debate
DESCRIPTION
EL DEBATE GUATEMALTECO.TRANSCRIPT
EL DEBATE
En el curso de Oratoria Forense es necesario que se desarrollen aptitudes que
permitan desenvolvernos en cualquier lugar que se nos requiera ya sea de forma
establecida o eventual, por lo que debemos estar preparados en conocimiento, en
aptitud y capacidad para argumentar y debatir; por lo que el acto de comunicación
es necesario, el que será más completo y complejo a medida que los argumentos
expuestos vayan aumentando en cantidad y en solidez de motivos.
1. DEFINICION DE DEBATE:
El debate es un acto de comunicación que consiste en la discusión de un tema
entre dos o más personas, tiene un carácter argumentativo, está dirigido
generalmente por una persona que asume el rol de moderador para que de este
modo todos los participantes en el debate tengan garantizada la formulación de su
opinión y aunque no se trata de una disputa que busca un ganador, sino más bien
de poder conocer las distintas posturas sobre un determinado tema, normalmente,
siempre se habla de quien lo ha ganado. En tanto, esto último se medirá por quien
mejor sostenga una idea, más que por el que tenga la razón.
El debate es una forma de discusión formal y organizada que se caracteriza por
enfrentar dos posiciones opuestas sobre un tema determinado. En otras palabras,
el debate es el intercambio de opiniones críticas, que se lleva acabo frente a un
público y con la dirección de un moderador para mantener el respeto y la
objetividad entre ambas posturas.
Por otro lado, cada postura debe exponer su tesis y sustentarla por medio de
argumentos y contraargumentos sólidos y claros. Además, cada posición debe
buscar el interés del público, buscando que éste forme su opinión y, finalmente,
contribuya de forma indirecta o no, en las conclusiones del debate. De esta
manera, el debate está formado por tres entidades: los participantes (un
proponente y un oponente), el moderador y el público.
El debate puede estar formado por individuos o grupos; es decir, las posturas
pueden estar sustentadas por más de dos personas, como en el caso de los
debates políticos, o por varias personas como sucede comúnmente en los debates
escolares o los televisivos. Los participantes, sean uno o varios, deberían limitarse
al tema establecido, el cual está preparado para respaldar la postura que defienda
o para refutar los argumentos del individuo o grupo contrario.
La calidad y fluidez del debate dependen de la capacidad de escuchar y
contraargumentar, así como del conocimiento de los participantes. Por otro lado, el
moderador es indispensable para llevar acabo un buen debate, ya que en él recae
la responsabilidad de dirigir la discusión y que ésta se desarrolle de acuerdo con
las reglas previamente establecidas y aceptadas por los oponentes. También es
responsable de dar inicio y concluir el debate. Por ello, es importante que el
moderador también conozca sobre el tema, tenga capacidad de análisis y
mantenga imparcialidad y tolerancia. Finalmente, el público es importante porque
sus reacciones orientan a los participantes en sus argumentos; es decir, si el
público reacciona de forma favorable, éstos saben que sus argumentos van en la
dirección correcta o viceversa. También depende del público, tanto la orientación y
enfoque del debate como el tipo de argumentos y lenguaje que se utilizará.
2. CARACTERÍSTICAS:
En los debates se tratan temas que pueden estar previamente definidos o que
surjan en el mismo.
Generalmente los debates tienen polémica entre los debatientes y los integrantes
expresan y defienden sus posturas, siempre de manera lógica, exponiendo sus
premisas y comprobándolas en forma ordenada.
En un debate se pueden establecer reglas que establecen periodos de exposición.
En un debate se apela a la integridad de las partes para evitar roces de pasiones o
de imprecaciones.
En el caso de que exista un moderador, es para que rectifique el orden que se
hubiere pactado, sobre todo en los debates públicos.
Los debates públicos generalmente son de orden político o filosófico-social y en
estos pueden inferir directamente al público y en estos pueden existir asistentes
que observen el mismo pero sin participar.
