Edita HOAC - Nº 153 - ABRIL 2014 - III ª Época - 0,75 ! - Suscripción anual: 6 !

Iglesia en Tánger:servir a los pobres

Trabajadoras Domésticas

Defensa de la vida en el trabajoDefensa de la vida en el trabajo

EEEE l 28 de abril se celebra el Día Mundial de la SaludLaboral en el Trabajo. Como dicen los obisposespañoles: «la situación de la salud laboral urge a

los cristianos a comprometerse activamente por un trabajosin víctimas, en defensa de la vida, colaborando según lasposibilidades de cada uno a formar, en nuestra sociedad, laconciencia de la gravedad de la situación y sus causas, yseguir apoyando la promoción del mundo del trabajo en elconocimiento de los derechos y también de las obligacionesde los trabajadores respecto a la salud laboral, para exigir surespeto y comprometerse en observar la normativa labo-ral».

En 2013 perdieron la vida en el trabajo 432 personas y unas3.300 sufrieron un accidente de gravedad. Las cifras han des-

cendido ligeramente con respecto al año anterior, pero notanto, desgraciadamente, porque haya aumentado la concien-cia sobre este grave problema y las medidas de prevención,sino porque la cantidad de gente con trabajo también esmenor.

Estas tragedias, con el sufrimiento personal y familiar queimplican, han de ser mejor conocidas también por la comuni-dad eclesial, de modo que permitan, como nos recuerdan losobispos, asumir «las responsabilidades derivadas de la defen-sa y promoción de la vida, también en el campo de la seguri-dad y salud en el trabajo». Esta gravísima realidad, es igual-mente una llamada urgente para nosotros a «ejercer la cari-dad cristiana acompañando y ayudando a las familias de losaccidentados».

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la calle

¡Tú! Coordina: Mª Dolores Medina Edita: Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC). Depósito legal: M.40919–1996. C/ ALFONSO XI, 4, 4º. 28014 MADRID. TFNO. 91 701 40 80 // publicaciones@hoac.es // www.hoac.es/publicaciones/tu

DD omingo, después demás de treinta añostrabajando en el pe-

riódico, ha progresado poco.Y es que su fe en el Obrerode Nazaret le unió al com-promiso sindical desde su ju-ventud. Y ya se sabe, la fide-lidad a los trabajadores y laintegridad no son buenasaliadas para los ascensos. Nifalta que hace. ¡Cuántoscompañeros han encontradoen él al samaritano que se de-tiene en el contratado en pre-cario, en el que sufre condi-ciones injustas de trabajo, enlos afectados por un ERE…!En su reunión de equipo, enla oración comunitaria,muestra su impotencia antelos tiempos de crisis que vivi-mos y que tanto les estánafectando. Alza su mirada alDios que lo sostiene y lo em-puja al compromiso. Unanueva negociación, unaasamblea de trabajadores,una manifestación de protes-ta…, momentos todos ellosen los que les sale al encuen-tro Cristo Obrero. La Euca-ristía de cada domingo en suparroquia continúa sin des-canso en el periódico, entresus compañeros, en el sindi-cato…, compartiendo su viday sintiendo suyos los proble-mas de todos.

Teresa Jiménez Zamorano

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con Diosen la vida obrera

SUSCRIPCIÓN ANUAL «¡TÚ!»

LL a «tarifa plana» im-plica que los empresa-rios que realicen con-

tratos indefinidos este añopagarán a la Seguridad Social,en concepto de contingenciascomunes 100 euros al mes du-rante dos años. Además, lasempresas de menos de dieztrabajadores podrán benefi-ciarse, una vez transcurridoslos primeros 24 meses, de 12meses adicionales de una re-ducción del 50% de la cuotapor dichas contingencias.

Esta reducción supondráun ahorro medio para el em-pleador de alrededor del75% de la cotización por con-tingencias comunes. «Ahora,que ya se ha empezado a crearempleo, es necesario crear em-pleo más rápidamente,y un em-pleo de calidad, así como seguirreduciendo la dualidad laboralentre los trabajadores con con-tratos indefinidos y tempora-les», explicó la ministra FátimaBáñez.

