nº 412/22-vii-2004 semanario catÓlico de ... - alfayomega.es · los microcréditos revolucionan...

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Alfa Omega SEMANARIO CATÓLICO DE INFORMACIÓN EDIC. NACIONAL Un dinero solidario Un dinero solidario Nº 412/22-VII-2004

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Alfa OmegaSEMANARIO CATÓLICO DE INFORMACIÓN EDIC. NACIONAL

Un dinerosolidario

Un dinerosolidario

Nº 412/22-VII-2004

Etapa II - Número 412

Edición Nacional

Edita:

Fundación San Agustín.Arzobispado de Madrid

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8 La foto

9 Criterios

10 Cartas

11 Ver, oír y contarlo

Aquí y ahora

12 Entrevista a don José María

Álvarez del Manzano.

13 La archidiócesis de Barcelona

recibe a su pastor

Iglesia en Madrid

12 Entrevista a don José María

Álvarez del Manzano.

13 La voz del cardenal arzobispo

14 Testimonio

15 El Día del Señor

16-17 Raíces

Exposición en la catedral-basílica

de San Martín, en Orense:

La «Ribeira sacra» gallega

22-23 La vida

Desde la fe

24-25 Escribe monseñor Julián Barrio:

La espiritualidad del peregrino

26 Entrevista con monseñor Lajolo:

Europa: no el socio mejor,

sino el más solidario.

27 Mesa redonda: Para los laicistas,

toda creencia es fanatismo.

28 El amor, cauce seguro

para la sexualidad.

29 Libros.

30 Televisión.

31 No es verdad.

32 Contraportada

SUMARIOΩΩAA

Milagros a 100 euros.Recuperar la dignidad de los pobres.Buenas ideas para viejos problemas

3-73-7

18-19

20-2120-21

Nota del ComitéEjecutivo

de la ConferenciaEpicopal Española:

En favor del verdadero

matrimonio

18-19

Balance económico de la Santa Sede:Agoniza el mito de las «riquezas»

del Vaticano

Se llaman microcréditos y son pequeñospréstamos, de los que pueden disponerlos más pobres de entre los pobres, per-

sonas que no pueden acceder al sistema ban-cario por falta de recursos. Como si de uncrédito normal se tratara, el beneficiario tie-ne que devolverlo con sus intereses corres-pondientes. Pero la experiencia ha demos-trado que los pobres son los mejores paga-dores y que sacan un sorprendente partido aestas pequeñas inversiones, con las que lo-gran beneficios que pueden llegar a cuadru-plicar el monto original.

Un ejemplo puede ilustrar bien este sis-tema. En algún lugar del mundo, quizá enlas afueras de una gran ciudad iberoameri-cana, una mujer cultiva cacahuetes en su jar-dín. La producción de maní excede con cre-

ces al consumo que puede realizar la familia,es decir, que esta mujer podría vender todoslos cacahuetes que le sobran a personas queno pudieran cultivarlos. Sin embargo, tieneun problema: necesitaría dinero para podercomprar pequeñas bolsas de plástico o depapel en las que guardar los cacahuetes y lle-varlos así a la ciudad para venderlos. En es-te punto entra el microcrédito. Una institucióncasi financiera –es decir, similar a un bancoen sus funciones pero sin unos requisitos tanestrictos–, dedicada a apoyar a los pobrescon préstamos, se entera de las circunstanciasdel caso concreto y valora que la inversión espositiva. Entonces, decide darle a la mujerun crédito de 100 euros a devolver en deter-minado plazo. Y se obra el milagro. Con los100 euros, la mujer compra las bolsas para

empaquetar los cacahuetes y un carro des-tartalado con el que poder ir a la ciudad. Allípone un puesto en un mercadillo callejero.Al cabo de unos meses, ha obtenido 300 eu-ros de beneficio después de devolver los 100del crédito. De los 300, reinvierte una parte enel negocio y compra un carro mejor, que sir-va, a la vez, como expositor del producto.Pero aún le queda dinero para algo de ropanueva para sus hijos. Las cuentas son sor-prendentes: 100 euros son, por obra del mi-crocrédito, lo mismo que 400.

Sobre el papel, la idea parece fabulosa.Pero lo más increíble es que en la realidadfunciona. Explica la profesora María CruzLacalle, de la Universidad madrileña Al-fonso X el Sabio, y experta en microcréditos,que el secreto está en que «su vida dependede este dinero». El éxito es tal que, comoexplica don Juan de Castro, director del Cen-tro de Estudios de Metaeconomía, una delas instituciones que busca fondos y coordi-na y analiza la labor microcrediticia, «lasentidades microfinancieras, que trabajan enel terreno y de manera directa con los mi-croempresarios, consiguen la autosostenibi-lidad operativa y financiera, gracias a un ni-vel de mora de estos últimos asombrosa-

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Los microcréditos revolucionan la forma de ser solidarios

Milagros a 100 euros

Una de las razones por las que las personas sumidas en la pobreza no consiguen salirde esa situación es porque los bancos, que no se fían de ellos, no les conceden

préstamos. Los microcréditos dan la oportunidad a los más desfavorecidos de iniciaruna actividad comercial dentro del mercado. Con los beneficios obtenidos, devuelven

el préstamo que recibieron, y los microempresarios han demostrado ser los mejorespagadores. La Reina Sofía, que participó en un debate sobre microcréditos

en el Fórum 2004 de Barcelona, defendió este modelo para erradicar la pobreza

mente bajo, que ronda el 1%», es decir, prác-ticamente todos los préstamos son devueltos.

El éxito de los microcréditos también es-tá determinado por la manera en que se im-plica al receptor de la ayuda. En el modelotradicional de solidaridad, el primer mundoadoptaba una actitud de cierto paternalis-mo, y las personas que recibían esas ayudasacababan pensando que la única manera decomer era esperar que cayera el alimento delos camiones de asistencia humanitaria. Conesa actitud, dejaban de lado cualquier capa-cidad para trabajar por su propio futuro.

Inusitada eficacia

Lo que se pretende con el microcréditoes, precisamente, lo contrario. Uno de losgrandes retos de esta forma de solidaridad esque el pobre queda totalmente implicado enel proceso de ayuda en el que está inmerso.Al depender de su trabajo para mantener elsistema y conseguir, en un futuro, renovaresos créditos, se esfuerza más aún por sa-car partido a la primera inversión. Al mismotiempo, se está consiguiendo que suba suautoestima y deje de considerarse como unparia de la sociedad, porque esa sociedad leha dado una oportunidad, la de comportarsecomo si fuera un rico. Así, una persona queno tenía dinero ni para comprar bolsas depapel, se presenta ante la puerta de su bancode la misma forma que hace el gran empre-sario, con una idea y sin dinero. El bancovalora la viabilidad del proyecto –ya seacomprar bolsas de papel o invertir en unagran fábrica de coches– y, si considera queparece razonable, le da el dinero que nece-sita. El empresario –manisero o fabricante decoches– se va con su dinero prestado a tratarde sacarle el mejor partido posible, es de-cir, a obtener beneficios. Y cuando el ricoha vendido muchos coches, y el pobre, mu-chas bolsas de maní, los dos vuelven son-rientes y orgullosos al banco a devolver el di-nero con sus correspondientes intereses. Yaún les quedan beneficios con los que me-

jorar el negocio y aumentar la calidad de vi-da de los suyos.

Los microcréditos se han calificado co-mo el nuevo paradigma de la solidaridad,porque consiguen aprovechar los mecanis-mos de la economía capitalista para favo-recer a los más pobres. Aunque no es el ob-jetivo de este artículo valorar si la globali-zación es o no beneficiosa, sí hay que serconscientes de que es, ante todo, un hecho.Hasta los Estados más pobres hacen ingen-tes esfuerzos por entrar en la OrganizaciónMundial del Comercio, un organismo in-ternacional cuyo objetivo es reducir losaranceles paulatinamente hasta conseguirla plena liberalización del mercado global.Así que la pobreza, lo quiera o no, está in-mersa en la economía de mercado, pero tie-ne muchas menos oportunidades porque ac-

túa desde la economía informal. El micro-crédito trata de solventar esa brecha queimpide a muchas personas entrar en el sis-tema capitalista. Y, al mismo tiempo, sua-viza la fiereza del libre mercado.

Hasta ahora, el capitalismo había prohi-bido la entrada de los más pobres a su siste-ma, porque la puerta de los bancos estabacerrada para ellos. A veces parece que losbancos sólo dan dinero si ese dinero no senecesita, es decir, si se demuestra que se tie-ne la cantidad de dinero necesaria para de-volver el préstamo. Sin el sistema financie-ro, es casi imposible engancharse a un carroque va tirado por la inversión.

La propuesta de los microcréditos se ba-sa en dar un voto de confianza. Implica que,a pesar de que, en el momento en que el po-bre solicita el crédito, es imposible que lo

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La dignidad de los pobres

Don Juan de Castro, director del Centro de Estudios de Metaeconomía, unainstitución dedicada al microcrédito, no deja de hacer hincapié en que el

secreto de este sistema de solidaridad es que «ese hombre que recibe el dinero, esmi socio». El microcrédito no sólo permite crear una red de distribución deriqueza basada en el sistema capitalista, sino que además recupera la dignidad delos pobres.

Dice el refrán que mejor que dar un pescado es enseñar a pescar, pero losmicrocréditos van más allá. Ya no se tiene al pobre por incapaz; el pobre sabepescar, quizá mejor que el que no lo es, pero no tiene caña. El microcréditopretende dar el dinero que necesitan las personas para llevar a cabo labores en lasque son expertas, pero con las que no logran beneficios por la falta de inversión.Hay cientos de ejemplos. Por ejemplo, en Iberoamérica, muchas mujeres cosenropa en sus casas que, después, venden en mercados tan lejanos como Japón.

La Iglesia no se ha decantado por un modelo económico determinado. Pero enlo que sí ha hecho hincapié Juan Pablo II es en la necesidad de garantizar eldesarrollo integral de las personas inmersas en el sistema económico. Y esoincluye el derecho a la iniciativa.

La ONU, a través de su Asamblea General, ha aplaudido en diversas ocasionesla idea de los microcréditos y ha destacado que «las personas que viven en lapobreza tienen la capacidad innata de salir de ella con dignidad por medio deltrabajo, y pueden dar muestras de capacidad creativa para mejorar su situación sicuentan con un entorno propicio y con las oportunidades adecuadas».

devuelva ni aun vendiendo sus escasas po-sesiones, si las tiene, el que concede el prés-tamo se fía de la voluntad y de la capacidadde trabajo del beneficiario. Es un punto cla-ve porque, gracias a ese minuto de confian-za, un pobre ha entrado en el sistema.

La cadena de los microcréditos es relati-vamente sencilla y está compuesta por cua-tro eslabones: el que invierte el dinero, elque busca al que invierte el dinero y lo poneen contacto con las instituciones financie-ras de microcrédito, la institución financie-ra que trabaja sobre el terreno y el pobre querecibe el préstamo.

Inteligente y rentable

El papel del que pone el dinero admiteuna amplia gama de candidatos, desde unagran empresa o la fundación de un bancocomercial hasta prestamistas individuales,puesto que cualquier dinero es bien recibido.A pesar de que los microcréditos están de-mostrando una inusitada eficacia, quizá és-te es el punto donde se encuentran con másproblemas. Resulta difícil convencer al pri-mer mundo de que han surgido nuevas víaspara ayudar a los demás. Pero, como expli-ca don Juan de Castro, ésta es una forma decompasión inteligente, porque realmente sa-le rentable. Sólo hay que convencer al quepone el dinero de que, en lugar de donarlo afondo perdido, puede introducirlo en un sis-tema que garantiza su devolución. En lugarde invertir en Bolsa con los riesgos que con-lleva, se puede invertir en el futuro de mu-chas familias y con unos riesgos mínimos.

La clave del microcrédito es que, unavez que se pone en marcha, no necesita másdinero para mantenerse, al igual que ocu-rre con los bancos del modelo capitalista.Doña Cruz Lacalle explica cómo se ha pa-sado, de un modelo de ayuda al desarrollodonde se trabajaba en grandes proyectos,como carreteras o puentes multimillona-rios, que repercutirían en la vida de cientosde personas, a incidir en proyectos minús-

culos que garantizan una amplia redistri-bución de la riqueza y que se mantienen porsí mismos.

El señor De Castro recuerda que, cuandoel rico da dinero para un microcrédito, haconvertido a un pobre en su socio. Y le tra-tará como tal, es decir, espera que le de-vuelva la inversión, que reporte beneficios,que el proyecto común salga adelante.

Para convencer al que tiene el dinero deque lo invierta en este rentable proyecto, es-tá la figura del intermediario. Probablemente,el empresario occidental no está dispuesto acambiar su traje de chaqueta por un pantalóncolor caqui y adentrarse en la selva amazó-nica para hablar con el encargado de una pe-queña institución financiera que funcionacomo banco de los pobres. Además, el em-presario, que sabe muchísimo de aquello enlo que trabaja, puede no conocer el mercadode las instituciones financieras que conceden

microcréditos. Como cualquier inversión,ésta requiere un estudio previo. Ahí es don-de aparece la figura del intermediario. Juande Castro, que dirige una de estas empre-sas, Centro de Estudios de Metaeconomía,explica que a veces se levanta una mañanaen un hotel de Nueva York y, a la mañanasiguiente, se despierta en un camastro de un

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Buenas ideas para viejos problemas

El campo de la solidaridad está abierto a la innovación.Los microcréditos son buen ejemplo de ello, pero no el

único. Don Javier Martín Cavanna, director de Codespa,apuesta por convertir a las instituciones de microcréditosen verdaderos bancos para los pobres, que también prestenotros servicios, como las cuentas de ahorro.

Hay otras experiencias curiosas, como el modeloeconómico basado en una moneda llamada dinero-hora. Eldirector del Cenro de Estudios de Metaeconomía, Juan deCastro, explica que este sistema funciona como unintercambio de trabajo. Una persona no tiene dinero peroes muy manitas. Necesita un corte de pelo. Un peluquerotiene una ventana rota y no tiene liquidez para pagar aalguien que la arregle. Estas dos personas valoran cuántotiempo les lleva a cada uno su operación y se intercambianese tiempo como si de dinero se tratase. La experiencia estásiendo muy fructífera y se aplica, incluso, en algunaspequeñas ciudades estadounidenses. Es un remedioperfecto contra el paro.

El movimiento de los focolares de Chiara Lubich tienemucho que enseñar sobre solidaridad. Brasil es su campode actuación y allí han creado comunidades que se basan,no en una economía del tener, sino en una economía deldar. Comunión, lealtad y solidaridad se aplican al sistemacapitalista en el que los pobres unen sus mínimos capitalespara salir adelante. Economía de Comunión está resultandoun éxito, en el que ya participan muchas empresas.

Hay casos en los que una población no tiene la opciónde aprovechar el capitalismo. Ocurre, por ejemplo, con losgrupos indígenas de lo más profundo del Amazonas. Paraellos es imposible competir en el libre mercado. Sólo losproblemas de transporte encarecerían demasiado elproducto. Sin embargo, enseñarles un sistema tan primitivocomo el trueque entre comunidades vecinas, puedesuponer una mejora sustancial de su calidad de vida.

poblado a las afueras de Quito. Los inter-mediarios conocen la situación del merca-do de las instituciones. Explican sus pro-yectos ante los que tienen el dinero y lesaconsejan sobre cómo y dónde invertirlo.Es el puente de confianza.

Cuando el intermediario ya ha conven-cido al inversor, el dinero llega a la institu-ción financiera que concede los microcré-ditos. Son verdaderos bancos crediticios delos pobres, y ahora empiezan a ampliar sugama de productos con cuentas de ahorro.Es importante que sean centros regentadospor personal de la zona, que conocen bienlas necesidades de los clientes y las posibi-lidades de los mercados.

Además, tienen que garantizar su trans-parencia. Al funcionar casi como bancos, esfundamental que las cuentas estén claras yque logren una estructura de costes fiable.Don Javier Martín Cavanna, director de laFundación Codespa, que, entre otras labo-res, trabaja con microcréditos, explica que latransparencia de las instituciones es uno delos puntos en los que más se está trabajando.«Estas instituciones son bancos, pero losbancos están bajo control de un Banco Cen-tral, mientras que éstos no. Haría falta unmarco regulador específico –dice el señorMartín Cavanna–, porque no pueden adap-tarse a los requisitos que tienen que cumplirlos grandes bancos». Parece que empiezan asurgir agencias de rating, auditorias que seocupan de calificar a las instituciones deacuerdo con una serie de criterios. «La trans-parencia es vital para atraer nuevas inver-siones», explica el director de Codespa.

Regalos, no

Para que el sistema siga en marcha, esimprescindible que las instituciones no seconviertan en sacos rotos, es decir, tienenque ser capaces de mantenerse por su cuen-ta. Quizá uno de los tópicos más extendidossobre los microcréditos es que regalan el di-nero. Pero esa idea es totalmente falsa. Nise regala, ni se debe regalar ni se puede re-galar. Los microempresarios están inmersosen la economía de mercado y tienen que po-der funcionar con sus reglas, aunque sea amenor escala y dentro de la llamada econo-mía informal, es decir, que no pagan im-puestos.

La profesora Lacalle dice que «los tiposson como los de mercado o un poco más al-tos, pero siempre serán muchísimo más ba-jos que los que le pueda pedir un usurero».De este modo, la institución recuperará lainversión sin que el dinero se devalúe, y aún

tendrá algo de beneficio que le permitirá darmás microcréditos y alimentar a más fami-lias. «La tasa de interés, aunque sea un po-quito más alta que la de mercado, no es elelemento fundamental para un pobre. A élquizá le interesa más la rapidez con la que seconcede el préstamo, porque puede necesi-tar el dinero inmediatamente, o el hecho deque no le exijan ningún tipo de aval», acla-ra don Javier Martín. Para resumir: los mi-crocréditos son sistemas solidarios que seconvierten en inmensas redes de redistribu-ción de la riqueza, pero no se trata a los po-bres como incapaces, sino como a igualescapaces de entrar en el juego del capitalismoacatando todas sus reglas, incluso la de los ti-pos de interés.

De esto se dio cuenta don MuhammadYunus, el llamado banquero de los pobres.Profesor de economía en una universidadde la India, salió a la calle para analizar porqué los modelos que estudiaba en las aulasno funcionaban en las calles. Hizo los cál-culos y descubrió que, con sólo 27 dólaresque prestara a 42 personas capaces de tra-bajar, habría generado riqueza en otros tan-

tos hogares. Y si lograba que esos 27 dólaresse devolvieran con sus intereses, podría pres-tar a más familias la siguiente vez.

Los encargados de estas instituciones,como el Grameen Bank, de Yunus, son losque se ocupan de tratar directamente con elbeneficiario del crédito. Hacen verdaderosestudios de viabilidad y análisis de mercado,escuchan las necesidades y posibilidades delos clientes, les conceden los préstamos quesolicitan, vigilan cómo se están realizandolas inversiones y ofrecen los consejos perti-nentes si observan que la actividad se estátorciendo, atienden los problemas, se im-plican en el proceso, hasta tal punto que sue-len acabar siendo invitados a todo ágape fa-miliar que los microempresarios organicen.Por todo ello, es fundamental que sean agen-tes locales con los que los beneficiados deldinero puedan mantener un trato fluido y undiálogo permanente.

El trabajo de los encargados de las insti-tuciones financieras es ingente, porque tienenque estar en contacto con los receptores delos préstamos, al menos dos veces por se-mana. Con unas inversiones tan pequeñas yunas necesidades tan grandes, es relativa-mente fácil que las familias pierdan de vis-ta el objetivo para el que se les concedió elcrédito. Y es imprescindible que ese créditorente, para que puedan devolverlo y obte-ner, al mismo tiempo, beneficios.