El debate se utiliza principalmente en el orden escolar, sobre todo en los
regímenes universitarios, donde se abren polémicas.
En el debate público se presentan una pequeña serie de reglas:
Preparación del material por cada parte.
El establecimiento de un moderador.
Separar los grupos de cada parte o cada posición.
En el debate público, el moderador explica el tema del debate, e indica quienes
inician la disertación y quienes lo deben responder.
Solo en los debates de alta escuela donde el moderador establece principios en
los que se realizan preguntas por parte de los asistentes, quienes se pueden
encontrar familiarizados con el tema.
En forma ambulatoria, en los debates políticos se ha establecido la mesa de
preguntas y respuestas, que se asemeja a una rueda de prensa.
En algunos debates, se hacen preguntas concernientes a los temas tratados,
siendo fundamentales en especial en los debates políticos, por ser en esta fase
donde gran parte del público se inclina por una u otra propuesta de las que se han
planteado en la discusión, ya sea en favor o en contra de determinado proyecto,
propuesta o solución, sirviendo además para esclarecer puntos por parte de los
debatientes hacia el público.
3. FUNCIÓN EN EL MEDIO ACADÉMICO:
En el medio académico, el debate es una herramienta pedagógica de utilidad
cuando se busca desarrollar habilidades críticas, así como ampliar y facilitar la
comprensión de un tema determinado. En el salón de clases, los debates suelen
realizarse con frecuencia, aunque con características menos formales. Por
ejemplo, el público, los participantes y el moderador no están siempre definidos;
sin embargo, este género oral es una forma de alcanzar la participación activa de
todos los integrantes del grupo, la cual no se obtiene con la exposición oral, por
ejemplo. Además, el debate permite ver y contrastar posturas opuestas, ampliando
así la perspectiva de los estudiantes. Como ya mencionamos, el debate es una
técnica usual en el salón de clases que se desarrolla de manera informal y que,
muchas veces, no se identifica ni se nombra así. Sin embargo, este recurso podría
explotarse más ampliamente porque fomenta el pensamiento crítico, así como el
respeto y la tolerancia ante opiniones diferentes. Además, es una herramienta muy
útil para transmitir conocimiento, de manera rápida y activa.
4. ESTRUCTURA:
La estructura del debate está sujeta a las reglas previamente determinadas por
los participantes y el moderador; sin embargo, de manera general, los debates
constan de cuatro fases:
a) La apertura,
b) El cuerpo del debate,
c) Sesión de preguntas y respuestas,
d) Y la conclusión.
A) LA APERTURA DEL DEBATE
Está a cargo del moderador, quien introduce el tema haciendo especial énfasis en
su interés y actualidad. Además, presenta tanto cada una de los participantes
como las posturas. También explica la dinámica a seguir y recuerda a los
participantes las reglas, previamente establecidas.
B) EL CUERPO DEL DEBATE
Está a cargo de los participantes y es la fase que se asigna a la discusión del
tema. Es en esta etapa donde se exponen los argumentos y contraargumentos,
así como toda la información adicional que ayude a la discusión del tema. Por lo
general, el cuerpo del debate se divide en dos bloques: el primero, se defiende
una de las posiciones y en el segundo, la otra.
C) SESIÓN DE PREGUNTAS Y RESPUESTAS
La interacción entre los antagonistas se da en la sesión de preguntas y
respuestas. Esto ayuda a mantener el orden y fomenta la capacidad de escuchar,
tanto del público como de los participantes. La sesión de preguntas y respuestas
es una parte fundamental dentro del debate porque es en ella donde el público
termina por inclinarse a favor o en contra de una postura. Además, es la
oportunidad de los participantes para clarificar los puntos principales de sus
argumentos, así como reforzar los puntos débiles. Las preguntas pueden estar a
cargo del moderador, del público o de los mismos participantes, pero siempre se
realizan de forma ordenada.
