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Administración de seguridad integral Enviado por Luis Aguedo Valencia Luis Aguedo Valencia Partes: 1, 2 1. Introducción a la administración y seguridad integral 2. Teoría administrativa 3. Características de la administración 4. Principios administrativos 5. 6. Biografías de Don Henry Fayol y Don Frederick Winslow Taylor 7. Seguridad 8. Riesgos y medidas de seguridad 9. La capacitación 10. Aplicación de la seguridad integral 11. Planeamiento y organización de seguridad en la empresa 12. Seguridad industrial 13. Reglamento de seguridad y salud en el trabajo decreto supremo Nº 009-2005-TR 14. Bibliografía

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Administración de seguridad integral

Enviado por Luis Aguedo Valencia Luis Aguedo Valencia

Partes: 1, 2

1. Introducción a la administración y seguridad integral 2. Teoría administrativa 3. Características de la administración 4. Principios administrativos 5. 6. Biografías de Don Henry Fayol y Don Frederick Winslow Taylor 7. Seguridad 8. Riesgos y medidas de seguridad 9. La capacitación 10. Aplicación de la seguridad integral 11. Planeamiento y organización de seguridad en la empresa 12. Seguridad industrial 13. Reglamento de seguridad y salud en el trabajo decreto supremo Nº 009-2005-TR 14. Bibliografía

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MÓDULO I

Introducción a la administración y seguridad integral

OBJETIVOS

Al término de las acciones educativas previstas en este primer módulo autodidacta del

programa de Especialización de Seguridad Integral, usted estará en condiciones de:

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1. ADMINISTRACIÓN GENERAL

Introducción

Para Poder entender la administración se debe conocer la perspectiva de la historia de su

disciplina, los hechos pasados en situaciones similares, y relacionarlos con otras

experiencias y conocimientos actuales, es por eso la importancia de conocer la historia y

origen de la administración.

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La administración aparece desde que el hombre comienza a trabajar en sociedad, "las

primeras manifestaciones administrativas se presentaron cuando dos hombres quisieron y

lograron mover una piedra que ninguno podía hacerlo solo".

A través de la historia de la humanidad encontramos que, los pueblos antiguos trabajaron

unidos en organizaciones formales (por ejemplo, los ejércitos griegos y romanos, el Imperio

Incaico, la iglesia católica romana, etc.). También las personas han escrito sobre cómo

lograr que las organizaciones sean eficaces y eficientes.

Esto sucedió mucho antes de que el término "administración" hubiera aparecido y se

hubiera definido.

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CONCEPTO GENERAL DE ADMINISTRACIÓN

Definiciones:

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Definición de Administración

Cada una de las anteriores definiciones nos llevará a la verdadera naturaleza de la

administración y a sus propiedades distintivas. Como tales, las definiciones son válidas

para toda clase de administración (Privada, Pública, Mixta, etc.), y para toda especie de

organismo (productivos, de capitál o de servicios).

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Podemos decir que la administración se apoya en principios (ciencia), que hace uso de la

creatividad y la destreza (arte) y que a través de la aplicación de ciertos procedimientos

(técnica), busca lograr siempre eficientemente los objetivos establecidos.

La ciencia es un conocimiento organizado. La característica esencial de cualquier ciencia es

la aplicación del método científico al desarrollo del conocimiento. (Koontz, 1994: 12). X

tanto podemos definir a la Administración como la:

Teoría administrativa

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Factores que contribuyen a las diferencias de los términos utilizados en la

Administración.

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Características de la administración

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Principios administrativos

Los principios administrativos: "son verdades fundamentales, que se tienen como tales en

un momento dado y que explican las relaciones entre 2 o + conjuntos de variables".

(Koontz, 1994:14).

Administración de seguridad integral

(página 2)

Enviado por Luis Aguedo Valencia Luis Aguedo Valencia

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Partes: 1, 2

Clasificaciones de los principios Administrativos

Los principios generales de la administración, están presentados bajo formas y contenidos

variables por cada autor (Chiavenato, 1997: 231).

A medida que se obtengan cada vez más conocimientos confiables respecto a la

administración, surgirán nuevos principios y, al mismo tiempo, serán modificados otros

o algunos serán descartados por no ser realmente representativos del conocimiento

administrativo.

La Administración se apoya en principios o medios administrativos que fortifican el cuerpo

social y facilitan el control de éste; deben ser flexibles y utilizados con inteligencia,

experiencia, decisión y mesura. Uno de los principios que no debemos omitir es el de

Coordinación, el que se refiere a la forma armoniosa de llevar las acciones con las

circunstancias. Fayol enumera 14 principios:

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Importancia de la administración

Una de las formas más sencillas de la administración en nuestra sociedad, es la

administración del hogar y una de las más complejas la administración pública. Pero el

fenómeno administrativo no solamente nació con la humanidad sino que se extiende a la

vez a todos los ámbitos geográficos y por su carácter universal, lo encontramos presente en

todas partes.

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¿PROCESO ADMINISTRATIVO?

Es la administración aplicada o la administración puesta en acción (Munich, 1994; 29.

Un proceso es el conjunto de pasos o etapas necesarias para llevar a cabo una actividad.

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ANEXO (A) :

Biografías de Don Henry Fayol yY Don Frederick

Winslow Taylor

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Henry Fayol

Nació en 1841 en Turquía – Estambul, y Murió en París, 1925; Destacado ingeniero y

teórico de la Administración de Empresas. Se gradúa como ingeniero civil en el año

1860 y desempeña el cargo de Ingeniero en las minas de un importante grupo metalúrgico.

En 1878, durante el Congreso de París de la Sociedad Minera, presentó un informe sobre la

alteración y combustión de la hulla expuesta al aire libre. Este trabajo consagró a Fayol

como un hombre de ciencia. En 1888 ocupa el puesto de Director General de la Commentry

Fourchambault. Se jubiló en 1918.

El modelo administrativo de Fayol se basa en tres aspectos fundamentales: la división

del trabajo, la aplicación de un proceso administrativo y la formulación de los

criterios técnicos que deben orientar la función administrativa. Fayol resumió el resultado

de sus investigaciones en una serie de principios que toda empresa debía aplicar: la

división del trabajo, la disciplina, la autoridad, la unidad y jerarquía del mando, la

centralización, la justa remuneración, la estabilidad del personal, el trabajo en equipo,

la iniciativa, el interés general.

FREDERICK WINSLOW TAYLOR

Nació en Germantown Pennsylvania EE.UU., y Murió en Filadelfia en 1915. Destacado

Ingeniero que ideó la organización científica del trabajo. A partir de 1875 se dedicó a

trabajar como obrero en una de las empresas industriales siderúrgicas de Filadelfia.

Su formación y su capacidad personal le permitieron pasar a dirigir un taller de maquinaria,

donde observó minuciosamente el trabajo de los obreros que se encargaban de cortar

metales. Y fue de esa observación práctica de donde Taylor extrajo la idea de analizar el

trabajo, descomponiéndolo en tareas simples, cronometrarlas y exigir a los trabajadores las

tareas necesarias en el tiempo justo.

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Este análisis del trabajo permitía, organizar tareas de tal manera que se redujeran los

tiempos muertos, por desplazamientos del trabajador o por cambios de actividad o de

herramientas; y establecer un salario a destajo (por pieza producida) en función del tiempo

de producción estimado, salario éste de incentivo laboral. La tradición quedaba así

sustituida por la planificación en los talleres.

Taylor se hizo ingeniero asistiendo a cursos nocturnos y, tras imponer el nuevo método

en su taller, pasó a trabajar de ingeniero jefe en una gran compañía siderúrgica de

Pennsylvania de 1898 a 1901. Taylor formo un equipo con el que desarrolló sus métodos e

innovaciones organizativas. Publicó varios libros defendiendo la «organización científica

del trabajo» (el principal fue PRINCIPIOS Y MÉTODOS DE GESTIÓN CIENTÍFICA,

1911).

Seguridad

1. CONCEPTO DE SEGURIDAD

a. Origen y Desarrollo

Si nos remontamos al pasado y vemos la evolución y desarrollo de la vida humana,

observaremos una acción o esfuerzo constante por sobrevivir: 01. Enfrentándose a la

inclemencia de la naturaleza. 02. Luchando con sus semejantes y otros seres vivientes.

03. Cuidando sus pertenencias, viviendas y objetos de trabajo. 04. Construyendo y

perfeccionando instrumentos de defensa y de ataque (armas).

Veremos también que el hombre va generando permanentes actitudes de violencia por

problemas de interacción, convivencia, y equidad en la distribución de bienes; o por la

imposición de ideologías, creencias o por el predominio de razas y/o riquezas.

Por lo analizado se entiende que el hombre a través de su evolución y desarrollo adopta

y perfecciona constantemente formas de defensa, protección y ataque.

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En esta visión retrospectiva el hombre se organiza por grupos, sociedades, etnias, hasta

llegar a la formación de pueblos, ciudades y naciones.

E igualmente afronta nuevos riesgos y peligros organizándose para conseguir mejores

sistemas de defensa, protección y ataque.

Cuando se crean las empresas, lugares y áreas de trabajo en un mismo entorno, los peligros

o riesgos son más contínuos y variados. La máquina primero, y después el despegue

industrial se va a encargar de crear diferentes tipos de peligros y riesgos contra el

trabajador, la máquina y su producción. Conforme el hombre va evolucionando y

desarrollando sus condiciones de vida y sus actividades, los riesgos y medidas van de

la mano.

Por lo expuesto podemos afirmar que:

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……………………..veamos algunas definiciones:

b. Definición

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Riesgos y medidas de seguridad

El Riesgo, definido en documentos legales, técnicos, normativos, incluido el Diccionario de

la Real Academia de la Lengua Española, no presenta un enfoque homogéneo, por lo tanto

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tomaremos la definición existente en el Glosario del DS. 009-MTPE, Reglamento de

Seguridad y Salud en el trabajo:

Del análisis de las definiciones anteriores de Riesgo, podemos llegar a las siguientes

conclusiones:

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Análisis del Riesgo

Para la evaluación y prevención del riesgo es conveniente practicar una apreciación o

análisis que podría analizarse bajo tres aspectos: su identificación, ubicación y su

intensidad.

Para una perfecta identificación tener en cuenta la clasificación anterior, para lo cual se

debe contribuir a la investigación con los datos teóricos e información general.

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El Riesgo debe ser ubicado el campo apropiado, donde se aplicará las medidas específicas,

sean las del SAFETY o las de SECURITY. El grado de intensidad del riesgo se medirá

con relación a la vulnerabilidad, incidencia, y repercusión que ha de producir.

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La capacitación

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"La Capacitación Como Elemento Clave En La Prevención de Riesgos, y en las Medidas de

Seguridad"

La capacitación profesional es un proceso permanente y planificado, concebido como

una inversión para el desarrollo que se lleva a cabo en las organizaciones con el objetivo

de que los trabajadores adquieran y perfeccionen su competencia laboral, de una vital

importancia para la implantación de un sistema de seguridad integral, permitiendo la

participación directa de los mismos en este proceso.

Los factores organizativos y humanos proporcionarán una respuesta tanto más

adecuada cuanto mejor sea la capacitación y entrenamiento de las personas que

intervengan en el diseño, en los procesos, en la dirección y en la operación de los sistemas.

Con la sensibilización ante la presencia de los riesgos, el conocimiento de su peligrosidad

y la necesidad de protección, comienza la creencia en la necesidad de la Seguridad y

Salud.

Esta sensibilización ha de emanar del más alto nivel jerárquico de la empresa y debe ser

reflejada en el compromiso de dirección refrendado en la implementación de la Política de

Seguridad y Salud.

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Principios Fundamentales de la Capacitación

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Aplicación de la seguridad integral

La Seguridad Integral implica prevención y defensa en el frente interno y externo de una

organización, dicho en otros términos se refiere a la capacidad de reaccionar con

efectividad ante cualquier acto provocado o no, la Seguridad Integral es tratada en dos

campos de aplicación específica, denominados SAFETY y SECURITY.

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"La Seguridad Integral implica prevención y defensa en el frente interno y externo de

una organización"

Ambos campos de aplicación abarca las siguientes secciones:

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Planeamiento y organización de seguridad en la empresa

Antes de iniciar las actividades operativas, toda organización, conjuntamente con el

estudio de factibilidad debe planificar su seguridad en base a un diagnóstico de

prevención y de defensa.

El planeamiento y la organización de la Seguridad comprenderán todo aquello destinado a

garantizar protección a sus operaciones, a las instalaciones y bienes, a sus trabajadores y

sus clientes.

A. Planeamiento de la Seguridad.

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Para el planeamiento correspondiente se tendrá en cuenta los principios de la

organización, los cuales son:

B. Fases de Planeamiento de la Seguridad

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Estos pasos perfectamente definidos en el factor tiempo son: Estudio, Elaboración de

Programas, Implementación y la Supervisión.

2. La elaboración de Programas

Después de tomarse las decisiones sobre las medidas a implantar en la empresa, se

desarrollarán cronogramas basándose en los siguientes puntos:

3. La Implementación

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4. La Supervisión

C. Organización de Seguridad

Después de efectuado el planeamiento de seguridad de la empresa se procederá a

organizar el sistema de seguridad diseñado.

Se elaborará una estructura orgánica y funcional, acorde a la realidad, que le permita

alcanzar todos los niveles.

Para el efecto se deben establecer acciones de prevención, protección y defensa contra

todo riesgo a que esté expuesta la empresa.

Se asignarán responsabilidades y funciones a cada uno de los componentes de la

organización.

Se elaborarán planes específicos para cada una de las situaciones críticas de la empresa.

D. Principios de la Organización

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E. Funciones del Administrador de Seguridad:

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Seguridad industrial

1. INTRODUCCIÓN

Seguridad laboral: Sector de la seguridad y la salud pública que se ocupa de proteger la

integridad física, controlando el entorno del trabajo para reducir o eliminar riesgos.

eran muchos los empresarios a los que no les preocupaba demasiado la seguridad de los

obreros. Sólo empezaron a prestar atención al tema con la aprobación de las leyes de

compensación a los trabajadores por parte de los gobiernos, entre 1908 y 1948: hacer más

seguro el entorno del trabajo resulta más barato que pagar compensaciones.

2. RIESGOS Y SU PREVENCIÓN

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Entre los riesgos físicos comunes están: el calor, las quemaduras, el ruido, la vibración, los

cambios bruscos de presión, la radiación y las descargas eléctricas.

Si las exigencias físicas, psicológicas o ambientales a las que están sometidos los

trabajadores dentro de sus centros laborales, exceden sus capacidades, es un hecho

consecuente que surjan riesgos ergonómicos. Este tipo de contingencias ocurre con mayor

frecuencia al manejar material en forma inadecuada, cuando los trabajadores deben

levantar o transportar cargas pesadas.

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3. APLICACIÓN DE LOS PRINCIPIOS DE PROGRAMAS DE SEGURIDAD

INDUSTRIAL.

El primer paso para alcanzar el buen funcionamiento del Programa de Seguridad es

hacer un recorrido por las instalaciones de la empresa, preferiblemente un día por cada

área de trabajo.

Se elaborará un reporte por área de trabajo clasificando cada una de las medidas

correctivas o preventivas, de acuerdo a las consecuencias que puedan surgir al generarse

un incidente por no ser corregida o prevenidas:

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Una vez terminado el recorrido, se procederá a la elaboración del reporte en donde se

plasmarán los siguientes conceptos:

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ACTIVIDADES

Las actividades propias del Servicio de Prevención son las siguientes:

Evaluación

01. ¿Qué es la administración y por qué es importante?

02. ¿Cuál es su concepto de seguridad y que rol desempeña en la actualidad?

03. ¿Cómo se clasifican los riesgos?

04. ¿Por qué es importante la clasificación de los riesgos? Comente.

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05. Comente la siguiente afirmación: "un personal de seguridad mal preparado

puede ser considerado un riesgo"

06. ¿Cómo se clasifican las medidas de seguridad?

07. ¿Cuáles son los campos de aplicación de la seguridad integral?

08. ¿Qué es planeamiento de seguridad y cuales son sus fases?

09. ¿Qué es seguridad laboral y por qué es importante?

10. Haga un comentario sobre el reglamento de servicios de prevención de riesgos

laborales.

ANEXO GENERAL:

Reglamento de seguridad y salud en el trabajo decreto

supremo Nº 009-2005-TR

TÍTULO PRELIMINAR

PRINCIPIOS

I.- PRINCIPIO DE PROTECCIÓN: Los trabajadores tienen derecho a que el Estado y

los empleadores promuevan condiciones de trabajo dignas que les garanticen un estado de

vida saludable, física, mental y social. Dichas condiciones deberán propender a:

a) Que el trabajo se desarrolle en un ambiente seguro y saludable.

b) Que las condiciones de trabajo sean compatibles con el bienestar y la dignidad de los

trabajadores y ofrezcan posibilidades reales para el logro de los objetivos personales del

trabajador.

II.- PRINCIPIO DE PREVENCIÓN: El empleador garantizará, en el centro de trabajo, el

establecimiento de los medios y condiciones que protejan la vida, la salud y el bienestar de

los trabajadores, y de aquellos que no teniendo vínculo laboral prestan servicios o se

encuentran dentro del ámbito del centro de labores.

III.- PRINCIPIO DE RESPONSABILIDAD: El empleador asumirá las implicancias

económicas, legales y de cualquiera otra índole, como consecuencia de un accidente o

enfermedad que sufra el trabajador en el desempeño de sus funciones o a consecuencia de

él, conforme a las normas vigentes.

IV.- PRINCIPIO DE COOPERACIÓN: El Estado, los empleadores y los trabajadores, y

sus organizaciones sindicales, establecerán mecanismos que garanticen una permanente

colaboración y coordinación en materia de seguridad y salud en el trabajo.

V.- PRINCIPIO DE INFORMACIÓN Y CAPACITACIÓN: Los trabajadores recibirán

del empleador una oportuna y adecuada información y capacitación preventiva en la

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tarea a desarrollar, con énfasis en lo potencialmente riesgoso para la vida y salud de los

trabajadores y su familia.

VI.- PRINCIPIO DE GESTIÓN INTEGRAL: Todo empleador promoverá e integrará la

gestión de la seguridad y salud en el trabajo a la gestión general de la empresa.

VII.- PRINCIPIO DE ATENCIÓN INTEGRAL DE LA SALUD: Los trabajadores que

sufran algún accidente de trabajo o enfermedad ocupacional tienen derecho a las

prestaciones de salud necesarias y suficientes hasta su recuperación y rehabilitación,

procurando su reinserción laboral.

VIII.- PRINCIPIO DE CONSULTA Y PARTICIPACIÓN: El Estado promoverá

mecanismos de consulta y participación de las organizaciones de empleadores y

trabajadores más representativas y actores sociales, para la adopción de mejoras en materia

de Seguridad y Salud en el Trabajo.

IX.- PRINCIPIO DE VERACIDAD: Los empleadores, los trabajadores, los

representantes de ambos y demás entidades públicas y privadas responsables del

cumplimiento de la legislación en seguridad y salud en el trabajo brindarán información

completa y veraz sobre la materia.

TÍTULO I

DISPOSICIONES GENERALES

TÍTULO II

POLÍTICA NACIONAL EN SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO

CAPÍTULO I

OBJETIVOS DE LA POLÍTICA

CAPÍTULO II

COMPETENCIAS Y FUNCIONES

TÍTULO III

SISTEMA DE GESTIÓN DE LA SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO

CAPÍTULO I

PRINCIPIOS DEL SISTEMA

CAPÍTULO II

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ORGANIZACIÓN DEL SISTEMA DE GESTIÓN

CAPÍTULO III

PLANIFICACIÓN Y APLICACIÓN DEL SISTEMA

CAPÍTULO IV

EVALUACIÓN DEL SISTEMA

CAPÍTULO V

ACCIÓN PARA LA MEJORA CONTINUA

TÍTULO IV

DERECHOS Y OBLIGACIONES

CAPÍTULO I

DERECHOS Y OBLIGACIONES DE LOS EMPLEADORES

Artículo 37. El empleador debe ejercer un firme liderazgo y manifestar su respaldo a las

actividades de su empresa en materia de seguridad y salud en el trabajo; asimismo, debe

estar comprometido a fin de proveer y mantener un ambiente de trabajo seguro y

saludable en concordancia con las mejores prácticas y con el cumplimiento de las

normas de seguridad y salud en el trabajo.

Artículo 38.- La política en materia de seguridad y salud en el trabajo, debe ser específica y

apropiada para la empresa. Los objetivos fundamentales de esa política deben ser los

siguientes:

a) El cumplimiento de las normas de seguridad y salud en el trabajo.

b) La protección de la seguridad y salud de todos los trabajadores.

c) La mejora continua del desempeño del sistema de gestión de la seguridad y salud en el

trabajo; y

d) La integración del sistema de gestión de la seguridad y salud en el trabajo con otros

sistemas.

Artículo 39.- El empleador, entre otras, tiene las obligaciones de:

a) Garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores en el desempeño de todos los

aspectos relacionados con su labor, en el centro de trabajo o con ocasión del mismo.

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b) Desarrollar acciones permanentes con el fin de perfeccionar los niveles de protección

existentes.

c) Identificar las modificaciones que puedan darse en las condiciones de trabajo y disponer

lo necesario para la adopción de medidas de prevención de los riesgos laborales.

d) Practicar exámenes médicos antes, durante y al término de la relación laboral a los

trabajadores, acordes con los riesgos a que están expuestos en sus labores.

Artículo 40. - El empleador debe aplicar las siguientes medidas de prevención de los

riesgos laborales:

a) Gestionar los riesgos, sin excepción, eliminándolos en su origen y aplicando sistemas de

control a aquellos que no se puedan eliminar.

b) El diseño de los puestos de trabajo, ambientes de trabajo, la selección de equipos y

métodos de trabajo, la atenuación del trabajo monótono y repetitivo, deben estar orientados

a garantizar la salud y seguridad del trabajador.

c) Eliminar las situaciones y agentes peligrosos en el centro de trabajo o con ocasión del

mismo, y si no fuera posible, sustituirlas por otras que entrañen menor peligro.

d) Integrar los planes y programas de prevención de riesgos laborales a los nuevos

conocimientos de las ciencias, tecnologías, medio ambiente, organización del trabajo,

evaluación de desempeño en base a condiciones de trabajo.

e) Mantener políticas de protección colectiva e individual.

f) Capacitar y entrenar anticipada y debidamente a los trabajadores.

Artículo 41.- El empleador debe considerar las competencias personales y profesionales de

los trabajadores, en materia de seguridad y salud en el trabajo, al momento de asignarles las

labores.

Artículo 42.- El empleador debe transmitir a los trabajadores, de manera adecuada y

efectiva, la información y los conocimientos necesarios en relación con los riesgos en el

centro de trabajo y en el puesto o función específica; así como las medidas de protección y

prevención aplicables a tales riesgos.

Artículo 43.- El empleador debe impartir a los trabajadores, oportuna y

apropiadamente, capacitación y entrenamiento en seguridad y salud, en el centro y

puesto de trabajo o función específica tal como se señala a continuación:

a) Al momento de su contratación, cualquiera sea su modalidad o duración de ésta.

b) Durante el desempeño de su labor.

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c) Cuando se produzcan cambios en la función y/o puesto de trabajo y/o en la tecnología.

La capacitación y entrenamiento se imparten dentro o fuera de la jornada de trabajo, según

acuerdo entre el empleador y los trabajadores.

Artículo 44.- El empleador debe controlar y registrar que sólo los trabajadores, adecuada y

suficientemente capacitados y protegidos, accedan a los ambientes o zonas de riesgo grave

y específico.

Artículo 45.- El empleador debe prever que la exposición a los agentes físicos, químicos,

biológicos, ergonómicos y psicosociales concurrentes en el centro de trabajo, no generen

daños en la salud de los trabajadores.

Artículo 46.- El empleador debe planificar la acción preventiva de riesgos para la

seguridad y salud en el trabajo, a partir de una evaluación inicial, que se realizará teniendo

en cuenta: las características de los trabajadores, la naturaleza de la actividad, los equipos,

los materiales y sustancias peligrosas, y el ambiente de trabajo.

