el epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz...

41
El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores, la ataraxia ("ausencia de turbación") y los vínculos de amistad entre sus correligionarios. Para los epicureistas los besos con amor eran la base de todo, ya que para ellos el amor era lo que le daba alegría a las personas. Fue enseñada por Epicuro de Samos , filósofo ateniense del siglo IV a. C. que fundó una academia llamada el Jardín y cuyo pensamiento fue seguido después por otros filósofos, llamados epicúreos. Doctrina Epicuro proponía la realización de la vida buena y feliz, la ataraxia y las relaciones amistosas entre sus correligionarios. Este placer no debía limitarse sólo al cuerpo, como preconizaba el hedonismo cirenaico, sino que debía ser también intelectual, ya que el hombre es un todo. Además, para Epicuro la presencia del placer o felicidad era un sinónimo de la ausencia de dolor, o de cualquier tipo de aflicción: el hambre, la tensión sexual, el aburrimiento, etc. Era un equilibrio perfecto entre la mente y el cuerpo que proporcionaba la serenidad o ataraxia. En el libro Ética de Adolfo Sánchez Vázquez (Editorial Grijalbo, S.A., México, 1969), encontramos que "El epicúreo alcanza el bien, retirado de la vida social, sin caer en el temor a lo sobrenatural, encontrando en sí mismo, o rodeado de un pequeño círculo de amigos, la tranquilidad de ánimo y la autosuficiencia" El bien supremo y el mal supremo Según este filósofo, los placeres y sufrimientos son consecuencia de la realización o impedimento de los apetitos. Epicuro distingue entre tres clases de apetitos, por tanto placeres: Los naturales y necesarios, como alimentarse, abrigo, y el sentido de seguridad, que son fáciles de satisfacer; Los naturales pero no necesarios, conversación amena, gratificación sexual. Los no naturales ni necesarios, la búsqueda del poder, la fama, el prestigio Los placeres del cuerpo y los del alma Es importante aclarar que Epicuro no era dualista, es decir, no postulaba la oposición cuerpo-alma; el alma, igual que el cuerpo, es material y está compuesta de átomos. También distinguía entre dos tipos de placeres, basados en la división del hombre en dos entes diferentes pero unidos, el cuerpo y el alma: Placeres del cuerpo: aunque considera que son los más importantes, en el fondo su propuesta es la renuncia de estos

Upload: catmanmay

Post on 30-Jul-2015

144 views

Category:

Documents


2 download

TRANSCRIPT

Page 1: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores, la ataraxia ("ausencia de turbación") y los vínculos de amistad entre sus correligionarios.Para los epicureistas los besos con amor eran la base de todo, ya que para ellos el amor era lo que le daba alegría a las personas. Fue enseñada por Epicuro de Samos, filósofo ateniense del siglo IV a. C. que fundó una academia llamada el Jardín y cuyo pensamiento fue seguido después por otros filósofos, llamados epicúreos.

DoctrinaEpicuro proponía la realización de la vida buena y feliz, la ataraxia y las relaciones amistosas entre sus correligionarios. Este placer no debía limitarse sólo al cuerpo, como preconizaba el hedonismo cirenaico, sino que debía ser también intelectual, ya que el hombre es un todo. Además, para Epicuro la presencia del placer o felicidad era un sinónimo de la ausencia de dolor, o de cualquier tipo de aflicción: el hambre, la tensión sexual, el aburrimiento, etc. Era un equilibrio perfecto entre la mente y el cuerpo que proporcionaba la serenidad o ataraxia.En el libro Ética de Adolfo Sánchez Vázquez (Editorial Grijalbo, S.A., México, 1969), encontramos que "El epicúreo alcanza el bien, retirado de la vida social, sin caer en el temor a lo sobrenatural, encontrando en sí mismo, o rodeado de un pequeño círculo de amigos, la tranquilidad de ánimo y la autosuficiencia"El bien supremo y el mal supremoSegún este filósofo, los placeres y sufrimientos son consecuencia de la realización o impedimento de los apetitos. Epicuro distingue entre tres clases de apetitos, por tanto placeres:

Los naturales y necesarios, como alimentarse, abrigo, y el sentido de seguridad, que son fáciles de satisfacer;

Los naturales pero no necesarios, conversación amena, gratificación sexual. Los no naturales ni necesarios, la búsqueda del poder, la fama, el prestigio

Los placeres del cuerpo y los del almaEs importante aclarar que Epicuro no era dualista, es decir, no postulaba la oposición cuerpo-alma; el alma, igual que el cuerpo, es material y está compuesta de átomos. También distinguía entre dos tipos de placeres, basados en la división del hombre en dos entes diferentes pero unidos, el cuerpo y el alma:

Placeres del cuerpo: aunque considera que son los más importantes, en el fondo su propuesta es la renuncia de estos placeres y la búsqueda de la carencia de apetito y dolor corporal;

Placeres del alma: el placer del alma es superior al placer del cuerpo: el corporal tiene vigencia en el momento presente, pero es efímero, mientras que los del alma son más duraderos y además pueden eliminar o atenuar los dolores del cuerpo.

La razónPese a que el placer es un bien y el dolor un mal, hay que administrar inteligentemente el placer y el dolor: en ocasiones debemos rechazar placeres a los que les siguen sufrimientos mayores y aceptar dolores cuando se siguen de placeres mayores. La razón representa un papel decisivo en lo que respecta a nuestra felicidad, nos permite alcanzar la total imperturbabilidad (ataraxia), la cual Epicuro compara con "un mar en calma" cuando ningún viento lo azota y nos da libertad ante las pasiones.FinalidadLa finalidad de la filosofía de Epicuro no era teórica, sino más bien práctica que buscaba sobre todo procurar el sosiego necesario para una vida feliz y placentera en la que los temores al destino, los dioses o la muerte quedaran definitivamente eliminados.Para ello se fundamentaba en una teoría empirista del conocimiento, en una física atomista inspirada en las doctrinas de Leucipo y Demócrito y en una ética hedonista.

Page 2: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

No había motivo para temer a los dioses porque estos, si bien existen, no pueden relacionarse con nosotros ni para ayudar ni para castigar, y por tanto ni su temor ni su rezo o veneración posee utilidad práctica. La muerte tampoco puede temerse, porque siendo nada, no puede ser algo para nosotros: mientras vivimos no está presente y cuando está presente nosotros no estamos ya." cuando el hombre se libere de sus falsos temores y elija racionalmente sus placeres, llegara a ser feliz"Difusión en el tiempoEl epicureísmo es una doctrina de un paganismo típicamente laico y mediterráneo y en este ámbito ganó gran número de seguidores que la consideraron una doctrina verdadera que solucionaba todos los problemas. Su escuela de pensamiento perduró largamente aun siete siglos tras la muerte de Epicuro; pero después fue casi relegada al olvido al advenir la Edad Media, periodo en el que se perdió o fue destruida la mayoría de los escritos de este filósofo griego a causa del rechazo que por sus ideas experimentó el Cristianismo, que no pudo adaptarlas a su sistema de creencias por la visión cristiana del dolor. Por otra parte lo intentaron el platonismo- Platón y el aristotelismo.

Período helenísticoSe denomina período helenístico (también llamado alejandrino por Alejandro Magno) a una

etapa histórica de la Antigüedad, cuyos límites cronológicos vienen marcados por dos importantes acontecimientos políticos: la muerte de Alejandro Magno (323 a. C.) y el suicidio de la última soberana helenística, Cleopatra VII de Egipto, y su amante Marco Antonio, tras su derrota en la batalla de Accio (30 a. C.). Es la herencia de la cultura helénica de la Grecia clásica que recibe el mundo griego a través de la hegemonía y supremacía de Macedonia, primero con la persona de Alejandro Magno, y después de su muerte con los diádocos (διάδοχοι) o sucesores, los reyes de las tres grandes dinastías: Ptolemaica, Seléucida y Antigónida. Estos soberanos supieron conservar y alentar el espíritu griego tanto en las artes como en las ciencias. Entre la gente culta y de la aristocracia «lo griego» era lo importante y en este concepto educaban a sus hijos. El resto de la población de estos reinos tan dispares (Egipto, Siria, Macedonia) no participaba del helenismo y continuaba con sus costumbres, su lengua y sus religiones. Las ciudades-estado griegas (Atenas, Esparta, Tebas…) habían llegado al declive y habían sido sustituidas en importancia por las ciudades modernas de Alejandría, Pérgamo y Antioquía, cuyo urbanismo y construcción no tenían nada que ver con las anteriores. En todas ellas se hablaba la lengua griega, llamada koinè (κoινης), que es un adverbio griego que significa «común», «comúnmente». Vale decir, la lengua común o panhelénica, principal vehículo de cultura.

Suele ser considerado como un período de transición entre el declive de la época clásica griega y el ascenso del poder romano. Sin embargo, el esplendor de ciudades como Alejandría, Antioquía o Pérgamo, la importancia de los cambios económicos, el mestizaje cultural y el papel dominante del idioma griego y su difusión, son factores que modificaron profundamente el Oriente Medio antiguo en esta etapa. Esta herencia cultural será asimilada por el mundo romano, surgiendo así con la fusión de estas dos culturas lo que se conoce como cultura clásica, fundamento de la civilización occidental.El término helenístico fue utilizado por primera vez por el historiador alemán Johann Gustav Droysen en Geschichte des Hellenismus (1836 y 1843), a partir de un criterio lingüístico y cultural, es decir, la difusión de la cultura propia de las regiones en las que se hablaba el griego (ἑλληνίζειν – hellênizein), o directamente relacionadas con la Hélade, a través del propio idioma, un fenómeno alentado por las clases gobernantes de origen heleno de aquellos territorios que nunca tuvieron relación directa con Grecia, como pudo ser el caso de Egipto, Bactriana o los territorios del Imperio seléucida. Este proceso de helenización de los pueblos orientales, y la fusión o asimilación de rasgos culturales orientales y griegos, tuvo continuidad, como se ha mencionado, bajo el Imperio romano.

Page 3: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Los trabajos arqueológicos e históricos recientes conducen a la revalorización de este período y, en particular, a dos aspectos característicos de la época: la importancia de los grandes reinos dirigidos por las dinastías de origen griego o macedónico (Lágidas, Seléucidas, Antigónidas, Atálidas, etc.), unida al cometido determinante de decenas de ciudades cuya importancia fue mayor de la idea comúnmente aceptada durante mucho tiempo.

La evolución política del mundo helenístico

El mundo helenístico a la muerte de Alejandro Magno.En el año 336 a. C., a los 20 años de edad, el hijo de Filipo II fue proclamado rey de Macedonia como Alejandro III, siendo reconocido como el gobernante de toda la Hélade tras su aplastante victoria sobre Tebas dos años más tarde. Durante su breve reinado, que duró apenas 13 años hasta el 323 a. C., realizó la conquista más rápida y espectacular de toda la Antigüedad. El pequeño reino balcánico, en alianza con algunas polis griegas, se convirtió inesperadamente en el imperio más grande de la época, tras sojuzgar al Imperio persa de Darío III. Este soberano aqueménida fue derrotado en cuatro años (334–330) tras tres batallas: en el río Gránico, en Issos y en la llanura de Gaugamela. Durante los tres años siguientes (hasta el 327 a. C.) Alejandro se dedicó a la lenta y difícil conquista de las satrapías de Asia Central, además de asegurar, en el 325 a. C., la dominación macedónica en el valle del río Indo. En ese momento Alejandro, presionado por sus agotadas tropas, hubo de renunciar a proseguir con su epopeya, regresando a lo que se había convertido en el núcleo de su imperio, Mesopotamia. En ese momento sus dominios se extendían desde el Danubio al Indo y desde Egipto hasta el Sir Daria.

