taller activo de tÉcnicas de estudio

UNIDAD 5

TÉCNICAS DE ESTUDIO

TALLER ACTIVO DE TÉCNICAS DE ESTUDIO

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ÍNDICE

PROPÓSITOS ............................................................................................. 3

PREPARACIÓN PARA LA UNIDAD ............................................................. 4

1. TÉCNICAS BÁSICAS DE ESTUDIO .......................................................... 7

1.1. LA LECTURA .................................................................................................... 7 1.1.1. DIFICULTADES LECTORAS ........................................................................... 8 1.1.2. CARACTERÍSTICAS DE LOS BUENOS Y MALOS LECTORES ............................. 10 1.1.3. ¿CÓMO MEJORAR LA VELOCIDAD DE LA LECTURA? ..................................... 11 1.1.4. LA LECTURA EFICAZ ................................................................................. 12 1.1.5. PRELECTURA ........................................................................................... 13 1.1.6. LECTURA COMPRENSIVA .......................................................................... 14

1.2. LAS NOTAS AL MARGEN .............................................................................. 15 1.2.1. CARACTERÍSTICAS DE LAS NOTAS AL MARGEN ........................................... 16 1.2.2. CÓMO HACER LAS NOTAS MARGINALES .................................................... 16

1.3. SUBRAYADO .................................................................................................. 17 1.3.1. ¿QUÉ Y CUÁNTO SUBRAYAR? .................................................................... 17 1.3.2. ¿CÓMO SE DEBE SUBRAYAR? .................................................................... 18 1.3.3. ¿CUÁNDO SE DEBE SUBRAYAR? ................................................................ 19 1.3.4. TIPOS DE SUBRAYADO .............................................................................. 20 1.3.5. SUBRAYAR LAS IDEAS PRINCIPALES .......................................................... 22

1.4. ESQUEMA ...................................................................................................... 23 1.4.1. CARACTERÍSTICAS DE LOS ESQUEMAS ....................................................... 25 1.4.2. TIPOS DE ESQUEMAS ............................................................................... 26

1.5. RESUMEN ...................................................................................................... 28 1.5.1. CARACTERÍSTICAS DEL RESUMEN ............................................................. 28 1.5.2. CÓMO REALIZAR UN RESUMEN.................................................................. 30

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1.6. LA MEMORIZACIÓN ...................................................................................... 30 1.6.1. TÉCNICAS DE MEMORIZACIÓN .................................................................. 31 1.6.2. TIPOS DE MEMORIA ................................................................................. 34 1.6.3. FACTORES QUE INFLUYEN EN EL PROCESO DE MEMORIZACIÓN .................... 35 1.6.4. ¿CÓMO MEJORAR LA MEMORIA? .............................................................. 36

1.7. EL REPASO .................................................................................................... 37 1.7.1. CARACTERÍSTICAS DEL REPASO ................................................................ 37 1.7.2. FRECUENCIA PARA REALIZAR LOS REPASOS ............................................... 37

CONCLUSIONES ....................................................................................... 39

AUTOCOMPROBACIÓN ............................................................................ 41

SOLUCIONARIO ........................................................................................ 45

BIBLIOGRAFÍA .......................................................................................... 47

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PROPÓSITOS

A lo largo de esta unidad analizaremos las diferentes técnicas de estudio para favorecer en el estudiante el proceso de memorización; así, conseguiremos proporcionar mayor seguridad y favorecer la motivación frente al estudio.

Las diferentes técnicas que veremos a continuación son las siguientes:

La lectura.

Las notas al margen.

El subrayado.

El esquema.

El resumen.

La memorización.

El repaso.

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PREPARACIÓN PARA LA UNIDAD

Antes de comenzar esta unidad sobre las diferentes técnicas de estudio, lo pri-mero que pretendemos es que el estudiante sea consciente de lo que se le va a pedir y, fundamentalmente, que conozca su realidad para que, a partir de ella, pueda trabajar y así mejorar día a día.

Para ello, lo más adecuado es que, al principio, el estudiante reflexione sobre su proceso de estudio y sobre las técnicas que utiliza y sea consciente si realmente son productivas en ese proceso.

Contesta sinceramente a las siguientes preguntas pa-ra conocer mejor tu realidad de estudio.

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Pregunta Sí No A veces

1. ¿Quiero estudiar?

2. ¿Me gusta estudiar?

3. ¿Conozco el grado de dificultad que requiere cada tema de estudio?

4. ¿Estudio todos los días?

5. ¿Tienes claro en qué momento del día vas a estudiar y por qué?

6. ¿Antes de comenzar a estudiar lees el índice o los apartados del material a estudiar?

7. ¿Estudias siempre en el mismo sitio?

8. ¿Al comenzar a estudiar un texto, primero lees todo por encima?

9. ¿A medida que voy estudiando, buscas el significado de las palabras que no conoces o no entiendes?

10. ¿Siempre utilizas la misma o las mismas técnicas de estudio?

11. ¿Intentas memorizar directamente el contenido del tema?

12. ¿Cuándo comienzas a estudiar un tema nuevo realizas una prelectura y lectura comprensiva?

13. ¿Utilizas el subrayado siempre que estudias?

14. ¿Utilizas las notas al margen a la hora de estudiar?

15. ¿Realizas esquemas de cada tema?

16. ¿Realizas un resumen de cada tema?

17. ¿Lo primero que haces a la hora de estudiar es intentar memorizar el tema?

18. ¿Realizas repasos continuos cuando terminas de memorizar un tema?

19. ¿Consideras que realizar notas al margen es eficaz a la hora de estudiar?

20. ¿Te parece útil realizar un esquema y un resumen de cada tema de estudio?

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Baremación:

Cada respuesta que hayas marcado un sí debes puntuarla con 2 puntos, las contestadas con un no debes puntuarlas con 0 puntos y las marcadas con a veces, puntúalas con un 1 punto.

Resultados:

Si tu calificación es superior a 25 tienes adquirido un correcto hábito sobre la aplicación de técnicas de es-tudio.

Si tu calificación es superior a 15 tu aplicación de di-ferentes técnicas de estudio puede mejorar y debes trabajar en ello.

Si tu calificación es inferior a 10 tienes una mala ad-quisición de las técnicas de estudio.

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1. TÉCNICAS BÁSICAS DE ESTUDIO

Las técnicas de estudio son imprescindibles en todas las tareas relacionadas con el estudio y el procesamiento de la información: comprensión, retención, recuperación, etcétera.

1.1. LA LECTURA

La lectura es el instrumento para el desarrollo intelectual y el ejercicio en el es-tudio, es una de las estrategias cognitivas básicas para el aprendizaje significati-vo y autónomo.

El estudiante que posea unas buenas habilidades lectoras tendrá, en general, pocos problemas de aprendizaje y para poder desarrollar estas habilidades es imprescindible que el estudiante tenga motivación por la lectura.

El buen lector sabe combinar adecuadamente la comprensión y velocidad lecto-ra de acuerdo con los objetivos que persigue y la dificultad con el material leído. La combinación óptima entre la velocidad y comprensión permite la lectura efi-ciente que supone entender un texto en un tiempo mínimo.

