasificación elegida en cada caso. La pirámide se ha elaborado con grupos dece- nales tomando a cada sexo con el 100 %, a efectos de facilitar la visualización de las diferencias observa- bles en cada uno de ellos. Esto no modifica mayormente la forma geomé- trica y ofrece la posibilidad de sumar los porcentajes en forma independiente por sexo. No se ha tenido en cuenta el grupo de datos sin consignar, por lo expre- sado precedentemente. Estructura y dinámica del recurso humano médico de la provincia de Buenos Aires * Elsa B. Pérez Arias ** Jorge J. Feller *** * Recibido para su publicación el 6/10/83. ** Especialista en Salud Pública. Asesor Médico de FEMEBA. *** Docente de la Facultad de Ciencias Médicas, UNLP. Diplomado en Salud Pública. **** Todos los cuadros mencionados se encuentran disponibles al final del trabajo.

Upload: others

Post on 04-Apr-2020

6 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

OBJETIVOSEl presente trabajo pretende describir y analizar den-tro de las posibilidades que brinda la información dis-ponible, la estructura y composición de la poblaciónmédica de la Provincia de Buenos Aires al año 1981,en base a las variables biológicas de sexo y edad ysu comparación con la población general de laProvincia a través del censo de 1980.

Asimismo se harán las comparaciones facti-bles con datos publicados del mismo tenor de añosanteriores, tanto de nuestra provincia como de otrasprovincias o jurisdicciones del país.

LIMITACIONESLa primera limitación es la dificultad de obtener infor-mación.

La segunda es la fidedignidad de la misma: enel caso que nos ocupa el 5 % del total de los médicosno tenía declarada la edad, lo que debió tenerse encuenta para no tergiversar las frecuencias relativasde los grupos etáreos.

Sin embargo, dado que el 93 % de los casossin discriminar la edad son varones es presumibleque se trate de médicos de más de 55 años, ya quea partir de ese grupo etáreo se observa una distribu-ción asimilable por sexo alrededor de 93 % de varo-nes y sólo 7 % de mujeres (Cuadro N° 3 ****). No obs-tante se prefirió no redistribuirlo equitativamente porno considerárselo imprescindible para al análisis. Porlo que se dejó constancia del grupo sin discriminar entodos los cuadros ****.

Lamentablemente no se pudo analizar el datoreferido a las causas de muerte, por no estar consig-nado adecuadamente en la mayoría de los casos.Este hecho merece destacarse ya que —si bien hay

un déficit importante en el país en lo referente a laregistración de la causa de muerte— nos debe llevara replantear algunos de los programas relacionadoscon el certificado de defunción, que en su momentopermitieron tener una idea aproximada de las causa-les de mortalidad en general y relacionarlos con lasvariables de edad y sexo. Actualmente no sólo nosencontramos con esa limitante a nivel población total,sino que en este grupo tan selectivo como es el de losmédicos, tampoco podemos analizarlo ya que adole-cemos de la misma falencia. Aunque parezca insólitose ha encontrado en los certificados de defunción delos médicos como causas más frecuentes de muerte,paro cardíaco y paro respiratorio.

METODOLOGÍASe ha clasificado la población médica tanto en gruposdecenales como quinquenales —para facilitar sucomparatividad con otros universos— pero en amboscasos partiendo de los 25 años de edad, ya que sibien existen 73 médicos de menos edad, sólo repre-sentan un 0,3 % del total, lo que hace muy desparejoincluirlos en un grupo quinquenal o decenal, por loque se consideró pertinente incluirlos en el primergrupo etáreo de 25 a 29 o de 25 a 34 años según laclasificación elegida en cada caso.

La pirámide se ha elaborado con grupos dece-nales tomando a cada sexo con el 100 %, a efectosde facilitar la visualización de las diferencias observa-bles en cada uno de ellos.

Esto no modifica mayormente la forma geomé-trica y ofrece la posibilidad de sumar los porcentajesen forma independiente por sexo. No se ha tenido encuenta el grupo de datos sin consignar, por lo expre-sado precedentemente.

Estructura y dinámica del recurso humanomédico de la provincia de Buenos Aires *

Elsa B. Pérez Arias **Jorge J. Feller ***

* Recibido para su publicación el 6/10/83.** Especialista en Salud Pública. Asesor Médico de FEMEBA.*** Docente de la Facultad de Ciencias Médicas, UNLP. Diplomado en Salud Pública.

**** Todos los cuadros mencionados se encuentran disponibles al final del trabajo.

Page 2: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

2 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS

1. Composición y estructurade la población médicaSobre un total de 24.305 médicos, tenemos que18.989 es decir el 78 %, son varones y el 22 % res-tante, o sea 5.316 corresponden al sexo femenino.Este total subdividido en grupos decenales de edad,nos muestra la composición de la población médica,tomando porcentualmente cada sexo por separado(Cuadro N° 1). Se observan así las hemipirámidestotalmente distintas (Gráfico N° 1), ya que la del sexomasculino se asemeja a una pirámide de país des-arrollado, con una base más pequeña de médicosdel grupo etáreo de 25 a 34 años, asciende luego al31,6 % en el grupo de 35 a 44 y a partir de aquí vadescendiendo paulatinamente. En cambio la hemipi-rámide del sexo femenino es del tipo de país subde-sarrollado con una base muy ancha, en la que el pri-mer escalón de 25 a 34 años tiene algo más del 50% del total de médicos para luego ir decreciendopaulatinamente en una graficación perfecta de laevolución por sexo de la población médica. Los hom-bres pioneros en la disciplina médica van abando-nando lentamente la misma para consagrarse a otrasprofesiones, mientras las mujeres van tomandoabruptamente sus espacios.

Con la pirámide completa se visualiza que el61,4 % (Cuadro N° 2) del total de médicos de ambossexos, tiene menos de 45 años de edad. Con lo cualse puede estimar promedialmente que tienen menosde 20 años de graduados. Con menos de 35 años,es decir con menos de 10 años de graduados, seencuentra el 30,7 % de los médicos. Por otro lado sedestaca dentro del sector femenino, que el 54,2 % delas médicas tiene menos de 35 años de edad o 10años de graduadas, y que el 82 % tiene menos de 45años de edad o 20 años de graduadas. Esto secorrelaciona en forma directa con el ingreso a lacarrera médica, que ha sido mucho mayor para elsexo femenino en los últimos años, lo mismo que losegresos.

En el Cuadro N° 4 observamos la tendencia delos ingresos femeninos a la carrera de medicina, quede un 18 % en los años 1955-59 pasa a ser práctica-mente de un 50 % veinte años después. La cantidadde egresadas, sigue una proporción semejante, unosdiez años más tarde aproximadamente. Siendo estaslas que luego pasan a integrar la pirámide señaladade los médicos en ejercicio.

El porcentaje de hombres y mujeres para cadagrupo de edad y su peso dentro del total del universomédico pueden observarse en el Cuadro N° 3.

2. Relación de masculinidad médicaA efectos de visualizar este incremento cada vezmayor de profesionales mujeres, se ha establecidouna relación de masculinidad total, con cocientedirecto de varones sobre mujeres, sin ningún factorde amplificación.

Relación de Masculinidad Médica:

Número total de médicos Pcia. Bs. As. 1981.

Número total de médicas Pcia. Bs. As. 1981.Total Provincia Bs. As. Año 1981.

En la misma forma se extrae la relación demasculinidad para cada grupo etáreo.

Relación Masculinidad Médica 20-29 años:

Número de médicos (20-29 años) Pcia. Bs. As. 1981

Número de médicas (20-29 años) Pcia. Bs. As. 1981Provincia de Buenos Aires—1981

Se obtiene así una relación algo menor a 1 enel grupo etáreo de 20 a 29 años, lo que implica unnúmero prácticamente igual de médicos y médicas eneste primer escalón etáreo. Esta relación va ascen-diendo con la edad de los graduados, llegando a serde casi 3 médicos por una médica entre los 30 y 39años. Llega a 5 en el decenio siguiente hasta llegar aun máximo de 78 médicos por una médica en elgrupo etáreo de 70 años y más (Cuadro N° 5).

Lo antedicho no concuerda estrictamente conel número de egresos femeninos, que en los últimosaños (80/81) representa el 35 % del total de egresa-dos de la Facultad de Ciencias Médicas de La Plata,quizás porque las edades por sexo de los médicosno son exactamente comparables en ambos casos alos años de graduados. Las mujeres en general segradúan más jóvenes que los hombres, de ahí queen la pirámide por edad haya más mujeres que hom-bres, lo que no significa de ningún modo que enalgún momento hubo más egresos femeninos quemasculinos.

Por otra parte podría considerarse la hipótesis,que a la Facultad de Ciencias Médicas de La Plataviene en proporción, mucha más cantidad de varonesde otras áreas del país y del extranjero, que luegoretornan en gran medida a sus lugares de origen.

Lo que significaría que las mujeres que egre-san, en su mayoría ejercen en la provincia de BuenosAires por pertenecer originariamente a la ciudad capi-tal o al interior de la provincia no siendo necesaria-mente así, con todos los hombres. Estas serían algu-nas de las posibles causas por las que la pirámide deluniverso médico muestra una proporción mucho másalta de mujeres que la correspondiente a los egresosuniversitarios.

3. Relación médico-habitanteLa OMS ha estimado hace ya varios años, una rela-ción adecuada de un médico por cada mil habitantes.Esta cifra últimamente se considera algo insuficiente,y se ha llegado a aceptar que una relación optima esla de un médico cada 700 habitantes como acontececon los países más desarrollados del mundo.

Nuestra Provincia de Buenos Aires cuenta enpromedio con 22 médicos por cada mil habitantes o loque es igual, a un médico por cada 447 habitantes.Esto quiere decir que aun en la mejor estimación

Page 3: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

3Estructura y dinámica del recurso humano médico de la provincia de Buenos Aires

nuestra relación es superior al máximo recomendado(Cuadro N° 6).

No obstante, cabe mencionar algunos aspec-tos a tener en cuenta desde el punto de vista cualita-tivo, y no meramente cuantitativo. Al respecto, en elanálisis de este indicador debemos considerar lossiguientes:a) La distribución geográfica.b) El nivel socio-cultural y económico.c) Los patrones epidemiológicos.d) La composición de la población.

a) La distribución geográfica nos muestra quela relación promedio de 1 médico por cada 447 habi-tantes, tiene un rango que va desde 1 por cada 150,caso de La Plata, hasta 1 cada 2.000 (Partido deMoreno). Este solo dato muestra las tremendas dife-rencias que presenta nuestra provincia. No hay dudade que existe una correlación directa en que a mayorconcentración de población (áreas urbanas) mayornúmero de médicos y viceversa en las áreas rurales.Desfasaje que es aun mayor cuanto más dispersa esla población y fundamentalmente cuanto más pobre.La mayor concentración médica en las zonas urbanases un fenómeno general en el país y se da con todotipo de trabajo calificado máxime en el área de servi-cios. Las principales causales se encuentran dentrode las variables que se mencionan en los puntossiguientes, y sus consecuencias son observables entodos los países del mundo donde no existe una polí-tica de distribución y regionalización de recursos,quedando los mismos sujetos al libre juego de ofertay demanda. A esto debe añadirse en la ciudad capi-tal, el hecho de ser sede de una importante Facultadde Medicina, aspecto ya señalado en nuestro paíspor autores varios.

El análisis por sexo demuestra una mayor pro-porción de médicas en La Plata con respecto al restode la Provincia, es decir que la densidad de mujeresdedicadas a la medicina tiene su más alto pico en lacapital de la Provincia.

b) Indudablemente el mayor o menor nivelsocioeconómico cultural de la población determina lascaracterísticas de la demanda de atención médica.Siendo esta demanda más selectiva con señaladoénfasis en actitudes preventivas y de cuidado de lasalud. Lo que está en estrecha relación con el nivelsocio-cultural, más que el económico en forma aislada.

Esto implica que al analizar la demanda poten-cial de un área, se deban tener en cuenta numerosasvariables que van desde las necesidades básicas dis-tintas de los diversos estratos, hasta la existencia ono de cobertura médica y su tipo que como se hademostrado incide en el volumen de utilización.

c) Los patrones epidemiológicos, si bien estánrelacionados con el punto anterior, se refieren a laexistencia de patologías prevalentes por áreas oregiones, las que van a determinar el tipo de activida-des médicas a desarrollar, como también la mayor omenor necesidad de médicos según especialidades.Así las áreas poblacionales de estructura de desarro-llo requieren un recurso mucho más sofisticado, para

el estudio, investigación y atención de procesos degran nivel de complejidad, ya sean estos preventivos,curativos, estéticos, de supervivencia o rehabilitación.

d) La composición de la población, también esun elemento muy importante a considerar, ya que depor sí solo indica un predominio de asistencia queserá mayor en el grupo materno-infantil, si se trata deuna población joven, o gran atención de crónicos enlas estructuras de población envejecida. Si bien esterubro está ligado a los dos anteriores, el mismopuede actuar por sí solo y debe ser considerado.

Es también importante destacar los aspectosmencionados someramente, ya que la sumatoria delos mismos y el hecho de conocerlos pueden resultarde valor y complementarios del indicador al que esta-mos haciendo referencia, desde el punto de vistacuantitativo a la población total. Si no se consideran yponderan se puede decir que un país o región tieneuna relación óptima y no ser así en la práctica.

Por último y al mismo efecto, se debe señalaralgo respecto a la composición de la población médi-ca, es decir, al numerador de la ecuación a la que nosestamos refiriendo. Por un lado, es bueno visualizarsu composición etárea actual y futura, pues puedeser decisiva para una política de desarrollo o des-aliento del recurso humano, y por otro la composiciónpor sexo, en que si bien la hemos explicitado alcomienzo, merece un comentario especial. El recursohumano médico femenino, es decir las médicas, porla estructura social de nuestro país, fundamentalmen-te, no se dedican a la profesión con la misma intensi-dad que los varones. Por lo tanto, no es válido colo-carlas en el numerador en la misma medida que a losmédicos. Digamos a título de ejemplo, que si estahipótesis representa que en promedio la médica sededica a la profesión en un 60 % de sus posibilida-des, implica que en lugar de contabilizar 5.316, debe-ríamos hacerlo con 3.190. Con lo cual el trabajo médi-co de la provincia se reduce y de los 24.305 señala-dos en los cuadros quedarían 22.179. Así la relaciónmédico-habitante sería de 2,0 médicos por cada mil,o uno cada 500. Diferencia que si bien no es muyimportante, va a pesar mucho más cuanto mayor seala proporción de mujeres en el total de los médicos.

Se considera que a los efectos de purificar esteindicador, es conveniente tener en cuenta los aspec-tos cualitativos mencionados, y con el tiempo habráque deslindar para cada uno de ellos, un valor querefleje más adecuadamente todo lo expresado.

4. Distribución por especialidadesAl egresar, todos los médicos tienen derecho a ejercerla medicina, y realizar todo lo que de acuerdo a suciencia y conciencia están en condiciones de ejecutar.

Sin embargo, el ejercicio profesional hace quecerca del 90 % de los médicos trabajen para laSeguridad Social. Dentro de ésta, gran parte de lasreglas del juego son fijadas por convenios entre pres-tatarios (Obras Sociales) y prestadores a través desus Entidades médico gremiales. Surge así la necesi-dad de inscribirse en especialidades para poder fac-

Page 4: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

4 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

turar las prestaciones de acuerdo a las normas delNomenclador Nacional de prestaciones medicas ysanatoriales.

La registración permite observar que el 70 %de los médicos está sólo en ocho especialidades, lasque, en orden de importancia numérica son:

Porcentaje Porcentaje Acum.1°) Medicina Gral. 17,5 17,52°) Clínica Médica 11,0 28,03°) Pediatría 9,3 37,34°) Cirugía Gral. 8,4 45,75°) Ginecología 8,2 53,96°) Obstetricia 6,5 60,47°) Cardiología 5,8 66,28°) Ortopedia y

Traumatología 3,7 69,9

Se llega al 80 % agregando: Radiodiagnóstico,Psiquiatría y Oftalmología, y se completa el 90 % con:Otorrinolaringología, Dermatología, Gastroenterolo-gía, Urología, Clínica Neurológica, Neumonología,Alergología y Anatomía Patológica.

Sin querer entrar en mucho detalle al respecto,cabe señalar que la elección de gran parte de estasespecialidades está influenciada por las posibilidadeseconómicas que en cada una de ellas existe, y que elNomenclador Nacional ha inducido con su retribucióndiscriminada que favorece ciertas prácticas frente altrabajo estrictamente intelectual. A la inversa está elcaso muy notable de los anestesistas que por consi-derar que la retribución estipulada en el NomencladorNacional, está muy por debajo de lo adecuado, engran parte no adhieren a este sistema. Esto es obje-tivable en el listado señalado en el que puede com-probarse que la anestesiología no figura entre lasespecialidades que cubren el 90 % de los médicosinscriptos para trabajar por Obra Social.

La inclinación de las mujeres a ciertas especia-lidades, está encubierta dentro del total. Su existen-cia e influencia es fácilmente demostrable con los lis-tados comparativos de especialidades según sexo.

Por encima del 50 % de las médicas seencuentran ejerciendo 3 especialidades: Ginecología,Obstetricia, Pediatría y Clínica Médica.Evidentemente el incremento de mujeres también sig-nificará en el futuro cierto cambio en el perfil de espe-cialidades.

5. Médicos residentesOtro hecho interesante al respecto ocurre con lapoblación médica que está realizando su capacita-ción de post-grado a través del sistema formal, masi-vo, denominado Residencias Médicas. Por ello, cabedestacar que este sistema cubre aproximadamente el20 % de los egresos de la Universidad Nacional de LaPlata. Si bien el cupo de residencias no permite laincorporación de la totalidad de los egresos de laFacultad de Ciencias Médicas, se considera que hay

una cantidad más o menos igual de graduados de LaPlata que ingresan a residencias fuera de la Provinciade Buenos Aires.

De este número voluminoso que representa un3,8 % del total de médicos en ejercicio, tenemos queel 40 % son mujeres y el 60 % restante varones. Estaproporción femenina es más notoria en el primer año,donde llega a ser del 45 %. Esto indicaría que en rela-ción al número de egresos, entran más mujeres quevarones. O dicho de otro modo, hay mejor prepara-ción del sexo femenino, ya que aprueban el examenen una mayor proporción.

La distribución de los residentes por especiali-dad, depende pura y exclusivamente de la oferta queal respecto ofrece el Sistema de residencias y no a lapropia elección de los médicos qua ingresan a lamisma. Al respecto, vemos que el orden decrecientede especialidades no concuerda con el establecidoen al capítulo anterior. Así predominan:

Porcentaje Porcentaje Acum.1°) Pediatría 18,3 18,32°) Clínica Médica 10,9 29,23°) Cirugía General 9,8 39,04°) Medicina Gral. 8,3 47,35°) Anestesiología 7,7 55,06°) Obstetricia 7,4 62,47°) Psiquiatría 4,9 67,38°) Ortopedia y

Traumatología 4,7 72,09°) Radiología 4,1 76,110°)Anatomía

Patológica 3,8 79,9

Con lo que se puede ver, el 80 % está cubiertocon las 10 especialidades mencionadas.Destacándose que si bien no es el mismo orden, den-tro del 80 % están las mismas en ambos grupos, aexcepción de: Anestesiología y Anatomía Patológica,que entran en las residencias seguramente porque setrata de especialidades críticas y se ha consideradoconveniente promoverlas a efectos de paliar el déficitexistente de las mismas, tanto a nivel hospitalariocomo de la comunidad en general. Esto que es posibleen estos casos, no sigue en su aplicación ningún méto-do ni ordenamiento general. Lo que nos replantea lanecesidad impostergable de un estudio profundo yexhaustivo de todo lo relacionado con las residenciasmédicas. Actualmente el más reconocido mecanismode formación formal del postgrado está siendo utiliza-do como reclutamiento de mano de obra barata,habiéndose dejado totalmente de lado los objetivosque fundamentaron su creación; como se puedeobservar analizando cuali-cuantitativamente las resi-dencias que se vienen ofreciendo en la última década.

