villada, zacarías g. - paleografía española

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L;

PUBLICACIONES DE LA REVISTA

DE FILOLOGA ESPAOLAVOLMENES PUBLICADOS

INTRODUCCIN AL ESTUDIODE LA LINGISTICA ROMANCE POR W. MEYER-LUDKETRADUCCIN DEIIA.

CASTRO

ANTOLOGA DE PROSISTAS CASTELLANOSPOR RAMN MENNDEZ P!DAL

III

MANUAL DE PRONUNCIACINESPAOLAPOR TOMS NAVARRO TOMS

IVLA VERSIFICACIN IRREGULAR EN LA poesa CASTELLANAPORP.

HENRQUEZ UREA

VLA ORACIN Y SUS PARTESPOR RODOLFO LENZ

VI PALEOGRAFA ESPAOLAPORZA'

ARAS GARCA VXLADA.

S.

I.

GJl..sTA

PARA AMPLIACIN DE ESTUDISE INVESTIGACIONES CIEXTiFlCAr'

CENTRO DE ESTUDIOS HISTRICOS

ZACARAS garca VILLADA,

S. I.

paleografa espaolaPRECEDIDA DE UNA INTRODUCCIN SOBRE LA

paleografa latinaE ILUSTRADA CON VEINTINUEVE GRABADOS

EN EL TEXTO Y CIENTO DIEZ Y SEIS FACSMILES

EN UN LBUM APARTE

TEXTO

MADRID1923

Blass, Soc. An.

TipogrfUa. Xez de Balboa,

21,

Madrid.

ADVERTENCIA PRELIMINARHace aos tena 3^0 el proyecto de dar a luz un compendio de Paleografa Espaola. Al fin lo he logrado, despus de no pocos sudores. En los ltimos tiempos hahabido extranjeros que han estudiado a fondo nuestra minscula visigoda, o sea, parte de nuestra escritura; pero en Espaa se ha descuidado bastante toda esta ciencia auxiliar de la Historia; y desde los trabajos de Muoz y Rivero, que datan de los aos 1881 y 1889, no se ha hecho nada de conjunto, verdaderamente serio, sobre tan importante disciplina. No cabe duda que el eminente profesor de la suprimida Escuela Superior de Diplomtica merece todo gnero de elogios por elesfuerzo que su obra significa.

De

hecho, ella ha sido la

gua de cuantos han querido aprender a leer los cdices y documentos espaoles en los ltimos cuarenta aos;

pero a nadie se

le

oculta que estos trabajos estn yala teora,

en parte anticuados, tanto en

como en

el

mtodo

dela

reproduccin de los grabados. Deseando recoger los ltimos resultados obtenidos enla

Paleografa Espaola y ofrecer modelos directos y

autnticos de sus diversas letras, he emprendido estetrabajo,la poca romana hasta el embargo, como la escritura espaola no naci espordicamente y como por ensalmo, sino que se deriv de la romana y se desarroll paralelamente a las escrituras de los otros pases europeos, llamadas naci-

que abarcar desde

siglo XVII. Sin

VI

ADVERTENCIA PRELIMINAR

nales, he juzgado conveniente tratar en la introduccinla Paleografa Latina en general. A continuacin entro de lleno en el estudio de la Paleografa Espaola, dividindola en cuatro perodos, a saber: A), el romano, hasta

de

el siglo viii; B), el visigodo,

C), el

de

la letra francesa,

hasta la mitad del siglo xii; que empieza en Catalua con

el siglo rx, y en otras regiones con el x, xi y xii, degenerando en el xiii en la escritura gtica, que da lugar a la llamada de privilegios y albalaes; y D), el de los siglos XIV al XVII, en que dominan la escritura gtica, humanstica, cortesana y procesal. Cada perodo se divide, por lo comn, en dos partes: en la primera se estudia la mi-

nscula, y en la segunda, la cursiva. El libro tiende a dar una pauta para aprender aleer,

ferencia

para conocer nuestra escritura en cuanto se dide las dems, y para establecer aproxima-

damente

las reglas que han de servir para fijar la fecha de los manuscritos. Por eso en los ejemplos he procurado escoger cdices y documentos fechados, a po-

dereste

ser,

y pertenecientes ael

las

distintas regiones.

De

modo

trabajo ser de utilidad al palegrafo, al

investigador y aun al fillogo. Los ejemplos tienen adems el mrito de estar sacados de las obras ms importantes de nuestra poca medieval

y ofrecer una serie de diplomas de los Reyes de Asturias y Len, desconocidos en su mayora. He indicado ya que lo que ms adelantado est es el estudio de la minscula visigoda. Por otra parte, sta, junto con la cursiva de la misma especie, es nuestra escritura verdaderamente nacional. A nadie, pues, extraar que me detenga de un modo particular en su examen. Sirva esto tambin de justificante a la insercin de la lista de los cdices visigodos hoy conocidos; la cual puede ser un avance del Corpus ManuscriptorumWisigofhorwn.

ADVERTENCIA PRELIMINAR

dominantes entre el siglo xiii y el hay an trabajos monogrficos suficientes; y en las lneas generales he tenido que atenerme a los resultados de Muoz y Rivero; salvo las advertencias quelas escrituras

De

XVII no

yo he podido anotar en

el

estudio directo de los cdices

y documentos de este perodo. La transcripcin de los modelos es paleogrfica; y, por lo mismo, lo ms conforme posible con el original. Cuandopor razones de impresin, o por otra causa, se ha juzgado conveniente modificarla, se advierte siempre. He subra3'ado la v sobrepuesta de los manuscritos espaoles, por ser una grafa propia y nica de ellos, en vez de t(. La obra consta de dos volmenes, a saber: I, Texto,

y

II,

lbum.el

En

texto van veintinue\"e grabados, que pondrn an-

te la vista del lector alfabetos

y signos

difciles

de explicar

de otra suerte.

En un lbum

aparte he reunido los ciento

diez y seis facsmiles en fototipia

que servirn de modelo

y para el ejercicio de lectura. He preferido darlos en un cuaderno separado, a fin de facilitar el manejo. As podrel

lector tener simultneamente ante los ojos sinel

ningn

esfuerzo la reproduccin ototpica,

texto explicativo

la transcripcin. En esta ltima tarea y en la correccin de pruebas me ha ayudado mi discpulo en el Centro de Estudios Histricos, Bienvenido Martn Garca.

y

I

INTRODUCCIN

paleografa latina en general

CAPITULO PRIMERO

NOCIONES GENERALESI.

Concepto de la Paleografa. 2. Su origen y desarrollo. 3. Abreviaturas de las obras citadas en el Manual.

1.

'ouQe\)to. PaleografazaKriL'A-

viene

de las vocesescrituras

grie-

gas

= antiguo,

y

(p'-y/^r,

= escritura. En su esencialas

es la

disciplina

que trata de

antiguas.

Tambin dedela

esto habla la Epigrafa, pero se diferencia

Paleografa en que aqulla se ocupa exclusivamente

de las escrituras esculpidas en un elemento duro (metal,piedra, etc.), grabadas con buril y hechas de suyo con

monumental. La Paleografa, en cambio, trata de trazadas sobre un elemento blando (cera, hojas de rbol, papiro, pergamino y papel), con un instrumento ms dbil (estilete, clamo, pluma), pudiendo ser su texto variadsimo y de cualquier argumento. Sefin

un

las escrituras

el material empleado, por el instrumento de que se sirven para la ejecucin y por el asunto de una y otra. Sin embargo, la diferencia no es

distinguen, pues, por

esencial,

aunque suficientemente caracterstica. La Paleografa puede considerarse en s misma o comos

ciencia auxiliar de la Historia. Si se la considera en

mismato

tiende a dar a conocer

el

origen y desarrollo dedel entendimienel

las diversas escrituras

como producto

humano. La Escritura fu inventada por

hombre

para transmitir sus hechos y pensamientos a las genera-

INTRODUCCINciones venideras, y ha sido durante muchos aos, sobre todo hasta la invencin de la imprenta, y aun siguesindolo en parte, el vehculo dela

cultura.

En

la

Paleografa ha pasado algo parecido a lo que sela

nota en otras disciplinas, sealadamente en

Pintura.

Ha

habido distintas

escuelas.

No que haya

escrituras

independientes unas de otras, como se crey algn tiempo, sosteniendo que las escrituras llamadas nacionales,es decir, la merovngica, longobarda, anglosajona, visi-

goda y Carolina fueron inventadas de nueva planta por los pueblos cuyos nombres llevan, sino que en cada uno de los pases habitados por esos pueblos obtuvieron nuevas formas y modalidades, que las distinguen uasde otras.

El estudio de esta divergencia es indispensable para fijar con precisin la escuela a que la escritura pertenece. Un palegrafo debe llegar a poder distinguir

poder

a simple vista

el

carcter de

una escritura, y hasta

el

lugar y tiempo en que fu ejecutada aproximadamente, como lo hace un artista con los cuadros.

