La fe es la fuente de la verdadera alegría

Te invitamos a la Misa y al rezo del

Santo Rosario el PRIMER SÁBADO de cada mes,

en la Parroquia Cristo Redentor, Col. Escalón.

4 de Septiembre 2 de Octubre 6 de Noviembre 4 de Diciembre

.

María se caracterizó por ese pro-

fundo amor y respeto hacia el

designio de Dios; lo acogió con

un corazón abierto, entusiasma-

do y agradecido, porque lo aco-

gió en la fe, por la fe creyó en Dios,

por la fe, aceptó el designio miste-

rioso de ser la Madre de Dios, por

la fe guardó silencio junto a su

Hijo en esos 30 años de oculta-

miento en Nazaret, por la fe lo

acompañó en la distancia, mien-

tras él predicaba y sanaba a los

enfermos, por la fe lo acompañó en

el martirio de la Cruz, una de las

virtudes que más sobresalieron en

María fue precisamente su espíritu

sobrenatural, su espíritu de fe.

La fe regala, a quienes la viven, la

clave y el sentido para comprender

desde Dios lo que es incomprensi-

ble para los ojos humanos, tan ce-

rrados a lo sobrenatural y a la pre-

sencia de Dios en el mundo y en

los sucesos de cada día. Por ello, un

cristiano basado en la fe vive con gozo

los diversos momentos, alegres y dolo-

rosos, en la salud y en la enfermedad,

en el triunfo como en el fracaso, aun-

que le sangre el corazón; obedece con

prontitud, sirve con alegría a sus her-

manos necesitados, aunque interior-

mente encuentre oposición.

María nos da ejemplo de verdadera

alegría, porque lo único que buscó es

hacer la Voluntad de Dios, abrirle su

corazón y realizar sus designios, sin

ningún tipo de apetencia personal. Ella

vivió feliz en su fe, porque siempre pu-

so su vida en las manos de Dios.

Con mi bendición sacerdotal,

Dennis Doren , L.C.

NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE

PEREGRINANDO EN EL SALVADOR

AGOSTO 2010 Edición 12

Querida Lourdes: Este día 3 de Agosto, fuí a dejar las peticiones que pusieron al pié de la Imagen de la VIRGEN DE GUADALUPE, en el Centro de Señoras en San Salvador, durante el mes de Mayo. Tengan la plena confianza, que Ella ha escuchado sus oraciones. Cuando llegué a dejarlas a la Basílica de Guadalupe en el D.F., estaba la Misa de la Peregrinación de la Prelatura de Quintana Roo, con Monseñor Pedro Pablo Elizondo, y los Padres Legiona-rios... fué una linda sorpresa y una Misa hermosa, todo quedó en Familia. Tomé unas fotos, para que sean un fiel testimonio de ese gran mo-mento. Raquel Guerra, Coordinadora de VPF

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REGNUM CHRISTI

TEMA: CORAZÓN DE MARÍA, FIEL REFLEJO DEL

CORAZÓN DE DIOS

Desarrollado por el PADRE VÍCTOR JOSÉ ALVARADO, quien se incorporó al Mov. Regnum Christi el pasado mes de Diciembre 2009 en la Ciudad de Roma. Lo expuso de una manera excelente y nos llevó a descubrir la grandeza que hay en el Corazón nuestra Madre. Nadie como Ella para amarnos; está siempre presente en toda nuestra vida, auxiliándonos, consolándonos y conduciéndonos a su Hijo Jesús y que debemos de tener la plena confianza que siempre nos escucha y que somos sus hijos amados. Los asistentes compartieron unos preciosos e impresionantes testimonios de conversión y sanación. Después de la Santa Misa que fue celebrada por el Padre Víctor, hubo bendición de Retablos. Definitivamente la Santísima Virgen se encontró gozosa de vernos entusiasmados, formándonos en su Amor para irlo a compartir y a testificar. Muchas gracias al Padre Víctor por habernos dedica-do parte de su valioso tiempo para nuestra formación y a todo el equipo de VPF por su colaboración, cum-pliendo cada una con la responsabilidad que le había sido encomendada

Les compartimos la "Jornada de Responsables

de Retablos de VPF" que se desarrolló el pasa-

do 3 de julio de 2010

La Legión de Cristo y el Movimiento RC acogen al Delegado Pontificio, Mons. Velasio De Paolis, C.S, que su Santidad Benedicto XVI ha designado para apo-yar a la congregación en estos momentos; los miembros de la Legión han recibido con respeto y agradecimiento esta nueva muestra de la cercanía del Santo Padre para ayudar en su discernimiento.