COMENTARIO FINALEn el presente trabajo se ha tratado de señalar ydemostrar una serie de variables que caracterizan al

Page 5: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

5Estructura y dinámica del recurso humano médico de la provincia de Buenos Aires

recurso humano médico, en un pretendido intento devisualizar la complejidad de la situación. Trabajos pre-vios de diagnóstico y proyectivos de diversos autoresauguraban hace décadas una explosión desordena-da, haciendo hincapié en la necesidad de su planifi-cación.

Es evidente que la irracional secuencia degobierno y funcionarios sin continuidad ni políticasinterfirió en todos los órdenes institucionales produ-ciendo el caos que alentó el crecimiento individual deintereses. En este momento se suma a la situación,descripta hace años, aspectos no existentes enton-ces así como un contexto socioeconómico distinto,con necesidades y expectativas que difieren según ellugar y los actores intervinientes. Teóricamente la pro-vincia de Buenos Aires, es de entre todas en el país,la que puede tener una estructura socio-económicamás homogénea, con centros poblacionales disper-sos en toda su superficie. Sin embargo el estudio dela distribución del recurso médico y sus característi-cas nos mostró la falta de coherencia entre necesida-des y existencia, lo que da por resultado grandes dis-torsiones cuando se consideran las variables cualita-tivas en juego.

Nuestra intención fue bosquejar la complejidadque actualmente ha adquirido la situación del recursohumano documentando algunos aspectos. El tema noha sido agotado, ya que esa no fue la intención. Nosmotivó el comprender que no es correcto buscar solu-ciones futuras en base a indicadores globales, dejan-do de lado la consideración de componentes intra yextrasectoriales.

Es necesario abandonar ciertos estereotipos,

como el de la existencia de una plétora médica, conlo que se minimiza en forma interesada la compleji-dad y responsabilidad que encierra el tema.

REFERENCIASPablo V. “Cantidad de médicos y distribución en la

República Argentina”. La Semana Médica, Tomo 106 N°19, mayo 1955.

Palermo E. “Número de médicos y otros profesionales. Sudistribución en la República Argentina”. Anales A deMedicina, Vol. VIII, julio-diciembre 1963.

Quesada E y Fontana F. “Análisis y perspectivas de la dis-tribución de médicos en la Argentina”. Revista de SaludNº 11/12, julio 1967 - junio 1968.

Facultad de Ciencias Médicas - Departamento deGraduados UNLP. Estudios estadísticos sobre los médi-cos egresados de esta Facultad entre los años 1970-1973 inclusive.

Ministerio de Bienestar Social - Secretaría de Estado deSalud Pública. Estudio Proyectivo Necesidades deMédicos, médicos Especialistas y Odontólogos hasta1990.

Centro de Estudios Sanitarios y Sociales - AsociaciónMédica de Rosario - CESS. “Estructura dinámica ocupa-cional del Médico: Rosario 1978”. Cuadernos MédicoSociales, Edición especial octubre 1980.

Primer Encuentro Provincial sobre la mujer médico. FEME-BA, La Plata, mayo de 1981.

“La relación médico/población sigue siendo desfavorablepara el mundo en desarrollo”. Bol. Of. Sanit. Panam. 91(1), 1982.

Segundo Encuentro Sobre el Médico en la Tercera Edad.Femeba. La Plata. Noviembre 1982.

CUADRO N° 1: Población médica total y porcentual por sexo según grupos etáreos,provincia de Buenos Aires, 1981

Grupo Varones Mujeres TotalEtáreo Número Porcentaje Número Porcentaje Número Porcentaje

25-34 4.580 24,1 2.881 54,2 7.461 30,735-44 6.004 31,6 1.470 27,6 7.474 30,745-54 4.236 22,3 724 13,6 4.960 20,455-64 2.096 11,0 137 2,6 2.233 9,265-74 789 4,2 15 0,3 804 3,374 y + 134 0,7 3 0,06 137 0,6Sin Consignar 1.150 6,0 86 1,6 1.236 5,1TOTAL 18.989 100,0 5.316 100,0 24.305 100,0

Fuente: Caja de Previsión y Seguro Médico de la Provincia de Buenos Aires.

Page 6: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

6 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

GRAFICO N° 1: Pirámide de población médica por grupos decenalesde edad y sexo, provincia de Buenos Aires, 1981.

% 30 25 20 15 10 5 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50

Fuente: Ídem Cuadro N° 1.

Edad

85

75

65

55

45

35

25

VARONES MUJERES

CUADRO N° 2: Porcentaje acumulado de médicos, según sexo y grupo etáreo,provincia de Buenos Aires, 1981

Grupo etáreo Total Varones Mujeres25-34 30,7 24,1 54,235-44 61,4 55,7 81,845-54 81,8 78 95,455-64 91 89 98,065-79 94,3 93,2 98,375 y + 94,9 93,9 98,4Sin consignar 5,1 6,1 1,6TOTAL 100,0 100,0 100,0Fuente: Ídem Cuadro N° 1

CUADRO N° 3: Porcentaje de médicos según sexo para cada grupo etáreo decenal,provincia de Buenos Aires 1981

Grupos Etáreos Sexo Varones Mujeres Total25-34 61,4 38,6 100,035-44 80,3 19,7 100,045-54 85,4 14,6 100,055-64 93,9 6,1 100,065-74 98,1 1,9 100,075 y + 97,8 2,2 100,0Sin consignar 93,0 7,0 100,0TOTAL 78,1 21,9 100,0

Fuente: Ídem Cuadro N° 1.

Page 7: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

7Estructura y dinámica del recurso humano médico de la provincia de Buenos Aires

CUADRO Nº 4: Promedio anual y porcentaje de ingresos y egresos según sexo.Período 1955/1981 Facultad de Ciencias Médicas de La Plata.

Ingresos Egresos

Año Mujeres Varones Total Mujeres Varones Total

X Anual Porcentaje X Anual Porcentaje X Anual X Anual Porcentaje X Anual Porcentaje X Anual

1955 124 18,0 568 82,5 692 16 12,4 113 87,6 1291959

1960 140 14,5 825 85,5 966 25 15,0 143 85,0 1691964

1965 207 19,0 880 81,0 1.087 45 16,5 228 83,5 2731969

1970 803 35,0 1.451 65,0 2.254 85 15,0 143 85,0 1691974

1975 664 49,4 681 50,6 1.346 200 26,0 566 74,0 7671979

1980 188 49,5 193 50,5 381 131 35,0 245 65,0 3761981

Fuente: Facultad de Ciencias Médicas. Universidad de La Plata. Año 1981.

CUADRO N° 5: Número total de médicos según sexo y grupos etáreos.Relación de masculinidad, provincia de Buenos Aires 1981

Grupos Varones Mujeres Relación deEtáreos Masculinidad

20-29 1.541 1.643 0,9

30-39 6.172 2.118 2,9

40-49 5.440 1.073 5,1

50-59 2.912 335 9,7

60-69 1.382 56 24,7

70 y + 392 5 78,0

Total 17.839 5.230 3,4

Sin consignar 1.150 86 13,4

Total 18.989 5.316 3,6

Fuente: Ídem Cuadro N° 1.

Page 8: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

8 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

CUADRO Nº 6: Población total*, Población médica y Relación médico/habitantes por mil,según grupos decenales, provincia de Buenos Aires 1981

Población general Población médica Relación médico/ Habitantes por médicohabitantes por mil

GruposEtáreos Total Varones Mujeres Total Varones Mujeres Total Varones Mujeres Total Varones Mujeres

25-34 1.625.882 811.232 814.650 7.461 4.580 2.881 4,6 5,6 3,5 218 177 283

35-44 1.335.274 670.381 664.893 7.474 6.004 1.470 5,6 9,0 2,2 179 112 452

45-54 1.217.274 604.908 612.366 4.960 4.236 724 4,1 7,0 1,2 245 143 846

55-64 923.345 444.722 478.623 2.233 2.096 137 2,3 4,7 0,3 413 212 3.494

65-74 592.345 266.782 325.563 804 789 15 1,4 3,0 0,05 737 338 21.704

75 y + 301.300 119.946 181.354 137 134 3 0,45 1,1 0,07 2.199 895 60.451

Total 10.865.408 5.382.182 5.483.226 24.305 18.989 5.316 2,2 3,5 1,0 447 283 1.031

* Según datos del Censo Nacional de Población 1980.

Page 9: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

Desde 1936 hasta 1939, mi padre fue cirujano princi-pal en el Ejército Republicano Español. Por lo tantotengo razones, tanto personales como profesionales,para agradecer con todo el corazón esta oportunidadde presentar una visión de la práctica médica generalen Gran Bretaña a este 9º Congreso de la AsociaciónMédica Internacional para el Estudio de las condicio-nes de vida y de Salud (AMIEV).

¿CONTRIBUYEN LOS MÉDICOS A LA SALUD?El nombre de la Asociación muestra que AMIEV reco-noce las conexiones causales entre salud-condicio-nes de vida y de trabajo y cree que los trabajadoresde la medicina pueden prestar una contribución espe-cial a la salud. Presumiblemente, la Asociación no veconflicto entre estas dos creencias. Sin embargo, aunen estos tiempos de una ciencia médica relativamen-te madura, este punto de vista es cuestionado. IvanIlich, por ejemplo, ha vendido varios millones deejemplares de su libro Némesis Médica1, que se ini-cia con la siguiente frase: “La Institución Médica se hatransformado en el mayor peligro para la salud”.

El libro termina con el siguiente párrafo:«El verdadero milagro de la medicina moderna esdiabólico. Consiste en hacer sobrevivir no sólo aindividuos sino a poblaciones enteras a nivel desalud personal inhumanamente bajos. La NémesisMédica es la retroalimentación negativa de unaorganización social que propone mejorar e igualar laoportunidad para cada hombre de ganar autonomíay que termina destruyéndola».

Como yo continúo desempeñándome comomédico general en la pequeña villa minera galesa,donde trabajo desde hace 22 años, obviamente noestoy de acuerdo con Ilich; pero aunque estoy segu-ro de que los médicos pueden hacer una contribu-ción neta positiva a la salud de la población, mi certe-za es menor en cuanto a que en realidad lo hagan por

la forma en que actualmente están organizados en lamayor parte del mundo. Si se observa atentamente elCuadro Nº 1 (página siguiente), se compartirá, creo,mi inquietud.

El cuadro muestra la relación entre el númerode médicos por 10.000 habitantes y la mortalidadinfantil, estandarizada para PNB/cápita en 18 paísesdesarrollados. Como puede verse, cuanto más médi-cos hay, mayor es la mortalidad infantil, y debe llamarla atención que análisis más detallados de estosdatos muestran que la combinación peor es un núme-ro de médicos con un sistema mercantil de atenciónmédica. La asociación parece ser verdadera entrepaíses, pero no en el interior de los países; las áreasde alta mortalidad infantil en los países tienden atener concentraciones más bajas de médicos en lamayoría de los países estudiados. Así, parece pocoprobable que muchos médicos estén realmentematando más pacientes que los que salvan. Pero laconclusión parece ineludible, en cuanto a que losmédicos, en la mayoría de estos países están traba-jando de manera no efectiva.

Un médico promedio en Francia gana 7 veces,en USA 5,6 veces, en Suecia 3,5 veces y en GranBretaña 2,7 veces más que el trabajador productivomedio en cada uno de estos países. Si los médicosdesean mantener este status tan alto, necesitan produ-cir mejores evidencias de que su trabajo es efectivo.

¿PUEDEN LOS MÉDICOSCONTRIBUIR A LA SALUD?Habiendo convencido a ustedes, espero, de que estono es una cuestión sin importancia, permitan asegu-rarles que tenemos evidencia excelente, científica-mente controlada, que nos da una respuesta clara,aun cuando la misma proviene de una fuente inespe-rada y no es aún generalmente reconocida. ElPrograma de Detección y Seguimiento de la hiperten-

El médico general y la atenciónmédica primaria *

Julian Tudor Hart **

* Traducido de las actas del IX Congreso de la Asociación Médica Internacional para el Estudio de las Condiciones de Vida y de Saludrealizado en Barcelona, 1-3/VI/83.

** Delegado Oficial del Royal College of General Practitioners (Gran Bretaña).

Page 10: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

2 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

sión de USA (HDFP)5 fue iniciado en 1973 para res-ponder a la pregunta: “¿el tratamiento antihipertensi-vo produce más beneficio que daño en la hiperten-sión límite (presión diastólica entre 90-99 mm Hg)?”.Como todos saben, la manera correcta de hacer estoes iniciar un ensayo controlado al azar sobre unamuestra aleatoria de la población y comparar el efec-to de un placebo con el efecto de drogas antihiperten-sivas con relación a la evolución final en accidentecerebro-vascular y enfermedad coronaria.Desafortunadamente, para esa misma época cercade 3 de cada 4 médicos en EEUU, estaban ya tratan-do la hipertensión límite y ya era considerado no éticoplantear esta cuestión de manera científica. Comousualmente sucede la ciencia prepara el camino parael comercio y hubo que adaptarse a un diseño dife-rente. En lugar de comparar el tratamiento a base dedroga con placebo, el HDFP, comparó el efecto de laatención común disponible para las poblaciones máspobres de las grandes ciudades, brindada por unamezcla inmedible e inplanificable de cardiólogos enformación, cardiologoides (cardiologoids *) médicosde familia y salas de emergencia hospitalaria y clíni-cas con relación al efecto de un servicio gratuitoespecialmente creado (atención médica) que trabajacon un protocolo riguroso, en el cual se hicieronesfuerzos especiales para alcanzar la totalidad de lapoblación en riesgo y mantener contacto con elladurante los 5 años del estudio. Este servicio especialaunque se llevó a cabo para hipertensión, brindóapoyo médico primario más general. Los sujetos parael estudio fueron originalmente extraídos de lasmuestras aleatorias de las poblaciones urbanas en

distritos pobres y ubicados al azar en los dos tipos deatención médica.

Los resultados fueron sorprendentes. Los suje-tos hipertensos tratados por el programa de atenciónmédica presentaron 45 % menos muertes por acci-dente cerebro-vascular; 2,6 % menos por enfermedadcoronaria y 14 % menos muertes por otras causas nocardiovasculares, que los sujetos que por azar recibie-ron atención médica mercantil común. Creo que estomuestra claramente que los trabajadores de la salud(no necesariamente médicos: la mayoría de las aten-ciones en el sistema “HDFP Step Care” fueron dadaspor enfermeras generales), pueden trabajar muy efec-tivamente si están adecuadamente organizados paracubrir las necesidades de salud de la gente.

Esto es particularmente cierto para las pobla-ciones pobres. En el ensayo de HDFP, los grupos másdesprotegidos fueron los que más se beneficiaron conel servicio especial, en comparación con la atenciónordinaria; el 77 % de la diferencia en muertes se debióa sujetos negros, aunque ellos constituían solamenteel 44 % de la población; mientras que, para las muje-res blancas, no hubo diferencia estadísticamente sig-nificativa6. Creo que el HDFP nos dice poco sobre eltratamiento de la hipertensión leve (aún el grupo deAtención Programada tuvo una mortalidad por todaslas causas dos veces más alta que los hipertensos sinningún tratamiento del estudio australiano, hecho almismo tiempo, sobre los mismos grupos de edad y auna presión arterial promedio ligeramente más alta)pero no dice mucho sobre los servicios de salud. Unaatención adecuadamente organizada, dada de unamanera amistosa y personal, que hace al paciente

* Un cardiologoide es un médico general que intenta especializarse sin un sistema de referencia.

10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20Médicos por mil habitantes

6

4

2

0

-2

-4

-6

-8Resid

uales

dem

orta

lidad

infan

tilde

spué

sdel

ajuste

porP

NB

CUADRO N° 1: Relación entre mortalidad infantil y número de médicosen 18 países desarrollados normalizados por PNB/ cápita

Alemania OccidentalItalia

Austria

Bélgica EEUU

Francia

Canadá

Suiza

Irlanda

Nueva Zelanda EscociaDinamarca

Noruega

EDW

Países Bajos

Australia

Suecia

Finlandia

Page 11: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

3El médico general y la atención médica primaria

más importante y a la atención médica más accesible,realmente puede disminuir las tasas de mortalidad porla mayoría de las causas y reducir la mutilación porenfermedades crónicas como el accidente cerebro-vascular. Enfrentar la atención médica con el mejora-miento del ambiente como alternativas políticas o eco-nómicas (como Ilich y otros pseudo-radicales lohacen) es completamente falso.

LO QUE ESTAMOS HACIENDOEncerrada en nuestras escuelas médicas, laInstitución Médica asume que una vez establecidaalguna verdad clínica en dichos centros de excelen-cia, su eventual aplicación (y aplicabilidad) en la peri-feria puede considerarse garantizada. Los docentesespecialistas de hospital enseñan lo que saben, ysaben mucho, pero de nuestros problemas diarios enla periferia, saben muy poco. Son también ignorantesde la población general de la que provienen suscasos. Es muy posible que un estudiante de medici-na imagine que dado que en una sala particular demetabolismo el tumor de la paratiroides es común,verá esta enfermedad en la población general. Enrealidad, probablemente no verá un solo caso en todasu vida profesional. Aislados de la población someti-da al riesgo, los especialistas pueden desarrollar lamisma restringida visión y aún los internistas genera-les saben más sobre lo que constituye su carga detrabajo (lo que hacen) que sobre las necesidades queno demandan o que no son reconocidas (lo que nohacen).

La pregunta que surge es ¿cómo está realmen-te distribuida la atención médica? El Gráfico 2 mues-tra la proporción de individuos de una muestra alea-toria (estudio de la OMS en varios centros), que habí-an consultado por presión arterial alta durante los últi-mos tres meses9. La diferencia que se observa entreindividuos con presión casi normal y aquéllos conhipertensión severa, es pequeña.

Esto coincide con estudios hechos en GranBretaña que muestran, por ejemplo, que menos de lamitad de los hombres entre 40 y 49 años de edad sehabían hecho controlar la presión por el médico defamilia durante los 10 años previos10. Ciento cincomuertes hospitalarias relacionadas con la hiperten-sión en personas menores de 50 años, el 27 % habíapadecido hipertensión antes de la enfermedad final,en el 20 % había sido reconocida pero no tratada y enel 51 % había sido tratada pero no controlada; sola-mente el 2 % había sido tratada y controlada11.

Tomemos otra enfermedad común, la diabetes.Un estudio de un grupo grande de más de 20.000pacientes mostró que el 21 % de los diabéticos cono-cidos estaban recibiendo atención regular de sumédico de familia, el 24 % estaba bajo atención enclínicas hospitalarias, el 3 % había repartido la aten-ción entre ambos sistemas y no menos del 52 % nohabía recibido supervisión regular de parte de ningu-no12. No hubo diferencias en la severidad de la diabe-tes, entre quienes habían recibido supervisión y quie-nes no.

Estos y otros datos relacionados con enferme-dades tan comunes y graves pero tratables como elasma, la bronquitis crónica obstructiva, la epilepsia yla esquizofrenia, sugieren que casi la mitad de laatención médica que debiera darse, no está realmen-te siendo prestada. En algunos lugares y para algu-nas enfermedades este problema es mayor o menorpero, en general, creo que es lo mismo. La diferenciaentre buenos y malos médicos no está en que losbuenos médicos hacen todo lo que se necesita y losmalos no; los únicos médicos que yo haya conocido,que posiblemente estuvieran haciendo todo lo nece-sario (o aun quizás más de lo necesario) trabajan ensituaciones tan poco frecuentes y anormales comopara no interesar al mundo real. La verdadera dife-rencia reside en que los buenos médicos reconocenhonestamente sus omisiones mientras los malos lasocultan.

Estas omisiones raramente surgen por falta deherramientas técnicas. Las mismas se producen prin-cipalmente debido al escaso contacto con la pobla-ción sometida al riesgo. Los médicos asumen que lagente que necesita atención, la solicita; y dado quelos médicos de la periferia de la medicina estánusualmente sobrecargados de trabajo y con escasopersonal, demasiada gente demanda atención y losmédicos no tienen interés en buscar las necesidadesinsatisfechas, a no ser que, por supuesto, las mismasestén acompañadas por honorarios. Para el médicode familia de la periferia, cuando la atención médicaes completamente accesible a la población, sin barre-ras financieras, las demandas parecen siempremayores que las necesidades y las necesidades sonmayores que los recursos. Solamente un tonto buscamás trabajo en tales circunstancias y el necesarioestilo de “atención anticipada” no puede surgir. Elmédico de familia se transforma en un satisfactorpasivo de la demanda, no en un investigador activode las necesidades a pesar de que sólo él tiene la for-mación necesaria para reconocerlas con seguridad yresponder a ellas en forma económica13.

