2

3

EL PATIO

staeraunaescobaqueseaburría.Estabaenunrincóndelpatio,conlapajaparaarriba.Esonolegustaba,porquelapajaeransuspiernasytambiénsusmanos.Estarenunrincón,patasarriba,yparacolmoenunpatiotansucio,¡quémortadeladevida!Las hojas secas, las pelusas, los diarios viejos, los carozos de banana, los pelos de

gatiperro, lascáscarasdeaceitunaylas latasvacías lehacíancosquillasenlapuntadelpalo,queerasucabeza,yellapensaba(enelsuelo)quealguienladebíallevarabarreralgunavez.Su abuela le contaba que en sus tiempos, los chicos se entretenían en montar una

escoba,jugandoalcaballito,peroesonuncalehabíapasado.Undía alguien tiró junto a ella un trapo de piso.El trapo se le enredó en la cabeza

comounabufanda.Ocomounamediadelana.OcomoelturbantedeArafat.—¡Quéasquete!—pensólaescoba.Yeltrapo,queestabasucioperonoerazonzo,laoyó.—Porlomenosteacompañoyteabrigo—ledijo.—Tengofríono—dijoella—,aburridaperoestoy,cuentouncontame,dale.Peroeltraponoentendió,porquelaescobatrabucabalaspalabrasalestarconlacabeza

paraabajo.Además,norecordabaningúncuento.Lafamiliade lacasaerabuenagenteperono teníaganasdeocuparsedelpatio.Los

chicosprometíanbaldearlocadaveranoydespuésseibanalosvideojuegos.UndomingosefuerontodosalZoológico,yentoncesentrarondosladrones.Cargados

coneltelevisor,lalicuadora,unalatadegalletitas,unpardezapatillasyelrelojdecucú,quisieronescaparporelpatio.Cuandolosvio,laescobasecayódelsusto,contalpunteríaqueunladróntropezócon

ellayserompióelcoco.Eltrapodiounsaltoyseleenredóalotroladrónenlacabeza,queasustadoempezóadisparartirosalabartola.Al oír el tiroteo, el vigilante de la esquina se despertó y entró corriendo en la casa,

despuésdeabrirlapuertadeunpatadóninútil,porqueyaloscacoslahabíanforzado.Seagarróelpiegolpeadoysaltandoenunapiernallegóalpatio,empuñólaescobay

4

de un buen escobazo en lamano del asaltante hizo volar el arma, que cayó patinandohastachocarconunamacetapetisa.¡Poiiiing!Delamacetacolgabaunhelechograndecomounapelucadegigante.Elpolicíaesposóalosladronesylosllevópresos,alavistadetodoslosvecinos,que

aplaudieroncomoenelteatroyrevolearoncamisetas.Los presos declararon que habían sido atacados por una escoba asesina y un trapo

feroz.Esto lo supo la familia cuando encontró su televisor y sobre todo su reloj de cucú

despanzurradosporahí,comootrasbasuras.Entoncesvieronlosucioqueestabaesepobrepatioyapesardequeyaoscurecíase

pusieronabaldearconalmayvida.Loschicos terminaronbailandocon laescobayaltrapolocolgaron,limpito,deunalambre,dondesehamacóhastahartarse.La tortugaManuelita, que estaba durmiendo a pata suelta bajo el helecho, despertó

sobresaltadaysedesvelóparaelrestodelinvierno.No quiso saber nadamás de ese patio ni de esamaceta ni de ese helecho ni de esa

escobanideese trapodepisonideesos ladronesnideesevigilantenideeserelojdecucúnideesospelosdegatiperro.¡Muchomenosdeloscarozosdebanana!Ydecidióirsearecorrerelmundo.

5

EL BARCO

steeraunbarcoquezarpabarumboalTurkestán.Elcapitáneraunricomercader(ounempresariocomosediceahora),que llevabaunacargamuyvaliosa:ochocientosbarrilesdepisdegato.En Turkestán, iba a venderlo para convertirlo, reciclado y destilado, en la famosa

coloniaparabebésBabypuf.Losmarineros estaban todos en cubierta, respirando hondo, porque el olor les daba

dolordecabeza,denariz,decodos,dededogordo.—¡Atrabajar,vagonetas!—lesgritabaelcapitán.Entoncespusieronenmarchaelbarco,mientraslospecessedesmayabanasupasoy

lasgaviotasvolabanbienalto,tapándoseelpico.Para colmo, en ese barco también viajaban el primer ministro del Principado de

Paponia, el embajadorde laRepúblicadeMenefrego, el vicecancillerde laFederaciónTruchimedia,todosconsusrespectivasesposas.Muyelegantesellasyellos,yaquehabíanidoalpuertodirectamentedespuésdeuna

funcióndegalaenelteatrodelaFrescaViruta.Encerrados en sus cabinas, tirándose de los pelos, tenían la impresión de haberse

equivocadodebarco,peroyaeratarde.Protestaban y pataleaban, bañándose en perfume y pegandomordiscos a jabones de

violeta, lavanda y rosamosqueta. Para qué decir los millones de pompas irisadas quefabricaron.Así pasó un tiempo y llegaron amar abierto. El oleaje era fuerte y en el zamarreo

algunosbarrilesempezaronadesarmarseyderramarsucontenido.—¡A trabajar, vagonetas!—gritó el capitán—. ¡Levanten inmediatamente ese tesoro

líquido!Levantaron lo que pudieron, con una aspiradora especial fabricada en Taiwan con

bambú,plastilina,tubitosdenaranjada,varillasdeparaguasychicleescupido,todoconunmotorapedal.

6

—¡Junten hasta la última gota de esa preciosamercadería! ¡Bastanteme costó tener

7

sentadosa25.000gatossiamesesenpelelasdecristal,durantesieteañosytresmeses!Y losmarineros, con las narices tapadas con cachos de soga y esponjas en la boca,

tratabanderespirarporlasorejas.Siguieronpasando laaspiradorahastaelúltimoresuelloyhasta juntar laúltimagota

delprincipalingredientedeBabypuf,lacoloniadelosbebésnarigones.Losimportantespasajeros(opasajerosVIP,comosediceahora)noaguantaronmásy

pidieron un bote salvavidas. Salieron remando a todamáquina, y supongo que todavíasiguenrespirandolafrescabrisadelmarytomandofotosquesaldránmuymovidas.Manuelita,queviajabaenlacocinadondealmenoshabíaolorasopa,tampocoaguantó

másysebajóenlaprimeraislaquevio.

8

LA ISLA

staeraunaisladesiertaqueenelmedionoteníaunapalmera,teníaunobelisco.Resultaqueunavez,elgobiernodelaArgentinadecidiómudarlaCapitalbienlejos,

dondenomolestaraneltráficoniloschicospedigüeños,peronolealcanzólaplatamásqueparalevantarotroobelisco,queallíquedó,rodeadodeplantuchasdemalamuerte.Unpobrepingüino, quehabía errado el rumbo, envezde llegar a unaorilla helada,

llegó a ese islote caluroso, que parecía freírse al solazo. Se abanicó un poco con losbracitosyseremojólacabezaenunaesquinadeola.Despuésseacurrucóalasombradelobelisco.¿Dónde había quedado su familia, su mamá, su papá, hermanos, primos, cuñados,

bisabuela,consuegros,tíosgordosynoviasdesustíos?Losseparóunaolamásaltaqueelobelisco,yallíseguíaelpobrepájarobobo,sintiéndosetansoloquesepusoallorar.Sullantoformóuncharcotangrandequelenacióunpescadito,selocomióysesintió

mejor,peronomucho.A esa isla llegó nadando Manuelita, y fue a curiosear el obelisco. El pingüino se

escondió y la espió con un poco de desprecio, porque él era más alto y porque esadesconocidanoeradesumismaespecie.¡Faltabamás!Manuelita,intrigada,diovariasvueltasalrededordelmonumento,sinveralpingüino,

queseguíajugandoalasescondidas.Elsolempezóacaersealagua,allálejos,yelaguaempezóaparecerlicuadodemelón.Yentonces,yamareados,chocaronysemiraronfrenteafrente.Mejordicho,éllamiró

desdearriba.—Manuelita,presente—saludóella.—Patachata,glurp...—dijoél,orgullosocomosihubieraacabadodehacerdiezgoles

enuncampeonatomundial,ohubieraganadoelPremioNobeldePaquetería.Perotantasoledadytantocalorloreblandecieron.Alfin,llorandolecontósuhistoriay

cuántosufríasinfamilia,sinhieloysincomidita.

9

Manuelitaloescuchóylopeinóunpocoparaconsolarlo.

10

En esas estaban cuando en la orilla se oyó un inesperado escandalete. ¡Uno a uno,estaba desembarcando toda la pingüinería parienta de Patachata!Habían viajado en subusca,trepadostodosauntémpanograndotecomolaislaGranCanaria.Unaverdaderainvasión,muyparecidaaldescubrimientodeAmérica.Laisladesiertasepobló,sepusonegradepingüinos,quearrastraroneltémpanoylo

recostaroncontraelobeliscoparahaceruntobogán.Eran tantos que algunos se caían al agua. Cantaban y zapateaban al compás de un

grabadorquetambiénviajabaenel témpano,juntoconelcestodelameriendallenodehamburguesasdeescamapicadayalfajoresdecacadepulpo.Manuelita, abandonada por el pájaro que, de puro bobo, no quiso ser su amigo, se

metiódentrodelcaparazón,seofendióydespuéssedurmió.

11

LA AVENIDA

stossonloschicosdelJardíndeInfantes“LaBuenaMandarina”.Vanenfila,delamano,detrásdesumaestraMarlene,quenosabequeunratodespuésseharáfamosaenlatelevisiónporotrorato.HacemediahoraquequierencruzarlaAvenidaColónenMardelPlata,perolosautos

ylasmotosderepartidoresdepizzapasancomorayosynoslesdantiempo.Loschicosestánfastidiosos(comosiempre)ylamaestra,muyenojada(comonunca).

¡Parecequenadielosviera,québarbaridad!Enestemundoyanosepuedeandarniunpoquitocaminandoniotropoquititoapie.De pronto sucede algo misterioso, que por más que se comente después en los

noticieros,nadiepuedeexplicar.Unosdiránquefueunaráfagadevientohuracanado,otrosdiránquefueunailusión,

otrosdiránquelaculpafuedelintendente,peronadiepodráexplicarlaverdad.Elúltimochicodelafilacruzalacallecomovolando,ollevadoporalguienquenose

ve.Eldelantalylamochilaflotanalviento.Despuéslaotra,yelotro,ylosotros,llegancomoángeles,muydivertidos,alaaceradeenfrente.—¡Otravez,otravez!—piden,saltandoyempujándose.Marleneaprovechaelsemáforoverdeyseanimaacruzaraltroteparajuntarseconsus

chicos.Aella,porlovisto,nolallevóningúnvientoniotracosarara.Todosríennerviosos,contentosyasustados.—¡ComoSuperman!—diceuno.—¡Comounhadatelecomandada!—diceotra.—Éste fue un fenómeno de realidad virtual—explica otro, que vive enchufado a la

computadora.Manuelita, que estaba comiendo un grano de pochoclo caído de un carrito, va a

curiosearyacruzarlaavenida.¡Yaellatambiénlalevantanypasavolandosobrelosautos!¡Ellaquesiemprequiso

volaryandarporlosairesconmuchodonaire!Yentoncesvealgoqueloschicosylamaestranopudieronver.

12

Veaunapersonarara,chiquita,mediotransparente,delevita,conelpelocolordearcoirismuyengominadoqueladepositaenlaacera,alpiedeunárbol.—Manuelita,presente—ledicelatortuga.—NifúNifá—sepresentaelpersonajito,connombreyapellido.—¿Vosquésos?—Duende.—Yamedicuenta,pero¿quéclasededuende?—Delamejorcalidad.—¿Socorrésatodoelmundo?—Según...Hoyestabaaburrido,otrasveces...—¿Otrasveces,qué?YentoncesNifúNifádesaparecesincontestar.Manuelita,cansadademirarparatodos

ladospor sivuelve, se encaminaalpuertoaesperarquepaseunbarcopara Indonesia,Zambia,ocualquierotropaísinteresante.CuandolagentedeltelenoticierollegaalaAvenidaColón,Manuelitayanoestá.Por

otrapartenolahubieranvistoporquesolamentelosperrosmiranalpiedelosárboles.

13

Tampocohubieranvistoalduende,porqueerainvisiblecuandoquería.

