alimentos transgenicos

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ALIMENTOS TRANSGENICOS El hombre lleva varios miles de años modificando los vegetales que utiliza como alimento. Tal es el caso de muchas frutas que son productos de mezclas de diferentes plantas. Sin embargo la ingeniería genética permite ahora llevar a cabo en pocos años y en forma controlada modificaciones que antes costaban décadas de trabajo. Sus comienzos En sus comienzos, la ingeniería genética se utilizó para producir sustancias de uso farmacéutico, como la insulina, vía la modificación genética de microorganismos. Con los posteriores desarrollos aquellas investigaciones preliminares se aplicaron y derivaron en la obtención de vegetales y animales modificados genéticamente de forma tal de mejorar sus propiedades implícitas. Los objetivos y mejoras principales a los que se apuntaba eran los de obtener mayor vida comercial en los productos, resistencia a condiciones ambientales más agresivas (heladas, sequías, distintos tipos de suelos), resistencia a herbicidas más fuertes y potenciar la autodefensa contra plagas e insectos. El primer alimento, modificado por la ingeniería, en ser producido para el consumo masivo fue el tomate Flavr Svr. Los alimentos que posteriormente se modificaron fueron la soja transgénica, en la cual se modificó su constitución para hacerla más resistente a herbicidas y el maíz, al que se le modificó para resistir determinados insectos y generar mayores rindes por cultivo y cosecha. Desde muchos puntos de vista, las perspectivas de esta tecnología son vastamente amplias por lo que actualmente existen varias decenas de otros productos listos para ser comercializados. Sin embargo, y aún a pesar de las amplias fronteras que esta ciencia tiene, debido a diversas razones

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Alimentos transgenicos generalizado

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ALIMENTOS TRANSGENICOS

El hombre lleva varios miles de aos modificando los vegetales que utiliza como alimento. Tal es el caso de muchas frutas que son productos de mezclas de diferentes plantas. Sin embargo la ingeniera gentica permite ahora llevar a cabo en pocos aos y en forma controlada modificaciones que antes costaban dcadas de trabajo.

Sus comienzos En sus comienzos, la ingeniera gentica se utiliz para producir sustancias de uso farmacutico, como la insulina, va la modificacin gentica de microorganismos. Con los posteriores desarrollos aquellas investigaciones preliminares se aplicaron y derivaron en la obtencin de vegetales y animales modificados genticamente de forma tal de mejorar sus propiedades implcitas. Los objetivos y mejoras principales a los que se apuntaba eran los de obtener mayor vida comercial en los productos, resistencia a condiciones ambientales ms agresivas (heladas, sequas, distintos tipos de suelos), resistencia a herbicidas ms fuertes y potenciar la autodefensa contra plagas e insectos. El primer alimento, modificado por la ingeniera, en ser producido para el consumo masivo fue el tomate Flavr Svr. Los alimentos que posteriormente se modificaron fueron la soja transgnica, en la cual se modific su constitucin para hacerla ms resistente a herbicidas y el maz, al que se le modific para resistir determinados insectos y generar mayores rindes por cultivo y cosecha. Desde muchos puntos de vista, las perspectivas de esta tecnologa son vastamente amplias por lo que actualmente existen varias decenas de otros productos listos para ser comercializados. Sin embargo, y an a pesar de las amplias fronteras que esta ciencia tiene, debido a diversas razones la cantidad de productos disponibles en el mercado es muy reducida y acotada.

Opiniones opuestas Como contracara de este tremendo avance tecnolgico existe una segunda voz: La que se mantiene en contra de la manipulacin gentica de los alimentos y que enuncia que esta atenta contra la salud de la poblacin. Estas voces de protesta se originan en que existen campos con diversas dudas concernientes al tema, que la ciencia no ha develado completamente. Por esto, es que diversas organizaciones ambientalistas y ecologistas claman en favor de la agricultura biolgica y orgnica, y promueven los alimentos de calidad que no aplican modificaciones o alteraciones genticas, o utilizan agroqumicos y/o agrotxicos para su crecimiento. Dada la corta historia de este tremendo avance tecnolgico, existe poca legislacin que controle o regule la utilizacin de esta ciencia. Al respecto, una de las pocas condiciones que se deben cumplir son las de respetar una directiva europea de 1997 que obliga a que los productos transgnicos: Demuestren ser necesarios y tiles, Sean seguros para la salud humana y el medio ambiente, Que sus caractersticas sean las declaradas y se mantengan a travs del tiempo, Que posean un etiquetado detallado que especifique si el producto est modificado genticamente.

