las criticas de habermas a foucault y sloterdijk en torno al discurso filosofico de la modernidad y...

Upload: gsv-canarias

Post on 14-Apr-2018

213 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    1/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    LLAASS CCRRTTIICCAASS DDEE HHAABBEERRMMAASS AA FFOOUUCCAAUULLTT YY SSLLOOTTEERRDDIIJJKK;; EENN TTOORRNNOOAALL DDIISSCCUURRSSOO FFIILLOOSSFFIICCOO DDEE LLAA MMOODDEERRNNIIDDAADD YY LLAA TTEEOORRAACCOONNSSEENNSSUUAALL..

    AAddooll ffoo VVssqquueezz RRooccccaaPontificia Universidad Catlica de Valparaso Universidad Complutense de Madrid

    Resumen.- En este trabajo se revisar la crtica desarrollada por Habermas a Foucault, expuesta en los captulos IX y X de El discursofilosfico de la modernidad. Para luego cotejarlas con las ideas del propio Foucault. Este trabajo, permitir retomar y examinar cuestionesrelativas a la relacin entre racionalidad y poder, intentando clarificar qu entra en juego en esta relacin? Se indaga finalmente losalcances y validez de las criticas de Habermas a las tesis presentadas por Sloterdijk en su conferencia Normas para el Parque humano ascomo las polmicas veladas que dicha crtica suscit.

    Palabras Claves.- Discurso, modernidad, Habermas, poder, Foucault, racionalidad, hermenutica, biopoltica, Sloterdijk, teora de laaccin comunicativa.

    Abs tract.- This paper will review the critique developed by Habermas to Foucault, as described in Chapters IX and X of the philosophicaldiscourse of modernity. Then compare it with Foucault's ideas. This work will resume and discuss issues concerning the relationshipbetween rationality and power, trying to clarify what comes into play in this relationship? It finally explores the scope and validity of thecriticisms of Habermas to the thesis presented by Sloterdijk in his talk entitled "Standards for the Human Park" and the controversy thatveiled criticism raised.

    Keywords.-Speech, modernity, Habermas, power, Foucault, rationality, hermeneutics, biopolitics, Sloterdijk, theory of communicativeaction.

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    2/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    I.- Habermas y Foucault; la tensin entre el consenso y el confli cto.

    1.

    El debate que atae a la cuestin de los fundamentos de la racionalidad y la moral particularmente cuando lo

    racional confronta sus antiguos ideales con las formas ms recientes de sus poderes encuentra en JrgenHabermas uno de sus polemistas ms representativos.

    Habermas es el filsofo contemporneo que ha formulado estas cuestiones con mayor rigor y mtodo. Para elloha elaborado una obra ya considerable, donde se cuenta, una crtica sistemtica de las posiciones de Foucault(y de sus supuestos genealgico-nietzscheanos).

    Las obras de Habermas y de Michel Foucault dan cuenta de una tensin esencial de la modernidad, la tensinentre el consenso y el conflicto. Habermas es el filsofo de la Moralitt (moralidad) basada en el consenso;Foucault es el filsofo de la wirkliche Historie (historia verdadera, la historia real y efectiva) narrada en trminosde conflicto y poder.

    En este trabajo revisaremos la crtica desarrollada por Habermas a Foucault, expuesta en los captulos IX y Xde El discurso filosfico de la modernidad

    1. Para luego cotejarlas con las ideas del propio Foucault. Este

    trabajo, permitir retomar y examinar cuestiones relativas a la relacin entre racionalidad y poder, intentandoclarificar qu entra en juego en esta relacin?

    En la referida obra, Habermas critica a Foucault al trmino de una lnea de personalidades entre los que secuenta Hegel, Nietzsche, Horkheimer, Adorno, Heidegger, Derrida y Bataille. Y esto no deja de tenersignificacin si se tiene en cuenta que el proyecto habermasiano se presenta explcitamente como unagenealoga de la filosofa moderna y por lo tanto, en lo relativo a Foucault, como la genealoga de unagenealoga.