Artículo 47.- El empleador debe actualizar la evaluación de riesgos una vez al año

como mínimo o cuando cambien las condiciones de trabajo o se hayan producido daños a

la salud y seguridad. Si los resultados de la evaluación de riesgos lo hicieran necesario, se

realizarán:

a) Controles periódicos de la salud de los trabajadores y de las condiciones de trabajo para

detectar situaciones potencialmente peligrosas.

b) Medidas de prevención, incluidas las relacionadas con los métodos de trabajo y de

producción, que garanticen un mayor nivel de protección de la seguridad y salud de los

trabajadores.

Artículo 48.- El empleador debe realizar una investigación, cuando se hayan producido

daños en la salud de los trabajadores o cuando aparezcan indicios de que las medidas de

prevención resultan insuficientes, a fin de detectar las causas y tomar las medidas

correctivas al respecto.

Artículo 49.- El empleador debe modificar las medidas de prevención de riesgos laborales

cuando resulten inadecuadas e insuficientes para garantizar la seguridad y salud de los

trabajadores.

Artículo 50.- El empleador debe proporcionar a sus trabajadores equipos de protección

personal adecuados, según el tipo de trabajo y riesgos específicos presentes en el

desempeño de sus funciones, cuando no se puedan eliminar en su origen los riesgos

laborales o sus efectos perjudiciales para la salud; éste verifica el uso efectivo de los

mismos.

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Artículo 51.- El empleador debe adoptar las medidas necesarias, de manera oportuna,

cuando se detecte que la utilización de ropas y/o equipos de trabajo o de protección

personal representan riesgos específicos para la seguridad y salud de los trabajadores.

Artículo 52.- El costo de las acciones, decisiones y medidas de seguridad y salud

ejecutadas en el centro de trabajo o con ocasión del mismo, no será asumido de modo

alguno por los trabajadores.

Artículo 53.- El empleador deberá establecer las medidas y dar instrucciones necesarias

para que, en caso de un peligro inminente que constituya un riesgo importante o intolerable

para la seguridad y salud de los trabajadores, éstos puedan interrumpir sus actividades, e

inclusive, si fuera necesario, abandonar de inmediato el domicilio o lugar físico donde se

desarrollan las labores. No se podrán reanudar las labores mientras el riesgo no se haya

reducido o controlado.

Artículo 54.- El empleador debe informar por escrito a la Autoridad Administrativa de

Trabajo, los daños a la salud de sus trabajadores, los hechos acontecidos y los resultados de

la investigación practicada.

Artículo 55.- El empleador debe garantizar la protección de los trabajadores que por su

situación de discapacidad sean especialmente sensibles a los riesgos derivados del trabajo.

Estos aspectos deberán ser considerados en las evaluaciones de los riesgos, en la adopción

de medidas preventivas y de protección necesarias.

Artículo 56.- En las evaluaciones del plan integral de prevención de riesgos, debe tenerse

en cuenta los factores de riesgo que puedan incidir en las funciones de procreación de los

trabajadores, en particular por la exposición a los agentes físicos, químicos, biológicos,

ergonómicos y psicosociales, con el fin de adoptar las medidas preventivas necesarias.

Artículo 57.- El empleador debe adoptar medidas necesarias para evitar la exposición de

las trabajadoras en período de embarazo o lactancia a labores peligrosas de conformidad a

la ley de la materia.

"Artículo 58º.- El empleador no debe emplear adolescentes para la realización de

actividades insalubres o peligrosas, que puedan afectar su normal desarrollo físico y

mental, teniendo en cuenta las disposiciones legales sobre la materia."

Artículo 59.- El empleador debe realizar una evaluación de los puestos de trabajo que van a

desempeñar los adolescentes previamente a su incorporación laboral, a fin de determinar la

naturaleza, el grado y la duración de la exposición al riesgo, con el objeto de adoptar las

medidas preventivas necesarias.

Artículo 60. - El empleador practicará exámenes médicos antes, durante y al término de la

relación laboral a los adolescentes trabajadores.

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Artículo 61.- El empleador en cuyas instalaciones sus trabajadores desarrollen actividades

conjuntamente con trabajadores de contratistas, subcontratistas, empresas especiales de

servicios y cooperativas de trabajadores; o quien asuma el contrato principal de la misma,

es quien garantiza:

a) La coordinación eficaz y eficiente de la gestión en prevención de riesgos laborales.

b) La seguridad y salud de los trabajadores.

c) La verificación de la contratación de los seguros de acuerdo a la normatividad vigente

efectuada por cada empleador durante la ejecución del trabajo, sin perjuicio de la

responsabilidad de cada uno por la seguridad y salud de sus propios trabajadores.

Asimismo, el empleador vigilará el cumplimiento de la normatividad legal vigente en

materia de seguridad y salud en el trabajo por parte de sus contratistas, subcontratistas,

empresas especiales de servicios o cooperativas de trabajadores que desarrollen obras o

servicios en el centro de trabajo o con ocasión del trabajo correspondiente del principal.

Artículo 62.- Las empresas que diseñen, fabriquen, importen, suministren o cedan

máquinas, equipos, sustancias, productos o útiles de trabajo, dispondrán lo necesario para

que:

a) Las máquinas, equipos, sustancias, productos o útiles de trabajo no constituyan una

fuente de peligro ni pongan en riesgo la seguridad o salud de los trabajadores.

b) Se proporcione información y capacitación sobre la instalación, adecuada utilización y

mantenimiento preventivo de las maquinarias y equipos.

c) Se proporcione información y capacitación para el uso apropiado de los materiales

peligrosos a fin de prevenir los peligros inherentes a los mismos y monitorear los riesgos.

d) Las instrucciones, manuales, avisos de peligro u otras medidas de precaución colocadas

en los equipos y maquinarias, así como cualquier otra información vinculada a sus

productos, estén o sean traducidos al idioma castellano y estén redactados en un lenguaje

sencillo y preciso con la finalidad que permitan reducir los riesgos laborales; y,

e) Las informaciones relativas a las máquinas, equipos, productos, sustancias o útiles de

trabajo sean facilitadas a los trabajadores en términos que resulten comprensibles para los

mismos.

CAPÍTULO II

DERECHOS Y OBLIGACIONES DE LOS TRABAJADORES

Artículo 63.- Los trabajadores serán consultados, antes que se ejecuten cambios en las

operaciones, procesos y en la organización del trabajo, que puedan tener repercusiones en

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la seguridad y salud de los trabajadores y las trabajadoras. A falta de acuerdo entre las

partes decidirá el empleador.

Artículo 64.- Todo trabajador tiene derecho a comunicarse libremente con los

inspectores del trabajo.

Artículo 65.- Los trabajadores, sus representantes y/o miembros de los comités o

comisiones de seguridad y salud ocupacional, están protegidos contra cualquier acto de

hostilidad y otras medidas coercitivas por parte del empleador que se originen como

consecuencia del cumplimiento de sus funciones en el ámbito de la seguridad y salud en el

trabajo.

Artículo 66.- Los trabajadores o sus representantes tienen derecho a revisar los programas

de capacitación y entrenamiento, y formular recomendaciones al empleador con el fin de

mejorar la efectividad de los mismos.

Artículo 67.- Los representantes de los trabajadores en Seguridad y Salud en el Trabajo

tienen derecho a participar en la identificación de los peligros y en la evaluación de los

riesgos en el trabajo, solicitar al empleador los resultados de las evaluaciones, sugerir

las medidas de control y hacer seguimiento de las mismas. En caso de no tener respuesta

satisfactoria podrán recurrir a la Autoridad Competente.

Artículo 68.- Los trabajadores tienen derecho a ser informados:

a. A título grupal, de las razones para los exámenes de salud ocupacional e investigaciones

en relación con los riesgos para la seguridad y salud en los puestos de trabajo.

b. A título personal, sobre los resultados de los informes médicos previos a la asignación de

un puesto de trabajo y los relativos a la evaluación de su salud. Los resultados de los

exámenes médicos al ser confidenciales, no son pasibles de uso para ejercer discriminación

alguna contra los trabajadores en ninguna circunstancia o momento.

Artículo 69.- Los trabajadores tienen derecho a ser transferidos en caso de accidente de

trabajo o enfermedad ocupacional a otro puesto que implique menos riesgo para su

seguridad y salud, siempre y cuando éste exista, debiendo ser capacitados para ello.

Artículo 70.- Los trabajadores, cual fuere su modalidad de contratación, que mantengan

vínculo laboral con el empleador o con contratistas, subcontratistas, empresas especiales de

servicios o cooperativas de trabajadores que hayan celebrado contrato con el empleador

antes señalado, tienen derecho a través de sus empleadores respectivos al mismo nivel

de protección en materia de seguridad y salud en el trabajo.

Artículo 71.- Los trabajadores o sus representantes tienen derecho a examinar los factores

que afecten a su seguridad y salud y proponer medidas en estas materias.

Page 52: Administración de seguridad integral.pdf

Artículo 72.- En materia de prevención de riesgos laborales, los trabajadores tienen las

siguientes obligaciones:

a) Cumplir con las normas, reglamentos e instrucciones de los programas de seguridad y

salud en el trabajo que se apliquen en el lugar de trabajo y con las instrucciones que les

impartan sus superiores jerárquicos directos.

b) Usar adecuadamente los instrumentos y materiales de trabajo, así como los equipos de

protección personal y colectiva.

c) No operar o manipular equipos, maquinarias, herramientas u otros elementos para los

cuales no hayan sido autorizados y, en caso de ser necesario, capacitados.

d) Cooperar y participar en el proceso de investigación de los accidentes de trabajo y las

enfermedades ocupacionales cuando la autoridad competente lo requiera o cuando a su

parecer los datos que conocen ayuden al esclarecimiento de las causas que los originaron.

e) Velar por el cuidado integral de su salud física y mental, así como por el de los demás

trabajadores que dependan de ellos durante el desarrollo de sus labores.

f) Someterse a los exámenes médicos a que estén obligados por norma expresa así como a

los procesos de rehabilitación integral.

g) Participar en los organismos paritarios, en los programas de capacitación y otras

actividades destinadas a prevenir los riesgos laborales que organice su empleador o la

Autoridad Competente.

h) Comunicar al empleador todo evento o situación que ponga o pueda poner en riesgo su

seguridad y salud y/o las instalaciones físicas; debiendo adoptar inmediatamente, de ser

posible, las medidas correctivas del caso.

i) Reportar a los representantes o delegados de seguridad, de forma inmediata, la

ocurrencia de cualquier incidente o accidente de trabajo.

j) Concurrencia obligatoria a la capacitación y entrenamiento sobre Seguridad y

Salud en el Trabajo.

TÍTULO V

INFORMACIÓN DE ACCIDENTES DE TRABAJO Y ENFERMEDADES

OCUPACIONALES

CAPÍTULO I

POLÍTICAS EN EL PLANO NACIONAL

Page 53: Administración de seguridad integral.pdf

CAPÍTULO II

POLÍTICAS EN EL PLANO DE LAS EMPRESAS Y CENTROS MÉDICOS

ASISTENCIALES

CAPÍTULO III

RECOPILACIÓN Y PUBLICACIÓN DE ESTADÍSTICAS

CAPÍTULO IV

INVESTIGACIÓN DE ACCIDENTES DE TRABAJO, ENFERMEDADES

OCUPACIONALES E INCIDENTES

TÍTULO VI

MECANISMO DE FISCALIZACIÓN Y CONTROL DEL SISTEMA DE GESTIÓN

CAPÍTULO I

INSPECCIÓN

CAPÍTULO II

PARALIZACIÓN DE TRABAJOS

CAPÍTULO III

CALIFICACIÓN DE LAS INFRACCIONES

CAPÍTULO IV

SANCIONES

DISPOSICIONES COMPLEMENTARIAS Y TRANSITORIAS

Primera.- El presente Reglamento entra en vigencia desde el día siguiente de su

publicación en el Diario Oficial El Peruano, otorgando a los empleadores un plazo de 18

meses para implementar el mismo. (PLAZO VENCE 04 OCTUBRE 2008)

Segunda.-

Tercera.-

Cuarta.- El funcionamiento del Comité de Seguridad y Salud en el Trabajo, la adecuación

del Reglamento Interno de Seguridad y Salud en el Trabajo al presente Reglamento o la

Page 54: Administración de seguridad integral.pdf

elaboración del mismo para los sectores que no tenían esta obligación, será obligatorio

desde el 1º de octubre de 2007.

Quinta.- Las auditorias a las que hace referencia el artículo 32º de este Reglamento

serán obligatorias a partir del 1º de enero de 2009. El Ministerio de Trabajo y

Promoción del Empleo regulará el registro y acreditación de los auditores autorizados, así

como la periodicidad de las mismas.

Sexta.-

Sétima.-

Octava.-

Novena.-

Décima.-

Artículo 4º.- Modificación del Glosario de Términos

Modifíquese el Glosario de Términos del Decreto Supremo Nº 009-2005-TR, de la

siguiente forma:

GLOSARIO DE TÉRMINOS

Accidente de Trabajo (AT): Todo suceso repentino que sobrevenga por causa o con

ocasión del trabajo y que produzca en el trabajador una lesión orgánica, una perturbación

funcional, una invalidez o la muerte.

Es también accidente de trabajo aquel que se produce durante la ejecución de órdenes

del empleador, o durante la ejecución de una labor bajo su autoridad, aún fuera del

lugar y horas de trabajo.

Según su gravedad, los accidentes de trabajo con lesiones personales pueden ser:

Accidente Leve: Suceso cuya lesión, resultado de la evaluación médica, genera en el

accidentado un descanso breve con retorno máximo al día siguiente a sus labores

habituales.

Accidente Incapacitante: suceso cuya lesión, resultado de la evaluación médica, da lugar a

descanso, ausencia justificada al trabajo y tratamiento. El día de la ocurrencia de la lesión

no se tomará en cuenta, para fines de información estadística.

Según el grado de incapacidad los accidentes de trabajo pueden ser:

Page 55: Administración de seguridad integral.pdf

.Total Temporal: cuando la lesión genera en el accidentado la imposibilidad de utilizar su

organismo; da lugar a tratamiento médico al término del cual estará en capacidad de volver

a las labores habituales plenamente recuperado.

.Parcial Permanente: cuando la lesión genera la pérdida parcial de un miembro u órgano o

de las funciones del mismo.

.Total Permanente: cuando la lesión genera la pérdida anatómica o funcional total de un

miembro u órgano; o de las funciones del mismo. Se considera a partir de la pérdida del

dedo meñique.

Accidente Mortal: Suceso cuyas lesiones producen la muerte del trabajador. Para efecto de

la estadística se debe considerar la fecha del deceso.

Actividad: Ejercicio u operaciones industriales o de servicios desempeñadas por el

empleador en concordancia con la normatividad vigente.

Actividades, procesos, operaciones o labores de alto riesgo: aquellas cuya realización

implica un trabajo con alta probabilidad de daño a la salud del trabajador La relación de

actividades calificadas como de alto riesgo será establecida por la autoridad competente.

Actividades Insalubres: Aquellas que generen directa o indirectamente perjuicios para la

salud humana.

Actividades Peligrosas: Operaciones o servicios en las que el objeto de fabricar,

manipular, expender o almacenar productos o substancias son susceptibles de originar

riesgos graves por explosión, combustión, radiación, inhalación u otros modos de

contaminación similares que impacten negativamente en la salud de las personas o los

bienes.

Ambiente, centro o lugar de trabajo y unidad de producción: Lugar en donde los

trabajadores desempeñan sus labores o donde tienen que acudir por razón del mismo.

Auditoria: Procedimiento sistemático, independiente y documentado para evaluar un

Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo.

Autoridad Competente: Ministerio, entidad gubernamental o autoridad pública encargada

de reglamentar, controlar y fiscalizar el cumplimiento de las disposiciones legales.

Capacitación: Actividad que consiste en trasmitir conocimientos teóricos y prácticos para

el desarrollo de competencias, capacidades y destrezas acerca del proceso de trabajo, la

prevención de los riesgos, la seguridad y la salud.

Causas de los Accidentes: es uno o varios eventos relacionados que concurren para

generar un accidente.

Page 56: Administración de seguridad integral.pdf

Se dividen en:

- Falta de control: Son fallas, ausencias o debilidades administrativas en la conducción de

la empresa o servicio y en la fiscalización de las medidas de protección de la salud en el

trabajo.

- Causas Básicas: referidas a factores personales y factores de trabajo:

Factores Personales.- Referidos a limitaciones en experiencia, fobias, tensiones presentes

de manera personal en el trabajador.

Factores del Trabajo.- Referidos al trabajo, las condiciones y medio ambiente de trabajo:

organización, métodos, ritmos, turnos de trabajo, maquinaria, equipos, materiales,

dispositivos de seguridad, sistemas de mantenimiento, ambiente, procedimientos,

comunicación.

- Causas Inmediatas.- Debidas a los actos y/o condiciones subestándares:

Condiciones Subestándares: Toda condición en el entorno del trabajo que puede causar un

accidente.

Actos Subestándares: Toda acción o práctica incorrecta ejecutada por el trabajador que

puede causar un accidente.

Comité de Seguridad y Salud en el Trabajo:

Órgano paritario constituido por representantes del empleador y de los trabajadores, con las

facultades y obligaciones previstas por las normas vigentes, destinado a la consulta regular

y periódica de las condiciones de trabajo, a la promoción y vigilancia del programa de

gestión en seguridad y salud en el trabajo de la empresa.

Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo:

Aquellos elementos, agentes o factores presentes en el proceso de trabajo que tienen

influencia en la generación de riesgos que afectan la seguridad y salud de los trabajadores.

Quedan específicamente incluidos en esta definición:

- Las características generales de los locales, instalaciones, equipos, productos y demás

elementos materiales existentes en el centro de trabajo.

- La naturaleza, intensidades, concentraciones o niveles de presencia de los agentes físicos,

químicos y biológicos, presentes en el ambiente de trabajo y sus correspondientes

intensidades, concentraciones o niveles de presencia.

Page 57: Administración de seguridad integral.pdf

- Los procedimientos, métodos de trabajo, tecnología, establecidos para la utilización o

procesamiento de los agentes citados en el apartado anterior, que influyen en la generación

de riesgos para los trabajadores.

- La organización y ordenamiento de las labores, relaciones laborales, incluidos los factores

ergonómicos y psicosociales.

Condiciones de salud: El conjunto de determinantes sociales, económicos y culturales que

determinan el perfil sociodemográfico y de morbilidad de la población trabajadora.

Contaminación del ambiente de trabajo: Es toda alteración o nocividad que afecta la

calidad del aire, suelo, agua del ambiente de trabajo cuya presencia y permanencia puede

afectar la salud, la integridad física y psíquica de los trabajadores.

Contratista: Persona o empresa que presta servicios remunerados a un empleador con

especificaciones, plazos y condiciones convenidos.

Control de riesgos: Es el proceso de toma de decisión, basado en la información obtenida

en la evaluación de riesgos. Se orienta a reducir los riesgos, a través de proponer medidas

correctoras, exigir su cumplimiento y evaluar periódicamente su eficacia.

Cultura de seguridad o cultura de prevención: Conjunto de valores, principios y normas

de comportamiento y conocimiento respecto a la prevención de riesgos en el trabajo que

comparten los miembros de una organización.

Emergencia: Evento o suceso grave que surge debido a factores naturales o como

consecuencia de riesgos y procesos peligrosos en el trabajo, que no fueron considerados en

la gestión de seguridad y salud en el trabajo.

Enfermedad ocupacional: es el daño orgánico o funcional inflingido al trabajador como

resultado de la exposición a factores de riesgos físicos, químicos, biológicos y

ergonómicos, inherentes a la actividad laboral.

Empleador: Toda persona natural o jurídica que emplea a uno o varios trabajadores.

Entidades Públicas competentes en materia de Seguridad y Salud en el Trabajo: Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, Salud, Energía y Minas, Producción,

Transportes, Comunicaciones, Vivienda y Construcción, Agricultura, ESSALUD y otras

que la Ley señale.

Equipos de Protección Personal (EPP): Son dispositivos, materiales, e indumentaria

específicos y personales, destinados a cada trabajador, para protegerlo de uno o varios

riesgos presentes en el trabajo que puedan amenazar su seguridad y salud. El EPP es una

alternativa temporal, complementaria a las medidas preventivas de carácter colectivo.

Page 58: Administración de seguridad integral.pdf

Ergonomía: Llamada también ingeniería humana, es la ciencia que busca optimizar la

interacción entre el trabajador, máquina y ambiente de trabajo con el fin de adecuar los

puestos, ambientes y la organización del trabajo a las capacidades y características de los

trabajadores, a fin de minimizar efectos negativos y con ello mejorar el rendimiento y la

seguridad del trabajador.

Estadística de accidentes: Sistema de registro y análisis de la información de accidentes.

Orientada a utilizar la información y las tendencias asociadas en forma proactiva y

focalizada para reducir los índices de accidentabilidad.

Estándares de Trabajo: Son los modelos, pautas y patrones establecidos por el empleador

que contienen los parámetros y los requisitos mínimos aceptables

de medida, cantidad, calidad, valor, peso y extensión establecidos por estudios

experimentales, investigación, legislación vigente y/o resultado del avance tecnológico, con

los cuales es posible comparar las actividades de trabajo, desempeño y comportamiento

industrial. Es un parámetro que indica la forma correcta de hacer las cosas. El estándar

satisface las siguientes preguntas: ¿Qué?, ¿Quién? y ¿Cuándo?.

Evaluación de riesgos: Proceso posterior a la identificación de los peligros, que permite

valorar el nivel, grado y gravedad de los mismos, proporcionando la información necesaria

para que la empresa esté en condiciones de tomar una decisión apropiada sobre la

oportunidad, prioridad y tipo de acciones preventivas que debe adoptar.

Exámenes Médicos de Preempleo: Son evaluaciones médicas de salud ocupacional que se

realizan al trabajador antes de que éste sea admitido en un puesto de trabajo. Tiene por

objetivo determinar el estado de salud al momento del ingreso y su mejor ubicación en un

puesto de trabajo.

Exámenes Médicos Periódicos: Son evaluaciones médicas que se realizan al trabajador

durante el ejercicio del vínculo laboral. Estos exámenes tienen por objetivo la promoción de

la salud en el trabajo a través de la detección precoz de signos de patologías ocupacionales.

Asimismo, permiten definir la eficiencia de las medidas preventivas y de control de riesgos

en el trabajo, su impacto, y la reorientación de dichas medidas.

Exámenes de Retiro: Son evaluaciones médicas realizadas al trabajador una vez concluido

el vínculo laboral. Mediante estos exámenes se busca detectar enfermedades ocupacionales,

secuelas de accidentes de trabajo y en general lo agravado por el trabajo.

Exposición: Presencia de condiciones y medio ambiente de trabajo que implican un

determinado nivel de riesgo a los trabajadores.

Fiscalizador: Es toda persona natural o jurídica autorizada de manera expresa por el

Ministerio o autoridad competente y domiciliada en el país, encargada de realizar exámenes

objetivos y sistemáticos en centros de trabajo, sobre asuntos de seguridad y salud, siempre

y cuando esté autorizado de manera expresa por el Ministerio o autoridad competente.

Page 59: Administración de seguridad integral.pdf

Gestión de la Seguridad y Salud: Aplicación de los principios de la administración

moderna a la seguridad y salud, integrándola a la producción, calidad y control de costos.

Gestión de Riesgos: Es el procedimiento, que permite una vez caracterizado el riesgo, la

aplicación de las medidas más adecuadas para reducir al mínimo los riesgos determinados y

mitigar sus efectos, al tiempo que se obtienen los resultados esperados.

Identificación de Peligros: Proceso mediante el cual se localiza y reconoce que existe un

peligro y se definen sus características.

Incidente: Suceso acaecido en el curso del trabajo o en relación con el trabajo, en el

que la persona afectada no sufre lesiones corporales, o en el que éstas sólo requieren

cuidados de primeros auxilios.

Incidente Peligroso: Todo suceso que puede causar lesiones o enfermedades a las personas

en su trabajo, o a la población.

Inducción u Orientación: Capacitación inicial dirigida a otorgar conocimientos e

instrucciones al trabajador para que ejecute su labor en forma segura, eficiente y correcta.

Se divide normalmente en:

• Inducción General: Capacitación al trabajador sobre temas generales como política,

beneficios, servicios, facilidades, normas, prácticas, y el conocimiento del ambiente laboral

de la empresa, efectuada antes de asumir su puesto.