Ensaber:

la escritura latina seel

distinguen tres perodos, a

romano, que abarca desde los orgenes hasta el siglo vii; el de las escrituras llamadas nacionales, que va del siglo vil al xii, y el tercero, que comprende desde el siglo xii, en que se introduce en todas partesla letra

Carolina, hasta la invencin de la imprenta.este tiempolibros,

Durante todolibrara,

hubo dos

escrituras, la littera

para losy

y

la litiera episiolaris,

para los

usos cotidianos, o sea la caligrfica capital y minscula])ara el cdice,d(js sela

cursiva para el documento.el

Ambas

a

diferencian tanto por

material empleado para

cada una de ellas, como por la mayor o menor perfeccin de sus rasgos. El cdice, que contena obras de cultura general y tena que ser ledo por muchos, se confeccionaba en

CONCEPTO DE LA PALEOGRAFAescritorio, con pergamino fino, muy esmeradamente por copistas avezados a este gnero de trabajos. En y cambio el documento, que era por lo general un ttulo

un

no era preciso leerlo sino muy raras veces, trazaban a menudo las partes contrayentes o interesadas, que en algunas ocasiones apenas si saban escribir,jurdico, ylo

o

si lo

aprisa

trazaba un escriba o notario de oficio, lo haca y sobre cualquier pedazo de pergamino. Con la

imprenta fu poco a poco desapareciendo la Hilera lihraria, quedando la cursiva para protocolos y dems documentos. La divisin aqu sealada no es matemtica, y a veces se encuentran cdices en letra cursiva y documentos en tipo caligrfico o minsculo.Paleografa tiene por

Considerada como ciencia auxiliar de la Historia, la fin: a), ensear a leer las escrituras

antiguas correctamente y sin defectos; b), determinar el tiempo y lugar en que fu escrito el manuscrito, )' c),

y eliminar los errores introducidos por les copistts. La correccin en la lectura se consigue, estudiando las formas de las diferentes letras, sus nexos y el valor, de las abreviaturas. Hay que acostumbrarse a leer, no guindose nicamente por el sentido de la frase, sino atenindose a las reglas fijas por las que se rige cada es\'er

a).

critura.b).

Para

la

determinacin del lugar y tiempo en que

fu redactado el manuscrito es preciso atender a las suscripciones, a las notas de los copistas y, por fin, al ele-

mento

grfico.

Cada

escritorio ha tenido sus

modalida-

des propias, que se manifiestan palpablemente en los

manuscritos que de l han salido. Por otra parte, al estudiar un cdice, no hay que perder de vista que aquello que tenemos delante no es un mero instrumento material, sino el producto de un ser inteligente, que puso en l todo su saber caligrfico. Mirado de esta suerte, el manuscrito adquiere mayor valor y nos induce a in-

INTRODUCCINdaj^arel

sitiolo

de donde procede,el

el

escriba e iluminasi

dor queta el

ejecutaron,

siglo,

y,

es posible,

has-

ao y da en que fu empezado y acabado. Este nuevo aspecto de la cuestin da bien a entender la importancia que tiene el estudio de las bibliotecas medievales y el de las escrituras llamadas nacionales. Y este estudio es tanto ms necesario, cuanto que en la Edad Moderna cisi todos los fondos de manuscritos estnfuera de su lugar primitivo. Recurdese,el

como ejemplo,

material reunido hoy da en

la

Biblioteca Nacional de

Madrid, que procede de casi toda Espaa y aun de Italia. Finalmente, la Paleografa nos ensea a eliminar c). los defectos introducidos por los copistas en los manuscritos.

transcribir

Es un hecho probado por la experiencia que al un texto se escapan involuntariamente alel original.

gunos errores que no estaban en

Esto ha su-

cedido siempre y suceda en la Edad Media, sobre todo cuando el escriba tena delante para copiarlo un libro

de letra distinta de la usada en su escritorio. Traube ha hecho notar a este propsito la confusin que los copistas del Continente han introducido en varios textos,

tomando

la

abreviatura insular o anglosajona de auiem,la del

tan parecida a

tura de este ltimo demostrativo

por abreviaEl ms. de la Biblioteca de Menndez Pelayo, en Santander (R. -I. -9-34), que contiene las poesas de Fray Luis de Len, est llenoadverbiohic, hace, hoc,(i).

de estos defectos, debidos a

la

ignorancia del copista.

Baste aducir el de la estrofa sexta de la Profeca del Tajo, donde, en vez de Ya dende Cdiz llama, escribe: Ya

dende Cliz llama.2.

Origen y desarrollo. El estudio de

la

P.ileograael c-

tuvo su origen en una controversia, suscitada por

(i)

ZFH.

pg. 12.

C.

Garca Villada,

MCH,

pg. 203.

.

ORIGEX Y DESARROLLO DE LA PALEOGRAFA

7

lebre bolandista Papebroch, quien, en 1675, public una disertacin negando la autenticidad de la maj'ora de

diplomas medievales, especialmente de los merovnA defender su autenticidad sali el benedictino Mabilln, dando a luz en 1681 sus De re diplomaiica libri VI. Aunque ste trata en su obra principalmente de la Diplomtica, no deja en olvido la Paleografa. Distingue cinco clases de escrituras, que llama nacionales, alos

gicos.

saber:

la

romana,la

la

gtica,

la

longobarda,

lala

angloidea de

sajona y

merovngica, apuntando tambin

la Carolina.

no estaba mal hecha. En lo la independencia mutua de esas escrituras, juzgndolas como invenciones espontneas de los distintos pueblos, cuyos

La

clasificacin

que err

el

sabio benedictino fu en creer en

nombres llevan. El ao 1708, otro benedictino de la Congregacin de San Mauro, Bernardo de Montfaucn, imprimi su Paaeographia graeca, sive de ortuet

progressii liiterarioii,

primero que estudi los cdices griegos y desterr la clasificacin de Vetus, usada hasta entonces para designar la fecha de los manuscritos, substitu\'ndola por la indicacin precisa del siglo a que cada uno pertenece. Sin embargo, el que dio el \-erdadero paso de gigante en esta ciencia fu el Marqus Scipione Maffei (1675-1755) A l se debe el descubrimiento de los cdices de la Catedral de Verona. El fu el que introdujo la teora verdadera de que no existen escrituras estrictamente nacionales, sino que todas ellas se derivan de la mavscula, minscula y cursiva romanas, con algunas diferencias propias a cada una de aqullas. Los benedictinos Tassn y Toustain recogieron todos estos resultados en los seis volmenes del Noiiveau traite de Diplomatique, publicados de 1750 a 1765. En el siglo xix se sistematiz en las principalescabindoleel

mrito de ser

el

INTRODUCCIN

naciones

el

estudiola

de tan importante disciplina,

in-

corporndola a especiales parades Charles,

la

Universidad, o bien creando centros formacin de los bibliotecarios y arel

chiveros. As se fund en Francia

ao 1821

la

Ecolcla

y en Austria, en 1854,

el Instituto

para

investigacin de la historia austriaca, calcado en aqulla.

En Alemania, los que ms impulso han dadocia,

a esta cien-

han sido

los

miembros que editan

la

famosa coleccin

Monumenta Germaniaetituida por Csar Paoli,Society,

Histrica, iniciada por Pertz en

1819; en Italia, la Escuela paleogrjica de Florencia, ins-

y en Inglaterra, la Paleographical fundada en 1873, disuelta en 1894 y resucitada de nuevo en 1904. Ms abajo hablar de lo concerniente a Espaa. Ahora voy a indicar algunas obras sobre Paleografa Latina, que pueden ser tiles a los lectores de este Manual, y las siglas con que las sealo aladucirlas.3.

Abreviaturas deel

las

ohras

ms

freouonteinene

ci-

tadas on

Manual.S.

Antoln, CCLE. =Antoln, Guillermo, O.del Escorial.

A. Ca-

tlogo de los Cdices latinos de la Real Biblioteca

Maid,

1910-16, 4 vols., 4.

Beer, //5.=Beer, Rudolf. Handschriftenschatzc Spaniens.Yiena, 1894, 4. Beer, HR. ^Beer, Rudolf. Die Handschriften des Klosters

Santa Marta de Ripoll. l, Viena, 1907;(Sitzungsberichte der Kais.

II,

1908.

Akadcmic der

Wissenschaften in Wien. Philosophisch Historische Klasse, vols. 155 y 158 con 24 facsmiles.)

Beer,

/'C7\=Beer,

Rudolf.est...

Isidori

Etymologiac.15, 8 phototyfol.

Codex Toletanus {nunc Matritensis)pice editus. Praefatus

Leiden, 1909,

(C-

dices graeci et latini photographice depicti duce

Scatone de Vries, tomo XIII.)

