debate económico no. 6

154
Debate Económico Revista de Economía del Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C. Índice Vol. 2 (3). No. 6 Septiembre-Diciembre 2013 Coyuntura Económica Darío Ibarra Zavala Un año del regreso del PRI al poder Artículos José Nabor Cruz Marcelo y Andrés Blancas Neira Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano: Implicaciones sectoriales macroeconómicas y distributivas Aderak Quintana Estrada Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica Alejandro Alanís Chico Ciclo económico y actividades productivas en México, análisis y proyecciones Eric Urias Romero y Darío Ibarra Zavala Síntesis de los enfoques metodológicos para la medición multidimensional de la pobreza Los nobel David A. Westbrook Ronald Coase (1910-2013) Notas O.A. Palacios Sommer Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico ISSN 2007-364X Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C. www.laes.org.mx

Upload: laes-mexico

Post on 28-Mar-2016

231 views

Category:

Documents


4 download

DESCRIPTION

En este número de Debate Económico Coyuntura Económica Un año de regreso del PRI al poder - Darío Ibarra Zavala Artículos Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano: Implicaciones sectoriales macroeconómicas y distributivas - José Nabor Cruz Marcelo y Andrés Blancas Neira Fragilidad Financiera y crisis bancarias en Centroamérica - Aderak Quintana Estrada Ciclo económico y actividades productivas en México, análisis y proyecciones - Alejandro Alanís Chico Síntesis de los enfoques metodológicos para la medición multidimensional de la pobreza - ERic Urías Romero y Darío Ibarra Zavala Los Nobel Ronal Coase (1910-2013) - David A. Westbrook Notas Escuela de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico - O.A. P

TRANSCRIPT

Page 1: Debate Económico No. 6

Debate

Económico Revista de Economía del Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C.

Índice Vol. 2 (3). No. 6 Septiembre-Diciembre 2013 Coyuntura Económica

Darío Ibarra Zavala Un año del regreso del PRI al poder

Artículos

José Nabor Cruz Marcelo y Andrés Blancas Neira Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano: Implicaciones sectoriales macroeconómicas y distributivas

Aderak Quintana Estrada

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

Alejandro Alanís Chico Ciclo económico y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

Eric Urias Romero y Darío Ibarra Zavala

Síntesis de los enfoques metodológicos para la medición multidimensional de

la pobreza

Los nobel

David A. Westbrook Ronald Coase (1910-2013)

Notas

O.A. Palacios Sommer Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

ISSN 2007-364X Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C.

www.laes.org.mx

Page 2: Debate Económico No. 6

DEBATE ECONÓMICO

Director general de LAES, A. C.

Darío Ibarra Zavala

Director Editorial de Debate Económico

Roberto Valencia Arriaga

Corrección de estilo

Ana Laura Rodríguez Grajeda

Asistentes Editoriales

Francisco Javier Pérez Muñoz

Comité Dictaminador

José Luis Martínez Marca (UNAM), Darío Ibarra Zavala (UAEM),

Luis Ramón López Gutiérrez (UAEM), Lilia Domínguez Villalobos (UNAM), Teresa Santos (UNAM), Roberto Soto Esquivel (UAZ),

Andrés Rosales (Colegio de Tlaxcala), Daniel González Sesmas

(LAES, AC), Selene Jiménez Bautista (UAEM).

Comité Editorial

Aurora Gómez Galvarriato Freer (CIDE), Carlos Mallén Rivera

(INIFAP), Clemente Ruiz Durán (UNAM), Eduardo Loría (UNAM),

Juan Carlos Moreno-Brid (CEPAL), Ha-Joon Chang (Cambridge

University).

Page 3: Debate Económico No. 6

Normas de Publicación: DEBATE ECONÓMICO

La revista Debate Económico es una publicación cuatrimestral de carácter

académico que incluye ensayos y resultados de investigaciones con contenido

particularmente económico, sin importar la escuela o pensamiento económico.

El comité editorial de la revista agradece el envío de artículos a esta

redacción, ya sea a título individual o de manera colectiva. Los artículos

enviados deberán necesariamente ser inéditos.

Los interesados en publicar en Debate Económico deberán enviar el artículo

en original donde se indique el nombre del autor o autores y el mismo trabajo

omitiendo sus datos, vía correo electrónico en formato de Word a la dirección

[email protected]. En hoja aparte deberán anotar los datos curriculares

del autor o autores (grado académico, publicaciones recientes, etc.),

institución de adscripción, puesto o cargo que desempeña, dirección, teléfono

y/o fax y dirección de correo electrónico. Además, deberán incluir un

resumen y abstract que describa el tema y objetivo del artículo, con una

extensión no mayor a 10 líneas.

Los artículos deberán ajustarse a las normas gramaticales vigentes y tener una

extensión mínima de 15 cuartillas y máxima de 30 (65 a 70 golpes por 27-29

líneas, incluyendo notas al pie, cuadros, tablas, gráficos y bibliografía). Los

apartados y/o subtítulos deberán estar perfectamente definidos, indicándose el

lugar correspondiente a los cuadros y gráficas. Los cuadros y gráficas deberán

ser elaborados y enviados en archivos aparte en algún programa de hoja de

cálculo, preferiblemente en Excel. Las referencias bibliográficas y la

bibliografía deberán estar presentadas en formato Harvard.

Los artículos recibidos serán sometidos a dictamen tipo doble ciego

(omitiendo el nombre del autor o autores), conservándose su anonimato.

Todos los artículos enviados, serán considerados, sin que ello implique

obligatoriedad de su publicación. La dirección de la revista se reserva el

derecho de realizar los cambios editoriales necesarios.

Page 4: Debate Económico No. 6

Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C.

Page 5: Debate Económico No. 6

Debate Económico Índice Vol. 2 (3). No. 6 Septiembre-Diciembre 2013

Coyuntura Económica

Darío Ibarra Zavala

Un año del regreso del PRI al poder……………………………………………..1

Artículos

José Nabor Cruz Marcelo y Andrés Blancas Neira

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano: Implicaciones sectoriales macroeconómicas y distributivas………………..6

Aderak Quintana Estrada

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica…………………..45

Alejandro Alanís Chico

Ciclo económico y actividades productivas en México, análisis y proyecciones……………………………………………………………….73

Eric Urias Romero y Darío Ibarra Zavala

Síntesis de los enfoques metodológicos para la medición multidimensional de

la pobreza………………………………………………………………………..…97

Los nobel

David A. Westbrook Ronald Coase (1910-2013)……………………………………………………… 120

Notas

O.A. Palacios Sommer

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico ……129

Page 6: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Índice Vol. 2 (3). No. 6, Septiembre-Diciembreo

2013 es una publicación cuatrimestral editada por el Laboratorio de

Análisis Económico y Social, A. C. Tejocotes 178-405, Actipan, Col.

Del Valle, Del. Benito Juárez, C.P. 03230. México, D.F. Tel. 5264

8837, www.laes.org.mx Editor Responsable: Darío Guadalupe Ibarra

Zavala [email protected]. Número de Certificado de Reserva

de Derechos otorgado por el Instituto Nacional del Derecho de Autor

exclusivo número 04-2013-102912180100-102. ISSN: 2007-364X.

Número del Certificado de Licitud de Título y Contenido: 15,541

otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas

Ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Domicilio de la

Publicación: Impresa en el taller del Laboratorio de Análisis

Económico y Social, A. C. Hacienda de Tomacoco 17, Col. Benito

Juárez, Nezahualcóyotl, Edo. De México, C. P. 57130. Distribuidor

Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C.

Este número se término de imprimir el 31 de diciembre de 2013 con

un tiraje de 1,000 ejemplares.

Las opiniones y comentarios expresados por los autores no

necesariamente reflejan la postura del Laboratorio de Análisis

Económico y Social, A.C. Los artículos publicados en Debate

Económico son responsabilidad de sus autores. Se permite la

fotocopia o impresión de cualquier artículo, reseña o nota publicada

en esta revista siempre y cuando se otorguen los créditos respectivos y

no implique la publicación en otras revistas o capítulos de libros, en

cuyo caso se deberán negociar los derechos con el Director General de

LAES, A. C.

Coordinador general del No. 6: Darío Ibarra Zavala.

Colaboradores: Roberto Valencia Arriaga, Selene Jiménez Bautista y

Gustavo Acua Popocatl.

Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C.

www.laes.org.mx

Page 7: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol.2 (3), No. 6. Septiembre-Diciembre 2013, Pp. 1-5.

Coyuntura económica

Un año del regreso del PRI al poder

Darío Ibarra Zavala1

La economía mexicana lleva décadas estancada. Ha tenido

crecimiento que, en el mejor de los casos, podría considerarse

como mediocre. Es verdad que hay una diferencia abismal en el

nivel de vida de la población de 2013 a la de 1980, sin

embargo, ello obedece al avance tecnológico en el resto del

mundo, que ha tenido una derrama en nuestro país. En suma,

las mejoras en el nivel de vida no son de México, son del

mundo.

Durante doce años tuvimos un Gobierno de un partido distinto

al PRI. Para algunos, el Gobierno alterno era de derecha, es

decir, aquellos políticos que eran apoyados por empresarios y

que a su vez esperaban recibir apoyo del Gobierno. Desde cierta

perspectiva, apoyar a los empresarios podría redundar en mayor

inversión y, a la postre, mayor crecimiento económico. Pero la

dura y necia realidad mostró que no basta cambiar de partido ni

bastan las buenas intenciones. Después de dos sexenios no

podemos decir que el nivel de vida de la población haya

mejorado, lo que es peor, en términos de seguridad pública las

cosas ahora son peores.

1 Universidad Autónoma del Estado de México (UAP-Neza) y Laboratorio de Análisis Económico y Social, A. C.

Page 8: Debate Económico No. 6

Debate Económico

2

El regreso del PRI al poder vino acompañado de una serie de

medidas legislativas, mismas que tuvieron lugar desde antes

que se diera el cambio de gabinete. Se empezaron a gestionar

reformas que podrían tener un impacto verdadero en la

economía y la sociedad mexicanas. No bien se habían dado las

condiciones para tener una reforma educativa cuando ya se

ventilaba otra en materia de telecomunicaciones, una más en el

sector financiero, tocando el turno entonces a la materia fiscal,

laboral y energética. En resumen, en menos de un año se han

tenido más reformas importantes que en dos sexenios juntos.

Gráfica 1. PIB Per cápita

Fuente: elaboración propia con datos del INEGI, 2013.

Medido en términos del PIB per cápita, la economía mexicana

ha crecido muy poco, como se puede ver en la gráfica 1. Lo

anterior se hace más evidente al hacerla en escala logarítmica,

que nos permite observar que de 1980 a 2012 la economía

0

20,000

40,000

60,000

80,000

100,000

120,000

1980

1982

1984

1986

1988

1990

1992

1994

1996

1998

2000

2002

2004

2006

2008

2010

2012

PIB Per cápita, pesos de 2008

Page 9: Debate Económico No. 6

Coyuntura Económica

3

apenas ha crecido a una tasa promedio anual de 0.81%, a todas

luces insuficiente para abatir la pobreza, y en una palabra,

poder desarrollarnos.

Gráfica 2. PIB Per cápita en escala logarítmica

Fuente: elaboración propia con datos del INEGI, 2013.

¿Por fin creceremos?

Posiblemente el dinamismo político vivido en la actualidad

puede sólo ser comparado con el sexenio de Carlos Salinas de

Gortari (1988-1994), cuyas reformas igualmente tuvieron un

alto impacto y de las que se esperaba que por fin la economía

creciera. Tan fue así, que finalmente se logró llevar a cabo la

firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte

(TLCAN), que definitivamente cambió de manera por demás

drástica a la economía mexicana.

y = 0.0081x + 11.358

R² = 0.7536

10

10.2

10.4

10.6

10.8

11

11.2

11.4

11.6

11.8

19

80

19

82

1984

19

86

19

88

19

90

19

92

19

94

1996

1998

20

00

20

02

20

04

20

06

20

08

2010

20

12

LN(PIB Per cápita, pesos de 2008)

Page 10: Debate Económico No. 6

Debate Económico

4

La autonomía del Banco Central entró en vigor a finales del

mandato salinista, mientras que la reforma al sistema de

pensiones del IMSS, si bien no entró en vigor durante su

mandato, sí se gestó durante su sexenio. En adición a lo

anterior, se llevó a cabo una importante reforma en el campo: el

otorgamiento de títulos de propiedad a los campesinos, con lo

que finalmente se reconocería la propiedad individual de la

parcela de éstos, con ello tendrían la posibilidad de invertir en

empresas agroindustriales teniendo como garantía la titularidad

de la tierra. Lo esperado era que por fin el campo saliera del

atraso que ha tenido durante décadas.

Nuevamente la realidad se encargó de mostrar que las cosas no

son tan simples ni tan fáciles como lo dice el libro de texto,

pues el campo no sólo no salió de su histórico atraso, sino que a

casi veinte años del programa, sigue estando en crisis.

Así pues, el pasado reciente muestra que las reformas son

importantes y necesarias para crecer, pero no suficientes. Por

ello es que conviene tomar con cautela esta ola de reformas,

pues si bien es incuestionable que muy pocos disputarían la

necesidad de hacer algo para romper la inercia que se llevaba,

lo cierto es que no hay ninguna garantía de que ya nos

encontremos en la senda del crecimiento.

El futuro inmediato

Hay varios temas pendientes en la agenda económica de nuestro

país. No abordarlos y resolverlos no ayudará a tener

crecimiento económico. Entre ellos se encuentran:

1. El problema de la inseguridad. Indiscutiblemente una

economía donde se corre el riesgo de ser secuestrado,

donde las mercancías son robadas antes de llegar a su

destino, donde la gente sale con temor de sus casas,

Page 11: Debate Económico No. 6

Coyuntura Económica

5

entre otros factores, no genera condiciones para que

exista crecimiento económico.

2. La eficiencia del gasto público. Existen muchos

programas públicos que se traducen en el apoyo

financiero, técnico o en especie a diversos sectores

como salud, agroindustrias, empresas pequeñas y

medianas, etc., pero la realidad muestra que, a pesar de

que varios de tales programas llevan décadas de existir,

la economía simplemente no crece. En suma, el gasto

público no ha sido efectivo para generar crecimiento

económico.

3. Una verdadera reforma fiscal. El tema de la

captación tributaria no es nuevo. Desde la desaparición

del Impuesto Sobre Ingresos Mercantiles (ISIM) para

convertirlo en el actual IVA, no ha habido una reforma

fiscal que merezca tal apelativo, en todo caso son

misceláneas fiscales. Un sistema tributario que persigue

al causante cautivo, que incentiva la informalidad y un

contexto donde el ciudadano no ve reflejados sus

impuestos en mejores servicios públicos como

seguridad, educación, salud, etc. no puede generar

crecimiento económico.

Los temas de la agenda económica de México son diversos.

Sólo se han esbozado algunos de ellos. Lo que es un hecho es

que mientras tales pendientes no se resuelvan, las reformas por

sí mismas difícilmente nos conducirán al ansiado crecimiento

económico.

Page 12: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol.2 (3), No. 6. Septiembre-Diciembre 2013, pp. 6-43.

Recibido: Mayo 2013.

Aceptado: Noviembre 2013

Estrategias alternativas para enfrentar la

pobreza en el campo mexicano: implicaciones

sectoriales macroeconómicas y distributivas

José Nabor Cruz Marcelo1

Andrés Blancas Neira2

Resumen

El objetivo central de este documento es examinar el efecto de un

conjunto de políticas públicas en el empleo, nivel de producción (total

y sectorial), distribución del ingreso y otras variables relevantes, tanto

del sector agrícola como el producto total, esto a través de un modelo

estructuralista cuyo bagaje teórico son las aportaciones de Michael

Kalecki y la escuela de la CEPAL, principalmente su hipótesis sobre

qué cambios en la demanda serán los impulsores de variaciones

positivas al interior de la economía. Al simular distintos escenarios

encontramos que la heterogeneidad estructural condiciona de forma

importante las percepciones de los campesinos, sin embargo, el

impulso del empleo formal y producción interna podrían mejorar las

condiciones de ingreso, pero sólo en el mediano y largo plazo.

1Doctor en Economía. Actualmente Becario del Programa de Becas Posdoctorales en la

UNAM, en el Instituto de Investigaciones Económicas, UNAM. Correo electrónico

[email protected] 2 Doctor en Economía. Investigador titular de tiempo completo en el Instituto de

Investigaciones Económicas-UNAM. Correo electrónico [email protected].

Page 13: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

7

Palabras claves: sector agrícola, políticas públicas, distribución del

ingreso, Kalecki, heterogeneidad estructural.

Clasificación JEL Q11 E12 E25 E27

Abstract

The main goal of this paper is to examine the effect of a group of

public policy in the employment, production level (total and by

sector), income distribution and another relevant variables, in both the

agricultural sector as well as total output, all this by using a

structuralist model, which was made using the theoretical approaches

of Michael Kalecki and the school of CEPAL, mainly their hypothesis

about which changes in the demand will impulse the positive

variations in the interior of the economy. By simulating different

scenarios we found that structural heterogeneity determines in an

important way the farmers income, nevertheless the growth of formal

employment and domestic production could improve their income

conditions, but just in the medium and long term.

1. Introducción

El sector agrícola mexicano ha presentado cambios estructurales a

partir de la década de los setentas del siglo pasado: reformas

constitucionales, un fuerte proceso de apertura comercial (eliminación

de aranceles a ciertos bienes) y una drástica caída en la producción

nacional de los llamados granos básicos con un consecuente

incremento del volumen de importación de los mismos. A la par,

61.6% de la población rural vive en estado de pobreza y 21.5% en

pobreza extrema3. Por lo anterior, el objetivo central de este

documento es examinar el efecto de un conjunto de políticas públicas

en el empleo, nivel de producción (total y sectorial), distribución del

3 De acuerdo al reporte del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo

Social (CONEVAL) difundido en Julio de 2013 disponible en:

http://web.coneval.gob.mx/Informes/Coordinacion/Pobreza_2012/RESUMEN_EJECUTIV

O_MEDICION_POBREZA_2012_Parte1.pdf

Page 14: Debate Económico No. 6

Debate Económico

8

ingreso y otras variables relevantes, tanto del sector agrícola como el

producto total, esto a través de un modelo estructuralista cuyo bagaje

teórico son las aportaciones de Michal Kalecki y la escuela de la

CEPAL, principalmente la hipótesis sobre que los cambios en la

demanda serán impulsores de variaciones positivas al interior de la

economía.

Entre las políticas públicas que consideramos se destacan las

transferencias sociales, sin embargo, hay que tener en cuenta cómo

han evolucionado éstas a lo largo de las últimas décadas en nuestro

país, de acuerdo a Narro et. al (2013) de 2000 a 2012, el gasto

acumulado en los rubros de “Programas Sociales” es de alrededor de

2.6 billones de pesos (a precios constantes del 2012) sin que esto haya

representado una mejora significativa y sobre todo constante en el

bienestar de la población que vive tanto en condiciones de pobreza

como de pobreza extrema, ya que de acuerdo al Consejo Nacional de

Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), apenas

5.2% de la población rural y sólo 23.6% de la población urbana podría

considerarse no pobre y no vulnerable para el año 20104.

Para el caso del campo mexicano, en los años recientes ha habido

periodos relativamente cortos con mejoras en el empleo y en el

ingreso de los agricultores, como lo examina Hernández Laos en

Aparicio, Villarespe y Urzúa (2009), puesto que de 2000 al 2006 el

coeficiente de Gini se redujo de 0.533 a 0.449, a la par, la relación

entre los ingresos que obtienen tanto el décimo como el primer decil

(D10/D01) también se contrajo de 62.1 a 36.3. Sin embargo, esta

mejora redistributiva no fue producto de transferencias públicas o

privadas (programas como Oportunidades o remesas de familiares que

trabajan en Estados Unidos), sino que fue, de acuerdo a las encuestas

ingreso gasto de los hogares, por la expansión de los ingresos

provenientes de salarios y de negocios propios, los primeros no

implican una mejora en las percepciones de los jornaleros, sino más

bien, de la diversificación del empleo agrícola en actividades de la

construcción o del sector servicios dentro del ámbito rural.

44

De acuerdo al informe del CONEVAL: “Medición de la pobreza en México 2010.

Page 15: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

9

A la par se presentó una mejora en los rendimientos por hectárea en

tierras de temporal (que no significó en una expansión de las hectáreas

cosechadas) pero sobre todo, la razón principal de esa fase de

redistribución positiva, se debió a un fuerte incremento de los precios

relativos de los cultivos básicos. Sin embargo, dicho avance se detuvo

o inclusive se contrajo como resultado de la crisis económica 2008-

2009, de ahí la importancia de aplicar políticas públicas que eviten la

vulnerabilidad de los pobres rurales de nuestro país a choques

externos negativos.

El artículo se estructura de la siguiente forma; en primer lugar la

presente introducción, posteriormente se analiza los hechos estilizados

más importantes del propio sector en las décadas recientes, en tercer

lugar, presentamos una síntesis del modelo estructuralista y a partir de

éste, se exponen los resultados de las simulaciones resultantes del

mismo. Finalmente, reportamos las conclusiones y se discute la

viabilidad de las políticas públicas que se simularon.

2. Hechos estilizados del sector agrícola de México

Durante el modelo de Industrialización vía Sustitución de

Importaciones (ISI) en México, el sector agrícola tuvo un papel

destacado en la economía en su conjunto, sin embargo, también se

gestaron algunos rasgos negativos, de acuerdo a Warman (1975), se

asentó la figura del neolatifundio, el cual define como una empresa de

tipo capitalista que produce mercancías agropecuarias para un

mercado amplio de intercambio monetario con el propósito de

reproducir un capital, así como de obtener una ganancia. El

neolatifundio recibió otro beneficio de la intervención del estado

mediante el establecimiento de precios oficiales de garantía para los

productos básicos5.

5 Éstos se fijaron desde la década de los cincuenta, al tomar como base los costos y

rendimientos de los neolatifundistas, agregados con un amplio margen de ganancia, lo que

permitía su cultivo en condiciones de absoluta seguridad.

Page 16: Debate Económico No. 6

Debate Económico

10

Por lo tanto, la producción agrícola de exportación eran cultivados

totalmente por los neolatifundistas: algodón, el más importante, café,

azúcar, henequén, jitomate y carne. El sector agrícola proveyó divisas

para compensar el enorme déficit de las importaciones dedicadas al

sector industrial6. En general una de las funciones básicas que el

desarrollismo asigna al campo mexicano era crear un excedente

importante y transferirlo al sector industrial, el cual cumplió con

eficacia. Al tomar en cuenta sólo tres mecanismos: el fiscal, el de

precios y el bancario, el sector agropecuario transfirió a la industria

tres mil millones de pesos entre 1942 y 1960. A partir de 1965, el

descenso de la participación del producto agropecuario en el producto

nacional y el de las exportaciones agrícolas se hizo evidente.

Con información consistente desde 1950, se puede apreciar

claramente la pérdida de peso del sector agrícola en la economía

mexicana, en dicho año su producción representó 10.8% del valor del

producto interno bruto (PIB), sin embargo, en 2010 fue solamente

4.4%.7. A partir de 1980, el país liberalizó su régimen comercial y

modificó el Artículo 27 constitucional ―ambas transformaciones

destinadas a impactar fuertemente al sector rural y agrícola―, las

reformas fueron vistas como una condición esencial para mejorar el

funcionamiento de los mercados de factores rurales, aumentar los

incentivos a la inversión y fomentar la gobernabilidad, así como la

aplicación del estado de derecho en el campo8. Sin embargo, la

pobreza en el sector rural se expandió durante las últimas dos décadas

y el crecimiento del sector se estancó, lo que evitó mejorar las

condiciones sociales en las áreas rurales9.

6 Se anexa la balanza comercial del sector agropecuario a partir de 1961 en el cuadro 8,

donde se constata el superávit del comercio agrícola hacia la segunda etapa del ISI. 7 Lo anterior confirma claramente las hipótesis de Warman (1978) sobre la decaída de la

producción nacional con lo cual el sector agrícola perdía peso y consecuentemente

seguridad alimentaria. 8 Como señalan Gordillo y Wagner (2005), la última expropiación agraria en México se

realizó en 1975, lo cual rompió muchos de los equilibrios y las alianzas establecidas hasta

entonces y dio lugar a un proceso irreversible de articulación de nuevos actores sociales en

el campo. 9 De acuerdo a datos de la CEPAL expuestos en el cuadro 9 del anexo dos, la pobreza rural

en México aumentó de 1980 a 1996 sistemáticamente, y si bien, a partir de ese año

Page 17: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

11

Al revisar la evolución histórica de la superficie cosechada en el

campo mexicano de 1950 a 2011, se observa claramente las dos fases

―crecimiento y estancamiento― que presentó el sector. En el año de

1950, 7.9 millones de hectáreas fueron cosechadas, para 1966 la cifra

se duplicó al reportarse un poco más de 15 millones, esto es lo que

Warman (1971 y 1978) denomina el milagro agrícola mexicano. En

1979 ocurre un cambio estructural, al disminuir la superficie hasta 12

millones, pero se recuperó al marcar un récord en 1983, cuando se

cosecharon 22.89 millones de hectáreas, a partir de 1984, la cifra

oscila entre 18 y 20 millones10

.

Como se observa en el octavo cuadro del segundo anexo, la variación

anual de la superficie cosechada es demasiado volátil a partir de la

década de los ochenta, sin embargo, de 1990 a 2010, la tasa de

crecimiento promedio anual es 1.1%, lo que denota el estancamiento

que prevaleció en el sector después del proceso de apertura

comercial11

. A su vez, los porcentajes de participación, entre los

cultivos de: consumo interno, tradicionales de exportación y no

tradicionales, permanecieron prácticamente sin cambios, al promediar

una estructura de participación de: 60, 20 y 20% respectivamente,

durante los últimos 25 años, lo cual permite realizar la hipótesis

acerca de que el sector agrícola ha permanecido estancado en cuanto

sus técnicas de producción y con una sistemática expulsión de mano

de obra.

Es importante recordar que el sector presentó una fuerte contracción

en el peso de éste en el PIB, por lo tanto, si bien las exportaciones

agrícolas aumentaron en valor comercial, no fue lo suficiente para que

en términos porcentuales se revertiera la tendencia negativa que se

mantuvo una tendencia decreciente, el último informe de CONEVAL de 2013, indica que

el 61% de la población en zonas rurales reporta condiciones de pobreza. 10

Dicho estancamiento de la superficie de cosecha se debe a factores que no se discuten a

fondo en este documento, por lo que para una discusión mucho más amplia del tema

dirigirse a estos documentos: Rello (2008); Timothy A. Wise, (2009). "The Limited

Promise of Agricultural Trade Liberalization," Trade Working Papers 2214, East Asian

Bureau of Economic Research y CEPAL (2007). 11

Los datos referidos se obtuvieron en la estadísticas oficiales de la CEPAL, pero se

cotejaron con el SIACON de la Sagarpa y la FAO: Organización de las Naciones Unidas

para la Agricultura y la Alimentación: Base de Datos FAOSTAT

Page 18: Debate Económico No. 6

Debate Económico

12

reporta desde hace 30 años (cuadro 8 del anexo). Las importaciones

agrícolas presentan un crecimiento en su valor comercial, sobresalen

la compra de granos básicos, carnes, y sobre todo, de bienes

intermedios a partir de la década de los noventa del siglo pasado12

.

En general, el papel del Estado ha disminuido drásticamente, a la par

del proceso de apertura comercial, el gasto de Gobierno en el sector

agrícola representaba 13.2% en 1980, sin embargo, hay una marcada

tendencia a la baja en los últimos treinta años, por lo que para el 2010,

el gasto agrícola apenas fue 3% (cuadro 9 del anexo dos). Para el

mismo periodo, el crédito en el sector muestra la misma tendencia al

pasar de 13.4% a sólo 1.3% del total del crédito, que se destinaba al

apartado agrícola y es prácticamente inexistente para el subsector de

pesca.

Como lo menciona Rello (2008), en nuestro país se llevó a cabo una

reforma para crear un gran sector de pequeños campesinos a los

cuales se les pidió que cultivaran para su propia subsistencia y

abastecieran los mercados locales, pero no dinamizaron la agricultura

y el resto de la economía. Para dicho fin, se pensó más en los

medianos y grandes propietarios, en la nueva agricultura capitalista,

orientada a los mercados y que usaba tecnología agrícola moderna. Un

análisis comparativo de los censos agrícolas de 1970 y 1990, indican

que los rasgos básicos del sector permanecieron inalterados, se

conserva el extenso minifundio, fuente permanente de pobreza: en

1990, cerca de la tercera parte de los predios tenían menos de dos

hectáreas. Esta notable concentración de la propiedad rústica indica

que la reforma agraria y las políticas económicas no han podido

disminuir la polarización agraria, la cual se mantiene como la

característica básica de la estructura agraria en México.

12

Por ejemplo, las consideraciones que señala Josling (1993) ante la inminente apertura

comercial con la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio Norteamericano, se

centraron en que habría una disminución de alrededor 21% en la producción nacional del

maíz, y que las importacionesdel mismo cultivo podrían crecer más allá del sesenta por

ciento, lo cual, a la luz de los hechos, queda más que comprobado. Bajo este mismo

contexto, Nuñez (2002) señala a pesar del proceso de apertura comercial, todavía se aplica

en el sector agrícola la misma política tecnológica que se desenvolvió en el modelo

sustitutivo.

Page 19: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

13

En el cuadro 10 del segundo anexo, presentamos las participaciones

relativas de diferentes términos económicos (2003-2011) como

porcentajes del valor bruto de la producción del sector agrícola

mexicano. Con una tasa de crecimiento para el PIB sectorial de 1.1%,

la mayoría de los agregados económicos presentan tendencia

decreciente. Las remuneraciones de asalariados han disminuido, lo

cual, sin lugar a dudas, influye directamente en el poco impacto en la

demanda agregada que tiene el sector, a la par, un alto porcentaje de

importaciones de bienes para el sector agrícola —que en términos

relativos al volumen total la participación es mínima— ha creado una

alta dependencia, tanto en términos de precios como de mercancías

del extranjero13

.

3. Síntesis del modelo estructuralista para la economía

mexicana

Después de analizar algunas variables económicas relevantes para el

sector, reportamos el modelo empleado, el cual cuenta con un amplio

set de ecuaciones que se presentan en el primer anexo de este

documento14

, sin embargo, los antecedentes teórico se centran tanto en

las ideas del economista Michal Kalecki (movimientos en la economía

se definen vía la demanda) y de la escuela estructuralista,

principalmente por la tesis de Aníbal Pinto (1973) sobre la fuerte

heterogeneidad estructural en el aparato productivo, condiciona las

políticas públicas que pretendan elevar el empleo, la demanda, y por

ende, el crecimiento del ingreso de la mayoría de los trabajadores

tanto de México y el resto de América Latina.

En general los principales supuestos del modelo son los siguientes:1)

El producto total y su composición sectorial están determinados por la

demanda. 2) El sector industrial es relativamente amplio; parte de la

13

Banco de México (Banxico) en sus informes anuales del 2009 y 2010, afirmó que lo

anterior es una de las causas que no permitieron alcanzar las metas de inflación en dichos

años. 14

Como antecedentes directos al modelo se pueden consultar a López (2005) y Cruz

(2013), en este último se da una amplia explicación de la construcción del mismo, sin

embargo para fines de esta investigaciones se actualizó tanto algebraica como

estadísticamente el set de ecuaciones, lo que permite obtener resultados más

contemporáneos y que se enfocan principalmente al sector agrícola nacional.

Page 20: Debate Económico No. 6

Debate Económico

14

capacidad productiva del sector está sub-utilizada, lo que permite que

la oferta sea elástica; las empresas líderes trabajan con costos

variables constantes en el corto plazo y fijan sus precios al agregar un

sobreprecio a sus costos variables.

3) El sector agrícola es relativamente pequeño. Aunque en la realidad

la elasticidad de oferta del sector es en general limitada, para

simplificar el modelo supondremos que aquí también la oferta es

elástica. Esto podría racionalizarse con el argumento que los

incrementos de la demanda hacia el sector están acompañados con

aumentos correspondientes de la capacidad productiva.

4) El sector informal urbano es muy amplio y absorbe una proporción

importante de la PEA.

5) Distinguimos las siguientes clases sociales: capitalistas urbanos

(dentro de los cuales incluimos a los profesionistas con alto nivel de

calificación) y capitalistas rurales; como clases pobres, consideramos

a: obreros industriales, trabajadores informales urbanos, campesinos

asalariados, campesinos no asalariados y desocupados urbanos. 6) La

demanda de cada una de las clases es diferente, no sólo en cuanto a su

monto, sino también en cuanto a la proporción en que está compuesta

por bienes de los distintos sectores.

7) La demanda agregada depende de dos factores: el gasto autónomo

y la distribución del ingreso. 8) El gasto autónomo está compuesto de:

a) El privado autónomo interno (que es el gasto de los capitalistas

urbanos y agrícolas), b) El gasto del Gobierno que se divide en: (i)

gasto en bienes y servicios; (ii) así como las transferencias; c)

finalmente las exportaciones netas. 9) Por último, la distribución del

ingreso medida con un índice C de concentración, que relaciona los

ingresos del décimo decil con los siete deciles más pobres15

.

15

Complementamos los supuestos iniciales con estas ideas: los capitalistas (agrícolas e

industriales) demandarán tanto bienes industriales, así como los importados finales. El

sector agrícola proveerá de bienes intermedios a la industria y al informal. El sector

industrial proveerá de bienes intermedios al sector agrícola, al informal y así mismo;

además importará bienes intermedios. El Gobierno demandará bienes finales nacionales e

importados.

Page 21: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

15

Presentamos ahora las ecuaciones básicas del modelo, referidas a la

demanda agregada16

. Diferenciaremos la demanda para tres sectores:

industrial iY , agrícola CY e informal FY , exportaciones TX y

TM son las importaciones. La demanda total (PIB total) se establece

como:

TTT

FCiT MXGYYYY (1)

En el caso del sector industrial la demanda hacia este rubro se

establece como: I DIK DCK DBII IS F

Y Y Y Y Y YFIS

CS CPY Y G X M MI I BFI BIICS CP

(2)

En primer lugar encontramos la demanda de los capitalistas urbanos y

de los capitalistas rurales DIKY y

DCKY respectivamente.

Suponemos que ambos grupos de capitalistas gastan sólo en bienes

industriales nacionales. Además, al seguir a Kalecki, consideramos

que su demanda no está limitada por sus ingresos corrientes.

Adicionalmente, el sector industrial recibe la demanda proveniente de

los obreros, de los informales urbanos y de los campesinos

(asalariados y no asalariados). Ésta se expresa como IS

ISY , F

YF

,

CS

CSY y CP

CPY , respectivamente. El símbolo Ω, con el

respectivo subíndice, alude a la proporción del ingreso del grupo

correspondiente que se gasta en bienes industriales. Finalmente, existe

una demanda proveniente del Gobierno IG y las exportaciones netas,

simbolizada por BIIBFII MMX .

C DBIC IS F CS

IS F CS

CP

CP C C BFC BIC

Y Y Y Y Y

Y G X M M

(3)

La producción del campo está compuesta por una porción de bienes

intermedios DBICY , también por aquélla de los obreros industriales, de

los informales y de los campesinos pobres. El símbolo σ, con el

16

En el primer anexo (cuadro 7) se exponen las ecuaciones fundamentales del modelo y

del índice C.

Page 22: Debate Económico No. 6

Debate Económico

16

respectivo subíndice, alude a la proporción del ingreso del grupo

correspondiente que se gasta en bienes agrícolas. Además del gasto de

Gobierno CG y el sector externo neto denotado por:

X M MC BFC BIC .