Su servidor en Cristo, Dennis Doren, L.C. Apostolado Virgen Peregrina de la Familia

Edición 12 Página 3

PAGINA VOCACIONAL

Mons. Velasio De Paolis, C.S. preside la celebración eucarística con el director general y los

miembros del consejo de la Legión de Cristo. Les asisten dos de los nuevos diáconos (atrás).

«La Iglesia que, en un primer momento, les ha ayudado al en-viar sus Visitadores para hacer un primer discernimiento, la

misma Iglesia , en la misma per-sona del Santo Padre, hoy les

envía su Delegado».

¡Venga tu Reino!

Deseamos expresar al H. Aldo Bejarano, L.C., nuestra gratitud por todo el apoyo que nos brindó durante las VISITAS APÓSTOLICAS DE VPF organizadas por el Padre Dennis Doren, LC., a las distintas residencias; así como también por su participación a los eventos, tomando parte muy activa para el de-sarrollo de los mismos.

Sus exposiciones sobre el MILAGRO DE LA VIRGEN DE GUADALUPE, y CÓMO SE INICIÓ EL REZO DEL SANTO ROSARIO, permitió que muchas más personas se formen en la devoción Mariana y amen cada día más a nuestra Madre Santísima.

Le acompañamos con mucho cariño con

nuestras oraciones para que siga adelante en su formación sacerdotal.

EQUIPO DE VIRGEN PEREGRINA DE LA FAMILIA

EDITORES Padre Dennis Doren, L.C.

Lourdes Ávila de Rodriguez e-mail: lourdesr33@gmail.com Martita Urrutia de Rodriguez e-mail: nemaurrutia@yahoo.com

NUESTRA SEÑORA DE

GUADALUPE

PEREGRINANDO EN E

L SALVADOR

NUESTRA SEÑORA DEL

CARMEN

El amor a la Virgen y el escapulario del Carmen. El culto y la devoción a la Virgen del Carmen se remonta a los orígenes de la Orden carmelitana, cuya tradición más antigua la relaciona con aquella pequeña nube como la palma de la mano de un hombre, que subía desde el mar (1 Rey 18, 44) y que se divi-saba desde la cumbre del Monte Carmelo, mientras el profeta Elías suplicaba al Señor que pusiese fin a una larga sequía. La nu-be cubrió rápidamente el cielo y trajo lluvia abundante a la tierra sedienta durante tanto tiempo. En esta nube cargada de bienes se ha visto una figura de la Virgen María quien, dando el Salvador al mundo, fue portadora del agua vivificante de la que estaba sedienta toda la humanidad. Ella nos trae continuamente bienes incontables. El 16 de julio de 1251 se apareció la Virgen Santísima a San Simón Stock, General de la Orden de los Carmelitas, y prometió unas gracias y bendiciones especiales para aquellos que llevaran el escapulario. Esta devoción «ha hecho correr sobre el mundo un

río caudaloso de gracias espirituales y temporales». La Iglesia la ha aprobado repetidamente con numerosos privilegios espiritua-les. Durante siglos, los cristianos se han acogido a esa protección de Nuestra Señora. «Lleva sobre tu pecho el santo escapulario

del Carmen.

