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Semana del 27 de Mayo al 2 de Junio [E. Libro] [E.M.T] [R. Servicio] [Atalaya] Estamos solucionando los problemas con el servidor por caídas del mismo, estamos muy agradecidos por la fidelidad de todos los que nos visitan y todos los que hacéis clic en los anuncios que permiten cubrir los gastos del hostin y servidor. www.ayudatj.com [Cantico Nº 6][E. Libro] [Inicio] [ 1 ][ 2 ][ 3 ][ 4 ][ 5 ][ 6 ][ 7 ] jr cap. 10 párrs. 1-7 Capítulo 10 ¿Nos preguntamos a diario “dónde está Jehová”? 1, 2. a) ¿Cuál era el estado espiritual de los contemporáneos de Jeremías? b) ¿Cómo debieron haber actuado ante su enfermedad? [ 1 ] [Textos] JEREMÍAS está sumido en el llanto. Tanto las circunstancias presentes de su pueblo como las predicciones que ha recibido de Dios para el futuro le desgarran el corazón. Desea que su cabeza sea como un manantial y sus ojos como una fuente para no dejar de llorar. No le faltan razones por las cuales lamentar el estado de la nación (Jer. 9:1-3; léase Jeremías 8:20, 21). Como el pueblo sigue rechazando la Ley de Dios y no obedece su voz, le sobrevendrá la calamidad (Jer. 6:19; 9:13). [ 2 ] [Textos] A los judíos, a quienes les gustaba oír de boca de sus dirigentes religiosos que todo iba bien, no les interesaba en realidad lo que Jehová opinaba de su conducta (Jer. 5:31; 6:14). Eran semejantes a un enfermo que solo quiere que el médico le diga palabras tranquilizadoras y pase por alto los síntomas graves. Si nosotros estuviésemos muy enfermos, ¿no desearíamos obtener un diagnóstico exacto y recibir el tratamiento oportuno? Espiritualmente hablando, los contemporáneos de Jeremías debieron haber buscado una evaluación honrada de su salud espiritual. Debieron haberse preguntado: ―¿Dónde está Jehová?‖ (Jer. 2:6, 8). 3. a) ¿Cómo pudieron haberse contestado los judíos la pregunta de “dónde está Jehová”? b) ¿Cuál sería una forma de buscar a Jehová? [ 3 ] [Textos] Preguntarse ―dónde está Jehová‖ habría supuesto buscar la guía divina a la hora de tomar decisiones tanto importantes como triviales. Aquellos judíos no lo hicieron. Pero después de la desolación de Jerusalén y su retorno del exilio en Babilonia, tendrían que ‗buscar a Jehová‘; entonces lo hallarían y llegarían a conocer sus caminos (léase Jeremías 29:13, 14). ¿Cómo podrían buscarlo? Una forma sería solicitando su guía mediante oraciones sinceras. Así lo hizo el rey David, quien rogó a Dios: ―Hazme conocer tus propios caminos, oh Jehová; enséñame tus propias sendas‖ (Sal. 25:4). Fijémonos ahora en la invitación que el Oidor de la oración extendió mediante Jeremías en el décimo año de Sedequías: ―Llámame, y yo te responderé y prontamente te informaré de cosas grandes e incomprensibles que no has conocido‖ (Jer. 33:3). Si el rey y la nación renegada llamaban a Dios, él les revelaría cosas ―incomprensibles‖ para ellos: la destrucción de Jerusalén y su reconstrucción tras yacer setenta años desolada. 4, 5. ¿De qué otros modos podrían los judíos haber buscado a Jehová? [ 4 ] [] Una segunda forma en que los judíos podrían buscar a Jehová sería estudiando su manera de tratarlos a lo largo de la historia. De este modo recordarían qué le agradaba y qué provocaba su cólera. Poseían los escritos de Moisés y varios relatos históricos inspirados, así como los anales de los reyes de Israel y Judá. Reflexionar en todo ello y escuchar a los profetas verdaderos les ayudaría a encontrar la respuesta a la pregunta: ―¿Dónde está Jehová?‖. [ 5 ] [Textos] Y en tercer lugar, podrían buscar a Jehová aprovechando sus experiencias personales y las de los demás. No es que tuvieran que aprenderlo todo por el método de ensayo y error, pero sí les beneficiaría analizar sus propios actos del pasado y lo que pensaba Jehová al respecto. Siendo observadores, comprenderían lo que Dios opinaba de su conducta (Pro. 17:10). 6. ¿Cómo nos anima el ejemplo de Job? [ 6 ] [Textos] Apliquemos esta lección a nuestra realidad. ¿Nos preguntamos constantemente ―dónde está Jehová‖ antes de tomar una decisión y elegir una manera de proceder? Si reconocemos que algunas veces no hemos sido tan juiciosos como deberíamos, no cedamos al desánimo. Hasta el fiel patriarca Job tuvo

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Semana del 27 de Mayo al 2 de Junio

[E. Libro] [E.M.T] [R. Servicio] [Atalaya]

Estamos solucionando los problemas con el servidor por caídas del mismo, estamos muy agradecidos por la fidelidad de todos los que nos visitan y todos los que hacéis clic en los anuncios que permiten cubrir los gastos del hostin y servidor. www.ayudatj.com

[Cantico Nº 6][E. Libro] [Inicio]

[ 1 ][ 2 ][ 3 ][ 4 ][ 5 ][ 6 ][ 7 ]

jr cap. 10 párrs. 1-7

Capítulo 10 ¿Nos preguntamos a diario “dónde está Jehová”?

1, 2. a) ¿Cuál era el estado espiritual de los

contemporáneos de Jeremías? b) ¿Cómo debieron

haber actuado ante su enfermedad?

[ 1 ] [Textos] JEREMÍAS está sumido en el llanto.

Tanto las circunstancias presentes de su pueblo como

las predicciones que ha recibido de Dios para el futuro le

desgarran el corazón. Desea que su cabeza sea como

un manantial y sus ojos como una fuente para no dejar

de llorar. No le faltan razones por las cuales lamentar el

estado de la nación (Jer. 9:1-3; léase Jeremías

8:20, 21). Como el pueblo sigue rechazando la Ley de

Dios y no obedece su voz, le sobrevendrá la calamidad

(Jer. 6:19; 9:13).

[ 2 ] [Textos] A los judíos, a quienes les gustaba oír de

boca de sus dirigentes religiosos que todo iba bien,

no les interesaba en realidad lo que Jehová opinaba de

su conducta (Jer. 5:31; 6:14). Eran semejantes a un

enfermo que solo quiere que el médico le diga palabras

tranquilizadoras y pase por alto los síntomas graves.

Si nosotros estuviésemos muy enfermos, ¿no

desearíamos obtener un diagnóstico exacto y recibir el

tratamiento oportuno? Espiritualmente hablando, los

contemporáneos de Jeremías debieron haber buscado

una evaluación honrada de su salud espiritual. Debieron

haberse preguntado: ―¿Dónde está Jehová?‖ (Jer.

2:6, 8).

3. a) ¿Cómo pudieron haberse contestado los judíos

la pregunta de “dónde está Jehová”? b) ¿Cuál sería

una forma de buscar a Jehová?

[ 3 ] [Textos] Preguntarse ―dónde está Jehová‖ habría

supuesto buscar la guía divina a la hora de tomar

decisiones tanto importantes como triviales. Aquellos

judíos no lo hicieron. Pero después de la desolación de

Jerusalén y su retorno del exilio en Babilonia, tendrían

que ‗buscar a Jehová‘; entonces lo hallarían y llegarían

a conocer sus caminos (léase Jeremías 29:13, 14).

¿Cómo podrían buscarlo? Una forma sería solicitando

su guía mediante oraciones sinceras. Así lo hizo el rey

David, quien rogó a Dios: ―Hazme conocer tus propios

caminos, oh Jehová; enséñame tus propias sendas‖

(Sal. 25:4). Fijémonos ahora en la invitación que el

Oidor de la oración extendió mediante Jeremías en el

décimo año de Sedequías: ―Llámame, y yo te

responderé y prontamente te informaré de cosas

grandes e incomprensibles que no has conocido‖ (Jer.

33:3). Si el rey y la nación renegada llamaban a Dios, él

les revelaría cosas ―incomprensibles‖ para ellos: la

destrucción de Jerusalén y su reconstrucción tras yacer

setenta años desolada.

4, 5. ¿De qué otros modos podrían los judíos haber

buscado a Jehová?

[ 4 ] [] Una segunda forma en que los judíos podrían

buscar a Jehová sería estudiando su manera de

tratarlos a lo largo de la historia. De este modo

recordarían qué le agradaba y qué provocaba su cólera.

Poseían los escritos de Moisés y varios relatos

históricos inspirados, así como los anales de los reyes

de Israel y Judá. Reflexionar en todo ello y escuchar a

los profetas verdaderos les ayudaría a encontrar la

respuesta a la pregunta: ―¿Dónde está Jehová?‖.

[ 5 ] [Textos] Y en tercer lugar, podrían buscar a

Jehová aprovechando sus experiencias personales y las

de los demás. No es que tuvieran que aprenderlo todo

por el método de ensayo y error, pero sí les beneficiaría

analizar sus propios actos del pasado y lo que pensaba

Jehová al respecto. Siendo observadores,

comprenderían lo que Dios opinaba de su conducta

(Pro. 17:10).

6. ¿Cómo nos anima el ejemplo de Job?

[ 6 ] [Textos] Apliquemos esta lección a nuestra

realidad. ¿Nos preguntamos constantemente ―dónde

está Jehová‖ antes de tomar una decisión y elegir una

manera de proceder? Si reconocemos que algunas

veces no hemos sido tan juiciosos como deberíamos,

no cedamos al desánimo. Hasta el fiel patriarca Job tuvo

su propia lucha y, al encontrarse bajo presión, solo

pensó en sí mismo. De hecho, Elihú tuvo que recordarle

que todos tenemos esa misma tendencia: ―Nadie ha

dicho: ‗¿Dónde está Dios mi Magnífico Hacedor [...]?‘‖

(Job 35:10). Por ello lo instó diciendo: ―Muéstrate atento

a las maravillosas obras de Dios‖ (Job 37:14). Job debía

observar las maravillas de Jehová tanto en la creación

como en sus tratos con los seres humanos. Por

experiencia propia, Job llegó a comprender los caminos

de Dios. Tras superar su prueba y ver cómo había

manejado Jehová la situación, dijo: ―Hablé, pero

no entendía cosas demasiado maravillosas para mí, las

cuales no conozco. De oídas he sabido de ti, pero ahora

mi propio ojo de veras te ve‖ (Job 42:3, 5).

7. ¿Qué vamos a estudiar a continuación, según se muestra en la página 116?

[ 7 ] [Textos] En cuanto a Jeremías, siguió buscando a Jehová y lo encontró. A diferencia de sus paisanos, no dejó de preguntarse durante decenios de servicio fiel ―dónde está Jehová‖. Basándonos en su ejemplo, veremos a continuación cómo podemos buscar y hallar a Jehová mediante la oración, el estudio y las experiencias personales (1 Cró. 28:9).