ALIMENTOS TRANSGENICOS: SITUACION ACTUAL Y FUTUROMiguel CalvoDepartamento de Produccin Animal y Ciencia de los AlimentosFacultad de Veterinaria. Universidad de Zaragoza.1. Introduccin.Los avances de la ingeniera gentica, que inicialmente se utilizaron en la produccin de sustancias de uso mdico, como la insulina, han llegado tambin al campo de la alimentacin. Mediante la tecnologa de DNA recombinante se producen actualmente enzimas de uso alimentario y, en los ltimos aos, se han obtenido y comercializado nuevas variedades de vegetales con propiedades especiales. Estas variedades representan ventajas importantes para los agricultores que las cultivan, al facilitar la lucha contra plagas de insectos o malas hierbas. Sin embargo, desde algunos sectores se ha cuestionado la utilizacin de estos vegetales con acusaciones como que representan un peligro para la salud de los consumidores o el medio ambiente.2. La ingeniera gentica y los alimentos.En el campo de la produccin de alimentos, la tecnologa del DNA recombinante se est utilizando para varias aplicaciones, y sus perespectivas de futuro, en el aspecto cientfico y tecnolgico, son prometedoras. Esas aplicaciones, presentes y futuras, corresponden a distintos tipos:2.1 Modificacin de microrganismos.Las primeras aplicaciones de la tecnologa del DNA recombinante en el campo de los alimentos han consistido en la obtencin de protenas en microrganismos, entre elas la hormona de crecimiento bovina y la quimosina bovina.La hormona de crecimiento bovina recombinante se administra a las vacas para aumentar su produccin de leche. Sin embargo, dadas sus caractersticas, es ms razonable considerarla como un producto de farmacia animal que como un material para uso por la industria alimentaria. Adems su uso no est autorizado en la Unin Europea, aunque s en Estados Unidos.La quimosina bovina recombinante, sin embargo, si que se puede considerar un aporte de la biotecnologa a la industria alimentaria. La quimosina, componente fundamental del cuajo obtenido del estmago de terneros jvenes, es el enzima clsico en la fabricacin de quesos. La fuente de suministro tiene como inconvenientes la posible heterogeniedad en cuanto a calidad, la variabilidad en suministro y el precio, relativamente elevado. A partir de 1990 se dispuso de quimosina recombinante, obtenida en distintos microrganismos, bien levaduras o bien bacterias.En Estados Unidos, ms del 80% del queso se fabrica actualmente utilizando quimosina recombinante. En la Unin Europea los problemas burocrticos asociados a las normativas especficas de los quesos de calidad (debe considerarse a la quimosina recombinante un "cuajo animal", tal como exige su estructura y propiedades, o un "cuajo microbiano", atendiendo a su forma de obtencion?) han frenado su difusin. Tambin se han obtenido otros enzimas de inters industrial, especialmente los destinados a la modificacin de carbohidratos. La modificacin de rutas metablicas en microrganismos ha permitido aumentar la eficacia de la sntesis de cidos orgnicos como el cido lctico y el cido ctrico. Algunos microrganismos de inters tecnolgico, como las levaduras de panadera, o los microrganismos utilizados en la industria lctea, etc. han sido tambin modificados genticamente especialmente para conseguir la sobreexpresin de determinadas enzimas. 2.2 Modificacin de vegetales. La modificacin gentica de vegetales es una actividad que acompaa a la civilizacin humana desde la aparicin de la agricultura. Muchos de los vegetales ms importantes cultivados actualmente, como el trigo, no guardan casi ninguna semejanza con sus parientes salvajes. La novedad de la utilizacin de la biotecnologa est simplemente en la potencia y precisin de las herramientas utilizadas actualmente para la creacin de nuevas variedades, no en el hecho en s. En este momento, la obtencin de vegetales transgnicos es el campo con mayores posibilidades de desarrollo, a partir de distintas aproximaciones.2.2.1. Genes antisentido.El primer vegetal transgnico comercial, desarrollado por la empresa Calgene en 1994, fue el tomate Flavr Savr, resistente al ablandamiento al contener un gen antisentido de la poligalacturonasa. En este tomate, el gen antisentido produce la sntesis de un m-RNA complementario del m-RNA de la poligalacturonasa, que al unirse a l impide la sntesis del enzima. Este tomate no ha tenido xito comercial, pero la aproximacin es vlida para la modificacin de otros vegetales. Los genes antisentido no inducen la expresin de una protena nueva, sino que evitan la de una existente en el vegetal no transgnico. Por el mismo sistema podra evitarse el pardeamiento enzimtico, u otras alteraciones producidas por enzimas. 2.2.2. Genes de resistencia a insectos. La resistencia a insectos est basada hasta ahora en los genes de las toxinas de Bacillus thuringiensis, una bacteria patgena para determinados lepidpteros. En particular, la toxina crylA(b) aparece en el maiz desarrollado por Monsanto en 1996. Esta protena se une especficamente a determinados receptores que solamente existen en el tubo digestivo de algunos tipos de insectos, entre ellos, Ostrinia nubialis, el barrenador del maiz, endmico en algunas zonas. Consecuentemente su accin es muy selectiva, muchsimo mas que la de los insecticidas qumicos. Para la inmensa mayora de los animales (mamferos, peces) es simplemente una protena ms, metabolizada como las dems protenas. El mismo principio, con la misma toxina o con otras distintas, puede aplicarse a otros vegetales, y est siendo muy importante en el caso del algodn. 