A fin de asegurar su poder en todo el territorio, trató de asociar la clase dirigente del antiguo Imperio aqueménida a la estructura administrativa de Macedonia. Intentó crear una monarquía que asumiera, a la vez, la herencia macedónica y griega y, por otro, la herencia persa y, en términos generales, la asiática. La muerte inesperada del rey, víctima probablemente de la malaria a la edad de 32 años, puso fin a esta tentativa original, que fue muy criticada por el entorno macedónico del soberano.

El período de los diádocos (323 – 281 a. C.)

La prematura muerte de Alejandro supuso que sus herederos directos no tuviesen la edad necesaria como para afrontar la tarea de gobernar el imperio. De los dos hijos varones de Alejandro, Heracles (hijo de Barsine) tenía 4 años, mientras que Alejandro (hijo de la princesa bactriana Roxana) no había nacido aún en el momento de la muerte de su padre. De esta forma, los llamados diádocos, los generales y oficiales de Alejandro a lo largo de la campaña persa, fueron quienes lucharon por el control del imperio durante 40 años, hasta el año 281 a. C. Las sucesivas guerras en las que se enfrentaron Pérdicas, Ptolomeo, Casandro, Lisímaco, Antígono y Seleuco, por citar a los más relevantes, acabaron tanto con la cohesión del imperio (repartido finalmente entre los vencedores) como con los familiares de Alejandro: su madre Olimpia, su hermana Tesalónica, y sus dos hijos.Las regiones de Grecia, Macedonia y Asia Menor fueron las que más profundamente se vieron afectadas por las incesantes campañas militares que enfrentaron a los diádocos, mientras que la parte oriental del imperio se separó rápidamente, creándose varios reinos griegos en Bactriana. Los generales prestaron poca atención a la pérdida de los territorios orientales, puesto que lo esencial para ellos era hacerse con el control total del imperio luchando contra sus rivales. La excepción fue Ptolomeo, uno de los compañeros de infancia de Alejandro, del que algunos autores aventuran que era un hijo ilegítimo de Filipo II. Con inteligencia se apoderó en seguida de Egipto y se apresuró a crear un estado duradero, renunciando a las ambiciones imperiales que consideraba poco realistas.

Page 4: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Fue uno de los principales artífices de la ruina de la causa imperial, convirtiéndose de esta forma en uno de los fundadores del mundo helenístico.Sin embargo, Antígono y su hijo Demetrio fueron quienes más lucharon por restablecer el Imperio macedónico, llegando a controlar Anatolia y el Levante mediterráneo antes de ser derrotados por una coalición del resto de los diádocos (excepto Ptolomeo) en la batalla de Ipso (301 a. C.). Muerto Antígono, Demetrio huyó a Europa, donde consiguió apoderarse temporalmente de Macedonia, antes de ser derrotado y terminar sus días miserablemente como prisionero de Seleuco. El hijo mayor de Ptolomeo I, Ptolomeo Cerauno, fue expulsado de Egipto por su padre, refugiándose en casa de su cuñado Lisímaco en Tracia, y apoderándose de su reino y de Macedonia, tras lo cual llegó a asesinar a Seleuco, que se enfrentaba a él. El Medio Oriente estaba, por tanto, dominado por las ambiciones de estos generales, que con presteza se coronaban reyes, apoyados por sus tropas, constituidas generalmente por mercenarios griegos y macedonios.

El equilibrio del siglo III a. C.

De esta forma, se estableció en el siglo III a. C. un precario equilibrio entre las tres dinastías descendientes de los diádocos, (los llamados epígonos —επιγονος—, 'los nacidos después' o 'sucesores') que se repartieron los territorios de forma poco homogénea y aun forzada. Macedonia y la Grecia continental fue gobernada por los descendientes de Antígono (los Antigónidas); Egipto, Chipre y Cilicia por los Lágidas; y Asia Menor, Siria, Mesopotamia y Persia occidental conformaron el poco homogéneo Imperio seléucida.Al lado de las tres monarquías principales, coexistían otros reinos más pequeños, pero que desempeñaron un papel destacado, como el reino de Pérgamo, controlado por los Atálidas; el reino del Epiro, en la actual Albania; los reinos del Ponto y de Bitinia, en Anatolia; o el que fundó Hierón II en Siracusa, en la Magna Grecia.Es preciso añadir además las confederaciones de ciudades que se oponían a los intereses de otros reinos mayores, especialmente a Macedonia, como fueron la Liga Aquea y la Liga Etolia, que desempeñaron un importante papel en la zona egea hasta la conquista romana. Algunas de estas ciudades llegaron incluso a preservar completamente su independencia y a mantener relaciones en pie de igualdad con los reinos helenísticos, como es el caso de Rodas.

El final político del helenismo y el auge romano

A finales del siglo III a. C., la Magna Grecia cayó finalmente bajo la dominación romana tras un siglo de enfrentamientos, ya fueran contra Pirro de Epiro, o en el ámbito de las Guerras Púnicas. Pero fue a principios del siglo II a. C. cuando Roma intervino realmente en Oriente. En principio se enfrentó militarmente a los Antigónidas, concretamente a Antíoco III Megas, el más importante de los soberanos helenísticos antes de Mitrídates y Cleopatra. La derrota de Antíoco fue decisiva en la pérdida de influencia política de los Seléucidas en Asia Central, en Persia y, por último en Mesopotamia. Antíoco III fue el último rey seléucida que todavía poseía los medios para dirigir una expedición hasta los límites de la India. Durante el reinado de su hijo, los Seléucidas no consiguieron dominar la insurrección de los Asmoneos en Palestina, que consiguieron instaurar un reino judío independiente. La irrupción de los partos aceleró la descomposición política y, a principios del siglo I a. C., los soberanos seléucidas ya sólo gobernaron en Siria.Después de su victoria sobre los seléucidas, Roma promovió un lento y complejo proceso de desgaste sobre los reinos helenísticos, con la complicidad de varias ciudades griegas y del reino de Pérgamo, asegurándose tras dos siglos el completo dominio del Mediterráneo oriental. El acto final de esta conquista fue la lucha que enfrentó a Octaviano (César Augusto) contra Marco Antonio y su aliada, la última soberana de Egipto, Cleopatra VII. Tras ser derrotados en Accio, ambos se suicidaron ante la inminente victoria de Octaviano (30 a. C.).

Page 5: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

No obstante, la penetración romana en el Oriente helenístico no se produjo sin resistencia, y los romanos precisaron no menos de tres guerras para doblegar al rey del Ponto, Mitrídates VI, en el siglo I a. C. El general Cneo Pompeyo Magno suprimió en el 63 a. C. el debilitado reino seléucida, reducido al territorio de Siria, reorganizando el Oriente según el orden romano. El mundo helenístico se convirtió desde entonces en el campo de batalla donde se definieron las ambiciones de los diversos generales de la República romana, como sucedió en Farsalia, Filipos o Accio, donde se impuso finalmente Octaviano.

La monarquía helenística

La monarquía helenística era personal, lo cual significaba que podía llegar a ser soberano cualquiera que, por medio de su conducta, sus méritos o sus acciones militares, pudiese aspirar al título de basileus. En consecuencia, la victoria militar era, la mayoría de las veces, el acto que legitimaba el acceso al trono, permitiendo así reinar sobre una provincia o un estado. Seleuco I utilizó la ocupación de Babilonia en 312 a. C. para legitimar su presencia en Mesopotamia, o su victoria en 281 a. C. sobre Lisímaco para justificar sus reivindicaciones sobre el Bósforo y Tracia. Asimismo, los reyes de Bitinia sacaron provecho de la victoria en 277 a. C. de Nicomedes I sobre los gálatas para afirmar sus pretensiones territoriales.Esta monarquía personal no tenía reglas de sucesión precisas, por lo cual eran frecuentes querellas incesantes y asesinatos entre los muchos aspirantes. Tampoco existían leyes fundamentales ni textos que determinaran los poderes del soberano, sino que era el propio soberano quien determinaba el alcance de su poder. Este carácter absoluto y personal era, a la vez, la fuerza y la debilidad de estas monarquías helenísticas, en función de las características y la personalidad del soberano. Por tanto, fue necesario crear ideologías que justificaran la dominación de las dinastías de origen macedonio y de cultura griega sobre los pueblos totalmente ignorantes de esta civilización. Los Lágidas pasaron, de este modo, a ser faraones ante los egipcios y tenían derecho a aliarse con el clero autóctono, otorgando espléndidas donaciones a los templos.En cuanto a los pueblos de origen griego y macedónico que también gobernaban, los soberanos helenísticos debían mostrar la imagen de un rey justo, que asegurase la paz y el bienestar de sus pueblos, existiendo así la noción de evergetes, el rey como benefactor de sus súbditos. Una de las consecuencias, acaecida ya en el reinado de Alejandro Magno, fue la divinización del soberano, a quien rendían honores los súbditos y las ciudades autónomas o independientes que habían sido favorecidas por el rey, lo que permitió reforzar la cohesión de cada reino en torno a la dinastía reinante.La fragilidad del poder de los soberanos helenísticos les obligaba a una incesante actividad. En primer lugar era necesario vencer militarmente a sus adversarios, por lo que el periodo se caracterizó por una serie de conflictos entre los propios soberanos helenísticos o contra otros adversarios exteriores, como los partos o la incipiente Roma. Los soberanos se veían obligados a viajar constantemente a fin de instalar guarniciones, a la vez que erigían ciudades que controlasen mejor las divisiones administrativas de sus reinos, siendo sin duda Antíoco III el monarca helenístico que más viajó entre Grecia, Siria, Egipto, Mesopotamia, Persia y las fronteras de India y Asia Menor, antes de morir cerca de la ciudad de Susa en 187 a. C. A fin de mantener sus armadas y financiar la construcción de las ciudades, fue indispensable que los soberanos desarrollaran una sólida administración y fiscalidad. Los reinos helenísticos se convirtieron así en gigantescas estructuras de explotación fiscal, erigiéndose en herederos directos del Imperio Aqueménida. Este trabajo agotador, al que se unían las incesantes quejas y recriminaciones (ya que el rey era también juez para sus súbditos) hicieron exclamar a Seleuco I:Si las gentes supieran cuánto trabajo conlleva el escribir y leer todas las cartas, nadie querría ocupar una diadema, aunque se arrastrara por el suelo.

Plutarco, Moralia, «Si la política es el quehacer de los ancianos», II

Page 6: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Alrededor de estos soberanos gravitaba una corte en la que el cometido de los favoritos se volvió gradualmente preponderante. Por regla general, eran los griegos y los macedonios los que casi siempre ocuparon el título de amigos del rey (philoi). El deseo de Alejandro Magno de asociar las elites asiáticas al poder fue abandonado, por lo que esta dominación política greco-macedónica adquirió, en muchos aspectos, la apariencia de una dominación colonial. Para conseguir unos colaboradores fieles y eficaces, el rey tenía que enriquecerlos con donaciones y dominios pertenecientes al dominio real, lo cual no impidió que algunos favoritos mantuvieran una dudosa fidelidad, y en ocasiones, especialmente en caso de una minoría de edad real, ejercer efectivamente el poder. Son los casos de Hermias, del que Antíoco III no pudo deshacerse fácilmente, o Sosibios en Egipto, al que Polibio achacó una reputación siniestra.Estos reyes disponían de un poder absoluto, pero estaban sometidos a múltiples obligaciones, como asegurar sus fronteras, vencer a sus enemigos y poner a prueba su naturaleza real por medio de su comportamiento, legitimando su función por la divinización de su persona. En la época clásica, el modelo de la monarquía, rechazada por los filósofos griegos, era asiático; en la época helenística era griego.