• Inducción Específica: Capacitación que brinda al trabajador la información y el

conocimiento necesario que lo prepara para su labor específica.

Inspector: Funcionario público encargado de fiscalizar el cumplimiento de una norma o

reglamento.

Investigación de Accidentes e Incidentes: Proceso de identificación de los factores,

elementos, circunstancias y puntos críticos que concurren para causar los accidentes e

incidentes. La finalidad de la investigación es revelar la red de causalidad y de ese modo

permite a la dirección de la empresa tomar las acciones correctivas y prevenir la recurrencia

de los mismos.

Inspección: Verifi cación del cumplimiento de los estándares establecidos en las

disposiciones legales.

Proceso de observación directa que acopia datos sobre el Trabajo, sus procesos,

condiciones, medidas de protección y cumplimiento de dispositivos legales en SST.

Lesión: Alteración física u orgánica que afecta a una persona como consecuencia de un

accidente de trabajo o enfermedad ocupacional.

Page 60: Administración de seguridad integral.pdf

Mapa de Riesgos: Es un plano de las condiciones de trabajo, que puede utilizar diversas

técnicas para identificar y localizar los problemas y las propias acciones de promoción y

protección de la salud de los trabajadores a nivel de una empresa o servicio.

Medidas Coercitivas: Constituyen actos de intimidación, amenaza o amedrentamiento

realizados al trabajador, con la finalidad de desestabilizar el vínculo laboral.

Medidas de Prevención: Acciones que se adoptan ante los riesgos identifi cados con el fin

de evitar lesiones a la salud y/o disminuir los riesgos presentes en el trabajo, dirigidas a

proteger la salud de los trabajadores. Medidas cuya implementación constituye una

obligación y deber de parte de los empleadores.

Peligro: Situación o característica intrínseca de algo capaz de ocasionar daños a las

personas, equipo, procesos y ambiente.

Pérdidas: Constituye todo daño, mal o menoscabo que perjudica al empleador.

Plan de Emergencia: Documento guía de las medidas que se deberán tomar ante ciertas

condiciones o situaciones de envergadura Incluye responsabilidades de personas y

departamentos, recursos de la empresa disponibles para su uso, fuentes de ayuda externas,

procedimientos generales a seguir, autoridad para tomar decisiones, las comunicaciones e

informes exigidos.

Programa anual de seguridad y salud: Conjunto de actividades de prevención en SST

que establece la organización servicio, empresa para ejecutar a lo largo de un año.

Prevención de Accidentes: Combinación de políticas, estándares, procedimientos,

actividades y prácticas en el proceso y organización del trabajo, que establece una

organización en el objetivos de prevenir riesgos en el trabajo.

Primeros Auxilios: Protocolos de atención de emergencia que atiende de inmediato en el

trabajo a una persona que ha sufrido un accidente o enfermedad ocupacional.

Proactividad: Actitud favorable en el cumplimiento de las normas de seguridad y salud en

el trabajo con diligencia y eficacia.

Procesos, Actividades, Operaciones, Equipos o

Productos Peligrosos: Aquellos elementos factores o agentes físicos, químicos, biológicos,

ergonómicos o mecánicos, que están presentes en el proceso de trabajo, según las defi

niciones y parámetros que establezca la legislación nacional, que originen riesgos para la

seguridad y salud de los trabajadores que los desarrollen o utilicen.

Reglamento: Conjunto de normas, procedimientos, prácticas o disposiciones detalladas,

elaborado por la empresa y que tiene carácter obligatorio.

Page 61: Administración de seguridad integral.pdf

Representante de los Trabajadores: Trabajador elegido de conformidad con la legislación

vigente para representar a los trabajadores, ante el Comité de Seguridad y Salud en el

Trabajo.

Riesgo: Probabilidad de que un peligro se materialice en unas determinadas condiciones y

sea generador de daños a las personas, equipos y al ambiente.

Riesgo Laboral: Probabilidad de que la exposición a un factor o proceso peligroso en el

trabajo cause enfermedad o lesión.

Salud: Bienestar físico, mental y social, y no meramente la ausencia de enfermedad o de

incapacidad.

Salud Ocupacional: Rama de la Salud Pública que tiene como fi nalidad promover y

mantener el mayor grado de bienestar físico, mental y social de los trabajadores en todas las

ocupaciones; prevenir riesgos en el Trabajo

Seguridad: Son todas aquellas acciones y actividades que permiten al trabajador laborar en

condiciones de no agresión tanto ambientales como personales, para preservar su salud y

conservar los recursos humanos y materiales.

Servicio de Salud en el Trabajo: Dependencia de una empresa con funciones

esencialmente preventivas, encargada de asesorar al empleador, a los trabajadores y a los

funcionarios de la empresa acerca de: i) los requisitos necesarios para establecer y

conservar un medio ambiente de trabajo seguro y sano que favorezca una salud física y

mental óptima en relación con el trabajo; ii) la adaptación del trabajo a las capacidades de

los trabajadores, habida cuenta de su estado de salud física y mental; y iii) la vigilancia

activa en salud ocupacional que involucra el reconocimiento de los riesgos, las

evaluaciones ambientales y de salud del trabajador (médico, toxicológico, psicológico,

etc.), y los registros necesarios (enfermedades, accidentes, ausentismo, etc.) entre otros.

Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo: Conjunto de elementos

interrelacionados o interactivos que tienen por objeto establecer una política, objetivos de

seguridad y salud en el trabajo, mecanismos y acciones necesarios para alcanzar dichos

objetivos. Estando íntimamente relacionado

con el concepto de responsabilidad social empresarial, en el orden de crear conciencia sobre

el ofrecimiento de buenas condiciones laborales a los trabajadores, mejorando de este modo

la calidad de vida de los mismos, así como promoviendo la competitividad de las empresas

en el mercado.

Supervisor de Seguridad y Salud en el Trabajo: Trabajador capacitado y designado entre

los trabajadores de las empresas con menos de 25 trabajadores.

Trabajador: Toda persona, que desempeña una actividad de manera regular, temporal o

no, por cuenta ajena y remunerada, o de manera independiente o por cuenta propia.

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Vigilancia en Salud Ocupacional: Es un sistema de alerta orientado a la actuación

inmediata, para el control y conocimiento de los problemas de salud en el trabajo.

El conjunto de acciones que desarrolla proporcionan conocimientos en la detección de

cualquier cambio en los factores determinantes o condicionantes de la salud en el Trabajo.

DISPOSICIÓN COMPLEMENTARIA FINAL

Unica.- Deróguense los artículos 78º, 82º, 83º y 84º y anexo Nº 5 del Decreto Supremo Nº

009-2005-TR.

Dado en la Casa de Gobierno, en Lima, a los cuatro días del mes de abril del año dos

mil siete.

ALAN GARCÍA PÉREZ

Presidente Constitucional de la República

SUSANA ISABEL PINILLA CISNEROS Ministra de Trabajo y Promoción del Empleo

Bibliografía

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Cuba 1998.

23. DS009-MTPE-009-2005.

La seguridad integral en los centros de enseñanza

obligatoria de EspañaSEGURIDAD

Este artículo presenta los resultados del estudio «La seguridad integral en los centros de

enseñanza obligatoria», cuyo objetivo es validar un modelo de seguridad integral e

identificar las debilidades que presentan los centros de enseñanza obligatoria al respecto. El

trabajo realizado ha permitido obtener una radiografía del estado de la cuestión, así como

establecer un conjunto de propuestas para la mejora de la seguridad integral en los centros

educativos de España.

Por J. GAIRÍN SALLÁN. Catedrático de Ciencias de la Educación, Universidad

Autónoma de Barcelona. Departamento de Pedagogía Aplicada. Edificio G6, despacho 247.

Campus de la UAB. 08193 Bellaterra (Cerdanyola del Vallès). ([email protected]),

R. MOLES PLAZA. Doctor en Derecho. Director General de la Fundació per als Estudis

de Prevenció i Seguretat Integral (UAB),

D. CASTRO CEACERO. Doctor en Ciencias de la Educación. Profesor lector de la

Universidad Autónoma de Barcelona,

M. MARTÍN ALEGRE, J. SANS PINYOL, M. ROSALES ACIN y X. SENTINELLA

SOLÉ. Técnicos especialistas en seguridad. Fundació per als Estudis de Prevenció i

Seguretat Integral,

A. DÍAZ VICARIO. Licenciada en Pedagogía. Personal Investigador en Formación.

Universidad Autónoma de Barcelona.

Con la colaboración de MARIO MARTÍN BRIS(U. de Alcalá), ISABEL CANTÓN

MAYO (U. de León) y MANUEL LORENZO DELGADO (U. de Granada).

La cultura de la seguridad de las personas y de los bienes va adquiriendo cada vez más

importancia en nuestro entorno social y económico, aumentando, año tras año, la

sensibilidad y preocupación en materia preventiva. A pesar de ello, aún queda mucho

Page 64: Administración de seguridad integral.pdf

camino por recorrer para lograr unos resultados razonables y situarla en el lugar que le

correspondería.

Una revisión de los estudios e iniciativas sobre la seguridad integral en centros educativos

ilustra alguna de las realizaciones y denota cierta preocupación por la temática, aunque

siempre de modo puntual, justificando la necesidad de iniciar estudios como el que se

presenta.

La investigación de Torrenteras, Gómez, Ruiz y otros (2001) (1), es un ejemplo de la

preocupación creciente por la salud de los trabajadores de la enseñanza. Los autores

identificaron que uno de los problemas que más preocupa al profesorado son las

deficiencias en el estado de su salud, derivadas directamente del tipo de funciones que

desempeñan.

Por otra parte, podemos afirmar que la preocupación por la seguridad y la salud en los

centros educativos va más allá de nuestras fronteras. Por este motivo, Longás y otros (2005)

(2) elaboraron un estudio comparativo de las iniciativas en prevención que se realizan en

diferentes países europeos con el objetivo de identificar prácticas para disminuir la

incidencia de enfermedades y accidentes o daños no intencionales en escolares y docentes.

Una de las conclusiones a las que llegaron fue que las iniciativas de buenas prácticas en

seguridad y salud dependen más del propio centro que del país concreto, de modo que los

centros deben poner el acento en las actividades de prevención y formación.

También es necesario destacar el estudio del año 2008 de Consumer-Eroski (3), en el que se

analizaba la seguridad de 208 centros de educación infantil, primaria y secundaria, y que

puso de relieve la falta de seguridad en los centros educativos. Las conclusiones del estudio

apuntaban a la necesidad de aplicar metodologías que permitieran identificar las

insuficiencias en materia de seguridad, para poder intervenir en los parámetros que

requiriesen mejoras y aumentar, así, la seguridad que el centro ofrece.

Otros estudios y referentes interesantes son: Gómez (2001) (4); Torrenteras, Gómez, Ruiz y

otros (2001) (1); Roldán (2002) (5); Sebastián (2006) (6); De Vehí (2009) (7); Buijs (2009)

(8); De Waal & Grösser (2009) (9), que nos introducen en la temática de la seguridad y la

prevención en los centros educativos y que expresan cierta preocupación por la necesidad

de contar con evaluaciones sistemáticas que permitan generar la mencionada cultura de la

prevención (USTEC-STES, 2008 (10), (Pérez Soriano, 2009 (11)).

La gestión de la prevención, como brazo articulado de la cultura preventiva, se hace

necesaria, dado que para la salvaguarda de la vida humana, de la integridad física de las

personas y de los bienes, se necesitan acciones que impidan al máximo la posibilidad de

ocurrencia de un siniestro.

La prevención no puede seguir siendo un simple requisito burocrático más y parte de la

documentación necesaria para homologar y autorizar la docencia cada nuevo curso escolar

Una implicación correcta del nuevo concepto de la filosofía de la prevención evidencia la

necesidad de un cambio de concepción en el trabajo de los gestores institucionales.

Page 65: Administración de seguridad integral.pdf

Mientras cualquier gestor considere el concepto de la prevención como gasto, seguirán

produciéndos inexorablemente accidentes que, por sus características, podían haberse

reducido a un coste bajo y evitar, significativamente, el alto precio de los riesgos para las

personas.

La prevención no puede seguir siendo un simple requisito burocrático más y parte de la

documentación necesaria para homologar y autorizar la docencia cada nuevo curso escolar.

La prevención va mucho más allá de tener extintores colgados en la pared o carteles que

indiquen qué hacer en caso de emergencia (Defensor del Pueblo Andaluz, 2003 (12)). No

obstante, no es aventurado afirmar que a veces tampoco existen y, por lo tanto, también es

un aspecto de la prevención que, seguro, debe mejorarse.

Uno de los factores causantes del elevado índice de siniestralidad laboral en nuestro país es

la falta de cultura preventiva. Para lograr una progresiva reducción de los accidentes en los

entornos de trabajo, resulta absolutamente necesario realizar acciones de concienciación de

la población, sobre todo de los jóvenes, que serán los trabajadores del mañana. De este

modo, conseguiremos que cuando se incorporen al mundo del trabajo ya conozcan sus

obligaciones y asuman rutinariamente unos hábitos de trabajo seguros. Parece obvio que los

centros educativos deben ser el marco idóneo para este fin, en el sentido de que lo deben ser

tanto con respecto al contenido de los programas formativos como con respecto a la

organización y estructuración de los propios centros, que deben responder a una estricta

práctica permanente y a una política orientada a la cultura preventiva en su sentido más

general.

De este modo, la materia de la autoprotección debe tener en los centros educativos una

doble aplicación: la propia de su implementación a cada uno de ellos y el desarrollo de la

cultura «preventiva ». Es importante que en cualquier entorno (edificio, recinto, etc.) donde

haya personas, las normas de seguridad se cumplan de la manera más estricta posible; muy

especialmente los aspectos de la seguridad que tienen que ver directamente con el bienestar

y la seguridad de los niños y jóvenes. Por este motivo, tenemos muy claro que los centros

educativos deben convertirse en espacios donde la seguridad represente una prioridad

máxima.

La seguridad de los centros educativos debe ser contemplada desde un enfoque integral que

incluya no solo los aspectos relacionados con las condiciones materiales de los edificios

escolares, sino también aquellos otros aspectos que de una forma u otra pueden tener

repercusión directa o indirecta en la seguridad de todas aquellas personas que desarrollan

sus actividades en el interior del centro (alumnos, dirección, educadores, personal no

docente, personal de servicios diversos, etc.).

Bajo este enfoque global se ha realizado el presente proyecto, examinando los diversos

requisitos mínimos que deben reunir los centros para ser susceptibles de prestar el servicio

educativo en sus diferentes niveles.

Page 66: Administración de seguridad integral.pdf

El concepto de seguridad integral

La seguridad integral y la prevención componen una pluralidad de elementos que incluyen

diferentes aspectos de ámbitos jurídicos, científicos y técnicos, que van desde la prevención

y la higiene en el trabajo o la seguridad pública y privada, hasta la seguridad informática o

alimentaria, pasando por la prevención y evaluación de riesgos, incluyendo el riesgo de

exclusión social, la seguridad industrial, la protección civil y las catástrofes, entre otros.

Desde esta perspectiva, entendemos por seguridad integral la seguridad en sentido amplio

(gestión privada de la seguridad integral, gestión pública de la seguridad integral y gestión

técnica de la seguridad integral, es decir, aplicada a procesos, productos y servicios) que

interacciona con otros campos íntimamente vinculados (medio ambiente, calidad industrial

y responsabilidad social corporativa).

Aplicada a los centros educativos, considera de manera integrada tanto los aspectos

estáticos del riesgo como los dinámicos, teniendo en cuenta los objetos y el uso que las

personas hacen de los mismos, así como la seguridad en los edificios, los peligros

derivados de la actividad pedagógica y las problemáticas sociales que puedan afectar.

También se incluyen las actividades extraescolares y servicios complementarios

relacionados con la educación.

Subyace en este planteamiento la idea de que la realidad es una totalidad y los aspectos de

seguridad no se pueden reducir a elementos físicos o personales, por significativos que

sean. De hecho, se defiende un enfoque ecológico, donde se reconoce una interacción

dinámica entre personas, objetos y contextos, donde tan importante es la ordenación de la

realidad como las actitudes y comportamientos personales que se tienen.

Después de analizar investigaciones y producciones propias, respecto al contenido de la

seguridad integral (Gómez, 2001 (4); Gay y otros, 2004 (13); Chamarro et al., 2009 (14);

Pérez Soriano, 2009 (11)), consideramos que las clasificaciones más exhaustivas son

aquellas que definen como variable de ordenación el agente causante del daño. De este

modo, tal y como se sintetiza en la ilustración 1, los riesgos que pueden afectar a los

centros educativos pueden ser clasificados en dos dimensiones (estática y dinámica) que

deberán ser consideradas en los procesos de gestión de la prevención.

Page 67: Administración de seguridad integral.pdf

Ilustración 1. Referentes para la seguridad integral.

En primer lugar, será necesario considerar la dimensión estática del riesgo, que hace

referencia a situaciones que suponen un peligro para la seguridad de las personas:

productos químicos, situación de las instalaciones, materiales y/o construcciones que

comportan un peligro para los usuarios, etc. En segundo lugar, deberán atenderse los

riesgos que denominamos dinámicos y que hacen referencia al traslado de las personas, las

actividades sociales y de la naturaleza, las actividades vinculadas al desarrollo de la

profesión, etc.

La seguridad de los centros educativos debe ser contemplada desde un enfoque integral

Se identifica así una concepción y modelo de seguridad integral, que considera todas las

circunstancias que se relacionan con el quehacer escolar y su interacción con la ordenación

física que se hace de los contextos de trabajo.

Diseño de la investigación

Para alcanzar el objetivo general de la investigación se hacía necesaria la aplicación de

instrumentos de diversa tipología, tanto cuantitativos como cualitativos:

a. Cuestionario EduRisc para el diagnóstico de la seguridad integral. b. Grupos de discusión. c. Análisis de documentos.

Para la aplicación de los instrumentos se consideró un sistema de selección de centros de

enseñanza obligatoria, es decir, centros de educación primaria y secundaria. Se estableció

un muestreo de conveniencia distribuido territorialmente para poder abarcar las diferentes

particularidades del sistema educativo, organizando el mapa escolar español en una serie de

zonas:

Zona 1 (Norte): Galicia, Cantabria, Asturias, Navarra, País Vasco, La Rioja y Castilla y León. Zona 2 (Este): Cataluña, Comunidad Valenciana, Región de Murcia, Aragón e Islas

Baleares.

Page 68: Administración de seguridad integral.pdf

Zona 3 (Centro): Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha y Extremadura. Zona 4 (Sur): Andalucía, Ceuta, Melilla y Canarias.

En cada una de las zonas se consideró la necesidad de analizar un mínimo de ocho centros

educativos que respondieran a las tipologías que se pueden establecer en función de la

titularidad (pública y privada) y la etapa educativa (primaria y secundaria). La muestra final

del estudio estuvo compuesta por un total de 32 centros, aunque el proceso de aplicación

eliminó uno de ellos.

Instrumentalización

El diagnóstico de la situación de los centros en cuanto a su seguridad integral se realizó a

partir de la adaptación del cuestionario elaborado en una investigación previa (Gairín y

otros, 2008 (15)). Fue elaborado por un equipo interdisciplinario de expertos del ámbito de

la seguridad y la prevención de riesgos y del Área de conocimiento de Didáctica y

Organización Educativa de la Universidad Autónoma de Barcelona, de acuerdo a la

normativa y a la realidad de los centros educativos catalanes.

El cuestionario EduRisc fue revisado y adaptado, en cuanto a contenido y lenguaje, a la

realidad de los centros educativos españoles por los miembros del equipo de investigación

y colaboradores de la universidades de Alcalá de Henares, Granada y León, realizándose

una validación por aplicación directa antes de pasar a la aplicación generalizada a la

muestra de centros.

La seguridad integral aplicada a los centros educativos considera tanto los aspectos

estáticos como dinámicos del riesgo

El cuestionario utilizado respondía a la estructura mostrada en la tabla 1.

Tabla 1. Componentes de la seguridad integral contemplados en el cuestionario EduRisc.

Riesgos estadísticos: instalaciones Riesgos dinámicos: personas

1. Riesgos físicos de las edificaciones y entornos estáticos.

2. Acumuladores de agua caliente. 3. Calderas de agua caliente sanitaria o

calefacción. 4. Almacenamiento de líquidos

inflamables y combustibles. 5. Almacenamiento de gases licuados del

petróleo. 6. Instalaciones de gas natural. 7. Aparatos consumidores de gas. 8. Instalaciones eléctricas de baja

20. Medidas de prevención aplicables a la seguridad física.

21. Protección anti-intrusión. 22. Protección contra actos violentos. 23. Protección contra el tráfico y el consumo

de drogas. 24. Prevención contra la inseguridad social. 25. Medidas de prevención del acoso

psicológico y la violencia física. 26. Prevención del riesgo físico de los

alumnos. 27. Prevención del riesgo físico del personal

Page 69: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 1. Componentes de la seguridad integral contemplados en el cuestionario EduRisc.

Riesgos estadísticos: instalaciones Riesgos dinámicos: personas

tensión. 9. Ascensores y montacargas. 10. Extintores 11. Instalaciones fijas (bocas de incendios

equipadas, detectores, etc.). 12. Instalaciones petrolíferas de uso

propio. 13. Instalaciones frigoríficas medias (clase

B). 14. Instalaciones térmicas. 15. Instalaciones de agua caliente sanitaria

y agua fría de consumo humano. 16. Plan de autoprotección. 17. Autorización municipal. 18. Fuentes radioactivas.

19. Accesibilidad.

docente. 28. Prevención del riesgo psicológico del

personal docente. 29. Prevención del riesgo ergonómico del

personal docente. 30. Equipo dirigente y personal responsable

de las actividades de educación en el tiempo libre.

31. Derivadas de las tecnologías de la información.

La aplicación de los cuestionarios tuvo lugar durante los meses de julio y septiembre de

2009. Posteriormente, y entre los meses de octubre y noviembre, se celebraron los grupos

de discusión, uno en cada zona del mapa escolar español consideradas. Las mesas de debate

celebradas permitieron discutir sobre diversos tópicos de la investigación: fuentes de

peligro y riesgo más significativos en los centros educativos; accidentes más comunes;

iniciativas y medidas para la prevención, y cuestiones sobre el modelo e instrumento

(utilidad y aplicación).

Resultados

Siguiendo el esquema del modelo e instrumento, se presentan los principales resultados,

después de realizar el análisis de datos de los 31 cuestionarios aplicados en centros de

enseñanza obligatoria analizados (ver tabla 2) y considerar las aportaciones de los grupos

de discusión.

Tabla 2. Distribución final de la muestra según tipología y titularidad.

Primaria Secundaria

Públicos Privados Públicos Privados TOTAL

Page 70: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 2. Distribución final de la muestra según tipología y titularidad.

Primaria Secundaria

Públicos Privados Públicos Privados TOTAL

11 7 6 7 31

Debido a que no se observaron diferencias significativas entre los resultados de los

cuestionarios de las diversas zonas del mapa escolar, la presentación y análisis de los

resultados se realiza globalmente; y solo se indican si hay diferencias entre tipología de

centros (primaria y secundaria) y titularidad (públicos y privados). A los resultados del

cuestionario se incorporan comentarios relevantes de los grupos de discusión.

Es necesario indicar que las fortalezas y debilidades que presentan los centros dependen

mucho de su realidad concreta, aunque se detectan aspectos más o menos comunes.

Factores estáticos del riesgo

Los resultados derivados del análisis de la dimensión estática del riesgo (instalaciones)

muestran que, en general, los edificios presentan un estado de conservación correcto,

aunque los centros públicos son los que presentan más deficiencias en el estado de

conservación de fachadas y otros elementos (accesos, rampas, escaleras y terrazas) (ver

gráfico 1). Igualmente, las instalaciones de las que disponen los centros educativos se

encuentran, en general, en buen estado.

Gráfico 1. Deficiencias en el estado de conservación del edificio (%).