Aunque todas las personas relacionadascon el mundo del microcrédito coinciden enafirmar que los pobres son los mejores pa-gadores, este dato merece alguna matiza-ción. En el campo de los microcréditos no sepuede hablar de igualdad entre sexos, porquelas mujeres son mucho mejores pagadorasque los hombres. De hecho, el 98% de lospréstamos se conceden a madres de fami-lia. La experiencia ha demostrado que lamujer tiene una mayor capacidad para esti-rar el dinero y distribuirlo, de tal forma que

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todos los miembros de la familia se vean be-neficiados. Evitar que los hombres dilapi-den las rentas familiares y que el microcré-dito se utilice de manera adecuada, es uno delos motivos por los que los encargados delas instituciones de cambio visitan perma-nentemente a las familias.

Un sistema con el que se trabaja mucho esel de comunidades de mujeres. Se trata degrupos de unas quince microempresarias,en los que cada una de ellas se dedica a la la-bor que desee. Pero se reúnen habitualmen-te para darse consejos entre ellas y, sobretodo, si a una, en un momento determina-do, le va mal y no puede devolver el crédito,las demás responden por ésta. Son comuni-dades donde el capitalismo y el compañe-rismo se unen para luchar por la pobreza.

Problemas... siempre

El cuento de las maravillas del micro-crédito parece de hadas, pero tampoco sedebe pensar que son la panacea que acabarácon la pobreza mundial. «El microcrédito–como explica Juan de Castro– es un siste-ma más, pero no el único». Hay poblacio-nes tan empobrecidas que no pueden pen-sar en un negocio propio, y necesitan de lacaridad entendida en sentido tradicional.Ocurre también en situaciones en que granparte de las personas están enfermas, comoen los países africanos donde el sida y lamalaria restan capacidad de trabajo. Por otrolado, no se pueden conceder microcréditosen cualquier circunstancia. Para que un mo-delo de microcrédito funcione, es impres-cindible que haya un mínimo mercado don-de el microempresario pueda colocar susproductos. Por eso, normalmente se conce-den en zonas urbanas y semiurbanas, por-que del campo es muy difícil sacar benefi-cios suficientes como para hacer rentable elsistema.

Incluso aquellos a los que les vaya biencon los microcréditos, no están exentos deproblemas. Los microcréditos se concedendentro de la economía informal, es decir, almargen del Estado, que suele hacer la vistagorda porque este mecanismo permite re-ducir unos índices de pobreza contra los queno tiene mecanismos de lucha. Pero en elmomento en que el negocio crezca lo sufi-ciente, el microempresario, que ya no serátan micro, tendrá que dar el salto a la eco-nomía formal, y ahí le entrará el síndrome decola de león. Aunque no hay que dramati-zar, porque, a pesar de las dificultades quepuede entrañar el salto, eso significa que elpobre ha dejado de ser pobre. Y ése era, pre-cisamente, el objetivo.

La historia del microcrédito termina de lasiguiente forma: aquella familia que ven-día cacahuetes gracias al primer microcré-dito con el que compraron las bolsas, man-tuvo un negocio floreciente en su peque-ñez. A los pocos años, habían diversifica-do su producción con otros frutos secos–anacardos y pipas–, que comenzaron a em-paquetar en bolsas en las que ya imprimíanel nombre de la empresa. Pronto pudieroncomprarse una furgoneta que distribuía laproducción por toda la comarca. Gracias alos ingresos que obtenían, superaron sinmuchas dificultades el salto a la economíaformal. Y acabaron contratando a tres per-sonas más, porque los miembros de la fa-milia no daban abasto con tanto trabajo.Con las mejoras y los contratos de perso-nal, los niños de esa casa no sólo fueron alcolegio, sino que dos de ellos llegaron a launiversidad. Uno estudió económicas y aho-ra regenta este negocio de frutos secos. Sue-na a cuento de la lechera, pero la realidad esque todo esto es un milagro que sólo costó100 euros.

María S. Altaba

LA FOTOΩΩ8

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«H

«Una experiencia maravillosa»

a sido una experiencia fantástica y maravillosa»,dijo Su Majestad la reina doña Sofía, tras llegarante la tumba del apóstol Santiago, después dehaber recorrido a pie un tramo de 5 kilómetros delCamino de Santiago, acompañada por miembrosde la Guardia Real, que celebraban su QuintoCentenario de la creación del Cuerpo deAlabarderos, con una peregrinación a la tumba delApóstol. También la reina doña Fabiola de Bélgica hallegado a Compostela para ganar el Jubileo del AñoSanto. Reyes y plebeyos, peregrinos de todas lasnaciones del mundo, se acercan este año hasta latumba de Santiago Apóstol, en Finisterre, como lohan hecho, a lo largo de los siglos, desde todos losrincones de Europa y del mundo. Lo que másimporta –con ser espléndido todo lo demás– es laconversión del corazón, la llamada de la fe y de laesperanza y la Gran Perdonanza del Jubileo.

a tensión que vive hoy la Humanidad y que, conmayor frecuencia cada día que pasa, estalla enviolencia de todo tipo tiene, sin duda, un signo-re-alidad terriblemente elocuente en el Muro cuyaconstrucción avanza implacable en Israel, pese

a la prohibición del Tribunal de La Haya y las denuncias porparte de voces autorizadas en todo el mundo, haciendo ca-da vez más angustiosa y desesperada la vida de los pales-tinos, sean musulmanes o cristianos. Esta dinámica, quepretende justificarse como derecho a la auto-defensa, nopuede llevar sino a una creciente auto-destrucción. «Noson muros, sino puentes, lo que necesita la tierra de Israely el mundo entero», ha dicho Juan Pablo II, con sus palabrasy con el testimonio indiscutible de haber cooperado comonadie a la caída –pronto van a cumplirse quince años–del vergonzoso Muro de Berlín. La voz del Pa-pa no deja de proclamarlo, pero no se la es-cucha. Entre tanto, ahí está el 11-S, el 11-M, una violencia creciente en MedioOriente, en África, en Iberoamérica…,y un nuevo Muro, más vergonzoso, sicabe, mientras la Unión Europea noquiere reconocer sus raíces cristia-nas, dando la espalda a la libertadde la Europa del espíritu que ini-ciaron sus fundadores, y con ello de-jando que crezca el monstruo de ladictadura de la Europa de los merca-deres.

Resulta escalofriante, aterrador, com-probar la inmensa cantidad de dinero quese destina en todo el mundo a destruir, desdelos gastos en armamento que mata los cuerpos, hastael despilfarro consumista que carcome las almas, y el aúnmás destructivo dinero que se auto-retroalimenta nego-ciando con los mismos seres humanos, del embrión al an-ciano, manipulados, en los tubos de ensayo del laboratorio,el primero, o en el aparcamiento del asilo, el segundo.Mientras tanto, ese dinero que a sus adoradores los con-vierte en esclavos ha provocado otra manipulación, la de lasmentes, hasta conseguir que a todo esto se le llame cienciay progreso, con el sarcasmo añadido de pretender razonarla matanza de seres humanos en estado embrionario invo-cando el humanísimo deseo de curar las enfermedades de losque están llenos de años, cuando lo que en realidad se ha-ce es apartarlos de la familia e incluso acabar con ellos,por mucho que se quiera disimular llamándolo muerte dul-ce, ¡y hasta muerte digna! Otro tanto puede decirse de ese

clamor de la lucha contra el sida de quienes, esclavos deldios dinero, fomentan el pingüe negocio del engañoso pre-servativo y las falsas medicinas que provocan abortos, po-niendo sordina al verdadero remedio de una sexualidadrectamente vivida.

Cuando el dinero deja de ser algo al servicio de la ver-dad, del bien y de la auténtica felicidad del hombre, ya ve-mos cómo se convierte en ese alguien terrible que lo es-claviza, y de tal modo, que, perdiendo toda utilidad parala vida, acaba por destruirla. Por el contrario, el recto uso deldinero no levanta muros que separan, sino que crea puen-tes que hermanan a los hombres. Un poco de dinero –¡yno le ha de faltar a quien mantiene en su sitio su humanidad,y su razón!– hace verdaderos milagros. Ésta es la expe-

riencia de esa economía de los pobres que ocupa hoynuestro tema de portada, y que está haciendo

florecer vida en el desierto, como ilustra lafoto de esta página. Y asimismo esta anéc-

dota de la Madre Teresa de Calcuta, queya hemos tenido ocasión de evocar ennuestro semanario: «Eso que haceusted –le dijo un periodista–, yo nolo haría ni por todo el dinero delmundo»; y así le respondió ella: «Niyo tampoco, hijo, ni yo tampoco».Como los primeros discípulos, se-

guía la indicación del Maestro: «Nollevéis nada para el camino, ni bas-

tón, ni alforja, ni pan, ni dinero…, por-que el obrero merece su salario». Antes

les había dado la clave: «Lo que habéis re-cibido gratis, dadlo gratis». Una sociedad es-

clava del dinero no entiende la gratuidad, pero jus-tamente ahí está el secreto de la verdadera rentabilidad deldinero, que no es otra que la humana.

«La libertad económica –dice Juan Pablo II, con insu-perable lucidez, en su encíclica Centesimus annus– es so-lamente un elemento de la libertad humana. Cuando aque-lla se vuelve autónoma, es decir, cuando el hombre es con-siderado más como productor o consumidor de bienes quecomo sujeto que produce y consume para vivir, entoncespierde su necesaria relación con la persona humana y ter-mina por alienarla y oprimirla». No hay mayor pobre quequien sólo tiene dinero, aunque fuese en cantidad inago-table. Es dinero inútil; peor aún, alienante y opresor. Allídonde hay un hombre libre, un sujeto humano verdadero, to-das las cosas, incluido el dinero, sirven a su felicidad, y a lade los demás.

CRITERIOS 22-VII-2004 ΩΩ9 AA

L

¿Dónde está tu Dios?

La actitud agresiva hacia laIglesia, sin haber desaparecido

totalmente, en ocasiones ha dadolugar a la burla y al resentimientoen determinados medios decomunicación y, a menudo, auna actitud extendida derelativismo, de ateísmo prácticoy de indiferencia. Es la apariciónde lo que yo llamaría –despuésdel homo faber, del homosapiens, y del homo religiosus– elhomo indiferente, incluso entrelos creyentes, expuesto a lasecularización. La búsquedaindividual y egoísta del bienestar,y la presión de una cultura sinanclaje espiritual, eclipsan lossentidos de lo que es realmentebueno para el hombre, y reducensu aspiración hacia lotrascendente a una vagabúsqueda interesada de loespiritual, que se satisface conuna nueva religiosidad sinreferencia a un Dios personal, sinadhesión a un cuerpo doctrinal, ysin pertenencia a una comunidadde fe alimentada por lacelebración de los misterios. [...]

Se trata de una formaromántica de religión, una clasede religión del espíritu y del yoque tiene sus raíces en la crisisdel sujeto, que enferma más ymás de narcisismo y rechazatodo elemento histórico-objetivo.Es una religión fuertementesubjetiva, donde el espíritu sepuede refugiar y contemplarse enuna búsqueda estética donde lapersona no tiene que rendircuentas a nadie. [...]

Otra característica de estanueva religiosidad es la falta deinterés por la verdad. En nuestracultura marcada por elpensamiento débil, las fuertesconvicciones suscitadas amenudo dentro: más que creercon lo absoluto de la fe, se tratade creer dejando siempre unespacio y un margen deincertidumbre, una salida deemergencias. [...]

En realidad, la verdad en elcristianismo no es un puropensamiento teórico, un juicioéticamente evaluable o unademostración científica. Es unaPersona cuyo nombre esJesucristo, Hijo de Dios e Hijo dela Santísima Virgen María.

Cardenal Paul PoupardPresidente del ConsejoPontificio de la Cultura

de su Discurso en la últimaAsamblea Plenaria del Consejo

El dinero y la felicidadEl dinero y la felicidad

CARTASΩΩ10

22-VII-2004AA

¡Hola, Yosu!

Ttodos nosotros te decíamos: Si quieres, puedes... Sólo tedejé un día, y tú sabías que estaba en el Congreso euro-

peo donde debatían sobre tu enemigo; te has ido cuando yomás cerca creía estar de comprender esta terrible enfermedady de ayudarte; aunque también sabía lo cansado que estabasya de luchar contra ti mismo, y yo tenía una difícil batalla con-tra el sistema, y la terrible ausencia de sensibilidad y ayu-das hacia esta patología. Cuando te consulté el hecho deformar una asociación para ayudar a otros, una vez más só-lo dijiste: Hazlo, esto es muy duro. Sí, muchas veces diji-mos de ti: Es egoista, no quiere a nadie, sólo si lo intenta-ra... Pero eras muy generoso, un alma creativa, alegre, y meanimabas a luchar, e incluso habías conseguido confiar en tupsiquiatra. Sé que no eran muchos los logros conseguidospara los demás, pero, para los que te hemos querido, esos pe-queños logros nos han reconfortado. Nos dejas tu fuerza devoluntad infinita. Te quiero, Yosu, y doy gracias por habértelopodido demostrar. Por cierto, su enemigo y el de todos los quequeremos seguir luchando es: trastorno límite de la perso-nalidad, pero, mayormente, se llama incomprensión.

María Antonia García GonzálezCastellón

El museo de Granada, en Madrid

Mil gracias por el espléndido reportaje dedicado a la ex-posición Obras del Museo de Bellas Artes de Grana-

da. Me complace informar a los lectores de Alfa y Omega deque la exposición permanecerá abierta hasta el domingo 12de septiembre.

Eduardo Quesada DoradorGranada

¿Por qué Medicina?

Soy un estudiante de 5º de Medicina. Desde que comencéla carrera me he hecho siempre una pregunta: ¿Por qué

Medicina? Este año he comenzado una serie de asignaturasque se denominan Clínica Práctica, y consisten en adquirir lasvirtudes profesionales y humanas del buen médico. He tenidola gran suerte de conocer a una familia cuyo hijo estaba ex-tremadamente enfermo, sin casi esperanzas de vida mas alláde unos cuantos meses. La entereza de la familia, tras 10años de sufrimiento, y la forma tan noble y cristiana de con-cebir el sufrimiento por todos, me hizo comprender el porquéal que antes hacía referencia. La labor del médico no sólo aca-ba en la enfermedad, sino que se ha de continuar con el su-frimiento espiritual o existencial que acompaña a todo pa-ciente, como parte inherente, intrínseca a la naturaleza de lavocación medica.

Hoy he escuchado en el Telediario la triste noticia del po-sible cobro de un euro a todo paciente que acuda a una con-sulta de un especialista o a urgencias. La solución de las lis-tas de espera no pasa por aquí, sino en educar, y digo edu-car cuando sería mejor decir reeducar. La carencia de tiem-po por parte del médico para asistir como es debido a suspacientes es importante. Éstos son historiados, explorados ydiagnosticados en tan sólo 8 minutos (si llega), porque elmédico tiene que ver 30 pacientes en 4 horas. ¿Cómo no seva a deshumanizar la medicina? ¡Es natural que exista ac-tualmente un cierto recelo (ojo, digo recelo por no decir des-confianza). Así pues, estimada sociedad, si queremos solu-cionar el actual problema de la sanidad, debemos concien-ciarnos de que la sanidad, como bien escaso, ha de ser usa-da con responsabilidad; así permitiremos a los médicos queejerzan la Medicina en su plenitud, y que mi sueño y la razónde mi vocación médica, y creo que en el fondo la de todo mé-dico: ejercer una medicina humanista que se centre en laenfermedad y en el enfermo, perdure.

José Joaquín Hernández RocaMurcia

Abuelo por amor

Leer Alfa y Omega de 8-VII-2004, y más en concreto el ar-ticulo Nuestros ancianos, nos debe hacer reflexionar a

más de uno. Yo, queme encuentro entreellos, y una vez leídotodas sus páginas, en-cuentro renglones lle-nos de amor y conse-jos cristianos. Yo ten-go la suerte de ser unsetentón (y gracias aDios estoy de buenuso) y de poder llevara mis nietos al parquepúblico, ya que suspadres tienen que tra-bajar. Cuando me pre-guntan algo sobre un

pájaro, un árbol, o una planta o una flor, yo, como abueloy amante de la naturaleza, les explico, con todo el amor quelos abuelos tenemos para ellos, y observo que, en el parque,hay muchos niños de familias acomodadas con canguros.Hacen lo que pueden, menos darles el calor del amor de losabuelos, porque eso es Dios el que lo da. A la humildecanguro podrán darle un sueldo por sus cuidados, peronunca el amor que los niños necesitan con esa edad. Y,dando un salto en el tiempo, nos pasa igual que a los niñosen manos de canguros, cuando a los mayores nos despegandel calor familiar y nos depositan en una residencia o un al-bergue, o un hotel residencia, que, al final, todo es lo mis-mo: un asilo, por mucho títulos que le pongan. Podría seruna buena residencia, pero sin amor. Y sin amor, donde sea,en el silencio de la noche lloran en la almohada con elsentimiento del desamor.

Cuando el padre jesuita Fernando Robles escribe: «¿Lasresidencias son un negocio, o una necesidad? Tal vez am-bas cosas», yo diría que es más negocio, porque si hayamor en la familia, la necesidad sería menor.

Justo Navarro FuentesAznalcázar (Sevilla)

Las cartas dirigidas a esta sección deberán ir firmadas y con DNI, y tener una extensión máxima de 20 líneas. Alfa y Omega se reserva el derecho de resumir su contenido

VER, OÍR Y CONTARLO 22-VII-2004 ΩΩ11 AA

La denominada excepción cultural, si esalgo, es excepción antropológica y, porende, excepción y decepción respecto a

la comprensión que hoy tenemos de la na-turaleza y del progreso, también en el casodel supuesto matrimonio de las parejas ho-mosexuales. Robert Spaemann, en un en-sayo titulado ¿Fin de modernidad?, señala:«El concepto de un progreso universal y ne-cesario es el mito de la modernidad. Es laidea de un progreso que, de algún modo, sig-nifica una mejora absoluta, es decir, una me-jora que no puede ser puesta en relación conningún precio y que se impone con necesi-dad. Personas progresistas son aquellas quehan reconocido esta necesidad y se ponende su lado. Lo que se opone al progreso va aparar al basurero de la Historia. La univer-salidad de este concepto de progreso está re-lacionada con su falta de contenido. La am-pliación de opciones no encuentra su criterioiluminador en ningún concepto de vida bue-na, sea del tipo que sea. Nunca se va tan le-jos como cuando no se sabe a dónde se va(Goethe)».

La Vanguardia

Oriol Domingo publicó, en La Vanguar-dia del domingo 11 de julio, un reportaje ti-tulado ¿Qué comprenderás sin religión, hijomío?, en el que reproducía la carta de unode los fundadores del Partido Socialista fran-cés, Jean Jaurès, a su hijo sobre el estudiode la asignatura de Religión. Leemos: «JeanJaurès dijo a su hijo con firmeza y delicade-za: Amado hijo: Me pides que te exima decursar Religión para parecer digno hijo deun hombre sin convicciones religiosas. Estecertificado, amado hijo, no te lo envío ni te loenviaré nunca. No es que desee que seas cle-rical, a pesar de que no hay peligro algunoen ello. Cuando tengas edad suficiente parajuzgar serás completamente libre, pero ten-go un decidido interés en que tu instruccióny educación sean completas, y no lo seríansin el estudio de la Religión.

Jaurès recalca a su hijo que su instruc-ción ha de ser completa: ¿Cómo lo sería sinun conocimiento suficiente de las cuestio-nes religiosas, sobre las que todo el mundodiscute? ¿Querrías tú, por ignorancia vo-luntaria, no poder decir ni una palabra sobreeste asunto, sin exponerte a decir un dispa-rate? Estudias Mitología para comprender lahistoria de los griegos y romanos, y ¿quécomprenderás de la historia de Europa y delmundo entero después de Jesucristo, sin co-nocer la religión que cambió la faz del mun-do y produjo una nueva civilización?

Jean Jaurès argumenta: ¿Qué serán parati las obras maestras de la Edad Media y delos tiempos modernos si no conoces el moti-vo que las ha inspirado y las ideas religiosasque contienen? Hasta en las ciencias natu-rales y matemáticas encontrarás religión.Pascal y Newton eran cristianos fervorosos;Ampere era piadoso; Pasteur probaba laexistencia de Dios y decía haber reencon-trado mediante la ciencia la fe de un bretón.