La idea suena bien, pero losdetalles parecen preocupan-tes. Puede ocurrir que se usepara sustituir empleados concierta antigüedad, con cotiza-ciones más altas, por nuevos

trabajadores indefinidos, concotizaciones más bajas. Dadoque la reforma laboral ha faci-litado el despido sin causa yabaratado el despido objetivo,una empresa puede despedir aun trabajador para luego con-tratar a otro, pero con la «ta-rifa plana». También puede

ocurrir que las empresas dejena sus trabajadores temporalesen paro para volver a contra-tarlos pasados más de 30 díascon un contrato indefinidocon cotizaciones reducidas.

Nadie duda de que este go-bierno intenta reducir las dra-máticas tasas de paro. Lo haceatendiendo, especialmente, lassugerencias de los empresa-rios, aunque por el caminoempeore la calidad del tra-bajo y la salud del propio sis-

tema de protección social. Es-taríamos más tranquilos si tu-viéramos garantía de que seva a impedir el uso fraudu-lento de la nueva medida.

No podemos quedarnos im-pasibles mientras haya víaspara explotar a las personasque necesitan un trabajo y

aprovecharse de sus circuns-tancias.Recientemente,el 27de febrero, el Papa Fran-cisco, durante su homilía enla Iglesia de Santa Marta, enla que criticaba la incoheren-cia de muchos cristianos, re-cordaba que Dios es sensibleal sufrimiento de los trabaja-dores: «Hemos escuchado loque el apóstol Santiago dice

a algunos incoherentes, quepresumían de ser cristianos,pero explotaban a sus emplea-dos, y les dijo: ‘Sepan que el sa-lario que han retenido a losque trabajaron en sus camposestá clamando, y el clamor delos cosechadores ha llegado alos oídos del Señor del uni-verso’. Si alguno escucha esto,puede pensar:‘¡Eso lo ha dichoun comunista!’. ¡No, no, lo hadicho el apóstol Santiago! Es laPalabra del Señor».

Roge Torres

"

IBAN ENTIDAD OFICINA DC Nº DE CUENTA

Cristo obrerosale

al encuentroTrabajo para todos, como Dios mandaEl gobierno ha aprobado una reducción de las cotizaciones a la Seguridad Social –la tarifaplana–, con la que, según sus voluntariosas estimaciones, se crearán 25.000 empleos estables.

¡¡EE l que coja el billete de cincuentaeuros se queda con el puesto de

trabajo! Gritó el empresario.Los aspirantes a ser contratados se es-

peraban todas las pruebas posibles, me-nos ésta; y se lanzaron a la «prueba».Una joven fue pisoteada y lesionada.Gracias a su denuncia nos hemos ente-rado de los hechos.

El empresario justifica su acción argu-mentando que trataba de fomentar lacompetitividad entre los aspirantes.

Lo primero que mueve a la tristeza y a lamisericordia es la imagen del empresariocon el billete en la mano. ¿Qué concep-ción de sí mismo tiene esta persona paraproceder de manera tan indigna? ¿Quévalor le merecen los otros seres humanospara someterlos a semejante prueba?

Respecto a los aspirantes a un puestode trabajo, hay que situarse en la vida

concreta de estas personas para conocerel drama que viven cada día. Así es posi-ble justificar su acción. Pero ello no nosexime de hacernos y hacerles preguntaspara llegar a descubrir lo que han –y he-mos– hecho de nosotros, de nuestra con-ciencia y solidaridad obreras, y de nues-tra dignidad humana. ¿Hasta dónde

vamos a llegar para conseguir un puestode trabajo precario y mal pagado?

Los trabajadores no solo padecemosdesempleo, precariedad y pobreza,también han roto y hemos roto nuestraconciencia, dignidad y solidaridad. Ylos problemas que más nos acucian notendrán respuesta mientras que no so-lucionemos estos. Los males que pade-cemos no tienen solución económica,porque la codicia humana no tiene lí-mites, solo la conciencia, dignidad y so-lidaridad pueden vencerla.