ABREVIATURAS DE LAS OBRAS CITADAS

9

Bi'RNAM,

P/.= BuRNAM,

J.

M.

Palaeographia

Ibrica.

Facsmiles de Manuscrits espagnols et portugais(ix-xv sicles)Pars. Fascculo

avec no tices et transcripcions.I,

1912;

II,

1920,

fol.

Chatelain, F5CL.=Chatelain, E. Vncialis scriptvracodicvm latinorvm novis exemplisrs,

illvstrata.

'Pa.-

1901,

fol.

Delisle,

.l/Pf.=DELiSLE,

Leopold.la

Manuscrits

de

l'Ahbaye de Silos acquis parnale.

Bibliothque Natio-

(Mlanges de Palographie et de bibliogra-

phe.

Pars,

1880, pgs. 52-116, 4.)P.

Ewalu-Loewe, SF.=Ewald,scripvrae Visigottcae,

et Loewe, G. Exemplatabvlis expressa.'Q.i-

XL

delberg, 1883,

fol.

Ehrle-Liebaert, 5CLF.=Ehrle,P.

F. S. I. et Liebaert, Specimina codicvm latinorvm V aticanorvm ~ Bonn, 1912, fol. (Tabvlae in vsvm scholarvm editae svb cvra lohanns Lietzmann, 3.) Ewai.d, 7^>S.=Ewald, Paulus. Reise nach Spanien im Winter von 1878 auf 1879 (Neues Archiv der Gesellschaft fr altere deutsche Geschichtskvmde, t. VI,.

1881, pgs. 217-398).

Fktix, 7^S.=FR0TIN, Maris, o.

S.

B. Hisfoire de

l'Abhaye de S/os. Pars,' 1897. 4. FROTiN, Z,C>.=FROTiN, Marius, O. S. B. Le Liber Or-

dinvm en usage dans VEglise wisigothiquePars, 1904, fol.

et

mo-

zrabe d'Espagne du cinquime au onzime siecle.

(Monvmenta Ecclesiae

litvrgica

edidervnt et cvravervnt Ferdinandvs Cabrol, Henricvs Leclercq presbyteri et

monaci benedictini

congregationis gallicae, vol. V).

Frotin, LMS.=Frotin, Marius, O. S. B. Le Liber Mozarabicvs Sacramentorvm et les manuscrits mozrabes. Fars, 1912, fol. (Ibid., vol. VI). Garca Villada, BPLHR. Garca Villada, Zaca-

HINTRODUCCINRAS, S.niensis.I.

Bibliotheca Patriim Latinormn Hispa-

II.I.

Band. Nach den Aufzeichnungen RuRipoll. Mena, 1915 (SitzungsberichAkademie der Wissenschaften in Wien.

dolf Beers.te

der Kais.

Garca Villada,

Philosophisch- Historische Klasse, vol. 169). CCDCL.= Catlogo de los Cdices y Documentos dla Catedral de Len. Mddrid, 1919,4. (con trece facsmiles).

Garca \'illada, C .= etodolo gia y Crtica Histricas. Segunda edicin refundida y aumentada. Ilustrada con 25 lminas. Barcelona, 1921 (Historia Universal redactada por varios especialistas y profesores bajo la direccin de

M

M

Don Eduardo^'ICE^Tl:,

I

barra

y Rodrguez. Tomo I). Gmez Bravo, TPC.=Gmez Bravo,Tesoro potico castellano de

S.

I.

los siglos

XII

a

XV,

ordenado para uso de/(?s.

la

juventud, con diez iacsnii-

Madrid,

1911, 4.^

Loewe-Hartel, BPLH. = Loe\vebliotheca Patriim

G.

Latinorum Hispaniensis.

Hartel, W. BiI. Band,

Viena, 1887, 4.

Loew, 5P.:=Loew, E. a. Studia Palaeographica.

A

con-

tribution to the history of early Latin minuscule

and

to the

dating of Visigothic Mss. with seven1910,8."

facsmiles. Munich,

(Sitzungsberichte

der Koniglich Bayerischcn Akademie der Wissenschaften. Philosophisch- philologischerische Klase.

und

histo-

Jahrgang 1910,

12.

Menndez

Pidal,

CG.=Menndez

Crnicas generales de Espaa.

'Madrid

Abhandlung). Pidal, Ramn.',

1918, 4."

(Con 30 facsmiles en colores). Merino, P.= Merino, Andrs, de las Escuelas Pas.Escuela Paleogrphica o dedesdela

leer

letras

antiguas,

entrada de los Godos en

Espaa hasta nues-

tros tiempos.

Madrid,

1780,

fol.

,

ABRKVIATURAS UK LAS OBRAS CITADAS

II

Millares, DPP.4C.= Millares Garlo, Agustn. Documentos Pontificios en Papiro de Archivos Catalanes. Estudio paleogrfico y diplomtico. Primera parte. Madrid, 1918, 8.^ Muoz y Rivero, PF.= Muoz y Rivero, Jess. Paleografa

visigoda.

Mtodo terico-prctico para

aprender a leer los cdices y documentos espaoles de los siglos V al xii. Obra ilustrada con 45 lminas dibujadas por el autor. Madrid, 1881, 8. Muoz y Rivero, 3/PZ).= Muoz y Rivero, Jess.

Manualsiglos

de Paleografa diplomtica espacila de losal

XII

XVII. Mtodolos

terico-prctico para

documentos espaoles de los siglos XII al XVII. Obra ilustrada con 240 facsmidibujados por el autor, y con numerosos les, grabados intercalados en el texto. Madrid^aprender a leer1889, 4.

Prou, .UPLF.=Prou, Maurice. Manuel de Palographie latineet

frangaise.

3.^^

dition entiremcnt re-

fondue, accompagne d'unPars, 1910, 4.

lbum de

24 planches.

Steffens-Coulon, PL.=Stei-fens,tine.

F. Palographie la-

150 facsmiles en phototypie, accompagns de transcriptions et d'explications avec un expos systmatique de l'hstoire de l'criture latine.Edition frangaise d'aprsla

nouvelle dition alle-

mande par Remi Coulon, O. P.^ars, 1910, fol. Thompsox-Fumagalli, PGL. =Thompson, E. M. Fumagalli,G. Paleografia grecadall'inglese

con aggiunte8.

e

e latina. Traduzone note. Miln ^ 1911,

(Manuali Hoepli),

Traube, A/'5.=Traube, Ludwig. Nominaener Geschichte der christlichennich, 1907, 4. (Ouellen

Sacra. Versuch

Krzung. Muund Untersuchungen zur

lateinischen Philologie des Mittelalters).

INTRODUCCIN

Traube, ZP^.=Traube, Ludwig. Zuy Palaographie utid Handschrijtenkunde, herausgegeben von Paul Lehmann, Munich, 1909, 4. {Vorlesungen und Abhandlungen von Ludwig Traube heraiisgegfben von Franz Boll. Vol. I). Traube, "Z.P/M. =Traube, Ludwig. Einleiiung in dielateinische Philologie des Mitelalters.4. (Vorlesungen... vol. 11).

Munich, 1911,

Upson Clark, C//.=Upson Clark,nica. Fars, 1920,4.

Collecanea Hispa-

(Transactions of the Con-

necticnt Academy of Arts and Sciences, vol. 24). W'attenbach, 5A/.=Wattenbach, G. Das Schriltwesen im Mttelaler. Berln '\ 1896.

Wattenbach, .,

est escrita sobre el rengln, unindose al palo de la

yti

la

delo

ft

Por

que aun subsiste. que hace a la altura deh,

las letrss; a,d, h,I

son ordinariamente cortas;

m, n, o, t, sobrepasan por

ESCRITURA CURSIVA

33

g, p, q, por abajo; c, e, i, r no tienen altura determinada, y /, s suben y bajan muy a menudo de las lneas paralelas. Abreviaturas hay regular-

arriba la caja comn;

mente pocas. Facsmil 4. Ofrece una muestra de escritura cursiva romana del siglo iv. Es reproduccin de un papiro egipcio, conservado en Estrasburgo, (Pap. lat. Argent. i) que mide 27 cm. de largo y de ancho. Contiene una carta derecomendacin a favor de Tefanes, escrita por Vidal y dirigida al gobernador de Fenicia, Aquilio. La tomamos de Steffens.

