faro n° 256

4
Primera Lectura: “La indignación y la misericordia de Dios se manifiestan en el exilio y en la liberación de su pueblo” Lectura del segundo libro de las Crónicas. (2Crón. 36, 14-16. 19-23) Todos los jefes de Judá, los sacer- dotes y el pueblo multiplicaron sus infideli- dades, imitando todas las abominaciones de los paganos, Santuario San Judas Tadeo - Santuario P. Mariano Avellana Zenteno # 764 - Santiago Centro - Fono: 698 94 91 PRESENTACIÓN En el largo camino de la historia de la salvación, el pueblo de Dios ex- perimentó duras pero saludables experiencias. El Señor permite que Israel por su infidelidad pierda su tierra y vea destruido el templo de Jerusalén. Y más aún, ten- ga que experimentar el exilio. La misericordia de Dios hará que este pueblo vuelva a su tierra haciendo renacer una alegre esperanza. También con nosotros que so- mos el nuevo pueblo de Dios, el Señor se muestra rico en misericordia liberándo- nos de la muerte del pecado y haciéndonos revivir en la gracia de Cristo Salvador, pero Él exige de nosotros una respuesta de amor, llena de buenas obras que ad- quieren un valor eterno en nuestra comunión con Él. En este domingo estamos invitados a levantar nuestras cabezas y en- contrar en el crucificado el perdón por nuestros pecados. “Oración Comunitaria o Colecta” Dios nuestro, que has recon- ciliado contigo a la humanidad ente- ra por medio de tu Hijo, concede al pueblo cristiano prepararse con fe viva y entrega generosa a celebrar las fiestas de Pascua. Por Jesucristo nuestro Señor, Amén. N° 256 Parroquia “Corazón de María” 4° domingo de Cuaresma 18 de Marzo 2012 y contaminaron el Templo que el Señor se había consagrado en Jerusalén. El Señor, el Dios de sus padres, les llamó la atención constantemente por medio de sus mensajeros, porque tenía compasión de su pueblo y de su Morada. Pero ellos escarnecían a los mensajeros de Dios, despreciaban sus palabras y ponían en ridículo a sus profetas, hasta que la ira del Señor contra su pueblo subió a tal punto, que ya no hubo más remedio. Los caldeos quemaron la Casa de Dios, demolieron las murallas de Jerusalén, prendieron fuego a todos sus palacios y destruyeron todos sus objetos preciosos. Nabucodonosor deportó a Babilonia a los que habían escapado de la espada, y éstos se convirtieron en esclavos del rey y de sus hijos hasta el advenimiento del re- ino persa. Así se cumplió la palabra del Señor, pronunciada por Jeremías:

Upload: edicion-el-faro

Post on 10-Mar-2016

235 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Correspondiente al Domingo 18 de marzo 2012

TRANSCRIPT

Page 1: Faro N° 256

Primera Lectura: “La indignación y la misericordia de Dios se manifiestan en el exilio y en la liberación de su pueblo” Lectura del segundo libro de las Crónicas. (2Crón. 36, 14-16. 19-23)

Todos los jefes de Judá, los sacer-dotes y el pueblo multiplicaron sus infideli-dades, imitando todas las abominaciones de los paganos,

Santuario San Judas Tadeo - Santuario P. Mariano Avellana

Zenteno # 764 - Santiago Centro - Fono: 698 94 91

PRESENTACIÓN

En el largo camino de la historia de la salvación, el pueblo de Dios ex-perimentó duras pero saludables experiencias. El Señor permite que Israel por su infidelidad pierda su tierra y vea destruido el templo de Jerusalén. Y más aún, ten-ga que experimentar el exilio. La misericordia de Dios hará que este pueblo vuelva a su tierra haciendo renacer una alegre esperanza. También con nosotros que so-mos el nuevo pueblo de Dios, el Señor se muestra rico en misericordia liberándo-nos de la muerte del pecado y haciéndonos revivir en la gracia de Cristo Salvador, pero Él exige de nosotros una respuesta de amor, llena de buenas obras que ad-quieren un valor eterno en nuestra comunión con Él.

En este domingo estamos invitados a levantar nuestras cabezas y en-contrar en el crucificado el perdón por nuestros pecados.

“Oración Comunitaria o Colecta” Dios nuestro, que has recon-

ciliado contigo a la humanidad ente-ra por medio de tu Hijo, concede al pueblo cristiano prepararse con fe viva y entrega generosa a celebrar las fiestas de Pascua.

Por Jesucristo nuestro Señor, Amén.