Jaurès concluía: Tengo que confesarlo, lareligión está íntimamente uni-da a todas las

manifestaciones de la inteligencia humana.Es la base de nuestra civilización. Y es co-locarse fuera del mundo intelectual y con-denarse a una inferioridad manifiesta noquerer una ciencia que han estudiado y queposeen en nuestros días tantas inteligenciaspreclaras. Esta carta te sorprenderá. Peroes necesario, hijo mío, que un padre digasiempre la verdad a sus hijos. Ningún com-promiso me podría excusar si permitiese quetu instrucción fuera incompleta y tu educa-ción insuficiente».

IVICON

La agencia de la CONFER, IVICON,informaba el 15 de julio: «La Religión esevaluable y debe tener alternativa seria,por tanto también evaluable, señala la re-vista cultural Razón y Fe, de la Compa-ñía de Jesús en España. Por eso, cuan-do los obispos y los ciudadanos re-clamamos esto, sólo estamos exi-giendo las condiciones necesariaspara que nuestro derecho sea eva-luado y no devaluado, añade. Enel editorial del último número,la publicación exige al Presi-dente del Gobierno y a la mi-nistra de Educación más se-riedad y precisión en susmanifestaciones públicas,cuando afirman que la Re-ligión no será evaluable.Eso puede expresar su vo-luntad, pero no la realidadjurídica a la que, tras lassentencias del Supremo, esta-mos obligados todos, opina la re-vista. La enseñanza religiosa en la es-cuela es un derecho de los ciudadanos,no un privilegio. Además, en el casoconcreto de España, los padres y alumnosmanifiestan cada año, con repetida tozu-dez, que quieren ejercer positivamente suderecho a la enseñanza religiosa escolar,pues casi el 90% de los padres de EducaciónPrimaria inscriben a sus hijos en las clasesde Religión».

ABC

Juan Manuel de Prada ha escritoun clarificador artículo, el 12 de ju-lio, en el ABC, titulado Católicos enlas catacumbas. Dice así: «La defensa denuestra fe nos impone un deber de activis-mo. Aprovechemos, en primer lugar, los ins-trumentos que la ley pone a nuestro servi-cio: exijamos sin desmayo para nuestros hi-jos una educación religiosa en las escuelas;contribuyamos con nuestros impuestos alsostenimiento de la Iglesia. Aceptemos, ensegundo lugar, que la fe no puede ser vividaen tiempos de tribulación como una rutinaheredada, sino como un signo de identidadorgullosa, en el que se dirime la superviven-cia de nuestra genealogía cultural y espiri-tual; participemos en las liturgias de nuestrafe con gozo, espantemos ese marasmo de es-tolidez y hedonismo que han arrojado sobrenuestros hombros llenando las iglesias. Y,

en fin, sila defensa de nuestrasconvicciones lo exige, salgamos a la callearmados de pancartas que nos identifiquen:nunca se habría visto una manifestación másmultitudinaria y apabullante como la quecongregase a los católicos que cada domin-go van a misa. Cualquier cosa, antes que re-signarnos a vivir en las catacumbas. Y, so-bre todo, perseverancia, aunque la soledadnos incite a la claudicación: Seréis aborre-cidos de todos en mi nombre. Sólo el quepersevere hasta el fin será salvo».

José Francisco [email protected]

El mito de la modernidad

AQUÍ Y AHORAΩΩ12

22-VII-2004AA

que quieres de verdad. Cuando se produ-cen uniones transitorias, donde no existe elamor auténtico, la entrega al otro hasta elpunto de sacrificarte por él, pueden surgirmuchas desavenencias, desajustes… Cuan-do no hay amor, las relaciones entre las per-sonas no funcionan.

¿Cuáles son los problemas principalescon los que se enfrentan hoy las personasque viven en una gran ciudad como Ma-drid?

En las grandes ciudades no hay cosa másdura que la soledad, rodeado de personas.Eso, en una ciudad más pequeña, no suce-de, porque el calor del conocimiento haceque no te sientas un número más. Hay egoísmo, todo el mundo intenta acudir a susproblemas, y no se acuerda de los demás; to-dos andamos muy individualistas, todos que-remos nuestro beneficio propio con inde-pendencia del que está al lado. Yo creo quequien triunfa en la vida es el que es capaz dehacer feliz a los que le rodean. La sociedadactual adolece de excesivo hedonismo, seadora al dinero y al poder, y no se preguntancómo se ha conseguido, y en definitiva nosvamos enquistando en nosotros mismos ynos olvidamos de los demás.

A. Llamas Palacios

¿Qué ha supuesto para usted laentrega de este galardón?En principio, una ilusión muy

grande, porque tengo en cuenta la impor-tancia que tiene esta distinción, y en segun-do lugar un estímulo para seguir cumplien-do mis obligaciones como cristiano. Dudomucho que las haya cumplido hasta ahora,pero, desde luego, esto es un aliciente paraseguir adelante.

¿A lo largo de su carrera, se ha encon-trado con muchas dificultades para con-jugar vida política y fe?

Yo siempre he considerado que los cris-tianos en la vida pública y vida privada te-nemos que comportarnos según nuestrascreencias, proceder con consecuencia. Nose pueden decir cosas distintas de las que secreen, o hacer algo contrario de lo que unopiensa, y eso muchas veces supone ciertosimpedimentos en la vida ordinaria. Yo heintentado por todos los medios, a lo largode mi vida, dar testimonio de la fe en la quecreo. Muchas veces, en la vida política, yen la profesional, para alcanzar un fin se uti-lizan medios que no son absolutamente le-gítimos, que no se adecuan a las creenciasque uno tiene. Una persona cristiana no pue-de hacer determinadas cosas que otros sí ha-cen, como mentir, producir daño delibera-do a las personas, actuaciones confusas pa-ra obtener beneficios de las mismas… Y esoen el mundo de la política se hace a veces, yun cristiano eso no puede hacerlo. Una cosaes emplear la astucia, y otra, la mentira.

A veces da la impresión de que un po-lítico cristiano es más comprendido porel pueblo que por sus propios compañe-ros…

Hombre, hay veces que te toman a broma,y yo he tenido que ver cómo en los medios,e incluso dentro de la propia organizaciónpolítica a la que pertenezco, te toman a bro-ma: «Claro, como éste va a misa…», y lagente piensa qué cosas haces tan raras. Pe-ro así es la vida.

Hablando de la familia, usted algunavez ha comentado que «no nos estamosparando a pensar qué tipo de sociedadestamos creando». Verdaderamente, ¿quétipo de sociedad estamos creando?

En muchas ocasiones sé que he produci-do polémicas con mis declaraciones, perosiempre he creído que tenía que decir en ca-da momento lo que pensaba, consciente deque cuando yo lo decía, en mi época de al-calde, iba a suscitar un eco determinado.

Creo que estamos haciendo que lo ex-cepcional se transforme en ordinario, y no esasí. Sigo creyendo que, desde el punto devista del equilibrio, para el individuo, el se-no de la familia es absolutamente esencial, yes más, las naciones donde la sociedad fa-miliar es fuerte, se produce una mayor esta-bilidad incluso desde el punto de vista polí-tico, ya no sólo desde el punto de vista social.Creo que alterar esa célula esencial de la so-ciedad, es perjudicial para la propia sociedad.

Estamos asistiendo a una época terri-ble de maltratos en la familia y de violen-cia en general. ¿Dónde cree que se escon-den las soluciones?

Se ha dicho muchas veces, en los últi-mos tiempos: «Esto no ocurría antes». Nosé si no ocurría o no se conocía, porque,afortunadamente, hay mayor transparenciaen los medios y hoy se conocen cosas queantes no se conocían, incluso por vergüen-za de la propia familia, y a lo mejor antesexistía el mismo grado de malos tratos. Pe-ro posiblemente, en los últimos tiempos,la concatenación de una serie de circuns-tancias ha podido hacer, yo no sé si que seconozcan más, o que haya mayor númerode casos. Cuando de verdad quieres a unapersona, lo que deseas es el bien para ella.Es muy difícil maltratar a una persona a la

Habla don José María Álvarez del Manzano:

«Un político cristiano ha de ser consecuente»

La Gran Cruz de San Gregorio Magno, la más alta distinción que otorga Su Santidad el Papa a las personas destacadas porsu servicio público a la Iglesia era, entregada recientemente por el cardenal Antonio María Rouco Varela

a don José María Álvarez del Manzano, Presidente de IFEMA y ex Alcalde de Madrid

El cardenal AntonioMaría Rouco Varelaimpone la Gran Cruz de San Gregorio Magno a don José María Álvarez del Manzano

AQUÍ Y AHORA 22-VII-2004 ΩΩ13 AA

Monseñor Martínez Sistach acce-de al gobierno pastoral de la ar-chidiócesis barcelonesa después

de la renuncia de su predecesor, el carde-nal Ricardo María Carles, por razones deedad. En la celebración de la toma de po-sesión, el nuevo arzobispo se refirió a lasituación de la Iglesia en Cataluña: «Hoyes muy urgente y muy necesario dar a co-nocer a Jesucristo a los hombres y mujeresde nuestra sociedad, profundamente se-cularizada. Cataluña no está al margen delas corrientes culturales de la Europa oc-cidental, y participa de su proceso de se-cularización. Todos somos muy cons-cientes de las dificultades que encontra-mos en el trabajo de la evangelización.Estoy y estaré con vosotros para compar-tir como propias vuestras alegrías y tris-tezas. Cuento con todos vosotros, y confíoplenamente en vuestra colaboración cons-tante y generosa».

La llegada del nuevo arzobispo de Bar-celona se produce tras la decisión de la San-ta Sede de crear dos nuevas diócesis –la deTarrasa y la de San Feliú de Llobregat–, conterritorio desmembrado de la archidiócesis deBarcelona. Monseñor Martínez Sistach alu-dió precisamente, en su homilía, al SantoPadre: «Para poder evangelizar hoy a nues-tra sociedad catalana, hemos de mirar toda larealidad eclesial y social de nuestro país conuna inmensa simpatía, con la mirada delBuen Pastor. Juan Pablo II, en su encíclicamisionera, dice que los cristianos son signodel Evangelio también por su fidelidad a lapatria, al pueblo, a la cultura nacional, pe-ro siempre con la libertad que Cristo nos hatraído».

Monseñor Luis Martínez Sistach nacióen Barcelona el 29 del abril de 1937. Fueordenado sacerdote en 1961 y es doctor enDerecho Canónico y Civil. En 1983 fue ele-gido Presidente de la Asociación Españolade Canonistas. Elegido obispo auxiliar deBarcelona, recibió la ordenación episcopalel 27 de diciembre de 1987. Fue nombradoobispo de Tortosa el 17 de mayo de 1991,y el 20 de febrero de 1997 fue promovidoa arzobispo metropolitano de Tarragona,cargo que ha ocupado hasta su nombra-miento como arzobispo de Barcelona, el pa-sado 15 de julio.

En la Conferencia Episcopal Española,pertenece a la Comisión Permanente y a laJunta episcopal de Asuntos Jurídicos. En laCuria romana es miembro del Consejo Pon-tificio para la Interpretación de los TextosLegislativos y consultor del Consejo Ponti-ficio para los Laicos.

Alfa y Omega

La archidiócesis de Barcelonarecibe a su pastor

Monseñor Luis Martínez Sistach ha tomado posesión como nuevo arzobispo de Barcelona. A la ceremonia acudieronveinticinco obispos, más de un centenar de sacerdotes y numerosos fieles que abarrotaron

la catedral barcelonesa, y a los que su nuevo arzobispo confesó: «Sois vosotros los que tomáis posesión de mí»

El cardenal Carles saluda a su sucesor como nuevo arzobispo de Barcelona, monseñor Martínez Sistach, en presencia del Nuncio de SuSantidad en España, monseñor Manuel Monteiro de Castro

Nuevo obispo de Osma-Soria

El sacerdote don Vicente Jiménez Zamora recibió la ordenación episcopal y tomó posesión del gobierno pastoral de la diócesis deOsma-Soria. La celebración tuvo lugar, el pasado sábado 17 de julio, en la catedral de dicha diócesis, en presencia de más de veinteobispos. En la foto: monseñor Jiménez Zamora, junto al Nuncio de Su Santidad en España, monseñor Monteiro de Castro

IGLESIA EN MADRIDΩΩ12

22-VII-2004AA

que quieres de verdad. Cuando se produ-cen uniones transitorias, donde no existe elamor auténtico, la entrega al otro hasta elpunto de sacrificarte por él, pueden surgirmuchas desavenencias, desajustes… Cuan-do no hay amor, las relaciones entre las per-sonas no funcionan.

¿Cuáles son los problemas principalescon los que se enfrentan hoy las personasque viven en una gran ciudad como Ma-drid?

En las grandes ciudades no hay cosa másdura que la soledad, rodeado de personas.Eso, en una ciudad más pequeña, no suce-de, porque el calor del conocimiento haceque no te sientas un número más. Hay egoísmo, todo el mundo intenta acudir a susproblemas, y no se acuerda de los demás; to-dos andamos muy individualistas, todos que-remos nuestro beneficio propio con inde-pendencia del que está al lado. Yo creo quequien triunfa en la vida es el que es capaz dehacer feliz a los que le rodean. La sociedadactual adolece de excesivo hedonismo, seadora al dinero y al poder, y no se preguntancómo se ha conseguido, y en definitiva nosvamos enquistando en nosotros mismos ynos olvidamos de los demás.

A. Llamas Palacios

¿Qué ha supuesto para usted laentrega de este galardón?En principio, una ilusión muy

grande, porque tengo en cuenta la impor-tancia que tiene esta distinción, y en segun-do lugar un estímulo para seguir cumplien-do mis obligaciones como cristiano. Dudomucho que las haya cumplido hasta ahora,pero, desde luego, esto es un aliciente paraseguir adelante.

¿A lo largo de su carrera, se ha encon-trado con muchas dificultades para con-jugar vida política y fe?

Yo siempre he considerado que los cris-tianos en la vida pública y vida privada te-nemos que comportarnos según nuestrascreencias, proceder con consecuencia. Nose pueden decir cosas distintas de las que secreen, o hacer algo contrario de lo que unopiensa, y eso muchas veces supone ciertosimpedimentos en la vida ordinaria. Yo heintentado por todos los medios, a lo largode mi vida, dar testimonio de la fe en la quecreo. Muchas veces, en la vida política, yen la profesional, para alcanzar un fin se uti-lizan medios que no son absolutamente le-gítimos, que no se adecuan a las creenciasque uno tiene. Una persona cristiana no pue-de hacer determinadas cosas que otros sí ha-cen, como mentir, producir daño delibera-do a las personas, actuaciones confusas pa-ra obtener beneficios de las mismas… Y esoen el mundo de la política se hace a veces, yun cristiano eso no puede hacerlo. Una cosaes emplear la astucia, y otra, la mentira.

A veces da la impresión de que un po-lítico cristiano es más comprendido porel pueblo que por sus propios compañe-ros…

Hombre, hay veces que te toman a broma,y yo he tenido que ver cómo en los medios,e incluso dentro de la propia organizaciónpolítica a la que pertenezco, te toman a bro-ma: «Claro, como éste va a misa…», y lagente piensa qué cosas haces tan raras. Pe-ro así es la vida.

Hablando de la familia, usted algunavez ha comentado que «no nos estamosparando a pensar qué tipo de sociedadestamos creando». Verdaderamente, ¿quétipo de sociedad estamos creando?

En muchas ocasiones sé que he produci-do polémicas con mis declaraciones, perosiempre he creído que tenía que decir en ca-da momento lo que pensaba, consciente deque cuando yo lo decía, en mi época de al-calde, iba a suscitar un eco determinado.

Creo que estamos haciendo que lo ex-cepcional se transforme en ordinario, y no esasí. Sigo creyendo que, desde el punto devista del equilibrio, para el individuo, el se-no de la familia es absolutamente esencial, yes más, las naciones donde la sociedad fa-miliar es fuerte, se produce una mayor esta-bilidad incluso desde el punto de vista polí-tico, ya no sólo desde el punto de vista social.Creo que alterar esa célula esencial de la so-ciedad, es perjudicial para la propia sociedad.

Estamos asistiendo a una época terri-ble de maltratos en la familia y de violen-cia en general. ¿Dónde cree que se escon-den las soluciones?

Se ha dicho muchas veces, en los últi-mos tiempos: «Esto no ocurría antes». Nosé si no ocurría o no se conocía, porque,afortunadamente, hay mayor transparenciaen los medios y hoy se conocen cosas queantes no se conocían, incluso por vergüen-za de la propia familia, y a lo mejor antesexistía el mismo grado de malos tratos. Pe-ro posiblemente, en los últimos tiempos,la concatenación de una serie de circuns-tancias ha podido hacer, yo no sé si que seconozcan más, o que haya mayor númerode casos. Cuando de verdad quieres a unapersona, lo que deseas es el bien para ella.Es muy difícil maltratar a una persona a la

Habla don José María Álvarez del Manzano:

«Un político cristiano ha de ser consecuente»

La Gran Cruz de San Gregorio Magno, la más alta distinción que otorga Su Santidad el Papa a las personas destacadas porsu servicio público a la Iglesia, era entregada recientemente por el cardenal Antonio María Rouco Varela

a don José María Álvarez del Manzano, Presidente de IFEMA y ex Alcalde de Madrid

El cardenal AntonioMaría Rouco Varelaimpone la Gran Cruz de San Gregorio Magno a don José María Álvarez del Manzano

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IGLESIA EN MADRID 22-VII-2004 ΩΩ13 AA

El tiempo de vacaciones, propicio parael descanso y para el cambio del ritmohabitual de vida, se presta también pa-

ra la mirada retrospectiva sobre aconteci-mientos que han ido entretejiendo y deter-minando el hilo de nuestras vidas en el cur-so pasado: para su valoración y su posiblerectificación, o cambio de rumbo, en la nue-va etapa, después del período vacacional.No es raro que en las horas veraniegas, sobretodo en las más tranquilas, se nos plantee lapregunta por el modo de cómo estamos con-figurando nuestra existencia diaria –la per-sonal, la familiar y la profesional–, y quenos preguntemos por su acierto y/o por susfracasos. Y, si no nos cerramos a la voz deDios que nos habla en el sagrario de nuestraconciencia, la pregunta se nos presentará entoda su hondura y completa verdad comoun interrogante sobre la medida de nuestracorrespondencia a lo que Él quiere para no-sotros y de nosotros: en una palabra, sobre siestamos viviendo nuestro presente y pro-yectamos nuestro futuro de acuerdo con lavocación recibida como personas y comocristianos. Porque, en definitiva, el problemadel hombre, al afrontar la tarea inaplazablede modelar y encauzar su existencia con elobjetivo de una felicidad plena y sin fin, esel de poner al servicio de su vocación divi-na –glosando a san Ignacio de Loyola– todasu libertad, su memoria, su entendimientoy toda su voluntad, todo su haber y poseer;y el de saber que Él nos lo dio todo y a Él de-be retornar. ¡Éste es el problema de los pro-blemas para cada uno de nosotros!

La clave, pues, que nos ofrece el Evan-gelio para comprender la plena verdad denuestra concreta vocación es la de saber quesomos amados y, por eso, elegidos y llama-dos desde toda la eternidad, en Jesucristo,para participar en el gozo de la vida divina,en la vida de la misma Santísima Trinidad:¡«Cristo es para nosotros la esperanza de lagloria», enseñará san Pablo a los Colosenses!Si somos así amados, no nos queda otra op-ción que la de corresponder amando a Quiennos amó desde toda la eternidad hasta la en-trega de su propio Hijo por nosotros y nues-tra salvación.

¡No es un imposible!