Finalmente: F

CP

CP

CS

CS

F

F

IS

IS

F GYYYYY (4)

La demanda del sector informal está compuesta por aquélla de los

obreros industriales, de los informales y de los campesinos (tanto

asalariado como no asalariados). El símbolo ρ, con el respectivo

subíndice, alude a la proporción del ingreso del grupo correspondiente

que se gasta en bienes elaborados en el sector informal, por último la

demanda del Gobierno. En general, supondremos que los obreros

industriales, los informales y los campesinos pobres gastan lo que

ganan. De la estructura del modelo resultará que, bajo ciertos

supuestos, al igual que en la formulación de Kalecki, se cumple que

los capitalistas ganan lo que gastan.

4. Simulaciones: análisis de resultados

En esta sección examinamos los resultados de las simulaciones más

representativas calculadas a partir del modelo propuesto, las cuales

girarán en tres grandes apartados y ejemplifican de forma aproximada

las distintas políticas redistributivas que pueden llevarse a cabo en una

economía como la mexicana que reporta características heterogéneas,

tanto en su aparato productivo, los sectores considerados, así como del

empleo e ingresos.

4.1 Modificaciones a los salarios agrícolas

Al contextualizar el ingreso de los ocupados en la agricultura, a través

de encuestas de hogares, entre 1990 y 2005, Valdés, et al. (2010),

demuestra que hubo un aumento en el ingreso real agrícola en los

siguientes países latinoamericanos: Brasil, Chile, Colombia y

Paraguay. Sin embargo, para México al emplear dos enfoques, tanto el

PIB deflactado por el IPC, como el de encuestas de hogares, coinciden

en mostrar una disminución en el ingreso real. Se sugiere que debido

Page 23: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

17

al poco crecimiento del PIB agrícola, los ingresos de los campesinos

no se elevaron; lo anterior crea un círculo nocivo entre bajos ingresos

y nulo crecimiento en el campo mexicano.

Por lo anterior, este primer subgrupo de simulaciones girará en torno a

los efectos que surgen a través de incrementar los ingresos de los

campesinos. Sin embargo, es conveniente realizar una importante

acotación, al seguir las ideas de Michal Kalecki, si se estableciera una

política por parte del Gobierno de elevar los salarios ―en este caso

campesinos― hay que diferenciar dos posibles efectos, el primero de

éstos es que los incrementos del coste unitario para el capitalista

(empresario) significará que éste decida trasladar esa expansión de

salarios a los precios del bien final que produzca, lo que mermaría el

efecto positivo del poder adquisitivo del trabajador. Por otro lado, el

empresario podría optar por una reducción de su margen de beneficio

al absorber el incremento de costes. Dicha opción servirá como marco

en el supuesto de la primera simulación, al elevarse 10% el ingreso de

los campesinos asalariados, por lo tanto, los precios agrícolas no se

verán alterados.

Cuadro 1. Incremento del ingreso de los campesinos asalariados

Variable Valor

original

Nuevo

valor

Cambio

absoluto

Cambio en

porcentaje

S 0.3986 0.3989 0.0003 0.08%

f 0.3759 0.3769 0.001 0.27%

d 0.0603 0.0604 0.0001 0.21%

p 0.0701 0.0703 0.0002 0.31%

u 0.0749 0.0732 -0.0017 -2.22%

YP1

36.3172 36.3444 0.0273 0.08%

YP2

20.355 20.7587 0.4037 1.98%

C 10.1329 10.0487 0.0843 -0.83%

YDI

139.1062 139.2371 0.1309 0.09%

YDF

25.6371 25.7336 0.0965 0.38%

YDC

33.4832 33.6868 0.2036 0.61%

YDT

198.2265 198.6575 0.431 0.22%

Page 24: Debate Económico No. 6

Debate Económico

18

Nota: valores promedios para cada variable después de estimar 10 000

escenarios. El valor original denota el promedio que se establece en el

escenario base.

Cuadro 2. Incremento de los ingresos de informales y campesinos

pobres

Variable Valor

original

Nuevo

valor

Cambio

absoluto

Cambio en

porcentaje

s 0.3986 0.4004 0.0018 0.46%

f 0.3759 0.3893 0.0134 3.57%

d 0.0603 0.0609 0.0006 1.06%

p 0.0701 0.0712 0.0011 1.59%

u 0.0749 0.0579 0.0170 -22.7%

YP1

38.6390 38.7751 0.1361 0.4%

YP2

19.0837 21.3825 2.2988 12.0%

C 10.1329 9.7228 0.4101 -4.05%

YDI

139.1062 139.7394 0.6332 0.46%

YDF

25.6371 26.5518 0.9147 3.57%

YDC

33.4832 34.3703 0.8870 2.65%

YDT

198.2265 200.6615 2.4349 1.23%

Nota: valores promedios para cada variable después de estimar 10 000

escenarios. El valor original denota el promedio que se establece en el

escenario base.

Los resultados exponen que dada la heterogeneidad de la economía

nacional, los efectos de demanda sectorial, y sobre todo, de empleo, es

mínimo ―los obreros industriales pobres (s) apenas si expanden su

empleo en promedio 0.08%, los informales urbanos (f) 0.27%, los

campesinos asalariados (d) 0.21% y los campesinos no asalariados

pobres (p) sólo 0.31%― si bien, es cierto que el índice de

concentración (C) propuesto se reduce 0.8%, esto resulta insuficiente

para generar efectos multiplicativos hacia el interior de la economía.

El sector agrícola (YDC

) expande su producción más allá de medio

punto porcentual, pero los efectos en los otros dos sectores

económicos apenas son perceptibles. Por lo anterior, en la segunda

Page 25: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

19

simulación supondremos que el Gobierno realiza transferencias de

ingreso de corte social para aumentar diez por ciento las percepciones

tanto de los informales urbanos como de los campesinos pobres (los

no asalariados)17

.

Se reporta un fuerte incremento en las demandas sectoriales —

principalmente por el efecto multiplicativo de expandir las

percepciones de los informales urbanos— los cuales pueden ser

correspondidos inmediatamente, dadas las características de la

economía mexicana, la cual reporta, como ya hemos referido18

,

importantes tasas de capacidades ociosas y empleados subocupados,

por consiguiente, los aumentos de empleos y de producción,

acompañados por una fuerte redistribución de los ingresos, el índice

de C cae en promedio 4%, pueden constituirse como una estrategia

viable para mejorar las condiciones de las clases pobres de la

economía. Sin embargo el producto total de la economía apenas si se

expande más allá de un punto porcentual, lo que permite inferir que si

bien habría un choque positivo en la economía al elevarse el empleo,

el que aumentaría en mayor proporción es el informal, por lo tanto, la

poca creación de trabajos formales, se constituye en una limitante, y

en general, esto es lo que se ha presentado en la década más reciente,

una tasa de crecimiento en promedio anual del PIB cercana al 2% y

con un alto porcentaje de la PEA en actividades informales19

.

4.2 Variaciones en el gasto de Gobierno

Antes de presentar los resultados sobre cómo afecta la demanda del

Gobierno en el sector agrícola actual, es conveniente retomar la

17

Hernández Laos en Aparicio, Villarespe y Urzúa (2009), afirma que las transferencias si

bien se incrementaron de 1992 a 2006, al representar de 8.9 a 18.5%, respectivamente, del

total de los ingresos monetarios de los hogares rurales, sin embargo, son los ingresos

laborales los que representan un mayor peso (80%) en las percepciones totales. 18

A pesar de que consideramos que el sector agrícola como un sector relativamente

pequeño y heterogéneo, la evolución histórica de la superficie sembrada y cosechada en

México permite suponer que incrementos de producción agrícola que oscilen a una tasa de

alrededor 2.5-3% no son lejanos a la realidad y en la medida de lo posible, fáciles de

obtener. 19

En el reporte de Indicadores Oportunos de la Secretaria del Trabajo y Previsión Social

de julio 2013, se estima que casi 30 millones de trabajadores mexicanos se ubican en

actividades informales.

Page 26: Debate Económico No. 6

Debate Económico

20

discusión que Arturo Warman (1978), planteó sobre qué debía realizar

el Estado, una política agrícola o una agraria; la primera se expresa

como un conjunto de medidas económicas por parte del Estado:

inversión directa, financiamiento, regulación de mercados y de

precios, cargas y subsidios fiscales, investigación y divulgación

agrícola, etc. La política agraria siempre ha sido más elemental, su

acción básica ha consistido en repartir la tierra o frenar este proceso.

Evidentemente, en la tercera simulación proponemos que por parte del

Gobierno haya una eficiente política agrícola, es decir, un papel activo

del Estado20

(Gobierno), pero que no se concentre en la burguesía o

neolatifundistas, sino que efectivamente, los recursos económicos

fluyan hacia los pequeños productores, a la par, controlar a los

intermediarios, lo que permitirá que efectivamente se retomen las dos

a cuatro millones de hectáreas que se han dejado de cosechar en los

años recientes. Se estima lo que en teoría pareciera un fuerte

incremento del gasto gubernamental, 20%, sin embargo como se

reporta en el cuadro 8, las erogaciones del estado destinadas al sector

agrícola han decaído en los últimos treinta años, ya que pasó de una

participación en el total de alrededor 13% en 1980 a 3.02% en 201021

.

Por lo que bajo este supuesto, el gasto de Gobierno podría

incrementarse a una proporción de 3.6%, niveles reportados entre

1999-2000, lo cual es bastante asequible.

20

Como lo reporta Palacios Escobar en Cordera y Cabrera (2007), desde finales de la

década de los setentas del siglo pasado, se pueden ubicar un amplio conjunto de programas

sociales tanto en las áreas urbanas y rurales, que sin embargo sólo han contenido, más no

reducido, la expansión de la pobreza en las décadas recientes. 21

Dicho gasto de Gobierno, debiera ser mejor focalizado, ya que como lo reporta Narro et

al. (2013), de los 278 nuevos programas federales en el ámbito del desarrollo social, sólo

24 se adjudicaron a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y

Alimentación (Sagarpa), con un presupuesto de 61 573 millones de pesos, apenas 8.2% del

total de las erogaciones gubernamentales dirigidas al combate a la pobreza en México

durante 2012.

Page 27: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

21

Cuadro 3. Expansión del gasto gubernamental sobre el sector agrícola

Variable Valor

original

Nuevo

valor

Cambio

absoluto

Cambio en

porcentaje

s 0.3986 0.3987 0.0001 0.02%

f 0.3759 0.3763 0.0004 0.10%

d 0.0603 0.0612 0.0009 1.44%

p 0.0701 0.0716 0.0015 2.16%

u 0.0749 0.0721 0.0028 -3.77%

YP1

38.6390 38.6782 0.0392 0.10%

YP2

19.0837 19.1435 0.0598 0.31%

C 10.1329 10.1156 0.0173 -0.17%

YDI

139.1062 139.1338 0.0276 0.02%

YDF

25.6371 25.6619 0.0248 0.10%

YDC

33.4832 34.7345 1.2513 3.74%

YDT

198.2265 199.5302 1.3037 0.66%

Nota: valores promedios para cada variable después de estimar 10 000

escenarios. El valor original denota el promedio que se establece en el

escenario base.

Sin embargo, el efecto que genera elevar la demanda del Gobierno por

bienes agrícolas es apenas mínimo, puesto que el producto total (YDT

)

se expandiría en promedio 0.66%, por su parte, más allá de

incrementar el empleo del sector agrícola ―son los campesinos no

asalariados o pobres los que tendrían hipotéticamente mayor

posibilidades de emplearse bajo este escenario― sólo la demanda de

este sector se incrementa fuertemente, por arriba de tres por ciento22

.

Dada la estructura tanto productiva como de comercio actual, es muy

probable que si no se aplicara otro tipo de política pública, los bienes

22

Inclusive, aunque no se reporta el cuadro de resultados, al realizar un ejercicio con el

supuesto de que el Gobierno incrementara 50% su gasto en el sector, los resultados no

varían en mayor proporción, si bien el producto total de la economía se elevaría en

promedio apenas 1.6% con una caída del índice de concentración de apenas 0.4%, es decir,

por sí mismo, el expandir el gasto del Estado no es una condición sine qua non para

mejorar las condiciones de la población de bajos ingresos, sino que, como se analiza en el

set de simulaciones de balanza comercial, es a partir de conjuntar políticas públicas que

hay ciertos resultados positivos en el conjunto de la economía.

Page 28: Debate Económico No. 6

Debate Económico

22

agrícolas requeridos para satisfacer esta demanda se obtendrían vía

importaciones, de ahí que el empleo y la demanda de los otros dos

sectores de la economía no se modifiquen bajo este escenario23

.

4.3 Cambios en la balanza comercial

En este último subapartado analizaremos los efectos de las variaciones

de las exportaciones y de las importaciones agrícolas en el resto de la

economía. A la par, habrá algunos escenarios donde supondremos una

disminución del coeficiente de importaciones, en especial de bienes

intermedios agrícolas con su consecuente producción nacional, esto es

relevante ante las perspectivas actuales de alta dependencia en la

compra en el exterior de bienes agrícolas, lo cual va acompañado con

la pérdida de soberanía alimentaria24

.

Cabe señalar que consideramos que las exportaciones forman parte

del gasto autónomo ―al igual el que realiza el Gobierno y los

capitalistas― por lo tanto, en esta cuarta simulación consideramos

elevar las exportaciones agrícolas 10% ―el promedio anual del

incremento de las mismas en el periodo del 2000 a 2012 es 8.39%, lo

que nos permite afirmar que dicho supuesto se apega a la evolución

reciente― y las importaciones agrícolas 5%.

Los resultados perfilan el estado actual del modelo de crecimiento

vigente en nuestra economía, es decir, a pesar de que se propone un

fuerte expansión de las exportaciones agrícolas, los efectos sobre todo

en la distribución del ingreso son prácticamente nulos, por otro lado,

el impacto del empleo también es mínimo ―máxime al compararlo

con las estimaciones anteriores― y finalmente el crecimiento de la

demanda total de la economía es también de los más bajos. Por lo

tanto es evidente que al romperse sistemáticamente las cadenas

productivas, en este caso del sector agrícola, a pesar de que se

23

Como se reporta en el cuadro 8 del anexo dos, a partir de 1988 la balanza comercial

agrícola reporta un persistente déficit y sólo en 1995 hubo superávit, aunque esto se debe a

la fuerte devaluación que hubo en dicho año. Además, cultivos como el maíz, sorgo y trigo

han incrementado fuertemente el volumen de toneladas importadas. 24

En el cuadro 11 del segundo anexo se expone la forma en cómo ha disminuido la

producción de algunos bienes básicos como el arroz, y si bien la superficie cosechada del

maíz ha aumentado, esto ha sido gracias al tipo forrajero y no al grano como tal.

Page 29: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

23

proponga dinamizar el sector con un mayor volumen de producción de

bienes destinados a la venta exterior, esto provocará que la fuerte

polarización de ingreso y de empleo persista en el mediano plazo.

Cuadro 4. Modificaciones en el comercio externo agrícola

Variable Valor

original

Nuevo

valor

Cambio

absoluto

Cambio en

porcentaje

s 0.3986 0.3986 0.0000 0.01%

f 0.3759 0.3761 0.0002 0.06%

d 0.0603 0.0608 0.0005 0.85%

p 0.0701 0.0710 0.0009 1.28%

u 0.0749 0.0732 0.0017 -2.23%

YP1

38.6390 38.6622 0.0232 0.06%

YP2

19.0837 19.1191 0.0353 0.19%

C 10.1329 10.1227 0.0103 -0.10%

YDI

139.1062 139.1225 0.0163 0.01%

YDF

25.6371 25.6517 0.0147 0.06%

YDC

33.4832 34.2226 0.7394 2.21%

YDT

198.2265 198.9968 0.7703 0.39%

Nota: valores promedios para cada variable después de estimar 10 000

escenarios. El valor original denota del valor promedio del escenario

base.

Claramente, parte central de la estrategia de desarrollo que se ha

implementado en México y América Latina, se ha enfocado en

impulsar la producción de bienes finales de exportación. Sin embargo,

esto no ha traído en términos reales un crecimiento del empleo o una

mejora en el bienestar social de dichas economías, sino en la mayoría

de los casos, ha resultado totalmente lo contrario. Por lo cual,

debemos ser muy cuidadosos con los resultados de las simulaciones

propuestas en este apartado. Al utilizar un modelo estructuralista, se

toma en cuenta la gran heterogeneidad del aparato productivo

nacional, además del peso específico de las importaciones de bienes

intermedios que son demandados para la producción de bienes finales,

que en la mayoría de los casos, son exportados. Dada la

Page 30: Debate Económico No. 6

Debate Económico

24

caracterización de las ecuaciones del modelo, nos permite realizar los

siguientes supuestos, se estima un incremento de 10% de las

exportaciones agrícolas e industriales, pero se disminuye 5% la

importación de bienes intermedios agrícolas e industriales

respectivamente, así como la de bienes finales del campo, dado que se

supone una caída de la compra de estos productos, se supondrá que la

producción nacional de bienes intermedios agrícolas se expandirá

20%.

Cuadro 5. Incremento de la producción nacional de bienes intermedios

agrícolas

Variable Valor

original

Nuevo

valor

Cambio

absoluto

Cambio en

porcentaje

s 0.3986 0.4046 0.0061 1.52%

f 0.3759 0.0029 0.0029 0.78%

d 0.0603 0.0622 0.0019 3.15%

p 0.0701 0.0734 0.0033 4.73%

u 0.0749 0.0607 0.0142 -18.95%

YP1

38.6390 39.1885 0.5495 1.42%

YP2

19.0837 19.2881 0.2044 1.07%

C 10.1329 10.0023 0.1306 -1.29%

YDI

139.1062 141.2178 2.1116 1.52%

YDF

25.6371 25.8367 0.1996 0.78%

YDC

33.4832 36.3893 2.9060 8.68%

YDT

198.2265 203.4438 5.2173 2.63%

Nota: valores promedios para cada variable después de estimar 10 000

escenarios. El valor original denota del valor promedio del escenario

base.

Al establecer un mecanismo de producción nacional de bienes

intermedios y restringir paulatinamente las importaciones de los

mismos, reflejará fuertes impulsos la producción interna. El

desempleo se abatirá de forma notable y sobre todo se crea empleo

formal (tanto obreros como campesinos asalariados). Dado que las

importaciones de bienes intermedios agrícolas constituyen más del

Page 31: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

25

80% de las compras al extranjero que realiza dicho sector (ver cuadro

10 del segundo anexo), al disminuir su coeficiente de importaciones,

se requerirá que el PIB agrícola se expanda en promedio más allá de

8%, una tasa accesible tanto en función por el porcentaje de población

subocupada, así como el diferencial de 4 millones de hectáreas que no

se han cosechado en los últimos años. Sin embargo, el impacto en

una redistribución del ingreso apenas si sobrepasa el punto porcentual,

aunque los trabajadores pobres en actividades formales (YP1

)

aumentan casi 1.5% sus percepciones, la fuerte heterogeneidad en la

pirámide de la distribución del ingreso condiciona que la creación de

empleos formales y de producción sectorial mejore la distribución del

ingreso en la economía.

Cuadro 6. Combinación de políticas públicas en el sector agrícola

Variable Valor

original

Nuevo

valor

Cambio

absoluto

Cambio en

porcentaje

s 0.3986 0.4023 0.0037 0.92%

f 0.3759 0.0029 0.0020 0.52%

d 0.0603 0.0620 0.0017 3.02%

p 0.0701 0.0731 0.0029 4.53%

u 0.0749 0.0646 0.0103 -13.71%

YP1

38.6390 38.9897 0.3507 0.91%

YP2

19.0837 19.2440 0.1602 0.84%

C 10.1329 10.0440 0.0889 -0.88%

YDI

139.1062 140.3889 1.2827 0.92%

YDF

25.6371 25.7715 0.1345 0.52%

YDC

33.4832 36.0120 2.5288 7.55%

YDT

198.2265 202.1724 -3.9459 1.99%

Nota: valores promedios para cada variable después de estimar 10 000

escenarios. El valor original denota del valor promedio del escenario

base.

Para la sexta simulación se propone la aplicación de un set simultáneo

de políticas públicas, es decir, incrementar 10% el gasto de Gobierno,

la producción nacional de bienes intermedios y las exportaciones

Page 32: Debate Económico No. 6

Debate Económico

26

agrícolas, por otro lado, las importaciones de bienes intermedios y

totales agrícolas disminuirán 5% y las importaciones de bienes

intermedios industriales 3%. A pesar de que el Gobierno se incluye en

esta estimación, los resultados son ligeramente menores al

contrastarlos con la quinta simulación, pero en términos generales

bastante positivos. Se presenta una expansión del empleo formal, las

demandas sectoriales aumentan, sobre todo la agrícola, y por ende, la

producción total se expande en promedio 2%. La distribución del

ingreso mejora al elevarse las percepciones de las clases más pobres.

Finalmente, queda constatado que el sector externo agrícola puede

aportar efectos positivos a la economía nacional, sí y solo sí, se

disminuye paulatinamente el coeficiente de importaciones, sobre todo

de bienes intermedios para que la producción nacional de éstos se

incremente. Reiteramos que no se propone un retorno a viejas

prácticas de una política de sustitución de importaciones como la que

ocurrió el siglo pasado, sino que a través de una política agrícola por

parte del Gobierno, se puedan realizar las siguientes acciones: romper

con los viejos neolatifundios, se impulse la productividad interna y

por ende, se aprovechen los recursos ociosos que al día de hoy

prevalecen en el sector agrícola mexicano. Sin embargo es claro que

aun cuando haya una importante disminución del desempleo, la

desigual distribución del ingreso persiste, por lo que se requiere de

una política de mediano plazo, donde el círculo virtuoso sea la

creación de empleos formales, expansión de la demanda, mejora en

los percepciones de los trabajadores, y por ende, mejorar la

distribución del ingreso, lo anterior hace evidente la falta de un gran

acuerdo social (Gobierno, empresarios y trabajadores) que tenga como

mayor prioridad, la formalización del empleo en México.

Page 33: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

27

5. Conclusiones

A través del análisis de un modelo macro-distributivo se capturaron

las características del sector agrícola y de los diferentes agentes que

ahí se desenvuelven, sin embargo, hacemos énfasis que tanto el

consistente crecimiento del neolatifundio y la pasividad del Estado

mexicano, coadyuvaron tanto a incrementar los niveles de bajo

ingreso salarial del grueso de los campesinos y de la persistente

heterogeneidad en el aparato productivo, lo cual tuvo como mayor

consecuencia que al presentarse la apertura comercial, se optara por

aumentar las importaciones de granos básicos y sólo los herederos de

los neolatifundios pudieran insertarse en el mercado global

―principalmente norteamericano― de algunos cultivos, sin que esto

representará una mejora en los niveles de ingreso, empleo y de

producción del sector.

Por lo tanto, se propusieron una serie de políticas públicas para

examinar sus resultados en el sector agrícola nacional, en primer

lugar, si el Gobierno aplica una importante política social para

incrementar las percepciones de los campesinos pobres e informales

urbanos vía transferencias, los resultados hacen patente una cierta

mejora tanto en el empleo como en el ingreso. Lo anterior, es de suma

importancia, ya que uno de los errores persistentes de la política

agrícola en México, fue el mantener los precios agrícolas bajos, lo que

conlleva en mantener los salarios reales también en un nivel inferior,

sin embargo, como se demuestra en los resultados de la simulación, el

incremento en los ingresos de los campesinos pobres, significará un

aumento de la demanda sectorial, que, en un segundo momento,

significará mejoras en el empleo de la clase pobre, lo que podría

generar las bases de una ruta de crecimiento sostenida.

A la par de expandir los ingresos, si el Gobierno aplica importantes

aumentos de su gasto enfocados en ampliar la producción del sector

agrícola, esto vendrá acompañado de un crecimiento del empleo de

los campesinos pobres. Además, se puede aligerar la alta dependencia

de insumos agrícolas importados que prevalece en la balanza

comercial mexicana. La conclusión de política económica que se

Page 34: Debate Económico No. 6

Debate Económico

28

infiere de este grupo de simulaciones es que vía principalmente

subsidios gubernamentales, aprovechar las capacidades ociosas

imperantes en el sector agrícola y la población económicamente activa

inmersa en el desempleo y la informalidad, para producir bienes

intermedios nacionales y tratar, en la medida de lo posible, disminuir

la dependencia hacia el exterior.

En cuanto a la importancia del sector agrícola para comenzar una ruta

de crecimiento, proponemos que para superar la debilidad productiva

y tecnológica del sector agropecuario, se debe considerar en primer

lugar, colocar a la dependencia alimentaria como factor de suma

importancia (objetivo nacional) de los esfuerzos productivos, sin

descuido de la promoción de exportaciones; y en segundo lugar,

designar al Estado como el agente impulsor principal que coordine y

aliente el cambio tecnológico y no sólo el cambio técnico, es decir,

aplicar una política agrícola completa; lo anterior podría permitir en el

mediano y largo plazo superar la heterogeneidad estructural que

caracteriza al aparato productivo de nuestra economía para poder

cerrar las brechas de productividad aún presentes; puesto que existe

un enorme potencial en las mismas, para llevar a cabo dichas políticas

gubernamentales que amplíen el empleo formal, de esta forma se

permitirá reducir la población que se encuentra en estado de pobreza y

a la vez aumentar los ingresos de la misma.

Page 35: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

29

6. Bibliografía

Camargo López, Jesús (1998) “El sector agropecuario frente a

los nuevos retos del TLC” en Problemas del Desarrollo vol.

27, núm. 105.

Calva, José Luis (1999) “El papel de la agricultura en el

desarrollo económico de México: retrospección y

prospectiva” en Problemas del Desarrollo vol. 30, núm.

118.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe

CEPAL (2010). La hora de la igualdad: Brechas por cerrar

caminos por abrir. Documento de trabajo.

Cordera Campos, Rolando y Cabrera Adame, Carlos Javier.

Coordinadores. (2007). La política social en México:

Tendencias y perspectivas. Facultad de Economía – UNAM.

401 páginas.

Cortes, Fernando (2006). Desigualdad en la distribución

del ingreso y pobreza. México 1992 a 2005. Centro de

Estudios Sociológicos. El Colegio de México.

Cruz Marcelo, José Nabor (2013). Distribución del ingreso y

los modelos de desarrollo en México. Instituto de

Investigaciones Económicas – UNAM. Primera edición. 188

pág.

Figueroa, Víctor Manuel (2005) “América Latina:

descomposición y persistencia de lo campesino” en

Problemas del Desarrollo Vol. 36 núm. 142.

Gordillo, Gustavo y Wagner, Rodrigo (2005). “Las reformas

titubeantes. El campo mexicano, 1975-2000” en Economía-

UNAM Vol. 2 No 005.

Hernández Laos, Enrique (2009). “Crecimiento, distribución

y pobreza en México (una nota)”. Economía UNAM, No.

016.

Josling, Tim (1993). “El TLC y la agricultura: una revisión de

las repercusiones económicas” Economía Mexicana. Nueva

Época, número especial, junio, 1993.

Page 36: Debate Económico No. 6

Debate Económico

30

Kalecki, M. (1937 [1990]). “A theory of commodity, income

and capital taxation”. Included in Collected Works of

Michal Kalecki, Vol. I, Edited by J. Osiatynsky, Oxford

University Press.

Lopez, J. (2005). “Income distribution in Latin America.

Theoretical considerations and Mexico’s experience”.

Economie Appliquée (81-104).

Lusting, Nora y Hoyos, Rafael (2009). "Apertura comercial,

desigualdad y pobreza. Reseña de los enfoques

metodológicos, el estado del conocimiento y la asignatura

pendiente" El Trimestre Económico; Abr-Jun 2009 pp 283-

328.

Narro Robles, J., Moctezuma Navarro, D., y De la Fuente

Stevens, D. (2013). “Descalabros y desafíos de la política

social en México”. Problemas del desarrollo, 44(174), 09-34.

Núñez, Ismael (2002). “Capacidades tecnológicas

agroalimentarias de México en el modelo sustitutivo y en el

modelo liberalizador” en Problemas del Desarrollo Vol. 33

núm. 128.

Rello, Fernando (2009). “Inercia estructural, globalización y

agricultura. Lecciones del caso mexicano” en Economía

UNAM Vol 6, No 017.

Valdés, Alberto, et al. (2010). Evolución y distribución del

ingreso agrícola en América Latina: evidencia a partir de

cuentas nacionales y encuestas de hogares. documento de la

Unidad de Desarrollo Agrícola de la División de Desarrollo

Productivo y Empresarial.

Villarespe, Verónica; Aparicio, Ricardo y Urzúa, Carlos.

Coordinadores. (2009). Pobreza en México: magnitud y

perfiles. CONEVAL, UNAM y Tec de Monterrey. 296

páginas.

Warman, Arturo (1971). “Sociedad campesina y reforma

agraria” publicado en Comunidad de la Universidad

Iberoamericana, Núm. 29, México D.F., febrero.

Warman, Arturo (1975). “El neolatifundio mexicano:

expansión y crisis de una forma de dominio: expansión y

Page 37: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

31

crisis de una forma de dominio” en Comercio Exterior, vol.

25, núm. 12.

Warman, Arturo (1977). “La colectivización en el campo: una

crítica” publicado en Cuadernos Políticos, núm. 11, México

D.F., enero-marzo.

Page 38: Debate Económico No. 6

Debate Económico

32

7. Anexo 1. Cuadro 7A Ecuaciones del modelo

Ecuación Variables Ecuación Variables

i CY Y Y

FY M

Productos

sectoriales (13)

DT DBIT DBFTY Y Y

Productos

intermedios y

finales

(2)I IK IS

Y Y Y Producto

industrial

DBFT DNY Y XT

M BF

(14)

Demanda de

bienes finales

(3)C CK CS

Y Y Y Producto

agrícola

M M MT BI BF (15) Importaciones

totales

IKY RkK (4)

5CK

Y RaA

Ingreso

capitalista

M M MBI BII BIC

(16)

Importaciones

de bienes

intermedios

6IS

Y ZsS

7CD

Y ZdD

Ingresos de

obreros y

campesinos

M M MBF BFIBFC

M BFG

(17)

Importaciones

de bienes finales

8F

Y ZfF

9U

Y ZuU

Ingresos

informales y

desemplead

os

G G GT I F

G MC BFG

(18)

Demanda

Gubernamental

(10)

P IS CD CPY Y Y Y

F UY Y

Ingresos de

los pobres

DBIT DBII DBICY Y Y

(19)

Demanda total

de bienes

intermedios

( )I ZsW RkLY

I

(11)

Producto

real del

sector

industrial

DBIIY Y YBIIFBIIC

YBII

(20)

Demanda de

bienes

intermedios

industriales

12cuI

Determinaci

ón del

margen

DBICY Y YBICI BICF

YBICC

(21)

Demanda de

bienes

intermedios

agrícolas

Ventas totalesY

CMP Salarios totales

Como se

calcula el

margen

Demandas finales de cada sector:

DI DIK DCK DBII IS F CS

IS F CS

CP

CP I I BFI BII

Y Y Y Y Y Y Y

Y G X M M

(22) Demanda

industrial

)23(F

CP

CP

CS

CS

F

F

IS

IS

DF GYYYYY

Demanda

informal

DC DBIC IS F CS

IS F CS

CP

CP C C BFC BIC

Y Y Y Y Y

Y G X M M

(24) Demanda

agrícola

Page 39: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

33

1IS IS IS (25)

Demand

a de los

pobres

al sector

industria

l

1CS CS CS (27)

281 CPCPCP

Dema

nda de

los

asalari

ados y

no

asalari

ados

agríco

las

1F F F (26) Demand

a de los

pobres

al sector

informal

Ip

IrC

Índice de concentración que

relaciona el ingreso del 10 decil, entre la

sumatoria de ingresos de los 7 deciles más

pobres

kK aAC

sS dD pP fF uU

Donde se cumple que:

1k a 1s f u d p

k = proporción de los capitalistas industriales del

total de ricos

K = ingreso por persona de los capitalistas

industriales

a = proporción de los capitalistas ricos del sector

agrícola

A = ingreso por persona de los capitalistas

agrícolas o rurales

s = proporción del número de obreros pobres en

relación al total de pobres de la economía

S = ingreso por persona de los obreros pobres

f = proporción de los trabajadores informales

urbanos en relación al total de pobres

F = ingreso por persona de los trabajadores

informales urbanos

d = proporción de campesinos asalariados en

relación al total de pobres

D = ingreso por persona de los campesinos

asalariados

p = proporción de campesinos no asalariados en

relación al total de pobres

P = ingreso por persona de los campesinos no

asalariados

u = proporción de los desempleados en relación al

total de pobres de la economía

U = ingreso por persona de los desempleados

Page 40: Debate Económico No. 6

Debate Económico

34

Cuadro 7B. Simplificación del modelo

En el siguiente anexo exponemos la simplificación del modelo estructuralista que se

desarrolló para esta investigación, si bien por cuestiones de espacios se omite el

desarrollo algebraico en extenso, se considera que esta versión simplificada da cuenta

de los aspectos centrales del propio modelo.

Ecuación base Variables Intervalo Observaciones

kK aAC

sS fF uU dD

1,0,

,,,,,

pd

ufsak

Se cumplirá que:

1 ak

1 pdufs

10 akR

70 pdufsZ

9.0,7.0k

, 9,8K

3.0,1.0a ,

8,7A,

5.0,35.0s ,

1,7.0S

4.0,52.0f ,

7.0,5.0F

2.0,05.0u

25.0,15.0U

07.0,05.0d

6.0,5.0D

08.0,06.0p

5.0,4.0D

De acuerdo con datos de la

Secretaria del Trabajo y

Previsión Social (STPS) la

población económicamente

activa al segundo semestre de

2012, está compuesta por 48

203 851 personas, de las

cuales sólo 3 857 322 perciben

más de 5 salarios mínimos

(SM) mensuales y 39 281 051

perciben entre menos de un

salario mínimo hasta 5 SM

mensuales. La proporción

entre el grupo de ricos y

pobres es de 9.8. Por lo tanto,

dicha proporción se mantiene

al estimar los ingresos medios

de los pobres y ricos, a partir

de los valores propuestos para

cada grupo social.

G G GT I F

G MC BFG

16,12IG

5.10,8FG

y

5, 7GC

El gasto del Gobierno oscila

en un intervalo de 15-20% del

producto (Y) total del modelo

base. Se asignará en 50% al

gasto en bienes industriales,

20% bienes agrícolas y 30%

bienes informales.

0.4,0.5IS ,

35.0,25.0CD , 3.0,2.0CP ,

3.0,2.0F

3.0,2.0IS , 25.0,15.0CD , 3.0,2.0CP ,

45.0,35.0F 0.25,0.35IS ,

0.45,0.55CS ,

0.45,0.55CP ,

4.0,3.0F

En este apartado presentamos

las demandas sectoriales de

cada una de las clases pobres,

a saber, obreros industriales,

campesinos asalariados y no

asalariados, y finalmente

urbanos informales, para cada

uno de los tres sectores

considerados.

M M MT BI BF 46, 54MT ,

37, 43M BI

9, 11M BF

Definimos el % de las

importaciones totales, de

acuerdo a la participación en

el PIB. La importación de

Page 41: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

35

bienes intermedios

representará entre 75 al 85%

del monto total, contra 15 al

25% de productos finales que

son importados por la

economía nacional.

M M MBI BII BIC

34, 39M BII 3, 4M BIC Las importaciones de bienes

intermedios industriales

constituyen 90% del total de

dicho apartado, las agrícolas

constituyen menos del 10%

del mismo.

B F GB F I

B F CB F

MM

MM

2, 2.5MBFC 6,5BFIM y

5.2,2BFGM

El sector industrial es el que

demandará más bienes finales

importados en relación al

sector agrícola y del Gobierno.

B I I

B I I FB I I C

D B I I

Y

YYY

7,5B I I CY

3, 5YBIIF

10, 12YBII

La composición interna de

bienes intermedios que

demanda el sector industrial,

se asemeja a los porcentajes

de participación sobre el total,

que se reportan en las cuentas

nacionales.