14

Marleneyloschicoshablaronhastaporloscodos,contandosuaventuraanteelmalónde los Ranqueteles (armados con cámaras, micrófonos, teléfonos celulares,radiograbadoresymilcuchufletesmás).Cientosdevecinosfueronacuriosear,peronadieseenteródelagrannoticiadeldía:

que Manuelita sabía el secreto del cruce mágico y que había conocido a Nifú Nifápersonalmente.¡Ja!

15

16

LA VISITA

steesManolo,tortugosabioquetomamatedelechechocolatadabajounombú,en las afueras de Pehuajó. Lo acompaña su familia, además de una perdiz, un cuzcoovero,lagataCachimba,cuatroplantasdelechugayunaparejadebenteveos.Descansanmientrassuena lamúsica,porqueManoloespropietarioyanimadorde la

FMQuelonio,quetransmitedesdeunacabinaenunhuecodelombú,conmicrófonosdezapallitodemodernatecnología.Terminadoel temamusicalacargode labandaCalandriasPop,Manolosearrimaal

micrófonoparacharlarconsusoyentes.Ylescuentaotravezelmismocuento,decuandoélerachiquitoyllegabaelmalón,al

galope,chillando,metalanzayboleadoras.¡Indiosbravosaquellos!Enesoslejanostiempos,Manoloseasomabaaespiarvalientementealaindiada,desde

elbordedeunpozo.Tienequeinterrumpirlacharlaporqueresultaqueahoratambiénllegaunmalón.No

puedeser.—Estimadosoyentes,andaréflojodelavista—diceManolo.Perolosbenteveosleconfirman,desdeloaltodelombú,queesciertoqueallá lejos,

levantandopolvaredaenelasfalto,llegaunmalón,alparecerbravocomolosdeantes.TodoestorelataManoloydespuésponemúsicaotravez.—Estimadosoyentes,sólose tratadelmalónde losRanqueteles,querumbeaparael

centro.Lasavesquevuelansalenvolando,laperdizsilba,lagataCachimbaseescondedetrás

deunzapallo,elperrooveroaúlla,laslechugassecierranhojaporhoja.Interrumpenlatransmisiónporqueelmalónpasacomounbólido,alosbocinazosysembrandoalborotobailable.Alratolargollegaunagallinamovileraalostropezonesyleabrenelmicrófonopara

quecuente:—¡Aquí, en vivo y en directo, para FM Quelonio! Avanzan los Ranqueteles para

entrevistar,enexclusividad,aManuelita la tortuga,queenestosmomentosatraviesa la

17

plazadelalocalidad.Manolocazaelmicrófonoydice:—¡Exclusividad, su abuelita ranquetela! Manuelita hablará sólo por FM Quelonio,

dirigidaporunservidor,Manolo,exesposodelavisitanteoriundadeestaciudad.LabandaCalandriasPopsedesinfladetantollenarconmúsicaellargoratohastaque

Manuelitaapareceydiceatodos:—Manuelita,presente.Manololaabrazaylepresentaasuterceraesposayaloshijitosdeuna,deotro,delos

dos,máslosdeManuelitaquesalenabesuquearasumamá,muyemocionados.LarecepciónestransmitidaenteritayendirectoporlaFM,ydespuésfestejantomando

matedelechechocolatada.Terminaelprogramaalcaerlatarde,ylafamiliaylosvecinosescuchansinpestañear

loscuentosdelatortugaviajera.Pasa de regreso elmalón de los Ranqueteles, que no pudo encontrarla ni con lupa.

Empiezaalloviznaryl’agüitaaplacalapolvareda.Despuésdevariosdías en familiayde respirar el airepurode suspagos,Manuelita

decideseguirviaje.Su ex esposo y actual amigo del alma,Manolo, la abraza deseándole que descubra

muchasmaravillas.YqueasuregresoselascuenteenexclusividadalosoyentesdeFMQuelonio.Sushijosleprometenqueestudiaránhastaquemarselaspestañasquenotienen.—¡Felizviaje,traenosmuchoscuentos!

18

19

EL SABIO

stehombreflaquísimo,vestidosóloconturbanteytaparrabo,debarbatanlargaqueselatirasobreelhombro,sellamaMacanapurPanchapánAparatopoChantalapir.Dicequeessabio,faquir,brujo,manosanta,adivinoydomadordearañas.Vadeaquí

paraallá,deunpuebloaotro,ytambiéndicequehablaconlosanimales,losinsectos,laspiedrasyelgranizo.Loquenosabemosesquélecontestan.Duermesobreuna tablaconclavos, toca laocarinay... olvidécontarles loprincipal:

estehombreviveenlaIndia.Hoyestáofreciendosusservicioscercadelaestacióndeltren,quetraepasajeroshasta

eneltechoyvariosmonoscolgadosdelasventanillas.EnesetrenlleganuestraamigaMarlene,maestradeljardín“LaBuenaMandarina”,de

MardelPlata.Se recibióen laUniversidady ledieronunabecapara iraestudiara laIndiauncursodePacienciaYogaaplicadaalpreescolar.Baja del tren con un grupo de amigos y colegas, cargando bolsos, mochilas y

colchonetas.Todosquierenconoceraalgúnsabio.LesdijeronqueloscaminosdelaIndiaestaban

plagadosdesabios,sabihondosysabelotodos.Marlenelepreguntaaunaestatuabailarina:—Señora,¿sabedóndequedaelInstitutodePacienciaYogaparamaestrasjardineras?Laestatuatienetantosbrazosquepareceseñalarendistintasdirecciones,yademásla

miramuyfijo,conenormesojosredondos.Marleneigualledalasgraciasperonosabehaciadóndeir.Preguntaenunacomisaría,peroestán todosentretenidosencobrarleunamulta aun

elefanteporentorpecereltráficoypisarhormigastransportadorasdepétalosdeloto.Lepreguntaaunavaca,peroenlaIndialasvacasnohablan.Sonpersonasmuyserias

yrespetadas,nadielasmolestanilasmata.—Noleshablesquenolesgusta—leaconsejanlosamigos.Les pregunta a unos chicos, pero ellos le piden limosna con un griterío tal que le

recuerda a su querido Jardín. Les regala sus últimos caramelos, hechos un pegote

20

repugnante.Entonces se acercaMacanapurPanchapán, etcétera,y los saludaconuna reverencia,

llevándoselasmanosjuntasalanariz.El truchimán, que habla en 34 idiomas pero por señas, los invita a seguirlo.Al rato

largo, con las zapatillas hechas puré y las mochilas zaparrastrosas, se sientan bajo unárbolacomerundátilentretodos.Elsabiolesdicequenohacefaltairaningúninstituto.Loquenecesitanaprenderestá

escrito en los dibujos que adornan a algunos animales o insectos: alas demariposa, ocaparazonesdetortuga,omanchasdejirafa,olunaresdelangosta:sólohayquedescifrarelmensaje.Marleneysusamigosestáncansadosyya lesparecequeelancianoesuncharlatán,

peroiguallosiguenescuchandorespetuosamente.No ven animales con dibujos por ningún lado, yMarlene piensa qué bueno hubiera

sidometer en el equipaje a la tortuga del Jardín, pero se quedó allá enMar del Plata.Entoncesoyenunavozcantarinaquedice:—Manuelita,presente.Qué casualidad,Manuelita ha viajado a la India en esemismo tren, para visitar a la

MadreTeresa,yjustojustitosetopaconMarleneysusamigos,quelepresentanalsabio.El anciano les dice que estudien el caparazón deManuelitamuy atentamente. Entre

todos,afuerzademuchasaliva,lalimpiandetierra,briznas,pelusas,abrojosyhastaunpiojoadquiridosentanlargoviaje.Se acuclillan alrededor de Manuelita como si fuera un mapa o un rompecabezas,

mientraselsabiosigueconsuflacodedolosdibujosdelcaparazón.Unasemanadespués,elancianolesrevelasudescubrimiento:—Estosdibujosquierendecir...queelsolbrillaylalluviamoja.—¡Pero miren qué pavada! —dice Manuelita—. Tenerme aquí una semana para

semejantetontería.

21

Marlene trata de calmarla y le ofrece visitar a otros sabios, pero Manuelita dice

22

permiso,chauysevacaminando,segurísimadequelosdibujosdesulomoquierendeciralgomásinteresante.—Duranteunasemana,aprendieronpaciencia,¿noeraeso loquequerían?—diceel

truchisabio,extendiendolamanoparacobrarporlaenseñanza.Lacomitivavuelvealaestaciónaesperarotrotrendurantecatorcehoras.Entoncesse

dancuentadequecuandolleguenalInstituto,estarándoctoradosenpaciencia.Atodoesto,muylejosdeallí,laMadreTeresaseasomaalapuertaypregunta:—¿PorquénollegaManuelita?

23

LA MÚSICA

stos pobres fulanos que están enfermos en una cama de hospital, miran por laventana un valle suizo de color turquesa, con chalecitos de chocolate y ovejas muypeinadas.Ésteesunhospitalpara instrumentosmusicales, fundadocercadeGinebraenelaño

1777,porelprofesorWalterWernerVonCureten.Laclínicatienevariosmédicosymédicasconmuybuenoído,yseleshanmuertomuy

pocos enfermos. Cuando ya no tienen remedio, los reciclan para hacer esculturas ojuguetes.Los que están ahora acostados en sus camas son un arpa, un timbal y una tuba.

Grandotesellos,lassábanaslesquedancomobaberos.—¿Teacordás,arpitaquerida,deaquelconciertoquedimosen1888?—Cómo me voy a olvidar—dice el arpa—. La arpista me acariciaba y el público

llorabadeemoción.Cubrieronlaalfombrademocos.—¡Québobería!—comentaeltimbal.—Nomegustaestarenferma—dicelatubaconsuvozdetruenoresfriado.—Yamínuncamegustóelrock—lecontestaelarpa.—¿Yesoquétienequever?—¿Cómoquétienequever?Alomejorseenfermódeunrockazo.—Ustedessonunosvejestorios—diceeltimbal.—Y,jóvenesyanosomos.—No,perosinoscuranpodremosvolveratocarsinfonías,otrabajarenlabandadela

plaza,oqueunjovennoscomprebaratitosparapracticar.—Yo preferiría viajar por el mundo —dice la tuba con un suspiro que parece un

terremoto.—Yoquerríavolveraactuarparalosniños—diceelarpa.—¡Losniños,lindopúblico!Loúnicoquequiereneshacerexplotarchiclesglobo.—Yo les gusto siempre porque meto mucho ruido, se mueren de miedo—dice el

timbal.

24

Yentoncesllegaronlosmédicoseinterrumpieronlacharla:

25

—Avercómoestánestosenfermitos—dijounmédicosuizomientraslamíaunheladodecremaconaspirina.—Aver cómoestán estos pacientitos—dijounadoctora gordamientrasmordía una

zanahoriarociadaconjarabeparalatos.—Avercómoestánestosinstrumentitos—dijoundoctorflacuchoconlabocallenade

chupetíndedesinfectante.Apartaronlassábanasyrevisaroncuerdas,parches,clavijasyteclas.Lamédicagordotapusoeloídoenlabocinadelatubaydijo:—Estapobreloquetienesontelarañasy,muyalfondo,unratónmuerto.—Y este timbal se mojó bajo una gotera, hay que ponerlo junto a la estufa para

estirarleelparche.—Yaestaarpaletironearonlascuerdasenunavisitaguiadaparaestudiantes.Conlas

cuerdasdisparabanflechasaldecorado,jugandoaGuillermoTell.—¡Quéhorror!¡QueestohayapasadoenSuiza,unpaístanordenadito!Pusieron manos a la obra y empezó el tratamiento. Después de una semana, los

enfermoshabíanmejoradotantoquelossacaronalparqueatomaraireyacontemplarloscanterosconflores.Losmédicos los hicieron sonar un poquito a los tres juntos. Al rato se les unieron

variosenfermerosquellevabanadosviolonchelosconvalecientesdefracturasdepatita,aun clarinete mejorado del asma, y a dos oboes restablecidos de un sarampión en fasostenidomenor.¡Québienestabansonando!ProntopodríanvolveralteatrodelaÓperaoalaplazay,

por qué no, a la televisión, a un programa con sorteos donde ganarían como premioestuchesnuevitos.Entoncesunavozcantarinadijo:—Manuelita,presente.Pero nadie la oyó. Casualmente,Manuelita estaba por ahí, abriéndose camino entre

azaleas,tulipanesypensamientos.Pasaba por Suiza, rumbo a la Cruz Roja Internacional, adonde iba a ofrecer sus

serviciosdebuenavoluntad.¿Dequéseríen?¿Acasoellanopuedecargarconunkilodegasa,unbidóndealcohol,

tres kilómetros de cinta adhesiva, diez cajas de antibióticos, quince de vacunas y unfrascodegotasnasalesarribadetodo?Buscandounatajoporelparque,Manuelitaescuchólasnotasdelarpaydesussonoros

compañeros,ysesintiórejuvenecida.Igualquelagentefamosaquesaledelasclínicasdecirugíaplástica,masajesycataplasmasdebarropodrido.Se va muy campante a comprarse un heladito de arándanos y pistacho, y lo está

26

chupandomientrasesperaeltranvía.