Culto al rey

La monarquía helenística se apoyó en una aristocracia creada por el propio rey y desarrolló un carácter especialmente cosmopolita, muy lejos de la anterior nobleza solariega. En adelante el rey no sería elegido libremente por sus ciudadanos. Los reyes helenísticos y sus nobles fueron elegidos por el propio rey pero para llevar a cabo con éxito y ante el pueblo tal sistema, insistieron en la idea de la divinidad, es decir, el rey tenía derecho a gobernar y a seleccionar la nobleza porque su poder lo había obtenido a través de su linaje divino y porque él mismo era en cierto modo un dios. El paso siguiente fue iniciar el culto al rey.Este sistema de divinización fue más político que religioso y tenía sus antecedentes en el pensamiento griego anterior con ejemplos de veneración a héroes y otros personajes mortales que se convirtieron en deidades después de su muerte, como es el ejemplo de Asclepio y otras figuras menores que habían sido jefes militares o fundadores de ciudades. La deificación o apoteosis en vida de los reyes helenísticos nunca o casi nunca fue un asunto puramente religioso o espiritual; nadie fue a rezar o a pedir gracias especiales a ninguno de estos personajes. Sin embargo fue necesario establecer el poder político en seres considerados por sus súbditos como dioses.El culto al rey había empezado ya en la figura de Alejandro Magno que fue reconocido como un mortal realizador de grandes hazañas y descendiente de Heracles, confirmado en el oráculo de Siwa como hijo del propio Zeus-Amón. La deificación de Alejandro en vida le sirvió en muchas ocasiones como aprobación y reconocimiento legal de su poder real. El propio Alejandro se tomaba su deificación como algo muy serio. Después de su muerte muchas de las ciudades helenísticas siguieron este proceso, deificando a algunos de sus diádocos, como ocurrió con Demetrio Poliorcetes, Antígono II Gónatas, Lisímaco de Tracia, Casandro de Macedonia, Seleuco I Nicátor y Ptolomeo I.

Deificación de los ptolomeos

Ptolomeo I nunca pidió honores divinos pero su hijo Ptolomeo II organizó la ceremonia de la apoteosis para su padre y su madre Berenice, con el título de Dioses Salvadores (Sóter). Más tarde, hacia el año 270, Ptolomeo II y su esposa Arsínoe fueron deificados en vida con el título de Dioses hermanos (Filadelfo). Se sabe que se les rindió culto en el santuario de Alejandro Magno que aun existía, donde su diádoco Ptolomeo I había depositado el cuerpo. (En la actualidad es un misterio el paradero de este santuario).

Page 7: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Los reyes y reinas sucesores de Ptolomeo II fueron deificados inmediatamente después de su ascenso al trono, con ceremonias de apoteosis en que podía verse la influencia de la religión y tradición egipcias. En el Egipto helenístico el culto al rey fue una fusión entre las tradiciones griegas para la deificación política y las tradiciones egipcias, con una gran carga religiosa.

Vasos de la reina

Son unas jarras de cerámica vidriada, fabricadas en serie, que se utilizaban en las fiestas que se hacían para el culto de los reyes. Se levantaban altares provisionales donde se hacían las ofrendas. Las libaciones de vino se depositaban en estas jarras especiales que solían estar decoradas con el retrato de la reina que ocupaba el trono en ese momento. En el entorno artístico se llaman vasos de la reina porque siempre viene representada la reina, con una cornucopia en la mano izquierda y un plato de libaciones en la derecha, con un altar y un pilar sagrado. Los relieves descritos iban acompañados con inscripciones que servían para identificar a la reina representada. Algunas de estas jarras o vasos han aparecido en distintas tumbas. Estos ejemplares se pueden fechar desde Ptolomeo II hasta el año 116 a. C. El vestido de las reinas es fundamentalmente griego: llevan un quitón sin mangas y un himatión enrollado alrededor de la cintura y recogido sobre el brazo izquierdo

Deificación de los seléucidas

A la muerte de Seleuco I su hijo Antíoco I Sóter preparó la ceremonia para su apoteosis. Más tarde se fundó un sacerdocio especializado para el culto del monarca vivo y de sus antepasados. Los reyes de Pérgamo dijeron ser descendientes del dios Dioniso. Estos reyes eran venerados en vida pero sólo después de su muerte recibían el título de theos. Antíoco III en el 193 a. C. creó una comunidad de sacerdotisas que serían las encargadas del culto a su esposa Laodice. Una de las normas dictadas por este rey para dichas sacerdotisas fue que en su indumentaria debían llevar una corona de oro decorada con retratos de la reina.

Grecia durante la época helenística

Grecia continental

Aparentemente, algunas ciudades de la Grecia independiente, como Atenas y Corinto, conservaban su autonomía, sus instituciones y sus tradiciones. Los problemas sociales que iban surgiendo, más el empobrecimiento paulatino hicieron que esta Grecia clásica, no perteneciente a los estados helenísticos, fuera sufriendo una crisis tras otra hasta la intervención de Roma.

En Atenas, perdido el espíritu democrático, se asistió a una disminución del comercio tras el fin de las cleruquías (reparto de tierras a ciudadanos pobres) y del puerto de El Pireo como escala estratégica de las rutas comerciales. La última crisis económica se dio a partir del saqueo de la ciudad por el ejército de Sila en el 86 a. C., que originó el descenso de los salarios, el abandono de los cultivos y las limitadas exportaciones de artículos como vino, aceite y algunos productos de lujo a precios muy bajos. Consecuencias lógicas de la situación fueron el empobrecimiento del pueblo y el descenso de la natalidad. Estas circunstancias favorecieron el mercenariado, el bandolerismo y la piratería como formas de subsistencia.Sin embargo, subsistió un cierto aire intelectual con ayuda de las fiestas, sobre todo las Dionisíacas y los Misterios eleusinos, durante las cuales se representaban comedias

Page 8: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

nuevas, y a las que acudían los reyes y gobernantes helenísticos de Asia y Egipto. Las escuelas filosóficas tampoco perdieron su atractivo y siguieron siendo las más brillantes del mundo conocido. En época romana, Atenas llegaría a ser el equivalente de una ciudad universitaria.

En Esparta hubo un resurgir de los tiempos arcaicos, un intento revolucionario para comenzar de nuevo un Estado, movimiento encabezado por los reyes Agis IV y Cleómenes III. Se abolieron las deudas, se crearon nuevas clases de ciudadanos, se repartieron tierras y se organizó una nueva milicia que obtuvo algunos éxitos hasta que fueron vencidos en el 222 a. C. por la Liga Aquea. Cleómenes fue sucedido por el rey Nabis, que fue el último hasta la intervención de Roma.

Grecia insular

Las islas griegas mantuvieron una cierta prosperidad gracias a las importantes vías creadas para el intercambio entre Asia, Egipto y Occidente. Contaban sin embargo con la constante inseguridad provocada por los piratas de regiones como Iliria, Creta y Cilicia.

Respecto a Cos, su economía se basaba en la producción del vino, en la manufactura de cerámicas y en la fabricación de la bombicina,[1] una seda especial que teñían de púrpura. En esta isla se encontraba una escuela de medicina reconocida en todos los estados helenísticos.

Rodas fue capaz de mantener en pleno período helenístico su estatus de polis. Se consideraba como una república de comerciantes que se comportaban con inteligencia con aquellos extranjeros que ayudasen a aumentar su posición económica. Los tres puertos de Rodas, construidos con grandes diques y buenos arsenales, y situados estratégicamente frente a Alejandría y la costa egea asiática, desarrollaron el papel antaño desempeñara El Pireo. La república rodia poseía además una importante marina de guerra que sabía mantener firmes a los piratas, y se regía por la llamada Lex Rhodia (ordenación helenística del comercio mediterráneo), convirtiéndose así en un enclave vital para el resto de las ciudades mediterráneas.En el plano cultural, resplandecieron en Rodas las artes y las ciencias. Se organizó un gran foco cultural donde acudían sobre todo jóvenes discípulos romanos de la aristocracia. Tuvo grandes maestros de retórica, empezando por Esquines (orador enemigo de Demóstenes), de ciencias como Posidonio de Apamea y muy buenos escultores que crearon escuela. Se considera que el Laoconte es la obra maestra de estos tiempos, realizada en talleres rodios, si bien hay autores que la creen originaria de Pérgamo.

En cuanto a Delos, obtuvo su independencia en el 314 a. C. de Atenas, siendo gobernada mediante una constitución democrática. No obstante, en el año 166 a. C. la intervención de Roma devolvió la isla a manos de Atenas, quien la convirtió en una cleruquía. A partir de este momento su prosperidad fue en aumento, siendo declarada puerto franco, al cual llegaban mercancías de todas partes, a través de Alejandría y de los puertos sirios y fenicios.Delos contaba además con enormes riquezas guardadas en sus templos, razón por la que pronto los sacerdotes se convirtieron en verdaderos banqueros, conocedores de elaboradas técnicas económicas. Adoptaron como una de las principales actividades el cambio y las tasas de interés, generalmente al 10 por ciento. El empleo de la letra de cambio, el cheque y las transferencias fue práctica habitual. Otra fuente de ingresos fue el

Page 9: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

gigantesco mercado de esclavos, en el cual podían llegar a venderse 10.000 por día, tal como menciona Estrabón.Al amparo de esta prosperidad y grandeza, la población cambió radicalmente: todos los nativos fueron deportados a Acaya, quedando en su lugar los colonos de Atenas, los del Mediterráneo, itálicos, orientales, comerciantes y banqueros de todo el mundo conocido. Todos ellos formaban grupos bien diferenciados en cuanto a costumbres y religión, pero mantenían entre sí buenas relaciones. Se trataba de una burguesía mercantil, cuyas casas estaban decoradas lujosamente y donde podía contemplarse el arte helenístico en todo su apogeo. Tal prosperidad se alargó hasta el siglo I de nuestra era, hasta los saqueos y masacres cometidas por Menofaneses, general de Mitídrates IV de Partia, quien ordenó a sus soldados que mataran a todos los griegos, sin que importase su edad. Los habitantes que no eran griegos abandonaron la isla, dejándola desierta, lo que aceleró su ruina.

Las koina

Las koina (κoινα, plural de koinón, κoινoν) fueron los estados federales, también llamados Ligas, formados por las ciudades más pequeñas. Estas confederaciones surgieron como una forma de protección y resistencia frente a los gobernantes de Macedonia, el poder hegemónico de este período, y al que sólo hacían frente estas ligas federales. Fueron dos las más influyentes durante el periodo helenístico, el Koinón Etolio (o Liga Etolia) y el Koinón Aqueo (o Liga Aquea).

El Koinón Etolio llegó a ser un estado federal muy extenso, agrupando Acarnania, Lócrida occidental y Tesalia. En las asambleas se agrupaban todos los ciudadanos de cada ciudad aliada, celebrándose dos sesiones al año, eligiéndose al jefe o estratega para un mandato anual. El koinón etolio demostró constantemente una gran hostilidad hacia el poder de Macedonia. El declive etolio comenzó al mismo tiempo que el progreso romano, hasta que en el 189 a. C. perdieron su independencia finalmente.