2.2.3. Genes de resistencia a herbicidas. En este caso son posibles en principio dos aproximaciones. O bien insertar en la planta el gen de un enzima que no se vea inhibido por el herbicida o bien un enzima que inactive el herbicida.En el primero de estos casos tenemos la soja resistente al glifosato, en la que se ha insertado un gen bacteriano para el enzima enolpiruvilshikimato-3 fosfato sintetasa. Este enzima est implicado en la ruta biosinttica de los aminocidos aromticos. El enzima equivalente de la soja es inhibido por el herbicida, pero el bacteriano no lo es, de tal forma que no se corta la correspondiente ruta metablica, y la planta transgnica no se ve afectada. En consecuencia, puede usarse el herbicida en cualquier momento de desarrollo del cultivo, sin que ste se vea afectado.Tambin se han desarrolado otros vegetales resistentes a herbicidas, como la colza (canola) resistente al glufosinato, obtenida por insercin en su genoma del gen de la fosfinotricin-acetiltransferasa de una bacteria. El glufosinato inhibe un enzima de la ruta biosinttica de la glutamina, dando lugar a la acumulacin de amionio. La fosfinotricin-acetil transferasa inactiva al glufosinato por acetilacin, eliminando su actividad inhibidora.Existen ya variedades en las que se ha combinado un gen de resistencia a insectos con otro de tolerancia a herbicidas.2.2.4. cambios en la composicin de vegetales.Los cambios en la composicin de un vegetal comestible pueden permitir mejorar su calidad nutricional, tanto si se emplea en nutricin animal como en humana. Concretamente se puede modificar el patrn de aminocidos de las protenas, corrigiendo la deficiencia en lisina de los cereales o la deficiencia en aminocidos azufrados de la protena de soja. mas importante desde el punto de vista de la lucha contra el hambre y las enfermedades carenciales es el "arroz dorado", que contiene beta-caroteno y que debe ser una herramienta vlida para luchar contra la mortalidad infantil y la ceguera asociada en varias zonas geogrficas a la deficiencia de vitamina A en la dieta. En http://www.goldenrice.org/ se encuentra la pgina web de este proyecto. Otras mejoras de este tipo pueden consistir en la obtencin de productos alimentarios o para usos industriales no alimentarios modificando la composicin de los lpidos. Em 1995 se desarroll una variedad de colza (canola) cuyo aceite es muy rico en cido lurico. En esta variedad est incluido el gen de la tioesterasa de la protena transportadora de lurico, obtenido del laurel de California2.2.5. Otras posibilidadesExisten otras posibilidades de mejora vegetal, alguna de ellas, como la resistencia a virus, de la que ya existen algunas variedades comerciales. Aspectos como la resistencia al fro o a la salinidad son algo ms complejos de abordar, ya que no dependen generalmente de un slo gen sino de varios. De todos modos, los primeros resultados de laboratorio referentes a resistencia a la salinidad hacen pnsar que incluso estos problemas son menos complejos de resolver de lo que se pensaba inicialmente.2.4 Modificaciones de animalesEn este campo, los desarrollos cientficos alcanzados no han llegado an a etapas comerciales. Los principales aspectos de inters son los animales de crecimiento rpido, especialmente peces para su reproduccin mediante acuiacultura y la obtencin de leche con protenas especficas. Este segundo caso es especialmente prometedor desde el punto de vista de las aplicaciones biomdicas, pero tambin desde las alimentarias. La leche de vaca es la materia prima utilizada para la elaboracin de leche para alimentacin infantil. las grandes diferencias que tienen comparada con la leche humana hace que deba ser sometida a distintas modificaciones (sustitucin de la grasa por una ms insaturada, adicin de protenas de lactosuero para aumentar la proporcin en la que se encuentran con la casena, etc). Sin embargo, la presencia en la leche humana de algunas protenas especficas, como la lactoferrina, sugiere la posibilidad de crear vacas transgnicas con el gen de esta protena.3. Ventajas de los vegetales transgnicos.Aunque parezca obvio, debe decirse que su ventaja fundamental es que tienen la propiedad (resistencia a insectos o a herbicidas, por ejemplo) que se buscaba con su obtencin. Ahora bien, estas ventajas no resultan casi nunca evidentes para los consumidores, ya que las repercusiones econmicas, como costos de produccin menores, mayor facilidad de cultivo o necesidad de menores subvenciones agrarias no se han trasladado por el momento hacia ellos en forma de nuevos productos, precios menores, etc. Adems, dado que los cultivos ms importantes (maiz, soja) no se comercializan directamente, sino que son materias primas para otras industrias o se utilizan en alimentacin animal, es razonable pensar que este traslado de beneficios nunca se va a producir. Las ventajas medioambientales por menor uso de insecticidas son tambin pequeas, y tampoco los consumidores las aprecian directamente.Consecuentemente, puesto que no ven ventajas personales, no pueden hacer un balance riesgo/beneficio proporcionado, aun que los riesgos sean nfimos, no aceptan asimirlos para un beneficio (personal) aparentemente nulo. A las organizaciones que se oponen sistemticamente a la biotecnologa les resulta pues muy fcil ganar opiniones. 