D) CONCLUSIÓN DEL DEBATE
Se hace un breve resumen de las posturas, así como se anuncia la postura que
prevaleció o el grupo ganador del debate, si fuera necesario decirlo. Esta parte
está a cargo del moderador.
5. PASOS PARA LA ELABORACIÓN DEL DEBATE:
I. Antes del debate:
1. Elegir un tema de interés que genere controversia.
2. Preparar los contenidos teóricos.
3. Nombrar un coordinador o moderador encargado de determinar el esquema de
trabajo, y a un secretario, si fuera necesario.
4. Formar grupos a favor y en contra de los planteamientos.
5. Preparar el material de apoyo (imágenes, textos impresos o en Power Point,
acetatos, etc.).
II. Durante el debate:
1. Iniciar presentando las posturas y los participantes. Dar una pequeña
introducción al tema. Mencionar tanto las instrucciones como las reglas del
debate. Estos puntos están a cargo del moderador.
2. Conceder la palabra a cada uno de los participantes o, en todo caso, a un
representante de cada posición, de forma ordenada y respetuosa.
3. Abrir la sesión de preguntas y respuestas. Hacer la pregunta y conceder la
palabra a cada participante que así lo desee.
4. Llegar a un consenso sobre las conclusiones.
5. Anunciar un ganador o la posición dominante, aunque esto no es obligatorio.
Reglas y recomendaciones generales
Respetar el tiempo de cada uno de los participantes.
Dos o más personas no pueden hablar al mismo tiempo.
No imponer ningún punto de vista personal.
No burlarse de intervención de nadie.
Hablar con seguridad y libertad.
Escuchar con atención
Utilizar un vocabulario adecuado, evitando palabras de registro informal o
altisonante.
6. FINALIDAD
La finalidad directa de un debate es exponer y conocer las posturas, bases y
argumentos funcionales, de las distintas partes. Indirectamente puede cumplir un
rol de aprendizaje y enriquecimiento para quienes participan en un debate, pueden
eventualmente cambiar a otra postura o profundizar y enriquecer la propia.
Funciones y Virtudes de un Debate
Como ejercicio para el intelecto ya que sirve para desarrollar múltiples
habilidades.
Para reforzar y mejorar la personalidad, en aspectos como la autoestima,
seguridad, confianza, expresión verbal y corporal.
Eleva el criterio para tomar una decisión ya que enseña a exponer las ventajas
y desventajas de un punto de vista.
Como medio para alcanzar la pluralización en cuanto a ideas.
Como medio informativo/expositivo ya que como espectador de un debate se
puede llegar a clarificar mucho acerca del tema tratado o a debatir.
Así mismo se ejercitan habilidades específicas como:
Escucha crítica.
Razonamiento y pensamiento crítico.
Estructuración de ideas.
Respuesta rápida y adecuada.
Expresión oral efectiva.
7. LOS TIPOS Y GÉNEROS DE DEBATES
Debate ínter escolar o universitario: Es un debate entre dos colegios o
universidades. Los alumnos se debaten entre si, argumentando sobre
cosas que tal vez jamás hayan escuchado antes. Aquí se encuentra el
público más raro, es el único público que es capaz de ver a dos infantes
con acné, hablando sin saber de lo que hablan.
Debate enciclopédico:Se ubica en el forúnculo, es donde las mentes más
grandes y ociosas se debaten sobre si una plantilla debe ser graciosa o
sarcástica. También es el perfecto lugar para los bufones que disfrutan
burlarse de las preguntas estúpidas de los noobs.
Debate de filósofos: Es cuando dos locos que dicen saber el significado
de la vida o por lo menos intentan encontrarlo. Se debaten sobre cosas
relacionadas al aspecto teológico del hombre, tales como si se tiene alma
o Dios existe. Cada vez hay menos de estos debates porque la gente se
preocupa más de cosas insustanciales, como por ejemplo:
que Megadeth es mejor que Metallica o que el Real Madrid es más grande
que el F.C. Barcelona y demás discusiones de ese tipo que duran años.
