anÁlisis de la obra - dialnetanÁlisis de la obra frenología y magnetismo es otra obra compuesta...

ANÁLISIS DE LA OBRA

Frenología y magnetismo es otra obra compuesta para la ama-ble función de la nochebuena, en este caso del ario del Serior de1845: tono amable, burla suave, diversión.

En nota a pie de página, y luego en el interior de la comedia,expone Bretón la intención moralizadora de la obra, enderezadaa ridiculizar los excesos de los aficionados a la frenología y elmagnetismo. Bretón, no obstante, tiene mucho cuidado en nometerse en camisa de once varas, y deja bien claro que no juzgaesas "artes, o ciencias, o lo que sean; pues ni para ensalzarlas nipara deprimirlas se considera juez competente."

Ya sea por las prisas impuestas por las "circunstancias" navi-derias, ya por esa innegable "intertextualidad" o copia descaradaa que me refería más arriba, la exposición de esta obra bebe sinrecato de otras dos comedias breves: Avíso a las coquetas y Porno decir la verdad. Como en Aviso a las coquetas, comienza conun arranque ex abrupto, y echa mano del enfrentamiento joven-pobre/viejo-rico con peluca. Por si ello no bastase, la situaciónfuera de lo normal y extremada que posibilita el inicio de la obravuelve a ser, como en Aviso, una cláusula del testamento de untío rico, que impone la previsible boda inconveniente. Cierto queen esta comedia la contrapartida es distinta: un amor verdaderoy matrimoniable, que parece haber acabado para la joven de lapeor manera ("en los brazos de torpe mujer adŭltera"), aunque,claro es, luego se verá que no había tal, pero, para que no pa-rezca que... , el inevitable debate aporta incluso pruebas escritasdel desliz adulterino del novio de toda el alma: una carta y un

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periódico. De tal manera que ya tenemos la situación extremosade partida (que de por si era extravagante: "Se habrá visto / dis-posición más absurda?, que dice la juiciosa criada) llevada al ex-tremo; claro que quedan dos racionales salidas: "imorir!" yabocarse al matrimonio inconveniente porque si, como expresaLuisa ya en la primera escena, lo que viene a ser igual que en Porno decir la verdad.

Frenología y magnetismo se desarrolla en torno a un tipo,próximo al del "figurón". En la plasmación escénica de este per-sonaje interviene un mayor nŭmero de elementos que los queBretón pone en juego en comedias similares. El ridiculo D. Lu-cas, frenólogo-magnetólogo, extravagante, rico, osado (al extre-mo de tener cincuenta arios), feo hasta la osadia, extremoso alpunto de pretender matrimonio con la bella de la obra, apareceen escena y ya su traje comienza a definirlo como "extravagan-te". Se define de inmediato por el uso de la palabra, por su idio-lecto grotesco, esmaltado de voces como "craneoscopia","magnetismo animal" o "chistosidad". Lo definen los otros perso-najes: "ente original", "es loco pero manso", "iQué mamarracho!".Se define, en fin, y por extenso, definiendo sus artes y poniéndo-las en práctica; en la primera ocasión de manera muy funcional,porque, además de contribuir a presentarse como tipo, genera hu-mor (al intentar practicar con la criada Ceferina), y reafirma una delas líneas de la intriga, la del matrimonio inconveniente.

La intriga de la obra presenta dos hilos: la nombrada del ma-trimonio inconveniente, aceptado por despecho por la bella, re-chazado después; un matrimonio conveniente, rechazado por labella por equivocación, aceptado después. Cuando estas dos line-as están presentadas y en tensión, el autor se aplica a solucionar.En este cometido juega el papel de demiurga la criada Ceferina (amanera de lo que pudo verse con la criada de A lo becho, pecbo).Ella marca el momento en que la obra debe enredarse para buscarel desenlace: "Ceferina. Ya el yerro/ se cometió: lo que importa/

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MANUEL BRETON DE LOS HERREROS. Frenologia y rnagnetismo

es pensar en el remedio./ Es preciso hacer de modo/ que renun-cie ese estafermo/ de motu propio a la boda..."

Lo que ella no dice: que el tipo ha de mostrar su ridiculez yser puesto en ridículo, ya lo decía Bretón en la nota a pie de pá-gina. Así la situación, las salidas que dicta el sentido com ŭn (ha-blar claro, decir "no", aburrir al pretendiente) se rechazan -demodo similar a Por no decir la verdad- y se impone entonces, pa-ra bien de la obra, el "dejarle obrar y esperemos" de la criada Ce-ferina, que permite que D. Lucas haga de las suyas -que a esoíbamos- y en cuanto a la solución: "Dios proveerá", que tambiénse invocaba en Por no decir la verdad.

Y obrando, ob.rando, la acción se divide en muestras de cra-neoscopia, por un lado, y de magnetismo, por otro. En las de cra-neoscopia actŭa D. Lucas, como aperitivo, con un criado 1 2, uncriado 29 y un Bonifacio Buenaflor, palpando cráneos y errandosin descanso, sobre todo en el tercer caso, que se volverá contraél, robándole quien él avaló tras análisis y palpaciones. Se au-menta la dificultad con la frenologización de un médico agresivo,que permite el humor ácido de igualar militares y médicos por elsema comŭn de matar (broma tan cara al autor); y en el paso almagnetismo, la hipnosis de doria Marta se resuelve con el ŭnicoacierto del personaje ridículo, aprovechado también como mo-mento cómico, ya que la seriora revela su edad.

"Dejarle obrar y esperemos", y mientras se esperaba, el Diosque había de proveer pone en la cabeza de la criada Ceferina"una idea"; el ŭnico acierto del personaje fantoche, su éxito en elmagnetismo de doña Mamerta, va a dar pie a su desdicha: cae enla trampa de la criada demiurga, y en la sesión de hipnosis, la be-11a, fingiéndose magnetizada, desembucha a D. Lucas lo que de-bió decir despierta (aunque decir esto es no entender el teatro,este teatro): que no lo quiso, ni lo quiere, ni nunca lo querrá; porestraflario, feo y motivos del guión. Hallada y aplicada la solu-ción, cabe notar el inquietante parecido que se da entre Dios

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(que había de proveer), la criada Ceferina (que actŭa de demiur-ga) y Bretón (el auctor).

El desenlace definitivo va, nuevamente, en clave de castigo,y el personaje ridículo padece sus "pifias" y es ridiculizado.

Dos cuestiones relativas a la técnica me gustaría, por ŭltimo,destacar en esta comedia. Es la primera la excesiva duración dealguna escena, y singular y curiosamente la de la ŭltima, en laque se cuenta dinero, por contar, y se habla por Ilenar el tiempo,para llegar a la broma final, que ciertamente tiene gracia, al Ile-var la palpación hacia el tema de los "cuernos", en alusión a lainfidelidad matrimonial, con el susto consiguiente del frenólogo;de cualquier modo, no necesitaba tanto preámbulo como el quese le concede.

La segunda cuestión se refiere a la presencia, más acentuadaque en otras obras, de las escenas de transición (serían, sobre to-do, las II, III, V, XIX y XXV ). Se trata de escenas breves; buscanjustificar un tiempo necesario para permitir la presencia o ausen-cia de un personaje; se realizan mediante la aparición de algŭncriado que dice algo, anuncia, etc., o un diálogo en que se re-dunda en lo ya sucedido en la acción.

FRENOLOGíA Y MAGNETISMOCOMEDIA EN UN ACTO

Estrenada en el Teatro del Principeel día 24 de diciembre de 1845 (*)•

PERSONAJES

LUISA. D. EME 1 ERIO.

CEFERINA. D. BENIGNO.

DOÑA MAMERTA. BONIFACIO.