MEDICINA DE BASE Y DE VÉRTICEExcepto en las situaciones de pago por acto médicoel profesional de familia trata de reducir su contacto almínimo con la población a cargo; tiene ya demasiadoque hacer. A diferencia del especialista de hospital,vive y trabaja cerca de la base. La población estácerca y es bastante grande, la ciencia médica estámuy lejos y es muy pequeña. Si queremos que laciencia médica llegue a toda la gente, el médico defamilia está en el lugar correcto para hacerlo, pero suorientación está equivocada.

En todos los países desarrollados antes estu-diados, alrededor de los 2/3 de la población consultaa alguna clase de servicio de atención primaria almenos una vez al año, y más del 80 % hace contac-to al menos 1 vez en 5 años14. Estos contactos inicia-les con el paciente podrían usarse para dar un con-tacto personalizado, óptimamente efectivo con casitoda la población, si las clínicas gratuitas no fueran

Page 12: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

4 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

cintas transportadoras impersonales, o si, en los ser-vicios pagados, no hubiera una confusión intermina-ble entre necesidades biológicas y sociales delpaciente y necesidades económicas del médico.

Es más fácil comprender este problema y susolución si observamos los Cuadros Nº 2 y 3. ElCuadro Nº 2 representa la profesión médica comouna pirámide. Muchos son llamados pero pocos sonelegidos. En el vértice están los consultores docentesde hospital, líderes del pensamiento médico, modelosde generación tras generación de estudiantes. Allí nohay demasiados pacientes, allí hay mucho tiempopara dedicarles y ellos están muy agradecidos por elprivilegio de estar allí, donde todo lo que puedehacerse será hecho. Para un médico llegar al vérticede la pirámide le requiere un enorme esfuerzo y unasola ambición en la mente y los menos capaces natu-ralmente caen hacia la base donde está la gente perofalta tiempo, el personal y los recursos para unabuena atención clínica.

La pirámide no sirve. Sus logros son muy esca-

sos y su costo inmenso. Da la idea de que solamen-te unos pocos pueden ser creativos, que solo algunasenfermedades son interesantes, que la población queestá en la base puede ser ignorada y atendida pormédicos entrenados para ser especialistas de hospi-tal pero incapaces de obtener puestos hospitalarios.Como un ejercicio más fácil de lograr en el papel queen la vida real, volquemos la pirámide como lo mues-tra el Cuadro Nº 3.

La pirámide se ha transformado en un planoinclinado, que corresponde mejor a la realidad. Losmédicos, en lugar de caer por inercia hacia la pobla-ción base, se deslizan naturalmente hacia la especia-lidad hospitalaria, limitados en número solamente porla disponibilidad de cargos. En todos los países coningreso planificado a las escuelas de medicina y, porconsiguiente, restringido, solamente pueden accederestudiantes con muy buenos resultados en los exáme-nes de ingreso. Solamente de esta manera puedenseguir aprobando exámenes. Su formación transcurri-rá casi totalmente en hospitales y estará a cargo de

Cuadro Nº 2: La pirámide de la jerarquía profesional

Cuadro Nº 3: El plano inclinado de la realidad social

Page 13: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

5El médico general y la atención médica primaria

especialistas. Para llegar a ser un biólogo humanoresidente en un lugar real con gente real que adaptelos descubrimientos de la ciencia a las necesidadeslocales de salud necesita una capacitación que nopuede ser dada en un hospital: una imaginación ágil yuna capacidad para hallar y actuar como lo hace elpueblo. Entonces, aquéllos que quieren penetrar acti-vamente en la población base y encontrar sus necesi-dades de salud son quienes tienen que remar contrala corriente, quienes tienen que aprender cómo haceruso de la ciencia más que simplemente repetirla.

Por supuesto, en la realidad no existen ni unapirámide ni un plano inclinado, y la especialidad hos-pitalaria es esencial para una atención efectiva. Sinembargo, podemos hacer caso omiso de sus protes-tas frente a nuestra posición por dos razones: en pri-mer lugar porque los especialistas mantienen aún supoder social, el control de las instituciones médicas,la asignación presupuestaria para personal, edificiosy equipamiento y porque controlan también la ideolo-gía de la enseñanza de pregrado y las principaleslíneas de investigación.

En segundo término, porque los especialistasno pueden especializarse y porque no se puede usarla tecnología en forma segura o económica sin unasólida base de atención primaria capaz de seleccio-nar con mayor probabilidad a quienes pueden serrecuperados con investigaciones escasas y costosas.

UNA NUEVA CLASE DE MÉDICOSEn varios países desarrollados son inminentes oestán en camino, cambios estructurales en los siste-mas de atención médica que pueden facilitar o impe-dir el desarrollo de vínculos más estrechos entremédicos primarios y sus pacientes. Pese a los seriosproblemas que presenta el British National HealthService (NHS) causados principalmente por cortes enel gasto público y rebrote de la práctica privada, nues-tra experiencia continúa atrayendo la atención en elextranjero, no siendo lo menos importante su costo-efectividad relativamente bueno. Gastando solamen-te alrededor del 5 % de nuestro PBN en toda nuestraatención médica (pública y privada) mientras que segasta aproximadamente el 10 % de un PBN per cápi-ta en Francia, la República Federal de Alemania, losPaíses Bajos, Suecia y EEUU. Antes de que fueraelegido el actual gobierno (principalmente debido alreclamo de que los impuestos eran excesivamentealtos), Gran Bretaña tenía menos gravámenes impo-sitivos que Francia, Alemania Occidental, los PaísesBajos y Escandinavia. Nuestro NHS es (para losestándares internacionales) barato y bastante efecti-vo. Pese a tener el más bajo PNB de la ComunidadEconómica Europea, excepto la República de Irlanda,estamos cuartos en el ranking de los índices de mor-talidad estandarizados por edad de todo el mundo(por debajo de Suecia, Países Bajos y Suiza14, 15.

La atención médica es dependiente de la cultu-ra. Las naciones pueden aprender unas de otrassolamente en los extremos, en los más finos detallesde la clínica o en las mayores medidas del cambiosocial. Gran Bretaña ha experimentado dos cambiosfundamentales en la profesión médica que son creo,de real significación internacional. Ellos son suma-mente interesantes porque sus verdaderos efectos nofueron planificados ni anticipados.

¿PUEDE EXISTIR UNA VIDA INTELIGENTEFUERA DE LOS HOSPITALES?El primer cambio y el más obvio fue la clara divisiónde la medicina británica entre especialistas que traba-jaban en hospitales y los médicos generales que tra-bajaban en la comunidad conectados entre sí sólopor medio de mecanismos formales de referencia.Esto comenzó antes de la 1ª Guerra Mundial y secompletó después de la Segunda Guerra con la cre-ación del Servicio Nacional de Salud (NHS), en 1948.Los orígenes de esta división han sido bien descrip-tos e interpretados por Stevens16; sus últimos des-arrollos han sido bien documentados pero ciertamen-te mal interpretados por Honigsbaum17.

Después de 1948, los médicos de familia britá-nicos fueron completamente eliminados de la aten-ción de sus propios pacientes en el hospital, en todaspartes, excepto en algunas pequeñas áreas rurales.Tenían dos alternativas; aceptar que esto era el finalde una medicina clínica seria en la práctica general yenfrentar una vida mediocre bastante bien remunera-da; o desarrollar alguna ideología médica nueva parala cual la base de especialista de hospital fuera inne-cesaria e irrelevante. Este segundo camino fue toma-do por los fundadores del Colegio (hoy el ColegioReal) de médicos Generales en 1952, calificadocomo año I. Su propósito era simplemente salvar elhonor y autorrespeto del médico general británico,pero casi con sorpresa para ellos mismos esto lesllevó a aceptar y aún a recibir bien la realidad social;un desusado desarrollo de la organización médicacon base masiva, como el que tiene hoy el RCGP **(del que son miembros alrededor de 1/3 de todos losmédicos de familia británicos).

La práctica general británica tiene ahora unaideología coherente independiente18, un estatuto,una pasantía de post-grado de capacitación en servi-cio, financiada por el Estado, controlada y administra-da por los mismos médicos de familia19 y es la carre-ra de elección preferida por cerca de la mitad denuestros estudiantes de medicina. No creo que hubié-ramos podido alcanzar ninguno de estos objetivos sino nos hubiéramos visto compelidos por las circuns-tancias. Creo que nuestra experiencia muestra quelos hospitales no son el único lugar donde puedeaprenderse y practicarse una buena medicina clínicaporque en los mismos sólo encontramos una parte

** Colegio Real de Médicos Generales.

Page 14: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

6 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

(aunque importante) de los procesos que conducen aenfermarse o mantenerse sano.

No luchamos para permanecer en los hospita-les, dejémoslos a los especialistas verdaderos y este-mos satisfechos de tener la oportunidad de desarro-llar la atención de la comunidad.

CONTINUIDAD DE LA ATENCIÓNLa segunda lección es, pienso, menos obvia, menosaceptada y menos comprendida. Debido a que tene-mos listas de pacientes registrados y a que nuestrosingresos no están ligados estrechamente a procedi-mientos e intervenciones, los médicos de familia británi-cos podemos mantener la continuidad de la atención,podemos identificar una lista definida de personas conriesgos y podemos desarrollar una responsabilidadorganizada frente a ello con revisión sistemática delcumplimiento de su trabajo. Retomando los ejemploscitados de alimentación, de atención incompleta dehipertensos y diabéticos que son, creo, característicasde la mayoría de las condiciones crónicas, dicha res-ponsabilidad personal organizada es seguramente lallave para mejorar la evolución de los pacientes.

Digo que “podemos”, no que siempre, ni aúnusualmente “lo hacemos”. Dado que hemos tenidoque desarrollar nosotros mismos nuestro liderazgocon poco apoyo efectivo por parte de la administra-ción de NHS, excepto en el terreno de la capacitaciónde post-grado, la regla general es aún la pasividad yla excepción, la atención activa y planificada de lapoblación. No obstante la minoría activa está crecien-do rápidamente y sus ideas mantienen la iniciativa enel pensamiento médico corriente.

Creo que la mayoría reconoce hoy que la aten-ción médica por pago de honorarios por acto médicodificulta activamente este desarrollo. La atención pri-maria orientada hacia la población en Gran Bretañapuede ser una penosa lucha, pero al menos nuestrosistema de pago no la hace imposible. Con una mul-titud de controles antieconómicos, puede llegar a serposible restringir los servicios pagados por honorariosa lo que sea útil y necesario para el paciente, en lugarde permitir un crecimiento ilimitado para maximizarlos ingresos médicos; pero un planeamiento de aten-ción prolongada para la población es claramenteimposible de un sistema de libre mercado.

Tradicionalmente, el servicio asalariado ha sidoa dedicación parcial, con escasez de personal y equi-po, y atención personal discontinua. Frecuentementeha empleado médicos con interés económico endemostrar la realidad inferior de la atención estatalcomparada con la práctica privada. Si los planificado-res dieran real prioridad a la continuidad personal dela atención y a la dedicación completa al serviciopúblico, sería posible dar a las clínicas estatales unrostro humano interesado. Las experiencias de aten-ción primaria asalariada de la Provincia de Quebec yde Oslo central merecen un estudio cuidadoso que sehace difícil por la aparente resistencia de las publica-ciones médicas británicas importantes a admitir suexistencia. No obstante el rechazo de los médicos de

familia en la mayoría de los países a aceptar el traba-jo a sueldo, es comprensible si vemos los ejemplosque les son más familiares, donde los administrado-res parecen estar preocupados principalmente porobtener un servicio barato para los pacientes y unavida tranquila para ellos mismos. Todavía tenemosque aprender que el libre acceso a la atención médi-ca es solamente el comienzo, que debe estar segui-do inmediatamente por el esfuerzo para terminar conla barrera del estilo impersonal de atención habitual-mente asociado con las clínicas para la clase trabaja-dora. Cuando vemos la prontitud con la que los médi-cos de familia abandonan la continuidad en las ciuda-des, los gobiernos deben ser perdonados por consi-derar todo el planeamiento como retórico, como unintento de mantener un pasado perverso transfor-mándolo en algo sentimental.

Aun si preguntamos a los pacientes, encontra-mos que la continuidad es importante, vital para laatención, no solamente de las enfermedades cróni-cas y de la infelicidad, sino para la atención de la con-dición más crónica, la salud en su totalidad. El usoefectivo, seguro y económico de las poderosas armasde la ciencia médica contemporánea dependerásobre todo de una sólida base de atención primaria,cubierta no por médicos comerciantes, sino por hom-bres y mujeres capaces de aplicar los principiosgenerales de la ciencia médica a los problemas espe-cíficos, locales, personales de la gente real en comu-nidades reales, traduciendo el difícil lenguaje de lamedicina experimental y de la epidemiología al cálidoidioma de la vida diaria y suficientemente seguros delvalor de su trabajo, de que ellos son capaces hones-tamente de medir su trabajo y considerar sus defec-tos. El mundo necesita un nuevo tipo de médico quecombine habilidades clínicas con habilidades enmedicina de la población, capaz de liderar un equipode trabajadores de la salud con sensibilidad e imagi-nación y con suficiente lealtad hacia los pacientescomo para permanecer en un lugar y considerar suempleo permanente. Este propósito será muy difícilde alcanzar. Al discutir la estructura de nuestro siste-ma propio de atención primaria, espero que nuestrosmédicos hagan todo lo posible para hacer la tareamás fácil, en lugar de más difícil o imposible.Entonces podremos todos esperar el día en que lospaíses blasonen menos de sus centros de excelenciay tengan más orgullo en la calidad de su periferiadonde la ciencia médica pueda brindarse en toda suplenitud al conjunto de los seres que la necesitan.

REFERENCIAS1. Ilich I (1976). Limits to medicine. Medical nemesis: the

expropriation of health. Marion Boyars, London.2. Cochrane AL, St. Leger AS, Moore F (1978). “Health servi-

ce ‘input’ and mortality ‘output’ in developed countries”.Journal of Epidemiology and Community Health, 32: 200-205. This paper includes a full discussions of the data, butnot the illustration.

3. Cochrane AL (1979). “1931-1971: a critical review with refe-rence to the medical profession”. In Medicine in the year2000. Office of Health Economics, London. This containsthe illustration and further discussion.

Page 15: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

7El médico general y la atención médica primaria

4. Maxwell RJ (1982). Health and wealth. Lexington Books.Lexington, Ma. The comparisons of doctor and workersincomes ate also given in a histogram in Compendium ofHealth Statistics 1979. Office of Health Economics,London.

5. Hypertension Detection and Follow-up ProgramCooperative Group (1979). “Five-year findings”. Journal ofthe American Medical Association 242: 2562-2577.

6. WHO/ISH Mild Hypertension Liaison Committee (1982).“Trials of the treatment of mild hypertension, an interimanalysis”. Lancet 1: 149-156.

7. Hart JT (1982). “Measurement of omission”. British MedicalJournal, 285: 1686-1689.

8. “Framingham Monograph Nº 30”. Reproduced in ArterialHypertension, ed. Gross F, Robertson JIS. Pitman MedicalLondon, 1979, p. 146.

9. Strasser T, Dowd E, Duppenthaler J (1979). “Mild hyperten-sion in the community”. In Mild hypertension natural historyand management, ed. Gross F, Strasser T. Pitman Medical,London, p. 34.

10. Fleming DM, Lawrende MSTA (1981). “An evaluation ofrecorded information about preventive measures in 38practices”. Journal of the Royal College of GeneralPractitioners 31: 615-260.

11. Whitfield AGW (1981). Young medical deaths their causeand prevention. Update, February: 1249-1254.

12. Doney BJ (1976). “Audit of cate of diabetes in a group prac-tice”. Journal of the Royal College of General Practitioners,26: 734-742.

13. Hart JT (1981). “A new kind of doctor”. Journal of the RoyalSociety of Medicine, 74: 871-883.

14. Anderson O (1972). Health care each there be equity. JohnWiley, New York.

15. Abel-Smith B (1981). “Health caring cold economic clima-te”. Lancet, 1: 373-376.

16. Stevens R (1966). Medical practice in modern England: theimpact of specialisation and state medicine. Yale UniversityPress, New Haven, Ct.

17. Honingsbaum F (1979). The division in British medicine. StMartin’s Press, New York.

18. Horder JP (1977). “Physicians and family doctors: a newrelationship”. Journal of the Royal College of GeneralPractitioners, 27: 391-397.

19. Cameron AG (1982). “Mandatory training; the case infavour”. British Medical Journal, 285: 781-782.

20. Acheson D (chairman) (1981). Primary health care in innerLondon, Report of a study group commissioned by theLondon Health Planning Consortium LHPC, London.

Page 16: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

INTRODUCCIÓNLo social en relación con los problemas de enferme-dad y su curación fue siempre, más o menos clara-mente, planteado desde la historia del hombre. Perosu consideración fue dilatándose y adquiriendo defini-ción en el curso del tiempo, especialmente aceleradodurante el siglo XIX hasta obtener, a comienzos delXX, visos de personalidad propia con la “medicinasocial”1.

Desde entonces el estudio de los factoressociales que influyen en las cuestiones médicas haido profundizando conocimientos sobre las interrela-ciones: demografía y salud; trabajo y salud; economíay salud; educación y salud; etc. hasta llegar a unencuadre global que puso a la salud y su atenciónentre las condiciones para, y a la vez consecuenciade, un necesario desarrollo socioeconómico, políticocultural de los pueblos, y como expresión definitoriade bienestar social.

Y lo que al principio pudo ser concebido comoun enfoque especializado de los conocimientos enmedicina hubo que llegar a concebirlo como la matrizintegradora obligada de la correcta interpretacióncientífica de la salud del hombre y, por supuesto, delas actividades dedicadas a su promoción, proteccióny recuperación y a la organización de esas mismasactividades.

Tal es el significado que condensa, en suma, ladefinición que adoptó la asamblea de la OrganizaciónMundial de la Salud en su Carta Magna en 1948, alentender la salud “como el estado de completo bien-estar físico, mental y social, y no solamente la ausen-cia de afecciones o enfermedades”.

Entre las influencias que reforzaban esta con-cepción contribuyó el análisis de las condiciones devida y de trabajo en los países llamados subdesarro-llados y en vías de desarrollo, que fue poniendo énfa-sis en la necesidad del desarrollo socioeconómico

para superar los intrincados problemas de pobreza yenfermedad.

Desde la década del 50 los trabajos en la mate-ria de salud pública o administración de la salud y lasreuniones internacionales pusieron cada vez mássobre el tapete las interrelaciones mencionadasadquiriendo su máxima expresión, tal vez, en la déca-da del 60 en que las mismas conferencias mundialessobre Educación Médica se referían a la relación“desarrollo económico y formación médica”2.

LOS CONGRESOS ARGENTINOSLos congresos de medicina social promovidos y orga-nizados, desde hace casi medio siglo, por los médi-cos organizados argentinos, han tenido la virtud, encierto modo adelantada en los primeros años, delograr la convergencia de lo médico gremial con lasexigencias de un desarrollo de la salud pública en elcrisol de la medicina social.

En un relato oficial al 8° Congreso MédicoSocial Panamericano sobre “Papel de la profesiónmédica” al historiar COMRA el origen de las gremia-les, expresa “que en el segundo cuarto del presentesiglo el médico advirtió que surgían ante sí dos pro-blemas: la necesidad de defender su profesión paraque no dejara de ser la fuente digna de recursos quehasta entonces había sido y la de contribuir a solucio-nar males que se manifestaban a través de los enfer-mos pero que en gran parte tenían profunda raigam-bre social”3.

Es así que mientras se organizaban los médi-cos argentinos en sus entidades gremiales represen-tativas federadas, en sus reuniones centrales nodejaban de aparecer, junto a los temas puramenteprofesionales, los problemas sanitarios y sociales.