¿Qué implica preguntarse “dónde está Jehová”? ¿De qué maneras podrían haberse preguntado esto los contemporáneos de Jeremías?

[E.M.T] [Inicio]

[P.S] [Nº1] [Nº2] [Nº3]

[P.S] Lectura de la Biblia: Juan 12 a 16

[Nº1] Núm. 1: Juan 12:20-36

20 Ahora bien, había unos griegos entre los que

habían subido a adorar en la fiesta. 21

Estos, pues, se acercaron a Felipe, que era de Betsaida de Galilea, y empezaron a solicitarle, diciendo: ―Señor, queremos ver a Jesús‖.

22 Felipe vino y se lo dijo a Andrés. Andrés y

Felipe vinieron y se lo dijeron a Jesús.

23 Pero Jesús les contestó, y dijo: ―Ha llegado la hora

para que el Hijo del hombre sea glorificado. 24

Muy verdaderamente les digo: A menos que el grano de trigo caiga en la tierra y muera, permanece un solo [grano]; pero si muere, entonces lleva mucho fruto.

25 El que

tiene afecto a su alma la destruye, pero el que odia su alma en este mundo la resguardará para vida eterna. 26

Si alguien quiere ministrarme, sígame, y donde yo esté, allí también estará mi ministro. Si alguien quiere ministrarme, el Padre lo honrará.

27 Ahora mi alma está

perturbada, ¿y qué diré? Padre, sálvame de esta hora. No obstante, por esto he venido a esta hora.

28 Padre,

glorifica tu nombre‖. Luego vino una voz del cielo: ―[Lo] glorifiqué, y también [lo] glorificaré de nuevo‖.

29 Por lo tanto, la muchedumbre que estaba de pie

por allí y lo oyó empezó a decir que había tronado. Otros empezaron a decir: ―Un ángel le ha hablado‖. 30

En respuesta, Jesús dijo: ―Esta voz ha ocurrido, no por mí, sino por ustedes.

31 Ahora se somete a juicio a

este mundo; ahora el gobernante de este mundo será echado fuera.

32 Y sin embargo yo, si soy alzado de la

tierra, atraeré a mí a hombres de toda clase‖. 33

Esto realmente lo decía para significar qué clase de muerte estaba para morir.

34 Por lo tanto la muchedumbre le

contestó: ―Nosotros oímos, de la Ley, que el Cristo permanece para siempre; ¿y cómo es que dices tú que el Hijo del hombre tiene que ser alzado? ¿Quién es este Hijo del hombre?‖.

35 Entonces Jesús les dijo: ―La luz

estará entre ustedes un poco de tiempo todavía. Anden mientras tienen la luz, para que la oscuridad no los subyugue; y el que anda en la oscuridad no sabe adónde va.

36 Mientras tienen la luz, ejerzan fe en la luz,

para que lleguen a ser hijos de la luz‖.

Jesús habló estas cosas y se fue y se escondió de ellos.

[Nº2] Núm. 2: ¿A quiénes se aplicó primero el mérito

del sacrificio de Jesús, y con qué objetivo? (rs pág. 322

párr. 3–pág. 323 párr. 1)

¿A quiénes se aplicó primero el mérito del sacrificio de Jesús, y con qué objetivo?

Rom. 1:16: ―Las buenas nuevas [respecto a Jesucristo y el papel que él desempeña en el propósito

de Dios] [...] son, en realidad, el poder de Dios para salvación a todo el que tiene fe, al judío primero y también al griego.‖ (La invitación para beneficiarse de la salvación provista mediante Cristo se extendió primero a los judíos, y después a los no judíos.)

Efe. 1:11-14: ―En unión con [Cristo] nosotros [los judíos, entre ellos el apóstol Pablo] también fuimos asignados como herederos [¿Herederos de qué? Del Reino celestial] [...] para que sirviésemos para la alabanza de su gloria, nosotros los que hemos sido los primeros en esperar en el Cristo. Pero ustedes también [los cristianos que habían sido tomados de entre las naciones gentiles, como sucedía con relación a muchos cristianos de Éfeso] esperaron en él después que oyeron la palabra de la verdad, las buenas nuevas acerca de su salvación. Por medio de él también, después que ustedes creyeron, fueron sellados con el espíritu santo prometido, que es una prenda anticipada de nuestra herencia, con el propósito de poner en libertad por rescate la propia posesión de Dios, para su gloriosa alabanza.‖ (Esa herencia, como lo muestra 1 Pedro 1:4, está reservada en los cielos. Revelación 14:1-4 indica que los que participan en ella son 144.000 personas. Junto con Cristo, servirán como reyes y sacerdotes sobre la humanidad por 1.000 años, y durante ese tiempo se llevará a cabo el propósito de Dios de que la Tierra sea un paraíso poblado por la prole perfecta de la primera pareja humana.)

[Nº3] Núm. 3: ¿Por qué es apropiado llamar a Jehová

―el Dios que da paz‖? (Rom. 15:33)

33 Que el Dios que da paz esté con todos ustedes.

Amén.

[R. Servicio] [Inicio]

Cántico 98

5 min. Cómo iniciar estudios bíblicos el primer

sábado del mes. Discurso. Incluya una demostración

en la que un publicador demuestre cómo iniciar un

estudio bíblico el primer sábado de junio utilizando la

última página de La Atalaya. Anime a todos a

participar en esta labor.

Algunas presentaciones

Cómo iniciar estudios bíblicos el

primer sábado de junio

“Aunque todo el mundo quiere que haya

paz, hay guerras por todas partes. ¿Por qué

cree usted que es tan difícil alcanzar la paz?”

Luego de que la persona responda,

muéstrele el artículo que está en la última

página de La Atalaya del 1 de junio y

examine con ella la información que contesta

la primera pregunta y al menos uno de los

textos bíblicos. Ofrézcale las revistas y quede

en volver para analizar la siguiente pregunta.

Nota: Esta demostración debe presentarse en la reunión

para el servicio del campo del 1 de junio.

15 min. Reguemos las semillas que sembramos (1

Cor. 3:6-9). Análisis con el auditorio basado en las

siguientes preguntas: 1) ¿Qué es lo que más les gusta

de hacer revisitas? 2) ¿Por qué a veces es difícil hacer

revisitas? 3) ¿Cómo se pueden superar esos

obstáculos? 4) ¿Qué podemos hacer si necesitamos

ayuda para mejorar? 5) ¿Qué método utilizan para

acordarse de las personas que mostraron interés, del

tema del que hablaron, de la publicación que dejaron

y de otros detalles? 6) ¿Cómo se preparan para sus

revisitas? 7) ¿Por qué conviene sacar tiempo todas

las semanas para hacer revisitas?

(1 Corintios 3:6-9) Yo planté, Apolos regó, pero Dios siguió haciéndo[lo] crecer;

7 de modo que ni el que

planta es algo, ni el que riega, sino Dios que [lo] hace crecer.

8 Ahora bien, el que planta y el que riega uno

son, pero cada [persona] recibirá su propio galardón según su propia labor.

9 Porque somos colaboradores

de Dios. Ustedes son campo de Dios bajo cultivo, edificio de Dios.

10 min: “Aprovechemos los videos para ayudar a

nuestros estudiantes.” Análisis con el auditorio. Pida

a los presentes que cuenten cómo los ayudaron los

videos antes de hacerse Testigos.

Aprovechemos los videos para

ayudar a nuestros estudiantes

A fin de que Abrahán y Jeremías comprendieran

ciertas lecciones valiosas, Jehová usó palabras e

imágenes (Gé n. 15:5; Jer. 18:1-6). Nosotros

también podemos valernos de ayudas visuales,

como los videos, para lograr que nuestros

estudiantes capten el sentido de las verdades

bíblicas y las valoren. En el programa que se

muestra a continuación veremos en qué

momentos podríamos utilizar algunos de estos

videos. Ahora bien, no olvidemos que solo se

trata de una sugerencia, pues las necesidades de

los estudiantes varían.

Libro Enseña

Capítulo 1: Después del párrafo 17, vean Las

maravillas de la creación revelan la gloria de

Dios.

Capítulo 2: Al finalizar, vean La Biblia: el libro más

antiguo y actual.

Capítulo 9: Después del párrafo 14, vean Los testigos

de Jehová: organizados para predicar las buenas

nuevas.

Capítulo 14: Al finalizar, vean La Biblia: el poder

que ejerce en su vida.

Capítulo 15: Después del párrafo 10, vean Toda

nuestra asociación de hermanos.

Libro “Amor de Dios”

Capítulo 3: Después del párrafo 15, vean Los

jóvenes preguntan... ¿Cómo conseguir amigos

verdaderos?

Capítulo 4: Al finalizar, vean Respetemos la

autoridad de Jehová.

Capítulo 7: Después del párrafo 12, vean La negativa

a la sangre. La medicina acepta el reto.

Capítulo 9: Después del párrafo 6, vean Ejemplos

amonestadores para nuestros días.

Capítulo 17: Al finalizar, vean “Andamos por fe, no

por vista”.

Puede ser que haya estudiantes a los que les

beneficiaría ver otros videos. Por ejemplo, a quienes

sufren debido a la oposición les podrían animar los

videos Fieles ante las pruebas. Los testigos de Jehová

de la Unión Soviética y Los testigos de Jehová se

mantienen firmes ante el ataque nazi. Y a los más

jóvenes les podrían ayudar los videos Vayamos tras

metas que honran a Dios y Los jóvenes preguntan...

¿Qué haré con mi vida? Apuntemos en nuestros

ejemplares de los libros Enseña y “Amor de Dios”

cuándo sería conveniente ver un video con el

estudiante o prestárselo. Y según vayan saliendo

nuevas grabaciones, pensemos en cómo podríamos

utilizarlas para llegar al corazón de nuestros

estudiantes (Luc. 24:32).

Cántico 101 y oración

[Cántico 27 ][Atalaya] [Inicio]

[ 1 ][ 2 ][ 3 ][ 4 ][ 5 ][ 6 ][ 7 ][ 8 ][ 9 ][ 10 ][ 11 ][ 12

][ 13 ][ 14 ][ 15 ][ 16 ][ 17 ][ 18 ][ 19 ][ 20 ][ 21 ][

22 ][ 23 ][ 24 ][ 25 ]

Honremos el gran nombre de Jehová

“Glorificaré tu nombre hasta tiempo indefinido.”

(SAL. 86:12)

Cántico 101

¿LO PUEDE EXPLICAR?

¿Qué significa conocer el nombre de Dios?

Párrafo 3

¿Cómo ha ido revelando Jehová su nombre?

Párrafos 9 y 10

¿Qué implica andar “en el nombre de Jehová”?

Párrafo 17

1, 2. A diferencia de las iglesias de la cristiandad,

¿qué piensan del nombre de Dios los testigos de

Jehová?

[ 1 ] [Textos] EN GENERAL, las iglesias de la

cristiandad han dejado de emplear el nombre de Dios.

