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HOJA PARROQUIAL B ASILICA DE SAN JUAN EL REAL 31 DE ENERO DE 2016 IV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO Reflexión EL DIFICIL CAMINO DEL CREYENTE Día a día descubrimos mejor que la fe reclama una confianza absoluta en Dios; la confianza que capacita para mantener la esperanza en medio de la contra- dicción, para hacer el bien a pesar de la persecución, para «saber» que no es el poder, ni el dinero, ni el placer lo que nos hace felices, sino el amor, un amor de la caridad que el apóstol Pablo propuso a los Corintios y a todo cristiano: «El amor es paciente, afable; no tiene envidia; no presume ni se engríe; no es mal educado ni egoísta; no se irrita, no lleva cuentas del mal, No se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad...». ¿Por qu los de Nazaret no llegaron a aco- ger a Jesús? Porque tenían una idea utilitaris- ta de la religión. Le exigían que hiciera algo de lo que había hecho en Cafarnaún: curar a sus enfermos, darles de comer..., sin caer en la cuenta de que estas cosas solo eran signos que les ayudaban a ir más allá; signos que nos descubren que Jesús proporciona vida, pero es vida eterna; que da de beber, pero un agua que sacia la sed de sentido; y que el que esto hace no tiene donde reclinar la cabeza. Jesús es Salvador, porque nos salva de nuestros egoísmos e intereses mezquinos. Jesús es Señor, porque la muerte no tie- ne poder sobre Él. Jesús es hermano, porque ha conocido y compartido nuestro destino y lo quiere vincular con el suyo, que es, a pesar de las apariencias, un destino glorioso. El profeta Jeremías, nos habla en la primera lectura sobre el destino de los pro- fetas: ¨Lucharán contra ti, pero no te podrán, porque yo estoy contigo... No les tengas miedo, que si no, yo te meter miedo de ellos». Es un anuncio del destino que Jesús asumió con su vida terrena y su muerte dolorosa, pero que culminó con la resurrección. ¡Por cuantos momentos penosos no tuvo que pasar! La Palabra de Dios de hoy deja ver a dónde nos lleva el creer o qu pide de nosotros la fe. Difícil camino el del creyente, pero con la garantía de que siempre nos acom- paña el Señor, en quien hemos de confiar plenamente.

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HOJA PARROQUIAL

BASILICA DESAN JUAN EL REAL31 DE ENERO DE 2016IV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Ref

lexi

ón

EL DIFICIL CAMINO DEL CREYENTE Día a día descubrimos mejor que la fe reclama una confianza absoluta en Dios;

la confianza que capacita para mantener la esperanza en medio de la contra-dicción, para hacer el bien a pesar de la persecución, para «saber» que no es el poder, ni el dinero, ni el placer lo que nos hace felices, sino el amor, un amor de la caridad que el apóstol Pablo propuso a los Corintios y a todo cristiano: «El amor es paciente, afable; no tiene envidia; no presume ni se engríe; no es mal educado ni egoísta; no se irrita, no lleva cuentas del mal, No se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad...».

¿Por que los de Nazaret no llegaron a aco-ger a Jesús? Porque tenían una idea utilitaris-ta de la religión. Le exigían que hiciera algo de lo que había hecho en Cafarnaún: curar a sus enfermos, darles de comer..., sin caer en la cuenta de que estas cosas solo eran signos que les ayudaban a ir más allá; signos que nos descubren que Jesús proporciona vida, pero es vida eterna; que da de beber, pero un agua que sacia la sed de sentido; y que el que esto hace no tiene donde reclinar la cabeza.

Jesús es Salvador, porque nos salva de nuestros egoísmos e intereses mezquinos. Jesús es Señor, porque la muerte no tie-ne poder sobre Él. Jesús es hermano, porque ha conocido y compartido nuestro destino y lo quiere vincular con el suyo, que es, a pesar de las apariencias, un destino glorioso.

El profeta Jeremías, nos habla en la primera lectura sobre el destino de los pro-fetas: ¨Lucharán contra ti, pero no te podrán, porque yo estoy contigo... No les tengas miedo, que si no, yo te metere miedo de ellos». Es un anuncio del destino que Jesús asumió con su vida terrena y su muerte dolorosa, pero que culminó con la resurrección. ¡Por cuantos momentos penosos no tuvo que pasar!