El tiempo de vacaciones puede resultar-nos extraordinariamente útil para pregun-tarnos por la forma de enfocar y conducirnuestra vida a la luz de la fe, con la serenidady fortaleza de la esperanza, con el ardienteimpulso de la caridad. Todo puede ganar ennosotros si nos atrevemos a dar ese paso.Ganaremos en transparencia de lo que so-mos y de lo que debemos ser a los ojos deDios y, por lo tanto, desde el punto de vistade lo mejor de nosotros mismos; en clari-dad en los horizontes y objetivos a los quedebemos tender; y en la certeza interior deque merece la pena aspirar a la santidad. ¡No

es ningún imposible! Basta adoptar la acti-tud de la humilde acogida de la gracia, desaber quedarse en la oración íntima al ladodel Maestro, de buscarle en los sacramen-tos de la Penitencia y de la Eucaristía. Eltrato íntimo con Él, presente en el Taberná-culo –¡Hostia Pura, Hostia Santa, HostiaInmaculada!–, nos permite entrar, día y no-che, en el misterio de su perenne y eternaoblación de amor al Padre por la redencióndel mundo, y no dejar de recorrer ningúndía el itinerario de nuestra identificación conÉl, completando en nuestra carne los doloresde su pasión, sufriendo por su cuerpo quees la Iglesia.

La historia de la visita de Jesús a Marta yMaría que nos relata, en pleno ajetreo y dis-frute veraniego, el evangelio de San Lucas nopuede resultar más aleccionadora al respec-to. Marta, la afanosa, la que lleva el cuidadoactivo de la casa, se apresura diligente a pre-parar y disponer todo para que al huésped,amigo y maestro, no le falte nada. María, encambio, se queda al lado de Jesús y no cesade escuchar su palabra. Se queja Marta anteel Señor de que no le ayuda en las faenas dela casa. Y éste, sorprendentemente, le res-ponde que «María ha escogido la parte me-jor». Marta andaba «inquieta y nerviosa contantas cosas», pero «sólo una es necesaria»,y ésa era la que había elegido María. Ni re-chaza Jesús el hecho, ni niega la bondad del

servicio de Marta; pero sí advierte sobre elpeligro de separarse de la fuente de dondebrota el amor: la intimidad con Él, vivida decorazón a corazón, cultivada con la miradaamorosa, de los misterios de su vida, muertey resurrección, alimentada con su palabra,con el coloquio vivo y con la súplica. Al fin ya la postre, el amor efectivo y fecundo enobras, aun en las circunstancias más adversas,nace de la contemplación.

¡Escojamos la mejor parte también noso-tros en estas vacaciones de verano, haciendoespacio y tiempo para ese estilo de oracióncontemplativa que hemos venido practican-do con la Lectio divina durante todo el cur-so pasado! Confiemos nuestros jóvenes aMaría, Nuestra Señora de La Almudena, so-bre todo a los peregrinos de Santiago, paraque los guíe y enseñe a estar con su Hijo, ahablar con Él, a abrirse a su llamada, a norehuir la vocación que ha pensado para ellosy por su bien. Vocación que les lleve a lagloria de Dios y a ser instrumentos de sal-vación de los hombres, sus hermanos. ¡Queno se pierdan ni se frustren sus vidas en la va-nidad de los sueños de este mundo y de sustriunfos tan engañosos! La Escuela de María,la de su devoción, la de su Rosario, es insu-perable. Se los confiamos con nuestra ple-garia más ferviente.

+ Antonio Mª Rouco Varela

La voz del cardenal arzobispo

Una pregunta decisivaSaber escoger la mejor parte, en tiempo de vacaciones: éste es el título de la exhortación pastoral que nuestro cardenal

arzobispo escribe esta semana, en la que dice:

TESTIMONIOΩΩ14

22-VII-2004AA

He dedicado muchas horas de mi vidaa actuar en el campo de lo que siem-pre se llamó res mixtae iurisdictionis,

cosas de mixta jurisdicción eclesial y estatal,que hoy llamamos áreas de competenciascompartidas por instituciones que interac-túan sobre la misma población y el mismo te-rritorio. Imposible resultaría no haber pen-sado algo sobre el asunto habiendo pasadopor las experiencias por las que yo he pasa-do.

Mis ocupaciones profesionales me hanpuesto en muchas otras de semejante im-portancia respecto a necesitar conocer ladoctrina social católica, y a tener que apli-carla en medio del fuego cruzado de la críticapública exterior y de la duda existencial in-terior. La vida, que ha sido muy generosaconmigo hasta aquí, me ha dado ocasión deejercer durante muchos años funciones depolítico cristiano.

En mi caso particular, son muchos losmandamientos de la doctrina social católicaque han encauzado para bien mi reflexiónintelectual, así como mi conducta moral ypolítica. En mi humilde opinión, la doctrinasocial católica no ejerce en la actualidad la

influencia que debiera ejercer en España.La masa del pueblo español la desconoce,y los medios masivos de mayor difusión laignoran. Todos los intelectuales católicostenemos en esto una deuda sin saldar. So-pesando esos factores, digo que mi pronós-tico sobre el porvenir de la doctrina social ca-tólica en España es positivo. Baso esa vi-sión, prudentemente optimista, en dosrazones. La primera es que, pese a la acon-fesionalidad teóricaen que se mueven yse deben movernuestros sindicatosy nuestros partidospolíticos, por serlode una democraciapluralista, muchospolíticos y sindica-listas del Partido Po-pular, que es uno delos dos grandes quese reparten por mi-tad el ochenta porciento del electora-do español, aplica-mos la doctrina so-cial católica en lapráctica. En esto seha avanzado mucho,desde aquellos tiempos en que se procla-maba la adhesión a la doctrina, mientras sela desmentía con hechos de explotación ydefraudación.

La segunda razón por la que pienso que ladoctrina social católica tendrá buena apli-cación, en la España y en la Europa del sigloXXI, es que hay minorías católicas muy ver-

sadas en ella, y que esas minorías van a ac-tuar con notable eficiencia en la vida públi-ca de los próximos años. Yo mismo me cuen-to, aunque me tengo por el último, entre losespañoles que acudieron a beber con prove-cho del magisterio eclesial, y concretamen-te de la doctrina social católica, para apren-der a resolver problemas económicos y so-ciales acuciantes. Y creo haberlo hecho conalgún éxito, y con no poco beneficio para el

bien común, que nopara el mío propio,sobre todo en el cam-po del turismo y lainformación; dos in-dustrias que son a lapar profesiones deenvergadura y caucesnaturales para fo-mentar la amistad yla cooperación entreciudades, regiones ypueblos de todo elplaneta.

Cuarenta añosdespués, sigo mante-niendo esas ideas,con el mismo vigor ypasión que entonces,en plena juventud. Y

no sólo por fidelidad a mí mismo, sino tam-bién por comprobación empírica. Porque lapraxis política de muchos años de represen-tación parlamentaria y de gobierno me haconfirmado la exactitud y viabilidad de ca-si todas sus reglas. He dicho.

Manuel Fraga Iribarne

Un político católicoPocas veces tenemos ocasión de conocer la visión y vivencia de fe de nuestros políticos. El caso de don Manuel Fraga,

Presidente de la Xunta de Galicia, es una excepción. Publicamos un extracto del testimonio que ofreció en el curso Iglesia, política y sociedad en la España del siglo XXI, recientemente organizado por la Universidad

Rey Juan Carlos, y que llevaba por título Mi visión de la doctrina social católica

Don Manuel Fraga cruzando la PuertaSanta, en la aperturadel presente Año SantoCompostelano.A la derecha, en otra celebraciónlitúrgica, en la catedralde Santiago de Compostela

La doctrina social católicano ejerce en laactualidad la influenciaque debiera ejercer enEspaña. La masa delpueblo español ladesconoce, y los mediosmasivos de mayordifusión la ignoran.Todos los intelectualescatólicos tenemos enesto una deuda sin saldar

EL DÍA DEL SEÑOR 22-VII-2004 ΩΩ15 AA

Una interesada madre, con todasu buena intención y buscandosiempre el bien de sus hijos,

se acercó un día al Maestro, para pe-dirle que sus hijos tuvieran un cargoimportante en el Reino, que Él iba ainstaurar. Cualquier madre hubiera he-cho lo mismo en su lugar. Tal vez, co-mo insinúa el texto evangélico de lafiesta de Santiago Apóstol, la actitudde la madre era compartida plena-mente por sus hijos; en realidad, to-dos ellos querían tener buena parte enese Reino, que se anunciaba y se ave-cinaba. La ambición de los Zebedeos,a quienes Jesús puso por sobrenom-bre hijos del Trueno, no se resistía adejar pasar por alto esa oportunidadde prestigio y de poder.

Pero la petición de los Zebedeosno era muy congruente con el anun-cio de la pasión de Jesús, que mo-mentos antes acababan de oír. El Ma-estro tiene la gran habilidad de re-si-tuar siempre a su interlocutor: sea cual

sea su posición intelectual, su morali-dad, su opción política o su religiosi-dad, viene reconducido por Jesús has-ta llevarle al punto exacto, desde elcual se plantean objetiva y correcta-mente las cosas. Centrando de nuevola conversación sobre el tema de lapasión, les pregunta: «¿Podéis beber elcáliz que yo voy a beber?» La cono-cida respuesta es afirmativa, concisa ycontundente, propia de quien está dis-puesto a todo, con tal de obtener loque desea. A ese diálogo sucede la re-acción de envidia y celos de los otroscompañeros. Y de nuevo el Maestroresitúa la conversación y el plantea-miento de todos ellos: del afán de do-minio y del deseo de poder opresor,propio de los grandes de la tierra, pa-sa a valorar el servicio desinteresado,propio de quienes quieran seguirle:«El que quiera llegar a ser grande en-tre vosotros, será vuestro servidor, y elque quiera ser el primero entre voso-tros, será vuestro esclavo».

El Apóstol Santiago supo pasar deuna actitud de gran ambición a uncompromiso de servicio generoso,ofreciendo su vida para anunciar elEvangelio. Él fue un verdadero testigode la Buena Nueva, vivida primero encarne propia y, después, compartidacon los demás. Gracias a su predica-ción, las gentes de Hispania han po-dido saborear también la experienciade abandonar la propia ambición, pa-ra vivir la sencillez del Evangelio. Eshumano buscar situaciones ventajo-sas de dominio, pero, ante la palabra yel ejemplo del Maestro, esas actitudesse truecan en actitud de servicio: «ElHijo del hombre no ha venido a serservido, sino a servir y a dar su vidacomo rescate por muchos». La fiestadel Apóstol Santiago es una ocasiónpropicia para resituar nuestras posi-ciones.

+ Jesús Cataláobispo de Alcalá de Henares

Los pueblos que están en vías de desarrollo entiendan bien que han de buscar expresa y firmemente, como fin propio del progreso, la plena perfecciónhumana de sus ciudadanos. Tengan presente que el progreso surge y se acrecienta principalmente por medio del trabajo y la preparación de los propios

pueblos, progreso que debe ser impulsado no sólo con las ayudas exteriores, sino ante todo con el desenvolvimiento de las propias fuerzas y el cultivo de lasdotes y tradiciones propias. En esta tarea deben sobresalir quienes ejercen mayor influjo sobre sus conciudadanos. Por su parte, los pueblos ya desarrolladostienen la obligación gravísima de ayudar a los países en vías de desarrollo a cumplir tales cometidos. Por lo cual han de someterse a las reformaspsicológicas y materiales que se requieren para crear esta cooperación internacional. Busquen así con sumo cuidado, en las relaciones comerciales con lospaíses más débiles y pobres, el bien de estos últimos, porque tales pueblos necesitan para su propia sustentación los beneficios que logran con la venta desus mercancías. Es deber de la comunidad internacional regular y estimular el desarrollo, de forma que los bienes a este fin destinados sean invertidos con lamayor eficacia y equidad. Pertenece también a dicha comunidad, salvado el principio de la acción subsidiaria, ordenar las relaciones económicas en todo elmundo para que se ajusten a justicia. Fúndense instituciones capaces de promover y de ordenar el comercio internacional, en particular con las nacionesmenos desarrolladas, y de compensar los desequilibrios que proceden de la excesiva desigualdad de poder entre las naciones. Esta ordenación, unida a otrasayudas de tipo técnico, cultural o monetario, debe ofrecer los recursos necesarios a los países que caminan hacia el progreso, de forma que puedan lograrconvenientemente el desarrollo de su propia economía.

Constitución Gaudium et spes, 86

Esto ha dicho el Concilio

Solemnidad de Santiago Apóstol, Patrono de España

De la ambición, al servicioEvangelio

En aquel tiempo, se acercó aJesús la madre de los Zebe-

deos con sus hijos y se postrópara hacerle una petición. Él lepreguntó: «¿Qué deseas?»

Ella contestó: «Ordena queestos dos hijos míos se sientenen tu reino, uno a tu derecha y elotro a tu izquierda».

Pero Jesús replicó: «No sa-béis lo que pedís. ¿Sois capa-ces de beber el cáliz que yo hede beber?»

Contestaron: «Lo somos».Él les dijo: «Mi cáliz lo be-

beréis; pero el puesto a mi de-recha o a mi izquierda no metoca a mí concederlo, es paraaquellos para quienes lo tienereservado mi Padre».

Los otros diez, que lo habíanoído, se indignaron en contra delos dos hermanos. Pero Jesús,reuniéndolos, les dijo:

«Sabéis que los jefes de lospueblos los tiranizan y que losgrandes los oprimen. No seráasí entre vosotros; el que quieraser grande entre vosotros, quesea vuestro servidor, y el quequiera ser primero entre voso-tros, que sea vuestro esclavo.Igual que el Hijo del hombre noha venido para que le sirvan, si-no para dar su vida en rescatepor muchos».

Mateo 20, 20-28

RAÍCESΩΩ16

22-VII-2004AA

ue la reina Teresa de Portugal la que con-cedió el sobrenombre de Ribeira sacra a laregión gallega que se extiende por las már-genes del río Miño hasta que el Sil se leune; ríos que, en palabras de don ManuelFraga, Presidente de Galicia, «han mar-cado siempre territorios de vida». De pri-vilegiado paisaje, con montañas que se al-zan con suavidad sobre los meandros delcauce de agua, este rincón de Galicia ha si-do y es centro de espiritualidad. En sus

colinas se levantaron, ya desde que losprimeros cristianos ocupaban la penín-sula, lugares de culto, monasterios y con-ventos, que forman hoy parte de un pai-saje natural donde el espíritu alcanza losmás altos vuelos.

La celebración del Año Santo Jacobeoy las actividades paralelas que la Juntade Galicia está desarrollando, con motivode tan señalada fecha, están detrás de unaexposición organizada por el Gobierno

autonómico, en la que colaboran distin-tas corporaciones locales e institucioneseclesiales, y que cuenta con la financia-ción del Grupo Leche Pascual.

Bajo el sugerente título de La Ribeirasacra. Esencia de espiritualidad en Gali-cia, esta muestra, que se expone en la ca-tedral-basílica de San Martín de Orensehasta el 22 de agosto, después de haberpasado por la capilla de Santa María, enLugo, recoge piezas de pintura y escultu-ra procedentes de los lugares más recón-ditos de estas dos provincias gallegas. Pa-ra don Manuel Fraga, con esta selecciónde obras de arte, se presentan ante el granpúblico «tesoros que permanecían silen-ciosos y escondidos en pequeños pueblos».

Viñedos, aldeas de galerías abiertas,monasterios cistercienses y benedictinos,pazos, iglesias y castillos conforman elpaisaje de las verdes lomas que enmar-can al río Miño. Para el Consejero de Cul-tura, Comunicación Social y Turismo dela Junta, don Jesús Pérez Varela, la ex-posición sobre la Ribeira sacra gallega es«una guía para caminar por un lugar que

Una exposición en la catedral de Orense recoge obras de arte de la región

Religión y arte en la Ribeirasacra gallega

Los ríos Miño y Sil bañan una tierra de montes abruptos en los que, sobre el susurro que levanta el agua, se hanasentado, durante siglos, conventos y monasterios que han hecho de la Ribeira sacra un rincón de espiritualidad. Con motivo del Año Santo Compostelano, la Xunta de Galicia, con el patrocinio de Leche Pascual, ha organizado

una exposición que pretende servir de guía al que busca la paz más allá de Santiago. La muestra estará en la catedral-basílica de San Martín, de Orense hasta el 22 de agosto

F

RAÍCES 22-VII-2004 ΩΩ17 AA

merece la pena recorrer». Al mismo tiem-po, se han rescatado tesoros que «la de-samortización abocó a la ruina».

Para quienes aprovechen el Año SantoCompostelano para llegar hasta Galiciasiguiendo la estela del apóstol Santiago,terminar la ruta de peregrinación en losvalles recónditos de la Ribeira sacra es unabuena elección. En la campa de sus densosbosques, el peregrino descubre la paz quebuscó todo el Camino y, a través de cadauna de las edificaciones, recuerda la his-toria de un monacato tan antiguo casi co-mo el cristianismo.

María S. Altaba

Datos de interés

Lugar:Catedral-basílica de San Martínde Orense.Fechas:Del 2 de julio al 22 de agosto

Relieve de La Visitación.Iglesia parroquial deSan Miguel do Campo,Noguira de Ramuín(Orense).A su izquierda: Huida a Egipto (sigloXIII). Parroquia deSanta Mariña de Asadur,Maceda (Orense).Abajo, de izquierda aderecha: enclave delmonasterio de SantaCristina de Ribas de Sil(Orense);San Miguel Arcángel(siglo XVIII). Iglesiaparroquial de SanMiguel de Eiré, Pantón(Lugo);Crismón (siglo X).Museo ArqueológicoProvincial, de Orense;San Pedro. Esculturaatribuida a Juan deAngés (siglo XVI).Iglesia monasterial deSanta Cristina de Ribasde Sil (Orense)

ESPAÑAΩΩ18

22-VII-2004AA

tiempo que plenifica sus existencias, es ellugar digno para la acogida de nuevas vidaspersonales. En cambio, las relaciones ho-mosexuales, al no expresar el valor antro-pológico de la diferencia sexual, no reali-

zan la complementariedad de los sexos, nipueden engendrar nuevos hijos.

A veces se arguye en contra de estas afir-maciones que la sexualidad puede ir hoy se-

parada de la procreación y que, de hecho,así sucede gracias a las técnicas que, por unaparte, permiten el control de la fecundidad y,por otra, hacen posible la fecundación enlos laboratorios. Sin embargo, será necesa-rio reconocer que estas posibilidades técni-cas no pueden ser consideradas como susti-tutivo válido de las relaciones personalesíntegras que constituyen la rica realidad an-tropológica del verdadero matrimonio. Latecnificación deshumanizadora de la vidano es un factor de verdadero progreso en laconfiguración de las relaciones conyugales,de filiación y de fraternidad.

El bien superior de los niños exige, porsupuesto, que no sean encargados a los la-boratorios, pero tampoco adoptados poruniones de personas del mismo sexo. Nopodrán encontrar en estas uniones la rique-za antropológica del verdadero matrimonio,el único ámbito donde, como Juan Pablo IIha recordado recientemente al Embajadorde España ante la Santa Sede, las palabraspadre y madre pueden «decirse con gozo ysin engaño». No hay razones antropológi-cas ni éticas que permitan hacer experi-mentos con algo tan fundamental como es elderecho de los niños a conocer a su padre y

El pasado 29 de junio, el Congreso de losDiputados votó favorablemente una pro-posición no de Ley, del Partido Socia-

lista, que solicita la equiparación legal plenade las uniones de personas del mismo sexocon el verdadero matrimonio. El Gobierno,por medio del ministro de Justicia, se apre-suró a anunciar que, en septiembre, remitiráa la Cámara un proyecto de Ley en este mis-mo sentido y que confía en que el llamadomatrimonio homosexual sea posible legal-mente ya para comienzos del año próximo.También se votaron varias proposiciones deLey que legitimarían las uniones homose-xuales de diversos modos.

Las personas homosexuales, como todos,están dotadas de la dignidad inalienable quecorresponde a cada ser humano. No es, enmodo alguno, aceptable que se las menos-precie, maltrate o discrimine. Es evidenteque, en cuanto personas, tienen en la sociedadlos mismos derechos que cualquier ciudada-no y, en cuanto cristianos, están llamados aparticipar en la vida y en la misión de la Igle-sia. Condenamos una vez más las expresio-nes o los comportamientos que lesionan ladignidad de estas personas y sus derechos;y llamamos de nuevo a los católicos a res-petarlas y a acogerlas como corresponde auna caridad verdadera y coherente.

