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ALUMNO/A: ___________________________________________________ 6TO AÑO: ________________________ ACTIVIDADES DE CONTINUIDAD PEDAGÓGICA

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Page 1: ACTIVIDADES DE CONTINUIDAD PEDAGÓGICA · ardua mi propia prueba. -Pero vos no vas a poder –me recordó riendo. -¡Bah! En realidad, su risa me había llenado de espanto. Subió

ALUMNO/A: ___________________________________________________ 6TO AÑO: ________________________

ACTIVIDADES DE CONTINUIDAD PEDAGÓGICA

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“Cuando fallan los espejos”

● Leemos el siguiente cuento de Elsa Bornemann. (buscarlo en la web como: bibliopeque itinerante.blogspot cuando fallan los espejos)

Luego de la lectura

Comprensión lectora:

¿Quién es el protagonista del cuento? (A veces puede haber más de uno) ¿Aparecen personajes secundarios en la historia?

3- Nombra algún hecho misterioso que aparezca en el relato. Es decir, que no podría ocurrir en la realidad. 4-Marcamos en el cuento su estructura: situación inicial, conflicto y resolución del conflicto.

¿Cómo te parece que es el final de “Cuando fallan los espejos”?, ¿Por qué? Escribe otro final posible para la historia.

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Enumera las secuencias del 1 al 5 según corresponda:

------Muy alterado, intentaba colocar la mesa dentro del ropero, tomé una

sábana y cubrí el espejo cuidadosamente. ---1----Están descompuestos uno atrasa y otro adelanta. -------Al día siguiente, cuando entré a su habitación, los encontré totalmente

compuestos. --------Una gallina negra aterrizó sobre mi cabeza totalmente inquieta. --------Mi tío caminó hasta enfrentarse con uno de los grandes espejos colgados

del cuarto.

¿Qué tipo de cuento es el que leíste? Marca la opción correcta Realista___ Maravilloso___ Fantástico___

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En el cuento que leíste: ¿Podrían ser los espejos el objeto fantástico?, ¿Por qué?

Aprendiendo y recordando un poco más de información

● Existen también otros tipos de cuentos:

● Recordamos algunas características sobre los cuentos maravillosos o tradicionales.

a- ¿Qué títulos de cuentos maravillosos recuerdan?

b- Anoten fórmulas de inicio y cierre que hayan leído o escuchado.

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Trabajo de comparación: cuentos y narradores  

● Leemos : * Cuento del caballero( M.V.M.R) * Hombrecitos (versión libre abreviada de un cuento de Enrique Wernicke) * Cambios (Elena Echegaray)

HOMBRECITOS 

Nosotros llamábamos “el árbol de la punta” a un viejo ciprés que se hacía

sitio en el monte. Le venía el sobrenombre de la extraña distribución de sus ramas que, formando una escalera, permitían fácilmente llegar hasta muy arriba. Si embargo, los últimos “escalones” eran difíciles y, a la verdad, ninguno de nosotros los había trepado.

Federico eligió aquella prueba. Al principio, su decisión me alegró porque hasta la fecha teníamos una misma performance de altura. Pero mi hermano era de brazos más largos.

Caminábamos tranquilamente por la calle de eucaliptus. Yo silbaba desafinado y altanero. Federico sonreía divertido.

Llegamos al ciprés de la prueba. Federico, ceremonioso, hizo mil preparativos. Se sacó las sandalias y se ajustó el cinturón. Después, mostrándome un pañuelo, me dijo:

-Vos tenés que bajarme este pañuelo. -Bueno. ¡Subí! –y en la sangre me latía el coraje. Empezó a trepar. Desde el suelo seguí con atención sus movimientos.

Como conocía las trampas, me repetía cada tanto, para mí: “Lo hago, lo hago, lo hago”.

Y él, calculando distancias, tanteando donde pisaba, iba subiendo cada vez más.

Llegó a la parte difícil. Sus pantalones azules se confundieron con el verde de las hojas. Llamaba la atención su camisa blanca. Me pareció verlo

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dudar; se detuvo; seguramente pensaba. Me imaginaba su situación y sus esfuerzos, y desde tierra lo ayudé con el pensamiento, estrujándome las manos. Lo vi subir el pedazo más bravo.

-¡Eh! –me gritó- ¿Es alto? -Sí –contesté, admirado sin querer. -¡Subiré más! -¡Subí! –lo incité, olvidando completamente que estaba haciendo más

ardua mi propia prueba. -Pero vos no vas a poder –me recordó riendo. -¡Bah! En realidad, su risa me había llenado de espanto. Subió un poco más y se perdió entre las ramas. Después de un ratito lo vi

descender. Y descendía tranquilo, sonriente: -No podés, no podés –me repetía mientras bajaba. Cuando estuvo en el suelo, se limpió las manos y se calzó las sandalias. Sonreía, me miraba y movía los hombros. Yo, a mi vez, me disponía en

silencio. Antes de que él se acordara me había colgado del árbol y encaramado dos metros. Federico, sacudiendo las basuras de su camisa, sonreía ante mi empuje.

Me dejó subir sin hablar. Pasé una rama gruesa que me era conocida porque de ella colgábamos siempre las hamacas. Luego empezaron las más delgadas.

Cuando Federico me vio en el “nudo”, me gritó con un poco de susto: -¡Che, no te vayas a matar! -¡No! Me sentía firme y seguro, pero los brazos me temblaban con el esfuerzo. Logré dos escalones difíciles. Me agarré bien fuerte de una rama y miré

hacia abajo. -¿Qué hacés? –me preguntó Federico. No le contesté y mi silencio lo asustó. -¡Bajá! –me gritó. Tampoco le respondí. Nada. Vuelta a seguir. Ya distinguía el pañuelo. Mi hermano lo había

colgado todo a los largo del brazo para prenderlo bien lejos de mi alcance. Todavía tenía que trepar un metro. El susto me hizo dudar. Volví a mirar al suelo. Federico me llamaba. Trepé sin escucharlo, llegué a la altura necesaria y no supe qué hacer para lograr el pañuelo. Después de pensar febrilmente, me saqué como pude el cinturón. Lo sujeté a la rama y prendiendo mi mano sudada a la correa, me dejé balancear. Oí los gritos de Federico, se me hizo un nudo enorme en el pecho, creí que iba a caer. Pero, mientras tanto, con la punta de los dedos había conseguido tomar el pañuelo. Me largué a llorar.

Mientras descendía por las ramas me estallaban los sollozos. Había olvidado mi triunfo y mi osadía. Lloraba como un desesperado y con las manos sucias me embadurnaba la cara. Cuando toqué tierra Federico me abrazó, también llorando. Y me parece solamente que entonces pude sonreír.

(de “Cuentos”, 1968)

ENRIQUE WERNICKE

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Cuento del caballero

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● Luego de la lectura identifica qué tipo de cuento es cada uno y qué

tipo de narrador presenta. Argumenta tu respuesta. *** Por ejemplo, para argumentar pueden realizar esta ficha.

Tipos de narradores Concluimos que:

En la narración encontramos diferentes tipos de narradores. Estos se manifiestan en el relato por medio de las personas gramaticales: (las encontramos en terminaciones de verbos y pronombres)

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1- Lean los siguientes fragmentos y clasifiquen al narrador en cada caso.