VISIONES DE HUMANIDAD Y HUMANISMO

Marginales a un Ideal Creacionista

Tú crees que los vientos vienen de allá y los de eselejano mundo creen que van de nosotros. La relatividad delas cosas es' lo que enseria a obrar. Saber que el esp ú itu pues­to en su momento creador en cualquier latitud geodésica dasu fruto, nos hace aparecer insatisfechos, hasta no ver flore­cer en el huerto cultivado con esmero, las manzanas de orode las Hespéridas ...

César, en drama de Shakespearc, por que cree en suyo que lo acompaña como una sombra metida dentro del pe­chu, se va al Capitolio, para romper con la furia de su destinoel eco de los augures y sueños de Calfurnia, con tanta intre­pidez como cuando saltó el m (sero lecho del Rubicón, cor­dón umbilical que alimenta su gloria insatisfecha. Se mirainamovible como la estrella polar con la que se compara,en un arranque de hondo egotismo, sin olvidar que a su ladohay constelaciones, que han recorrido su camino, y plenas derobusta claridad, 'hay que tener una fuerza de perennidadpara sostener la energja externa que lucha por corrompery acabar. La fuerza del esp (ritu es lo que sostiene la vidade los hombres. Hombre y Parábola son los polos de lahistoria. Ser y Ctrculo de acción. Palabra, hecho, reac­ción, son modos de actuar la Parábola. Infinita curva donde

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IdI1/,\ SU disco el macrocosmos para alumbrar sus propias pu­pilas, plenas de entusiasmo por Id afectiva realización desu idea.

Hay un d (d en que el hombre quiere sirnboliz ar supropia hdlalid y crea el Mito. 1:1 hombre, he pensado muchasveces, sula puede mediante uru tenaz culturización apartarsede cst.is creaciones simbolistas que hacen perpetuar ciertasui.mifcstacioncs globales de su humanidad. Pero pienso tam­bién que .1 medida que se progresa, como una ley de prolon­g.ición espiritual, el hombre tiene que crear estas imaginesque '>011 Id re,t1i/dciún de sus visiones y voliciones.

Mientras el importuno, Hamle t le responde que sololec p.rl.ib: as, en aquel momento no hace sino pensar en lastonncu t,rs de su csp úitu inquieto por IdS realidades que locircundan, ante las cuales trata de presentarse corno uno queirrcalmcntc no se comprende muy a su pesar. zDóndc se ani­Ud ese csp úitu estético que buscarnos con tanto interés? Enel hombre Id belleza se presenta por un espectáculo que mu­ch.is veces es su misma creación. El campesino sueña conott os campos que no son los suyos y ante los cuales presien­te un estado de admiración. Si son cultivadores de la calla,verán en los cafetos que caen por desangrarse en la tierra desu enorme sueño de vida, un súnbolo grande y hermoso que[am.is hab I,tll contemplado. El que ha amanecido dormidoentre el dorado de los trigales, siente una esplendente emo­ción cuando despega los teobrornas, o cuando corta el sedosotumbo de la savia en los brazos de la musa paradisíaca. Vansintiendo emociones distintas, signo del rompimiento del ar­co iris de la belleza que no hablan sospechado. Un hombreculto, supongamos Bello, puede hacer traducir en una emo­ción única por lo universal, todo el tesoro estético que la be­lIeld de esta misma Lona tórrida puede ejercer en variadostonos sobre el ivcrsos horn bres.

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Cada uno tiene su espú itu de captación. Una vez to­

mé un arado en una vega de 13S vegas rústicas del pueblo. Contesón ernpezé a perfilar surcos. El campesino reía ante las si­nu osi dades de mis lineas, y me dec ia con u na sonrisabenévo­

la: Teha faltado tiempo para poder trazar estas lineas, quea mi mismo, cuando el sampo es inmenso y plano se me con­

funde con el cielo.

Yo sabia por estudio que hay una expresión geornétri­

ca que dice que las lineas paralelas no se encuentran por másque se prolonguen. Después un espíritu filosófico me habíaenseñado, con menos realidad cósmica pero con mayor pro­fundidad matemática que las paralelas sé encuentran en el in­finito. Esta última culminación perfecta, me la enseña elcampesino, más burda en la expresión, pero tan clara y elo­cuente en el fondo diciendo, que los-surcos -paralelas de ger­rninación- se le confunde con el cielo.. El esp íri tu de suavegcorncuia pascaliana flota por los aires como esencia que sedesprende de los surcos olientes a fecundidad. Y al deciraquello el campesino, el sol que se ha ido ocultando, pareceel centro hacia donde convergen los millones de surcos, ypor los cuales como canales de luz se irradia sobre estas cua­tro pupilas toda la belleza de la tierra.

Es la manifestación cósmica en el csp íritudcl hom­bre, lo que la hace sentir la palpitación universal muy cercade sus venas. Ardiente en esta cuenca voléanica tiene quesentirse envuelto por' el caldeado entusiasmo que lo vitali­za perennemente.