BICFBICI

DBIC YYY

4, 5YBICI

2, 3YBICF ,

1.5, 2.5YBICC

Al igual que el sector anterior,

los bienes intermedios

agrícolas son demandados por

el sector industrial.

X X XT IC

43, 50XT

6,5CX 44,38IX

Las exportaciones industriales

representarán en promedio

entre 85 al 88 por ciento del

total, el resto de la

participación porcentual

corresponderá al sector

agrícola.

Page 42: Debate Económico No. 6

Debate Económico

36

Anexo 2. Estadísticas económicas de largo plazo

Cuadro 8. Estadísticas históricas del sector agrícola, 1950-2012 (1)

AñoPoblación

Rura l Tota l 1/

PEA

Población

Economica

Activa Rura l

1/

Población

Ocupada

rura l Tota l1/

Superficie

Cosechada

Tota l2/

Variación

anual de la

superficie

cosechada

Superficie

Cosechada:

Granos 2/

Superficie

Cosechada

Cultivos de

Exportación

2/

Superficie

Cosechada

Cultivos

Industria les

2/

Exportacione

s Agro-

a l imentarias

3/

Importacione

s Agro-

a l imentarias

3/

Balance

Comercia l

Agro-

a l imentario

3/

1950 15,893.36 5,322.57 4,823.90 7,960.10 6,046.40 388.30 825.33

1951 16,092.88 5,347.65 4,942.00 8,230.20 3.4% 6,173.00 402.40 948.66

1952 16,294.90 5,372.86 5,062.90 7,858.20 -4.5% 5,876.70 422.10 849.89

1953 16,499.45 5,398.18 5,186.90 8,592.60 9.3% 6,587.90 464.60 817.77

1954 16,706.58 5,423.62 5,313.80 9,430.80 9.8% 7,215.60 483.60 994.43

1955 16,916.31 5,449.18 5,443.90 9,893.30 4.9% 7,454.10 523.40 1,138.80

1956 17,161.21 5,483.34 5,577.10 9,898.10 0.0% 7,655.10 462.50 954.97

1957 17,409.65 5,517.72 5,713.60 10,037.50 1.4% 7,583.00 581.60 1,012.10

1958 17,661.69 5,552.31 5,853.50 11,419.10 13.8% 8,801.00 611.80 1,125.20

1959 17,917.38 5,587.12 5,996.80 11,334.80 -0.7% 8,906.00 649.30 870.76

1960 18,176.77 5,622.15 6,143.50 10,673.70 -5.8% 7,983.00 705.50 1,020.10 ... ...

1961 18,426.41 5,611.64 6,030.60 11,697.60 9.6% 9,004.40 711.10 914.46 505.80 121.50 384.30

1962 18,679.47 5,601.14 5,919.80 11,819.70 1.0% 9,044.70 734.90 907.00 586.40 127.60 458.70

1963 18,936.01 5,590.66 5,811.00 12,709.60 7.5% 9,825.40 774.60 966.70 582.10 172.20 409.90

1964 19,196.07 5,580.20 5,704.30 13,771.60 8.4% 10,779.10 869.50 928.90 646.30 161.70 484.60

1965 19,459.70 5,569.76 5,599.40 14,180.10 3.0% 11,145.90 895.00 923.50 732.80 192.10 540.70

1966 19,710.12 5,554.28 5,496.50 15,086.70 6.4% 11,986.30 922.30 805.00 759.10 190.80 568.30

1967 19,963.76 5,538.83 5,395.50 14,262.50 -5.5% 11,161.00 948.10 763.10 714.90 195.20 519.70

1968 20,220.67 5,523.44 5,296.40 14,442.90 1.3% 11,225.60 959.10 810.60 738.60 189.70 548.90

1969 20,480.88 5,508.08 5,199.10 13,711.90 -5.1% 10,636.50 891.50 627.30 836.50 215.40 621.10

1970 20,745.77 5,467.79 5,103.50 14,260.50 4.0% 11,143.70 949.70 530.20 773.20 337.90 435.30

1971 21,016.61 5,643.83 5,157.50 14,737.10 3.3% 11,360.30 943.20 586.40 785.50 290.20 495.30

1972 21,290.99 5,825.53 5,212.00 14,430.20 -2.1% 10,930.70 913.40 640.50 960.50 361.70 598.70

1973 21,568.95 6,013.09 5,267.20 14,957.40 3.7% 11,451.50 947.50 544.60 1,115.50 638.20 477.30

1974 21,850.55 6,206.68 5,322.90 14,007.80 -6.3% 10,372.00 935.50 703.30 106.60 215.60 -109.00

1975 22,135.81 6,406.51 5,379.20 14,353.90 2.5% 10,926.90 946.10 339.40 1,132.10 1,134.90 -2.80

1976 22,293.25 6,529.74 5,436.10 13,371.30 -6.8% 10,403.70 939.90 347.30 209.40 845.20 -635.80

1977 22,451.81 6,655.34 5,493.60 15,114.80 13.0% 11,403.10 920.70 524.40 201.30 1,198.80 -997.50

1978 22,611.49 6,783.36 5,551.70 14,773.50 -2.3% 11,051.50 1,002.50 459.20 499.60 222.70 276.90

1979 22,772.31 6,913.84 5,610.40 12,723.40 -13.9% 8,530.60 995.40 487.60 438.50 302.90 135.60

1980 22,934.28 7,046.83 5 669.70 16,039.48 26.1% 11,072.23 1,086.40 465.90 2,354.80 3,857.17 -1,502.37

1981 23,149.71 7,149.85 5,723.40 20,904.98 30.3% 12,727.72 1,100.90 452.90 2,221.10 4,178.83 -1,957.73

1982 23,367.16 7,254.37 5,777.70 14,476.95 -30.7% 9,950.19 1,125.30 279.10 1,992.70 2,647.55 -654.85

1983 23,586.65 7,360.42 5,832.40 22,890.84 58.1% 12,335.38 1,135.90 309.10 1,995.10 2,631.67 -636.57

1984 23,808.21 7,624.55 5,887.60 16,805.62 -26.6% 11,767.59 1,113.70 391.20 2,380.60 2,795.09 -414.49

1985 24,031.84 7,577.19 5,943.40 18,172.52 8.1% 13,047.04 1,078.20 302.30 2,231.80 2,693.96 -462.16

1986 24,187.03 7,424.88 5,999.70 16,979.69 -6.6% 11,535.65 1,305.00 278.80 3,136.30 2,009.71 1,126.58

1987 24,343.22 7,275.63 6,056.60 17,912.36 5.5% 11,981.89 1,332.10 326.60 2,991.30 2,239.62 751.68

1988 24,500.42 7,129.38 6,113.90 17,094.54 -4.6% 11,618.49 1,390.10 410.20 3,214.50 3,785.70 -571.20

1989 24,658.63 6,986.07 6,171.80 16,617.25 -2.8% 11,055.86 1,371.70 273.20 3,219.60 4,912.40 -1,692.80

1990 24,817.86 6,845.64 … 17,974.64 8.2% 12,628.30 1,233.10 316.40 3,425.30 5,744.63 -2,319.33

1991 24,907.62 7,008.82 ... 17,106.49 -4.8% 11,739.43 1,263.10 335.00 4,237.30 5,194.00 -956.70

1992 24,997.71 7,175.89 8,189.80 17,278.43 1.0% 11,222.26 1,417.40 138.10 3,975.40 6,744.20 -2,768.80

1993 25,088.12 7,346.95 8,842.80 17,423.33 0.8% 11,419.65 1,337.30 152.50 4,092.60 5,988.30 -1,895.70

1994 25,178.86 7,522.08 8,378.30 18,866.62 8.3% 12,731.59 1,403.30 276.80 5,110.51 8,644.15 -3,533.64

1995 25,269.93 7,701.39 7,921.70 18,753.55 -0.6% 12,707.72 1,369.30 382.70 7,278.40 5,944.10 1,334.20

1996 25,259.86 7,872.05 9,020.30 19,981.00 6.5% 13,527.90 1,435.60 421.20 7,440.80 8,695.60 -1,254.80

1997 25,249.79 8,046.50 7,817.40 18,727.84 -6.3% 12,088.55 1,372.80 318.20 8,134.30 9,214.20 -1,079.90

1998 25,239.72 8,224.82 8,208.70 20,212.68 7.9% 13,179.27 1,376.20 362.10 8,551.00 10,108.00 -1,556.60

1999 25,229.66 8,407.09 7,060.70 19,097.57 -5.5% 11,833.12 1,442.30 256.60 8,514.10 10,193.00 -1,678.90

2000 25,219.61 8,593.40 7,065.50 18,734.05 -1.9% 11,638.44 1,391.97 180.90 9,203.77 11,699.00 -2,495.20

2001 25,196.14 8,662.56 7,206.70 20,032.83 6.9% 12,572.34 1,446.86 191.90 8,861.47 13,075.60 -4,214.20

2002 25,172.70 8,732.28 7,282.04 19,318.97 -3.6% 11,924.00 1,424.80 135.20 8,894.05 13,700.20 -4,806.20

2003 25,149.28 8,802.56 7,053.44 20,118.78 4.1% 12,473.32 1,460.35 153.80 9,893.41 14,917.30 -5,023.90

2004 25,125.88 8,873.41 6,879.93 20,191.53 0.4% 12,178.74 1,491.22 201.50 11,223.91 16,573.27 -5,349.36

2005 25,102.51 8,944.82 6,163.53 18,528.49 -8.2% 10,540.70 1,509.01 198.30 12,698.60 17,761.00 -5,062.30

2006 25,037.48 9,136.93 5,995.00 19,967.46 7.8% 11,726.84 1,500.61 187.20 14,932.30 19,694.80 -4,762.49

2007 24,972.63 9,333.17 5,842.54 20,054.63 0.4% 11,718.76 1,538.13 176.50 15,923.96 23,432.60 -7,508.63

2008 24,907.94 9,533.62 5,802.62 20,502.83 2.2% 11,982.02 1,536.13 166.60 17,889.19 27,698.90 -9,809.70

2009 24,843.42 9,738.38 5,800.89 18,688.83 -8.8% 10,312.52 ... … 17,112.99 21,073.02 -3,960.03

2010 24,779.07 9,947.53 5,799.11 20,167.77 7.9% 11,601.38 ... ... 19,239.03 24,217.70 -4,978.66

2011 18,095.11 -10.3% 9,658.55 ... ... 23,240.00 30,018.00 -6,778.20

2012 23,492.00 27,832.00 ...

Page 43: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

37

Cuadro 8. Estadísticas históricas del sector agrícola, 1950-2012 (2)

Año

Volumen de

Importación

Maiz 4/

Volumen de

Importación

Sorgo 4/

Volumen de

Importación

Trigo 4/

Precio de

Tonelada

Importada de

Maiz 5/

Tierra

Cultivable 6/

Numero de

Tractores 7/

Tractores por

100km2 de

tierra

cul tivable 7/

Valor

Agregado del

Sector

Agricola (%

del PIB) 8/

% del PIB

Agricola en el

Tota l 8/

1950 0.36 ... 427.07 10.8%

1951 50.74 1.20 378.25 10.1%

1952 24.82 0.80 452.31 10.4%

1953 376.79 2.30 249.44 11.2%

1954 146.72 0.10 68.52 11.3%

1955 0.99 1.50 9.55 10.5%

1956 119.01 0.20 84.89 10.6%

1957 … 49.20 19.06 10.4%

1958 810.44 3.89 0.43 9.8%

1959 49.24 6.67 4.01 39.20 10.0%

1960 28.48 9.49 4.36 24.90 9.5%

1961 34.08 31.32 7.61 25.80 50.54 56,000 24.98 9.5%

1962 17.90 58.65 27.13 330.10 50.50 60,000 26.86 9.5%

1963 475.83 137.89 46.16 ... 50.47 64,000 28.75 9.5%

1964 46.50 21.34 62.41 ... 50.44 68,000 30.66 9.0%

1965 12.03 33.85 12.54 ... 50.40 72,000 32.58 13.74 8.6%

1966 4.50 22.92 1.12 ... 50.37 76,000 34.51 12.60 8.3%

1967 5.08 4.52 1.17 ... 50.33 80,150 36.55 12.29 8.1%

1968 5.50 60.61 1.60 ... 50.29 83,900 38.40 11.45 7.6%

1969 8.44 11.72 0.76 ... 50.26 87,600 40.24 10.95 7.5%

1970 761.79 25.89 1.13 73.90 50.23 91,354 42.12 12.73 7.0%

1971 18.31 17.11 177.11 106.30 50.30 92,800 42.53 12.61 7.2%

1972 204.21 246.31 641.50 80.20 50.37 94,300 42.96 11.52 6.6%

1973 1,145.18 13.60 719.56 107.30 50.45 95,700 43.34 12.15 6.4%

1974 1,282.13 426.72 976.64 153.50 50.52 97,200 43.78 12.04 6.2%

1975 2,660.84 835.08 88.53 149.50 50.59 98,700 44.18 11.81 6.0%

1976 913.79 44.57 5.33 125.00 50.68 100,100 44.53 11.21 5.8%

1977 1,985.62 714.52 456.37 94.80 50.77 101,611 44.96 11.16 6.0%

1978 1,418.53 729.23 458.50 114.10 50.84 108,259 47.61 10.91 5.9%

1979 744.00 1,263.35 1,169.01 136.60 50.91 114,000 49.85 9.85 6.4%

1980 4,187.07 2,253.92 923.46 140.70 51.03 115,057 50.02 9.00 6.2%

1981 2,954.57 2,631.19 1,129.61 153.30 51.06 143,078 62.07 8.96 5.6%

1982 249.93 1,641.27 311.16 150.80 51.13 146,083 63.14 8.14 5.8%

1983 4,645.13 3,330.45 401.05 136.60 51.15 152,319 65.83 8.45 6.2%

1984 2,427.87 2,311.29 334.33 154.50 51.15 155,000 66.99 9.39 6.2%

1985 2,223.49 2,222.42 319.98 114.90 51.54 178,571 76.64 10.07 5.9%

1986 1,703.47 781.73 224.09 97.20 51.96 202,141 86.02 10.30 6.2%

1987 3,602.89 765.87 434.58 78.70 52.32 225,712 95.24 9.68 5.8%

1988 3,188.29 1,449.01 1,191.71 119.20 52.68 250,000 104.60 7.90 5.8%

1989 3,538.20 2,622.03 428.26 120.90 53.04 272,900 113.24 7.75 5.3%

1990 4,104.17 2,860.82 338.74 106.30 53.40 300,000 123.46 7.85 5.2%

1991 1,371.24 2,871.33 352.47 130.50 53.76 317,313 129.78 7.52 4.9%

1992 1,318.27 4,726.68 1,076.52 140.80 54.12 312,408 127.00 6.68 4.9%

1993 210.64 3,745.18 1,741.48 331.00 54.48 307,503 123.99 6.29 4.9%

1994 2,746.63 3,473.25 1,413.74 134.50 54.84 302,597 121.52 5.97 4.7%

1995 2,686.91 2,092.50 1,222.65 140.00 55.15 297,692 118.60 5.67 5.0%

1996 5,872.15 2,066.39 1,969.32 181.10 55.15 292,787 117.11 6.26 5.0%

1997 2,473.56 2,189.02 1,794.67 153.40 55.15 287,882 115.15 5.70 4.7%

1998 5,211.92 3,246.93 2,473.83 119.80 54.94 282,977 112.74 5.27 4.5%

1999 5,621.02 4,568.15 2,580.07 106.90 54.68 278,072 110.79 4.74 4.5%

2000 5,347.61 5,142.00 2,794.40 102.80 54.43 273,166 108.83 4.17 4.2%

2001 6,174.02 5,032.10 3,385.80 104.40 54.22 268,261 106.88 4.15 4.4%

2002 5,512.90 4,716.80 3,139.80 116.90 53.96 263,356 104.92 3.94 4.4%

2003 5,764.14 3,381.40 3,499.90 126.30 53.76 258,451 102.97 3.99 4.5%

2004 5,518.68 3,159.30 3,585.50 135.00 53.55 253,546 101.01 3.85 4.2%

2005 5,743.67 3,020.47 3,717.62 124.30 53.24 248,640 99.46 3.72 4.1%

2006 7,609.93 2,624.55 3,446.63 149.60 52.73 243,735 99.48 3.67 4.0%

2007 7,954.72 1,878.47 3,252.56 195.40 52.67 238,830 97.67 3.64 4.1%

2008 9,145.98 1,553.42 3,217.03 261.50 52.93 3.65 4.1%

2009 7,260.61 2,496.91 2,776.92 197.90 52.90 3.94 4.4%

2010 7,848.99 2,252.51 3,495.48 201.70 52.98 3.91 4.4%

2011 9,476.17 2,380.30 4,047.80 315.50 53.07 3.78

2012 9,515.10 ... … 314.90

Page 44: Debate Económico No. 6

Debate Económico

38

1/ Población en miles de personas a junio de cada año. Fuente Cepal

2/ Superficie total cosechada en miles de hectáreas. Fuente Cepal

3/ En millones de dólares. Fuente Cepal

4/ En miles de toneladas. Fuente Cepal

5/ Precio unitario US$ dólares / tonelada. Fuente Cepal

6/ Como porcentaje del total del territorio. Fuente Banco Mundial

7/ Número de tractores que se ocupan en tierras arables. Fuente Banco

Mundial

8/ Fuente Banco Mundial

Cuadro 9. Estadísticas económicas del sector agrícola de México,

1980-2012 (1)

Año PIB Total 1/PIB Agrícola

Total 1/

% del PIB

Agricola en el

Total

Crédito Total

2/

Crédito Agro-

pecuario 3/

% del Crédito

Agro en el

Total

Gasto Total

2/

Gasto Agro-

pecuario 2/

% del Gasto

Agro en el

Total

Valor de la

Producción

Agro Total 3/

1980 342,940 16,132 4.70% 1,313 178 13.54% 1,160 153 13.17% 62,512

1981 372,235 17,403 4.68% 2,030 219 10.76% 1,803 216 11.98% 66,342

1982 370,163 16,908 4.57% 4,480 281 6.26% 2,644 295 11.16% 61,286

1983 357,347 17,331 4.85% 6,974 427 6.12% 4,246 489 11.51% 62,807

1984 369,548 17,588 4.76% 11,015 781 7.09% 7,141 719 10.06% 63,611

1985 377,690 18,205 4.82% 20,161 1,267 6.28% 10,573 1,012 9.57% 69,053

1986 365,916 17,886 4.89% 45,626 1,818 3.99% 17,197 1,714 9.97% 65,969

1987 372,273 18,169 4.88% 115,840 3,692 3.19% 39,223 3,210 8.18% 66,905

1988 377,056 17,547 4.65% 136,568 8,186 5.99% 74,222 4,537 6.11% 65,037

1989 392,886 17,531 4.46% 180,546 13,534 7.50% 88,273 5,022 5.69% 63,300

1990 452,558 21,912 4.84% 249,020 21,389 8.59% 117,122 13,042 11.14% 68,767

1991 471,666 22,422 4.75% 337,354 24,850 7.37% 148,879 10,818 7.27% 70,758

1992 488,781 22,205 4.54% 467,320 33,393 7.15% 178,266 14,540 8.16% 71,474

1993 498,315 22,888 4.59% 583,495 40,972 7.02% 206,987 18,159 8.77% 74,213

1994 520,317 22,929 4.41% 872,252 51,371 5.89% 249,481 22,243 8.92% 76,045

1995 488,229 23,349 4.78% 1,123,269 55,507 4.94% 290,424 20,662 7.11% 79,142

1996 513,389 24,235 4.72% 1,231,757 65,661 5.33% 403,450 27,132 6.73% 81,857

1997 548,156 24,274 4.43% 1,280,954 70,500 5.50% 528,124 28,202 5.34% 83,852

1998 575,730 25,008 4.34% 1,325,993 61,240 4.62% 600,583 30,248 5.04% 87,816

1999 597,359 25,383 4.25% 1,395,145 55,458 3.98% 711,228 26,644 3.75% 89,937

2000 636,731 25,479 4.00% 1,347,897 49,453 3.67% 855,286 29,828 3.49% 91,808

2001 636,522 26,993 4.24% 1,279,766 44,254 3.46% 937,214 32,405 3.46% 98,741

2002 641,436 26,738 4.17% 1,414,222 36,003 2.55% 1,078,861 34,299 3.18% 98,483

2003 650,353 27,765 4.27% 1,433,412 33,244 2.32% 1,241,853 40,170 3.23% 102,490

2004 676,445 28,569 4.22% 1,438,824 20,438 1.42% 1,326,952 41,456 3.12% 104,970

2005 698,988 28,372 4.06% 1,581,221 21,711 1.37% 1,477,368 46,279 3.13% 87,586

2006 734,348 29,440 4.01% 1,686,303 22,187 1.32% 1,671,175 48,779 2.92% …

2007 759,048 30,980 4.08% 1,979,695 27,959 1.41% 1,911,321 57,118 2.99% ...

2008 770,643 31,592 4.10% 2,229,869 33,879 1.52% 2,229,155 64,112 2.88% ...

2009 724,352 31,535 4.35% 2,356,412 29,906 1.27% 2,261,936 70,529 3.12% ...

2010 762,743 33,269 4.36% 2,545,029 33,932 1.33% 2,425,553 73,369 3.02% ...

Page 45: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

39

Cuadro 9. Estadísticas económicas del sector agrícola de México,

1980-2012 (2)

1/ En miles de dólares constantes al año 2000. Fuente Cepal

2/ En millones de pesos. Fuente Cepal

3/ En millones de pesos y es la sumatoria del crédito otorgado a los

subsectores agrícola, pecuario, silvícola y pesca. Fuente Cepal

4/ Porcentaje en relación al total referido Fuente Cepal

Año  Agrícola 3/   Pecuario 3/ Ganadería 3/ Avicultura 3/ Apicultura 3/ Si lvícola 3/   Pesca 3/Población en

Pobreza 4/

Población

Rura l en

Pobreza 4/

% del empleo

en el sector

agrícola

1980 41,517 20,995 17,357 3,390 249 ... ... ... ...

1981 44,366 21,976 18,159 3,547 270 ... ... ... ...

1982 38,739 22,547 18,643 3,713 191 ... ...

1983 40,492 22,316 18,200 3,856 260 ... ...

1984 41,561 22,050 17,861 4,009 180 ... ... 53.50 25.40

1985 46,591 22,463 17,675 4,629 159 ... ...

1986 43,836 22,133 16,512 5,336 285 ... ... ... ...

1987 45,165 21,740 16,215 5,285 240 ... ... ... ...

1988 43,545 21,492 15,713 5,558 221 4,123 3,413 ... ... 23.50

1989 43,371 19,929 14,324 5,369 236 4,126 3,559 56.70 27.90

1990 47,915 20,852 14,827 5,771 254 3,993 3,713 ... ... 22.60

1991 47,922 22,836 16,012 6,559 266 3,944 3,709 ... ... 26.80

1992 47,856 23,618 16,606 6,767 244 3,969 3,421 54.90 25.70

1993 49,354 24,859 17,119 7,503 237 3,746 3,890 ... ... 26.90

1994 50,284 25,761 17,688 7,858 215 3,823 3,958 56.50 27.50

1995 52,366 26,776 18,163 8,426 188 3,534 4,358 ... ... 23.80

1996 55,402 26,455 17,931 8,336 188 3,782 4,563 62.80 33.00 22.20

1997 56,013 27,839 18,368 9,267 205 4,071 4,473 ... ... 23.70

1998 58,138 29,677 19,145 10,321 211 4,272 3,932 58.50 31.10 19.60

1999 58,436 31,502 19,962 11,328 211 4,404 4,081 ... ... 20.50

2000 58,825 32,984 20,627 12,131 225 4,695 4,105 54.70 28.50 18.00

2001 64,602 34,138 21,089 12,823 226 4,396 4,334 ... ... 17.90

2002 63,411 35,072 21,445 13,402 225 4,096 4,287 ... 21.90 17.90

2003 67,030 35,460 21,636 13,606 218 4,161 4,901 ... ... 16.80

2004 68,262 36,708 22,046 14,444 217 … … 44.10 19.30 16.40

2005 50,308 37,278 22,206 14,873 199 ... ... ... ... 14.90

2006 ... .. ... … ... ... ... 47.50 21.70 14.30

2007 ... ... ... ... ... ... ... 13.50

2008 ... ... ... ... ... ... ... 13.10

2009 ... ... ... ... ... ... ... 13.50

2010 ... ... ... ... ... ... ... 13.10

Page 46: Debate Económico No. 6

Debate Económico

40

o

Val

or

Bru

to d

e la

Pro

du

cció

n

Agr

ico

la

Dem

and

a

inte

rmed

ia

Dem

and

a d

e

bie

nes

fin

ales

Co

nsu

mo

Pri

vad

o

Co

nsu

mo

inte

rmed

io

Form

ació

n

bru

ta d

e

Cap

ital

Fijo

imp

ort

acio

nes

tota

les

M d

e b

ien

es d

e

Form

ació

n d

e

Cap

ital

M d

e B

ien

es

de

Co

nsu

mo

Fin

al

M d

e

Co

nsu

mo

Inte

rmed

io

Rem

u-

ner

acio

nes

de

Asa

lari

ado

s 2

/

2003

100%

54.5

5%

45.4

5%

34.3

1%

7.5

7%

1.7

0%

8.9

4%

0.1

4%

1.1

8%

7.5

7%

11.0

6%

2004

100%

54.7

1%

45.2

9%

35.9

3%

7.2

1%

1.6

4%

8.3

8%

0.1

1%

1.0

6%

7.2

1%

10.0

6%

2005

100%

51.3

7%

48.6

3%

38.6

1%

6.4

4%

1.7

4%

7.7

7%

0.1

9%

1.1

4%

6.4

4%

9.6

2%

2006

100%

52.0

7%

47.9

3%

36.7

5%

6.6

5%

1.6

7%

8.0

7%

0.1

8%

1.2

4%

6.6

5%

9.3

6%

2007

100%

52.7

5%

47.2

5%

36.7

6%

6.0

2%

1.6

6%

7.4

9%

0.1

9%

1.2

8%

6.0

2%

8.4

2%

2008

100%

53.6

0%

46.4

0%

35.9

9%

7.0

6%

1.6

6%

8.5

3%

0.2

1%

1.2

6%

7.0

6%

7.6

4%

2009

100%

54.2

3%

45.7

7%

34.9

2%

5.6

8%

1.6

2%

6.9

7%

0.1

1%

1.1

8%

5.6

8%

7.5

3%

2010

100%

54.7

5%

45.2

5%

34.5

7%

6.2

1%

1.5

7%

7.5

4%

0.1

1%

1.2

3%

6.2

1%

7.6

2%

2011

100%

55.4

8%

44.5

2%

34.0

8%

6.6

0%

1.5

7%

7.9

4%

0.1

1%

1.2

4%

6.6

0%

7.6

8%

No

ta:

la

abre

via

tura

M d

enota

im

port

ació

n. T

odos

los

com

ponen

tes

se c

alcu

laro

n

a p

arti

r d

e d

ato

s co

nst

ante

s del

2003,

a ex

cepci

ón d

e la

rem

uner

ació

n a

asal

aria

dos,

el

porc

enta

je s

e re

fier

e a

val

ore

s co

rrie

nte

s. F

uen

te:

elab

ora

ción

pro

pia

con

dat

os

de

INE

GI.

Cu

adro

10

. P

arti

cip

acio

nes

rel

ativ

as e

n e

l S

ecto

r A

grí

cola

, 2003

-2011

Page 47: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

41

Año

Aguacate

Arro

z 1/Frijo

lM

aiz 2/So

rgo 3/

Jitom

ate Trigo

4/A

guacateA

rroz 1/

Frijol

Maiz 2/

Sorgo

3/Jito

mate

Trigo 4/

Aguacate

Arro

z 1/Frijo

lM

aiz 2/So

rgo 3/

Jitom

ate Trigo

4/

198054,498

127,4771,551,352

6,892,8221,596,412

69,472728,020

441,768445,364

935,17414,793,987

5,850,2221,320,628

2,819,1788.11

3.490.60

26.6334.67

19.0111.98

198155,640

174,7921,990,569

7,763,4441,736,928

61,224861,801

460,879709,611

1,331,28716,888,664

7,215,4151,310,151

3,225,2168.28

4.060.67

37.6835.08

21.4019.38

198255,796

156,8091,571,092

5,742,0531,325,846

63,2341,013,167

486,056515,741

979,80212,675,631

5,470,0481,427,327

4,450,1318.71

3.290.62

29.8129.14

22.5715.84

198357,480

133,3261,957,801

7,522,6781,590,768

63,809858,185

426,618421,050

1,285,17116,091,553

6,166,4061,505,421

3,490,9367.42

3.160.66

36.0034.84

23.5928.24

198456,869

125,8961,679,426

6,989,4571,710,612

72,5211,034,342

439,418487,133

930,69215,672,505

6,466,8701,687,946

4,509,7987.73

3.870.55

36.7033.57

23.2813.69

198573,015

216,4661,782,341

7,725,9251,936,492

69,3291,218,373

566,451807,529

911,90817,365,904

8,035,9071,616,394

5,225,2647.76

3.730.51

29.5629.24

23.3212.77

198666,362

157,4301,807,976

6,581,6541,604,431

63,6491,203,304

627,906544,632

1,085,53614,589,362

6,146,3161,837,590

4,781,5649.46

3.460.60

29.3429.37

28.8715.30

198761,211

154,8141,787,066

6,932,2211,921,771

74,154989,028

520,837590,999

1,023,73415,236,412

7,485,4531,781,298

4,421,4108.51

3.820.57

32.9628.54

24.0210.93

198878,084

126,6701,947,298

6,651,6621,869,686

72,184913,454

682,928456,548

862,42813,909,383

7,260,5281,839,548

3,671,6758.75

3.600.44

27.6929.83

25.4813.48

198956,831

151,4581,320,851

6,594,9281,693,491

77,4731,144,751

473,156527,118

593,43613,966,930

6,369,2741,919,391

4,379,7728.33

3.480.45

28.9828.36

24.7812.58

199077,365

105,4022,094,017

7,478,9641,892,707

81,545933,153

686,301394,388

1,287,36418,228,210

7,570,6711,885,277

3,934,7928.87

3.740.62

30.5030.59

23.1214.11

199182,926

84,7901,988,981

7,113,1021,464,330

78,931985,495

780,403347,245

1,378,51918,413,117

6,040,1791,863,920

4,072,2129.41

4.100.69

29.5730.54

23.6211.29

199287,508

90,4201,295,588

7,384,7591,452,740

77,659916,324

724,523394,022

718,57420,994,894

6,730,9141,416,535

3,623,7298.28

4.360.56

30.7529.28

18.2417.46

199382,792

58,9391,873,862

7,593,411948,173

75,346878,435

709,296287,180

1,287,57322,712,235

4,062,9661,697,989

3,586,5978.57

4.870.69

38.6130.01

22.5411.84

199489,747

87,7962,086,687

8,352,7091,368,133

65,444967,459

799,929373,616

1,364,23922,572,811

5,782,7101,375,901

4,160,0278.91

4.260.65

34.8525.36

21.028.72

199589,705

78,4392,040,447

8,185,5951,463,160

75,739932,426

790,097367,030

1,270,91522,658,479

5,977,6991,941,231

3,483,7568.81

4.680.62

32.9630.81

25.638.75

199689,932

86,7782,048,456

8,267,9322,295,504

71,253810,027

837,787394,075

1,349,20223,416,420

8,934,3222,009,781

3,379,1739.32

4.540.66

33.2427.37

28.219.46

199781,358

113,4921,615,057

7,549,4272,016,069

71,927775,342

762,336469,455

965,05622,263,045

8,996,2171,923,862

3,669,9279.37

4.140.60

42.0933.72

26.759.13

199892,215

101,5602,146,472

8,163,9202,097,617

79,052773,646

876,623458,112

1,260,65826,432,887

9,746,6952,257,484

3,291,2829.51

4.510.59

37.1030.87

28.5615.91

199992,671

79,7281,708,688

7,385,3532,084,474

82,757654,805

879,083326,513

1,059,15622,796,407

9,155,5882,418,391

3,065,1009.49

4.100.62

28.2827.61

29.2222.36

200094,104

84,0691,502,818

7,330,2782,093,660

74,629714,415

907,439351,447

887,86822,934,827

9,717,8322,086,030

3,557,7569.64

4.180.59

34.6328.15

27.9514.65

200194,148

53,2321,698,221

8,082,2402,144,776

74,451690,231

940,229226,639

1,062,62927,382,041

11,456,9392,149,932

3,342,2529.99

4.260.63

33.3837.11

28.8827.17

200293,847

50,4572,054,362

7,422,2011,957,013

67,360637,397

901,075227,194

1,549,09127,837,916

10,567,2901,989,979

3,320,8729.60

4.500.75

36.1736.39

29.5434.95

200395,399

60,0441,904,100

7,848,9782,189,512

67,644607,642

905,041273,266

1,414,90430,843,206

12,447,4282,171,159

2,790,6219.49

4.550.74

38.9134.13

32.1029.58

2004100,127

62,3901,678,367

8,008,3102,047,461

71,498521,412

987,323278,540

1,163,43431,106,863

12,098,3572,314,630

2,412,1889.86

4.470.69

42.8831.90

32.3733.92

2005103,119

57,4791,261,220

6,920,2891,791,085

71,086636,413

1,021,515291,149

826,89227,793,433

9,824,1212,246,246

3,076,0809.91

5.070.66

35.7230.19

31.6036.42

2006105,477

70,4701,723,219

7,646,5621,842,880

63,954648,868

1,134,250337,250

1,385,78432,388,305

11,089,0082,093,432

3,452,85710.75

4.790.80

36.9130.45

32.7336.79

2007110,377

70,9491,489,241

7,663,0802,021,171

64,779693,318

1,142,892294,697

993,95333,871,505

11,499,8022,425,403

3,578,25410.35

4.150.67

47.2929.21

37.4440.23

2008112,479

50,2861,503,238

7,830,1102,095,373

55,942830,976

1,162,429224,371

1,111,08737,218,453

11,829,6782,263,202

4,278,76510.34

4.460.74

40.3927.92

40.4632.14

2009121,491

54,2301,205,310

6,566,2911,923,957

52,384829,724

1,230,973263,028

1,041,35029,411,470

11,218,7172,043,815

4,165,26410.13

4.850.86

38.0229.29

39.0237.55

2010123,404

41,7481,630,225

7,645,8401,988,868

52,089682,416

1,107,135216,676

1,156,25735,113,703

11,589,3372,277,791

3,741,9168.97

5.190.71

38.4428.75

43.7321.08

2011126,598

34,037894,972

6,383,8531,916,581

44,932664,596

1,264,141173,461

567,77927,265,760

10,380,3431,872,482

3,700,2739.99

5.100.63

44.4527.83

41.6732.40

Sup

erficie Co

sechad

a en h

ectáreas

Vo

lum

en d

e pro

du

cción

en to

nelad

asR

end

imien

to To

nelad

a / Hectá

rea

Cu

adro

11

. Superficie co

sechad

a, volu

men

de p

rod

ucció

n y

rendim

iento

tonelad

a/hectárea d

e cultiv

os seleccio

nad

os d

e Méx

ico, 1

98

0-2

01

1

Page 48: Debate Económico No. 6

Debate Económico

42

1/ Se refiere al Arroz Palay

2/ Incluye a las variedades de maíz: forrajero, grano, semilla y

palomero

3/ Incluye a las variedades de sorgo: escobero, forrajero, grano y

semilla

4/ Incluye a las variedades de trigo: forrajero, grano semilla y

ornamental

Fuente: elaboración propia con datos del Sistema de Información

Agroalimentaria de Consulta (SIACON) disponible en:

http://www.siap.gob.mx/?option=com_content&view=article&id=181

&Itemid=426

Anexo 3. Pruebas estadísticas

Como se detalla al interior del documento, los cálculos se estiman a

partir de un modelo algebraico estructuralista, cuyas ecuaciones se

destacan tanto en el cuadro 7A como en el 7B del primer anexo. Por

lo tanto, a partir de asignar los rangos de valores, mediante el paquete

R, se genera un escenario base que refleja la interacción de las

diferentes variables y ecuaciones, los números pseudoaleatorios que

corresponde a cada uno de los rangos designados por variable, se

espera que se generen al seguir una distribución normal.