La escritura presenta los tres caracteres de la cursiva que acabo de describir; trazado corriente de las letras, unin de unas con otras y altura desigual de las mismas. El alfabeto es minsculo, hasta el punto de que slo se encuentra la N francamente mayscula. La a es abiertapor arriba;la h

est invertida, la

c se

compone de

los

dos

semicrculos dichos y es alta; la d lleva a la izquierda la panza, unas veces redonda, otras aguda; la y la / son

un cinco muy prolongado por abajo: forma actual; i es larga y corta; /, parecida a la actual; m y n minsculas tiran algo a uncial; la A' es generalmente mayscula; pero en la reproduccin la escribo siempre en minscula; o muy redonda a veces, otras se cruzan las dos lneas por arriba como en bonif (ln. 3); p, q, r, f, t conformes con las descritas; u completamente redonda por la parte de abajo; es el paso de la f a la u: en la transcripcin conservo la primera forma.largas; la g es casila

h tiene

la

De

la

altura de las letras vale lo expuesto.la

Lectura de

lmina IV:AchjlljoUitaljf

Domjno

fvo

Cvm jn omnibvf

bonif benignita tvaet

f it

praedita

tvm

etjam cholaftjcof

mxime

qvi a

me

cvltore tvo'

hono-

34

INTRODUCCIN

5

qvod honef te rofpicere velit nondvbitodomjnepraedicabiljfqvaproptertheofanen orjvndvm ex civitate hermvpoljtanorvm provinciae thebajdof qvi ex fvggeftjone domini me] fratrifrificentjae tvae tradvntvr

noftrjfilippi

vfque ad officivm domini mej dyfcolj vexatjonem

10

jtjnerjf

qvodammodo

fine ratjone fuftjnere videtur

15

evndem praeterevntem more honeftatjf tvae benigne et hvmane refpicere dignerif jvro enim falvtem commvnem et jnfantvm noftrorvm qvod enim eodem mjnime ptente benjvolentjae evndem ininvendvm pvtavi domine dulciffime et ver amantiffime beatum te meiqve amantem emper gavdearjnimjtabjlj reljgioni tvae trado vt

En ellio

dorso va

la direccin:

Domino

fuo? (meo?) Achil-

->,-(SJ.(ovO

Ooiv3!zr,;

Uitalis

Lminas de8, 9;

escritura cursiva:

Ehrle- Liebert, SCLV.4, 5, 8, 9, 11, 13, 16, 22,

Steffens- Coulon. PL.,

23, 24.

Semiuncial. Esta escritura, segn lo indica el 16. nombre, es en parte uncial y en parte no. Su elemento esencial lo constituye la cursiva; de modo que es una escritura propiamente minscula, al paso que la uncial es mayscula. La letra mayscula ms persistente en la semiuncial es la N, y en algunos manuscritos, la S, Como sucede en la muestra V que doy como ejemplo. En los cdices ms antiguos h, m y n son parecidas alas del tipo uncial

por su redondez, pero en los posteriola e ella

res son cursivas.lar

En

remate de

la lnea

semicircu-

de arriba se une aojo.la

barra horizontal del medio, for-

mando un

La g

al principio es uncial,

y dura algn(facs. 5,9),

tiempo con

misma forma,

v. gr., exigerit

ESCRITURA SEMIUNCIAL

35

ms

tarde

toma una

figura algo semejante a

un

3,

como

El martllete de la r desciende hacia abajo onduladamente segn se ve en indubitanter (facs. 5,1), confundindose a veces toda la letra con la n mien regno(facs. 16, 3).

nscula,es

como en pe^mane/'ent (facs. 16, i). La s, cuando minscula, se compone de un palo vertical largo y de otro que describe un arco hacala derecha, mulierif (facs. 5, 2). En el facsmil 5 se advierte 5'a el uso de la/ alta

/am

(ln.

i),

/N

(ln.

14).

Las abreviaturas son casi las mismas que en los cdices de letra uncial. En nuestra lmina V se notan la p cruzada en su palo vertical con una barra horizontal para indicar pgy en p^rsonarum (ln. 2), la m substituida por un trazo en forma de 5 echada, como en la palabra anterior, en prefatuw (ln. 3), autem (ln. 7)...; ^s por (\ue en propnqwe (ln. 6); b cruzada por una barra, igual hitsen uerberibtts(ln.

11).

Ligaduras de las letras. Las de la uncial y algunas ms. En nuestra lmina V se hallan las siguientes: NT, VR, noscuntur (ln. 3); OR, fortasse (ln. 9), uxorem (ln. 10), filiorum (ln. 22); o, agnofcens (ln. 15); ON adsertiowe(ln.

22);

al

,

dehuerat

(ln.

27).

Lo ms antiguo escrito en semiuncial son unos fragmentos de las Instituciones de Gayo, descubiertos porao 1898 en la Biblioteca del Seminario de Autn. La edad de oro de esta escritura se extiende delChatelainsigloel

V

al VIII.5.

Facsmillatino

Est

sacado del Cdice Vaticano Reg.

1024, folio 49 r., que contiene las leyes de los visigodos. Traube (i) lo cree de origen espaol, fundado

en

las

abreviaturas nsi,lagella.

fia

nostri

y

Upson Clark

con un trazo arriba por (2) aade a estos indi-

(i) (2)

N5. pg. CH. pg.

221.,127.,

36

INTROnfCClNla

cios

g uncial visigtica yAelegerit(ln.

(ln. 8),

14).

las grafas, iscripturam El cdice contiene las leyes

describi

de los Visigodos y pertenece al siglo vii u viii. Lo y utiliz para su edicin Zeumer en Monii-

menta Germaniae Histrica,

Legiim Sect.

I,

tomus

1,

Hanovre-Leipsic, 1902. La lmina V encierra parte del libro IH, 6, 2 de la Lex Wisigothorum. Ne iner coniigesdiuortiumjiat.

Transcribo en minscula F, L, N, S, que suelen ser maysculas y alguna R que tambin lo es.facultatem eius indubitanter obtineant. lam uerosi

predictarum

p/'sonaru;;; uel uiri ucl mulieriffilii

secundum prefatum ordinem5

dcesse noscuntur

contente mulieris hereditatem tune recte propinquis eius capiendi licitumcrit. si

que uindicatur spernentisliter

uiri

despectum propinpresumtioncm legamaritusaute;;;

condemnandam

institerint.

qui uel diuortii uel securitatis a coniuge iscriptura;^/

10

quawlibet exigerit seu fortasse non exigens contemta tamen uxorem. aliam sibi uxorem adsumsit. ducentis

publice uerberib/s flagellatus ac turpiter calua-

tione fedatus aut perpetuo

condemnetur

exilio

aut15

donare ilium cuicumq? 39- 42, 47' 49. 58>

73,

75, 86, 93, 96, 102,

104, 129, 131, 133, 137, 140, 141, 142, 143, 144, 146, 149,152, 153, 154, 155, 156, 158, 160, 162, 165, 166, 180, 183,

196, 204, 205, 210, 211.

Siglos

IX-X: Nmeros

de

mi

lista,

11-12, 29, 30,151, 176,

33,

51, 82, 87, 91, 112, 117,

126,

130,

131,

195,

202, 206, 207, 209.

Siglo X: Ntmeros de

mi

lista, 4, 7,

10, 14, 15, 16, 17,

21, 35, 38, 40, 46, 55, 57. 62, 63, 64, 69, 77, 78, 79, 89,

90, 92, 94, 95, 97, loi, 105, 106, 123, 136, 147, 161, 169, 188, 189, 190, 191, 192, 198, 199, 208, 212, 213, 218,

219. Siglos

X-XI: Nmeros

de

mi

lista, 24,

25, 56, 68, 110,

159, 178, 197, 203.

Siglo

XI: Nmeros de mi99,

lista,

9,

19, 20, 28, 65, 66,

67, 70, 72, 80, 81, 98,

100, 116, 118-119, 120, 124,193, 194,

128, 134, 157, 171, 172, 173, 174, 177, 181,

220.

Siglo

XII: Nmero de mi

lista,

179, 219.

MINSCULA VISIGODA DEL SIGLO VIH AL

XII

CAPITULO IX

DESARROLLO INTERNO DE LA MINSCULA VISIGODA3'. Caracteres generales:c), a), letras; b), nexos y ligaduras; abreviaturas; d), puntuacin; e), ortografa 33. Caracteres especficos que la diferencian de las otras escrituras nacionales. 34. Reglas para fijar la fecha aproximada de los cdices visigodos.

33. Caracteres

generales:

a),

letras. ha.

minsculaxii.

visigoda tuvo su comienzo enelx,

el siglo viii,

su apogeo, en

y su decadencia, en

la

primera mitad del

Exa-

minemos cada una de las letras en particular. a. La a es abierta por arriba, como en las dems escrituras nacionales, asemejndose mucho a la u. Se compone de dos especies de ees unidas por abajo, y sedistingue de la u, ante todo en que los dos trazos de la a rematan abajo en un semicrculo, mientras que el

primer trazo de la u remata abajo por un ngulo y el segundo verticalmente sin ondulacin de ningn gnero: adems, el segundo trazo de la a se une a la letra siguiente, cosa que no pasa con el segundo trazo de la 11. Aparte de esta a, que es la comn, se us alguna vez la a cursiva, que se parece a una psilon, colocada encima del rengln y unida a la letra siguiente, v. gr. Dan, partem, etc.(facs. 18, Is. 10, II, 15);

otra en forma de omega,Is.

como eny

parentela, lnea (facs. 20,

13,

20); otra entre psilon

130

PALEOGRAFA ESPAOLA

ALFABETO DE LA LETRA MINSCULA VISIGODA

CARACTERES DE LA MINSCULA VISIGODA

13I

omega, desligada delauirt (facs.

la letra siguiente,

segn se ve en

26b, 27), y finalmente la uncial, mente, V. gr., a cebron, disciplina (facs. i8,b.

aunque rara1.