4. Representan un riesgo los vegetales transgnicos?En los ltimos aos, desde algunos sectores sociales concretos se ha cuestionado la utilizacin de vegetales transgnicos acusndolos de representar un peligro para la salud de los consumidores o el medio ambiente, aunque sin definir un riesgo concreto. Sorprendentemente, a mayor vaguedad del riesgo, mayor es la inquietud que suele generar entre los consumidores.Al contrario de lo que sucede con las variedades vegetales obtenidas por tcnicas convencionales, o de los vegetales, nuevos para nosotros como alimento, procedentes de otras regiones del mundo, las variedades transgnicas son sometidas a procesos de evaluacin individual de riesgos, tanto en lo que afecta a la seguridad de los consumidores como en lo referente al medio ambiente. 4.1. Para la salud del consumidor.El riesgo que aparece a primera vista es la posibilidad de que, al introducirse una protena "extraa" en el alimento (la toxina o el enzima bacteriano, por ejemplo) pudieran aparecer reacciones de alergia en algunos consumidores. La experiencia del uso desde hace bastantes aos de las toxina de Bacillus thuringiensis, en la "agricultura biolgica" sin que se hayan indicado casos de alergia hace que no parezca probable su aparicin al encontrarse dentro de un transgnico. Lo mismo puede decirse de las otras protenas, de las que por el momento tampoco se conoce un solo caso de alergia a ellas.En cuanto a los genes transferidos, el nico que pudiera considerarse cuestionable es el de resistencia a un antibitico, gen utilizado como auxiliar en algunos transgnicos. En condiciones naturales, el paso del gen de resistencia desde el vegetal a las bacterias es extremadamente difcil, y en cualquier caso, ese paso, de producirse, sera insignificante compararado con la propia presencia del gen de resistencia en la poblacin natural. El grave problema de las resistencias a antibiticos no se debe tanto a la existencia de los genes de resistencia como a la presin de seleccin inducida por un uso incorrescto de los antibiticos en medicina humana o animal. A esto hay que aadir que en la mayora de los casos, los productos que se consumen no son los propios vegetales, sino materiales muy elaborados, como la glucosa obtenida del almidn del maiz o el aceite en el caso de la soja, materiales en los que no hay ni DNA ni protenas. 4.2. Efectos sobre el medio ambiente.Desde el punto de vista medioambiental, los vegetales transgnicos con genes de resistencia a insectos representan una ventaja medioambiental desde el momento en que reducen la utilizacin de insecticidas qumicos, menos especficos que el presente en el propio vegetal. Tambin los genes de tolerancia a herbicidas pueden representar una ventaja medioambiental al permitir una mejor gestin del uso de los herbicidas, utilizando aquellos que son menos txicos y persistentes (glifosato y glufosinato) pero que presentaban problemas precisamente por su falta de selectividad. El riesgo de paso de los genes de resistencia a plantas salvajes se ha planteado como una posibilidad de creacin de "supermalezas". Este planteamiento olvida que esto solamente es posible por polinizacin entre especies muy prximas, que en los casos de soja y maiz no existen en Europa, y que, en cualquier caso, los parientes salvajes de las plantas cultivadas no han representado nunca un problema como "malas hierbas". En cuanto al riesgo de que el polen del maiz transgnico pueda afectar a insectos no diana, los experimentos en condiciones de campo han demostrado que es mnimo, mucho menor que si se usan insecticidas qumicos.Por supuesto, en otros transgnicos distintos pueden aparecer riesgos ecolgicos reales, como en le caso de los peces gigantes o de crecimiento acelerado, que exigen un estudio detallado antes de su autorizacin.4.3 Riesgos agronmicos y socioeconmicosEn el caso de la utilizacin de transgnicos con protenas insecticidas, es perfectamente posible la aparin de fenmenos de resistencia en insectos diana, lo mismo que ha sucedido en el caso de la utilizacion de insecticidas qumicos. La gestin de este problema exige el mantenimiento de reas sembradas con maiz no transgnico, para disminuir la presin de seleccin y retardar la aparicin de poblaciones resistentes. Como es lgico, las semillas transgnicas son ms caras que las tradicionales, y adems las empresas productoras intentan evitar la prctica tradicional de "autosuministro" de semillas para aos sucesivos. An as, los cultivos transgnicos son suficientemente ms rentables para que compensen el mayor gasto en la semilla. En el caso del algodn, el mejor evaluado, el incremento de peroductividad se reparte casi por igual entre la empresa biotecnolgica y el agricultor, sin que se traslade prcticamente nada a los compradores, y menos an al consumidor final. 