La Virgen prometió, a quienes viviesen y muriesen con el escapulario o la medalla bendecida con el Sagrado Corazón y la Virgen del Carmen, que hace sus veces la gracia para obtener la perseverancia final es decir, una ayuda particular para que, quienes no estén en gracia, se arrepientan en los últimos momentos de su vida. A esta promesa hay que añadir el llamado privilegio sabati-

no, que consiste en la liberación del Purgatorio al sábado siguiente a la muerte y otras muchas gracias e indulgencias. Verdaderamente, «María, con su amor materno, se cuida de los hermanos de su Hijo que todavía peregrinan y se hallan en peli-

gros y en ansiedad hasta que sean conducidos a la patria bienaventurada. Especial ayuda y gracias de Nuestra Madre en el momento de la muerte. Un día nos llegará la hora de nuestro encuentro definitivo con el Señor. Entonces necesitaremos más que nunca su protección y ayuda. La devoción a la Virgen del Carmen y a su santo escapulario es prenda de esperanza en el Cielo, pues la Virgen Santísima prolonga su maternal protección más allá de la muerte. Esta prerrogativa nos llena de consuelo. «María nos guía hacia ese futuro

eterno; nos lo hace ansiar y descubrir; nos da su esperanza, su certeza, su deseo. Animados por tan esplendorosa realidad, con ale-

gría indecible, nuestra humilde y fatigosa peregrinación terrena, iluminada por María, se transforma en camino seguro iter para

tutum hacia el Paraíso». Allí, con la gracia divina, la veremos a Ella. En su visita a Santiago de Compostela, el Papa Juan Pablo II deseaba a todos: «Que la Virgen del Carmen... os acompañe siempre,

Sea Ella la Estrella que os guíe, la que nunca desaparezca de vuestro horizonte. La que os conduzca a Dios, al puerto seguro» . De su mano llegaremos a presencia de su Hijo. Y si nos quedara algo por purificar, Ella adelantará el momento en que, limpios del todo, podamos ver a Dios. Antiguamente se representaba a la Virgen del Carmen con un grupo a sus pies formado por almas en llamas en el Purgatorio, para señalar su especial intercesión en este lugar de purificación (Cfr. «La Virgen es buena para aquellos que están en el Purgato-

rio, porque por Ella obtienen alivio», predicaba con frecuencia San Vicente Ferrer. Su amor nos ayudará a purificarnos en esta vida para estar con su Hijo inmediatamente después de la muerte. El escapulario, símbolo del vestido de bodas. El Papa Juan Pablo II, hablando a jóvenes en una parroquia romana dedicada a la Virgen del Carmen, recordaba en confidencia el especial socorro y amparo que recibió de su devoción a la Virgen del Carmen. «Debo deciros les comentaba que en mi edad juve-

nil, cuando era como vosotros, Ella me ayudó. No podría decir en qué medida, pero creo que en una medida inmensa. Me ayudó a

encontrar la gracia propia de mi edad, de mi vocación». Y añadía: la misión de la Virgen, la que se halla prefigurada y «toma ini-

cio en el Monte Carmelo, en Tierra Santa, está ligada a un vestido. Este vestido se llama santo escapulario. Yo debo mucho, en mis

años jóvenes, a este, su escapulario carmelitano. Que la madre sea siempre solícita, se preocupe de los vestidos de sus hijos, de que

vayan bien vestidos, es algo hermoso». Pero cuando estos vestidos se rompen, «la madre trata de reparar los vestidos de sus hijos».

«La Virgen del Carmen, Madre del santo escapulario, nos habla de este cuidado materno, de esta preocupación suya para vestir-

nos. Vestirnos en sentido espiritual. Vestirnos con la gracia de Dios, y ayudarnos a mantener siempre blanco este vestido». «Sed

también vosotros solícitos colaborando con la Madre buena, que se preocupa de vuestros vestidos, y especialmente del vestido de la

gracia, que santifica el alma de sus hijos e hijas» (Ese vestido con el que un día nos presentaremos al banquete de bodas. El escapulario del Carmen Puede ser una ayuda grande para querer más a Nuestra Madre del Cielo, un especial recordatorio de que le estamos dedicados y de que en un momento de apuro, en medio de una tentación, contamos con su ayuda. El tenerla tan cerca nos permitirá ser fuertes. Con palabras del Gradual para la fiesta de hoy, pedimos a Nuestra Señora: Recordare Virgo Mater... ut loquaris pro nobis bona. «Acuérdate, Virgen Madre de Dios, cuando estés en la presencia del Señor, de decirle cosas buenas de nosotros»; también en esos días en que no hayamos sido tan fieles como Dios espera de sus hijos.