No ya el hombre convida a una reunión a los demáshombres para enseñarles el desenvolvimiento de la vida conuna clara visión de hermandad. No olvidemos al burguésaquel que deja su nombre al lugar donde se reunían aquellosotros de pensamiento que Se tildaban amantes de la sabidu­ría, y que le explicaban a su mundo burgués, y al otro de se­lección eterna, las corrientes misteriosas que asombran en la

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sentencia oriental al padre Tiempo. "Yo soy lo que existe,lo que existió y lo que existirá.

Esa falta de creencia en una futura creación es lo queha traido esa también honda crisis de humanismo. El aleteovital que conmueve al mundo espiritual es precursor de unasoñada filosofía: donde el hombre se satisface en compene­trarse alma con alma para realizar su trabajo y glorificación.Ya no somos individuos. Nuestro juicio es el juicio de todos,alboradas en sus cartas estéticas, el creador de Guillermo Tell,

Pueden fenecer las grandes conquistas modernas por­que son obras de apresuramiento. Natura non facit sal tus.Las creaciones deben tener sus bases de afincamiento, que noes más que el cultivo de esa especie indomable que se llamacultura con una totalidad de carácter y energía. Por esa faltade tradición humanista es que se oyen gritos contra el cieloentre nosotros por la constante ruptura de culturas que cadauno -hornbre o grupos se dice haber creado.

Humanismo es la exaltación de los valores moralesde un pueblo en los ramos en que la vida tiende a la perfec­clan. Es la actitud emotiva del hombre hacia sus propiasimágenes pulsando en ellas lo que de relación y aspiraciónpuede contener. No es hacia el remanso, hacia el cual la pu­pila cansada y retardataria ahonda. Es la belleza en funciónsocial que nace del ejercicio activo y sin contemplación, co­mo del huerto .bien cultivado nacen las flores más coloridasque presagian frutos ri'qu (simas en vitaminas, sanos en gene­ral para acercarlos a la partícula viviente que anima cual­quier ser.

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Carta aun Amigo Escritor

Fresca aún la lectura de un libro -que me pareciocomo lo esperaba-: del 'recio sabor de otoñe de la cepa purí­sima que da vendimia espiritual a la generación que le siguecon los ojos clarificados de sombras, me punga e hilvanarestas marginales en torno a la reflexión en que se ha hundidomi mente, por los bellos pensamientos, las ideas sinceras enque he vivido varios días, y que deseo sean para m í mostodel mismo racimo de uvas de donde la ha extraido usted pa­ra la levadura de.su siem.pre hond ísimo pensar.

y por encontrarse en la 'misma sugestión de amor lite­rario a lo que campea tomo símbolo-a la entrada de su pórti­ca, donde plantea cátedra de idealismo y de vergüenza, ape­gado a mi historia venezolana que se nutre del mismo solardonde Ledezrna, con las piernas sobre su caballo, echa -a an­dar contra los piratas, los monederos falsos, de todas las épo­cas y también enamorado de ese Don Quijote, enternecido dealbas, regañado siempre por la suerte, pero que dió la razón amedia humanidad mientras la otra sea bárbara, tengo el dere­cho y razón de hacer escolios a su propia conciencia, porquea ello me favorece la amistad y la misma fe crítica que daserpersonero de una misma cultura, o disdpulode una heren­cia común

Don Mario: no se pierde la fé en una cruzada porquese llama loco al pionero de esa fulminación, o porque-lo llamala delicia de los humanos. La alabanza y el improperio tienen'la buena enseñanzade equilibrar el puesto del hombre en elcosmos. Al contrario, hay que afincar los cañares en la par­cela que nos ha tocado labrar y sembrar. Fray Angélico,Angel Caído, son los títulos que apacientan I'a humanagrandeza.

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Siempre lo he repetido, hasta en un epígrafe de un li"bro, este pensamiento de Cervantes: "Visión debió ser sin du­da, dijo Don Quijote, porque no hay otro yo en el mundo".Por ello hay pocos "yo" que sigan este idealismo trascenden­te, que lleva a la m ística de una perfección de vida y ho­locausto.

Cuantas idas y venidas tiene que hacer el escritor so­bre este camino de tópicos trascendentales que tienden a ha­cer de la naturaleza humana. más llena de humanismo. Verti­calidad de expresión; tonificación para el espíritu tan lleno delas visiones ni materialistas ni terrenas que contiene su granfilosofía, sino a ras de la tierra sin poner en nada el pensa­miento, sin tener una brújula de buena intención; sino vivirpara vivir, explotando lo flaco de su naturaleza y sin pensaren poner de manifiesto lo que naturalmente lleva consigo ca­da hombre; la supervivencia del espíritu y con ella la materiaque vivifica la expresión tónica de la personalidad. Caballode paseo no gana batallas. Martí: hablando del pendón líricode Pérez Bonalde: el niágara.

Notas Sencillas para el Hombrey el Citadino

El presupuesto de una nación es una combinación delas posibles entradas como rentas que van paralelas a los gas­tos que ocasionan la realización de los planes constructivosque orientan las necesidades de un país.