La Palabra de Dios de hoy deja ver a dónde nos lleva el creer o que pide de nosotros la fe.

Difícil camino el del creyente, pero con la garantía de que siempre nos acom-paña el Señor, en quien hemos de confiar plenamente.

S

E

La Palabra

1a

2a

Lectura del libro deJeremías 1, 4-5 y 17-19

Lectura de la 1ª Cartadel Apóstol San Pabloa los Corintios 13, 4-13

Salmo 70

Evangelio segúnSan Lucas 4, 21-30

Mi boca contará tu salvación, Señor

A ti, Señor, me acojo: no quede yo derrotado para siempre. Tú que eres justo, líbrame y ponme a salvo, inclina a mí tu oído y sálvame. Se tú mi roca de refugio, el alcázar donde me salve, porque mi peña y mi alcázar eres tú. Dios mío, líbrame de la mano perversa.Porque tú, Señor, fuiste mi esperanza y mi confianza, Señor, desde mi juventud. En el vientre materno ya me apoyaba en ti, en el seno tú me sostenías. Mi boca contará tu justicia, y todo el día tu salvación, Dios mío, me instruiste desde mi juventud, y hasta hoy relato tus maravillas.

En los días de Josías, el Señor me dirigió la palabra: «Antes de formarte en el vientre, te elegí; antes de

que salieras del seno materno, te consagre: te constituí profeta de las naciones.

Tú cíñete los lomos: prepárate para decirles todo lo que yo te mande.

No les tengas miedo, o sere yo quien te intimide. Desde ahora te convierto en plaza fuerte, en co-

lumna de hierro y muralla de bronce, frente a todo el país:

frente a los reyes y príncipes de Judá, frente a los sacerdotes y al pueblo de la tierra. Lucharán contra ti, pero no te podrán, porque yo

estoy contigo para librarte —oráculo del Señor—».

Hermanos: El amor es paciente, es benigno; el amor no tiene

envidia, no presume, no se engríe; no es indecoroso ni egoísta; no se irrita; no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad.

Todo lo excusa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor no pasa nunca.

Las profecías, por el contrario, se acabarán; las lenguas cesarán; el conocimiento se acabará.

Porque conocemos imperfectamente e imperfec-tamente profetizamos; mas, cuando venga lo per-fecto, lo imperfecto se acabará.

Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sen-tía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me hice un hombre, acabe con las cosas de niño.

Ahora vemos como en un espejo, confusamente; entonces veremos cara a cara. Mi conocer es ahora limitado; entonces conocere como he sido conocido por Dios. En una palabra, quedan estas tres: la fe, la esperanza y el amor. La más grande es el amor.

En aquel tiempo, Jesús comenzó a decir en la si-nagoga:

«Hoy se ha cumplido esta Escritura que acabáis de oír».

Y todos le expresaban su aprobación y se admira-ban de las palabras de gracia que salían de su boca.

Y decían: «¿No es este el hijo de Jose?». Pero Jesús les dijo: «Sin duda me direis aquel refrán: “Medico, cúrate

a ti mismo”, haz tambien aquí, en tu pueblo, lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún».

Y añadió: «En verdad os digo que ningún profeta es acep-

tado en su pueblo. Puedo aseguraros que en Israel había muchas viudas en los días de Elías, cuando es-tuvo cerrado el cielo tres años y seis meses y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías sino a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos le-prosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, sin embargo, ninguno de ellos fue curado sino Naa-mán, el sirio».

Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furio-sos y, levantándose, lo echaron fuera del pueblo y lo llevaron hasta un precipicio del monte sobre el que estaba edificado su pueblo, con intención de despe-ñarlo. Pero Jesús se abrió paso entre ellos y seguía su camino.

Servicios ministeriales en la Iglesia

El servicio que se ofrece en la parroquia es, como la palabra dice, un servicio a la comunidad que ayuda a crecer a la Iglesia y a la toma de responsabilidades en la misma.

El servicio de los laicos no puede interpretarse como una plaza en propiedad y en exclusiva. Si así lo consideráramos no permitiríamos que otros miembros de la parroquia lo pudieran ejercer.