Page 71: Administración de seguridad integral.pdf

Las fortalezas y debilidades que presentan los centros educativos en relación a la seguridad

integral dependen mucho de la realidad concreta de cada institución, aunque se detectan

aspectos más o menos COMUNES

Se ha observado que los centros no controlan suficientemente la documentación

relacionada con las instalaciones (autorizaciones, libros de mantenimiento, periodicidad de

la revisión de las instalaciones, etc.) y del edificio en general (autorización municipal de

funcionamiento, autorización de primera ocupación y autorización de obra de edificación).

El control de la documentación y la revisión de las instalaciones es mejor, en casi todos los casos, en los centros privados. Asimismo, dentro de esta tipología, los centros de secundaria privados son los que presentan un mayor control de las revisiones y la documentación de las diversas instalaciones con las que cuentan los centros (acumuladores de agua caliente, calderas de agua caliente, aparatos consumidores de gas, instalación eléctrica, etc.).

Se observan deficiencias en el control de la documentación del edificio. Sólo el 100% de los centros privados de educación secundaria analizados dice disponer de toda la documentación de autorizaciones. Los centros de educación primaria públicos son los que mayores deficiencias presentan en este ámbito, debido a que dichos centros son gestionados por las Administraciones Públicas y son estas quienes gestionan dichos documentos.

En el caso de instalaciones más inusuales, como las de almacenaje de líquidos inflamables e instalaciones petrolíferas, se observa una falta de control de las revisiones anuales.

Los participantes en los grupos de discusión señalan, en este sentido, que los peligros

relacionados con las instalaciones dependen mucho del año en el que fue construido el

edificio y destacan los amplios riesgos que hay en escuelas rurales (enchufes colgados,

escaleras sin protección, escalones sin bandas antideslizantes, calderas situadas en las

paredes de las escuelas, etc.).

Referente a los extintores, aunque el 100% de los centros dispone de ellos y en la mayoría

se realiza el mantenimiento necesario, se observa que los centros públicos de primaria

llevan poco control en lo que se refiere a su mantenimiento y revisión (saben quién es el

responsable del mantenimiento, pero en algunos casos desconocen si las revisiones se

llevan a cabo con la periodicidad indicada,). Asimismo, se detecta que no todos los centros

realizan una comprobación visual trimestral del estado de la carga del extintor, la botella y

sus partes.

Casi la totalidad de centros (29 de los 31 analizados) disponen de Plan de Autoprotección -

Evacuación, implementándolo y revisándolo adecuadamente, aunque los resultados son

mejores en centros públicos que privados.

26 de los 31 centros realizan ejercicios o simulaciones con periodicidad anual, de los cuales tan solo 22 los llevan a cabo durante los tres primeros meses del curso, tal como establece la normativa. Igualmente, es necesario indicar que hay centros que realizan los simulacros sin la participación de todos los alumnos y personal del centro. En el caso de

Page 72: Administración de seguridad integral.pdf

los centros de titularidad privada la proporción de centros que presentan esta deficiencia es mayor (ver gráfico 2).

Deficiencias en cuanto a señalización (plano «usted se encuentra aquí», indicación de salidas, recorridos de evacuación y sistemas de protección contra incendios) en un 50% de los centros.

Gráfico 2. Realización de ejercicios o simulacros (%).

Algunos participantes de los grupos de discusión exponen que «los simulacros se hacen,

pero ¿se aprende de ellos?», considerando que muchas veces se avisa previamente a los

estudiantes, que «aparecen en el patio con abrigo y bocadillo ». Asimismo, se señala que no

siempre el protocolo es el adecuado: «se empieza la evacuación por abajo, pero ¿qué pasa si

hay fuego en los pisos superiores? ». En este sentido, es necesario diseñar adecuadamente

el Plan de Autoprotección– Evacuación del centro educativo, contemplando tanto

protocolos de evacuación como de confinamiento.

El análisis de la accesibilidad (ver gráfico 3) revela que muy pocos centros disponen de

soportes complementarios para ayudar a la comunicación (sistemas aumentativos y

alternativos, sistemas de soporte a la comunicación oral, lenguaje de signos u otros).

Asimismo, solo el 50% de los centros dispone de normas internas que promueven y

estimulan la eliminación de barreras, y de estos solo la mitad tiene establecidos planes y

calendarios para la implementación de estas normas. Es necesario indicar que las

instituciones que cuentan con planes de integración son las que acostumbran a contemplar

actuaciones para la supresión de barreras arquitectónicas.

Page 73: Administración de seguridad integral.pdf

Gráfico 3. Accesibilidad (%).

En los diferentes grupos de debate se manifestó que en los centros de nueva construcción se

contemplan más los elementos de accesibilidad, instalando rampas en aquellos lugares que

lo permiten. Su instalación también se convierte en un elemento de seguridad, por cuanto

sustituyen a las escaleras que, a juicio de los profesores, entrañan un riesgo en las horas de

concentración de alumnado (entradas y salidas) por las aglomeraciones que se generan.

Factores dinámicos del riesgo

En esta dimensión destacan los datos relativos a tránsito y circulación de vehículos (ver

tabla 3), tanto en el interior del centro como en el exterior del mismo. Especialmente es

necesario destacar cómo alrededor de un 50% de los centros considera que la señalización

exterior vertical y horizontal es insuficiente. Asimismo, en pocos centros existen zonas de

espera protegidas para los padres y/o zonas de aparcamiento señalizadas para la entrada o

recogida de alumnos.

Tabla 3. Datos relativos al tránsito y circulación de vehículos (%).

Primaria Secundaria

Público Privado Público Privado

Suficiente señalización exterior, vertical y horizontal 55% 29% 67% 57%

Semáforos y pasos de peatones en los alrededores del

centro 73% 71% 67% 86%

Page 74: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 3. Datos relativos al tránsito y circulación de vehículos (%).

Primaria Secundaria

Público Privado Público Privado

Vigilancia por parte de la policía municipal o afines en las

horas de entrada y salida de alumnos del centro 64% 43% 67% 57%

Zonas de espera protegida o señalizada para padres 18% 29% 17% 43%

En relación con la seguridad vinculada al transporte escolar, regular o esporádico, los

resultados ponen de relieve que este tipo de servicio cumple con la normativa y se toman

las medidas de seguridad adecuadas, en casi la totalidad de los centros analizados. Con

todo, tan solo la mitad de los centros públicos disponen de zona señalizada y protegida de

la circulación de vehículos, cuando la zona de subida o de bajada se encuentra fuera del

recinto escolar (ver gráfico 4). Este hecho supone un alto riesgo debido a la falta de zonas

específicas para subir o bajar del autobús escolar y la falta de señalización para el resto del

tránsito, situación más grave en los centros de primaria que de secundaria y entre los de

titularidad pública que privada.

Gráfico 4. Señalización de la zona de llegada y salida y protección del tránsito de otros

vehículos (%)

Aunque los resultados indican lo contrario, algunos participantes en los grupos de discusión

celebrados indicaron que hay poca costumbre de utilizar los servicios colectivos, como

autobuses, con los adecuados niveles de seguridad (uso del cinturón, por ejemplo),

corroborando, por otro lado, los bajos niveles de señalización de la zona de llegada y salida

de los vehículos.

Page 75: Administración de seguridad integral.pdf

Referente a la seguridad física, es decir, aquellos elementos de protección necesarios para

la custodia de valores materiales o documentación susceptible de robo, hurto o uso

indebido, se detecta que pocos centros disponen de elementos de protección en ventanas y

puertas de acceso. Igualmente, se observan algunas deficiencias en los protocolos de claves

y contraseñas (custodia y modificación periódica). También es necesario indicar que muy

pocos centros disponen de correctas medidas mecánicas (cerraduras y llaves) para el control

del acceso, sobre todo en lo referente a llaves de seguridad (incopiables) para las cerraduras

de acceso desde el exterior.

La custodia de documentación académica, información documental sensible y los datos

informáticos acostumbran a gestionarse y guardarse debidamente, según la legislación

vigente sobre privacidad de datos. Además, casi la totalidad de centros (97%) dice conocer

y cumplir con lo que establece la Ley de Protección de Datos.

EL TRANSPORTE ESCOLAR CUMPLE EN GENERAL CON LA NORMATIVA Y SE

ADOPTAN LAS MEDIDAS DE SEGURIDAD ADECUADAS EN CASI TODOS LOS

CENTROS ANALIZADOS

De todas las aportaciones recogidas alrededor de este aspecto, cabe decir que los

participantes distinguieron entre aspectos que han mejorado y aspectos mejorables de la

cultura de protección de datos. Así, indican que se ha mejorado en el sentido de que, en la

actualidad, todos los documentos que contienen algún tipo de información personal se

destruyen directamente cuando dejan de ser útiles y se presta mayor atención a la

protección de datos informáticos. Por otro lado, señalan que se debe mejorar la custodia de

datos sensibles y expedientes de alumnado y profesorado; estos documentos deberían estar

solo en manos de la dirección.

En relación a la prevención del riesgo del personal docente es necesario indicar que:

El riesgo físico del personal docente es medio. Es conveniente destacar, en este sentido, cómo la probabilidad de que se produzcan casos de patologías vocales es medio-alto, pero que son pocos los centros que establecen medidas preventivas al respecto (mecanismos de ventilación, mecanismos de soporte para facilitar la comunicación y mecanismos para evitar los ruidos exteriores y la mejora acústica de las aulas).

El riesgo psicológico y ergonómico del personal docente es bajo, aunque más elevado en los centros públicos de educación primaria.

Alrededor de un 77% de los centros analizados disponen de Plan de Actuación para la promoción y la mejora de la convivencia escolar.

La mayoría de docentes participantes en los grupos de discusión indicaron el acoso laboral

y la presión psicológica como los principales riesgos a los que están expuestos. En el caso

de los centros de la zona sur, también se mencionó el contagio de enfermedades, por el

hecho de atender inicialmente a grupos sociales de inmigrantes sin controles sanitarios o de

los que se desconoce su trayectoria sanitaria.

Sobre la prevención del riesgo del alumnado, se ha observado que:

Page 76: Administración de seguridad integral.pdf

Casi la mitad de centros analizados tiene antecedentes de tráfico y/o consumo de drogas en el interior del centro y/o alrededores. Casi la totalidad de centros tiene establecidas medidas de protección y prevención contra este tipo de riesgo, como por ejemplo, la realización de charlas y cursillos de formación para padres y alumnos, medida muy extendida entre los centros de educación secundaria, dada la edad de los alumnos. Con todo, son muy pocos los centros que tienen establecidas medidas internas de prevención y detección.

En un 40,75% de los centros analizados hay antecedentes de casos de acoso psicológico entre alumnos del centro educativo y antecedentes de casos de violencia física en un 57,25%. Es necesario indicar que los porcentajes son superiores en los centros de secundaria públicos (ver gráfico 5). Las medidas más extendidas para hacer frente a este tipo de riesgo son: servicios de orientación y asesoramiento, personal responsable del control de los alumnos durante las horas de recreo y existencia de protocolos de actuación en caso de producirse situaciones de acoso físico o psicológico, que el personal conoce y aplica.

Gráfico 5. Inseguridad social. Antecedentes de acoso psicológico y violencia física entre

alumnos del centro (%).

Es necesario destacar cómo en los grupos de discusión se contemplaron los riesgos

derivados del uso de las nuevas tecnologías entre el alumnado como uno de los principales

problemas a los que se enfrentan actualmente los centros de educación secundaria. Los

casos de acoso entre alumnos, utilizando estos medios, han aumentado en los últimos

cursos, detectándose grabaciones y difusiones de comentarios sobre alumnos y profesores

en redes sociales o usando las mismas para presentar y debatir temas privados o socializar

aspectos del funcionamiento del centro: motes de los profesores, ridiculización de

comportamientos, etc.

La realización de nuevas investigaciones deberá dirigirse hacia el diseño de procesos de

gestión de la seguridad integral que incluyan instrumentos autoavaluativos, aplicables por

los propios centros

Page 77: Administración de seguridad integral.pdf

En relación al equipo dirigente de actividades del tiempo libre/extraescolares, alrededor de

un 80% de los centros analizados cumple con las ratios de personal responsable/ número de

alumnos participantes.

Respecto al modelo e instrumento, los participantes en las mesas de debate celebradas

concluyen que son amplios y útiles. Más específicamente comentaron que la aplicación del

cuestionario EduRisc les permite ser conscientes de los peligros que están presentes en el

día a día de sus centros y conocer sus deficiencias, ayudándoles a concretar aspectos de

mejora. De este modo, indicaron que su aplicación resulta útil para la realización de

procesos de autoevaluación, diagnóstico y/o evaluación externa.

Conclusiones y propuestas para la mejora de la seguridad integral en centros

educativos

La realización de estudios como el que aquí se ha presentado permite conocer cuál es la

realidad de los centros educativos en cuanto a su seguridad integral, proporcionando

información relevante con el fin de llegar a establecer recomendaciones prácticas.

La validez y utilidad del modelo e instrumento EduRisc queda evidenciada tanto por la

utilidad que proporciona la recogida de datos como por la validez que le asignan los grupos

de discusión establecidos. De todas formas, el instrumento deberá incorporar en nuevas

ediciones aportaciones relacionadas con medicamentos, recogida de alumnos y riesgos

derivados del uso de las tecnologías.

Respecto a la información obtenida, y a pesar del bajo número de centros analizados, se han

puesto de relieve las principales debilidades y fortalezas que los centros de enseñanza

obligatoria de España presentan en relación a la seguridad integral. No podemos hacer

generalizaciones, pues el número de centros analizados no lo permite, pero, sin duda, es el

primer paso para seguir avanzando. Los resultados de la investigación proporcionan un

punto de partida para la realización de nuevas investigaciones que deben dirigirse hacia el

diseño de procesos de gestión de la seguridad integral que incluyan instrumentos

autoevaluativos, aplicables por los propios centros.

Como resultado del estudio de campo y de la discusión de los resultados, el equipo de

investigación elaboró un conjunto de propuestas para la mejora de la seguridad integral, que

deben ser entendidas como indicaciones que, necesariamente, deben ser contextualizadas en

cada centro. Las medidas contempladas obedecen a distintos grados de formalización y

prevención, pudiendo identificar tres estadios:

a. El centro aplica iniciativas diversas relativas a la seguridad. b. El centro previene los riesgos a través de la formalización de acciones y medidas

preventivas. c. El centro ha institucionalizado la cultura de la seguridad, de modo que todos los

elementos y estructuras de la organización se encuentran impregnados de ella, creando valores, normas y creencias sobre seguridad compartidas.

Page 78: Administración de seguridad integral.pdf

En relación a la dimensión estática del riesgo, los centros deberían atender las siguientes

cuestiones:

En cuanto a las instalaciones (acumuladores de agua caliente, instalaciones de gas natural, instalaciones eléctricas, etc.), los centros educativos deberían realizar las revisiones pertinentes de los aparatos, tal como determina la legislación correspondiente. Asimismo, deberían registrar todas las actuaciones de mantenimiento, gestionando y custodiando la documentación relativa a las actualizaciones y revisiones de las instalaciones.

Los centros deberían diseñar y actualizar el Plan de Autoprotección, difundiéndolo entre todos los agentes de la comunidad (profesores, alumnos, personal de administración y servicios, padres, etc.). Igualmente, deberían contemplarse las acciones de difusión y formación necesarias, realizándose los simulacros de situación de emergencia durante los tres primeros meses del año, contando con la participación de todo el alumnado y personal del centro (profesorado y personal de administración y servicios).

En relación a las medidas de protección, los centros deberían realizar un correcto mantenimiento de los extintores y otro tipo de instalaciones (BIE), así como tener instalados detectores de humos y alarmas contra incendios.

Todos los centros educativos deben ser accesibles a la gente con discapacidad. Es necesario fomentar la adopción de medidas que permitan, a cualquier persona, acceder y desplazarse por el centro educativo (instalación de rampas, ascensores, etc.), utilizar el transporte escolar (transporte adaptado) y comunicarse de forma autónoma e independiente (elementos de soporte a la comunicación).

Referente a la dimensión dinámica del riesgo, se propone que los centros educativos:

Presten especial atención al tránsito, tanto a lo referente a la seguridad del transporte escolar, como a la señalización horizontal y vertical de circulación (semáforos, pasos de peatones, señal de zona escolar, etc.). Asimismo, deben dotarse del personal necesario para realizar el control del alumnado durante la subida y bajada de los vehículos, así como para realizar el control de la circulación en el interior del centro educativo.

En relación a la custodia de documentación y acceso a los datos, deben mantener los expedientes académicos y otros datos personales bajo llave, y todos los ordenadores con acceso a información privada bajo contraseña de acceso. Asimismo, el centro escolar debe estar provisto de medidas de protección que impidan el acceso de personal no autorizado. Es necesario indicar que las horas de entrada y salida de alumnos suponen un riesgo al producirse aglomeraciones. En este sentido, es conveniente que los responsables de los centros establezcan mecanismos para reducir el riesgo: entradas y salidas escalonadas, salida de alumnos por diversas puertas, recogida de los alumnos más pequeños en el interior del centro, etc.

Los centros educativos deben adoptar medidas para la prevención y vigilancia de los riesgos sobre las personas, es decir, sobre alumnos y profesores. De este modo, es necesario que los centros cuenten con protocolos y medidas para evitar el riesgo físico, psíquico y social del colectivo de alumnos, profesores y otro personal que intervenga en el centro. La puesta en marcha de este tipo de medidas repercutirá en la mejora del clima y la convivencia escolar.

Page 79: Administración de seguridad integral.pdf

Aplicando medidas preventivas e institucionalizando los procesos de gestión de la

seguridad integral, se promoverá y generará la cultura de la Seguridad Integral en el interior

de los centros educativos

Aplicando medidas preventivas y de seguridad desde una perspectiva global, iniciando

procesos integrales e institucionalizando los procesos de gestión de la seguridad integral, se

promoverá y generará la cultura de la seguridad integral en el interior de los centros

educativos. La seguridad integral debe someterse a los procesos de planificación,

coordinación, control y evaluación institucional, incluyendo la realización de actuaciones

para su desarrollo en el centro escolar.

A MODO DE GLOSARIO

Seguridad integral. Gestión de un valor institucional vinculado a la cultura organizativa de

los centros educativos mediante el que se promueven las acciones necesarias sobre los

componentes organizativos con la finalidad de ofrecer alternativas y fomentar la cultura

preventiva.

Riesgo. Es la probabilidad de que se produzca un evento o consecuencia negativa, es decir,

la probabilidad de que una persona sufra un daño.

Tipología de riesgos. Existen diferentes tipos de riesgo: riesgos físicos (factores

ambientales), químicos (elementos y sustancias que pueden causar algún tipo de

intoxicación), biológicos (agentes orgánicos que pueden desencadenar algún tipo de

enfermedad), ergonómicos (elementos de la tarea, equipo o ambiente de trabajo que pueden

favorecer el desarrollo de enfermedades o lesiones) y psicosociales (aspectos personales del

trabajo y el entorno social que en un momento dado pueden generar cargas que afecten a la

salud).

Medida preventiva. Actividad o medida adoptada o prevista para evitar o disminuir los

riesgos presentes en el centro educativo.

Cultura de la seguridad integral. Conjunto de valores, actitudes y normas, implícitas y/o

explícitas, sobre seguridad y prevención, que son compartidos por los individuos y grupos

que integran la institución escolar.

AGRADECIMIENTOS

Este trabajo ha sido financiado gracias a una ayuda a la investigación concedida por

FUNDACIÓN MAPFRE.

Page 80: Administración de seguridad integral.pdf

PARA SABER MÁS

1. Torrenteras, A.; Gómez, F.J.; Ruiz, M.J. y otros (2001). Salud laboral y prevención de riesgos laborales en docentes. Póster presentado en XII Congreso Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo. Valencia 20-21 de noviembre de 2001.

2. Longás, J. (dir. y coord.) (2005). Estudi de les iniciatives europees de prevenicó de risc escolar (2003- 2004). Fundació Blanquerna Assistencial i de Serveis. En http://www.prevencio.cat/resources/ estudi_prl_europa_ca.pdf [revisado en septiembre de 2009].

3. Consumer-Eroski (2008). Uno de cada cuatro colegios suspende en seguridad. Revista Consumer- Eroski, nº 19 marzo, pp.34-41.

4. Gómez, G. (coord.) (2001). Prevención de riesgos y salud laboral en los centros docentes. Valencia: ciss-praxis.

5. Roldán, C. (2002). Manual de seguridad en los centros educativos. Consejería de Educación y ciencia. Dirección General de Construcciones y Equipamiento Escolar. España: junta de andalucía. En http://www.iseandalucia. es/archivos/manual_de_seguridad. pdf [revisado en septiembre de 2009].

6. Sebastián, E. (2006). Cuestionario para la evaluación de los espacios escolares en los centros educativos. En Estrategias e instrumentos para la gestión educativa. Madrid: walters kluwer.

7. De Vehí, A. (2009). ¡Peligro! Cómo afrontar las adversidades sin miedo. Barcelona: edic. 8. Buijs, G. (2009). Better schools trought health networking for health promoting schools in

Europe. European journal of education, vol. 44, nº 4, pp. 507-520. 9. De Waal & Grösser (2009). Safety and security at school: a pedagogical perspective.

Teaching and teacher education. Vol. 25, issue 5, pp. 697-706. 10. USTEC-STES (2008). Guía pràctica de salut laboral. En Eina sindical d’informació, nº 41,

abril, pp. 2- 18. En http://www.sindicat.net/ w/docs/eina40.pdf [revisado en septiembre de 2009].

11. Pérez Soriano, J. (2009). Seguridad y salud en los docentes, en Gestión práctica de riesgos laborales, nº 58, marzo, pp-30-35.

12. Defensor del Pueblo Andaluz (2003). Informe del Defensor del Pueblo Andaluz: protección y seguridad en centros docentes de Andalucía. Andalucía: Defensor del Pueblo Andaluz.

13. Gay, E. y otros (2004). Condiciones de seguridad y salud del trabajo docente. Barcelona: publicaciones rosa sensat.

14. Chamarro, A.; longás, e.; longás, j.; capell, m. (2009). Danys no intencionals a l’escola. Gestió de la seva prevenció. Barcelona: saip - Fundació Blanquerna Assistencial i de Serveis (Universitat Ramón Ilull). El documento se puede descargar en la página web: http://www.prevencio.cat [revisado el 15.09.09].

15. Gairín, j. y Otros (2008). Seguretat integral en els centres educatius de Catalunya. Barcelona: Departament d’Educació (documento interno).

El estado de la seguridad en el hogar y el

ocioSEGURIDAD

Page 81: Administración de seguridad integral.pdf

Pese a que los accidentes ocurridos en el hogar y en el ocio apenas encuentran eco en los

espacios informativos, su mortalidad en España es seis veces superior a la producida en el

ámbito laboral y más del doble de la registrada en los accidentes de tráfico. Aunque son

cifras de extrema gravedad, no existen datos oficiales en ningún país que reflejen con

claridad este tipo de accidentalidad. Este estudio, con el objetivo de contribuir a arrojar luz

sobre este problema «invisible », establece a partir de diversas estadísticas el número de

fallecidos en nuestro país cada año por accidentes en el hogar, actividades de ocio y

peridomésticas, y elabora un análisis sistémico de los riesgos domésticos y de ocio, como

base para el desarrollo y la aplicación de planes preventivos multimodales que permitan

reducir la ocurrencia de este tipo de accidentes.

Por FRANCISCO MARTÍNEZ GARCÍA. Experto en Gerencia de Riesgos.

En la última década, cada año han fallecido en España alrededor de 380.000 personas, de

las que en torno a 16.000 lo son por causas accidentales o fortuitas, esto es, el 4%. La

mayoría de los fallecimientos, el 96%, se producen por enfermedades y desgastes

biológicos o naturales, de los que nadie se puede librar. Sin embargo, el otro conjunto de

muertes accidentales ocurren de forma inesperada, con interrupción brusca y prematura de

la vida de personas, algo que las sociedades avanzadas no pueden admitir. Esta

desaparición inmediata, por anticipado, en edades tempranas, genera desequilibrios y

tragedias familiares y en allegados difíciles de asimilar.

