a clasificación de las ciencias desde el criterio ciencias humanas / ciencias “no humanas” en la Teoría del

cierre categorial

Antonio Cabrera Domínguez. Psicólogo Clínico

 

Celos

 

Desde la Teoría del cierre categorial se divide el campo de una ciencia en dos regiones: la estrictamente formal (que comporta las operaciones, el sujeto operatorio) y la material (que comporta los términos y las relaciones). Así, se estipula que para eliminar la subjetividad se procede a la eliminación del sujeto; a la eliminación de las operaciones construidas  [i]. Se prescribe la neutralización de las operaciones, del sujeto operatorio, sujeto gnoseológico [ii].

         Desde aquí, para la clasificación ciencias humanas / ciencias “no humanas” es necesario distinguir dos situaciones.

Situación α: Situación de las ciencias en las que no aparece entre sus términos el sujeto gnoseológico o análogos suyos rigurosos, como los monos en la investigación de Köhler; son las ciencias naturales

Situación β: Situación de las ciencias en las que entre sus términos aparece el sujeto gnoseológico (sujeto convertido en objeto) o análogos suyos rigurosos; muy próximas a las ciencias humanas

         En las ciencias humanas, la neutralización de las operaciones comportará su elevación al rango de cientificidad más alto, superando una gran dificultad: que las operaciones son fenómenos del campo, mientras en las ciencias naturales son exteriores al campo.

         Neutralizar las operaciones requiere partir de los fenómenos y volver a ellos: regressus de los fenómenos a las esencias y progressus de las esencias a los fenómenos. Este caso particular en que los fenómenos son operaciones requiere dos nuevos conceptos: metodología α y metodología β, que no deben confundirse con la distinción entre situaciones α y β que le sirve de base.

Metodologías α-operatorias: Son aquellos procedimientos que atribuimos a las ciencias humanas en los que, en virtud de la neutralización de las operaciones iniciales, pueden llevarse a cabo las conexiones entre los términos al margen de los nexos operatorios originarios

 

Metodologías β-operatorias: Son aquellos procedimientos de las ciencias humanas en los cuales esas ciencias consideran como presente en sus campos al sujeto operatorio, gnoseológico

         Posteriormente se llamará metodología α a aquellos procedimientos de las ciencias naturales que no requieren la neutralización de metodologías β previas.

         La dialéctica a seguir puede sintetizarse según la siguiente fórmula: Las ciencias humanas comenzarán con construcciones β-operatorias; en estas fases no podrán alcanzar plenitud científica. La neutralización de las operaciones o regressus eleva los fenómenos al orden esencial, con lo que estas construcciones alcanzan la situación α. Por último, con la vuelta a los fenómenos o progressus estas construcciones recuperarán su condición de metodologías β-operatorias.

         El concepto de ciencias humanas al que se llega de este modo es dialéctico. Las ciencias humanas aparecen como problemáticas, y se remite a situaciones a través de las cuales van transformándose en ciencias naturales.

         Esta dialéctica permite establecer estados intermedios de equilibrio (entre los dos límites extremos de las metodologías α y β-operatorias) de los resultados, mediante los conceptos genéricos regressus y progressus.

         De la combinación de los conceptos anteriores se obtiene la siguiente teoría general de los estados intermedios de equilibrio:

I)       En las metodologías α-operatorias:

α1: Estado límite en el cual una ciencia humana deja de serlo propiamente y se convierte en ciencia natural; cuando el regressus conduce a una eliminación total de las operaciones y de los fenómenos humanos. V.gr. la Reflexología de Pávlov: Partiendo de una situación β-operatoria (psicológica, etológica) regresa hasta el concepto de reflejo cortical en cuyo nivel ya no cabe hablar de operaciones ya que el animal, como sujeto operatorio, desaparece, resuelto en un sistema de circuitos neurológicos; se llega a la fisiología que es una ciencia natural

α2: Estado intermedio en el cual el camino de progressus, partiendo de las operaciones y sin regresar a los factores naturales anteriores, considera los resultados objetivos a los cuales esas operaciones dan lugar, y en los cuales una construcción ya no es operatoria

Hay dos modos: I-α2: genérico, en el que las estructuras a las que se llega son de tipo α pero, además, comunes a los procesos dados en las ciencias naturales; es el caso las estructuras estadísticas. II - α 2: específico, en el que las estructuras a las que se llega puedan considerarse específicas de las ciencias humanas o etológicas; v.gr. el estructuralismo

II)    En las metodologías β-operatorias:

β1: Estado intermedio en el cual cabe trazar la figura de una situación β en la que pueda decirse que nos desprendemos del curso práctico-práctico (propio de las operaciones β2 del punto siguiente) en virtud de la acción envolvente, no ya de contextos objetivos dados a través de ella, sino de otros conjuntos de operaciones que puedan analógicamente asimilarse a tales contextos envolventes. Siguen dentro de la atmósfera de las operaciones, pero ahora las operaciones figuran como determinadas ellas mismas por otras estructuras

Hay también dos modos: I - β 1: genérico que, siendo él mismo operatorio, reproduce la forma en la que se determinan las operaciones β, a través de los contextos objetivos; se diferencia de II-α2 en que nos sigue remitiendo, no a objetos o estructuras, sino a las operaciones; es el caso de las “ciencias de estructuras tecnológicas”: están el conocimiento del productor de una “cosa” y el del que examina la “cosa”, que ya depende de la “cosa” misma. II - β 1: específico en el que las operaciones aparecen determinadas por otras operaciones (procedentes de otros sujetos gnoseológicos), según el modo específico de las metodologías β; la Teoría de Juegos puede considerarse un claro ejemplo de este modo

β2: Estado límite en el que las operaciones, lejos de ser eliminadas en los resultados, son requeridas de nuevo por estos, a título de decisiones, estrategias, planes, etc.; como en la ingeniería y la jurisprudencia; son “teconologías” o “praxiologías”

         Las situaciones a que se llega no son estables. Las ciencias humanas se mantienen en oscilación constante; en ciertos estados de equilibro inestables.

 

[i] Lafuente Guantes, Ma. Isabel (2007). Curso “Epistemología y gnoseología: dos enfoques en teoría del conocimiento”. Módulo 3 La gnoseología tras la crisis del conocimiento. Instituto de Altos Estudios Universitarios y Universidad de León.

[ii] Bueno, Gustavo (1992). “Teoría del cierre categorial”. Pentalfa Ediciones. Oviedo”. Vol. 1. Págs. 113-126 y 196-213.