El número de estimaciones se adecuó en 10 000 valores para cada

rango que se le asignan a cada variable, debido a que al estimar

escenarios con mayor volumen ( 20 000, 50 000 ó 100 000 valores)

los valores medios de cada variable no variaban significativamente

con relación al escenario de diez mil simulaciones ni su propia

distribución en intervalos, vista a través de histogramas, además de

que al emplear en algunos casos rangos de las variables con un valor

muy mínimo, calcular 20 000 valores o más, los valores sólo

cambiarían en diezmilésimas partes, cuyo aporte a una estimación

robusta seria mínima.

Page 49: Debate Económico No. 6

Estrategias alternativas para enfrentar la pobreza en el campo mexicano

43

Por otro lado, para comprobar la uniformidad de los valores

pseudoaleatorios generados, optamos por aplicar la prueba de

frecuencias, Chi-Cuadrada, la cual nos permite comprobar el grado de

ajuste entre la distribución de la muestra con la distribución uniforme

teórica. En el cuadro 12 presentamos los valores de la chi-cuadrada

calculada para cada una de las variables que le fueron asignadas a

priori sus valores, en el escenario base. El valor de tablas para la Chi-

Cuadrada es 16.92 con un nivel de confianza de 0.05.

Cuadro 12. Pruebas de Chi-Cuadrada

Los valores calculados para todas las variables, son menores al valor

crítico de la Chi-cuadrada, por lo tanto, se acepta la hipótesis que los

datos tienen una distribución U(0,1), tanto los valores del asignados a

priori como los obtenidos después de ser estimados mediante las

diferentes relaciones algebraicas que componen el propio modelo

estimado.

VariableChi 2

ObservadaVariable

Chi 2

ObservadaVariable

Chi 2

Observada

k 6.14 M T 8.66 Y BIIC 13.84

K 6.12 M BI 12.4 Y BIIF 8.74

a 7.86 M BF 13.22 Y BIII 10.66

A 10.9 M BII 1.62 Y BICI 8.86

s 5.1 M BIC 11.98 Y BICF 8.4

S 4.8 M FBI 9.96 Y BICC 3.28

d 4.58 M BFC 7.54

D 12.76 M BFG 12.68

p 15.8 M FG 5.9

P 9.08 X C 4.42

f 10 X I 5.38

F 1.74 G C 15.04

u 7.36 G I 11.66

U 7.46 G F 8.98

Page 50: Debate Económico No. 6
Page 51: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol.2 (3), No. 6. Septiembre-Diciembre 2013, pp. 45-72.

Recibido: Junio 2013.

Aceptado: Noviembre 2013

Fragilidad financiera y crisis bancarias

en Centroamérica1

Aderak Quintana Estrada*

Resumen

El objetivo de este trabajo es extender el modelo de fragilidad

financiera desarrollado por Minsky al sistema financiero

centroamericano, para ello se discute el procesos de reformas y liberación financiera de la zona, encontrando que esto sembró

en principio un fuerte optimismo en muchos inversionistas, por

lo que se generó una importante expansión de los flujos de inversión, sin embargo, esto en el corto plazo se tradujo en una

fuerte especulación y malos manejos financieros por parte de

los administradores bancarios, lo cual culminará en varias

quiebras, que por las mismas características de estas economías no tendrán un impacto sistémico, pero las bancarrotas serán

numerosas.

Abstract

The nature of this paper is extend the model of financial

fragility developed by Minsky to Central American financial

1 Generalmente el término Centroamérica se usa para referirse al subgrupo de

países constituido por Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua,

no incluye a Panamá; cuando se emplea el término América Central o Istmo, se

incluyen los países de Centroamérica más Belice y/o Panamá. * Posdoctorante del CONACYT. Este trabajo fue realizado como parte de las

actividades de posdoctorado en la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo

de la Universidad Autónoma de Zacatecas.

Page 52: Debate Económico No. 6

Debate Económico

46

system, for which the processes of reform and financial

liberalization in the area is discussed, finding that this principle

planted in a strong optimism many investors, so a significant

expansion of investment flows generated, however, that in the short term led to strong speculation and financial

mismanagement by bank managers, which will culminate in

several bankruptcies, that because of the characteristics of these economies will not have a systemic impact, but bankruptcies

are numerous.

Palabras clave: Fragilidad financiera, Ciclo económico,

Instituciones financiero.

Clasificación JEL: G0, G2

1. Introducción

La idea desarrollada por el economista poskeynesiano, Hyman Minsky, sobre la fragilidad financiera, que será expuesta en el

primer apartado, constituye una herramienta útil para poder

entender de mejor manera el origen de una crisis financiera. La fragilidad es un factor inherente al sistema económico, es decir,

a pesar que la economía registre una expansión y goce de una

estructura financiera sólida, es probable que se estén

desarrollando ciertos factores que desembocarán en un sistema frágil. En este sentido, la composición del endeudamiento de

los agentes económicos se transforma, para medir esto, se

consideran tres clases de perfiles de pago que sirven para clasificar dicha fragilidad: cobertura, especulativo y Ponzi.

La transición entre un perfil de pago a otro permitirá observar el

nivel del problema financiero en que se encuentra el sistema, y con ello la presencia de una crisis. Una estructura institucional

acorde con la situación, puede ser capaz de controlar los efectos

negativos de la fragilidad, pero, cuando se modifica ésta por

medio de diversas reformas financieras, las cuales buscan una mayor apertura, muchas de las reglas se vuelven laxas, siendo

los episodios de crisis más comunes.

Page 53: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

47

En Centroamérica, es a partir del decenio de los noventa cuando

se llevan a cabo importantes reformas financieras que buscan la desregulación y liberalización, la mayoría de ellas van

encaminadas al sector bancario, debido a que es el sector

predominante en el conjunto del sistema financiero. Esto va sembrando en principio un fuerte optimismo en muchos

inversionistas, por lo que hay una importante expansión de los

flujos de inversión, sin embargo, esto se traducirá en el corto

plazo en una fuerte especulación y malos manejos financieros por parte de los administradores bancarios que culminará en

varias quiebras, que por las mismas características de estas

economías no tendrán un impacto sistémico, pero, las bancarrotas serán numerosas.

Para abordar esta problemática, el presente artículo se divide en

cuatro partes, en la primera se da una breve exposición sobre

las principales ideas en torno a la fragilidad financiera desarrollada por H. Minsky. En la segunda se abordan las

principales reformas financieras implementadas en

Centroamérica, lo cual permite tener un mejor panorama de sus consecuencias sobre el sistema financiero de la región, por ello

en la tercera parte se detallan las principales quiebras bancarias,

finalmente se encuentran las reflexiones finales.

2. Principales ideas en torno a la fragilidad financiera

Para Hyman Minsky (1992: 1-2), la hipótesis de la inestabilidad

financiera presenta diversos elementos empíricos y teóricos. En

los aspectos empíricos se observa que las economías capitalistas exhiben procesos de inflación y deflación de la

deuda2, factores que tienen el potencial de sacar de control al

sistema económico.

2 La descripción clásica de la deflación de la deuda es ofrecida por Irving Fisher

(1933). Este autor resalta que bajo ciertas circunstancias el sobreendeudamiento

es el único factor que perturba el equilibrio económico general y en particular,

suponiendo que no existe ninguna otra influencia, que tienda a afectar el nivel de

precios. Como consecuencia, en algún momento un estado de sobreendeudamiento

conducirá a la liquidación, ya sea por medio de la alarma de los deudores o de los

acreedores, inclusive de ambos.

Por lo que I. Fisher (1933: 341-342) deduce el siguiente encadenamiento de

consecuencias, compuesto por nueve eslabones: 1) la liquidación de deuda da

origen a ventas de urgencia y; 2) a la contracción de los depósitos en moneda, en

Page 54: Debate Económico No. 6

Debate Económico

48

Como teoría económica, la hipótesis de la inestabilidad

financiera es una interpretación de las ideas principales de la

Teoría General de J. M. Keynes (2003). Esta interpretación

toma lugar en el contexto histórico de la misma obra, ya que fue escrita en los primeros años del decenio de 1930, periodo en el

que se presenta la gran contracción financiera y productiva de

los Estados Unidos y de algunas otras economías capitalistas, este hecho constituirá una parte importante de la evidencia para

interpretar la teoría. Asimismo, dicha hipótesis también se basa

en el punto de vista del dinero crédito y las finanzas de J. Schumpeter (1994, capítulo 3). Sin embargo, en palabras del

propio Minsky (1992: 2), nos recuerda que las obras principales

del desarrollo de la hipótesis de la inestabilidad se basan en

sentido estricto en sus propias obras (Minsky, 2008; 1975).

El principal argumento de la hipótesis de la inestabilidad

financiera (Minsky, 1992: 2), consiste en que en una economía

capitalista existen crecientes activos de capital y un complejo y sofisticado sistema financiero. Además, el gasto en inversiones

constituye el motor de la economía. En principio se registra un

auge de las inversiones en un ambiente financiero estable, donde empresas financieras y no financieras tienen condiciones

favorables de liquidez, y en donde las tasas de interés son bajas.

A medida que se expanden los gastos de inversión, el flujo de

ganancias se incrementa, por lo que se estimulan las expectativas de mayores ganancias en el futuro, lo que a su vez

fomenta nuevas inversiones. Esta situación genera mayor

confianza entre empresas financieras e inversionistas individuales, se ve reflejada en la reducción de la preferencia

la medida en que se pagan los préstamos hechos por la banca y por una

desaceleración de la circulación. Esta contracción de los depósitos y la

desaceleración, precipitada por las ventas de urgencia, causa 3) una caída en el

nivel de los precios. Al suponer que esta caída de precios no se ve afectada por la

reflación u otro factor, debe haber 4) una caída mayor en el valor neto de las

empresas, precipitando las quiebra, y 5) una caída de utilidades, lleva a la

preocupación de que se va a la pérdida acelerada, lo que provoca 6) una reducción

en el producto, el intercambio comercial y el empleo de fuerza de trabajo. Estas

pérdidas, quiebras y desempleo llevan a 7) el pesimismo y la perdida de confianza,

lo que a su vez lleva a 8) el atesoramiento y una mayor desaceleración en la

velocidad de circulación. Los factores anteriores causan 9) complicadas

perturbaciones en las tasas de interés, particularmente en una caída de las tasas

reales de interés, o bienes.

Page 55: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

49

por la liquidez3. Esto induce a los agentes a tomar mayores

riesgos, ya que el inversionista considera que cada acto específico de inversión financiera entraña menos riesgo que el

anterior. Por lo tanto las empresas hacen mayor uso del capital

adeudado, los bancos otorgan préstamos con riesgos crecientes y las instituciones no bancarias reducen su liquidez en un

intento por enriquecerse de manera rápida.

Sin embargo, esta euforia trae consigo una falta de liquidez

creciente, por lo que aumenta el endeudamiento de los diferentes agentes económicos. Los flujos de efectivo esperados

se encuentran comprometidos con otras unidades económicas.

Para cada unidad, los pasivos sobre su hoja de balance determinan los diferentes compromisos de pago previo, incluso

cuando los activos generan un periodo de supuestos flujos de

efectivo4.

Bajo un contexto de endeudamiento moderado, la reducción en los flujos de efectivo se podría solventar sin problema, no así

para un elevado nivel de endeudamiento, con lo cual aparecería

la insolvencia. Si a esta situación le siguen recesiones menores, lo más probable es que surja una deflación seria de la deuda y

con ello una depresión profunda para la economía.

3 Es la tendencia que muestran las personas a escoger activos líquidos frente a

otros de más difícil realización. 4 Estas ideas son abordadas por Keynes como un “velo monetario”, que implica

que el dinero está conectado con las necesidades de financiamiento a través del

tiempo. Una parte del financiamiento de la economía puede estar estructurada

como compromisos de pago en la que los bancos son el actor central. Los flujos de

dinero pasan primero de los depositantes a los bancos y de los bancos a las

empresas, posteriormente, de las empresas a los bancos y de los bancos a sus

depositantes. En principio, los intercambios son para el financiamiento de la

inversión, y subsecuentemente, los intercambios cumplen con los compromisos

adquiridos anteriormente, los cuales comenzaron con el contrato de

financiamiento.

En el velo monetario keynesiano, los flujos de dinero para las empresas son una

respuesta a las expectativas de los beneficios futuros, y el flujo de dinero de las

empresas es financiado por los beneficios que son realizados. Se establece que la

clave de los intercambios económicos tienen lugar como el resultado de las

negociaciones entre banqueros y hombres de negocio comunes. Los documentos

de la negociación detallan los costos y las expectativas de los beneficios del

hombre de negocios, que interpretan los números y las expectativas con

entusiasmo, por el contrario los banqueros lo ven con escepticismo (Minsky, 1992:

4).

Page 56: Debate Económico No. 6

Debate Económico

50

Es así que dicha hipótesis resalta el impacto que tiene la deuda

sobre el comportamiento del sistema económico. Por lo tanto,

una expansión considerable de la economía sienta las bases para

una fragilidad financiera. Es decir, la economía transita de una estructura financiera sólida a una estructura frágil. Ya que en

una situación de expansión económica, que sólo es

interrumpida por desaceleraciones menores, la estructura de los pasivos de las empresas, los hogares y las instituciones

financieras, cambian de tal forma que los compromisos de pago

de deuda experimentan un crecimiento en relación con los flujos de efectivo (Ibídem: 6).

A medida que aumenta la fragilidad, las tasas de interés sufren

un incremento que es impulsado por la expansión económica,

con lo que aumentan las probabilidades de una caída de la inversión. Entonces, al decrecer la inversión en un ambiente de

fragilidad financiera, el sistema financiero acelera la caída. Al

registrarse una caída en la demanda agregada, los diferentes agentes enfrentan presiones para realizar sus pagos de

principales e intereses, con lo que se ven obligados a vender

activos con relativa falta de liquidez. La caída acelerada en los precios de los activos vuelve menos atractivo el gasto en

inversión. Si la reducción de la inversión y la caída en los

precios de los activos financieros es considerable, puede

aparece una crisis de deuda-deflación.

Así la fragilidad financiera es medida por diferentes variaciones

en la composición de los préstamos y su influencia perturbadora

sobre el comportamiento general de la economía. Cabe resaltar que la fragilidad no se origina por la discordancia de los plazos

de vencimiento5, entre los préstamos a largo plazo y los

5 En este sentido, J. Kregel (Cfr., 2004: 19) nos señala que la concepción

tradicional de inestabilidad en los mercados financieros proviene de la idea de que

las instituciones financieras actúan como entidades que median entre ahorradores

deseosos de prestar sus recursos y agentes de crédito finales que están en busca de

los mismos para invertirlos. Tal actividad de intermediación no sólo exige hacer

compatibles las decisiones de quienes van a tomar prestado con las de quienes van

a prestar; sino también, el transformar el plazo de vencimiento de los activos

financieros de corto a largo plazo en un escenario en el que quienes prestan tienen

preferencia por los activos líquidos de corto plazo y, en contraste, quienes toman

prestado preferirán obligaciones que fuesen de largo plazo y a tasas de interés

preferentemente fijas.

Page 57: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

51

depósitos a corto plazo, más bien por el deterioro de la calidad

de los activos en manos de las instituciones financieras.6 Esta

manera de comprender la fragilidad será la que reemplazará el

concepto tradicional de inestabilidad financiera (Kregel, 2004:

18-19).

Por lo tanto, H. Minsky (1992: 6-7) consideró tres formas en la

que los agentes económicos obtienen financiamiento para

realizar sus actividades económicas y financieras, las cuales con

el tiempo van modificando la composición del endeudamiento. Las tres clases de perfiles de pago que establece este

economista para clasificar la fragilidad financiera del sistema

son las siguientes: cobertura, especulativo y Ponzi7.

Este esquema de perfiles de pago comienza desde el balance

contable del prestatario, ya que el ingreso que genera capital en

la parte del activo se ha financiado emitiendo pasivos que

implican compromisos de pago en efectivo en la parte del pasivo. El perfil de pago debe coincidir con los compromisos de

pago de intereses, dividendos y amortizaciones generados por

los pasivos, con los flujos de ganancias generados por los activos de capital. Generalmente, las amortizaciones pueden ser

volátiles y sujetas a factores fuera de control de la empresa.

Cuanto mayor es la discrepancia en relación a los plazos de vencimiento entre los

activos de corto plazo emitidos para los ahorradores y el largo plazo de las

obligaciones compradas a los inversionistas, mayor será el riesgo de que la tasa de

interés de corto plazo se eleve en relación a la de largo plazo. Este fenómeno

provoca desconfianza, insolvencia o una salida repentina de recursos también

conocida como “desintermediación” por cuanto las tasas de corto plazo, al ser

presionadas al alza, se rezagarán respecto a las tasas de mercado.

Si la volatilidad de las tasas de interés de corto plazo es pequeña, el ajuste se

puede efectuar restringiendo los nuevos préstamos, reduciendo los márgenes netos,

o bien, permitiendo una reducción de las reservas secundarias. Sin embargo,

cuando el movimiento de las tasas de interés de corto plazo es sustancial, se hace

exigible de manera intempestiva el repago de los préstamos, y al presentarse la

venta forzosa de activos, se presiona a la baja sus precios. 6 La caída en la tasa de expansión del crédito es lo que provoca la caída en los

precios y la consecuente deflación de la deuda. Es el cambio en la preferencia por

la liquidez lo que eventualmente lleva a los bancos a detener la creación de

liquidez, más que el fenómeno del desfase o discordancia en los plazos de

vencimiento, lo cual conduce a la fragilidad financiera (Kregel, 2004: 33). 7 Este nombre es tomado de Carlo Ponzi, un italiano radicado en Boston en el año

de 1920 que fracasó al tratar de hacer funcionar una pirámide financiera basada en

cupones postales internacionales.

Page 58: Debate Económico No. 6

Debate Económico

52

Entonces el perfil ideal de pago sería en el que la unidad

económica tiene en todo momento del futuro un margen de

protección de flujos de efectivo constantes que son suficientes

para cubrir sus compromisos por concepto de servicio de la deuda, incluso cuando se presenta un alza de las tasas de interés

o una declinación de los flujos de efectivo. Esta posición sería

de cobertura, y por lo tanto libre de riesgo. Visto en el estado contable, implica que a medida que tenga mayor peso la

financiación de capital en la estructura de los pasivos, mayor

será la probabilidad de que estas unidades económicas tengan una posición cubierta.

Sin embargo, la mayoría de prestatarios caen en una posición

financiera especulativa, que significa que las unidades

económicas no tienen suficientes flujos de efectivo para hacer frente a sus pagos en todo momento, pero sí pueden cubrir el

préstamo en el plazo acordado. Esto quiere decir que el valor

neto actual del proyecto que se está financiando es positivo, aunque las entradas de efectivo en algunos momentos suelen ser

negativas o insuficientes para cubrir el servicio de la deuda;

pero si el prestamista tiene paciencia recibirá completo el préstamo y sus intereses correspondientes.

En el extremo están las unidades con una posición financiera

Ponzi, las cuales enfrentan un evento inesperado, externo o

interno. Esta posición inicia al momento en que una unidad con una posición de financiamiento especulativo se encuentra en

una posición que no puede hacer frente a sus compromisos

actuales en efectivo y existen pocas posibilidades de que lo haga en el futuro, por lo que el valor neto actual de la inversión

que se está financiando se vuelve negativo para el prestamista.

Aunque se liquiden los activos a su justo valor no son

suficientes para cubrir los pasivos, por lo que esta unidad entra en insolvencia.

Los prestatarios con una posición financiera de tipo Ponzi, para

estar al corriente en sus compromisos y mantenerse en operación, necesitan obtener nuevos préstamos para pagar lo

que deben por concepto de servicio de la deuda en cada

período. Esto implica que tienen que convencer al prestamista original de que incremente el monto del préstamo existente, o

Page 59: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

53

conseguir nuevos créditos con otros prestamistas, ya que

existen pocas probabilidades de que el prestatario pueda pagar sus créditos si no obtiene financiamiento adicional en el futuro.

Por lo tanto, si domina el financiamiento cubierto, el sistema

económico tenderá al equilibrio. En contraste, cuanto mayor sea el peso del financiamiento especulativo y Ponzi, mayor será la

probabilidad en que el sistema se encuentre en desequilibrio. H.

Minsky (1992:8) nos señala que cualquier economía puede

tener regímenes de financiamiento estables como regímenes inestables. Además, en periodos de larga prosperidad, la

economía transita de relaciones financieras que contribuyen a

un sistema estable a relaciones financieras que contribuyen a un sistema inestable.

Los diferentes perfiles de financiamiento nos indicarán la

posibilidad de una crisis financiera por parte de los prestatarios

y su efecto sobre el prestamista ante cambios en los factores externos, como las tasas de interés. En un perfil cubierto se

necesitan cambios significativos en los ingresos o en los

compromisos para que se convierta en especulativo. Sin embargo, bajo un perfil especulativo se puede convertir en

Ponzi con una variación mucho más pequeña de las condiciones

internas o externas, pues el margen de seguridad, representado por los ingresos futuros sobre los compromisos, es bajo.

De esta forma, la fragilidad financiera es endógena al sistema

económico, esto implica que bajo una expansión económica

continua, los prestatarios y prestamistas se involucran en actividades con menores márgenes de seguridad. De este modo,

en una economía dominada con prestatarios con perfiles de

financiamiento cubiertos, paulatinamente la economía transitará de una estructura de financiamiento especulativo hacia una

estructura de tipo Ponzi.

Una vez que los valores actuales netos negativos predominan, los problemas de los prestatarios también son de los

prestamistas, ya que los pasivos de los primeros aparecen como

activos en los registros contables de los segundos. Cuando un

prestamista decide dejar de prestar, está reconociendo que lo que había registrado en su contabilidad con un valor positivo ya

no lo es, y en consecuencia debe ser tomado como un cargo en

Page 60: Debate Económico No. 6

Debate Económico

54

contra de las ganancias, y después contra el capital. Si el

prestamista ha emitido pasivos, entonces el valor de esos

pasivos se vuelve cuestionable y sus prestamistas pueden

retirarse, llevando a lo que Minsky, siguiendo a Fisher, llamó una deflación de la deuda (Kregel, 2004: 21).

Al ser la fragilidad financiera algo inherente al sistema

económico, incluso cuando la economía marcha de manera exitosa, el camino posible para aminorar los efectos negativos

de la fragilidad es diseñar una estructura institucional que

controle los mecanismos mediante los cuales la fragilidad desencadena en inestabilidad, y ésta a su vez en una crisis de

grandes proporciones.

3. Reformas financieras en la región

A partir de la ruptura del orden monetario de Bretton Woods, los sistemas financieros por todo el mundo comenzaron a

cambiar rápidamente. La moneda y el crédito, intermediarios

financieros, instituciones, autoridades, relaciones de financiamiento bancos-industrias, relaciones financieras

externas, sufrirían enormes transformaciones. Estos cambios no

se registraron inmediatamente en los países de América Latina, sucedieron a diversos ritmos y con matices distintas de acuerdo

a las propia realidad económica-política-social que cada país le

fue imprimiendo (Correa, 2003: 2).

Inmediatamente a la crisis de la deuda, los Gobiernos de América Latina fueron firmando acuerdos y cartas de intención

con el Fondo Monetario Internacional (FMI) con el supuesto

propósito de hacer frente a la crisis, el nuevo financiamiento se condicionó al proceso de iniciar reformas de largo alcance. En

primer momento se plantearon programas de ajuste y

estabilización, posteriormente vinieron las reformas

estructurales, todo ello trajo como consecuencia cambios profundos en la estructura económica de los países.

Estas reformas han contribuido en gran medida a reconfigurar

el espacio financiero regional; han sido impulsadas por el FMI y el Banco Mundial (BM) como resultado de las sucesivas

renegociaciones de la deuda externa, y por las crisis financieras.

Ello desencadenó en numerosas privatizaciones bancarias, seguros y fondos de pensiones, y se suprimieron los límites a la

Page 61: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

55

participación del capital extranjero en las instituciones

financieras, en los casos en que existían.

A lo largo de las tres últimas décadas, la aplicación de la

reformas financieras ha tomado distintos grados de

profundidad, por lo que se pueden identificar tres generaciones: la primera, bajo la crisis de deuda de los primeros años de la

década del ochenta, cuando básicamente se empuja a la apertura

y liberalización financieras; la segunda, que levanta el edificio

institucional, organizativo, contable, regulador y de supervisión de los mercados con creciente presencia de intermediarios

financieros no bancarios y promueve la modificación de los

sistemas de pensiones; una tercera generación de reformas está en curso, a partir del crecimiento de la presencia de consorcios

financieros extranjeros con posicionamiento sistémico,

principalmente fomentando los mercados de productos

derivados con acuerdos y regulaciones de carácter internacional, buscando recuperar la credibilidad y el poder

perdidos del FMI y el BM (Correa, 2006: 68).

En América Latina el proceso de liberalización y desregulación financiera han traído consigo fuertes transformaciones en los

sistemas financieros. Muchas de estas reformas se

instrumentaron con mayor intensidad durante el decenio de 1990. Así también, en Centroamérica durante la última década

del siglo XX se da un fuerte impulso a este tipo de reformas,

momento en el que esta pequeña región transita a un periodo de

mayor “estabilidad” económica y política8, por lo que se

intensifican las reformas estructurales, incluyendo las del plano

financiero.

Entre los aspectos más generales de las reformas financieras instrumentadas en Centroamérica, resalta el objetivo de integrar

los sistemas financieros de los países de la región, para

8 Esta aseveración se utiliza porque durante el periodo que comprende los decenios

de 1960 a 1980, la región vivió un periodo de inestabilidad política económica.

En Nicaragua se llevó a cabo la Revolución Sandinista o Revolución nicaragüense,

fue protagonizada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional, gobernaron el

país desde 1978 hasta principios de 1990. En El Salvador se desarrolló una guerra

civil entre las Fuerzas Armadas de El Salvador y el Frente Farabundo Martí para la

Liberación Nacional, el conflicto duró de 1980 a 1992; en Guatemala entre 1960 y

1996 se desarrolló el periodo conocido como Guerra civil de Guatemala

Page 62: Debate Económico No. 6

Debate Económico

56

posteriormente iniciar su inserción al mercado internacional.

Por lo que el resultado ha sido la obtención de un elevado grado

de integración financiera.

En el documento de trabajo de Arturo Galindo, et. al. (2010: 3-6) se señala que América Latina, en relación a la apertura

financiera, es la región más integrada al resto del mundo; y

Centroamérica se encuentra por encima del promedio de Latinoamérica. Esto es así porque se considera que existen

escasos controles a los movimientos de entradas y salidas de

capital.

Como se puede observar en el cuadro 1, el índice de apertura

financiera9 para el año de 2006, América Latina registró el

mayor grado de apertura, después de los países industriales; es

de destacar que Centroamérica está aun por encima del promedio de Latinoamérica. A pesar de ello, este promedio

regional muestra diferencias importantes entre los países, hasta

el 2006 El Salvador, Guatemala y Nicaragua registraban los mayores índices de apertura financiera, en el que Honduras

registró un índice negativo, y Costa Rica un grado muy cercano

al promedio latinoamericano.

El mayor grado de apertura financiera en Centroamérica es

resultado, en gran medida, de la multiplicidad de reformas

legales y cambios institucionales acaecidos en la región durante

las últimas dos décadas. Es a partir del decenio de 1990 que se sientan las bases de las reformas financieras de primera

generación, todas ellas aplicadas de forma paralela a los

programas macroeconómicos, supervisados principalmente por el FMI.

9 Menzie Chinn e Hiro Ito (2008; cit. en Galindo, et. al., 2010: 3-4) crean un índice

sobre el nivel de apertura de la cuenta de capital, en el que se mide el grado de los

controles sobre el capital con base en la información obtenida en los Annual

Report on Exchange Arragements and Exchange Restrictions, publicada por el

FMI. A pesar de la dificultad para cuantificar el grado de apertura financiera, el

índice propuesto hace una contribución sustancial en términos de cobertura de

países para un mayor periodo. La información se encuentra disponible para 180

países durante los años 1970 a 2006.

Page 63: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

57

Las reformas financieras de primera generación, que podríamos

ubicar durante los años de 1990-1995, se caracterizarán por el fuerte proceso de desregulación y la implementación de la

liberalización de los mercados financieros. En materia bancaria,

aparece una oleada de reformas que buscará la construcción de

una regulación prudencial y de supervisión. Los años siguientes se manifestarán algunas dificultades financieras, lo que

motivará a la implementación de una segunda oleada de

reformas a principios del decenio de los 2000. El nuevo marco regulatorio se caracteriza por conferirle mayor autonomía e

independencia a las entidades responsables de la supervisión

bancaria, se crean esquemas de seguro para los depósitos bancarios y aparecen leyes en las nuevas áreas de actividad

financiera, primordialmente la bursátil (Flaming, 2005: 329;

Dubón, 2008: 3).

De alguna u otra forma, las reformas financieras instrumentadas en la región a partir del decenio de 1990 han seguido los

mismos aspectos, según el Consejo Monetario Centroamericano

(CMCA) (2003: 9-10) se resumen en los siguientes:

En relación a la banca central, se puso énfasis en el

fortalecimiento de su autonomía e independencia respecto

al gobierno central; se ha puntualizado que su función

principal es el control de la inflación.

Cuadro 1. Índice de apertura financiera por regiones 1970-2006

Región 1970 1980 1990 2000 2006

Asia del Este y el Pacífico -0.44 -0.32 -0.05 -0.17 -0.13

Europa del Este y Asia Central -1.13 -1.8 -0.78 -0.3 0.46

Alto ingreso 0.21 0.61 1.08 1.7 1.85

América Latina 0.21 0.07 -0.82 1.09 1.54

Centroamérica 0.49 -0.62 -1.42 1.18 1.89

Costa Rica 1.27 -0.49 -1.8 1.27 1.27

El Salvador -1.13 -1.13 -1.8 2.54 2.54

Guatemala -1.13 -0.05 -0.22 1.27 2.54

Honduras 2.54 0.99 -1.8 -0.99 -0.09

Nicaragua 2.54 -1.26 -1.13 2.54 2.54

Medio Oriente y África del Norte -1.03 -0.47 -0.38 0.33 0.6

Asia del Sur -1.05 -1.24 -1 -0.47 -0.42

África Subsahariana -0.93 -0.9 -0.86 -0.52 -0.53

Nota: Un mayor valor del índice, indica un mayor grado de apertura de la cuenta de capitales, Fuente :

Chinn e Ito (2008), cit. en Galindo, et. al, 2010: 3-4.

Page 64: Debate Económico No. 6

Debate Económico

58

En el ámbito bancario, las reformas se centraron en

incrementar el grado y nivel de capitalización bancaria; en

el fortalecimiento de las potestades de supervisión y

sanción de los entes reguladores, especialmente de los

grupos financieros; así como en el mejoramiento de la eficacia de los mecanismos de intervención y liquidación

de entidades.

Sin embargo, aún quedan áreas en distintos países que

requieren actualización y aspectos que deben ser mejorados, para lo cual en años reciente se han hecho

propuestas, además de ser aprobada una nueva legislación.

Asimismo, se debe destacar, que las reformas también han promovido la participación privada en la intermediación

financiera, ya que previamente ésta era prohibida por el marco

legal y regulador vigente en la década de 1980. Se debe

recordar que en la banca comercial existía una fuerte intervención del Estado. Por ejemplo, en El Salvador y

Nicaragua, se habían nacionalizado los sistemas financieros a

inicios del decenio de 1980; los mercados de Costa Rica se encontraban en su totalidad controlados por el Estado desde

1948.

Las reformas también han propiciado un crecimiento de los flujos de liquidez. Durante el decenio de 1990 crecen de manera

considerable los flujos de capital hacia América Latina. Este

incremento es motivado por el interés de los inversionistas

institucionales (Correa, 2006: 70), principalmente por: la atractiva rentabilidad de los títulos gubernamentales; la

incorporación al mercado de valores de empresas locales; y el

interés de los intermediarios financieros domésticos en asociarse con bancos de inversión y corredurías para participar

en el lucrativo negocio de bursatilización, emisión y colocación

de bonos, como el arbitraje de tasas de interés.

Como se puede observar en el grupo de gráficos 1, los flujos de inversión en cartera en América Latina experimentan un

crecimiento considerable a principios del decenio de 1990.

Pero, esto se ve interrumpido para mediados del decenio, marcado por la crisis financiera mexicana. Como consecuencia

se da un giro en la tendencia de estos flujos de capital,

Page 65: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

59

volviéndose preponderantes los flujos de inversión extranjera

directa.

En América Latina, el cambio en la tendencia de la inversión

directa se ve motivado por el fuerte proceso de privatización de

empresas públicas y de las diversas fusiones o adquisiciones de empresas regionales con diversos conglomerados

internacionales. En Centroamérica, sucede algo similar, la

inversión extranjera directa crece con mayor intensidad a partir

de la segunda mitad del decenio de 1990, los motivos son los mismos que en el resto de Latinoamérica. Además, durante

estos años se da una importante reactivación del acuerdo de

integración económica conocido como Mercado Común Centroamericano, lo que impulsó a los inversionistas

internacionales aún más a invertir en la región.

A pesar del crecimiento importante en los flujos de inversión

extranjera directa, en contraste, como se puede observar en el grupo de gráficos 1, la inversión en cartera en Centroamérica

muestra un comportamiento débil. Esto se atribuye

principalmente al clima empresarial que inhibe la emisión de valores. Asimismo, es reflejo del pequeño tamaño de las

empresas regionales, el predominio de los conglomerados y

empresas familiares. Por ello se prefiere el financiamiento bancario, y los conglomerados regionales también recurren al

financiamiento a través del banco propio, en lugar de recurrir al

mercado de capitales, por motivos de control societario (Shah,

et. al., 2008: 134-135).

En este mismo sentido, los inversionistas institucionales tienen

poca participación en los mercados de capital. Por diversas

razones, en la región, estos inversionistas tienen un escaso desarrollo. Reflejo de esto es que sus recursos representan

apenas el 9% del PIB regional (incluye Panamá y República

Dominicana), por lo que carecen de medios para la demanda de valores y de ese modo al desarrollo de los mercados de capital

(Ibídem: 136).

Page 66: Debate Económico No. 6

Debate Económico

60

A pesar de la poca importancia que tienen los flujos de capital

en la región, éstos no han impedido que los flujos de inversión

directa tengan una elevada movilidad. Las diferentes reformas

financieras que han impulsado el modesto crecimiento en los flujos de capital, también han provocado un incremento en la

volatilidad y fragilidad de los sistemas financieros. Ello ha

traído consigo diferentes episodios de crisis, algunos de ellos traducidos en quiebras bancarias.

4. El impacto de la fragilidad en el sistema bancario

Las diversas reformas financieras y monetarias implementadas en Centroamérica desde el decenio de 1990 trajeron consigo

una serie de cambios que en un principio dieron la impresión de

que todo marcharía bien, sin embargo, este optimismo fue

Page 67: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

61

revertido al poco tiempo, poniendo en evidencia la fragilidad de

los sistemas bancarios.

Las primeras reformas financieras dejaron huecos legales en

materia de supervisión, y acompañado de cierta inexperiencia

de los entes supervisores, propiciaron un ambiente en el que algunos financieros incurrieron en prácticas fraudulentas, lo que

desembocó en diversas quiebras financieras (ver tabla 1).

Posterior a estos sucesos y dada la experiencia acumulada, fue

necesario la implementación de nuevas reformas, las cuales se empezaron a implementar a finales del decenio de los 2000.