Gira en torno a dos ejes esenciales: las entrada o ren­tas y los gastos. Nuestro sistema presupuestario tiene una de­ficiencia en la determinación; habla de rentas y gastos públi­cos en su membrete de exposición o de enumeración y luego

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habla de los gastos numéricos primeramente y exponen lo

mas suscinto posible las entradas.

Luego en la determinación de los gastos en las asigna­ciones a las diversas unidades ministeriales, los que son losramos administrativos que resuelven en última instancia lasnecesidades del país.

Ahora, bien, un presupuesto es el resumen sintéticode las fuerzas vivas de una nación por cuanto refleja las entra­das, las detalladas rentas conque cuenta la especialidad del vi­vir nacional, y las energías que se gastan para la consecuciónde la finalidad objetiva en que se trasluce dichas fuerzas vi­vientes y vitales en su afán de logro.

La sistematización de un presupuesto es una tarea detécnica y que a medida que se ejecuta en el transcurso de losaños económicos, que va-dando una seguridad que-no se pier­de e igualmente va creando en el medio ambiente que .10 ejecu­ta, una táctica segura para coordinar ensmtesis los aumentadosgastos modernos con las posibilidades económicas de las en­tradas. En e;Fé"árido pero sano y fructífero ensayar bajo di­ferentes puntos de vista la riqueza nacional así como las ne­cesidades del país, se va formando la sana conciencia econó­mica-fiscal que enfocado en otros artículos, al final trae latécnica, como la mayor eficiencia en el servicio presupues­tario. Es de una saludable y grandiosa misión: estar en el ínti­mo contacto de las necesidades materiales y espirituales dela nación; saber que los lejanos caseríos de las regiones aparta­das esperan que su técnica haga determinar que necesitan es­cuelas propias para alcanzar la virilidad del esp íritu, que loscampos petroleros dan su gota rica de alimento a las arcaspero que también esperan que se cumplan las disposiciones dela Ley del Trabajo y de las disposiciones modernas sobre lalegitimidad de todo lo referente al cuido sanitario de su vivi~alejado de centros radiados por la civilización y el mismo pro­greso; del obrero de las obras públicas de donde tienen que

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sacar su provecho particular dando igualmente a la nación su

mayor eficiencia aprendida por la práctica y las enseñanzasde las escuelas de artes; en fin todas las dependencias llevanal gran cauce de la hacienda sus canales para que la energrase avene por ellos; y sabemos que el lenguaje de los númeroses la fórmula eficaz de la.hacienda, y con él es que se respon­den a las preguntas llenas de ansiedad conque se pronuncian

las necesidades nacionales.

Así vemos, atendiendo a la técnica de las posiblida­des, que sistemas económ icos tan variados, como F rancia, endonde la labor administrativa sobre presupuestos ha llegado ala mayor altura -prueba ésta en el peligroso debate de este ca­p úulo en las cámaras galas, y hasta Rusia, donde no obstantesu sistema de: gastos colectivos, se llega a la eficiencia en el de­sarrollo de sus fuerzas vivas en las entradas y las salidas.

En medio deJos conceptos teóricos que campean enel tema de los presupuestos, por ejemplo, están: si las cámarasno adoptan la ley de presupuesto para el período económicoque empieza, rige la anterior inmediata; mientras que otrospaises tiene períudos de duración variados, desde seis' meseshasta tres años, entre nosotros rige por un ario, pudiendoaquellos principios regir también en nuestra acitvidad pre­supuestaria.

Hoy que han entrado en la organización nacionalotras asignaciones cuantitativas como son las adscritas a losúltimos ministerios creados, se suponen que habrán mayoresentradas, o por lo menos seguridad de encontrarlas. El ré·gimen anterior que solo vela en la hacienda las arcas particu­lares para girar contra él a su antojo de psicología para la ra­pitia y el desbarajuste, el presupuesto era una fórmula de sim­ple entrega a las administraciones particulares cantidades dedinero, que sufrran las modificaciones de las diversas depen­dencias ministeriales, sin dejar cuenta fija de los serviciosprestados por Jos desembolso? y sin desarrollarla verdadera

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finalidad a que estaban designadas las partidas. No solo senecesita una profunda técnica en la elaboración de los presu­puestos, sino una sana conciencia fiscal para llenarlo a su fi­nalidad efectiva.

La elaboración del presupuesto se hace para formarUfl proyecto de Ley, en cuyo trabajo actúa como nervio coor­dinador, el Ministro de Hacienda, a quien se le asigna SU

creación:

1. Administrar el I esoro Nacional, cuidando de que losfondos provenientes del producto bruto de todas-lasrentas nacionales se recauden, custodien y distribu­yen de conformidad con las leyes respectivas.

2. Reunir los presupuestos de gastos de los demás Minis­terios para formar, con el de su propio Departamentoyel Presupuesto General de Rentas. el Proyecto Ge­neral de Rentas y Gastos que se sometería al Ejecuti­vo con la debida anticipación. Ley Orgánica de laHacienda Nacional. Artículo 75.