Las victimas en accidentes en los medios de transporte, en el trabajo y en episodios de

homicidios y asesinatos son suficientemente conocidas y están reflejadas con nitidez por las

estadísticas oficiales. De hecho, por su importancia y repercusión social, en la última

década se ha actuado decididamente frente a ellas, fundamentalmente en las dos primeras,

reduciendo de forma sustancial la siniestralidad registrada. No ocurre lo mismo cuando se

trata de medir la importancia de la mortalidad por accidentes en el hogar, el ocio y las

gestiones particulares ciudadanas, de la que no existen estadísticas representativas y fiables

en España ni en la mayoría de los países.

Las muertes accidentales acaecen de forma inesperada con la interrupción brusca y

prematura de la vida de las personas

Las responsabilidades y competencias claramente atribuidas en los ámbitos del transporte

vial, ferroviario, aéreo y marítimo, en los centros de trabajo y en la seguridad ciudadana

ante delitos contra las personas, se diluyen cuando se intentan atribuir en los espacios

domésticos, de ocio y de gestión privada. Son tan variados los escenarios en que se

desarrolla la vida ciudadana, al margen de los citados expresamente, que resulta muy

complejo establecer las responsabilidades en cada uno de ellos, la mayoría de las veces

solapadas en España entre organismos estatales, autonómicos y municipales y, en

ocasiones, con vacíos que quedan al margen de cualquier entidad pública o privada.

Desde el atrapamiento de un usuario por la puerta automática del garaje de su vivienda, al

encendido del aceite de una sartén en el fogón de la cocina, una baldosa suelta en la acera

de la vía pública o la caída de un infante en una piscina privada hasta el resbalón en el suelo

húmedo del supermercado, son innumerables los episodios cotidianos que pueden terminar

Page 82: Administración de seguridad integral.pdf

en accidentes individuales de diferente gravedad, incluso trágicamente con la vida de

personas.

En la búsqueda de la dimensión de los accidentes domésticos, una vez descartados los

accidentes laborales, en los medios de transporte y los de carácter antisocial, se contemplan

también otros eventos de gran magnitud humana y social acaecidos en diferentes partes del

planeta Tierra que avisan de acontecimientos similares que se pueden reproducir en el

futuro.

Adicionalmente a los riesgos representados por las viviendas, hay que considerar los que

entrañan los espacios públicos y privados donde se llevan a cabo las actividades de ocio y

de gestión particular ciudadana o peridoméstica

Son conocidas las repetidas y casi inevitablemente esperadas catástrofes naturales de

terremotos, tsunamis, erupciones volcánicas, corrimientos de tierras, huracanes/tifones,

inundaciones, entre otras, que se repiten periódicamente en determinadas zonas del planeta

con unos saldos estremecedores de pérdidas de vidas humanas, fundamentalmente en los

hogares. No obstante, y de forma más aleatoria, se producen otros macrosiniestros, quizá

más imprevisibles –que no serían tan imprevisibles si se detectan y analizan con

anticipación tales situaciones de riesgo–, pero con resultado de múltiples víctimas mortales

fundamentalmente en los espacios domésticos y de ocio. Baste con enumerar algunos

ejemplos:

Cámping de Los Alfaques. Tarragona (España). Explosión de cisterna. 1978. 243 fallecidos alojados en el cámping.

Aceite de colza adulterado. Intoxicaciones. España. Años 1980. 1.100 fallecidos. Presa de Tous. Valencia (España). Rotura de presa e inundación. 1982. 8 fallecidos. Explosiones de gas en San Juanico (México). 1984. 1.200 fallecidos. Explosión y escape tóxico en planta química. Bhopal (India). 1984. 2.500 fallecidos. Corrimiento de lodos del volcán Nevado del Ruiz. Armero (Colombia). 1985. 3.000

fallecidos. Perforaciones de oleoductos para robo de combustible. Diversos lugares internacionales.

Centenares de víctimas mortales por evento. Cámping de Biescas. Huesca (España). Riada. 1996. 87 fallecidos. Consumo de carne de vacas locas, encefalopatía espongiforme. Unión Europea. 1999-

2002. 130 fallecidos. Corrimiento de ladera por terremoto y rotura de depósito de agua. Santa Tecla (El

Salvador). 2001. 300 fallecidos. Incendios forestales. Victoria (Australia). 2009. 173 fallecidos. Terremoto. Haití. 2010. 316.000 fallecidos. Corrimiento de ladera por lluvias torrenciales. Medellín (Colombia). 2010. 400 fallecidos. Avalancha humana en la Love Parade. Duisburgo (Alemania). 2010. 21 fallecidos. Vertido de lodos metálicos mineros. Ajka-Kolontar (Hungría). 2010. 12 fallecidos. Avalancha humana en Fiesta del Agua. Phnom Penh (Camboya). 2010. 400 fallecidos. Inundaciones en Brasil, Australia, Sri Lanka, Europa. 2011. Centenares de fallecidos.

Page 83: Administración de seguridad integral.pdf

Todos estos casos, que no son más que una muestra, han repercutido fundamentalmente en

hogares y han alcanzado esos balances descomunales por la acumulación de fallos y

factores negativos en un momento, lugar y circunstancias determinadas, que

desencadenaron y pueden volver a desencadenar los peores escenarios de accidentes o sus

equivalentes de siniestros máximos posibles de pérdidas de vidas humanas.

Es llamativa la inexistencia de cifras oficiales de la accidentalidad en el hogar, ocio y

gestiones peridomésticas en ningún país, cuando posiblemente estemos ante los espacios en

que se manifiestan los riesgos de mayor importancia cuantitativa susceptibles de ser

medidos. Es destacable el esfuerzo del programa EHLASS (European Home and Leisure

Accidents Surveillance System, por sus siglas en inglés, y traducido al español como

Sistema Europeo de Detección de Accidentes Domésticos y de Ocio), puesto en marcha en

1975 por la Dirección General de Salud y Protección al Consumidor de la Comisión de la

Unión Europea y de su correspondiente aplicación en España por el estudio DADO

(Detección de Accidentes Domésticos y de Ocio), que llevaba a cabo el Instituto Nacional

de Consumo del Ministerio de Sanidad y Consumo con una periodicidad anual irregular.

Este estudio se elaboraba mediante encuestas de muestras de población que se extrapolaban

al conjunto del país, con una aceptable información de causas y circunstancias de estos

accidentes, pero sin una validez estadística ajustada para conocer la magnitud real del

problema. Hay que lamentar que el último estudio DADO se realizó en 2007, año en que se

canceló el programa.

La dimensión de los accidentes en el hogar y el ocio

El hogar moderno se ha convertido en un elemento constructivo equipado con numerosas

instalaciones y equipamientos industriales de pequeño tamaño en el que se almacenan o

suministran diversas mercancías y productos peligrosos, que alberga a los miembros de la

familia y visitantes temporales de sus entornos de relación.

Así, los edificios de viviendas incorporan medios constructivos formados por rampas,

suelos rugosos o resbaladizos, bordillos, escaleras, huecos y balcones, entre otros, que

comportan riesgos de distintas relevancia. Junto a estos, los equipamientos de aparatos

elevadores, calderas de vapor y agua caliente, depuradoras, electrodomésticos, maquinaria

de bricolaje, cuchillería y otros utensilios, así como las instalaciones eléctricas, de gas, agua

y aire acondicionado y los productos de limpieza, farmacéuticos, de reparación, de

tratamiento de piscinas, depuradoras y compostaje, que acumulan riesgos químicos de

considerable importancia, configuran un auténtico establecimiento industrial en miniatura,

con los consiguientes riesgos asociados.

Adicionalmente a los riesgos representados por las viviendas, hay que considerar los que

entrañan los espacios públicos y privados donde se llevan a cabo las actividades de ocio –

naturaleza, pabellones escolares y deportivos, recreativos, comerciales, etc.– y las de

gestión particular ciudadana o peridomésticos –citas médicas, trámites administrativos,

reuniones cívicas, etc.–, con sus correspondientes riesgos vinculados.

Page 84: Administración de seguridad integral.pdf

Si bien los macroaccidentes de catástrofes naturales y antropogénicas antes citados golpean

fuertemente en ciertas regiones y conmueven en todo el mundo, las estadísticas de víctimas

humanas se nutren principalmente de los numerosos accidentes comunes cotidianos, la

mayoría individuales, que, como es evidente, no atraen la misma atención mediática que las

grandes catástrofes. En los análisis de riesgos se manejan, además de otros factores, las

variables estadísticas de frecuencia y consecuencias dañinas, que miden la importancia del

pasado más reciente transcurrido y permiten proyectar las previsiones de probabilidades e

intensidades futuras.

En la valoración de las consecuencias dañinas de los accidentes se consideran

habitualmente los tres componentes de daños personales, sociales y económicos.

Sin ninguna duda, la repercusión más importante es la de carácter humano, y dentro de esta,

aquella que produce la muerte de personas, como valor extremo y claramente

representativo de la gravedad de las distintas situaciones de riesgo.

En este sentido, este estudio pretende, en primer lugar, establecer el número de fallecidos

producidos cada año por accidentes en el hogar, actividades de ocio y peridomésticas.

Como se ha indicado anteriormente, no existen estadísticas oficiales al respecto en ningún

país del mundo, aunque sí se elaboran encuestas y sondeos que reflejan algunas tendencias

de causas, edades, asistencia sanitaria y otros aspectos, que son útiles, pero no facilitan, ni

por aproximación, las cifras absolutas de víctimas mortales.

La búsqueda de este parámetro, fundamental para poder medir la importancia del riesgo, se

acomete en el estudio a partir de las estadísticas de defunciones por causa de muerte del

Instituto Nacional de Estadística español, en su apartado de causas externas. En dicho

apartado se recogen todas las causas accidentales y las fortuitas de carácter intencionado

que han ocasionado las defunciones en cada año.

En el gráfico 1 se recogen las defunciones por causas externas registradas en España en los

últimos años a contar desde 1980, para disponer de la visión de su evolución histórica. En

el gráfico 2 se refleja la misma estadística de diversos países de nuestro entorno en 2008,

para contar también con una referencia comparativa internacional en este punto de partida.

El desglose de defunciones por las principales causas externas registradas en España en

2008, último año disponible, está recogido en el gráfico 3. En el total de 15.289

defunciones se incluyen 10.903 por causas accidentales y el resto por comportamientos

voluntarios o de intencionalidad evidentes y, por tanto, no accidentales. Tomando como

base la cifra de muertes accidentales, por desagregación de los ámbitos no domésticos, esto

es, las ocurridas en las actividades laborales –legales e irregulares– y en los medios de

transporte –vial, aéreo, ferroviario, marítimo y otros–, resulta en la cifra de 6.869, con un

margen de error razonable, que da una idea de la importancia de los accidentes del hogar y

el ocio en comparación con los espacios más conocidos del trabajo (1.065) y del tráfico vial

(3.100) en ese año.

Page 85: Administración de seguridad integral.pdf

Gráfico 1. Fallecidos y mortalidad por causas externas: Accidentes, agresiones y suicidios.

España, 1980-2008.

Tasa de mortalidad: Número de fallecidos por millón de habitantes.

Fuente: Instituto Nacional de Estadística.

Gráfico 2. Fallecidos y mortalidad por causas externas. Internacional, año 2008. Tasa de

mortalidad: Número de fallecidos por millón de habitantes. Fuentes: Instituto Nacional de

Estadística y Organización Mundial de la Salud. Nota: Junto al país, entre paréntesis, año al

que corresponde el dato si es distinto de 2008.

Page 86: Administración de seguridad integral.pdf

Gráfico 3. Principales causas externas de mortalidad. España, 2008. Tasa de mortalidad:

Número de fallecidos por millón de habitantes. Fuente: Instituto Nacional de Estadística.

Las principales causas de muerte accidental en el hogar y el ocio en ese año están

encabezadas por las obstrucciones de vías respiratorias (25,9%), las caídas (24,5%) y los

envenenamientos accidentales (12,8%), cuya distribución con el resto de causas se puede

observar en la tabla 1.

Tabla 1. Fallecidos en accidentes del hogar y ocio por causas. España, 2008.

Causas Nº de fallecidos Porcentaje frente al total

TOTAL 6.869 100,0

Obstrucción vías respiratorias 1.780 25,9

Caídas 1.686 24,5

Envenenamientos accidentales 880 12,8

Ahogamientos 428 6,2

Incendios 196 2,9

Page 87: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 1. Fallecidos en accidentes del hogar y ocio por causas. España, 2008.

Causas Nº de fallecidos Porcentaje frente al total

Fuerzas de la naturaleza 65 0,9

Fuerzas mecánicas 18 0,3

Otras causas no especificadas 1.805 26,3

Por otra parte, la distribución de estos fallecimientos accidentales por razón de género

corresponde en el 61,6% a varones, que son mayoría sustancial en todas las causas, excepto

en la de obstrucción de las vías respiratorias, en la que las mujeres supusieron el 52,4% de

las víctimas.

Finalmente, en el breve análisis que tiene cabida en este artículo, merece especial atención

la distribución de las muertes en función de la edad, que se recoge en la tabla 2. En este

apartado destacan las mayores tasas de accidentalidad en las edades más longevas; así, a

partir de los 65 años dicha tasa supera de manera creciente la tasa media –148,2 fallecidos

por cada millón de habitantes– hasta alcanzar el índice más alto, 6.675, en el tramo de 95 y

más años. También es muy significativa la comparación entre los porcentajes que

representan estos grupos de edad de mayores en la población española y los muy superiores

de fallecidos por accidentes en esos mismos tramos de edad, como se puede observar en la

tabla citada.

Tabla 2. Fallecidos en accidentes del hogar por edades. España, 2008.

Tramos de

edad

(años)

Nº de

fallecidos

Tasa de mortalidad

por millon en casa

franja de edad

Porcentaje del total de

fallecidos en cada

franja de edad

Porcentaje de la

población en cada

franja de edad

0 a 4 84 35,9 12,0 5,1

5 a 9 28 12,8 0,4 4,7

10 a 14 24 11,2 0,3 4,6

15 a 19 93 39,5 1,4 5,1

Page 88: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 2. Fallecidos en accidentes del hogar por edades. España, 2008.

Tramos de

edad

(años)

Nº de

fallecidos

Tasa de mortalidad

por millon en casa

franja de edad

Porcentaje del total de

fallecidos en cada

franja de edad

Porcentaje de la

población en cada

franja de edad

20 a 24 161 56,7 2,3 6,2

25 a 29 175 47,1 2,5 8,0

30 a 34 239 57,8 3,5 9,0

35 a 39 302 77,2 4,4 8,5

40 a 44 287 77,0 4,2 8,1

45 a 49 297 88,6 4,3 7,3

50 a 54 239 83,3 3,5 6,2

55 a 59 250 96,7 3,6 5,6

60 a 64 251 105,8 3,7 5,1

65 a 69 314 169,9 4,6 4,0

70 a 74 461 235,7 6,7 4,2

75 a 79 688 404,0 10,0 3,7

80 a 84 1.019 860,0 14,8 2,6

85 a 89 1.027 1.937,7 15,0 1,1

90 a 94 663 1.801,6 9,7 0,8

Page 89: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 2. Fallecidos en accidentes del hogar por edades. España, 2008.

Tramos de

edad

(años)

Nº de

fallecidos

Tasa de mortalidad

por millon en casa

franja de edad

Porcentaje del total de

fallecidos en cada

franja de edad

Porcentaje de la

población en cada

franja de edad

95 y más 267 6.675,0 3,9 0,1

Esta valoración global de fallecidos en accidentes del hogar y ocio se complementa con la

proporcionada por el estudio DADO realizado en España en los años en que se facilitó una

estimación de víctimas mortales, que se puede observar en el gráfico 4. Las estimaciones de

fallecidos oscilan entre un mínimo de 4.000 en los años 2001 y 2007 y el máximo de 6.869,

estimado en este trabajo, seguido de 6.060 en 2005.

Gráfico 4. Fallecidos y mortalidad por accidentes domésticos y de ocio. España, 1995 -

2008.

Tasa de mortalidad: Número de fallecidos por millón de habitantes.

Fuente: Ministerio de Sanidad, Igualdad y Política Social y elaboración propia.

En el gráfico 5 se reflejan las cifras estimativas de víctimas mortales en accidentes del

hogar y ocio en diferentes países.

Page 90: Administración de seguridad integral.pdf

Gráfico 5. Fallecidos y mortalidad por accidentes domésticos y de ocio. Internacional.

Tasa de mortalidad: Número de fallecidos por millón de habitantes.

Fuente: Organismos nacionales e internacionales de salud.

La comparativa estadística de los accidentes del hogar, ocio y peridomésticos frente a los

otros dos ámbitos principales del transporte –básicamente vial: carretera y urbano– y el

laboral se lleva a cabo de acuerdo a los datos de accidentalidad en 2008, con las lógicas

salvedades de ciertas carencias de los del hogar y vinculados, tal como se expresan en la

tabla 3.

Tabla 3. Accidentes por ámbitos e índices de incidencia. Año 2008. (1)Accidentados por cada milón de personas expuestas.

(2)Accidentes leves y graves. Año 2007. (3) Accidentes leves con baja y sin baja.

(4)Accidentes leves y graves.

Ámbito Nº de accidentes Índice de incidencia (1)

Leves Graves Mortales Leves Graves Mortales

Hogar y ocio 1.754.335(2) 6.869 3.785(2) 148,2

Tráfico y vial 114.459 16.488 3.100 2.828,2(4)

2.472,1 356,1 67

Laboral

107.680,9(4)

Page 91: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 3. Accidentes por ámbitos e índices de incidencia. Año 2008. (1)Accidentados por cada milón de personas expuestas.

(2)Accidentes leves y graves. Año 2007. (3) Accidentes leves con baja y sin baja.

(4)Accidentes leves y graves.

Ámbito Nº de accidentes Índice de incidencia (1)

Leves Graves Mortales Leves Graves Mortales

1.703.626(3) 8.500 1.065 107.146,3 534,6 67

OBSTRUCCIONES DE VÍAS RESPIRATORIAS, CAÍDAS Y ENVENENAMIENTOS

ACCIDENTALES, PRINCIPALES CAUSAS DE MUERTE ACCIDENTAL EN EL

HOGAR Y EL OCIO EN ESPAÑA EN 2008

El análisis esencial de comparación de los índices de incidencia entre los tres ámbitos, que

se reflejan en la misma tabla 3, muestra con claridad la mayor incidencia de los accidentes

del hogar y ocio, con una tasa de 148,2 fallecidos por cada millón de habitantes en ese año

2008, frente al mismo valor de 67 en el laboral y el tráfico vial.

Por otra parte, en la consideración de la importancia de los accidentes de toda gravedad,

resulta esclarecedor el tener en cuenta las lesiones de carácter leve, grave y mortal, con una

relación piramidal en la que esta última representa la máxima expresión de la importancia

de los accidentes y, de otro lado, la relación que se da entre los tres niveles.

De esta forma, se construyen las pirámides relacionales que se reflejan en el gráfico 6 y que

muestra en 2008 para los accidentes de trabajo una relación de 1.600 accidentes leves por

cada accidente mortal y de 200 accidentes leves por cada accidente grave, así como de 8

accidentes graves por cada accidente mortal; la relación entre la suma de accidentes leves y

graves respecto de los mortales es de 1.608 (dato elaborado con el mismo criterio en

accidentes del hogar, que se facilita más adelante, para que pueda ser comparado).

LAS MUERTES EN ACCIDENTES DOMÉSTICOS Y DE OCIO EN ESPAÑA SON

SEIS VECES SUPERIORES A LAS PRODUCIDAS EN LOS CENTROS DE TRABAJO

Y MÁS DEL DOBLE QUE LAS REGISTRADAS EN EL TRÁFICO VIAL

En los accidentes de tráfico vial, la geometría piramidal reflejada en el mismo gráfico 6

establece una relación de 37 accidentes leves por cada accidente mortal, 7 accidentes leves

por cada accidente grave y 5 accidentes graves por cada accidente mortal; al igual que en el

punto anterior, la relación entre los accidentes leves más los graves respecto a los

accidentes mortales es de 42.

Page 92: Administración de seguridad integral.pdf

Por lo que respecta a la pirámide de los accidentes del hogar, también expresada en el

mismo gráfico 6, en la que los datos de accidentes leves y graves, procedentes del estudio

DADO, no están disponibles por separado, el único ratio que se puede extraer es el de 255

accidentes leves más graves por cada accidente mortal.

Gráfico 6. Pirámides relacionales de accidentes en hogar, laboral y tráfico. España, 2008.

El análisis comparativo de estos ratios, con las salvedades ya indicadas de la relativa

fiabilidad de los accidentes leves en los ámbitos laboral y de tráfico y de los leves y graves

en el hogar, permite extraer la lectura de que el riesgo de los accidentes de tráfico –42

siniestros leves más graves por cada accidente mortal– acumula en el proceso de la

circulación un potencial de daño muy superior al de los otros dos, seguido del riesgo en el

hogar (255) y a mayor distancia el de los accidentes de trabajo (1.608).

Adicionalmente a los daños personales, de atención prioritaria, se han de considerar las

repercusiones de carácter social sufridas por los accidentados y por los familiares,

allegados, entorno laboral y, en definitiva, el conjunto de la sociedad. De tal manera, en el

caso de fallecimientos se puede utilizar la valoración de la pérdida de capital humano,

representada por metodologías como la DALY (Disabled Adjust Lost Years, por sus siglas

en inglés y traducida al español por Valor de Años de Vida Perdidos por Accidentados),

que da una idea aproximada de la pérdida de aportación a la sociedad que supone la muerte

prematura en accidente de una persona.

Hay que destacar también los desenlaces de algunos accidentes del hogar, que sin

desembocar en el extremo del fallecimiento derivan en lesiones de incapacidad física y

mental muy graves, con la dependencia social y costes económicos que conllevan para los

afectados, su entorno familiar y los sistemas públicos de protección social.

Por otra parte se encuentran los costes económicos derivados de los accidentes domésticos,

resumidos en los servicios de emergencia, atención sanitaria y hospitalaria y de

dependencia. Otro componente de costes viene representado por los daños patrimoniales, a

menudo simultáneos con los personales, de los que apuntan la importancia de esta vertiente

Page 93: Administración de seguridad integral.pdf

del problema las indemnizaciones abonadas por las aseguradoras por las reclamaciones de

los seguros del hogar en las magnitudes que se observan en la tabla 4, con datos

correspondientes a 2009. No obstante, dichos datos no reflejan toda la dimensión de las

pérdidas patrimoniales, ya que bastantes hogares no disponen de póliza de seguros o no

tienen contratadas las coberturas frente a determinados daños.

Tabla 4. Indemnizaciones por siniestros en multirriesgos de hogar. España, 2009.

Naturaleza de los siniestros % de siniestros Valor promedio por siniestro (€)

TOTAL 100.00 382

Incendio 6,21 1.015

Robo 6,03 842

Responsabilidad civil 3,63 434

Responsabilidad civil por agua 0,72 283

Daños propios por agua 32,07 289

Cristales 19,42 169

Accidentes personales 0,01 5.601

Fenómenos atmosféricos 8,44 532

Daños eléctricos 8,07 294

Otros 15,40 160

La importancia de conocer con precisión las cifras reales de la epidemia de los accidentes

domésticos y de ocio radica en el paradigma de que «lo que no se sabe medir no se puede

mejorar». No en vano, a pesar de las actuaciones preventivas que se puedan desplegar, si no

hay un sistema confiable de medida de la accidentalidad no se podrá saber si han

repercutido en mejorar los índices de siniestralidad o, por el contrario, si han empeorado.

Page 94: Administración de seguridad integral.pdf

Análisis sistémico de los riesgos domésticos y de ocio

La aproximación sistémica (de la teoría de sistemas), holística o integral a los riesgos

domésticos, de ocio y de gestión particular ciudadana permite un análisis global de las

diferentes interacciones entre las fuentes de peligro y los activos presentes en los distintos

escenarios, en tiempos y contextos posibles. En el gráfico 7 se sintetiza la metodología en

la matriz de análisis de riesgos empleada.

Gráfico 7. Matriz de análisis de riesgos.

De acuerdo a esta metodología, los activos expuestos a riesgos en el hogar, ocio y

peridomésticos se clasifican en:

Personas que habitan en el hogar, con especial atención a: o Infantes y bebés. o Dependientes físicos, psíquicos y emocionales. o Mayores. o Adultos.

Activos materiales: o Edificación, instalaciones y equipos fijos. o Mobiliario, equipamiento móvil, ajuar y utensilios.