Los motivos de las crisis bancarias centroamericanas han sido

parecidos en todos los casos, una mala decisión administrativa origina problemas de liquidez o solvencia. Surgen por el lado

del activo de los balances bancarios, lo que deriva en un

prolongado deterioro de la calidad de la cartera crediticia. Esto

último generalmente se asocia a las altas tasas de interés internas, excesiva concentración de créditos y la existencia de

créditos vinculados.

En diversas ocasiones se ocultan estos problemas financieros con el propósito de sobrestimar las utilidades. Todo ello es

resultado de irregularidades administrativas, donde los

banqueros manipulan los estados contables, incumplen las disposiciones legales y en otras ocasiones las resoluciones

propuestas por las autoridades financieras no son acatadas. Esta

contravención termina con la intervención administrativa de los

bancos, lo que desemboca en su liquidación o venta.

Page 68: Debate Económico No. 6

Debate Económico

62

La situación de las quiebras bancarias no sólo es resultado de la

fragilidad que existe en los marcos regulatorios, también se debe a la debilidad institucional, en la que predomina la falta de

profesionalismo y una elevada corrupción. Por ello, en muchos

de los casos, los motivos de estas crisis no se conocen a profundidad, y los banqueros involucrados en su mayoría se

encuentran impunes.

Además, se podría creer que las recientes crisis bancarias en la

región trajeron consigo momentos de fuerte tensión financiera para el país que la experimentó, inclusive se pensará que su

impacto sobre la economía trajo grandes repercusiones y un

elevado riesgo para el conjunto de la región. Sin embargo, esto no ha sido así, debido posiblemente al reducido tamaño que

representan estas instituciones en el conjunto de los sistemas

financieros. Probablemente por todos estos motivos, las crisis

se encuentren un tanto “subestimadas” en la región.

País Año Suceso

Quiebra el Banco Anglo Costarricense

Son intervenidos Banco Federado, Cooperativo

Costarricense y Banco Solidario

El Salvador 1997-1998Quiebran las financieras Finsepro-Insepro y el

Banco de Crédito Inmobiliario

2001Quiebran los bancos Empresarial, Metropolitano

y Promotor

2006Quiebran los bancos Bancafé y Banco de

Comercio

1999Quiebran los bancos Corporativo y Banco

Hondureño de Crédito y Servicios

2002 Quiebra Banhcrecer, Capital y Sogerín

1998 Quiebra Banco Sur

2000Quiebra el Banco Crédito Popular,

Intercontinental y Bancafé

2001 Quiebran los bancos Bamer y Banic

Fuente: Elaborado a partir de datos obtenidos del CMC, 2003, y Banco Central de

Guatemala, 2007a y 2007b.

Tabla 1. Centroamérica, quiebras bancarias, 1994-2006

Costa Rica 1994

Guatemala

Honduras

Nicaragua

Page 69: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

63

A pesar de la poca importancia que parecieran tener las crisis

bancarias, son diversos los eventos que se han registrado a lo largo de la región en los últimos años, por ello no se deben

ignorar. Algunos de estos sucesos financieros se pueden

resumir en las siguientes páginas (CMC, 2003: 22-37).

En el caso de Costa Rica, a finales de 1998 fue intervenido el

Banco Federado ante el riesgo de una cesación de pagos. El

problema de liquidez se originó por una dificultad de

Coovivienda, una cooperativa de ahorro y crédito para el financiamiento de la vivienda, la cual era parte del grupo al que

pertenecía el banco. Un serio problema de liquidez llevó a

Coovivienda a su insolvencia, contagiando al banco. Así se inició su proceso de autoliquidación ordenada por las

autoridades financieras, pero la incapacidad de cubrir el total de

los pasivos generó desconfianza en el Federado. Inclusive años

después, en el 2002, varios acreedores seguían sin recobrar parte o totalidad de sus acreencias.

En el mismo año fue intervenido Bancoop por problemas de

insolvencia al haber perdido más del 50% de su patrimonio, su liquidación terminó en el 2003. Por otra parte, el Banco

Solidario también fue intervenido en el 2000 por manejos

administrativos que llevaron a la inestabilidad e insolvencia de la entidad. Inclusive la declaratoria de quiebra fue apelada por

el ex-presidente de la Junta Directiva, atrasando el proceso.

En El Salvador, la quiebra de las financieras Finsepro-Insepro

fue resultado de un fraude. La primera, funcionaba con una sociedad captadora de fondos de manera paralela e ilegal,

Insepro. Durante la primera mitad de 1997, Insepro enfrentó

una corrida de depósitos, contaminando a Finsepro, cuya situación financiera era considerada estable. Insepro pagó

capital e intereses a inversionistas, emitiendo cheques sin

fondos a cargo de otros bancos, incluyendo a Finsepro. En el mismo periodo la Superintendencia del Sistema Financiero

intervino a ambas instituciones, aduciendo falsificación de

estados financieros, emisión de cheques sin fondos, quiebra

dolosa, evasión de fiscalización y defraudación.

En el caso de Credisa, que se dedicaba a conceder créditos para

la construcción y la adquisición de vivienda; en el año de 1997

Page 70: Debate Económico No. 6

Debate Económico

64

en medio de la quiebra de las financieras Finsepro-Insepro fue

afectada su situación de liquidez, por lo que recurrió con

frecuencia al mercado interbancario y al uso de líneas de

crédito de estabilización del Banco Central. Además, su cartera crediticia se deterioró, la Superintendencia solicitó una

ampliación de su capital que los accionistas no pudieron

cumplir. Este hecho marcó su intervención a finales de 1998, pero bajo una modalidad de vigilancia especial, sin remoción de

la Junta Directiva. Fue hasta principios de 1999 que se acordó

su disolución y liquidación con la intervención del Gobierno mediante el Instituto de Garantía de Depósitos y del Banco

Central.

En Guatemala, en el año de 1998, el Banco Empresarial

presentó problemas de liquidez resultado de una serie de prácticas contables improcedentes, y el incumplimiento de

disposiciones legales y resoluciones de la Superintendencia y la

Junta Monetaria. Como consecuencia, en el 2001, las autoridades financieras acordaron la intervención administrativa

del banco.

En el caso de los bancos Metropolitano y Promotor, llamados bancos gemelos por su misma propiedad, enfrentaron

problemas de liquidez que los obligaron a captar recursos

interbancarios de corto plazo y a altas tasas de interés, lo que

repercutía en su liquidez y rentabilidad. A finales de 1998 ambos bancos empezaron a mostrar recurrentes deficiencias de

encaje con importantes operaciones fuera de balance. Además,

siguieron prácticas contables tendientes a ocultar su verdadera situación financiera, sobrestimando utilidades y ocultando

pérdidas. En 2001 fueron intervenidos ambos bancos, en la que

la Superintendencia presentó denuncias en contra de 12

ejecutivos acusándolos de fraude (Banco Central de Guatemala, 2007a).

En Guatemala, en el año de 2006 se presenta la quiebra del

Banco del Café (Bancafé), el segundo banco del sistema en relación a sus activos. El marco regulatorio de supervisión era

débil en estos años, contribuyendo a la quiebra de Bancafé

(Banco Central de Guatemala, 2007a). Esta experiencia motivará un cambio en la legislación de supervisión.

Page 71: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

65

Meses después, la quiebra de Bancafé arrastró a la misma

situación al Banco de Comercio. La explicación de los accionistas se centró en que se vieron seriamente afectados por

la fuga de dinero que provocó la quiebra de Bancafé (ibídem,

2007b). Sin embargo, dos meses previos a la quiebra, los directivos del Banco de Comercio autorizaron más de 20

millones de dólares en préstamos a empresas ligadas con los

mismos socios del banco, más otros préstamos normales. De

ésos, casi 13 millones fueron entregados a Organizadora de Comercio

10, una off shore con sede en Panamá que no era

reconocida por la Superintendencia de Guatemala (López,

2007: 8-10).

En Honduras, en el 2001 fue intervenido el banco Banchcreser

al verse deteriorada su cartera crediticia y enfrentar problemas

de liquidez, con lo que entró en quiebra técnica, al no aportar

los accionistas nuevo capital que retribuyera su posición. En consecuencia fue sometido a un proceso de liquidación forzosa

y sus activos fueron subastados.

Por su parte, los bancos Capital y Sogerín entraron en crisis de liquidez a principios de 2002, habiendo perdido todo su capital,

sin posibilidades de reposición por parte de los accionistas. Con

el fin de evitar el contagio al resto del sistema, ambas instituciones fueron intervenidas por la Comisión Nacional de

Bancos y Seguros. En principio se cambió su administración y

accionistas, para evitar su liquidación forzosa fueron

capitalizados por el Fondo de Seguro de Depósitos, con la intención de administrar los bancos por un periodo corto para

venderlos posteriormente. No obstante, a fines de 2002 el

Banco Capital se encausó a un proceso de liquidación, al determinar su insolvencia; posteriormente el Banco Sogerín en

el 2003 fue vendido al Banco del País.

El sistema bancario de Nicaragua fue privatizado en el año de 1999, con lo que nueve bancos privados –todos de capital

10

Investigaciones de la Superintendencia de Bancos de Guatemala detallaron que

Organizadora del Comercio, S.A. captó entre 1995 y 2006 aproximadamente 231

millones de dólares de siete mil inversionistas guatemaltecos a quienes las

autoridades no le dan respuesta porque su dinero fue colocado en esa off shore que

no es regulada y que tampoco paga impuestos en Guatemala (López, 2007: 8).

Page 72: Debate Económico No. 6

Debate Económico

66

nicaragüense- concentraban más del 90% de los depósitos del

sistema. Previamente a la privatización quebraron dos bancos,

en el año de 1996 (el BECA) y en 1998 (el Banco Sur), pero no

representaron mayor problema para el sistema financiero debido a su reducida participación en el mercado,

aproximadamente el 5.5% del total de activos del sistema.

Posteriormente, en 1999 se liquidó un banco estatal por un problema en la cartera crediticia.

Sin embargo, para el 2000 el sistema financiero se enfrentó a

una serie de quiebras con un fuerte riesgo sistémico. En este año la Superintendencia intervino el banco más grande del país,

Banco Intercontinental (Interbank), que contaba con el 14% de

los activos totales del sistema. El problema se derivó porque

más del 80% de la cartera de préstamos se otorgó a empresas vinculadas con un grupo económico agroindustrial, por lo que

era prácticamente irrecuperable. El grupo económico se

dedicaba a la exportación de café, la fuerte caída del precio internacional de este producto lo llevó a una situación de mora.

Como consecuencia, Interbank tenía un fuerte descalce11

de

moneda al tener una alta proporción de su cartera en moneda extranjera, con lo que no pudo cumplir con el encaje legal y fue

intervenido.

La intervención en Interbank, entre junio y diciembre de 2000,

trajo como consecuencia que se registrara una salida del equivalente del 8.2% del total de los depósitos del público en el

sistema. Esto provocó que otros bancos que ya tenían

problemas se vieran afectados por estos retiros, trayendo como consecuencia la quiebra de otros tres bancos. Por lo que las

autoridades intervinieron el Banco del Café (Bancafé), el Banco

Mercantil (Bamer), el Banco Nacional de Industria y Comercio

(BANIC). Posteriormente, el Banco de la Producción (Banpro), que forma parte de la Red Promerica, con intereses en todos los

países de Centroamérica y Panamá, adquirió los principales

11

El descalce e iliquidez de una institución financiera implica la percepción de sus

clientes de que es insolvente, por lo que conduce usualmente a corridas de

depósitos, las cuales pueden ser contagiadas a otras entidades que dependen de los

pagos de la institución financiera en problemas y pueden ser igualmente ilíquidas,

generando con ello una inestabilidad en el sistema financiero de un país.

Page 73: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

67

activos y pasivos de Interbank, la diferencia sería cubierta con

la emisión de títulos de deuda interna.

La intervención bancaria en Nicaragua llevó a garantizar la

totalidad de los depósitos y la mayoría de los pasivos. Esto tuvo

la intención de que los pasivos y activos fueran transferidos a otros bancos locales mediante subasta, mientras el Banco

Central cubrió la diferencia entre pasivos y activos por medio

de la emisión de títulos de deuda interna de mediano plazo

(Certificados Negociables de Inversión –Ceni’s-, indexados al dólar estadounidense), por lo que el costo de la intervención fue

asumido por el Gobierno de Nicaragua.

En el caso de Bancafé, su situación financiera se venía deteriorando, su cartera vencida sufría alzas, ya que se

encontraba vinculada al grupo económico que llevó a la quiebra

a Interbank y a la actividad cafetalera en crisis, y tenía

préstamos relacionados mas allá a los establecidos por la Ley General de Bancos. A finales del 2000 se decidió llevar a cabo

la liquidación forzosa, en principio se decidió respaldar una

parte de los depósitos, pero la retirada masiva en otros bancos, provocada de la crisis de Interbank, llevó a respaldar la

totalidad de los depósitos. Posteriormente se licitaron sus

principales activos y pasivos, la cual fue ganada por el Banco de Finanzas (BDF). La diferencia entre la cartera neta de

provisiones y los pasivos del público fue cubierta con Ceni´s

del Banco Central.

En Bamer su cartera se encontraba concentrada en el sector agrícola, especialmente en la producción de café y el sector

comercial. Su cartera se deteriora y sufre un retiro de depósitos

con la crisis de Interbank, entrando en insolvencia, que se complicó con una estafa millonaria de un ex socio de la entidad.

El banco fue intervenido en 2001, con lo que sus activos y

pasivos fueron licitados, ganando el Banco de Crédito Centroamericano (Bancentro). La diferencia entre activos y

pasivos fue cubierta con Ceni’s.

El Banic a fines de 2001 venía presentando un deterioro en la

calidad de su cartera, siendo un tercio de ella en café. Esta situación se complicó con la crisis de Bancafé en 2000 y del

Bamer en 2001, lo que se tradujo en fuertes retiros de depósitos.

Page 74: Debate Económico No. 6

Debate Económico

68

En consecuencia fue intervenido a mediados de 2001, con lo

que se licitaron sus activos y pasivos, que ganó el Banco de la

Producción (Banpro). Al igual que los casos anteriores, la

diferencia entre activos y pasivos se reconoció con Ceni’s del Banco Central.

Para principios de 2008, se dieron una serie de negociaciones

entre el Gobierno de Nicaragua y los tenedores de los Ceni’s, como resultado se llegó al acuerdo en el que el total del valor de

estos bonos, valuado en 190 millones de dólares (84% en

posesión de Banpro y el 16% en Bancentro), fuera redimido anticipadamente y sustituido por nuevos títulos. Los nuevos

títulos tienen un plazo de vencimiento de 20 años (el plazo

anterior incluía el vencimiento del último tramo de los bonos

hasta el año 2013), con pagos escalonados cada 6 meses y la reducción de la tasa de interés a un 5.0% durante los primeros

15 años y 5.25% en los últimos 5 años (anteriormente la tasa

era del 8.3%) (Fitch Ratings, 2008: 12).

Los costos fiscales de las diferentes intervenciones bancarias

han sido variados. El caso de Costa Rica en 1994 implicó en un

costo del 3.5% del PIB. Guatemala, hasta el 2002 había incurrido en un costo equivalente al 1% del PIB. Otro caso

importante fue el de Nicaragua, donde la intervención de siete

bancos durante el cuatrienio 1998-2001 costó cerca de 42% del

PIB en el año 2001. Tan sólo, en el año del 2000, cuatro instituciones fueron intervenidas, lo que representó

aproximadamente el 40% de los activos del sistema y 39% de

sus depósitos (Agosin, et. al., 2004: 65; Ansorena, 2007: 14-16).

Si comparamos el costo fiscal de las crisis bancarias como

porcentaje del PIB en otros países, tenemos que Chile (en la

crisis bancaria de 1981-1985) incurrió en un costo equivalente al 33% del PIB, se estimó que por lo menos hasta el 2000 este

país continuaba realizando pagos y transferencias tanto a

deudores como a algunas instituciones financieras por montos cercanos al 1% del PIB anual; Venezuela (1994) hasta el 2000

incurrió en un costo del 17.2% del PIB; México (1994-1995) se

estimó que hasta el 2000 tenía un costo del 11.9%; y Argentina (1980-1982, 1989-1990, 1995) hasta el 2000 con 25% del PIB

Page 75: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

69

(Amieva y Urriza, 2000 :30). Salvo en Nicaragua, en el resto de

los países centroamericanos los costos de estas crisis no han sido significativos, pero, qué costo fiscal es insignificante en

una región que enfrenta serias dificultades sociales y

económicas.

5. Reflexiones

La aplicación de las reformas financieras en Centroamérica

tiene un fuerte impulso a partir de la implementación de las

reformas estructurales, por lo que en su diseño y ejecución se encuentra una fuerte participación de instituciones

internacionales como el FMI el BM. El objetivo principal de la

reformas consiste en el rediseño de las leyes e instituciones financieras para garantizar la libre movilidad del capital

financiero.

A pesar de las numerosas reformas instrumentadas en los países

de la región, que toman matices diferentes, todas han cumplido con los mismos objetivos. La primera ola de reformas,

conocidas como de primera generación tuvieron el objetivo de

construir un marco jurídico centrado en garantizar la regulación y supervisión bancaria, asimismo se implementó la idea de los

bancos centrales independientes, con el objetivo de garantizar el

control de la inflación. Posteriormente vino una segunda generación donde se fortaleció la libre movilidad de los

capitales, para ello se implementó la liberalización de los tipos

cambiarios y las tasas de interés, la reducción del encaje legal,

así como la promoción de los mercados de capital y la reducción o en sus casos la eliminación de la participación de

los Estados en el sector bancario.

Las reformas adoptadas han reconfigurado el espacio financiero de la región. El principal efecto se ha reflejado en un

crecimiento considerable de los flujos de capital. El principal

motivo de ello se debe al proceso de privatizaciones, fusiones y adquisiciones de las empresas financieras y no financieras que

se han llevado a cabo durante los últimos veinte años y con

mayor intensidad en la última década.

Además, existe un panorama de incertidumbre, ya que los flujos de capital se mueven con mucha mayor fluidez generando un

Page 76: Debate Económico No. 6

Debate Económico

70

ambiente de vulnerabilidad e inestabilidad, con ello crece el

riesgo de una crisis.

A pesar de que no existen estudios profundos sobre los eventos

de crisis en la región, posiblemente por el pequeño tamaño de sus economías y el reducido impacto que puede tener su

sistema en el conjunto del sistema financiero internacional,

estos países no han quedado exentos de este tipo de eventos, al verse vulnerados sus sistemas a la fragilidad financiera que se

acentuó con las últimas reformas.

6. Bibliografía

Agosin, Manuel R., Roberto Machado y Paulina Nazal

(2004), “Capítulo IV. Los mercados financieros”, en

Agosin, Manuel R., Roberto Machado y Paulina Nazal (edits.), Pequeñas economías, grandes desafíos.

Política económica para el desarrollo en

Centroamérica, Washington, D.C., BID, pp. 63-77.

Amieva Huerta, Juan y Bernardo Urriza González

(2000), “Crisis bancarias: causas, costos, duración,

efectos y opciones de política”, en Serie. Política Fiscal, núm. 108, Chile, CEPAL- División de

Desarrollo Económico.

Ansorena, Claudio (2007), “Competencia y regulación

en la banca: el caso de Nicaragua”, en Serie. Estudios y perspectivas, núm. 85, México, CEPAL-

BIDRC/CRDI.

Banco Central de Guatemala (2007a), Proceso de suspensión de operaciones del Banco del Café, S.A.,

Guatemala, Banguat.

Banco Central de Guatemala (2007b), Proceso de

suspensión de operaciones del Banco de Comercio, S.A., Guatemala, Banguat.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe

(CEPAL), <www.cepal.org>.

Page 77: Debate Económico No. 6

Fragilidad financiera y crisis bancarias en Centroamérica

71

Consejo Monetario Centroamericano (CMCA) (2003),

Características básicas y evolución reciente de los sistemas bancarios de Centroamérica, Panamá y

República Dominicana, Costa Rica, CMCA.

Correa, Eugenia (2006), “Banca extranjera en América Latina”, en Correa, Eugenia y Alicia Girón (coords.),

Reforma financiera en América Latina, Argentina,

CLACSO, pp. 67-81.

Correa, Eugenia (2003), “Los sistemas financieros en América Latina: algunas transformaciones”,

(consultado el 13 de agosto de 2013) disponible en:

<www.redcelsofurtado.edu.mx/archivosPDF/correa6.pdf>.

Dubón, Enrique (2008), “Consolidación bancaria en

Centroamérica. ¿Puede contribuir a la mayor

bancarización regional?, en Notas Económicas Regionales, núm. 11, junio, Costa Rica, Consejo

Monetario Centroamericano.

Fisher, Irving (1933), “The debt-deflation theory of great depressions”, en Econometrica, vol. 1, núm. 4,

octubre de 1933, Chicago, Journal of the Econometric

Society, pp. 337-357, (consultado el 25 de julio de 2013) disponible en:

<http://www.jstor.org.pbidi.unam.mx:8080/stable/1907

327>.

Fitch Ratings (2008), Bancos centroamericanos: resultados semestrales y perspectivas”, en Reporte

Especial, 22 de agosto, (consultado el 5 de agosto de

2013) disponible en: <http://www.fitchca.com/docs/doc_1298.pdf>.

Flaming, Mark (2005), “Capítulo 9. Desarrollo de los

mercados financieros”, en Large, William R. (edit.), Una sólida alianza para el desarrollo. Centroamérica y

el BID desde 1990, Washington, D.C., Banco

Interamericano de Desarrollo, pp. 323-350.

Page 78: Debate Económico No. 6

Debate Económico

72

Galindo, Arturo, Alejandro Izquierdo, Liliana Rojas-

Suárez (2010), Integración financiera en

Centroamérica: nuevos desafíos en el contexto de la

crisis internacional, Documento de trabajo núm. IDB-WP-153, Washington, D.C., Banco Interamericano de

Desarrollo.

Keynes, John Maynard (2003) 1936, Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero, cuarta edición en

español, México, FCE.

Kregel, Jan (2004), “Fragilidad financiera e inestabilidad económica”, en Correa, Eugenia y Alicia

Girón (coords.), Economía Financiera Contemporánea,

Tomo III, México, Miguel Ángel Porrua, pp. 17-39.

López Ocampo, Ismael (2007), “Fraudes financieros en Centroamérica”, en Revista Probidad, El Salvador,

agosto, (consultado el 10 de agosto de 2013) disponible

en: <http://reportes.files.wordpress.com/2007/08/fraudes-

financieros.pdf>.

Minsky, Hyman P. (2008) 1986, Stabilizing an unstable economy, Estados Unidos, Mc. Graw Hill.

Minsky, Hyman P. (1992), “The financial instability

hypothesis”, en The Jerome Levy Economics Institute

of Bard College, working paper no. 74, Estados Unidos, Nueva York, (consultado el 5 de agosto de

2013) disponible en:

<http://www.levyinstitute.org/pubs/wp74.pdf>.

Schumpeter, Joshep A. (1994) 1911, Teoría del

desenvolvimiento económico. Una investigación sobre

ganancias, capital, crédito, interés y ciclo económico,

México, FCE.

Shah, Hermant, Ana Carvajal, Geoffrey Bannister,

Jorge Chan Lau e Ivan Guerra (2008), “Financial sector

development: equity and prívate debt markets”, en Desrulle, Dominique y Alfred Schipke (edits.), Central

America. Economic Progress and Reforms, EU, FMI,

pp. 134-198.

Page 79: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol. 2 (3), No. 6. Septiembre-Diciembre 2013, pp. 73-96.

Recibido: Enero 2013.

Aceptado: Noviembre 2013.

Ciclo económico y actividades productivas en

México, análisis y proyecciones

Alejandro Alanís Chico1

Resumen

Como un elemento de series de tiempo, el ciclo muestra las

fluctuaciones de los datos de una variable a lo largo de su

tendencia. Bajo el enfoque de ciclos de crecimiento, este

análisis permite verificar la asociación que una variable objeto de estudio mantiene con el desempeño de la economía en su

conjunto. En este ámbito, es de mucha utilidad extraer el

componente de mediano plazo y verificar en cuál de las cuatro fases existentes se está ubicado, así como la duración que

presenta cada una de las etapas.

Al hablar de ciclo económico y actividades productivas en

México, lo que se muestra en este documento es una

descripción de la trayectoria de algunas de las principales

actividades económicas así como su asociación con respecto al Producto Interno Bruto. Lo anterior se realiza empleando la

metodología de ciclos de crecimiento. De forma adicional en el

documento se realizan proyecciones de comportamiento para un horizonte de cinco años.

1 Maestro en Administración; Universidad Mexiquense; mail:

[email protected];

Page 80: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

74

Abstract

As an element of time series, the cycle shows the fluctuations of the data of a variable along its trend. Under the growth cycle

approach, this analysis verifies the association variable under

study maintains the performance of the economy as a whole. In

this area, it is very useful to extract the medium term component and verify which of the four existing phases is

located, and the length presented by each of the stages.

Speak about economic cycle and production activities in

Mexico, which is shown in this paper is a description of the

path of some of the main economic activities and their association with respect to GDP. This is done using the

methodology of growth cycles. Additionally projections in

document behavior for a five-year horizon are provided.

Palabras clave: Ciclo económico, análisis de ciclos, filtros de

Hodrick-Prescott, grados y tiempo de co-movimiento.

Clasificación JEL: E0, C40

Introducción

Los ciclos económicos pueden ser definidos como fluctuaciones

cíclicas de la actividad económica en su conjunto. Al

estudiarlos se ha descubierto que las variables ligadas a la actividad productiva global revelan estos comportamientos en

forma de onda, no obstante, parece existir cierto número de

actividades que tienen un desempeño contrario al de la

actividad global, sea porque pertenecen a un sector conectado más fuertemente con el exterior o porque pertenecen a un sector

no fuerte dentro de las actividades económicas del país.

La importancia del análisis radica en el hecho de que es posible

visualizar el desempeño de la economía en su paso por cuatro

distintas fases del ciclo económico, entendidas como expansiones, auges, contracciones y crisis. En este sentido,

contar con la resultante de un análisis de ciclo permite a los

integrantes del contexto económico tener idea de en qué fases

ha estado la actividad económica, por cuánto tiempo, y de qué

Page 81: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

75

es lo que se espera para el futuro toda vez que en el ámbito

económico la incertidumbre siempre es un componente latente

y si se tiene idea del comportamiento futuro de las actividades

se pueden tomar decisiones que permitan administrar el riesgo.

Por lo anteriormente planteado, resulta importante estudiar la

sincronía que las actividades productivas del país mantienen con el desempeño de la economía en conjunto y sobre todo la

identificación de la parte del ciclo en la que nos encontramos.

En este ámbito, son dos los objetivos del documento; el

primero, realizar un análisis sobre el grado de asociación y

tiempo de respuesta que las actividades productivas mantienen con el desempeño de la economía a través del enfoque de ciclos

de crecimiento, y el segundo, predecir el comportamiento del

ciclo de las variables involucradas en un horizonte de cinco

años.

El documento está dividido en tres partes, la primera presenta la

metodología de ciclos de crecimiento empleada para dar lugar al análisis en este trabajo. En la segunda parte, con datos del

primer trimestre de 1993 al primer trimestre de 2012, se realiza

el trabajo empírico entre el valor de producción de actividades productivas y el Producto Interno Bruto de México.

En la última parte se plasman las conclusiones relativas al

análisis.

I. Metodología

Previo a describir los aspectos relativos a la metodología que se

emplea, vale la pena mencionar que el estudio de los ciclos se soporta en distintos enfoques, entre ellos los más utilizados son

el de ciclos clásicos y ciclos de crecimiento y menos abordados

al mismo tiempo que innovadores son los de enfoque no lineal.

El primer enfoque parte de la definición de Burns y Mitchell en

1946 en el National Bureau of Economic Research (NBER).

Ellos sugerían que el ciclo era el comportamiento en forma de onda que poseía la existencia de cuatro fases las cuales

Page 82: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

76

inevitablemente se suceden en el tiempo: la prosperidad, la

crisis, la depresión y la recuperación (Burns y Mitchell, 1946).

En este enfoque, el ciclo es visto como una secuencia de etapas,

resalta la importancia del análisis de las características de los regímenes

2.

Más tarde, en la década de los setenta, Lucas (1977), influenciado por importantes economistas de la época y algunos

anteriores, sentaría las bases del enfoque de ciclos de

crecimiento al dar un nuevo giro al estudio del tema definiendo al ciclo económico como las desviaciones del producto nacional

bruto con respecto a su tendencia a lo largo del tiempo. En este

ámbito, a diferencia de la definición de Burns y Mitchell, que

definían a los ciclos como una sucesión de expansiones y contracciones, Lucas supone la centralidad del producto y

enfatiza el movimiento del resto de las variables en relación al

producto.

Lucas ya no supone que la tendencia de largo plazo deba ser

necesariamente constante, puede crecer o decrecer a lo largo del tiempo. Cuando Lucas establece su definición de ciclo no aclara

a qué se refería con “tendencia”, y ante este vacío serán

Kydland y Prescott los que hacen operativa la definición de

Lucas, completando su concepto y estableciendo que la tendencia de cualquier serie de tiempo es la curva suave que se

puede trazar en un gráfico de una serie de tiempo (Kidland y

Prescott, 1982).

De la misma forma en que Lucas no aclara lo que era tendencia,

tampoco deja establecido cómo se aislaba de una serie y en este

sentido, los autores Hodrick y Prescott, formulan una metodología para aislar el componente de tendencia

3.

2 Bajo este enfoque se entienden por regímenes del ciclo económico a las fases de

expansión y recesión. 3 Tradicionalmente esta metodología es conocida como el filtro de Hodrick-

Pescott y es un método para extraer el componente secular o tendencia de una

serie temporal, propuesto en 1980. Descompone la serie observada en dos

componentes, uno tendencial y otro cíclico. El ajuste de sensibilidad de la

tendencia a las fluctuaciones a corto plazo es obtenido modificando un

multiplicador λ.

Page 83: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

77

Ya para la década de 1990, Kydland y Prescott contemplan en

el análisis de ciclo los siguientes aspectos:

Amplitud de las fluctuaciones.

Grado de co-movimiento de variables con respecto

al PNB.

Desplazamiento de fases.

Dado que el objetivo de este documento es analizar el grado de

asociación y tiempo de respuesta que el valor de lo producido en las principales actividades económicas mantienen con

respecto a las fluctuaciones de la economía en su conjunto, el

enfoque a utilizar es el de ciclos de crecimiento.

A continuación se describe la parte operativa de la metodología.

Aislamiento de la tendencia para resaltar componente

cíclico

Se analizan las regularidades empíricas de actividades económicas principales y su relación con el desempeño de la

economía usando la metodología sugerida por Kydland y

Prescott, los cuales se basan en la definición de Lucas.

Según esta metodología, para poder analizar las fluctuaciones

cíclicas de alguna serie económica, debemos determinar

primero el componte tendencial de la misma. A su vez, en caso de que los datos tengan una periodicidad menor al año, se

requiere previamente descomponer el componente estacional, el

cual incluye las variaciones intranuales de una serie alrededor de la tendencia en el mismo sub-período de cada año. Este

proceso lo realizamos con el método X11 ARIMA.

Para separar el componente tendencial, según Hodrick y

Prescott (1997) la serie de tiempo yt es la suma de un

componente de tendencia gt y un componente de ciclo ct:

, para todo t = 1,…,T

Page 84: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

78

Para lograr la descomposición, Hodrick y Prescott propusieron

como medida de la variabilidad de la componente permanente,

la suma de los cuadrados de las segundas diferencias. Como el

procedimiento que propone se aplica sobre el logaritmo de la serie, este criterio sugiere minimizar la variabilidad de la tasa

de crecimiento de la componente permanente. Motivados por el

criterio de variabilidad expuesto anteriormente, Hodrick y Prescott propusieron el siguiente problema de minimización

para encontrar la componente permanente (o tendencia) de una

serie.

{ ∑

∑ [ –

] },

donde λ es un número predeterminado, conocido como

parámetro de suavización, cuya función en el problema de suavización es penalizar la suma de las segundas diferencias de

la componente permanente o tendencia. Entre menor sea el

parámetro, la tendencia puede fluctuar más pareciéndose a la serie original, y entre mayor sea éste, más se penalizan las

fluctuaciones de la tendencia por lo que se aproxima a una línea

recta.

Con = 0 no se distingue la tendencia de la serie,

y con = la tendencia es lineal, no tiene variabilidad.

Los autores recomiendan usar = 1600 para series trimestrales

y = 100 para series anuales.

El filtro de HP se utiliza para extraer la señal cíclica, (mediante

la sustracción de la tendencia estimada a la serie original), sin

embargo, esto sólo ha de hacerse en series sin estacionalidad ni

irregularidad, dado que por la forma de la función de ganancia, los componentes estacionales e irregulares “pasarían” sin ser

modificados, dando como resultado una señal cíclica

“contaminada” por estos componentes.

Page 85: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

79

En muchos casos lo que suele hacerse es tratar con logaritmos

de manera previa a las variables objeto de aplicación del filtro

con la intención de solucionar este problema. Otros autores,

como Guay y St-Amant (1996) señalan que el filtro HP “funciona” adecuadamente en la extracción de la señal cíclica

cuando el espectro de la serie original presenta un “pico” en

las frecuencias “cíclicas”, en el caso de que el espectro esté dominado por las bajas frecuencias (como es el caso de

la mayoría de series macroeconómicas), el filtro HP

proporciona un ciclo “distorsionado”.

Una vez que se desestacionaliza la serie, y se ha calculado su

componente tendencial, se puede obtener el componente

cíclico.

Et

Ct

Ttt YYYY

Et

Ttt

Ct YYYY

A su vez, es conveniente trabajar en logaritmos de las variables, así el componente cíclico estará expresado en términos

porcentuales aislado de cualquier unidad de medida.

Grado de co-movimiento

También basados en el postulado de Lucas acerca de la centralidad del producto, es útil analizar el grado de

comovimiento o relación de cada variable con el PIB.

Es decir, analizar si cada una de las variables económicas son procíclicas (correlación positiva), contracíclicas, (correlación

negativa) o acíclicas (cuando no hay correlación con el

producto).

Para determinar esto se debe calcular el coeficiente de

correlación de Pearson entre la desviación cíclica de cada

variable con la desviación cíclica del PIB. Este coeficiente varía entre –1 y 1. Cuanto más cerca de 1 en valor absoluto,

más correlacionadas estarán las series. El signo del coeficiente

indica si la correlación es positiva (>0) o negativa (<0).

Page 86: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

80

Para ver si dos series están correlacionadas habría que probar

estadísticamente si el coeficiente de Pearson es

significativamente distinto de cero. En caso de que rechacemos

la hipótesis nula de que sean iguales a cero, podremos concluir que están correlacionados, y habrá que ver el signo para saber

si se relacionan directamente o inversamente.

Una forma alternativa es seguir las definiciones de Fiorito y

Kollintzas que sugieren lo siguiente:

Cuadro 1. Análisis del ciclo y grado de asociación

Tipo de co-

movimiento

Valor del

coeficiente

Grado de asociación

Pro-cíclico

Si >0.2

Es fuerte si >0.5 y débil si

0.2<<0.5

Contra-cíclico Si ≤-0.2 Es fuerte si <-0.5 y

débil si -0.5<<-0.2

A-cíclico Si –0.2≤≤0.2

Fuente: Fiorito, R. y Kollintzas, T. (1993).

Cambio de fase

Esta es otra característica que está relacionada a la centralidad

del producto. Con cambio de fase nos referimos al hecho de si una variable cambia antes, en el mismo momento o después que

lo hace el PBI. Se dice que alguna variable lidera el ciclo si ésta

cambia antes que el producto (es adelantada), que es coincidente con el ciclo si cambia en el mismo momento en que

se modifica el producto y se dice que sigue el ciclo si cambia

luego de que lo hace el PBI (es rezagada). Para analizar estas

Page 87: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

81

características también se calculan los coeficientes de

correlación de Pearson entre los componentes cíclicos del

producto y de cada variable rezagada y adelantada (Kydland y

Prescott, 1990).