El próximo Primero de Mayo conti-nuamos conmemorando la lucha obrera.La HOAC tenemos el reto de seguirmostrando el amor al mundo obrero y lafuerza solidaria que tiene Jesucristo. Élno hubiera peleado por el billete, habríamuerto para que otro lo cogiera.

A.A. Maestre

¡DIGNIDAD!

VV amos por el buen camino. Estamos saliendo de lacrisis. Esa es la consigna del momento. Pero,¿quién está saliendo de la crisis?, ¿las pequeñas

empresas?, ¿los trabajadores precarios?, ¿los parados?, ¿laspersonas y familias que sufren la pobreza y la exclusión?…La realidad es que las desigualdades no paran de crecer enEspaña. Pero el lenguaje se manipula con mucha facilidadpara encubrir grandes mentiras.

Una de las mayores mentiras que encubren la realidad esla que nos han contado sobre ladeuda y el déficit de las cuentaspúblicas. Al dictado de los pode-res financieros, PSOE y PP per-petraron la modificación del artí-culo 135 de la Constitución: «elpago de los créditos para satisfa-cer los intereses y el capital de ladeuda pública gozarán de priori-dad absoluta». O sea: si las perso-nas no tienen empleo, no tienenprotección social, no tienen prestaciones por desempleo,ni pensiones suficientes, ni ingresos…, no tendrán priori-dad porque la tienen los dineros de quienes nos han pres-tado dinero. Esta atrocidad ha regido y rige las políticasque han provocado más paro, empobrecimiento y des-igualdad.

Porque la realidad de la deuda en España (con datos de2011) es que el 80% es privada, no pública. Casi el 60% esdeuda de las grandes empresas y bancos, el 21% es deudade familias (y de ella el 65% corresponde al 10% de las fa-milias más ricas), y solo el 19% es deuda del sector públi-co. Pero nos han contado que el problema es la deuda delas administraciones públicas. Y, a través de las ayudas alsistema financiero, han convertido deuda privada en deu-da pública.

¿Y el déficit de las cuentas públicas? Elfraude fiscal en España es, ¡cada año!, de80 ó 90.000 millones de euros. Su inmensamayoría de grandes fortunas y de grandesempresas y bancos. ¿Habría déficit fiscalsin ese fraude masivo? ¿Lo habría si tu-viéramos un sistema fiscal justo? ¿Se haresuelto este problema? No.

Sí, algunos están saliendo de la crisis. Seles han dado todas las garantías de que se-guirán enriqueciéndose a costa de los de-

más. Por eso hay cada vez más pobres y más desigualdades.Qué verdad son aquellas palabras de Jesús: «No podéis

servir a Dios y al Dinero» (Mateo 6, 24), o lo que es lo mis-mo: no podéis servir a las personas y al Dinero.

Francisco Porcar

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política en zapatillas

cultura

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«Las necesidades so-ciales son múlti-ples; en las socie-

dades musulmanas el conceptode bienestar social no se con-templa de la misma forma queentendemos en las sociedadesoccidentales. Aquí tiene mu-cha relevancia la limosna. Des-de la Iglesia, hemos puesto elacento en las poblaciones másvulnerables: mujeres, niños yniñas», explica Ramona Telle-chea, trabajadora social quecoordina la delegación de Cá-ritas en Tánger, ciudad a la que

llegó hace 14 años, tras pasarcasi 30 en Suiza.

En la actualidad, Cáritasmantiene, en colaboracióncon algunas congregacionesreligiosas y en algunos casosa través de acuerdos con laadministración marroquí,con la que existe «una rela-ción de respeto mutuo, reco-nocimiento y a veces, hastaadmiración», un proyecto enbeneficio de la infancia ypromoción de la mujer; uncentro de educación especialde menores con discapacida-

A Santiago Agrelo, al frente de la diócesis de Tánger, le han llamado «elarzobispo de los inmigrantes». Sin embargo, el compromiso de la comu-nidad católica en defensa de los derechos humanos y la promoción de losmás débiles va mucho más allá de la denuncia pública que tanta repercu-sión levanta. Es verdadera Iglesia entre los pobres.

la ventana del mes

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La Iglesia en Tánger, iglesia ent

Al frente de la diócesis de Tánger, unade las dos que la Iglesia tiene en Ma-rruecos –la otra es la de Rabat–, se en-cuentra desde hace siete años, el fran-ciscano de 71 años, Santiago Agrelo.Su voz se ha escuchado con fuerza araíz de la muerte de 15 inmigrantesafricanos cuando intentaban llegar aCeuta.