Por ejemplo, cierta versión inglesa de la Biblia dice en

su prólogo: “El uso de cualquier nombre propio para

el Dios que es uno y único [...] es enteramente

inapropiado para la fe universal de la Iglesia

Cristiana” (Revised Standard Version).

[ 2 ] [Textos] Los testigos de Jehová, en cambio,

estamos orgullosos de portar el nombre de Dios y

glorificarlo (lea Salmo 86:12 e Isaías 43:10). Además,

nos sentimos privilegiados por comprender el

significado de ese nombre y la cuestión universal

relacionada con su santificación (Mat. 6:9). Sin

embargo, este es un privilegio que nunca debemos

dar por sentado. Por eso analizaremos tres

importantes preguntas: 1) ¿Qué significa conocer el

nombre de Dios? 2) ¿Cómo ha sido Jehová fiel a su

gran nombre, glorificándolo de ese modo? 3) ¿Cómo

podemos andar “en el nombre de Jehová”?

¿QUÉ SIGNIFICA CONOCER EL NOMBRE DE DIOS?

3. ¿Qué significa conocer el nombre de Dios?

[ 3 ] [Textos] Conocer el nombre de Dios significa

mucho más que oír y pronunciar la palabra Jehová.

Implica conocer qué clase de Dios es Jehová, sus

cualidades, propósitos y actividades según se

exponen en la Biblia, por ejemplo, cuando esta habla

de cómo trata a sus siervos. Jehová concede este

entendimiento de manera progresiva, de acuerdo con

el desarrollo de su propósito (Prov. 4:18). Reveló su

nombre a nuestros primeros padres; de hecho, Eva lo

usó cuando dio a luz a Caín (Gén. 4:1). Los fieles

patriarcas Noé, Abrahán, Isaac y Jacob conocían el

nombre de Dios, y este cobró más significado para

ellos cuando Jehová los bendijo, los cuidó y los puso

al tanto de distintos aspectos de su propósito. Más

adelante, a Moisés le concedió una comprensión

especial del nombre divino.

Conocer el significado del nombre de Dios

fortaleció la fe de Moisés

4. ¿Por qué le preguntó Moisés a Dios cuál era su

nombre, y por qué estaba justificada su

preocupación?

[ 4 ] [Textos] Lea Éxodo 3:10-15. Cuando Moisés

tenía 80 años, Dios le mandó: “Saca tú de Egipto a mi

pueblo, los hijos de Israel”. Moisés respondió

respetuosamente con una pregunta que encerraba un

profundo significado. En realidad le preguntó cuál era

su nombre. Teniendo en cuenta que el nombre de

Dios se conocía desde hacía mucho, ¿qué pretendía

Moisés con su pregunta? Es obvio que deseaba saber

más sobre la persona representada por el nombre,

conocer hechos que convencieran a su pueblo de que

Dios de veras los iba a liberar. Su preocupación

estaba justificada, pues como los israelitas llevaban

algún tiempo siendo esclavos, tal vez dudarían de que

el Dios de sus antepasados fuera capaz de liberarlos.

Algunos de ellos incluso adoraban dioses egipcios

(Ezeq. 20:7, 8).

5. ¿Cómo aclaró Jehová el significado de su

nombre cuando le respondió a Moisés?

[ 5 ] [Textos] ¿Cómo respondió Jehová a la pregunta

de Moisés? En parte, dijo: “Esto es lo que has de decir

a los hijos de Israel: ‘YO RESULTARÉ SER me ha

enviado a ustedes. [...] Jehová el Dios de sus

antepasados [...] me ha enviado a ustedes’”. * Dios

prometió que llegaría a ser lo que él decidiera ser

para cumplir su propósito, es decir, que siempre

resultaría fiel a su palabra. Por lo tanto, en el

versículo 15 leemos que Jehová mismo dijo: “Este es

mi nombre hasta tiempo indefinido, y este es la

memoria de mí a generación tras generación”. Tal

revelación debió de fortalecer muchísimo la fe de

Moisés y llenarlo de temor reverente.

JEHOVÁ FUE FIEL A SU NOMBRE

6, 7. ¿Cómo fue Jehová completamente fiel a su

gran nombre?

[ 6 ] [Textos] Poco después de dar su comisión a

Moisés, Jehová fue completamente fiel a su gran

nombre “resultando ser” el Libertador de Israel.

Humilló a Egipto con 10 terribles plagas, con las que

puso al descubierto la impotencia de los dioses

egipcios, incluido el faraón (Éx. 12:12). Entonces

dividió el mar Rojo, condujo a Israel a través de él y

ahogó en sus aguas al faraón y su ejército (Sal.

136:13-15). En “el desierto grande e inspirador de

temor”, “resultó ser” el gran Conservador de la vida:

le dio alimento y agua a su pueblo, que se componía

de dos o tres millones de personas o hasta más. Y no

solo eso. Durante todo ese tiempo, las prendas de

vestir y las sandalias no se les gastaron (Deut. 1:19;

29:5). Como vemos, nada puede impedirle a Jehová

ser fiel a su incomparable nombre. Más adelante le

declaró a Isaías: “Yo... yo soy Jehová, y fuera de mí no

hay salvador” (Is. 43:11).

[ 7 ] [Textos] Josué, el sucesor de Moisés, también

presenció los impresionantes actos de Jehová en

Egipto y en el desierto. Por eso, hacia el fin de su vida,

pudo decir con plena convicción a sus hermanos

israelitas: “Ustedes bien saben con todo su corazón y

con toda su alma que ni una sola palabra de todas las

buenas palabras que Jehová su Dios les ha hablado ha

fallado. Todas se han realizado para ustedes. Ni una

sola palabra de ellas ha fallado” (Jos. 23:14). En

efecto, de manera muy clara, Jehová cumplió su

palabra, “resultó ser” lo que había prometido.

8. ¿Cómo está siendo Jehová fiel a su nombre hoy

día?

[ 8 ] [Textos] Hoy, de igual modo, Jehová está

“resultando ser” fiel a su nombre. Por medio de su

Hijo profetizó que durante los últimos días el mensaje

del Reino se predicaría “en toda la tierra habitada”

(Mat. 24:14). ¿Quién sino el Dios todopoderoso

podría predecir tal obra y encargarse de que se

llevara a cabo empleando a muchos “iletrados y del

vulgo”? (Hech. 4:13.) Así, al participar en esta obra,

participamos en el cumplimiento de la profecía

bíblica. Honramos a nuestro Padre y mostramos que

somos sinceros cuando decimos: “Santificado sea tu

nombre. Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como

en el cielo, también sobre la tierra” (Mat. 6:9, 10).

SU GRAN NOMBRE

El faraón no quiso reconocer que Jehová es Dios

9, 10. En su relación con Israel, ¿cómo fue

añadiendo Jehová significado a su nombre, y con

qué resultado?

[ 9 ] [Textos] Poco después del éxodo de Israel,

Jehová llegó a ser algo nuevo para su pueblo.

Mediante el pacto de la Ley, se convirtió en “su dueño

marital” y asumió con gusto todas las obligaciones

que ello suponía (Jer. 3:14). Los israelitas, por su

parte, llegaron a ser su “esposa”, el pueblo que él

eligió para que llevara su nombre (Is. 54:5, 6).

Cuando ellos se sometían a Dios de buena gana y

guardaban sus mandamientos, él resultaba ser el

“Esposo” perfecto. Los bendecía, los protegía y les

daba paz (Núm. 6:22-27). Como consecuencia, su

gran nombre era glorificado entre las naciones (lea

Deuteronomio 4:5-8 y Salmo 86:7-10). De hecho,

durante toda la historia de Israel hubo muchos

extranjeros que abrazaron la adoración verdadera. Su

decisión fue la misma que Rut la moabita le expresó a

Noemí: “Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios”

(Rut 1:16).

[ 10 ] [Textos] Durante unos mil quinientos años, la

relación de Jehová con Israel reveló muchas facetas

de la personalidad divina. A pesar de la rebeldía de la

nación, vez tras vez él fue “un Dios misericordioso” y

“tardo para la cólera”, de extraordinaria paciencia

(Éx. 34:5-7). Sin embargo, su paciencia tenía un

límite, y la nación judía lo sobrepasó cuando rechazó

y mató a Jesús (Mat. 23:37, 38). Los descendientes

naturales de Israel dejaron de ser el pueblo del

nombre de Dios. En su mayoría murieron

espiritualmente, como un árbol marchito (Luc.

23:31). ¿Qué efecto tuvo esto en su actitud para con

el nombre divino?

11. ¿A qué se debió que la nación judía dejara de

usar el nombre de Dios?

[ 11 ] [Textos] La historia indica que, con el tiempo,

los judíos llegaron a tener supersticiones respecto al

nombre de Dios, hasta el punto de creer que no

debían pronunciarlo (Éx. 20:7). De manera gradual

dejaron de usarlo. A Jehová sin duda le dolió mucho

esa enorme falta de respeto (Sal. 78:40, 41). Está

claro que el Dios “cuyo nombre es Celoso” no iba a

permitir que su nombre siguiera vinculado a unas

personas que, por haberlo rechazado a él, ya no

contaban con su favor (Éx. 34:14). Este hecho debe

grabar en nuestra mente la importancia de tratar con

sumo respeto el nombre del Creador.

UN NUEVO PUEBLO PORTA EL NOMBRE DE DIOS

12. ¿Cómo dio Jehová comienzo al predicho

“pueblo para su nombre”?

[ 12 ] [Textos] Jehová reveló mediante Jeremías su

propósito de establecer “un nuevo pacto” con una

nueva nación, el Israel espiritual. Además, predijo

que todos sus miembros lo conocerían, “desde el

menor de ellos aun hasta el mayor” (Jer. 31:31, 33,

34). Esa profecía empezó a cumplirse en el

Pentecostés del año 33 de nuestra era, cuando Dios

estableció el nuevo pacto. La nueva nación, “el Israel

de Dios”, compuesta de judíos y no judíos, llegó a ser

“un pueblo para su nombre”, o, como él dijo,

“personas que son llamadas por mi nombre” (Gál.

6:16; lea Hechos 15:14-17; Mat. 21:43).

13. a)?¿Por qué podemos estar seguros de que los

primeros cristianos emplearon el nombre de

Dios? b)?¿Cuánto valora usted el privilegio de

emplear el nombre de Jehová en su ministerio?

[ 13 ] [Textos] Como personas que eran llamadas

por el nombre de Jehová, los miembros de esa nación

espiritual emplearon el nombre divino, y obviamente

lo hicieron al citar de las Escrituras Hebreas. * Por

eso, cuando el apóstol Pedro se dirigió a un auditorio

internacional de judíos y prosélitos en el Pentecostés

del año 33, empleó ese nombre varias veces (Hech.