Que esto no fuera categórico y lineal se evi-dencia en la inseguridad de la denominación de loscongresos que realizaban las entidades nacientes. Ya

Los Congresos Médico Socialesargentinos *

Italo V. Elena **

* Recibido para su publicación el 10/8/83.** Dr. Italo V. Elena: Médico Sanitarista. Buenos Aires, Argentina.

Page 17: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

2 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

Congreso Gremial Médico (el primero en 1934) yaCongreso Médico Social Argentino (2° gremial y 1°social en 1936) ya Congreso Argentino Sanitario y deMedicina Social (en 1942).

En el Congreso de 1936, de Rosario, es sufi-ciente la enumeración de sus temas para comprobarla tendencia y reconocer también que muchas preo-cupaciones expresadas entonces tienen igual omayor validez en la actualidad. Son algunos de ellos:1) Condiciones bio-sociales del pueblo en las campa-ñas y ciudades. 2) Condiciones de la asistencia médi-ca en la ciudad y en la campaña. 3) Las condicionessanitarias del país según las regiones. 7) Unificacióny coordinación de los servicios de asistencia médica.10) Orientación de la sanidad y previsión social.Seguros sociales. 11) Organización de los estudiosmédicos de acuerdo con las necesidades actuales.12) Organización nacional de médicos4.

Se dice en la ponencia sobre Seguro de saludaprobada por este Congreso:

«1°) La situación económica de los trabajadoresasalariados, y la gran mayoría de los pequeños agri-cultores, empresarios y profesionales llamadoslibres, les hace imposible proveer por sí solos parael caso de incapacidad causada por las enfermeda-des agudas o crónicas y la asistencia que ellasrequieren, así como para la incapacidad causadapor la vejez o los accidentes de trabajo.2°) La asistencia social es insuficiente para atenderestas necesidades. Ella es además deprimente parael asistido y por la escasez de sus recursos relativa-mente a las necesidades a que debe hacer frente, yse realiza en gran parte a expensas de los médi-cos». [...]

Siguen otros once puntos en los que se propo-ne y condiciona un seguro social de cuyas conclusio-nes e indicaciones podríamos ahora afirmar que sucumplimiento tal vez hubiese ahorrado al país cua-renta años de ineficiencia política sanitaria y dereplanteos permanentes de idénticos problemas sinsolución5.

Es que todo el proceso de administración de lasalud y asistencia médica no ha podido sustraerse delos vaivenes de un proceso nacional harto complejodonde la política de salud ha estado casi siempre, sino siempre, subalternizada ante otras prioridades dis-cutibles de la política gubernativa. Volveremos sobreesto.

Uno de los aspectos resultantes, contradictorioen más de un enfoque, fue que mientras nuestramedicina clínica alcanzaba altos niveles de prestigio,especialmente en su desarrollo en los hospitalespúblicos, no se daba en el país una planificación sani-taria ni medianamente racional y aumentaban las difi-cultades de asistencia para la población, en especialpara los sectores populares6.

Y fueron las demandas asistenciales insatisfe-chas que actuaron como estímulo fundamental paraque proliferaran las mutualidades y bien pronto (déca-da del 40) las obras sociales.

Los congresos médicos sociales de esos años

tomaron esos temas forzosamente, porque estabanen la preocupación de la población y de los médicos.

El Tercer Congreso Médico Gremial de la RA(Córdoba 1950) trató los siguientes temas:Agremiación - Jubilación - Mutualidades: su relacióncon los médicos - Compañías de Seguros: su relacióncon los médicos - Condiciones para los convenios7.

Pero el 4° Congreso (Paraná, 1952) y el 5°(Mar del Plata, 1954), a pesar de titularse solo médi-co gremiales tuvieron como temas centrales:

“Planificación sanitaria nacional y AsistenciaMédica en relación con el estado sanitario y económi-co de la población”8.

El 6° Congreso, todavía titulado médico gre-mial (San Luis, 1957), estuvo centrado en los temas:“Asistencia mutualizada y Seguro Nacional de Salud”y “Normas futuras de la Asistencia Mutual”.

Surgió de sus conclusiones “que las obrassociales y mutualidades no estaban en condicionespara atender en forma eficiente la prestación basadaen el concepto de seguro de salud”8.

Entre las declaraciones de este Congresotranscribimos textualmente:

«El VI Congreso Médico Gremial Arg. ante la convo-catoria de la Asamblea Nac. Constituyente y consi-derando de vital importancia la inclusión delDerecho a la Salud de los habitantes de la Nación yde las medidas que lo garanticen, declara:1°. Realizar una campaña de divulgación encamina-da a hacer conciencia en la ciudadanía de esteDerecho.2°. Dirigirse a la Asamblea en oportunidad de suconstitución solicitando se incluya en la CartaMagna dicho derecho»9.

Este Congreso imbuido de la importancia deltema Seguro de salud concluye proponiéndolo comotema central de un próximo “congreso extraordinarioa realizarse en un plazo no mayor de un año”.

Efectivamente, el congreso siguiente: VIICongreso Argentino de Medicina Social tuvo por temaúnico “Seguro de salud en la República Argentina”pero se realizó ocho años después (Rosario, 1965)10.

De los VII y VIII Congresos hemos hecho unanálisis conceptual en 1971 publicado con el títuloPrincipios y Proposiciones de los Médicos para unapolítica Sanitaria4.

Para nosotros, en ellos se va delineando cadavez con mayor profundidad y esclarecimiento unaconcepción de los problemas de salud, enfermedad yorganización de la atención médica que se fecundacon la congruencia de los tres aspectos que ya seña-lamos: la salud pública, la medicina social con el gre-mialismo médico.

El VII Congreso, ya lo hemos dicho, trató elseguro de salud, En él “se dio intervención no sola-mente a entidades médicas sino también a lasempresarias, obreras, estatales y de otras profesio-nes del arte de curar que pudieron aportar sus puntosde vista colaborando en los grupos de trabajo en quese dividió la consideración de los siguientes aspectosdel Tema Central: Doctrinarios - Jurídicos y

Page 18: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

3Los Congresos Médico Sociales argentinos

Legislativos - Financieros - Administrativos yOrganizativos - Profesionales y Estructura de lasprestaciones. Estos diversos aspectos fueron trata-dos en profundidad expresando sus conclusiones lamadurez alcanzada en ellos y canalizando las aspira-ciones gremiales hacia soluciones concretas”8.

El VIII Congreso (Villa Carlos Paz, Córdoba,1967) abordó un temario muy ambicioso: “I. La Saluden función del desarrollo económico. II. Organizaciónde la Salud y su Financiación, III. Problemas de losProfesionales Médicos. IV. La Enseñanza de laMedicina en relación con los Problemas de Salud enla República Argentina”.

En algunas de las conclusiones sintetizamos laconcepción general que se nutrió de las entusiastasdiscusiones habidas en los grupos de trabajo.

En el Tema I:1— Que una interpretación del desarrollo económi-

co desde el ángulo del interés de la salud,exige que el mismo tenga un claro sentidosocial y nacional, debiendo tomarse medidasque actúen sobre todas las etapas del proceso,en particular sobre los factores de producción,la distribución de la riqueza y las estructuraseconómicas básicas.

2— Que para lograr este propósito, se debe apoyarla planificación de la economía y, dentro deella, la planificación de la salud al par quemedidas de tecnificación y una política imposi-tiva, presupuestaria y social que asegure unadistribución equitativa de la renta nacional, pro-moción de la educación y la salud pública almismo tiempo que el pleno empleo, una justapolítica de salarios y seguridad de la capacidadde trabajo. [...]Al referirse a los médicos en la Carta de

Córdoba resultante del Congreso, sostiene que elcondicionamiento socio-económico de la enfermedady de las formas y alcances del ejercicio médico “lehacen entrever que sus propias reivindicacionessociales o profesionales habrán de satisfacerse en elmarco, y a medida, de la satisfacción de las necesi-dades de salud de la población”.

Y continúa: “Las organizaciones médico gre-miales, avanzada de este pensamiento médico,mientras promueven una profundización en elestudio de la problemática médico gremial y sani-taria, deben lograr el progresivo esclarecimientode los médicos buscando los medios y nivelesadecuados para transmitir los resultados de talesestudios y motivar la necesaria participación delconjunto de profesionales en preparación de loscambios de actitud necesaria para un camino deprogreso”.

En los problemas de los médicos hay unabuena sistematización de las necesidades y reivindi-caciones médicas y sus recomendaciones constitu-yen una excelente programática para la actividadmédico gremial.

Las recomendaciones sobre la enseñanza dela medicina son dignas de ser conocidas en todos los

ámbitos universitarios y profesionales. Y, en todocaso discutidas, pero nunca ignoradas.

OTRAS FUENTES DE PREOCUPACIÓNMÉDICO SOCIALAunque no estamos en una revisión exhaustiva detodo lo concerniente a las inquietudes de los médicosorganizados por los problemas sociales y de políticasanitaria, no podemos dejar de señalar la influenciaque en tal sentido ha jugado la Confederación MédicaPanamericana.

1) Iniciada en 1946 tendió a unir a las asocia-ciones médicas nacionales de afiliación voluntaria delos países del continente americano, llegando a con-tar con representantes de la gran mayoría de ellos.

Sus fines fueron: a) Que todo individuo enAmérica tiene derecho a vivir en salud. b) Que todomédico en América tiene derecho a que se respete lalibertad en el ejercicio de la profesión. c) Toda institu-ción de carácter médico social debe ser dirigida pormédicos.

La doctrina desarrollada en la mejor compren-sión de los objetivos médicos y su código de conduc-ta quedó señalada en sus reuniones internacionales,los Congresos Médicos Sociales Panamericanos, delos cuales surgieron los documentos llamados CartasMédicas que fijan las posiciones adoptadas por lasentidades gremiales de toda Latinoamérica. Se partede la primera: Carta Médica de la Habana, 1946, ysiguen la de Lima, 1949, que trata de la educaciónmédica, la Salud pública y Medicina Social y el segu-ro social.

La Carta Médica de Buenos Aires, 1959, inclu-ye la importante “Declaración Médica de BuenosAires” que expresa:

«Es deber de toda asociación gremial médica:1. Luchar por mantener en el país respectivo losderechos individuales y humanos, norma básica delas constituciones de nuestras repúblicas.La violación de estos derechos será motivo de pro-testa por parte de los gremios médicos latinoameri-canos, hasta observar su completo restablecimiento.2. Como conglomerado social altamente especiali-zado, el gremio médico está en el deber de lucharpor cuantas medidas signifiquen una superación dela protección, recuperación y rehabilitación del indi-viduo.En tal virtud propenderá al mejoramiento de la saludelaborando planes que desarrollen la medicina pre-ventiva y la asistencia hospitalaria en cada país.3. Contribuir a crear o a mejorar las organizacionesde seguridad social en las que se compaginen armó-nicamente los derechos inalienables de los factoresque la integran, con el ánimo de cooperar al bienes-tar social de nuestros pueblos mejorando así suscondiciones de vida de trabajo.4. Contribuir con su ejemplo y organización a quenuestros Gobiernos se encaucen honestamente poruna política que en lo administrativo y en lo asisten-cial, tienda a la elevación del nivel sanitario, educa-cional y cultural del pueblo, promueva el desarrollo

Page 19: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

4 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

de las riquezas naturales del país y desenvuelva lasmejores relaciones de amistad, comercio e inter-cambio con los países del mundo y en especial conlas Repúblicas Latinoamericanas.[...]6. En bien de la dignidad nacional la AsociaciónMédica Gremial luchará por conservar los derechossoberanos de nuestros países donde quiera que tra-ten de ser hollados por intereses foráneos y procla-mará su inconformidad sosteniendo una política deplena Democracia, cimentada en la paz y en la libredeterminación de los pueblos. Al apoyarnos solida-riamente constituiremos una unidadLatinoamericana fuerte y eficaz ante todo someti-miento económico o de cualquier otra naturaleza.7. Declarar enfáticamente su repulsa a todos losgobiernos que disminuyan, alteren o violen estossagrados derechos.8. Rechazar las tiranías, así sean políticas o econó-micas y condenar los regímenes contrarios a lospueblos y el sentimiento democrático». [...]11

Ratificada años después en la VI AsambleaGeneral de la Confederación en 1962 por el Anexo dela Carta Médica de Buenos Aires, destacando espe-cialmente los puntos 1; 6; 7; 8 y 9, y aclarando que laConfederación “se preocupa y se preocupará única-mente de los asuntos que le competen, precisados enla documentación aludida siendo por lo tanto comple-tamente ajena a todo sentido de política partidista”.

Los Congresos Panamericanos continuaronrealizándose regularmente hasta el XI (La Paz,Bolivia, 1970) con la contribución de las entidadesmédico gremiales latinoamericanas y se formalizó latemática llegándose al establecimiento de un códigodel trabajo del médico americano.

Su organismo ejecutivo, Comité Ejecutivo, enel ínterin de las asambleas y congresos bianuales, nose ocupaba de la defensa concreta de los interesesde los médicos en cumplimiento de las Cartas y fren-te a las cesantías y detenciones por causas políticasy/o ideológicas peticionando a los gobiernos respecti-vos, así como en los episodios de avasallamiento delas autonomías universitarias. Interesando en estos yotros problemas generales a la Asociación MédicaMundial.

El Comité Ejecutivo rotaba entre lasAsociaciones Médicas Nacionales y en cada cambio,a los cuatro años, obviamente se trasladaba todo elbagaje histórico documental de la institución. En laAsamblea General de la Confederación de 1971 sedesignó al Colegio Médico de Chile como nueva sededel Ejecutivo. Fue así que el golpe de Estado chilenode setiembre de 1973 significó también la destrucciónde toda esa documentación y de la continuidad insti-tucional de la Confederación Médica Panamericana,en un momento en que agrupaba a 18 asociacionesmédicas del Continente que representaban a 360.000médicos que servían a una población de 400 millonesde americanos.

2) En nuestro país se formó en la década del60 una agremiación de sanitaristas —no sabemos por

qué con independencia de la ConfederaciónMédica— que también realizó un Primer CongresoArgentina de la Salud Pública en 1973, organizadopor la Federación Argentina de Asociaciones de laSalud Pública sobre el Tema: “Modelo Argentina deOrganización de la atención Médica” con principiosque puede decirse están en las líneas generales de loya expuesto pero con matices particulares provenien-tes del carácter de expertos sanitarios de sus miem-bros. Allí postulan como principios:

«1. El cuidado de la salud es un derecho del serhumano.2. El Estado es el garante y responsable de la políti-ca que conduzca a contemplar este derecho.3. La salud del hombre no es una mercancía y suatención no puede ser objeto de lucro.4. La seguridad de la atención de la salud descansaen la solidaridad social.5. La Atención de la Salud debe ser integral, iguali-taria, oportuna y continuada.6. La seguridad de una buena atención solo puedelograrse en base a una Integración de las accionesque se cumplen en los subsectores estatal, paraes-tatal y privado»12.

En otros 14 ítems desarrolla el diagnósticonada alentador de lo que denominan ‘’una dramáticacrisis de la Salud Pública”. Y se agrega:

«Son responsables de la solución de esta situación,en primer lugar el Estado como garante de la Saluddel pueblo por mandato constitucional, y luego, aun-que no en menor medida, todos los grupos de la vidanacional, en especial aquellos que disponen demayores recursos, como asimismo, los que asumenel liderazgo político, social, económico o gremial enel país»12.

3) En 1973 se realizó también el 2° CongresoNacional de Medicina Social, organizado enCorrientes por la Sociedad Argentina de MedicinaSocial, entidad científica no gremial.

En su primer Congreso (Buenos Aires, 1971)ya se había concluido en el tema Salud: “El nivel desalud no depende de los recursos médicos sino delnivel de vida y sus recursos son los que hacen lasalud del pueblo”13, 14.

En resumen, con todas estas postulaciones seseñala un camino para la progresiva solución de losgraves problemas de salud de la población, de laorganización de un sistema racional de atención médi-ca, de la formación profesional, de la investigaciónbiomédica y los propios problemas de los profesiona-les y técnicos. Un camino que resulta de la planifica-ción sanitaria integrada en una planificación económi-co social global que tiene como objeto la remoción delos frenos estructurales de desarrollo argentino, a tra-vés de la coincidencia de acción democrática en unproceso de participación comprometida.

A nuestro entender, esto debe ser interpretadocomo reales expresiones doctrinarias de una crecien-te conciencia médico gremial y sanitaria de cara alpaís que fue obstaculizada en su evolución en los últi-mos años.

Page 20: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

5Los Congresos Médico Sociales argentinos

Se decía en la ya mencionada ponencia deCOMRA3: “Esa conciencia gremial debe significarconocimiento de los problemas técnicos asisten-ciales y sanitarios, comprensión de los proble-mas sociales y de sus determinantes económi-cos, educativos y ambientales, ambición de supe-ración y de progreso, devoción por los principiosde libertad y democracia, seguridad de saber apli-car todo ello en el ejercicio de la función pública,espíritu inagotable de lucha”.

¿EN QUÉ ESTAMOS AHORA?Fuerza es reconocer que esa elaboración doctrinariaa que acabamos de referirnos no se ha integrado enla conciencia social de la gran masa médica argenti-na; ella ha sido el resultado de debates entre los cua-dros dirigentes más comprometidos con una visión dela práctica social de la medicina que acompañaba, ose adelantaba, según los casos, a los mismos cam-bios sociales inherentes al proceso histórico de todopaís, y que realizaron esfuerzos para no quedar a lazaga de otros intereses que no fueran el progreso dela propia profesión en el progreso nacional y la efi-ciencia digna de la función médica en la sociedad.

A no muchos años de esas postulaciones setiene la impresión que todo ha quedado detenido ycomo colgado a gran altura tras las nubes del cielotormentoso de nuestro país, salvo algunos relámpa-gos que alumbraron el decir o el hacer de pocosmédicos y escasas gremiales. ¡Y no es que hayan fal-tado razones para decir y hacer!

Lo que se concibe como proceso normal dedifusión de !as conclusiones concertadas en aquellasreuniones, para ser rediscutidas en las amplias basesde las organizaciones médicas, así como hacia elmedio social en sus distintos sectores, porque sontemas de interés público, esto, no se ha producido.Rediscusiones en las que se puede acordar o disen-tir, pero imprescindibles para vitalizar la vida republi-cana democrática, y para, en definitiva, enriquecer lacultura social en base a información y elaboración, yabrir siempre nuevos derroteros en la capacidad dediscernir un camino entre varios posibles al querersolucionar determinados problemas.

Ese proceso ha sido bloqueado en nuestropaís y no solo por una expresa prohibición legalde las actividades gremiales, que ya lleva seis lar-gos años, sino también por una más difusa ypenetrante influencia de los mecanismos de lacensura y de los resultados de la propia evoluciónde la crisis económica.

Sobre la censura y sus deletéreos alcances enrelación con publicaciones, editoriales, cine, televi-sión, radios, se ha discurrido en forma creciente en laprensa nacional en los últimos tiempos. Aunque estasaludable sacudida no haya tocado con la amplitudnecesaria al ámbito científico y profesional, no es porque no haya sido de importante peso en laUniversidad, en las organizaciones profesionales, enlos hospitales e institutos médicos, etc. donde la suti-leza represiva ha llegado tan lejos como lo pudo per-

mitir la autocensura, la intimidación, genérica o indivi-dualizada, y el uso personal que de todo ello pudieronhacer funcionarios asesores ideológicos y distintosoficiantes de la discriminación por provecho propio opor imposición.

Muchas reuniones que se realizaron en los últi-mos años lo hicieron, conscientemente o no, bajo lainfluencia, excepcionalmente soslayada, de la ima-gen fotográfica tan difundida de la enfermera que invi-ta al silencio con su dedo en los labios. Es el símbo-lo de la democracia enferma que continúa bajo cuida-dos intensivos y requiere de toda nuestra participa-ción terapéutica para emerger del trance.

Más complejo aún, y más mutilante si cabe, hasido el resultado del creciente impacto de la crisiseconómica en el quehacer asistencial, el que ha veni-do embretándose aceleradamente en unas leyes demercado que no le son compatibles.