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La lectura es una de las habilidades más complejas del ser humano. Su aprendizaje constituye un largo proceso que se prolonga durante toda la vida.

Recuerda siempre que a leer se aprende leyendo.

1.1.1. DIFICULTADES LECTORAS

Los malos hábitos lectores son, en una gran mayoría de los casos, los culpables del bajo nivel de comprensión o velocidad lectora, lo cual a su vez influye negati-vamente en el rendimiento del estudiante.

Entre los malos hábitos, señalamos como los más frecuentes:

La vocalización: consiste en leer siempre en voz alta o moviendo los labios aunque no se emita ningún sonido.

El modo más fácil y rápido para eliminar este defecto es introducirse un lápiz o algo similar entre los labios y obligarnos a leer en silencio, pa-sando a gran velocidad la vista.

La subvocalización: se produce cuando al leer se van pronunciando mentalmente todas las palabras, lo que impide realizar una lectura rápida.

Para suprimirlo se debe poner el máximo interés en captar en cada lec-tura ideas y no palabras sueltas.

Las regresiones: consisten en volver atrás para leer de nuevo lo ya leído.

Para superar este hábito puedes superarlo practicando la técnica de la postal, de la que hablaremos más adelante.

Para evitarlo se debe estar concentrado plenamente en el proceso lec-tor y comprendiendo cada frase leída.

Mover la cabeza, seguir la lectura con el dedo: son defectos muy co-rrientes que consisten en seguir con el dedo cada palabra que se va le-yendo.

La forma de suprimir estos defectos consiste en primer lugar en ser conscientes de ellos para poder evitarlos, y en segundo lugar, con la ayuda de otra persona que nos controle de vez en cuando y comprue-be nuestra actitud.

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Exceso de fijaciones: al leer el ojo no recorre una línea continua de una forma regular, sino que lo hace a saltos o fijaciones. Si en cada fija-ción o golpe de vista, abarcamos solo una palabra, el ritmo lector será más lento que si leemos tres palabras cada vez.

Se debe ampliar el campo visual por fijación si queremos aumentar la velocidad lectora.

Un buen ejercicio para reducir el número de fijacio-nes y ampliar el campo visual consiste en leer colum-nas de palabras semejantes a estas.

Al hacerlo es importante que dirijas la vista hacia el punto central de cada renglón.

Si en cada

fijación o golpe

de vista

abarcamos solo

una palabra,

el ritmo lector

será más lento

que si leemos

tres palabras

cada vez.

Tenemos, pues,

que ampliar

el campo visual

por fijación

si queremos

aumentar nuestra

velocidad lectora.

Un buen ejercicio

es leer columnas

como esta.

Vocabulario pobre: dificulta la capacidad lectora. Buenas sesiones de lectura y uso frecuente del diccionario es la mejor forma de subsanar el problema.

Lectura lenta: cuando leemos con lentitud no comprendemos mejor lo leído, sino al revés, cuanto mayor sea la velocidad lectora mejor será nuestra comprensión. Pues cuando leemos lento leemos palabras y cuando lo hacemos rápido leemos ideas, lo que nos permite acceder a una visión más global y comprensiva del texto. Se debe practicar dia-riamente la lectura rápida para mejorar este proceso.

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1.1.2. CARACTERÍSTICAS DE LOS BUENOS Y MALOS LECTORES

El buen lector:

Es capaz de comprender el contenido del mensaje escrito y de juzgarlo (lectura crítica).

Interpreta las palabras escritas, comprende su sentido, capta las ideas y los mensajes del autor, coteja las novedades que el autor le ofrece con los conocimientos que ya posee y valora críticamente lo leído para aprenderlo o rechazarlo.

Lee mucho y está abierto a la experiencia de los demás. Trata de in-formarse sobre las distintas opiniones que han emitido sobre un tema concreto los autores más relevantes y cualificados.

No se deja arrastrar por ideas preconcebidas, ya que es consciente de que los juicios prematuros conducen fácilmente al error.

Se esfuerza por tener, el mayor número de ideas claras y precisas so-bre un tema.

El mal lector:

Es incapaz de centrar la atención en la lectura y pasa las páginas del li-bro sin captar su contenido.

Aunque no entiende lo que lee, sigue leyendo sin profundizar en el con-tenido, y sin entender el mensaje que el autor desea transmitir.

Deja dudas sin resolver ante datos, citas o alusiones.

Posee un campo de visión muy pequeño, de tan solo una o dos pala-bras por fijación. Esto le hace ser lento y regresivo en la lectura.

Posee un vocabulario muy reducido, lo que le dificulta la comprensión del mensaje y entorpece la expresión de las ideas propias.

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1.1.3. ¿CÓMO MEJORAR LA VELOCIDAD DE LA LECTURA?

El ejercicio constante mejora la velocidad de la lectura. A continuación se indi-can algunas de las técnicas más utilizadas:

Ampliación del campo de percepción visual y reducción del número de fijaciones por línea.

Deslizamiento de la vista por la parte superior de las palabras, ya que en nuestro alfabeto la identificación de las palabras es más fácil en su parte media superior que la inferior. Podemos practicar tapando con una tarjeta la mitad inferior de las letras.

Supresión de la percepción de espacios. El lector no entrenado co-mienza a leer fijándose en la primera palabra de cada renglón y sigue haciendo fijaciones hasta la última palabra con que acaba el renglón. Al obrar así, realiza un trabajo inútil de visión, porque abarca con la vista los espacios en blanco de los márgenes a ambos extremos del texto, y pierde la velocidad. El lector entrenado empieza a leer fijando la vista un poco más a la derecha del comienzo de cada renglón, pasando al si-guiente sin hacer fijaciones en la última palabra del anterior, por lo que aumenta su velocidad lectora.

Ajustamiento de la velocidad a la dificultad del texto. Es muy útil va-riar los ritmos de la lectura para coordinar la velocidad y la comprensión.

Primero se lee un texto a la mayor velocidad posible, si preocu-parse de la comprensión.

A continuación se lee otro texto a la mayor velocidad posible, pe-ro tratando de captar el sentido.

Por último, el tercer texto se lee a la velocidad habitual y tratando de comprender lo que se va leyendo.

Se puede controlar el tiempo invertido en la tercera lectura y registrarlo diariamente en una gráfica para comprobar la mejora progresiva.

Técnica de la postal: se trata de un sistema muy sencillo y con el cual se puede conseguir incrementar la rapidez lectora:

Se prepara un texto para leer y una cartulina o postal.

Se coloca la postal debajo de la primera línea que vamos a leer.

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Leída esta línea se pasa a la siguiente o de más abajo, luego a la otra y después a la otra…, hasta acabar la página.

Has de aumentar la velocidad lectora a medida que desplazas la postal de uno a otro renglón.

Esta técnica también se puede utilizar para ampliar el campo visual y disminuir el número de fijaciones por línea, así como para evitar las re-gresiones; pero entonces deberás realizar una abertura en la postal que solo te permita ver unas tres palabras cada golpe de vista o fijación.

Técnica de las tres páginas:

Se coge un libro cualquiera. A ser posible que sea el mismo para todos los ejercicios.