D. MANUEL. GIL.

D. LUCAS. DOS CRIADOS.

La acción se supone en Toledo.- Sala con puerta en el foro,que es por la que entran en escena los que vienen de fuerade la casa: otra en los bastidores de la derecha del actor,

otra en los de la izquierda.

(*) La presencia en esta corte del famoso "frenálogo y magnetizador" Cubiy sus experimentos y lecciones en ambas materias, las pusieron en boga poruna temporada; y, como acontece en casos semejantes, no faltaron aficionadosatrevidos e ignorantes que se diesen a ejercer una y otra habilidad a diestro ysiniestro. Este abuso es lo que el autor se propuso ridiculizar en la presente fá-bula cómica; y no a persona determinada; ni tampoco a las referidas artes, ociencias, o lo que sean; pues ni para ensalzarlas ni para deprimirlas se consi-dera juez competente. -

ESCENA I.

LUISA. CEFERINA.

Ceferina. Xonque es cosa decidida,seriorita?

Luisa. Sí.Ceferina.

J-lay locurasemejante? yor despechocasarse en segundas nupcias,usted, tan joven, tan linda,con ese primo a quien nuncaha visto, y que frisa ya,segŭn consta de escrituras,en cincuenta navidades!iSanto Dios! Tendrá peluca...

Luisa. Así lo dejó dispuestodon Pedro Nolasco Orduria,tío de ambos, y es precisoque la voluntad se cumpladel difunto...

Ceferina.

No es la cláusulaen cuestión tan absoluta;pues, segŭn tengo entendido,hay otra que la atenŭamandando que si la bodacitada no se ejecuta,reciba usted diez mil durosde dote...

Luisa.

Pero a don Lucas,que es el ŭnico herederode la cuantiosa fortuna

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de don Pedro, se reservala facultad inconcusade elegir entre casarseconmigo, o darme la sumaconsabida; y si soy yode quien parte la repulsa,todo lo pierdo.

Ceferina.

Se ha vistodisposición más absurda?

Luisa. Hubiérame apresuradoa escribirle mi renuncia,porque no en él sino en otrocifraba yo mi ventura;pero esperé, y mi esperanzapareció a todos muy justa,que el novio testamentario,dando corteses disculpas,me dejase en libertadde aspirar a otra coyunda,ya que a sus crecidos bieneslos de la herencia acumula,y pudiendo a poca costacomprar mi paz y la suya.No quiso...

Ceferina.

Quizá habrá hechoalguna excursión ocultaa Toledo...,sí, y prendadode esa cara, —ialma de Judas!—habrá dicho para sí:Me conviene la futura;muchos arios llevo a cuestas,pero ella es pobre y yo un F ŭcarl...

1. Fŭcar. Personaje famoso y erhblematico por su riqueza. Remite al apelli-do de la famosa familia de banqueros alemanes.

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MANUEL BRETÓN DE LOS HERREROS. Frenología y inagnetismo

Esperaré. Siempre hay tiempopara soltar la pecunia.

Luisa. Pues bien, no la soltará.Llena mi alma de amargurapor la alevosa perfidiadel ingrato a quien ilusaentregué mi corazón,cedí en fin a la importunasolicitud de mi primo,y hoy mismo, segŭn me anuncia,debe llegar a Toledo.

Ceferina. Pero está usted bien segurade que don Manuel Germánolvida en la bara ŭndade Madrid a la que ha sidoobjeto de su ternura?iDemasiado! yeinte díassin escribirme! Jlay excusapara tan largo silencio?

Ceferina. Sin duda el pleito le ocupamás de lo que él esperaba.Sabe usted lo que es la curia...Han podido extraviarselas cartas, o quizá algunaenfermedad...

Luisa. Será fuerza,pues de ligera me inculpas,convencerte de su infamia,aunque de rubor me cubra.No es sólo ya su silenciosospechoso el que le acusa.Olvidándome en los brazosde torpe mujer adŭltera...

Ceferina. ¡Ave María purísima!

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Luisa. Se ha viciado su conductaen términos de haber sidopreso por más de una culpavergonzosa.

Ceferina.

iÉl! No es posible.Quien tal diga le calumnia.

Luisa. [Mostrando una carta y un periódicoliAh! no. Persona incapazde mentir me lo aseguraen esta carta, y tambiéneste diario lo anuncia.

Ceferina. Siendo así...Luisa. [Leyendo "Manuel Germán."Ceferina. Sí.Luisa. "Manuel Germán."Ceferina. No hay duda.Luisa. Dime ahora, Ceferina,

que es mi indignación injusta,y que, mientras él asíse deshonra, así me injuria,cuando otro me solicitame resigne yo a ser viuda.

Ceferina. Eso no. Pero casarsesin amor... iAy! calenturame da sólo de pensarlo.Ñué hará usted si le repugnaluego ese rancio maridoque en un acceso de furiaha aceptado?

Luisa.

Ñué sé yo?iMorir!

Ceferina. Naliente tontuna!Quien puede aspirar a templosno debe pensar en tumbas.Si quiere usted verá pronto

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MANUEL BRETON DE LOS HERREROS. Frenología y magnetismo

esas lágrimas enjutassin recurrir a una manocurtida y llena de arrugas.Jóvenes hay en Toledo...

Luisa. No, no. Es justo que yo sufrael castigo de mi neciacredulidad. Ya a don Lucaspalabra he dado de esposa,y aunque a mi dolor sucumbala he de cumplir.

Ceferina. Conque el otroha cometido la culpa

usted se impone el castigo?Si lo mandara la Bulano haría yo...

ESCENA H.LUISA. CEFERINA. GIL.

Gil. Seriorita,un forastero preguntapor usted.

Luisa. Su nombre?Gil. Don Lucas Pérez Orduria.Luisa. (iCielos!...) Que entre.

ESCENA III.

LUISA. CEFERINA.

Ceferina.

iAy, seriorita!Si esa boda se efectŭano diga usted que se casa;diga usted que se sepulta.

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ESCENA IV.

LUISA. CEFERINA. D. LUCAS.

Ceferina. [Viendo aparecer a D. Lucas, que hasta en el trajeque lleva manifiesta la extravagancia de su carácter](iQué visión!)

Lucas. ¡Ave Maria!Ñuién es aqui mi serioradoria Luisa...?

Luisa. Servidora...Lucas. Muy seriora y novia mia.

Recibi la muy atentade usted, en que acepta, calamocurrente, mi amor, mi tálamo,mi craneoscopia y mi renta;y vengo;

[Se arrodilla.]y puesto de hinojos

devoro con fanatismoel celestial magnetismode esos hechiceros ojos.

Luisa. i0h! alce usted...Lucas. [Levantandose iDulce momento!

ioh gloria mia! ioh placed-Usted debe de tenernervioso temperamento.

Luisa. No sé.Ceferina. (Es ente original.)Lucas. iGran tipo, o miente la ciencia,

para absorber la influenciadel magnetismo animal!

Luisa. No entiendo...Lucas.

Veremos luego...Ceferina. Hable usted claro, o si no...

Ni mi seriora ni yohemos aprendido el griego.

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Lucas. yullitas, eh?[Cefernina se

glilaridad?[A Luisa .]

Sabe usted que es buena piezala niria...? En esa cabezahay mucha chistosidad.—bk ver...?[Tentando la cabeza a Ceferina.1

Ceferina. [Desviándose3iEh!...

Lucas. Como no venzasu buena razán la audacia

[Volviendo a tentarla .]de ese hueso, en cada graciasoltará una desvergiienza.

Ceferina. [Retirándosenuite usted!... iDiantre!...