De aqu íse desprende su-papel coordinador, dade; quecada Ministerio elabora su respectivo presupuesto de -gastos,pero como cada Ministerio no sabe de la importancia y tama­ño de los gastos generales y de las entradas de la nación, nopuede dar cuenta sino, muy relativa, de como la nación ten­drá el manantial de riqueza que presupone los cuantiososgastos dela administración. El Ministerio de Hacienda si es­tá en esta posición, pues regenta las entradas en forma de ren­tas y .sabe también de los gastos generales; tiene el verdaderopanorama de la realidad del pueblo venezolano como produc­tor y como consumidor.

Es un trabajo que va de lo particular a lo general co­mo el método inductivo. Corresponde pues al Ministerio deHacienda, estudiar lo general, lo global (no daña que estudie

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los pormenores, dada que su labor estener cuenta de las nece­sidades particularizadas, para saber igualmente con lo que sepuede contar con las entradas en un momento dado)' para ha­cer comparaciones con las entradas más o menos seguras, nose produzca el caso que pueda haber déficit, es decir, no ha­ber dinero para las erogaciones públicas.

La Ley Constitucional determina la fecha en que letoca al Ministro de Hacienda presentar a la Cámara de Diputa­dos el Proyecto de Ley de Presupuesto, la que para poder te­ner fuerza de Ley, requiere las discusiones previas efe las Cá­maras, las que pueden enmendarlas, amplificarlas o acortar­las, dado el caso que, corno ellas representan a todo el país,en su faz poi ítica corno son los Senadores, y esencialmenteal pueblo los Diputados les cabe la obligación de enmendar elpresupuesto, es decir, discutirlo, en un ambiente de libre dis­cusión donde cada uno exponga las necesidades de su regiónrepresentada, y corno ellos conocen a fondo las mismas en suconfiguración geográfica y económica, por lo menos debenconocer,cs su conformación poi (tica, ellos podrían ponerlemarginales seguras aL proyecto, y en la combinación de todasestas advertencias, nace una Ley de Presupuesto segura, efi­ciente y práctica, y especialmente remediadora de las vertica­les necesidades de la nación. La utilidad de la Ley Presupues­taria estriba, en que al coordinar las riquezas y las necesidadesde la nación en una fórmula estricta y paralela a lo que se tie­necomo fondo del resurgimiento anual de la nación, da a losmismos funcionarios encargados de su aplicación y observan­cia, un medio seguro de no equivocarse en el manejo de losfondos públicos, que el manejo de tanto trabajo venezolano yde tanto esfuerzo de totalización de las energías latentes detantas divisiones poi íticas que encarnan la base constitucionalen que se funda el pacto poi ítico de las entidades federales alunirse.

La utilidad de la Ley Presupuestaria es que al coordi­nar las riquezas y necesidades nacionales, crea al mismo tiern-

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po una conciencia especializada que debe tener cada hombredcsf mismo y aún más del patrimonio colectivo.

De aqu í, que habiendo ciertas costumbres en los asun­tos fiscales, que perjudican la consolidación de esta costum­bre como práctica eficaz para el ejercicio económico dela na-.ción, es necesario señalar estas deficiencias fiscales que vancontra las naciones y no traen la confianza que se debe tenerde un gobierno en donde la democracia señala rumbos nuevosque deben quedar como señales definitivas dentro de las nor­mas diarias de su vida humana correspondiente.

Es costumbre el concepto que se tiene de las ganan­cias por comisiones que a menudo se habla y se practica entrefuncionarios públicos y particulares escogidos con. el fin deorientar los principios latentes de.' deber ciudadano de vigilary condenar.. Se ejerce esto contra las arcas del tesoro nacio­nal, olvidando el más elemental principio de concepto social­económico; un Ministro o un tercero necesita comprar parausos del Ministerio a su cargo odel cual sirve miles de sacosde cemento. Los compra a una casa extranjera, esta se los dapor menos de su costo esencial dado, la cantidad comprada,y entonces aquel cobra su comisión por haber obtenido reba­ja en el precio total. Sagrado es el Tesoro Nacional, porquees la agrupación de la riqueza nacional acumulada efectiva­mente por los naturales para sus necesidades prcsupuestales.Contra el Tesoro no debe haber comisión de ningún género.Siempre recordaremos el escandoloso comercio de los fósfo­ros verificado por un Ministro anterior. Todavía encnde­mas con cerillas del centenario del Libertador, tal fue la grancantidad de estos útiles comprados con el fin de conseguiruna comisión de 'millones. Sistema absurdo que debe extir­parse hasta en los más pequeños negocios que por regla gene­ral verifican los institutos y organizaciones federales, para ir­se dando cuenta exacta de que el tráfico con los dineros na­cionales es de suprema vigilancia y en todo caso de aumentar­se cl patrimonio nacional con las econom (as hechas, ya que al

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fin vuelven ellas bajo otras formas a engrosar los gastos útilesy esenciales.