Debate de farándula: Es donde varios personajes, que no tienen nada
mejor que hacer, debaten entre sí sobre cosas tales como el nuevo corte de
pelo de Brad Pitt o si los implantes de Angelina Jolie son catastróficos. Es
increíble lo tanto que les pagan por hablar tonteras que a nadie interesa.
8. DEBATE POLÍTICO
1. Definición y reglas
En esta variante, dos equipos de dos intervinientes se oponen o defienden un plan
derivado de una resolución que propone un gobierno para introducir un cambio
político. Normalmente, los equipos se alternan y compiten, defendiendo la
cuestión, oponiéndose a ella. Suele haber un tema fijo con una duración
académica reconocible (uno o dos cuatrimestres). A diferencia del debate
parlamentario, se basa en pruebas documentales y trabajo de investigación previo.
Aquí, gana quien presenta las pruebas más irrefutables y los razonamientos más
lógicos, lo que implica que los jueces del debate deberán estar más tiempo
evaluando antes de dar su veredicto.
Una variante del debate político consiste en enunciar la mayor cantidad posible de
elementos en un tiempo fijo y, normalmente, breve; si la contraparte no es capaz
de responder a los argumentos con suficiente rapidez, se proclama que ha
perdido. Puede asimilarse a una discusión libre en la que no se tasan los tiempos
de los intervinientes, sino que se exige que argumentaciones y refutaciones sean
breves y ágiles. A esto, se le llama Cross-Examination Debate, o CX Debate, que
podríamos traducir como cruce de argumentos.
2. Normas de Realización
Quienes van a debatir deberán conocer plenamente el tema a debatir. Durante el
debate el moderador debe:
Poner en consideración el objetivo del tema.
Anunciar el tema y ubicarlo dentro del proceso.
Describir la actividad.
Formular la primera pregunta y dar la palabra en orden a los participantes.
Desempeñar durante la discusión el papel de moderador.
Al terminar el debate, el secretario tratará de llegar al consenso sobre las
conclusiones.
Dar a conocer el objetivo de la realización del debate.
Poseer buena información.
Recomendaciones para participar en el debate popular
Para desarrollar y llevar a buen término los ejercicios de Debate, resulta muy
importante que tanto el emisor como el receptor, consideren los siguientes puntos:
Ser breve y concreto al hablar.
Ser tolerante respecto a las diferencias.
No subestimar al otro.
No hablar en exceso para así dejar intervenir a los demás, evitando la
tendencia al monólogo y la monotonía.
No burlarse de la intervención de nadie.
Evitar los gritos para acallar al interlocutor.
Hablar con seguridad y libertad, sin temor a la crítica.
Acompañar las críticas con propuestas.
Oír atentamente al interlocutor para responder de forma adecuada.
Articular correctamente los sonidos, empleando un tono de voz adecuado a la
situación concreta de entonación y al contenido del mensaje (interrogación,
exclamación, sonidos indicativos de fin de enunciación, pausas, etc).
3. Argumentos
Los argumentos a favor se llaman pruebas y los que están en contra se llaman
objeciones.
Por los primeros, se intenta demostrar la validez de las afirmaciones o
argumentos de la parte.
Por los segundos, se intentará mostrar los errores de la contraparte.
3.1 Argumentos lógicos racionales
Sintomáticos o por signo: Las razones se presentan en forma de indicios,
signos o síntomas que conducen a una breve conclusión. Por ejemplo: No
sería extraño que Juan tuviese un infarto. Come, bebe, fuma en exceso,
además trabaja demasiado.
Nexos causales: Las razones se presentan como la causa que provoca la
conclusión: uno es causa de otro. Por ejemplo: Correr 5 kilómetros diarios
produce un bienestar general del sistema cardiovascular. Corra por su vida.