Lucas. En los cráneoshay órganos diferentes:los unos son prominentes,los otros son subterráneos.El cerebro es la substanciadonde nuestra alma reside.Cada afección coincidecon una protuberancia.—Mas ya probaré en detall2que no es farsa ni pamemael admirable sistemadel famoso doctor Gal

2. Detall. Detalle; Bretón recurre al catalán para procurarse una rima con Gall.• 3. Gall. Fisiólogo alemán (1758-1825) fundador de la Frenología. Teoría fun-

dada en la creencia de que existe una relación entre la forma del cráneo de unapersona y sus facultades mentales.

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Luisa. [Aparte con CeferinalCeferina!

Ceferina.

Es un pozode ciencia.

Luisa. iQué novio!Ceferina.

Un lince;allá por el ario quincefue sin duda guapo mozo.

Lucas. En el arte de Mesmersoy profesor asimismo;esto es, en el magnetismo.

Ceferina. Y eso... es cosa de comer?Lucas. yicarilla! ibachillera!

[A Luisa.]Con el tacto, y aun quizáscon mirarle, y nada más,hago dormir a cualquiera.

Ceferina. Lo creo a fe de mujerhonrada.

[A Luisa .]Desde que entró

este caballero...[Bostezando.]

Ah... yome duermo a más no poder.

Lucas. [Sonriéndose, mirando a Cejérina y poniéndose eldedo en la cabezaliAh! el órgano... Y este gasmagnético, sin preámbuloslo digo, forma somnámbulos,y aun profetas...

4. Mesmer. Federico Antonio Mesmer (1733-1815); médico alemán funda-dor del Magnetismo; teoría que defiende que el magnetismo animal puede curartodas las enfermedades.

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MANUEL BRETÓN DE LOS HERREROS. Frenología y magnetismo

Ceferina. Escp más?Lucas. En cuanto a la craneoscopia,

usted juzgará si...[En actitud depalpar la cabeza de Luisa. Estaretrocede

ver...?

Luisa. iQuieto!Lucas. [Valiéndose del lente para examinar la cabeza de

Luisa y girando en derredor de ellaiBien! Para mujer

propia, ihuy! es usted... ila propia!La amatividad es fuerte,pero la templa...[A Luisa, viéndola bacer un movimientoretrógrado.]

ph! no toco;—el intelecto.

Luisa. [Aparte con Ceferina.1iAy! es loco.

Ceferina. Pero manso. Me divierte.Luisa. iBasta!Lucas.

En todo su apogeola ven,eración descuella.(Puedo casarme con ellasin peligro.)

Luisa. ph! me mareo.Lucas. [Dejando de girar en torno de Luisal

Bien, otra vez... Tiempo quedapara que yo me ejercite...Ahora, si usted me permitequitarme esta polvareda...

Luisa. Sí, sí.Lucas. El que viene de viaje...

Cuál es mi cuarto?Luisa. [Mostrando la puerta de la derechal

El de enfrente.

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Lucas. Muchas gracias...[Viendo entrar a un mozo con maleta, saco denoche y sombrereral

Justamente,ya tengo aquí el equipaje.[Guiado por Ceferina entra el mozo con su carga enla habitación indicada.](iBien haya, amén, el caprichode mi tío!) Por lo que hacea nuestro próspero enlace,no hay que hablar; todo está dicho.

Luisa. (ŠCielo!...)Lucas. [A Ceferina.] iAh! será menester

que me encargues un criado...Ceferina. Sí; voy a dar el recado.

ESCENA V.D. LUCAS. LUISA.

Lucas. [Al mozo que sale de vacio, dándole una peseta.]Toma tŭ para beber.[E1 mozo se retira.]Esta noche tendrá efectoel contrato, ioh dulce amor!

Luisa. Yo...[Se reprime y calla.]

Lucas. turbas? Ya; el pudor...Vuelvo... Abur...[Entrando en la habitación de la derecha.]

(Sí, iel intelecto!)

ESCENA VI.LUISA. CEFERINA.

Luisa. iDios mío, qué hombre!... iImposible!Guárdese sus diez mil pesos...

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Ceferina. [VolviendoÑué tal, seriorita? iBravo!Doy a usted el más sinceroparabién...

Luisa.

iCruel, no asíte burles de mi tormento!Muy desesperada estoy,mas resignarme no puedoa una boda que me haríafábula y risa del pueblo.

Ceferina. No tal. J3or qué? Bien miradodon Lucas, aunque grotesco,es un bendito de Dios.Conozco yo a más de cientoque por un marido asíse darían en el pechocon un canto.

Luisa. Calla por Dios, Ceferina,o échame un cordel al cuello.

Manuel. [DentroiDánde está!...

Luisa. iCielo! Esa voz...Ceferina. iEs don Manuel!...Luisa.

Será suerio?[Viéndole llegar por el foroljAh!

ESCENA VII.LUISA. D. MANUEL. CEFERINA.

Manuel. iLuisa!Ceferina. ;Extraria visita!Manuel. Esa mano...Luisa. [Con seriedad y retrocedienda]

iCaballero!...

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MANUEL BRETON DE LOS HERREROS. Frenología y magnetisrno

para darme que sentir.En Madrid..., ien el infiernodebía estar! hay un quídam5llamado ni más ni menoscomo yo Manuel Germán,mas con el cual nada tengode comŭn, ni relacionesde amistad ni parentesco...

Luisa. iAh!...Manuel.

Ni le he visto en mi vida;mas si algŭn día le encuentro,o se bautiza otra vezo he de romperle los huesos.Él es sin duda el que constaen este papel funestoque he herido tu corazóncon el purial de los celos.

Luisa. Dios mío!Manuel.

A él le buscabanlos agentes del Gobiernopor vago y traidor, y a míen su lugar me prendieron.

Manuel. Ñué oigo!Ceferina. Es posible!...Manuel.

Sí tal;también le debo ese obsequio.

Luisa. Y yo... iinsensata!... iInfeliz!...Manuel. Sí, por pecados ajenos

me han tenido tres semanasen un calabozo horrendo;

5. Quídam. Sujeto despreciable y de poco valer, cuyo nombre se ignora ose quiere omitir. (vid. DRAB); Bretón gusta de esta voz y la emplea con fre-cuencia (vid. v.g. Marcela o Los tres ramillete,s, donde, incluso, es la denomina-ción de un personaje, que dice de sí: "Sí, yo soy una entidad...").

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MIGUEL ÁNGEL MURO

y ya ves que mal podíaescribirte estando preso.Mi inocencia al fin probarontestigos y documentos,y apenas me veo libre,dejo abandonado el pleito,salgo en posta, y en cinco horasllego a la imperial Toledo.

Luisa. Perdona... iAy triste de mí!Manuel. iNo más!Ceferina. (Y ahora quid faciendurn?)Manuel. Las apariencias estaban

contra mí; yo lo confieso.tu corazón, sin embargo,no debió tan de ligeroacusarme... iEh! dpor qué lloras?

Luisa. iAy, Manuel mío! El despechome ha cegado y...

Manuel. oQué?Luisa. Y vengando

en mí misma tu supuestodelito...

Manuel. iYo tiemblo! Acaba.jias tomado algŭn veneno?

Ceferina. No: un marido.— Es decir...Manuel. iPérfida!Ceferina. Todavía no se ha hecho

la boda.Manuel. iInfiel! iTe has valido...!Ceferina. [Con el dedo en la bocal

iChit!...Manuel. De frívolos pretextos

para venderme!Ceferina. iMás bajo!Manuel. Xómo!...

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Ceferina. El novio está allí dentro.Manuel. 0Qué importa?Ceferina.

Está arrepentida:su llanto lo está diciendo.En un rapto de locuraescribió a don Lucas...

Manuel. iCielos!...sobrino del difunto...?

Ceferina. Sí, el novio del testamento.Manuel. Basta; todo está explicado.

Es rico... yenció el dinero!—;Adiós!

Luisa.