14; 27b, 6).

Hay

dos clases delo lleva

y otra quelante.

una que tiene el ojo abierto cerrado. La primera se emple hastab;

principios del siglo x,

y

la

segunda, de entonces en ade-

Por

lo

que hacela

al palo vertical se

observa que en

los siglos VIII, IX

y principios del xI alta,1.

es por arriba

ms

grueso que por en los palos desiglo

parte de abajo. Esto

mismo

se nota

primera mitad del y en su punto de arranque lleva un tracito transversal que le da bastante gracia. Este es uno de los criterios para distinguir la fecha de los cdices. c. La c no tiene nada de particular, siendo muy pala d, h, la

En

x aparece ya

este palo

ms fine

e igual,

recida a la actual.d.

Existen dos clases de

d,

usadas indistintamente;

uncial y la minscula, que es como la nuestra. Sobre la evolucin del palo vertical de la minscula vase lola

dicho en lae.

b.

la uncial, comun trazo horizontal en medio, y otra y es semejante a una psilon griega; ambas sobrepasan generalmente la caja comn del rengln. Desde muy tem-

La

e

presenta dos formas, una esc

puesta de una

prano se emple la e por ae. El palo de la / se alarga bastante por debajo de la f. caja ordinaria, y arriba forma un arco, que casi siempre sobresale algo por encima de las dems letras, v. gr., /ratrcs (facs. 17, 1. 9)... En algunos manuscritos, como en el veronense citado, el palo vertical y el punto de arranque del arco forman un ngulo muy agudo; en otros el arco parece prolongacin del palo vertical con un punto a la izquierda del sitio de arranque, v. gr., /luentibus (facs. 18,1.3);

en otros, finalmente, clareo es ciertamente continua-

cin del palo vertical, que lleva al nivel de las otras le-

132

paleografa espaola

tras/iliag.

una barrita horizontal, por ejemplo:(facs.

in/eriori, /ilius,

20,

1.

21).las letras

La g

es

una dela

ms

tpicas

de

la escritura

visigoda. Tiene forma uncial

que

se conserva persistenla letra Carolina.

temente hastaes tanto

introduccin de

Esto

ms sorprendente cuanto quela

en las otras es-

crituras nacionales se desarroll la g semiuncial.

h hay que tener en cuenta lo dicho sobre b. En cuanto al trazo que arranca de la mitad del palo vertical, es preciso fijarse en que hasta principios del siglo x termina en general, aunque hay no pocas excepciones, sin ondulacin ninguna o con una leve ondulacin hacia adentro, V. gr., Mmanae (facs. 17, i), Aelia (facs. 18, i). Luego viene un perodo de transicin; vase hec con ondulacin hacia fuera (facs. 25a, 12), /lostende mM (26a, 15) conh.

Sobre

su

palo vertical al hablar de la

ondulacin hacia dentro, dominando finalmente en

la

segunda mitad delro

siglo

x

la

ondulacin hacia fuera, ver-

bigracia, /iedificationis (facs. 32b, 5), hoc (facs. 33a, 7). Cla-

que hay excepciones; pero stas confirman la regla, la reproduccin 21, que en la primera columna escribe h con la ondulacin hacia fuera, pMlosofus (ln. 2) y en la segunda hacia dentro en loth (Un. 22). Todas estas advertencias hay que aplicarlas a la m y a

como pasa con

la n.i.

alta

y

Tres clases de i hay que sealar; la i corta, la / la / baja semejante a nuestra jota. La i corta es dela ordinaria.el

suyo

Sobre

empleo de

la

I alta ha llegado

Loew

en SP.,

pg. 8, a los siguientes resultados, que en sus lneas generales son absolutamente ciertos:

Primero: al principio de palabra I tiene la forma alta:V. gr.

/am,

Ihi,

/ccirca. Id, /ecit,

/gnem, 7hs,i

/lie,

/m-

par, /n, /ouita, /pse, /ra, 7ste, /tinera, /us, etc.

Hay una

excepcin, y es cuando

la

inicial

va seguida de una

CARACTERES DE LA MINSCULA VISIGODAletra alta, en

1

33

cuyo caso

el

empleo de

la

/ alta no es obli^17,(Is.

gatorio, V.halla 7deo,

gr. ihi, ihs,llic.

'llc.

En

el facs.

i, 8),

se

Segundo: la semivocal / lleva la forma alta, v. gr. ma/as, a/ebat, pro /ca tur, a/t, ga/us, e/us, /e/uniis. Aade Loew que son raras las excepciones a estasreglas,

neraliza demasiado, puessmil

aunque Upson Clark {CH., pg. 78) cree que gehay no pocas, v. gr., 'pse (fac17, 1. 16). Con todo es un criterio interesante y basnotadoal describir los

tante seguro para distinguir Jos cdices visigodos. Porptulo anterior. Advirtase

manuscritos en el cade los manuscritos beneventanos de letra longobarda tambin emplean la I alta inicial, pero con la particularidad que la hacen corta, cuando sigue una letra con un trazo que sobresale, sea por encima, sea por debajo de la caja comn, V. gr., bi, tpse, re, iste, etc, y cuando precede unaeso lo he

que

los copistas

preposicin,

v.

gr.

ad imaginempruebael

(i).

La I

alta se encuentra j-a en los manuscritos unciales

espaoles,

comoque

lo

palimpsesto leons, en queIs.

el

copista escribe Judices, /n (facs. 13,

3, 19)-

Lala

/

baja,

se parece

ms

oti

menosfuerte,

a

se us alguna vez en el sonido

una jota actual, cuando la t lleva

forma de B vuelta, v. gr. humanitatjs (facs. 17, i). Sobre el nexo o ligadura ti en los cdices visigodos ha hecho Loew (2) un estudio de singular importancia. Esla

bien sabido que en la pronunciacin latina de

Edad

media

dos sonidos, uno dental, fuerte y otro sibante, parecido a tsi o a nuestra zi, v. gr. instila slaba ti tenatia (3).

Pues bien:

al principio la

i

de ambos sonidos era

corta

;

pero a partir de cierta poca comenzaron los copisCf.

(i)

Loew, SP. pg.

9.

(2)(3)

pg. 76... Cf. San Isidoro, Etymol.,82, col.

Ibid.,

I,

caps. 27,

28:

en Migne,

PL.

t.

104.

134

PALEOGRAFA ESPAOLA

tas & distinguirla; usando la i corta nicamente para el sonido dental fuerte, y la ; que baja de la lnea comn del rengln, para el sonido zi. Cundo se introdujo esta

distincin?I.*

Loew

establece las siguientes conclusiones:

La

distincin no se encuentra en ningn5'

manus-

de principios del ix. 2.* Se observa invariablemente la distincin en los manuscritos recientes, comenzando en la segunda mitad del siglo x y extendindose hasta el Xii, o sea hasta la extincin de la minscula visigoda. 3.* Los manuscritos comprendidos entre estos dos periodos varan en el uso, guardando un escriba la distincin y otro no, o emplendola en ciertos casos 3^ abandonndola en otros. Ciendo an ms sus observaciones, formula Loew esta regla general: De todo esto se sigue que un manuscrito sin la distincin grfica indicada es segn todas las probabilidades anterior al 894 (fecha del manuscrito thompsoniano 97 que es el cdice ms antiguo que tiene la distincin); si el cdice presenta la distincin de ti y zi difcilmente ser anterior al 894, y en la mayora de loscrito del siglo VIII

casos ser posterior.

Al leer

lo

que precede fcilmente comprender

el lec-

tor la razn por la cual sealamos en casi todos los c-

dices del Catlogo anteriormente dado, si se observaba o no la distincin grfica entre ti y zi; pues es un criterio de suma trascendencia para fijar su fecha. Apliquemos estas reglas a los facsmiles 17-44 reproducidos en nuestro lbum, para ver si se cumple en todo o en parte. Desde luego en el facs. 17 no se hace tal distincin, escribindose lo

mismo(ln.

el ti

de El

diuinita's (ln. 2)

que

el

de misera^'onumel facs. 18.