Analógicos: Razonamiento basado en la existencia de atributos semejantes en
seres o cosas diferentes. Por ejemplo: Debe haber una preocupación
permanente por el medio ambiente, igual que por un auto. Éste se debe
mantener limpio, repararlo cuando se requiera y usar de un modo racional sus
beneficios.
Por generalización: A partir de varios casos similares, se puede generalizar
una tesis común a todos ellos, comprobándola mediante solución.
3.2 Falacias
Un buen argumento debe aportar apoyo suficiente para aceptar la conclusión, y
las premisas deben estar relacionadas con la conclusión. Una argumentación
insuficiente es considerada una falacia.
Por ejemplo
“Mi primera novia me traicionó, por lo que todas las mujeres son traidoras” (la
cantidad de casos no es suficiente para concluir, por lo que se denomina
conclusión apresurada); “Estoy en desacuerdo con las prácticas educacionales de
la profesora" (las razones que plantea no tienen relación con la conclusión: razón
irrelevante); “Sostengo que los extraterrestres existen. El otro día entrevistaron a
Juanito Pérez en la tele, y contó cómo fue secuestrado por ellos” (la razón que
plantea para concluir no puede ser aceptada universalmente: premisa
problemática).
9. DEBATE LEGISLATIVO
Es el conjunto de trámites necesarios para la aprobación de una ley. Es decir, es
el procedimiento necesario para la creación de una ley, comprende desde la
presentación de la iniciativa de ley hasta su publicación para que posteriormente
entre en vigencia.
El debate legislativo, consiste en la exposición de dos equipos, una Proposición
(también llamada Gobierno) y una Oposición, que deben debatir una moción,
propuesta o un enunciado. Cada equipo cuenta con tres oradores y el rol de la
proposición es defender la moción, mientras que la oposición intenta refutar y
crear una duda razonable en torno al caso del Gobierno.
Un cronometrista se encarga de tomar el tiempo de cada discurso, el cual debe
durar alrededor de 8 minutos, y en cada una de estas exposiciones los oradores
presentan y refuerzan sus argumentos e intentan refutar de la mejor forma posible
los argumentos del equipo contrario, siempre buscando destruir el caso del
oponente. Al finalizar los tres discursos de cada equipo, que se dan de manera
intercalada, y luego de un breve resumen del debate dado por el primer o segundo
orador de cada equipo, un Jurado es el encargado de determinar, según estilo,
estrategia, y contenido, el equipo ganador.
Tanto a nivel nacional como internacional se debaten temas relacionados con la
actualidad en áreas de economía, política, medio ambiente y ciencias sociales
Características
a) Iniciativa: se establece esta como la acción de comenzar, el proceso
de formación de creación de una ley, según lo establecido en la
Constitución Política de la República de Guatemala, tienen iniciativa
para la formación de las leyes, los diputados al Congreso, el Organismo
Ejecutivo, la Corte Suprema de Justicia, la Universidad de San Carlos
de Guatemala y el Tribunal Supremo Electoral.
b) Discusión: esta es una de las partes másesenciales del procedimiento
de formación de la ley, ya que de los argumentos presentados y la
forma correcta de sus planteamientos depende en gran medida, el
éxito de la iniciativa, aquí se da a nivel legislativo, el debate en todo su
auge.