Vete, ingrato, vetesi dudas....

Ceferina. [DeteniéndolelNo, serior. iquieto!

Luisa. Pero, por Dios, no me injuriesasí. iMátame primero!

Manuel. iLuisa![A CeferinaEl alma me traspasan

sus doloridos acentos. •[A Luisa .]

pué débil soy! No debieraperdonarte, mas...

Ceferina.

Ya el yerrose cometió: lo que importaes pensar en el remedio.Es preciso hacer de modoque renuncie ese estafermode motu propio a la boda...

Manuel. Si no le amas...Luisa.

Le detesto.Manuel. Pues ffienes más que decírselo

en su cara...

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Luisa.

No me atrevosino en el ŭltimo apuro...

Manuel. Pues bien, de un modo indirecto...Ceferina. No caerá de su asno. Acaba

de decir que en su cerebroestá muy desarrolladoel órgano de 0;2tié términousó?... La amatividad.

Manuel. iQué me dices! Segŭn eso,es frenólogo el don Lucas?

Ceferina. Sí, serior, ioh! y estupendomagnetizador. Si él quierelas gentes hablan en suerios;cree tener ciencia infusaen las yemas de los dedos,y que todo ser vivientedel uno y el otro sexolleva su hoja de serviciosen la tapa de los sesos.

Luisa. Supersticiones ridículas!Ceferina. Brujerías...Manuel.

No por cierto.La Frenología es yadigna de entrar en el gremiode las ciencia, pues se apoyaen muchos experimentosnotables, y la defiendenautores de mucho mérito.Por lo que hace al magnetismo,probado está ya con hechosinnegables que produceextraordinarios efectosese fluido impalpableque se trasmite de un cuerpoa otro; y, si bien repugna

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a mi razón el dar créditoa todas las maravillasque cuentan los extranjeros,casos he visto en Madridque a los hombres más incréduloshan convencido... ríes?—Ver y creer dice el proverbio;y yo, Luisa, que no soyni fanático ni ciego,lo que veo no lo dudo;lo que dudo no lo niego.—Mas no faltan charlatanesque, sin estudio ni ingenio,en esta y otras materiasse dan aire de maestros,y el susodicho don Lucaspudiera ser uno de ellos.

Ceferina. Ñuién duda...? Yo, sin echarlade frenáloga, me atrevoa convencerle de que esun insigne majadero.—Pero me ocurre una idea.Él dice que los afectossi la razón no los domason nocivos y siniestros.Abŭrrale usted a fuerzade dengues y de requiebros,y así...

Manuel. iCómo!...Luisa. Yo no sé

Manuel.fingir...

Ni yo lo consiento.iHola! iPues eso faltaba...!Pero qué andar con rodeos?Entro ahora mismo en su carto

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y quitándome de cuentosle hago tomar el portantey si no se va le estrello.

Ceferina. iNo! Mi seriorita entoncesperderá los diez mil pesos,y ni ella es bastante ricapara desairar al muerto,ni usted querrá que los pierdacontra razón y derecho.—Paciencia. Dios proveerá...Dejarle obrar y esperemos.Para dar con todo al trastesiempre ha de quedarnos tiempo.Aquí estará usted...

Manuel. ph! sí.No quiero exponerme al riesgo...

Luisa. iOtra vez, Manuel!...Manuel. Perdona.Ceferina. Disimule usted...Manuel. Si puedo.Ceferina. Digale usted que es también

frenólogo, aunque modesto,y atraído por la famade su superior talentoha venido a consultarle...Ya sale... iAlerta![Separando de Luisa a D. Manue1.1

iMás lejos!

ESCENALUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS.

[D. Lucas aparece vestido, como suele decirse, de tiros largos,pero muy atrasado en la moda y con colores ridículamente

cbillones y mal combinados.1

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Lucas. Otra vez, bella futura,a tus órdenes estoy.

Manuel. (iQué mamarracho!)Ceferina. Este joven,

entusiasta admiradorde la craneoscopia...

Lucas. :Sí?Ceferina. Y la magnetización...Lucas. Celebro... J)esea usted

que le magnetice?Manuel.

Soypoco elástico de fibrasy temo una congestión...

Lucas. Querrá usted que le examineel cráneo... Al momento voy...Siéntese usted...

Manuel.

Es inŭ til:ya tengo formado yomi horóscopo... He dicho mal:mi craneóscopo.

Lucas. Esa voztécnica anuncia que ustedcultiva...

Ceferina. Sí, es profesor...Lucas. Bien; discutiremos.Ceferina.

Quierever alguna operaciónde esas manos primorosas...

Lucas. Corriente; aunque sean dos.

ESCENA 111.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. CRIADO 12

Criado. 1 2 Con su licencia de ustedes.Lucas. Ñué quiere ese motilán?

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Criado 1 9 Es aquí donde hace faltaun criado?

Lucas.

iAh! Sí; serior.Adelante.

Criado 1 9

Yo prentendo...Tengo personas de proque me abonen...

Lucas.

Es ocioso.Con hacer yo la inspeccióncerebral del candidatopor satisfecho me doy

[A D. Manuel.]Vea usted otra ventajadel sistema del doctorGall. Para admitir criadosya los informes no sonnecesarios[Palpándole la cabeza.]

Registremos....Criado 1 2 [Temblandol

Ñué hace usted? (iExtrario humor!)Lucas. iQué espantoso desarrollo,

qué montaria en la regióndel orgullo!— Vete, vete.

Criado 1 2 iVirgen Santa! Pues isi soyhumilde como un borregoy a nadie guardo rencor...!

Lucas. Tŭ darás tarde o tempranoa conocer tu ambicióndesmedida. Si pudierasserías otro Nembrod6.Tal vez ya estarás fraguandoalguna conspiración...

6. Nembrod. Posiblemente, Nemrod, rey de Nínive.

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Criado 1 2 Jesŭs!Lucas. Si entras en mi casa

querrás mandar más que yo.Ceferina. iCalle usted! no hay más que ver

esa cara de angelón...Criado 1 9- [Llorandol

mí tal injuria!... iA mí!...Me quejaré al celador.

ESCENA X.LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS.

Ceferina. J,4D ve usted? Se va llorando...

ESCENA Xl.LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. CRIADO 2°

Criado 22. Alabado sea Dios.Vengo...

Lucas.

A buscar acomodo.1\Tip es eso?

Criado 22. Sí, serior, Hoy...Lucas. [Tentandole la cabeza.]

Veamos...Criado 22. iAy!...Lucas. No te muevas.Criado 22. (ffle irá a dar un cogotón?)Lucas. Tu cabeza me dirá

de qué pie cojeas.— i0h!...Basta; no ha lugar. iAparta!

Criado 22. Pero...Lucas. iAbur!Criado 22. yor qué razón...?Lucas. No te quiero avergonzar.Criado 22. Si yo...Lucas. iLargo o voto a briós!...

141

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Criado 22. QQué tendré yo en la cabezaque le causa tal horror?)

ESCENA XII.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS.

Ceferina. It3or qué le despide ustedcon tal furia?

Lucas. Por ladrón.Luisa. ffls posible!... cómo...?Lucas.

Su órganoadquisitivo es atrozy está en el ŭltimo gradode malicia y perversión.

Ceferina. Mire usted no se equivoque.Lucas.

iYo equivocarme!... No.Ceferina. yo pudiera sobre ese órgano

tener el pobre un chichón?Lucas. iBah! yo sé bien...

ESCENA 71111.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. BONIFACIO.

Bonifacio.

peogracias![Dudando .1

JDon Lucas...?Lucas. Ven.Bonifacio.

Servidor...[Hablan aparte D. Lucas y Bonifacio

Luisa. [Aparte con D. ManuellÑué opinas, Manuel?