Salvo los creadores y los directamente intere-sados, no hay quien deje de reconocer los efectos deun plan económico que ha puesto al Estado en elbanco de los acusados ante el altar de un discrecio-nal principio de subsidiariedad. Enarbolando las ban-deras de enaltecer la iniciativa privada y la libreempresa se han abierto más las compuertas del paísal interés extranjero y se ha condenado a los trabaja-dores, y las grandes mayorías en general, a pagar“con sangre, sudor y lágrimas” la crisis nacional. Estoestá en la base de la crisis sanitario-asistencial y haincorporado a los profesionales al listado de quienesluchan por sobrevivir con su trabajo.

En las crisis políticas que desde hace muchotiempo redundan sobre las crisis económicas, la polí-tica de salud ha estado siempre a la deriva de la polí-tica económica nunca como entidad con jerarquíapropia. Los presupuestos decrecientes han ido produ-ciendo el empobrecimiento asistencial público y eldeterioro de hospitales y equipos. Sin otra justifica-ción racional que pueda explicar la irreverencia delderecho a la salud, la ausencia de estudios epidemio-lógicos científicos sobre nuestras necesidades y eldesconocimiento de lo que en el mundo ocurre enmateria de atención médica.

De este modo el derrumbe del subsector públi-co ha sustraído: al pueblo, posibilidades de acceso ala asistencia, y al personal sanitario, importantesfuentes de trabajo, docencia y capacitación, que nohan sido reemplazadas, ni pueden serlo, por los otrossubsectores asistenciales.

El desentendimiento oficial, por otra parte, hapropiciado que el sistema de obras sociales asumie-ra progresivamente la responsabilidad de cubrir a lamayoría de la población, sin aportar como Estado,más que su injerencia política (nueva ley de ObrasSociales) y empujándolas hacia la contratación deservicios con la medicina y odontología privadas ensu mayor parte, lucrativas, en coherencia con laorientación privatizante general.

Pero como el país sigue empobreciéndose, ycon él la mayoría de su población, mientras aumen-tan los costos asistenciales, las obras sociales se

Page 21: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

6 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

desfinancian y el pago de los servicios prestados seposterga o se suspende. Y tenemos otro rubro de tra-bajo médico que se resiente y es origen de conflictos.

El subsector privado, empuñando el escudo dela libre elección del médico por el enfermo (¿todavíapuede elegir?) entra en el mercado competidor cadavez más restringido y, mientras las grandes empresasasistenciales concentran capitales, complejidad tec-nológica sin control, y contratos para aumentarganancias, restringen la remuneración médica en larelación de dependencia y se corre el riesgo que res-trinjan también la calidad de las atenciones para aba-ratar costos.

Y el consultorio privado busca afanosamentemantenerse con servicios contratados con obrassociales, con organizaciones de prepago, que hanproliferado en las grandes ciudades, o con el “prepa-go gremial”, pero sienten que, inexorablemente, la cri-sis llama a sus puertas.

Hay quienes entran en el criterio de mercadode la atención médica porque creen inocentementeque tales son las reglas del juego (¿han conocidootras?) y, según ellas, hay que adaptarse y competiraunque muchos intuyan que es un camino sin futuro.

Se agregan algunos factores dignos de teneren cuenta: la presión que los avances científico-técni-cos producen en la ansiedad del quehacer médico.

Con la formación predominantemente tecnicis-ta de nuestra educación médica, falto de aprendizajeen servicio de la real patología prevalente, el reciéngraduado es dominado por la inquietud por la alta tec-nología y por la contribución a voces espectacular delas nuevas técnicas de diagnóstico y tratamiento. Elmercado de trabajo favorece esa inquietud pues pro-porciona las posibilidades mejores en las unidades decuidados intensivos en las grandes ciudades.

Hay, si no una subestimación, por lo menosuna postergación o directa supresión de la laboriosasemiología clínica, para acortar el tiempo de la con-sulta médica. Este tipo de subalternización se tradu-ce corrientemente en sobreprestar atenciones que,además, en el Nomenclador Nacional tienen mayorremuneración que el acto clínico fundamental que esla consulta médica integral.

Por cierto que la presión no se ejerce sólosobre los médicos sino también sobre la población engeneral que, con la justificación que nace de los rea-les progresos de la ciencia y la técnica, se sensibilizafrente a las promociones y propagandas de distintotipo y se crea la imagen de que todo en salud se arre-gla con medicamentos de alto costo, equipos comple-jos y gran aparatología.

Todo sumado aumenta el consumo (¿o consu-mismo?) de prestaciones de complejidad más costo-sa y cuya ponderada eficacia, racional utilización ydistribución está aún por hacerse15, 16.

Estas reflexiones merecen una mayor conside-ración por parte de médicos, sicólogos y sociólogos,así como la incidencia que estos factores tienen en larelación médico paciente. Creemos que ellos vanaumentando el distanciamiento entre uno y otro. Una

distancia física, temporal, por la técnica, que disminu-ye y aleja el contacto personal, y una distancia ética,porque el paciente desconfía de un posible compro-miso del profesional con los métodos costosos ycaros.

Hay que tomar con mucha preocupación el quela percepción popular entrevé a los médicos en lapendiente de “vender actos médicos” en lugar de“atender la salud”.

Puede palparse cómo el estrechamiento deperspectiva tanto en lo general como en lo sectorial,con la anulación de los cauces naturales de discusiónde los problemas (por restricción de los derechosdemocráticos) y la práctica asistencial encerrándoseen la concepción predominante de mercado, resultanser la influencias que obstaculizan la búsqueda desoluciones válidas a la crisis sanitaria y médica.

Y son los factores fundamentales que acentúanla transformación de las organizaciones médico gre-miales en entidades administrativo contables con ries-go de crear una burocracia gremial dedicada a contra-tos, costos y pagos, auditorías y actividades afines ala exégesis permanente del Nomenclador Nacional.Que son todas labores necesarias en la realidad quese vive, pero en su justa medida y en su debido tiem-po, que no deben impedir la permanente brega por ladignificación profesional, texto de la tradicional doctri-na médico social y sanitaria actualizada.

VOLVAMOS A LOS CONGRESOSMÉDICOS SOCIALESEste somero panorama de las condiciones de la prác-tica médica en la actualidad nacional concurre a refir-mar postulados ya establecidos en las reuniones decongresos anteriores.1) Que la salud de la población y las condiciones

del ejercicio médico dependen fundamental-mente de la situación económica, social, políti-ca y cultural del país en su conjunto y en laetapa histórica que cursa.

2) Que las crisis, tanto en lo político y social comoen lo económico, tienden a estrechar las pers-pectivas del médico que, en lo agudo de laspreocupaciones vitales y de trabajo, deja dever las contradicciones esenciales que antece-den a las particulares.Bien expresa la solicitada de COMRA, “Los

Médicos al país”, publicada el 30/1/82, al plantear supreocupación por hechos que afectan al puebloargentino y a los médicos: “Al pueblo argentino por-que el plan político económico vigente ha generadouna crisis en las posibilidades, expectativas y legíti-mos intereses de las fuerzas del trabajo y la produc-ción, haciendo prosperar la especulación, expresiónde egoísmo y falta de solidaridad”.

“A los médicos, porque las consecuencias deesta política económica ha determinado una sustanti-va disminución de la capacidad productiva, con rece-sión, desocupación y caída de los ingresos que impo-sibilitan el acceso de los sectores mayoritarios a unaatención de la salud acorde con sus derechos”.

Page 22: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

7Los Congresos Médico Sociales argentinos

Efectivamente, la crisis nacional es profunda,estructural y global. Y sus consecuencias en la depre-sión del mercado interno, además de lo que significacomo intolerable compresión del nivel de vida, no per-mite abrigar esperanzas sectoriales. En el sentidoque, por ejemplo, se pueda arreglar el problema sani-tario asistencial por su propia cuenta tal cual estáplanteado en la trama comercial competitiva actual.

Hay que tener en cuenta que el grueso de lafinanciación del gasto en atención médica provienedel gasto directo de la población y del aporte porcen-tual de la masa salarial: ambos en franca disminución,especialmente el segundo que es el soporte para lagruesa atención de la mayoría de la población.

Tomando datos de la Universidad Argentina dela Empresa (UADE): en octubre de 1980 se necesita-ba el equivalente de 7 horas 30 minutos para comprar500 mg. de antibióticos; para el mismo mes de 1981ya se requerían 10 horas 18 minutos de trabajo obre-ro para el mismo fin. Mientras estos aumentos podí-an ser en parte compensados por un real incrementodel horario de trabajo personal a 12; 13; 16 o máshoras diarias, aún con sacrificio y deterioro de lasalud, se podía marchar. Pero esta forzada compen-sación se va extinguiendo, porque según la mismafuente, las suspensiones de trabajo en promedio detodas las ramas y tomando como índice 100 al año1980, en 1981 dichas suspensiones fueron aumen-tando según índices: primer trimestre 169,1; segundotrimestre: 481,6; tercer trimestre: 487,617.

Aparte de las consecuencias directas sobre lacalidad de vida de las clases populares, esto empe-queñece hasta limites increíbles el mercado interno yredunda obviamente en la retracción de la demandade servicios y en la quiebra del poder de pago de lasentidades de seguridad social cuyos fondos provie-nen de salarios.

Según datos de FIDE (Fundación deInvestigación para el desarrollo) y FIEL (Fundaciónde Investigaciones Económicas Latinoamericanas)desde 1976 los salarios aumentaron un promedio de88 veces, mientras el costo de vida subió 156 veces;vale decir que el salario real disminuyó el 43,6 %.

No tenemos datos para comparar frente a estedeterioro, el gran aumento del costo de la atenciónmédica, y desglosar del mismo la ingente contribu-ción del permanente e inexorable aumento de preciosde los medicamentos.

Así como nos falta información para cuantificarla disminución de los ingresos médicos, aunque pen-samos que las gremiales pueden realizar análisisvaliosos en este tema.

Frente a la magnitud de estas realidades con-cretas se cometen errores de falta de ubicación cuan-do se anatematiza al hospital publico como causa decompetencia ruinosa para el trabajo médico, o se caeen el debate, a nuestro entender diversionista, de la“plétora médica”, o se depositan esperanzas queresultan infantiles en el “arancelamiento hospitalario”,o en la instalación de grandes equipos (T.C. por ejem-plo) en la pequeña clínica que se defiende como

fuente de trabajo médico, o en el desarrollo másextendido y estricto de las “auditorías médicas”, etc.Aspectos, los más, engarzados en las consecuenciasde la crisis, no entre las causas y que no aportansoluciones reales.

Según los principios enunciados a lo largo deesta reseña, los médicos deben reivindicar, junto conla defensa de sus justos intereses, la reparación delas tremendas penurias sociales y contribuir, a queentre ellas, las dificultades asistenciales —que no sonlas menores— vayan solucionándose.

En esta etapa, harto difícil y compleja, a travésdel mejoramiento y coordinación integradora detodo lo que sirve actualmente, adquiriendo elEstado el papel trascendente de recoger el clamorde todas las necesidades perentorias y, con laparticipación de todos los sectores involucrados,planificar las formas de esa integración para locual debe disponerse, aun dentro de la supuestaescasez de recursos, el apoyo financiero quecorresponde para garantizar el comienzo de cum-plimiento del derecho a la salud para todos loshabitantes.

Es obvio que esto requiere un gran debatenacional sobre estos problemas que configuran unaverdadera emergencia sanitaria, para que se empie-ce a ver, según se viene repitiendo desde hace años,que las graves cuestiones nacionales debemos arre-glarlas entre todos.

En este debate, la pretendida asepsia políticade las asociaciones profesionales no es útil sinocomo excusa para autoproscribirse de las necesida-des de la hora o como escudo de quienes medrancon el statu quo y niegan a la COMRA la responsabi-lidad de adoptar posiciones sociales que están res-paldadas por las recomendaciones y resoluciones desus congresos y por sus mismos estatutos.

Conviene actualizar el recuerdo del Estatuto dela COMRA que establece por objeto: “el mejoramien-to moral, científico y económico de la profesión médi-ca y el acrecentamiento de la salud pública en todossus aspectos” (art. 1°). Y en el art. 4°, al exponer fina-lidades, objetivos y medios incluye entre sus incisos:

«g) gestionar ante los poderes públicos la sanciónde leyes, reglamentaciones, ordenanzas, etc. ten-dientes a mejorar las condiciones de trabajo médicoy la sanidad de la población.h) colaborar en el estudio de los problemas asisten-ciales y sanitarios y los que atañen a la medicinapreventiva.i) promover el estudio de los asuntos médicos gre-miales, médico sociales y la educación sanitaria dela población.j) promover la incorporación de los médicos agre-miados al gobierno de la Universidad en función yrepresentación de los graduados, a través de susorganizaciones regionales respectivas»18.

Todas finalidades, según se aprecia, estrecha-mente vinculadas a las actividades políticas universi-taria y sanitaria en su amplio sentido.

En cambio, está claro en el art. 2° del Estatuto

Page 23: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

8 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

que “la COMRA y sus filiales no podrán sustentar ten-dencias políticas partidistas”, que es el límite racionaly ecuánime de sus posiciones sociales y que está deacuerdo con lo estatuido en el Anexo a la Carta deBuenos Aires de la Confederación MédicaPanamericana a que ya nos hemos referido.

Cuando, más allá de ese límite, se planteanexigencias de apoliticismo para las instituciones gre-miales, universitarias o educacionales y culturales, loque se busca es promover la autocensura en laexpresión de aquellas ideas con que cada uno quisie-ra contribuir a solucionar problemas del país.

Personalmente sospecho en los cultores deese apoliticismo un íntimo deseo de volver al tipo depensamiento social de los pueblos prealfabetos, cuyoejemplo aún existente lo constituyen los maoríes deNueva Zelanda, en los que el aislamiento social pro-vocaba una inmovilidad o fijeza mental que se tradu-cía en su particular inercia cultural. Esas característi-cas facilitaban un rígido control social, y una marcadaresistencia al cambio19 que son las explotables porlos “apoliticistas”.

Hay fuertes indicios en el país de numerosasiniciativas de todos los sectores que tienden a supe-rar cierta inmovilidad social y mental impuesta. Lasentidades médico gremiales tienen también la oportu-nidad para avanzar en la reanudación de su plenaactividad específica movilizando a sus bases en larecuperación de su vida democrática con la confec-ción de programas de acción para los cuales convo-car a las fuerzas del trabajo y la producción a partici-par en la dilucidación de los caminos a recorrer juntospara mejorar la atención médica y la salud.

Nosotros aspiramos a que en el IX Congreso,se reanuden los debates provechosos en los que,retomando la tradición doctrinaria de COMRA las pos-tulaciones de sus congresos, de sus cartas y declara-ciones, se enriquezca con la actualización de la pro-blemática social, sanitaria y médica y se ayude enlograr la unidad de objetivos para la definición de unprograma gremial en la lucha por aportar solucionesa la crisis que nos afecta a todos.

En “Los Médicos al país” (30/1/82) reconoce-mos la necesidad de un proyecto nacional y se exhor-ta a la ciudadanía sin exclusiones a trabajar en formamancomunada para lograr el restablecimiento de lasinstituciones constitucionales.

Es oportuno pues que, a partir de las justas rei-vindicaciones de los médicos y de las necesidades dela población se definan en el Congreso los cursosde acción para esa “labor mancomunada quelogre la forma idónea de solucionar los problemasargentinos”.

Buenos Aires, marzo 25 de 1982.

REFERENCIAS1. René Sand, cuyos trabajos promueven ese criterio a fines

del siglo XIX, funda en 1912 la Asociación Belga deMedicina Social.

2. La 3ª Conferencia Mundial de Educación Médica (NuevaDelhi, 1963) tuvo por tema “Educación médica y desarrolloeconómico”.

3. Lebrón CJ, Lerner J, Provenzano S, Sisto C. Relato Oficialde COMRA: “Papel de la profesión médica en los proble-mas de salud de los pueblos latinoamericanos”. Rev.COMRA, abril-octubre 1964.

4. Elena IV. Principios y proposiciones de los médicos parauna política sanitaria. Ed. esp. de An. Arg. de Medicina,1971.

5. Ponencia sobre “Seguro de Salud en el Congreso MédicoSocial de 1936”. An. Arg de Medicina, enero-marzo de1957.

6. La transición entre la beneficencia y la racionalidad de unaplanificación sanitaria basada en necesidades y con méto-dos científicos, ha cursado con enormes dificultades, porrazones políticas fundamentalmente. Y, por supuesto, aúnestá sin resolver.

7. Tercer Congreso Méd. Gremial de la Rep. Arg. Abril 1950.Folleto especial editado por COMRA en 1951.

8. Reseña de los Congresos en Rev COMRA N° 99. Abril-mayo 1967.

9. VI Congreso Médico Gremial de la RA. An. Arg. deMedicina, abril-junio 1957.

10. El por qué entre el 6° y 7° Congreso pasaron ocho años, yentre el 8° (1967) y el actual pasaron quince, es digno deestudio. Nuestra hipótesis es que esos intervalos sonespacios de historia política argentina en que se ha senti-do más agudamente la crisis de la democracia. Y demues-tran iterativamente la influencia de los factores socioeconó-micos y políticos sobre las instituciones sanitarias y el que-hacer médico. Es digno de lectura y meditación el análisisque Bloch C, Quinteros ZT de y Belmartino S, publican enel N° 18 de Cuad. Méd. Soc., Cess, Rosario. oct. 1981, conel título: “Políticas de Salud y Bienestar Social. Argentina1976-1980”.

11. Bol. de la Conf. Méd. Panamericana N° 1. 1er. trimestre1966. Para no abundar se han omitido los puntos 5; 9; 10y 11 que se refieren a métodos y procedimientos para cum-plir con los dictados de los otros puntos.

12 Separata especial de la Federación Argentina deAsociaciones de Salud Pública (sin fecha).

13. Primer Congreso Nacional de Medicina Social. Sociedadde Medicina Social, Bs. As. 1973.

14. No se reproducen allí los componentes del nivel de vidaque, según los expertos de OMS-OIT-UNICEF son: 1:Salud. 2: Alimentación. 3: Educación. 4: Situación en mate-ria de empleo. 5: Condiciones de trabajo. 6: Salarios. 7:Vivienda. 8: Transporte. 9: Vestido. 10: Esparcimiento yrecreo. 11: Seguridad social. 12: Libertades humanas.(OMS. informe Técn. 137. Ginebra, 1957).

15. Canitrot CH. “Tecnología Médica: el advenimiento de uncambio radical en medicina”. Cuad. Méd Soc. N° 16, Abril1981. Ed. CESS. Rosario. „

16. Waitzkin H. “Unidad de estudio coronario: crecimiento ydesarrollo de su tecnología”. Cuad. Méd. Soc. N° 16, abril1981. Cess. Rosario.

17 Douthat D. “Otro golpe para las remuneraciones”. Probl. deEconomía N° 69, enero-marzo 1982.

18. Estatutos de la Confed. Méd. de la RA, con las modificacio-nes aprobadas en Asamblea 7/VII/1972.

19. Barnes H y Becker H. Historia del pensamiento Social.Ficha mimeo. Inst. Sociológico de UBA, 1960.

Page 24: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

ÁREA DE SALUDLa lucha por la salud, entendiendo por tal el completoestado de bienestar físico, mental y social del hombre,no es sólo la lucha contra la enfermedad sino contratodos los factores que la generan y refuerzan. Lasalud es un derecho social básico inherente al serhumano como tal. Entendiendo que todo derecho deesta naturaleza —así como el concerniente a la liber-tad y a la vida— deben ser defendidos permanente-mente, asumimos el compromiso político que esto sig-nifica, asimilándolo a la lucha por los derechos huma-nos, tan frecuentemente vulnerados por los gobiernosque representan a los intereses antipopulares. Lasalud, considerada como un fin y no como un medio,deberá constituirse en el eje de un nuevo modelo depolítica sanitaria. Afirmamos que la salud es un biensocial y que debe excluirse en la ejecución de susacciones la finalidad del lucro, no debiendo ser utiliza-da para la producción, como objeto de mercado nipara la dependencia tecnológica. El Estado debe asu-mir plenamente la responsabilidad que le compete y apartir de esta concepción se propone: 1) La reestruc-turación de los servicios de salud existentes, con elobjeto de adecuarlos a un sistema integral de salud,para que el pueblo goce de los beneficios de unamedicina preventiva, reparadora y de rehabilitación.