27

LOS PATAPIEDRAS

stossonlostiposmásbrutosdelmundo.Midendosmetrosypicodealtura(entrelosdos),sevistendecueronegrocontachasdetapitasdebotellas,calzanunasbotasconpezuñasenlapuntayseríensinpararabriendomucholasbocazasdedondechorreaunababadecaracoltamañobestia.Nolessalencarcajadassinorelinchosdecaballoslocos.Avecesjueganapegarsecabezazos,poresoestántodosabollados.Empiezan a comer los helados por la punta del cucurucho y siempre suben por la

escaleramecánica quebaja.Tienen las orejas rotas pormeterse el tenedor con la papafritaenesapartedelcoco.Lesllevamuchotiempotomarlasopaconcuchilloyponenlaalmohadabajolacama.Sonasí.Sehandescolgadodesusmotosadescansarenplenocampo,cercadelríoLapizul.Son

tan brutos que manejan mirando para atrás, porque no distinguen manubrio de ruedatrasera,asíquevivenchocandoynuncasabenbienparadóndevan.Así como los ven, son campeonesmundiales de un deporte que ellos inventaron: el

patapiedra.Consiste en patear las piedrasmás grandes que encuentren: el que la pateamáslejossinromperseelpieylabotaconpezuña,gana.Vivenganándoseelunoalotro,yseentrenanpor todaslascalles,campos,patiosde

escuelayplazasqueencuentran.Sedistraenpisando sembradosy canteros, peropor sobre todas las cosas nopueden

dejarpiedrasinpatear,aunqueseaunarocade3.000kilos.Deprontodivisanunapiedraredondaychata,adornadaconcuriososdibujos.Nocreen

quevalgalapena,porquenoesmuygrande,peroallávancorriendoaverquiénlapateaprimero.Lapatean los dos, se golpeanbien los tobillos, y la piedra redonda sale disparaday

aterrizaenlaotraorilladelríoLapizul.Gritan¡Gooool!Ysebabeandealegría,peroesonolesparecehazañasuficiente.

28

Justoenesemomentopasaporelríoelyacaré-colectivo,quevacompleto:llevasobre

29

ellomoaalgunosbichoscansadosdenadar,volar,caminaroarrastrarse.Losbrutos,a faltade juegomejor, saltansobreelyacaréy lohunden.Lospasajeros

escapancomopueden.Lostiposeructanypeganmanotazos,nosabennadarysólosalpicangritando:—¡Yacaréroñoso,alpozo,alpozo!¡Lagartijatriste,moriste,moriste!Peroojoqueelyacaréreaparece,furioso,yseloscomecrudos.Primeroauno,después

al otro, y novalen en el agua las patadasdefensivas.Sóloquedan las botas pezuñosasflotandoporahíyunosandrajosnegros.Elpobreyacarétieneunaindigestióndepadreyseñormío,ysepasaelrestodeldía

vomitandotachasdetapitasdebotellas.Comoimaginarán,lapiedraquepatearonnoeraningunapiedra,sinoManuelita,quese

habíaencerradoensucorazaparapensarmientrasesperabaalyacaré-colectivo.Lasferocespatadas lamandarona laotraorilla,comoyasabemos,y ladesgraciaes

quecayópanzaarriba.Hacemilgestosconmanosypatitas,pidesocorrocomopuede,pero los bichos se han ido lejos y el yacaré yacemásmuerto que vivo, llorando hastapartirelcorazón.Manuelitaestáallí,patasparaarriba,bastantepreocupadaporquesolanopuededarse

vuelta.Semeteensucaparazóny,comotantasotrasveces,seponeapensar.Pobrecita,sino laayudaalguien,sevaamorir.Ydigoyo:elduendeNifúNifá¿no

pasaráporaquí?NifúNifá¿dóndeestará?

30

31

EL GAUCHO

steeselgauchoNicolásGarcía,flacoél,depelocolordekinoto,quealternalastareas ruralesconelarte.AhívaporelpagodePonchoRabón,cargandouncaballete,unapaleta,unacajadepomosymuchospinceles.Lesavisoqueenlacasasequedósumujer,laRomina,muyocupadacomponiendouna

canciónensusintetizador.Ytambiénestáelbebé,VerdecitoGarcía,ylagataCachimba.¿Cómo?¿LagataCachimbanoestabaenPehuajó?Estaba,sí,perobuscandounbuen

rincón donde parir sus crías. Así llegó hasta los pagos de Poncho Rabón (a 765kilómetros) y se quedó en lo deGarcía, aunque los bebés humanos no le gustan nada,peroloquesedicenada.Encuanto lovegatear aVerdecito, lemuestra los colmillosy lededicaun sifonazo

feroz.¡Losúnicosquetienenderechoagatearsonlosgatos,caramba!NicolásvahastalaorilladelríoLapizulypiensapintarloenuncartón,juntoconlas

flores que cultiva para eso. Y también los tomates y la acelga: primero los siembra,despuéslosretrataydespuésloscome.Para qué contarles el disgusto que le dio encontrarse con su jardín y su quinta

destruidos,aplastados,hechosunberenjenalsinunasolaberenjena.Paracolmo,ellímpidoríoLapizul,alquecuidacomolaniñadesusojos,correturbio,

llenodebasura,conunashorriblesbotasmordisqueadasenlaorilla.—Poraquíhapasadoelmalónde losRanqueteles—sospechaNicolás—,pero ¿qué

vinieronafilmarsinohubocrimenniaccidentenivisitadeunídolo?Velacoladepasajeros,enlaparadaPonchoRabón,esperandoqueelyacaré-colectivo

retomeelservicio.Entoncesescuchaunasquejasyunllantoqueleponendepuntalosruloscolorados.Va

yvealyacaréempachado,quelecuentacómosalvóalpueblocomiéndoseenteritosalosdostiposquelapolicíatienefichadoscomoRompeyRaja.—¡Yacarébruto!—lediceNicolás.—¡Losbrutoseranellos,papito!—lloriqueaelyacaré.—¡Rebrutísimostodos!—diceNicolásenojado.

32

Y debe cargar al bicho en su caballete como si fuera una camilla y llevarlo alveterinario.Paciencia,pintaráotrodía.CuandolagataCachimbavaabuscarlo,tropiezaconalgoescondidoentrelosyuyos.—Manuelita,presente—dicelatortugamoviendomuchopatasymanos,porquesigue

alrevés,conelpetoparaarriba.—Lindamañana¿no?—ledice lagata,y seponea jugarhaciéndolagirar comoun

trompo.—Serálinda,¿peronovesquelaveoalrevés?—¿YaGarcíanolohasvisto?—Aquínoveomásqueyuyosypasóunaoruga.—Bueno,seráhastaluego—diceCachimba.—¿Cómohastaluego?¡Damevuelta,quemevoyamorir!—Ysitedoyvuelta,¿quémedas?—PodríatraertealgodeTonga,odeSamarcanda,algunachuchería.—¿Conquéletraempieza?Yestatontaconversaciónpodríahaberseguidohastalanoche,peroporsuertellegaron

uno,dos,tres,cuatro,losgatitosdeCachimba,yjugandojugandoalfinladieronvueltaentretodosylapusieronsobresuspatas.Manuelita aprovechó que era la hora de mamar para la familia gatuna y se fue

disparando,dispuestaanovolvernuncaalpagodePonchoRabón.¡Faltabamás!

33

EL GLACIAR

steeselglaciarPeritoMoreno,enlaPatagonia,yestepuntitoqueapenasseveeselpingüinoPatachata,perdidoalpiedelasmontañascelestesdehielopuro,altascomoedificiosdecincuentaysietepisosypico.¡Otra vez está solo! ¿Será posible? Por hache o por be, siempre pierde por ahí a su

numerosafamilia.Aunque le gusta el clima, está triste y cabizbajo. ¡Todo es demasiado grande, las

montañas,ellago,lastorresdehielo!Entoncesvealgoquecamina, allá lejos. ¡Qué suerte!Alguien se abrepasoentre las

molesheladas,peroamedidaqueseacerca¡mamitamía,cómoseagranda!Alverloaladistancia,tododeoscuro,elpobrePatachatapensóquesetratabadeun

parienteperdidocomoél,peroahoraque lovemejor, resultaqueesunhombre,ounabestia peluda, o un gigante, con una capa de piel de murciélago, unos descomunaleszapatonescondestornilladoresenlassuelasyuntroncodeárbolenvezdebastón.Patachata quiere escapar, pero está petrificado de miedo, con todas las plumas de

punta.Miraparaarribayelhorriblegigantemiraparaabajoysevenlosdos.Esunhombrónfeísimo,hechoderemiendos,cosidoportodoslados,conojosdesapo

tuerto,unafrentegrandecomounfrontónyunospelosdealambredepúaoxidado.El pingüino nunca fue al cine ni leyó cuentos y por eso no sabe que se trata de

Frankensteinenpersona.¡QuiénnoconoceaFrankenstein,porfavor!Esunviejomonstruoqueserefugiaenlas

zonasheladasparaqueloshombresnolopersigan.Tambiénsesabequeliquidaatodobicho viviente, amargado porque nadie quiere casarse con él. Y que tiene comodoscientosañosdeedad.Frankenstein abre sus manotas como garras, y con una espantosa carcajada alza a

Patachatadiciendo:—¿Quiéneres,pajarracosinalas?—Glurp...soyPatachata,señor.

34

—¿Quierescasarteconmigo?—¿Yo?No,no,tengonovia...ymipapáesmásgrandequeusted.—¿Dóndeestá?Voyahacermeunbuenguisitodepapaconpapá.Justo cuando Frankenstein iba ameterse a Patachata en el bolsillo, se oyó una voz

cantarinaquedijo:—Manuelita,presente.Así era. La tortuga, con patines para hielo y una larga bufanda, había bajado de la

lanchadeunoscientíficosquerecorríanelLagoArgentinoestudiandoelcomportamientodelpez-cubito.—¡Patachata!—legritóManuelitaalpingüino—.¿Seráposiblequesiemprepierdasa

tufamilia?—¡Esunadesgraciaquetengo!—lloriqueóéldesdelagarradelmonstruo.¿Yquéhizoelmonstruo?¡AgarróaManuelitaconlaotramano!—¿Quierescasarteconmigo?Manuelita,espantada,seescondiótodadentrodesuestuche,sincontestar.Frankensteindiomediavueltaysefuealaszancadasllevándoseaunoencadamano.Semetióeneldesfiladerodealtísimoyfríohielo,esperandollegaraunrefugiodonde

teníasuollaparaguisoyuncucharónhechodecráneohumano.Peronollegómuylejos.Pisóarribadeunamontañay¡plaf,brrrum!La montaña de hielo se derrumbó, haciéndose añicos con un ruido parecido a un

tiroteo.En la patinada, se le cayeron lejos sus presas porque se olvidó demetérselas en los

bolsillos.Frankenstein,conunaullidohorripilante,sehundióenelabismocomosilasmontañas

selohubierantragado.¡Pobres,quéindigestión!AlláaterrizóPatachatasobresupanza,yManuelita,porsuerte,también,esdecir,cayó

tambaleándosesobresuspatines.Corrieronypatinaronhastallegaralalancha,dondeloscientíficoslosrescataron.Comonoesposibleestudiarcuandounpingüinolloraypatalea,leencendieronlatele.

35

Se calmó mirando videos llenos de rayos mortíferos y dinosaurios hambrientos de

36

remolachaenvenenada.Manuelita,muy callada, se arrimó a espiar por elmicroscopio con que los biólogos

estudiabanlapecerallenadepeces-cubitocautivos,antesdequesederritieran.La expedición científica siguió viaje por agua y tierra —la lancha era anfibia— y

despuésdemuchasvueltasdepositaronaPatachatacercadesupingüinera,alaorilladelmar.Allí Manuelita pudo saludar a unas cuantas ballenas que bailaban el antiguo vals

“Sobrelasolas”.Los científicos le dijeron que navegarían hasta un puerto europeo y la invitaron a

acompañarloscomopreciadamascota.Tambiénlainvitaronaunconciertoenuncastillomaravilloso.Ellalesdijoqueloibaapensar.En una de tantas vueltas por tierra y agua, perdieron aManuelita. Le guardaron los

patinesylabufandaporsivolvía,peronovolvió.Ella,enalgunaparte,seguíapensando.