5. Deteccin y etiquetado. En Estados Unidos, el primer pas en comercializar vegetales modificados por ingeniera gentica, o en Canad, no existe ninguna obligacin de indicar su presencia en un alimento mediante el etiquetado. Esto es la consecuencia legal de considerar que las variedades vegetales obtenidas por este sistema son sustancialmente equivalentes en cuanto a propiedades nutricionales y de seguridad a las obtenidas por otros mtodos de seleccin gentica, lo que es efectivamente cierto. En la Unin Europea o en Japn, cuando un alimento contiene entre sus ingredientes materiales procedentes de un vegetal transgnico es obligatorio indicarlo. Sorprendentemente, en la nueva normativa de la Unin Europea no es necesario que el material contenga DNA o protenas, que son las realmente transgnicas. Incluso en el caso de productos como la glucosa obtenida de almidn obtenido de maiz transgnico, en los que es cientficamente imposible confirmar o desmentir su origen en el laboratorio, es obligatoro el etiquetado, en basa a la trazabilidad a lo largo del proceso hasta la materia prima. El resultado es el aumento de costes y la disminucin de competitividad de agricultores y empresas, simplemente para intentar contentar a un sector peculiar de la opinin pblicaLa deteccin de un vegetal transgnico es, en principio, fcil mediante tcnicas de PCR en el caso de pretender detectar la presencia de DNA o por tcnicas inmunoqumicas para detectar protenas. Sin embargo, el paso desde el mtodo de deteccin en el laboratorio a la evaluacin final de la contaminacin es mucho ms complicado. En la UE se admite una contaminacin accidental, que no obliga a un etiquetado diferencial. Los factores implicados en la cuantificacin, especialmente la fiabilidad de la toma de muestras en materiales manejados a escalas tan grandes como el maiz y la soja hacen complicada la cuantificacin. Tambin hay que tener en cuenta las dificultades de hacer cuantitativo un anlisis de DNA, o las relacionadas con la cuantificacin de protenas en alimentos elaborados que hayan sufrido tratamientos trmicos. 6. La polmica de los transgnicos.La biotecnologa aplicada a los alimentos ha encontrado oponentes en algunos grupos sociales desde sus inicios. Inicialmente, la oposicin parto de grupos fundamentalistas religiosos en Estados Unidos, que se oponan a la modificacin de la Obra de Dios. Otras organizaciones intervinieron tambin en la polmica, con ideas tan peregrinas como el hecho de que si se utilizaran "genes animales" en los vegetales transgnicos, stos seran incomestibles por los vegetarianos. Algunas organizaciones ecologistas o antiglobalizacin han encontrado enla lucha contra los transgnicos una causa atractiva para un sector del pblico, que ve tras ellos el peso de las multinacionales de la agricultura. En su batalla por ganar adeptos, estas organizaciones no han vacilado en lanzar acusaciones falsas y demaggicas, intentando, con cierto xito, trasladar al pblico la idea de que representan un riesgo sanitario y ecolgico, y a empresas y polticos la sensacin de que es preferible no apoyar ni utilizar estos productos para evitar convertirse en la diana de campaas en contra en la calle y en los medios de comunicacin. 7. Situacin actual y perspectivas de futuro. El cultivo de los vegetales transgnicos a escala comercial comenz en 1996. En este momento (segn datos del ao 2000), cuatro cultivos de este tipo (soja, maiz, colza y algodn) representan ya un porcentaje significativo del total plantado para esa especie. Algunos otros, como la calabaza o la papaya, se encuentran en un estadio poco ms que experimental, mientras que el tomate resistente al ablandamiento ha dejado de cultivarse prcticamente por falta de inters comercial. En el caso de la soja, mas de un tercio del total de la produccin mundial es transgnica (resistente a herbicidas). En el caso del algodn, a nivel mundial el transgnico (resistente a insectos y/o a herbicidas) representa el 16%, y el 70% del sembrado en Estados Unidos. En ese pas en el ao 2.000 se cultivaron en total ms de 30 millones de hectreas de cultivos de este tipo. Argentina y Canad cultivan tambin varios millones de hectreas de transgnicos cada una, seguidos por otros pases hasta alcanzar un total del orden de los 50 millones de hectreas cultivadas. En un sistema de agricultura sostenible, o de gestin integrada, los transgnicos representan una pieza fundamental. Sin embargo, las semillas transgnicas pueden llegar a ser la causa de problemas reales, en el aspecto socioeconmico, en cuanto que peden producir la dependencia de una parte sustancial de los agricultores de unas pocas empresas. Disfrazar esos problemas con las inexistentes amenazas de los riesgos para la salud y el medio ambiente no hacen ms que empeorarlos. Los gobiernos no van a ser propensos a invertir en investigacin en un campo en el que existe una oposicin con una gran capacidad de presin en los medios de comunicacin.