3).

mismo fenmeno

ofrece

En

el 19,

que

es

y cursiva,

se

observa

la / al

unirse con

mezcla de minscula la t en forma dela ligadurarj.

B

vuelta, v. gr. nalenija.

(col. a, 8) el

y en

En

el facs.

20 no hay distincin; en

21 slo una vez, en la

CARACTERES DE LA MINSCULA VISIGODA

1

35t

palabra aman//us,tiene

(1.

20) con la particularidad

que

la

forma de

B

vuelta. As llegamos hasta el ao 839.22, del

ao 867, muestra ya el prinpues la i del sonido ti asibilado baja algo de la caja comn, segn se puede ver en Inijum deuotjone (col. a, 4, 5) y otros casos; se advierte, con todo, cierta vacilacin en su empleo, pues en neclegentjam (col. a, 10), la i slo baja un poco del rengln y en ahrenuTitiationihus (col. a, 14), es decididamente corta. No cabe, por tanto, la menor duda de que esta escritura pertenece al perodo de transicin. Lo mismo ha}^ que decir de la muestra 23. Esta la he sacado de un cdice del ao 902, escrito por dos manos, una hasta el fol. 44 v. y otra de all en adelante. La primera mano hizo la distincin, la segunda, no; y es curioso ver cmo en el folio 45 rb, que es donde comienza la segunda mano, se ha corregido la * corta en / en las palabras ter^/um (ln. 6), quamto;us (ln. 10), remo/oris (ln. 15). El facsmil 24, del ao 911, slo contiene i corta locuzonis (col. a, 2), etc. En la prueba 25, reproduccin de parte del folio 42 de un cdice del 915, se observa en generalcipio de la distincin,la distincin, pvesenija, ipotjus, aduenien/a, transeun/a...(col. a, 3, 4, 5, 8,

La reproduccin

10, 11),

pero al lado de estos casos se

En los facsmiles 26 y 27, de aos 920 y 924, existe la distincin; no as en el 28, del ao 938, que escribe cogni/one, demencia, graza, pueri/ze (col. b, 15, 18, 23, 25). De aqu en adelante apahaUa construco(col. b, i).

los

rece la distincin regularmente.

De modo que segnestablecer

nuestros facsmilses,i.'*,

podemos

las siguientes conclusiones:

hasta media-

dos del siglo IX no se haca distincin grfica ninguna de la i en ti dental fuerte y ti sibilante; 2.^, desde mediados

de este siglo hasta fines del primer tercio del siglo X, unas veces se hace, otras no; siendo, por tanto, un perodo de transicin; 3.*, desde principios del segundo

136tercio del siglo

PALEOGRAFA ESPAOLA

x hasta

la

desaparicin de la minscula

visigoda existe la distincin en todos los cdices./.

Sobrelo

la evolucin del palo verticalh.

de esta letra

La / se parece algo a la / alta, pero se distingue de ella en que su trazo vertical, al terminar abajo, se vuelve un poco hacia la derecha y se une con la letra siguiente, mientras que el palo devasedicho al tratar de lala /

acaba

recto,

sin

ondulacin ni nexo

de ningn

gnero.

m y n. Acerca del desarrollo de la curva del tercero y segundo palo, respectivamente, vale cuanto se dijo del segundo trazo de la h. o, p, q no tienen nada de especial. r, s. Son dos letras algo semejantes y por eso es preciso estudiarlas conjuntamente. Las diferencias son stas: El martinete de la r arranca del palo vertical en forma de ngulo agudo y termina con un rasgo ondulado que se une a la letra siguiente siempre, v. gr., nature, periculis (facs. 17, Is. I, 2); cuando est al fin de palabra, se alza ese mismo rasgo ondulado un poco hacia arriba, al terminar, V. gr., Igitur (facs. 17,eripiar (facs. 38,1.

1.

12),

socientur (33

a, 10),

13).

En cambiocircular, qut;

el

trazo superior de la s describeletra siguiente

un arcoel final

nunca va unido a

y

ms bien mira hacia abajo, v. gr., futinuit, legef (facs. 17, 1. i). La s pasa en general la caja del rengln, sobresaliendo a veces un poco de ella, como en las reproducciones 17, 18, 21, etc., y otras bastante, comodel trazo

en los facsmiles 19, 20, 35, etc. Por estas razones en transcripcin uso siempre la f alta.

la

Lo quedistinta21, 22).

s

se nota a simple vista es

el

desarrollo de

la s

a travs de los siglos. Al principio su arco es

una cosa19, 20,

adosada

al palo vertical

(facs.

17,

18,

facsmil 23 y, sobre todo, en el 24, se puede perfectamente apreciar que ambos forman una sola cosael

En

CARACTF'.RES

DE LA MINSCULA VISIGODAse

I37

y estn trazados conjuntamente, y que despuscolocado un punto ensiglo XII./.

ha

el

lado izquierdo hacia la mitad

del palo vertical. Esto subsiste sin interrupcin hasta el

Hay que

distinguir tres clases: una, en la

que

la

lnea transversal

forma ala!

la

izquierda una semicircun-

ferencia,

dando a2),

la

apariencia de a cerrada, susfeui

(facs. 17,1. i), otra

semejante a una de

B vuelta, di^etfinc,

(facs-

mil

17,

1.

y

la caracterstica

de palabra unida

a la letra anterior,

que parece una

segn se ve en

la

misma palabra dite. u, V. La u no tiene nada de

especial, pero con rela-

encima del rengln, aunque no haya abreviatura; y en estos casos lleva la forma de v. Es sta una de las caractersticas de la estiva frecuencia se halla sobrepuesta

critura

espaola, anterior a la visigoda, pues ofrecenla letra uncial del

ejemplospli,

Palimpsesto de Len qvadrucdice del Escorial del

qvinque

(facs. 13, Is. 3, 19), el1.

siglo VII, optin7;it (facs. 14,

15);

y luego todos1.

los cdices

visigodos, derclinqi'entem (facs. 17,10),X.

11), qi^asi (facs. 37a,

loquebattT

(facs.

41b, 10).c al

Esta letra est formada de unaizquierdo de

lado derecho

y

al

un rasgo superiorA;ps. (facs.

algo inclinado, y

otro inferior

que

se prolonga bastante por debajo17,1.

de

la

caja del rengln..

15).

Particular a esta delos

escritura es el signo de x con

recha, parecido afacs. 18,y.1.

una L, que

un remate en la c de la significa XL. Vanse

29; 2ia, 6; 24b, 7.

Es una de las letras caractersticas tambin en minscula visigoda. Su forma es semeiante a nuestra inayscula. Se usa en los nombres de origen griego,la

martl'rem (facs. 17, 1. 23; facs. 32b, 4); a veces en la semivocal, loYca (facs. 27a, 6, ii),laycus (facs. 34a, 7); l nombre de San Isidoro en ocasiones la lleva al principio, Ysidorus (facs. 31a, 11), hYsidorus (facs. 31b, i, 15)

138

PALEOGRAFA ESPAOLA

y

el

de Egipto y algunos otros nombres escritursticos,(facsmil 35,1.

como sYonz.

11).

tendiendo a formar con caja comn, y con el inferior un ziszs: ga^am, a^otum, iferium (facs. 18,es gacha,c

Primitivamente

el

trazo superior

una

sobre

la

lins.

24,

25, 35).

En

ezecie,

ebedei, 2:accariae,

la^ar

un punto arriba, que pudo dar lugar al copete, que se halla completamente formado en elipha^: (facs. 26a, 19, 27). Sobre el desarrollo de(facs.

2ib,

I, 5, 7, 20),

lleva

esta letra hablar al tratar de la cursiva. Se us para los

nombres extranjeros y

los

verbos en

zare.

Al lado de

ella

existe la z gacha, zosimi (facs. 34a, 16).b). Nexos y ligaduras de las letras 1^^. a va siempre ligada a la letra siguiente, salvo raras excepciones,

siendo de notar sobre todo la ligadura de la a sobrepuesta,

que aparece enae,

lae,

muestras,

18:

h,

c,

d no se unen a

la letra siguiente;

en toda suerte de combinacioh,

nes,

&; tambin la

/;

g no; la

i,

sea corta o larga, noel final

se

une a

la letra siguiente

en general, salvo en

de los verbos con la T, v. gr., influ/ (facs. 18, 1. 33); ya he hecho resaltar en cambio el nexo de ti dental, ti sibilante y , cuando la t se parece a una B vuelta; m, n no Se unen a la letra siguiente por regla general; existe, con todo, un nexo de origen romano que sigui en la escritura visigoda, V. gr., fueri (facs. 13,18,1.

1.

2),

su/

(facs.

29),

acceda^/la letra

gada de(facs. 20,

permanece deslisiguiente menos en alguno que otro(facs.

33a, 2); la o

caso raro en on,1.

or, os,

agnoscensr,

(facs. 5,

1.