Se lee la primera página a ritmo normal. Es decir, tal y como lo hacemos habitualmente.

La segunda se leerá lo más deprisa que se pueda, aun corriendo el riesgo de que se quede uno como estaba, esto es, sin enterar-se de nada.

Y la tercera hay que leerla lo más rápido posible y comprendién-dolo todo.

1.1.4. LA LECTURA EFICAZ

La lectura verdaderamente eficaz es consecuencia del equilibrio entre la veloci-dad lectora de un texto y el nivel de comprensión de su contenido. Por las si-guientes razones:

Lo que importa es captar las ideas expresadas por las palabras, su con-tenido.

Como las palabras son signos que representan ideas, la lectura veloz permite captar, de forma global, el significado de las frases como un todo. Situación muy distinta cuando leemos palabra por palabra, pues una lectura demasiado lenta hace que la percepción parcial del conte-nido no nos proporcione una idea exacta del mismo.

El significado de muchas palabras depende del contexto en que se en-cuentre; el lector rápido obtendrá siempre mayor nivel de comprensión que el lento.

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La práctica de la lectura rápida incrementa la capacidad de comprensión y, en consecuencia, mejora considerablemente la de los contenidos.

Leer con rapidez permite agrupar las palabras en unidades lógicas que facilitan y aumentan la comprensión del texto.

El lector eficaz precisa de una perfecta combina-ción entre velocidad y comprensión, y la clave está en leer con atención, con concentración, en disposi-ción receptiva frente a los contenidos que ofrece el texto.

No siempre es mejor lector el que lee más rápido, sino el que, sin reducir demasia-do la velocidad, comprende más del 60% del contenido del texto, y al mismo tiem-po sabe adaptar la velocidad al tipo de lectura y a los objetivos que se propone.

El mal lector lee siempre a la misma velocidad, mientras que el buen lector, que domina todos los tipos de lectura, cambia de ritmo de lectura según sus intereses.

En cualquier caso la lectura rápida es imprescindible para formarse una idea general sobre cualquier tema, buscar datos, ideas o aspectos de interés, y como paso previo para la lectura crítica, meditativa y de estudio.

1.1.5. PRELECTURA

Se realiza como primera toma de contacto con los contenidos. El objetivo es sacar una visión general del tema viendo de qué trata y los aspectos en que se desglosa.

Para realizar la prelectura no es necesario leer todo el tema, consiste en dar una ojeada o vistazo general, pues el objetivo es obtener una visión global del tema. Conviene relacionarlo con la materia vista anteriormente.

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A la hora de realizar la prelectura se debe tener en cuenta:

Los títulos y subtítulos (son las ideas principales del tema).

Las fotografías, gráficos, ilustraciones, cuadros sinópticos, etcétera.

Párrafos y conceptos destacados (en negrita, subrayados, cursiva, etcé-tera).

Todos los resúmenes que hubiera.

Convienen responder a preguntas del tipo:

¿Qué sé de este tema? ¿Qué quiere decir el autor? ¿Qué me sugiere el título? ¿Qué es lo más importante?

Ventajas que aporta la prelectura:

Es la mejor manera de introducirse en el tema.

Evita distracciones, falta de ganas…

Facilita una buena comprensión posterior del te-ma, así como una mejor realización de anotacio-nes al margen.

La prelectura bien hecha motiva, permite com-prender de modo general el libro, tema u obje-to de estudio y como resultado obtenemos un diagrama de la lección.

1.1.6. LECTURA COMPRENSIVA

La lectura comprensiva tiene como objetivo la interpretación y comprensión crítica del texto, es decir, en ella el lector es un agente activo, descodificando el mensaje, analizándolo, etcétera.

Se leerá el texto tantas veces como haga falta hasta conseguir un nivel de com-prensión de información satisfactorio. En numerosas ocasiones será necesaria la utilización de un diccionario para tener una comprensión correcta de los términos que aparecen en el texto y de su contenido informativo.

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Para poder realizar una correcta lectura comprensiva hay que saber localizar la idea principal en cada pá-rrafo leído y comprender su significado.

Con la lectura comprensiva se consigue entender mejor el tema que se va a estudiar.

1.2. LAS NOTAS AL MARGEN

Una vez realizada la prelectura, se trata de analizar la estructura del texto y cap-tar las ideas principales que se desarrollan.

Las anotaciones marginales son la palabra o expresión que escribimos al lado del párrafo del tema de estudio y que sintetiza las ideas principales del mismo.

Ventajas de las notas al margen:

Ejercitamos el pensamiento al sustituir la repe-tición mecánica del texto por la comprensión del mismo.

Al tratarse de un estudio activo se opone a la monotonía y aburrimiento y favorece el re-cuerdo.

Tiende a desarrollar la capacidad de análisis al obligar a comprender y examinar el texto mi-nuciosamente y en todos sus detalles.

Desarrolla la capacidad de síntesis, ya que im-pone reducir a una o dos palabras la idea prin-cipal del párrafo analizado.

Facilita la comprensión y práctica de las si-guientes fases de estudio: subrayado, esque-mas y resúmenes.

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1.2.1. CARACTERÍSTICAS DE LAS NOTAS AL MARGEN

Es la primera lectura completa del tema.

Se debe realizar teniendo en cuenta la idea general captada al realizar la prelectura. Es una lectura rápida y comprensiva a la vez, realizada en silencio.

Es el momento adecuado para aclarar todas las dudas que surjan, pre-guntando, consultando el diccionario, libros, etcétera.

1.2.2. CÓMO HACER LAS NOTAS MARGINALES

Para sacar las notas marginales procede del siguiente modo:

Prelectura o lectura rápida del texto. Si este es muy extenso solo se leerán título, subtítulos, esquemas, dibujos, gráficos, subrayados…

Lectura comprensiva, sin dejar ningún cabo suelto. Si no entiendes alguna palabra, usa el diccionario. No es conveniente quedarse con dudas pendientes.

Leer párrafo por párrafo. Generalmente cada uno contiene una sola idea principal. En cada uno se debe hacer las siguientes preguntas:

¿De qué trata el texto?

¿Qué quiere decir realmente?

¿Cuál es la idea que desarrolla?

¿Qué es?

Las respuestas a estas preguntas se deben poner en el margen iz-quierdo o derecho del párrafo correspondiente; con frecuencia, po-dremos responder con palabras como estas, más o menos:

Características, definición, evolución, clases, elementos, historia, tipos, causas, conse-cuencias…

Estas palabras a veces aparecerán en el propio escrito, pero otras tendrás que descubrirlas o inventarlas.

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1.3. SUBRAYADO

El subrayado es una técnica básica a la hora de estudiar, porque sirve para ana-lizar y comprender los contenidos de un texto. Su objetivo es localizar las pala-bras o frases que contienen la información básica o fundamental del tema, sin las cuales no es posible aprender la materia.

Consiste en destacar mediante un trazo las partes esenciales de un texto (frases y palabras claves). Al resaltarlas centramos más la atención en ellas, por lo que ahorramos esfuerzo y hacemos más provechoso el trabajo intelectual.