El Koinón Aqueo fue el rival del Koinón Etolio. Tras apoderarse de Corinto, fue poco a poco anexionándose todo el Peloponeso, absorbiendo también a la ciudad de Esparta. En un principio este koinón fue aliado de Roma, la cual nunca confió en esta liga. En el 146 a. C. se declararon abiertamente enemigos de Roma, quien arrasó Corinto en respuesta, quedando la liga disuelta. Al igual que su rival etolio, su principal enemigo fue el reino de Macedonia. Contaba con una asamblea a la que podían asistir todos los ciudadanos de la confederación, con cuatro sesiones al año en el santuario de Zeus, situado en el nomo de Aigio (llamada Egio hasta 1991). Su jefe o estratega era también designado anualmente.

Las ciudades

Los sucesores de Alejandro tuvieron buen cuidado en seguir el espíritu que su gran general les había infundido: helenizar el Oriente y llevar hasta los confines conquistados la civilización griega a la que consideraban la mejor (si no la única) para el hombre. Durante la etapa del griego clásico los grandes centros urbanos fueron llamados polis (Atenas, Siracusa, Corinto), que eran verdaderos Estados independientes. Las nuevas ciudades del mundo helenístico contaban con una autonomía jurídica y financiera, estaban gobernadas por magistrados, pero ya no era el Estado independiente sino que todas ellas dependían de un gobernador nombrado por el rey, llamado epistates. Por otra parte los reyes de los territorios helenísticos participaban personalmente con su fortuna en el embellecimiento y engrandecimiento de muchas de estas ciudades, siendo los principales mecenas de la construcción de edificios públicos o de la reconstrucción o restauración. Todas estas ciudades

Page 10: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

con su régimen de vida y su política reformada en gran medida favorecieron el auge económico y como consecuencia, el tesoro real.Aunque en el fondo la política administrativa fue casi la misma en los reinos helenísticos, y el afán de conservar y extender la cultura griega era un lazo de unión, cada reino dotó a sus ciudades de un estilo propio y diferente. No siempre la fundación de estas ciudades partió de la nada. Dentro del concepto fundacional se puede incluir un simple cambio de nombre de una ciudad ya existente (con añadidos y mejoras) o la transformación de un pueblo pequeño indígena en una ciudad próspera.El trazado de las ciudades era la consecuencia de un estudio bastante serio. Además de la belleza y el sentido práctico se tenían en cuenta muchos más detalles que se conocen en la actualidad gracias a las inscripciones de reglamentos municipales descubiertas en los yacimientos arqueológicos. Se daban normas para la anchura de las calles, para la distancia entre las viviendas, para la construcción de acueductos, recogida de basura, etc.

Ciudades seléucidas

El primero de los reyes, Seleuco I Nicátor fundó 16 ciudades a las que dio el nombre de Antioquía en recuerdo de su padre llamado Antíoco. Y con otros nombres diversos llegó a fundar hasta 60. Su hijo, Antíoco I Sóter, siguió multiplicando la fundación de ciudades y más tarde, en época de Antíoco IV Epífanes, hubo otro gran impulso de construcción.La fundación de una ciudad nueva, desde un punto de vista urbanístico, seguía las reglas difundidas por el filósofo y arquitecto griego Hipódamo de Mileto hacia el año 480 a. C. y que aconsejan un proyecto cuadrilátero con calles cortadas en ángulo, con zonas que puedan ocupar los servicios, los edificios oficiales, templos y con otras zonas dedicadas a vivienda. Las mejores ciudades seléucidas son las construidas en Siria y de todas ellas las más conocidas y estudiadas son Antioquía (en la orilla izquierda del río Orontes, navegable hasta el mar) y Apamea, situada más al norte de Antioquía.En la antigua Mesopotamia surgieron zonas de gran actividad urbanística donde aparecieron Antioquía-Edesa, Antioquía-Nisibis, Dura Europos, Seleucia del Tigris y Babilonia.

Ciudades ptolemaicas

Alejandría fue la ciudad capital de los ptolomeos y la que más importancia tuvo durante el periodo helenístico. Fundada por el propio Alejandro Magno fue durante muchos siglos la referencia a la grandiosidad y actividad económica así como el gran centro del estudio de las ciencias y de las artes.Ptolomeo I Sóter fundó Náucratis y Ptolemaida, pero Alejandría siguió siendo la ciudad por excelencia.

Ciudades atálidas

La capital de los atálidas fue Pérgamo, una ciudad que quiso ser la Atenas de los tiempos clásicos. Tuvo una gran biblioteca y un museo de escultura donde se dice que nació la crítica de arte. Los arquitectos siguieron en Pérgamo las mismas normas de Hipódomo de Mileto, pero el enclave que ofrecían los terrenos hizo que los constructores se lucieran edificando una ciudad totalmente distinta, con la acrópolis en todo lo alto y el perímetro urbano dividido en tres terrazas, cada una con sus templos, que se unían entre sí por una original vía trazada en zigzag y con grandes escaleras.

Page 11: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Los edificios públicos

Como en épocas anteriores, los edificios públicos fueron un capítulo importante en estas ciudades helenísticas, adaptándolos a la necesidad de los tiempos, pero siguiendo siempre el modelo griego que tanto admiraban.

El ágora

Se prestó gran atención a este espacio público que en tiempos anteriores se había limitado a ser una simple plaza de mercado. Los pórticos vinieron a configurar este espacio, favoreciendo su aspecto, dándole nueva y mejor prestancia. El ágora se empezó a construir de acuerdo con un plan hipodámico (calles trazadas en ángulo recto), es decir, se acotó un espacio rectangular y porticado en varios de sus lados. Fueron ágoras diseñadas con amplitud, donde se reunía la actividad comercial que podía disfrutar de un espacio suficiente y cómodo. Cada ciudad tenía al menos una, según sus necesidades. En Delos se construyeron varias ágoras en las cercanías del puerto. En Atenas también se modificó este espacio y se embelleció con tres nuevos pórticos, uno de ellos ofrecido a Átalo II.

[editar] Los pórticos

La construcción de pórticos fue una moda que se extendió de manera asombrosa por todas las ciudades. La sensación de magnitud y suntuosidad que ofrecían estas grandes obras hicieron que las ciudades que poseían un pórtico fueran las más bellas y armoniosas. Pero además se consideraban de gran utilidad dando cobijo en las horas de mucho sol o en los días de lluvia. Los pórticos monumentales de las ciudades importantes llamaron enseguida la atención de los romanos cuando tuvieron contacto con ellas en sus conquistas de Oriente. Muchos historiadores y críticos de arte, como José Pijoán opinan que fue a la vista de estos pórticos cuando los romanos desarrollaron el gusto por el arte griego. Muchas veces se construía un pórtico por el capricho de embellecer un santuario, el rincón de una ciudad o por delimitar un ágora.

[editar] Teatros

Los teatros también se multiplicaron. Se construyeron a la antigua usanza, generalmente adosados a la ladera de una colina o elevación del terreno. En esta época tuvieron una modificación que dio lugar al escenario permanente donde actuaban los actores. Anteriormente éstos se situaban sobre una plataforma que se colocaba en el momento de la actuación delante del proscenio. Uno de los teatros que más información puede dar al respecto es el de Priene del año 150 a. C.

[editar] Gimnasios

Éste fue el complejo arquitectónico más difundido en el mundo helenístico. No hubo ciudad o poblamiento por muy humilde que fuera que no tuviese construido su gimnasio. El gusto por los ejercicios físicos (heredado de los griegos) fue general en este periodo y fue parte de la educación de los jóvenes. Además, en el complejo gimnástico no sólo se realizaban ejercicios físicos sino que se daban enseñanzas diversas, conferencias, y se organizaban lo que hoy se llamaría «actos culturales». Los edificios solían estar rodeados de grandes jardines con bonitos y agradables paseos donde los discípulos escuchaban las charlas de sus maestros filósofos. Tampoco olvidaron el tema religioso, de manera que los gimnasios fueron protegidos y dedicados a un dios o en algunos casos a un héroe como Hermes o Heracles.

Page 12: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Estos centros fueron de una gran ayuda para la educación de los nativos, sobre todo en Asia. Acudían a ellos con gran entusiasmo y deseos de aprender. Llegaron a formar asociaciones que de manera general eran llamadas apo tou gymanasiou ('los que salen del gimnasio').

[editar] Los negocios

El mundo de los comerciantes y de los negocios también tuvo necesidad de enclaves especiales. Se construyeron edificios comparables con las cámaras de comercio y otros menos importantes pero igualmente necesarios como almacenes y despachos. Las excavaciones de Delos han dado abundante información sobre estos edificios, en especial sobre el conjunto de los Posidoneístas de Bertos, actual Beirut, que poseían un importante complejo formado por una lujosa residencia llena de obras de arte, y sobre el otro conjunto de los Negotiatiores itálicos con un ágora particular, tiendas, despachos y demás dependencias. Los romanos lo imitarían en época imperial en Ostia con la Plaza de las corporaciones.

Religión y filosofía

La religión consistía en una suerte de sincretismo entre el panteón clásico, los dioses locales y las deidades del antiguo Oriente. Entre las divinidades propias de este período se destacan la diosa Tique [Τύχη] y el dios grecoegipcio Serapis [Σέραπις]. Asimismo, cobraron gran relevancia los cultos de Isis, Dionisos y Cibeles.La Filosofía, que en épocas anteriores abarcaba todos los saberes, se desmembró paulatinamente de las ciencias empíricas y se quedó como ciencia del pensamiento cuya preocupación se inclinó más a los problemas individuales que a la propia naturaleza del mundo. En este período surgieron varias sectas y escuelas filosóficas de entre las que cabe mencionar:

Cínicos Cirenaicos Epicúreos Escépticos Estoicos Megáricos

[editar] Las escuelas y academias

La mayor parte de las escuelas del siglo IV subsistieron en época helenística. La escuela de Platón continuó la obra filosófica y la Academia sobrevivió hasta el siglo I a. C., recibiendo en distintas etapas distintos nombres.

[editar] Academia Antigua

Su característica es seguir siendo fiel al maestro Platón. Después de este filósofo los directores de la Academia fueron: su sobrino Espeusipo (407–339 a. C.) durante ocho años, su discípulo Jenócrates (c. 395–314 a. C.) que fue director hasta su muerte, Polemón (351–270 a. C.) que estuvo al frente desde el 314 hasta su muerte y el tebano Crates.

Page 13: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

[editar] Academia Media

Se caracteriza por la introducción del escepticismo y sus directores fueron el escéptico Arcesilao de Pitane en Eolia (c. 315–240 a. C.) (fue maestro de Eratóstenes), Carnéades de Cirene (214–129 a. C.) que había estudiado en la propia Academia con Hegesino, Clitómaco de Cartago, filósofo cartaginés discípulo del anterior y Metrodoro de Estratonicea.

[editar] Academia Nueva

Sus filósofos se centran más en el eclecticismo, abandonando las teorías del escepticismo. Su director fue Filón de Larisa (150–83 a. C.) que departió sus enseñanzas en Roma y tuvo como discípulo a Cicerón sobre quien ejerció una gran influencia; su discípulo Antíoco de Ascalón fue su rival en la dirección de la Academia. Después tuvo lugar el neoplatonismo de Plotino cuyo máximo exponente fue Proclo.