Esta característica, está establecida en el artículo 176 de la ConstituciónPolítica
de la República de Guatemala, que cito: Presentación y discusión. Presentado
para su trámite un proyecto de ley, se observará un procedimiento que prescribe
la Ley Orgánica y de Régimen Interior del Organismo Legislativo. Se pondrá en
discusión celebrada en distintos días y no podrá votarse hasta que se tenga por
suficientemente discutido en la tercera sesión. Se exceptúan aquellos casos que
el Congreso declare de urgencia nacional con el voto de las dos terceras partes
del número total de diputados que lo integran.
c) Aprobación: según lo establecido, en la ConstituciónPolítica de la
República de Guatemala, le corresponde al organismo ejecutivo su
aprobación, la Junta Directiva del congreso de la Republica, tiene un
plazo no mayor de diez días para envirarlo.
d) Sanción: Esta le corresponde al ejecutiva realizarla en el plazo
establecido.
e) Publicación: después de aprobada la ley, se debe publicar en un
plazo que no exceda de tres días, para que surta efectos en toda la
república.
f) Iniciación de la vigencia: según lo regulado, la ley empieza a regir en
todo el territorio nacional, ocho días después de su publicación integra
en el Diario Oficial dic l, a menos que la misma ley amplié o restrinja
dicho plazo o su ámbito territorial de aplicación.
10. DEBATE LITIGANTE
Definición
En sentido amplio es equivalente de pleito. En sentido restringido se refiere al
desarrollo de una audiencia. Así se habla de "clausura de los debates" refiriéndose
al informe de viva voz que hace el presidente de un tribunal (generalmente
colegiado), al finalizar la audiencia y antes de la sentencia (generalmente en
competencia penal).
Este debate ha transformado profundamente las visiones contemporáneas acerca
del papel de los jueces, la relación entre el derecho y la moral y el concepto mismo
de derecho. El contexto en el que se inscribe esta controversia está caracterizado
por el gran protagonismo de los jueces, la proliferación de tribunales
constitucionales y el llamativo activismo judicial en esferas sensibles de la vida
comunitaria. Por ello, la reflexión sobre el alcance y los límites del poder de los
jueces es hoy especialmente relevante.
Argumentar no es persuadir, es informar claramente los fundamentos de nuestro
punto de vista para ser sometidos aún examen crítico. Tal como los litigantes
hacen alegaciones largas y oscuras, los jueces también hacen sentencias largas y
oscuras; tal como los litigantes evaden objeciones, los jueces también las evaden
al sentenciar; tal como el litigante reza por desaparecer una prueba adversa, el
magistrado si le conviene no la menciona; tal como un litigante hace falacias,
también las hallamos en las sentencias.
De ese modo antes que sencillez, orden, colaboración, precisión, tenemos
oscuridad, abundancia, desorden, oscuridad, manipulaciones.
El problema de la motivación de las sentencias no es el problema de la
argumentación. Los últimos 200 años se ha escrito sobre cómo el juez debe
sentenciar, pensando en que debe decidir sobre un expediente escrito que
contiene las actuaciones probatorias. Incluso le han dicho que el 90% de los
casos son fáciles y sólo una pequeña parte no lo es. Interesa ahora que el debate
sea lo suficientemente exigente para esclarecer las dudas y que permita al
magistrado tomar la decisión cuidando de no alterar el resultado del debate.
Interesa por tanto la argumentación de los litigantes como fuente de
información del magistrado. Luego, el magistrado no puede resolver un caso
donde el debate fue pobre, insuficiente .El juez no puede en la sentencia mejorar
el debate, en cambio el debate critico exigente es el paso indispensable para tener
mejores sentencias.
La retórica no puede servir a los jueces para sentenciar mejor. La antigua retorica
griega y romana, incluso medieval no tiene una sola hoja dedicada directamente a
cómo debe sentenciar el juez, en cambio solo trata de cómo deben argumentar las
partes en litigio ya que originariamente los juicios se decidían por votación.
Tampoco la retórica servirá a los litigantes actualmente, sino el conjunto de
herramientas que se han producido para mejorar nuestra capacidad de crítica y
análisis en los últimos 50 años.