TRANSGENICOS

A nivel mundial y por ms de una dcada, el tema de los transgnicos permanece vigente en el tapete de discusin. Esta nueva tecnologa ha provocado una serie de preguntas, argumentos y consideraciones ticas sobre su manejo y utilizacin, unas a favor y otras en contra.El desarrollo en los ltimos aos de las tcnicas de la biologa molecular ha dotado al hombre de herramientas que le permiten acceder y manipular el ADN de los organismos. As, los transgnicos, llamados tambin organismos genticamente modificados (OGMs), son plantas o animales que han sido manipulados en laboratorios. Esta manipulacin consiste en agregar genes a la cadena de ADN de dichas plantas y animales, para as cambiar o combinar caractersticas entre ellos.En el mbito alimenticio, esta tcnica ha hecho posible conseguir nuevas variedades capaces de expresar genes de resistencia hacia enfermedades, herbicidas, insecticidas, condiciones climticas o bien para mejorar su calidad nutricional. Por ejemplo, se inserta el gen de resistencia al fro del salmn en papa para buscarle resistencia a heladas.El tema de los alimentos transgnicos, a nivel mundial, es asiduamente abordado por la comunidad cientfica, las autoridades gubernamentales, la Organizacin de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentacin (FAO, por sus siglas en ingls), la Organizacin Mundial de la Salud (OMS); el Codex Alimentarius y las organizaciones de consumidores.Muchos han sido los foros internacionales realizados en los que se discute sobre este tema, debido a su importancia, su dinamismo, lo controvertido de la situacin y por la existencia a nivel mundial de grupos muy bien definidos, los defensores sin cuestionamiento alguno, los detractores a ciegas y aquellos que abordan esta nueva tecnologa con un correcto enfoque biotico y cientfico.Los alimentos modificados genticamente son sometidos a una serie de rigurosos anlisis y estudios que determinan su seguridad y que son la base para permitir su comercializacin en el mercado. Adems, las entidades regulatorias ejercen una especial fiscalizacin de los productos en los que ha intervenido de alguna u otra forma la biotecnologa para evitar cualquier tipo de riesgo.Cinco compaas transnacionales de la agro-biotecnologa controlan el mercado: Dupont, Syngenta, Bayer, Dow y, en particular, Pharmacia de Monsanto que produce 91 por ciento de las semillas transgnicas sembradas en el mundo.