–¿A qué se dedica la Iglesia católicaen particular en Tánger y en general enMarruecos?

–Somos una pequeña comunidadeclesial, multirracial, multicultural, a la

que da unidad la fe en Cristo, el Espí-ritu de Cristo, la caridad que es Dios.La mayor parte de los miembros deesa comunidad están aquí por motivosde trabajo o de estudio, alguno pormotivos penales, otros han nacidoaquí, aunque, por ser cristianos, nopuedan ser marroquíes. Y hay ungrupo, que ha sido numeroso en tiem-pos pasados y que continúa siendo sig-nificativo, constituido por los que hanvenido a Marruecos como misioneros.De ellos puedo decir que nos dedica-mos a ser Iglesia entre musulmanes, y

creo que también diría con verdad quenos dedicamos a ser Iglesia entre lospobres. Y, por ser Iglesia, se nos en-cuentra siervos de los pequeños: disca-pacitados profundos, niños con sín-drome de Down, sordomudos, niños yniñas en situación de riesgo de exclu-sión social, analfabetos, inmigrantes.Un capítulo muy importante de las ac-tividades de esta Iglesia ha sido siem-pre la promoción de la mujer.

–¿Qué hay de cierto en la existenciade «mafias criminales» que facilitan laentrada ilegal de inmigrantes?

Santiago Agrelo, arzobispo de Tánger

«Toda política, también la de fronteras, debería respetarlos derechos de las personas»

des mentales; otro centro deniños y niñas con deficienciasauditivas; y otro de apoyo es-colar que intenta prevenirque los menores acaben en lacalle.

Para esta navarra, el crite-rio de actuación de Cáritas es«ser levadura en la masa», loque se traduce en que tratande «poner en el centro el su-jeto» a través de programaseducativos personalizados yel acompañamiento, «refor-zando las potencialidadesque hay en cada uno y descu-briendo conjuntamente quecada uno somos protagonis-tas de nuestra historia».

La carmelita vedruna, InmaGala, coordina la DelegaciónDiocesana de Migraciones,desde hace tres años. Llegó aMarruecos en 2009, despuésde pasar por la AsociaciónPro Derechos Humanos deAndalucía. Además del área

pastoral, dondese atienden lasnecesidades espi-rituales de los ex-tranjeros cristia-nos –que sonminoría–, y el depromoción de losderechos funda-mentales, su dele-gación, junto conCáritas, desarro-lla una importan-te labor social.

Tanto en las zonas fronteri-zas de Ceuta y Melilla, dondese ofrece asistencia sanitariapreferentemente, como enTánger, donde desde hacedos años, permanece abiertoun centro de atención a inmi-grantes, financiado por laUnión Europea y CáritasMarruecos.

Para la responsable de mi-graciones, el endurecimientode las políticas migratorias

provoca «dolor y desespe-ranza, sueños rotos y vidasatrapadas... Las personas queemprenden su proyecto mi-gratorio con ilusión, con sue-ños, saben que encontrarándificultades, pero nunca sepueden imaginar lo cerca queestá la muerte, la facilidadcon que se vuelven invisiblesy no cuentan para nadie».

El relato bíblico del Éxodo–«bien vista tengo la aflicciónde mi pueblo en Egipto, y he

escuchado su clamor en pre-sencia de sus opresores; puesya conozco sus sufrimien-tos»– es un acicate, en opi-nión de esta religiosa, paraque los ciudadanos del mun-do próspero entiendan que«el inmigrante no es un pro-blema, un peligro del que nostenemos que proteger. Esuna persona y como tal tieneque ser respetada y cuidada».