En resumen:
Mejores abogados, entrenados en el debate crítico exigente harán que los
juicios mejoren. Cuanto más exigente sea el debate mejor será la sentencia. El
entrenamiento para participar en ese debate debe incorporar herramientas de
crítica y análisis
Litigar en un juicio oral es un ejercicio profundamente estratégico, tanto para quien
acusa como para quien defiende, implica el diseño de una teoría del caso, en
donde cada parte busca explicar cómo ocurrieron los hechos y la participación del
imputado en ellos, con la única finalidad de convencer al Juez de que su versión
es la verdadera. Sin embargo, lo cierto es que esa verdad que se pretende hallar
está en el pasado y que, lamentablemente, nunca llegaremos a saber lo que
exactamente ocurrió, incluso en los casos en donde existen pruebas muy
poderosas hay zonas de la verdad que nunca se llegaran a conocer, por ejemplo,
lo que estaba en la mente de las personas cuando realizaron sus conductas,
cuáles fueron sus motivaciones, etc.
De esta manera, lo único verdadero que tenemos en un caso penal es un conjunto
de versiones heterogéneas, fragmentadas, parciales y disímiles acerca de lo que
“realmente ocurrió”. Por eso, cuando los jueces sentencian construyen una versión
acerca de lo que “verdaderamente ocurrió” y la aceptamos como oficial. En
ocasiones lo hacen adoptando completamente la versión de una de las partes, en
otras lo hacen tomando fragmentos de las versiones de cada una de ellas. Por
tanto, nuestros argumentos y pretensiones deben dirigirse a que el Juez asimile y
haga suya nuestra versión, obteniendo de la prueba la información real que
contiene y estructurando la información de modo que los jueces consigan lo que
necesitan de ella para sentenciar correctamente. El abogado es en este sentido un
mensajero de cierta información; y no importa qué tan bueno sea el mensaje, ni
qué tan significativo: si el mensajero es malo, el mensaje no llega. Nuestra labor
es, pues, hacer que llegue el mensaje, y el mecanismo natural de transmisión es
el relato.
El litigante en el juicio oral debe narrar y persuadir. Esa será su principal tarea y
primordial objetivo. Esto no sólo se logrará con tener habilidad histriónica y talento
intuitivo sino será necesario el diseño de una teoría del caso consistente,
suficientemente probada y adecuadamente expuesta que tenga por finalidad lograr
una decisión favorable por parte del juez.
LA TEORÍA DEL CASO:
Es un ángulo, un punto de vista desde el cual mirar la prueba, en términos tales
que si el juez la mira desde allí verá en ella lo que nosotros vemos. Es nuestra
simple, lógica y persuasiva historia acerca de lo que realmente ocurrió, la brújula
del litigante, un mapa que se diseña desde el momento en que se tiene
conocimiento de los hechos y que tiene tres elementos:
a) Fáctico: es la identificación de los hechos relevantes que nos ayudan a
comprobar la responsabilidad o no del procesado.
b) Jurídico: consiste en la subsunción de los hechos dentro de un tipo penal.
c) Probatorio: son los medios probatorios que acreditaran las proposiciones
fácticas.
Podemos afirmar entonces que la teoría del caso es una herramienta importante
porque permite:
a) Realizar un análisis estratégico del caso.
b) Ordenar y clasificar la información del caso.
c) Adecuar los hechos al tipo penal, lo cual servirá para defender la tesis.
d) Determinar que es lo que esperamos de la investigación.
e) Seleccionar la evidencia relevante.
f) Detectar debilidades propias.
g) Identificar las debilidades de la parte contraria.
PREPARACIÓN PARA EL JUICIO.
Una preparación adecuada permite conocer las fortalezas, oportunidades,
debilidades y amenazas del caso y facilita la organización de los medios de
prueba para su presentación en el juicio.
Como parte de la preparación siempre es conveniente redactar un bosquejo o plan
que recoja todos los aspectos importantes del caso que deben ser probados en el
juicio y un listado o índice que nos permita cotejar durante el juicio la prueba que
debe ser reconocida por los testigos y el orden que debemos seguir al presentar la
misma. También debemos registrar en nuestras notas las debilidades de nuestro
caso, y tener un “memorando de litigación” que contenga los principales asuntos
legales que puedan suscitarse en el juicio. El tener por escrito los asuntos de
derecho más relevantes para el caso nos permite rebatir eficazmente y en el
momento oportuno cualquier ataque a nuestros medios de prueba y también
refutar las posibles defensas.