Luego, hay que verificar dónde se da el máximo coeficiente de

Pearson. Si es máximo, en valores absolutos, cuando la variable está rezagada, la variable lidera el ciclo o es adelantada. Si por

el contrario, el máximo coeficiente de correlación en valores

absolutos se da cuando la variable está adelantada y la variable sigue el ciclo o está rezagada.

En caso de que el máximo coeficiente de correlación sea el

contemporáneo la variable es coincidente con el ciclo o co-incidental. Es conveniente que se verifique que los coeficientes

de correlación con base en los cuales se caracterizó el

comovimiento y el cambio de fase de las variables con respecto al producto, sean estables a lo largo del tiempo. Para esto se

calcula la evolución de los coeficientes de correlación

contemporánea restringiendo el número de períodos y “corriendo” la muestra eliminando el primer período y

agregando uno al final.

Este proceso se hace sucesivas veces de modo de obtener una serie de coeficientes a lo largo del tiempo.

II. Análisis empírico

II.1 Los datos

Las series históricas contempladas pertenecen a diecinueve

años (1993-2012) con frecuencia trimestral. Como indicador

del desempeño de la actividad económica se contempla al

Producto Interno Bruto a precios de 2003 y su fuente fue el Banco de México. Con respecto a las actividades económicas

principales del país se eligieron de los tres sectores a aquellas

cuya participación estuviese por arriba del 1% con respecto al Producto Interno Bruto. Cabe mencionar que los datos también

se obtuvieron de Banco de México. Bajo el criterio planteado,

hubo un registro de 14 actividades.

Page 88: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

82

En el siguiente cuadro se presentan los sectores económicos así

como la participación porcentual que cada actividad

considerada tiene en el PIB y en el sector al que pertenece.

Cuadro 2. Participación de actividades productivas

en PIB mexicano

Sector / Actividad Participación en PIB Participación en sector

Sector primario 3.18%

Sector secundario 30.42%

Minería 4.6% 15.2%

Manufactura 17% 58.97%

Industria alimentaria 3.97% 13.06%

Bebidas y tabaco 1.01% 3.33%

Construcción 6.38% 20.99%

Equipo de transporte 3.9% 12.95%

Químico 1.53% 5.04%

Sector terciario 64.72%

Comercio 15.89% 24.55%

Medios 3.72% 5.75%

Salud 2.81% 4.35%

Educación 4.5% 6.98%

Servicios financieros

y seguros

5.48% 8.46%

Servicios profesionales

2.97% 4.59%

Transporte 7.08% 10.95%

Servicios de

alojamiento

2.56% 3.96%

Fuente: elaboración propia con base en datos de Banco de

México.

En la gráfica 1 se puede observar el desempeño del Producto

Interno Bruto, en esta se captan las fluctuaciones de la actividad

económica en México y destaca la contracción de la crisis reciente.

Page 89: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

83

5,000,000

6,000,000

7,000,000

8,000,000

9,000,000

10,000,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Producto Interno Bruto

1993-2012 (Trimestral)

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de Méxicohttp://www.banxico.org.mx/SieInternet/consultarDirectorioInternetAction.do?accion=consultarCuadro&idCuadro=CR111&sector=2&locale=es

Crisis reciente

Gráfica 1

La gráfica 2 muestra el comportamiento de las actividades

primarias y secundarias en el periodo comprendido de 1993 a

2012.

En este primer plano se observa que las actividades

relacionadas con el sector de alimentos, bebida y tabaco

muestran un marcado componente de estacionalidad.

Por otro lado, la manufactura en su conjunto presenta rastros

marcados de crisis en 1995 y para el periodo 2008-2009 el patrón se repite en actividades de la construcción, equipos de

transporte e industria química.

Vale la pena señalar que haciendo a un lado a las actividades primarias, el sector secundario representa el 30.42% con

respecto al PIB y la sola manufactura participa en un 17 % con

respecto a la actividad de la economía en su conjunto.

Page 90: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

84

200,000

240,000

280,000

320,000

360,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Actividades Primarias 1993-2012

(en mil lones de pesos trimestral)

1,600,000

2,000,000

2,400,000

2,800,000

3,200,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Actividades Secundarias 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

320,000

360,000

400,000

440,000

480,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Mineria 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

800,000

1,000,000

1,200,000

1,400,000

1,600,000

1,800,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Manufactura 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

200,000

240,000

280,000

320,000

360,000

400,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Industria Al imentaria 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

40,000

60,000

80,000

100,000

120,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Bebida y Tabaco 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

200,000

300,000

400,000

500,000

600,000

700,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Construcción 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

50,000

100,000

150,000

200,000

250,000

300,000

350,000

400,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Equipo de transporte 1993-2012

(en mi l lones de pesos trimestral)

100,000

110,000

120,000

130,000

140,000

150,000

160,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Industria química 1993-2012

(en mi l lones del pesos trimestral)

Fuente: Elaboración propia con base en Banco de México

http://www.banxico.org.mx/SieInternet/consultarDirectorio

InternetAction.do?accion=consultarCuadro&idCuadro=CR111&sector=2&locale=es

Actividades Productivas Sector Primario y Secundario, 1993-2012 en millones de pesos

Gráfica 2.

Page 91: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

85

3,500,000

4,000,000

4,500,000

5,000,000

5,500,000

6,000,000

6,500,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Activ idades Terciarias 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

600,000

800,000

1,000,000

1,200,000

1,400,000

1,600,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Comercio 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

50,000

100,000

150,000

200,000

250,000

300,000

350,000

400,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Medios de comunicación 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

180,000

200,000

220,000

240,000

260,000

280,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Serv icios de Salud 1993-2012

(en millones del pesos trimestral)

240,000

280,000

320,000

360,000

400,000

440,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Serv icios de educación 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

100,000

200,000

300,000

400,000

500,000

600,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Serv icios f inancieros y de seguros 1993-2012

(en millones del pesos trimestral)

150,000

200,000

250,000

300,000

350,000

400,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Serv icios prof esionales 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

300,000

400,000

500,000

600,000

700,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Serv icios de transporte 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

190,000

200,000

210,000

220,000

230,000

240,000

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Serv icios de alojamiento temporal 1993-2012

(en millones del pesos trimestral)

Actividades del sector terciario 1993-2012

(en millones de pesos trimestral)

Fuente: Elaboración propia con base en datos del Banco de México

http://www.banxico.org.mx/SieInternet/consultarDirectorioInternet

Action.do?accion=consultarCuadro&idCuadro=CR111&sector=2&locale=es

Gráfica 3

En la gráfica anterior (gráfica 3), se destaca el comportamiento

de las actividades de comercio toda vez que se puede observar

una estrecha relación y acompañamiento con respecto al desempeño de las actividades terciarias en su conjunto y esto

obedece al hecho de que actividades de comercio representan el

24.55% del total de servicios. Al mismo tiempo el sector de servicios representa el 64.72% del PIB.

Llama la atención de los planos anteriormente presentados el

correspondiente a servicios de transporte, alojamiento y salud, ya que en tiempos de crisis incluidas en el periodo de estudio se

puede notar la clara contracción que experimentan y en este

ámbito puede adelantarse que mantienen una estrecha conexión con el comportamiento del PIB, aunque será necesario dar paso

al trabajo cuantitativo para poder corroborar esta afirmación.

Page 92: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

86

-.08

-.04

.00

.04

.08

15.5

15.6

15.7

15.8

15.9

16.0

16.1

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LPIB Trend Cycle

Producto Interno Bruto de México

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

Es importante mencionar que antes de ser sometidos a la

extracción de tendencia para aislar el componente cíclico y

poder proceder al análisis que compete al presente documento,

todas las series se desestacionalizaron y se trabajó con el logaritmo de las mismas a fin de limpiarlas de comportamientos

que pudieran afectar a los resultados.

II.2 Análisis cuantitativo

En esta sección se procede a separar las series históricas en tendencia y ciclo utilizando el filtro de Hodrick y Prescott. Un

estudio adecuado de esta cuestión, exigiría disponer de una

definición precisa de los dos componentes de la serie histórica, tendencia y ciclo.

Previamente a las operaciones de diferenciación o filtrado, se

desestacionaliza cada serie y se obtiene el logaritmo.

Aislamiento de tendencia para la obtención del ciclo

En esta parte se ha estimado una tendencia lineal determinista, obteniendo el ciclo empírico por sustracción, es decir, restando

al logaritmo de la serie original la tendencia lineal estimada.

Se ilustra el procedimiento para las variables en cuestión.

Gráfica 3. Descomposiciones de tendencia y ciclo del PIB *.

Page 93: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

87

-.10

-.05

.00

.05

.10

12.2

12.3

12.4

12.5

12.6

12.7

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LAPRIM Trend Cycle

Sector Primario

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

-.12

-.08

-.04

.00

.04

.08

14.3

14.4

14.5

14.6

14.7

14.8

14.9

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LACSEC Trend Cycle

Sector Secundario

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

-.12

-.08

-.04

.00

.04

.08

12.7

12.8

12.9

13.0

13.1

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LMINERIA Trend Cycle

Minería

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

-.15

-.10

-.05

.00

.05

.10

13.6

13.8

14.0

14.2

14.4

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LMANUF Trend Cycle

Manufactura

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

-.04

-.02

.00

.02

.04

12.3

12.4

12.5

12.6

12.7

12.8

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LALI Trend Cycle

Industria Alimentaria

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

-.08

-.04

.00

.04

.08

10.8

11.0

11.2

11.4

11.6

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LBEYTA Trend Cycle

Bebidas y tabaco

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

Gráfica 4. Descomposiciones de tendencia y ciclo de las

variables objeto de estudio*.

Gráfica 5. Descomposiciones de tendencia y ciclo de las

variables objeto de estudio*. (Continuación)

Page 94: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

88

-.3

-.2

-.1

.0

.1

.2

12.4

12.6

12.8

13.0

13.2

13.4

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LCONS Trend Cycle

Construcción

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

-.6

-.4

-.2

.0

.2

11.2

11.6

12.0

12.4

12.8

13.2

94 96 98 00 02 04 06 08 10

LEQTRANS Trend Cycle

Equipo de transporte

Descomposición en Tendencia y Ciclo 1993-2012

Serie Trimestral

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

* En cada gráfica la línea más alta que presenta irregularidades

corresponde al logaritmo de la serie original, la que se extiende a lo largo de la línea anterior es la tendencia calculada, mientras

que la línea que se sitúa más cerca del eje horizontal

corresponde al componente de ciclo, hallado mediante la

sustracción de la tendencia al logaritmo.

Aunque en el presente documento sólo se presenta de manera

gráfica el aislamiento del componente de tendencia y de ciclo para el PIB y seis de las ocho actividades productivas, el

procedimiento a seguir fue el mismo en todos los casos.

Siguiendo la dinámica de la metodología, tras haber aislado el

componente de tendencia se obtiene el ciclo en cada una de las

series. El ciclo obtenido constituye la descripción más ajustada a los hechos históricos. La gráfica 6, muestra claramente los

periodos de recesión, recuperación y crisis de las actividades de

la economía mexicana en general. Si tomamos como ejemplo el

PIB (su descomposición en la gráfica 3), en la última década el crecimiento económico promedio de nuestro país ha sido del

2% si dejar de mencionar la drástica caída de 6.7%

experimentada en 2009 debido a la crisis financiera originada en los Estados Unidos. Como se puede observar en la gráfica de

ciclo, en el periodo citado predominan las condiciones

negativas mismas que reflejan el problema estructural de

dependencia casi total del sector externo mexicano hacia la economía norteamericana y del poco éxito de implantar una

política de crecimiento de largo plazo.

Page 95: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

89

-.010

-.005

.000

.005

.010

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo PIB

-.006

-.004

-.002

.000

.002

.004

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Actividades Primarias

-.012

-.008

-.004

.000

.004

.008

.012

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Actividades Secundarias

-.006

-.004

-.002

.000

.002

.004

.006

.008

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Mineria

-.015

-.010

-.005

.000

.005

.010

.015

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Manufactura

-.004

-.002

.000

.002

.004

.006

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Industria Alimentaria

Crisis Reciente

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México.

Gráfica 6. Ciclo del PIB y principales actividades económicas

en México, 1993-2012. Trimestral

Page 96: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

90

-.015

-.010

-.005

.000

.005

.010

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo bebida y tabaco

-.03

-.02

-.01

.00

.01

.02

.03

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Construcción

-.04

-.02

.00

.02

.04

.06

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Equipo de transporte

-.010

-.005

.000

.005

.010

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo industria química

-.008

-.004

.000

.004

.008

.012

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo actividades terciarias

-.02

-.01

.00

.01

.02

.03

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo actividades de comercio

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México.

Gráfica 7. Ciclo del PIB y principales actividades económicas

en México, 1993-2012 Trimestral (Continuación)

Page 97: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

91

-.03

-.02

-.01

.00

.01

.02

.03

.04

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Medios

-.008

-.006

-.004

-.002

.000

.002

.004

.006

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo Salud

-.003

-.002

-.001

.000

.001

.002

.003

.004

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo servicios de educación

-.04

-.03

-.02

-.01

.00

.01

.02

.03

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo servicios financieros y seguros

-.010

-.005

.000

.005

.010

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo servicios de transporte

-.010

-.005

.000

.005

.010

94 96 98 00 02 04 06 08 10

Ciclo servicios de alojamiento

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México.

Gráfica 8. Ciclo del PIB y principales actividades económicas

en México, 1993-2012 Trimestral (Continuación)

Page 98: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

92

Relación cruzada del precio de las acciones con el

Producto Interno Bruto

Como se mencionó en la primer parte, realizar un análisis de

ciclo conlleva el compromiso de identificar si una variable o

conjunto de variables se encuentran ligadas con el

comportamiento de la actividad económica.

Puede darse el caso de que la(s) variable(s) de interés se

mueva(n) con el PIB (pro-cíclica) o se mueva(n) en dirección opuesta (contra-cíclica) o simplemente tenga(n) un

comportamiento independiente (a-cíclica) de la variable de la

actividad económica.

En este mismo ámbito se hace importante descubrir si las

variables en estudio responden a tiempo, de forma adelantada o

retardada ante las fluctuaciones del producto interno bruto, lo anterior es relevante ya que en lo general se sabe que las

expectativas racionales financieras se adelantan a los hechos

económicos.

El siguiente cuadro muestra las correlaciones cruzadas que

permiten apreciar el grado, el sentido de asociación y tiempo de respuesta entre el ciclo de la economía y el comportamiento de

las actividades económicas estudiadas. En los cuadros se

presentan tres aspectos principales; el tipo de asociación, grado

de asociación y tiempo de respuesta.

Finalmente se muestran proyecciones del ciclo económico para

las variables objeto de estudio hasta 2017, destacando cuatro aspectos principales:

1. Dado que nos encontramos en una fase de expansión la pregunta es ¿hasta cuándo seguiremos creciendo? Con base

en las proyecciones se prevé que la economía siga en

ascenso hasta alcanzar su máximo en el tercer trimestre de

2013, a partir de allí iniciará una fase de contracción.

Page 99: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

93

Cuadro 3. Correlación cruzada entre actividades

económicas y ciclo de la economía

Fuente: elaboración propia con base en análisis de ciclo.

Sector/Actividad Tipo de asociación Grado de

asociación Tiempo de respuesta

Sector primario +0.71 Procíclica Fuerte Retardada 32 periodos

Sector secundario +0.96 Procíclica Fuerte A tiempo

Minería -0.77 Contracíclica Fuerte Retardada 8 periodos

Manufactura +0.91 Procíclica Fuerte A tiempo

Industria alimentaria +0.79 Procíclica Fuerte A tiempo

Bebidas y tabaco -0.81 Contracíclica Fuerte Retardada 13 periodos

Construcción +0.93 Procíclica Fuerte A tiempo

Equipo de transporte +0.80 Procíclica Fuerte A tiempo

Químico -0.81 Procíclica Fuerte Retardada 14 periodos

Sector terciario +0.97 Procíclica Fuerte A tiempo

Comercio +0.93 Procíclica Fuerte A tiempo

Medios +0.85 Procíclica Fuerte Retardada 1 periodo

Salud +0.89 Procíclica Fuerte Retardada 3 periodos

Educación +0.40 Procíclica Débil A tiempo

Servicios financieros -0.60 Contracíclica Fuerte Retardada 15 periodos

Servicios

profesionales +0.88 Procíclica Fuerte A tiempo

Transporte +0.98 Procíclica Fuerte A tiempo

Servicios de

alojamiento +0.97 Procíclica Fuerte A tiempo

Page 100: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

94

-.012

-.008

-.004

.000

.004

.008

.012

94 96 98 00 02 04 06 08 10 12 14 16

PIB Act. TerciariasAct. Primarias Act. Secundarias

Ciclo PIB y Actividades ProductivasProyecciones a 2017

Fuente: Elaboración propia con base en datos de Banco de México

Proyecciones

Tercer trimestre 2013

Cuarto trimestre de 2016

Crisisreciente

2. Partiendo de lo anterior, surge otra pregunta, ¿hasta cuándo

durará la contracción?, la respuesta que brindan las

proyecciones indica que la fase de contracción llegará hasta

el cuarto trimestre de 2016, para a partir de entonces volver a crecer.

3. Se nota en las proyecciones que a pesar de que los servicios poseen más peso en la economía, su ciclo se empezará a

desfasar del ciclo del PIB, razón que hace pensar que estas

actividades no serán motores de la economía a diferencia de lo que promete la industria al mostrar una sincronía más

fuerte con la economía en su conjunto.

4. Las actividades agropecuarias estarán cada vez más divorciadas del desempeño económico global de nuestro

país. ¿Qué haremos con el sector? ¿Dejarlo morir?

Aprendamos lecciones de la economía norteamericana o europea que consideran al sector primario como de

seguridad nacional de tal forma que en foros

internacionales defienden a como dé lugar la política de apoyo y subsidios al mismo.

Gráfica 3. Proyecciones del ciclo del PIB y de actividades productivas, 2012-2017

Page 101: Debate Económico No. 6

Ciclos económicos y actividades productivas en México, análisis y proyecciones

95

Conclusiones

Con base en los resultados generados al aplicar el análisis de ciclo, se puede decir que en general la mayor parte de las

actividades económicas son procíclicas manteniendo una

relación fuerte y una respuesta a tiempo con respecto al

comportamiento del producto interno bruto.

Llama la atención el comportamiento contracíclico del rubro

bebidas y tabaco por el lado de las actividades secundarias y el de servicios financieros por el lado de las actividades terciarias.

Al respecto pueden hacerse los siguientes señalamientos: las

bebidas y tabaco son bienes que escapan de la racionalidad económica del ser humano y que no siempre su consumo

obedecerá al presupuesto disponible, sea porque se tienen que

adquirir para compromisos sociales o para eventos emergentes

no planeados.

Con respecto a los servicios financieros y de seguros en el que

existe un retraso de 15 periodos, puede inferirse que el sector financiero no está respondiendo ante expectativas, más bien

está tomando una postura precavida para la toma de decisiones

y está esperando que ocurran eventos económicos que garanticen estabilidad antes de tomar decisiones importantes de

expansión en el sector.

Finalmente con respecto a las perspectivas que muestra el componente de ciclo se espera en forma general que el ciclo de

la economía mexicana alcance el punto máximo de crecimiento

en la primera mitad de 2014, para posteriormente dar paso a una etapa de contracción económica.

Page 102: Debate Económico No. 6

. Debate Económico

96

Referencias bibliográficas

Burns, A. y Mitchell, W. (1946). Measuring business cycles, New York: NBER.

Carrera, Pérez y Saller.(1998). El ciclo económico y la

recaudación. Reunión Anual. AAEP.

Fiorito, R. y Kollintzas, T. (1993). Stylized facts of business i les in the G7 from a real business cycle

perspective. European Economic Review.

Guay ySt-Amant (1996). Do mechanical filters provide a good approximation to business cycles. Bank of

Canada.

Hodrick, R.J. y Prescott E.C. (1997). “Poswar US

business cycles: An empirical investigation”, Journal of money, credit and banking, The Ohio University

Press. Vol 29.

Kydland, F. y Zarazaga, E. (1996). Is the Business Cicles of Argentina different? Economic Review.

Federal Reserve of Dallas.

Lucas, R. (1977). Understanding business cycles. Carnegie-Rochester Series 5.

Moral, J. (2002). “Análisis del ciclo económico:

Descomposición de series Temporales”,

http://www.uam.es/personal_pdi/economicas/gamonal/doctorado/cicloeco.PDF (17 marzo2012).

Sprinkel, B. (1972). “Dinero y mercado financiero, un

enfoque monetarista”, trad. por CEMLA, México. Uriel, E. (1995). Análisis de datos: Series temporales y

análisis multivariante. Ed. C.1995.

Banxico. (2012) www.banxico.org.mx BMV, (2012). Indicadores de precios históricos de las

acciones.

Page 103: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol.2 (3), No. 6. Sept.-Dic. 2013, pp. 97-119.

Síntesis de los enfoques metodológicos

para la medición multidimensional de la

pobreza

Eric Urias Romero

1

Darío Ibarra Zavala2

Resumen

El concepto de pobreza ha cambiado en los últimos años, de

modo tal que ahora no se considera solamente el ingreso

económico o la riqueza del individuo para que se le pueda

considerar como pobre. Se han incorporado una serie de

elementos que hacen que la pobreza se deba medir y cuantificar

desde diferentes ángulos, que incluyan elementos tales como

esperanza vida, consumo de energéticos, etc. En México, la

medición de la pobreza ha incorporado diferentes elementos,

por lo que la pobreza se considera como multidimensional, esto

es, no sólo importa el ingreso o riqueza monetaria, sino otros

elementos que impactan en el bienestar de la población. El

presente artículo hace una revisión de la literatura sobre la

materia.

Palabras Clave: pobreza, distribución del ingreso, medición.

1 Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social

(CONEVAL). 2 Unidad Académica Profesional Nezahualcóyotl-UAEM y Laboratorio de

Análisis Económico y Social, A. C.

Page 104: Debate Económico No. 6

Debate Económico

98

Clasificación JEL: D31, D33, D63

Abstract

The concept of poverty has changed in the last years, so now it

includes not only economic income or wealth to consider a

family as poor. In measuring poverty it has been included a list

of elements that makes that poverty can be measured from

several angles that includes elements such as expectation of life,

energy consumption, etc. In Mexico measurement of poverty

takes into account several elements, so poverty is considered as

multidimensional, which means, not only matters the wealth or

income, but others elements that have an impact in population

welfare. This article makes a review about economic literature

on this subject.

Key words: Poverty, income distribution, measurement.

JEL: D31, D33, D63

Introducción

Históricamente se ha considerado que la pobreza es un

fenómeno que tiene que ver esencialmente con el ingreso o la

riqueza de un individuo o familia. Así, se ha considerado pobre

a una persona que no tiene un nivel de ingreso determinado que

le permita adquirir una canasta de bienes que, en el contexto

social donde se desenvuelve, se considera crucial para no ser

pobre. En resumen, la pobreza se ha considerado como la

carencia de recursos económicos, o más propiamente dicho,

Page 105: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

99

monetarios, que provocan la insatisfacción de ciertas

necesidades básicas.

Sin embargo, este enfoque ha cambiado en los últimos años. De

hecho, el enfoque por sí mismo es problemático, pues puede

provocar que algunas personas se consideren pobres dentro de

su contexto y ricas en otro. Por poner un ejemplo, un ingreso de

1,000 dólares al mes para una familia de Estados Unidos de

América implica pobreza, pero en México no, mucho menos en

países como Cuba o India, donde tal ingreso casi sería

escandaloso.

Por tal razón es que se han desarrollado otros enfoques para

medir la pobreza, considerando que ésta es no sólo un

fenómeno de ingreso monetario, sino de insatisfacción de una

serie de necesidades que se consideran básicas. Cabe agregar

que dichas necesidades son móviles y cambian con el tiempo,

en ocasiones de manera dramática. Ejemplo de ello lo

constituye el drenaje, la electricidad y el agua entubada, que

ahora se consideran necesidades básicas y cuya carencia

implicaría pobreza. Sin embargo, en la edad media, los mismos

reyes no contaban con tales servicios, por lo que, a nuestros

ojos, podrían parecer pobres.

Así pues, el concepto de pobreza no es único ni estático.

Presenta una serie de dilemas y problemas para su medición. El

consenso actual, sin embargo, es que la pobreza no es sólo un

fenómeno monetario, pues intervienen una serie de factores que

deben considerarse para que alguna persona o familia se

consideren como pobres. El objeto del presente artículo es hacer

un recuento de los principales enfoques contemporáneos que se

utilizan para la medición de la pobreza desde una perspectiva

mucho más amplia que la puramente monetaria o económica,

Page 106: Debate Económico No. 6

Debate Económico

100

sin pretender ser exhaustivos, más bien es un recuento de los

principales métodos de medición de pobreza.

1. Los pioneros

Anand y Sen (1997), usan tres indicadores: i) esperanza de vida

(porcentaje de individuos cuya esperanza de vida es menor a 40

años), ii) educación (porcentaje de individuos analfabetas) y iii)

un indicador concerniente a salud que es el resultado de una

media aritmética de otros tres indicadores que son la proporción

de población sin acceso a servicios de salud, la proporción de

población sin acceso a agua potable y el porcentaje de niños

menores de cinco años en condiciones de desnutrición. Para

obtener un índice de pobreza se agregan los tres indicadores

primarios usando una ponderación, la cual es arbitraria. Este

índice no incluye al ingreso como dimensión y tampoco toma

en cuenta la correlación que posiblemente existe entre sus tres

componentes. De acuerdo a la construcción de este índice se

puede contabilizar más de una vez a un mismo individuo

(Gallo, 2011). Sin embargo, es uno de los primeros intentos por

medir la pobreza desde una perspectiva más amplia al ingreso

monetario.

2. Las necesidades básicas insatisfechas y la línea de

pobreza

Método de Medición Integrada de la Pobreza (MMIP), que de

acuerdo con Boltvinik (2003) consiste en combinar la variante

mejorada de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) con la

variante de la canasta normativa generalizada de la Línea de

Pobreza (LP) e incorporar un indicador de pobreza de tiempo,

para obtener un índice de pobreza integrado por hogar que

permite calcular todas las medidas agregadas de pobreza.

Page 107: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

101

El primer paso del método es la identificación de los umbrales

normativos que establecen la satisfacción o privación de las

NBI por separado y de la LP monetaria por otro. El segundo es

la construcción de un sistema de ponderadores inspirados en

criterios normativos y traducidos en valores monetarios. El

tercer paso es la construcción de un índice ponderado de

privación para cada una de las dimensiones consideradas. El

cuarto paso es la construcción de un índice compuesto para el

subconjunto de necesidades básicas no susceptibles de ser

evaluadas, de manera directa, por medio del ingreso. El quinto

movimiento es el índice de privación del ingreso estable

equivalente. El paso final es la construcción de un índice

agregado y ponderado de pobreza del hogar (Mora, 2010).

3. La pobreza en los infantes

El enfoque multidimensional de Bristol (Gordon y otros, 2003)

ha hecho una contribución substancial a la medición de la

pobreza en la infancia, expandiendo el enfoque que se basa en

los ingresos. Este modelo fue la primera medición de conteo de

la pobreza en la infancia y también está alineado con el enfoque

basado en derechos y con el amplio consenso internacional

sobre cuáles son las dimensiones esenciales para el desarrollo

humano. Si bien la medida mejora el enfoque de los ingresos de

la pobreza, ésta no da cuenta del grado, profundidad, o

severidad de las dimensiones de pobreza en la infancia.

Además, la incidencia no puede desagregarse para descubrir los

componentes de la pobreza en la infancia en diferentes regiones

o grupos etarios o de género.

La estrategia de Gordon consiste en estimar un índice de

privación económica, empleando una única línea de pobreza

para todo el país. Posteriormente, se estima un índice de

privación considerando las otras dimensiones seleccionadas. El

tercer paso consiste en construir un índice aditivo de privación

Page 108: Debate Económico No. 6

Debate Económico

102

que sintetiza la información de los otros dos índices antes

construidos. El cuarto paso es estimar la línea objetiva de

pobreza, definida como el punto de corte que permite identificar

a los “verdaderos” pobres en las distribuciones conjuntas del

índice de pobreza económica y el índice de privación social

(Mora, 2010).

4. Ingreso monetario vs bienestar no monetario

Por su parte, Bourguignon y Chakravarty (2003), combinan una

medición del bienestar monetario y otra no monetaria. Adoptan

el enfoque de la unión para la identificación de los pobres

multidimensionales. Esto significa que un hogar se considera

pobre multidimensional si presenta privaciones en al menos una

de las dimensiones consideradas. Aunado a esto, el índice es

axiomático y está fundamentado en la teoría Microeconómica

neoclásica. Lo anterior permite determinar si las dimensiones

monetarias y no monetarias son sustitutas o complementarias

entre sí.

La familia de índices de pobreza multidimensional propuesta

por Bourguignon y Chakravarty, suma las carencias de cada

dimensión y utiliza una función de elasticidad de substitución

constante que permite incorporar diferentes grados de

sustitución entre dimensiones. Este índice puede verse como la

generalización a más de una dimensión del tradicionalmente

usado índice FGT (Foster-Greer-Thorbecke) para la medición

de la pobreza unidimensional. El índice agrega en un solo

indicador el déficit que cada individuo tiene en cada dimensión,

respecto a un nivel mínimo de necesidades básicas. Además, el

índice de pobreza es invariante con la escala y permite

descomponer la pobreza por subgrupos de la población. Así el

índice se obtiene con la siguiente fórmula:

Page 109: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

103

q

i

m

j j

ij

ijjz

xSa

nzXP

1 1

11

;

Donde

X: Matriz de n casos por m dimensiones o atributos.

z: Conjunto o vector de umbrales.

n: Número total de individuos (u hogares).

m: Número total de dimensiones.

ijx : Valor de la dimensión j respecto del individuo (u hogar) i.

zj: Umbral de privación para la dimensión j.

Sij: Función del indicador de privación, la cual se define de la siguiente manera:

1

0

ij j

ij

ij j

x zS

x z

a j: Peso o ponderación que se asigna a la dimensión j.

q: Número de personas (u hogares) con privación en al menos

una dimensión (según el enfoque de unión).

α: Parámetro que da la intensidad a la distancia que hay entre el individuo y el umbral considerado. Entre más grande sea α, más

importancia se le da a la distancia. Este parámetro se considera

un indicador de la “aversión a la desigualdad”, que muestra la

importancia que se les asigna a los más pobres en comparación con los que están cerca de la línea de pobreza.

θ: Parámetro de elasticidad de sustitución de las distancias de

dimensiones respecto de sus umbrales. Define el grado de equivalencia en la transferencia de unidades desde una

dimensión (la distancia de dicha dimensión respecto del

umbral) a otra, o desde un individuo con algún grado de privación en una dimensión a otro individuo con otro grado de

privación en la misma dimensión.

Page 110: Debate Económico No. 6

Debate Económico

104

5. Otros enfoques de contraste de pobreza monetaria y

de otra naturaleza

Otra metodología de medición es la propuesta por López Calva

y Rodríguez Chamussy (2005), se divide en tres etapas: i)

identificación de la población en pobreza, en términos de

ingreso, utilizando las líneas de pobreza y la metodología del

Comité Técnico para la Medición de la Pobreza (CTMP); ii) la

segunda etapa asocia a la condición de pobreza con tres

vectores de características para determinar un puntaje, la que se

interpreta como la “probabilidad de pertenencia” de un hogar al

conjunto de los pobres, y iii) la última etapa del proceso

metodológico consiste en, primero, calcular la magnitud de la

consistencia entre la medida de pobreza monetaria y los perfiles

de pobreza para varias dimensiones y, segundo, calcular la

discrepancia entre el indicador de pobreza basado en el ingreso

y la “probabilidad de pertenencia” al grupo de pobreza obtenido

mediante el modelo probit, en donde se asocian de manera

multivariada la pobreza monetaria y las demás dimensiones. A

las inconsistencias en las clasificaciones de “pobre” y “no

pobre” para un mismo hogar bajo distintos criterios, le

llamamos “discrepancia de exclusión, o tipo I”. Esta medida

nos indica el porcentaje de hogares que no son pobres bajo una

medida monetaria, pero sí lo son (o tienen probabilidad alta de

serlo) en algún otro atributo (educación, características físicas

de la vivienda, servicios básicos en la vivienda, seguridad

social).

Alkire y Foster (2008) proponen un enfoque intermedio, de

acuerdo al cual un individuo/hogar es identificado como pobre

si sufre privaciones en k dimensiones, donde k varía entre 1

(enfoque de unión) y el número total de dimensiones utilizadas

(enfoque de intersección). De este modo, proponen un método

de identificación de línea de corte dual. Se identifica a quién es

Page 111: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

105

pobre en dos pasos muy intuitivos. Primero, se establece un

umbral dentro de cada dimensión para determinar si una

persona presenta carencias en esa dimensión. En segundo lugar,

se establece un umbral sobre todas las dimensiones que fija el

rango de privaciones que una persona debe sufrir para ser

considerada pobre.

Una vez superada esta etapa, debe agregarse la información

individual en un indicador global de la sociedad. Existen

diversas alternativas para esta etapa, entre las que suele optarse

por alguna extensión de la familia de índices FGT por sus

propiedades y simpleza. Entre las que sobresalen, que puede ser

desglosado hasta alcanzar grupos meta de los más pobres y las

dimensiones en las que éstos sufren mayores privaciones.

La fórmula para el FGT está dada por:

H

i

i

z

yz

NFGT

1

1

Donde z es la línea de pobreza, N es el número de personas en

una economía, H es el número de pobres (aquellos con ingresos iguales o inferiores a z), yi son los ingresos individuales y α es

un parámetro de "sensibilidad". Si α es baja, entonces todas las

personas con ingresos por debajo de z tienen aproximadamente el mismo peso. Si α es alta, aquellos con ingresos más bajos

(los más alejados a z) tienen más peso en el índice. Cuanto

mayor sea el estadístico FGT, más pobreza existe en una

economía.

6. Siguiendo los pasos de los pioneros

Colafranceschi, Peyrou y Sanguinetti (2009), siguiendo el

enfoque de las capacidades de Amartya Sen, aplican técnicas de

análisis multivariados — Análisis de Correspondencias

Page 112: Debate Económico No. 6

Debate Económico

106

Múltiples (ACM) y Análisis de Conglomerados (AC)— para el

estudio de la pobreza como un fenómeno multidimensional.

Uno de sus objetivos fue encontrar en la población un grupo de

hogares que por sus características pudiera ser considerado

como de pobreza multidimensional de acuerdo al enfoque de

Sen. Sin embargo, estos autores tampoco desarrollan una

medida agregada de pobreza.

En una primera etapa se lleva cabo un ACM con las variables

correspondientes a las dimensiones comunicación, confort,

laboral y de la vivienda, con el fin de reducir de manera

eficiente la información contenida dentro de cada una de ellas.

En una segunda etapa se realiza un AC a partir del cual se

construye una tipología de hogares. En esta etapa el análisis se

centra, dado el objetivo de estudio, en la identificación de un

grupo de hogares en situación de pobreza multidimensional y el

estudio de sus características. Además se incluyen algunas otras

variables que no fueron consideradas inicialmente para una

mejor caracterización de los grupos.

La metodología de Asselin (2009), consiste en crear un

indicador compuesto de múltiples indicadores cualitativos de

pobreza para diferentes unidades de población (individuos,

hogares, etc.). Con el fin de obtener el indicador compuesto:

primero, se calcula el perfil de cada unidad de población

relativo a indicadores básicos (de educación, salud, vivienda,

etc.); segundo, a cada perfil se le aplican pesos-categoría, los

cuales se obtienen del ACM; por último, los indicadores

básicos ponderados se suman en un indicador compuesto

cuantitativo. Con el indicador compuesto es posible calcular

índices estándar de pobreza, una vez que la línea de pobreza ha

sido establecida.