José Luis Palacios

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tre los pobres

–Las mafias no las crean los pobres,sino el poder. Nadie se pone en manosde una mafia si puede estar en manosde una autoridad legítima. Ningunode nosotros acudiría a un usurero si lajusticia nos diese lo que nos corres-ponde por derecho o lo que necesita-

mos por circunstancias extra-ordinarias de la vida. Las ma-fias las crea el poder cuando, alos pequeños, a los pobres, losdeja desprotegidos en el ejerci-cio de sus derechos, en la sole-dad de sus problemas, en la an-gustia de sus vidas. Si el podercierra las fronteras, nacerá unamafia que se ofrecerá a abrir-las. Resulta repugnante que elpoder y sus voceros presentena los emigrantes como víctimasde las mafias: mucho antes deserlo de ellas, lo han sido y loson del poder.

–¿Como debería ser la política mi-gratoria y de fronteras desde su óp-tica?

–Toda política, también la de fronte-ras, debería respetar escrupulosa-mente los derechos inalienables de las

personas, esos derechos con los quenacemos, y que ninguna autoridad deeste mundo nos podría dar ni nospuede quitar. Las políticas deberíanhacer innecesaria la emigración; perosi no consiguen eso, han de hacer almenos que todos respeten el derechoa emigrar. Las opciones políticas se-rían muy diferentes si, en vez de res-ponder a la pregunta: ¿cómo hacerimpermeables las fronteras?, respon-diesen a la pregunta: ¿qué podemoshacer para que los emigrantes seabran camino hacia el futuro? Mien-tras no hagamos la pregunta ade-cuada, no daremos con la políticajusta. Mientras ignoren al hombre ysu sufrimiento, las opciones políticasserán vejatorias, inicuas, y necesitaránla envoltura del lenguaje para que losciudadanos comulguemos con vallas ycuchillas, con violencias y muertes.

–¿Cómo son sus condicionesde trabajo en la actualidad?

–Me levanto a las 7:00 y meacuesto a las 22:00 horas dela noche. Solo tengo hora ymedia de descanso al día.Los sábados trabajo hasta elmedio día y los domingos li-bro de 10:00 a 22:00 horas.Cobro unos 800 euros al mesy estoy dada de alta en la Se-guridad Social.

–¿Qué han supuesto las últi-mas modificaciones legislati-vas en el sector de las emplea-das de hogar que entraron envigor en abril de 2013?

–El Estado se ha quitado laresponsabilidad de encima yha convertido las tareas delos cuidados en un asuntomercantil entre quien con-trata y la trabajadora del ho-gar. Lo único que persigue esaumentar la recaudación a laSeguridad Social y traspasarla responsabilidad jurídica decotizar a las trabajadoras.Nos mantienen en la abso-luta desigualdad con res-pecto al resto de la poblacióntrabajadora.

–¿Qué supondría que Es-paña ratificara y cumpliera elConvenio 189 de la Organi-zación Internacional del Tra-bajo sobre las condiciones delsector del trabajo doméstico?

–Significaría la protección

efectiva ante los abu-sos e incluso la violen-cia, contar con mediospara defender el cum-plimiento de las con-diciones de trabajopactadas por escrito,el fin de los descuen-tos abusivos por alo-jamiento y manuten-ción, la mejora de lasprestaciones de la Se-guridad Social, el ac-ceso a las medidas deprevención de riesgosen el trabajo y acabarcon las agencias decolocación que fun-cionan sin licencia ysin supervisión de lainspección de trabajo.

–¿Cómo se han vistoafectadas las trabaja-doras de este sector porla crisis y por los cam-bios en las normas?

–Con la crisis, mu-chas familias han aprove-chado para bajar los salarios.En algunos casos, quitan va-caciones a las trabajadorasinmigrantes a cambio de pa-garles la Seguridad Social, alsaber que nos hace falta coti-zar a las inmigrantes para re-novar la tarjeta de residen-cia. Estamos también menosprotegidas, menos respalda-das y menos reconocidas.

–El llamado Grupo Turínintegra a entidades que estánpresionando al gobierno paraque firme el Convenio 189...¿Se está avanzando en esteobjetivo?