Con todo, ante la inusitada innovación le-gal anunciada, tenemos el deber de recordartambién algo tan obvio y natural como que elmatrimonio no puede ser contraído más quepor personas de diverso sexo: una mujer yun varón. A dos personas del mismo sexo noles asiste ningún derecho a contraer matri-monio entre ellas. El Estado, por su parte,no puede reconocer este derecho inexistente,a no ser actuando de un modo arbitrario queexcede sus capacidades y que dañará, sin du-da muy seriamente, el bien común. Las ra-zones que avalan estas proposiciones son deorden antropológico, social y jurídico. Lasrepasamos sucintamente, siguiendo de cercalas recientes orientaciones del Papa a esterespecto.

La realidad antropológica

Los significados unitivo y procreativo dela sexualidad humana se fundamentan en larealidad antropológica de la diferencia se-xual y de la vocación al amor que nace deella, abierta a la fecundidad. Este conjuntode significados personales hace de la unióncorporal del varón y de la mujer en el matri-monio la expresión de un amor por el que seentregan mutuamente, de tal modo, que esadonación recíproca llega a constituir una au-téntica comunión de personas, la cual, al

Nota del Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal Española

En favor del verdaderomatrimonio

En su reunión del pasado día 15 de julio, el Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal Española hizo pública la siguiente Nota, que ofrecemos íntegra a nuestros lectores:

El matrimonio no puede ser contraído más que por personas de diverso sexo: una mujer y un varón. A dos personasdel mismo sexo no les asiste ningúnderecho a contraer matrimonio entre ellas. El Estado no puede reconocer este derechoinexistente, a no ser actuando de un modoarbitrario que excede sus capacidades y que dañará, sin duda muy seriamente, el bien común

El cardenal Presidente y el Secretario Generalde la ConferenciaEpiscopal Española

ESPAÑA 20-V-2004 ΩΩ19 AA

a su madre, y a vivir con ellos, o, en su caso,a contar al menos con un padre y una ma-dre adoptivos, capaces de representar la po-laridad sexual conyugal. La figura del pa-dre y de la madre es fundamental para la ne-ta identificación sexual de la persona. Nin-gún estudio ha puesto fehacientemente encuestión estas evidencias.

La relevancia del único verdadero matri-monio para la vida de los pueblos es tal, quedifícilmente se pueden encontrar razonessociales más poderosas que las que obliganal Estado a su reconocimiento, tutela y pro-moción. Se trata, en efecto, de una instituciónmás primordial que el Estado mismo, ins-crita en la naturaleza de la persona como sersocial. La historia universal lo confirma:ninguna sociedad ha dado a las relacioneshomosexuales el reconocimiento jurídico dela institución matrimonial.

El matrimonio, en cuanto expresión ins-titucional del amor de los cónyuges, que serealizan a sí mismos como personas y queengendran y educan a sus hijos, es la baseinsustituible del crecimiento y de la estabi-lidad de la sociedad. No puede haber ver-dadera justicia y solidaridad si las familias,basadas en el matrimonio, se debilitan co-mo hogar de ciudadanos de humanidad bienformada.

Si el Estado procede a dar curso legal a unsupuesto matrimonio entre personas delmismo sexo, la institución matrimonial que-dará seriamente afectada. Fabricar monedafalsa es devaluar la moneda verdadera y po-ner en peligro todo el sistema económico.De igual manera, equiparar las uniones ho-mosexuales a los verdaderos matrimonios, esintroducir un peligroso factor de disoluciónde la institución matrimonial y, con ella, deljusto orden social.

Se dice que el Estado tendría la obliga-ción de eliminar la secular discriminaciónque los homosexuales han padecido por nopoder acceder al matrimonio. Es, cierta-mente, necesario proteger a los ciudadanoscontra toda discriminación injusta. Pero esigualmente necesario proteger a la sociedadde las pretensiones injustas de los grupos ode los individuos. No es justo que dos per-sonas del mismo sexo pretendan casarse.Que las leyes lo impidan no supone discri-minación alguna. En cambio, sí sería injus-to y discriminatorio que el verdadero matri-monio fuera tratado igual que una unión depersonas del mismo sexo, que ni tiene nipuede tener el mismo significado social.Conviene notar que, entre otras cosas, la dis-criminación del matrimonio en nada ayuda-rá a superar la honda crisis demográfica quepadecemos.

Error e injusticia

Se alegan también razones de tipo jurí-dico para la creación de la ficción legal delmatrimonio entre personas del mismo sexo.Se dice que ésta sería la única forma de evi-tar que no pudieran disfrutar de ciertos de-rechos que les corresponden en cuanto ciu-dadanos. En realidad, lo justo es que acu-dan al derecho común para obtener la tutelade situaciones jurídicas de interés recípro-co. En cambio, se debe pensar en los efectosde una legislación que abre la puerta a laidea de que el matrimonio entre un varón yuna mujer sería sólo uno de los matrimo-nios posibles, en igualdad de derechos con

otros tipos de matrimonio. La influencia pe-dagógica sobre las mentes de las personasy las limitaciones, incluso jurídicas, de sus li-bertades que podrán suscitarse serán, sin du-da, muy negativas. ¿Será posible seguir sos-teniendo la verdad del matrimonio, y edu-

cando a los hijos de acuerdo con ella, sinque padres y educadores vean conculcadosu derecho a hacerlo así por un nuevo sis-tema legal contrario a la razón? ¿No se aca-bará tratando de imponer a todos por la pu-ra fuerza de la ley una visión de las cosascontraria a la verdad del matrimonio?

Pensamos, pues, que el reconocimientojurídico de las uniones homosexuales y, másaún, su equiparación con el matrimonio,constituiría un error y una injusticia de muynegativas consecuencias para el bien comúny el futuro de la sociedad. Naturalmente, só-

lo la autoridad legítima tiene la potestad deestablecer las normas para la regulación de lavida social. Pero también es evidente quetodos podemos y debemos colaborar con laexposición de las ideas y con el ejercicio deactuaciones razonables a que tales normasrespondan a los principios de la justicia ycontribuyan realmente a la consecución delbien común. Invitamos, pues, a todos, en es-pecial a los católicos, a hacer todo lo que le-gítimamente se encuentre en sus manos ennuestro sistema democrático para que las le-yes de nuestro país resulten favorables alúnico verdadero matrimonio. En particular,ante la situación en la que nos encontramos,el parlamentario católico tiene el deber mo-ral de expresar clara y públicamente su de-sacuerdo y votar contra el proyecto de Leyque pretenda legalizar las uniones homose-xuales.

La institución matrimonial, con toda labelleza propia del verdadero amor humano,fuerte y fértil, también en medio de sus fra-gilidades, es muy estimada por todos lospueblos. Es una realidad humana que res-ponde al plan creador de Dios y que, paralos bautizados, es sacramento de la graciade Cristo, el esposo fiel que ha dado su vidapor la Iglesia, haciendo de ella una madrefeliz y fecunda de muchos hijos. Precisa-mente por eso, la Iglesia reconoce el valor sa-grado de todo matrimonio verdadero, tam-bién del que contraen quienes no profesannuestra fe. Junto con muchas personas deideologías y de culturas muy diversas, esta-mos empeñados en fortalecer la instituciónmatrimonial, ante todo, ofreciendo a los jó-venes ejemplos que seguir e impulsos quesecundar. En este proyecto de una civiliza-ción del amor las personas homosexualesserán respetadas y acogidas con amor. In-vocamos para todos la bendición de Dios yla ayuda de Santa María y de san José.

Si el Estado procede a dar curso legal a un supuesto matrimonio entre personasdel mismo sexo, la institución matrimonialquedará seriamente afectada. Fabricarmoneda falsa es devaluar la monedaverdadera y poner en peligro todo el sistema económico. De igual manera,equiparar las uniones homosexuales a los verdaderos matrimonios, es introducir un peligroso factor de disolución de la institución matrimonial y, con ella, del justo orden social

MUNDOΩΩ20

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La Santa Sede, en el año 2003, registróingresos por un valor de 203.659.498euros, y gastos por un valor de

213.228.954 euros, con un déficit de9.569.456 euros. Después de comunicar es-tos números, el cardenal Sergio Sebastiani,Presidente de la Prefectura para los Asun-tos Económicos de la Santa Sede, añadió,con una sonrisa: «Si tuviéramos tanto dine-ro, no tendríamos necesidad de sacar la ma-no para pedir ayuda».

Y si el dinero que llega no es suficiente,entonces la Santa Sede tiene que recurrir–como sucede en toda familia– a la reduc-ción de sus gastos, según explicó el cardenalitaliano, y confirmó espontáneamente, conuna expresión que le salió del alma, el padreCiro Benedettini, Subdirector de la Oficinade Información de la Santa Sede, que mo-deraba la rueda de prensa: «Puedo confir-mar esta austeridad».

Entre quienes trabajan en el Vaticano, elauténtico mito o leyenda ha pasado a ser elde la posibilidad de aumentar de presu-puesto, sobre todo de personal. En particular,el Vaticano ha ahorrado más de un millónde euros en personal, en el último ejercicio(en la Curia romana trabajan 2.674 perso-nas, y hay cerca de unos mil jubilados). «Pa-ra ello –aclaró el cardenal Sebastiani–, seha evitado con todos los medios aumentarel personal. Además, hemos limitado a lourgente los gastos de mantenimiento, en par-ticular los que se refieren a las 118 Nuncia-turas apostólicas en el mundo».

La Curia romana, cuyos servicios no ge-neran ganancias económicas, se financia gra-cias a la generosidad de las diócesis de todo elmundo, de las familias religiosas, de funda-ciones católicas, y de fieles de todo el mundo.

En 2003, según reveló el cardenal Se-bastiani, estas contribuciones experimenta-

ron un descenso, pasando de 85,4 millones a79,6 millones de euros. En parte, este bajónse debe a la devaluación del dólar con res-pecto al euro. De hecho, Estados Unidos si-gue siendo el país que más colabora econó-micamente con el Vaticano.

El Óbolo de San Pedro ha experimentado,sin embargo, un incremento del 5,7%:45.096.388 euros. Este dinero, según ha exi-gido Juan Pablo II, no se destina a cubrir elpresupuesto vaticano, sino que se dedica aayudas del Papa a Iglesias perseguidas o po-bres, así como a poblaciones en necesidad, ovíctimas de catástrofes naturales y la guerra.

El Administrador vaticano explicó quelas causas del déficit hay que atribuirlas ala coyuntura económica mundial, que, «apartir de la última parte del año 2000, ya ha-bía entrado en una fase de crisis, y que des-pués experimentó las turbulencias provoca-das por acontecimientos de otro carácter,como el ataque a las torres gemelas y la se-rie de ulteriores atentados, la guerra en Iraqy la perduración del conflicto entre israelíesy palestinos».

Dado que el Vaticano pertenece a la zonamonetaria del euro, y que buena parte de suscontribuciones llegan en dólares, la deva-luación del dólar con respecto a la monedaeuropea (el récord de 1,26 dólares euros seregistró en diciembre de 2003), también hainfluido negativamente. Para cubrir este dé-ficit la Santa Sede echará mano al patrimo-nio neto.

Números rojos

El balance económico de la Santa Sede re-lativo al año 2003 constata que la mayor par-te de los gastos corresponde a la gestión ordi-naria y extraordinaria de los organismos dela Santa Sede: Secretaría de Estado (con dosSecciones), 9 Congregaciones, 3 Tribunales,11 Consejos Pontificios, la Cámara Apostó-lica, la Administración del Patrimonio de laSede Apostólica (APSA), la Prefectura para losAsuntos Económicos de la Santa Sede, la Pre-fectura de la Casa Pontificia, la Oficina de lasCelebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífi-ce, la Oficina de Prensa de la Santa Sede, elVatican Information Service, la Oficina Cen-tral de Estadística de la Iglesia, 5 Comitéspontificios y Comisiones, 9 instituciones re-lacionadas con la Santa Sede, el Sínodo delos Obispos y 6 Academias Pontificias. Aesosorganismos centrales hay que añadir las 118sedes de representación pontificia en las na-ciones u organismos internacionales.

Además de los gastos institucionales de laCuria romana, el balance económico tieneotros sectores, como el de las actividades fi-nancieras, gestión del patrimonio, que secreó cuando Italia compensó con los Pactosde Letrán, en 1929, los daños provocadospor la expropiación de los Estados Pontifi-cios. En este apartado se obtuvo un resulta-do negativo de 11,6 millones de euros.

Agoniza el mito de las riquezas del VaticanoHay mitos que tardan en morir, como el de las riquezas del Vaticano. A quien

le cae entre manos el balance económico de la Santa Sede, presentado el pasado 8 de julio, la impresión que le suscita es más bien la de una austeridad obligada,después de que, por tercer año consecutivo, se haya cerrado en números rojos

Otro sector es el patrimonio inmobilia-rio (en buena parte depende también deaquellas mismas concesiones del Estado ita-liano), que ha cerrado con un beneficio de22,4 millones de euros.

La actividad de las instituciones de losmedios de comunicación (Radio Vaticana,Tipografía Vaticana/L’Osservatore Roma-no, Librería Editora Vaticana y Centro Te-levisivo Vaticano) cerró con un déficit de1,2 millones de euros (1,4 millones de dó-lares), menor que el de 2002, que fue de 1,7millones de euros (2,1 millones de dólares).

El balance económico del Estado de laCiudad del Vaticano, independiente al de laSanta Sede y que tiene en cuenta los servi-cios propios de esta ciudad (desde los mu-seos hasta su farmacia o cuerpo de policía),también se cerró en números rojos, con undéficit de 8.820.678 euros (10.911.179 dó-lares); el año anterior había sido de16.048.508 euros (unos 19.852.004 dóla-res). Estas pérdidas se deben a obras de res-tauración de los edificios y obras artísticasdel Vaticano, y a la contribución de10.452.543 euros (unos 12.929.796 dólares)que el Gobierno del Estado de la Ciudad delVaticano ha ofrecido a Radio Vaticano, pa-ra cubrir su deuda, según aclara el comuni-

cado de los cardenales. El número de em-pleados en el Estado de la Ciudad del Vati-cano asciende a 1.534.

Las cuentas del Vaticano son revisadas, en-tre otros, por el Consejo de los cardenales pa-ra el estudio de los problemas organizativos yeconómicos de la Santa Sede, del que formaparte el cardenal Ricardo María Carles Gor-dó, arzobispo emérito de Barcelona. Antes dela presentación del balance, los purpuradosmantuvieron una reunión de control, en la queafrontaron en particular el tema de los mediosde comunicación social de la Santa Sede, y enconcreto el caso de Radio Vaticano, que cons-tituyen uno de los motivos de su déficit.

«La Iglesia es muy sensible a la utiliza-ción de estos instrumentos que implican in-gentes recursos financieros y exigen conti-nuas innovaciones tecnológicas, pero de-sempeñan un importante y provechoso ser-vicio de información sobre la actividad yenseñanza del Santo Padre y de la Iglesiauniversal, así como de formación pastoral, enparticular para aquellos países que dispo-nen de limitados recursos para la evangeli-zación», aclara una Nota que emitieron loscardenales tras su reunión.

Jesús Colina. Roma

MUNDO 22-VII-2004 ΩΩ21 AA

Habla el Papa

Una caridad más efectiva

Las condiciones de pobrezaextrema que afectan a muchos

millones de personas son motivo degran preocupación para lacomunidad internacional. La Iglesia,naturalmente, comparte estapreocupación, y apoya el objetivode reducir a la mitad, para el año2015, el número de personas queviven bajo el umbral de la pobreza.A través de numerosos organismoscatólicos de ayuda y desarrollo, laIglesia contribuye a la realización deestos objetivos. Lo que se necesitaahora es una nueva creatividad en lacaridad, de manera que seencuentren caminos más efectivospara alcanzar una distribución másjusta de los recursos mundiales.

Se ha hecho mucho para reducirla carga de la deuda de los paísespobres, pero hay que hacer muchomás, si queremos que las nacionesen desarrollo se liberen de losefectos paralizadores de la falta deinversiones, y que los paísesdesarrollados cumplan con su deberde solidaridad con sus hermanosmenos afortunados. De breve amedio plazo, el compromiso deincrementar la ayuda exterior pareceser el único camino viable, y laIglesia acoge con agrado labúsqueda de solucionesinnovadoras, como la InternationalFinance Facility.

La Iglesia alienta también otrasiniciativas, patrocinadas tanto porNaciones Unidas como por losGobiernos individuales. Al mismotiempo, el apoyo financiero de lasnaciones más ricas requiere laobligación, por parte de quien larecibe, de demostrar transparencia yfiabilidad en el empleo de esaayuda. Estoy seguro de que todos losGobiernos asumirán con seriedadsus responsabilidades hacia losdemás y con sus pueblos.

(9-VII-2004)

Aumentan las aportaciones a la caridad del Papa

Si bien la coyuntura económica ha provocado una ligera disminución de las ayudas de las diócesis,familias religiosas y fieles católicos del mundo para los gastos de funcionamiento de la Curia romana,

en el año 2003 han aumentado en un del 5,7% las donaciones al Óbolo de San Pedro, recogiendo45.096.388 euros. Juan Pablo II ha destinado esta cantidad económica a intervenciones de caridad afavor de las comunidades eclesiales perseguidas o necesitadas, y para ayudar a poblaciones flageladaspor guerras o catástrofes naturales. Según reveló el pasado 7 de julio una Nota de prensa emitida por elConsejo de los cardenales para el estudio de los problemas organizativos y económicos de la Santa Sede,el aumento de las donaciones al Óbolo de San Pedro es constante desde hace años. El Óbolo se recoge,en particular, gracias a la colecta efectuada en las diócesis de todo el mundo, sobre todo, con motivo dela solemnidad de los Santos Pedro y Pablo. Por este motivo, los cardenales que forman parte del Consejo,según se lee en la Nota de prensa, «han manifestado profunda gratitud a todos aquellos que, con sucontribución, con frecuencia anónima pero generosa, han querido dar al Santo Padre una respuestaconcreta a las apremiantes necesidades de quienes se encuentran en graves dificultades, o en la repentinay absoluta indigencia». Si bien sus raíces ya están en la colecta que organizó san Pablo para ayudar a lospobres de la Iglesia madre de Jerusalén, el origen histórico del Óbolo de San Pedro se remonta a finalesdel siglo VIII, cuando los anglosajones se convirtieron al cristianismo y, como signo de unión con elobispo de Roma, decidieron enviar de manera estable una contribución al Santo Padre.

El Papa dona a Rusia el iconode la Virgen de Kazán

En un gesto profundamente simbólico, destinado a promover las re-laciones fraternas con la Iglesia ortodoxa rusa, el Papa Juan Pablo

II devolverá el venerado icono de la Virgen de Nuestra Señora de Ka-zán a la Iglesia ortodoxa rusa, que conserva en la capilla de su apar-tamento privado. La fecha que ha elegido es también simbólica: 28de agosto, fiesta de la Dormición de la Virgen, que para los ortodo-xos corresponde a nuestra fiesta de la Asunción de María. Este ico-no fue robado en 1904 en Moscú; durante la revolución de 1917, unmercader lo vendió en Londres; acabó en los Estados Unidos, desdedonde, en 1970, fue donado a la basílica de Fátima. En uno de los via-

jes del Papa a Fátima, se lo regalaron al Papa, y ahora volverá a Rusia. Según los expertos, esteicono sería una magnífica copia del original, y fue realizada a comienzos del siglo XVIII, mientrasque el original (en paradero desconocido) se remonta a 1579.

Éxito de Magníficat

Magníficat es un librito de oración que recoge la oración litúrgicade la Iglesia para cada día del mes (las más hermosas oraciones, lec-

turas e himnos de la Iglesia, en cómodo formato). Ha alcanzado los8.200 suscriptores en España, más dos mil de venta en librerías. Son ci-fras del mayor interés, aunque todavía no ha logrado las cotas de acep-tación que tiene en Francia, donde nació. El director de la redacción esdon Pedro María del Monte, y el redactor-jefe es don Pablo Cervera Ba-rranco, capellán de la Universidad San Pablo-CEU. Ayudan en la re-dacción David Amado y Ángela Pérez García. En la foto, la portada deuno de los números de este año.