[editar] Escuela peripatética

La escuela de Aristóteles se vio engrandecida con el gran impulso que le dio el orador Arcesilao, fundador de la Academia Nueva. Su doctrina rechazaba el dogmatismo de los estoicos y trataba de demostrar que lo más importante era buscar y descubrir lo más verosímil o probable.Teofrasto de Éreso (370–287 a. C.), alumno de Aristóteles y colaborador, fue también su sucesor en la escuela peripatética que experimentó un gran desarrollo a partir de su ingreso y colaboración.

[editar] Escuela del escepticismo

El escepticismo se desarrolló en gran medida durante el periodo helenístico aunque no hubo ninguna auténtica figura que lo representase, pero la escuela se mantuvo muy activa aun después de la conquista romana dándose el caso de que sus mejores representantes son de la época imperial: Enesidemo de Cnoso (en Creta), maestro en Alejandría y Sexto Empírico, perteneciente además a la escuela médica empírica Elvia

[editar] Escuela del epicureísmo

Epicuro (341–270) compró en Atenas una casa con huerto o jardín que se convirtió en el lugar de encuentro de sus alumnos, que acabaron llamando al sitio «El Jardín». Uno de los fines que llevó a Epicuro a la utilización de esta sede nueva fue el de oponerse a la influencia de la Academia heredera de las enseñanzas de Platón. El epicureísmo intentaba dar solución al problema de la felicidad. Los epicúreos buscaban la paz consigo mismos para lo que elaboraron un método que pretendía combatir la tristeza, la angustia, el aburrimiento y las preocupaciones inútiles que llegaban a acongojar al ser humano.

[editar] Escuela del estoicismo

Su creador fue Zenón de Citio (335–263), un semita comerciante que optó por dedicarse a la filosofía. Su doctrina se llamó también doctrina del pórtico, stoa en griego, de donde le viene el nombre de estoicismo. Se trataba del Pórtico de Poecile en Atenas, lugar donde se reunían sus discípulos. A su muerte la escuela fue dirigida por Cleantes de Aso (ciudad de la Tróade) y Crisipo de Soli de Solos quienes coordinaron y ordenaron sus teorías. Estos tres filósofos enseñaron lo que después se ha llamado antiguo estoicismo o estoicismo antiguo. En el siglo II se renovaron las teorías con el nombre de estoicismo medio siendo uno de sus mejores representantes Diógenes de

Page 14: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Babilonia, nacido en Seleucia del Tigris, seguido por su discípulo Crates de Mallos y después Blosio de Cumas que fue maestro de Tiberio Graco. En la segunda mitad del siglo II a. C. destacan dos grandes pensadores y maestros del estoicismo medio: Panecio de Rodas (180–110 a. C.) y Posidonio de Apamea de Orontes (155–51 a. C.).

[editar] Cultura helenística

Las grandes ciudades se convirtieron, en este período, en los centros del saber, de las ciencias y del arte. A partir del siglo IV, la mayoría de los artistas fueron griegos de las colonias de Asia. Se dio un gran avance en el mundo de las ciencias, medicina, astronomía y matemáticas. Estas últimas fueron disciplinas estudiadas y enseñadas por grandes sabios como Euclides, Apolonio, Eratóstenes, Arquímedes, etc.Nació la filología en todos los aspectos abarcables. Muchos bibliotecarios y hombres de letras dedicaron su vida y sus estudios a dar forma a las obras literarias, a la gramática, las palabras, la crítica literaria, clasificación de libros, etc.En literatura, se siguieron los modelos clásicos. Son dignos de mención los nombres de Calímaco de Cirene y de su discípulo Apolonio de Rodas.Con respecto a las artes plásticas, el período helenístico alcanzó una grandiosidad y una madurez que no tuvo nada que envidiar al período anterior. Célebres monumentos, entre los que se encuentran dos de las llamadas por los romanos «Siete Maravillas del Mundo», se construyeron en esta época: el Faro de Alejandría y el Coloso de Rodas. Asimismo cabe mencionar otras importantísimas obras como el Templo de Apolo, cerca de Mileto y el Altar de Zeus en Pérgamo.Grupo escultórico Laocoonte y sus hijos. Es una de las obras más representativas del período helenístico. Fue realizada por Hagesandro, Atenodoro y Polidoro de Rodas hacia 50 ddC (Museo Pío-Clementino, Vaticano).En el período comprendido entre el siglo II a. C. y el I a. C., salieron a la luz las esculturas más famosas:

Apolo de Belvedere Victoria alada de Samotracia Diana cazadora Venus de Milo (Milo es una isla situada al sureste de Grecia, en el archipiélago de las islas

Cícladas) Relieves del altar de Zeus en Pérgamo

Sin olvidar las de otros siglos como:

Gálata Ludovisi (225 a. C.), de la Escuela de Pérgamo Gálata moribundo (225 a. C.), de la Escuela de Pérgamo Alegoría del Nilo , de la Escuela neoplatónica de Alejandría Laocoonte y sus hijos , de la Escuela de Rodas y ya de época romana (50 d.C)

El ámbito de las joyas tuvo su estilo propio aunque ligeramente influenciado por la etapa anterior. Se pusieron de moda los colgantes con formas de victorias aladas, palomas, ánforas y cupidos, utilizando para su elaboración las piedras de colores, sobre todo el granate. También se utilizaban otras gemas para hacer figuras en miniatura, como el topacio, ágata y amatista. El vidrio entró en los talleres de los artistas como sustituto de las piedras preciosas y con este material confeccionaban toda clase de objetos, sobre todo camafeos.

Page 15: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Artículo principal: Arte helenístico.

[editar] El sabio y la ciencia

Durante el periodo helenístico las ciencias tal y como las entendemos hoy se independizaron de la filosofía, concepto éste que en la antigüedad comprendía todo el saber. Se constituyeron en materias autónomas, siendo favorecidas para su desarrollo por el mecenazgo gracias al cual fueron creadas aulas de investigación y museos como el de Alejandría, que comprendía observatorios, jardines botánicos y zoológicos, salas de medicina y disección, etc. Contribuyó también a este desarrollo la ampliación del mundo conocido.El estudio de las matemáticas, sobre todo en Alejandría tuvo una importancia enorme no sólo por la materia en sí sino como aplicación al conocimiento del Universo. En el museo de Alejandría estudiaron, investigaron y enseñaron grandes sabios como Euclides (que fue solicitado por Ptolomeo I Sóter), que supo organizar todas las investigaciones precedentes y añadir las suyas propias, aplicando un método sistemático a partir de principios básicos. Euclides sentó las bases del saber matemático a partir de las cuales evolucionó dicha materia a través de los siglos hasta llegar a la reciente invención de las nuevas matemáticas.En geometría el gran maestro en Pérgamo y en Alejandría fue Apolonio de Pérgamo. Ofreció la primera definición racional de las secciones cónicas. Arquímedes de Siracusa (287–212 a. C.) fue un gran matemático, interesado en el nº π al que dio el valor de 3,1416. Se interesó también por la esfera, el cilindro y fundó la mecánica racional y la hidrostática. Estudió la mecánica práctica inventando máquinas de guerra, palancas y juguetes mecánicos. Su mejor invento práctico de uso inmediato fue el tornillo sin fin, utilizado en Egipto para las labores de irrigación. Sóstrato de Cnido, ingeniero y arqueólogo fue considerado como otro de los grandes sabios. Fue el constructor del faro de Alejandría.El estudio de las matemáticas favoreció el conocimiento de la astronomía. Se despertó un nuevo interés científico por conocer la Tierra, su forma, su situación, su movimiento en el espacio. Eratóstenes de Cirene, bibliotecario de Alejandría creó la geografía matemática y fue capaz de medir la longitud del meridiano terrestre. Aristarco de Samos (310–230 a. C.) fue matemático y astrónomo y determinó las dimensiones del Sol y la Luna y sus respectivas distancias a la Tierra. Aseguró que el Sol estaba quieto y que era la Tierra quien se movía a su alrededor. Se le considera como el primer antecesor de Copérnico.Hiparco de Nicea estaba dotado de un gran don de observación y desde su observatorio de Rodas pudo elaborar un gran mapa del cielo con más de 800 estrellas catalogadas y estudiadas por él. Gran conocedor de las teorías de los caldeos, comparó sus estudios con aquellos, descubriendo la precisión de los equinoccios. Hiparco sentó las bases de la trigonometría estableciendo la división del ángulo en 360 grados que dividió en minutos y segundos.Posidonio de Apamea además de dedicarse a la filosofía fue un gran científico. Estudió el hasta entonces misterio de las mareas, explicando científicamente su existencia y su relación con la luna.Algunas deficienciasEl sistema de notación de los números se hacía con la ayuda del alfabeto, así α era igual a 1, ι era igual a 10, ρ era igual a 100. Si escribían ρια, estaban escribiendo el nº 111. Este sistema dificultaba mucho el manejo de las matemáticas. En el siglo III a. C. Diofanto aportó una notación algebraica que fue buena pero que todavía resultó insuficiente. Otra deficiencia era la gran carencia de instrumentos de observación para las ciencias naturales. Pese a todo esto, la humanidad llegó hasta el Renacimiento utilizando y valiéndose de los grandes inventos y descubrimientos de los sabios helenísticos, sobre todo de los procedentes de Alejandría, Pérgamo y Rodas.

Page 16: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

[editar] Biología y medicina

La figura del médico pasó a sustituir al mago o hechicero que se valía de los milagros. Fue un personaje respetado y estimado, fue considerado un gran sabio en quien se podía confiar no sólo para ayuda física sino también para ayuda psicológica. Los lugares helenísticos donde floreció principalmente la medicina fueron:

Alejandría, donde ya existía un cierto conocimiento científico a causa de la tradición de momificar y del respeto y estudio de los despojos mortales.

Cos, lugar de nacimiento de Hipócrates (siglo V a. C.) el célebre médico y escritor, considerado padre de la medicina. En Cos se mantenía una tradición médica. Lo mismo ocurría en aquellas ciudades en las que existía un antiguo santuario de Asclepio, como Cnido, Epidauro y Pérgamo.

Herófilo de Calcedonia aprendió en Alejandría mucho sobre anatomía, practicando con la disección de cadáveres e incluso con la vivisección de seres humanos (criminales convictos). Descubrió el sistema nervioso y explicó su funcionamiento y explicó el de la médula espinal y del cerebro y estudió el ojo y el nervio óptico. Fue poniendo nombres de objetos que él creía parecidos en la forma a las partes de anatomía que iba estudiando y descubriendo. Este sabio fue un pionero de la anatomía humana. Sus estudios y descubrimientos fueron trasmitidos gracias a la labor de la escuela de medicina que fundó y que duró unos 200 años.Erasístrato de Ceos (315–240 a. C.) trabajó e investigó en Alejandría siguiendo la labor de Herófilo. Fundó también una escuela de medicina. Se le considera el padre de la fisiología. Se dedicó sobre todo al estudio de la circulación de la sangre cuyos descubrimientos no fueron superados hasta la aparición de William Harvey.

[editar] Judaísmo helenístico

A principios del siglo I a. C. tiene lugar la diáspora helenística, vale decir, la dispersión del pueblo judío a través del mundo alejandrino. A partir de entonces, gran parte de los judíos —especialmente los que vivían en Egipto, Cirenaica y Siria— comenzaron a usar el griego para entenderse entre ellos y también en las sinagogas. De este modo, comenzó a hacerse distinción entre los «judíos helenísticos» (o helenizados) y los «hebreos» (o judaizantes), que fueron aquellos que se opusieron y resistieron a la influencia griega. San Lucas escribió sobre este tópico en los Hechos de los Apóstoles 6:1 y 11:20. Es así como el término «helenístico» pasó a designar a grupos humanos que, aunque no tuvieran sangre griega, seguían y adoptaban la cultura y la lengua griegas.En este período tuvo lugar también la traducción griega del Antiguo Testamento que se conoce con el nombre de Septuaginta o Biblia de los Setenta, ya que, según se cree, habría sido efectuada por un grupo de setenta y dos sabios alejandrinos.De entre los judíos helenizados más destacados, puede mencionarse al filósofo Filón de Alejandría y al historiador Flavio Josefo.

