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A poco más de un año de

haberse conmemorado el 27

de febrero, recordamos a los

que haciendo uso de internet

brindaron desinteresadamente

sus servicios a quienes lo

perdieron todo. Así, fueron

25.000 los voluntarios

reclutados por medio de

Ayudando.com, 1.000

tejedoras furiosas, más de

1.000 psicólogos y un grupo

de 300 abogados, los que

formaron parte de una ayuda

“en patota”.

Por Jorge Ricci Avalos

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Tejedoras furiosas 2.0

con dinero o madejas de lana. Quienes sabían tejer, también financiaban la lana. Finalmente, se trató de un acto desinteresado por intentar ayudar con nuestro grano de arena”.

Para las “arañitas” –como ellas mismas se denominan-, fue un orgullo haber podido contribuir en la zona y según comentan, fue “su forma de decir presente”.

Los númerosHoy las cifras son azules por donde se les mire: “Nuestra campaña estuvo a full todo el primer semestre de 2010, donde hicimos cerca de 250 frazadas, lo que equivale a alrededor de 12.500 cuadrados de 20 x 20 cm. y si contamos que una madeja alcanza para cuatro cuadrados, debimos gastar cerca de 3.100 madejas. Esto es como si cada seguidor en Facebook hubiese tejido cinco cuadrados, lo que es un poco más de una madeja de lana”, cuenta la periodista.

Además, agrega que el apoyo y el tamaño de la “operación frazada” fueron tal que pudieron viajar a una de las zonas más afectadas para entregar personalmente las más de 100 mantas tejidas. “Conseguimos el apoyo de la Fuerza Aérea de Chile para llevar la ayuda recolectada a Lolol, en la VI Región del Libertador General Bernardo O’Higgins”.

Para 2011 su causa sigue más viva que nunca, puesto que saben que muchos compatriotas sureños siguen necesitando de su aporte. Tal como escribió Macarena en la plataforma web, “¡Vamos desempolvando los palillos, chicas, porque estamos de vuelta!”.

Datos de contactoWeb: Grupo Tejedoras Furiosas en Facebook.Mail: tejedoras.furiosas@gmail.com

Macarena Pérez, Andrea Gajardo, Nicole Polanco, Jocelyn Vargas, María Fernanda Rubio y Francisca Jorquera, no superan los 23 años y están lejos de parecerse a la abuela que teje en la mecedora.

Su fuerte es internet, plataforma que utilizan para la coordinación de la ayuda, al igual que para promover sus actividades. No buscan imitar a las tejedoras furiosas oriundas de Houston, Texas, EE.UU. o de Londres, que visten estatuas, puertas y hasta micros en sus respectivas ciudades. Ellas son una agrupación “made in Chile” y su manera de ayudar fue fabricar frazadas, uniendo cuadrados de 20 x 20 cm. que recibieron por parte de 2.689 colaboradoras a lo largo de todo el país, con el objeto de hacer más cálidas las noches de los damnificados por el terremoto del 27 de febrero de 2010.

Para algunos, los días siguientes al suceso, se convirtieron en una oportunidad de hacer negocios, pero para este grupo de ex compañeras del Liceo Carmela Carvajal simplemente se dio la instancia propicia para hacer algo por los demás. La periodista Macarena Pérez, es una de sus creadoras y cuenta cómo fue que empezaron a mover los palillos: “La iniciativa nació un par de semanas después del llamado 27F. Por aquel entonces armamos un grupo en Facebook para reunir a más gente y rápidamente lo logramos. Lo que se suponía sería una tarea de unos pocos días, se transformó inevitablemente en algo más grande, gracias al gran número de gente que se sumó”.

Luego de la sacudida de 8,8 grados en la escala de Richter, Macarena junto a sus ex compañeras, vieron lo que se podía hacer para contribuir. “En un inicio intentamos apelar a la buena voluntad de privados, pero no tuvimos éxito. Todo lo efectuado se hizo a partir de donaciones. Aquella gente que no sabía tejer aportaba

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sol idariaFotografía gentileza Tejedoras Furiosas

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Atención psicológica gratuita a las víctimas del terremoto

Actualmente son una ONG, pero todo partió con un aviso publicado en internet por los psicólogos Danilo Schulz y Sebastián Chacón, después del 27F, convocando a más profesionales del área para prestar ayuda psicológica de manera voluntaria a las víctimas. Fueron 200 los que respondieron.

Posteriormente, es Sebastián Chacón quien funda la agrupación Psicólogos Voluntarios de Chile. A poco más de un año de la catástrofe que remeció a gran parte del territorio nacional, se encuentran coordinando la intervención que se llevará a cabo, en aspectos psicosociales, en las 104 aldeas de emergencia, localizadas en la V, VI, VII y VIII regiones. También apoyan a otras fundaciones, escuelas de escasos recursos y en cuanto a temas relacionados a emergencia, forman parte de la Red Nacional de Ayuda Humanitaria, instancia que les permitió brindar ayuda, por ejemplo, en la Mina San José, en la Cárcel de San Miguel y en el accidente de TurBus.