37

EL CONCIERTO

ste es el antiguo castillo de Petipuá, en la región deDondedón, un lugar pocovisitadodelaComunidadEuropea.Enelparquedelcastillohanarmadounatarimaconsillasyatrilesporqueestatardehayconcierto.Tomando fresco a la sombra de un fresno están nuestros viejos amigos el arpa, el

timbalylatuba.Doscornosseacercanrodandoparaconversar.—Sí,porsuerteahoraestamoscerokilómetro—diceelarpa.—Peroelviajefuemuycansador—diceeltimbal.—¿Quépasó,quépasó?—preguntanloscornos.—Estuvimosmuyenfermos,internados.—¿Dónde,dónde?—preguntanloscornos.—EnGinebra,Suiza,enunaclínicadelomejor—informaelarpa.—Fundadaen1777porelprofesorWalterWernerVonCureten.—¿Porquién,porquién?—preguntanloscornos.—¿Yaustedesquécornolesimporta?—dicelatubamalhumorada.—Tubitaquerida,queseasmásgrandotanoteautorizaasergrosera—diceelarpa—.

Yosoymásaltaquevosynopierdojamáslacompostura.—¿Tuqué,tuqué?—preguntanloscornos.Enunahorquetadelfresnohayunpersonajemuyaburridoconestaconversación.Esel

duende Nifú Nifá, el de levita y pelo engominado color arco iris. Quiere hacer unatravesuraynoseleocurrecuál.Ve de pronto que alguien petisito atraviesa por el césped los portones dorados del

parqueycorreaverquiénes.—¡Perosiesmiviejaamiga!—diceNifúNifá.—Manuelita, presente —dice ella, que ha viajado desde remotos parajes sólo para

escucharelconcierto.—Bienvenida—diceelduendeburlón—.¿Tellevohastaelescenario?

—Bueno—contesta Manuelita porque está cansada y tiene ganas de revolotear. A

38

vecesenvidiaalasmariposas,claroquelaspobrestienenunavidamuycorta.YentoncesNifúNifáselallevaporlosaires.Lavistaaéreadelcastillo,elparqueyel

brillodelosinstrumentos...¡quéprogramainigualable!Manuelitadecideaprenderalgunavezeldeportellamadoparapente.—¡QuébuenamigoesNifúNifá,aunquenosiempreestécuandouno loprecisa!—

piensaManuelita—,yquédistintosevetododesdearriba.Elduendeladepositaenlaramadeunárbolmuyalto.Desdeallívemagníficamente

cómolleganlosmúsicosyacomodanlosinstrumentos.Pero el público, que aparece en turbamulta por el parqueypor el castillo, no es tan

elegantecomounopodríasuponer.Serevuelcanporelpasto,bebenlatasdegaseosas,seempujan,cantanysearrojanlibrosporlacabeza.Resulta que el castillo, desde hace unos años, es una

residenciaestudiantil,yelpúblicodelconciertosecomponede chicos, adolescentes, profesores, deportistas, paseadoresdeperrosyheladeros,vestidosconlosúltimostraposviejosqueencontraron.ApesardeladistanciaManuelitadistingueasusamigos,

losbiólogosestudiososdelpez-cubito.Les hace señas pero no la ven. Por más profesores que

sean¿cómovanaimaginarsequeunatortugaestéarribadeunárbol?Yentoncesoyeunvozarrónquedice:—Silencio,queempiezaelconcierto.¿Quiénhabló?¡Misterio!Y el concierto empezó, y siguió y siguió, y toda esa música era como un baño

maravillosodebajodeunacascadafresca,enverano.AManuelitaselecaíanlaslágrimasdeemoción.NifúNifároncaba.Terminó la música, el público aplaudió y tiró las gorras al aire, la directora de la

orquestaylosintérpreteshicieronreverencias,yentoncesManuelitaledijoaNifúNifá:—Despertateybajamequevoyasaludaramisamigos.Elduendeserió,abrió losbrazos,dijochauydesaparecióplaneandocomosivolara

conunparapente.Elparquesevaciódegente,sefueronapagandolaslucesdelcastillo,salierontodaslas

estrellasyManuelitaalláarriba.Algomuyfeoparaalguienquenoesavenimurciélagonibarriletecaído.—¿Yahoramevoyaquedaraquíarribaparasiempre?—dijopreocupada.

39

Entoncesoyóotravezelvozarrónquelecontestó:—Estotepasaportenerciertasamistades.—¿Quiénhabla?—ElAlerce.—Muchogusto,¿yquiénes?—¡Quién voy a ser! El árbol donde estás posada como un pajarito, algo que no te

corresponde.—Yoquisebajarmepero...—Peroeligesatusamistadesentreesagentuza...—¿Quégentuza?—Losduendes.Noconfíesenellos.—¿Porqué?

40

—Porqueconellosnuncasesabe.HanechadoaperderalmismísimoMozartín,que

41

eraunángelentrelosduendes.—¿Ydóndeestá?—¡Vayaunoasaber!—Graciasporeldato.Ahora¿podríaindicarmedóndeestálabajada?—Iréinclinandomisramasunaporuna,despacito.Descuélgateconcuidado.Estepeligrosoejerciciolellevótodalanoche,peroalfinpisóelcésped,agotada.—Muchasgracias,donAlerce—dijodesdeelsuelo.—Denada,peroahora,derechitoacasa.—Micasaeselmundo—dijoManuelita.Ysefuetrotandoalaluzdelamanecer,mientraselAlercealzabalasramasyseguía

rezongandosolocontralosduendes,lasardillasylastortugasmodernas.

42

LA SELVA

staeslaselvaamazónica,yesatorrecelestecontechodepajaquesobresaledelos árboles es el Instituto de Estudios, Clínica Veterinaria y Reserva de Cocodrilos yAfines.Por el río Amazonas viene navegando la piragua Grinpís, tripulada por el gaucho

NicolásGarcía,conelyacaré-colectivoacostadosobresucaballetedepintor.Resulta que el único veterinario de Poncho Rabón no supo curarlo y le aconsejó a

NicolásquelollevaraaestefamosoInstituto.—¿Conquéplatavoyahacersemejanteviaje?—preguntóNicolás.Su esposa laRomina le dijo que se la daba de sus ahorros ganados en concepto de

derechosdeautoradelacanción“BluesdelríoLapizul”.TambiénledijoquequizáspodríaconseguirleunabecaenLagartologíadelMercosur.EntoncesNicolás se despidió y se fue nomás. Le llevó bastante tiempometerse por

todos los brazos, afluentes y riachuelos del río Lapizul que desembocaran en elAmazonas.¡Paraquécontarleslospeligrosquepasóensunavegación!Tambiénviomuchascosas

bellas, desde orquídeas hasta cobras colgadas de los troncos. Claro que casi no pudopintarporquellevabaelcaballetetransformadoencamilla,comosabemos.Sólodibujabaenunalibretitacuandodescansabadelremo,yanotabasusimpresiones

pensandoquealgúndíaescribiríaunlibro.En el Instituto lo recibieron cariñosamente. Los profesores eran todos indígenas

taraguará-pereguapés,decarapintadaartísticamente,convinchasfluorescentessobresuscrenchasrecortadasconcacerola,enformademelenaconflequillo.Eltorsocubiertodecollaresydelantalesdehojadebananero.Estosmédicos de la selva se llamanchamanes.Otros les dicen brujos, hechiceros o

paramédicos.Magníficaspersonasqueloconvidaronconbocadillosdepatédehormigasylicuado

deortigaconajípicanteservidoencoco.Los chamanes llevaron al enfermo a la sala de observación y enseguida comentaron

43

quehabíaquesalvarlo,porqueelyacaré-colectivopertenecíaaunaespecieenextinción,mejordicho,eraelúnicoquequedaba.Después de agradecerle a Nicolás con muchas reverencias que hubiera pensado en

ellos,secolgarondelhombrolaaljabaconflechas,empuñaronsuslanzasyseencerraronaestudiaralpaciente.Nicolássesentóenlasaladeesperasobreuntapirembalsamadoysepusotriste.—Después de tanto viaje estoy solo, extraño a la Romina y a Verdecito, a la gata

Cachimbayasuscuatrocachimbitos.Yyaibaaponersealloriquearcuandoescuchóunavozcantarinaquedijo:—Manuelita,presente.—¿Vosporaquí?—Nuncaabandonoamisamigos.Charlaron un rato largo hasta que los chamanes volvieron muy serios. ¿Se habría

muertoelyacaréenlasaladeoperaciones?No,porqueapareciólomáscampante,operadoycosidoalaperfección,sonriendocon

todossuspreciososdientes.—Bueno,entoncesvolvamosacasa—dijoGarcía.—Teextrañantuspasajeros—dijoManuelita.—¡No, no y recontra no! —dijo el yacaré agarrándose de sus sanadores hasta

destrozarleslosdelantales.—SiRelámpagodelaCorrientenoquiere...—dijeronacorolostaraguará-pereguapés.

(Relámpagoeraelnombreantiguodelreptil.)—EnPonchoRabónmevanameterpresoporhabermecomidoadostipos—dijoel

yacaréhaciendopucheros.—Muchos parientes nuestros han sido honorables caníbales —dijo una chamana

embutidaenvarioskilómetrosdecollares.—Quéasquete—dijoManuelita,vegetarianahastanuevoaviso.—Vamosdeunavez—ordenóNicolás,yafueradesuscasillas—.Yotetrajeyyote

llevoderegreso.Yseacabóladiscusión.Se acabó la discusión y empezó el mambo. El chamán jefe tiraba de la cabeza del

caimányNicolásdelacola.

44

—¡Queesmío,queyolotrajeyyomelollevo,ustedessonunoscochinos,capacesde

45

comérselo!—Comérselo,selocomerátuabuelita.Aquísequedaypunto,nohayquecontrariarla

voluntaddeRelámpagodelaCorrienteporquepuedevengarseyllamaralosRanquetelespara que nos roben el alma. Porque es el único ejemplar del mundo. Porque aquímandamosnosotros,desdehace700.000añosymedio.Estorecitaronlos taraguará-pereguapésgolpeandosuslanzasacompássobreelpiso,

taloneandodelolindoyalzandolosojoshastaesconderlosbajoelflequillo.—Calma,radicales—dijoManuelita.—Me lo llevoporque lo estoy retratando... ¡Yporquemeda la gana! ¡Yporque no

quierovolversolocomounaesponja!Tantotironearonqueelyacarésedescosió.Loschamanesempezaronadesenfundarlasflechas,lachamanahizosonarsuscollares

ytodosdijeronacoro:—Relámpagode laCorrienteesnuestro.Demasiadascosasnosharobadoelhombre

blanco.—Esoesverdad—dijoManuelita.Elyacarérezongó,agarrándoselapanzapordondeasomabantripas.—Yo no quiero trabajarmás de colectivo, quiero quedarme aquí y queme cuenten

cuentosdemisabuelitos.Y a cada rato se descosía más y más. Se agarró con uñas y dientes al tapir

embalsamadoytambiénlodesarmó.—Aquílocuidaremosydetantoentantoledaremosdecomerunniñoblancogordito

—dijoeljefe.—¿Cómodice?—Decimosquechauyacaré–colectivo,aquísequeda,paraencantodetodoslosamigos

desuespecie.Graciasportraerlo.Porcualquiercosa,aquítienemitarjeta.Entoncesentraronotros indígenas tocando tamboresy sonajeros, señal inconfundible

dequelavisitahabíaterminado.Despuésdeunaruidosadespedida,conbaile,discursosyregalodeplumeros,Nicolás

notuvomásremedioquemeterseensupiraguaconManuelitayelcaballeterecuperado.Noeracuestióndehaceresperarasufamiliaacausadeestebicho,pormásúnicoque

fuera.Además,porahíRelámpagodelaCorrienteextrañabayseleocurríavolversolo.—Te acompaño un trecho—le dijoManuelita aGarcía—pero a PonchoRabón no

quieroirmás.¡Paséunanocheenteritapatasarriba!—Comoquieras—dijoNicolás—,estávistoquehoytodoelmundoseencapricha.Y allá fueron, remontando elAmazonas en la piraguaGrinpís,mientras cantaban el

“BluesdelríoLapizul”.

46

La selva estaba plagada de plantas carnívoras y bestias feroces, pero todas, pormáshambrequetuvieran,lossaludabanconrespeto.Hastalaspirañas.