Investigacin Los estudios con OGMs est liderado por los los pases industrializados como Estados Unidos; pero los pases en desarrollo tambin se encuentran a la vanguardia con investigaciones en este campo. Pases como Argentina, Brasil, China, Cuba, Egipto, India, Mxico y Sudfrica estn abriendo camino.Cuba, pas que integra la avanzada de las investigaciones biotecnolgicas en el mundo, desarrolla importantes investigaciones relacionadas con la aplicacin de la Ingeniera Gentica para la obtencin de OMGs destinados a la alimentacin y asume esta responsabilidad con total rigor cientfico y mxima proteccin a los consumidores y el medio ambiente.En Cuba se han realizado inversiones significativas en el desarrollo de la tecnologa para la obtencin de OMGs desde la dcada de los 80.

ComercializacinLa comercializacin de los alimentos transgnicos para el consumo humano comenz el 18 de mayo de 1994, cuando la Agencia Alimentaria (Food and Drug Administration) de los Estados Unidos autoriz el comercio del primer tomate "Flavr-Savr" (tomate larga vida), obtenido por la empresa Calgene, con un proceso de maduracin retardada que facilitaba su almacenamiento y transporte a grandes distancias.Actualmente, en el mundo, existen ms de 80 productos transgnicos.La introduccin de estos alimentos en el mercado ha desatado una polmica que, sobre todo, enfrenta a consumidores y organizaciones ecologistas con las grandes multinacionales que los distribuyen. El problema es complejo y no se puede abordar de una forma sencilla ni general.

Posibles beneficiosLos beneficios de los alimentos transgnicos estn directamente relacionados con los objetivos de la modificacin gentica, los mismos se pueden agrupar en tres grandes grupos:Consumidores. Responden mejor a las necesidades nutricionales y alimentarias, y a las preferencias del mercado, prevn enfermedades, son portadores de vacunas, presentan mejores caractersticas sensoriales y mayor disponibilidad de alimentos.Productores. Son organismos genotpicamente mejor adaptados a factores ambientales adversos, tienen crecimiento y desarrollo acelerado, lo que permite una intensificacin de la produccin y reduccin de los costos; el retardo del proceso de maduracin posibilita tener una mayor vida de determinados alimentos; tienen resistencia a los herbicidas, las infecciones microbianas y las plagas por insectos.Medio ambiente. Permiten el uso ms racional de la tierra, el agua y los nutrientes, disminuye el empleo de sustancias quimiotxicas como fertilizantes o plaguicidas.

Posibles riesgos No obstante sus beneficios atribuidos, algunas de las crticas que se le formulan a esta ciencia fundan sus argumentos en la potencial incapacidad de predecir lo que pudiera ocurrir al introducir organismos modificados genticamente en el medio ambiente o en la dieta alimenticia. As, los posibles riesgos, estn relacionados con su repercusin sobre la salud humana, el impacto sobre el medio ambiente y aspectos socioeconmicos. Sanitarios. Se relacionan fundamentalmente con la inocuidad de los alimentos; la presencia de alrgenos; la creacin de nuevas toxinas; el desarrollo de resistencia a antibiticos por bacterias patgenas y los posibles efectos negativos para la salud a largo plazo. Medio ambientales. Se refieren al impacto sobre el medio ambiente a la amenaza a la biodiversidad; la transferencia gnica no intencionada a especies silvestres, la ruptura del equilibrio natural, los transgnicos con rasgos nuevos pueden diferir de sus parientes naturales en sus habilidades para sobrevivir y reproducirse bajo condiciones ambientales variables, pueden interactuar de forma inesperada o no deseable con las comunidades biolgicas locales; el uso indiscriminado de herbicidas, el dao a especies de insectos beneficiosos, etc. Socioeconmicos. Un riesgo socioeconmico es el desarrollo de la biotecnologa en manos de las grandes multinacionales, puesto que el acceso puede limitarse debido a la proteccin por patentes, los productores de alimentos tradicionales u orgnicos puedan ser desplazados. Adems, existe preocupaciones de carcter religioso, cultural y tico.Argumentos a favorLa tecnologa gentica ha hecho posible que los alimentos sean ms nutritivos, introduciendo ciertas caractersticas de plantas y animales, por lo cual se espera que disminuya la mala nutricin de muchos seres humanos e incluso algunos creen que gracias a los alimentos transgnicos, se erradicar el hambre mundo, pues los frutos sern ms nutritivos y grandes.