15),

consensuse ligan

6), liiior

(facs. 36a, 13); p,s;

q

tampocost

con

la letra posterior; la

la s

nunca, salvo excepenla escritura

cin.

Es de advertirel/

la falta del

nexo

visigoda,nales: la

cual existe en las

dems

escrituras nacio-

se

une a

la letra siguiente,

en toda clase deia, te, ti

combinaciones, siendo de notar las deti

dental

3"

sibilante, v. gr., sus/muit, humani//js, ditet, misera-

NEXOS Y ABREVIATURAS

13^

^

>^

(at, et te)

^2l

XT

^^/

(^^'

^^ tercerael

formatiu).

en

sonido sibilan-

te tia, tie, tio,

3

"^

^

(rum,

bis, nis, tis)

^>='

(XL)

(m, n)

t*oj

fe

(l'"^)

T

(que)

NEXOS DE ALGUNAS LETRAS Y SIGNOS ESPECIALES DEABREVIACIN

tionumaparece

(facs. 17, Is. i, 2, 3), consolaz'o (facs. 31a, 15); la

u

se presenta desligadael

comnmente,

nexo

ur, us, ut;

alguna rara vez x est desligada de la letraslo1.

siguiente en las palabras, v. gr., an^rietate (facs. 17,

18),

pero no as en los nmeros romanos3);

(facs.

21a,

i;

34a,

y, z no llevan nexo con.

la letra

que va despus.el

c)

Abreviaturas. Kn la escritura visigoda se enel

cuentran

sistema de

siglas, el

de suspensin y

de

contraccin.

Los signos empleados son los siguientes: para indicar supresin de la m y en medio o al fin de palabra y para las otras abreviaturas por contraccin o sncopa se us el trazo horizontal slo o con un punto sobrepuesto^la

140V. gr., nestre,(facs. 22a, 5),

paleografa espaola

EODEMetc.

(facs. 17, Is. 2,

5J,

cowsummans

la

Para us, ue, y en general para la suspensin, se adapt forma de un punto y coma puesto sobre la caja della(facs.

rengln en

usqwg

18,

ltima palabra expresada, como fluentibus, Is. 3, 9), el cual durante el siglo ix y

principios del

x

se convirti en(facs. 20,6,

una verdadera1.

s,

v.

gr.,

usqw, sequentibMS

27), uirtutibws, diligen(facs.

tiamqw

(facs.

22a,

13), uniuersiq^J6).

23,

1.

7),

oblationibws

(facs.

24a,

La supresin de is se seal con un signo especial por debajo de la caja comn del rengln, cual lo muestran nobs (facs. 18, 1. 18) uobs (facs. 26a, 23). Por regla general se utiliz la para expresar el nmero mil, pero tambin se indic con la / llevando encima un trazo sobrepuesto. Esta letra tom ms tarde, hacia el siglo x, la forma de T. A continuacin doy la lista de las abreviaturas ms

M

tpicas en la escritura visigoda,

sultados de Traube {NS.), en

estudio directo de las

fundndome en los reUpson Clark {CH.) y en el lminas de mi lbum. Por facilique va en-

tar la impresin suprimo la rayita y el punto

cima de

las

palabras abreviadas y se pueden ver en las

citas adi:cidas:

apstls, apstli,

apslm

=

apostohs, apostoli, apo-

solum22b.

(facs.

21b,

3;

13).1.

aum

= ==

a.vitem (facs. 18,a,

8;6;

26

t8,

34;

31b,i;

3622;

a, 5;

37b,(facs.4.)

41a, 19).1.

dan id22b,

18,

do;nn//s,

dowiniindicar

....

para

Dios

ABREVIATURAS DE LA ESCRITURA VISIGODA(facsmiles 17,7;

141

Is.

6,

dms,

dmo

=

2ib, 4; 22a, 3; 26 a. 18; 41a, 5; 42a, 5).

dominus, domino para indicar amo o seor temporal (facsmil 31b, 14).epscopMS...;ral se

epscps, epscs, epcps, epcs

=

en

gene-

suprimen lascaractersti-

vocales intermedias:las

ms

cas son las tres pri-

meras31b,flm, fllmi;

(facs.

2ia, 7;b, 8,

34a, 7;

11; 41b, 22.)fll,

=

agllum: slo se abrevi en Espaa (Traube, NS.,la

pg. 256);

primera forma es11^

una suspensin, lasotras, supresin de

gla

= =

g

y

las vocales.(facs.

glon'a

39,

1.

11;

42a, 7).idest;

ids, idt, idst

la

abreviaturasobrela

carga

se-

gunda palabra, suprimindose siemprela e (facs. 22b, 2;a, 17;

2711)

37a, 20).1.

Ihrsimshrl, srhl, srl

=s Ih^rsalem (facs. 35,Ishiael.

ms, nim

==

xaeus,

meum(facs.

(facsmil

26a, 16, 23).

nmn

nomen

26a,

43;

142

paleografa espaola

27b,

2),

pero tam-

bin se halla(facs.

nomn

18,

1.

12).

nsr, nsi,

nsm

noster, nostri,

nostrum

(facs. 22a, 17; b, 18;8): es propia de Espaa, pero tam-

41a,

bin se hallan las co-

munes a otros pases: nrm=nos^rm (facsmil18,1.

29).

La mis-

ma

advertencia hay

que hacer sobre iiester, de que hay unejemplo enmil 17,1.

el facs-

2.

omnps

omn'po/es, es abrevia-

tura espaola delglo VIII segn

si-

Trau260,

be NS., pg.peroa, 5)

a

su

lado se(facs.

ven omps

41

y otras formas.

^,?//

-per.

Este signo de abreque en las otras escrituras naviacincionales significa pro,es peculiar de

Espaa para indicar per y se encuentra ya en el palimpsesto de Len, sup^rexactionis(facs. 13,1.

12). Tie-

ne tres formas principales, segn se pue-

ABREVIATURAS DE LA ESCRITURA VISIGODA

1

43

de comprobar ensiguientes citas:

las

-per1.

gentibusII)

(facs. i8, (facs.

per

22a,

10), persecutoris (fac-

smil 23,

1.

i),perpei),

tretur (facs. 24b,super,mil.

semper7;1.

(facs-

26a,

b,23),4).

perla

(facs. 30,

En20

reproduccin

y en4,

los cdices, Vitr.

3 de la Bibl. Na-

cional,

Egerton 1934

Museo Britnico, 32 de la Academia dedella

Historia, EscuriaS.I.

lensesI.

16;

S.

17 se ve empleada

la

p cruzada por una

barra horizontal parasealar la abreviatura per,

como sucede en las dems escriturasnacionales.la escritura visigo-

prae, pro

=^

En

da

casi

nunca

se

abrevian estas preposiciones.scs...

=

sanctus.

esta es la

Segn Traube forma or-

dinaria, propia de Espaa. Vanse san-

ctum

(facs. 17,

1.

23),

sawc^i (facs. 28 b, 3;

144

paleografa espaola

41 b,

6), sanctis (fac-

smil 32 a, 5), sanctOj

sanctus (facs. 38, 1.6).

tomndolos de los griegos, emplearon tres signos de puntuacin, el incisum o subdistinctio, equivalente a nuestra coma; la media distinctio, igual a nuestro punto y coma y a los dos puntos, y la ultima distinctio o punto final. San Isidoro da de esto la siguiente explicacin: dice que el signo grfico de la subdistinctio era un punto puesto en la parte inferior del rengln, el cual indicaba que, aunque no estaba completo el sentido, all convena hacer una pausa para respirar. El signo grfico de la media distinctio era tambin un punto, pero colocado en medio de la altura de la caja del rengln, el cual se pona para indicar que la frase tena sentido completo. Finalmente la distinctio, consistente en un punto colocado en la parte alta de la caja del rengln, daba a entender que el perodo estaba completo y el que segua se diferenciaba ya de l por entero (i). San Isidoro se quejaba ya en su tiempo de que no se observaban estas reglas con exactitud. Lo mismo pas en la escritura visigoda postisidoriana. Para la coma, y a veces para el punto y coma y dos puntos, se sirvieron los copistas del punto, o de una rayita vertical y un punto, semejantes a nuestro punto y coma invertidos. Para el punto final emplearon un punto y una comilla un poco ms elevada, o dos puntos y la comilla. Tambin aparece desde muy antiguo en los manuscritos el signo interrogativo, al fin de la clusula. La lnea de puntos debajo de una palabra indica que hay que suprimir sta. Algunos otros signos ms raros y de menord).

Puntuacin.

Los

latinos,

importancia los notare).

al explicar las lminas.

Ortografa.

En

este particular rein

una verdadede

(i)

Etymolog.

lib. I,

cap.

XX,

pg.