47

LOS SOMBREROS

stos son dos sombreros mexicanos que están conversando a la sombra de unapirámideazteca.Alparecer,nohaynadiedebajodelossombrerotes.Estáncharlandotonterías,cosasdesombrerossincabeza:—Queamímeusóunmariachienunafiesta.—Queamímefilmóungrandirectorde

cine.—Queyosoymásgrandequetú.—Peroyoestoymejorbordado.—QueyounavezlovialChavo.—Yqueyoestoytodoremendadoporqueunavezmepegaronveintetirosenunabalacera.Yasí.Uncactomuyaltoyviejitoquequieredormirlasiestayaestáhartodelacharla.Justo cuando va a pedirles que se callen, ve que los sombreros, de tanto en tanto,

caminanunpoco,mejordichosemuevenporquenotienenpatas.El cacto se da cuenta de que no llevan duende ni gente debajo, que deben de estar

amaestradosporquenosoplaniuncachitodevientoquepuedamoverlos.Esmuyastutoestecacto.Alfinlesdice:—Miren,manitos,acallaryquedarsequietos.—¿Yporqué,pues?—Porquemedistraenyestoyporflorecer.Lossombrerossesacudenderisa.—¡Nohasflorecidoentreintaaños,abuelitopinchudo!—Puesesteañometoca.Dentrodeunratomevaabrotarunaflormorada.—Quérisa.—Yvienealguiendemuylejossóloparavermiflor.Entoncesunodelossombrerosdaunsaltitoyjustojustocaesobreunpájarosinsonte

quepicoteabadistraído.Yentoncesseoyeunavozquesusurra:—Manuelita,presente.—Bienvenida—lediceelcactotratandodeinclinarseunpoquito.—¿Lleguéatiempo,donCacto?

48

—Alatardecertemostrarémiflor.

49

Entonceselotro sombrerocayósobreManuelita,que seencontróaloscuroyoyóalsinsontequellorababajito.—Dejenlibresaesascriaturas—suplicóelcacto.Pero los sombreros se fueron andandoy arrastrando a las presas quehabían cazado,

hastallegaralotroladodelapirámide.Allí estaba escondida una pareja que cazaba animalitos para vender en la ciudad.

Manejabanlossombrerosconunhilo.GuardaronalsinsonteyaManuelitaenunacajaconagujeros.Elhombresepusoun

sombreroylachamacallevóelotroalaespalda.Lacaja,bientapadaconunamanta.Parahacerlacorta:Manuelita,compradaporlamamádeunpardechicosrepelentes,

fueapararaunacasadelaciudaddeMéxico.Le pusieron de nombre Chilindrina ¡y le ataron al cogote un piolín para que no

escapara!Lausaronparahacermiltravesuras,desdeobligarlaagirarcomountrompo¡otravez!

Hastaponerlaconelpetoparaarriba¡otravez!Ypatearla¡otravez!Manuelitaseescondiótoda,apesardelhiloquelaahorcaba,yjurónuncamásasomar

desucarapacho.Loschicoslasacudieronylegritaronylepegaronparaquesaliera,peroellanoasomó,

hastaquealfinalsecansaron.Entonces el papá les trajo de regalo una jaulita con un sinsonte, precisamente el ex

compañerodesombrerodeManuelita.Loschicoslofastidiarontodoloquepudieronytambiénleataronunhiloaunapatay

losacarondelajaula.Elpájarofingióquelosobedecíayvolabaycaminabasegúnellosquerían,hastaquese

hizoelmuerto,conlosojosbiencerradosylaspatastiesas.Entoncesloschicosseaburrieron,lodejaronenlagaleríaycorrieronapedirlesasus

padresquelescompraranunmonotití.Sinperderun segundo, el sinsonte seacercóaManuelitaypicoteóypicoteóelhilo

hastadejarlaenlibertad.Losdosescaparondelacasa,unovolandoylaotracaminandotodoloquelepermitían

suságilespatas.Llegaron sin aliento pero felices, a tiempo para ver bien abierta la flor morada del

cacto.Yentonceselsinsontecantódivinamente,comoessucostumbre,yManuelitabailóun

pocoaunquenofuerasucostumbre,peroporalgoseempieza¿no?

50

51

LA INFANTA

staeslaInfantaMargarita,unaprincesaespañolaquevivepintadaenuncuadrodesdehacemásdetrescientosaños.La Infanta, o princesa, como ustedes quieran, se aburrió de estar siempre quieta y

pintadamientrastodoelmundolamira,laadmiraylare-retrata.Así,porlossiglosdelossiglos.Porotraparte,elcuadroestállenodegente:susmeninasodamasdehonor,suspadres

losreyesmirandodesdeunespejo,dosenanos,unamonja,unsirviente,elmariscaldelpalacio, un perro, y hasta elmismísimo pintor donDiegoVelázquez y su descomunalcaballete.Esmuchoparaunachica.Tantotiemposinvisitarotroscastillos,sinbailar,sincharlar

consusprimos,sinjugaralaperinola,sincomerunbocadillodechorizo.¡Quéopio!Poreso,unatarde,aprovechandoqueelMuseodelPradoestátranquilo,saledespacito

delmarcoysevaapasear.Tienequecaminardeperfil,porque la faldadesuvestidomidecomodosmetrosde

ancho,pareceunmostrador.¡Asíeralamodaantigua,almenosparalosricos!Salealacalleynollamalaatención.Primero,porqueesedíajuegaelRealMadridy

estátodoelmundoenelestadiooenlacasaviendolatele.Ysegundo,porqueenlosdíasactualesmuchagenteparecedisfrazadaycomosalidade

uncuadro.Peroalaniñasíquetodolellamalaatenciónylaasusta.Casastanaltas,máquinastan

ruidosas,callestananchas,unsolazotanfuerte.Esverdadqueensustiemposnosalíademasiadoalacalle.Delpalacioalacarrozay

delacarrozaalaiglesiaydelaiglesiaaotropalacio.Ytodos lehacíanreverencias,ysuspadrespagabana titiriterosysaltimbanquispara

queladivirtieran.Ycatorceservidorasyveintisietecriadaslavestíanylapeinabancadamañana,durante

variashoras.Yrezo,muchorezo,cataratasderezosyrosarios.Algúnconciertoquedurabatambién

52

muchas horas, y también horas y horas de bordado y lecciones de baile: una danzabastantepavotallamadagavota.Noleresultafácilcaminarconsuszapatitosderaso,despuésdetantotiempodevivir

pintada.¡Yelvientoqueladespeina,ynadiequelaacompaña!Andandoandando,bastanteacalambrada, llegaalParquedelRetiroysesientaenun

bancoatomaraire.—¡Uf!—suspira—.¡Quésuertequemelibrédeesaspesadasdemismeninas!Ahora

me gustaría que llegara un príncipe, pidiera mi mano, nos casáramos dentro de unosañitosynosfuéramosdelunademielaVillatuertadelCalabacete.Justoenesemomentovioqueseacercabaunapersonamuypetisita.—Yasé—seilusionólaInfanta—,éstaesunaranaencantadayencuantolehablese

va a convertir en un príncipe chueco, de rizos tirabuzones, con capa de chinchilla ysombreroconplumasdepavoreal.—Manuelita,presente.—¿Cómodices?—preguntalaInfanta,quenodistingueranadetortuga.—Presente,dije.—¿Estásencantada?—EncantadísimadehabervenidoaMadrid.—Encantadaquieredecirembrujada.Queerasunpríncipeyunabrujateconvirtióen...

eso.—No,nuncafuipríncipe,siemprefuitortuga.—¿Yporquéhasvenido?—MediounbrotedecholulismoyquiseveralosReyesdeEspaña.PuesyosoylaInfantaMargarita,hijadelosreyes.—Claro,perodelosreyesdeantes,yoqueríaveralosreyesdeahora.—Eresmuyatrevida—dicelaInfanta,alzandoaManuelitaysentándolasobresufalda

—perosiaprendesahacerreverencias,tepresentaréasusmajestades,mispadres.—¿JuanCarlosySofía?—No,micielo,noséquiénessonésos.

53

Manuelitaestá felizyobservaque los rubiospelosde laprincesitadespidenuna luz

54

muybrillante,quesonunverdaderosolqueiluminalassombrasdelparque.Sentadamuycómodasobreelvestido-mostradorderaso,sientequelaInfantalerascalacabeza.—¡ViveDios,notienespelo!—ledice.—Nadieesperfecto—lecontestaManuelita.—Calva,peroconmuchoingenioparaserunasimplerana.—¡Cómorana!¡Soytortuga!¿Cuántasvecestengoquerepetírtelo?—Tortugaoloqueseas,debestratarmedealteza.—Estábien,alteza—resoplóManuelita—.Vineaveralosreyes,aunqueseadelejos.—Lespedirépermisoparallevartealcuadro...,digo,alpalacio.—Gracias,peromeparecequetuspadresnosonlosreyesquevienlatele.—¿Enlatequé?—Latelevisión.—¡Cáspita!¿Yquéeseso?—Esunaparatodondesevedetodo,todoeltiempo.—¡Esoesmagia,porlotantoespecado!Ysimeestásmintiendo,tambiénespecado

—dicelaInfantaysesantiguatresveces.—Yonomiento.Desdechiquitameenseñaronanomentir.—¿Enquéconventoteenseñaron?—Enninguno,enmicasaenPehuajó.—¿Peguaqué?Podían haber seguido charlando todo el día, pero se oyeron sirenas, campanillas del

camión de los bomberos, pitos de la policía, chicos que gritaban, hombres que dabanórdenes,ladridosdeperrosdetectives.Comopodránimaginar,encuantounguardiadelmuseodescubrióladesaparicióndela

Infanta,sonaronlasalarmasysemovilizóhastaelejércitoparairarescatarla.El mundo entero ya lo sabe, está alertada la Interpol. ¡Hasta se interrumpió la

transmisióndelpartidoparadarlanoticiaporlaradio!Manuelita ve con espanto que por un sendero del parque avanza el malón de los

Ranqueteles,levantandopolvaredaysindejaryuyosano,mientraslospájarosescapanenbandada.La Infanta yManuelita no tienen tiempo de esconderse, las atacan los Ranqueteles

cegándolasconsusflashesymetiéndolesmicrófonosenlasnarices,preguntandotodosalavez,comoessucostumbreenelmundoentero.AtrásvieneunbatallóndelaGuardiaCivily,abriéndosepasocomopuede,eldirector

delmuseo,jadeando,despeinadoyconlosojoscomopelotasdetenis.LevantadelicadamentealaInfanta,mientrasunamaquilladoralapeinaconeldedoy

laGuardiaCivilrepartepatadasypalosaperiodistasycuriosos.

55

Alfinconsiguenmeteralaprincesaenunacarroza,porquesilasubenaunautopuedemorirsedelsusto,oloqueespeor,despintarse.La Infanta Margarita no quiere desprenderse de Manuelita y la esconde entre sus

muchostraposdesedabordada.Entranenelmuseoenpuntasdepie,y conmuchomiramientovuelvenaponer a la

Infanta en el cuadro, cuidando de que quede exactamente en el mismo lugar y en lamismapose.EnellíonadiesedacuentadequeManuelitaresbalaporlasedaysecae–pataspara

abajo, por suerte– y va a parar al lado del perro, en la mismísima mitad inferior delcuadro.Pero¡ay!Manuelita tambiénquedapintada,quietayresignadaapasarasí trescientos

añosomás,yparacolmo,alladodeeseperropulguiento.EsciertoquefigurarenLasMeninasesungranhonor,pero...¿Peroqué?Nada,¡quéopio!