Ventajas de subrayar:

Facilita la concentración al estudiar.

Fomenta la comprensión de lo estudiado.

Ayuda a fijar la atención, evitando las distrac-ciones y la pérdida de tiempo.

Favorece el estudio activo y el interés por cap-tar lo esencial de cada párrafo.

Al destacar lo importante sobre lo accesorio se incrementa el sentido crítico de la lectura.

Es de gran ayuda para repasar mucha materia en poco tiempo.

Es el paso indispensable y previo para confec-cionar esquemas y resúmenes.

Favorece la asimilación y desarrolla la capaci-dad de análisis y síntesis.

1.3.1. ¿QUÉ Y CUÁNTO SUBRAYAR?

Solo se debe subrayar lo que es fundamental y que se haya contenido en la idea principal. Más que la palabra, hay que buscar ideas.

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También es bueno subrayar las palabras técnicas o específicas del tema, así como cualquier otro dato relevante que contribuya a mejorar la comprensión. Para comprobar si subrayamos correctamente basta con hacerse varias pregun-tas sobre el contenido y, si las respuestas están contenidas en las palabras sub-rayadas, es señal de que el subrayado está bien hecho.

No hay una fórmula fija a la hora de subrayar. Si solo interesa ir a lo fundamen-tal, con que se subrayen en cada párrafo las palabras que contienen la idea bá-sica, es suficiente, pero a veces convendrá destacar las ideas secundarias, que sirven para reforzar, ampliar y enriquecer la principal.

No hay que olvidar que, al querer destacarlo todo, en realidad no se destaca nada, ya que el exceso de subrayado impide la comprensión.

1.3.2. ¿CÓMO SE DEBE SUBRAYAR?

Es muy práctico utilizar lapiceros de colores y utilizar cada color para un propósito. El rojo, por ejemplo, para destacar las ideas principales y el azul será útil para destacar las secundarias.

Cuando el subrayado se hace con lápiz, podemos diferenciar el subra-yado con distintos tipos de líneas. Señalaremos la importancia y la je-rarquización de las ideas de la siguiente manera, por ejemplo:

Idea general

Ideas principales

Ideas secundarias

Detalles

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El subrayado ha de hacerse de manera que favorezca los repasos posteriores y la confección de esquemas y resúmenes. Por eso, la lectura de un subrayado, si está bien hecho, tiene sentido completo sin necesidad de recurrir a las palabras no subrayadas.

Otras señales y marcas que ayudan a destacar lo fundamental:

Recuadro: para destacar etapas, clasificaciones, fechas… o para los comienzos importantes, vocablos significativos y epígrafes en una lección o tema.

Flechas: sirven para enlazar y conectar datos, ideas y párrafos que tienen algún tipo de relación.

Subrayado en vertical: se colocan unas rayas verticales al mar-gen para destacar párrafos y trozos de párrafo en un texto cuyo contenido es básico para la comprensión general del tema o que merecen especial atención para el lector.

Destacada especial: se puede emplear una línea ondulada bajo el dato o dos líneas paralelas y dentro del mismo. Sirve para des-tacar elementos que se han de fijar y memorizar necesariamente (títulos, lugares, geográficos…).

Acotado (): corchetes en aquellos párrafos dudosos que precisan aclaración, ampliación en los contenidos, etcétera.

Llamadas *¡!: las principales son el asterisco y las admiraciones, y suelen emplearse como llamada de atención sobre algo que ha despertado vivamente la curiosidad del lector.

1.3.3. ¿CUÁNDO SE DEBE SUBRAYAR?

No se debe subrayar en la primera lectura de visión general (prelectura), ya que podrían destacarse frases o palabras que no expresan el contenido esencial, produciéndose confusión desde el principio.

Las personas más entrenadas en la lectura comprensiva pueden realizar el sub-rayado durante la segunda lectura, destacando las ideas principales y secunda-rias, los términos técnicos, las clasificaciones, etc., y realizando incluso anotacio-nes marginales.

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El subrayado es la segunda lectura completa del tema. Hay que insistir en esto porque se tiende a subrayar en la primera lectura y no conviene hacerlo.

Al subrayar hay que tener en cuenta las anotaciones marginales, es más, el subrayado suele ser la res-puesta a esas anotaciones.

La persona menos entrenada puede necesitar una tercera lectura. En todo ca-so, hay que esforzarse por descubrir dónde se encuentra la idea principal y, solo cuando se esté bien seguro, proceder a subrayar debidamente.

Para subrayar de forma correcta es fundamental conocer el significado de todas las palabras, en sí mismas y en el contexto en que se encuentran expresadas.

1.3.4. TIPOS DE SUBRAYADO

Subrayado lineal:

Se hace con varias modalidades de líneas, utilizando uno o varios colores. Cada cual puede dar a los modelos que ofrecemos el valor que crea oportuno, pero convencionalmente se le da el siguiente:

Destacados básicos

Ideas principales

Ideas secundarias

Aspectos, detalles

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Subrayado estructural:

Es una señal referida a la estructura del texto y a la organización de las ideas, y se hace al margen izquierdo del texto. Puede ser de dos tipos: anotaciones y/o numeraciones.

Enumeraciones que anuncian títulos o ideas claves:

1 I 1. A

2 II 1.1 B

3 III 1.2 C

4 IV 1.3. D

Señalización de ideas secundarias relevantes:

. _ + *

. _ + *

. _ + *

. _ + *

Subrayado de realce:

Es una letra, palabra o signo colocado al margen derecho del texto para dejar constancia de lo que el lector piensa o siente, duda o no termina de compren-der. Estas son algunas señales concretas para cada uno de los signos y lo que suelen significar:

(¡!) Sorpresa, extrañeza.

(¿?) No lo entiendo.

(**) Esto es muy importante.

(++) Sobreabunda, reincide demasiado en lo expuesto.

(--) Faltan datos, el autor ofrece poca información.

(//) Contenido fundamental que necesito para un trabajo.

(()) Acotación de una frase lapidaria excepcional.

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1.3.5. SUBRAYAR LAS IDEAS PRINCIPALES

El subrayado de las ideas más importantes marcará o resaltará las palabras o frases más significativas de las ideas básicas del texto.

¿Cómo podemos encontrar la idea principal?

Puede estar situada al principio, en medio o al final del párrafo. Algunas pautas para su localización:

Si la idea principal se encuentra al comienzo del párrafo, las frases que la siguen suelen ser explicación de la misma. Por lo cual, una vez leída la frase inicial, que contiene la idea principal, se puede leer con mayor rapidez todo lo que sigue como explicación. Sería un párrafo deductivo, que parte de algo general y acaba mostrando las ideas que comple-mentan lo primero.

Cuando la idea principal se encuentra hacia la mitad del párrafo, las ideas que la preceden sirven de preámbulo, mientras las que la siguen sirven para matizarla o ampliarla.

Si está al final del párrafo, las frases con las que se inicia este aportan datos, contienen razonamientos y constituyen una introducción o preámbulo que finaliza con la idea principal como conclusión, que completa toda la argumentación del párrafo.

La palabra clave de la idea principal es, por lo general, la que más se repite, aunque a veces el autor la disfrace bajo sinónimos.