1

8

en

la edicin

Ma-

drid de

MDCCLXXVIII

REGLAS PARA FIJAR LA FECHA DE LOS CDICES

I45

ra anarqua.

Con todo,

se

puedenel

fijar ciertas reglas

muy

empleo de ae por e, la confusin de b y -p, b y v, c y q, d y t, g e i, la omisin o aadidura de h. Tpicas son desde los ms remotos tiempos la e con cedilla, por ae, no siendo en el fondo la cedi11a ms que la a colocada debajo; la q en la conjuncin ^uum; la K por c en Karitas; el aditamento de una vocal en las palabras que comienzan con s, como zspiritus, exponte (lm. 13, 1. 30). Algunas palabras de la lmina 22 y bastantes de la 25 aparecen notadas con sus acentos.propias de Espaa, cuales son:33.

Caracteres especficos que difereucian la minscu-

la visigoda de las otras escrituras

nacionales. Van stos

explicados en las lneas anteriores; pero para ma^'or cla-

ridad los resumiremos aqu. Son los siguientes:

En

las letras, la g uncial, la

I

alta, la distincin

de

ti

dental fuerte y ti sibilante, la falta de nexo t, la v sobre la caja comn del rengln, el nmero romano con

X

una

L

enlo

la parte superior del palo alto

de la derechalani,

igual a

Porlinea

y la Y. que hace a las abreviaturas, el empleo de y el punto para. dar a entender la supresin de

XL

n y las sealadas bajo la letra c. Finalmente es preciso tener en cuenta las particularidades ortogrficas consignadas bajo la Ierra e.fecha aproximada de los cdices formulado con bastante acierto Loew (i), y se pueden aceptar en sus lneas generales, aunque con alguna modificacin y reserva. Hay que dis34.fijar la

Reglas para

visigodos. Las

ha

tinguir cuatro perodos:i.

Este perodo est representado por los cdices

ms

antiguos, o sea de los siglos viii y ix [mejor hasta mediados de ste]. En ellos la escritura es muy apretada.(i)

SP, pgs. 80-81.

146

PALEOGRAFA ESPAOLAla

Los trazos desin palotes

son

pluma no son finos. Las letras cortas ms bien anchas que altas. Los arcos de

n, h son bajos, y su ltimo trazo tuerce hacia dentro termina verticalmente en seco]. La separacin de las palabras es imperfecta. El signo de interrogacin es de[o

m,

ordinario

una aadidura posterior. La suspensin hus, que est generalmente indicada por un punto y coma colocados sobre la 6 y la q. Los palos de b, d, h, I, I son muy gruesos, principalmente por arriba. No se hace distincin grfica entreti

dental fuerte y

ti

sibilante.

dices estn generalmente escritos a toda plana

Los cy con

pocas abreviaturas. 2. El segundo perodo abarca desde fines [mejor mediados] del siglo IX hasta principios del x inclusive [todosu primer tercio ] La escritura es menos apretada y.

ms

abultada. Los palotes de las letras altas estn arriba

abultados en forma de maza; las letras cortas sin palotes son ms altas que anchas; el ltimo trazo de m, n, h confrecuencia tuerce hacia afuera [es una poca de transicin].

La separacin de

las palabras es

ms

clara.

Se

emplea el signo de interrogacin. La suspensin de hus, que est representada, ora por un punto y coma, ora, por un rasgo a manera de s. Se comienza a hacer ya ladistincin grfica de3.ti dental fuerte y ti sibilante. El tercer perodo se manifiesta en Jos manuscri-

tos de los siglos

X y

xi [mejor desde el segundo tercio

del siglo

X hasta

principios del xi.] Las letras estn

separadas; los rasgos de lafinos; el

cuerpo de las letras El trazo final de las letras m, n, h tuerce regularmente hacia afuera. Son particularmente caractersticos los palotes de las letras altas b, d, h, I, I, que terminan arri-

ms pluma son con frecuencia es ms bien alto y estrecho.

ba en un pequeo gancho o en una como cabeza de martillo [es un tracito transversal en el arranque del palo vertical]. La suspensin hus, c\ie est sealada por un

REGLAS PARA FIJAR LA FF.CHA DE LOS CODICtS

I47

s, colocado sobre la b y la q] es decir, punto y coma del primer perodo se ha convertido aqu en un rasgo convencional. Existe la distincin grfica de ti dental fuerte y ti sibilante. La f se hace francamente alta. 4. El ltimo perodo [desde principios del siglo xi hasta la primera mitad del xii en que desaparece la

rasgo en forma deel

que

decadencia y tosquedad de las formas antiguas y el empleo de elementos extraos [se entiende carolinos].letra visigoda] est caracterizado por la

En los captulos siguientes doy la lectura y explicacin somera de los facsmiles. Para evitar repeticiones, remito al lector, una vez para siempre, a las reglas de este captulo, que son las que le han de guiar en el estudio. Yo slo har resaltar lo ms saliente de cada una delas reproducciones.

,

.s;v-r-v* '

.

:

/

Transcripcin:

Incipit liber tercius de criminibws. z

eoxum cogwi-

tonibws et alus accM/atonib/s z denuwciat/owibMS

per inquifitonew (i) in parte preceden ti pleniMS explic-

[SJupmus

5

auimws quahVer in ciuilibws fit negociis procedenduw. sed quoniam criminalia indicia fepe reqnentsLntur

et quia publice utile eft ne

maleficia remaneant inpuwi-

10

ta. extra

de sententia.ita

(2)

extra ut

fame(4)

(3) digefta.

adI.

.\egem

aquil'aw.(?)

uuln-ratws.

Rubrica.

maleici

iuxa illwd malfi-

cos

de

pwuidimus noua doctrina aliqua difputare. Ad cuiws rei noticiam prenofcendum eft quod de cripacieris uiuere. id^o utile forteip/is

non

15

.quinqu,

minihus modzs agitur de quihusdiff^re-

-per

fpfciales titwlos

mus

lelicet -per SiCCtfa.tionem. z hoc regulare, ut

Codex ad(i)

En

las lneas

374.

(2)(3) (4)

Decretalium Gregorii IX, lib, II, ttulo XXVII. Ibid., lib. V. ttulo XXXIX, cap. XXXV. Lib. IX, ttulo II, 51.

MINSCULA GTICA DEL I315:legem

319

corneliam de falf/s cum fwbpo/iti. (i) z. Codex ad legem a.laui de plag/ams. (2) .lex iii. p^r denuMciatores ut. Codex de accujcitione. ea

quidem pgrtow^m.

inq/fi-

2. digesta,

de. oficio pra^fidis (3) cowgruit.

exipiendo ut extra20

de ordine cognitionum. capul.notoriis. ut leguwtwr exrahiisz.

11

(4)

cum

fuis con-

cordanciis. z exraordinarie ut in

de

a.ccufa.tione (5)

sup^f capul

m

pyzmi's.(7)

(6).

caput

quahV^r.(8)

ad corrigendos,

z.

euidencia.licet

z de ymonia

ely in pvincipium. (9) Et non quod crimen eft peccatum accM/atone, et dampnatone digniffimum. ut lxxxi. ijtinctio (10)

apo/tolws

25

u&i no/a. pgr q'

GN

^i.

Ka Re^"'

ie'*'

(3- 3 *'"

C\;.(x.(:

SnchezS^'UU/.'

(^^ylS^

(^K"

5

V"''"Sctrc/

A7*T^\& CiZX

-

.

QiUlJfuur

-*Tf'5c

TnturjJ

Qua!Jfuir

V^. .....

TdrCr--

Z..//.-,

j'A

52

V.

.

.

.QucJi.

QiimAii.

C^br^

...

Om

j

_

^-^

l^-^

^~>r\>iC17-\cv ^

.

I.-.-".

'/-'.

^

^

^Ratt^->

X

34^t"'s

l'.M.K()(,KAIl.\

ISI'ANOi.A

tc\S//,'US.

Vallidvec.

Vallrfo/i(l.

veciMo.vuestro.vecino^..

vrovsv*^"

.

veinte.

xpoval xpiano

Cmtval.crisa.no.

No van comprendidas enquese

esta lista las abreviatinas en

suprimen m, n; ar, er, ir, or, ur; ra, re, ri, ro, ni, y algunas ms, fciles de interpretar. A fin de completar la materia, pongo aqu las lminas de Merino, que, aunque algo arbitrarias en algunos perfiles, pueden ayudar al lector a descifrar no {>ocas de las abreviaturas enrevesadas de estos tiempos.103.

Signos especiales de abreviacin. El signofu el de la rayita sobrepuesta. Al

comn

se usaron otros especiales,

cuyo dibujo

ms mismo tiempo nos da Muoz y

y Rivero,tinuacin:

MPDE.,

pg. 94 y 95, cjue reproduzco a con-

Signos que indican palahra entera.

IIGI'KA

\ALUK

y"X

cuii

Q