56

57

LA FUGA

steesotravezelfamosocuadroLasMeninas,conunpersonajitocoladoqueelseñorVelázqueznuncapusoahí.Elpintorlomiraunpoquitodereojo,creyendoquesehavueltoloco.Depronto,seproduceunsilencioimpresionante.Eldirectordelmuseo,conlacorbataenlanuca,hacemilreverenciasporqueacabande

entrar Juan Carlos y Sofía, los mismísimos Reyes de España en persona que se hanenteradodelescandaleteyvienenaversitodoestáenordenenlacélebrepintura.Manuelitaalmenospuedeverlosdecerca,peroconlosnervios,nilosreyesninadie

reparanqueenelcuadrohayunpersonajedemás,unatortugadeIndias.Al finsevan todos,ydejandecustodiaaunadocenadeguardiasantiguos,armados

conballestasyarcabuces.Entonces,enelsilenciodelanochemadrileña,Manuelitaoyepasos.—Quevengaalguien,aunqueseaNifúNifá,asacarmedeaquí.¡Noquieropasarmela

vidapintada!—piensa.Apareceunchicodeunosseisaños,tambiénantiguoél,conmediasdeseda,zapatosde

charolyunchalecodeterciopeloconbotonesdepiedraspreciosas.¡Yunaenormepelucablancaconcoletaymoño!—¡Zas!—piensaManuelita—.Seguro que éste se escapó de otro cuadro, porque es

muychicoparaestarenunabandaderock.—Noninóninoní—diceelniño.Ycomolosferocesguardianesnodanseñasdeverlonioírlo,Manuelitasuponequese

tratadeunduende.Yasídebedeser,porqueleadivinaelpensamiento.EntoncesManuelitapiensa:—Llevámedeaquí.—Veré,veremos,veriola—diceelniñoduende.—¿Quéduendesos?—piensaManuelita.—ElMozartín—contestaconunareverenciayhaciendopitocatalán.Despuéshacemilpiruetasysacadelbolsillounpianitodecristalplegadizo,loarmay

58

se pone a tocar una canción,muy bajito para no despertar a los guardianes, a los quedurmióconunpasemágico,ahoraestáclaro.Los guardias parecen estatuas, todos en posición de firme, las armas en la mano y

dormidoscomomarmotas.¡Ja!El duendebaila y salta, juega con las armasde los vigilantes, apuntandoy diciendo

¡pumalatesta!Después les grita palabrotas a los personajes del cuadro y les dedica reverencias al

revés,mostrándoleselculitoatodos,unoporuno.Canta en italiano, en alemán y en un idioma inventado, payasea por toda la sala,

caminaunratoconlasmanosydespuéssesientaenelsueloaseguirtocandosupiano,concaradeYonofuíydequeallínopasónada.LamúsicaledaaManuelitaunaespeciedemareo,sientequeestásoñandodespierta,y

queenelsueñoviajaporelaireysevamuylejos.Lejoslejoslejos.Tambiénporelagua,enunsubmarinodepuramúsica.

59

60

EL BOSQUE

steeselbosquedeMischiffin,unlugarpocovisitadodelaRepúblicadeIrlanda.Plantasyhabitantescambiandeformaydecolortodoeltiempo.¡Quémareo!Aquíabundanlaspiñasylascastañas,nosóloenlosárbolessinolasquesepeganlos

duendes.Irlandaeslapatriadecasitodosellos,perocadavezquesejuntan,sonamos.Sepelean.

¿Porquésepelearántanto?Pregúntenlesaloschicos.El hadaVirulana es la directora del bosque, tiene su escritorio en la horqueta de un

roble.Esaltaybellísima,perocalvacomounhuevoyconorejasdechanchaaambosladosdelhuevo,enlugardesusorejitasdenácar.Estáseguradequeambastravesurasselasdebeadosduendesquebienconoce.Pide

socorroporelteléfonocelular,anotandosusnombresenlaplanilladeamonestaciones.No puede recuperar sus orejas ni su larga cabellera pelirroja porque el service del

bosqueestáatoradosolucionandootrosdesmanescometidosporesosdospillos,quealfinsepresentanporseparado.ElMozartín,encuantovioasucompincheNifúNifá,sequitólapelucayelchalecoy

lospusoenelsuelo.NifúNifádepositóunajaulaconunpajarito,sequitólalevita,yambosseescupieron

lasmanos.Patada va, trompada viene, ruedan tirándose de los pelos, mordiéndose las orejas y

pellizcándoselasnarices.Es inútil queVirulana haga sonar su silbato para llamarlos al orden, así que decide

vengarse,secuestrándoleselpajaritoylapeluca.Aprovecha la ocasión cuando los dos acaban por hacerse pomada y se caen

desmayadosenelpasto.Elhadaabre la jaulay liberaaunsinsonte,queen lugardeescaparse leposaenel

hombroylecantasuspenasenlaorejitadechancha.Seacercaalapelucayve¡oh!queempiezaamoverse,comosihubieragatoencerrado.La peluca se ladea y debajo aparece una cabecita vivaracha, que la saluda con voz

61

cantarina:—Manuelita,presente.El sinsonte, como ustedes imaginarán, es el mismo que conocimos en México.

ReconoceaManuelitaylosdosserepartenbesos,cariciasymimosvarios.Entonces Nifú Nifá y elMozartín se despabilan y corren a arrebatarle sus presas a

Virulana.—¡Esatartarugaesmíamíamía!—¡Yesesinsonteesmíomíomío!—¡Pajaróncopión,quesilbaunacanciónmíamíamía!—¡Nomehagasreír,lacopionaserátuabuelita!—¡Pumalatesta!¡Pumalagamba!Ladiscusiónyeltironeoconelhadaduranunbuenratoyelescandaleteatraeatodos

losvecinos,queaparecenenlosárboles.Son trols, pomberos, befanas, ñomos y ñomas, brujas, cronopios, pinochos, titanias,

goblins, cachirúesyhasta la famosaChanchaconcadenas,oriundadeRíoCuarto,queestáencantadaconsusorejitasdenácar.ElhadaVirulana,conManuelitaensusmanosyelsinsonteenelhombro,leshabladulcementealosduendespeleadores:—Les devolveré estas criaturas robadas cuando ustedes me devuelvan mi cabellera

pelirrojalargahastaelsueloymisorejitasdenácar,tambiénrobadas.—¡Ah,no!—dicelaChanchaconcadenas.—¡Jamás!—diceNifúNifá—¡Jamás!—diceelMozartín.Tenía razón aquelAlerce que le dijo aManuelita que los duendes eran una gentuza

peligrosa.ElhadaVirulanadepositaaManuelitayal sinsontealpiedeunárbolyarrancauna

varapinchuda.Justocuando losvaa castigar, apareceelduende-jefe,unancianoviejísimo,depelo

multicoloryvinchaconluciérnagas.VisteunatúnicahechadetrébolesdeterciopeloysetratanadamenosquedelGranCuchulain.Espersonajedemuchaautoridad,porquelosotrossecalman,aunquenomucho.EntoncesCuchulainsesientaenuncráneodebisonteydescuelgadeunárbolunarpa

irlandesa.Esunarpadepobres,mide lamitadde laqueconocimoshacemuchoenunhospitalenSuiza.Perotieneefectosmágicos.Cuchulaincantaytocaunaviejacanciónduendil,queresuenaentodoelbosque,como

si él guardara un micrófono en un trébol y hubiera amplificadores escondidos en losárboles.Comotodoloqueaquísucede,escosademagia.

62

Cómo será de impresionante la letra de esa canción, quemuchos bromistas bajan lacabezayhacenpucheros.Porsupuesto,todosconcarasdeYonofuí.Entonces Nifú Nifá, caminando para atrás, va a un pozo y saca la larga cabellera

pelirrojadeVirulana,yseladevuelve.ElMozartín,concaradesantito,lequitalasorejasalachancha,querezongafuriosa,y

selasreimplantaalhada.Virulana aprovecha para sonreír precisamente de oreja a oreja. Y por tratar de

mirárselasledaunataquedebizqueragrave.Nifú y el Mozartín desaparecen tras un árbol y al segundo vuelven vestidos de

escoceses,tocandolagaita.Elpúblicosedescuelgadelosárbolesy,yaquehaymúsica,bailantodos.Manuelitayelsinsonteaprovechanlaconfusiónysevan,charlaquetecharla.Antesdeamanecer,elsinsonteseirávolando,yaquepuede.YManuelita se encerrará adormir suponiendoque, como lehapasado tantasveces,

amaneceráenotraparte.

63

LOS ESQUELETOS

staeslaorilladeunlagomuygrande,rodeadodemontañas.Nosesabesiesdedíaodenoche,siesayeropasadomañana.Deprontoseoyeunhorribleconciertodehuesosqueseentrechocan.¿Qué cuernos hacen aquí estos horribles esqueletos que parece que van a una

manifestaciónovienendelaguerra?Loshuesudosmarchanyhacenejerciciosbrutos,saltanysegolpean.¡Cuerpoatierra!

¡Pasodeganso!¡Fir...mes!Andanconlaspatasylosbrazosduroscomogarrotes.Dalequedale.Algunossedescoyuntan.Otrospierdenlacabeza,esdecir,lacalavera,quesalerodandocomopelota.Manuelitasedespiertayasoma,muertadecuriosidad.—Pobregente,se lesfuelamanoconlasdietasparaadelgazar—piensa—yencima

hacengimnasia.Su amigo el sinsonte ya se ha ido. ¡Qué lástima! A él le hubieran encantado los

esqueletos,porqueenMéxicohaymuchacalaveradejuguete,yhastadeazúcar.Manuelitaesperavolveraverasucompincheyseponeacaminar,bastantemolesta

porquelosesqueletoslarodeancongestosamenazadoresymetiendocadavezmásruidoconsushuesos.Esunconciertodemaracaslocas.Dos esqueletitos se apartan del grupo y se lamentan de su triste vida, ya que no

consiguenasustaranadie.—Probemosotraperrería—dicen.Manuelitasigueandandohaciaellago,dondepiensaremojarse,perosaledelaguaun

monstruoespantoso,dedoscabezas,queechafuegoporunatrompayyogurporlaotra.Rugecomoveintehelicópteros,yparacolmollevauntiburónensartadoenlacola.Losesqueletosescapanaltrote,asustadísimos,ysederrumbanenunmatorral.Losdosesqueletitossequedanmástristestodavía,porelfracasodelasegundabroma.

64

Entonces,alverlostanjuntosyconspirando,Manuelitaseaviva.

65

—Claro,sonellosotravez,NifúNifáyelMozartín.Porlovistosehanamigado.Memudaron de país mientras dormía, pero no llegué demasiado lejos. Esto debe de serEscocia.Mientras tanto, elmonstruo sigue chapoteando en el lago para llamar la atención, y

levantaolasdetresmetros,depuraespuma,comosiseestuvierabañandoconchampú.—¡Ja!—diceManuelita—.¡QuierenasustarmeconelfamosomonstruodellagoNess!

¡Amamá!Siyomemoríaporconocerlo.Yaviunavezalotromonstruo,elNahuelitodeBariloche.Viendoqueno la asustannimedio, los esqueletitos se transformanotravez enNifú

Nifá y el Mozartín, pero se encasquetan además grandes sombreros bicorniosemplumados,paraparecerseaSanMartínyaBolívar.¡Ojo!Manuelitayafuecazadadentrodeunsombreromexicanoydeunapeluca.Poreso,cuandosequitanlossombrerotesparahacerlereverencias,ellaestáenguardia

y,sinachicarse,dice:—Manuelita,presente.—¡Quécasualidad!—dicenellos.—¡Llévenmedeaquí!—ordenaManuelita.—Comogustes,princesa—lecontestan.El monstruo de Loch Ness termina su baño, se seca con una toallita y después se

sumerge,muyamargadoporsufracaso.Entonces aparece en el cielo un dirigible de propaganda de la colonia para bebés

Babypuf.Aterriza en la orilla, serenito, serenito, con una beba narigona pintada enmitad del

globo.NifúNifáyelMozartínlainvitanaembarcarse,muycariñosos.—Márchateadondequieras.—Austedesnolestengoconfianza—diceManuelita.—Ésteesunfalluto,peroenmípuedesconfiaraciegas.—¡Porfavor!—diceelMozartín,concaradeYonofuí—.¡Tantasvecesmeconfunden

conunángel!—Nopodrásconfiarenesteangelitopiojoso—legritaNifúNifá—,porquelovoya

reducircomoenunabatidora.¡MarcheunagelatinadeMozartín,saleconfritas!—¡Calla,cacahuetecacofónico!—lecontestaelMozartín.Ysetrenzanconpasesdekungfu,yruedancomounabolademasacote.¡Otravez,québarbaridad!Otravezeltorneodeartesmarciales.¡Quépesados!Ymientras se peganpatadasy trompis,Manuelita sube a la cabinade la nave.Y el

dirigibleseelevatranquilamentesobreellagoNessysumonstruoNessy,queasomapara

66

saludar,sacudiendolatoallita.Losduendesinterrumpenlapeleaparadecirleadiósrevoleandosussombreros,delos

quesalendosardillas.Manuelita está contenta de haber visitado esos países llenos de duendes, hadas,

monstruos,esqueletosyotrosefectosespeciales.Peroyaestábien,almenosporesteaño.¡Aotracosa,mariposa!