    Habermas sostiene que la teora inevitablemente est traspasada y en algn sentido, dirigida por los intereses,creencias y deseos del investigador, incluso en las as llamadas ciencias 'duras'. A partir de all en El DiscursoFilosfico de la Modernidad

    2, desarrolla una crtica del pensamiento heideggeriano y en un contexto msamplio, expone la relacin entre el pensamiento filosfico de la modernidad y el lugar que corresponde a

    autores como Heidegger y Foucault al hacer suyo el 'mesianismo dionisiaco de Nietzsche'.

    La objecin de Habermas a Foucault apunta a una supuesta ambigedad sistemtica o si se quiere enlaceparadjico entre el enfoque emprico y hasta positivista de Foucault, por un lado, y la pretensin crtica ymetaterica, por otro lado. Esta ambigedad sistemtica parece desplegarse en toda la obra de Foucault,pero tiene su fuente en el concepto mismo de poder que gua ms especialmente las indagaciones de Foucaulten sus ltimos aos. En esta ambigedad sistemtica se deja entrever ms que un simple gusto literario porel doble juego la asignacin de un desconcertante doble papel al concepto de poder, una funcin deestructura y otra como instancia de regulacin. Habermas sealar los rastros de esta ambigedad, sin llegar apretender aun cuando tal vez tenga la tentacin de pensarlo que la ambigedad en s es algo que debesuprimirse; para luego adems intentar comprender la sistemtica de esta ambigedad en las vertientes en quese esta se da.

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    1HABERMAS, Jrgen, El discurso filosfico de la modernidad, Taurus, Madrid, 1991.

    2HABERMAS, Jrgen, El discurso filosfico de la modernidad, Versin castellana de Manuel Jimnez Redondo,Taurus, Madrid, 1991.

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    3/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    2.

    Examinemos primero la vertiente emprica. En el caso de Foucault se puede discutir hasta qu punto est bienfundado ese trmino. Habermas se atiene a este punto aunque tambin habla de una historiografa descriptiva,lo cual parece ms acertado para calificar indagaciones que se niegan a adaptarse a los marcos disciplinarios

    de la filosofa y de la historia y que se deslizan dentro de sus intersticios, como dice Foucault al final de Laarqueologa del saber.3 Muchos se asombraron en su momento de que un filsofo consultara los archivos delas prisiones, estudiara los registros de los asilos, examinar manuales de gramtica de los siglos XVII y XVIII,breviarios, manuales de teologa moral, etc., en lugar de volver a leer las Meditaciones metafsicas o la Crticade la razn pura. Habr que recordar, sobre este particular, que Foucault se sita en la tradicin francesa deuna filosofa crtica, al modo de su maestro Canguilhem, que sustituye por la paciente investigacin documental(sobre todo en el campo de la historia) las certezas demasiado rpidamente adquiridas de la metafsicatradicional?

    Aqu Habermas ms all del indiscutible inters literario y documental de obras como Historia de la locura4yVigilar y castigar, sospecha de la inocencia del concepto de poder, que aunque descriptivo y funcional a untipo de anlisis emprico de las tcnicas de poder, con todo, da pie a una particular pretensin de objetividad.De modo que, pese a las consideraciones metodolgicas de su arqueologa, en lugar del alcance modesto -propio de una indagacin de este tipo, Foucault parece procurarse -en ltimo termino- una fundamentacin

    (dentro del dominio de las ciencias humanas) que aspira a una objetividad equivalente a la que se presenta enlas ciencias exactas.

    La propuesta foucaultiana es la de ver las cesuras y los problemas de la constitucin de las ciencias humanas ydevelar su racionalidad instrumental. Es decir, la aparicin de la ciencia como propuesta de ilustracin y comoprctica de esclavitud. Es en este sentido que la Foucault hace frente a la hermenutica en cualquiera de susformas. Lo que en la arqueologa parece importar delimitar es el margen, el borde, lo excluido del discurso, loque el historiador no ha utilizado. Al valorar un texto, reviste tanto o ms importancia lo que se excluye que loque se dice.