Terceros: o Otras personas físicas y jurídicas y su patrimonio y medio ambiente en relación

con el hogar objeto de análisis: vecinos, prestadores de servicios, visitas, vías públicas, paseantes, circulantes, medio natural, etc.

Por otra parte, las fuentes de peligro o daño que pueden afectar a dichos activos se ordenan

en:

Naturales: o Atmosféricas: vientos, rayos, granizo, olas de calor (canículas), olas de frío, nieve,

hielo. o Hidrológicas: inundaciones, tsunamis, ahogamientos. o Geológicas: terremotos, erupciones volcánicas, subducciones, corrimientos de

tierra.

Page 95: Administración de seguridad integral.pdf

o Biológicas: epidemias, microorganismos nocivos, insectos, reptiles, animales feroces (perros, ganado, reses bravas).

o Cósmicas: meteoritos, radiación y vientos solares. Tecnológicas:

o Físicas: electricidad, radiaciones, vibraciones, impactos mecánicos (caídas, golpes, choques).

o Químicas: térmicas (incendios y explosiones), tóxicas, reactivas, contaminantes. o Psicosociales: estrés, fatigas, depresiones, dolores de espalda, neuralgias.

Intencionadas: o Antisociales:

Delictivas: robos, hurtos, vandalismo, terrorismo, secuestros, fraudes, extorsiones.

Bélicas y efectos laterales en la población civil. o Sociales: huelgas, manifestaciones, protestas. o Políticas: nacionalizaciones, golpes de Estado, expropiaciones, inseguridad

jurídica.

Los escenarios en los que se ha de analizar, en el caso del hogar y ocio, la interacción de las

fuentes de peligro sobre los activos expuestos se clasifican en:

Hogar: o Interior de la vivienda. o Aledaños: jardines, piscinas, canchas deportivas, clubes sociales, salas de juegos,

garajes, etc., vinculados al edificio de residencia. Ocio con actividades:

o Deportivas: Como practicantes. Como espectadores.

o Turismo y viajes familiares. o Culturales. o Musicales. o Festivos: encierros taurinos, procesiones, desfiles.

Peridomésticos. De gestión ciudadana particular. o Comerciales. o Gestiones civiles y administrativas. o Manifestaciones y mítines. o Voluntariado social.

Así como en los centros de trabajo y en los medios de transporte existen unas

responsabilidades y competencias bien definidas, en los escenarios de la vida privada en el

hogar, antes enumerados, debido a la escasa conciencia de los riesgos, se produce una gran

desatención de las administraciones públicas competentes y de los principales actores de

estas situaciones: los propios ciudadanos.

Se ha de tener en cuenta la relación transversal de las personas como miembros de la

familia, la empresa y las relaciones sociales

Page 96: Administración de seguridad integral.pdf

La presencia de las personas en su vida privada en espacios tan diferentes como la

residencia, la calle, el comercio, la oficina pública, la naturaleza abierta y otros muchos en

los que se entrecruzan las competencias administrativas y que se suceden en periodos de

tiempo muy cortos, dificultan notablemente el poder garantizar de forma continua su

seguridad por parte de los organismos públicos. Es por ello, siendo conscientes de la

dificultad que entraña, que se debe buscar un ambicioso plan nacional preventivo de

seguridad en el hogar y en el ocio, en las direcciones que se han demostrado eficazmente en

la seguridad en el tráfico vial y en el trabajo.

Por otro lado, conviene tener presente también que cualquiera de estos escenarios se puede

producir en unos contextos de situaciones extremas y agravantes derivados de condiciones

especiales de carácter social–conmoción civil, huelgas, manifestaciones–, de grandes

concentraciones de personas, del clima atmosférico, del horario solar y otras circunstancias,

que pueden conducir a eventualidades de niveles máximos posibles y previsibles que han

de estar considerados por los responsables públicos y personales de cada caso.

Una vez que se han identificado los actores del riesgo (peligros y activos expuestos) y

escenarios concretos, se procede a su evaluación, si es posible, con métodos estadísticos y

prospectivos; en casos previsiblemente extremos se aconseja aplicar modelos de pérdidas

máximas (pruebas de estrés o esfuerzos límite). En este sentido, es aconsejable disponer de

metodologías con cuestionarios de listas de chequeo específicos para el hogar que faciliten

esta tarea.

A la vista de las valoraciones de riesgos obtenidas y las recomendaciones estándar de

seguridad en el hogar, se procede a elaborar y poner en práctica los planes preventivos, que

lógicamente han de ser de un nivel elemental asequible a los ocupantes de las viviendas.

Los agentes directos de aplicación de los planes preventivos son todos y cada uno de los

ciudadanos que están expuestos a los distintos peligros de su actividad cotidiana y continua,

a los que hay que educar y preparar en esta dirección y en sus diversos papeles: hogar,

tráfico, laboral, viajes, etc. y edades de desarrollo (infantil, adulta, mayor), para conseguir

una cultura de prevención natural e inherente en cualquier faceta de su actividad vital.

Se debe tener en cuenta de manera preferente la relación transversal e indisoluble de los

papeles que puede desarrollar toda persona como miembro de la familia, la empresa, las

amistades y las asociaciones cívicas, y la repercusión que se da entre todas por un hecho

ocurrido en cualquiera de ellas. Es un ejemplo conocido el de la persona trabajadora que en

su vida familiar en el fin de semana se accidenta de gravedad haciendo deporte, cocina o

bricolaje y, además de las consecuencias para su integridad física, familiar y social, causa

baja en su actividad laboral durante varios días. Iguales efectos se pueden dar en el sentido

inverso del accidente laboral con repercusiones en la vida familiar del trabajador. Según un

estudio del National Safety Council de Estados Unidos, el 73% de las bajas laborales en el

sector industrial se generan fuera del centro de trabajo.

Page 97: Administración de seguridad integral.pdf

Planes preventivos multimodales

Al igual que en otros escenarios de riesgo, la prevención en el hogar y en el ocio debe partir

de la aplicación escalonada de los principios de acción siguientes:

1. Eliminación de las fuentes de peligro 2. Sustitución de las fuentes de peligro por otros elementos que disminuyan el riesgo 3. Aplicación de medidas preventivas que reduzcan la ocurrencia de accidentes

o Incorporación de la prevención y protección en el diseño y construcción de edificios, hogares y lugares de ocio.

o Dotación de los equipos móviles de seguridad. o Supervisión y control periódicos de las condiciones de seguridad:

Autoinspecciones. Listas de chequeo. Inspecciones reglamentarias. Inspecciones optativas externas. Reconocimientos médicos.

o Formación científica, técnica y de gestores expertos en esta disciplina. o Educación ciudadana en las etapas infantil, secundaria, formación profesional,

universitaria y adulta. o Sensibilización continuada, información y recomendaciones prácticas. o Elaboración de planes de autoprotección privados. Simulacros de preparación y

control. o Análisis de accidentes e incidentes, para mejorar las técnicas preventivas. o Servicio de vigilancia privada. o Investigación, registro y análisis estadístico de los accidentes, para extraer

enseñanzas que se apliquen en la prevención futura. 4. Aplicación de medidas de protección que controlen los accidentes y minimicen los daños

que puedan ocasionar o Descubrimiento de accidentes y alarma y aviso interno y externo a servicios de

emergencia y socorro. o Asistencia en accidentes.

Neutralización de las fuentes emisoras de agresividad: escapes de gas, agua, productos tóxicos, incendios, derivaciones eléctricas, animales agresivos.

Atención a personas afectadas: Primeros auxilios. Atención psicológica. Desplazamiento a centros hospitalarios.

Minimización de daños materiales. Evitación de la transmisión de efectos dañinos a terceros y al medio

ambiente. Colaboración con los servicios de emergencia.

5. Planes de contingencia y continuidad de las actividades o Asistencia médica hospitalaria. o Salvamento y saneamiento de bienes materiales. o Restitución definitiva o provisional de los servicios básicos afectados.

Page 98: Administración de seguridad integral.pdf

o Comunicación a organismos y entidades relacionadas: ayuntamientos, consejerías, Seguridad Social, juzgados, policías, empresas con relación laboral con los afectados.

o Reclamación de compensaciones económicas a aseguradores y otros con posible responsabilidad.

o Rehabilitación física, mental y laboral de las personas afectadas. o Reparación y reconstrucción de los bienes materiales dañados.

DESCONTANDO AL TOTAL DE MUERTES ACCIDENTALES EN 2008 (10.903) las

producidas EN EL ÁMBITO DOMÉSTICO, RESULTAN 6.869 FALLECIDOS EN EL

HOGAR Y el OCIO

La gran variedad de escenarios y de peligros a los que se pueden ver expuestos los

ciudadanos requiere de una aproximación estructural y escalonada que defina las

actuaciones de todos los agentes involucrados de manera coordinada en los siguientes

niveles:

Administraciones públicas: o Estado: ministerios y organismos competentes. o Comunidades autónomas: consejerías y organismos competentes. o Diputaciones provinciales y comarcales: servicios y consorcios competentes. o Ayuntamientos: servicios competentes.

Todos ellos con enfoques innovadores y de dinamización. Entidades y agrupaciones civiles relacionadas con el tema.

o Asociaciones profesionales y cívicas: consumidores, técnicos seguridad. o Fundaciones. o Organizaciones No Gubernamentales. o Empresas públicas y privadas: compañías eléctricas, gas, agua, seguros.

Protagonistas principales: los ciudadanos, expuestos a tan amplia gama de riesgos y, a menudo, carentes de una seguridad específica y supervisada de forma continua como se da en los ámbitos del tráfico vial y las actividades empresariales. Por tanto, la seguridad ciudadana se ha de orientar a la autoprotección personal asimilada como una cultura y conciencia preventiva proactiva que se mantiene y aplica de manera espontánea y natural en cualquier situación de la vida diaria.

Para ello, se debe facilitar a los ciudadanos el apoyo de unos recursos educativos,

informativos y procedimentales que garanticen la condición de autonomía protectora que ha

de poseer cada persona.

Conclusiones

El destilado principal de lo recogido en este estudio se concentra en la toma de conciencia

de la muy elevada importancia de los accidentes del hogar y el ocio en España, y, por

lógica traslación, en cualquier país del mundo. Las cifras de víctimas mortales en

accidentes domésticos y de ocio en España, como máxima y evidente expresión de la

gravedad del problema, son seis veces superiores a las producidas en los centros de trabajo

y más del doble que las registradas en el tráfico vial.

Page 99: Administración de seguridad integral.pdf

Se hace necesaria, por tanto, una respuesta eficaz canalizada por un Plan Nacional de

Prevención de los Accidente en el Hogar y el Ocio, en el que participen de forma activa

todos los organismos públicos involucrados en los niveles estatal, autonómico y local, así

como las instituciones y agentes sociales representativos de estos espacios. Los exitosos

ejemplos de los planes de seguridad vial y laboral desplegados en nuestro país en los

últimos años aportan una experiencia muy positiva de los modelos a seguir.

En la aplicación práctica de los planes preventivos dirigidos a las actividades domésticas y

de ocio es muy importante complementarlos con un enfoque transversal recíproco respecto

de los espacios laborales, educativos, del tráfico vial, deportivos, Internet, redes sociales,

etc. en los que se desarrolla de manera indisoluble la vida de las personas.

Se hace muy necesaria la creación de organismos especializados de fomento y apoyo

técnico a los promotores y expertos que desarrollan acciones preventivas en el hogar y el

ocio. Entre otras, se debería atender a la formación especializada de gestores y técnicos, la

dotación de herramientas y materiales didácticos, la difusión de campañas en los medios de

comunicación, la investigación de accidentes, su registro y análisis estadístico, buscando la

correlación entre los índices de la prevención desplegada y la accidentalidad resultante.

Para conocer la exacta dimensión de las repercusiones de los accidentes del hogar es

necesario disponer de unos sistemas de estadísticas fiables y completas, ya que en la

actualidad las bases de datos al respecto no proporcionan la calidad deseada. Sin embargo,

los sistemas estadísticos disponibles en España comportan una base de partida bastante

sólida, que, con algunas mejoras en los contenidos de los certificados y boletines

estadísticos de defunción y, sobre todo, en la más precisa cumplimentación por los

facultativos y procesamiento técnico, puede proporcionar la información esencial para el

seguimiento periódico de la accidentalidad y el ajuste oportuno de los planes preventivos.

ANTE LA ELEVADA SINIESTRALIDAD, SE HACE NECESARIA UNA RESPUESTA

EFICAZ CANALIZADA POR UN PLAN NACIONAL DE PREVENCIÓN DE LOS

ACCIDENTES EN EL HOGAR Y EL OCIO

Los incalculables costes personales, sociales y económicos de los accidentes del hogar y el

ocio, junto con los dramas humanos que suponen muchos de ellos, demandan una

movilización activa de la sociedad que consiga reducir de manera sustancial la magnitud de

estas consecuencias tan preocupantes.

REFERENCIAS DE SITIOS WEB

Todas precedidas de www

cdc.gov.us

cenapra.salud.gob.mx

census.gov.us

Page 100: Administración de seguridad integral.pdf

dane.gov.co

deis.gov.ar

destatis.de

dgt.es

dh.gov.uk

eurostat.ec.europa.eu

ibge.br

ilo.org

ine.cl

ine.es

inegi.org.mx

inei.gob.pe

inec.gov.ec

insee.finsht.es

isciii.es

istat.it

mir.es

mtin.es

one.cu

osha.eu.int

paho.org

statcan.gc.ca

unodoc.org

Page 101: Administración de seguridad integral.pdf

who.int

Accidentes industriales que originan nubes

multicomponentesSEGURIDAD

Parte II: Propuestas metodológicas para determinar la dispersión en aire y las zonas de

objeto de planificación

El presente artículo es continuación del publicado en el número 119 de la revista, relativo a

los efectos agudos sobre el ser humano que pueden causar las emisiones al aire de mezclas

de sustancias tóxicas, como consecuencia de accidentes industriales, así como a la

evaluación del nivel de efectos de los componentes de la mezcla utilizando la metodología

del Índice de Peligro. En este trabajo se proponen metodologías para determinar, por un

lado, los parámetros que definen las dosis y los valores límite de los componentes de la

mezcla, y por otro, los criterios para estimar las zonas objeto de planificación en caso de

producirse emisiones de multicomponentes. El empleo del programa ALOHA y la

modelización de la mezcla como una sustancia pura representativa permiten obtener la

«curva característica» de cualquier componente de una mezcla.

Por E. GONZÁLEZ FERRADÁS*.Doctor en Química. Profesor de la Universidad de

Murcia. Dpto. de Ingeniería Química. Facultad de Química. Campus de Espinardo.

Universidad de Murcia ([email protected]),

E. GONZÁLEZ DUPERÓN. Doctora en Química. Profesora asociada de la Universidad

de Murcia. Colaboradora de investigación,

J. RUÍZ GIMENO. Químico. Profesor de la Universidad de Murcia,

B. GIMÉNEZ FRANCÉS. Ingeniero químico. Colaborador de investigación.

Este artículo es el segundo de una serie sobre las características e impactos de las emisiones

de multicomponentes tóxicos en aire que pueden producirse en accidentes industriales,

sobre todo en instalaciones químicas o conexas, bien por fuga directa de mezclas o como

consecuencia de incendios de sustancias o productos complejos, plásticos, fitosanitarios,

etc.

En el primer artículo, publicado en el número 119 de esta revista [1], se abordan los

principales efectos toxicológicos de las mezclas por vía respiratoria, especialmente las que

dan lugar a efectos agudos en los seres humanos, proponiendo la metodología del Índice de

Peligro (Hazard Index o HI) para evaluar cuantitativamente la incidencia tóxica de cada

grupo de componentes que provocarían el mismo efecto. Este índice pondera la

contribución tóxica de cada componente del grupo mediante el Cociente de Peligro (Hazard

Quotient o HQi), definido mediante la expresión:

Page 102: Administración de seguridad integral.pdf

donde Di es la dosis del componente i a lo largo del recorrido de la nube y VLi su valor

límite. Una vez determinados los Cocientes de Peligro de todos los componentes de la

mezcla en la nube, se obtiene el Índice de Peligro de cada grupo de componentes de

isoefectos, mediante:

donde j, k…x son los componentes que constituyen cada grupo de isoefecto de la nube de n

componentes, de manera que se verifica:

Si cada componente de la mezcla presenta un solo efecto tóxico, la suma i+j+…+x es igual

al número de componentes tóxicos de la nube (n). Y si, por el contrario, una o más

sustancias pueden ejercer más de un efecto, la suma i+j+…+x es mayor que n.

Cuando a una determinada distancia del origen del accidente (dx), en la dirección del

movimiento de la nube, se verifica que el índice de riesgo de uno de los grupos de isoefecto

alcanza el valor unidad (por ejemplo, HIx = 1), se establece que a esa distancia se produce

el nivel de efecto definido por los valores límite de los componentes del grupo x de la

mezcla (VLx).

Page 103: Administración de seguridad integral.pdf

La determinación de los parámetros anteriores se lleva a cabo en el presente artículo, donde

también se propone un método simplificado para estimar las Zonas Objeto de Planificación

–ZOP– (intervención y alerta) para estas mezclas siguiendo los criterios establecidos en el

Real Decreto 1196/2003, de 19 de septiembre [2], para las sustancias puras.

Las emisiones de multicomponentes tóxicos: planteamientos generales

Conviene ante todo describir las causas accidentales iniciales que darían origen a fugas de

mezclas, las características más relevantes de las emisiones de multicomponentes y los

mecanismos y comportamientos generales de la dispersión en el aire.

Las causas iniciales o primarias pueden incluirse en dos grupos: por un lado, la rotura o

rebose de contenedores que almacenen, transporten o traten mezclas líquidas o gaseosas, y

por otro, las formadas en los incendios de materiales (sustancias o productos) complejos, ya

sean sólidos, líquidos o gases.

En el primer caso, pueden llegar a ser especialmente graves los accidentes que se produzcan como consecuencia de fugas en recipientes de almacenamiento y tuberías de alta capacidad (dadas las elevadas cantidades que pueden verse involucradas); en los reactores químicos, donde participarían todos los componentes (iniciales, finales, intermedios e incluso el propio catalizador); en los hornos, considerados como elementos críticos, dada la posibilidad de provocar grandes emisiones de vapores a elevadas temperaturas e incendios, y en los equipos donde se producen operaciones de separación (columnas de destilación, absorción o extracción, recipientes de mezclado, sedimentación, cristalización…).

En cuanto a las emisiones de los incendios, pueden proceder de la combustión de materiales que en su estado normal no son peligrosos (como es el caso de muchos plásticos o polímeros estables) o que pueden serlo (fitosanitarios, agroquímicos, monómeros u otras sustancias o preparados con heteroátomos, etc.). Este caso presenta dos diferencias respecto al anterior: en primer lugar, la formación de sustancias tóxicas distintas a las precursoras, y en segundo lugar, el mecanismo dispersivo, que en este caso está condicionado por una intensa emisión convectiva ocasionada por la elevada temperatura derivada de la exotermicidad de la reacción de combustión.

En cuanto a las emisiones citadas en primer lugar (sin combustión), la duración de la fuga

depende principalmente del estado físico, composición, cantidad y condiciones de

almacenamiento (presión y temperatura) en el momento del accidente, geometría y

volumen del equipo, posición y tamaño del orificio o zona de fuga y efectividad de la

intervención. Así, como primera aproximación, se considera que la fuga es «instantánea »

cuando la rotura del contenedor es total (catastrófica) o el tamaño del orificio formado por

la rotura o zona de salida es considerable con relación al volumen total del equipo o sección

aislable. En otras condiciones la fuga se produce durante un periodo más o menos dilatado,

considerándose continua y con caudal generalmente decreciente.

Las emisiones de multicomponentes tóxicos al aire pueden producirse por fugas directas de

equipos que los contengan o como consecuencia de incendios de productos complejos

Page 104: Administración de seguridad integral.pdf

Una vez producida la fuga, la fluidodinámica y composición de la emisión dependen en

gran medida del estado físico del producto, de manera que:

Los gases se emiten como tales sin variación de su composición. Los vertidos de líquidos «no hirvientes », mantenidos a temperatura inferior a la de

equilibrio a presión atmosférica, formarán un charco, produciéndose la emisión por evaporación. La composición del vapor difiere en general de la del líquido, de manera que, inicialmente, la fase vaporizada estará enriquecida en los componentes más ligeros. Una evaluación rigurosa de la emisión exige conocer las relaciones de equilibrio líquido-vapor de los componentes de la mezcla, lo que origina un flujo complejo de composición variable, por lo que conviene adoptar planteamientos y simplificaciones que dependen de cada caso (composición y presión de vapor de los componentes, extensión del derrame, condiciones ambientales, eficacia de la intervención…).

La fuga de gases licuados mantenidos a presiones más o menos elevadas plantea situaciones diversas. Así, si la rotura es catastrófica, el producto sufriría una evaporación brusca (flash), produciendo, en teoría, vapor y líquido siguiendo los principios de la termodinámica y las leyes de los equilibrios entre fases. Como antes, publila fase vapor (más concentrada en los componentes ligeros) formaría una nube cuya composición es diferente a la de la mezcla original y el líquido remanente (que concentra los componentes más pesados) se extendería sobre el suelo y se evaporaría, incorporándose a la emisión inicial. En la mayoría de los casos, el flash inicial suele provocar un aerosol (gas y gotículas), de manera que la masa inicial emitida al aire es superior a la obtenida por cálculo teórico, donde se supone la separación nítida de las fases líquida y vapor.

Por otro lado, si el orificio de fuga es pequeño, la emisión o vertido se considera continuo,

con caudal decreciente, y el estado físico de la fuga estará condicionado por la posición del

orificio en el recipiente, de manera que si está en la zona superior ocupada por el vapor, la

emisión es gaseosa (salvo que se produzca el denominado «efecto champán», consistente

en la formación de espuma, que sale con el gas, ocasionada por la evaporación rápida del

líquido). Si el recipiente está aislado térmicamente, la evaporación del gas en el interior

provoca el enfriamiento del líquido que permanece en el recipiente, hasta que éste alcance

la temperatura de equilibrio, lo que ocurre cuando la presión interior (que es la presión de

vapor de la mezcla) se iguala a la atmosférica; a partir de ese momento se puede considerar

que, prácticamente, cesa la emisión. Si el recipiente no está térmicamente aislado, la

evolución de la fuga depende de las características del producto, superficie de transferencia

de calor y de las condiciones térmicas exteriores. Si, por el contrario, el orificio de fuga

estuviese en la zona ocupada por la fase líquida, se produciría el vertido, que, al salir,

sufriría un continuo flash, cuyo comportamiento evaporativo sería similar al comentado

para la rotura catastrófica. La fuga bifásica continuaría hasta que el nivel del líquido en el

interior del recipiente disminuya hasta alcanzar el orificio de fuga. A partir de entonces el

comportamiento de la emisión es igual al anteriormente citado.

El cálculo de la fuga y emisión de los diferentes casos anteriores se tratan en la bibliografía

especializada, destacando entre otras las publicaciones de Lees [3], Casal [4], Santamaría et

al. [5], TNO [6] y AIChE [7].

Page 105: Administración de seguridad integral.pdf

Tras la fuga, la emisión al aire formará una nube multicomponente, instantánea o continua,

que en la mayoría de las ocasiones tiene mayor densidad que el aire (nube pesada), de tal

manera que, en los primeros momentos, la nube se abatirá y extenderá sobre el suelo y su

evolución dependerá de las características orográficas y meteorológicas, aspectos

suficientemente tratados en artículos o monografías, como las publicomcadas por Hanna, et

al. [8] o la Dirección General de Protección Civil, Madrid [9]. La progresiva dispersión en

aire y las características toxicológicas de los componentes de la nube condicionarán los

alcances de sus efectos.

Los parámetros meteorológicos fundamentales que influyen en la dispersión de estas

emisiones son los que conforman las denominadas matrices de estabilidad, esto es: las

clases de estabilidad y las velocidades y direcciones del aire. Generalmente, en los análisis

de riesgos y con relación a la planificación ante posibles escenarios accidentales, se suelen

utilizar dos combinaciones estabilidad-velocidad de aire: la más frecuente de la zona

considerada y la más desfavorable; esta última dará origen a los mayores alcances de los

efectos. Para las emisiones con temperaturas iguales o menores a la ambiental, la

combinación más desfavorable suele ser la que corresponde a la clase de estabilidad F de

Pasquill y velocidades de aire de 1 a 2 m/s.