67

LA BALSA

staeslaorilladeunlagograndecomounpaís,rodeadodemontañas.No,noeselmismodeantes,ésteesmuydistinto.Esellagomásaltodelmundoyse

llamaTiticaca.NoquedaenEscociasinoentreBoliviayPerú,enmediodelosAndes.Ynadiehadichohastaahoraqueenélasomeningúnmonstruo.¡Nohaymonstruoque

puedarespiraracuatromilmetrosdealtura,salvoalgúndragoncitodeplástico!En la orilla está la familiaUrubamba, construyendounabalsa de totora.Trabajan el

padre,lamadreyloschicos,quesonocho.Labalsaserásucasa,yvanavivirenelagua.Enlaorillahayotragentequenohacenada,esdecir,quesólomiracómoestafamilia

trabaja.Sonturistasyesperanquelabalsaestéterminadaparadarunpaseoporellago.Regateanmuchoconlafamiliaparaconseguirelviajebaratito.¡Ja!Elmenor de los Urubamba les vende chucherías, pero nadamás. ¡La balsa no será

ningúncolectivo!Ningúnextrañoserárecibidoabordo.¡Faltabamás!Porfinlaterminanyentretodoslaempujanhastaelagua.Unquirquinchoqueestabaensucuevaapareceacuriosear,creyendopasadoelpeligro.

Temía que lo cazaran, lo comieran asado y después hicieran un charango con sucaparazón.LachicamayordelosUrubambalotienebienfichado.Yde repente, todo elmundo se pone amirar una cosa rara que aparece en el cielo.

¿Seráunovni?Elquirquinchoarrugalosojosporqueelsollociegaynohatraídolosanteojosnegros.Losturistasempuñantodaclasedebinocularesyseñalanconeldedohastaqueseles

acalambranlosbrazosyparecencactos.Enterados de inmediato del extraño suceso, ¿quiénes creen que aparecen levantando

polvareda?¡ElmalóndelosRanqueteles!¡Revoleancámarasyhacenviborearloscablespegandochicotazos!Atropellanaungrupodevendedorasdeyuyosqueestánsentaditasenelsuelo,y las

pobressecaenparaatrás,mostrandosusenaguasdemilcoloresmientrasgritantodaclasedemaldicionesensulenguaindígena.Aprovechando la confusión, la chica mayor de los Urubamba, en lo que dura un

68

pestañeo,cazaelquirquinchoporlacolayloescondebajosuponcho.¡Pobrebicho!Lamuerdey la rasguña,peronohaycaso.Gana lachica,que lo tiene

bienapretado,comounpaquete.Ymiraparaarriba,ellatambiénconcaradeYonofuí.¿Quéesesoqueflotaenelcielocomoungranmelón?¡EselzeppelindepropagandadelacoloniaparabebésBabypuf,señores!Acuatizaserenito,serenito,yentoncessevemuyclaraalabebanarigonapintadaenel

globo.Lacabina,queesunaespeciedecanasta,acariciaelaguaduranteunrato,perodespués

soplaunventarrónyeldirigibleseelevaotravezydesapareceentrelascumbresnevadasdelosAndes.Todossequedanconlabocaabiertayelbrazolevantado.¿Quéhavenidoahacerestanaveenestecieloysobreestelago?¿Solamenteapasar

unavisodecoloniaparabebés?LosUrubamba,entretenidosenacomodarsubalsa,noentiendennada,perodesconfían.

Nosabensieseraroartefactoesdemalagüeroovaatraerlessuerte.Ysalenanavegar,muycontentostodos,menoselquirquincho,quedice:—¡Soné!Ymásvoyasonardemuerto.Estomepasapormirarparaarribacomoun

bobo.Lamayordelafamilialodepositaenelpisodelabalsa,haciéndoselasorprendida:—¡Ooiiiaaa!¡Unpeludo!Ydeprontooyenunavozcantarinaquedice:—Manuelita,presente.Eldirigible la llevóhastaelTiticaca,nadó, se trepóa labalsay saludó, segúnes su

costumbre.ElseñorUrubambalamirafijo,comocomiéndolaconlosojos.

69

Noesquelafamiliatengahambre,perosíganasdecomer.

70

Manuelitasearrimaalquirquinchoysequedanlosdosmuyjuntitos,paradarsecorajeanteelpeligro.La familia nunca conoció animales que hablaran, pero saben que en los cuentos los

animaleshablanhastaporloscodos.LaseñoraUrubambaseabrepasoaojotazosentresushijosydespuésdeunratolargo

dice:—Estosanimalitossenoshancolado,nosécómo.Susfamiliassonmuyantiguassobre

la Tierra, como las nuestras. Los dos nos traerán suerte en nuestra balsa nueva.Bienvenidasalagua,criaturasconcorazas.Envezdecomerlas,porahoralesvamosadardecomer.Después,severá.PalabrasantaladelamamáUrubamba,nadiechistaniseretoba.Losochohijos,concaradefallutos,acaricianalosanimalitosyprometencuidarlos.Así fuecomoManuelitapasóunosdíasdedescanso,navegandoen familia,pero los

chicos,comolosduendes,nosondeconfiar.Hanempezadoajugarconellosalapelota.—¿Vinisteeneldirigible?—lepreguntaelquirquinchoenunintervalodeljuego.—Sí,perometrajoelvientosinsaberadónde.—Tetrajodondeencontraríasunamigo,quesoyyo.—Entonceselviajevaliólapena—diceManuelita.Peroesasvacacionessontantranquilascomopeligrosas.Elquirquinchoextrañasucuevayasufamilia.Manuelitaprefiereseguirviajando,le

quedanmuchascosasporaprender.Decidenescapar,yunanoche sedeslizanal agua.Manuelita remolcaalquirquincho

llevándoloconlabocaporlacola.¡Flordeesfuerzo!,comopodránimaginar.Lleganalaorillasanitosysalvos,peroahoraelquirquinchotrepaconsusfuertesuñas

yremolcaaManuelitacuestaarriba.Se van caminando hasta la parada del ómnibus, mientras se cuentan muchísimos

cuentos,cuentosdesusantepasadoscascarudos.Manuelitahavisitadounlugarquenofigurabaensusplanes,peroestáchochaporque

nadóenellagoTiticaca,elmásaltodelmundo,yencontróunamigoíntimoparatodalavida.El quirquincho se va a dormir a su cueva, y Manuelita se esconde enterita en su

caparazón, dispuesta a dormir bajo las estrellas, que desde el Titicaca se ven comodiamantesdecollardegiganta,enormesytemblorosos.Ysueñaquellegaelómnibusyellasubeentrelosindígenascargadosdecanastasyuna

queotragallina,ysevasevaseva.

71

72

EL GRAN PANDA

stas son dos bicicletas recostadas en una típica esquina de la China, en Pekín,mejordicho,Beijing.Alláatrás,muylejos,puedeverselaGranMuralla.Mientras esperana susdueños, lasbicicletas charlanenbiciclés.Da la impresiónde

queestántramandoalgoraro.—Alahoraenquelalunaestémadura—diceuna.—¿Esciertoquenosvanapintardedorado?—Siemprequecorramoscomogacelasperseguidas.—Sinpararhastalafronterayllevandomuchacarga,compañera.JustoenesemomentolosprofesoresChonkinsalendesucasa,conataditosdelibros.

Tienenmuchosañosentrelosdos,vistenalaantiguayusanlentes.Lasbicicletascallan,seponenderechitasyacomodansuspedales.La pareja sale pedaleando despacito y se mete por una avenida donde hay un

impresionantetráficodebicicletas.Másomenos700.000personasquevanal trabajooa laUniversidad.Vanovienen,

todosembarulladosychocandoencadaesquinachina.LosancianosChonkindoblanporunacalletranquila,conabedulesypalacios.De pronto ven a una persona petisita que hace dedo. Se detienen y oyen una voz

cantarinaquedice:—Manuelita,presente.Elprofesorlepregunta,inclinándosecondificultad:—¿Quieresqueteacerquemosaltortugario,sabiacriaturadelatierra?—Noséandarenbicicleta,venerableanciano.—Podemosllevarteenlacestadeloslibros—ofrecelaseñoraChonkin.—Gracias,megustaríaviajarconlibros,amableseñora.—NosotrosvamosalZoológico.—¡Quécasualidad!Yotambién—diceManuelita.Las bicicletas resoplan malhumoradas, y la profesora coloca a Manuelita sobre el

manubrio,entrelibrosyflores.¡Ja!

73

Cuando llegan al portal del Zoológico, guardias y veterinarios los reciben muyagitados,abanicándoseorevoleandosombrillitas.Cadaguardiallevaunamáscaraoantifazquerepresentaalanimalquetieneasucargo.

Eldisfrazadodepandalloraamocosuelto.Encambiohaydosguardiasqueseríendetrásdesuscaretasdemandriles.ManuelitaseenteradequelosancianossonlosdirectoresdelZoológico.¿Quépasa?¿Porquéhaytantodrama?Y las bicicletas no se quedan a la entrada, siguen por su cuenta, haciendo eses, con

carasdesospechosas.SeencaminantodosalparquedelpalaciodondeviveelGranPandaYuYiTo.—¡Senosmuere,camaradasprofesoresChonkin!ElGranPandaestápanzaarriba,conlaspatastiesasylosojoscerrados.

74

Manuelitaseacercaparaverlomejory¡oh!YuYiToleguiñaunojo.

75

Losprofesoresloauscultan,letomanelpulso,leclavanagujas,lelevantanloslabios.Elmoribundoestávivitoycoleando,peronoresponde.Los ancianos deciden consultar a especialistas de provincia, y se van a laDirección

paradeliberaryhablarporteléfono.Manuelitaoyealosguardias-mandrilesquesesecreteanyhacenmorisquetas,mientras

toqueteanlasbicicletas.Estanoche,cuandolalunaestémadura,vanarobaraYuYiToyasacarlodisfrazado

defardodebambúes,conlacomplicidaddelasbicissobornadas.ElGranPandalosospecha,porquenotieneunpelodezonzo,yporquelosguardiasle

haninyectadoquietilina,unasustanciaparalizante.EntoncesManuelitalehablaaloído:—YuYiToquerido,tevanasecuestraryallevaralafrontera.—¿Cómolosabes?—preguntaelPandahablandoporlacomisuradelatrompa.—Losé,punto.Vanallevartealafronterayavenderteauncontrabandistadeespecies

enextinción.—¡Ayayay,mamitamía!Seguroqueacaboenuncirco.—¡Nolopermitiremos!Manuelita trota hasta laDirección ymordisquea los dedos gordos de los profesores,

queusansandalias.—¿Quépasa,sabiahijadelasolasylossurcos?Manuelitalesexplicalahorriblenovedad.—¿Robar a Yu Yi To? ¡No es posible! ¡Sería una verdadera catástrofe para la

República!—Yparaél,nolesdigonada.Catástrofeymedia.—Pensábamos que sólo sufría de un gravísimo estrés, causado por los turistas y el

rumordelvientoentrelosbambúes.Losprofesores, losveterinariosy losguardias fielesorganizanunoperativoparaesa

noche,cuandolaLunaestémadura.PescaránalosladronesconlasmanosenelPanda.Alertanalapolicíaydespuéssedisfrazandebúhosyatraviesanenpuntasdepielas

sombrasdelparquedelGranPanda.Los ladroneshanpuestouna tabla sobre las dosbicicletas, y sobre la tabla un fardo

enormederamasdebambú.—¡Altoahí,ennombredetodoslosniñoschinos!—gritanlosbúhosyenciendensus

linternas.Los ladrones dejan caer el bulto y las bicicletas se van al traste, desarmándose, un

guardabarrosporallí,unacadenaporallá.

76

La policía y el personal del Zoológico, que suman como 123.000 personas, másManuelita,rodeanalosmalhechoresylesponenesposas,candados,cadenasymáscarasdeescuerzos.Elfardodebambúruedayruedadeshaciéndose,yvenalpobrePandadopadoyhecho

unabola,queruedatambiénhastachocarconunárbolydespertarse,porlovistopasadoelefectodelaquietilina.Aprovechaparamordisquearunabuenameriendadebrotesdebambú.Losladronessoncondenadosacuarentaañosdetrabajosforzados:deberánbordartres

millones de carpetas de seda y fabricar a mano seis millones de zapatillas de fieltroadornadasconlentejuelas.Lasbicicletas soncondenadasa ser trituradas, recicladasy convertidas enbandejitas

baratas,¡nadadedorados,faltabamás!ManuelitasequedaelrestodelanocheaacompañarasuamigoYuYiTo.Secuentan

cuentosydespuésseduermenyroncanysueñan,hastaque lospajaritos losdespiertansilbandoenpequinés.