    Foucault piensa que tanto las ciencias de la naturaleza, como las ciencias del espritu tienen un mismo origen(las tecnologas del poder) pero una doble diversificacin. Las ciencias de la naturaleza ofrecen objetividad yverdad mientras que las ciencias humanas pretenden, en ltimo trmino, el dominio sobre el sujeto. En ltimo

    trmino la intencin de Foucault es la construccin de una historia genealgica de la humanidad exenta desesgos axiolgicos y concesiones al poder bajo la forma de compromisos valricos, que supere las aporas delas ciencias humanas interpretadas como producto de la filosofa del sujeto.

    Foucault pretende as situarse en una posicin y actitud puramente descriptiva. Quiere poner entre parntesistoda pretensin de validez y a partir de ah describir lo que se ve, lo que Weber llam neutralidad valorativa.Pero para Habermas esta pretensin foucaultiana la de una distincin entre ciencias de la naturaleza yciencias del espritu es slo un fallido intento. Foucault parece no haber notado a juicio de Habermas lanecesidad de fundamentar sta distincin.

    3.

    La propuesta de Habermas, por su parte, ser la de una pragmtica trascendental que comporte una teora delconocimiento al modo de la que el mismo desarrolla en Conocimiento e inters5 en un esfuerzo terico para

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    3FOUCAULT, Michel, La arqueologa del saber, Siglo XXI Editores, Mxico, 2002

    4FOUCAULT, Michel,Historia de la locura en la poca clsica, Ed. Paids, Barcelona, 1987.

    5HABERMAS, Jrgen, Conocimiento e inters, Taurus, Madrid, 1982

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    4/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    dirimir si las ciencias humanas son o no contra-ilustradas.

    Habermas expone el concepto de mundo como 'totalidad de conformidad' o 'plexo de significatividad', donde secomprende cmo se llega al pensar representacional y objetivante mediante un proceso 'desmundanizacin deuna regin del ente' que arranca a la naturaleza del mundo de la vida. De aqu surgen los objetos de la ciencia

    (objetos y sucesos), un mundo objetivo para que el sujeto pueda referirse a l en trminos de una filosofatrascendental.

    Es sobre estas bases que Habermas articula tres crticas contra las grandes indagaciones de Foucault: elpresentismo o -actualizacin inducida- (que Habermas llama Prsentismus), el relativismo y elcriptonormativismo6:

    Examinemos en primer lugar el presentismo. Habermas llama as a un comportamiento metodolgico queFoucault pretende eliminar pero que en modo alguno logra evitar: proyectar retrospectivamente nuestra visinde las cosas a actitudes y a acontecimientos que no se explican ni en funcin de valores eternos ni en funcinde nuestros sentimientos actuales. Mientras el hermeneuta presupone un origen oculto y mantiene en reservauna instancia de juicio, el arquelogo sera aquel que toma en consideracin nicamente la sustitucin de unatcnica de poder por otra tcnica de poder y slo considera la lgica interna de cada una de esas tcnicas. Porejemplo, Luis XIV en ocasin del Gran Encierro de 1656 no crea el hospital general por razones humanitarias

    en el sentido en el que lo haramos hoy, sino que lo hace por razones especficas, a saber, para deshacerse detodos los elementos marginales de la sociedad (locos, mendigos, delincuentes y prostitutas) cuestin que elhistoriador en su tarea precisamente debe reconstituir. Otro ejemplo dado por Paul Veyne y retomado porHabermas es el de la prohibicin de los combates de gladiadores en la Roma tarda; dicha prohibicin no sedebe a la influencia humanitaria del cristianismo sino al reemplazo de un arquetipo de poder por otro: elemperador se ha convertido en un padre que debe proteger a sus hijos7.