Restauración en Mondoñedo

En el museo de la catedral de Mondoñedo, ha tenido lugar recientemente lainauguración de las salas de exposición del Museo catedralicio diocesano

que han sido rehabilitadas y acondicionadas por la Fundación Pedro Barriéde la Maza, con un presupuesto de más de ochenta y un mil euros. Por vezprimera se expone al público, en óptimas condiciones museísticas, unaespléndida selección de las 60 obras más significativas del Museo; 33 de ellaspertenecen a los fondos diocesanos; y 27, a los fondos catedralicios. La pri-mera sala acoge una selección de obras sobre el ceremonial sacro, El esplen-dor barroco y su tradición, en la que destaca el retablo de la antigua sacristía;la segunda sala acoge dos colecciones: Los orígenes bajomedievales (orfebre-ría, tallas y pinturas de los siglos XV y XVI); y Mondoñedo: por el camino deTrento, con tallas, retablos y pinturas del siglo XVI.

NombresEl Papa Juan Pablo II, en una de sus excursiones vaca-

cionales en coche a la montaña, ha visitado el mo-nasterio Mater Misericordiae, en la localidad de Vi-llair di Quart, cuya primera piedra bendijo en 1986;en 1989, él mismo inauguró el convento. Se trata deuna comunidad de religiosas carmelitas de clausu-ra. Se ha sabido que el Papa está preparando un li-bro de reflexiones filosóficas, aunque, según el pa-dre Ptasznik, Jefe de la sección polaca de la Secre-taria de Estado vaticana, «no es probable que lapublicación sea inminente. Abordará los proble-mas del totalitarismo». Los cuatro libros anterioresdel Papa son: Cruzando el umbral de la esperanza;Don y misterio; Tríptico romano; y Levantaos, va-mos.

Carla Diez de Rivera ha dirigido, en El Burgo de Osma(Soria), el curso de verano de la Universidad SanPablo-CEU sobre Patrimonio histórico: recuperarel pasado para construir el futuro. En él participanlos más reconocidos expertos que analizan la misiónque tienen las autoridades de transmitir el patri-monio histórico y cultural.

El arzobispo emérito castrense monseñor José ManuelEstepa Llaurens ha recibido un homenaje con mo-tivo de sus Bodas de Oro sacerdotales. Se lo ofre-cieron el pasado 7 de julio, en Los Peñascales (Ma-drid), el cardenal Antonio María Rouco Varela, losobispos miembros de la Comisión episcopal de En-señanza y Catequesis, presididos por monseñor An-tonio Cañizares Llovera, arzobispo de Toledo, yantiguos directores de la Subcomisión episcopalde Catequesis.

El Seminario Menor diocesano de Tarazona acogerá,del 2 al 5 de agosto, la VII Semana de Espiritualidady Liturgia, que estará dedicada al tema Liturgia yreligiosidad popular. Serán ponentes los profeso-res don Raúl Berzosa, don Gabriel Ramis, don Fran-cisco Raya, don Ignacio Tomás y don Luis Rueda.

El padre Juan Antonio Martínez Camino, SecretarioGeneral de la Conferencia Episcopal Española, hasido el primer ponente del curso de verano queacaba de celebrar la Facultad de Teología de Burgossobre Hombre, ciencia y religión.

Los militantes del Movimiento de Jóvenes de AcciónCatólica celebran su III Asamblea General Ordina-ria, del 22 al 25 de julio, en Bilbao, con el lemaSer dentro, para estar fuera. Asisten 200 jóvenes detoda España, y es un importante momento de revi-sión de la identidad, estructura e implantación delmovimiento en las diócesis españolas.

Monseñor Ramón Echaren, obispo de Canarias, aca-ba de conmemorar el VI Centenario de la creaciónde la diócesis por el Papa Benedicto XIII.

Doña María del Mar López Andrés es la primera mujerque accede al cargo de Canciller Secretario delObispado de Almería; tras 5 años al frente de Cári-tas almeriense, sustituye, por decisión del obispode la diócesis, monseñor Adolfo González Mon-tes, al hasta ahora Canciller Secretario, don JuanMolina, que se ha jubilado. Doña María del Mares diplomada en Magisterio y funcionaria.

En nombre del Papa, el cardenal Angelo Sodano, SuSecretario de Estado, ha enviado un telegrama alPresidente de Iraq con la feliz ocasión de la trans-ferencia de poderes al Gobierno transitorio de Iraq,por cuyo pueblo el Juan Pablo II siempre se ha in-teresado profundamente. «La Iglesia católica –selee en el telegrama– le ofrece todo su apoyo y alien-to en la tarea de construir un nuevo Iraq».

La catedral de Valencia –informa AVAN– exhibe, por pri-mera vez, pinturas góticas y renacentistas salvadasde los incendios ocasionados por la barbarie de laguerra civil en 1936.

LA VIDAΩΩ22

22-VII-2004AA

Datos de la Dirección General de Salud Pública y Fomento del Ministerio de Sanidad

Libros

Cuando fue publicado en italiano, Alfa yOmega ya se ocupó de este libro, que

ahora edita Grijalbo enespañol: La conversión.Una historia personal. Ensus 140 páginas,Leonardo Mondadori,Presidente de la editorialitaliana del mismonombre, y el periodistaVittorio Messoriconversan sobre eltrascendental y definitivoproceso interior quelleva a un hombre de

trayectoria vital laica a asumir, libre ydecididamente, la fe católica como guía desu existencia. Son páginas fascinantes, queexplican muchas cosas sorprendentes sobrelos resortes más íntimos delcomportamiento humano. Es la crónicarigurosa de una conversión. Entrevistador yentrevistado son ambos conversos, yreflexionan con humildad y prudentemoderación, pero con absoluta claridad,sobre el sentido de la vida, la familia, lafelicidad, los sacramentos, la vida eterna...Se trata de un testimonio verdaderamentevalioso y excepcional.

Edibesa, la editorial que con ritmotrepidante y con tino dirige el padre

dominico José AntonioMartínez Puche, acabade publicar estas 500páginas, profusa ymagníficamenteilustradas, sobre SantoDomingo de Guzmán enla iconografía española.Santo Domingo deGuzmán (1170-1221)fue el primer españolque fundó una Ordenreligiosa, concretamente

la Orden de Predicadores, llamadosdominicos. La presencia artística suscitadapor su persona y obra es abrumadora. Losprincipales artistas españoles, pintores,escultores, etc., se han fijado en él. Hacíafalta recoger en una obra tan prodigiosariqueza artística dominicana, y ésta ha sidola tarea –difícil intento– a la que se hadedicado con entusiasmo el autor, el padredominico Domingo Iturgáiz Ciriza,catedrático de Arte Sacro en la PontificiaUniversidad de Santo Tomás, de Roma, y enla Facultad de Teología del Norte de España.Todos los grandes pintores españolesdesfilan por estas páginas: de Berruguete aEl Grego, de Zurbarán a Claudio Coello. Laprimera parte aborda la presencia de santoDomingo en los diversos estilos: gótico,Renacimiento, hispano-flamenco... Lasegunda parte, Museografía dominicana,aporta las fichas técnicas de cada cuadrocon la reproducción, a todo color, de losmás importantes.

M.A.V.WWWW WWWW WWWWLa página web de esta semana ofrece una amplio abanico de informaciones sobre el aborto, que

es la primera causa de muerte en nuestro país; y lo hace en los siguientes apartados: El nego-cio del aborto; Cómo evitarlo; Dónde acudir; Qué hacer; Materiales; Enlaces.

http://www.abortar.org/

La dirección de la semana

El chiste de la semanaEl Roto, en El País

LA VIDA 22-VII-2004 ΩΩ23 AA

Indemnizaciones a profesores de Religión

La Sala de lo Social, del Tribunal Supremo, ha estimado el recurso de casación interpuesto por el sindi-cato USO y, en reciente sentencia, declara nula la cláusula de los contratos de los profesores de Reli-

gión en la que se estipula que no tendrán derecho a indemnización alguna cuando termine su contrato. Lasentencia reconoce expresamente el derecho de estos profesores a que se les indemnice, al término del con-trato que suscriben para cada curso escolar, con una cantidad correspondiente a 8 días de salario.

Descuentos en la Universidad San Pablo-CEUpara hijos de familias numerosas

La Fundación Familia y la Universidad San Pa-blo-CEU han firmado un convenio de cola-

boración, por el cual las familias numerosas ob-tendrán importantes descuentos en las titulacio-nes impartidas por este centro universitario. Losdescuentos, de entre un 25% (carreras técnicas)y un 40% (Humanidades), podrá llegar al 90%,dependiendo de la titulación escogida, del ex-pediente académico y de la situación socio-eco-nómica del alumno. El acuerdo ha sido suscritopor don Alfonso Coronel de Palma, Gran Can-ciller de la Universidad, y por el Director Gene-ral de la Fundación Familia, don José Ramón Lo-sana, y se enmarca en un plan pionero de apoyoeconómico y social a las familias numerosas,que ofrece importantes ventajas, a cargo de másde 30 empresas e instituciones, en diversos sec-tores: banca, automóviles, telefonía, formación,empleo, ocio, viajes, etc.

Más información: Tel. 91 398 07 00 y 91 434 57 81.

DESDE LA FEΩΩ24

22-VII-2004AA

Miles de peregrinos llegan a la tum-ba del apóstol Santiago durante es-te Año Santo Compostelano con

espíritu de conversión, tras el esfuerzo deun caminar interiormente hacia uno mismo,hacia Dios, hacia los demás. El peregrinoes alguien que se aventura a caminar en unpaís desconocido sin ninguna seguridad. Pe-regrinar a la tumba del Apóstol es imageny metáfora de la vida del hombre que, en-contrándose con la fe apostólica, anhela lapaz y el sosiego después de vagar por elmundo, esperando gozar un día de la felici-dad eterna. Hasta entonces vive esa sensa-ción de exilio, constatando la dureza del ca-mino con el peso de la soledad y de la duda.La espiritualidad del éxodo es la del hombreque lucha por liberarse de toda opresión has-ta conseguir la tierra prometida.

La parábola del hijo pródigo es el arque-tipo de la peregrinación, donde se describe elalejamiento que precede al retorno y a laconversión. Un caminar guiado por Cristoy encaminado hacia Él: «Una cosa es ver lapatria de la paz desde una cumbre silvestre,sin encontrar el camino hacia ella, esfor-zándose en balde a través de lugares sin ru-tas, asediado e insidiado en derredor por de-sertores fugitivos con su príncipe el león ydragón; y otra cosa, tener la vía que allí con-duce, vía fortificada por el cuidado del ce-leste emperador y donde no saltean cuantoshan desertado la celeste milicia», escribebellamente san Agustín. Esto comporta unasactitudes como son la austeridad, el des-prendimiento voluntario, el pasar de lo co-nocido para encaminarse a lo desconocido,obedeciendo una voz interior, la voz del Es-píritu que nos invita a sentirnos forasterosen la propia patria, llamados a ser conciu-dadanos de los santos.

El espíritu de la peregrinación lleva con-sigo dejar la propia tierra y la parentela, pa-ra ir lejos, es decir, más allá de lo inmedia-to, de lo que uno conoce o posee, signo de laapertura a la trascendencia. «Para ir adon-

de no sabemos, hay que ir por donde no sa-bemos», escribía san Juan de la Cruz. Eldesprendimiento es substancial para el pe-regrino. No hay salida de lo propio sin aban-dono. El relato genesiaco: «Sal de tu tierra,de tu pueblo y de la casa de tu padre; emigraal país que te indicaré y fija allí tu morada»es fundante en la tematización de la figura

Peregrinar a la tumba del Apóstol es imagen y metáfora de la vida del hombre que,encontrándose con la fe apostólica,anhela la paz y el sosiego después de vagar por el mundo, esperando gozar un díade la felicidad eterna

La espiritualidad del peregrino

El Camino de Santiago, que lleva hasta Compostela, es también un peregrinaje interior;es la metáfora de la vida del hombre y de la Iglesia. La meta no es sólo la tumbadel Apóstol. La meta es que el hombre alcanza el abrazo de Dios misericordioso, que lo libera de toda opresión, y caminando, junto a sus compañeros de viaje,

de penas y glorias, descubre que esta ruta milenaria hay que hacerle mirando al cielo,para hablar con Dios; y mirando al frente, para que de ahí en adelante

viva la conversión del amor verdadero

El Papa Juan Pablo II da el abrazo a la imagen del Apóstol, con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud, en Santiago de Compostela, el 19 de agosto de 1989

DESDE LA FE 22-VII-2004 ΩΩ25 AA

del peregrino. El autor de la Carta a los He-breos, a partir de aquí, elabora una de lasmás hermosas representaciones teológicasde la peregrinación cristiana: «Por la fe,Abraham, al ser llamado por Dios, obede-ció y salió para un lugar que había de recibiren herencia, y salió sin saber dónde iba. Porla fe peregrinó por la tierra prometida comoen tierra extraña, habitando en tiendas, lomismo que Isaac y Jacob, coherederos delas mismas promesas. Pues esperaba la ciu-dad asentada sobre cimientos, cuyo arqui-tecto y constructor es Dios». En el carácterperegrinante del hombre de fe, sobresale laesperanza como el elemento dinámico de laexistencia. Sólo el que espera puede consi-derarse peregrino. El peregrino, al igual queAbraham, sigue el ardiente deseo de su co-razón y peregrina por el mundo, preguntán-dose a veces dónde está Dios, y aunque fla-quee y tenga la tentación de desistir en labúsqueda, Dios tiene piedad del que en so-ledad le busca en el silencio.

El peregrinar a la tumba del Apóstol, des-de lejos, con sus noches y sus días, con losgozos y las penas del camino, se convierteen imagen de la vida cristiana. La Iglesia enla Historia es extranjera en el mundo, y pe-

regrina, está en camino hacia su meta. El pe-regrino siente la ausencia, la precariedad yel erradicarse de su propia tierra, porque es-pera y camina hacia la ciudad celestial. Laconciencia de ser peregrinos ayuda a superarlos obstáculos con serenidad. No temas, quenada te asuste; atiende a la nostalgia de lapatria, ten conciencia de tu condición de pe-regrino. La peregrinación es el espacio quecorre entre el inquietum y el reposo. El pe-

regrino es el que espera alcanzar la dulce,única y verdadera patria; el que se experi-menta como indigente, como un pobre conhambre y sed que saciará únicamente en lapatria definitiva. El peregrino –ser cristia-no– es aquel que, en su propia casa y en supropia patria, se reconoce como extranjero, ypor tanto, siente la llamada a salir y encontrarla meta sirviéndose de signos que le ayudena entrever la meta última y definitiva.

Súplica confiada

La alabanza, la súplica y la confianza sonmanifestaciones del hombre que se está mo-viendo y desplazando, del hombre en cami-no, que vive esa tensión entre la tierra ajenay la ciudad propia, que sale de la patria yvuelve a ella, que pertenece a la sociedadde los ángeles y a la sociedad de los hom-bres: Peregrino por gracia aquí abajo y, porgracia, ciudadano allá arriba. Así apareceya, en alguna forma, cómo deben portarselos peregrinos, viviendo según el Espíritu yno según la carne, según Dios y no segúnel hombre. Esto define una espiritualidadque, junto a la opción básica, comprende lavariedad de recorridos personales, que nose desentiende de la condición humana his-tórica y de sus compromisos de liberación yde promoción, donde el cristiano tiene queser fermento de libertad y progreso, de fra-ternidad y justicia, con conciencia eclesial yvalorando la vida comunitaria. «El caminodel hombre fiel a la Revelación no puedeprescindir de la vida de la Iglesia y, en par-ticular, del ritmo sacramental que envuelvela existencia entera del cristiano, y de la ce-lebración del ciclo litúrgico que proponeanualmente el misterio de Cristo con sus im-plicaciones vitales», sabiendo que el itine-rario espiritual no puede considerarse comouna subida gradual y armónica, ya que llevaconsigo contradicciones.

El Año Santo Compostelano es más queun mero símbolo exterior. Es expresión deuna concepción determinada del hombre yde su relación con Dios, de la presencia de losacro en el corazón de nuestra civilización,de la distinción entre lo temporal y lo espi-ritual. Es una llamada a la esperanza cris-tiana, que no es un ingenuo optimismo ba-sado en el cálculo de probabilidades, y queha de resonar desde la Casa del Señor San-tiago, mirando hacia arriba y caminandohacia delante.

+ Julián Barrio Barrioarzobispo de Santiago

de Compostela

Nueve obispos predican en la Novena de Santiago Apóstol

El próximo domingo 25 de julio se celebra la fiesta del Apóstol Santiago, que, por coincidirprecisamente en domingo, convierte a 2004 en Año Santo Compostelano. Desde el 16 de julio se

celebra, en la catedral compostelana, la Novena al Apóstol, en la que participan otros tantos obispos. Lainició monseñor José Cerviño, obispo emérito de Tui-Vigo. El sábado 17 de julio predicó monseñor LuisQuinteriro, obispo de Orense; el domingo 18, el obispo de Astorga, monseñor Camilo Lorenzo Iglesia.Monseñor José Diéguez Reboredo, obispo de Tui-Vigo, predicó el lunes, 19 de julio; el martes 20,monseñor José Gómez González, obispo de Lugo; el miércoles 21, monseñor Eugenio Romero Pose, unode los obispos auxiliares de Madrid. Hoy, jueves 22, predicará el cardenal Giovanni Battista Re, Prefectode la Congregación para los Obispos, monseñor Elías Yanes, arzobispo de Zaragoza, lo hará mañanaviernes 23. Cierra el ciclo de la Novena el cardenal Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid yPresidente de la Conferencia Episcopal Española.

Niños peregrinosentrando en la catedralde Santiago de Compostela en mayo de este Año Santo 2004. A la izquierda: sepulcro del ApóstolSantiago en la catedralcompostelana

DESDE LA FEΩΩ26

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«Además de la importancia quepuede tener en el equilibrio po-lítico entre las grandes fuerzas

mundiales, la Unión Europea tiene ante síel reto de convertirse en un “socio solida-rio” para el desarrollo cultural y econó-mico del tercer mundo», sugiere el Secre-tario de la Santa Sede para las Relacionescon los Estados, arzobispo Giovanni Lajo-lo. Es una perspectiva que plantea tras lareciente aprobación del Tratado constitu-cional de la UE, un texto en general aco-gido con un sentimiento de satisfacción porla Santa Sede, pero que ha omitido la «in-controvertible herencia cristiana del viejocontinente». Recogemos sus palabras pu-blicadas en el diario italiano «Avvenire»:

Ha habido quejas por la no menciónde las raíces cristianas en el Preámbulodel Tratado constitucional de la UE. ¿Porqué, en su opinión, este rechazo?

Han sido pocos los Gobiernos que sehan cerrado categóricamente a la menciónde la herencia religiosa específicamentecristiana. Y duele constatar que son preci-samente los países en cuya historia y en cu-ya cultura el cristianismo ha tenido una par-te altamente cualificada, incontrovertible.En mi opinión, sobre todo por un evidenteprejuicio ideológico. También se ha dadoel temor de que la mención explícita de laherencia cristiana pudiera hacer menosaceptable la casa europea para un país demayoría musulmana que eventualmente po-dría formar parte de ella. Temores fuera delugar,: porque es precisamente del cristia-nismo el principio de la libertad religiosay de la clara distinción entre esfera religio-sa y esfera política, que permite la serenaconvivencia de religiones distintas en unamisma organización política.

¿Cómo se puede hacer Europa máscercana a la gente?

Primero: haciendo más comprensibles yperceptibles los grandes principios, comolos de solidaridad y subsidiariedad, presen-tes, es más, determinantes, en el Tratado, yque deberán caracterizar la política de laUnión. Segundo: indicando algunas metasconcretas de carácter social, cultural y polí-tico que los Estados europeos sólo pueden al-canzar juntos.

¿Qué podría significar una Europa po-líticamente fuerte en el escenario inter-nacional de este comienzo de milenio?