77

78

LA OLA

staesunaOlallenadeespumaquetraeaveceselmar,enlacostadelJapón.EsunaOla famosa, se llamaOladeHokusai,ydetrásdeella siempre seve lacima

nevadadelvolcánFujiyama.Un día la Ola pensó que estaba cansada de recalar en la playa, y quiso conocer la

ciudad.Lucirse,depaso,yaqueeratanhermosaytancélebre.Ysefuerodando,ellasolita,porcalles,pueblosyplazas.Salpicabaalagentegrande,

que se enojaba, pero se hizo amiga de unos cuantos chicos que llegaron a la escuelaempapadosyretorciéndosederisa.LaOla,rodandoyrodando,llegóalfinaTokio,yahíseasustóysesintióperdidaentre

tantospeatones,torres,autosylucesdecolores.Entoncesvioqueenunaplazahabíaunafuenteconcascada,yahísequedóunrato,

luciendocomounabanicodepuntillas.Notóqueunapersonapetisitasemetíaentresusespumaspararefrescarse,yoyóuna

vozcantarinaqueledijo:—Manuelita,presente.—Remójate,hijamía.Ysitienesbuenavista,allálejossobremiscurvasveráslacima

delFujiyama.—Yameparecíaqueeras laOladeHokusai.Unavezvi tu foto.Perono sabíaque

viajabasyhablabas.—Igualquetú,Manuelita-San.Manuelita tenía que hacer algo muy importante en Tokio, y la Ola decidió

acompañarla.No les resultó fácil cruzar las calles y esquivar el tráfico, pero nadie se asombró de

verlas porque todo el mundomiraba un partido en sus minitelevisores de pulsera, sindejardecaminaromanejar.AlfinllegaronallaboratorioMichigato,dondeManuelitadebíarealizarseunadelicada

operación.(¡No,nosetratadecirugíaestética!¡Alpiste,perdiste!)

79

LaOladeHokusaisequedóaesperarlaenotrafuentedelparque.

80

En el laboratorio, cuyas paredes estaban cubiertas del piso al techo con monitores,consolasybotonerasde todaespecie,Manuelitafuerecibidaconmuchosaspavientosyatendidaporvariosrobots.La alzaron hasta una especie de camita rodeada de aparatos y espejos, y llegó un

especialistaconpintadecirujano,elingenieroShuniroMichigatoenpersona.Sinperdertiempo,medianteunafinísimaagujaláser,extrajodelcaparazónunobjeto

casiinvisible.Vistoconmicroscopioparecíaunalfiler.—¿Saliótodobien?—preguntóManuelita.—¡Esunodelosgrandestriunfosdelaelectrónica,Manuelita-San!Mañanadaremos

unafiestaentuhonoryrevelaremosalmundoenteroestesecreto.—¿Puedoinvitaraunaamiga?—Atodaslasquequieras.Manuelitafueasufiesta,dondetodoslehicieronreverenciasytambiénasuamiga,la

Ola de Hokusai, a quien le ofrecieron como asiento una gigantesca palangana deporcelanallenadeaguasalada.Estabanpresentestodaslasgrandespersonalidadesdelaciencia,latécnica,elarte,la

zoologíayelcine,vestidosconsustrajestípicos.Sesentaronenalmohadonesenelparque,delantedeunapantalladecuatropisosde

alturaymediacuadradeancho.ElingenieroShuniroMichigatodiocomienzoalavideoceremonia.Elpúblicoviomuy

ampliadasvariaspartesdeldocumentalquehabíafilmadoManuelita-San.¿Selohabíanimaginado?¡Ja!Todofuegrabadoenunminimicrochipquellevabaincrustadoenelcaparazón.ConteníaunmicrocircuitoquetransmitíaalaterminalMichigatotodoloregistradopor

Manuelita.En Tokio iba a ser reprocesado y ampliado y difundido electrónicamente a todo el

mundoquequisieraverlo.Unnuevoalfilerelectrónico le fue injertadoaManuelita, sinanestesianidolorysin

quenadielonotara,alfinaldelaceremonia.Entonceshubobailesconkimonos,sombrillas,marionetas,ymuchotangoenhonorde

lavisitante.Elpúblicoaplaudióa rabiar,peroManuelitaestabanerviosapensandoque laOlaya

estaríamuyacalorada.Entoncesescapóentrelospiesdelpúblico,saltandosobreloscablesdelosRanqueteles

nipones.LlegóalafuenteycomprobóquelaOlaestabamuyimpaciente.—¿Meacompañashastaelmar,venerableOla?

81

—Paramíseráunhonor,Manuelita-San.—Teguardaréenmiaccesorioelectrónicoparaqueloschicosteconozcan.—LescontarásquehacedoscientosañosmeretratóelfamosopintorHokusai.—Yveránqueestássiemprejovenybellísima.—Igualquetú,Manuelita-San,tataranietadelhonorablegliptodonte.Yseencaminaronhaciaelmar,charlandoycantando.AllísedespidióManuelitadesunuevaamiga,quesemezclóconsusotrashermanas

olas.Todaseranhermosasyjuguetonas,peroningunamostrabaelFujiyamaalfondodesu

vestidodeespuma.Manuelitalacontemplóunrato,pensandoquelaibaaextrañar.DespuésseencaminóalaeropuertodeNarita,paracolarsecomopolizónenunavión

quelallevaraderegresoasuspagos,porquetambiénlosempezabaaextrañar.

82

83

84

EL REGRESO

steeselPlanetariodelaciudaddeBuenosAires.Devariosómnibushanbajadomuchoschicosparavisitarlo.AlfrentedeellosestánuestraamigaMarlene,quehasidonombradaDirectoraGeneral

dePacienciaPreescolardelaciudaddeMardelPlata.Todosloschicosysusmaestrasestáncomiendoalfajoreshastareventar.Precisamente,

elfabricantedeestasgolosinaslosinvitóarealizarunaexcursiónalaCapital.Terminan de masticar, tiran los papeles hasta llenar tres cestas y organizan la fila

agarrándosedelosdelantalesenchocolatados.Unavezdentrodelplanetario,serecuestantodosenlasbutacas,dispuestosaapreciar

unaclasedeastronomía.Una voz en off empieza a contar la historia de los planetas, que se ven

maravillosamenteeneltecho-cielooscuro.Peroalratosucedealgoimprevisto.Hayunruidoenlacabinadetransmisión,algose

cayóalsuelo.Seoyócomounestallidoyloschicosseinquietaron.Lavozgrabadasecalló,yMarlenepidióqueesperaranenordenhastaquesearreglara

eldesperfecto.Entoncesseoyóotravozenoff,queanunció:—Buenas tardes, amigos. En este planetario, transmite el equipo móvil de la FM

QueloniodelaCiudaddePehuajó.ConelauspiciodealfajoresCorchete,recibiremosenexclusividadundocumentaldesdelaterminalMichigatoenelJapón.Cambio,yadelanteTokio.Losplanetasseesfuman,yempiezanaverunapelículaconpaisajesdemuchospaíses.

Pasanbarcos,pingüinos,unyacaré-colectivo,indígenasdelAmazonas,elfamosocuadroLasMeninas,ymilcosasmás.Lomás raro de todo es que por primera vez ven verdaderos duendes, no los de los

dibujosanimados,sinootros,enunbosquemisterioso.Mientrasloschicossedivierten¿quépasaenlacabinadelPlanetario?Un señor tortugo cortó la grabación y se apoderó de unmicrófono para anunciar la

85

transmisióndirectadesdeelJapón.Mientraselvideoyelaudiosiguendivirtiendoaloschicos,el tortugolocutorsaleal

parqueatomarfresco.Ydeprontooyeunavozcantarinaquedice:—Manuelita,presente.—SoyAmílcar,encargadodedartelabienvenidaennombredetufamiliaydelpueblo

dePehuajó,conelauspiciodealfajoresCorchete.ManuelitavequeAmílcartienesusañitosperoesmuypintón.Leparecequelegusta

bastante.EntoncesAmílcar,consualfajoradavozdelocutor,ledice:—¿Quéopinásdeunlicuaditodelechuga?—Megustaríaconlocura.—UngauchoamigonosvaallevarhastaPehuajóensucamioneta.—Yasé,debedeserNicolásGarcía.—Elmismo—diceAmílcar,mirándolaembobado.Asícharlandosedetienenanteunkioscoatomarellicuaditodelechuga.Elsolbrillafuerte,losárbolesestánflorecidosporqueesprimavera.Zorzales,horneros

ycalandriasofrecenelmejordesusconciertos.Pasaunabandadadeloros,chillandoycurioseando.EntoncesManuelitacreequeencualquiermomentosevaaenamorar.Perotienequepensarlo.Pensará durante todo el viaje en la camioneta deNicolásGarcía.Y cuando llegue a

Pehuajó,veremos.Noescuestióndeapresurarse,¿no?

86

87

DATOS BIOGRÁFICOS DE MARÍA ELENA WALSH

Fotografía Sara Facio

Poeta, novelista, cantante, compositora, guionista de teatro, cine y televisión,es una figura esencial de la cultura argentina. Nació en Buenos Aires, en 1930.Estudió en la Escuela Nacional de Bellas Artes. A los quince años comenzó apublicar sus primeros poemas en distintos medios. En 1947, apareció su primerlibro: Otoño imperdonable. Viajó a Europa en 1952, donde integró el dúo Leda yMaría, con la folclorista Leda Valladares, y grabó discos en París. Desde 1960,ya en la Argentina, escribió programas de televisión para chicos y para grandes,y realizó el largometraje Juguemos en el mundo, dirigido por María HerminiaAvellaneda.

Asimismo, escribió guiones para cine y su música fue incorporada a filmes detrascendencia. En 1962 estrenó Canciones para Mirar en el teatro San Martín,con tan buena recepción que, al año siguiente, puso en escena Doña Disparate yBambuco, con idéntica respuesta. Esas obras se publicaron como libros en2008.

88

A partir de 1960 nacieron muchos de sus libros para chicos: Tutú Marambá(1960), Zoo Loco (1964), El Reino del Revés (1965), Dailan Kifki (1966),Cuentopos de Gulubú (1966) y Versos tradicionales para cebollitas (1967). Suproducción infantil abarca, además, El diablo inglés (1974), Chaucha y Palito(1975), Pocopán (1977), La nube traicionera (1989), Manuelita ¿dónde vas?(1997), Canciones para Mirar (2000), Hotel Pioho’s Palace (2002) y ¡Cuántocuento! (2004).

En 1990 publicó Novios de antaño, su primera novela para adultos, y en 2008,Fantasmas en el parque, una obra donde conviven novela, memorias y ficción.

María Elena Walsh obtuvo numerosos reconocimientos: Premio Municipal dePoesía; Premio ARGENTORES; Gran Premio SADAIC; Gran Premio de Honordel Fondo Nacional de las Artes; el Highly Commended del Premio HansChristian Andersen de la IBBY (International Board on Books for Young People);Premio Gabriela Mistral, Chile, Konex De Honor (Letras), entre muchos otros.

En 1985 fue nombrada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires; en1990, Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Córdoba, y en 2011de la Universidad Nacional de Río Cuarto, Córdoba, Argentina; en 2008 recibió elReconocimiento Público de la Academia Argentina de Letras.

Sus creaciones se han constituido en verdaderos clásicos de la literaturainfantil, cuya importancia trasciende las fronteras del país, ya que han sidotraducidas al inglés, francés, italiano, sueco, hebreo, danés y guaraní. Entre suspersonajes más famosos se destaca Manuelita la tortuga, que fue llevado al cinecon gran éxito internacional.

María Elena Walsh murió en Buenos Aires el 10 de enero de 2011. Es y seráun referente intelectual para muchas generaciones de argentinos.

89

CubiertaPortadaElpatioElbarcoLaislaLaavenidaLavisitaElsabioLamúsicaLospatapiedrasElgauchoElglaciarElconciertoLaselvaLossombrerosLainfantaLafugaElbosqueLosesqueletosLabalsaElgranpandaLaolaElregresoDatosbiográficosdeMaríaElenaWalshCréditosOtrostítulosdelaautora

90

Walsh,MaríaElenaManuelita¿dóndevas?.-1aed.-BuenosAires:Alfaguara,2015(Alfawalsh)EBook.

ISBN978-987-738-108-5

1.LiteraturaInfantilyJuvenilArgentina.I.TítuloCDDA863.9282

Ediciónenformatodigital:juliode2015©2015,PenguinRandomHouseGrupoEditorialHumbertoI555,BuenosAires.

©1997,MaríaElenaWalsh

Direccióneditorial:HerminiaMéregaSubdireccióneditorial:LidiaMazzalomoEdición:MaríaFernandaMaquieiraSeguimientoeditorial:VerónicaCarreraDiseñoydiagramación:MichelleKenigstein

Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, ni registrada en, o transmitida por, un sistema derecuperación de información, en ninguna forma ni por ningúnmedio, seamecánico, fotoquímico, electrónico,magnético, electroóptico, por fotocopia ocualquierotro,sinpermisoprevioporescritodelaeditorial.

ISBN978-987-738-108-5

Conversiónaformatodigital:Libresque

www.megustaleer.com.ar

91

92

93