Acorde a las deficiencias técnicas de la Ley Presu­puestaria para poderla ejecutar, se ve en los malgastos de laanterior administración, tal como se desprende de la últimademanda del Procurador de la Nación. ¿Qué capítulo tanafortunado para las ansias particulares que el bendito VII delPresupuesto del Ministerio de Relaciones Interiores, que co­mo tonel no se secaba nunca. Qué patrimonio el nuestro, pa­gaba las demandas que los hijos de familia obtenían co­mo premio a sus desmanes y su lujo. Se demanda contra elchoque de uno de los familiares en Paris, y las arcas naciona­les la paga. Las planillas de liquidación de aguardientes recti­ficados y elaborados en haciendas particulares se exirruan desus pagos, haciéndolos el tesoro. Arbitrariedad que no se havisto nunca. Una lotería con el titulo de benéfica para un so­lo beneficiario en forma de renta semanal.

Habla de la misma Ley Organica de la Hacienda deun artícülo que se denomina "Reintegro" que constituye unafórmula peligrosa de reintegro del pago indebido verificadopor el Tesoro a cualquier Ministerio o Dependencia al que lesuministra gastos. Va un ejemplo que he palpado últimamen­te y que procura exponerlo, como ejemplo de futuridad ylección para modernizar el asunto presupuestario; el Ejecuti­vo expide un Decreto para la creación de un servicio de maes­tros, y este habla que empezará a funcionar desde la primeraquincena de abril. Pero como no se puede cobrar sino desdeel nombramiento y sucede que puede pasar días sin haberseestos hechos, por diferentes motivos al simple alcance. ElMinisterio cobrará toda la quincena y guardaba el remanenteno pagado y se guardaba para compra de útiles, etc. La lec­ción dada por este Ministerio consistió en que se reintegró es­ta cantidad al fisco en buena conciencia fiscal, que suponeque el dinero no gastado se debe reintegrar a su misma parti­da. El peligro consist ía en que estas cantidades se las embol-

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saban los diferentes titulares haciendo caso omiso de la Leyque especifica el reintegro, solución que se puede llamar decálculo económico que tiene el tesoro para sus gastos in­debidos.

Es pura conciencia fiscal, cómotomar una cantidadcuya finalidad es otra, para comprar útiles o para gastos dife­rentes al asignado en su partida respectiva. En Presupuestolo que se asigna para gastos de un servicio o de cualquierotro gasto, no puede dársele otro fin, pues chocaría con loparalelo de gastos y asignaciones determinadas similarmente,y con el carácter de contabilidad y técnica que se acompañaa la teoría general del presupuesto. Así como el cap ítuloVII del presupuesto o de las Relaciones Interiores hay otrosen diferentes departamentos que no tienen ese carácter deseguridad y precisión que el caso requiere por lo amplio delconcepto debiéndose suprimir en buena ley , así como la mo­dificación del artículo de la Ley de Hacienda (Art ículo 167)que debe determinar esta consecuencia.

En tal sentido debe haber un gran cuidado, máximoen la formación de un decreto por el que se crea un servicio.El mismo decreto debe determinar el gasto desde la fecha pre­cisa, y el Ministerio de Hacienda debe llevar la contabilidadexacta, para no darse ninguna orden de pago sin fijarse queel servicio en acción funcional y no en el cuerpo del Decreto.Si por el recibo del servicio se comprende que no se ha paga­do en orden a su finalidad y que ha quedado un remanentea favor del departamento, el Ministerio de Hacienda para laefectiva contabilidad debe pedir el reintegro de las sumas de­bidas al despacho a cuyo favor está. Esta forma es un medioeficaz para evitar un desfalco al Tesoro, o gastos de dineroasignados a otros fines.

Presuponemos como condición de tonalidad para lapureza del esfuerzo totalizador, la moralidad y el crédito delos funcionarios. Sabemos que la mayoría de la tendencia ve-

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nezolana va ala purificación del medio en que se actúa y es­pecialmente, cuando hay en uno esa cierta especialidad paraver y querer que .las cosas sigan el expontáneo crecimientoque se le da en la raiz. Pero también, esperamos que hayael golpe certero para hacer que las cosas torcidas o que tien­dan a dicha cuflidad sean arrancadas para que no sean rémo­ras en la finalidad a que tiende el gobierno y el pueblo denuestra Venezuela.

Uná vez aclarados cuales son los lineamientos que seperfilan en la determinación de nuestro sistema presupuesta­rio, según lo determina la Ley de Hacienda en su parte refe­rente al Presupuesto General, empezaremos la coordinaciónde nuestros apuntes para saber hasta donde alcanza la teoríade nuestra conciencia presupuestaria y también las fallas queen la práctica no dejan coordinar eficientemente los precep­tos legales.

El parecer corriente que la cuestión presupuestaria esde simple observancia y no de estudio profundo y amplio yademás seguro en su aplicación, están equivocados. Ameritaun conocimiento de la economía y de las finanzas externascorno propias. Entre estas dos ciencias está su fundamento:Primero. porque es la economía la que señala alas medios deproducción, la riqueza del medio en que se va a ocupar aejercer la misma Ley Presupuestaria; y segundo: las finanzas,cómo su misma etimología lo enseña, viene de finarlo, extin­guir, pagar, terminar, nos enuncia el modo de llevar esa rique­za al acoplamiento de las necesidades nacionales.

Nosotros nos atenernos para la orientación básica delas cuestiones fiscales que se refieren a la hacienda: en la LeyOrgánica de la Hacienda Nacional, que en su Título VI, tratadel Presupuesto General con estas palabras.