2:14, 20, 21, 25, 34). Los primeros cristianos

honraron a Jehová, y él, por su parte, bendijo su labor

predicadora. En la actualidad también bendice

nuestro ministerio cuando proclamamos su nombre

con orgullo y se lo mostramos a quienes nos

escuchan, de ser posible en su propia Biblia. De esa

manera les presentamos al Dios verdadero. ¡Qué

privilegio... tanto para ellos como para nosotros! Esa

presentación puede, en algunos casos, marcar el

comienzo de una maravillosa relación con Jehová que

seguirá creciendo por la eternidad.

14, 15. A pesar de la propagación de la apostasía,

¿qué ha hecho Jehová para proteger el nombre

por el que decidió ser recordado?

[ 14 ] [Textos] Posteriormente, la apostasía comenzó

a infectar a la congregación cristiana, sobre todo tras

la muerte de los apóstoles (2 Tes. 2:3-7). Hubo

maestros falsos que incluso adoptaron la tradición

judía de no emplear el nombre divino. Pero

¿permitiría Jehová que desapareciera el nombre con

el que decidió ser recordado? ¡Nunca! Es cierto que

no podemos determinar con exactitud cómo se

pronunciaba, pero el nombre ha perdurado. A lo largo

de las épocas ha aparecido en diversas traducciones

de la Biblia, así como en los escritos de distintos

biblistas. Por ejemplo, en 1757, Charles Peters

escribió que Jehová, a diferencia de los numerosos

títulos divinos, “parece ser la palabra que mejor

expresa su esencia”. Por su parte, Hopton Haynes

comenzó el capítulo 7 de un libro del año 1797 sobre

la adoración a Dios con estas palabras: “JEHOVÁ, el

nombre propio de DIOS entre los judíos, a quien solo

ellos adoraban, como también lo hicieron Cristo y sus

Apóstoles”. Henry Grew (1781-1862) no solo utilizó

el nombre de Dios, sino que también comprendió que

había sido tratado con falta de respeto y que debía

ser santificado. Y George Storrs (1796-1879),

estrecho colaborador de Charles T. Russell, empleó el

nombre de Dios, al igual que el propio Russell.

[ 15 ] [Textos] En este sentido, el año 1931 tuvo

especial importancia, pues los Estudiantes

Internacionales de la Biblia, como hasta entonces se

llamó a quienes formaban el pueblo de Dios,

adoptaron el nombre bíblico de testigos de Jehová (Is.

43:10-12). Así anunciaron al mundo que estaban

orgullosos de ser siervos del único Dios verdadero, de

ser “un pueblo para su nombre”, para alabar ese

nombre (Hech. 15:14). Aquellos sucesos nos

recuerdan estas palabras de Jehová que se

encuentran en Malaquías 1:11: “Desde el nacimiento

del sol aun hasta su puesta mi nombre será grande

entre las naciones”.

ANDE EN EL NOMBRE DE JEHOVÁ

16. ¿Por qué es un honor andar “en el nombre de

Jehová”?

[ 16 ] [Textos] El profeta Miqueas escribió: “Todos

los pueblos, por su parte, andarán cada cual en el

nombre de su dios; pero nosotros, por nuestra parte,

andaremos en el nombre de Jehová nuestro Dios

hasta tiempo indefinido, aun para siempre” (Miq.

4:5). Para los Estudiantes de la Biblia, el hecho de que

Jehová permitiera que adoptaran su nombre no solo

fue un gran honor, sino también una garantía de que

tenían su aprobación (lea Malaquías 3:16-18). Ahora

bien, ¿cuánto valora usted ese privilegio? ¿Se

esfuerza al máximo por andar “en el nombre de

Jehová”? ¿Comprende lo que eso implica?

17. ¿Qué implica andar en el nombre de Dios?

[ 17 ] [Textos] Andar en el nombre de Dios implica al

menos tres cosas. Primero, debemos proclamar ese

nombre, pues reconocemos que solo aquel que

“invoque el nombre de Jehová será salvo” (Rom.

10:13). Segundo, tenemos que reflejar las cualidades

divinas, en especial el amor (1 Juan 4:8). Y tercero,

hemos de someternos de buena gana a las justas

normas de nuestro Padre celestial para no traerle

ninguna deshonra a su santo nombre (1 Juan 5:3).

¿Está usted resuelto a andar “en el nombre de Jehová

nuestro Dios hasta tiempo indefinido”?

18. ¿Por qué razón pueden mirar al futuro con

confianza todos los que honran el nombre de

Jehová?

[ 18 ] [Textos] Muy pronto, todos los que pasan por

alto o desafían a Jehová tendrán que saber quién es él

(Ezeq. 38:23). Entre ellos estarán personas

semejantes a aquel faraón que dijo: “¿Quién es

Jehová, para que yo obedezca su voz[?]”. Él lo

averiguó por las malas (Éx. 5:1, 2; 9:16; 12:29).

Nosotros, en cambio, hemos llegado a conocer a

Jehová porque así lo quisimos. Estamos orgullosos de

llevar su nombre y de formar parte del obediente

“pueblo para su nombre”. Por lo tanto, miramos al

futuro con confianza en la promesa que se halla en

Salmo 9:10: “Los que conocen tu nombre confiarán

en ti, porque ciertamente no dejarás a los que te

buscan, oh Jehová”.

Textos del Libro

Párrafo 1

(Jeremías 9:1-3) ¡Oh, que mi cabeza fuera aguas, y que mis ojos fueran fuente de lágrimas! Entonces podría llorar día y noche por aquellos de la hija de mi pueblo que fueron muertos.

2 ¡Oh, que tuviera yo en el desierto

un lugar de alojamiento de viajeros! Entonces dejaría a mi pueblo y me iría de ellos, porque todos ellos son adúlteros, una asamblea solemne de hombres traicioneros en sus tratos;

3 y doblan su lengua como su

arco en falsedad; pero no por fidelidad han resultado poderosos en el país. ―Pues de maldad en maldad procedieron, y aun a mí me pasaron por alto‖, es la expresión de Jehová.

(Jeremías 8:20, 21) ―¡Ha pasado la siega, se ha acabado el verano; pero en cuanto a nosotros, no hemos sido salvados!‖

21 Por el quebranto de la hija de

mi pueblo he quedado desbaratado. Me he entristecido. Pasmo absoluto se ha apoderado de mí.

(Jeremías 6:19) ¡Escucha, oh tierra! Aquí voy a traer calamidad sobre este pueblo como el fruto de sus pensamientos, porque no prestaron atención a mis propias palabras; y mi ley... también siguieron rechazándola.‖

(Jeremías 9:13) Y Jehová procedió a decir: ―Por motivo de que dejaron mi ley que di [para que estuviera] delante de ellos, y [porque] no han obedecido mi voz y no han andado en ella,

Párrafo 2

(Jeremías 5:31) Los profetas mismos realmente profetizan en falsedad; y en cuanto a los sacerdotes, van sojuzgando conforme a sus poderes. Y mi propio pueblo así [lo] ha amado; ¿y qué harán ustedes al final de ello?‖

(Jeremías 6:14) Y tratan de sanar el quebranto de mi pueblo livianamente, diciendo: ‗¡Hay paz! ¡Hay paz!‘, cuando no hay paz.

(Jeremías 2:6) Y no han dicho: ‗¿Dónde está Jehová, Aquel que nos hizo subir de la tierra de Egipto, Aquel que nos llevó andando por el desierto, por una tierra de llanura desértica y de hoyo, por una tierra falta de agua, y de sombra profunda, por una tierra a través de la cual ningún hombre pasó y en la cual no moró hombre terrestre alguno?‘.

(Jeremías 2:8) Los sacerdotes mismos no dijeron: ‗¿Dónde está Jehová?‘. Y los mismísimos que manejaban la ley no me conocieron; y los pastores mismos transgredieron contra mí, y hasta los profetas profetizaron por Baal, y anduvieron en pos de los que no podían traer provecho.

Párrafo 3

(Jeremías 29:13, 14) ‖‗Y ustedes realmente me buscarán y [me] hallarán, porque me buscarán con todo su corazón.

14 Y yo mismo ciertamente me dejaré hallar

por ustedes —es la expresión de Jehová—. Y ciertamente recogeré a su cuerpo de cautivos y los juntaré a ustedes de todas las naciones y de todos los lugares a los cuales los he dispersado —es la expresión de Jehová—. Y de veras los traeré de vuelta al lugar del cual los hice ir al destierro.‘

(Salmo 25:4) Hazme conocer tus propios caminos, oh Jehová; enséñame tus propias sendas.

(Jeremías 33:3) ‗Llámame, y yo te responderé y prontamente te informaré de cosas grandes e incomprensibles que no has conocido‘‖.

Párrafo 5

(Proverbios 17:10) Una reprensión obra más

profundamente en un entendido que el golpear cien

veces a un estúpido.

Párrafo 6

(Job 35:10) Y, no obstante, nadie ha dicho: ‗¿Dónde está Dios mi Magnífico Hacedor, El que da melodías en la noche?‘.

(Job 37:14) Presta oído a esto, sí, oh Job; deténte y muéstrate atento a las maravillosas obras de Dios.

(Job 42:3) ‗¿Quién es este que está oscureciendo el consejo sin conocimiento?‘ Por eso hablé, pero no entendía cosas demasiado maravillosas para mí, las cuales no conozco.

(Job 42:5) De oídas he sabido de ti, pero ahora mi propio ojo de veras te ve.

Párrafo 7

(1 Crónicas 28:9) ‖Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al

Dios de tu padre y sírvele con corazón completo y con

alma deleitosa; porque todos los corazones Jehová los

está escudriñando, y toda inclinación de los

pensamientos la está discerniendo. Si tú lo buscas, él se

dejará hallar de ti; pero si lo dejas, él te desechará para

siempre.

Textos Atalaya

Párrafo 1

(Hebreos 11:13)En fe murieron todos estos, aunque no

consiguieron [el cumplimiento de] las promesas, pero

las vieron desde lejos y las acogieron, y declararon

públicamente que eran extraños y residentes

temporales en la tierra.

Párrafo 2

(Filipenses 3:20)En cuanto a nosotros, nuestra ciudadanía existe en los cielos, lugar de donde también aguardamos con intenso anhelo a un salvador, el Señor Jesucristo, (1 Pedro 2:11)Amados, los exhorto como a forasteros y residentes temporales a que sigan absteniéndose de los deseos carnales, los cuales son los mismísimos que llevan a cabo un conflicto en contra del alma. (Juan 10:16)”Y tengo otras ovejas, que no son de este redil; a esas también tengo que traer, y escucharán mi voz, y llegarán a ser un solo rebaño, un solo pastor. (Juan 17:16)Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo. (Salmo 90:1)Oh Jehová, tú mismo has resultado ser una verdadera morada para nosotros durante generación tras generación.

Párrafo 3

(Salmo 90:1)Oh Jehová, tú mismo has resultado ser una verdadera morada para nosotros durante generación tras generación. (1 Juan 4:8)El que no ama no ha llegado a conocer a Dios, porque Dios es amor. (Salmo 4:8)En paz ciertamente me acostaré y también dormiré, porque tú, sí, tú solo, oh Jehová, me haces morar en seguridad.