–Se está fortaleciendo el te-jido social que apoya esta rei-vindicación en España, enGranada, Bilbao, Barcelona...y en otros países, pero necesi-tamos el apoyo de más colec-

tivos. Necesitamos que tam-bién los hombres tomen con-ciencia. Hay que tener encuenta que el asunto de loscuidados es de todos, no solode las mujeres, ni de las tra-bajadoras del hogar. En la ac-tualidad somos las inmigran-tes las que cargamos con elpeso de esta responsabilidad.

José Luis Palacios

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¿quién es?

Mariela Loraisa, trabajadora del hogar:

Mariela Loraisa, nacida en Colombia, de 54 años, lleva siete en España. Trabaja como in-terna cuidando de un anciano y pertenece al colectivo «Territorio Doméstico» de Madrid, unade las entidades que en España abanderan la presión para que el gobierno de España firmeel Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo sobre las empleadas del hogar.

«Estamos menos protegidasy reconocidas que el resto

de trabajadores»

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LL eo lo siguiente: «En torno a los sala-rios casi hay unanimidad: caen. Has-ta aquí las certezas. ¿Cuánto? De-

pende de la estadística a la que se recurra». Seve que cada uno, según sus intereses, dice quebajan más o menos. Pero llega el Banco de Es-paña y afirma en febrero que los datos cono-cidos se quedan cortos y que la devaluación obajada salarial es mayor de lo observado enlas estadísticas. Se dice que la duplica. La caí-da de sueldos ha sido del 2%, en vez del 1%.

Pero hay que tener en cuenta que la crisisse ha cebado en los trabajadores normales,no en los altos trabajos que han subido en elsueldo. Es decir, la bajada de sueldo la notanlos trabajadores menos pagados: jóvenes, em-pleados sin formación, inmigrantes, tempora-les… Por tanto, en éstos el salario ha bajadomás del 2%. Vamos hacia un aumento tre-mendo de diferencias salariales.

En fin, se nos dice que esto tiene que pasarpara recuperar la competitividad perdida yasí salir de la crisis. Los que peor están, sonlos que tienen que colaborar más para salvar-nos todos. ¡Qué cosas hay que ver! Y se quie-

re más: hasta un banco afirma que una rebajadel 7% de los sueldos produciría un aumentode la economía del 8,3% y una creación delempleo del 10,4%. Una mejora, ¿para quién?

La enseñanza social de la Iglesia nos muestraque el salario es hoy el medio normal de la in-mensa mayoría de las personas y de las fami-lias para poder acceder a los bienes y llevaruna vida digna. Por eso es un tema muy im-portante. Es una clave para medir y hacer rea-lidad la justicia social en las relaciones trabaja-dor-empresario.

Es verdad que para determinar la cuantía delsalario hay que tener varios criterios como la si-tuación de la empresa y el bien común de la so-ciedad, que exigen en tiempos de crisis la cola-boración y sacrificio de todos y sobre todo delos que mejor pueden.Y el criterio principal sonlas necesidades del trabajador y de sus familias.

¿Cómo sabemos que un sistema socio-eco-nómico es justo? La verificación-clave de sujusticia es ver cómo se paga el salario (Enc.«Laboren Exercens» 19).

¿Vamos hacia atrás?Gregorio Burgos

La mirada justa

¿Los salarios caen? Menudo golpe

CC uando una actividad vital para el serhumano, como es el trabajo, se adulte-ra entonces deja de ser principio de

vida para convertirse en camino de deshumani-zación. Eso ocurre cuando la persona es trata-da como moneda de cambio, cuando se adoraal dios dinero y la codicia impregna los plieguesde la vida social. Nos hacen ver que es normalque en el altar del crecimiento económico y dela competitividad se sacrifique la vida y el futu-ro de las familias trabajadoras. Con plegariasrecurrentes los gurús del neoliberalismo piden,para salir de la crisis y luchar contra el desem-pleo, más reformas laborales, más flexibilidad,menos salarios… Es como si quisieran apagarel incendio de un bosque cortando los árboles.Cuando esto ocurre vivimos una terrible para-doja: si no trabajas no puedes vivir y si trabajasentregas tu vida al mercado donde lentamentetambién la vas perdiendo. ¿No será que tendre-mos que cambiar la manera de organizar lavida económica y social y de concebir el ser hu-mano y el trabajo?