Manuel. Que es locorematado. Más de dosen el hospital del Nuncioestán con menos razón.

Lucas. Bien está. Xómo te Ilamas?

142


Bonifacio. Bonifacio Buenaflor.Lucas.

El nombre es de buen presagio.Bonifacio. He servido al capiscol7

de la...Lucas.

Eso es indiferente.Tomaré tu filiación...

Bonifacio. Xómo!...Lucas.

En la cabeza.[Se la reconoce.]

Bonifacio. Limpiala hallará usted como el sol.Todos los días me peino.(iVaya que es rara aprensión...)

Lucas.

Están bien equilibradoslos órganos. Ni un reloj...[A D. ManuellVea usted esta cabeza...Redonda como un melón.—Tŭ eres muchacho de juicio...

Bonifacio.Lucas. De conciencia.Bonifacio. Es favor...Lucas.

Los órganos perniciososno están en sublevación;y al contrario, es admirableel desarrollo precozde los buenos.— imuy bien!Fidelidad —adhesión-patriotismo —filadelfia...

Ceferina. Qué?

7. CapiscoL Sochantre, dignidad religiosa que en las catectrales tenía a sucargo el gobierno del canto en el coro.

143

MIGUEL ÁNGEL MURO

Lucas. Es decir, amoral prójimo y a la patria...

Bonifacio. iMucho! Soy buen espariol.Lucas. Si hubieras nacido en Roma

serías otro Catón.No hay más que hablar: te reciboa ojos cerrados.

Bonifacio. iSerior!...(Es chiripa haber topadocon este santo varón.)

Lucas. Ñué salario te pagabael jefe del facistol?

Bonifacio. Cada més cuarenta reales.(Aumentemos...)

Lucas.

Yo te doysesenta

Bonifacio. i0h! mándeme ustedrodar y...

Lucas. [A D. Manue1.1iQué adquisición!

Dele usted oro molido,y es seguro...

Manuel. En eso estoy.Lucas. [A Bonifacio.]

Ven...Ceferina. [Aparte con D. Manuel.]

Yo creo que es un tuno...Manuel. Soy de la misma opinión.Lucas. Te diré lo que has de hacer.

[A Luisa.]En tanto, cara de sol,manda llamar al notarioy que con mano velozextienda el contrato... Sí?pué dicha para los dos!

144


ESCENA

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL.

Manuel. iVoto a...!Ceferina.

iCalle usted con milde a caballo!

Manuel. iMentecato!Ya le daré yo el contratocon una...

Ceferina. iSilencio!...[A la puerta del foro.1

iGil!—Aunque venga será en vano.Mi seriorita sé yoque no ha de firmar...

Luisa.

iAh! no.iAntes cortarme la mano!

Manuel. Pero...Ceferina. Usted déjeme a mí.

[Llega Gil, le dice Ceferina una palabra al oído y seretira

[A Luisa .1Si acoge usted cuando seatiempo oportuno una idea

[Con el índice en la frentelque me está bullendo aquí...

Manuel. Pero...Ceferina. El asunto es muy serio.Manuel. Soy yo quien lo tomo a risa?Emeterio. [En el fora]

Mi seriora doña Luisa...Luisa. Entre usted don Emeterio.

ESCENA YCV.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. EMETERIO.

Emeterio. A los pies de usted, Luisita.

145

MIGUEL ÁNGEL MURO

Luisa. Servidora...Ceferina. QQué traerá...?)Emeterio. [Saludando a D. Manuel, que le contesta con una in-

clinación de cabeza.1Caballero...

[A LuisaiUsted dirá

que es extraria mi visita.Se habla mucho en la ciudadde un frenólogo que aquise hospeda...

Luisa. Cierto.Emeterio. Pues, y...

me tomo la libertad...Luisa. Es usted muy duerio...Ceferina.

iViva!Vendrá usted con el deseo -de un poquito de tecleoen los órganos de arriba.

Emeterio. No vengo con tal afán.A lo que vengo en sustanciaes a probar la ignoranciade ese necio charlatán.Xon qué titulo o qué gradoviene ese pseudo-Galenoa...? Noto al chápiro!...

Ceferina. [Aparte a Luisa y D. ManueliBueno!

Ya tenemos un aliado.

ESCENA XVI.LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. DON EMETERIO. D. LUCAS.

Lucas. Luisa...Ceferina. [A D. Emeterio.1

Aqui viene.

146


Lucas.

Dtro adepto?[Yendo a tentar la cabeza a D. Emeterio.]Veamos...

Emeterio. [Parandole la mano.1iEh! yo me rasco

solo y no pongo mi cascoen las manos de un inepto.

Lucas. iQué! ffiene usted la osadíade blasfemar— ioh idiotismosolemne!— del magnetismoy de la frenología?

Emeterio. iMiserable!... Eso es absurdo.Lucas. Xámo!...Emeterio. Con esas mararias

al vulgo crédulo engarias.iMala pedrada de zurdo!...

Lucas. iCachaza! Yo no me irrito.qué tanta baraŭnda?

Ñuiere usted que le confunda?A la prueba me remito.Testimonio subitáneotendrá usted de mi periciasi mi mano le acariciala superficie del cráneo.

Emeterio. Se pueden oír con calmatan ridículos enredos?

Lucas. Le contaré con los dedostodos los pliegues del alma;le diré, si no se mueve,lo que es, lo que puede ser,lo que...

Emeterio. pombre!...Lucas. Y si es menester,

lo que come y lo que bebe.

147

MIGUEL ÁNGEL MURO

Emeterio. iCuidado que es pertinacia...!Bien, aquí está mi mollera;palpe usted por donde quieray veamos esa gracia.[A los circunstantes.]No dará un juicio su manoque no sea un embolismo.

Lucas. [Después de examinarle un momento la cabeza.]Mucho aprecio de sí mismo.

Emeterio. Ya, eso...Lucas. [Después de reconocerle en otro lado.]

Intelecto mediano.Emeterio. Falso. Mi ingenio precoz

ya se mostró desde el aula...Lucas. [Que no ha dejado de tentar]

il-lola!... Aquí tiene la maula8.Emeterio. Xámo!...Lucas. Carácter feroz.Emeterio. No por cierto.Lucas. Otro Goliat.Emeterio. auién? iYo!...Lucas. Este hombre si se exalta...Emeterio. i0h! ya...Lucas.

Dará quince y faltaa Robespierre y Marat.

Emeterio. [Riéndose.]Ja, ja...

Lucas. Quiere que sucumbatodo ser que le rodea.La sangre le regodeay le electriza la tumba.

Emeterio. iDiagnóstico singular!

8. maula. Engaño o artificio encubierto'. (DRAE, 3).

148


Lucas. No hay quien su saña mitigue.Emeterio. Ñué soy yo pues?Lucas.

Usted siguela carrera militar.

Emeterio. [A Luisal.N/e usted cómo desatina?

Lucas. Yo...Erneterio.

Su ignorancia da tedio.—La erró usted de medio a medio:soy doctor en medicina.

Lucas. I'Qué más da? Todo es matar.Emeterio.Lucas. Cabeza que yo atrape...Erneterio. il3rrr!...Lucas. iLo dije! NO hay escape:

o médico o militar.Emeterio. [Furiosal

Calle usted o...Lucas.

Por la traza...Sí, sí; es brusista9 De fijo.La dieta es su regocijo,las...

Emeterio. Noto a...!Manuel. [Intoponiéndose y separandolosl

Paz.Lucas. iHum!...Manuel. iCachaza!Ceferina. [Aparte con Luisa.]

El que no se ría de estono es hombre de gusto.

Luisa. Sí.

9. Brusista. Seguidor de Broussais, médico famoso en la época; vid. El hom-bre gordo.

149

MIGUELÁNGEL MURO

Emeterio. iSe acordará usted de mí!Manuel. [Aparte a D. Lucas.]