[editar] Decadencia

Con la llegada de los romanos y su hegemonía sobre todos estos pueblos de la antigüedad, llegó a su fin, en teoría, el período helenístico; aunque lo cierto es que Roma, pasados algunos años y como consecuencia del contacto y conocimiento del arte griego extendido por todas sus colonias y provincias, tomó el relevo y puede decirse que fue la continuación de la cultura helenística, empezando por el propio idioma. La clase alta tenía a gala hablar griego y se educaba a los hijos en

Page 17: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

esta cultura. Los grandes políticos romanos, por mucho que tuvieran un cargo importante, serían siempre menospreciados por el resto si no eran capaces de entenderse en el idioma griego.

Estoicismo

El estoicismo es uno de los movimientos filosóficos que, dentro del periodo helenístico, adquirió mayor importancia y difusión. Fundado por Zenón de Citio en el 301 a. C., adquirió gran difusión por todo el mundo greco-romano, gozando de especial popularidad entre las élites romanas. Su período de preeminencia va del siglo III a. C. hasta finales del siglo II d. C. Tras esto, dio signos de agotamiento que coincidieron con la descomposición social del Alto Imperio romano y el auge del cristianismo.

Perspectiva histórica

El estoicismo fue fundado por Zenón de Citio (aprox. 333–262 a. C.) —a veces llamado Zenón el estoico para distinguirlo de Zenón de Elea—, de origen chipriota y posiblemente de ascendencia mixta, griega y oriental.[1] Se trasladó a Atenas en el 311 a. C. después de una vida agitada. Por aquel entonces Atenas era el centro cultural del mundo griego, donde se congregaban las principales escuelas de filosofía. Durante su estancia, tomó contacto con la filosofía socrática, en especial la de la escuela cínica, y la megárica. Según Diógenes Laercio, inicialmente se inclinó por el cinismo, siendo alguien especialmente cercano a Crates, pero pronto abandonó esta escuela al rechazar las numerosas «exageraciones» en que estos incurrían, porque no podían ofrecerle ningún programa de vida válido. Tras este abandono del cinismo, estudió con otros filósofos de las escuelas académica, aristotélica y megárica pero, insatisfecho con ellas, acabó creando su propia escuela, en la que combinaba múltiples aspectos cínicos con los de otros filósofos como Heráclito.[2] Desde la antigüedad, se estudió la posible influencia sobre Zenón de doctrinas semíticas tales como el judaísmo o las filosofías del oriente medio; el considerable parecido entre el estoicismo y el cristianismo en algunas doctrinas, sobre todo en la ética y en la cosmología, sugirieron a panegiristas cristianos como Quintiliano y Tertuliano que Zenón estaba familiarizado, por su origen semita, con el judaísmo.[3]

El término estoicismo proviene del lugar en el que Zenón comenzó a dar sus lecciones en el año 301 a. C., a saber, la Stóa poikilé (en griego Στοα, stoa, ‘pórtico’), que era el Pórtico pintado del ágora de Atenas. Pronto atrajo a numerosos seguidores quienes, tras la muerte de Zenón, continuarían y expandirían su filosofía. El estoicismo fue la última gran escuela de filosofía del mundo griego en ser fundada, y continuó existiendo hasta que en el año 529 d. C. el emperador Justiniano clausuró la Escuela de Atenas.El corpus doctrinal del estoicismo se basó en las escrituras de Zenón, hoy en día perdidas; no obstante, se sabe que escribió numerosas obras entre cuyos títulos destacaban: De la vida conforme a la naturaleza; De los universales; Argumentos dialécticos y De las pasiones. Cuando Zenón muere en el 261 a. C. se hacen cargo de la escuela Cleantes y Crisipo. A decir de Laercio, a este último se le debe que el estoicismo perdurase: «Sin Crisipo no habría habido la Stóa». En efecto, Crisipo, que dirigirá la Stóa desde el 232 a. C. hasta su muerte, acaecida en el 208 a. C., fijó el canon del estoicismo, perfeccionó las investigaciones lógicas y sistematizó las enseñanzas de Zenón. Desgraciadamente de su obra sólo han sobrevivido algunos escasos fragmentos y unas pocas referencias hechas por otros autores, resultando complicado discernir qué partes del ideario se deben a Zenón, a Crisipo y a Cleantes. En general, apenas si se han conservado algunos fragmentos de los textos estoicos más antiguos.Con la muerte de Crisipo, se dio por concluida la primera fase del estoicismo, llamada Estoicismo antiguo. Esta primera etapa se caracterizó sobre todo por el establecimiento formal de la doctrina. Tras Crisipo, dirigieron la escuela Diógenes de Babilonia y Antípater de Tarso, comenzando la

Page 18: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

época denominada estoicismo medio. Durante la misma se da la expansión del estoicismo por todo el mundo mediterráneo, aprovechando el impulso del mundo helenístico y las redes comerciales surgidas con el auge de Roma. Sus principales figuras fueron Panecio de Rodas (185–109 a. C.) y, sobre todo, Posidonio de Apamea. Quizá el hecho más destacado de este período fue la introducción del estoicismo entre las élites romanas. La sociedad aristocrática romana de los siglos II y I a. C. valoraba en mucho los tiempos de «nuestros padres», refiriéndose a los siglos anteriores en que la relevancia económica y militar de Roma todavía era escasa. Se idealizaba y exaltaba la sencillez y la sobriedad de la vida de aquellos tiempos y, como en todo el mundo griego, se miraba con desconfianza a los lujos y a las costumbres modernas, más sofisticadas, que se habían ido introduciendo conforme la República Romana ganaba preeminencia. La doctrina estoica, muy favorable a esos puntos de vista, fue introducida con éxito, y ganó adeptos tan conocidos como Catón el Viejo, Escipión el Africano y Catón el Joven; la notable fama de estos favoreció aún más al estoicismo, que pronto fue la escuela filosófica más admirada por los romanos.Los estoicos antiguos dividieron la filosofía en tres partes: la lógica (teoría del conocimiento y de la ciencia), la física (ciencia sobre el mundo y sobre las cosas) y la ética (ciencia de la conducta). Todas ellas se refieren a aspectos de una misma realidad: el universo en su conjunto y el conocimiento sobre él. Este puede ser explicado y comprendido globalmente porque es una estructura organizada racionalmente de la que el hombre mismo es parte integrante, siendo la faceta más importante la ética.De los escritos del período medio apenas se conservan, de nuevo, más que unos pocos textos fragmentados. Usualmente, se considera que tras la muerte de Catón el Joven y la resolución de las guerras civiles que condujeron al establecimiento del Imperio romano, surge la última etapa del estoicismo, el llamado Estoicismo nuevo o Estoicismo romano. Los filósofos de esta etapa han llegado a ser mucho más famosos y conocidos que los estoicos antiguos (y sus obras son las conservadas en mayor número), y materializaron la implantación del estoicismo como la principal doctrina de las élites romanas. El estoicismo romano destaca por su vertiente eminentemente práctica, donde las consideraciones lógicas, metafísicas o físicas del estoicismo antiguo pasan a un segundo plano para desarrollar, sobre todo, la vertiente ética de la escuela. Los principales exponentes de esta etapa, y posiblemente los estoicos más famosos, fueron Lucio Anneo Séneca (4 a. C.–65 d. C.), uno de los escritores romanos más conocidos y quizá el estoico mejor conocido, Epicteto (50–130 d. C.), nacido esclavo, y el emperador Marco Aurelio (121–180 d. C.). La obra de Séneca, Marco y Epicteto permite acercarse, de manera sencilla y didáctica, a los principales aspectos del estoicismo, si bien no introdujeron ningún elemento esencialmente original en la doctrina.Tras la muerte de Marco Aurelio, se considera que el estoicismo entra en decadencia. Las sucesivas crisis políticas, económicas y militares que asolan el Imperio romano durante el siglo III tienen como consecuencia una revalorización de la espiritualidad que el estoicismo no puede afrontar, surgiendo el Neoplatonismo, que, a partir del 250 d. C., desplazará al estoicismo como principal doctrina de las élites. El giro cultural de esta época provoca que el plan de vida estoico pase a ser negativamente considerado; será esencialmente en esta época en la que el estoicismo se ganará su fama de envarado y rígido. Igualmente, el auge del cristianismo afecta negativamente a todas las escuelas filosóficas helenísticas, al ser rechazadas muchas de sus enseñanzas por contrarias a la doctrina cristiana. Para el año 300, la única de éstas capaz de objetar algo al cristianismo es el neoplatonismo, y el triunfo de aquél sentencia definitivamente al movimiento helenista en general, que formalmente concluye en el 529 d. C., cuando Justiniano cierra las escuelas filosóficas de Atenas (el Liceo, la Academia, la Stoa).No obstante, el estoicismo influirá en numerosas corrientes filosóficas posteriores, desde los primeros padres de la Iglesia hasta Descartes y Kant. Como se ha dicho, los primeros padres de la Iglesia admiraron del estoicismo su ética, que consideraba especialmente cercana a la suya propia; su calma, su serenidad, así como su posición frente a las adversidades hicieron que algunos cristianos como Tertuliano trataran a estoicos como Séneca en los términos de «saepe noster» («a

Page 19: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

menudo, uno de los nuestros»), mientras que San Jerónimo lo incluyó en su catálogo de santos. Incluso se difundió la leyenda de que Séneca había sido bautizado antes de morir por San Pablo, con quien además habría mantenido correspondencia, y que Marco Aurelio habría igualmente mantenido correspondencia con el Papa y algunos cristianos romanos. Durante el Renacimiento, el estoicismo ganó difusión entre las corrientes humanistas y universitarias: la primera obra de Calvino fue una edición de De clementia de Séneca, y las referencias al estoicismo nuevo son constantes en Erasmo, Juan Luis Vives y Michel de Montaigne. En esta época se revalorizó la actitud vital estoica; en la actualidad, se utiliza cotidianamente el término «estoicismo» para referirse a la actitud de tomarse las adversidades de la vida con fortaleza y aceptación.

Posidonio.

[editar] Fases

Estoicismo Antiguo (siglos III–II a. C.):o Zenón de Citio o Cleantes o Crisipo

Estoicismo Medio (siglos II–I a. C.):o Panecio (180–110 a. C.)o Posidonio (155–51 a. C.)

Estoicismo Nuevo o romano (siglos I d. C.-III d. C.):o Séneca o Musonio Rufo o Epicteto o Marco Aurelio

[editar] Filosofía estoica

La filosofía no promete asegurar nada externo al hombre: en otro caso supondría admitir algo que se encuentra más allá de su verdadero objeto de estudio y materia. Pues del mismo modo en que el material del carpintero es la madera, y el del escultor, bronce, el objeto del arte de vivir es la propia vida de cada cual.