En los incendios de productos químicos pueden formarse numerosos compuestos tóxicos

cuyas tasas de emisión son difíciles de cuantificar debido a los numerosos parámetros que

influyen en los procesos de combustión

La formación de multicomponentes tóxicos en incendios industriales es un tema

complejo que deriva de los numerosos factores, circunstancias y parámetros implicados,

destacando:

El proceso de combustión en los incendios no es uniforme, estando condicionado por la ubicación del material (en recintos interiores o en exteriores), tipo de almacenamiento, embalajes, geometría y volumen de los apilamientos, que condicionan las disponibilidades y entradas de aire al material que arde.

El proceso de combustión en los incendios no es uniforme, estando condicionado por la ubicación del material (en recintos interiores o en exteriores), tipo de almacenamiento, embalajes, geometría y volumen de los apilamientos, que condicionan las disponibilidades y entradas de aire al material que arde.

La composición del material que arde condiciona la formación y emisión de numerosas sustancias en los incendios, algunas con elevados niveles de toxicidad. En las últimas décadas se han publicado numerosos trabajos sobre los componentes tóxicos formados en los incendios, destacando algunas monografías tales como las publicadas por Purser [10], Babrauskas [11], Anderson [12] y Stec et al. [13]. En otros trabajos se ha prestado especial atención a la combustión de polímeros y plásticos, sobre todo a raíz de haberse detectado la presencia de parabenzo-dioxinas y parabenzo-furanos en los incendios de los mencionados materiales que contienen cloro; así, Christmann et al. [14], Theisen et al. [15], Mansson et al. [16], Vikelsøe et al. [17], Katami et al. [18], Zhu et al. [19] y Valavanidis et al. [20], entre otros, han publicado estudios sobre incendios de plásticos de PVC y otras sustancias químicas conteniendo diversos heteroátomos, como, por ejemplo, metales pesados. También hay que destacar los trabajos publicados por Risø National

Page 106: Administración de seguridad integral.pdf

Laboratory (Dinamarca)[21,22,23] sobre la combustión y pirólisis de fitosanitarios, que han permitido la detección de componentes muy tóxicos que dependen de las composiciones de los materiales y de la disponibilidad de oxígeno en la masa que arde. Así, en la tabla 1 se indican los componentes más destacables procedentes de la combustión o pirólisis de los citados preparados, que también pueden extenderse a otros productos químicos que contengan los heteroátomos que se indican.

Para llevar a cabo los análisis de riesgos sobre estos accidentes es necesario conocer la

composición cuantitativa de los productos formados, pero en muchas ocasiones no se

dispone de esta información dada la diversidad de materiales y mezclas que pueden verse

involucradas en estos accidentes y la variabilidad de composiciones obtenidas, incluso en

experimentos controlados, por lo que se suelen utilizar aproximaciones conservadoras. Así,

por ejemplo, TNO utiliza en su programa informático EFFECTS Plus versión 5.5 [24] los

siguientes criterios sobre los productos formados a partir de los heteroátomos implicados en

el incendio:

La totalidad del azufre pasa a dióxido de azufre. Todos los halógenos –flúor, cloro y/o bromo– pasan a sus correspondientes hidrácidos –

HF, HCl y HBr–. El nitrógeno pasa parcialmente a dióxido de nitrógeno. Se considera que el 35% del

contenido inicial en nitrógeno en el producto original pasa a dióxido de nitrógeno.

Tabla 1. Principales componentes tóxicos detectados en la combustión de fitosanitarios y otros

compuestos químicos.

Heteroátomos contenidos en

materiales. Derivados del

carbono y nitrógeno del aire

Componentes tóxicos en los humos

Azufre Dióxido de azufre, sulfuro de carbonilo.

Cloro Cloruro de hidrógeno, fosgeno. Dioxinas y furanos.

Flúor y bromo Fluoruro y bromuro de hidrógeno.

Nitrógeno Óxidos de nitrógeno y cianuro de hidrógeno.

Metales Óxidos y sales estables de los metales.

Derivados del carbono Monóxido de carbono y gran variedad de sustancias desde

muy ligeras (por ejemplo, formaldehído o acroleína) a muy

pesadas (hidrocarburos policíclicos) y humo (partículas

Page 107: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 1. Principales componentes tóxicos detectados en la combustión de fitosanitarios y otros

compuestos químicos.

Heteroátomos contenidos en

materiales. Derivados del

carbono y nitrógeno del aire

Componentes tóxicos en los humos

carbonosas).

Nitrógeno del aire Óxidos de nitrógeno (inicialmente NO y conforme se enfría

NO2).

En cuanto a la emisión, el mencionado programa utiliza una tasa referida al producto

original que arde de 25 g/s m2. La superficie incluida en la tasa de emisión es la expuesta al

fuego; así, por ejemplo, si el producto que arde es un sólido que está apilado sobre el suelo

formando un cubo de un metro de arista, la superficie que arde es de 5 m2, que incluye

cinco caras, dado que la sexta, apoyada sobre el suelo, no está expuesta directamente al

fuego; para este caso se obtendría un consumo de producto inicial de 125 g/s.

Los criterios y tasa de consumo anteriores pueden servir para obtener una aproximación a

los caudales másicos de emisión de los posibles productos formados.

La emisión y dispersión de los componentes generados en los incendios tienen una

fluidodinámica diferente a las fugas directas sin arder. En los incendios se forma una

emisión convectiva provocada por la elevada temperatura de la combustión y, como

consecuencia de ello, la nube de humo y gases, de baja densidad, se eleva hasta alturas que

puedan ser considerables (centenares de metros), mezclándose en su ascenso con el aire

circundante hasta que su temperatura disminuye y, consecuentemente, su densidad

aumenta, igualando a la del aire. La altura máxima alcanzada por los humos depende de las

características de la emisión (principalmente del caudal volumétrico y dela temperatura) y

de la meteorología reinante, principalmente de la clase de estabilidad y velocidad del aire.

Una vez alcanzada la altura máxima, la dispersión subsiguiente depende fundamentalmente

de la clase de estabilidad, siendo la más desfavorable la más inestable (A de Pasquill), dado

que las turbulencias verticales del aire, típicas de esta situación atmosférica, rompen el

penacho y lo pueden abatir sobre el suelo (fenómeno conocido como «fumigación»),

provocando la afectación de los receptores vulnerables que se encuentran en o próximos al

suelo, principalmente los seres vivos y otros elementos ambientales. Por el contrario, las

clases atmosféricas estables alteran poco el penacho una vez que este alcanza su altura

máxima, de manera que se forma un flujo cuasi cilíndrico que es transportado por el aire de

manera inalterada a grandes distancias (kilómetros). Cuando el penacho cae finalmente

sobre el suelo el impacto suele ser irrelevante debido a su baja concentración.

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La dispersión de multicomponentes en aire

El primer objetivo de este trabajo es proponer un procedimiento simplificado que permita

determinar las concentraciones en aire de cada uno de los componentes de la mezcla y sus

tiempos de paso en cada punto del recorrido de la nube. Para ello, se establecen las

hipótesis y criterios siguientes:

1. Se supone conocida la emisión cualitativa (componentes) y cuantitativa (masa, caudal y duración de la emisión), aspectos comentados en el apartado anterior.

2. Para facilitar el cálculo, se considera que la composición de cualquier emisión continua permanece invariable durante el episodio accidental. Si no fuera así, se debe operar con composiciones medias constantes.

3. Durante la dispersión, la composición de la nube es homogénea, esto es, no se produce la transferencia a otros medios (deposición húmeda o seca) ni la transformación o separación de los componentes, bien como consecuencia de la reactividad, estado físico (gaseoso o en forma particulada) o por sus diferentes masas moleculares. Esta última hipótesis es realista dado que en aire ambiente los mecanismos dispersivos turbulentos predominan sobre los originados por difusión molecular (Ley de Fick); en otros términos, la mezcla dentro de la propia nube, provocada por la dinámica del aire, es más eficaz que la originada por movimientos de las especies debido a gradientes moleculares.

4. Dado que no se han publicado procedimientos de cálculo que traten la dispersión de estas mezclas en aire y, como consecuencia de ello, no se dispone de modelos informatizados que faciliten el tratamiento de dicho fenómeno, se propone la utilización de programas informáticos que resuelvan la dispersión de sustancias puras en aire. En este sentido, se ha seleccionado el programa ALOHA (versión 5.4.1.2)[25] dadas las ventajas siguientes.

o Ha sido desarrollado por la Environmental Protection Agency (EPA) de Estados Unidos, siendo de reconocido prestigio entre los expertos en este ámbito.

o Permite introducir nuevas sustancias, lo que resulta de gran interés para la metodología aquí propuesta.

o Dispone de un módulo que determina fugas a través de los equipos más habituales (depósitos y tuberías).

o La presentación de los resultados es la más idónea para la propuesta de cálculo de este trabajo.

5. Para poder operar con ALOHA [25] es obligado modelizar la mezcla como si se tratara de una sustancia pura. Utilizando el programa citado se han llevado a cabo ejemplos de dispersión de varias especies y se ha evaluado la influencia de las propiedades de las mismas –solicitadas en la base de datos del programa– sobre los perfiles de concentraciones a lo largo del recorrido de la nube, encontrando que la densidad de la sustancia en estado gaseoso es la única variable significativa. Se ha adoptado el criterio de modelizar una Sustancia Representativa de la Mezcla (SRM) con una densidad de la fase gas ponderada con respecto a las densidades de los componentes. Las demás propiedades pueden ser también las ponderadas o las del componente mayoritario de la mezcla.

6. Teniendo en cuenta las hipótesis de emisión continua de composición constante (punto 2) y de homogeneidad de la nube (punto 3), se deduce:

o 6.1 Que las fracciones másicas de cualquier componente i en la nube (Xi) permanecen constantes a lo largo de su recorrido, lo que implica:

Page 109: Administración de seguridad integral.pdf

donde los subíndices 0 y d corresponden al origen de la emisión y a

cualquier distancia de dicho origen, respectivamente.

o 6.2 Que las concentraciones de cualquier componente i de la mezcla y de la SRM en cualquier punto del recorrido (d) y en un instante determinado (t) están relacionadas mediante:

Particularmente, para los valores máximos (max) de las concentraciones de i

y de SRM en cualquier punto del recorrido (d), se verifica:

Para clarificar lo anterior, en la figura 1 se representan perfiles de

concentraciones de la SRM y de uno de los componentes (i) para emisiones

instantáneas (figura 1.a) y continuas (figura 1.b) en un punto d del recorrido

de la nube.

Figura 1. Perfiles de concentraciones de la SRM y de un componente i de la mezcla en un

punto del recorrido de la nube, alejado una distancia d del origen del accidente. La figura

1.a es la representación de perfiles para una emisión de corta duración («instantánea») y la

figura 1.b corresponde a los de una emisión continua.

La dispersión en aire de emisiones de varios componentes se puede modelizar como si se

tratara de una sustancia pura representativa de la mezcla

Page 110: Administración de seguridad integral.pdf

Con relación a las figuras 1.a y 1.b, los parámetros ti, tf y Δt (que es la diferencia tf – ti) son

los tiempos de llegada, salida y de paso de la nube en cada punto d del recorrido,

respectivamente.

Para determinar el impacto de nubes tóxicas en aire es necesario conocer en cada punto de

su recorrido la concentración máxima y su tiempo de paso

ALOHA [25] proporciona, en cada punto del recorrido de la nube, información gráfica de

los perfiles concentracióntiempo para la SRM, como se muestra en la figura 1, a partir de la

cual se obtiene para cada componente lo que hemos denominado «curva característica »,

que está definida por los parámetros siguientes:

d: distancia al origen del accidente. Ci,max,d: concentración máxima del componente i en d, obtenida mediante la ecuación 8. Δt: tiempo de paso del componente i por d, que coincide con el de la SRM.

La «curva característica» de cualquier componente i se representa en la figura 2, utilizando

los parámetros que la definen.

Figura 2. «Curva característica» del componente i.

Para representar las «curvas características » de SRM o i se han tomado como

concentraciones de referencia las máximas en cada punto del recorrido, que es el mismo

criterio utilizado para evaluar las ZOP de nubes de sustancias tóxicas puras que se detalla

en la guía técnica «Zonas de planificación para accidentes graves de tipo tóxico» [9]. La

selección de la citada concentración máxima en lugar de cualquier otra representativa (por

Page 111: Administración de seguridad integral.pdf

ejemplo, su valor medio ponderado) supone un criterio conservador, que ofrece mayores

garantías de protección a la hora de establecer las ZOP.

Las zonas objeto de planificación para nubes multicomponentes

Una vez formados los grupos de isoefectos, siguiendo los criterios indicados en la parte I de

este trabajo [1] y las «curvas características» de todos los componentes de la mezcla, se

determinan los Índices de Peligro de cada grupo de componentes que producen el mismo

efecto, a diversas distancias del origen del accidente y en la dirección del viento (HIj,d),

mediante:

donde j hace referencia al número de componentes incluidos en uno de los grupos que

provocan un determinado isoefecto y VLi,texp=Δtd es la concentración límite del componente

i que provoca el nivel de gravedad que interesa evaluar para dicho isoefecto, tomando como

tiempo de exposición (texp) el mismo que el tiempo de paso de la nube por el punto d (Δtd).

La distancia dj*, a la cual se verifica que HIj,dj

* = 1, es donde se produciría el nivel de

gravedad del efecto considerado definido por VLi,texp=Δtd. A distancias mayores/ menores a

dj* la gravedad de los efectos es menor/mayor que la producida en dj

*.

El procedimiento se repite para los otros grupos de isoefectos (k,l,…), obteniéndose para

cada nivel de gravedad las distancias dk*, dl

*, … La mayor de estas distancias es la que

determina el alcance de la ZOP (intervención o alerta) de la nube de n componentes.

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Figura 3. «Curvas características» del grupo de componentes j y de su valor límite. La

distancia dj* determina dónde se produce el nivel de gravedad que caracteriza a la zona de

planificación evaluada (HIj,d*j =1).

El procedimiento anterior resulta laborioso por el número de iteraciones que debe realizarse

hasta encontrar la distancia donde el Índice de Peligro de cada grupo adquiere el valor

unidad, pero se puede simplificar operando como sigue:

1. Para cada grupo de componentes j que provocan el nivel de gravedad del isoefecto considerado, se define una concentración límite (VLj, texp= Δtd) aplicable al conjunto de dichos elementos, en la forma:

de donde:

Page 113: Administración de seguridad integral.pdf

La ecuación 11 –que hemos denominado «curva característica» del valor límite–

permite operar con un único valor límite para el grupo de j componentes del

isoefecto evaluado.

2. La «curva característica» de los j componentes se obtiene teniendo en cuenta que sus concentraciones máximas se calculan mediante la expresión:

y los tiempos de paso son los mismos que los de la SRM a las mismas distancias al

origen del accidente.

Si en la misma gráfica se representan las «curvas características» del valor límite –ecuación

11– y la del grupo de isoefecto evaluado –ecuación 12–, como en la figura 3, el punto de

corte de ambas curvas define los «datos característicos» (dj*, Cj,max,dj* y texp,dj*) para el grupo

j. Esto es: la distancia dj* es el alcance del nivel de gravedad evaluado para el grupo j. Se

repite el procedimiento para los demás grupos de isoefectos (k, l,…) determinando las

respectivas distancias (dk*, dl

*,…), tomándose la mayor de ellas como límite de la ZOP

(intervención o alerta, según proceda).

La determinación de las Zonas Objeto de Planificación para nubes multicomponentes se

lleva a cabo igual que si se tratara de una sustancia pura, pero se selecciona la máxima

distancia de daño de todos los grupos de isoefectos formados con los componentes de la

nube

En la tercera parte de este trabajo, que se publicará próximamente en esta revista, se

desarrollará un ejemplo práctico que ayude a la mejor comprensión de la metodología

propuesta.

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Agradecimientos

Este trabajo ha sido financiado gracias a una ayuda a la investigación concedida por

FUNDACIÓN MAPFRE.

Page 116: Administración de seguridad integral.pdf

PARA SABER MAS

1. González Ferradás, E.; González Duperón, E.; Mínguez Cano, M.V.; Ruiz Gimeno, J.; García Lorente, P. Accidentes industriales que originan nubes multicomponentes. Parte I: Toxicología de las mezclas. Seguridad y Medio Ambiente. Fundación MAPFRE, 2010, (119) 22-33.

2. Real Decreto 1196/2003, de 19 de septiembre, por el que se aprueba la Directriz Básica de Protección Civil para el Control y Planificación ante el Riesgo de Accidentes Graves en los que intervengan sustancias peligrosas (B.O.E. nº 242, de 9 de octubre de 2003).

3. Lees, F. Loss prevention in the process industries. Butterworth Heinemann, 2001. 4. Casal, J. Evaluation of the effects and consequences of major accidents in industrial plants.

Elsevier, 2008. 5. Santamaría, J.M.; Braña, P.A. Análisis y reducción de riesgos en la industria química.

Fundación MAPFRE, 1994. 6. TNO. Committee for the Prevention of Disasters. Methods for The Calculation of Phisical

Effects. «Yellow Book», 2005. 7. Guidelines for consequence analysis of chemical releases. Center for Chemical Process

Safety (AIChE), 1999. 8. Hanna, S.R.; Drivas P.J. Guidelines for use of vapor cloud dispersion models. Center for

Chemical Process Safety (AIChE), 1989. 9. Guía técnica: Zonas de planificación para accidentes graves de tipo tóxico (en el ámbito del

Real Decreto 1254/99 [Seveso II]). Dirección General de Protección Civil. Ministerio del Interior. Madrid. 2003.

10. Purser, D.A. Toxic hazard from fires: A simple assessment method. Toxicology Letters, 1992, (64-65) 247-255.

11. Babrauskas, V. Toxic hazard from fires: A simple assessment method. Fire Safety Journal, 1993, (20) 1-14.

12. Anderson, P. Evaluation and mitigation of industrial fire hazards. Lund University, 1997. 13. Stec, A. A.; Hull, T.R. Fire toxicity. University of Central Lancashire, 2010. 14. Christmann, W.; Kasiske, D.; Klöppel, K.D; Pastscht, H.; Rotard, W. Combustion of polyvinyl

chloride –An important source for the formation of PCDD/PCDF-. Chemosphere 19, 1989, (1-6) 387-392.

15. Theisen, J.; Funcke, W.; Balfanz, E.; König, J. Determination of PCDFs and PCDDs in fire accidents and laboratory combustion test involving PVC-containing materials. Chemosphere, 1989, (1-6) 423-428.

16. Mansson, M.; Dahlberg, M.; Blomqvist, P.; Rydeman, A. Combustion of chemical substances: Fire characteristics and smoke gas components in large-scale experiments. SP Swedish National Testing and Research Institute, 1995.

17. Vikelsøe, J.; Johansen, E. Estimation of dioxin emission from fires in chemicals. Chemosphere, 2000, (40) 165-175

18. Katami, T.; Yasuhara, A.; Kazuokuda, T.; Shibamoto, T. Formation of PCDDs, PCDFs and coplanar PCBs from polyvinyl chloride during combustion in an incinerator. Environ. Sci. Technol, 2002, (36) 1320-1324.

19. Zhu, H.M.; Jiang, X.G.; Yan, J.H.; Chi, Y.; Cen, K.F. TG-FTIR analysis of PVC thermal degradation and HCl removal. J. Anal. Appl. Pyrolysis, 2008, (82) 1-9.

20. Valavanidis, A.; Iliopoulos, N.; Gotsis, G.; Fiotakis, K. Persistent free radicals, heavy metals and PAHs generated in particulate Soot emissions and residue ash from controlled

Page 117: Administración de seguridad integral.pdf

combustion of common types of plastics. Journal of Hazardous Materials, 2008, (156) 277-284.

21. Smith-Hansen, L. Toxic hazards from chemical warehouse fires. Risø National Laboratory, 1994.

22. Jørgensen, K.H.; Smith-Hansen, L. Flash pyrolysis and DIN 53436 experiments. Risø National Laboratory, 1995.

23. Markert, F. Results for CNBA and TMTM combustion in a DIN furnace. Risø National Laboratory, 1996.

24. EFFECTSPLUS. Version 5.5. TNO Safety Software. 2003. 25. ALOHA. Version 5.4.1.2. Environmental Protection Agency (EPA) and Emergency Response

Division (NOAA). 2009.

Envases alimentarios sosteniblesMEDIO AMBIENTE

Los envases plásticos utilizados para el envasado de alimentos están constituidos por

materiales poliméricos de origen no renovable (derivados del petróleo) y representan una

importante fuente de generación de residuos y contaminación para el medio ambiente. En el

presente estudio se han desarrollado películas plásticas obtenidas a partir de biopolímeros

con el fin de obtener envases alimentarios activos y medioambientalmente sostenibles

capaces de proteger al alimento de ataques microbiológicos o degradación oxidativa. Estas

películas se prepararon a partir de proteínas lácteas (caseinatos) con glicerol como

plastificante y un agente antimicrobiano proveniente del aceite esencial del orégano

(carvacrol) como componente activo. Las películas obtenidas fueron posteriormente

caracterizadas para estudiar sus principales propiedades mecánicas, térmicas y funcionales.

Asimismo, se estudió su capacidad antimicrobiana y se determinó su desintegración en

compost para evaluar la sostenibilidad de los envases alimentarios obtenidos.

Por ARRIETA, M.P. M.Sc. en Tecnología de los Alimentos por la Universidad Católica

de Córdoba, Argentina. Estudiante Ph.D. Dpto. Química Analítica, Nutrición y

Bromatología. Universidad de Alicante, España. [email protected],

PELTZER, M.A. Doctora en Química por la Universidad de Alicante, España.

Investigadora contratada. Dpto. Química Analítica, Nutrición y Bromatología. Universidad

de Alicante, España,

GARRIGÓS SELVA, M.C. Doctora en Química por la Universidad de Alicante, España.

Profesora ayudante doctora. Dpto. Química Analítica, Nutrición y Bromatología.

Universidad de Alicante, España,

JIMÉNEZ MIGALLÓN, A. Doctor en Ciencias Químicas por la Universidad de Alicante,

España. Profesor titular de Universidad. Dpto. Química Analítica, Nutrición y

Bromatología. Universidad de Alicante, España.

Los envases plásticos utilizados en la actualidad para el envasado de alimentos están

constituidos por materiales poliméricos derivados del petróleo (tabla 1). Su uso se ha

extendido en esta y otras muchas aplicaciones debido a las numerosas ventajas que ofrecen,

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en particular su disponibilidad a gran escala, relativo bajo coste de producción, ligereza,

gran versatilidad y relativamente buenas propiedades de barrera [1].

Tabla 1. Materiales plásticos derivados del petróleo tradicionalmente utilizados en la fabricación

de envases para alimentos.

Material Abreviatura Aplicaciones

Polietileno de alta densidad PEAD Botellas

Polietileno de baja densidad PEBD Películas, bolsas

Poli (etilentereftalato) PET Botellas

Poliestireno PS Bandejas, tarrinas

Polipropileno PP Películas flexibles

Poli (cloruro de vinilo) PVC Películas flexibles

Sin embargo, estos materiales, a pesar de sus múltiples ventajas, presentan ciertos

inconvenientes ya que, además de ser sintetizados a partir de una fuente no renovable, no

son biodegradables, lo cual los convierte en una gran fuente de generación y acumulación

de residuos [2], suponiendo un problema para el medio ambiente.

En los últimos años se ha desarrollado un creciente interés político y social por la

sostenibilidad de los materiales, considerando que la producción y eliminación de los

polímeros presenta riesgos medioambientales que deben ser limitados. Así, se ha extendido

la investigación en materias primas renovables, biotransformaciones, diseño estructural y

biodegradabilidad [3]. En este sentido, actualmente se observa un creciente interés en los

biopolímeros, padebido a la mayor conciencia medioambiental de los ciudadanos y a los

desarrollos obtenidos en los últimos años, que los hacen una alternativa real a los polímeros

tradicionales. Los biopolímeros son polímeros obtenidos a partir de una fuente natural

como pueden ser los organismos vivos, y que cumplen con los principales condicionantes

medioambientales para su uso: ser obtenidos de fuentes renovables, como la caña de

azúcar, proteínas y almidones, y mostrar una alta capacidad de biodegradación. Estos

materiales se pueden utilizar para diversas aplicaciones y en ciertos casos se pueden

producir con un menor consumo energético que sus homólogos petroquímicos, por lo que

tienden a ser menos tóxicos para el medio ambiente [4].