Es loco.[Aparte a D. Emeterio.]Es tonto.

Lucas. pué gesto!De cólera está convulso...

Emeterio. Ya nos veremos los dos.iFlump!...[Se retira gruñendo y llevándole del brazo basta lapuerta D. Manuell

Lucas. [A Luisa .1 iNo permitas, por Dios,que ese hombre te tome el pulso!

ESCENA XVII.LUISA. CEFERINA. D. LUCAS. D. MANUEL.

Ceferina. iBien! ibravo! La craneoscopiaha triunfado. iVítor! ivítor!Si hace usted con igual éxitosus pruebas de magnetismo,le aseguro...

Lucas.

Ñuién lo duda?Verán ustedes prodigios.

ESCENA XVIII.LUISA. CEFERINA. D. LUCAS. D. MANUEL. D. BENIGNO.

Benigno. Saludo a ustedes con todala...

Ceferina. Es el serior don Benigno.Lucas. Ñuiere usted magnetizarse?Benigno. [Extrañando el vocablo

fflagne...?Ceferina.

Está usted en su juicio?Si le paraliza usted

150

MANUEL BRETÓN DE LOS HERREROS. Frenología y magnetisrno

las potencias y sentidos,córno ha de hacer el contrato

conyugal...?Lucas.

iAh! este individuoies el notario...?

Benigno.

Y humildeservidor...

Lucas. Muy bien venido.Benigno. Xle qué se trata?Lucas. Se trata

de un matrimonio inter vivos...Benigno. Por palabras de presente

dirá usted.Lucas.

Pues, eso mismo.-Traerá usted papel sellado...

Benigno. Siempre llevo en el bolsillomedia resma. Ñuiénes sonlos que contraen el vínculonupcial?

Lucas.

Esa peregrinahermosura y yo, aunque indigno.

Benigno. Bien; extenderé el contratocon las fórmulas de estilo.JIDónde...?

Ceferina. [Mostrando la habitación de la derechalEn ese gabinete,

[A D. Lucasisi usted le da su permiso,podrá escribir...

Lucas. Sí; entre usted.Benigno. Ya sé el nombre y apellido

de la novia, edad, estadoy todos los requisitos.En cuanto a usted...

151

MIGUEL ÁNGEL MURO

Lucas. [Dándole papeles.] Todo constaen esta fe de bautismoy documentos adjuntos.

Benigno. Ñuién ha de ser el padrino?Ceferina. Don Manuel Germán.

[Don Benigno apunta con lápiz en su cartera losnombres que le da Ceferina.]

Manuel. [En voz baja.] iMuchacha!Ceferina. [Lo mismo.1

yor Dios, prudencia!Manuel. (Estoy frito.)Benigno. Testigos?Ceferina.

Don CeledonioAguaviva- don RemigioQuijorna- don AnacletoValderrábano- don Críspulo...

Benigno. iBasta!— A ninguno conozcode los tres, y soy vecinode Toledo hace treinta arios.

Ceferina. [Aparte a D. Manuel y Luisa.]Son tres nombres de capricho.

[A D. BenignalCuando vengan a firmardará usted fe...

Benigno. Voy...Lucas. Prontito.

ESCENA XIX.


Lucas. El notario tiene trazasde saber bien el oficio.Pienso analizarle luegode la frente al colodrillo.

152


ESCENA XX.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. BONIFACIO.

Bonifacio. Señor...Lucas. iHola, Bonifacio!Bonifacio. Ya todo lo dejo limpio...Lucas. Bien.Bonifacio. Con licencia de usted

iré a buscar mis trapillos...Lucas. Bien, hijo. J\lo tardarás?Bonifacio. Jardar? Volveré más listo

que Cardona. Hasta después.[Se va corriendo y tropieza con doña Mamerta, queentra al mismo tiempo.] •

Lucas. Es una alhaja.Mamerta. iBorrico!Bonifácio. Perdone usted.

ESCENA XXI.

LUISA. CEFERINA. D. LUCAS. D. MANUEL. DOÑA MAMERTA.

Mamerta.

iQué insolentepechugón!

[Saludando.]Seriores míos...

Luisita...Luisa. por mi casa!Manuel. QQué traerá este anacronismo?)Mamerta. Sí; vengo con el objeto...

ha descompuesto los rizos?Luisa. No, nada...Mamerta.

Poco ha faltadopara besarme el maldito.

Ceferina. (Eso quisieras.)Mamerta. jesŭs!

Hay hombres tan atrevidos

153

MIGUEL ÁNGEL MURO

que ya no hay pudor seguro...Es la edad de los peligrosla juventud.

Ceferina.

(juventud,y arrastra ya medio siglo!)

Mamerta. No porque yo todavíaesté en el mayo floridode la vida: tengo yaveintinueve arios.

Ceferina. (Y pico.)Mamerta. Pero al fin soy del estado

honesto y... Pues, como digo,es horror lo que padezcode histérico'°, jay Dios!, y vistoque ni bizmas ni cantáridas"me proporcionan alivio,noticiosa de que un doctoprofesor de magnetismose hospeda aquí, y esperandoque, si no mienten los libros,ese fluido admirableme curará el histerismo,vengo a rogarle que me hagatan singular beneficio.

Lucas. Yo soy ese profesorque busca usted con ahínco;y en efecto, el gas magnéticoes excelente específico...Ea, manos a la obra.

10. Histérico. Histerismo; vid. esta voz en La Minerva.11. Cantáridas. Ungtientos y emplastos'; voz también empleada en Los tres

ramilletes.

154


Mamerta. Si ve usted que me atosigodemasiado...

Lucas. Nada de eso.Verá usted cómo la inspiroun suerio apacible..., igualal de los padres del Limbo.Siéntese usted...[La toma de la mano y la lleva a un extremo delteatro .]

Aquí..., lejos...[La bace sentar en un sillón.]Y ustedes no metan[Se acerca a ella, la mira fijamente, bace ademán depasar sus pulgares por la frente y los párpados de lapaciente, y otras veces figura recoger un gas impal-pable e invisible y lo rocía sobre el rostro de doña Ma-merta, suspendiendo estas operaciones o volviendo aellas sigŭn lo indicará el diálogo, y acompañándolascon gestos y pantomimas aparatosas y ridículas. Lui-sa, Ceferina y D. Manuel hablan en voz baja

Zuisa. J,ogrará magnetizarla?Manuel. No lo extrariaré. Ya he dicho

que ese fluido resideen todos los cuerpos vivos...

Lucas. Se duerme usted?Mamerta. No, serior.Lucas. Sentirá usted calofríos

en los hombros, o así, a modode un hormigueo continuo...

Mamerta. No, serior.Lucas. Repetiremos.Manuel. iSí, Luisa!

[Hablan los tres en voz baja como antes y cuidandono ser observados por D. Lucas.]

55

MIGUEL ANGEL MURO

Luisa.

Xámo lo finjo...?Yo no puedo...

Manuel. Por mi amorharás ese sacrificio.

Lucas. iDura es usted de pelar!Ceferina. [Como antes.]

Si usted no quiere decírselodespierta, no hay más remedioque apelar al artificio.

Lucas. [A media voz y dirigiendo la palabra al grupo.]iChito! Ya empieza a operarel magnético prestigio.

[A la pacientelDoria...

[A los demás.]Su nombre?

Ceferina. Mamerta.Luisa. [A D. Manuel aparte.]

Pero si me magnetizode veras?

Manuel. No temas.Lucas.

poriaMamerta!

Mamerta. [A media voz.]Ya..., ya me eclipso...

Manuel. [Aparte a LuisalSin mediar la voluntady la fe del individuono hay caso. Además, yo estoyaquí... Piensa en lo ridículode ese hombre, y es imposible...

