La versión del cuento de Navidad ecologista.

Érase una vez un viejo rico, tacaño y contaminador , que era el director de una fábrica de papel. Se llamaba Yoricoco. Sus empleados, por el contrario, eran jóvenes, pobres, simpáticos y ecologistas. El había despedido ya a 100 de sus 200 empleados porque hacían papel reciclado, y los que quedaban lo hacían en secreto.

Se acercaba el 5 de junio, y los empleados dijeron: - Mañana es el día del medio ambiente. Y Yoricoco contesto:- Puf, a mí eso no me importa. Venga, haced estuches de piel.- Pero los empleados, muy astutos, utilizaron pieles falsas.

Por la noche, Yoricocopudo ver como el manillar de la entrada a su rascacielos privado, se convertía en lata y luego en manillar.

Luego vino el espíritu de su socio, Juaqueto, con cadenas. Y le dijo:

-Si sigues mi ejemplo, contaminar, tendrás unas cadenas como las mías, y si es posible, peores. Escúchame, te visitaran 3 espíritus.

Y se fue flotando.

En la habitación de Yoricoco había una cosa rara vestida degasolina y Yoricoco pregunto: -Eres el espíritu de la tierra futura.¿Verdad?- El espíritu no respondió. Le agarró muy fuerte y sevieron en una nube de humo, se encontraron en una especie decementerio-vertedero. La gente era de color azul. Y dijo Yoricocollorón: -No,No,No-

Vamos a hacer un mundo mejor, se dijo Yoricoco. Salió afuera y en una plaza no solo vieron sus 100 empleados, sino que eran 200. Yoricoco traía contaminación y dijo: ¡Vamos a reciclar, vamos a hacer un mundo mejor!

30 años después, Yoricoco murió, pero su granitode arena pasó a su nieto, que trabajó en unacompañía contra la caza. Él no tenia coche, comosus amigos, tenía una bicicleta tirada por uncaballo.

Cuando el nieto de Yoricoco murió, se convirtió enel espíritu medioambiental condicional. Enseñabaa la gente, como su abuelo, a cuidar al medioambiente.

100 años después, se fue la contaminación del mundo y la niña hippie, el gigante de la barba verde y la cosa rara vestida de gasolina celebraron una fiesta.