Mucho, y desde varios puntos de vista.Sobre todo, en los equilibrios políticos entrelas grandes fuerzas mundiales, entre aquellasahora determinantes en el escenario inter-nacional y aquellas que se van delineandocomo tales. Pero, aún más, la UE deberíaproponerse como un gran socio para el de-sarrollo cultural y económico de los paísesdel tercer mundo. Papel que podría desem-peñar no presentándose como el socio mejor,sino como socio solidario, animador de em-presas conjuntas, no sólo en el campo deldesarrollo técnico y económico, sino sobretodo en los de la investigación, la informa-ción, la cultura y los proyectos sociales.

¿Cree que existe un riesgo concreto dechoque de civilizaciones? ¿Y que éste seael foco del terrorismo?

El terrorismo internacional se remite apocas ideas, radicalizadas, absolutizadas yllevadas a una fuerza destructiva por el fa-natismo religioso, junto a una errónea sim-plificación en el análisis político. Está de-claradamente empeñado en un choque decivilizaciones. Lo desea ostensiblemente,con alguna frase aislada del Corán, y tambiénquiere, por lo tanto, un choque de religio-nes. Pero las fuerzas religiosas y culturalesque aceptan la razón no pueden no decla-

rarse fuera de una lucha tan insensata. Pre-cisamente el fenómeno inhumano y absurdodel terrorismo debe empujar con crecienteurgencia al encuentro, al conocimiento mu-tuo y al recíproco reconocimiento. Que endefinitiva, fuera de todo sincretismo, signi-fica una ocasión de enriquecimiento espiri-tual. Ésta es nuestra concepción.

Desde Iraq a Tierra Santa, se ha pues-to en evidencia la necesidad de que se re-visen los fundamentos del Derecho inter-nacional, como el Papa repite desde ha-ce años.

Sí, en el sentido de redescubrirlos y re-forzarlos. Éstos son: la centralidad de la per-sona humana y su intangible dignidad, lasoberanía y la independencia de los Esta-dos, el derecho de todos los pueblos a acce-der a los bienes materiales y espirituales, eldeber de la colaboración. Basta con releerlas grandes encíclicas papales: contienen in-dicaciones motivadas, generales, que no ge-néricas, y suficientemente concretas, siem-pre válidas.

La ONU ha sido objeto de críticas, aveces ásperas. Hay quien dice: «Está su-perada», pero la Santa Sede siempre laha defendido. ¿Por qué?

A pesar de sus límites, la ONU perma-nece como la institución política más válidapara limitar los focos de guerra y favorecerla paz y el acuerdo entre los pueblos. Susestructuras y su funcionamiento son, sin em-bargo, susceptibles de mejoras decisivas. Esde esperar que la pertinente Comisión insti-tuida por el Secretario General, Kofi Annan,pueda presentar pronto sus propuestas, y quede ellas maduren nuevas normas que hagansu funcionamiento más rápido y más eficaz.

Salvatore Mazza

Entrevista con el arzobispo GiovanniLajolo, Secretario de la Santa Sede para las Relaciones con los Estados

Europa: no el sociomejor, sino

el mássolidario

DESDE LA FE 22-VII-2004 ΩΩ27 AA

el Estado ha de tener una actitud positiva:eso es la libertad religiosa. Hay que lograr lamáxima libertad posible y mínima restric-ción necesaria, sin más limitación que lanecesaria para el mantenimiento del ordenpúblico protegido por la ley.

Hay diversos modos de proteger la li-bertad. La respuesta académicamente pul-cra muchas veces es ineficiente. Los autoresque han tratado de la libertad religiosa vie-nen observando que el respeto y tutela de lalibertad religiosa se suele reconocer satis-factoriamente cuando el Estado sabe mo-

verse con agilidad entre dos parámetros: laseparación de esferas temporal y espiritual,de una parte, y la sensibilidad a las deman-das sociales, particularmente las individua-les, en materia de conciencia y religión. Loque en Norteamérica se ha denominado unaneutralidad benevolente. Por ejemplo, el Es-tado no puede emplear una religión comosigno de identidad, como la católica, peronada obsta para que firme acuerdos de coo-peración con esa Iglesia.

El Rector de la Universidad Carlos III,de Madrid, ha defendido la reforma del ar-tículo 16 de la Constitución. Es un poco tre-mendista don Gregorio Peces Barba: quieremeter la Constitución en un tubo de ensa-yo, sin cotejarla con lo que ocurre en la uni-versidad de la calle. La clave es si esa men-ción específica es una discriminación pormotivos religiosos. En realidad, la menciónviene a decir: de tanta libertad y de tanto re-conocimiento jurídico de su especificidaddiferencial como goce la Iglesia católica –lade mayor arriago–, pueden gozar el resto delas confesiones genéricamente aludidas en laConstitución si poseen notorio arraigo. Esun paradigma extensivo que protege a lasdemás confesiones de tratamientos injustos.

La situación en Europa es distinta de la deEstados Unidos. Cuando allí se habla de le-gislación común para las confesiones, se ha-bla de una separación amistosa, que impli-ca una benévola neutralidad. El modelo eu-ropeo no estaba dispuesto a respetar los de-rechos de las Iglesias, ni en bienes ni enorganización interna. Siempre queda laten-te la sospecha de que una legislación unila-teral acabe siendo lesiva de las libertades delas Iglesias. De ahí que las Iglesias en Europatengan memoria histórica, y procuren quesus espacios de libertad encuentren un re-fuerzo suplementario en el pacto más o me-nos solemne con los Estados.

Rafael Navarro Valls

El laicismo piensa que cualquier creen-cia lleva en sí las raíces del fanatismo.Cuando, en realidad, el fanático es irre-

ligioso en la exacta medida en que suele re-currir a la violencia que la religión rechaza.La patología de la religión –fanatismo– nodebe erigirse en el centro del pensamientolaico. La aconfesionalidad o laicidad entiendeque entre lo espiritual y lo temporal hay unaregión fronteriza incierta. Donde hay fron-tera hay incidentes. Pero huye de la tenta-ción de desembarazarse de lo religioso. Cuan-do la producción de somberos en una naciónes menor que las necesidades de las cabezasde los ciudadanos, la solución no es cortarcabezas, sino aumentar la producción desombreros.

La religión puede compararse a un árbolque, a medida que crece, produce frutos es-pléndidos, pero también hojas caducas o ma-dera seca. Los radicales de todos los tiem-pos, los laicistas, dirán: Cortemos el árbol.Los inmovilistas, los fundamentalistas: Nolo toquemos. Frente a ambas posturas cabe uncompromiso: Podémoslo, de modo que con-servemos el viejo tronco y las nuevas ramas.El artículo 16 de la Constitución española esun buen ejemplo de laicidad positiva. De-clara que ninguna confesión tiene carácterestatal, pero a renglón seguido declara quelos poderes públicos tendrán en cuenta lascreencias religiosas de la sociedad española.Frente al factor religioso como factor social,

Don Rafael Navarro Valls y don Teófilo González Vila, en Los jueves de la Péguy

Para los laicistas, toda creencia es fanatismo

Bajo el título Laicismo por obligación, don Rafael Navarro Valls, catedráticode Derecho, y don Teófilo González Vila, catedrático de Filosofía, respondieron

a las preguntas de los asistentes a Los jueves de la Péguy, un foro de debate que organiza la asociación cultural Charles Péguy, en la sede de la Organización

de Estados Iberoamericanos, en Madrid. Esto dijo el profesor Navarro Valls:

Así lo ha visto Dobritz en Le Figaro, para Francia.

«El Estado es laico para que yo pueda ser creyente»

Don Teófilo González Vila, catedrático de Filosofía, explicó ante los asistentes al foro Los jueves de laPéguy, que la libertad religiosa implica que el Estado, al ser laico, aconfesional, permite que sus

ciudadanos no lo sean y confiesen la fe que deseen. Pero, en la actualidad, el laicismo practicado enEuropa «entraña una verdadera oposición a toda forma de creencias». En realidad, un Estado laico,aunque carece de capacidad religiosa, «no puede desentenderse de la religión, porque le incumbe en lamedida en que incumbe a la sociedad».

Para don Teófilo González Vila, los católicos tienen que luchar contra la laicidad que pretendereducirlos al ámbito de lo privado, pero deben hacerlo con armas diferentes y con objetivos a largoplazo. «Lo que la Iglesia necesita –afirma este catedrático– no son más privilegios, sino más libertad»,porque en estos momentos «asistimos a un clericalismo laicista».

La aconfesionalidad que establece la Constitución española es, según don Teófilo González Vila, unaexigencia de la libertad. «La laicidad –afirmó este prestigioso catedrático– debería estar al servicio de lalibertad religiosa, en vez de ser un obstáculo para ella».

M.S.A

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La falta de dominio de sí. Una cualidadnecesaria para la madurez humana esel control de uno mismo, de los senti-

mientos, afectos, instintos, deseos, etc. De noser así, seríamos incapaces de comportar-nos con responsabilidad, y tendríamos difi-cultades de trabajo, de responsabilidades so-ciales, de carácter...

La dificultad para distinguir entre de-seo y amor. El amor supone respeto a la otrapersona, pensar en ella antes que en uno mis-mo, deseo de hacerla feliz toda la vida (no unrato), incluso cuando el deseo sea menor porel paso de los años. ¿Por qué muchos ma-trimonios se rompen? Porque, más que amor,había deseo, y no se cultivó, día a día, el ver-dadero amor.

Dificultad para asumir compromisospara toda la vida. Cuando se hace de la re-lación sexual algo divertido, sin mayor com-promiso, es inevitable que esas personas sevean con incapacidad para decir sí para todala vida. Y cuando se hace, es muy probableque ese matrimonio se rompa, porque lle-gan al matrimonio –aunque se casen en laIglesia– con mentalidad divorcista: Estare-mos juntos mientras nos vaya bien. Y se ad-

mite el divorcio como solución, pero éste essiempre un fracaso del matrimonio, nuncasolución.

Poca predisposición a tener hijos. Lasexualidad permisiva fomenta la búsquedadel propio placer, sin compromisos, y tenerhijos es un compromiso, y grande. Y si setiene, ¿hasta qué punto será realmente frutodel amor y no algo que yo deseo tener? Entodo caso, serán los hijos que yo quiera te-ner, no los que deba tener, categoría moraldifícilmente asumible por esas personas.

De la sexualidad sin riesgos a la con-sideración de la persona como «objeto se-xual». Una sexualidad vivida así evitarávoluntariamente la procreación, manipu-lando el acto conyugal (tanto en casados,como más en parejas no casadas). ¿Cómoevitar que un acto vivido muchas veces asíno lleve a ver a la otra persona como unobjeto sexual? El placer ha sido previstopor Dios como parte del acto conyugal, pa-ra facilitarlo, y es por tanto bueno; pero sise busca sólo el placer, ¿cómo poder decirque es un acto de amor, si se ha mutiladovoluntariamente ese acto esencial para elamor?

Insatisfacción sexual, embarazos nodeseados... y abortos. Si se trivializa la se-xualidad, se puede caer en frustración se-xual, en insatisfacción por saturación (cu-riosamente, Freud al revés), y, por supuesto,se da lugar a los embarazos no deseados,que no disminuyen, como puede compro-barse, por mucho que se difundan los anti-conceptivos, preservativos, etc., pues todosesos medios contribuyen a una mayor per-misividad sexual y al crecimiento de lo quese pretende evitar. Lamentablemente, algu-nas de esas personas que llegan hasta el abor-to se autoengañan (o las engañan otros) di-ciendo que eso no es una persona (toda per-sona ha comenzado siendo un óvulo feme-nino fecundado por un espermatozoide. Si noes persona, ¿entonces por qué algunos re-curren a la unión artificial de un óvulo y unespermatozoide, en la fecundación in vitro,para tener un hijo?)

Malos tratos. Aunque las causas de losmalos tratos a mujeres son diversas, entreellas ocupa un lugar importante el hábito deuna sexualidad irresponsable, que busca so-bre todo el placer. Basta ver, para compro-barlo, que la mayoría de estos casos lamen-tables se dan en parejas poco estables.

Enfermedades de transmisión sexual.Hoy, la más grave sigue siendo el sida, perohan proliferado otras: la clamidia, la gono-rrea, la sífilis... Las enfermedades contraí-das por una sexualidad irresponsable llenande pacientes las clínicas urológicas y gine-cológicas de no pocos países.

Abusos sexuales, violaciones. El quecomete estos atropellos suele ser una per-sona habituada a dejarse llevar por las ape-tencias de su deseo sexual. Es necesario ir ala raíz, si se quieren evitar estos sucesos.

Pérdida del sentido del género sexual.A la homosexualidad no se llega, sino a tra-vés de una sexualidad vivida con promis-cuidad, como simple búsqueda de placer.Una actitud tan contraria a la inclinación na-tural de la persona, necesariamente, hacemella en toda la estructura psicológica yafectiva del hombre o de la mujer, causandoalteraciones profundas en su personalidad.De la homosexualidad se puede salir, perohay que estar dispuesto a ello; lo saben losmédicos y los psicólogos.

A la vista de estas consecuencias, ¿cómono reflexionar seriamente sobre el erróneosentido de la sexualidad que las ocasiona? Larevolución sexual de los años 60 ha conse-guido liberar la sexualidad de las normasmorales. Está en juego la felicidad de mu-chas personas y de muchas familias, y de lasociedad en su conjunto. Los medios paralograr esta felicidad son, entre otros, la vir-tud gozosa de la castidad, que evita la es-clavitud de la sensualidad y el egoísmo, yfacilita el amor verdadero, ése que en el fon-do todos deseamos, el que dura toda la vida.

Juan Moya

El amor, cauce seguropara la sexualidad

Muchos no reconocen que todo acto libre tiene necesariamente una dimensión moral,buena o mala. No hay actos humanos –actos libres del hombre– indiferentes,y, por tanto, tampoco lo son los referentes a la sexualidad. Puede ser de gran ayudareflexionar sobre algunas consecuencias constatables que se derivan de una visión de la sexualidad en la que todo o casi todo se considera lícito, e incluso conveniente:

Punto de vista

Don Rufino

Con ese nombre se le conoció a don Rufi-no Aldabalde en toda España. Acaso lo

recuerden quienes pasen de los setenta años.Él, con otros, fue el creador de lo que se hallamado el movimiento sacerdotal de Vitoria,de hondas raíces en aquel Seminario y dió-cesis, pero irradiado a toda España por la re-vista Surge, la obra de los Ejercicios Espiri-tuales parroquiales y las Casas diocesanas deEjercicios Espirituales parroquiales. El año an-terior a su muerte pasó por Ávila, Jaén, Cas-tellón, Santiago, León, Toledo, Málaga, Va-lencia, Tuy… Premioso de palabra, conta-giaba convicciones, arrastraba, encendía.

Su transformación personal ocurrió en unosEjercicios que hizo siendo seminarista filóso-fo. Más tarde, conectó con los sulpicianos deParís. Hizo los Ejercicios de mes con el je-suita padre Valensin. Creyó en un sacerdo-cio renovado, soñó con él, sembró idealescomo Director espiritual de los teólogos delSeminario de Vitoria, suscitó la obra de losEjercicios Espirituales parroquiales, y a ellosasoció, previa capacitación, a los sacerdotes,seguro de que ellos serían los primeros be-neficiarios de esta experiencia espiritual pro-funda, y convencido también de que sólo des-de una transformación de las conciencias po-día surgir una nueva Iglesia regenerada.

El 18 de julio, en su pequeña parroquiaguipuzcoana de Aya, en cuyo cementerio re-posan sus restos mortales, se ha celebrado elcentenario de su nacimiento. A él asistimos al-gunos sacerdotes, presididos por el obispode San Sebastián, y las Misioneras secularespor él fundadas. Es un gesto encaminado amantener vivo su recuerdo. Han desapareci-do ya todos sus coetáneos y colaboradores; losúltimos: don Joaquín Goicoecheandía y donRamón Echeverría. Queda entre nosotros elcardenal Suquía. Él me proporciona un pre-cioso texto de un marianista de 91 años quecoincidió con don Rufino en el Seminario deVergara en 1940; se sentaba junto a él en elcomedor. De su larga memoria extrae estetestimonio, bello de fondo y forma:

«Tengo un excelente recuerdo de él. Él cir-culaba con bicicleta de carrera, y nosotroscon pesada de piñón fijo. Él volaba raudo y al-to, como las águilas, y nosotros bajo y corto,como los gorriones. Él era un árbol alto y co-pudo y hacía mucha sombra. No es extrañoque tuviera admiradores y detractores. Conla palabra premiosa pero incisiva, estimulabapara que acelerásemos la marcha. Su ejemploconfirmaba sus dichos. Algunos hechos, co-mo las faltas de puntualidad, sirvieron a susdetractores para zaherirle. Que Dios le tengaen su gloria y nos sirva de estímulo de vida.Firmado: Florencio Murúa».

Es una espléndida definición, envuelta enmetáforas. A ellas añadiría otra: fue un vien-to cálido y huracanado, como el de la ma-ñana de Pentecostés, símbolo de la presen-cia contagiosa del Espíritu que llegó, a pesarde su prematura muerte –a los 41 años–, amuchos. A mí entre tantos. Lo recordamosagradecidos.

J. Ignacio Tellechea Idígoras

L I B R O S

El cristianismo, y la historia de los cristianos, no han hecho másque empezar. Se objetará, con lógica aplastante, que el Evan-gelio lleva veinte siglos fecundando al hombre y la Historia.

Pero cada tiempo es un tiempo nuevo y, parafraseando a san Agustín,nosotros somos los tiempos, nuestros tiempos. Decía Juan XXIII:«No es que el Evangelio cambie; es que nosotros empezamos a com-prenderlo mejor». Cada instante es un ahora, comienzo de la posi-bilidad transformadora de la gracia en este mundo, destinado a ser nue-va creación. El gran sacerdote ruso Alexander Men, que fue asesinadodurante la revolución bolchevique, recordaba que el cristianismo dehoy no es lo mismo que el cristianismo de los siglos IV al XII: no he-mos vivido y entendido toda la palabra del Señor, no hemos experi-mentado todas sus potencialidades.

Si algo es este libro de Andrea Riccardi, es un recordatorio de queel cristianismo es hoy posible; hoy tanto como ayer y como mañana.El cristianismo es posible porque Cristo es tan posible como real pa-ra la vida de los hombres. Un argumento indiscutible, que se mues-tra y que demuestra a lo largo de estas heterogéneas páginas del fun-dador de la profética Comunidad de San Egidio, es el testimonio delos mártires del siglo XX, un siglo que, si por algo se ha querido ca-

racterizar, ha sido por el progreso. Cuando la Iglesia presenta sus Cartas credenciales en un mun-do que oscila entre la tribulación y el adormecimiento, lo hace con la rúbrica de la vida entregada,donada, con el argumento inaplazable de los hechos. Andrea Riccardi ha trabajado sobremanera al-gunos de los grandes temas de nuestro tiempo, que aparecen en este libro: la historia contemporá-nea de la Iglesia, el carácter universal de la fe católica, las relaciones entre judíos y musulmanes,la misión de la Iglesia, la centralidad del obispo de Roma y la herencia de los mártires. Sin embargo,hay uno que puede llamar especialmente la atención: la pobreza de la Iglesia. Es muy difícil abor-dar esta cuestión sin caer en fáciles y simplistas demagogias. Sólo reproduciendo el último párra-fo de este capítulo, el lector se dará cuenta de la seriedad y profundidad con que A. Ricardi, que hatrabajado más por la misión externa de la Iglesia que por una aportación significativa al desarrollointerno, aborda esta materia: «El Patriarca de Constantinopla, Atenágoras, el que se abrazó conPablo VI en Jerusalén en 1964, el que tuvo la valentía de romper barreras seculares y de denunciarla trampa de los nacionalismos para el cristianismo, relanzó su Iglesia quizá en el momento más gra-ve de su debilidad: no logró eliminar la pobreza y la debilidad, sino que hizo surgir de ellas una granfuerza de amor. Por último, me gustaría recordar cómo definía al cristiano utilizando las palabrasde san Simeón el Nuevo Teólogo: el discípulo de Jesús es un pobre que ama a los hombres».