Salud PúblicaEl Papel de orientar, planificar, dirigir y controlar todala actividad vinculada al campo de la salud y almanejo de los recursos necesarios deben ser ejerci-dos por el Estado en forma indelegable. Implementaruna política sanitaria que fije con claridad el rol quese le asignará a cada uno de los tres subsectoresintervinientes —público, obras sociales y actividadprivada—, garantizando una participación efectiva delos prestadores en todos sus niveles, para inaugurar

nuevas prácticas democráticas en la prestación delos servicios. Incrementar y redistribuir el presupues-to de salud, poniendo todos los recursos técnicos ycientíficos al servicio de las actuales necesidades delmedio. Instrumentar acciones que tiendan al des-arrollo pleno y a la realización de los trabajadores dela salud en lo humano, social y técnico, modificandolas condiciones en que se forman y cumplen su acti-vidad.

Hospital PúblicoPromover el desarrollo del hospital público como ejefundamental alrededor del cual giran intereses vitalesde la población, las organizaciones comunitarias y lostrabajadores de la salud. Dotar al hospital público deplanteles profesionales y de personal, suficientes yadecuadamente capacitados.

Implementar una carrera hospitalaria nacionaluniforme y velar por su estricto cumplimiento.

Implementar un sistema de hospital abierto,extendiéndolo a los profesionales de la comunidad.

Otorgar autonomía al hospital, modernizandoadecuadamente su administración. Poner en marchaen lo inmediato un plan de aprovechamiento plenodel hospital en todos sus recursos, evitando la capa-cidad ociosa y ampliando los horarios de atención.Modernizar las relaciones del hospital con su medio,con un reglamento que determine la participación dela comunidad de su área. Dentro de la prioridad de lospresupuestos para la salud, privilegiar con plazo defi-nido en todas las jurisdicciones, las partidas para lareconstrucción del hospital. El hospital, según sunivel, será el eje de integración de los establecimien-tos periféricos para la atención primaria y el resto delas acciones de salud, como modalidad de aperturade los establecimientos hospitalarios. Suprimir elarancelamiento hospitalario directo.

[DOCUMENTOS POLÍTICOS]

Partido Intransigente. Plataforma política.Area de Salud

Partido Intransigente

Page 25: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

2 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

Salud MentalPromover la creación de centros de salud que inter-actúen con los hospitales y la comunidad para preve-nir y detectar patologías a través del trabajo comuni-tario. Descentralizar la atención psiquiátrica creandoservicios generales de asistencia en los hospitales,según el nivel de complejidad que corresponda. Crearen los hospitales, según criterio de complejidad regio-nal, servicios de puertas abiertas y comunidades tera-péuticas. Procurar el desarrollo de una práctica profe-sional que tienda a la prevención del padecimientomediante su detección antes de que acontezca. Crearla carrera de enfermería psiquiátrica. Derogar la legis-lación restrictiva que pesa sobre los trabajadores desalud mental. Eliminar la estructura manicomial yrepresiva del sistema vigente. Propiciar la creación deservicios de hospitales de día a través de los cualesse rehabiliten pacientes dados de alta, favoreciendosu mejor inserción en el medio. Crear para pacientescrónicos o con mayor grado de deterioro y sin conti-nente familiar, centros de comunidades abiertasextrahospitalarias, en lugares apropiados para elabo-rar productos para su autoabastecimiento. Propiciarel establecimiento de todos aquellos mecanismos einstrumentos que aseguren una atención adecuadade la salud mental de la población, dada su importan-cia para la existencia de una sociedad sana.

Obras SocialesRegular el sector de obras sociales a partir de losmismos principios de salud que fijó el Estado enforma integral, reafirmando su papel normatizadorpara obtener como uno de los objetivos inmediatos lahomogenización de las prestaciones, como pasohacia la concreción del Sistema Integrado de Salud.Se procederá a la revisión y modificación de la legis-lación vigente al respecto, para ajustarla a los finespropuestos. Asegurar a los afiliados como meta inme-diata, igualdad, accesibilidad, eficacia e integralidaden el servicio de las obras sociales. Efectivo controlen la gestión de las obras sociales por los usuarios delas mismas.

TRANSFORMACIÓN DEL ACTUAL SISTEMAMEDIANTE UN SISTEMA INTEGRADO DE SALUDSe propone la creación de un sistema integrad desalud que esté basado en el principio universal desolidaridad, que tenga niveles de decisión adecua-dos, que esté integrado por todos los subsectoresque conforman la actual estructura a través de la cualse presta la atención médica, incluyendo todos losniveles de prestadores y en donde el Estado se reser-ve el derecho de normatización y control de su funcio-namiento, como prerrequisito indispensable para lapreservación de las normas fijadas que aseguren elobjetivo de la salud del pueblo, en condiciones de uni-versalidad, igualdad, accesibilidad, oportunidad, efi-cacia y gratuidad. El Sistema Integrado de Salud ten-drá una organización normativa y administrativa cen-tralizada, con descentralización en sus aspectosregionales y con sus acciones ejecutivas, y sus obje-

tivos no solo serán referidos a la recuperación y reha-bilitación de la salud, sino a todas aquellas activida-des en función regional que conforman el vastocampo de la salud pública, tales como saneamiento,inmunización, nutrición, educación sanitaria e investi-gación. Para los trabajadores de la salud el sistemacontará con un régimen que asegure los requisitosfundamentales referidos a ingresos, promoción, esta-bilidad y una remuneración que permita consolidar lasvocaciones, la capacitación y la dedicación exclusiva.La regionalización estará destinada a coordinar yordenar las instituciones sanitarias en un conjuntoorgánico y articulado, con el fin de lograr el abasteci-miento integral y suficiente de los servicios sanitarios,posibilitando su correcta utilización por la totalidad dela población. En cada región se deberá tener presen-te las características ecológicas y de patología pro-pias. La implementación de la regionalización se haráa través de un sistema de programación y conducciónque utilizará todos los recursos de salud disponiblesen cada región, cualquiera sea el subsector al quepertenezca, permitiendo cubrir la salud de una pobla-ción delimitada por un área geográfica de caracterís-ticas comunes. A partir del Sistema se podrá planifi-car con medidas adecuadas, de acuerdo a necesida-des regionales, la redistribución de los trabajadoresde la salud. Igual criterio se aplicará para la formacióndel recurso humano, especialmente en lo que hace atécnicos y enfermería y existencia de especialidadescríticas. A los fines de la financiación del sistema, enla etapa inmediata se hace imprescindible una recom-posición global del presupuesto destinado a salud, alo que deberá sumarse los aportes que el subsectorde obras sociales deberán efectuar mediante la ade-cuada regulación de su funcionamiento y el que sedestine al subsector estatal por las prestaciones enlos servicios públicos. El Sistema tiene como metamediata la financiación de la salud a cargo delEstado, para lo cual se hace necesario una modifica-ción en la formación y redistribución del ingresonacional. La conducción del sistema estará regida poruna organización cuatripartita integrada por elEstado, prestatarios, prestadores y la comunidad.Como meta mediata se propone la creación de unseguro de salud que ponga en vigencia el más plenoejercicio de este derecho en todos sus aspectos,abarcando a la totalidad de la población en igualdadde condiciones para enfrentar no sólo la contingenciade la enfermedad, sino todos aquellos aspectos quehacen a la promoción global de la salud, tanto indivi-dual como colectiva.

RECURSOS HUMANOSSe promoverá la formación de recursos humanos detodos los niveles del sistema de salud, adecuados alas necesidades reales de nuestro país, teniendo encuenta las características regionales, comenzandopor la adecuación de pregrado y completándola conuna formación de postgrado donde, prácticamente enel sector profesional, se promoverá el sistema de resi-dencias mediante una legislación específica. Se

Page 26: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

3Partido Intransigente. Plataforma política. Area de Salud

implementarán planes de educación continua paratodos los trabajadores de la salud en ejercicio.

MEDICAMENTOSSe propone la promulgación e implementación de unaley de medicamentos que tenga como base toda lalegislación vigente, de carácter positivo, que rige enla materia; y que contenga disposiciones destinadasa: Jerarquizar el Instituto de Farmacología, aseguran-do su equipamiento y los recursos humanos necesa-rios. Elaborar un Vademécum único de monodrogasde uso obligatorio en el Sistema Integrado de Salud.Autorizar la incorporación de nuevos productos en elmercado sólo cuando satisfagan las condiciones deeficacia, inocuidad, calidad y precio. Reinscribir todaslas especialidades autorizadas hasta la fecha, cance-lando la autorización de todas aquéllas que no cum-plan los requisitos del punto precedente. Controlar yverificar por parte del Estado el medicamento, desdela etapa de producción hasta su dispensación.Relevar el consumo de medicamentos a nivel nacio-nal para establecer las prioridades de fabricación.Promover la producción nacional de drogas básicas,tecnología y material accesorio a la industria delmedicamento, tomando el Estado bajo su responsa-bilidad la producción cuando así fuere necesario.Adquirir en el mercado internacional y a los oferentesmás beneficiosos para el país, las drogas básicas

seleccionadas en el vademécum único y que la indus-tria local no puede producir, normatizar la importaciónde materias primas que utiliza la industria farmacéuti-ca. Fijar los precios y utilidades empresarias de losmedicamentos elaborados por la industria en la queno se reconocerán gastos de patentes y marcas nipor promoción del producto; logrando un precio justo,fijo y uniforme en todo el país. Esta tarea deberá estara cargo del organismo competente del área de SaludPública y no de la Secretaría de Comercio. Modificarel sistema de información desde los laboratorios a losprofesionales, estableciendo que debe ser el Estadoy las instituciones académicas los responsables de lainformación científica completa sobre los medicamen-tos autorizados. Caducidad de las autorizaciones delos medicamentos de venta libre, evitando la propa-ganda con fines mercantilistas y eliminando la auto-medicación. Estimular la formación de centros coope-rativos regionales con otros países de América Latinay del Tercer Mundo que impulsen la fabricación demedicamentos. Formular programas educativos quetiendan a reducir la automedicación y a estimular eluso seguro y apropiado de los medicamentos.Reafirmando nuestros principios doctrinarios sobresalud, definimos también al medicamento como unbien social cuyos fines, al liberarlo de la dependencia,se cumplirán con la formación de una industria farma-céutica de carácter netamente nacional.

Page 27: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

SOBRE LAS NECESIDADES EN SALUDLa crisis sanitario-asistencial se inscribe en el cuadromás amplio, y más lacerante, de la crisis económico-social y cultural del país. Como ocurre con todas lasáreas de este retroceso nacional sus causas vienende lejos.

Reconocen su origen en nuestra estructuraeconómica social atrasada y dependiente, usufruc-tuada por una clase dominante que no ha permitidolos cambios que la clase obrera y el pueblo vienenbregando por obtener. Y, cada vez más, ha hipoteca-do el país a los intereses crecientes de los monopo-lios supranacionales.

Esa estructura y estos intereses actuando afavor de una teoría política de “seguridad interna”entronizaron un estado dictatorial y una orientacióneconómica que llevaron a una situación de verdaderaindefensión en derechos humanos, en salud y asis-tencia para las grandes mayorías populares.

A los niveles críticos habituales de vida y detrabajo generadores de causas sociales de enferme-dad para las clases populares, se agregaron en estosúltimos siete años condiciones de hambre y desnutri-ción, de miedo, angustia y desocupación con jorna-das de 14/16 horas de labor diaria y salarios insufi-cientes, de empeoramiento de la vivienda; de la faltade cloacas y de agua potable, con polución crecientee incontrolada del medio. Todo esto ha permitido a laenfermedad y a la muerte ganar terreno, dandomayor extensión y gravedad a enfermedades que, enrazón del progreso científico debían ser dominadas:infecciones infantiles en general, tuberculosis, enfer-medad de Chagas-Mazza, parálisis infantil...

A los padecimientos propios de la enfermedadse han sumado los inconvenientes y dificultades de lasupresión y del deterioro de los hospitales públicos,del acceso cada vez más problematizado a los distin-

tos tipos de asistencia, al arancelamiento de todas lasatenciones con encarecimiento sideral de medica-mentos y servicios y a una deshumanización crecien-te del aparato asistencial.

Los profesionales, técnicos y demás trabajado-res del área han sido atrapados en esta superestruc-tura, inducidos los más a luchar para sobrevivir,muchos a costa de sus propias aspiraciones de servi-cio y, para algunos entrando en las variantes dellucro. Pero, para la gran mayoría de jóvenes profesio-nales, con dificultades para su capacitación y conangustia por conseguir fuentes de trabajo, el sistemase constituye en factor de frustración.

HACIA LA VIGENCIADEL DERECHO A LA SALUDSin duda la magnitud y complejidad del daño es tal,que para llegar a las soluciones de fondo hay que pen-sar seriamente en los cambios de estructura económi-co-social que nuestro Partido propone con la revolu-ción democrática, agraria, antiimperialista con vistas alsocialismo. Porque es necesario liberar las fuerzasproductivas que abrirán las posibilidades de un autén-tico desarrollo nacional y, a la vez, crear el poder queimpida las maniobras obstructivas de los monopolios,la oligarquía, el capital financiero y todos sus persone-ros políticos. La sociedad argentina podrá así asentar-se sobre bases estables para producir bienes y servi-cios accesibles a toda la población.

En esa lucha del pueblo argentino podrá tomarcuerpo la defensa del Derecho a la Salud y los próxi-mos gobiernos harán cumplir que el Estado sea elgarante efectivo de la vigilancia de ese derecho.

Las luchas populares, y de la clase trabajadoraen especial, por sus reivindicaciones por una mejoratención médica y por mejor salud, constituyen lacolumna vertebral de ese proceso. Y podrá contar

[DOCUMENTOS POLÍTICOS]

Salud: Emergencia Nacional.Propuestas de los Comunistas.

Partido Comunista

Page 28: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

2 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

con la alianza de todos los científicos, profesionales ytécnicos que asumiendo la dignidad social de su que-hacer, entiendan que sus reivindicaciones están indi-solublemente ligadas a la salud del pueblo y al pro-greso del país.

Y sus entidades profesionales adquirirán asícon mayor profundidad, el carácter de participantesen el proceso de lucha para llegar a una única medi-cina para todo el pueblo argentino, de la mejor cali-dad, sin dejar de defender sus propios derechos decapacitación, de trabajo, de remuneración, etc.

En ese camino, nada fácil por cierto, surgirándiferentes propuestas para enfrentar la crisis asisten-cial. Las propuestas de los distintos partidos políticos,su difusión, su debate público, el esfuerzo por hacerparticipar en él a todos los sectores, forma parte vivadel proceso democrático, visto no sólo como objetivoelectoral, sino también como el más trascendente deeducación sanitaria y democrática que estimule en lagente la conciencia de su necesaria participación enlos movimientos y luchas por la salud y la mejor aten-ción médica.

En esos debates y de los esfuerzos de los par-tidos políticos y las organizaciones obreras y popula-res y de los profesionales y demás trabajadores invo-lucrados, pueden surgir acuerdos sobre programasbásicos con los cuales aportar al nuevo gobiernoconstitucional orientaciones que tendrán desde ya unapoyo estabilizador.

LAS PROPOSICIONES ASISTENCIALESY LA DEMOCRACIA RENOVADANuestra concepción en materia de política nacionalde salud apunta a un sistema único de cobertura, a

un Servicio Nacional de Salud, al que habrá que lle-gar en el curso de las decisiones surgidas en unademocracia nacional renovada, representada por ungobierno de nuevo tipo que recoja efectivamente lasaspiraciones populares.

Esa democracia renovada se gesta desde yacon la amplia participación de todos, la fervorosadecisión de unir a todos los sectores democráticosdel país en objetivos compartidos y posibles y supe-rar los intereses sectoriales en la comprensión que losectorial se resuelve en el éxito de lo general nacio-nal.

Creemos indispensable establecer coinciden-cias entre los partidos democráticos y todas las fuer-zas sociales (movimiento obrero, organizacionesmédico-gremiales, odontológicas, farmacéuticas,etc., universidades, movimientos populares) paralograr la aplicación de medidas positivas en salud.

Nosotros partimos del convencimiento de laexistencia de una verdadera Emergencia Sanitariaque requiere soluciones urgentes que comiencen apaliar los padecimientos del pueblo argentino. Sobreella es que exhortamos a llegar a acuerdos mínimossuficientes, sin desmedro que discutamos programasmás exigentes, más profundos y que exigirán un máslargo plazo.

Pero no podemos discutir grandes planes teó-ricos en las condiciones de escasa factibilidad quevive el país en esta etapa de transición política, mien-tras una cantidad inaceptable de niños, adultos yancianos se enferma y muere injustificadamente.

Por eso en este documento, tras enumerarnuestros principios básicos para una política desalud actualizada, enunciamos las medidas más

PRINCIPIOS BÁSICOS PARA UNA POLÍTICA DE SALUD

1 En el marco de una política de auténtico desarrollo nacional de carácter democrático y popular, sedebe establecer una política específica del área salud que parta del establecimiento del Derecho ala Salud como principio rector para la reasunción del Estado de sus responsabilidades y obligacio-nes en el área. En consecuencia se debe centrar la planificación en el mejoramiento y desarrollodel sector público.

2 Asignar en la política de salud la importancia que corresponde, no sólo a las tareas de reparaciónde la salud sino también a su promoción, a la prevención de la enfermedad y a la rehabilitación físi-ca, mental y social.

3 Serán tareas prioritarias la medicina estatal gratuita, la asistencia integral de los sectores másempobrecidos del pueblo, la asistencia integral de los trabajadores y la mejor atención de la infan-cia, maternidad y ancianidad.

4 Deben mejorarse los servicios existentes en el país, coordinando lo estatal con los otros subsecto-res.

5 Con estos objetivos impulsar la participación activa y protagónica de las organizaciones populares,partidos políticos, sindicatos, etc. y las organizaciones de profesionales y técnicos del sector.

6 Regionalizar la asistencia para que los problemas se analicen y resuelvan preferentemente a nivellocal, con participación popular. Con ese fin habrán de crearse Consejos Sanitarios en los que par-ticiparán el Estado y las organizaciones populares y de trabajadores de asiento local.

7 Los recursos financieros deben ser considerados según necesidad de la población y no como rema-nentes de un presupuesto de gastos de la Nación.

8 Impulsar la educación sanitaria con base científica y social, utilizando todos los recursos disponi-bles (sistema educacional en todos sus niveles y medios de comunicación masiva).

Page 29: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

3Salud: Emergencia Nacional. Propuestas de los Comunistas

urgentes a aplicar para mejorar el acceso popular ala atención médica y la extensión de los servicios ypasamos revista luego a los rubros más importantesde la organización y el quehacer asistencial paraaclarar nuestras posiciones.

HOSPITAL PÚBLICOPara cumplir los objetivos de este plan y los principiosde una política en salud de beneficio popular es nece-sario fortalecer y desarrollar el hospital público y lasdemás dependencias asistenciales de carácter esta-tal para ampliar el alcance de los servicios del hospi-tal a los centros periféricos del mismo.1) Suspender todo cierre de hospitales y servicios

hospitalarios.2) Rehabilitar los servicios cerrados, y los hospi-

tales clausurados (ej. Hosp. Rawson de CapitalFederal).

3) Rehabilitar en general la capacidad instaladaociosa. Concluir la construcción de los hospita-les y servicios paralizada para equiparlos yhabilitarlos inmediatamente.

4) Mejorar los hospitales en funcionamiento en suconfort, su reequipamiento humano y materialy mejorar su mantenimiento.

5) Establecer para cada hospital general un “áreaprogramática”, es decir, una unidad geográficafuncional centrada en el hospital que asume lasfunciones básicas sanitario-asistenciales paratal región.

6) Desarrollar en el hospital y sus centros periféri-cos las funciones preventivas básicas: vacuna-ciones, detección precoz de enfermedades,control nutricional, control bromatológico, con-trol ambiental, etc.

7) Completar los planteles humanos para cumplircorrectamente con la ampliación de funciones:profesionales (médicos, psicólogos, odontólo-gos, bioquímicos, etc.), de enfermería, de man-tenimiento, de limpieza.

8) Humanizar la atención hospitalaria en el tratocon los enfermos y familiares; eliminando lasesperas injustificadas (las largas colas), mejo-rar la alimentación, la higiene y confort.

9) Recobrar para el hospital público las funcionesdocentes de investigación biomédica y biosocial.