Sebastián Chacón, director de la ONG, dice que la evolución de esta iniciativa, la que partió como un simple llamado, resultó ser tan grande que sigue en funcionamiento y ha logrado innovar en el campo de la psicología: “La atención psicosocial en emergencia genera resultados inmediatos, pero las prácticas anteriores en psicología en Chile, nos decían que era imposible. Y nosotros, por ignorancia o atrevimiento, decidimos arrojarnos, consiguiendo producir un impacto tremendo”.

Por otro lado, el financiamiento –en su primera etapa-, estuvo dado por empresarios, como el presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), Ronald Bown, y Andrés Giménez, gerente de Empack, además de numerosas compañías que donaron materiales de primera necesidad. Otro mecanismo es a través de la postulación a proyectos concursables, licitaciones públicas y prestación de servicios de atención clínica.

Pero lo anterior no fue todo, pudieron poner su plan en marcha, gracias al apoyo de la Universidad Diego Portales, institución que les facilitó una sala para que coordinaran

la ayuda. Sin embargo, ésta fue un complemento entre los voluntarios y el sector privado que dio dinero para los gastos: “Se destinaron $150.000 por persona, entre traslado, alojamiento y alimentación”, calcula el psicólogo.

La inscripción de voluntarios suma y sigue. En diciembre de 2010 se registraron 1.104 profesionales y a la fecha van 150 adicionales. La ONG, a su vez, tiene presencia en las redes sociales donde destacan sus cuentas de Facebook (perfil Psicólogos Voluntarios de Chile) y Twitter (@PsicVoluntarios) con 1.095 amigos, y más 200 seguidores, respectivamente.

Zonas más necesitadasChacón identifica la zona costera de las regiones VII y VIII como una de las más afectadas por la tragedia. “Si bien hemos trabajado desde la V hasta la IX regiones, la ayuda la concentramos en los lugares más golpeados. Superamos las 20.000 atenciones, movilizando a cerca de 800 psicólogos. Asimismo, atendimos a las 300 escuelas más afectadas entre la VI y VIII región, todas las de la zona costera”.

Problemas más comunesEl director de la ONG explica que el terremoto fue una motivación natural para dar atención psicosocial en terreno en situaciones de emergencia, puesto que fue en los días posteriores cuando recién se pudo ver una gran variedad de problemas y trastornos en las personas. “Cuadros depresivos asociados a contextos anteriores al sismo (el evento del 27 de febrero fue sólo un gatillante). También, nos encontramos con dificultades para conciliar el sueño, dolores estomacales y mareos, entre otras complicaciones”.

Datos de contactoWeb: www.psicologosvoluntarios.clTeléfonos: 410 2838 / Celular: 9 076 7889.

Fotografía gentileza Psicólogos VoluntariosSebastián Chacón

www.psicologosvoluntarios.cl

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Buscando voluntarios para ayudar

El portal web Ayudando.com inicialmente nació en 1999, bajo el alero de Trabajando.com –portal de búsqueda de empleo- y dentro del marco de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE).

Sus fundadores fueron los ingenieros comerciales Juan Pablo Swett y Felipe Hurtado, quienes vieron en internet, el head hunter perfecto para la búsqueda de personas que quisieran entregar su tiempo para trabajar en distintos proyectos: educación, construcción, acompañamiento de niños y mujeres embarazadas, entre otros.

No obstante, el auge real de este sitio ocurrió justo después del terremoto del 27 de febrero de 2010, lo que dio como resultado un boom de solicitudes de gente que quería aportar.

Swett revela cuál fue el objetivo de ambos socios al crear el sitio. “Éste fue el proyecto de responsabilidad social empresarial de Trabajando.com, con el que la idea era colaborar a través del trabajo voluntario. Por eso pusimos a disposición de las fundaciones, a través de Ayudando.com, la tecnología necesaria para que pudieran administrar su voluntariado de forma autónoma”.

Dada la expertise con que contaban en la red, eligieron contribuir por medio de la web, ya que Trabajando.com es una fórmula probada y simplemente se tenía que replicar algo que ya había funcionado. Además es la vía más fácil y rápida de otorgar información a un mayor número de personas.

Sin embargo, Swett señala que el portal busca financiarse por medio de la generación de proyectos de voluntariado corporativo, además del aporte de sus socios fundadores y que aún no se han planteado las donaciones, pese a que no descartan hacerlo más adelante.

A juicio de Swett, la prioridad fue buscar una manera de financiamiento que les permitiera impulsar los proyectos particulares de cada una de las fundaciones asociadas.