Epicteto.[4]

Los estoicos proclamaron que se puede alcanzar la libertad y la tranquilidad tan sólo siendo ajeno a las comodidades materiales, la fortuna externa, y dedicándose a una vida guiada por los principios de la razón y la virtud (tal es la idea de la imperturbabilidad o ataraxia). Asumiendo una concepción materialista de la naturaleza, siguieron a Heráclito en la creencia de que la sustancia primera se halla en el fuego y en la veneración del logos, que identificaban con la energía, la ley, la razón y la providencia encontradas en la naturaleza. La razón de los hombres se consideraba también parte integrante del logos divino e inmortal. La doctrina estoica que consideraba esencial cada persona como miembro de una familia universal ayudó a romper barreras regionales, sociales y raciales, y preparar el camino para la propagación de una religión universal. La doctrina estoica de la ley natural, que convierte la naturaleza humana en norma para evaluar las leyes e instituciones sociales,

Page 20: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

tuvo mucha influencia en Roma y en las legislaciones posteriores de Occidente. Además tuvo importancia en corrientes y filósofos posteriores como Descartes y Kant.En el campo de la lógica desarrollaron la lógica inductiva. Dividieron la lógica en Retórica (ciencia del recto decir) y Dialéctica.En el campo de la física retornaron a la filosofía de Heráclito: todo está sometido al cambio, al movimiento. La física, según el estoicismo, es el estudio de la naturaleza tanto del mundo físico en su totalidad como de cada uno de los seres que lo componen, incluidos los seres divinos, humanos y animales. Fundamentalmente especulativa, y en clara deuda con el pensamiento de Parménides de Elea (unidad del ser) y Heráclito, la física estoica concibe la naturaleza como un fuego artístico en camino de crear.El universo es un todo armonioso y causalmente relacionado (es decir, todo esta relacionado por una serie de causas), que se rige por un principio activo, el Lógos cósmico y universal del que el hombre también participa. Este lógos cósmico, que es siempre el mismo es llamado también Pneuma (‘soplo’, Spiritu en latín), aliento ígneo, ley natural, naturaleza (physis), necesidad y moira (‘destino’, Fatum en latín), nombres todos ellos que hacen referencia a un poder que crea, unifica y mantiene unidas todas las cosas y que no es simplemente un poder físico: el pneuma o lógos universal es una entidad fundamentalmente racional: es Dios (panteísmo), un alma del mundo o mente (razón) que todo lo rige y de cuya ley nada ni nadie puede sustraerse. Inmanente al mundo, el lógos es corpóreo, penetra y actúa sobre la materia (hylé): principio pasivo, inerte y eterno que, en virtud del pneuma o lógos, produce todo ser y acontecer. Todo en la naturaleza es mezcla de estos dos principios corpóreos (materialismo).Aunque la naturaleza (physis) es plenamente racional, no rige de la misma forma a todos los seres:

Los hombres nacen con un alma[5] como si fuera una «tabla rasa» pero cuando adquieren cierta madurez pueden, mediante el uso de una «fantasía» aceptar o rechazar las impresiones que los «iconos» que desprenden las cosas fijan en el alma como conceptos. Cuando el hombre maduro ejerce una «fantasía cataléptica» es capaz de comprender la verdad de los conceptos, a partir de dichas impresiones y elaborar a partir de los mismos juicios verdaderos y razonamientos verdaderos.

En los animales irracionales mediante un alma sensible que percibe pero no conoce. Mediante un alma vegetal en las plantas. Mediante el movimiento local de los átomos regidos por el fatum o destino.[6]

La teología estoica es panteísta: no hay un Dios fuera de la naturaleza o del mundo; es el mismo mundo en su totalidad el que es divino, lo que justifica que la creencia en los dioses, pese a su heterogeneidad, sea universal.La concepción de un cosmos dotado de un principio rector inteligente desemboca en una visión determinista del mundo donde nada azaroso puede acaecer: todo está gobernado por una ley racional que es inmanente (como su lógos) y necesaria; el destino no es más que la estricta cadena de los acontecimientos (causas) ligados entre sí: «Los sucesos anteriores son causa de aquellos que les siguen, y en esta manera todas las cosas van ligadas unas a las otras, y así no sucede cosa alguna en el mundo que no sea enteramente consecuencia de aquélla y ligada a la misma como a su causa». (SVF, II, 945).El azar no existe; es el simple desconocimiento causal de los acontecimientos. Si nuestra mente pudiera captar la total trabazón (conexión) de las causas podría entender el pasado, conocer el presente y predecir el futuro. Este mundo es el mejor de todos los posibles y nuestra existencia contribuye a este proyecto universal, por lo que, como veremos, no hay que temer al destino, sino aceptarlo.El lógos que todo lo anima está presente en todas las cosas como lógoi spermatikoi, razones seminales de todo lo que acontecerá. Como el mundo es eterno y el lógos es siempre el mismo

Page 21: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

inevitablemente habrán de repetirse todos los acontecimientos (eterno retorno) una y otra vez. El mundo se desenvuelve en grandes ciclos cósmicos (aión, ‘año cósmico’), de duración determinada, al final de los cuales todo volverá a comenzar de nuevo, incluso nosotros mismos. Cada ciclo acaba con una conflagración universal o consumación por el fuego de donde brotarán de nuevo los elementos (aire, agua y tierra) que componen todos los cuerpos, comenzando así un nuevo ciclo.

[editar] Teoría estoica del conocimiento

Los escépticos, muy influyentes a partir del siglo II a. C. trataban de independizar al hombre del mundo mediante la abstención de juicio. Dudaban de la posibilidad de conocimiento sensible, mediante el pensamiento discursivo y de los resultados de combinar ambos. El relativismo de Protágoras es la base de la duda escéptica respecto a los sentidos. No pueden ser una reproducción inmediata de las cosas si la percepción varía de individuo en individuo y entre distintas situaciones del mismo individuo o del objeto. Estas contingencias no se pueden evitar, así que no hay posibilidad de conocimiento sensible. Por otra parte, las opiniones vienen condicionadas por la costumbre. Ante la contradicción de opiniones no se puede distinguir la veraz. El método de deducción silogística de Aristóteles depende de las premisas. Estas premisas ni se pueden admitir sin demostración ni pueden ser simplemente hipotéticas. Por tanto, el camino del conocimiento de lo general a lo particular mediante el silogismo es imposible, pues el punto de partida es incierto. De modo que lo mejor desde el punto de vista escéptico es abstenerse de juzgar, pues no se puede decir nada más allá del parecer.Frente a ellos, los estoicos, filósofos preocupados esencialmente por problemas éticos, sostienen que se llega a la virtud por el saber. Por tanto, deben buscar el conocimiento pese a todas las objeciones, y para ello deben encontrar un criterio de verdad certero. Consideran que la percepción deja la impresión de lo externo en el alma, que al nacer sería como una tabla de cera en la que lo exterior imprime sus signos. Las representaciones generales se deben al enlace entre impresiones o a su permanencia. No hay pues ni ideas platónicas ni una energía externa que produzca conceptos. A partir de esta base, el argumento principal de los estoicos para afirmar la existencia de un criterio de verdad es que las impresiones son iguales para todos los individuos. Consideran que el consenso de los hombres sobre las representaciones se puede tomar como punto de partida para la demostración. Sin embargo, en el último estoicismo hay cambios respecto a este punto. Para Cicerón no se trata del consenso entre los individuos, sino de representaciones innatas, presentes desde el nacimiento en cada uno. Según Cicerón, el hombre nace con unos principios morales, la creencia en Dios y otros.Respecto a las percepciones, los estoicos consideran que el criterio del conocimiento verdadero es la evidencia de la percepción. Las percepciones son verdaderas, el error cuando hay contradicciones está en la opinión, no en las percepciones, que son veraces al mostrar algo en unas determinadas circunstancias.

[editar] La moral estoica

Al estar todos los acontecimientos del mundo rigurosamente determinados y formar parte el hombre del lógos universal, la libertad no puede consistir más que en la aceptación de nuestro propio destino, el cual estriba fundamentalmente en vivir conforme a la naturaleza. Para ello el hombre debe conocer qué hechos son verdaderos y en qué se apoya su verdad.El bien y la virtud consisten, por lo tanto, en vivir de acuerdo con la razón, evitando las pasiones (pathos), que no son sino desviaciones de nuestra propia naturaleza racional. La pasión es lo contrario que la razón, es algo que sucede y que no se puede controlar, por lo tanto debe evitarse. Las reacciones, como el dolor, el placer o el temor, pueden y deben dominarse a través del autocontrol ejercitado por la razón, la impasibilidad (apátheia, de la cual deriva apatía) y la

Page 22: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

imperturbabilidad (ataraxia). Éstas surgirán de la comprensión de que no hay bien ni mal en sí, ya que todo lo que ocurre es parte de un proyecto cósmico. Sólo los ignorantes desconocen el lógos universal y se dejan arrastrar por sus pasiones.El sabio ideal es aquél que vive conforme a la razón, está libre de pasiones y se considera ciudadano del mundo. El cosmopolitismo, que defiende la igualdad y solidaridad de los hombres.

Agnosticismo

El agnosticismo (del griego α-, a-, ‘sin’; y γνώσις, gnōsis, ‘conocimiento’) es aquella postura filosófica o personal que, a grandes rasgos, considera inaccesible para el ser humano todo conocimiento de lo divino y de lo que trasciende o va más allá de lo experimentado.El agnosticismo designa corrientemente la actitud que considera fútil toda manifestación metafísica y, en sentido estricto, se aplica a todas las doctrinas filosóficas que, aparte de sus diferencias, admiten la existencia de una realidad absoluta y trascendente, incognoscible por naturaleza: el positivismo, el evolucionismo, el relativismo y, en cierto sentido, el criticismo kantiano.En Filosofía se aplica también a la postura de Sócrates en su celebre frase «solo sé que no sé nada».[cita requerida]

Para algunos agnósticos, el valor de verdad de ciertas afirmaciones (particularmente las metafísicas respecto a la teología, el más allá, la existencia de Dios, dioses, deidades, o una realidad última) es incognoscible o para otros, imposible de adquirir su conocimiento debido a la naturaleza subjetiva de la experiencia, o para otros son afirmaciones falsas al no tener fundamento experimental o racional, por lo que es una búsqueda de la verdad.En algunas versiones esta falta de certeza o conocimientos es una postura personal relacionada con el escepticismo religioso. En otras versiones se afirma que el conocimiento sobre la existencia o no de seres superiores no solo no ha sido alcanzado sino que es inalcanzable. Finalmente hay versiones (apateísmo) en las cuales se afirma que la existencia o no de seres superiores, no solo no es conocida sino que es irrelevante. En general, los agnósticos consideran que las religiones no son una parte esencial de la condición humana, pero sí de la cultura y de la historia humana.El agnosticismo no implica necesariamente antirreligiosidad, lo cual no tiene vinculación con el respeto o no hacia unas u otras creencias. El agnóstico puede o no entender las creencias sobrenaturalistas como una opción personal de cada individuo, que él no comparte, o como ideas falsas, o simplemente como ideas no comprobadas.Los servicios de investigación demográfica normalmente incluyen a los agnósticos en la misma categoría que los ateos y personas no religiosas, aunque esto puede ser engañoso dependiendo del número de agnósticos teístas que se identifican primero como agnósticos y en segundo lugar como seguidores de una religión particular.De esta forma, el agnóstico no siempre niega la existencia de un dios, pero insiste en que ésta no es demostrable o que no se ajusta a los supuestos establecidos en las diversas religiones oficiales.