"Artículo 164.- El Presupuesto General de Rentas yGastos de cada año económico comprende todos los gastos

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autorizados por el Congreso par~ dicho año y la enumeraciónde las contribuciones cuya recaudación se autorice y de losdemás recursos y arbitrios que constituyen ingresos del Teso­ro durante el año, con lndicación de las cantidades que proba­blemente han de ingresar 'por cada ramo. El año económicocomienza ello. de julio de cada año y termina el 30 de juniodel-año siguiente".

En la constante actualidad de estas deformacionesmonstruosas de las relaciones presupuestales con los serviciosy utilidades que la Nación ten (a derecho a que se le prestarao se les diera para sus necesidades de observancia y creacionis­mo progresista, debemos ver una de las causales de nuestraruina moral y material, ya que la Nación carece hasta de losmás elementales puntos donde poner la planta los espfritusnuevos y atentos a la que la civilización se complete en nues­tra patria, para sus ensayos decultura, de creación estable enlo social. Se sosten (a todo un sistema de pol ítica perniciosacon las áreas nacionales. Esto como práctica dctalladora delas debilidad y corrupción dcl medio. Luego en los oscuros.tráficos de las personas entre sf como medio para esconderlas ganancias y los robos que se le hada al Presupuesto, cuan­do no hab ía esa carencia de obras duraderas en nuestro pue­blo y de adelante, cuando el mismo Presupuesto atestiguabaque estaba en superavit, o por lo menos en el plano de realiza­ción de cualquier programa de gobierno bueno.

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Pero tengo miedo de esta avalancha que se nos ha ve­nido encima atraída por el empleo, el trabajo y nuestra sítua­ción económica y social. También, por el ambiente de liber­tad poi Itica. Pero esencialmente por nuestra condición depueblo rico, de gente que con el petróleo todo lo que toca esoro como en el cuento de Midas. Ya hemos pasado de aque-

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Ila parábola ceciliana de que todo lo que se pisa es oro, todolo que se toca es oro, sin ser pan cuando los tocamos con lasmanos para alongar el pensamiento de Acosta. Pueblo petro­lero, pueblo que entra en la genealogía de pueblo saudita.Ya nos han colocado en el Gotha de una ascendencia de ri­ca alcurnia. Muchos otros pueblos han encontrado en el nues­tro la tierra prometida sin pasar por el mar rojo. ¿y seremosy continuaremos siendo venezolanos arcifinios? Hombres defronteras de peligrosa psicología. ¿Cómo va a ser ese mestizolleno de las mil células diferentes que pueden dañar el ser?Que oponemos a ese tremendismo de ola que se va adentran­do en nuestro mar interior y que los vientos pueden hacernaufragar las ureas de nuestro periplo territorial. ¿Es el vene­zolano un pueblo unido, fuerte, por sabio o por disciplina,capaz de oponer al que viene sus manos curtidas de sabiduríapráctica para el trabajo y la artesanía para sus industrias? ¿Pa­ra la siembra y el recoger los frutos de una agricultura y gana­derra.en auge? Por sí propio, el venezolano está perdiendolas grandes Iincas que hacen su conformación física e intelec­tual; cuando .mas necesita tener su forma individualizada co­mo ente nacional, así tenga q~e englobar las grandes repercu­siones que se presentan a todo pueblo que pasa o está pasan­do del subdesarrollo a la vía del desarrollo. Si no tenemosuna clara conciencia de nuestro ser en su posición en el cos­mos; si no sabemos cuál es el camino de nuestro destino; sihemos truncado el proceso del desarrollo que ven íamos ha­ciendo desde los albores de la independencia; si hemos apar­tado las grandes líneas que nos sosten ían como colonia y quesirvieron para las cimbrias sostenedoras de aquel gran edificioque construyeron nuestros libertadores; la inmigración lo queva es a trastornar nuestro desarrollo espiritual así apadrinenel gran desarrollo económico del país. Se manda la gentefuera cuando tenemos gran conciencia de lo que somos y loshilos de la nacionalidad están fuertes para sostener la respon­sabilidad; si no tiempo perdido; lo absorberán culturas ex­trañas; terminarán por ocupar aquello que hemos cultivadopara que florezcan flores extrañas; si dejamos que el nacional

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no se mezcle con el que viene puesto que hemos dejado queel inmigrante tenga colegios con cursos y programas de susnaciones, listos para ir a terminar sus estudios en su patriagrande; o si no pueden ir ya se han cimentado en la mismacultura popular o histórica de sus abuelos contra lo cual sehace mella la relación anímica con el propio autóctono. Nues­tras ciudades tambalean en su proceso de transculturaciónporque vienen sufriendo el mayor peso de lo extraño-extrañoa lo que amarnos y deseamos se constituyan tierras de nuestraalfarería patria; barrios completos habitados por nacionalida­des de una sola enseña; teatros donde sólo asiste una naciona­lidad especial; telenovelas donde los principales -hombres ymujeres- en su mayoría son extraños. Periódicos donde pocose calza la pluma del nacional en contraste con la abundanciadel escrito de otras latitudes. Todo está o parece estar en ma­nos de inmigrantes. Desde la traída del periódico mañanerohasta las reparticiones o ventas de frutas y pescaderías. Pareceque estuviéramos atrapados por un gran pulpo con sus tena­zas extrañas y largas por todas las rías y caminos de nuestraconformación nacional.