N° 256

Parroquia

“Corazón de María”

4° domingo de Cuaresma

18 de Marzo 2012

y contaminaron el Templo que el Señor se había consagrado en Jerusalén. El Señor, el Dios de sus padres, les llamó la atención constantemente por medio de sus mensajeros, porque tenía compasión de su pueblo y de su Morada. Pero ellos escarnecían a los mensajeros de Dios, despreciaban sus palabras y ponían en ridículo a sus profetas, hasta que la ira del Señor contra su pueblo subió a tal punto, que ya no hubo más remedio. Los caldeos quemaron la Casa de Dios, demolieron las murallas de Jerusalén, prendieron fuego a todos sus palacios y destruyeron todos sus objetos preciosos. Nabucodonosor deportó a Babilonia a los que habían escapado de la espada, y éstos se convirtieron en esclavos del rey y de sus hijos hasta el advenimiento del re-ino persa. Así se cumplió la palabra del Señor, pronunciada por Jeremías:

Page 2: Faro N° 256

«La tierra descansó durante todo el tiempo de la desolación, hasta pagar la deuda de todos sus sábados, hasta que se cumplieron setenta años».

En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, para que se cumpliera la palabra del Señor pronunciada por Je-remías, el Señor despertó el espíritu de Ciro, el rey de Persia, y éste mandó procla-mar de viva voz y por escrito en todo su reino: «Así habla Ciro, rey de Persia: El Señor, el Dios del cielo, me ha dado todos los reinos de la tierra y él me ha encargado que le edifique una Casa en Jerusalén, de Judá. Si alguno de ustedes pertenece a ese pueblo, ¡que el Señor, su Dios, lo acompañe y que suba!».

Palabra de Dios. R./ Te alabamos, Señor.

Segunda Lectura: “Muertos a causa de nuestros peca-dos, ustedes han sido salvados por su gracia” Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Éfeso. (Ef. 2, 4-10)

EVANGELIO: “Dios envió a su Hijo para que el mundo se salve por Él”

† Lectura del Santo Evangelio Según San Juan (Jn. 3, 14-21)

Gloria a ti, Señor

Dijo Jesús: De la misma manera que Moisés levantó en alto la serpiente en el de-sierto, también es ne-cesario que el Hijo del hombre sea levantado en alto, para que todos los que creen en él tengan Vida eterna. Sí, Dios amó tanto al mun-do, que entregó a su

Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna.

Salmo Responsorial: (Sal. 136, 1-6)

R. ¡Que no me olvide de ti, ciudad de Dios!

Junto a los ríos de Babilonia, nos sentába-mos a llorar, acordándonos de Sión. En los sauces de las orillas teníamos colgadas nuestras cítaras. R.

Allí nuestros carceleros nos pedían cantos, y nuestros opresores, alegría: «¡Canten para nosotros un canto de Sión!» R.

¿Cómo podríamos cantar un canto del Se-ñor en tierra extranjera? Si me olvidara de ti, Jerusalén, que se paralice mi mano de-recha. R.

Que la lengua se me pegue al paladar si no me acordara de ti, si no pusiera a Jeru-salén por encima de todas mis alegrías. R.

Hermanos: Dios, que es rico en misericordia,

por el gran amor con que nos amó, preci-samente cuando estábamos muertos a causa de nuestros pecados, nos hizo revi-vir con Cristo--¡ustedes han sido salvados gratuitamente!-- y con Cristo Jesús nos resucitó y nos hizo reinar con Él en el cielo.

Así, Dios ha querido demostrar a los tiempos futuros la inmensa riqueza de su gracia por el amor que nos tiene en Cristo Jesús.

Porque ustedes han sido salvados por su gracia, mediante la fe. Esto no pro-viene de ustedes, sino que es un don de Dios; y no es el resultado de las obras, para que nadie se gloríe.

Nosotros somos creación suya: fuimos creados en Cristo Jesús, a fin de realizar aquellas buenas obras, que Dios preparó de antemano para que las prac-ticáramos.

Palabra de Dios. R./ Te alabamos, Señor.

Page 3: Faro N° 256

SÍGUENOS EN FACEBOOK Correo electrónico: edició[email protected]

COMENTARIO: Juan 3,14-21

El Evangelio de este domingo nos presenta la parte final del diálogo de Jesús con Nicodemo, el Maestro de la Ley, Fariseo y Magistrado judío que vino a ver a Jesús de noche. Aquí Jesús aborda el tema de la luz que disi-pa las tinieblas. Por cierto, una bella conclusión para el encuentro nocturno.

En la Vigilia Pascual, con el símbolo de la luz, proclamaremos la victoria del Crucificado Resucitado. La misión de Jesús se cumple totalmente: él es la verdadera luz que ha venido al mundo (Jn. 1,9).