En ocasiones la idea principal puede aparecer implícita a lo largo de to-do el párrafo y no quedar expresada de manera clara en ninguna frase o palabra clave. Es entonces cuando el lector, con sus propias palabras debe dar forma a la idea principal de una manera precisa.

Puede darse también que un párrafo contenga más de una idea principal.

Frase principal:

Es la más genérica de todas las frases, la de una comprensión más amplia.

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Es imprescindible dentro del párrafo, de manera que, si se supri-me, se podrá comprobar de inmediato como el sentido queda in-completo.

Expresa una afirmación más amplia y abstracta, en la que las de-más frases quedan incluidas y resumidas.

Frases secundarias:

Si las suprimimos, apenas cambia el sentido general del párrafo, pues solo se pierden aspectos y matices que no afectan al conte-nido esencial.

Suelen ser una simple repetición de la frase principal, con distin-tas palabras.

Dan detalles, ilustran o aportan argumentos que prueban lo ex-presado en la idea principal.

1.4. ESQUEMA

Un esquema es la reducción y reorganización del contenido de un texto. Las relaciones entre ideas se establecen a través de llaves, líneas, márgenes, flechas y otros enlaces. Con el esquema se aprecia, de un solo golpe de vista, las partes fundamentales del tema y las secundarias.

Los elementos o contenidos que fueron destacados y diferenciados por medio de la técnica del subrayado, se recogen en el esquema en una síntesis. La gran ventaja de este sobre otras técnicas de síntesis es que ofrece una clara estruc-tura visual de la materia de estudio, permite captar de un vistazo lo esencial y diferenciar la importancia de cada elemento dentro del todo.

El objetivo del esquema es obtener una visión de conjunto del tema, global y concreta a la vez, recons-truyendo el esqueleto del mismo.

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El esquema debe ser algo personal y no conviene utilizar los de otros, ya que es el resultado de una lectura individualizada en la que cada uno refleja sus opi-niones y visiones. No obstante, una vez elaborado, sí conviene compararlo con el de otros para poder sugerirles nuevas aportaciones a ellos, o complementar el tuyo con alguna suya.

El esquema facilita los ejercicios mentales de análisis y de síntesis, imprescindi-bles para el aprendizaje, y esto es así por dos razones:

Con la síntesis logramos una clara idea general del tema al seleccionar los contenidos básicos.

Con el análisis nos ocupamos de los aspectos concretos en función de su importancia.

Ventajas del esquema:

Contribuye a un estudio más activo, ya que obliga a tomar nota, sintetizar, expresar lo fun-damental por escrito, incrementar la atención y el interés…

Desarrolla la capacidad de comprensión, porque al profundizar en el texto para descu-brir los elementos esenciales, exige una lectura más analítica y pausada.

Permite captar de manera intuitiva la es-tructura de un tema en sus ideas y datos más relevantes (labor de síntesis).

Desarrolla la memoria lógica, ya que ejercita la capacidad de relacionar y matizar los conte-nidos según un orden de prioridades, y esto facilita la expresión de lo aprendido.

Facilita la fijación, la retención y la evoca-ción de los contenidos, obligando a una ma-yor precisión y concisión en el uso del vocabu-lario. Ahorra mucho tiempo, para memorizar y repasar, y favorece la claridad de la mente ha-bituándola a "ir al grano", sin rodeos.

Pone a prueba la capacidad que tenemos de análisis, síntesis, claridad mental, razona-miento lógico, expresión, concisión, precisión… Tan importante para la formación mental de un individuo.

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1.4.1. CARACTERÍSTICAS DE LOS ESQUEMAS

El esquema debe ser claro; debe "entrar por los ojos", captarse de un solo golpe de vista, y para ello:

Hay que dejar amplios márgenes.

Se deben utilizar solo palabras clave; ocasionalmente, frases.

Hay que jerarquizar las ideas, básicamente con su colocación.

Estar archivado:

Cada materia debe realizarse en el mismo tipo de papel.

Almacenarlo ordenadamente en carpetas. Hay que recordar que el orden es clave para poder estudiar.

Los contenidos: en el esquema tienen que aparecer todos los concep-tos que se debe memorizar (incluyendo desde el título y las ideas gene-rales hasta los ejemplos), pero solo los necesarios, por lo cual es básico realizar un buen análisis previo (notas marginales). Cada idea debe apa-recer solo una vez y hay que evitar las repeticiones.

La extensión: el esquema debe ocupar una sola hoja, de forma que se vea entero de un vistazo. Así resultará más sencillo integrar todos los contenidos y ver las relaciones que existen entre ellos.

Claridad: la buena presentación, con letra clara y amplios márgenes, es fundamental para retener más fácilmente el esquema. Cada idea debe estar bien diferenciada de las demás. Es habitual que cada línea con-tenga una sola idea, para ayudar a la memoria visual del estudiante. Las relaciones entre las ideas deben ser sencillas y fáciles de comprender.

Importancia de las ideas: para destacar la mayor importancia de los conceptos, conviene utilizar algunos recursos: puede servir usar letras mayúsculas, márgenes más amplios o el subrayado, de tal modo que se destaque el papel que tienen esas ideas.

Márgenes: las ideas de similar importancia deben guardar la misma distancia con respecto al margen del papel. Así se sabe que las ideas que presentan el mismo margen cuentan con un mismo rango.

Limpieza: el esquema debe estar limpio. Si las ideas quedan confusas porque se ha tachado algún término, conviene repetirlo. Un esquema confuso es poco útil.

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Revisión: al finalizar el esquema, hay que revisarlo, para comprobar que no se ha repetido ninguna idea al pasar los conceptos del libro y los apuntes al esquema y que se ha mantenido la estructura que se había establecido en el análisis (notas al margen).

Al elaborar un esquema con estas características, el estudiante notará que los conceptos quedan bien asimilados y preparados para ser memorizados sin apenas esfuerzo.

1.4.2. TIPOS DE ESQUEMAS

Hay mucha variedad de modelos que pueden adoptarse. En cualquier caso de-pende de la creatividad de cada uno. A continuación mostramos algunos de los más empleados, con las pautas de cada uno:

Esquema de llaves: aquel en el que la idea principal se escribe a la iz-quierda del folio. A su derecha, agrupadas por una llave, están las ideas secundarias que dependen de ella, y así sucesivamente. Cada idea en-globa a las que la desarrollan con una llave. Los contenidos que apare-cen a la izquierda son más importantes que los que quedan a la derecha.

Título del tema

I. Idea principal 1.º Idea secundaria

Detalle 2.º Idea secundaria

II. Idea principal 1.º Idea secundaria


III. Idea principal 1.º Idea secundaria


Este tipo de esquemas es muy sencillo de elaborar y es uno de los más habituales. Los contenidos se relacionan entre sí con gran claridad. Si se abren demasiadas llaves hacia la derecha se corre el riesgo de que la parte izquierda de la hoja quede casi en blanco y el extremo derecho concentre casi toda la información, estropeando la vista global.

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Esquema de barras: igual que el de llaves, pero en lugar de englobar las ideas con una llave se hace con una barra vertical.