Párrafo 4

(Génesis 12:1-3)Y Jehová procedió a decir a Abrán:

“Vete de tu país y de tus parientes y de la casa de tu

padre al país que yo te mostraré;2 y haré de ti una

nación grande y te bendeciré y de veras haré grande tu

nombre; y resulta ser tú una bendición. 3 Y ciertamente

bendeciré a los que te bendigan, y al que invoque mal

sobre ti lo maldeciré, y ciertamente se bendecirán por

medio de ti todas las familias del suelo”.

Párrafo 5

(Génesis 26:1-6)Ahora bien, surgió un hambre en el país, además de la primera hambre que ocurrió en los días de Abrahán, de modo que Isaac se dirigió hacia Abimélec, rey de los filisteos, a Guerar. 2 Entonces Jehová se le apareció y dijo: “No bajes a Egipto. Reside en el país que yo te designe. 3 Reside como forastero en este país, y yo continuaré contigo y te bendeciré, porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y ciertamente pondré por obra la declaración jurada que juré a Abrahán tu padre: 4 ‘Y ciertamente multiplicaré tu descendencia como las estrellas de los cielos y verdaderamente daré a tu descendencia todas estas tierras; y por medio de tu descendencia ciertamente se bendecirán todas las naciones de la tierra’, 5 debido a que Abrahán escuchó mi voz y continuó guardando sus obligaciones para conmigo, mis mandatos, mis estatutos y mis leyes”. 6 De modo que Isaac siguió morando en Guerar. (Génesis 12:14-20)Sucedió, pues, que tan pronto como Abrán entró en Egipto, los egipcios llegaron a ver a la mujer, que ella era muy hermosa. 15 Y también los príncipes de Faraón llegaron a verla y empezaron a alabársela a Faraón, de modo que la mujer fue llevada a casa de Faraón. 16 Y él trató bien a Abrán por causa de ella, y este llegó a tener ovejas y ganado vacuno y asnos y siervos y siervas y asnas y camellos. 17 Entonces Jehová tocó a Faraón y a su casa con grandes plagas por

causa de Sarai, esposa de Abrán. 18 Por lo tanto Faraón llamó a Abrán y dijo: “¿Qué es esto que me has hecho? ¿Por qué no me informaste que era tu esposa? 19 ¿Por qué dijiste: ‘Es mi hermana’, de modo que yo estuve a punto de tomarla por esposa? Y ahora, aquí está tu esposa. ¡Tómala y vete!”. 20 Y Faraón dio mandatos respecto de él a unos hombres, y estos se fueron acompañándolo en despedida a él y a su esposa y todo cuanto tenía. (Génesis 20:1-14)Ahora bien, Abrahán mudó su campamento de allí a la tierra del Négueb y se puso a morar entre Qadés y Sur y a residir como forastero en Guerar. 2 Y repitió Abrahán respecto a Sara su esposa: “Es mi hermana”. Ante aquello, Abimélec rey de Guerar envió, y tomó a Sara. 3 Después Dios vino a Abimélec en un sueño de noche y le dijo: “Mira que puedes darte por muerto a causa de la mujer que has tomado, puesto que es poseída por otro dueño como esposa”. 4 Sin embargo, Abimélec no se había acercado a ella. Por eso dijo: “Jehová, ¿matarás a una nación que es verdaderamente justa? 5 ¿No me dijo él: ‘Es mi hermana’?, y ella... ¿no dijo ella también: ‘Es mi hermano’? En la honradez de mi corazón y con inocencia de mis manos he hecho esto”.6 Ante aquello, el Dios [verdadero] le dijo en el sueño: “Yo también he sabido que has hecho esto en la honradez de tu corazón, y también estaba deteniéndote de pecar contra mí. Por eso no te permití tocarla.7 Pero ahora, devuelve la esposa del hombre, porque es profeta, y él hará súplica por ti. Así que, sigue viviendo. Pero si no la vas a devolver, sabe que positivamente morirás, tú y todos los que son tuyos”. 8 De modo que Abimélec se levantó muy de mañana y procedió a llamar a todos sus siervos y a hablar de todas estas cosas a oídos de ellos. Y a los hombres les dio mucho miedo. 9 Entonces llamó Abimélec a Abrahán y le dijo: “¿Qué nos has hecho, y qué pecado he cometido yo contra ti, para que hayas traído sobre mí y sobre mi reino un pecado grande? Obras que no debieran haberse hecho has hecho tú respecto a mí”. 10 Y Abimélec pasó a decir a Abrahán: “¿Qué tenías en mira para que hayas hecho esta cosa?”. 11 A esto Abrahán dijo: “Fue porque me dije a mí mismo: ‘Sin duda no hay temor de Dios en este lugar, y ciertamente me matarán por causa de mi esposa’. 12 Y, además, ella en verdad es mi hermana, hija de mi padre, solo que no es hija de mi madre; y vino a ser mi esposa. 13 Y aconteció que, cuando Dios me hizo salir errante de la casa de mi padre, entonces le dije a ella: ‘Esta es tu bondad amorosa que puedes ejercer para conmigo: En todo lugar adonde lleguemos, di de mí: “Es mi hermano”’”. 14 Después de eso Abimélec tomó ovejas y ganado vacuno y siervos y siervas y los dio a Abrahán, y le devolvió a Sara su esposa.

(Génesis 26:6-11)De modo que Isaac siguió morando en Guerar.7 Ahora bien, los hombres del lugar preguntaban de continuo acerca de su esposa, y él decía: “Es mi hermana”. Pues tenía miedo de decir: “Mi esposa”, por temor de que, según decía él, “los hombres del lugar me maten a causa de Rebeca”, porque era de apariencia atractiva.8 Aconteció, pues, que como se le extendían los días allí, Abimélec, rey de los filisteos, estaba mirando por la ventana y observando la escena, y allí estaba Isaac divirtiéndose con Rebeca su esposa. 9 En seguida Abimélec llamó a Isaac y dijo: “¡Claro está que ella es tu esposa! Entonces, ¿cómo es que dijiste: ‘Es mi hermana’?”. Ante esto, le dijo Isaac: “Lo dije por temor de morir a causa de ella”. 10 Pero Abimélec continuó: “¿Qué es esto que nos has hecho? ¡Un poco más y ciertamente alguno del pueblo se hubiera acostado con tu esposa, y habrías traído sobre nosotros culpa!”. 11 Entonces mandó Abimélec a todo el pueblo, diciendo: “¡Cualquiera que toque a este hombre y a su esposa, de seguro será muerto!”. (Salmo 105:14, 15)No permitió que ningún humano los defraudara, antes bien, a causa de ellos censuró a reyes, 15 [diciendo:] “No toquen ustedes a mis ungidos, y a mis profetas no hagan nada malo”.

Párrafo 6

(Génesis 28:1, 2)Por consiguiente, Isaac llamó a Jacob y lo bendijo y le mandó y le dijo: “No debes tomar esposa de las hijas de Canaán.2 Levántate, ve a Padán-aram, a la casa de Betuel, padre de tu madre, y de allí tómate una esposa de las hijas de Labán el hermano de tu madre. (Génesis 28:10)Y Jacob continuó su salida de Beer-seba y siguió encaminándose hacia Harán.

Párrafo 7

(Génesis 28:15)Y aquí estoy yo contigo y ciertamente te

guardaré en todo el camino por el cual estás yendo, y

ciertamente te haré volver a este suelo, porque no voy

a dejarte hasta que realmente haya hecho lo que te he

hablado”.

Párrafo 8

(Génesis 31:41, 42)Van ya para mí veinte años en tu casa. Te he servido catorce años por tus dos hijas y seis años por tu rebaño, y seguiste cambiando mi salario diez veces. 42 Si el Dios de mi padre, el Dios de Abrahán y el Pavor de Isaac, no hubiera resultado estar de parte

mía, me habrías enviado ahora con las manos vacías. Mi miseria y el afán de mis manos los ha visto Dios, de modo que te censuró anoche”. (Génesis 30:43)Y el hombre siguió aumentando más y más, y llegaron a ser suyos grandes rebaños, y siervas y siervos, y camellos y asnos. (Génesis 32:10)indigno soy de todas las bondades amorosas y de toda la fidelidad que has ejercido para con tu siervo, porque con solo mi bastón crucé este Jordán y ahora he llegado a ser dos campamentos.

Párrafo 9

(Salmo 90:1)Oh Jehová, tú mismo has resultado ser una verdadera morada para nosotros durante generación tras generación. (Santiago 1:17)Toda dádiva buena y todo don perfecto es de arriba, porque desciende del Padre de las luces [celestes], y con él no hay la variación del giro de la sombra.

Párrafo 10

(Revelación 12:17)Y el dragón se airó contra la mujer, y se fue para hacer guerra contra los restantes de la descendencia de ella, los cuales observan los mandamientos de Dios y tienen la obra de dar testimonio de Jesús. (Isaías 54:14)Resultarás estar firmemente establecida en la justicia misma. Estarás lejos de la opresión —pues no temerás— y de cualquier cosa aterradora, porque no se acercará a ti. (Isaías 54:17)Sea cual sea el arma que se forme contra ti, no tendrá éxito, y sea cual sea la lengua que se levante contra ti en el juicio, la condenarás. Esta es la posesión hereditaria de los siervos de Jehová, y su justicia proviene de mí”, es la expresión de Jehová.

Párrafo 11

(Génesis 27:46)Después Rebeca siguió diciendo a Isaac: “He llegado a aborrecer esta vida mía a causa de las hijas de Het. Si alguna vez Jacob toma esposa de las hijas de Het como estas de las hijas del país, ¿de qué me sirve la vida?”. (2 Corintios 4:4)entre quienes el dios de este sistema de cosas ha cegado las mentes de los incrédulos, para que no pase [a ellos] la iluminación de las gloriosas buenas nuevas acerca del Cristo, que es la imagen de Dios. (Efesios 2:1, 2)Además, a ustedes [Dios los vivificó] aunque estaban muertos en sus ofensas y pecados, 2 en

los cuales en un tiempo anduvieron conforme al sistema de cosas de este mundo, conforme al gobernante de la autoridad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de la desobediencia.

Párrafo 12

(Efesios 4:8-12)Por lo cual él dice: “Cuando ascendió a

lo alto se llevó cautivos; dio dádivas [en]

hombres”. 9 Ahora bien, la expresión “ascendió”, ¿qué

significa, sino que también descendió a las regiones

inferiores, es decir, a la tierra? 10 El mismísimo que

descendió también es el que ascendió muy por encima

de todos los cielos, para dar plenitud a todas las

cosas. 11 Y dio algunos como apóstoles, algunos como

profetas, algunos como evangelizadores, algunos como

pastores y maestros, 12 con miras al reajuste de los

santos, para obra ministerial, para la edificación del

cuerpo del Cristo,

Párrafo 13

(Hebreos 11:13)En fe murieron todos estos, aunque no consiguieron [el cumplimiento de] las promesas, pero las vieron desde lejos y las acogieron, y declararon públicamente que eran extraños y residentes temporales en la tierra. (Efesios 6:12)porque tenemos una lucha, no contra sangre y carne, sino contra los gobiernos, contra las autoridades, contra los gobernantes mundiales de esta oscuridad, contra las fuerzas espirituales inicuas en los lugares celestiales.