    Segn Habermas, Foucault no logra alcanzar esta objetivacin de las formaciones de poder que comohistoricista radical pretende y esto porque no puede eximirse de comparar los diferentes complejos de poderque estudia ni puede evitar disponer para ello de un punto de partida hermenutico. Habermas da un ejemploen apoyo de este argumento: la divisin cronolgica de Edad Media, Renacimiento y poca clsica. Esa divisinno puede dejar de ser referida a ese poder disciplinario, a esa divisin no puede dejar de ser referida a esepoder disciplinario, a esa biopoltica que Foucault identifica como el destino de nuestro presente. De manera

    que esa mirada que atribuye los cambios histricos decisivos a una economa de la disciplina ejercida sobre loscuerpos, esa presunta objetividad que desnuda la discursividad de las prcticas, bajo la pretendida interioridadde las significaciones, esa mirada tiene tambin una fecha y es tan parcial (en virtud de su mismo historicismo)como las modificaciones de complejos de poder que ella pretende reconstituir. As se puede explicar que laHistoria de la locura y tambin Vigilar y Castigar -para atenerse slo a dos de estos ejemplos- hayadesempeado el doble papel de estudios documentales y de manifiestos de antipsiquiatra y del movimiento dereivindicaciones carcelarias. Para Habermas, la razn de ello es clara: Foucault queda atrapado en el juego dela denegacin; cede al presentismo que pretende conjurar porque su objetivismo cientificista (que lleva ellastre de anticiencia) se transforma en un incurable subjetivismo. Al recusar toda hermenutica de lasignificacin Foucault, a juicio de Habermas, encuentra dividido como historicista radical entre el objetivismo y elsubjetivismo.

    En la imputacin de relativismo Habermas intenta siempre desenmascarar el mismo doble juego de la

    historiografa genealgica, volviendo a constatar la conversin del objetivismo en subjetivismo. El planteamiento

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    6HABERMAS, Jrgen, El discurso filosfico de la modernidad, Versin castellana de Manuel Jimnez Redondo,

    Taurus, Madrid, 1991.

    7VEYNE, Paul, Foucault revolutionne l'historie, Coment on crit l'histoire, Pars, Ed. du Seuil, coleccin Points,

    1979, pp. 210 - 212.

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    5/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    de Foucault tiene el defecto de no partir de las prcticas escritas, sino, como se le observa, del comportamientodel mismo historigrafo atrapado en su propio intento de zafarse8.

    4.

    Foucault, a su vez, pudo haber visto, en un principio de la genealoga nietzscheana, una salida a esta aporaesquizoide, a saber, la utilidad y relevancia que por principio tiene la investigacin sobre el pasado paracomprender el presente y su devenir. Para Foucault, la realidad biopoltica que se inicia a fines del siglo XVIII,principios del XIX, no se encuentra clausurada, sino que an hoy somos parte de aquella periodizacin y de lasquerellas que le son propias. Foucault, fiel a este programa, inmediatamente despus de haber asentado lanocin del biopoder abre una indagacin del presente sobre, por ejemplo, las formas de gestin de la salud ylas polticas sanitarias en Estados Unidos y Europa.

    Tal vez Habermas no haya intuido esto y de all que le parezca sorpresivo y extrao el giro ltimo delposicionamiento foucaultiano:

    Mientras Foucault hasta el momento solamente haba percibido esta voluntad de poder en las formacionesmodernas del saber para denunciarla, ahora la muestra bajo una luz radicalmente distinta: a saber, como un

    impulso crtico que resulta preciso preservar y que requiere renovacin

    De este suelo surge el criptonormativismo que Habermas le imputa a Foucault. En efecto, Habermas constataque el proyecto de Foucault se desliza hacia posiciones en principio superadas tras el abandono de lospostulados formalistas de sus primeras obras- como la de su peculiar descriptivismo. Una suerte de narrativaneutral guiada por un observador en marcha y abstinente de presupuestos tericos o normativos por lasrazones ya apuntadas. En ocasiones parece como si la sola consciencia de los efectos de poder de la autorapudiera conjurar los efectos de poder del propio discurso foucaultiano, sus deudas, sus races, dispensando dela interrogacin sobre sus condiciones de posibilidad y emergencia.