Como parte del proceso preparatorio de un caso debemos cerciorarnos que todos
los testigos estén disponibles para comparecer al juicio y además, se debe evaluar
si contamos con todos los medios probatorios para asegurarnos que el caso esté
completo el día de su señalamiento. El familiarizarnos antes del juicio con la
prueba no testimonial nos permite además, precisar las bases probatorias que
debemos establecer y los testigos necesarios para su reconocimiento. En los
casos apropiados, se deberán tomar medidas con antelación para asegurar la
disponibilidad de los recursos técnicos necesarios para presentar en la sala del
tribunal determinada evidencia científica o ilustrativa.
Se recomienda también, siempre que sea posible, visitar el lugar de los hechos.
Tenemos de tener presente que para convencer al juzgador de que es confiable lo
que declara un testigo debemos tener la perspectiva correcta de lo que paso en la
escena del delito para formular las preguntas apropiadas a nuestros testigos o
para poder contrainterrogar eficazmente a los testigos de la parte contraria.
ALEGATO DE APERTURA.
Es una actividad fundamentalmente del litigante, pues constituye la oportunidad
para presentar su teoría del caso ante el tribunal. Por medio del alegato de
apertura los jueces tomaran por primera vez contacto con los hechos y
antecedentes que fundamentan el caso. En el punto anterior dijimos que la teoría
del caso es un ángulo, un punto de vista desde el cual mirar la prueba, en
términos tales que si el juez la mira desde allí verá en ella lo que nosotros vemos.
El alegato de apertura es por excelencia el momento para ofrecer ese punto de
vista para la apreciación de la prueba, el ángulo desde el cual leerla. Este es el
momento para comenzar a configurar la disposición mental del juzgador hacia el
caso y la prueba.
OBJECIONES:
Es la forma que tienen las partes en juicio de manifestar su disconformidad con
cualquier actividad de la contraparte que pueda afectar sus derechos o poner en
riesgo la vigencia de las reglas que rigen el desarrollo del juicio oral.[3]
ALEGATO FINAL:
El alegato final es un ejercicio argumentativo por excelencia, permite al abogado
sugerir conclusiones al tribunal acerca de la prueba presentada, mostrándole de
qué manera cada prueba e información se conjuga para probar nuestras
proposiciones fácticas y hacer creíble nuestra teoría del caso. Es en este
momento en que daremos unidad y coherencia al relato que hemos venido
construyendo a lo largo del juzgamiento, ya que con él buscamos iluminar el juicio
del juzgador acerca de lo que el conjunto de la prueba dice y de donde se puede
extraer que diga eso. Por ello, el alegato final comienza a prepararse desde el más
temprano momento, y los exámenes de testigos y demás evidencias se
encuentran siempre al servicio de ponernos en condiciones de construir en él
estas argumentaciones específicas y concretas.[7]
Es importante subrayar que en el alegato final no se trata de repetir los hechos,
sino de darle, a través de su teoría del caso, los argumentos al juez que le
permitan concluir que los hechos probados se subsumen perfectamente o se
corresponden exactamente con el análisis jurídico o la proposición jurídica que se
le presentó.
Conclusión.
Si un abogado no sabe litigar y únicamente elabora teorías jurídicas abstractas
que expliquen alguna etapa del proceso o cualquier institución procesal que se
desarrolle dentro de él, sólo conseguirá desnaturalizar la idea del proceso
entendido como el método de debate pacífico y dialéctico de resolución de
conflictos mejor elaborado por el hombre, por tal razón no podemos dejar de lado
las herramientas que nos brinda la disciplina de litigación.