Párrafo 14

(2 Corintios 4:18)mientras tenemos los ojos fijos, no en las cosas que se ven, sino en las que no se ven. Porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. (Hebreos 11:10)Porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos verdaderos, cuyo edificador y hacedor es Dios. (2 Pedro 3:11, 12)Puesto que todas estas cosas así han de ser disueltas, ¡qué clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoción piadosa, 12 esperando y teniendo muy presente la presencia del día de Jehová, por el cual [los] cielos, estando encendidos, serán disueltos, y [los] elementos, estando intensamente calientes, se derretirán!

Párrafo 15

(Mateo 24:7, 8)”Porque se levantará nación contra nación y reino contra reino, y habrá escaseces de alimento y terremotos en un lugar tras otro. 8 Todas estas cosas son principio de dolores de angustia. (Habacuc 3:16, 17)Oí, y mi vientre empezó a agitarse; al sonido mis labios temblaron; podredumbre empezó a entrar en mis huesos; y en mi situación estuve agitado, para esperar calladamente el día de la angustia, para [su] subida al pueblo, [para] hacer él incursión contra ellos. 17 Aunque [la] higuera misma no florezca, y no haya fruto en las vides; la obra de[l] olivo realmente resulte un fracaso, y los terraplenes mismos realmente no produzcan alimento; [el] rebaño realmente sea cortado de[l] aprisco, y no haya vacada en los cercados; (Revelación 6:15-17)Y los reyes de la tierra y los de primer rango y los comandantes militares y los ricos y los fuertes y todo esclavo y [toda] persona libre se escondieron en las cuevas y en las masas rocosas de las montañas. 16 Y siguen diciendo a las montañas y a las masas rocosas: “Caigan sobre nosotros y escóndannos del rostro del que está sentado en el trono, y de la ira del Cordero, 17 porque ha llegado el gran día de la ira de ellos, y ¿quién puede estar de pie?”.

Párrafo 16

(Habacuc 3:18)sin embargo, en cuanto a mí, ciertamente me alborozaré en Jehová mismo; ciertamente estaré gozoso en el Dios de mi salvación. (Revelación 7:9)Después de estas cosas vi, y, ¡miren!, una gran muchedumbre, que ningún hombre podía contar, de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos de largas ropas blancas; y había ramas de palmera en sus manos. (Éxodo 13:18)Por lo tanto, Dios hizo que el pueblo rodeara por el camino del desierto del mar Rojo. Pero fue en orden de batalla como subieron los hijos de Israel de la tierra de Egipto. (Isaías 26:20)”Anda, pueblo mío, entra en tus cuartos interiores, y cierra tus puertas tras de ti. Escóndete por solo un momento hasta que pase la denunciación. (Hebreos 13:17)Sean obedientes a los que llevan la delantera entre ustedes, y sean sumisos, porque ellos están velando por las almas de ustedes como los que han de rendir cuenta; para que ellos lo hagan con gozo y no con suspiros, por cuanto esto les sería gravemente dañoso a ustedes.

Párrafo 17

(Éxodo 3:6)Y siguió diciendo: “Yo soy el Dios de tu padre, el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob”. Entonces Moisés ocultó su rostro, porque temía mirar al Dios [verdadero]. (Lucas 20:38)Él no es Dios de muertos, sino de vivos, porque para él todos ellos viven”. (Eclesiastés 7:1)Mejor es un nombre que el buen aceite, y el día de la muerte que el día en que uno nace.

Párrafo 18

(Revelación 21:3)Con eso, oí una voz fuerte desde el trono decir: “¡Mira! La tienda de Dios está con la humanidad, y él residirá con ellos, y ellos serán sus pueblos. Y Dios mismo estará con ellos. (1 Corintios 15:28)Pero cuando todas las cosas le hayan sido sujetadas, entonces el Hijo mismo también se sujetará a Aquel que le sujetó todas las cosas, para que Dios sea todas las cosas para con todos.

Cántico 6

La oración del siervo de Dios (Efesios 6:18)

1. Padre, Jehová, altísimo Dios,

digno es tu nombre de veneración.

Eres tan tierno, tan justo y fiel,

en ti yo pongo toda mi fe.

En ti pongo yo mi fe,

Padre tierno, justo y fiel.

2. Tu voluntad enséñame a hacer,

a amar tus leyes con mi entero ser.

A los humildes quiero buscar

y consolarlos con tu verdad.

Tu consuelo quiero dar

al humilde, oh Jehová.

3. Lléname, Dios, de tu paz y amor,

dame también un sabio corazón.

Tu compasión deseo mostrar

y salvación a todos llevar.

Salvación voy a llevar

y tu compasión mostrar.

(Véanse también Sal. 143:10; Juan 21:15-17; Sant. 1:5.)

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Cántico 98

Sembremos las semillas del Reino (Mateo 13:4-8)

1. Oh, vengan, esclavos de Cristo

que sirven con todo su ser,

trabajen en la obra del Amo

y sigan los pasos de él.

Esparzan semillas de la verdad,

sabiendo que algunas caerán

en la tierra blanda de un buen corazón

y seguro fructificarán.

2. Habrá corazones cerrados,

tan duros como el pedernal;

aun si la palabra aceptaran,

su gozo será temporal.

A otros, los cardos oprimirán,

y fruto al final no darán.

Su amor al dinero y a lo mundanal

puede más que su amor a Jehová.

3. El éxito de tus labores

en parte depende de ti.

Con mucha paciencia y cariño

podrás corazones abrir.

En ellos el grano germinará,

y a su tiempo fruto verás.

Mas no todos rinden igual cantidad;

eso sí, gloria a Dios todos dan.

(Véanse también Mat. 13:19-23; 22:37.) Volver

Cántico 101

Anunciemos la verdad del Reino (Hechos 20:20, 21)

1. A tientas ya no andamos más.

¡Llegó la luz de la verdad!

Del error Dios nos libró

y los temores disipó.

Nos enseñó a amar su ley,

a obedecer a Cristo, el Rey;

nos mandó a proclamar

Su santo nombre y Su voluntad.

Fiel testimonio demos, pues,

a todo hombre y mujer;

así la luz verán brillar

y libertad alcanzarán.

A todo el mundo llegará

la fama del Señor Jehová.

Nuestra voz escucharán

en tanto Dios no diga: “Basta ya”.

(Véanse también Jos. 9:9; Isa. 24:15; Juan 8:12, 32.)

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Cántico 27

¡Ponte del lado de Jehová! (Éxodo 32:26)

1. En confusión vive la humanidad,

bebe la copa de la falsedad.

¡Qué dicha fue conocer la verdad,

de Babilonia salir!

(ESTRIBILLO)

Ponte con firmeza

del lado de Dios.

Él no te abandona,

es tu protector.

El Reino de Cristo

sal a predicar,

pues es la esperanza

de la humanidad.

2. A Dios servimos con sumo placer

y la semilla sembramos con fe.

A nuestro hermano invitamos también

a unir su voz en canción.

(ESTRIBILLO)

Ponte con firmeza

del lado de Dios.

Él no te abandona,

es tu protector.

El Reino de Cristo

sal a predicar,

pues es la esperanza

de la humanidad.

3. No sentiremos pavor de Satán,

nuestra confianza reposa en Jehová.

Aunque sean muchos, no nos vencerán:

Dios es refugio y poder.

(ESTRIBILLO)

Ponte con firmeza

del lado de Dios.

Él no te abandona,

es tu protector.

El Reino de Cristo

sal a predicar,

pues es la esperanza

de la humanidad.

(Véanse también Sal. 94:14; Pro. 3:5, 6; Heb. 13:5.)

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Cántico 101

Anunciemos la verdad del Reino (Hechos 20:20, 21)

1. A tientas ya no andamos más.

¡Llegó la luz de la verdad!

Del error Dios nos libró

y los temores disipó.

Nos enseñó a amar su ley,

a obedecer a Cristo, el Rey;

nos mandó a proclamar

Su santo nombre y Su voluntad.

Fiel testimonio demos, pues,

a todo hombre y mujer;

así la luz verán brillar

y libertad alcanzarán.

A todo el mundo llegará

la fama del Señor Jehová.

Nuestra voz escucharán

en tanto Dios no diga: “Basta ya”.

(Véanse también Jos. 9:9; Isa. 24:15; Juan 8:12, 32.)

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Juan 12 a 16

12 De consiguiente, Jesús, seis días antes de la

pascua, llegó a Betania, donde estaba Lázaro, a quien Jesús había levantado de entre los muertos.

2 De modo

que le dieron una cena allí, y Marta estaba sirviendo, pero Lázaro era uno de los que estaban reclinados a la mesa con él.

3 María, pues, tomó una libra de aceite

perfumado, nardo genuino, muy costoso, y le untó los pies a Jesús y le enjugó los pies con sus cabellos. La casa se llenó de la fragancia del aceite perfumado. 4 Pero Judas Iscariote, uno de sus discípulos, que

estaba para traicionarlo, dijo: 5 ―¿Por qué no se vendió

este aceite perfumado por trescientos denarios y se dio a los pobres?‖.

6 Dijo esto, sin embargo, no porque le

importaran los pobres, sino porque era ladrón y tenía la caja del dinero y se llevaba el dinero que se echaba en ella.

7 Por eso Jesús dijo: ―Déjala, para que guarde esta

observancia en vista del día de mi entierro. 8 Porque a

los pobres siempre los tienen con ustedes, pero a mí no me tendrán siempre‖.

9 Así que una gran muchedumbre de los judíos llegó

a saber que él estaba allí, y vinieron, no a causa de Jesús solamente, sino también para ver a Lázaro, a quien él había levantado de entre los muertos.

10 Los

sacerdotes principales ahora entraron en consejo para matar también a Lázaro,

11 porque a causa de él

muchos de los judíos iban allá y ponían fe en Jesús.

12 Al día siguiente la gran muchedumbre que había

venido a la fiesta, al oír que Jesús venía a Jerusalén, 13

tomaron ramas de palmeras y salieron a su encuentro. Y se pusieron a gritar: ―¡Salva, te rogamos! ¡Bendito es el que viene en el nombre de Jehová, sí, el rey de Israel!‖.

14 Pero Jesús, habiendo hallado un

asnillo, se sentó sobre él, así como está escrito: 15

―No temas, hija de Sión. ¡Mira! Tu rey viene, sentado sobre un pollino de asna‖.

16 Al principio sus discípulos no se

fijaron en estas cosas, pero cuando Jesús fue glorificado, entonces recordaron que estas cosas estaban escritas respecto a él, y que le habían hecho estas cosas.

17 En efecto, la muchedumbre que estaba con él

cuando él llamó a Lázaro de la tumba conmemorativa y lo levantó de entre los muertos siguió dando testimonio. 18

A causa de esto también salió a su encuentro la muchedumbre, porque oyeron que había ejecutado esta señal.