    Foucault aparece as dando un salto lgico arbitrario al formular, implcita o explcitamente, toda una serie dejuicios de valor negativos (sobre la prisin, las disciplinas, las ciencia sociales, etc.) de patente gratuidad enausencia de fundamento terico o normativo alguno.

    Un positivismo con tales pretensiones, pese a sus protestas de no ser sino un empirismo modesto, ha sidovalorado de forma muy diversa por quienes, de un modo u otro, se interesaron desde la ciencia social por laobra de Foucault. En efecto, el problema de la pura descripcin anormativa y aterica foucaultiana, pareceradicar insoslayablemente en su misma imposibilidad: la eleccin de las categoras, puramente descriptivas, esya en s misma una evidente interpretacin; de ah el criptonormativismo imputado por Habermas, los mltiples

    juicios de valor que sin cesar Foucault vierte en su obra.

    5.

    La propuesta de Foucault circula por una va diferente a la postulada por Habermas en lo que respecta a laconfluencia de trabajo e interaccin comunicativa, para situarse en un distinto campo de anlisis y tal vez en

    esto radica su aportacin: la conformacin de los sujetos en los dispositivos de poder/saber, en las tcnicas dedominacin y en una detallada consideracin del individuo moderno como producto de una multiplicidad detcnicas individualizantes, divisorias, de sujecin-subjetivacin, cuestiones tradicionalmente ignoradas por lamacroterica perspectiva de la ciencia social crtica.

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    8JANICAUD, Dominique, Racionalidad, fuerza y poder; Foucault y las crticas de Habermas, Editorial Gedisa,Barcelona, 1999, p. 284

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    6/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    Si bien una analtica semejante, ajena a lo simblico y a lo ideolgico, presenta, frente al anlisis de la accincomunicativa9 de Habermas, una minusvaloracin de elementos decisivos para el anlisis de la relacin depoder moderna -de unos hombres sobre otros a travs del control de la informacin- aporta, sin embargo, unelemento asimismo valioso: el centramiento corporal de las disciplinas. Este dar todo su relieve a la centralidaddel cuerpo en las relaciones de poder de la sociedad moderna, con su claro acento biopoltico10, puede

    constituir un enriquecimiento de perspectiva para las teoras de la comunicacin de Habermas que,seguramente en razn de sus lealtades a las teoras del speech-act de Austin y Searle, muestran un carcteren exceso idealista y descorporizado, desatendiendo el progresivo efecto de la interrogacin y administracinde los cuerpos y la consiguiente erosin de las anteriores asunciones del cuerpo como fuerza natural y externaa las influencias del poder.11

    II.- Habermas y Sloterdijk : Antecedentes del debate en torno al Parque humano y los escndalosmediticos subyacentes.

    1.- Hay una abundante literatura sobre la polmica velada que Habermas ha mantenido con Sloterdijk desde lapublicacin de Reglen fr den Menschenparkse12, que se edit en espaol un ao despus con el ttulo Normaspara el parque humano

    13; el as denominado affaire Sloterdijk tiene sin embargo races bastante ms

    profundas y alcances que exceden el incidente aquel14.

    Es as necesario interrogar por el origen y alcance de la polmica desde un contexto ms amplio, desde unaperspectiva de mayor alcance, que tenga en cuenta el aspecto meditico de las acusaciones as como lasdiscrepancias de fondo manifiestas no slo en la serie de imputaciones de Habermas a Sloterdijk, sinotambin en las crticas que Sloterdijk realiza a la teora de la accin comunicativa15de Habermas. Un modeloparadjico, que preconiza el dilogo mientras posee un indisimulable carcter monolgico.

    Para Sloterdijk el proyecto habermasianismo no era otra cosa que el de una religin civil destinada a lasociedad alemana de la postguerra asentada sobre la bases de un idealismo intersubjetivo.

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    9HABERMAS Jrgen, Teora de la accin comunicativa, tomo 1, Taurus, Argentina, 1989.

    10A principio de los aos 70, Foucault hablaba indistintamente de biopoder y biopoltica. Pero finalmente tuvo que

    distinguirlos: biopoder es efectivamente el poder sobre la vida, pero biopoltica es ms bien la respuesta resistente de la

    vida ante este nuevo poder.