Cristina López

El paro registrado en lasoficinas del Instituto

Nacional de Empleo (INEM)disminuyó en febrero pasadoen casi 2.000 personas conrespecto al mes anterior.

El número total de des-empleados se quedó en

4.812.486. Es la primera vez,desde que empezó la crisisen 2008, que se reduce elparo en un mes de febrero.

Lo malo es que el em-pleo creado cada vez es

más precario. Crecen loscontratos temporales (aho-ra son casi el 24%), con jor-nada reducida o discontinua(son ya el 43% de los nue-vos contratos) y el trabajoautónomo (44.000 de las61.000 afiliaciones a la Se-guridad Social del mes defebrero se deben a esta mo-dalidad).

Algunos expertos creenque tendremos que

convivir durante todavíamucho tiempo con una tasade paro cercana al 25% dela población en edad de tra-bajar, mientras que la tem-poralidad afectará a unacuarta parte de los trabaja-dores.

Parece que la única solu-ción que se ofrece a los

trabajadores es la precarie-dad. A costa del bienestar yel futuro de tantas familias,expuestas a la exclusión so-cial.

¿Sabías que...?DESDE EL OTRO LADO

El trabajo es para la vida

evangelioen la calle

En la Unión Europea hay 124,5 millones de personas, el24,8% de la población, en situación de pobreza. Por eso, laRed Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social(EAPN), que agrupa a 29 redes nacionales y 18 ONGs, hapuesto en marcha una campaña para pedir a los candidatos ycandidatas al Parlamento Europeo que se tomen en serio lalucha contra esta lacra social. EAPN pide a los ciudadanosque a la hora de decidir su voto depositen su confianza en lasformaciones que hayan expresado su compromiso con el com-bate contra la pobreza y la exclusión.

Así va el mundo

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2ª Edición

NOVEDAD

EE n el Evangelio aparece muchas veces Jesús deNazaret conversando con la gente. Entre estasconversaciones la más conocida y completa

puede que sea la que narra el Evangelio de Juan 4, 5-42. Los dos conversadores son Cristo y una samaritana.El lugar en donde se realiza: los alrededores del pozode Jacob.

Recordemos: Jesús pide agua a aquella buena mujer.«Dame de beber», le dice. La samaritana se extraña deaquella petición y, a propósito del agua, realizan unaconversación que va desde el agua de beber hasta otranueva agua que le ofrece Jesús «que se convertirá en suinterior en un manantial que salta hasta la vida eterna»y entonces la mujer le pide: «dame esa agua».

La conversación no termina aquí sino que el Maestrole sigue hablando de la forma de encontrarse con Diosen la búsqueda de la verdad de tal manera que ella,entusiasmada, se convierte en discípula y anunciadorade Cristo a sus paisanos.

Merece la pena leer (una vez más) este capítulo. Tie-ne una inmensa riqueza.Yo me fijo en la conversación.Sin duda, es un modelo para las conversaciones con losprójimos en los distintos pozos de Jacob de nuestroscaminos.

En todas nuestras conversaciones podemos pasar delo más común y cotidiano a aspectos que nos superan,sobrepasan, atormentan o nos dan alas. Así lo hizonuestro profeta: desde la cotidianidad del pozo y delagua a los problemas y esperanzas más profundos, des-de lo mundano hasta lo eterno.

Se puede empezar hablando del fútbol, del tiempo,de la última noticia del barrio para continuar conver-sando de lo mal que está la vida de los trabajadores, decómo podía ser de otra manera, de la necesidad quetenemos los unos de los otros, del misterio que encierrala existencia humana, de la dignidad de la persona, delDios de la liberación…

Eso sí, en toda conversación hay que huir de dosextremos: sermonear y sestear.

La conversación de Cristo con la samaritana siempreserá un ejemplo de buena e interesante conversación.

Antonio Hernández-Carrillo

Una conversacióninteresante

Fé de erratas: En el número 152 del ¡Tú!, en portada, la fecha que aparecía era«MARZO 2013» donde debía poner «MARZO 2014»