Esquema numérico o científico: aquel en que cada idea va precedida de un número. El número de la idea principal se repite en la numera-ción de las ideas secundarias que dependen de ella. A su vez, las ideas que dependen de las anteriores recogen esos números previos. De es-ta forma, al ver el número que antecede a una idea, se sabe cuáles son los conceptos de los que proviene. Por ejemplo:

Título del tema

1. Idea principal.

1.1. Primera idea secundaria.

1.2. Segunda idea secundaria.

1.2.1. Primer detalle.

1.2.2. Segundo detalle.

1.3. Tercera idea secundaria.

2. Segunda idea principal.

2.1. Primera idea secundaria.

2.1.1. Primer detalle.

3. Tercera idea principal.

Establecer una numeración de los contenidos obliga a tener muy clara la relación entre las ideas. Si se es capaz de numerar según este siste-ma, no cabe duda de que el tema está bien comprendido. Además, el número ayuda a retener con mayor facilidad los contenidos.

Esquema alfabético: es igual que el numérico, salvo que antes de las ideas aparecen letras en lugar de números.

Esquema alfa-numérico: igual que los dos anteriores, pero mezclando números y letras. Al combinar letras y números, se evita la monotonía y se facilita el recuerdo.

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1.5. RESUMEN

El resumen consiste en la síntesis de un texto, por parte del estudiante, con sus propias palabras. La extensión no debe extender el 25% del texto original.

Si al resumen se incorporan comentarios personales o explicaciones que no corresponden al texto, tenemos el resumen comentado.

Las ventajas de hacer el resumen son:

El resumen sirve como ejercicio preparatorio para el examen, ya que es una redacción don-de se han de relacionar ideas.

Ayuda a desarrollar la capacidad de expresión escrita.

Al igual que las notas al margen y el subrayado, es una técnica activa que mejora tu atención y concentración en el trabajo.

Refuerza la capacidad para organizar de modo lógico el material de estudio.

Simplifica las tareas de repaso y memorización.

Desarrolla la capacidad de síntesis del alumno. Es decir, aprende a exponer oral o por escrito, con muchas menos palabras, el contenido de un texto.

Desarrolla la capacidad creativa, ya que el es-tudiante utiliza sus propias palabras.

1.5.1. CARACTERÍSTICAS DEL RESUMEN

Para hacer un buen resumen hay que tener en cuenta los siguientes puntos:

Es fundamental, antes de comenzar el resumen, tener muy claro cuál es la idea general básica del texto y cuáles son las secundarias.

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Hay que tener siempre a la vista el esquema en la síntesis y en el re-sumen comentado, en los que se da una mayor actividad mental, que aumenta la eficacia en el estudio al expresar los contenidos con tus propias palabras.

Es necesario encontrar el hilo conductor que une perfectamente las frases esenciales, prescindiendo de la información redundante e innece-saria.

Una vez jerarquizadas las ideas según su importancia hay que organi-zarlas de forma que presenten una unidad y un significado completo.

Se debe personalizar el resumen hasta el punto de que todas las fra-ses y las expresiones que se utilicen en él sean del propio lenguaje co-loquial del estudiante.

Enriquece, amplia y completa los resúmenes con anotaciones de cla-se, comentarios del profesor, lecturas relacionadas con el tema de que se trate y, sobre todo, con tus propias observaciones.

Deben ser breves y concisos, pero sin dejar los aspectos importantes. Para lograrlo tratar de sustituir frases enteras por sustantivos, verbos o adjetivos que condensen el sentido de toda una frase.

Cuando se resume no es necesario seguir obligatoriamente el orden de exposición que aparece en el texto. Se pueden adoptar otros crite-rios, pasando de lo general a lo particular, de lo fundamental a lo expli-cativo, de lo principal a lo accesorio.

No debe ser una copia de algunas partes del texto, sino la expresión personal del texto elaborado.

Si necesitas resumir un texto del que no has hecho ni el subrayado ni el esquema, alterna lecturas rápidas con lecturas lentas y pasa direc-tamente a confeccionar el resumen.

El resumen tiene por finalidad capacitar al estudiante para exponer brevemente y con sus propias palabras el contenido de un texto.

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1.5.2. CÓMO REALIZAR UN RESUMEN

Primero se debe realizar una lectura silenciosa de todo el texto.

Hay que buscar en el diccionario las palabras desconocidas para tener claros todos los conceptos.

Se vuelve a leer de forma comprensiva y reflexiva el texto.

Una vez leído se debe separar el texto en bloques o párrafos, y resu-mir cada párrafo.

Finalmente, hay que realizar el resumen definitivo de todo el texto.

1.6. LA MEMORIZACIÓN

La memoria es la que permite a cada persona conservar, rememorar y localizar en el pasado sus vivencias.

La memorización es el proceso en el que los conteni-dos quedan almacenados para recordarlos poste-riormente.

La conservación de las experiencias y su integración en nosotros se consigue mediante un proceso en el que interviene una gran parte de la persona (los sen-tidos, el cerebro…) así como la repetición, la experimentación, la comparación, la combinación, la ejercitación…

En este proceso se identifican tres fases o etapas:

Fijación: fase inicial; en el caso de los. estudios, este primer momento puede ser la explicación del profesor, la primera lectura que se haga de la materia o lo que le comente un compañero al estudiante sobre un tema que se debe estudiar, y seguirá actuando de forma acumulativa a partir del momento inicial. En la fijación intervienen, además de las ca-

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pacidades perceptivas, aspectos como el interés que se presta a la ex-periencia, la actitud que se adopta ante ella, la implicación personal, el grado de atención, las condiciones ambientales en las que ocurre, la frecuencia con la que se repite la experiencia y el agrado o des-agrado que produce.

Retención: su función es la de conservar las experiencias. La calidad de la retención y la cantidad de aspectos que se conservan dependen de lo buena que haya sido la fijación.

Evocación: consiste en traer al momento presente lo fijado y reteni-do. La evocación es la parte del proceso que se pone en funcionamien-to en los exámenes, en la que se pide que se ponga de manifiesto lo que se ha aprendido, lo que conserva de lo fijado y retenido. También se pone funcionamiento durante los repasos.

1.6.1. TÉCNICAS DE MEMORIZACIÓN

Existen muchas técnicas de memorización que ayudan a la hora de estudiar. A continuación, proponemos las más importantes:

Organización.

El primer recurso para memorizar es la organización del material que se desea asimilar. Si hay que memorizar una gran cantidad de datos es importante dividirlos en grupos reducidos.

Grabación.

Se trata de leer con mucha atención las líneas de texto que se quieren memorizar e intentar repetirlas exactamente, tras unos segundos de espera.

Si en el primer momento no se recuerda perfectamente, se vuelve a leer con la máxima concentración. Si se falla en una palabra clave, se repite varias veces mentalmente y se vuelve a intentar.

Esta técnica sirve para textos que se deben recordar con exactitud co-mo pueden ser algunas definiciones o citas.