19 Por lo tanto, los fariseos dijeron entre sí:

―Observan que ustedes no logran absolutamente nada. ¡Miren! El mundo se ha ido tras él‖.

20 Ahora bien, había unos griegos entre los que

habían subido a adorar en la fiesta. 21

Estos, pues, se acercaron a Felipe, que era de Betsaida de Galilea, y empezaron a solicitarle, diciendo: ―Señor, queremos ver

a Jesús‖. 22

Felipe vino y se lo dijo a Andrés. Andrés y Felipe vinieron y se lo dijeron a Jesús.

23 Pero Jesús les contestó, y dijo: ―Ha llegado la hora

para que el Hijo del hombre sea glorificado. 24

Muy verdaderamente les digo: A menos que el grano de trigo caiga en la tierra y muera, permanece un solo [grano]; pero si muere, entonces lleva mucho fruto.

25 El que

tiene afecto a su alma la destruye, pero el que odia su alma en este mundo la resguardará para vida eterna. 26

Si alguien quiere ministrarme, sígame, y donde yo esté, allí también estará mi ministro. Si alguien quiere ministrarme, el Padre lo honrará.

27 Ahora mi alma está

perturbada, ¿y qué diré? Padre, sálvame de esta hora. No obstante, por esto he venido a esta hora.

28 Padre,

glorifica tu nombre‖. Luego vino una voz del cielo: ―[Lo] glorifiqué, y también [lo] glorificaré de nuevo‖.

29 Por lo tanto, la muchedumbre que estaba de pie

por allí y lo oyó empezó a decir que había tronado. Otros empezaron a decir: ―Un ángel le ha hablado‖. 30

En respuesta, Jesús dijo: ―Esta voz ha ocurrido, no por mí, sino por ustedes.

31 Ahora se somete a juicio a

este mundo; ahora el gobernante de este mundo será echado fuera.

32 Y sin embargo yo, si soy alzado de la

tierra, atraeré a mí a hombres de toda clase‖. 33

Esto realmente lo decía para significar qué clase de muerte estaba para morir.

34 Por lo tanto la muchedumbre le

contestó: ―Nosotros oímos, de la Ley, que el Cristo permanece para siempre; ¿y cómo es que dices tú que el Hijo del hombre tiene que ser alzado? ¿Quién es este Hijo del hombre?‖.

35 Entonces Jesús les dijo: ―La luz

estará entre ustedes un poco de tiempo todavía. Anden mientras tienen la luz, para que la oscuridad no los subyugue; y el que anda en la oscuridad no sabe adónde va.

36 Mientras tienen la luz, ejerzan fe en la luz,

para que lleguen a ser hijos de la luz‖.

Jesús habló estas cosas y se fue y se escondió de ellos.

37 Pero aunque había ejecutado tantas señales

delante de ellos, no ponían fe en él, 38

de modo que se cumplió la palabra de Isaías el profeta, que él dijo: ―Jehová, ¿quién ha puesto fe en la cosa oída por nosotros? Y en cuanto al brazo de Jehová, ¿a quién ha sido revelado?‖.

39 La razón por la cual no podían creer

es que otra vez dijo Isaías: 40

―Él les ha cegado los ojos y ha hecho duro su corazón, para que no vean con los ojos y capten la idea con su corazón y se vuelvan y yo los sane‖.

41 Isaías dijo estas cosas porque vio su gloria,

y habló de él. 42

Con todo, hasta de los gobernantes muchos realmente pusieron fe en él, pero a causa de los fariseos no [lo] confesaban, para no ser expulsados de la sinagoga;

43 porque amaban la gloria de los hombres

más que la misma gloria de Dios.

44 Sin embargo, Jesús clamó y dijo: ―El que pone fe

en mí, no pone fe en mí [solamente], sino [también] en el que me ha enviado;

45 y el que me contempla,

contempla [también] al que me ha enviado. 46

Yo he venido como luz al mundo, para que todo el que pone fe en mí no permanezca en la oscuridad.

47 Pero si alguien

oye mis dichos y no los guarda, yo no lo juzgo; porque no vine para juzgar al mundo, sino para salvar al mundo. 48

El que me desatiende y no recibe mis dichos tiene

quien lo juzgue. La palabra que he hablado es lo que lo juzgará en el último día;

49 porque no he hablado de mi

propio impulso, sino que el Padre mismo, que me ha enviado, me ha dado mandamiento en cuanto a qué decir y qué hablar.

50 También, sé que su mandamiento

significa vida eterna. Por lo tanto, las cosas que hablo, así como el Padre me [las] ha dicho, así [las] hablo‖.

13 Ahora bien, puesto que antes de la fiesta de la

pascua sabía que había llegado su hora para irse de este mundo al Padre, Jesús, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin. 2 Así que, mientras estaba en progreso la cena, como el

Diablo ya había metido en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, que lo traicionara,

3 [Jesús,] sabiendo que

el Padre había dado en [sus] manos todas las cosas, y que de Dios había venido y a Dios iba,

4 se levantó de la

cena y puso a un lado sus prendas de vestir exteriores. Y, tomando una toalla, se ciñó.

5 Después de aquello

echó agua en una palangana y comenzó a lavar los pies de los discípulos y a secarlos con la toalla con que estaba ceñido.

6 Y vino, pues, a Simón Pedro. Él le dijo:

―Señor, ¿tú me lavas los pies?‖. 7 En respuesta, Jesús le

dijo: ―Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora, pero lo entenderás después de estas cosas‖.

8 Pedro le dijo: ―Tú

ciertamente no me lavarás los pies nunca‖. Jesús le contestó: ―A menos que te lave, no tienes parte conmigo‖.

9 Le dijo Simón Pedro: ―Señor, no los pies

solamente, sino también las manos y la cabeza‖. 10

Jesús le dijo: ―El que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, sino que está todo limpio. Y ustedes están limpios, pero no todos‖.

11 Conocía, en

efecto, al hombre que lo traicionaba. Por esto dijo: ―No todos ustedes están limpios‖.

12 Ahora bien, cuando les hubo lavado los pies y se

hubo puesto sus prendas de vestir exteriores y recostado de nuevo a la mesa, les dijo: ―¿Saben lo que les he hecho?

13 Ustedes me llaman: ‗Maestro‘, y,

‗Señor‘, y hablan correctamente, porque lo soy. 14

Por eso, si yo, aunque soy Señor y Maestro, les he lavado los pies a ustedes, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros.

15 Porque yo les he puesto el modelo,

que, así como yo hice con ustedes, ustedes también deben hacerlo.

16 Muy verdaderamente les digo: El

esclavo no es mayor que su amo, ni es el enviado mayor que el que lo envió.

17 Si saben estas cosas,

felices son si las hacen. 18

No hablo de todos ustedes; yo conozco a los que he escogido. Mas es para que se cumpla la Escritura: ‗El que comía de mi pan ha alzado contra mí su talón‘.

19 Desde este momento en adelante

se lo digo a ustedes antes que suceda, para que cuando suceda ustedes crean que soy yo.

20 Muy

verdaderamente les digo: El que recibe a cualquiera a quien yo envío me recibe a mí [también]. A su vez, el que me recibe a mí recibe [también] al que me envió‖.

21 Después de decir estas cosas, Jesús se perturbó

en espíritu, y dio testimonio y dijo: ―Muy verdaderamente les digo: Uno de ustedes me traicionará‖.

22 Los

discípulos empezaron a mirarse unos a otros, perplejos por no saber de quién [lo] decía.

23 Ante el seno de

Jesús estaba reclinado uno de sus discípulos, y Jesús lo

amaba. 24

Por lo tanto, Simón Pedro le hizo seña con la cabeza a este y le dijo: ―Di quién es de quien [lo] dice‖. 25

De modo que este se recostó sobre el pecho de Jesús y le dijo: ―Señor, ¿quién es?‖.

26 Por tanto Jesús

contestó: ―Es aquel a quien daré el bocado que mojo‖. Y así que, habiendo mojado el bocado, lo tomó y se lo dio a Judas, hijo de Simón Iscariote.

27 Y después del

bocado, entonces Satanás entró en este. Jesús, por lo tanto, le dijo: ―Lo que haces, hazlo más pronto‖.

28 Sin

embargo, ninguno de los que estaban reclinados a la mesa sabía con qué propósito le había dicho esto. 29

Algunos, de hecho, se imaginaban que, como Judas tenía la caja del dinero, Jesús le decía: ―Compra las cosas que necesitamos para la fiesta‖, o que diera algo a los pobres.

30 De manera que, después de recibir el

bocado, salió inmediatamente. Y era de noche.

31 Entonces, cuando aquel hubo salido, Jesús dijo:

―Ahora es glorificado el Hijo del hombre, y Dios es glorificado respecto a él.

32 Y Dios mismo lo glorificará, y

él lo glorificará inmediatamente. 33

Hijitos, estoy con ustedes un poco de tiempo más. Me buscarán ustedes; y así como dije a los judíos: ‗A donde yo voy ustedes no pueden venir‘, también se lo digo a ustedes ahora. 34

Les doy un nuevo mandamiento: que se amen unos a otros; así como yo los he amado, que ustedes también se amen los unos a los otros.

35 En esto todos

conocerán que ustedes son mis discípulos, si tienen amor entre sí‖.

36 Simón Pedro le dijo: ―Señor, ¿adónde vas?‖. Jesús

contestó: ―A donde yo voy no puedes seguirme ahora, pero seguirás después‖.

37 Pedro le dijo: ―Señor, ¿por

qué no puedo seguirte ahora? Entregaré mi alma a favor de ti‖.

38 Jesús contestó: ―¿Entregarás tu alma a favor de

mí? Muy verdaderamente te digo: No cantará el gallo de ninguna manera hasta que me hayas repudiado tres veces‖.

14 ―No se les perturbe el corazón. Ejerzan fe en

Dios, ejerzan fe también en mí. 2 En la casa de mi Padre

hay muchas moradas. De otra manera, se lo hubiera dicho a ustedes, porque voy a preparar un lugar para ustedes.

3 También, si prosigo mi camino y les preparo

un lugar, vengo otra vez y los recibiré en casa a mí mismo, para que donde yo estoy también estén ustedes. 4 Y a donde yo voy ustedes saben el camino.‖

5 Tomás le dijo: ―Señor, no sabemos adónde vas.

¿Cómo sabemos el camino?‖.

6 Jesús le dijo: ―Yo soy el camino y la verdad y la

vida. Nadie viene al Padre sino por mí. 7 Si ustedes me

hubieran conocido, habrían conocido a mi Padre también; desde este momento lo conocen y lo han visto‖.

8 Felipe le dijo: ―Señor, muéstranos al Padre, y nos

basta‖.

9 Jesús le dijo: ―¿He estado con ustedes tanto

tiempo, y aun así, Felipe, no has llegado a conocerme? El que me ha visto a mí ha visto al Padre [también]. ¿Cómo es que dices: ‗Muéstranos al Padre‘?