Page 119: Administración de seguridad integral.pdf

Por otra parte, el creciente interés en los alimentos de alta calidad, con mayor vida útil y un

impacto ambiental reducido, ha fomentado el desarrollo de películas y revestimientos de

estos biopolímeros [5]. Una de las principales áreas de investigación en envases

alimentarios se ha centrado en el desarrollo de nuevas técnicas de envasado capaces de

mejorar las propiedades de los alimentos a partir de sus interacciones con el envase; es lo

que se conoce como «sistemas de envasado activo».

Es conocido que los productos lácteos contienen diversos compuestos con propiedades

funcionales adecuadas e incluso algunos de ellos, como la caseína, se han utilizado en la

fabricación de diferentes productos: adhesivos, encolados, fibras textiles, acabados del

cuero, industria papelera, revestimientos y biopelículas para envasado [6], entre otras

aplicaciones.

En lo que se refiere a las películas de caseína, éstas representan materiales innovadores para

su uso en el envasado alimentario debido a que son transparentes, biodegradables,

presentan buenas propiedades de barrera al oxígeno, preservando así al alimento de

procesos oxidantes, y además pueden usarse como soporte de agentes antimicrobianos,

antioxidantes o nutrientes (como vitaminas). Sin embargo, estos materiales poseen dos

desventajas en comparación con otras películas de proteínas: flexibilidad limitada y alta

sensibilidad al vapor de agua [4,6]. Para solucionar estos inconvenientes, es necesario

utilizar plastificantes para mejorar el procesado y la flexibilidad de las películas. Los

plastificantes más utilizados para este tipo de materiales son ciertos polioles, azúcares o

almidones, debido a su compatibilidad con las proteínas y su capacidad para favorecer la

elasticidad y flexibilidad [6].

Los biopolímeros se producen principalmente a partir de recursos renovables con un menor

consumo energético que sus homólogos petroquímicos, tendiendo a ser menos tóxicos para

el medio ambiente

Los envases antimicrobianos son uno de los sistemas de envasado activo más prometedores

y estudiados en la última década y consisten en sistemas capaces de inhibir la acción de los

microorganismos causantes de la contaminación de los alimentos [7]. Las bacterias

patógenas son, sin duda, el grupo más importante de microorganismos asociados con los

alimentos, tanto por lo que se refiere a la transmisión de enfermedades como a sus

alteraciones, por lo que su control es decisivo para asegurar la calidad de los alimentos

envasados [8]. Existen una serie de microorganismos llamados marcadores cuya presencia

en los alimentos advierte sobre una inadecuada manipulación de la materia prima o

eventual contaminación, con la consiguiente existencia de un peligro para la salud del

consumidor [9]. Los envases antimicrobianos son sistemas capaces de controlar la

descomposición microbiológica de productos perecederos [10]. En este sentido, existen

plantas ricas en aceites esenciales que son conocidos por sus propiedades antimicrobianas

[11]. Los aceites esenciales más renombrados son los provenientes del orégano (carvacrol y

timol), clavo (eugenol), canela (cinamaldehído y eugenol) y romero (ácido carnósico y

carnosol). De todos ellos en el presente trabajo se escogió como agente bio-activo el

carvacrol, debido a sus conocidas propiedades antimicrobianas frente a un amplio número

de microorganismos [12]. Los aceites esenciales y sus componentes, como el carvacrol,

Page 120: Administración de seguridad integral.pdf

están clasificados como aromatizantes por Decisión de la Comisión Europea 2002/113/CE,

y además son reconocidos como seguros por la FDA (Food and Drug Administration) [13].

En resumen, se estima que los nuevos materiales derivados de los caseinatos pueden

reemplazar potencialmente a algunos polímeros sintéticos utilizados en el envasado de

alimentos, debido a su naturaleza de procedencia renovable y biodegradable [14]. Además,

poseen un elevado potencial comercial ya que pueden servir como soporte de aditivos

activos con características antimicrobianas. Asimismo, los costes de producción de este tipo

de biopolímeros se encuentran en condiciones de entrar en competencia comercial con los

polímeros de uso común, como las poliolefinas o el PVC.

Materiales de partida

Para preparar las biopelículas se utilizaron los siguientes materiales de partida:

Caseinato de sodio (Lote STD: 11868 - Ferrer Alimentación S.A., Barcelona, España). Glicerol anhidro pureza 99,5% (Fluka, Madrid, España). Carvacrol pureza 98% (Sigma Aldrich, Móstoles, España). Agua destilada.

Las bacterias utilizadas para el estudio de la capacidad antimicrobiana de las biopelículas

desarrolladas fueron: E. coli y S. aureus, obtenidas de la Colección Española de Cultivos

Tipo (CECT) de la Universidad de Valencia. Los medios de cultivo utilizados para el

diagnóstico bacteriológico fueron suministrados por Insulab (Valencia, España).

Preparación de las biopelículas

Las biopelículas se prepararon disolviendo 5 g de proteína láctea (caseinato de sodio) en 95

g de agua destilada y calentando hasta 65º C para facilitar su solubilización. Tras la

disolución total del polímero, se dejó enfriar la solución a temperatura ambiente. Para

obtener las distintas formulaciones, se añadieron diferentes porcentajes de glicerol anhidro

(15, 25 y 35%) y para las formulaciones con agente antimicrobiano se agregó un 10% de

carvacrol. Una vez preparadas las soluciones formadoras de las biopelículas, se colocaron

30 mL de cada disolución en cápsulas de Petri de polietileno (15 cm de diámetro) y

posteriormente se secaron en condiciones de temperatura y humedad relativa controladas

(25º C y 50% HR) durante 48 horas.

Tras este tratamiento, se obtuvieron películas de caseinato de sodio/glicerol (NaCas-G)

transparentes e inodoras; mientras que las muestras a las que se les adicionó carvacrol

(NaCas-G-CV) también resultaron transparentes pero no inodoras, percibiéndose un ligero

olor característico a orégano (figura 1).

Page 121: Administración de seguridad integral.pdf

Figura 1. Biopelículas de caseinato de sodio y glicerol (35%) obtenidas sin (izquierda) y

con carvacrol (derecha).

Caracterización de las biopelículas

Microscopía electrónica de barrido (SEM) de las biopelículas Para estudiar la morfología

superficial de las biopelículas se empleó la microscopía electrónica de barrido (SEM). Esta

técnica permite el análisis microscópico de los polímeros con una alta resolución mediante

un bombardeo de electrones de alta energía que barren la superficie del material. Con el

concurso de un detector apropiado permite registrar el resultado de esta interacción para dar

imágenes topográficas en dos dimensiones [15]. Las muestras utilizadas deben ser

conductoras, y considerando que los polímeros muestran características de aislantes

eléctricos, se recubrieron las muestras con una delgada capa de oro para mejorar dicha

conducción.

Una vez preparadas las muestras se realizaron microfotografías de las mismas con una

magnificación de 1000x. Para ello se utilizó un microscopio electrónico de barrido JEOL

JSM-840 (Tokio, Japón), que consta de un detector de electrones retrodispersados y un

detector de rayos X. Se empleó una aceleración electrónica de 10kV.

Los envases antimicrobianos son sistemas capaces de inhibir la acción de los

microorganismos causantes de la contaminación de los alimentos

Page 122: Administración de seguridad integral.pdf

Las muestras presentaron una microestructura de superficie homogénea (figuras 2 y 3), lo

que indica una buena dispersión del plastificante en la matriz polimérica ya que en ningún

caso se observó formación de dos fases.

Figura 2. Micrografías 1000x de la superficie de las biopelículas de caseinato de sodio con

glicerol: (a) 15%; (b) 25%; (c) 35%.

Figura 3. Micrografías 1000x de la superficie de las biopelículas de caseinato de sodio con

carvacrol 10% y glicerol (a) 15%; (b) 25%; (c) 35%.

Como se puede observar, las biopelículas con un 25% de glicerol presentaron una

estructura agrietada. Este hecho coincide con los resultados obtenidos por Kristo et

al.(2008)[16], que encontraron que la concentración mínima de plastificante (sorbitol)

necesaria para superar la fragilidad y mejorar la flexibilidad de las películas de caseinato de

sodio era también de un 25%.

Caracterización óptica de las biopelículas

Con el objetivo de conocer si las biopelículas obtenidas presentaban algún tipo de variación

en su coloración según la formulación utilizada, se llevaron a cabo mediciones de color

mediante el uso de una técnica fotométrica. El equipo utilizado en el presente trabajo fue un

fotómetro Konica CM- 3600d Colorflex-DIFF2, HunterLab, Hunter Associates Laboratory,

Inc. (Reston, Virginia, EE UU), que permite la medida del color por reflexión y por

transmisión. Los valores obtenidos por el equipo se dan en las coordenadas del espacio

colorimétrico CIELAB, que consta de un sistema cartesiano definido por tres coordenadas

colorimétricas, L*, a*, b*, las cuales permiten describir el color de cualquier objeto. L*

indica la luminosidad, es decir, la cantidad de luz percibida que refleja o transmite un

material y puede tomar valores entre 0 y 100; a* indica la saturación o desviación del punto

acromático de L* hacia el rojo (a* > 0) o hacia el verde (a* < 0); y b* es el ángulo de tono

que define la desviación de L* en el eje amarillo (b* > 0) o azul (b* < 0).

Page 123: Administración de seguridad integral.pdf

Las biopelículas de caseinato son transparentes, prácticamente incoloras, biodegradables,

presentan excelentes propiedades barrera al oxígeno y además pueden usarse como soporte

de agentes bioactivos

La medida del color se realizó colocando las biopelículas sobre el sensor y tomando cinco

medidas en diferentes puntos de su superficie. La tabla 2 muestra las medias obtenidas para

cada uno de los parámetros anteriores así como su desviación estándar para todas las

formulaciones desarrolladas.

Tabla 2. Coordenadas de color del espacio CIELAB de las biopelículas (n = 5).

BIOPELÍCULAS L* DS a* DS b* DS

NaCas-G15% 34,30 0,07 -0,10 0,10 -0,88 0,03

NaCas-G25% 34,28 0,05 -0,24 0,04 -0,81 0,05

NaCas-G35% 33,83 0,08 -0,13 0,03 -0,69 0,04

NaCas-G15%-CV10% 34,71 0,06 -0,37 0,06 -1,30 0,10

NaCas-G25%-CV10% 34,64 0,05 -0,30 0,03 -0,96 0,05

NaCas-G35%-CV10% 33,78 0,03 -0,17 0,06 -0,72 0,06

Como se puede observar, la luminosidad L* muestra un ligero descenso con el aumento en

la proporción del plastificante, por lo que se puede concluir que las biopelículas, al estar

más plastificadas, se hacen ligeramente más transparentes. Tanto para los parámetros de

saturación a* como para el ángulo de tono b*, se observaron valores ligeramente inferiores

a cero, desviándose por lo tanto levemente hacia los colores verde y azul, respectivamente.

Sin embargo, se debe tener en cuenta que los valores absolutos de los parámetros a* y b*

fueron muy cercanos a 0 en todos los casos, indicando la ausencia de color y una elevada

transparencia para todas las formulaciones, incluso para las que contenían carvacrol. En

este sentido, Pereda et al. (2010) [17], si bien obtuvieron películas transparentes de

caseinato de sodio plastificadas con glicerol y modificadas con aceite de tung, observaron

que éstas presentaban una coloración ligeramente ámbar, obteniendo valores de la

coordenada b* de hasta 8,11.

Page 124: Administración de seguridad integral.pdf

Caracterización mecánica de las biopelículas

Las propiedades mecánicas a tracción de las biopelículas se estudiaron siguiendo la Norma

ASTM D882-01(18). La información aportada por el ensayo de tracción es muy completa,

ya que permite medir la respuesta elástica y plástica del material. Así, los parámetros

módulo elástico de Young (E) y porcentaje de deformación en el punto de rotura (εB%)

permiten obtener conclusiones sobre la resistencia del material y sus propiedades dúctiles,

respectivamente (figuras 4 y 5).

Se pudo comprobar que la adición de glicerol a la máxima proporción utilizada (35%)

provocó una disminución importante en el módulo elástico de Young (figura 4), lo que

implica una disminución importante en la rigidez del material, como era de esperar al

tratarse de un proceso de plastificación. Por otro lado, las biopelículas con glicerol al 15%

mostraron valores de E mayores que los de algunos polímeros convencionales como

polipropileno (0,2-1,2 GPa), polietileno de alta densidad (0,5-1,2 GPa) y

poli(tetrafluoretileno) (0,3-0,8 GPa) (15). Este resultado indica una rigidez muy alta de las

películas de caseinatos en comparación con las de poliolefinas utlizadas frecuentemente en

envasado de alimentos. Como el objetivo básico del presente trabajo era obtener películas

flexibles, se descartaron las biopelículas plastificadas con 15% de glicerol, no siendo

incluidas en la investigación posterior.

Figura 4. Módulo elástico de Young obtenido para las distintas biopelículas (n = 5).

Se observó que el aumento en la proporción de plastificante mejoró la flexibilidad de las

biopelículas. Así, las biopeliculas con un 35% de glicerol presentaron el incremento más

elevado de deformación en el punto de rotura (figura 5). Este resultado es importante, ya

que para la fabricación de envases en forma de películas es necesario que el valor de εB%

sea lo más alto posible, para poder tener una flexibilidad adecuada.

Page 125: Administración de seguridad integral.pdf

Figura 5. Porcentaje de deformación a la rotura (εB%) obtenido para las biopelículas (n =

5).

Propiedades de barrera al oxígeno

Una de las propiedades más importantes cuando se trata de diseñar un sistema para

envasado de alimentos es la permeabilidad a los gases, en particular al oxígeno. Este gas es

capaz de participar en reacciones químicas perjudiciales para los alimentos y por ello su

presencia debe estar regulada por el material de envase en la mayor parte de los casos.

En este trabajo se determinó la velocidad de transmisión de oxígeno (OTR) a través de las

biopelículas con un analizador de permeación de oxígeno Systech Instruments modelo 8500

(Metrotec S.A, España). Para poder comparar los resultados de las muestras entre sí, se

midió el espesor promedio de cada una de las biopelículas y se multiplicó por el valor

registrado por el equipo. Las determinaciones se realizaron por duplicado. La tabla 3

muestra los valores finales de OTR obtenidos en el estado estacionario multiplicados por el

espesor promedio de cada película (OTR.e).

Tabla 3. Velocidad de transmisión de oxígeno por espesor promedio de muestra (OTR.e) obtenido

para las películas de caseinato de sodio estudiadas (n = 3).

BIOPELÍCULAS OTR.e (cm3mm / m2día) DS

NaCas-G25% 1,87 0,01

NaCas-G35% 1,40 0,30

NaCas-G25%-CV 2,42 0,02

Page 126: Administración de seguridad integral.pdf

Tabla 3. Velocidad de transmisión de oxígeno por espesor promedio de muestra (OTR.e) obtenido

para las películas de caseinato de sodio estudiadas (n = 3).

BIOPELÍCULAS OTR.e (cm3mm / m2día) DS

NaCas-G35%-CV 2,10 0,70

Se observó que los valores obtenidos de OTR.e fueron muy bajos, indicando que las

biopelículas desarrolladas presentan excelentes propiedades de barrera al oxígeno. Por otro

lado, se comprobó que la adición del agente antimicrobiano produjo un leve aumento en el

valor de OTR.e, disminuyendo ligeramente las propiedades de barrera de las biopelículas.

Este incremento es muy poco significativo, por lo que se puede concluir que las

propiedades de barrera son adecuadas para su uso como material para envasado alimentario

activo. Estos resultados fueron posteriormente comparados con los obtenidos por Martino

et al. (2009) [19], que también desarrollaron películas biodegradables para el envasado de

alimentos en base poli(ácido láctico) PLA. Los valores de OTR.e para PLA sin plastificar

fueron de 29,5 cm3 mm/m

2 día, siendo incluso superiores para PLA plastificado, llegando a

obtener valores de hasta 48 cm3 mm/m

2 día.

Estudio de la actividad antimicrobiana de las biopelículas

La actividad antimicrobiana de las biopelículas en base caseinatos con y sin agente activo

se evaluó mediante el método de difusión de disco descrito por el laboratorio internacional

de referencia, el National Committee for Clinical Laboratory Standards (NCCLS) [20].

Para ello, las biopelículas se cortaron en forma de cuadrados de 10 x 10 mm2 y se colocaron

de forma que se asegurase un contacto pleno entre ellas y la superficie del agar de cultivo.

Se prepararon tres cuadrados por placa, llevándose a cabo el ensayo por duplicado para

asegurar la reproducibilidad de los resultados.

Las biopelículas cuyas formulaciones contenían carvacrol mostraron una inhibición del

crecimiento bacteriano en la zona de contacto, tanto frente a E. coli como frente a S.

aureus, mientras que para las biopelículas utilizadas como control (sin carvacrol en su

formulación) se observó el crecimiento bacteriano en toda la superficie de la placa (figura

6).

Page 127: Administración de seguridad integral.pdf

Figura 6. a) Inhibición del crecimiento de E. coli por muestras de NaCas-G25%-CV10%, b)

crecimiento E. coli en biopelículas control (sin carvacrol).

Tanto el plastificante (glicerol) como el agente antimicrobiano (carvacrol) mostraron buena

compatibilidad con la matriz polimérica, formando películas homogéneas y sin separación

de fases o formación de zonas aglomeradas

De esta forma se pudo confirmar la capacidad antimicrobiana de las películas con carvacrol

y, en consecuencia, la capacidad de las películas en base proteína para actuar como soporte

de los agentes activos.

Estudio de la biodegradabilidad de las biopelículas

A partir de los resultados obtenidos se evaluó la calidad de las formulaciones preparadas,

teniendo siempre en cuenta un compromiso entre las propiedades mecánicas de las

películas y su acción antimicrobiana. De esta forma, se seleccionó la formulación de

caseinato de sodio plastificada con un 35% de glicerol y con presencia de agente

antimicrobiano (NaCas35%G-CV10%), procediéndose a estudiar su biodegradabilidad.

Este estudio se llevó a cabo siguiendo la metodología indicada por Martucci y Ruseckaite

(2009)[21] para películas en base gelatina. Para ello, se introdujeron las muestras cortadas

en piezas rectangulares (2 x 3 cm2) dentro de mallas de acero inoxidable, se enterraron en

reactores con compost (figura 7) y se fueron sacando a distintos tiempos de reacción.

Las formulaciones que contenían carvacrol inhibieron el crecimiento de E. coli y S. aureus,

demostrando la capacidad antimicrobiana de las biopelículas desarrolladas

Tras cada extracción se llevó a cabo una inspección visual de las muestras para comprobar

el grado de desintegración física en función del tiempo (figura 8). Se observó que al cabo

de 90 minutos resultó prácticamente imposible despegar las biopelículas de la malla

metálica. Finalmente, después de 300 minutos de tratamiento, las muestras se encontraban

totalmente desintegradas bajo las condiciones estudiadas, tanto las que no tenían agente

antimicrobiano como las que contenían carvacrol.

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Figura 7. Reactores con compost utilizados para el estudio de biodegradación.

Figura 8. a) Muestra antes de ser introducida en el reactor; b-f) Muestras retiradas del

reactor a tiempos b: 10 min; c: 80 min; d: 90 min; e: 120 min; f: 240 min.

Conclusiones

A partir de los resultados obtenidos, se puede concluir que tanto el plastificante como el

agente antimicrobiano utilizados en este trabajo mostraron una buena compatibilidad con la

matriz polimérica, formando películas transparentes y prácticamente incoloras, homogéneas

y sin separación de fases o formación de zonas aglomeradas.

Todos los compuestos utilizados en las formulaciones desarrolladas han sido de origen

natural, seguros y cumplen la normativa vigente para materiales en contacto con alimentos.

Además, son altamente biodegradables, representando una alternativa prometedora y

medioambientalmente sostenible a las películas sintéticas que se utilizan hoy en día.

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La plastificación de la biopelículas de caseinato de sodio con glicerol fue uno de los

factores clave para la obtención de las biopelículas, mejorando las propiedades dúctiles del

material con una reducción en el módulo elástico de Young y un aumento en la elongación

en el punto de rotura, proporcional a la concentración de plastificante añadido. De esta

forma se consigue un nuevo material apto para ser procesado para la obtención de películas

a nivel industrial.

Las biopelículas de caseinato de sodio plastificadas con glicerol y con carvacrol como

agente bioactivo cuentan con un elevado potencial comercial porque presentan

características antimicrobianas y son sostenibles

Se comprobó que las formulaciones que contenían carvacrol inhibieron el crecimiento de E.

coli y S. aureus, demostrando la capacidad antimicrobiana de las biopelículas desarrolladas,

lo cual le da una elevada importancia desde el punto de vista de la posibilidad de obtención

de películas activas para envasado de alimentos.

Se obtuvieron excelentes propiedades de barrera al oxígeno, siendo éste un factor muy

importante para un envase alimentario a la hora de proteger al alimento contra la oxidación.

Además, este bajo valor en la permeabilidad a este gas constituye una mejora significativa

en comparación con otros polímeros biodegradables.

En resumen, la formulación de caseinato de sodio plastificada con un 35% en peso de

glicerol y tratada con un 10% en peso de carvacrol (NaCas-G35%-CV10%) fue la más

adecuada de todas las formulaciones ensayadas. De esta forma, se obtuvo una biopelícula

de superficie lisa y homogénea, con capacidad antimicrobiana frente a E. coli y S. aureus,

excelente barrera al oxigeno, con propiedades dúctiles adecuadas, aportando una

flexibilidad aceptable para asegurar su uso en sistemas de envasado de alimentos y que se

desintegra rápidamente en condiciones de compostaje, siendo así amigable con el medio

ambiente.

AGRADECIMIENTOS

Marina Patricia Arrieta agradece a FUNDACIÓN MAPFRE por la Beca Ignacio Hernando

de Larramendi 2009 - Medio Ambiente, concedida para el desarrollo de este trabajo de

investigación. Asimismo, los autores quieren expresar su agradecimiento a Ferrer

Alimentación S.A. por aportar la proteína láctea.

A MODO DE GLOSARIO

Aceites esenciales. Sustancias químicas intensamente aromáticas biosintetizadas por

plantas.

Antimicrobiano. Agente capaz de combatir los microorganismos o evitar su aparición.

Biodegradación. Descomposición aeróbica o anaeróbica por acción de microorganismos.

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Durante la biodegradación los materiales son degradados por acción enzimática de los

microorganismos bajo condiciones normales del medio ambiente.

Biopolímeros. Polímeros biodegradables, obtenidos de fuentes naturales.

Caseína. Proteína presente en la leche.

Carvacrol. Uno de los aceites esenciales del orégano que posee capacidad antimicrobiana.

Compost. Humus obtenido por descomposición bioquímica de una mezcla de residuos

orgánicos y que tiene un contenido en minerales limitado.

E. coli. Bacteria que generalmente se encuentra en el tracto gastrointestinal. Es un

microorganismo utilizado como indicador de contaminación fecal.

Food and Drug Administration (FDA). Agencia del Gobierno de los Estados Unidos

responsable de la regulación de alimentos (tanto para seres humanos como para animales),

suplementos alimenticios, medicamentos (humanos y veterinarios), cosméticos, aparatos

médicos (humanos y animales), productos biológicos y derivados sanguíneos.

S. aureus. Bacteria que generalmente se encuentra en la piel, las mucosas y el tracto

respiratorio. Es un microorganismo utilizado como indicador de una incorrecta

manipulación.

Recursos renovables. Recursos naturales que no se agotan con su utilización, debido a que

vuelven a su estado original o se regeneran a una tasa mayor a la tasa con que los recursos

son disminuidos mediante su utilización. Ciertos recursos renovables pueden dejar de serlo

si su tasa de utilización es tan alta que evite su renovación.

PARA SABER MÁS

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