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MEDITACIÓN
Cerrar un estudio sobre el movimiento con la quietud de la meditación
puede parecer contradictorio. No lo es si lo que se pretende es alcanzar la
sabiduría. Los padres del castellano antiguo ya intuyeron las relaciones
binomiales:
Movi”miento” → Conoci”miento”
Quietud → Sabiduría.
Todo lo expuesto anteriormente tiene sentido si contemplamos el
movimiento como la llave para percibir la trascendencia de la quietud en toda
su magnitud.
Al principio analizamos el movimiento desde el punto de vista de la
relación o interferencia entre los principios yin-yang, y lo convinimos en
denominar cielo-tierra. Esa relación que se establecía entre esos pares de
opuestos lo conocemos como octograma de Fushi, o bien como octograma de
Sherab Tharching. Posteriormente unimos el yin y el yang entrando en el
mundo de la carne mediante una serie de movimientos que la tradición oriental
denomina de San Jiao, y que en la tradición judeo-cristiana se corresponde con
el “pecado original”. Éste es producto de una religión donde prima el premio-
castigo como modo de mantener la relación entre el Creador y su Obra. Al
Creador Todopoderoso se le rebela el personal demasiadas veces y debe
acudir con su espada vengadora a imponer su disciplina.
Si seguimos la tradición oriental y las marcas que ha puesto en el
hombre, todo se puede explicar con más coherencia con un Ser Todopoderoso
que obra con un sentido TAO, que se aleja de la imagen de Ser exterminador.
La pierna nos proporciona detalles de ese sentido TAO
EL DOS
En el hombre, esos 5 Reinos reaparecen en la columna vertebral:
La columna vertebral es la famosa serpiente que une el yin al yang para
entrar en el mundo de la forma y así se cumpla el TAO.
TRADICIÓN
GRECO-ROMANA
Derecha
TRADICIÓN
ORIENTAL
Izquierda
EL UNO VACÍO 7 días de la
Creación
5 Reinos
fémur rótula tibia y peroné huesos
del tarso
Una vez estamos en el mundo de la forma como seres
Conformados, tenemos distintas maneras de relacionarlos, una de las cuáles
es el movimiento. Y aquí entramos en el I ching, que describe los diferentes
modos de relacionarse el hombre con el cielo y la tierra:
Meditación: Siéntese. Durante todo el estudio del movimiento hemos
solicitado, al igual que se hace en las Artes Marciales, que sintiera el paso del
“soplo” a través de su cuerpo, y muchas veces se habrá alegrado al sentir el
fluir de la “energía” por sus extremidades.
Imagínese ahora tratando de hacer un movimiento, por ejemplo:
Usted está sentado, y por tanto sus piernas ya no le relacionan con la
tierra, por lo que la línea inferior de cada trigrama se anula y pasan a ser
bigramas:
Anule ahora la acción de los brazos y cortará su relación con lo celeste,
quedando tan sólo el trazo intermedio que corresponde a la parte humana:
yang
yin
hombre
Cielo
Tierra
agua por la izquierda
fuego por la derecha
Movimiento:
Trigrama izquierdo
Trigrama derecho
Bigrama izquierdo
Bigrama derecho
Bigrama izquierdo
Bigrama derecho
...y el puede mutar a , y viceversa.
Usted ya ni va (piernas anuladas), ni hace (brazos anulados). Para
ayudarnos en el razona”miento”, pongamos una analogía: Supongamos que
es “ser rico”, y que por tanto, es “ser pobre”. Contémplese
desde la izquierda; es rico, pero ni va, ni hace. Ahora contémplese desde la
derecha; es pobre, pero igualmente, ni va, ni hace. No podría encontrar
ninguna diferencia, siendo nuevamente un “ser de luz”, un “iluminado”.
Hasta este momento la respiración se habrá mantenido dentro de la
parte humana, generalmente se recomienda hacerlo en un punto por detrás del
ombligo, Shenque o Qihe 8RM, “fusión con el soplo”.
Tras un largo periodo de práctica en los anteriores ejercicios, y siempre
contando con la guía de un maestro, deberá trasladar su respiración a un punto
fuera de los tres planos, denominado la “zona de la media pulgada”, Inntang o
“tercer ojo”. En este instante se habrá librado de cualquier manifestación y
regresará al estado inicial de Wuchi (vacío).
El TAO es grande porque se expande; su expansión le lleva lejos; en un
universo curvo, esa lejanía le hace acercarse.
¡Alabado sea el señor!
Wuchi