10) Democratizar la conducción del hospital, conparticipación del personal y de las organizacio-nes sociales (sindicatos, sociedades de fomen-to, comisiones vecinales, etc.) de su zona deinfluencia.

11) Proyectar y edificar nuevos hospitales enzonas críticas por la concentración demográfi-ca y la falta de capacidad instalada.

CENTROS PERIFÉRICOSLos centros asistenciales periféricos tienen nombresdiversos según la concepción con que se los utilice:centros de salud, unidades sanitarias, consultoriosperiféricos, etc. Lo importante es que estén suficien-temente equipados para que cumplan tareas de

Atención Primaria que sería “la asistencia sanitariaesencial basada en métodos y tecnologías prácticos,científicamente fundados y socialmente aceptables,puesta al alcance de todos los individuos y familiasmediante su plena participación y a un costo que lacomunidad y el país puedan soportar...” (Declaraciónde Alma Ata. Conf. Internacional sobre AtenciónPrimaria, OMS 1978).1) Estos centros periféricos formarán parte del

área programática cuya cabecera será el hos-pital que se transforma en centro de referenciapara patologías o consultas de mayor comple-jidad. Estos centros desarrollan los planes devacunación controlada, detección y contralorde enfermedades crónicas, infecciones endé-micas o epidémicas, degenerativas, desnutri-ción infantil. Incorporarán a las organizacionesde voluntarios y/o profesionales en tareas pro-gramadas hacia la comunidad.

2) Deben crearse centros periféricos en zonas demayores necesidades: barriadas obreras, villasde emergencia, etc.

3) Centros con características especiales debenser creados para atender problemas de lapoblación rural dispersa y de las zonas de fron-tera. Son prioritarios en estas zonas los proble-mas de transporte de los enfermos o de las bri-gadas sanitarias que se creen al efecto.

LAS OBRAS SOCIALESLas obras sociales (O.S.) deben ser estimuladas amejorar la calidad de sus atenciones y facilitar detoda manera posible el acceso a las mismas a todossus afiliados y en todo lugar del país.1) Mientras no se debata ampliamente el régimen

de seguridad social o la forma de servicio unifi-cado de salud en el país bajo gobiernos cons-titucionales, debe mantenerse la ley 18.610con las correcciones inmediatas que la expe-riencia indica como necesarias. Con estorechazamos todo intento de sustraer a las O.S.sindicales de su natural jurisdicción gremial. Y,además, es imperativo que cesen todas lasintervenciones a los gremios y a las O.S.

2) Debe ser democratizada la dirección de lasO.S. Sus directivos gremiales deben ser elegi-dos directamente por sus afiliados y no nom-brados por los dirigentes sindicales. En ladirección del área asistencial deben participarlos trabajadores de salud de cada O.S. profe-sionales, técnicos y no técnicos.

3) Es necesaria la difusión y análisis de la estruc-tura de recursos y gastos de cada O.S.

4) Mejorar la capacidad instalada propia y com-pletar los planteles humanos necesarios yestablecer condiciones correctas de trabajopara todo el personal, con estabilidad, remune-ración adecuada, etc.

5) Establecer carreras profesionales y demás tra-bajadores, con ingresos por concursos, escala-fón y posibilidades de perfeccionamiento.

Page 30: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

4 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

6) Ampliar sus posibilidades de atención median-te convenios entre las distintas O.S. y comple-mentar servicios para sus afiliados.

7) Facilitar mecanismos convenidos para ampliarposibilidades de internación de consultas yestudios especiales con el subsector público.Aquí hay que reiterar que se trata del hospitalpúblico mejorado y eficiente y con capacidadinstalada suficiente para mantener igualdad deacceso y de trato para todo paciente, sea o noprotegido por alguna O.S.

8) La estructura de los Institutos Nacionales deO.S. instituidos por leyes (18.610 para trabaja-dores en relación de dependencia y 19.032para jubilados y pensionados) deben tambiénser democratizadas con la participación de losusuarios, el Estado y los profesionales.

9) Los recursos financieros para este plan semencionan en el rubro específico y lo hemosadelantado en las Medidas Urgentes.

EL SECTOR PRIVADODiferenciamos en este sector a las grandes entidadesempresariales con tendencia a monopolizar los con-tratos de la seguridad social, que suelen explotarmano de obra médica, de multitud de consultorios yestablecimientos que cumplen todavía una funciónsocial indudable:a) Consultorios médicos, odontológicos, bioquími-

cos.b) Muchas pequeñas clínicas y sanatorios disper-

sos por el país que frecuentemente constituyenel único recurso de atención ambulatoria y deinternación.

c) Muchas instituciones de atención de variadadimensión y capacidad, surgidas de formas desolidaridad de grupos; colectividades extranje-ras, sociedades de fomento, asociaciones veci-nales, clubes, etc. y algunas formas cooperati-vas que cumplen efectivamente con los princi-pios del cooperativismo.Son todas formas que merecen la protección

del Estado mientras cumplan normas nacionales deatención médica, se incorporen a los programasregionales sanitarios, cumplan con las leyes laboralesen vigencia y establezcan carreras profesionales ade-cuadas.

MATERNIDAD E INFANCIAa) Resolver el problema de la alimentación de los

niños menores de un año, preescolares y esco-lares y la suplementación alimentaria de lamujer embarazada.

b) Resolver prioritariamente el déficit de vacuna-ciones, especialmente en lo que hace a vacu-na triple, BCG, Sabin y antisarampionosa.

c) Asegurar la atención prenatal de la mujer emba-razada, lo que será progresivamente factiblecon la ampliación de servicios ya expuesta.

d) Del mismo modo, a través de distintos efecto-res, efectivizar el control de salud y enferme-

dad de los niños desde su nacimiento hasta laadolescencia.

MEDICINA DEL TRABAJOLa medicina del trabajo debe abandonar su papel decontrol de ausentismo, de incentivación de la produc-ción y de certificación de incapacidades. Asimismodebe superar el concepto de resarcir la salud por laindemnización. Las medidas cautelares para la saluddel trabajador deben comenzar por cumplir con lasnormas existentes y mejorar las que corresponde convistas a efectivizar la disminución de riesgos de fati-ga, enfermedades y accidentes, tanto en la industriacomo en el campo.

Para ello es inexcusable que los propios traba-jadores participen en el control de la aplicación deleyes y reglamentos.

El Ministerio de Salud debe asumir las funcio-nes normativas pertinentes con el asesoramiento decomisiones de las confederaciones de trabajadoresde cada rama.

SALUD MENTAL1) Crear servicios de Psicopatología en todos los

hospitales generales.2) Habilitar consultorios psicológicos y/o psiquiá-

tricos en los centros periféricos.3) Propiciar la creación de consultorios de salud

mental en organizaciones populares (Sociedadde Fomento, Club, etc.) que estarían vincula-dos a los centros periféricos y hospital de suzona.

4) Actualizar las funciones y mejorar las condicio-nes higiénicas de alimentación de trato huma-no, de recreación y laborterapia para lospacientes internados en los hospitales psiquiá-tricos.

ATENCIÓN A JUBILADOS1) Resolver con urgencia un plan integral de

mejoramiento de la atención médica que serealiza a través del PAMI y en todos sus nive-les de atención.

2) Suprimir cualquier arancel que se exija al jubi-lado para sus atenciones.

3) Resolver rápidamente el FormularioTerapéutico para el suministro gratuito de losmedicamentos esenciales de las enfermeda-des más comunes de la tercera edad, y el des-cuento más importante a que se pueda llegaren todos los demás. (Tener en cuenta loexpuesto en el tema medicamentos).

4) Ampliar la cobertura odontológica incluyendolas prótesis imprescindibles para poder alimen-tarse.

5) Democratizar la conducción del PAMI en todoslos niveles con participación de los usuarios, elEstado y los profesionales.

SALUD BUCALDebe asegurarse el tratamiento preventivo y curativo

Page 31: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

5Salud: Emergencia Nacional. Propuestas de los Comunistas

de la patología dental de los sectores materno infan-til y escolar dotando de recursos a los centros perifé-ricos y activando estructuras existentes en las escue-las, en las Fuerzas Armadas, etc. y coordinando conlos efectores privados necesarios.

Se tenderá a lograr programas para tratar laplaca bacteriana y la maloclusión.

ENFERMEDADES ENDEMO-EPIDÉMICASDE MASASSe establecerán planes de lucha para controlar yerradicar enfermedades de masas, posibles de sercontroladas de acuerdo con la evolución de la medi-cina y que requieren que se tomen las medidas deorden social y económico que lo permitan, además delas científicas y asistenciales propiamente dichas:tuberculosis, enfermedad de Chagas-Mazza, brucelo-sis, hidatidosis, fiebre hemorrágica del Noroestebonaerense, etc.

Planes especiales que privilegien la educaciónsanitaria deben establecerse para las enfermedadesvenéreas y las toxicomanías.

MEDICAMENTOS1) Congelamiento del precio de los medicamen-

tos.2) Aplicación del Formulario Terapéutico Nacional

de drogas básicas.3) Creación de la Droguería Nacional de drogas

básicas para suministrarlas a la industria nacio-nal y a las instituciones públicas que puedanfraccionarlas.

4) Diversificar los mercados de provisión de mate-rias primas e insumos. Especial atención a lospaíses socialistas por las condiciones favora-bles de importación.

5) Desarrollar el Instituto Nacional deFarmacología para investigación, vigilancia ycontralor de calidad de los medicamentos ydesarrollo de nuevas drogas.

6) Restablecer la capacidad del Instituto Nacionalde Microbiología para fabricar sueros y vacu-nas y similares.

7) Desarrollar una campaña nacional para privile-giar una política de implantación de la químicapesada nacional. Suspender la adhesión a losConvenios de París que refuerzan nuestradependencia tecnológica.

8) Integrar en la formación profesional de grado yposgrado los conocimientos farmacológicos yestimular el juicio crítico en la utilización y eva-luación de los medicamentos.

9) Reformar la ley de Transferencia de Tecnología(N° 22.426/81) que significó un abandono totaldel objetivo de salvaguardar el interés público ydefender la posibilidad de desarrollo económi-co tecnológico nacional.

RECURSOS FINANCIEROSLos más importantes han sido adelantados entre lasMedidas Urgentes. Partiendo de la abolición de toda

contribución directa que deban hacer los pacientes alconcurrir a las instituciones públicas o de O.S. esimprescindible:1) Decidir un aumento presupuestario de emer-

gencia para atender las necesidades del plansanitario de emergencia, en función de ser elEstado el principal responsable de la vigenciadel Derecho a la Salud.

2) No será aumentado el aporte de trabajadores yjubilados y pensionados a las O.S. Si la nece-saria mejora de la atención por las O.S. impor-ta un balance deficitario para las mismas,deben ser subsidiadas por el Estado.

3) Para la financiación de esos recursos es nece-sario revisar las estructuras de ingresos y degastos del circuito financiero de las ObrasSociales y de los Institutos nacionales de O.S.(leyes 18.610; 19.032 y 19.316), así como losingresos por previsión social, por las leyes deaccidentes de trabajo, para su racionalización.

4) El criterio de financiación debe orientarse hacia“una reforma impositiva que desgrave los pro-ductos esenciales y recaude en los patrimonioscon el principio proporcional de mayores gravá-menes para quienes más tienen” (Plataformadel Partido Comunista). Y en lo inmediato esnecesario un impuesto a las ganancias de losmonopolios extranjeros, grandes capitales ygrandes fortunas.

INFORMACIÓNDebe actualizarse toda la información epidemiológicapara el estudio de las necesidades de atención ycrear una organización operativa para la recolecciónperiódica, sistemática, procesamiento y difusión de lainformación sanitaria epidemiológica, para conoci-miento de la realidad nacional y coherente formula-ción de programas.

UNIVERSIDADSe deben coordinar los esfuerzos de estudios y pla-nes sanitarios de los sectores oficiales y de la seguri-dad social con la Universidad renovada. Esta debejugar un papel importante en la investigación de losproblemas más agudos de la realidad nacional, en eldiagnóstico de situación y en materia de medicamen-tos y drogas.

En los planes de estudio deben incorporarse, laproblemática nacional y su patología prevalente,tanto en el pregrado como en el posgrado.

Para asegurar la proyección de la educacióncontinua desde la universidad y el Posgrado y loscorrectos contenidos curriculares, debe volverse a laincorporación de los delegados de graduados en elgobierno tripartito de la universidad.

RECURSOS HUMANOS1) Deben mejorarse inmediatamente las condicio-

nes laborales de todos los trabajadores de lasalud.

2) Deben ser actualizados los planteles hospitala-

Page 32: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

6 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

rios. El plan de emergencia y de reactivacióndel sector público permitirá absorber el trabajode muchos profesionales técnicos y paramédi-cos desocupados o subocupados.

3) El sector público debe disponer sueldos dignosespecialmente para quienes trabajan a tiempocompleto. Lo mismo debe obtenerse en el sec-tor de O.S.

4) En todos los sectores (públicos, de O.S. y pri-vado) deben reglamentarse las condiciones detrabajo y la capacitación del personal técnico yno técnico. Es necesario un plan de urgenciapara la capacitación del personal paramédicode todo nivel, enfermería y auxiliares de todotipo para completar planteles, especialmenteen el sector público.

5) Deben crearse estímulos para destinos geo-gráficos especiales, con incentivos económi-cos y garantía de capacitación.

6) Se crearán carreras profesionales en las juris-dicciones donde no existan, con tendencia allegar a una carrera sanitaria nacional.

7) Deben ser repuestos en sus cargos todosaquellos que fueron separados sin sumarioprevio.

8) Deben aumentarse las plazas de médicos resi-dentes y renovar su programa de formaciónincorporando el aprendizaje de los conceptos ylas prácticas de Atención Primaria.

MINISTERIO DE SALUDEl Ministerio de Salud debe asumir las funciones per-tinentes con autonomía política sectorial y recursossuficientes para el apoyo técnico, el análisis científicode los problemas y la movilización ágil de los elemen-tos y recursos para todas aquellas áreas del sistemaen marcha en que las necesidades poblacionales lorequieran. En el curso de esas actividades desarrolla-rá su función de centralización normativa.

El Ministerio reforzará o creará las dependen-cias imprescindibles para la recolección y análisis detoda la información necesaria para los planes y pro-gramas de salud y para analizar los problemas dedefecto de la cobertura asistencial, las superposicio-nes funcionales entre los subsectores, el dispendiode recursos, etc.

Desde el punto de vista de la política y los pla-nes de salud, debe evitar encerrarse en los límitestécnicos; como organismo político debe abrirse a lacomunidad donde tiene asesores naturales: universi-dades, asociaciones científicas y gremiales de los tra-bajadores del área salud y los propios representantesde los usuarios de los servicios asistenciales. Lamisma gestión ministerial debe ser compartida condelegados ad hoc de esas mismas organizaciones.

PROPÓSITO ANUALEstas propuestas en materia de salud, en nuestrosentir, permitirán avanzar en la defensa de los intere-ses populares. Y si logramos obtener coincidenciascon las aspiraciones y expectativas de las mayoríasnacionales y ello se traduce en convergencia políticacon otros partidos y sectores sociales diversos, pode-mos reforzar la marcha del país hacia su instituciona-lización y las soluciones inmediatas más necesarias.

En resumen estas propuestas se inscriben enla plataforma nacional del Partido como un punto dearranque sectorial “para la ingente tarea de restituir laidentidad nacional, democrática e independiente deun país cuya reconstrucción exigirá un largo esfuerzo,garantizado por un gobierno auténticamente popularbasado en la participación efectiva del pueblo entodos los órdenes de deliberación, planeamiento, eje-cución y control; sustentado a su vez por un ampliofrente democrático cuya función va mucho más alládel acto electoral en sí”.

Buenos Aires, 17 de mayo de 1983

Page 33: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

I. FUNDAMENTOS DOCTRINARIOS

Nuestro concepto de saludDe acuerdo con nuestro pensamiento socialcristiano,concebimos a la salud como una realidad sociocultu-ral resultante de la interrelación entre las personas,sus instituciones y el medio ambiente.

A partir de esta definición, y aceptando que laenfermedad es una cuestión básicamente social y noun problema meramente individual, sostenemos que lamisma no puede enfrentarse al margen de los factoreseconómicos y socioculturales que la condicionan. Esnecesario, por lo tanto, una respuesta integradora que,trascendiendo al sector salud, abarque aquellas activi-dades de otros sectores que hacen a la satisfacción delas necesidades básicas de las personas.

Por eso afirmamos que la promoción de lasalud y la prevención de la enfermedad deben basar-se en un proceso de desarrollo personal y comunita-rio, donde la respuesta profesional del sistema deservicios sea el complemento indispensable para suefectiva recuperación y consolidación.

La salud como derechoLa salud, en cuanto derecho social básico, represen-ta una “hipoteca social” para toda la comunidad, lacual debe asegurar a sus integrantes una plena acce-sibilidad a los bienes de la salud.

La familia y el EstadoConsideramos que la familia es el sujeto y el centrode las acciones de salud, y como tal, el protagonistaprincipal —por sí misma y por las sociedades interme-dias que constituye— del cuidado, desarrollo y mante-nimiento de la salud de las personas. En consecuen-cia, enfatizamos la necesidad de desarrollar y exten-der la atención primaria de la salud lo más cerca

posible del grupo familiar, a fin de asegurar la perso-nalización y continuidad de la atención y su coordina-ción con niveles más complejos de asistencia.

El Estado, como garante y promotor del biencomún, debe: procurar activamente que se alcancenlos objetivos comunitarios, asegurando que el interésgeneral prevalezca sobre apetencias particulares y ala vez actuar eficazmente para la solución de situa-ciones carenciales que atenten contra grupos demayor vulnerabilidad de la población. Para ello debe-rá elaborar un Plan Nacional de Salud que tengaestructura federal, contemple las expresiones regio-nales y facilite la participación plena de la comuni-dad, siendo responsable del cumplimiento de susobjetivos.

En esta relación entre personas, Estado ysociedades intermedias que se da en el área de lasalud, son también válidos los principios de solidari-dad, pluralismo y participación que la DemocraciaCristiana postula como fundamentos de su políticasocial. Solidaridad que une a las personas pararesolver problemas comunes, a nivel comunitario,sectorial o nacional. Pluralismo que afirma la unidaden la diversidad y permite la integración de todos losrecursos existentes. Participación que posibilita laconducción comunitaria de asuntos que, por su natu-raleza pública, interesan a toda la sociedad.

Con referencia a este último aspecto conside-ramos como fundamental el perfeccionamiento y con-solidación de los grupos intermedios (organismosprofesionales, obras sociales, sindicatos etc.) en ladefinición, desarrollo y control de la política social ysu aplicación.

Es en este contexto que señalamos a la fami-lia como destinataria principal de nuestra actividad yagente de salud de la comunidad, a los más necesi-tados como los sujetos prioritarios de nuestro esfuer-

[DOCUMENTOS POLÍTICOS]

Propuesta de la Democracia Cristianapara la Salud de los Argentinos

Partido Demócrata Cristiano

Page 34: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

2 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

zo, y al desarrollo de la Atención Médica Primariacomo la piedra angular sobre la que construiremosnuestra respuesta asistencial.

II. SISTEMA DE ATENCIÓN MÉDICALa evolución del sistema de salud en la Argentina,con sus tres sectores tradicionales —el público, el pri-vado y el de la seguridad social— ha determinadoque el conjunto de todas las obras sociales del paísconstituya, en estos momentos, la base de un verda-dero Seguro Nacional de Salud que, sin embargo,presenta falencias en relación con su cobertura y consu organización.— Si bien las obras sociales cubren con sus ser-

vicios a más de los dos tercios de la población,las mismas no incluyen de un modo adecuadoa los trabajadores independientes y a los des-ocupados.

— Debido a que los fondos de las obras socialesprovienen principalmente de quitas al salario,persisten diferencias en la capacidad financie-ra de las entidades, que se traducen en distin-tos niveles de calidad y cantidad de los servi-cios que brindan a sus afiliados.

— Las Obras Sociales atienden a sus beneficia-rios, preferentemente, a través del sector priva-do; en cambio los hospitales públicos, queposeen la mayor parte de la capacidad instala-da de camas del país, aún no han logrado unaeficaz relación funcional con dichas obrassociales.