Es más eficaz hacer la lectura en voz alta y con énfasis en algunas pala-bras. Los estudiantes que tienen buena memoria auditiva, o que son más eficaces por vía auditiva que visual, conviene que graben la lectura y se escuchen antes de iniciar la repetición. Si la lectura es muy deficiente, se lo puede grabar otra persona y que él lo lea oyendo la grabación.

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Acrósticos.

Un acróstico es una palabra inventada y sin significado que se forma con las iniciales de una serie de conceptos que nos interesa recordar. Por ejemplo la palabra PASERM (no tiene significado), se obtiene de nombrar una serie de características en las técnicas de estudio:

Prelectura.

Anotaciones marginales.

Subrayado.

Esquema.

Resumen.

Memorización.

Parafraseado.

Para memorizar textos o resúmenes algo extensos de forma no literal, se lee el texto y se reproduce con otras palabras. Se puede intentar incluso traducir al lenguaje cotidiano, si es posible, los términos complicados.

Así se logra memorizar una serie de ideas y a la vez se interiorizan las relaciones existentes entre ellas.

Técnica de fichero.

Hace más ameno y ordenado el acto repetitivo que supone recordar una serie numerosa de datos aislados (fórmulas, vocabulario, fechas…).

Se deben dar los siguientes pasos:

Escribir en un lado de una ficha la pregunta, y en el dorso, la res-puesta, hasta obtener un montón de fichas.

Se coge la primera ficha, se lee la pregunta y se intenta recordar la respuesta. Si se acierta, se pasa la ficha a otro montón; si se fa-lla, se mira la respuesta y se coloca al final del primer montón.

Cuando se llega de nuevo a la primera ficha "no sabida", se toma el segundo montón y se comprueba que se saben bien todas, si se ha olvidado alguna se pasa al primer montón.

Se vuelve al primer montón y se continúa el proceso por el paso 2.

Cuando el montón de "no sabidas" se acabe, se repasa hasta es-tar seguros de que no hay riesgo de olvidarse.

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Técnicas con imágenes mentales.

Asociar una imagen mental a un concepto ayuda a su memorización. Esto es así por un doble motivo:

La asociación es un fundamento de la memoria.

La memoria visual es más potente que la que se basa solo en conceptos abstractos.

Se trata de utilizar la imaginación para memorizar, inventando imágenes y asociándolas a los conceptos que se desea recordar. Se construyen con ellas pequeñas historias o películas tan divertidas como se quiera.

Para facilitar el recuerdo hay que seguir dos guías:

Exageración: se trate de introducir desproporciones y rarezas en las imágenes, haciendo que estas sean inusuales y sorprenden-tes, por lo que se recordaran con facilidad.

Movimiento: que las imágenes sean dinámicas favorece su atrac-tivo y la vinculación entre los elementos representados.

Técnicas de la cadena.

Las palabras clave del texto que hay que memorizar se convierten en imágenes concretas, aunque sean abstractas.

El objetivo es recordar todas las palabras en orden, para lo cual cada imagen se enlaza con la siguiente, se construye una historia con ella a modo de "película mental" y se comprueba que se recuerda fácilmente, y al repasar, las imágenes nos evocarán con facilidad el concepto sim-bolizado.

Técnicas del itinerario.

Hay que seguir los siguientes pasos:

1. Se toma un itinerario o recorrido ya conocido: estaciones de metro, habitaciones de la casa o puntos más interesantes de un paseo.

2. Como en la anterior, los conceptos que se han de recordar se transforman en imágenes claras y fáciles de visualizar.

3. Se asocia cada imagen a un lugar del itinerario elegido, estable-ciendo una relación que llame la atención.

4. Para recordar los conceptos solo será necesario recorrer el itine-rario.

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1.6.2. TIPOS DE MEMORIA

Basándonos en el modelo de memoria de Atkinson y Shiffrin (1968), llamado estructuralista, proponemos tres tipos de memoria:

Almacenamiento de la información sensorial.

Es la memoria de los sentidos: auditiva, táctil, visual, gustativa, olfativa…, y presenta las siguientes características:

Se registra la información sin ningún tipo de transformación del estímulo.

Su principal función es dejar tiempo a que se operen sobre el es-tímulo otros mecanismos que extraigan la información pertinente y la elaboren.

El tiempo de almacenamiento es muy breve, menos de un segundo.

Dura más la percepción del estímulo que el propio estímulo.

Memoria a corto plazo.

Es la manifestada de inmediato. Comprende las impresiones que se pueden abarcar con un único acto de atención y su duración es muy breve, con el límite superior alrededor de unos 10 segundos.

Se pueden retener entre cinco y nueve unidades con un solo golpe de atención, según se trate de números, palabras o frases y el tiempo de retención oscila entre un segundo y un minuto. Este tipo de memoria es consciente y voluntaria, y como proceso atencional, depende de la repetición.

Por ejemplo, cuando tomamos de oído la dirección de una persona, podemos retenerlos durante unos segundos en la memoria; pero, co-mo la capacidad de retención es tan limitada, para recordar después esos datos, debemos repetir varias veces la información hasta que pase a formar parte de la memoria a largo plazo.

Memoria a largo plazo.

Es la que se conoce comúnmente como memoria. Le precede un pe-riodo de consolidación, y la maduración de los recuerdos tendría lugar durante los primeros 15 minutos. Una hora es, por lo general, suficien-te para la consolidación casi completa de las trazas mnemónicas (hue-llas de la memoria).

La duración de la memoria a largo plazo abarca desde el fin del proce-so de consolidación hasta el olvido; prácticamente es ilimitada.

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1.6.3. FACTORES QUE INFLUYEN EN EL PROCESO DE MEMORIZACIÓN

Hay aspectos que pueden facilitar o dificultar el proceso de memorización:

Factores subjetivos:

Dependen de la disposición interna del individuo y tienen las siguientes caracte-rísticas:

Se fijan mejor aquellas impresiones que se entienden mejor, lo que es más significativo para la persona.

Los recuerdos no se fijan indistintamente, sino que lo hacen según los núcleos de interés, motivos, ideales… Las impresiones que no atraen se pierden con facilidad.

Facilita la memoria la cantidad de atención prestada.

Es más fácil memorizar según la estrategia que se emplee. Cada per-sona utiliza el método de estudio que le resulta más favorable.

La actitud que se adopte ante el estudio y el material a memorizar. Una actitud favorable, se caracteriza por el deseo de aprender y de rendir lo más posible, favorece la memoria. Al igual que la actitud de rechazo al estudio provoca que la memoria sea mala.

La confianza en las capacidades del estudiante, también incide en la calidad y eficacia del proceso y tendrá como consecuencia la mejora en el conjunto del aprendizaje.

Tener hábito de estudio también ayuda al proceso de memorización.

Factores objetivos:

Dependen del contenido para memorizar y se distinguen por ciertas características:

Capacidad de significación del material. Se aprende bien un material que se presenta bien organizado, con claridad y haciendo referencia al cuadro cognoscitivo del alumno.

Tiempo del que se dispone. Cuando se tiene prisa por aprender algo, la falta de tiempo influye negativamente en el proceso de memoria.

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Tipo de tarea. Lo que fácilmente se aprende, fácilmente se olvida. Lo que nos ha costado más aprender, más difícilmente lo olvidamos.