José Francisco Serrano

Dentro de las novedades en la bibliografía de los estudios franciscanos, debemosdestacar la aparición de dos obras de relevancia, complementarias y comple-

mentadoras de la escuela espiritual de san Franciso de Asís. La primera es el trabajode Chiara Augusta Lainati sobre santa Clara de Asís. Una obra, prologada por el en-tonces profesor de la Facultad de Teología San Dámaso, de Madrid, y hoy obispo de

Huesca y de Jaca, monseñor Jesús Sanz Montes, en la que se hace unprofundo estudio de las fuentes en el conocimiento de santa Clara yde los elementos principales de su pedagogía espiritual. La segunda,de reciente presentación, es el estudio que, antes en forma de traba-jo académico de grado y ahora como libro divulgativo, ha realizadola hermana franciscana misionera de la Madre del Divino Pastor,Marisol del Álamo, sobre la oración de la alabanza en y desde sanFrancisco de Asís. Un cuidado texto de introducción a esta impres-cindible forma y norma de plegaria.

J.F.S.

La escuela espiritual de Francisco de AsísTítulo: Santa Clara de Asís / Alabar. San Francisco de Asís y la iniciación a la oraciónAutor: Chiara Augusta Lainati / Marisol del ÁlamoEditorial: Ediciones Encuentro / Editorial Asís

El optimismo cristianoTítulo: Dios no tiene miedo. La fuerza del Evangelio en un mundo cambianteAutor: Andrea RiccardiEditorial: San Pablo

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Gentes

Televisión

Rocco Buttiglione, ministro italiano de PolíticaComunitaria

Una Europa que no sabedecir una palabra sobre suidentidad cristiana es unaEuropa que todavía está

buscándose a sí misma. El cristianismo esel ADN europeo. Asimismo, el papel delos cristianos es indispensable para unaEuropa realmente humana y respetuosacon la dignidad de la persona.

Belinda Washington,presentadora de televisión

Cuando te regalan dosniñas como las mías ytienes tanta armonía, sólose me ocurre dar gracias aDios. Tal vez en el futuro

adoptemos a un niño, u otra niña, eso nosda igual. Cuando éramos novios, mimarido no se lo podía ni imaginar, y ahoraes un padrazo.

Antonio Dorado, obispo de Málaga

Cada año son numerosaslas personas que vienen apasar unos días connosotros. La Iglesia enMálaga os brinda su

amistad; os ofrecemos nuestras parroquiaspara que, además de los serviciosreligiosos, dispongáis de un espacio deacogida para conversar, compartir la viday ayudarnos unos a otros.

Sospecha

PROGRAMACIÓN TMT y POPULAR TV (del 22 al 28 de julio de 2004)(Op: Opcional; Mad: sólo en Madrid; Información: Tel. 902 22 27 28)

A DIARIO:

08.00.- Palabra de Vida 08.30.- Popu-lar Tv Noticias (salvo Sab. y Dom.)12.00.- Ángelus y Santa Misa (Op, Do-mingo: en Cadena)14.00 y 20.00.- Popular Tv Noticias(salvo Sáb. y Dom.)00.00: Lunes a Jueves (Vier. 00.30;Sab. 00.15; Dom. 01.05).- Palabra deVida00.05 (Vier. 00.35).- Popular Tv Noti-cias (salvo Sáb. y Dom.)

JUEVES 22 de julio

14.30.- Documentales (Op)15.00.- Octava Dies15.35.- Cine Tres herederas17.30.- Tris, Tras y Verás19.00.- El Chavo del Ocho19.30.- Valorar el Cine20.30.- Documentales (Op)21.05.- Super Agente 8621.40.- Sé lo que hicisteis el último ve-rano (Op)23.05.- Debate popular (Op)00.35.- Cine La Reina de Nueva York

VIERNES 23 de julio

13.00.- El show de la Cultura (Op)13.30.- Valorar el Cine (Op)14.30.- Documentales (Op)15.00.- España en la vereda - 15.35.-Cine Voces de muerte - 17.30.- Tris,Tras y Verás - 19.00.- El Chavo delOcho - 19.30.- Investigaciones de Bol-sillo - 20.30.- Documentales (Op)21.05.- Super Agente 86 - 21.40.- Sé loque hicisteis el último verano (Op)23.05.- Cine Principales sospechosos01.05.- Cine 39 escalones

SÁBADO 24 de julio

08.05.- Tris, Tras y Verás - 11.05.- Cineinfantil El soldadito de plomo (Op)12.40.- Tris, Tras y Verás (Op)14.00.- Investigaciones de Bolsillo14.30.- Siglo Futuro - 16.05.- Cine in-fantil El pequeño tren I 17.00.- Valorarel Cine - 17.30.- Los 100 de la Cien19.00.- Super Agente 86 (Op)20.00.- La Semana - 20.30.- Ilusos21.35.- Esto sí que es Rosa22.35.- Cine Atrapen al ladrón00.30.- Al otro lado del viento

DOMINGO 25 de julio

07.00.- Octava Dies - 07.30.- La Se-mana - 08.10.- Tris, Tras y Verás11.05.- Familia - 13.10.- Con la Febien puesta (Op) - 13.40.- Los 100 dela Cien (Op) - 15.05.- El Chavo delOcho (Op) - 16.00.- Esto sí que es Ro-sa (Op) - 17.05.- Cine español Mr. Ar-kadin (Op) - 18.35.- 20 Minutos con...(Op) - 20.05.- Informativo diocesano(Mad) - 20.30.- Concierto (Op)22.00.- Dos vidas a la semana (Op)22.50.- Pon un amplificador en tu vida23.25.- Cine El Rey de la montaña

LUNES 26 de julio

13.00.- Debate Popular (Op)14.30.- Documentales (Op)15.00.- Con la Fe bien puesta15.35.- Cine clásico Esta tierra es mía17.30.- Tris, Tras y Verás19.00.- El Chavo del Ocho20.30.- Informativo diocesano (Mad)21.05.- Super Agente 8621.40.- Sé lo que hicisteis el último ve-rano (Op)23.05.- Ilusos (Op)00.35.- Cine El hombre que sabía de-masiado

MARTES 27 de julio

13.00.- Ilusos (Op)14.30.- Documentales (Op)15.00.- Escuela de María (Mad)15.35.- Cine El millonario17.30.- Tris, Tras y Verás19.00.- El Chavo del Ocho19.30.- La edad importa20.30.- Documental (Op)21.05.- Super Agente 8621.40.- Sé lo que hicisteis el último ve-rano (Op)23.05.- Familia (Op)00.35.- Cine Serenata nostálgica

MIÉRCOLES 28 de julio09.10.- Con la Fe bien puesta (Op)09.35.- Escuela de María (Mad)10.00.- Audiencia Vaticano - 13.00.-Familia (Op) - 14.30.- Documentales(Op) - 15.00.- Pueblo en camino15.35.- Cine Veracruz17.30.- Tris, Tras y Verás - 19.00.- ElChavo del Ocho - 19.30.- El show dela Cultura 20.30.- Documentales (Op)21.05.- Super Agente 8621.40.- Sé lo que hicisteis el último ve-rano (Op) - 23.05.- Argumentos (Op)00.35.- Cine Los amantes de la noche

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No me refiero a la mítica película deHitchcock, sino a ese chirimiri inagotable

que lleva meses cerniéndose sobre la pequeñapantalla, dedicado a desacreditar a personas oinstituciones para el lucro de las distintasempresas de comunicación. Lo digo porque soninagotables las vetas de donde parten lasiniciativas de deshonra. Prácticamente, todoslos programas de mayor audiencia tienen comomóvil el quitar credibilidad a alguien dereconocido prestigio, al que le han pillado enaffaires sentimentales, desfalcos o conductasinadecuadas. Parece como si los programas deentretenimiento, que –no lo olvidemos– es unode los objetivos de toda televisión inteligente,se redujeran a desestimar la integridad o lafidelidad del ser humano. Recientementepudimos ver un programa en el que los chicos

de un equipo de fútbol de élite se dedicaban afrecuentar un local nocturno, en el queolvidaban la rutina de su tediosa vida, paraechar una cana al aire. Hemos oído romancesinexistentes de relevantes políticos,informaciones sin ningún fundamento pero conaviesas intenciones. En el mundo del deporte seha filtrado la sospecha de que ningúnprofesional va de legal por la vida. Delmismísimo Armstrong pende la espada deldopaje; más de uno dice que es imposible eseritmo del americano, tan elegante y, al mismotiempo, depredador. Hay periódicos que hancatalogado esta ruindad como ambiente fétido,que afecta al universo deportivo en suconjunto. Es también grave que los canales detelevisión denominen la marcha de los trabajosde la Comisión del 11-M como un barullo

indescifrable. Con tales calificativos, es muyprobable que las grandes perjudicadas sean, ala larga, no las personas, sino las institucionesdel Estado: el sistema judicial, las fuerzas deseguridad y el mismo poder político, enentredicho por las declaraciones que hacen laspartes implicadas. Hace poco, me encontré ungraffiti en el muro de un descampado, en el quese leía el viejo axioma ácrata de que Elgobierno apunta, la policía dispara y los medioslo silencian. Si no queremos que esta fraseadolescente convierta en carne de sospechatodo lo que vemos, deberíamos sacudir nuestrojuicio crítico, para no caer en esa trampamediática de que, en el fondo, toda realidadhermosa esconde siempre aguas putrefactas.

Javier Alonso Sandoica

No es verdad

¿Qué es lo que está investigando la Comisiónde investigación sobre el 11-M?: ¿quién tuvo odejó de tener razón política?, o ¿quién mató a ca-si doscientos seres humanos? Porque aquí pare-ce que lo que menos importa son los seres huma-nos asesinados. Por cierto, se han cumplido cuatromeses de aquella matanza, cuando escribo, y éstaes la fecha en que el nuevo señor ministro del In-terior no ha facilitado ni siquiera un dato más so-bre el atentado. La loable eficiencia del Gobiernorespecto a la tragedia del avión en la que murieronnuestros militares, ¿no podrían aplicarla a estaotra catástrofe y, cuando menos, triplicar los es-fuerzos, porque al menos las víctimas fueron eltriple? ¿O es que lo que se pretende es tapar estocon aquello? Otra preguntita: ¿si la televisión es-tatal, que todos pagamos, no está para informarde esto, para qué está? Otra preguntita más, ante to-do esto, y ante el inminente envío de tropas espa-ñolas a Haití y Afganistán: ¿dónde están los titiri-teros del mundo del cine, los bardemes, los inte-lectuales de nómina, los subvencionados, a losque, por decreto, va a ir una parte del dinero delas televisiones? ¿Es que guerra sólo es la de Iraq?¿Es que no se pueden ganar los garbanzos comocada hijo de vecino? Porque yo también quieroque me subvencionen. Las televisiones ya han he-cho notar que el cine español ha empeorado des-de que el Gobierno las obliga a invertir en él. Y,otra cosa más: el señor Dezcallar dice estar con-vencido de que no hay contactos entre el terroris-mo etarra y el islamista. «No se fían unos deotros», asegura; y, si no hay contacto entre ellos,¿cómo sabe el señor Dezcallar que no se fían unosde otros? A todo esto, a mí todavía no me ha ex-plicado nadie quién puso la famosa furgoneta allí,cuándo, y, sobre todo, por qué y para qué.

No sé por qué me pareció, cuando escribí aquí lasemana pasada, que Mario Vargas Llosa era Pre-mio Nobel de Literatura. Seguramente, tenía laimpresión de que había hecho, para tener dichoPremio, méritos tan suficientes como sus cole-gas Fo, Saramago, García-Márquez. Los nume-rosos amigos que me honran leyéndome y queme han hecho notar mi error, estarán de acuerdoconmigo en que, tras el luminoso artículo publi-cado por Vargas Llosa en El País, el Premio No-bel que le faltaba se lo darán enseguida. Por cier-to, ¿han leído ustedes la entrevista que le hace,

obviamente El País, a Dario Fo, el pasado do-mingo? Se ufana de su Premio Nobel y de queahora le van a hacer Doctor Honoris Causa en laSorbona de París. ¡Pues no faltaba más! Dice quetiene doctorados de universidades de EstadosUnidos, Alemania, países nórdicos y, sobre todo,de Oxford y Cambrigde, y pregunta al entrevis-tador: «¿Sabe cuantos Honoris Causa tengo deuniversidades italianas? ¡Ninguno!» A lo mejor esque sus paisanos le conocen a fondo...

No sé si se han fijado ustedes en el despliegue in-formativo que El País ha dedicado al Parlamen-to de las religiones del mundo, en el Foro de Bar-celona: crónica diaria de su enviado especial yhasta un par de bien sesgados editoriales. En cam-bio, miren ustedes por dónde, a la toma de pose-sión del nuevo arzobispo de Barcelona, El País leha dedicado 26 líneas en el rincón inferior derechode una página par, a una columna. ¿Por qué será?Lo que El País demuestra hacia lo católico está enproporción inversa a la conmovedora solicitudque siente hacia otras religiones y hacia otros cre-dos. Un reciente editorial de la Civilta Cattólicaque acaba de recordar: «para que el diálogo inte-rreligioso sea fecundo, se necesita verdad y sin-ceridad».

De verdad que, por más vueltas que le doy, nopuedo entender qué interés puede tener determi-nado semanal dominical para dedicar su tema deportada a Las imágenes más bestias del verano.De veras que no lo entiendo. Después, se queja-rán de que los psiquiatras denuncien que «vivimosen una sociedad psicológicamente enferma, quefomenta lo que luego condena». ABC, en un es-pléndido reportaje dominical, acaba de informarde que el número de presos supera ya en un terciola capacidad de los centros penitenciarios. ¿Sabenlo que pasa? Pues, sencillamente, que cuando seintenta echar a Dios de la vida de los hombres,se llenan las cárceles. Menos mal que, para arre-glarlo, la Televisión Española que pagamos to-dos los contribuyentes ya nos anuncia la gloriosapresencia, en la pequeña pantalla, de deslum-brantes analistas de la actualidad y paradigmasde coherencia como el Gran Wyoming, LorenaBerdún, Carmen Posadas y Juan Ramón Lucas.

Gonzalo de Berceo

DESDE LA FE 22-VII-2004 ΩΩ31 AA

Con ojos de mujer

Aprender a mirarse en el espejo

Llega una nueva ola de calor. Nos defende-mos como podemos de las inclemencias de

esta tierra tan aparentemente discreta, tan pro-fundamente apasionada en sus rigores climáti-cos. Pero no sin que nos pase factura después.La cervecita fresca resucita a un muerto, peroen octubre nos preguntaremos de dónde saleesa barriguita. Los helados alivian la vida dejóvenes y dulzones, aunque sus estragos seconcreten en michelines no deseados. Y,todos, aligeramos la vestimenta. Los hombres,tan aferrados a sus tradiciones, apenas osandesafiar al pantalón largo y los zapatos cerra-dos. Cuando lo hacen, pocos consiguen unlook que no lleve a sus conciudadanos a emi-tir una sonrisita desaprobadora. En este terre-no, la mujer ha impuesto su voluntad: joven-zuelas y maduras se destapan sin complejos.El gusto se va perdiendo al ritmo de las gran-des cadenas democratizadoras de la moda. Meapenan las hordas de ombligos al aire y tiran-tas –como dice un buen amigo mío– mal acer-tadas. Porque proyectan una imagen de lamujer florero, tonta y superficial, sin sentidocomún, sin belleza y sin delicadeza, algo quele es tan propio y sin la que no existiría lapoesía, ni la música, ni tantas cosas bellas.

Quizás, dentro de decenas de años, sepreguntarán por qué hemos roto las raícesantropológicas del vestido: defenderse de lasinclemencias del tiempo, mostrarse más bella yreservar para la persona amada aquello que espropio de la intimidad conyugal. Es decir,sentido común, buen gusto y propiedad privada,tres notas antropológicas que corren el riesgo dedesaparecer. El sentido común nos lleva autilizar tejidos frescos en verano y, sin embargo,resulta misión imposible encontrar una simplecamiseta de algodón entre tanta oferta sintética.En cuanto al buen gusto, las mujeres siemprehemos sabido disimular defectos o realzar lasvirtudes de nuestro cuerpo: maquillajes, mechas,tal corte de pantalón o de camisa que hace másalta o más baja si se necesita, o disimulacaderas, etc. ¿Por qué despreciamos hoy estaherencia? Por último, nos estamos quedando sinpropiedad privada, el terreno sagrado donde lamujer vela y desvela con el lenguaje de lavestimenta y del cuerpo.

¿El remedio? Daría cursos de saber mirarseal espejo. Porque se da una esquizofrenia entreel modelo que la mujer ve en la percha y laimagen que le refleja el espejo.Inexplicablemente, la demencia se produce, yla secular aliada de la moda se convierte en supeor enemigo. Si no, que se lo pregunten a losmuchachotes que pronuncian cosas irrepetibles–tanto por el tono como por el contenido–cuando desfilan ufanas y miméticamenteataviadas a su lado. Los hombres, tanemancipados en todo menos en el terreno de lamoda, pueden aprender de nuestros desvaríos.Habrán de cambiar sus modos, lograr lacomodidad, la versatilidad y la belleza..., perosin perder el sentido común, la conciencia desu intimidad y la belleza.

María Merino

El Roto, en El País

FUNDACIÓNCASA DE LA FAMILIA

Alfa y Omega agradece la especial colaboración de:

eñor Santiago:La Unión Católica de Informadores y Periodistas deEspaña venimos a darte gracias por tu ayuda e inter-cesión, a pedirte que nos sigas protegiendo, a mani-festarte nuestra voluntad de ser siempre fieles a nues-tro compromiso de católicos y a nuestra vocación deperiodistas.¡Apóstol Santiago!: como sabes, la misión periodísti-ca exige competencia profesional y responsabilidadmoral. Como nos ha dicho Juan Pablo II, «con los po-

derosos instrumentos de que disponemos, podemos forjar la con-fianza para elaborar el bien. Podemos influir en ellos el sentido deDios, educar para la virtud, cultivar la esperanza, revivir la sen-sibilidad ante los valores trascendentales». Pero también pode-

mos producir un gran daño a las familias, presentándoles una vi-sión inadecuada o incluso deformada de la vida, de la familia,de la religión y de la moralidad. Por eso, creemos, como JuanPablo II, que las autoridades públicas tienen el grave deber deapoyar a la familia en beneficio de la sociedad misma. Es necesarioque las autoridades públicas pongan en práctica políticas y pro-cedimientos de reglamentación para asegurar que los medios decomunicación social no actúen contra el bien de la familia.Los representantes de las familias deben participar en la elabo-ración de esas políticas. Los que elaboran las políticas en los me-dios de comunicación y en el sector público deben favorecer tam-bién una distribución equitativa de los recursos de los medios decomunicación, tanto a nivel nacional como internacional, respe-

tando la integridad de las culturas tradicionales.Sigue ayudándonos, Señor Santiago. Sigue intercediendo por no-sotros, para que lleguemos a parecernos un poco a nuestro que-rido Lolo, Manuel Lozano Garrido, nuestro periodista ejem-plo, que deseamos tener pronto en los altares. Él nos decía siem-

pre: «El periodismo, como ejemplo de servidumbre, nunca po-drá ser enarbolado bajo una bandera sin ideología, por inhumano;

y de aquí también que la fidelidad católica, por verdadera, tenga queestar necesariamente en la raíz de toda información que se preciede auténtica y sincera».¡Óyenos, Santo Patrono! Queremos proclamar ante tu presen-cia nuestra decisión de hacer realidad nuestro compromiso de pe-riodistas católicos, y te pedimos por nuestras familias y tambiénpor España, nuestra patria, de la que tú eres Patrono.

La vueltaa las fuentesRecogemos la invocación al Apóstol Santiago

que realizaron los miembros de la Unión Católicade Informadores y Periodistas de España (UCIP-E)

que peregrinaron a Santiago de Compostela,recientemente

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Santiago y una pareja de peregrinos. Anónimo (siglo XVI). Museo catedralicio. Ávila