Así, la plataforma posee más de 20 proyectos a los cuales se puede solicitar ingresar y los cupos siempre son limitados. “El usuario puede entrar al sitio para postular al trabajo en el cual quiere ocupar su tiempo libre y luego de este primer paso, nosotros revisamos la petición y lo orientamos en caso de ser necesario. Es el mismo mecanismo de Trabajando.com.”

Actualmente son más de 25.000 los voluntarios inscritos en el sitio, que han podido contribuir a igual número de personas, teniendo presencia en 11 países de Latinoamérica.

Un difícil comienzoEn su inicio, el proyecto no se pudo llevar a cabo al 100% por falta de recursos (tanto económicos como humanos), no obstante, tuvieron que pasar 10 años y un sismo de gran envergadura para que pudieran relanzar la iniciativa. Luego de este período, 2008 asoma como punto de despegue de la web de colaboración, el cual se concretaría en 2010.

Ayuda post terremotoEl terremoto significó un aumento en la demanda de los que pedían ayuda, pero aún más en la oferta. Estiman, con orgullo, que el voluntariado vivió un momento estelar y en Chile se demostró que la gente quiere y puede ser solidaria, haciéndolo de forma convincente. “Para ello se creó un currículo de trabajo voluntario donde además de los datos de contacto, experiencia e intereses, las personas escogen a qué tipo de fundaciones desean aportar, de qué manera y en qué horarios”, asegura Swett.

Datos de contactoWeb: www.ayudando.comMail: paula.moreno@ayudando.comTeléfono: 594 4230.

Fotografías gentileza Ayudando.com

Juan Pablo Swett

Felipe Hurtado

www.

ayudando.com

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Prestando asesoría jurídica

Ayuda Legal Chile fue creada para entregar orientación judicial gratuita a las víctimas del 27F y una apuesta online de la Fundación Pro Bono, organización que presta servicios legales sin costo alguno a personas de escasos recursos, en conjunto con el Colegio de Abogados, la Corporación de Asistencia Judicial y Estudiantes de Derecho por Chile.

Tras el terremoto, lo primero que hicieron fue entregar a cada estudio jurídico un tema a desarrollar. Así, cada oficina se encargó de hacer un registro de preguntas y respuestas frecuentes por temas asociados al sismo. Con esta información se escribió una “Guía de preguntas frecuentes”, lo que posteriormente dio vida a una web, cuya principal misión fue ser una herramienta útil a las personas que se vieron afectadas.

Dentro de los temas a destacar, en el manual se encuentra el cómo cobrar un seguro en sus distintas formas: póliza de bienes raíces, delitos contra la propiedad, protección al consumidor y cobro de pensiones, entre otros.

Sin embargo, uno de los aspectos más complicados fue ganarse la confianza de los “consumidores”, que creyeran en el servicio y en recibir la ayuda. “Aunque ésta fue una iniciativa voluntaria, que no tenía un fin comercial, sino prestar un servicio legal gratuito, oportuno y de calidad, al igual que en un negocio, lo más difícil fue conseguir “clientes”, que quisieran recibir la asesoría de un abogado”, argumenta, Marcela Fajardo, directora ejecutiva de la fundación.

Para comenzar con Ayuda Legal, sus organizadores sólo necesitaron de $300.000, además de mucho trabajo voluntario. Uno de los primeros pasos fue

habilitar una línea telefónica, vía a través de la que recibieron más de 500 consultas. Igualmente, un grupo de 300 profesionales estuvo en 23 comunas a lo largo del país, asistiendo en terreno y más 9.000 personas visitaron el sitio www.ayudalegalchile.cl.

Además tienen presencia en las redes sociales, en Facebook con 232 amigos, Twitter y canal de videos en YouTube. Los anteriores son espacios abiertos a la discusión de temas legales y que aquejan a las víctimas del movimiento telúrico.

Puntos de atenciónLa agrupación de abogados estuvo presente en localidades, que fueron fuertemente golpeadas como Curepto y Hualañé, VII Región del Maule. “Las consultas más comunes con las que llegaba la gente fueron respecto a contratos de arriendo, seguros y derecho laboral”, recuerda Marcela Fajardo.

Programa cerradoActualmente, como iniciativa post terremoto Ayuda legal Chile cesó sus operaciones, aunque no el compromiso de seguir atendiendo las consultas de las personas afectadas, labor que mantiene Fundación Pro Bono a través de su sitio web www.probono.cl Esto, para todo lo que respecta a problemas legales surgidos después del 27 de febrero del año pasado y de cualquier otra índole.

Datos de contacto Web: www.probono.cl / www.ayudalegalchile.clMail: probono@probono.clTeléfono: 381 5660.

Fotografía gentileza Ayuda LegalMarcela Fajardo

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