Las plantas sern ms resistentes tanto a plagas como a insecticidas, lo que permitir que los cultivos se aprovechen al mximo.

De igual manera los animales, aumentaran su resistencia al fro y a las enfermedades, esto ayudara a los campesinos a tener mejores ganancias.Argumentos en contraAunque los experimentos demuestran que la calidad nutritiva de los alimentos transgnicos es considerablemente ms alta, no se ha podido demostrar que estas alteraciones sean inofensivas para el ser humano (alergias, resistencia a antibiticos, etc.

La mayor parte de los insecticidas son fabricados por las mismas empresas que ahora promueven la investigacin gentica; stas cobran por las patentes de sus semillas, por las mejoras que realizaron en el ganado.

Cuando las plantas y los animales desarrollan resistencia a enfermedades o plagas, stas se vuelven ms fuertes y se convierten en un peligro.Semillas cultivadasLas semillas transgnicas cultivadas actualmente, en el mundo, pertenecen principalmente a cultivos como maz, soja y algodn. Una buena forma de medir la implantacin de estos nuevos desarrollos es cuantificar la superficie mundial sembrada con cultivos transgnicos.

La superficie mundial de cultivos transgnicos aument un 7,2 por ciento en 2009, hasta alcanzar los 134 millones de hectreas, segn el informe anual publicado por el Servicio Internacional para la Adquisicin de Aplicaciones Agrobiotecnolgicas (ISAAA, en sus siglas en ingls).

Segn el informe, los pases en desarrollo aumentaron los cultivos con semillas biotecnolgicas en un 13 por ciento, y son liderados por Brasil que registr un incremento del 35 por ciento y super incluso a Estados Unidos.

El 77 por ciento de la soja que se cultiva en el mundo proviene de semillas modificadas, al igual que el 49 por ciento del algodn y el 25 por ciento del maz mundial.Cifras por pasesSegn el informe de ISAAA, Estados Unidos es el mayor productor con 64 millones de hectreas. Le siguen Brasil con 21,4 millones, un 35 por ciento ms que en 2008; Argentina (21,3 millones); India (8,4 millones); Canad (8,2 millones); China (3,7 millones); Paraguay (2,2 millones) y Sudfrica (2,1 millones); Uruguay y Bolivia con 800.000 hectreas; Filipinas (500.000); Australia (200.000); Burkina Faso (115.000); y Mxico (100.000 hectreas). De lejos, se sitan Espaa, Chile, Colombia, Honduras, Repblica Checa, Portugal, Rumana, Polonia, Costa Rica, Egipto y Eslovaquia.Qu opina la FAO?La Organizacin de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentacin (FAO, por sus siglas en ingls), en su pgina web, manifiesta que la biotecnologa es un instrumento igual que el fuego, que puede ser utilizado para cocinar los alimentos o, si se hace un mal uso de l, para incendiar la casa. Por ello, considera necesario aclarar tres puntos.

a) La inocuidad de los alimentos. Hasta ahora no se ha observado, en ninguna parte del mundo, efectos nocivos comprobables del consumo de alimentos producidos con cultivos modificados genticamente. Esto no significa que los nuevos alimentos transgnicos no entraen riesgos. Pero estos riesgos son en esencia los mismos que representan las plantas y los animales mejorados con los mtodos tradicionales. Adems, la FAO considera necesario que cada nueva variedad transgnica de cultivo o de animal se someta a prueba individualmente, con mtodos cientficos rigurosos, a fin de observar sus posibles beneficios y riesgos.

b) La ayuda a los pobres. Es cierto que los principales inversionistas y creadores de cultivos y ganado transgnico son grandes empresas privadas. Sin embargo, nada impide que grupos del sector pblico, como los gobiernos, las universidades y las instituciones de investigacin agraria, utilicen la nueva biotecnologa para crear variedades de plantas y animales que puedan beneficiar a los agricultores pobres.

c) La necesidad de la biotecnologa. Para poner fin al hambre en el mundo es imprescindible esta tecnologa? Tal vez s, tal vez no. Pero nada justifica abandonarla. La biotecnologa puede ayudar a las personas pobres y a las que sufren de hambre en el mundo.