Periódicos en lengua propia tienen algunas comunida­des extranjeras que dificultan la transmisión de nuestro len­guaje a la mente de padres e hijos; mantenimiento del idiomaautóctono en el medio familiar que si es bueno para que setenga dos idiomas en cada núcleo no se pormenoriza y tomaasiento el nuestro, ayudando al basamento de la cultura queservirá al país que acepta este numeroso contingente de extra­nacionales. Se van relajando los lazos de nuestra comunidaden acción centrífuga para amalgamar lo que quede cuando loscambiamentos económicos o políticos Se lleve el caudal paraotros países o para el de origen, dejando nuestro tierra sinninguna simiente, o con simiente menguada, después que seha gastado tiempo, dinero, esfuerzos, tierras dispuestas parala agricultura; después de los grandes gastos en servicios socia­les, educación, seguro social, hospitales, vías, etc., estableci­dos para el nuevo nacional y la generación familiar con la que

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contábamos para una demografía de consecuencias. Todo ello-;(' lo merece quien trabaja a la par del nacional o al serviciodel industrial o del propietario de finca. Tienen derecho a es­tos beneficios sociales quien ha dejado mundo suyo para ve­nir a arraigar a otro que le da seguridad, amor y trabajo. He­mos visto con dolor como se desprenden de sus familias enlos puertos de embarque para venir a Venezuela, los lloros ytristezas de los familiares que se vienen y los que se quedan.La saudade es tremenda cuando el emigrado piensa en su tie­rra, en su sol, en sus compañeros, en sus amores, en todo elhilo que ha tejido sus juventudes.

También los hemos visto enriquecidos -más que noso­tros mismos- con carros y familias enteras, volver a sus pa­trias y, muchas veces, hablando muy mar de nosotros. Hetestimoniado ambas situaciones. Si es doloroso el partir co­mo ellos cuando se vienen a nuestras playas -corno el Cid: losunos se separaban de los otros como la uña de la carne- tam­bién Cuesta nabajo aceptar la crítica mordaz para quienes ledieron cobijo, calor y riqueza.

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Hay veces que puede presentarse un espejismo en elpanorama histórico; es deber del hombre buscar la huella quepudo dejar lo humano; no llenarlo con simbolismos o mitos;puede imaginar algo afianzado por los antecedentes y conse­cuentes; si hubo oásis o desiertos, árboles o palmeras, o salsurtida que hoy refleja y engaña. Pero nunca hacer sentir elespejismo. Porque descubierto que sólo la imaginación me­tió su metáfora en ese molde rutilante, podríamos entoncescreer que todo lo escrito o descrito es novela, y leyenda y nohistoria. La historia debe ser seria y cierta para que produzcaciencia y enseñe. La parábola pudo hacerse por el escritorpero que los hechos posteriores atestiguen la huella delhombre.

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Yo no critico que quien escriba sobre un hombre osobre un período histórico lo haga a la medida de su puntode vista personal o cientffico, siempre que ese período o esehombre sea de la apetencia ideológica del historiador. Lo quesería malo, es que cuando se escriba una historia universal onacional, no sea clara la posición del que desarrolla un cursosobre ella, para enseñanza de la juventud.

Todo puede tratarse bajo el prismático de una ideolo­gía, porque siempre el que estudia puede confrontar todo elarsenal y saber dónde está la luz o donde está lo que a él con­sustancialmente le apetece. Debemos tener historia concebi­das bajo la forma romántica o científica; que el desarrolloesté basado en premisas intelectuales o económicas. ·EI es­tudio parcial de un tema tiene la valoración de que quien loestudia ha investigado a fondo una realidad especial; la inves­tigación es más fuerte y concreta y siempre hay novedad parael estudioso y semillero para el aprendizaje. Realizar historiasiguiendo el plan que otros han hecho, sin otra profundidad,es como habitar la misma casa, llena de duendes y de sueños.Original es el que sigue nuevos planes sobre ideilogías diversassin que se pierda la estética de la historia o el bello estilodel escritor.

Hay el pronunciamiento de los nuevos estudios sobrela historia nacional un enjambre de abejas que están llenandoun rico .panal de dulzura en la estilización, así se haga a basede una fundamentación económica, psicológica; o románticao las tres entretejidas. Por all í andan el Zamora de BritoFi­gueroa, el Casa de León o el Zaraza.

Las obras antiguas tienen el encanto de las cosasmuertas que sobreviven por lo que tienen de perennidad. Co­mo Oviedo y Baños y las escuelas de tantos estudiosdiversos,pero encaminados 'a un mismo fin y que por eso se aman; co­mo las obras de Arístides Rojas. Algún día escribiré sobre lapedagogía escolar de los estudios de Rojas, que son necesarios

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que se reediten y se pongan en manos de la juventud, comouna de las iniciaciones en el amor por la historia nuestra. Ini­ciarse en la historia, es como la iniciación en el amor. Suponeque una mujer que tiene todos los encantos para ser sugestiva,para hacer anclar el jóven velero en los encantos de la bah íaesplendorosa.