    11KEANE, John , Public life and late capitalism, Cambridge Ed. , 1984, p. 176

    12En un coloquio sobre la filosofa despus de Heidegger celebrado en el castillo de Elmau en julio de 1999, Peter

    Sloterdijk present un texto titulado Normas para el parque humano que gener (y an sigue generando) un

    controvertido y acalorado debate pblico en torno al humanismo como modelo de civilizacin.

    13SLOTERDIJK, Peter,Normas para el parque humano; Una respuesta a la carta sobre el humanismo, Siruela, Madrid,

    2000.

    14Es claro que la polmica alcanzo ribetes mediticos, pero por qu se producen estos escndalos mediticos? En primer

    termino porque el poder real est en los medios, quienes vehiculizan las excitaciones. Las sociedades modernas seorganizan como bolsas temticas. La opinin publica no es como dice la teora (crtica) un medio de Ilustracin sino mas

    bien un foro organizado para desarrollar negocios temticos.

    15En efecto, Sloterdijk se haba atrevido a a poner en tela de juicio el sistema consensual de la desacreditada Escuela de

    Frankfurt.

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    7/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    Habermas le venia bien a la sociedad alemana en los aos 60 porque se necesitaba un paz religiosa en elmbito de las ciencia sociales, y fue precisamente en lo que respecta al discurso tico-religioso dondeHabermas dulcifico la teora critica tradicional apostando a la integracin occidental de la razn religiosa.

    Nadie expuso las inconsistencias de Habermas con la fuerza y el desparpajo con que lo hizo Sloterdjikinsistiendo en que Habermas no cree en sus teoras salvo cuando le conviene. De este modo Sloterdijk nos

    previene que no debemos hacer caso slo de lo que Habermas dice sino fijarse principalmente en lo quehace, es decir, en cmo procede en su quehacer filosfico. Porque muy bien puede suceder que niegue orechace algo que al mismo tiempo est practicando. En el caso de la metafsica ocurre algo as: Habermas diceno querer contaminarse de metafsica, pero su filosofa no est exenta de la misma. Algo parecido sucede en sutratamiento de la religin. No es, de entrada, el centro de su atencin, pero se convierte en algo ineludible parasus propsitos. Por eso es preciso descubrir el uso que realmente hace de lo religioso en la construccin de supropia teora, porque slo as descubriremos su autntico valor para entender adecuadamente la racionalidadcomunicativa y la configuracin de la sociedad moderna que Habermas nos propone.

    Para Sloterdijk el proyecto habermasianismo no era otra cosa que el de una religin civil destinada a lasociedad alemana de la postguerra asentada sobre la bases de un idealismo intersubjetivo.

    Habermas le venia bien a la sociedad alemana en los aos 60 porque se necesitaba un paz religiosa en elmbito de las ciencia sociales, y fue precisamente en lo que respecta al discurso tico-religioso dondeHabermas dulcifico la teora critica tradicional apostando a la integracin occidental de la razn religiosa.

    Nadie expuso las inconsistencias de Habermas con la fuerza y el desparpajo con que lo hizo Sloterdjikinsistiendo en que Habermas no cree en sus teoras salvo cuando le conviene. De este modo Sloterdijk nospreviene que no debemos hacer caso slo de lo que Habermas dice sino fijarse principalmente en lo quehace, es decir, en cmo procede en su quehacer filosfico. Porque muy bien puede suceder que niegue orechace algo que al mismo tiempo est practicando. En el caso de la metafsica ocurre algo as: Habermas diceno querer contaminarse de metafsica, pero su filosofa no est exenta de la misma. Algo parecido sucede en sutratamiento de la religin. No es, de entrada, el centro de su atencin, pero se convierte en algo ineludible parasus propsitos. Por eso es preciso descubrir el uso que realmente hace de lo religioso en la construccin de supropia teora, porque slo as descubriremos su autntico valor para entender adecuadamente la racionalidadcomunicativa y la configuracin de la sociedad moderna que Habermas nos propone.