Lucas. Ya está con el parasismo.[Se retira un poco y deja ver a doña Mamertadormidal

156

MANUEL BRETÓN DE LOS HERREROS. Frenología y magnetistno

ESCENALUISA. CEFERINA. DOÑA MAMERTA. DON MANUEL.

D. LUCAS. D. EMETERIO.

Emeterio. JDánde, dónde está esa locade mi hermana...?[Viéndo1a.1

desucristo!Lucas. Aquí está imagnetizada!

Ahora niegue usted, isacrílego!la virtud...

Emeterio. yarsa! imentira!Lucas. C.z5rno, si nunca la he visto

ni...?Emeterio. (Esa cara... Veo sintomas...)Lucas.

ver si hay somnambulismo?—iDoria Mamerta!

Mamerta. iSeñor!Lucas. iLo ve usted? Tiene expedito

a pesar de estar dormidael órgano del oído.

Emeterio. Aŭn falta saber si duerme.Lucas. No la despiertan ni a tiros

hasta que yo la libertede este cautiverio físicoen que está. Si usted lo duda,arrímele un buen pellizco,y si se queja, consientoen que me Ilamen pollino.

Emeterio. Sí lo haré: así como asílo tiene bien merecido.

[LaiAlza!— iNada!

Lucas.

J,o ve usted,hombre incrédulo y macizo?

157

MIGUEL ÁNGEL MURO

Emeterio. iMamerta!Mamerta. sQué?Emeterio.

iMe respondea mí también!

Lucas. No me admiro.Mientras yo no se lo impida...iMamerta!

Mamerta. Ñué?Lucas.

Te prohíboresponder a nadie...

Mamerta. Bien.Lucas. Sino a mí. Déle usted gritos

ahora.Emeterio. [Con voz estentórea y acercándose mucho a la

víctimaliMamerta!... Nada.

Lucas. Es esto charlatanismo?Emeterio. [Enfadado.1

Sí, serior. Yo no me tragouna rueda de molino.

Emeterio. si viera con los ojoscerrados?

Emeterio. iQué desvarío!...Lucas. Probemos. De estas hay pocas.—

[A doña Mamerta.]Ves algo?

Mamerta. Nada distingo.Emeterio. Ñué tal?Lucas.

Decir que no ve,ya es algo. Pero prosigomi interrogatorio.— oZ21.1é hasalmorzado?

Mamerta. Cochifrito.Emeterio. Cierto.Ceferina. Yo estoy asombrada...

158


Luisa. Es singular...Lucas.

Te suplicoque me digas lo que másapeteces.

Mamerta. [Suspirando.]iUn marido!

Emeterio. iCielos!...Lucas. j-las tenido novios?Mamerta. iUno solo!Emeterio. [Admirado.]

iEs positivo!Lucas. Y dpor qué no te casaste

con él?Mamerta. iAy! porque él no quiso.Emeterio. iEs verdad!Ceferina.

(Piantre! Pues tieneel asunto sus peligros.)

Emeterio. [A D. Lucas.]211 ver la edad...?

Lucas.

iCuántos ariostienes?

Mamerta. lAy! cuarenta y cinco.Emeterio. [Entusiasmado.]

iBasta! Es usted un grande hombrey creo en el magnetismo.Arrancar a una mujer...iy como esa! sus más intimossecretos, y sobre todoel de su fe de bautismo,es un triunfo, es un milagro,es el asombro del siglo.—Pero despiértela ustedpronto...

Lucas. Sí, será preciso...[A soplos y agitando las manos figura abuyentar

de doña Mamerta el fluido que le comunicó .1

159

MIGUEL ÁNGEL MURO

Emeterio. Porque si no, esa infelizva a decir mil desatinos.

Lucas. ;Afuera!... iDespierte usted!;Afuera!...

Mamerta. [Despertando muy agitada.]Mi abanico...

[Lo babía dejado sobre una mesa al sentarse ydáselo Ceferinal

Lucas. nué siente usted?Mamerta. [Con la mano en la frente.]

Aquí... un peso...Lucas. [Repitiendo los soplos y el manoteo.]

iFuera! ifuera!Mamerta. iAh!... Ya respiro.Lucas. Está usted bien?Mamerta. Sí, sí.Emeterio. Pero lejos de este sitio

estarás mejor.Mamerta. [Levantándose.] Ñué veo!

iMi hermano!Lucas.

Sí; un paseítoal aire libre... Ñué talha sido el suerio?

Mamerta.

Tranquilo.—Es decir... No sé... Pareceque ahora nazco... o resucito.

Lucas. jtecuerda usted lo que ha hablado?Mamerta. Yo... no, serior. Pues Ñué he dicho?Emeterio. [Aparte, tomándola del brazo .]

Verdades que no acostumbras,idesventurada!

Mamerta. Pios mío!...Emeterio. Calla y ven.Mamerta. [Turbada.] Sí... Abur, Luisita...Luisa. Seriora...

16o


Emeterio. Abur.[Aparte a doña Mamertal

iTe has lucido!Mamerta. (iAy! une habré espontaneado?)

Seriores, si en mi deliriohe dicho alguna simpleza,la retracto y me desdigo.El serior es responsable...

Lucas. Xómo!...Emeterio. [Impaciente y tirando de doña Mamertal

Namos!Lucas. Yo atestiguo...

Los magnetizados dicensiempre la verdad.

Mamerta. Pues, hijo...Emeterio. iVen, maldita...!Mamerta. Si es verdad

lo que he dicho yo,... he mentido.

ESCENA YOMI.


Ceferina. No lleva mal sofocón.—iBien, don Lucas! de esta vezse cubre usted de honra y prez.

Manuel. [A Luisa en voz baja.]i.knimo! Esta es la ocasión.

Ceferina. Si aŭn hay quien no se convenza...Lucas. iYa lo has visto!...Ceferina. [A Luisal Ahora usted: sí?

No hace mal.Lucas. No. Fía en mí.Ceferina. Vamos...Luisa. Yo...Ceferina. Le da vergŭenza...

161

MIGUEL ÁNGEL MURO

Luisa. [Sentándose.]Bien, mas... tiemblo...

Lucas. iEh! no te azores.(Esta prueba me conviene.Ahora el pudor la contiene,pero me dirá... iprimores!)[Empieza las maniobras magnéticas.]iAsí!... Ya mira al soslayo...Ya va...

Ceferina. iPor Dios, que no enferme!Lucas. No hay cuidado.— iAh! ya se duerme...

[Luisa se finge dormidaliSe durmió! Esto ha sido un rayo.

Ceferina. En efecto.Manuel. Sí.Lucas. No obstante,

preguntaré... Ife has dormido?Luisa. Sí.Lucas. Xonservas el oído?Luisa. Sí.Lucas. Pero ves?Luisa. No.Lucas. Adelante.

ESCENA XXIV.LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. D. BENIGNO.

Benigno. [Con papeles en la mano.1Traigo el contrato... 0Z21.1é es esto?

[Se detiene admirado.]Lucas. Ñuieres casarte conmigo?Luisa. Sí.Manuel. (iFalsa!)Lucas.

iAh! yo te bendigo.JVIe amas?

162


Luisa. No.Lucas. iMalo me he puesto!Benigno. Aquí traigo este adminículo...Lucas. iQuítese allá...! (iAy Dios!)

[A Luisalyor qué

das tan mal pago a mi fe?Luisa. Porque eres feo y ridículo.Manuel. (iDivina!...)Lucas.Ceferina. (Ya refunfuria.)Lucas. 1‘.4e tomas por otro?Luisa. No.Benigno. Ñué monserga...?Lucas. Quién soy yo?Luisa. Don Lucas Pérez Orduria.Lucas. »Luego tiendes una red

a mi amor?Luisa. Sí.Lucas.