Cuando se pasan las horas enternecidas en los encan­tos de las páginas que encubren las desnudeces de la historia,cuando en las manos se va quedando el oloroso entreteni­miento que los ojos llevan al fondo de las sensaciones dondeSe oculta la diosa del amor o de la razón, entonces sentimosen todo su esplendor, como quien toca las luces de una estre­lla, las ideas que se desarrollan entre los tejidos que nos sir­vieron para nuestros tapices de amor y viene el sentimientofecundante que va llenando en esplendente luz todo nuestrovacfo interior, operándose aquello que llamaba Stcndhal en lacreación de sus novelas: la cristalización.

Pocos años hace escribimos sobre Arístides Rojas.Era un ensayo biográfico y explicativo del alma consustancla­da con el pa{s.Hoy deseamos entresacar notas sobre la peda­gogía histórica. de las leyendas y estudios de Don Arfstides.El interés que ellos tienen para empezar a grabar en nuestroespíritu juvenil el amor a la historia nuestra. Al lado de losgrandes historiadores Yancs, González, Baralt, Gil Fortoul,se necesitan en las patrias las dulces y entretenidas leyendasa lo Rojas. Cual aliado de seres geográficos los libros de Sal­gario El alma de los niños necesita más de las rutilantes es­trellas, que en las noches mienten fogatas fugaces en el ciclo,que el esplendoroso holocausto del sol en las horas tardaso del fugaz gobelino cuando se rompen las del alba.

¿Cómo era Caracas para los tiempos en donde Arísti­des escribra sus famosas leyendas y estudios históricos? Seoha el medio ambiente corno si Se hubieran alongado los fana­les coloniales alumbrando el estruendo republicano. Sólo se

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entreveían las ventanas que se iban abriendo al progreso pordonde las caras caraqueñas contemplaban como se dernol íanalgunos conventos y aparecía versallesco Jos patios y colum­nas del Capitolio o las arcadas religiosas de la Iglesia Teresianao las puntiagudas agujas sernigóticas de la nueva Universidad.

La capitalidad de una ciudad implica varias facetasque la hacen subrayar lo nacional, el no ser artifice de undestino poi ítico, económico y cultural. Hasta hace poco está­bamos en la infancia histórica de una ciudad que lleva la pré­dica o la directriz de vida nacional. Todavía no se discute a laciudad de Caracas la alcurnia de una ascendencia que de hechoo de derecho le ha dado forma.

Cuando se despereza el sol sobre las lomas caraque­ñas, y la tarde vuelve a resucitar el romance dé Venus, enton­ces la ciudad camina presurosa sobre las avenidas, yen ese iry venir, se toma el ambiente de una farándula viviente, comocornucopia que lanza su vendimia para ser recogida por eltranseunte.

Hoy vemos esta algarabía sinfónica de rostros nuevos,de otras latitudes, de idiomas extraños, de niñas y mujereshombres y ancianos, que llevan el recuerdo retratado en susrostros de campiñas, puertos o ciudades o campos de confineslejanos, pensamos en lo que será la nacionalidad en años en­trantes. Pesará el nombre y apellidos extraños sobre nuestraVenezuela: Nuestros hijos serán los "maridos o esposasde los descendientes de ellos, o el amor de nuestras hijasse al iará al amor de otros sensitivos, todo para una raza nuevaque dominará nuestro destino para pasos de creación. Sinembargo, nos angustia este dilema del nuevo tiempo; cuál se­rá el producto mestizo de esta nueva colonización. Tendre­mos acaso en el futuro, que sólo un apellido domine el ámbi­to cultural, económico o político del país como sucedió enuna ocasión que tres hermanos en el Sur del continente diri­gían los destinos superiores de la Nación, como Presidente de

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la República, Rector de la Universidad de Buenos Aires y elotro presid la el Partido Socialista de aquella Nación.

Cuando la edad haga de nuestra vida sarmentosa don­de los pájaros no vengan a picar la locura de la vendimia,aquellos injertos florecerán sus tallos, y a nuestra sombra,crecerán los nuevos árboles que sin podar todavía, abren suscampánulas de amor en collados, villas y ciudades. Creo quesi hace raigambre la fé en la inmigración; si vienen a adherirseno sólo en el esfuerzo, sino en el amor también de nuestroshabitantes, figurará muy pronto, un nuevo estilo de génesisdonde no habrá predominio ni de lo otro. Se sentirá el nuevohabitante en su propio "hábitat" y la canción de sus labiossonará con las mismas notas del abuelo, en la música, que laquejumbre de lo nuestro y de lo extraño amalgamará en unanueva poesia autóctona como el alojamiento sentimental demi Padre, el Inmigrante.

Habrá añoranza en la sinfon la de un alma que ha he­redado las corrientes encontradas de sentimientos lejanos,pero que suena en un mundo propio de consonancias.

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