10 ¿No

crees que yo estoy en unión con el Padre y el Padre

está en unión conmigo? Las cosas que les digo a ustedes no las hablo por mí mismo; sino que el Padre que permanece en unión conmigo está haciendo sus obras.

11 Créanme que yo estoy en unión con el Padre y

el Padre está en unión conmigo; de otra manera, crean a causa de las obras mismas.

12 Muy verdaderamente

les digo: El que ejerce fe en mí, ese también hará las obras que yo hago; y hará obras mayores que estas, porque yo estoy siguiendo mi camino al Padre. 13

También, cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, esto lo haré, para que el Padre sea glorificado con respecto al Hijo.

14 Si ustedes piden algo en mi

nombre, lo haré.

15 ‖Si ustedes me aman, observarán mis

mandamientos; 16

y yo pediré al Padre, y él les dará otro ayudante que esté con ustedes para siempre,

17 el

espíritu de la verdad, que el mundo no puede recibir, porque ni lo contempla ni lo conoce. Ustedes lo conocen, porque permanece con ustedes y está en ustedes.

18 No los dejaré desconsolados. Vengo a

ustedes. 19

Un poco más y el mundo ya no me contemplará, pero ustedes me contemplarán, porque yo vivo y ustedes vivirán.

20 En aquel día ustedes

conocerán que yo estoy en unión con mi Padre y ustedes están en unión conmigo y yo estoy en unión con ustedes.

21 El que tiene mis mandamientos y los

observa, ese es el que me ama. A su vez, el que me ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me mostraré a él claramente‖.

22 Le dijo Judas, no el Iscariote: ―Señor, ¿qué ha

pasado que vas a mostrarte claramente a nosotros y no al mundo?‖.

23 En respuesta, Jesús le dijo: ―Si alguien me ama,

observará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos nuestra morada con él.

24 El que no me

ama no observa mis palabras; y la palabra que ustedes oyen no es mía, sino que pertenece al Padre que me ha enviado.

25 ‖Mientras permanecía con ustedes les he hablado

estas cosas. 26

Mas el ayudante, el espíritu santo, que el Padre enviará en mi nombre, ese les enseñará todas las cosas y les hará recordar todas las cosas que les he dicho.

27 La paz les dejo, mi paz les doy. No se la doy a

ustedes como el mundo la da. No se les perturbe el corazón ni se les encoja de temor.

28 Oyeron que les

dije: Me voy y vengo [otra vez] a ustedes. Si me amaran, se regocijarían de que sigo mi camino al Padre, porque el Padre es mayor que yo.

29 De modo que ahora se lo

he dicho a ustedes antes que suceda, para que, cuando suceda, crean.

30 Ya no hablaré mucho con ustedes,

porque el gobernante del mundo viene. Y él no tiene dominio sobre mí,

31 pero, para que el mundo conozca

que yo amo al Padre, así como el Padre me ha dado mandamiento [de hacer], así hago. Levántense, vámonos de aquí.

15 ‖Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el

cultivador. 2 Todo sarmiento en mí que no lleva fruto, él

lo quita, y todo el que lleva fruto él lo limpia, para que lleve más fruto.

3 Ustedes ya están limpios a causa de la

palabra que les he hablado. 4 Permanezcan en unión

conmigo, y yo en unión con ustedes. Así como el sarmiento no puede llevar fruto por sí mismo a menos que permanezca en la vid, así mismo tampoco pueden ustedes, a menos que permanezcan en unión conmigo. 5 Yo soy la vid, ustedes son los sarmientos. El que

permanece en unión conmigo, y yo en unión con él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí ustedes no pueden hacer nada.

6 Si alguien no permanece en unión

conmigo, es echado fuera como un sarmiento, y se seca; y a esos sarmientos los recogen y los arrojan al fuego, y se queman.

7 Si permanecen en unión conmigo

y mis dichos permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se efectuará para con ustedes.

8 Mi Padre es

glorificado en esto, que ustedes sigan llevando mucho fruto y demuestren ser mis discípulos.

9 Así como me ha

amado el Padre y yo los he amado a ustedes, permanezcan en mi amor.

10 Si observan mis

mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo he observado los mandamientos del Padre y permanezco en su amor.

11 ‖Estas cosas les he hablado, para que mi gozo

esté en ustedes y su gozo se haga pleno. 12

Este es mi mandamiento: que ustedes se amen unos a otros así como yo los he amado a ustedes.

13 Nadie tiene mayor

amor que este: que alguien entregue su alma a favor de sus amigos.

14 Ustedes son mis amigos si hacen lo que

les mando. 15

Ya no los llamo esclavos, porque el esclavo no sabe lo que hace su amo. Pero los he llamado amigos, porque todas las cosas que he oído de mi Padre se las he dado a conocer a ustedes. 16

Ustedes no me escogieron a mí, sino que yo los escogí a ustedes, y los nombré para que vayan adelante y sigan llevando fruto y que su fruto permanezca; a fin de que sin importar qué le pidan al Padre en mi nombre, él se lo dé a ustedes.

17 ‖Estas cosas les mando: que se amen unos a

otros. 18

Si el mundo los odia, saben que me ha odiado a mí antes que los odiara a ustedes.

19 Si ustedes fueran

parte del mundo, el mundo le tendría afecto a lo que es suyo. Ahora bien, porque ustedes no son parte del mundo, sino que yo los he escogido del mundo, a causa de esto el mundo los odia.

20 Tengan presente la palabra

que les dije: El esclavo no es mayor que su amo. Si ellos me han perseguido a mí, a ustedes también los perseguirán; si ellos han observado mi palabra, también observarán la de ustedes.

21 Mas todas estas cosas las

harán contra ustedes por causa de mi nombre, porque ellos no conocen al que me ha enviado.

22 Si yo no

hubiera venido y no les hubiera hablado a ellos, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa de su pecado.

23 El que a mí me odia, odia también a mi

Padre. 24

Si yo no hubiera hecho entre ellos las obras que ningún otro ha hecho, no tendrían pecado; pero ahora han visto y también han odiado tanto a mí como a mi Padre.

25 Pero es para que se cumpla la palabra [que

está] escrita en la Ley de ellos: ‗Me odiaron sin causa‘. 26

Cuando llegue el ayudante que yo enviaré a ustedes del Padre, el espíritu de la verdad, que procede del Padre, ese dará testimonio acerca de mí;

27 y ustedes, a

su vez, han de dar testimonio, porque han estado conmigo desde que principié.

16 ‖Les he hablado estas cosas para que no se les

haga tropezar. 2 Los expulsarán de la sinagoga. De

hecho, viene la hora en que todo el que los mate se imaginará que ha rendido servicio sagrado a Dios.

3 Mas

ellos harán estas cosas porque no han llegado a conocer ni al Padre ni a mí.

4 Sin embargo, les he

hablado estas cosas a ustedes para que, cuando llegue la hora para ellas, se acuerden de que se las dije.

‖Estas cosas, sin embargo, no se las dije al principio, porque estaba con ustedes.

5 Pero ahora voy al que me

ha enviado, y sin embargo ni uno de ustedes me pregunta: ‗¿Adónde vas?‘.

6 Pero porque les he hablado

estas cosas el corazón se les ha llenado de desconsuelo.

7 No obstante, les digo la verdad: Es para

provecho de ustedes por lo que me voy. Porque si no me voy, el ayudante de ninguna manera vendrá a ustedes; pero si sigo mi camino, lo enviaré a ustedes. 8 Y cuando ese llegue dará al mundo evidencia

convincente respecto al pecado y respecto a la justicia y respecto al juicio:

9 en primer lugar, respecto al pecado,

porque ellos no están ejerciendo fe en mí; 10

luego respecto a la justicia, porque voy al Padre y ustedes no me contemplarán más;

11 luego respecto al juicio,

porque el gobernante de este mundo ha sido juzgado.

12 ‖Tengo muchas cosas que decirles todavía, pero

no las pueden soportar ahora. 13

Sin embargo, cuando llegue aquel, el espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propio impulso, sino que hablará las cosas que oye, y les declarará las cosas que vienen.

14 Aquel me glorificará, porque recibirá de lo

que es mío y se lo declarará a ustedes. 15

Todas las cosas que el Padre tiene son mías. Por eso dije que él recibe de lo mío y se [lo] declara a ustedes.

16 Dentro de

poco no me contemplarán más, y, otra vez, dentro de poco me verán‖.

17 Por eso, algunos de sus discípulos se dijeron unos

a otros: ―¿Qué significa esto que nos dice: ‗Dentro de poco tiempo no me contemplarán, y, otra vez, dentro de poco tiempo me verán‘, y, ‗porque voy al Padre‘?‖.

18 Así

que decían: ―¿Qué significa esto que dice de ‗poco tiempo‘? No sabemos de qué habla‖.

19 Jesús supo que

querían interrogarlo, de modo que les dijo: ―¿Andan inquiriendo entre ustedes sobre esto, porque dije: Dentro de poco no me contemplarán, y, otra vez, dentro de poco me verán?

20 Muy verdaderamente les digo:

Ustedes llorarán y plañirán, pero el mundo se regocijará; ustedes estarán desconsolados, pero su desconsuelo será cambiado a gozo.

21 La mujer, cuando está dando a

luz, siente desconsuelo, porque ha llegado su hora; mas cuando ha dado a luz al niñito, ya no se acuerda de la tribulación, por el gozo de que un hombre haya nacido en el mundo.

22 Ustedes también, pues, ahora sienten,

en realidad, desconsuelo; pero los veré otra vez, y se regocijará su corazón, y su gozo nadie se lo quitará.

23 Y

en aquel día ustedes no me harán pregunta alguna. Muy verdaderamente les digo: Si le piden alguna cosa al Padre, él se la dará en mi nombre.

24 Hasta el tiempo

actual ustedes no han pedido una sola cosa en mi

nombre. Pidan y recibirán, para que su gozo se haga pleno.

25 ‖Les he hablado estas cosas en comparaciones.

Viene la hora en que ya no les hablaré en comparaciones, sino que les informaré con claridad acerca del Padre.

26 En aquel día pedirán en mi nombre,

y no les digo que haré petición al Padre respecto a ustedes.

27 Porque el Padre mismo les tiene cariño,

porque ustedes me han tenido cariño a mí y han creído que salí como representante del Padre.

28 Salí del Padre

y he venido al mundo. Además, dejo el mundo y sigo mi camino al Padre‖.

29 Dijeron sus discípulos: ―¡Ves! Ahora hablas con

claridad, y no expresas comparación alguna. 30

Ahora sabemos que sabes todas las cosas y no necesitas que nadie te interrogue. En esto creemos que saliste de Dios‖.

31 Jesús les contestó: ―¿Ahora creen?

32 ¡Miren!

Viene la hora, en realidad, ha llegado, en que serán esparcidos cada uno a su propia casa, y me dejarán solo; y sin embargo no estoy solo, porque el Padre está conmigo.

33 Les he dicho estas cosas para que por

medio de mí tengan paz. En el mundo están experimentando tribulación, pero ¡cobren ánimo!, yo he vencido al mundo‖.

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