Son estos servicios: el ministerio del lector, el salmista, el cantor, el catequista, el agente de la pastoral, los voluntarios en los diferentes ser-vicios que se ofrecen (Cáritas, catequistas, her-mandad o cofradía, la administración de los bienes parroquiales, las colectas, quienes dan la bienvenida y acogen a los que llegan, los que visitan y ayudan a enfermos y ancianos, los acó-litos y servidores del altar, quienes colaboran en la Hoja Parroquial, los miembros de los diferentes Consejos, los adoradores nocturnos, los respon-sables de casa y calle …). Todos estos servicios se realizan en nombre de la parroquia. Es la Iglesia la que se hace presente en estos ministros y servidores de la parroquia.

No debe entenderse que un lector habitual se sienta molesto si otra persona se preste a leer, o si una persona que habitualmente hace las colectas en la Misa, impide que otra persona lo haga o le parezca mal que le hayan “usurpado el puesto de pedidor o recolector”. Para nada. Nadie quita ni usurpa el puesto de nadie, pues hablamos de servicio y cuantas más personas se impliquen en estas tareas , mucho mejor: más plural y más rica será la celebración. En la Iglesia estamos para servir donde se nos necesite y no donde a cada uno se le antoje.

En la parroquia de San Juan el Real nos sentimos orgullosos de todas las personas que colabo-ran en los distintos servicios ministeriales. Gracias a todos los que entendeis estos ministerios como un servicio. Gracias a todos vosotros la parroquia se hace más viva.

En nuestra Casa-Residencia de señoras disponemos de una plaza libre.Información: Tlfno. 985 222 832

La Catequesis con Cáritas

El pasado domingo 10 de Enero, Jimena, una niña de postcomunión y participante asidua de los talleres solidarios de la pa-rroquia desde sus inicios, hizo entrega a Jose Luis Portos, director de Cáritas parro-quial, de un cheque de 1.445 euros. Esta cantidad es la obtenida por la venta del Taller solidario de Adviento.

Ya está en marcha el taller a favor de la Campaña contra el hambre que desarrolla Manos Unidas. Ánimo a los niños y niñas que estáis participando.

Horario de MisasBasílica de San Juan el RealLaborables 9:00, 13:15 y 20:00 hDomingos y festivos 9:00, 11:00, 12:00, 13:00 y 20:00 h

Siervas de Jesús (Uría, 23) Lunes a Sábado 7:30 h Domingos y festivos 8:00 h

Sagrado Corazón (PP. Jesuitas) Laborables 12:30 y 19:30 h Domingos 12:30, 13:30, 19:30 y 20:45 h

Esclavas todos los días 13:00 y 18:00 h

Despacho ParroquialMartes y viernes no festivos

de 18:00 a 19:00 h

TeléfonosBasílica985 212 388Oficina de Fray Ceferino985 222 832Javier (Párroco)609 823 632Jose Manuel (Vicario Parroquial)645 947 070

SANTORAL

31 de Enero San Juan Bosco

1 de FebreroSanta Brígida de Irlanda

2 de FebreroLa Presentación de Jesús

3 de FebreroSan Blas

4 de FebreroS. Andres Corsino y S. Fileas

5 de FebreroSanta Ágeda (Gadea)

6 de FebreroSan Pablo Miki

REPARACIÓNDEL ORGANO

Despues de haber repa-rado en una primera fase todo el entramado (cos-tillas, badanas, tubos, te-clados y la reposición de uno de los motores) em-prendemos la repara-ción de la segunda fase que quedó pendiente por falta de presupuesto.Iniciamos una nueva co-

lecta de donativos.Los que deseeis colaborar

para esta obra importan-te podeis hacer la entrega a los sacerdotes o en la oficina parroquial.

Gracias PEREGRINACIÓN DIOCESANA

a ROMA en el AÑO SANTOde la MISERICORDIA

del 12 al 17 de AbrilPresidida por el Sr. Arzobispo, Fray Jesús Sanz Montes.Incluye: Visitas a Roma, Florencia y Asís Audiencia de S. S. el Papa Francisco Paso por la Puerta Santa de la Misercordia

Información e inscripciones en la oficina de la parroquiac/ Fray Ceferino 24, 3º Tlfno. 985 22 28 32 Organiza: Delegación Episcopal de Peregrinaciones