Estoy en brasas.—iNo me quieres y te casasconmigo!

Luisa. Sí. iAhí verá usted!Lucas. iCuer... po de briós!... 211111arás

a otro?Luisa. i0h! con fanatismo.—

Y quítame el magnetismo,que no quiero decir más.

Lucas. iQue te lo quite el demonio!Manuel. [Figurando desmagnetizar a Luisa]

Yo lo haré, que no es razón...Luisa. [Respirando fuerte.]

iAh!Manuel. Ya v-uelve.Luisa. [Lo mismo.] iAh!

163

MIGUEL ÁNGEL MURO

Lucas. iMal rejón...!Luisa. [Levantandose y brincando de alegría.]

iMatrimonio! imatrimonio!Lucas. ilape!Ceferina. [A D. Lucas como asombrada.]

visto usted qué extremos...?Luisa. Está ya el contrato? iBien!Lucas. [Con horror]

ph!...Manuel. [Fingiendo estar escandalizado.]

iYo me hago cruces!...Luisa.

Ven,Lucas mío, y firmaremos.

Lucas. iYo firmar! No soy tan zote.Luisa. Si yo...Lucas. iikparta de mi lado!

Prefiero darte al contadolos diez mil duros de dote.

Luisa. iCruel!...Lucas. iAh pérfida!...Luisa. iIngrato!Lucas. jlabrá osadía...? me quieres

seducir...? iAh! las mujeres...[A D. Benignol

Rompa usted ese contrato.Y para no dar lugara un necio arrepentimiento,voy a traer al momento...iVirgen santa del Pilar!

dirán los aristarcos"que es quimera el magnetismo?Si no es por él, ien qué abismoiba yo a caer, san Marcos!

12. Aristarcos. Por Aristarco, "críticos severos".

164


ESCENA XXV.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. BENIGNO.

Benigno. rompo, o no?Luisa. iSí, por Dios!Benigno. [Rompiéndolo.]

Yo no entiendo este entremés...Ceferina. Hará usted otro después...Manuel. Y yo pagaré los dos.

[A LuisalHas estado deliciosa.

Luisa. Sólo por ti hubiera hecho...Manuel. [Beseindole la mano3

iVida mía!Benigno.

iikh! ya sospecho...Los dos...

Celerina. Ahí está la cosa.

ESCENA XXVI.

LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. BENIGNO. D. LUCAS.

Lucas. [Sale de su cuarto azorado, con una cartera en laniano.]justicia!

LuisaLucas. iMe han robado!Manuel. Es posible!...Ceferina p5mo!...Luisa. Ñuién?Benigno. Xiinero?Lucas.

No; por fortunael ladrón no dio con él.

Luisa. Pues xiué ha sido?

165

MIGUEL ÁNGEL MURO

Lucas. Mi magnificarepetición de Breguet13

Ceferina. iOh! aquel criado, sin duda...Ya hace un siglo que se fuey no ha vuelto...

Lucas.

Monifacio?iCalumnia! No puede ser.Respondo de su cabeza.iImposible!...

Ceferina.

iQué sandez!Él solo ha entrado...

Lucas. En efecto...iNo! (iQué sospechal)... Tambiénha entrado el serior...

Benigno.

Ñué escucho!JVIe atribuye usted...?

Lucas. No sé...Benigno. iMire usted bien lo que dice!Ceferina. iUn notario!Lucas. iEh!...Benigno. Xórno...?Lucas. ver?

Haremos un escrutinio...Benigno. Jtegistrarme a mi! la ley

personificada! crimen![Viendo que le sujeta D. Lucas.]yavor...!

Lucas. (Detrás de la sien...)Manuel. iDon Lucas!Lucas.

A los bolsillosno toco, ni es menester.

13. Breguet. Se refiere (como puede verse más abajo) a un reloj con la mar-ca de este famoso relojero suizo-francés (1747-1823).

166


El cráneo...[Consiguiendo palpar donde desea a pesar de laresistencia de D. Benigno y de los esfuerzos de D.Manuell

Sí, iaquí está el bultoacusador! Sí, sí; iél es!

ESCENA XXVII.LUISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. D. BENIGNO. GIL.

Gil. El criado que don Lucasrecibió...

Ceferina. Ñué dices!...Lucas. [Soltando D. Benigno .] Eh?Gil. Es un ladrán redomado.Lucas. Sí?Gil. Le acaban de prender.

Le han encontrado un reloj...Lucas. iEl mío! Estoy en babel.

Ñuién creyera...? Voy corriendo...Voy a presentarme al juez...Pero antes...[Saca billetes de la cartera y cuenta de memoria

Benigno. Y yo a quejarmedel impostor descortésque ha osado...

Ceferina. [En voz baja No haga usted caso.Su juicio está...

Luisa. [Lo mismol iChit!...Manuel. [Haciendo ademán de untar la mano a D. Benignol

Yo...Benigno. iAh!. Bien.

[A una seña de Luisa se retira Gil.]

167

MIGUEL ÁNGEL MURO

ESCENA ŬLTIMA.

LLTISA. CEFERINA. D. MANUEL. D. LUCAS. D. BENIGNO.

Lucas. [A D. Benigno presentándole lo que dice.]Aquí hay letras a la vistay billetes de IsabelSegunda... Haga usted la cuenta.

Benigno. [Examinando los documentos sobre una mesa.]Uno, dos, tres... cinco, seis...

Lucas. Todos son de a diez mil reales.Benigno. Siete, ocho, nueve, diez...

Cien mil.Lucas.

Letra de dos mil.duros...

Benigno. Sí.Lucas. Y otra de tres.Benigno. Corriente. Suma total,

diez mil duros en papel.Lucas. [Dando los billetes y letras a Luisa.]

Que recibe de mi manoesta seriora...

Benigno. Doy fe.Lucas. Cumpliendo lo prevenido

en el testamento...Benigno. Pues.Lucas. De mi tío, que Dios tenga

en su santa gloria.Todos. Amén. •Benigno. Se extenderá el testimonio...Lucas. Bien, lo Ilevaré después

con mi equipaje. Ahora voya acusar en juicio a aqueldelincuente inverosímilque ha desmentido el poderde la ciencia frenológica.

168


Ceferina. Usted no le hizo tal vezen regla la operación.

Lucas. Puede...Manuel.

Conviene saberque la ciencia ha adelantadonotablemente de un mesa esta parte.

Lucas. Piga!Manuel.

Yo estoyal corriente y probarélos progresos...

Lucas.

Xonque...? iDiantre!...Tendría mucho placer...

Ceferina. Hoy ha dado usted dos pifias.Lucas. JDos...?Ceferina. La del criado infiel...Lucas. iAh! Sí.Manuel. Y la de esta seriora...Lucas. Cierto. iPérfida mujer!Manuel. Ya se ve, usted, afanado

en registrar cien a ciencabezas de otros, quizáno ha dado en reconocerla suya...

Lucas. En efecto, nunca...Manuel. Pues bien, desde aquí se ven

árganos... que no me atrevoa explicar...

Lucas. yor qué no? 211 ver...?Manuel. [Tentándole la cabezal

iCielos!Lucas. 0:211é?Manuel. Este signo tiene

mucha analogía...Lucas. [Temerosol Jh?

169

MIGUEL ÁNGEL MURO

Manuel. Con el de Tauro.Lucas. [Hompilado.] JDe veras!Manuel. Sí!Lucas. iDios de Melquisedec!...Manuel. No se case usted, don Lucas.

iPor Dios, no se case usted!

G,GuA406110,~

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anÁlisis de la obra - dialnetanÁlisis de la obra frenología y magnetismo es otra obra compuesta...

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