— Las modalidades de organización y pago de losservicios que brindan las obras sociales hanprovocado un énfasis en medicina curativa,con un cierto descuido de las acciones de pre-vención de la salud.

— El desarrollo acelerado de la alta tecnologíamédica y el interés económico —principalmen-te de las industrias productoras de equipamien-to médico y de medicamentos—, han genera-do, al amparo de la política económica y deldeterioro de la relación médico-paciente, unconsumo excesivo y perjudicial que incremen-ta indebidamente el costo de la atención sinlograr un mejoramiento proporcional de lasalud de la población.

Nuestra PropuestaAfirmamos que la organización y estructura del siste-ma de atención médica debe tender a lograr una flui-da accesibilidad al mismo, eliminando las barreraseconómicas, geográficas y culturales, y rescatando larelación médico-paciente como un acto único, priva-do y de encuentro bi-personal.

El sistema deberá diseñarse en función de lasnecesidades de salud de la población, apartándolo deuna concepción meramente mercantilista de la medi-cina, asegurando la calidad y oportunidad de lasprestaciones y desalentando el consumo irracional yla tecnificación inorgánica.

Para ello proponemos un Seguro Nacional

de Salud, constituido sobre la base de las actualesObras Sociales que será: universal en su cobertura,pluralista y descentralizado en su estructura y admi-nistración, solidario en su financiamiento y participati-vo en su conducción.— Cobertura universal, por incorporación al sis-

tema de los desocupados y trabajadores inde-pendientes, en un pie de igualdad con respec-to a la actual población beneficiaria.

— Estructura pluralista, por medio de la integra-ción al sistema de todos los sectores existen-tes; el público, el privado y el de obras sociales.

— Financiamiento solidario, por el ingreso alsistema de recursos provenientes de distintasfuentes y el funcionamiento efectivo de unfondo de compensación.

— Administración participativa tanto de losbeneficiarios como de los profesionales y técni-cos de la salud, para que a través de sus orga-nizaciones representativas (sindicatos, asocia-ciones gremiales, de médicos, odontólogos,bioquímicos y otros trabajadores de la salud),participen en la definición de la política desalud, en la normatización de las prestaciones,en el cumplimiento de los objetivos propuestosy en la conducción de las obras sociales.

Financiación del Seguro Nacional de SaludEl sistema tenderá a asegurar la gratuidad de laatención en el punto de consumo, es decir que selimitará el pago directo de las personas en elmomento que se demandan servicios sólo a ciertasprestaciones de acuerdo con prioridades socialesclaramente fijadas.

Para evitar las injustas diferencias de calidad ycantidad de servicios que reciben los beneficiariossegún la capacidad financiera de las Obras Sociales,se pondrá en funcionamiento efectivo un fondo decompensación que actúe como un verdadero nivela-dor, de manera tal que cada habitante reciba la aten-ción médica adecuada para cubrir sus necesidadesbásicas en salud.

La financiación del Seguro Nacional de Saludprovendrá de los aportes y contribuciones derivadosdel salario del personal en relación de dependencia,de los aportes directos de los trabajadores indepen-dientes, de los aportes del Estado para cubrir a losdesocupados (Rentas Generales), de los aportes delEstado con destino específico (docencia, investiga-ción, programas dirigidos a poblaciones vulnerables)y del aporte directo de los beneficiarios para determi-nadas prestaciones.

Organización del Sistema EfectorLa conducción política del sistema requiere unificaren un solo Ministerio el área de salud pública y lasáreas de seguridad social referidas a prestacionesasistenciales (obras sociales, INOS. etc.) tanto en elnivel nacional como en el provincial y municipal.

En la organización regionalizada del sistemade efectores tendrán activa participación Consejos de

Page 35: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

3Propuesta de la Democracia Cristiana para la Salud de los Argentinos

Salud integrados por miembros elegidos por votodirecto de la población y representantes de las orga-nizaciones profesionales reconocidas.

Se incorporarán al sistema los efectores delsector público, de obras sociales, y los privados queopten por participar del mismo.

Los establecimientos asistenciales, cualquierasea el sector al que pertenezcan y la jurisdicción en laque se encuentren instalados, formarán parte de unsistema de atención médica regionalizada, con líne-as claras de referencia de pacientes.

Basados en la concepción de la familia comonúcleo y agente de la salud, los programas de aten-ción médica darán absoluta prioridad a la atenciónprimaria, ejercida por médicos generales, clínicos opediatras, y estarán destinados a lograr en ese niveluna relación personalizada médico-paciente y médi-co-familia, a partir de la libre elección de los profe-sionales por parte de los beneficiarios. A su vez, cadaprofesional estará en estrecha relación con estableci-mientos de internación y apoyo de especialistas, demodo tal que se conformen grupos integrados deatención.

El sistema contemplará en forma particular, laimplementación de programas especiales basadosen necesidades específicas de determinados gruposde población, tales como:a) Programa de atención materno-infantil, que

desarrolle acciones de prevención y promociónde salud especialmente para aquellos gruposde población que por circunstancias económi-cas, sociales o geográficas, tengan dificultadpara acceder a los servicios.

b) Programa de atención rural, basado en la aten-ción médica primaria y con líneas de derivaciónperfectamente definidas, que permita superarlas desigualdades de disponibilidad de servi-cios.

c) Programas de atención de patologías preva-lentes, que como la tuberculosis, Chagas, hida-tidosis, uncinariasis, venéreas, infecciosasinmunizables, exijan la movilización simultáneade variados recursos sanitarios junto a accio-nes del ámbito social.

d) Programa de rehabilitación que promueva for-mas efectivas de integración de las actividadesde rehabilitación a las habituales de recupera-ción de la salud; y que desarrolle modalidadesde atención que permitan la rápida insercióndel paciente a su medio social en las mejorescondiciones.

e) Programa de geriatría y gerontología que pro-mueva una atención integral al anciano en suámbito familiar y con el apoyo de la comuni-dad.En todos estos programas se deberá asegurar

la participación amplia de los profesionales de lasalud en la normatización de actividades y la de todala población, a través de sus entidades representati-vas, en la detección de las necesidades y en la imple-mentación de las mismas.

El Hospital PúblicoEs imprescindible lograr la recuperación integral delhospital público, que deberá constituirse en una delas piezas claves del sistema sanitario argentino,tanto por su tradición como por el hecho de contarcon más del 60 % de las camas de internación de quedispone el país.

Dicha recuperación deberá alcanzarse a travésde su integración con los diferentes subsectores ysistemas de atención médica existentes en el país, demodo tal que se adapte a las exigencias de unSeguro Nacional de Salud y se coloque al servicio delas necesidades de toda la comunidad.

Para lograr los objetivos propuestos, se promo-verá el dictado de una Ley Nacional deReformulación de los Hospitales a la que podránadherir las provincias y que estará basada en lossiguientes principios:

a) FuncionamientoCada hospital se constituirá en una unidad autárqui-ca en lo que respecta a su administración y funciona-miento. Actuará dentro de un sistema regionalizadosegún niveles de complejidad y áreas de influencia, ycumplirá las normas y planes establecidos por lasautoridades sanitarias, las que coordinarán las accio-nes de los diversos establecimientos y ejercerán elcontrol de gestión correspondiente.

b) OrganizaciónLa conducción de cada hospital estará a cargo de unconsejo de administración integrado por represen-tantes elegidos por voto directo de la comunidad a laque sirven y de los profesionales y demás personaldel establecimiento.

Los hospitales podrán funcionar en formacerrada, con su propio cuerpo médico, o abierta, per-mitiendo la participación de todos los profesionalesdel área sin otro requisito que su idoneidad, depen-diendo la definición entre estas opciones de su com-plejidad y zona geográfica de implantación.

c) FinanciaciónCada hospital recibirá fondos del ámbito municipal oprovincial del cual dependa, asignados presupuesta-riamente bajo programas de actividades. Tambiénrecaudará fondos a través de convenios específicospara la prestación de servicios a las obras sociales, laprestación de servicios de medicina laboral a lasempresas y la atención de la demanda espontánea.

Estos aportes serán destinados al propio esta-blecimiento que los genere, a fin de solventar los gas-tos inherentes a funcionamiento, recurso humano yrenovación tecnológica.

d) Recursos HumanosSe establecerán diferentes modalidades y normaspara la actividad profesional y su remuneración,pudiendo cada hospital o grupo de hospitales adherira uno de estos sistemas según sus características ylas preferencias del cuerpo profesional.

Page 36: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

4 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

e) Planeamiento físico y tecnológicoSe formulará un plan de reactivación con metas almediano y largo plazo, a fin de ir adecuando progre-sivamente la actual capacidad instalada.

Concomitantemente, se planificarán las nece-sidades en materia de equipamiento, especialmenteen lo que se refiere a alta complejidad, con el propó-sito de obtener una utilización plena de los recursosexistentes en los tres subsectores, evitando las habi-tuales duplicaciones y la consiguiente dilapidación derecursos.

InvestigaciónSe promoverá el desarrollo de la investigación clínicasobre patologías prevalentes o de tipo zonal, asícomo de las tecnologías administrativas más ade-cuadas para obtener un óptimo rendimiento de losservicios de salud. Para ello se contará con el apoyode la Nación, de las Provincias y de las Universidadesde la región.

InformaciónTodos los establecimientos públicos o privados, cual-quiera sea su jurisdicción integrarán el Plan Nacionalde Estadísticas de Salud, proveyendo la informa-ción requerida tanto para la planificación y la progra-mación de nivel nacional y regional, como para laevaluación del funcionamiento del propio estableci-miento y del cumplimiento de su papel en relacióncon la comunidad a la que sirve.

Recursos HumanosSerá imprescindible desarrollar una política de recur-sos humanos capaz de aportar soluciones integralesa la grave crisis de personal que afecta al sector.

Esta crisis se relaciona con la cantidad, compo-sición, distribución, capacitación y remuneración delos diversos integrantes del equipo de salud, y suconsideración no puede separarse de un enfoqueglobal sobre la formación y utilización de la mano deobra laboral del país.

La elaboración e implementación de dicha polí-tica contemplará la integración entre el sistema for-mador de recursos para la salud y el sistema utiliza-dor de los mismos.

Para ello, el curriculum de las Escuelas deMedicina, Odontología, Bioquímica, etc. deberá enfa-tizar los aspectos relacionados con la prevención delas enfermedades, el fomento de la salud y el tra-tamiento de las patologías regionales.

Será importante asegurar el contacto tempra-no de los estudiantes con la realidad asistencial.Estas ideas implican un cambio fundamental en laorientación pedagógica de la enseñanza.

Simultáneamente se realizará una revisión afondo de los enfoques tradicionales sobre formaciónde recursos humanos, de modo tal que, a partir de lasreales necesidades del país, se establezcan nuevosparámetros para las profesiones, se definan los res-pectivos roles y se ordenen las interrelaciones, contri-buyendo a la creación de un auténtico equipo de salud.

Con la finalidad de revertir las actuales distor-siones se estimulará la formación de personal deenfermería, técnicos y auxiliares, a través de unamejor asignación de recursos y la adopción de meca-nismos idóneos para lograr una mayor motivación:jerarquización de las profesiones, incentivación, esta-bilidad en el cargo, posibilidad de promoción, etc.

Se dará especial énfasis a la formación de pro-fesionales en el postgrado inmediato mediante el sis-tema de residencias. El ideal a lograr será que todoprofesional tenga oportunidad de acceder a esta for-mación intensiva de capacitación. La residencia esta-rá plenamente relacionada con las necesidades deatención primaria de la salud de la población, por loque se ampliarán las plazas de medicina general,medicina interna, pediatría y tocoginecología y se cre-arán residencias en otras profesiones (Odontología,Bioquímica, Enfermería). Al mismo tiempo se imple-mentará un “servicio civil” de manera que parte delcurriculum de los residentes se desarrolle en aquellasregiones del país en donde los recursos profesiona-les son más escasos.

Este sistema, unido a una adecuada regiona-lización del país contribuirá a mejorar la distribuciónde los recursos humanos y su utilización.

Se establecerán asimismo condiciones de tra-bajo y facilidades adecuadas que promuevan el des-arrollo de una educación continuada del cuerpo pro-fesional, a fin de adquirir nuevos conocimientos ylograr mejores niveles en calidad de la atención brin-dada a los pacientes.

Se promoverá la modificación de la ley 17.132del Ejercicio Profesional buscando adecuarla a lasactuales exigencias del sistema de salud, de manerade asegurar mejores niveles de calidad, el trabajo enequipo y la legalización del ejercicio profesional dealgunos grupos, tales como psicólogos y asistentessociales.

En cuanto a la remuneración del trabajo profe-sional, considerando que no existe ningún régimencarente de limitaciones sostenemos que la modalidadde pago puede variar según diversas circunstancias.Pero en todos los casos deberá contemplar buenosniveles de remuneración, favorecer una adecuadarelación médico-paciente, estimular la práctica gru-pal, desalentar las prácticas superfluas y moderar elcrecimiento de los costos sin perjudicar la calidad delas prestaciones.

Salud MentalDado que la salud mental es un emergente de lascondiciones de vida y de la vinculación entre laspersonas e instituciones, las respuestas a las necesi-dades específicas de la población superan el estrictomargen asistencial, para insertarse en acciones deprevención primaria que hacen a la calidad devida. Dichas acciones deben estar dirigidas al fortale-cimiento de los grupos naturales (familia, escuela,sindicato) y a promover valores de solidaridad, departicipación, de convivencia y de justicia frente alos que propone una sociedad consumista, competiti-

Page 37: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

5Propuesta de la Democracia Cristiana para la Salud de los Argentinos

va, violenta e injusta, expresados tanto a través delos medios masivos de comunicación como de lasrelaciones interpersonales.

La prevención específica deberá contemplaractividades con líderes de la comunidad que sonagentes naturales de salud (maestros, médicos gene-rales, agentes sanitarios) y con grupos especialmen-te vulnerables por atravesar crisis vitales.

En el aspecto asistencial se implementará: a) laincorporación del tratamiento de problemas de saludmental a la cobertura del Seguro Nacional de Salud,promoviendo formas tempranas de asistencia queeviten terapéuticas prolongadas e innecesarias y lacronificación de patologías: b) atención e internacióndel enfermo psiquiátrico agudo en establecimientosgenerales; c) Redimensionamiento y humanización dela atención del enfermo psiquiátrico crónico con parti-cipación de la familia y la comunidad.

Se darán respuestas de emergencia para pro-blemas de adicciones (alcoholismo, drogas, tabaquis-mo), delincuencia juvenil y la patología mental deriva-da de agresiones sociales (familiares de víctimas dela violencia y desaparecidos, combatientes deMalvinas y sus familiares, inundados y desocupados).

EquipamientoSerá prioritario establecer mecanismos de reordena-ción del equipamiento existente y elaborar normaspara un re-equipamiento gradual y progresivo, centra-do en las necesidades de salud de la población.

Para ello se considera fundamental la partici-pación del Estado en el control de las importacionesy en la normatización de las condiciones de adquisi-ción e instalación del equipamiento de mayor comple-jidad, a través del otorgamiento de “certificados denecesidad” conforme a requisitos de: número deequipos por población a servir, nivel técnico del servi-cio al que se destina y actualidad de la tecnología aincorporar.

Esta actividad deberá complementarse en elterreno de la educación profesional y comunitaria aefectos de asegurar la calidad y oportunidad de laindicación, evitando la mala aplicación y la excesivademanda, productos ambos de una información dis-torsionada e interesada.

Será imprescindible integrar la acción estatalde normatización y control, la participación profe-sional a través de las universidades y de las socieda-des científicas específicas.

Deberá igualmente promoverse la producciónlocal de equipos en estrecha vinculación con nuestroprograma de apoyo a la industria nacional con lasnecesidades emergentes de la aplicación de la políti-ca sanitaria.

MedicamentosLa solución del problema del medicamento se insertaen una política de salud que asegure a la poblaciónuna fluida accesibilidad al sistema sanitario, asícomo una calidad efectiva de la presentación querecibe. Pero excede sus límites al vincularse directa-

mente con aspectos referidos al desarrollo indus-trial y a las relaciones internacionales, y por ellocon la temática de la dependencia tecnológica, políti-ca y económica.

Esta situación hace que las propuestas secto-riales deban reconocer, además de la factibilidad delas mismas, su efectiva viabilidad, jerarquizando eneste sentido no sólo la explicitación de objetivos fina-les sino también el desarrollo de una estrategia con-creta para alcanzarlos.

A partir de estas consideraciones afirmamoscomo objetivos principales:1) Asegurar la calidad del medicamento y su

oportuna indicación.2) Promover su correcta utilización.3) Lograr su plena disponibilidad.

Para alcanzar dichos objetivos, proponemoscomo medidas concretas:a) Estimular la capacitación continua del cuerpo

profesional, reorientando hacia esta actividadlos recursos que actualmente se destinan a lapromoción publicitaria.

b) Proteger la relación médico-paciente demanera de evitar la utilización del medicamen-to como sustituto de la disponibilidad de aten-ción.

c) Procurar la participación de las entidades pro-fesionales y sociedades científicas en la elabo-ración y difusión de normas terapéuticas y elcontrol de su aplicación.

d) Fomentar la investigación clínica y farmaco-lógica genuina destinada a brindar mayorseguridad y eficacia a la actividad terapéutica.

e) Desarrollar programas de educación sanitariaque desalienten la automedicación y promue-van la mejor utilización del medicamento.

f) Jerarquizar la participación estatal en el des-arrollo y control de la política de medicamen-tos, recuperando el nivel funcional del InstitutoNacional de Farmacología como herramientaclave en la relación técnica con la industria far-macéutica.

g) Reorientar el actual sistema de comercializaciónen función de la salud de la población y no delos intereses mercantilistas, desalentando laintroducción al mercado de productos y formasfarmacéuticas que no signifiquen un real aporte.

h) Coordinar la actividad de los distintos integran-tes del sector salud para la elaboración yactualización permanente de un listado demedicamentos básicos para su utilización porel Seguro Nacional de Salud.

i) Implementar formas de control de costos ycomercialización que evite distorsiones en losprecios de venta y favorezca la función socialdel medicamento.

j) Promover y ordenar la industria nacional,estimulando la producción local de drogasbásicas y dando intervención al Estado en laimportación y comercialización de drogas y tec-nologías.

Page 38: Estructura y dinámica del recurso humano médico de la ...capacitasalud.com/biblioteca/wp-content/uploads/2016/02/Cuadernos... · de egresadas, sigue una proporción semejante, unos

6 CUADERNOS MÉDICO SOCIALES Nº 26 - DICIEMBRE DE 1983

III. SANEAMIENTO AMBIENTALPuesto que hemos definido la salud como una resul-tante de la interrelación entre las personas, susinstituciones y el medio ambiente, sostenemos lanecesidad de contar con un medio ambiente aptoque, además de estar libre de riesgos para la salud,permita una vida higiénica y una óptima calidad devida.

Para ello será necesario enfrentar decidida-mente tanto los factores referidos al macro-ambiente(disponibilidad de agua potable, eliminación de excre-tas, desagües fluviales, recolección y disposición deresiduos, contaminación del aire, suelo y cursos deagua, etc.) como los referidos al microambiente (sane-amiento ambiental de los lugares de trabajo, estudio,concentración de público, hospitales y viviendas).

La complejidad de los problemas planteadosexige una respuesta que, por su envergadura, sóloserá posible si las acciones se desarrollan a partir de

dos principios que consideramos básicos. El primero,que es indispensable efectuar un enfoque multidis-ciplinario en que participen tanto urbanistas comoecólogos, ingenieros sanitarios y profesionales de lasalud. El segundo, que la ejecución de las medidasrequiere una atención multisectorial, donde se des-taca el papel del municipio como célula básica de laestructura política y social, junto con la responsabili-dad primaria de los niveles provincial y nacional de laplanificación, realización y fiscalización de aquellasobras públicas que, por su magnitud, exceden lacapacidad de los niveles inferiores y de la propiacomunidad.

Finalmente, aspiramos a que las accionesambientales estén dirigidas a la plena realización delas personas y las familias, de modo tal que todohabitante de nuestro país pueda vivir en un medionatural y urbano humanizado, coherente con sudignidad y con el ejercicio de sus derechos.