Page 113: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

107

El Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) desarrollado por

Alkire y Santos (2010), identifica una serie de privaciones en

las mismas tres dimensiones del Índice de Desarrollo Humano

(IDH) (salud, educación y nivel de vida), reflejadas mediante

diez indicadores,3 cada uno de los cuales tiene igual

ponderación dentro de cada dimensión. Muestra el número de

personas que son pobres (que sufren privaciones) y el número

de privaciones con las que usualmente vive una familia pobre.

La medida permite determinar la naturaleza de la privación (de

acuerdo con las dimensiones seleccionadas) y la intensidad de

la misma. Es posible agrupar el índice por región, grupo étnico,

dimensión de la pobreza y otras categorías.

Por otra parte, la metodología estadística para la medición

multidimensional de la pobreza en México, desarrollada por

Rubén Hernández Cid y Humberto Soto de la Rosa, señala que

la pobreza es un fenómeno multidimensional que requiere un

seguimiento temporal y espacial.

Su estrategia metodológica se fundamenta en la aplicación de

una técnica estadística de análisis multivariado, el Análisis de

Componentes Principales Comunes (ACPC). Los autores

formulan una estrategia que en términos generales, implica dos

pasos. Primero, realizar la construcción de un índice compuesto

de pobreza a partir del estudio del universo de indicadores que

se desprenden de la operacionalización de las diferentes

dimensiones elegidas. El segundo paso es la construcción de un

umbral de pobreza que permite el cálculo de la incidencia, la

severidad y la intensidad de la pobreza, en concordancia con el

índice FGT. Para ello, los autores seleccionan el primer

3

Los diez indicadores son: bienes, piso, electricidad, agua, saneamiento,

combustible para cocinar, matriculación escolar, años de instrucción, mortalidad

infantil y nutrición. Los primeros seis contenidos en la dimensión nivel de vida,

los siguientes dos en educación y los últimos dos en salud.

Page 114: Debate Económico No. 6

Debate Económico

108

componente del análisis factorial. Finalmente, la metodología

genera resultados que pueden desagregarse según las

dimensiones establecidas en la Ley General de Desarrollo

Social (LGDS) (Mora, 2010).

7. La medición de la pobreza en México

Por último, la medición multidimensional de la pobreza

adoptada por el CONEVAL (2010), concibe la pobreza a partir

de tres grandes espacios: el bienestar económico, los derechos

sociales y el contexto territorial. A diferencia de otras

aproximaciones teórico metodológicas para la medición

multidimensional de la pobreza, la metodología no combina en

un solo índice o indicador a los derechos sociales y los recursos

monetarios, sino que los considera de manera independiente

para la identificación de la población pobre.

La identificación de la población en situación de pobreza se

realiza en dos etapas: en la primera, se determina si los ingresos

de una persona son suficientes para la satisfacción de sus

necesidades, lo cual se mide a través del indicador de ingreso

corriente total per cápita (ICTPC) y se compara con dos líneas

de pobreza (línea de bienestar económico —LBE— y línea de

bienestar mínimo —LBM—). Para calcular el valor de estas

líneas se elaboraron dos canastas de consumo, una alimentaria

(LBM) y otra que incluye, además de los alimentos, todos los

bienes y servicios de consumo habitual (LBE). El valor

monetario de estas canastas se definió tanto para los ámbitos

rural y urbano.4

Asimismo, para cada uno de los seis indicadores asociados al

espacio de los derechos sociales, se genera una variable

dicotómica que permite distinguir si la persona padece la

4 Se considera que una persona vive en el ámbito rural si la localidad tiene menos

de 2,500 habitantes; en caso contrario se considera que vive en el ámbito urbano.

Page 115: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

109

carencia o no. Después se construye el Índice de Privación

Social (IPS) para saber cuántas carencias padece la persona.5 A

partir del IPS, se generan dos indicadores dicotómicos: el que

identifica a la población con al menos una carencia social y otro

que identifica a la población con tres o más carencias sociales.

En la segunda etapa, se combinan los indicadores generados en

la etapa previa, a fin de identificar a la población en situación

de pobreza o vulnerabilidad. A partir de los indicadores de

ingreso y de carencia social una persona puede clasificarse en

uno y sólo uno de los cuadrantes que se muestran en la figura 1.

Se considera pobre si la persona tiene un ingreso inferior a la

línea de bienestar y presenta al menos una carencia social; es

vulnerable por carencias sociales si tiene un ingreso superior o

igual a la línea de bienestar pero tiene una o más carencias

sociales; es vulnerable por ingresos cuando no presenta carencia

social alguna pero su ingreso es inferior a la línea de bienestar,

y es no pobre y no vulnerable si su ingreso es igual o superior a

la línea de bienestar y no tiene carencias sociales.

Con el propósito de priorizar los esfuerzos de política pública

en aquellas personas que presentan niveles de ingreso menores

a la línea de bienestar mínimo (canasta alimentaria) y tres o

más carencias sociales, la metodología identifica (figura 2) a la

población en pobreza extrema. Asimismo se identifica a la

población en pobreza moderada, aquella persona que siendo

pobre, no es pobre extrema.

5 Los valores que toma el IPS van de cero a seis. Debido a que el CONEVAL

adoptó el enfoque de derechos humanos, todas las carencias sociales valen lo

mismo, es decir, uno. Si la persona padece al menos una carencia social se dice

que hay una negación de sus derechos fundamentales.

Page 116: Debate Económico No. 6

Debate Económico

110

Figura 1

Fuente: CONEVAL, 2010

Figura 2

Fuente: CONEVAL, 2010

Una vez identificadas las personas pobres y vulnerables, es

necesario contar con una serie indicadores que permitan

analizar la magnitud y los cambios en los niveles de pobreza.

Las medidas agregadas de pobreza deben satisfacer un conjunto

de propiedades, entre ellas: asegurar la comparabilidad de las

mediciones de pobreza a nivel nacional, estatal y municipal, y a

lo largo del tiempo; permitir valorar la contribución de los

estados y los municipios a la pobreza nacional; posibilitar el

Page 117: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

111

conocimiento de la participación de cada una de las

dimensiones, y satisfacer algunas propiedades analíticas.

La metodología de medición define tres tipos de medidas

agregadas de pobreza: incidencia H (porcentaje de población y

número de personas), profundidad A (número promedio de

carencias sociales y la distancia promedio del ingreso de la

población con un ingreso inferior a la línea de bienestar,

respecto a esta misma línea) e intensidad M0= H ∙ A (se mide al

multiplicar la incidencia por la profundidad). Las medidas de

intensidad permiten conocer la contribución a la pobreza de las

distintas carencias sociales que padece la población.6

La metodología implementada por el CONEVAL en 2010,

permitió cumplir con lo que señala la LGDS y con la

metodología para la medición multidimensional de la pobreza

en México. Identificar a la población en pobreza y en cada uno

de los cuadrantes, calcular las medidas agregadas de incidencia,

profundidad e intensidad, tener la posibilidad de desagregar la

información por grupos de población y dimensiones, calcular de

manera integrada la cohesión social y ser consistente con la

estimación estatal y nacional.

En el cuadro 1 se hace una recapitulación de los distintos

enfoques metodológicos para la medición multidimensional de

la pobreza.

6 Las medidas de intensidad se reportan para la población pobre, pobre extrema y

con al menos una carencia social.

Page 118: Debate Económico No. 6

Debate Económico

112

Cuadro 1. Enfoques metodológicos

Método DimensionesRelación entre

dimensiones

Valor de los

ponderadores

Enfoque para

identificaciónIdentificación Agregación Resultado

•Esperanza de vida

•Educación

•Salud

•Educación Medidas de

incidencia

•Salud Medidas de

profundidad

•Seguridad social Medidas de

intensidad

•Vivienda

•Servicios sanitarios de la vivienda

•Energía doméstica

•Teléfono

•Eliminación de basura

•Bienes durables

•Ingresos

•Tiempo libre

•Alimentación Intermedio

•Agua potable Intersección

•Servicio de limpia

•Salud

•Vivienda

•Educación

•Información

•Acceso a servicios

•Ingreso Medidas de

incidencia

•Salud Medidas de

profundidad

•Educación Medidas de

intensidad•Etc.

•Ingreso

•Educación del jefe de hogar

•Asistencia escolar de niños entre 6

y 15 años de edad

•Condición de trabajo de niños entre

12 y 15 años de edad

•Materiales de construcción de la

•Disponibilidad de agua entubada en

la vivienda

•Disponibilidad de servicio sanitario

con conexión de agua en la vivienda

•Hacinamiento en el hogar

•Disponibilidad de refrigerador para

uso del hogar

•Seguridad social para al menos uno

de los miembros del hogar

López-

Rodríguez

Modelo probit Relativos Intermedio Hogar

Bourguignon-

Chakravarty

FGT Equitativos Unión Individuo

Gordon Suma ponderada Arbitrarios Hogar Medidas de

incidencia

Método de

Medición

Integrada de

Pobreza

(MMIP)

Promedio

ponderado

“Normativos”

(arbitrarios)

Unión Hogar

Anand-Sen Suma ponderada Arbitrarios Unidimensional Individuo

Conjunto de

índices

Medidas de

incidencia

Índice sintético

Índice sintético

Par ordenado de

índices

Conjunto de

índices

Medidas de

incidencia

Page 119: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

113

Cuadro 1. Enfoques metodológicos (continuación)

Consideraciones finales

Existe amplio consenso en la literatura sobre pobreza acerca de

la necesidad de considerar indicadores que mejoren a los

tradicionales análisis basados únicamente en ingresos y

Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI). Las propuestas de

Método DimensionesRelación entre

dimensiones

Valor de los

ponderadores

Enfoque para

identificaciónIdentificación Agregación Resultado

Medidas de

Medidas de

profundidad

Medidas de

•Comunicación

•Educación

•Ingresos

•Confort (riqueza)

•Laboral

•Vivienda

•Nutrición

•Educación básica

•Atención básica a la salud

•Servicio de limpia

•Agua potable

•Vivienda

•Ingreso

•Participación comunitaria

•Nivel de vida Medidas de

•Educación Medidas de

profundidad

•Salud Medidas de

•Ingreso corriente per cápita Medidas de

•Rezago educativo promedio en el

hogar

Medidas de

profundidad

•Acceso a servicios de salud Medidas de

•Acceso a la seguridad social

•Calidad y espacio de la vivienda

•Acceso a los servicios básicos en la

vivienda

•Acceso a la alimentación

•Grado de cohesión social

•Ingreso corriente per cápita Proporcionales:

un medio para el

ingreso y un

medio para el

resto de los

indicadores (un

doceavo para

Medidas de

incidencia

•Rezago educativo Medidas de

profundidad

•Acceso a los servicios de salud Medidas de

•Acceso a la seguridad social

•Calidad y espacios de la vivienda

•Acceso a los servicios básicos en la

vivienda

•Acceso a la alimentación

CONEVAL Suma ponderada Intersección Individuo Par ordenado de

índices

Hernández-

Soto

Análisis de

Componentes

Principales

Comunes

(ACPC)

Relativos Intermedio Individuo Conjunto de

índices

IPM -

PNUD

FGT Equitativos Intermedio Individuo Índice sintético

Asselin Análisis de

Correspondencia

s Múltiples

(ACM)

Categórica Intermedio Individuo Medidas de

incidencia

Colafrances

chi, Peyrou

y Sanguinetti

Análisis de

Correspondencia

s Múltiples

(ACM) y

Análisis de

Conglomerados

Equitativos Unión Grupo de

individuos

Medidas de

incidencia

IndividuoFoster-

Alkire

(OPHI)

No especificadas FGT Equitativos

Generales

(relativos)

Intermedio

(línea de corte

dual)

Índice sintético

Par ordenado de

índices

Conjunto de

índices

Page 120: Debate Económico No. 6

Debate Económico

114

medición multidimensional han sido tan numerosas y diversas

que han llevado a un debate fructífero, con el consecuente

mejoramiento continuo de los métodos. En los últimos años se

han realizado diversas investigaciones encaminadas a presentar

nuevos resultados y metodologías innovadoras, se ha ampliado

el número de dimensiones incorporadas al análisis y

examinando la forma en que éstas interactúan. No existe un

patrón único que determine qué metodología debe utilizarse, ni

qué dimensiones es necesario incluir, puesto que estas

decisiones dependen de los países y períodos en que se realice

el estudio.

La metodología de CONEVAL es una aplicación particular al

caso de la medición de pobreza en México, esta metodología

cumple con los propósitos que la Ley General de Desarrollo

Social ha establecido en materia de definición y medición de la

pobreza, y genera elementos que pueden ser utilizados en el

análisis y evaluación de las políticas públicas. La metodología

está en constante revisión y tiene la ventaja de que puede

incorporar varios indicadores.

Bibliografía

Alkire, Sabina y Foster, James. (2007). “Counting and

Multidimensional Poverty Measurement”, OPHI Working

Paper Series, Oxford Poverty & Human Development Iniative

(OPHI), Oxford, (OPHI Working Paper, 7), recuperado de

http://www.ophi.org.uk/pubs/Alkire_Foster_CountingMultidim

ensionalPoverty.pdf (2008, 18 de junio).

Page 121: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

115

_____ (2009). “Memo to CONEVAL”, mimeo.

_____ (2011). “Counting and Multidimensional Poverty

Measurement”. Journal of Public Economics. Vol. 95, Núm. 7-

8. (pp. 476-487).

Alkire, Sabina y Santos, Maria Emma. (2010). “Acute

Multidimensional Poverty: A New Index for Developing

Countries”, OPHI Working Paper No. 38, Queen Elizabeth

House, University of Oxford.

Anand, Sudhir y Sen, Amartya. (1997). “Concepts of Human

Development and Poverty: a Multidimensional Perspective”.

Human Development Papers, United Nations Development

Programme, New York.

Asselin, Louis-Marie. (2009). Analysis of Multidimensional

Poverty: Theory and Case Studies. Springer/IDRC.

Atkinson, Anthony. (2003). “Multidimensional Deprivation.

Contrasting Social Welfare and Counting Approaches”. Journal

of Economic Inequality vol.1. (pp. 51–65).

Brandolini, Andrea y Giovanni D'Alessio. (1998). Measuring

Well-being in the Functioning Space. Mimeo. Roma. Banco

d'Italia Research Department.

Boltvinik, Julio y Hernández Laos, Enrique. (1999). Pobreza y

distribución del ingreso en México. México. Siglo XXI

Editores.

Boltvinik, Julio. (2003). “Tipología de los métodos de medición

de la pobreza, los métodos combinados”. Comercio Exterior.

(pp. 453-565).

Page 122: Debate Económico No. 6

Debate Económico

116

_____ (2007). “Multidimensional Poverty Measurement. A

Methodological proposal for Mexico according to the

requirements defined in the Law for Social Development

(LGDS)”, mimeo.

_____ (2010). “Principios de medición multidimensional de la

pobreza”. Mora, Minor (coord.), Medición multidimensional de

la pobreza en México. México. El Colegio de México-

CONEVAL.

Bourguignon, Francois y Chakravarty, Satya. (2003). “The

Measurement of Multidimensional Poverty”, Journal of

Economic Inequality, vol. 1, núm. 1. (pp.25-49).

Chakravarty, Satya et. al. (1998). “On the Family of Subgroup

and Factor Decomposable Measures of Multidimensional

Poverty”. Research on Economic Inequality vol. 8. (pp. 175–

194).

Chakravarty, Satya. (2007). “Multidimensional Poverty

Measurement Methodology for Mexico”, mimeo.

Chakravarty, Satya y Silber, Jacques. (2008). “Measuring

Multidimensional Poverty: the Axiomatic Approach”. en

Kakwani, Nanak y Jacques Silber (eds.), Quantitative

Approaches to Multidimensional Poverty Measurement.

Palgrave Macmillan. New York. (pp. 192–209).

Colafranceschi, M., Peyrou, M. y Sanguinetti, M. (2009).

“Pobreza multidimensional en Uruguay: una aplicación de

técnicas multivariadas”. Montevideo. Trabajo presentado en la

red de Desigualdad y Pobreza (Network on Inequality and

Page 123: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

117

Poverty, NIP), en el marco de la reunión anual del capítulo

uruguayo, 4 y 5 de junio.

Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo

Social (2010), Metodología para la medición multidimensional

de la pobreza en México. México.

_____ (2012), Construcción de las líneas de bienestar.

Documento metodológico. México

Deutsch, Joseph y Silber, Jacques. (2005). “Measuring

Multidimensional Poverty: An Empirical Comparison of

Various Approaches”. The Review of Income and Wealth vol.

51. (pp. 145–174).

Feres, Juan Carlos y Villatoro, Pablo. (2012). “La viabilidad de

erradicar la pobreza: Un examen conceptual y metodológico”.

Serie Estudios estadísticos y prospectivos, N° 78, CEPAL.

Santiago de Chile.

Gallo, César Rafael, Roche, José Manuel. (2011). Las

dimensiones de la pobreza en Venezuela y sus cambios entre

1997 y 2010: Propuesta de una medida multidimensional.

Caracas: Gerencia de Comunicaciones Institucionales, BCV,

2011.

Gordon, David. (2002). “The international measurement of

poverty and anti-poverty policies”. Townsend, P. y Gordon, D.

(eds.). World Poverty: New Policies to Defeat an Old Enemy.

(pp. 53-80). Londres. The Policy Press.

_____ (2006). “The concept and measurement of poverty”, en

Christina Pantazis, David Gordon y Ruth Levitas (eds.),

Page 124: Debate Económico No. 6

Debate Económico

118

Poverty and social exclusion in Britain. The millennium survey,

Bristol, The Policy Press.

Gordon, D., S. Nandy, C. Pantazis, S. Pemberto y P. Townsend.

(2003). Child poverty in the developing world, Bristol, The

Policy Press.

Kakwani, Nanak y Silber, Jacques (eds.). (2008a). The Many

Dimensions of Poverty. New York. Palgrave Macmillan.

_____ (2008b). Quantitative Approaches to Multidimensional

Poverty Measurement. Palgrave Macmillan. New York.

López Calva, L. F. y Rodríguez Chamussy, L. (2005). “Muchos

rostros, un solo espejo: restricción es para la medición

multidimensional de la pobreza en México”. Székely, M.

(Coord.), Números que mueven al mundo: la medición de la

pobreza en México. México. Sedesol-CIDE-ANUIES, Miguel

Ángel Porrúa.

Minujin A. et al. (2006). “Pobreza infantil: conceptos, medición

y recomendaciones de políticas públicas”, Cuaderno de

Ciencias Sociales, Costa Rica, FLACSO-Costa Rica, (cuaderno

140).

Mora, Minor (coord.). (2010). Medición multidimensional de la

pobreza en México. México. El Colegio de México-

CONEVAL.

Sen, Amartya. (1976). “Poverty: An Ordinal Approach to

Measurement”, Econométrica, vol. 44, núm.2. (pp.219-231).

Page 125: Debate Económico No. 6

Enfoques para la medición multidimensional de la pobreza

119

_____ (1980). “Equality of what?”, en S. McMurrin (ed.), The

Tanner Lectures on Human Values. Volume I, Salt Lake City,

University of Utah Press, Salt Lake City. (pp. 197-220).

_____ (1985a). Commodities and Capabilities. Elsevier,

Amsterdam; New York, North-Holland.

_____ (1985b). “Well-being, Agency and Freedom: the Dewey

Lectures 1984”, The Journal of Philosophy, 82. (pp. 169-221).

_____ (1987). “The Standard of Living”, en G. Hawthorn (ed.),

The Standard of Living. Cambridge. University Press. (pp. 1-

38).

_____ (1992). Inequality Reexamined. New York. Oxford

University Press.

_____ (1993). “Capability and Well-Being?” Nussbaum,

Martha y Amartya Sen (eds.), Quality of Life. Oxford.

Clarendon Press. (pp. 30-53).

_____ (1999). Development as Freedom. New York. Random

House.

_____ (2004). “Element of a Theory of human rights?”,

Philosophy and Public Affairs, vol. 234. (pp. 315-356).

Thorbecke, Erik (2008), “Multidimensional Poverty:

Conceptual and Measurement Issues”. Kakwani, Nanak y

Jacques Silber (eds.), The Many Dimensions of Poverty. New

York. Palgrave Macmillan. (pp. 3–20).

Page 126: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol.2 (3), No. 6. Septiembre-Diciembre 2013, pp.120-128.

Recibido: Septiembre 2013.

Aceptado: Noviembre 2013

Los Nobel

Ronald Coase (1910-2013)

David A. Westbrook1

Ronald Coase, profesor de Economía en la Escuela de Derecho de la

Universidad de Chicago y ganador del Premio Nobel en Economía,

murió el 2 de septiembre de 2013, a la edad de 102 años. La influencia del trabajo de Coase es difícil de exagerar. En la Economía

académica, se le acredita la fundación de la Economía Institucional.

En el marco legal, se le atribuye la fundación del movimiento más poderoso sobre la academia jurídica de EU: Derecho y Economía

como campo de estudio o bien el análisis Económico del Derecho;

mientras que su artículo "El problema del costo social " (1960) es por mucho el texto más citado en la literatura académica. De mayor

importancia es que su trabajo fue tan influyente entre hacedores de

política instruidos en Economía y/o Derecho, que se puede decir que

el trabajo de Coase, dio forma a la misma Economía Política por varias décadas.

Quiero sugerir que los textos de Coase fueron muy influyentes pues funcionaron en formas esencialmente poéticas -probablemente fue el

“creador de mitos” más poderosos en la economía política desde

Marx. A pesar de sus intenciones, el trabajo de Coase presentó una

forma de ver al mundo que otorga un gran sentido no sólo para los profesores de Economía, sino también para los capitalistas (y por lo

1 .Louis A. Del Cotto es Profesor de Derecho y Director de Iniciativas Estratégicas

Globales en la Facultad de Derecho SUNY, Buffalo. Esta primera parte de la reflexión

apareció, sustancialmente en la misma forma, en el boletín de prensa del World Economics

Association 3(5), en octubre del 2013. Traducción al español de Darío Ibarra Zavala.

Page 127: Debate Económico No. 6

Ronald Coase (1910-2013)

121

tanto los cabilderos y políticos), además de los profesores de Derecho,

quienes debieron tener mejor criterio. Pero me estoy adelantando.

Al otorgarle el Premio Nobel, la Real Academia de Ciencias de Suecia

citó dos artículos: "La naturaleza de la empresa" (1937), que había

sido ignorado por muchos años, y el ya citado "El problema del costo social”. El primer artículo comienza con una observación: el mundo

de los negocios está compuesto de muchas relaciones que no operan a

través del mecanismo de precios. Como Coase aclara en su

conferencia de recepción del Nobel, se trata de un problema que va a la raíz de Economía, mismo sobre el que Adam Smith argumentó que

actores descentralizados, coordinados por precios, pueden tomar

decisiones socialmente benéficas. Más aún, Smith argumentó, la eficiencia (y por lo tanto la competitividad) que existe en la

especialización - ¿por qué entonces no hay más relaciones gobernadas

por precios? ¿Por qué existen las empresas? O, dado que observamos a las firmas, ¿por qué la vida económica no está dirigida por una firma

grande? ¿Por qué no tenemos una economía planificada? ¿Por qué

observamos una sustancial descentralización social en la toma de

decisiones, pero incompleta? Coase argumentó, como la mayor parte de lectores de este Journal saben, que la contratación operativa en un

mercado, es cara. Encontrando a los compradores dispuestos, pero

regateadores, más adelante establece "la transacción cuesta”. Por supuesto, la gerencia impone sus propios costos. Por lo tanto, Coase

sostuvo, que las sociedades usan relaciones jerárquicas privadas,

concretamente, amo /esclavo (ahora renombrada, en las leyes, el

empleador /empleado) donde los gastos de transacción - se piensa - son más altos que los costos análogos de dirección. Algunas veces

compramos, otras construimos.

“El problema del costo social” también se convirtió en el concepto de

los costos de transacción. Coase comenzó una amplia investigación en

torno a la naturaleza de la Economía del Bienestar enfocándose en la antigua doctrina de la molestia, lo que más tarde serían llamadas

externalidades negativas. Coase señaló que etiquetar a una actividad

como “molestia” fue dar a los vecinos un derecho a ser libres de dicho

malestar, esto es crear un derecho para los vecinos. Pero la molestia de uno es con frecuencia el placer de otro. En el ejemplo de Coase,

podemos preguntarnos ¿si un ganadero tiene derecho de permitir a sus

vacas vagar, o si un granjero tiene el derecho de tener campos sin ser molestado por las vacas? Lastimar a uno ayudará al otro (la naturaleza

Page 128: Debate Económico No. 6

Debate Económico

122

recíproca de los derechos fue un gran punto hecho por el erudito legal

de Yale, Wesley Hoffeld, casi medio siglo antes).

Coase argumentó que, en ausencia de costos de transacción, el

agricultor y el granjero negociarían hasta alcanzar una solución de

asignación eficiente: “el último resultado (que maximiza el valor de la

producción) es independiente de la posición legal si asume que el sistema de precios funciona sin costos” (Coase, 1960, p.8). Si el

ganadero tiene el derecho de permitir a sus vacas vagar, y la

agricultura es más valiosa que las vacas, entonces el granjero pagaría al ganadero para cercar el ganado. Si la ganadería fuese más valiosa,

entonces el granjero asumiría sus pérdidas, o tal vez abandonaría la

tierra para dedicarse a cualquier otra actividad. Si el granjero tuviera

el derecho de mantener a las vacas fuera, y el pastoreo fuese más rentable, entonces el ganadero pagaría al primero por renunciar a su

derecho de excluir a las vacas. A la inversa, si la agricultura fuese más

valiosa, entonces habría menos ganadería. Por lo tanto, se argumentó –por supuesto de un modo más elaborado—que en un ambiente sin

costos, la asignación inicial de derechos no importa, debido a que las

partes llegarían a un acuerdo para alcanzar resultados económicamente eficientes. El economista George Stigler nombraría a

esta proposición el teorema de Coase, y así es como se ha llamado

desde entonces.

Es importante señalar que para Coase, el caso de la negociación en

ausencia de costos de transacción fue una abstracción mental,

utilizada para hacer más claro el análisis y tal vez el modelo. Los costos de transacción son siempre positivos, y son ordinariamente

algo realmente significativo, y por lo tanto, generalmente se requieren

crear derechos –este es el papel de la ley—la pregunta para la ley es, entonces, cómo establecer un conjunto de arreglos socialmente

óptimos:

En la selección de los arreglos sociales dentro del contexto en que las decisiones individuales son tomadas, tenemos que

considerar que un cambio en el sistema existente, que nos

llevará a una mejora en ciertas decisiones, podría llevarnos al empeoramiento de otras. Además tenemos que tomar en

cuenta los costos involucrados en el funcionamiento de varias

disposiciones sociales (sea el funcionamiento del mercado o

Page 129: Debate Económico No. 6

Ronald Coase (1910-2013)

123

de un departamento del Gobierno), así como los costos

involucrados en moverse hacia un nuevo sistema. En el diseño

y selección de los arreglos sociales deberíamos considerar los efectos totales (Coase, 1960, p.44).

En mi lectura, Coase pensó que estaba dibujando los límites de los mercados, y al hacerlo, extendió el dominio del pensamiento

económico al mandato de una sociedad grande, donde los mercados

eran sólo un modo de ordenamiento. “Los costos de transacción

fueron usados en un caso (en la teoría de la empresa) para demostrar que si no están incluidos en el análisis, la empresa no tiene sentido,

mientras que en otro (el problema del costo social) mostró, como

pensó, que si los costos de transacción no fuesen introducidos en el análisis, para la gama de problemas considerados, la ley no tendría un

proposito” (Coase, 1993, p. 62).

En una de las ironías de la historia reciente, Coase se hizo famoso por

el propio teorema de Coase, entendido como una descripción justa de

una amplia variedad de relaciones humanas. Si no hubiera barreras a

los contratos, entonces el resultado social podría presumirse como el resultado explícito o implícito de la negociación, por lo tanto,

eficiente. Si los costos de transacción fuesen un factor significativo, la

acción gubernamental (notablemente la regulación y decisiones judiciales) podrían ser tomadas para crear situaciones en las que los

actores del mercado habrían negociado, por lo tanto, replicando la

asignación óptima de mercados sin costos. Haciendo esto

sensatamente requiere (aunque de manera profundamente especulativa) el análisis de varios usos alternativos de los factores de

la producción. A la luz del hecho –intensivo y abierto- el fin último de

tales investigaciones, fue tal vez obvio que, al menos en Estados Unidos, se presumiría que los mercados no opondrían barreras al

beneficio social de los contratos. Dado el costo de la regulación

burocrática, y el riesgo de que el Gobierno pudiera abusar de su monopolio legítimo sobre la violencia, muchos en los Estados Unidos

estuvieron de acuerdo con Coase en que a menudo la mejor respuesta

al costo social “era hacer nada sobre el problema en absoluto”, es

decir, desregular. Así, la Economía y la ley, como disciplina, había nacido.

Es importante enfatizar que una lectura errónea de Coase es una cuestión de grado antes que de tipo, los conversos tienden al

Page 130: Debate Económico No. 6

Debate Económico

124

fanatismo. Pero el mismo Coase creía que el mecanismo de precios

era fundamental, y de hecho preferido, como modo de ordenamiento

social. En el discurso de recepción del Premio Nobel, Coase dijo:

La economía podría ser coordinada por un sistema de precios

(la “mano invisible”) y, además, con resultados benéficos…

Los economistas han descubierto las condiciones necesarias para que los resultados de Adam Smith sean alcanzados y si,

en la vida real, tales condiciones no se encuentran por ningún

lado, ellos proponen cambios que sean diseñados para obtenerlos… Lo que procuré hacer en los dos artículos citados

por la Real Academia de Ciencias de Suecia fue tratar de llenar

esos huecos o más exactamente, indicar la dirección en la que

deberíamos movernos y donde tales huecos deberían cubrirse (Coase, 1991).

Para Coase, los mercados son algo fundamental, realizando preguntas sobre porqué otras formas de ordenamiento social son necesarias y, en

la medida que lo son, cómo hacer que sus operaciones sean tan

productivas para la sociedad como sea posible. Desde esta perspectiva, no sorprende que, generalmente, Coase no simpatizara

con la regulación. A veces es mejor hacer “nada absolutamente acerca

del problema”. Más específicamente, en un trabajo menos famoso, en

temas como focos y la distribución del espectro de la radio, Coase insistió en que los mercados podrían trabajar muy bien en lugar de la

acción del Gobierno.

La agitación causada por la (mala) lectura de “El problema del costo

social”, condujo a un naciente y elevado interés en “La naturaleza de

la empresa”. Así, acercándose a sus ochenta, Coase fue aclamado como un sabio. La fama es algo extraño: los autores no llegan a

decidir si acaso, cuándo, o cómo sus ideas serán recibidas. ¡Por su

parte, Coase, gastó otra generación (!) en la discusión, argumentando

más notablemente en su conferencia del Nobel que (i) él era una mente simple y no un gran economista, y (ii) había sido ampliamente

incomprendido. Casi nadie estuvo de acuerdo con ninguna de las

proposiciones.

Tanto la carrera de Coase, como nuestra fascinación con los premios,

muestran cuan profundamente nos mantenemos influenciados por la

Page 131: Debate Económico No. 6

Ronald Coase (1910-2013)

125

idea del genio, y qué tan problemático es hablar sobre su influencia

intelectual o incluso grandeza como característica de una mente

individual. Las ideas son sobrevaluadas, ignoradas o (de) formadas para encajar a los intereses de sus tiempos. Para efectos de historia

intelectual, el hecho de que Coase fuera un poco mal interpretado es

tanto fácil como exagerado e irrelevante, como son sustanciales las objeciones a las ideas de Coase, tanto en la teoría como en la práctica.

Al final de vidas ilustrativas es apropiado formularse preguntas

históricas, por ejemplo, por qué el trabajo de Coase pegó tan

fuertemente cuando lo hizo –lo que me regresa a la afirmación de que Coase fue, a pesar de él mismo, un creador de mitos.

Los costos de transacción conservan la antropología de la Economía: los individuos todavía son la unidad básica de la vida social (sin

importar lo que otras disciplinas puedan decir) y los contratos entre

individuos permiten que las cosas se hagan. Así es que lo social es un producto de acción individual, que se siente más científico (dado que

se llama individualismo metodológico). Cuando lo social reaparece

tercamente en las empresas y otras estructuras jerárquicas, y el

ordenamiento no puede ser suficiente para establecer un contrato o precio, entonces lo social puede explicarse como un artefacto o

negocio implícito sobre costos implícitos.

Más ambiciosamente, la distribución de derechos y la correlativa

imposición de restricciones es entendida no como un artefacto de

poder o creencia o historia, sino como una aproximación legal a

negociaciones imaginarias. Así es que tanto la organización social como la ley (y presumiblemente el Gobierno) pueden ser entendidos

como si fueran originados por un contrato. El mercado es ubicuo y la

economía se mantiene como la reina de las ciencias sociales, aun en la ausencia de las actuales transacciones con dinero real. O puesto de

otra forma, Coase rearticula el contrato social hobbesiano para

aquellos con formación económica.

Los costos de transacción son entonces profundamente especulativos,

y además subjuntivos, tratados como si fueran actos reales, cuando, de

manera simple, no lo son. Es importante recordar que no hay transacción ni, por lo tanto, costo de hacerla. El “costo” es un valor

asignado, no un precio observado. La gran metáfora de Coase

descansa en un fuerte confort, extendida en una sociedad comercial, tanto con la idea de dinero como unidad de cuanta y con las

Page 132: Debate Económico No. 6

Debate Económico

126

consecuencias aritméticas de la contabilidad. Así es que si

conscientemente hablamos del valor negativo de una compañía,

necesitamos decir que, si una acción vale $100.00, entonces el propietario de diez millones de acciones tiene mil millones de dólares,

podemos atribuir la diferencia entre el valor de libros y el precio a la

“buena fortuna” y listo. La aritmética es sana, pero no se ha dicho

nada del uso del dinero en transacciones, o del mundo. Similarmente, con costos de transacción, a las dificultades de hacer lo que no se hizo

se le asigna un “precio”, o más comúnmente, se dice que su precio

sería mayor que la acción tomada (la formación de la empresa, la concesión de un derecho).

Después de Coase, hay un “precio” por lo que es comprado, y un

precio por lo que no es comprado e incluso ofrecido. A manera de analogía, consideremos como los números naturales, que consideran

lo que es, implican números negativos, que cuantifican lo que no es.

Para cambiar la metáfora ligeramente, los costos de transacción “balancean los libros” de la vida social, tanto como el concepto de

equidad balancea las hojas de balance. Tales conceptos fluyen desde

una estructura de pensamiento formal, y son convincentes, pero también son, profundamente anti empíricas. Y he aquí otra ironía de la

historia intelectual, pues a través de su vida, Coase insistió en la

importancia del trabajo empírico en la Economía.

Desde una perspectiva de costos de transacción, el dominio de la

Economía no es el estudio de las transacciones reales, o más aún de

transacciones sobre bienes y servicios reales, sino de las transacciones que son posibles, por ejemplo, el orden social que podría describirse a

través de las transacciones. Algunas cosas tienen precios, otras tienen

costos de transacción. Así es que el dinero va de ser una clase de bien, situada en una matriz social e institucional, a ser un símbolo de valor

universal. Una vez que el movimiento conceptual es alcanzado, la

mayoría de la vida social se puede articular como el resultado de un

contrato, incluso cuando no se observe ningún contrato. Así los costos de transacción hacen a la Economía capaz de articular la mayoría de la

vida en sociedad, adjudicando “arreglos sociales”.