Los objetos que más resaltan. En una lista aprendemos mejor los elementos que figuran al principio y al final.

Para poder retener y memorizar la información, se almacenará en la memoria el resumen y el esquema elaborado.

La asociación de ideas es un recurso muy útil para retener la información, sobre todo si se trata de un listado de palabras.

1.6.4. ¿CÓMO MEJORAR LA MEMORIA?

A continuación exponemos algunos consejos para mejorar la memoria:

Hay que intentar estar descansado a la hora de estudiar y repasar.

Se debe reflexionar sobre el significado de las principales ideas del tema a estudiar.

Es importante relacionar la información del texto con imágenes, ya que la memoria visual es muy importante en el proceso de memorización.

Se deben realizar breves paradas durante el estudio y así intentar re-cordar lo estudiado.

Hay que evitar las repeticiones mecánicas, sino intentar razonar lo estudiado.

Se deben realizar repasos de los resúmenes y esquemas, ya que así aumenta el número de repeticiones, consiguiendo fijar la información estudiada.

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1.7. EL REPASO

Repasar significa volver a pasar por los mismos temas que ya has pasado, de examinar tus obras, como estudiante, para que corrijas sus imperfecciones. Dar las últimas pinceladas a aquellos conocimientos que lo necesiten releer lo estu-diado para retenerlo mejor.

1.7.1. CARACTERÍSTICAS DEL REPASO

El repaso consiste en volver a repasar por lo estudiado.

Para memorizar a largo plazo hay que repasar a menudo.

Su finalidad es evitar el olvido de lo aprendido anteriormente.

Repasar el esquema elaborado.

Se consigue tener la información siempre a punto.

1.7.2. FRECUENCIA PARA REALIZAR LOS REPASOS

La frecuencia ideal para realizar repasos son:

Primer repaso: a los 10 minutos de haber estudiado algo. Esto no sig-nifica que según vas estudiando tengas que detenerte cada 10 minutos a repasar. Es decir, reinicias la sesión, tras un descanso, repasando lo estudiado en la hora anterior, con lo cual cubres dos objetivos.

Segundo repaso: conviene hacerlo al día siguiente. El segundo de los repasos lo harás cuando vayas a iniciar el estudio de esa materia, lo cual supone un refuerzo de los conocimientos que ya tienes y un apoyo para los nuevos que se produzcan.

Repasos sucesivos: conviene realizar nuevos repasos a lo largo del tiem-po, aunque cada vez más espaciados (a la semana, al mes), teniendo siempre bien presente que cuanto más tiempo transcurra entre ellos ma-yor será la cantidad de materia que no consigas evocar en el momento.

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Último repaso: realizarlo concibiéndola como un repaso general de toda la materia que entre para el examen. Si se ha seguido un buen método de estudio, los días previos al examen deberías dedicarlos ex-clusivamente a repasar, no a tratar de adquirir nuevos conocimientos.

El repaso es imprescindible realizarlo debido a:

El tiempo es el mejor aliado del olvido.

La mente tiende a olvidar para dejar paso a los nuevos aprendizajes.

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CONCLUSIONES

Para estudiar es importante estar cómodo, así que se debes comprobar cuáles son las técnicas que mejor resultado te dan y ponerlas en práctica cada vez que decidas estudiar. Así, se van formando los hábitos y se logra poner al máximo la capacidad de aprendizaje.

Con el tiempo es importante descubrir cuál es el método más apropiado para interiorizar los conceptos que se estudian.

La lectura, el subrayado, las notas al margen, el esquema, el resumen, la memo-rización y el repaso son las técnicas más útiles para estudiar de forma eficaz y duradera.

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AUTOCOMPROBACIÓN

1. El buen lector:

a) Sabe combinar la comprensión y la reflexión lectora.

b) Sabe combinar la velocidad y la comprensión lectora.

c) Sabe combinar la reflexión y la velocidad lectora.

d) Todas son correctas.

2. ¿Cómo se llama el esquema en el que la idea principal se escribe a la izquierda del folio y a su derecha las ideas secundarias agrupadas por llaves?

a) Esquema de barra.

b) Esquema de llaves.

c) Esquema numérico.

d) Esquema alfabético.

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3. ¿A qué técnica de estudio corresponden las siguientes características?

Debe "entrar por los ojos", captarse de un solo golpe de vista, y para ello: hay que dejar amplios márgenes; se deben utilizar solo palabras clave; ocasionalmente frases; hay que jerarquizar las ideas, básica-mente por su colocación.

a) Esquema.

b) Resumen.

c) Notas al margen.

d) Ninguna es correcta.

4. ¿Qué tipo de memoria es la que abarca desde el fin del proceso de consolidación hasta el olvido?

a) Memoria a corto plazo.

b) Memoria a medio plazo.

c) Memoria a largo plazo.

d) Las respuestas a y b son correctas.

5. ¿En qué consiste la técnica de grabación?

a) Se trata de organizar el material que hay que estudiar.

b) Se trata de leer con atención las líneas del texto e intentar repetirlas exactamente.

c) Se trata de elaborar una palabra sin significado hecha con las primeras letras de un listado de palabras.

d) Es una técnica para elaborar un resumen de forma que al escribirlo que-da grabado lo más importante en nuestra memoria.

6. ¿Cuál es la técnica de estudio encargada de localizar las palabras o frases que contienen la información básica del tema?

a) Notas marginales.

b) Esquema.

c) Repaso.

d) Subrayado.

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7. ¿A qué técnica de estudio corresponden las siguientes características?

Es la mejor manera de introducirse en el tema; evita distracciones, fal-tas de ganas…; y facilita una buena comprensión posterior del tema, así como una mejor realización de las anotaciones al margen.

a) La prelectura.

b) La lectura comprensiva.

c) Las notas al margen.

d) El esquema.

8. ¿Cómo se llama el error de lectura que se produce cuando al leer se van pronunciando mentalmente todas las palabras, lo que impide rea-lizar una lectura rápida?

a) Regresiones.

b) Vocalización.

c) Seguir con el dedo la lectura.

d) Subvocalización.

9. ¿Cuál es el error de lectura que se modifica introduciéndose un lápiz entre los labios para poder leer en silencio?

a) Regresiones.

b) Seguir con el dedo la lectura.

c) Subvocalización.

d) Vocalización.

10. ¿Cuál es la técnica de estudio que sirve como ejercicio preparatorio para el examen, ya que es una redacción, donde se han de relacionar las ideas?

a) El resumen.

b) El esquema.

c) El subrayado.

d) Todas las respuestas son correctas.

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SOLUCIONARIO

1. b 2. b 3. a 4. c 5. b

6. d 7. a 8. d 9. d 10. a

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BIBLIOGRAFÍA

BALLENATO PRIETO, G. Técnicas de estudio: el aprendizaje activo y positivo. Madrid: Pirámide, 2005.

TIERNO JIMÉNEZ, B. Las mejores técnicas de estudio. Temas de hoy. Ma-drid, 2003.

http://www.psicopedagogia.com/

http://www.psicopedagogia.com/

taller activo de tÉcnicas de estudio

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