Dios Padre es absolutamente misericordioso, lleno de amor por los hombres, y por el gran amor que nos tiene, sabiendo de nuestras faltas, fue tan bueno que nos trajo a Jesús, y nos ha hecho vivir con Él. Pero no solo hizo eso, además, nos entregó a su propio hijo para que nos salváramos.

Lectura del Evangelio en la Semana:

Lunes 19: Mt. 1, 16.18-21. 24a.

Mart. 20: Jn. 5, 1-3a. 5-18

Miér. 21: Jn. 5, 17-30.

Jueves 22: Jn. 5, 31-47. Vier. 23: Jn. 7,1-2.10.14, 25-30.

Sab. 24: Jn. 7, 40-53.

Porque Dios no envió a su Hijo pa-ra juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que cree en él, no es condenado; el que no cree, ya está conde-nado, porque no ha creído en el Nombre del Hijo único de Dios. En esto consiste el juicio: la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron las tinieblas a la luz, porque sus obras eran malas. Todo el que obra mal odia la luz y no se acerca a ella, por temor de que sus obras sean descubiertas. En cambio, el que obra conforme a la verdad se acerca a la luz, para que se ponga de manifiesto que sus obras han sido hechas en Dios.

Palabra del Señor / R. Gloria a ti Señor Jesús

Si fuéramos capaces de poder entender bien lo que hizo Dios por nosotros, si pudiéramos sentir de ver-dad en nuestro corazón todo el amor que Dios nos tiene, sería entonces más sencillo darse cuenta de su amor infinito y su gran ideal de salvarnos. Para eso nos mando a Jesús, su buen Hijo, no para condenarnos, sino que todo lo contrario, para el que crea en Él, no muera, sino que tenga vida eterna.

El evangelio nos está diciendo con mucha claridad, el que desprecia el amor de Dios, se condena a sí mis-mo, es decir Dios no tiene interés en condenarnos, porque El es puro amor, amor total, ahora el resto está en nosotros, si aceptamos o no ese amor, o si ante la luz que vino al mun-do, preferimos la oscuridad y ocultar-nos en ella. Si así fuera, el preferir la oscuridad, es detestar la Luz, esto es no querer recibir el verdadero amor que se nos ofrece, y por este motivo, ya estamos condenados, pero no por Dios, sino por nosotros mismos.

Redactado por Equipo CeBiClar Zenteno

Visita nuestro blog:

http://cebiclarzentenochile.blogspot.com/

Si deseas recibir comentarios bíblicos diarios escríbenos a

[email protected]

Page 4: Faro N° 256

Edición a cargo de: Pastoral de comunicadores, Parroquia Corazón de María

LOS CINCO MINUTOS DE

María es hermosa como la estrella de la ma-drugada. En María descan-sa Dios, por María nos bajan del cielo las gracias y por María suben al cielo nues-tras súplicas.

San Antonio Mª Claret

Vida Parroquial

Del 22 de

Febrero

al 1 de Abril

EN MARCHA BLANCA

HIMNO AL CORAZON DE MARÍA

Gloria a Ti, Corazón de María, fiel creyente en Jesús, el Señor.

Te aclamamos: «La llena de Gracia», Reyna y Madre del pueblo de Dios.

Con la fuerza y el don del Espíritu, compartiendo la vida y el pan, anunciamos la buena noticia, construimos el reino en la paz.

Te aclamamos: «La llena de Gracia», Reina y Madre del pueblo de Dios.

Gratitud: A todos los que han colaborado y siguen ayudando a financiar la magna

obra de la reconstrucción de nuestra Basílica.

Que Dios multiplique su generosidad

SUFRES, LLORAS, MUERES

1. Cuando un niño con hambre pide pan, cuando llora pues nunca se lo dan. Oh! Tiemblo por Ti, Jesús. Sufres, lloras, mueres. Con los niños de hambre mueres Tú.

2. Mueres Tú cuando un hombre esclavo está. Cuando grita pidiendo libertad. Oh! Tiemblo por Ti, Jesús. Sufres, lloras, mueres. Con los hombres esclavos mueres Tú.

3. Cuando siento que el mundo en guerra está. Que el hermano al hermano matará. Oh! Tiemblo por Ti, Jesús. Sufres, lloras, mueres. Con los hombres que mueren mueres Tú.

4. Cuando pasas enfermo junto a mí. Cuando olvido tu hambre y tu sufrir. Oh! Tiemblo por Ti, Jesús. Sufres, lloras, mueres. Por mi absurdo egoísmo mueres Tú.

www.basilicacorazondemaria.cl