    Como lo seala el propio Sloterdijk

    16

    , el origen de las acusaciones de Habermas se encuentra en losespejismos en los fantasmas revividos del nacionalsocialismo que siguen ocupando bastas zonas delinconsciente colectivo alemn, de modo tal que campos semnticos enteros se encuentran bloqueados para unuso inteligente17.

    De este modo se asume que, tal como se ha desarrollado el debate en Alemania, expresiones como seleccinhan sido puestas en cuarentena entre los hablantes de lengua alemana en razn de que existe una parlisisprogramada por los miedos atvicos antes sealados.

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    As se puede comprender prosigue Sloterdijk que algunos hombres sintieran aversin al concepto de crianza[Zchtung] cuando se aplica a la esfera humana. Pero resulta evidente que conceptos de este tenor, sobre todola trada educar, domesticar, criar, forman parte de una tradicin filosfica o didctica que se se desarrolladesde Platn a Nietzsche. De modo que cuando Sloterdijk, a propsito una reflexin en torno a la situacingeneral de la biotecnologa18, retoma aquella tendencia heterodoxa, sepultada en su mayor parte hasta la fecha

    16SLOTERDIJK, Peter y HEINRICHS, Hans-Jrgen, El sol y la muerte; Investigaciones dialgicas, Siruela, Madrid,

    2004, p. 52

    17SLOTERDIJK, Peter y HEINRICHS, Hans-Jrgen, El sol y la muerte; Investigaciones dialgicas, Siruela, Madrid,

    2004, p. 53

    18SLOTERDIJK, Peter,Normas para el parque humano; Una respuesta a la carta sobre el humanismo, Siruela, Madrid,2000.

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    8/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    por un humanismo de orientacin literaria, se pregunta: Qu podra haber de falso en esta unin de lo clsicoy lo actual?19 Sin embargo se prefiere aplicarle la etiqueta de provocador. Sloterdijk frente a ello acepta quesus opiniones, en virtud de las condiciones psicolgico-polticas de Alemania, puedan resultar cuestionables ypor s mismas generadoras de crticas, y que adems su poco habitual suma de intereses, mtodos y temaspueda parecer desafiante para mentalidades ms conservadoras. Comprende, sin embargo, que hoy en da un

    filsofo slo logra influencia si se presenta como superficie de proyeccin de errores afectivamente cargados

    20

    .Podra decirse que se trata de una variante pblica del psicoanlisis, a travs de la cual sus clientes puedenhacer asociaciones libres en forma de recensiones. Estas recensiones son las lecturas sesgadas porprejuicios ideolgicos, ticos o religiosos con las que ha tenido que habrselas de modo casi habitual Sloterdijk.

    BIBLIOGRAFA:

    * 1962: Historia y crtica de la opinin pblica. Ed. Gustavo Gili. ISBN 978-84-252-2015-9* 1963: Teora y prctica; Teora y praxis. Estudios de filosofa social. Ed. Tecnos. ISBN 978-84-309-1423-4* 1967: La lgica de las ciencias sociales. Ed. Tecnos. ISBN 978-84-309-4522-1* 1968: Conocimiento e inters. Ed. Taurus. ISBN 978-84-306-1163-8; Ciencia y tcnica como ideologa. Ed.

    Tecnos. ISBN 978-84-309-4520-7* 1970: La lgica de las ciencias sociales. Ed. Tecnos. ISBN 978-84-309-4522-1* 1973: Problemas de legitimacin en el capitalismo tardo. Ed. Ctedra. ISBN 978-84-376-1753-4* 1976: La reconstruccin del materialismo histrico. Ed. Taurus. ISBN 978-84-306-1190-4* 1981: Teora de la accin comunicativa: I. Racionalidad de la accin y racionalidad social, II. Crtica de la