Esta óptica es tanto profundamente reconfortante (nos reconforta de

nuestra autonomía liberal) como poderosamente conservadora (este es

el mundo, más o menos, por el cual hemos luchado). Para ser más

Page 133: Debate Económico No. 6

Ronald Coase (1910-2013)

127

específicos, Coase como radicalizado por Stigler, apela a diversas

élites. Para los economistas académicos, los costos de transacción

amplían infinitamente el alcance de su disciplina, y más gratamente aún, hacen que la Economía sea lógicamente previa a la ley (y por

extensión, a la misma cultura), lo que se ajusta agradablemente con la

aspiración tradicional al hablar con el a priori imperialismo de una ciencia natural. Coase era consciente de esto: “en mi visión del

enfoque utilizado en dicho artículo (“El problema del costo social”)

ultimadamente transformará la estructura de la Microeconomía y

explicará porqué”.

Esta noción expansiva de los costos de transacción tiene serios

inconvenientes. Parece empírico, pero raya en la especulación cruda. Se vuelve contra una noción fría del dinero, pero de nueva cuenta, el

dinero siempre tiene algo vergonzoso en la microeconomía.

Para los capitalistas, los costos de transacción proveyeron tanto una

disculpa al status quo y, más importante, una Economía Política en la

que la regulación era siempre la segunda mejor solución. La

desregulación financiera de los años recientes no habría sido imaginable sin la gran fe en la habilidad tanto de los sofisticados

como los no tanto, actores para alcanzar acuerdos socialmente

beneficos acerca de cosas como el riesgo de incumplimiento.

La petición del teorema de Coase, y en menor grado la teoría de la

empresa, a los eruditos legales es de alguna forma intrigosa. Mientras

que muchos maestros de derecho resisten el impulso de explicar al mundo en términos de contratos implícitos y alrededor de presuntos

gastos (la todavía más especulativa confianza sobre los usos

alternativos de factores de la producción han sido, para mi conocimiento, ignorados), más suscritos. Esto no es parejo. Uno

podría pensar que los abogados podrían sentir visceralmente la

importancia de la historia, del poder de los arreglos institucionales –muchas cosas además de contratos, implícitos o no, para entender el

privilegio social. ¿Y seguramente los abogados deberían enfatizar la

dificultad e incertidumbre y, por lo tanto, muy parcial naturaleza de

los contratos, mismos que son enseñados en los primeros años de las escuelas de derecho?

Hay algo de misterio, pero pienso que los textos de Coase sugieren una visión muy atractiva del orden social, donde los títulos de

Page 134: Debate Económico No. 6

Debate Económico

128

propiedad, las instituciones civiles, la acción del mercado, y la misma

ley, hagan sentido una en términos de la otra, y donde la cómoda

visión individual mantenga su sentido de valor propio. Bajo tal visión, el Derecho podría apaciguar su antigua ansiedad de ser infundado,

ilegítimo y desleal. Este no es el lugar para desarrollar tales

especulaciones sobre la historia espiritual de mi profesión. Por ahora

vale la pena celebrar la mente maravillosa de un poeta por accidente, y también recordar que hay razones por las que Platón advirtió contra

la poesía.

Referencias

Coase, R. H. (1960). “The Problem of Social Cost”. Journal of Law and Economics, 3, 1-44.

Coase, R. H. (1991). The institutional structure of production -Nobel Prize lecture. Disponible en:_

http://nobelprize.org/nobel_prizes/economics/laureates/1991/c

oase-lecture.html

Coase, R. H. (1993). “The nature of the firm: Influence”. In

O. E. Williamson & S. G. Winter (Eds.), The nature of the

firm: Origins, evolution, and development. (pp. 61-89). New York, N.Y.: Oxford University Press

Page 135: Debate Económico No. 6

Debate Económico, Vol.2 (3), No. 6. Septiembre-Diciembre 2013, Pp. 129-148.

Recibido: Julio 2013.

Aceptado: Noviembre 2013

Nota

Escuelas de pensamiento con relación al

crecimiento y desarrollo económico

O. A. Palacios Sommer

Presentación:

La preocupación inicial de la teoría económica, desde los

mercantilistas, ha sido el crecimiento y el desarrollo; por qué unos pueblos son prósperos y otros no, y, sobre todo, que puede

hacerse para llegar a ser próspero.

En esta larga trayectoria de investigación han surgido múltiples

interpretaciones, muchas de las cuales se mantienen vivas. La

siguiente nota es un rápido vistazo a los principales enfoques

contemporáneos sobre el tema, la posible existencia de una condición clásica y la imposibilidad de una plena confluencia

entre las escuelas de pensamiento económico.

Definición de conceptos:

Conforme al diccionario de economía publicado por Editorial

Trillas, el crecimiento económico es el “Proceso constante de

Page 136: Debate Económico No. 6

Debate Económico

130

incrementos en la capacidad productiva de una economía y, por tanto, en el ingreso nacional”…… “La opinión general

considera que la tasa de crecimiento de la fuerza de trabajo, la

proporción del ingreso nacional que se ahorra e invierte y la tasa de mejoras tecnológicas (incluyendo incrementos en la

capacitación de la fuerza de trabajo y en la eficiencia

administrativa), como los determinantes principales de la tasa de crecimiento de la economía” (Bannock, 2007: 121 y 122).

Siguiendo a ese mismo diccionario, tenemos que por desarrollo

económico se entiende el “Proceso de crecimiento económico en el ingreso total y per cápita de los países en desarrollo que se

acompaña de cambios fundamentales de sus

economías”…”Junto con este proceso económico se presentan reformas políticas y sociales importantes…” (Bannock, 2007:

143). Por tanto, podemos pensar que el desarrollo económico es

un proceso más amplio que el solo crecimiento.

Para tener crecimiento basta solo con obtener mayor PIB total y

per cápita; para el desarrollo se debe también contemplar un

aplanamiento de la distribución del ingreso, de la riqueza y del poder; una mejora del Índice de Desarrollo Humano, que, inter

alía, incluye la esperanza de vida al nacer, las tasas de

morbilidad, y la tasa de escolaridad (Bannock, 2007: 227). Esto es, el desarrollo incluye un aumento de la civilidad; de la

autodeterminación individual; y de todos aquellos aspectos que

incrementan la calidad de vida de una población.

La mayor parte de los modelos y teorías económicas se refieren

al crecimiento, no al desarrollo, siendo este último un campo

más propicio para la filosofía, la historia, la antropología o la sociología; puesto que requiere una comprensión más amplia de

las sociedades humanas. Esto es, se requiere de ciencias

sociales que no hayan perdido su carácter de humanas.

Page 137: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

131

Canon colectivista:

El modelo Fehr-Schmit la función de utilidad que poseemos los

humanos es (Wilkinson, 2008: 355 a 357):

Ui(x) = xi – [αi/(n – 1)Σmax(xj – xi, 0)] – [βi/(n – 1)Σmax(xi – xj,

0)]

En donde:

La comunidad está formada por n individuos; xi es un vector de pagos para la persona i x = (x1,

x2,…..,xn);

αi es la medida de la aversión de la persona i por una desigualdad que le es desfavorable, conocida como el

parámetro de envidia;

βi es la medida de la aversión de la persona i a la

desigualdad favorable, también conocido como el parámetro de culpa;

Se ha encontrado que 0 ≤ βi ≤ 1;

y que βi ≤ αi; en conjunto el modelo nos indica que la utilidad que

derivamos de nuestro consumo de bienes es condicionada

por la posición que guardamos dentro de la sociedad a la que pertenecemos, y, en particular, respecto de nuestro

grupo o grupos de referencia; y que nuestro

comportamiento está más guiado por la envidia que por la

culpa.

Por tanto, no es de extrañar que la mayor parte de los escritos

de economistas sobre el crecimiento estén orientados a aclarar porque algunos son ricos y otros son pobres, más que realmente

a analizar el proceso de cómo llegar a ser rico.

Durante trescientos años predomino el concepto de que el

progreso humano dependía de la voluntad y empeño humanos,

individuales y colectivos; que nuestro bienestar estaba en

relación al bienestar de los demás; que nuestra racionalidad era

Page 138: Debate Económico No. 6

Debate Económico

132

limitada o acotada en el sentido de Simon; que siempre existían recursos ociosos; y que la economía era un desequilibrio

general dinámico con procesos de causalidad acumulativa; y

que por eso había progreso y naciones ricas y pobres. A los escritores de ese largo periodo se les conoce como

mercantilistas. Esta tradición ha sido mantenida por las escuelas

de pensamiento económico actualmente denominadas heterodoxas, como son los postkeynesianos, evolucionistas,

austriacos, institucionalistas, estructuralistas y marxistas.

Por ejemplo, relacionar el monto, tendencia y dirección de los flujos comerciales a las diferencias no solo en tecnología, sino

en capacidades tecnológicas (absorción, difusión y creación de

nuevas tecnologías), ya había sido desarrollado por Mun y Tucker en el siglo XVIII (Elmslie y Vieira, 1999: 248 a 251).

La conclusión mantenida hasta la fecha es que el comercio se

basa en ventajas absolutas o competitivas y tamaño relativo de

los países, no en ventajas comparativas (Dosi, 1990: 190).

Otra idea desarrollada desde el mercantilismo es la necesidad

de un superávit comercial como mecanismo para (i) incrementar la demanda agregada –en cuyo caso se liga a las

visiones del historicismo y del estructuralismo (Schumpeter,

1982: 401 y 402)-, y (ii) para, mediante la acumulación de reservas internacionales, aumentar la oferta monetaria, reducir

la tasa de interés y aumentar el consumo de bienes duraderos y

la tasa de inversión (Hahne, 1988: 44 y 45; y McCombie y

Thirlwall, 1999: 43 a 45).

La combinación de ventajas absolutas basadas en capacidad

tecnológica con la necesidad de mantener un superávit comercial que permita aumentar la tasa de inversión, incluida la

inversión directa en el extranjero, nos remiten a los modelos

kaldorianos de crecimiento impulsado por exportaciones o al crecimiento restringido por balanza de pagos de Thirlwall. Y

nos centra en que la mejora del acervo de factores de la

producción (tecnología, administración, capital humano, capital

social y capital físico) sirve para atender demandas con

Page 139: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

133

elasticidades ingreso progresivamente mayores y elasticidades precio progresivamente menores, en industrias que se alejan de

la competencia atomística y se vuelven oligopolios mundiales

por la existencia de economías crecientes a escala por el lado de la oferta. Esto es, las distintas industrias tienen efectos distintos

sobre las posibilidades de desarrollo.

Por su parte, Antonio Serra (ver Reinert 1999), napolitano del

siglo XVIII escribió en su Breve Tratado sobre porque Venecia

era rico, mientras que Nápoles era pobre y llegó a la conclusión

de que mientras que Nápoles estaba centrado solo en las primeras y últimas etapas de pocas cadenas de valor agregado y

tenía unas bases de conocimientos desconectadas, Venecia tenía

múltiples cadenas de valor integradas, con bases de conocimiento que se complementaban mutuamente. Que el

proceso de de desarrollo es la aparición de nuevos sectores de

actividad económica que atienden demandas cada vez más

sofisticadas y requieren un capital humano y social crecientes. La visión de Serra recuerda con mucho a las actuales visiones

evolucionista y estructuralista. Así las recomendaciones de

política económica de los mercantilistas no son una serie de ideas inconexas, sino el esfuerzo sostenido de crear y ampliar

sistemas nacionales de innovación tecnológica (ver Lundvall

2010).

La tradición de modelos de crecimiento multisectoriales, con

mucho más de dos sectores, ha sido continuada por Passinetti

(Postkeynesiano); Metcalfe y Foster (Evolucionistas); y Pyka y Saviotti (Evolucionistas). Y ha sido mediante “olas” de

apariciones de nuevos sectores cada cincuenta a sesenta años

que la humanidad ha progresado (Pérez, 2002). Y la tradición continúa.

Otro elemento característico es la no sustituibilidad entre factores de la producción. El capital físico está diseñado para

operar con cierta cantidad de capital humano y no con otra; las

isocuantas son de tipo Leontieff. Además, cada categoría de

capital humano y de capital físico está orientado a trabajar solo

Page 140: Debate Económico No. 6

Debate Económico

134

en cierta industria. Por tanto, distintas categorías de capital físico no son sustituibles entre sí; e igualmente distintas

categorías de capital humano no son sustituibles entre sí. Así

que del tipo de capital humano y físico que acumule una comunidad dependerá el tipo de demanda que pueda atender, y

esto determinará sus posibilidades de crecimiento y desarrollo.

Por tanto, cada industria, cada producto, tiene un efecto diferenciado sobre las posibilidades de crecimiento.

Ahora bien, el futuro es incierto tanto porque lo estamos

construyendo entre todos con nuestras poco coordinadas acciones diarias, como porque las decisiones importantes o

tienen pocos antecedentes y, por tanto, no se pueden estimar

distribuciones de probabilidad o, aún más, no existen antecedentes suficientes como para conocer las posibles

consecuencias de la decisión que se tome. Y a la urgencia de

actuar ante esta incertidumbre radical se presentan los “espíritus

animales”: la urgencia de actuar pese a la ignorancia que se tiene.

Y como los humanos somos notoriamente diferenciados en todos los posibles aspectos de nuestra psique, hay muy distintos

grados de capacidad de decisión frente a incertidumbre.

Muchos serán paralizados por ella, mientras que otros serán capaces de absorber incertidumbre a nombre de otros y

coordinar a partes o a toda la colectividad para emprender

acciones, pese a la incertidumbre radical que enfrentan. A estas

personas las escuelas austriaca y evolucionista los denominan empresarios y las escuelas de pensamiento administrativo los

llama líderes. El liderazgo es la capacidad de absorber

incertidumbre a nombre de otros y guiar a esos otros a través de ella; esta capacidad es la que hace la diferencia entre una

empresa y otra para responder a los retos de los mercados

competitivos y empujar el crecimiento económico.

Una forma de reducir incertidumbre sobre las reacciones de

otros ante nuestras acciones es la formación de instituciones,

esto es, de usos y costumbres (las rutinas) y de reglamentos,

Page 141: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

135

leyes y constituciones (las instituciones formales), con las que se intenta hacer menos inestable (incierto) nuestro

comportamiento colectivo. El efecto de estas instituciones sobre

el desarrollo es el campo propio de la economía institucionalista, creada por Veblen y Commons, y continuada

por Kenneth Galbraith, Hodgson y North (ver Screpanti y

Zamagni, 2005).

Por último, habremos de mencionar que para estas escuelas de

pensamiento ahora llamadas heterodoxas, el ejemplo

metodológico a seguir por la economía es la biología y, en particular, el estudio de ecologías mediante el concepto de

sistemas complejos abiertos adaptativos (ver Miller y Page, así

como a Hodgson y North) y de poblaciones de reacciones en modelos de simulación.

Y, por influencia de los economistas heterodoxos, se están

volviendo más cuantitativas y matematizadas de los que eran hace solo alguna décadas, con excepción hecha de los

economistas austriacos y marxistas clásicos, los que continúan

produciendo solo narrativas; algunas de ellas realmente interesantes e ilustrativas. Y aún entre los marxistas podemos

contar a un ya fallecido Angus Madison y sus estadísticas sobre

la historia de la economía mundial.

Page 142: Debate Económico No. 6

Debate Económico

136

Organizaciones

PRODUCCIÓN E INSTITUCIONES

Volumen y composiciónde la producción

Valor y composiciónde la demanda

Instituciones

Rutinas

Hábitos

Oportunidadtecnológica

Oportunidad deinversión

Aprendizaje

Productividad y competitividad

Pago a los Factores de laproducción

Elaboración propia.

El canon atomista:

A diferencia del anterior, en este canon la utilidad que los

humanos obtenemos de nuestro consumo es absolutamente personal, individual: Ui(x) = xi donde xi es un vector de pagos

para la persona i x = (x1, x2,…..,xn). Además, el equilibrio

existe, se puede alcanzar y, de hecho, se considera es la condición normal de la economía.

En este canon, las personas parecen interactuar solo a través del mercado, sin aprender unas de otras, sin ser humanas. Y esto

viene de las concepciones filosóficas de Bentham en el periodo

de la Escuela Clásica. En este periodo se inicia el desarrollo del

concepto de Homo Economicus que orienta todas sus acciones hacia su satisfacción personal y hacia la ganancia financiera

inmediata.

Pero sus ejemplos aún eran biológicos; el equilibrio general

macroeconómico era tomado del flujo sanguíneo mediante los

Page 143: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

137

fisiócratas. Y aún Smith le daba al gobierno el control de la fabricación de armas, canales y caminos, educación y correo;

un gobierno con mucho poder. Aún así, había traído una muy

sana reducción del tamaño del gobierno después de la corrupción creciente del sistema cameralista del mercantilismo

(ver Reinert 1999).

A fines del siglo XIX con el predominio de la física mecánica y

su extensivo uso de las matemáticas como modelo de ciencia, la

economía quiso imitar este triunfo. Y nació la escuela

neoclásica, con los conceptos de equilibrio general microeconómico de Walras, continuado por Arrow-Debreu y

otros. Y como las matemáticas habían sido diseñadas para

trabajar con partículas inertes, donde sí existe un agente representativo, adoptaron esa visión del mundo; conocer a uno

permite conocer a todos. Se retrocedió en la comprensión de la

diversidad humana.

Su primer gran fracaso fue en pronosticar y encontrar solución

a la gran depresión de 1929. Para los neoclásicos de primera

generación estaba ocurriendo lo que no podía pasar. Así que tuvieron que aceptar la macroeconomía keynesiana y crear una

síntesis con ella mediante los trabajos de Hicks - Hansen y

Samuleson. Y con ellos surge la segunda generación de neoclásicos y la primera síntesis neoclásica. Y es a esta

generación que coincidió con el proceso de descolonización de

los años cincuenta del siglo XX que les debemos el primer

modelo de crecimiento neoclásico realmente exitoso, el modelo de Solow-Swan.

Y sobrevienen los trabajos econométricos de Griliches (año) sobre funciones de producción agregadas en las que se suponía

plena sustituibilidad entre los factores de la producción,

economías constantes a escala y que el crecimiento se explicaba por la acumulación de factores de la producción homogéneos y

todo uso. Y se encontró que las economías eran ligeramente

crecientes a escala y que el cambio tecnológico explicaba más

de la mitad del crecimiento. Y se comenzaron a anidar

Page 144: Debate Económico No. 6

Debate Económico

138

funciones producción para generar modelos de crecimiento endógeno. A la demanda no se le daba la más mínima

consideración y las conclusiones de las Controversias de

Cambridge son ignoradas, pese a ser suscritas por Samuelson (Cohen y Harcourt; 2003; y Fisher, Barkowitz y William 2005).

En un mundo de agentes inertes con relaciones mecánicas entre ellos, la capacidad empresarial, el liderazgo de cualquier índole,

no tiene cabida. Se diserta sobre el riesgo sin incertidumbre; el

tiempo es lógico, así que se puede desandar un error, por lo que

la historia no existe; y todo el mundo actúa “como si” supiese el comportamiento de la economía y el futuro de manera

inequívoca. La realidad es solo un caso poco relevante del

espectro teórico.

Sin embargo, algunos teóricos del neoclasicismo escucharon las

críticas externas a sus posturas y comenzaron a criticar

internamente a esta escuela de pensamiento. Y realizaron algunas aportaciones sustanciales, como fue la introducción de

economías crecientes a escala a la teoría del comercio

internacional por Helpman y Krugman en los años ochenta (Neary, 2009). Y Krugman sostiene que la economía

(neoclásica) avanzó por la línea de menor resistencia

matemática. Stiglitz inserta las asimetrías de información y la posibilidad de engaño como elementos del análisis y, con ello,

reintroduce la incertidumbre.

Y, al reintroducir la incertidumbre y reintroduce el tiempo histórico, y consecuentemente la necesidad de la política

industrial (Cimoli, Dosi y Stiglitz, 2008), el progreso social

(Fitoussi y Stiglitz, 2011), y reinicia la discusión sobre la ficción del equilibrio (Hoff y Stiglitz, 2010). Y colabora con

estructuralistas como Cimoli y con evolucionistas como Dosi;

pecado capital para los puristas del neoclasicismo de segunda generación en plena retirada.

Otro autor relevante para el inicio de esta tercera camada de

autores neoclásicos es Rodrik, quién recupera los temas de la

Page 145: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

139

importancia de las instituciones para el desarrollo, pues estas reducen la incertidumbre y favorecen la coordinación (Rodrik,

Subramanian y Trebbi, 2002); las estrategias de desarrollo

(Rodrik, 2003); el cambio estructural (McMillan y Rodrik, 2011), y el diferente efecto de distintas actividades sobre las

posibilidades de crecimiento (Rodrik, 2005); y al aceptar la

racionalidad limitada y el aprendizaje, aún entre los economistas (Rodrik, 2008).

En cuanto a enfoques sobre el desarrollo, a estos autores de la

tercera generación de neoclásicos los podemos dividir en grupos: 1) los neoschumpeterianos, que enfatizan el avance

tecnológico, y 2) a la economía política, que enfatiza el papel

de las instituciones formales e informales en el proceso de desarrollo. En el primer grupo tenemos sobre todo a Audretsch

(Audretsch y Sanders; 2009) y en el segundo a Acemoglu

(Acemoglu y Jackson; 2012; Acemoglu, Ozdaglar y Tahbuz-

Salehi; 2010; y Weiss; 2005).

Los neoschumpeterianos tienen un fuerte contacto con los

evolucionistas, y escritos característicos de ellos son: Barlevy (2004); “On the timing of innovation in stochastic

schumpeterian growth models”; NBER Working Paper 10741;

50 p.; y Audretsch y Sanders (2009); “Technological Innovation, Entrepreneurship and Development”; UNU-

MERIT Working paper 2009-052; 38 p.. En el segundo nótese

la palabra entrepreneurship, algo que incluye al liderazgo, y que

solo puede ocurrir bajo condiciones de incertidumbre, información y conocimiento asimétricos, agentes diferenciados,

relaciones no mecánicas y racionalidad limitada.

En cuanto a los autores de Economía Política, tenemos títulos

como: Meyer-Foulkes (2005); “Institutions and Long-term

Development”; CIDE; 54 p.; y Alesina, Cozzi y Montovan (2010); “The Evolution of Ideology, Fairness and

Redistribution”; NBER Summer Institute; 30 p.; y, obviamente

a Acemoglu, con su ensayo “History, Expectations and

Leadership in the Evolution of Social Norms”, en el que destaca

Page 146: Debate Económico No. 6

Debate Económico

140

la palabra Leadership (liderazgo), algo necesario solo en un mundo con incertidumbre, relaciones no mecánicas entre

agentes, agentes sociales con racionalidad limitada y voluntad,

que aprenden sus preferencias y generan su base de conocimientos conforme viven. También destacan las palabras

Ideology e Institutions (ideología e instituciones), algo solo útil

en un mundo incierto, poblado por agentes sociales con racionalidad acotada.

Los economistas neoclásicos han tendido dos líneas de

reacción. Unos han optado por atrincherarse en las posturas de su segunda generación (circa 1947 a 1995), en cuyo caso su

programa de investigación se ha vuelto retrogrado. Otros han

optado por aceptar la crítica, y la han incorporado a su estilo de análisis altamente matematizado y centrado en la existencia de

equilibrios. En este caso su programa de investigación se ha

vuelto extraordinariamente progresivo, generando textos de

gran interés. En las otras escuelas puede observarse comportamientos similares, un choque entre puristas y

eclécticos, en que los segundos producen obras de de mayor

interés.

¿Una nueva condición clásica?

Pudiéramos concluir alegremente que nos podemos estar

acercando a una “condición clásica” de consenso entre escuelas

de pensamiento, a cuyo centro están las ideas de Joseph A.

Schumpeter. Otro centro del consenso es que la economía es un sistema de desequilibrio general dinámico, no uno de equilibrio

general estático. Enfrentamos condiciones de riesgo y de

incertidumbre, dependiendo lo cotidiano de la decisión a tomar. Las instituciones son mecanismos de coordinación necesarios,

aunque puedan sufrir de esclerosis y exista la necesidad de

actualizarlas, y distan de ser óptimas. Otro, los humanos poseemos una racionalidad limitada u acotada y tenemos

propósito en nuestras acciones, voluntad; y que, por tanto, el

liderazgo, la capacidad emprendedora es necesaria.

Page 147: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

141

Sin embargo, las diferencias entre escuelas continúan, porque si bien han confluido en su cinturón protector, no han cambiado

en su núcleo duro. Y en este núcleo duro están sus conceptos

ontológicos (que podemos conocer) y epistemológicos (como conocemos), que se reflejan en sus aspectos metodológicos

contenidos en su cinturón protector.

Las diferencias se centran no en el cinturón protector, el cual ha

tendido a confluir, sino en las concepciones ontológicas,

epistemológicas y metodológicas en que las escuelas se

fundamentan; eso es, se centran en el núcleo duro. La discusión a continuación se basa fuertemente en el ensayo de Furlong y

Marsh.

Conforme a Frulong y Marsh existen dos posiciones

ontológicas clave (2010: 185): la

fundamentalista/Objetivista/Realista, conforme a la cual el

mundo existe independientemente de nuestro conocimiento sobre él; y la Anti-Fundamentalista/Constructivista/Relativista,

que va al mundo como socialmente construido.

En cuanto a epistemología existen tres posiciones: la

positivista; la realista y la interpretacionista. Cada una de estas

posturas intenta resolver la cuestión de cómo podemos conocer el mundo. El positivismo privilegia la observación directa y

cree en la posibilidad de establecer relaciones causales entre

fenómenos sociales. Considera que la intensidad de estas

relaciones puede ser cuantificada y, por tanto, se deben desarrollar modelos con capacidad de pronóstico. Los agentes

reaccionan en formas conocibles, por lo cual es un mundo

probabilístico.

El realismo epistemológico cree que existen estructuras

profundas no directamente observables que explican el comportamiento observado. Esto hace necesario considerar

información cualitativa y no solo cuantitativa. Y aunque se

puede establecer relaciones causales entre fenómenos sociales,

el objetivo es explicar, no pronosticar, lo cual es imposible

Page 148: Debate Económico No. 6

Debate Económico

142

porque el futuro está siendo construido por las acciones de todos; esto es, es un mundo incierto. Además, los fenómenos

observables nos pueden dar una falsa imagen de causalidad, y

puesto que nuestra interpretación de los fenómenos puede alterar las consecuencias de los mismos, toda teoría es

necesariamente provisional o poco generalizable.

La epistemología interpretativa se enfoca a la interpretación del

comportamiento y enfatiza el entendimiento sobre la

explicación. Considera que no es posible establecer relaciones

causales entre fenómenos sociales. (Furlong y Marsh; 2010: 191, 192 y 193 a 205)

Las posiciones ontológicas y epistemológicas están relacionadas. Tanto el positivismo como el realismo

epistemológico se relacionan con el fundamentalismo

ontológico; y el interpretacionismo epistemológico se relaciona

con el constructivismo ontológico.

Y las personas y los grupos profesionales no cambian estas

posiciones conforme se requiera o convenga, son parte de lo que los define. Esto hace que sea importante que los autores

reconozcan su posición y sean capaces de sustentarla (Furlong y

Marsh; 2010: 187, 188 y 193). En el caso de los economistas, habría que añadir que sepan que existen otras posiciones y que

sean capaces de entenderlas y perdonarles la existencia.

Así por ejemplo, la economía neoclásica es notoriamente positivista y sus defensores se molestan cuando autores de

otras posturas no incluyen evidencia cuantitativa ni realizan

análisis de regresión en sus estudios y los descalifican como sociólogos, o al menos, de falta de seriedad. También

consideran indispensable la existencia de un modelo en

cualquier escrito, y su aplicación a algún caso concreto. Y han convertido a las matemáticas de una forma de lógica en un

criterio de verdad.

Page 149: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

143

Otra escuela de pensamiento económico con fuerte influencia positivista es la economía experimental o behaviourista, la cual

ha empleado experimentos propios de la psicología en un

intento por sustentar o falsar los conceptos de la economía neoclásica sobre el comportamiento de los agentes.

En el otro extremo estaría la economía austriaca y probablemente la economía cognitiva, las que siguen una

ontología relativista con una epistemología interpretativa. Y,

como tales rechazan la aplicación de métodos cuantitativos.

Entre los economistas de la escuela austriaca escuchar que la economía debe alejarse de la madrastra matemática y regresar a

la abuela filosofía.

La mayoría de las escuelas heterodoxas, como los

postkeynesianos y los evolucionistas, tienen una posición

ontológica fundamentalista y una posición epistemológica

realista. De ahí la necesidad de incluir tanto elementos cualitativos como cuantitativos, y las dudas que tienen sobre los

métodos cuantitativos, pues estos solo captan las estructuras

superficiales y pueden conducir a falsas interpretaciones.

Algunas conclusiones

Por desgracia, ninguna disputa teórica se ha resuelto con

evidencia cuantitativa; y ninguna teoría ha sido falsada en

forma individual; son paradigmas enteros los que se sustentan o

se rechazan, tal como nos los recordó Thomas Kuhn. En esto radica la dificultad fundamental de la existencia de varias

escuelas. Cada una es un paradigma que resulta difícil de falsar

porque todas tienen algo de acto de fe; creemos en ellos en forma apriorística, frecuentemente porque se nos educa en la

ignorancia de paradigmas alternos dentro del mismo campo de

estudio.

Si a esto le añadimos que las “ciencias” sociales estudian un

parte del mundo de construcción específicamente humana,

donde la capacidad de experimentación es relativamente baja e

Page 150: Debate Económico No. 6

Debate Económico

144

indirecta, la posibilidad de ser objetivo es pequeña. Y esto se debe a que nuestra selección de temas de interés, piezas de

evidencia, forma de análisis y conclusiones que derivemos

están fuertemente influenciadas por nuestro marco teórico; vemos lo que deseamos ver y nuestro cerebro es propenso al

autoengaño. Tenemos que la existencia de múltiples escuelas de

interpretación es algo que debe esperarse.

Y, además, no es solo algo a esperar, sino a promover; puesto

que cada una arroja luz sobre aspectos distintos de un mismo

fenómeno, que otras ignoran, lográndose una comprensión más completa del mismo cuando se considera a más de un enfoque.

Así que el eclecticismo es una necesidad; la profesión puede ser

objetiva, sus practicantes individuales, no. Y, además, resulta útil el conocimiento de campos de estudio relacionados, así

como de varias formas de ordenar nuestro pensamiento, sin

privilegiar alguna.

Bibliografía

Acemoglu y Jackson (2012); “History, Expectations and Leadership in the Evolution of Social Norms”; MIT

y Stanford University; 65 p.

Acemoglu, Ozdaglar y Tahbuz-Salehi (2010);

“Cascades in Networks and Aggregate Volatility”;

MIT; 50 p.

Audretsch y Sanders (2009); “Technological

Innovation, Entrepreneurship and Development”;

UNU-MERIT Working Paper 2009-052; 38 p.

Bannock, Baxter y Rees (2007); “Diccionario de

Economía”; Trillas; 443 p.; 978-968-24-7849-9

Cimoli, Dosi y Stiglitz (2008); “The future of Industrial

Policies in the New Millennium: Toward a knowledge

Page 151: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

145

centred development agenda”; Sant’ Anna School of Advanced Studies LEM Working Paper 2008/19; 21 p.

Cohen y Harcourt (2003); “Whatever Happened to the Cambridge Capital Theory Controversies?”; The

Journal of economic Perspectives 17-1; pp. 199 - 214

Dosi, Pavitt y Soete (1990) “The Economics of

Technical Change and International Trade”; New York

University Press; 303 p.; 0-8147-1834-5

Elmslie y Vieira (1999), “A primer on technology gap

theory and empirics”; pp. 248 a 272 de Deprez y

Harvey (1999) “Foundations of International Post Keynesian Perspectives”; Routledge; 283 p.; 0-415-

14651-8

Fisher, Barkowitz y William (2005); “Aggregate production functions – A Pervasive but Unpersuasive

Fairytale”; Eastern Economic Journal 3-1; pp. 489 -

491

Fitoussi y Stiglitz (2011); “On the measurement of

Social Progress and Well being: Some further thoughts”; OFCE Document du travail 2011-19

Furlong y Marsh “A Skin not a Sweater: Ontology and

Epistemology in Political Science”, pp. 184 a 211 de Marsh y Stoker (2010); “Theory and Methods in

Political Science”; Palgrave Macmillan; 392 p.; 978-0-

230-57627-8

Garbellini y Wirkierman (2010); “Pasinetti’s Structural

change and Economic Growth: a conceptual excursus”; MPRA Paper 25685; 61 p.

Hahne Rima (1988); “Desarrollo del Análisis

Económico”; Irwin; 616 p.; 84-8086-176-2

Page 152: Debate Económico No. 6

Debate Económico

146

Helpman y Krugman (1987); “Market Structure and

Foreign Trade: Increasing Returns, Imperfect

Competition and the International Economy”; The M.I.T. Press; 288 p.; 0-262-58087-X

Hodgson (2007); “The Evolution of Economic Institutions: A Critical Reader”; Edward Elgar; 301 p.;

978-1-84720-087-7

Hodgson (2006); “Economics in the Shadows of Darwin and Marx: Essays on Institutional and

Evolutionary Themes”; Edward Elgar; 265 p.; 978-1-

84720-619-0

Hoff y Stiglitz (2010); “Equilibrium Fictions: A

cognitive approach to societal rigidity”; NBER

Working Paper 15776; 23 p.

Lundvall (2010); “National Systems of Innovation:

Toward a Theory of Innovation and Interactive Learning”; Anthem Press; 388 p.; 978-1-84331-866-8

McCombie y Thirlwall (1999); “Growth in an international context: A Post Keynesian View”; pp. 35 a

88 de Deprez y Harvey (1999) “Foundations of

International Post Keynesian Perspectives”; Routledge;

283 p.; 0-415-14651-8

McMillan y Rodrik (2011); “Globalization, Structural

Change and Productivity Growth”; NBER Working paper 17143; 54 p.

Metcalfe y Foster (2009); “Evolutionary Growth Theory”; University of Queensland School of

Economics discussion paper 388; 50 p.

Page 153: Debate Económico No. 6

Escuelas de pensamiento con relación al crecimiento y desarrollo económico

147

Miller y Page (2007) “Complex Adaptive Systems: An Introduction to Computational Models of Social Life”;

Princeton University Press; 263 p.; 978-0-691-12702-6

Neary (2009); “Putting the ’new’ into trade theory:

Paul Krugman’s Nobel memorial prize in economics”;

University of Oxford; 45 p.

North (2005); “Understanding the Process of Economic

Change”; Princeton University Press; 187 p.; 0-691-

11805-1

Pérez (2002); “Technological Revolutions and

Financial Capital: The Dynamics of Bubbles and Golden Ages”; Edward Elgar; 198 p.; 1-84376-331-1

Reinert (1999); “The role of the state in economic

growth”; Journal of Economic Studies 26, 4/5; pp. 268 a 326

Rodrik, Subramanian y Trebbi (2002); “Institutions Rule: The Primacy of Institutions over Geography and

Integration in Economic Development”; NBER

Working Paper 9305; 46 p.

Rodrik (2003); “Growth Strategies”; Johannes Kepler

University of Linz, Department of Economics Working

Paper 0317; 60 p.

Rodrik (2005); “What You Export Matters”; NBER

Working Paper 11905; 25 p.

Rodrik (2008); “The New Development Economics: We

Shall Experiment, but How Shall We Learn?”; Harvard university J.F.K. School of Government RWP08-055;

38 p.

Page 154: Debate Económico No. 6

Debate Económico

148

Schumpeter (1982); “Historia del Análisis Económico”; Editorial Ariel; 1,377 p.; 84-344-0148-7

Screpanti y Zamagni (2005); “An outline of the history of economic thought”; Oxford University Press; 559p.;

0-19-927914-4

Wilkinson (2008); “An Introduction to Behavioural

Economics”; Palgrave Macmillan; 511 p.; 978-0-230-

53359-5

Weiss (2005); “On the Evolution of Wage Inequality in

Acemoglu´s Model of Directed Technical Change”;

Universität Mannheim; 9 p.