Etimología

El término agnóstico fue introducido por el zoólogo británico Thomas Henry Huxley (1825-1895) en 1869 para describir su filosofía que rechaza el gnosticismo, por el cual no rechazaba solo a ese grupo religioso del primer milenio, sino a todos los grupos que afirman tener un conocimiento oculto o místico.Los primeros líderes de la Iglesia cristiana utilizaron la palabra griega «gnosis» (‘conocimiento’) para describir una especie de «conocimiento espiritual». El agnosticismo no debe ser confundido con las visiones religiosas que se oponen a la doctrina del gnosticismo: estos son conceptos religiosos que no se relacionan generalmente con el agnosticismo. Huxley utilizó el término en un sentido amplio.

Page 23: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

[editar] Definición según Thomas Huxley

En su libro Aphorisms and reflections, Henrietta Ann Heathorn Huxley (1825-1915), esposa de Thomas Huxley, recoge múltiples volúmenes de notas y ensayos de Huxley,[1] quien acuñó el término «agnosticismo». En dichas notas se encuentra un párrafo donde Thomas Huxley define con claridad lo que significaba el término para él:Agnosticismo, de hecho, no es un credo, sino un método, la esencia en la que se sustenta la aplicación rigurosa de un solo principio.[2]

Y más adelante en el mismo párrafo:El principio puede ser expresado positivamente: en asuntos intelectuales, sigue tu razón tan lejos como te lleve, sin importar ninguna otra consideración. Y negativamente: en asuntos intelectuales, no pretendas que son ciertas las conclusiones que, o no han sido demostradas o directamente no son demostrables. Esto entiendo como significado de la fe agnóstica, que si un hombre mantiene completa e incorrupta, no deberá sentir vergüenza de mirar al universo a la cara, cualquiera que sea el futuro deparado para él.[3]

[editar] La postura del no conocimiento

El agnóstico suele diferenciar entre «conocer» y «creer». Para él, una persona religiosa se distingue de una atea por el hecho de que el religioso «cree que dios existe» y el ateo «cree que dios no existe». Así, el agnóstico se aparta de la postura de creencia indicando que unos y otros (religiosos y ateos) «creen» en la existencia o inexistencia de una entidad superior, mientras que él la «desconoce».

[editar] Variantes

Un ícono (no usual) del agnosticismo. Agnosticismo fuerte : es una afirmación categórica sobre el conocimiento de entidades

superiores indicando que éstas no son cognoscibles, y que los seres humanos no están equipados para descubrir la existencia de tales realidades o para probar su inexistencia. Se resume en la frase «Desconozco sobre la existencia de dios y es imposible llegar a conocerlo»

Agnosticismo débil : se considera una opción personal que afirma no tener conocimiento sobre una entidad superior. Se resume en la frase «Desconozco sobre la existencia de dios y la posibilidad de conocerlo»

Page 24: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Agnosticismo apático : conocido también como apateísmo es la visión de que una entidad superior, aún de existir, no cambia en nada a la condición humana y por lo tanto las religiones son irrelevantes o accesorias. «Desconozco sobre la existencia de dios y es irrelevante conocerlo»

Agnosticismo interesado : aquel que considera que el conocimiento de entidades superiores es relevante para el ser humano, en oposición al Agnosticismo apático, que considera lo contrario. Por lo general este interés se justifica argumentando la relevancia que tiene la existencia o inexistencia de deidades en el rol que desempeñan los seres humanos en el mundo. «Desconozco sobre la existencia de dios pero sería interesante conocerlo»

Agnosticismo modelo : apunta a que las preguntas filosóficas y metafísicas no son verificables fehacientemente sino un modelo maleable de pensamiento que debe basarse sobre la racionalidad. Esta rama del agnosticismo no se enfoca en la existencia de entidades superiores.

Ignosticismo : Algunos filósofos han visto el ignosticismo como una variación de ateísmo o agnosticismo, mientras que otros han considerado que es distinto. Según las definiciones de Theodore Drange los ignósticos no son ateos ni agnósticos. Una simplificación en la materia establece que un ateo diría: «No creo que dios exista», un agnóstico diría: «Desconozco sobre la existencia de dios», y un ignóstico diría: «¿Qué entiende por dios?».

[editar] Algunas opiniones filosóficas

Entre los más famosos agnósticos (en el sentido original) se encuentran Thomas H. Huxley, Thomas Alva Edison, Charles Darwin, Marie Curie y Bertrand Russell. A partir de los trabajos de David Hume, especialmente Dialogues Concerning Natural Religion (Diálogos con respecto a la religión natural), se piensa que él era agnóstico, aunque es un tema que sigue en debate.La posición agnóstica es visible en varios filósofos poskantianos, que mantienen que la razón que pretende hablar de lo incondicionado cae en contradicción, tanto para demostrar la existencia de Dios como para negarla.

Thomas H. HuxleyThomas Henry Huxley (1825-1895).

Las posturas agnósticas son tan antiguas como el escepticismo filosófico, pero el término «agnosticismo» fue acuñado por el biólogo Thomas H. Huxley (abuelo del conocido novelista inglés Aldous Huxley) en una reunión de la Sociedad Metafísica en 1869. En ella definió a los agnósticos como a las personas que niegan tanto el ateísmo como el teísmo y que aseguran que no es posible hallar respuesta a la duda metafísica de la existencia de un poder superior o Dios. En una carta a un amigo escribe:Yo no afirmo ni niego la inmortalidad del hombre. No veo razón para creer en ella pero tampoco tengo ningún medio para desaprobarla. No tengo objeciones a priori a esa doctrina. Nadie que tenga que lidiar día a día con la naturaleza puede meterse en el brete de las dificultades a priori. Dame alguna evidencia que justifique mi creencia en cualquier cosa y yo creeré. ¿Y cómo no habría de creer? No sería más maravilloso que la conservación de la energía o la indestructibilidad de la materia. [...] No tiene sentido que me hables de analogías y probabilidades. Yo sé a qué me refiero cuando digo que creo en la ley de los cuadrados inversos, y no basaré mi vida y mis esperanzas en alguna convicción más débil.

T. H. Huxley, en carta a Charles Kingsley del 23 de septiembre de 1860

Page 25: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

Desde entonces el término «agnóstico» también ha sido usado para designar aquella persona que, aunque no considera que sea incognoscible la existencia de Dios, cree que las evidencias a favor y en contra de la existencia de una deidad no resultan concluyentes, por lo que se muestra indecisa sobre el tema.Por naturaleza tengo la antipatía más grande posible contra el ateísmo. Y sin embargo sé que yo —a pesar de mí mismo— soy exactamente lo que un cristiano llamaría un ateo. No puedo ver ni una sombra de evidencia acerca de que lo desconocido que se esconde tras los fenómenos del universo tenga algo que ver con nuestra relación con un Padre que nos ama y nos cuida, como dicen los cristianos. Así que con respecto a los demás dogmas cristianos —como la inmortalidad del alma y el castigo y recompensa futuros— ¿qué voy a objetar yo —que me siento compelido a creer en la inmortalidad de lo que llamamos materia y energía y a creer en un inconfundible estado actual de castigos y recompensas por nuestras acciones— qué voy a objetar contra esas doctrinas? Dame una pizca de evidencia y estoy listo para saltar a tu lado.

Huxley, en carta a Charles Kingsley del 6 de mayo de 1863

Con respecto al origen del término «agnóstico» para describir su actitud, Huxley da la siguiente explicación:Por eso inventé el título que me pareció más apropiado: «agnosticismo». Me vino a la cabeza como la antítesis del gnosticismo que apareció al principio de la Historia de la Iglesia. Los gnósticos pretendían saber tanto justamente acerca de las cosas que yo más ignoro. Para mi gran satisfacción el término tuvo éxito.

Huxley, Ensayos escogidos, pág. 237-239.

Se considera que el agnosticismo de Huxley es una consecuencia natural de las condiciones intelectuales y filosóficas de 1860, en que la intolerancia religiosa estaba tratando de impedir los descubrimientos científicos que parecían chocar contra una lectura literal de la Biblia (en especial del libro del Génesis) y otras doctrinas cristianas establecidas. Sin embargo el agnosticismo no se debe confundir con el deísmo, el panteísmo u otras formas científicas positivistas de teísmo.En temas intelectuales, sigue tu razón tanto como puedas, sin tener ningún otro tipo de consideración. Y negativamente: en temas intelectuales, no finjas que es cierta ninguna conclusión que no haya sido demostrada o sea demostrable.

Huxley, Agnosticismo, 1889

Charles Darwin

En 1879, cuando Charles Darwin estaba escribiendo su autobiografía, le llegó una carta preguntándole si él creía en el dios Yahvé, y si el teísmo y la evolución eran compatibles. Él replicó que «un hombre puede ser un ardiente teísta y un evolucionista», citando como ejemplos a Charles Kingsley y Asa Gray; con respecto a él, dijo que «nunca había sido ateo en el sentido de negar la existencia de Dios». Agregó: «Creo que en general (y más cuanto más viejo me hago) aunque no siempre, que “agnóstico” sería una descripción correcta de mi pensamiento».El jueves 28 de septiembre de 1881 Darwin recibió la visita de dos conocidos ateos: Ludwig Büchner y Edward Aveling. Estaba presente Brodie Innes, un religioso amigo de la familia.Darwin explicó sagazmente que «el reverendo y yo hemos sido medio amigos por treinta años. Nunca hemos estado de acuerdo en ningún tema: más bien nos miramos y cada uno piensa que el otro debe estar muy enfermo». En la charla después de la cena, Darwin les preguntó a sus invitados: «¿Por qué se hacen llamar ateos?», explicando que él prefería la palabra agnóstico. Aveling replicó

Page 26: El epicureísmo es un sistema filosófico que defiende la búsqueda de una vida buena y feliz mediante la administración inteligente de placeres y dolores

que «un agnóstico no era sino un ateo elástico, y un ateo no era sino un agnóstico agresivo». Darwin respondió: «¿Y por qué tienen que ser tan agresivos?», preguntándose qué iban a ganar imponiendo esas nuevas ideas en la gente, cuando la libertad de pensamiento estaba «más que bien» para las personas educadas, pero si la gente ordinaria «estaría madura para ello».Aveling respondió que si «las revolucionarias verdades de la selección natural y sexual hubieran sido confinadas solo para las pocas personas sensatas» y él «hubiera demorado la publicación del Origen de las especies, ¿dónde estaría el mundo en este momento?». Seguramente su propio ilustrativo ejemplo había alentado a los librepensadores a «proclamar la verdad desde los techos de las casas». Darwin en ese momento aceptó que «el cristianismo no está apoyado en evidencias», pero que él no estaba dispuesto a forzar esa idea en nadie, ya que de hecho «yo no abandoné el cristianismo hasta que tuve cuarenta años de edad».

Bertrand RussellBertrand Russell (1872-1970)

El libro del filósofo y matemático Bertrand Russell (premio nobel de Literatura en 1950) Por qué no soy cristiano, basado en una conferencia que dio en 1927, se considera un manifiesto clásico de la creencia agnóstica. El ensayo presenta brevemente las objeciones de Russell a algunos de los argumentos sobre la existencia de Dios y del átomo, y luego presenta una discusión acerca de sus objeciones morales a las enseñanzas cristianas. Luego les pide a sus lectores que se paren «sobre sus dos pies y dirijan una mirada cruda y directa al mundo [...] con una actitud sin miedo y una inteligencia libre».En el otro libro posterior de Russell ¿Soy ateo o agnóstico? (subtitulado «Un ruego de tolerancia ante los nuevos dogmas»), él confirma que es un agnóstico en el sentido filosófico de que no puede creer la verdad de la existencia o no existencia de Dios. Sin embargo en el mismo ensayo admite que la manera más clara de presentarse ante una audiencia no filosófica sería como ateo.