    razn funcionalista. Ed. Taurus. ISBN 978-84-306-9952-0* 1982: Sobre Nietzsche y otros ensayos. Ed. Tecnos. ISBN 978-84-309-0918-6* 1989: El discurso filosfico de la modernidad (Doce lecciones). Ed. Taurus. ISBN 978-84-306-1290-4* 1990: El pensamiento postmetafsico. Ed. Taurus. ISBN 978-84-306-1300-7* 1991: Escritos sobre moralidad y eticidad. Ed. Paids. ISBN 978-84-7509-692-6* 1996: Textos y contextos. Ed. Ariel. ISBN 978-84-344-8741-1* 1998: Facticidad y validez. Sobre el derecho y el Estado democrtico de derecho en trminos de teora del

    discurso. Ed. Trotta, 5 edicin 2008. ISBN 978-84-8164-151-6* 1998: Ms all del Estado nacional. Ed. Fondo de Cultura Econmica. ISBN 978-84-8164-144-8;

    * 1997: Ms all del Estado nacional. Ed. Trotta, 4 edicin 2008. ISBN 978-84-8164-144-8* 1998: Debate sobre el liberalismo poltico. (Disputa con John Rawls). Ed. Paids. ISBN 978-84-493-0499-6* 1999: La inclusin del otro. Estudios de teora poltica. Ed. Paids. ISBN 978-84-493-0672-3* 1999: Fragmentos filosfico-teolgicos. De la impresin sensible a la expresin simblica. Ed. Trotta. ISBN

    978-84-8164-336-7* 2000: Aclaraciones a la tica del discurso. Ed. Trotta. ISBN 978-84-8164-378-7* 2001: Israel o Atenas. Ensayos sobre religin, teologa y racionalidad. Ed. Trotta. ISBN 978-84-8164-440-1* 2001: El futuro de la naturaleza humana. Hacia una eugenesia liberal?. Ed. Paids. ISBN 978-84-493-

    1249-6* 2004: Tiempo de transiciones. Ed. Trotta. ISBN 978-84-8164-708-2* 2006: Entre naturalismo y religin. Ed. Paids. ISBN 978-84-493-1941-9* 2006: El Occidente escindido. Pequeos escritos polticos. Ed. Trotta. ISBN 978-84-8164-823-2* 2007: Verdad y justificacin. Ed. Trotta, 2 edicin. ISBN 978-84-8164-497-5

    * 2008: Normas y valores. Ed. Trotta. ISBN 978-84-8164-992-5* 2008: Conciencia moral y accin comunicativa. Ed. Trotta. ISBN 978-84-8164-993-2* 2008: El discurso filosfico de la Modernidad. Katz Editores. ISBN 9788496859296* 2008: El derecho internacional en la transicin hacia un escenario posnacional. Katz Editores. ISBN

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    19 Ibid.

    20SLOTERDIJK, Peter y HEINRICHS, Hans-Jrgen, El sol y la muerte; Investigaciones dialgicas, Siruela, Madrid,2004, p. 53

  • 7/27/2019 Las Criticas de Habermas a Foucault y Sloterdijk en Torno Al Discurso Filosofico de La Modernidad y La Teoria Con

    9/9

    Nmadas. Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas | 24 (2009.4)

    Publicacin Electrnica de la Universidad Complutense | ISSN 1578-6730

    9788496859296

    Bibliografa sobre Habermas (una breve seleccin en espaol) [editar]

    * Juan Carlos Velasco (2003): "Para leer a Habermas", Alianza Editorial, Madrid, 2003. ISBN 84-206-4171-5* Juan Carlos Velasco (2000): "La teora discursiva del derecho. Sistema jurdico y democracia enHabermas", Centro de Estudios Polticos y Constitucionales, Madrid, 2000. ISBN 84-340-1238-3

    * Enrique M. Urea (1998): La Teora Crtica de la Sociedad de Habermas, Tecnos, Madrid, 1998.* Fernando Vallespn (1995): "Dilogo entre gigantes. Rawls y Habermas", en Claves de la razn prctica, n

    55, pp. 48-55.* Thomas McCarthy (1987): "La Teora Crtica de Jrgen Habermas", Tecnos, Madrid.