videoarte y posmodernidad

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  • Anlisis

    Autor/es: Fernando R. Contreras

    Una nueva relacin entre el artista y su obra

    La obra de arte en la era digital

    A New Relationship Between the Artist and his Work

    Art Work in the Digital Era

    RESUMEN:

    Se analiza crticamente la contribucin de las tecnologas de la comunicacin a la transformacin de losconceptos tradicionales en torno a la obra de arte y a socavar la posmodernidad meditica, como sesostiene desde diferentes perspectivas en la era digital.

    Palabras clave: Arte, Tecnologa, Posmodernidad, Medios, Teora Crtica

    ABSTRACT:

    This article has critically analyzed the contribution of communication technologies to transformtraditional concepts about the art work and undermine the postmodern media, as observed from differentperspectives in the digital age.

    Keywords: Art, Technology, Posmodernism, MassMedia, Critical Theory

    En este artculo hemos analizado crticamente el contexto ideolgico de tecnologas digitales en el artecontemporneo. Hace tiempo, Clement Greenberg (2002) defina la modernidad como un periodo detransformacin contina de los principios reguladores de la esttica: el objeto principal en la obra de arteera a menudo el propio acto de creacin.

    Cuando los objetos son lmites del espacioEn este texto nos hemos centrado en la importancia del medio en el proceso creativo a nivel discursivo yterico, ms que desde una perspectiva procedimental. La aportacin instrumental de la informticagrfica, audiovisual, interactiva y de comunicacin en red no se tratar en el presente artculo, paraencauzar la investigacin hacia las contribuciones culturales del contexto digital en las actualesmanifestaciones artsticas.

    Pensamos que el arte en su labor nihilista es capaz de tomar prestadas las cualidades de un medio digital yadaptarlas a su propio inters y discurso. Borriud comparte la misma reflexin cuando dice (Huyssen etal., 2008, pp. 33-34): La foto de satlite y el sistema GPS, las cmaras de vigilancia, o el mapa, laexpedicin o la colecta de datos, pertenecen todos al dominio de las prcticas que el arte tiene quecuestionar con el fin de alentar una democracia de los puntos de vista, una policultura del imaginario: esdecir, lo contrario a la monocultura de la informacin. La mirada del arte no es la visin de los mediosde comunicacin, aunque ambas recorren el camino de la representacin de la realidad. No obstante, elarte y los medios parecen deslizarse en estratos distintos de esa realidad. En la misma direccin, sus

    Revista TELOS (Cuadernos de Comunicacin e Innovacin) | ISSN: 0213-084X| pp. 1/10 |Abril - Junio 2012 | www.telos.esEditada por Fundacin Telefnica - Gran Va, 28 - 28013 Madrid

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  • discursos corren a niveles diferentes de profundidad, marcados por el uso que cada uno hace de la estticay de la tica. Es indudable el salto de los artistas posmodernos desde la periferia al centro, buscando elpoder, ms que mirndolo como otros espectadores ms. Esto, como estamos dejando entrever, suponeuna relacin distinta entre el artista y la dimensin esttica o tica de su obra.

    El arte, como la cultura, es proceso en la posmodernidad. El arte es, en estos momentos, resistencia,oposicin y conflicto frente al poder del orden hegemnico cultural de Occidente y su firmeza se basa encualidades que son inherentes a las tecnologas: tiempo mltiple (instantneo e inmediato), movilidadespacial o experiencias voltiles e inacabadas.

    En el presente artculo revisamos nuestro objeto de estudio apoyados en una bibliografa que abarca desdela teora del arte a la teora de la comunicacin y desde la filosofa del arte al pensamientocomunicacional. A continuacin, hemos debatido sobre las principales caractersticas mediticas del artecontemporneo y, de modo inverso, tambin sobre las cualidades artsticas de los medios decomunicacin, ya que a veces es complicado concretar esta matizacin sobre determinadas produccionesde la industria de contenidos digitales. Nos referimos a los efectos de la tecnologa de la comunicacinque transforma radicalmente el concepto de arte basndose en el intercambio de informacin y en lainteractividad.

    La innovacin introduce nuevas vas de comunicacin entre el artista y su sociedad y entre la producciny la diseminacin de sus ideas. Esto abre un importante debate sobre la neutralidad de la tecnologa. Sibien en la dcada de 1960 el concepto de la comunicacin electrnica era la aldea global, la expresinactual es . Y es Lovejoy (1990, p. 262) quien nos ofrece la aclaracinEl mundo es una antena parablicade su significado: Pero el tipo de cultura mundial que sale de esta parablica dista mucho de la utopaideada en los aos sesenta. El postmodernismo representa un cambio a escala mundial hacia un modoms pluralista de ver las cosas, con una perspectiva ms amplia en lo que respecta a las posibilidadespolticas y culturales. La condicin digital introduce en el arte ms democracia, ms libertad deintercambio de experiencias estticas entre un pblico ms amplio.

    Antecedentes

    Existe una extensa bibliografa acerca de las cualidades mediticas del arte contemporneo y a su vez,ensayos sobre contenidos mediticos que desarrollan destrezas y habilidades artsticas con el empleo delas nuevas tecnologas y sus posibilidades creativas (Allienz, 2006; Crawford, 1982; Giloth, 1990;Giddings y Lister, 2011; Guasch, 2000; Harrison, 1997; Huyssen, 2008; Ippolito, 1997; Lister, 1997;Manovich, 2005; Mitchell, 2001; Penny, 1997; Fernndez, 1999; London, 1985; Tamblyn, 1990; Joselit,2000; Lovejoy, 1990; Hallensleben, 1999; Cohen, 1997; Mitchell, 1990; Bernard, 2000; Goodman, 1990;Batchelor, 1990).

    La literatura sobre arte y medios digitales en el marco de un idealismo posmoderno muestra en ocasionesuna relacin entre un pensamiento creativo que desecha el objeto y su materialidad, por la forma y larelacin que establecemos con ella. Tambin enfatiza el uso de la tecnologa en la creacin de simulacrosy discursos sobre virtualidad. Tanto la negacin de la materialidad del objeto como la exaltacin de laforma estn en perfecta sintona con los simulacros y los discursos de las realidades virtuales queproducen los medios digitales (videocreaciones, videojuegos o espacios interactivos en red).El arte expresa lo que parece ser la filosofa de nuestro tiempo y que Molinuevo describe con elegantesutileza: Es una nueva forma de idealismo, en el que gozamos de las cosas como si fueran ellas, pero sinserlo (Huyseen et al., 2008, p. 200). Amoldando las ideas de Molinuevo a nuestra opinin, podemosafirmar que el arte, como discurso autntico saca a relucir en su produccin estos ideales que se fundan enuna liberacin del cuerpo, en la sustitucin de la forma por la materia y en las metforas de la vida quecontinuamente crean el uso de las tecnologas.

    De esta forma, se revelan las tcnicas creativas del arte contemporneo y su relacin con la realidad. Laapropiacin, el arte contextual, el arte procesual, el arte conceptual, el , el , lasperformance happening

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  • acciones, las instalaciones son prcticas artsticas que juegan con la relacin del espectador y un espaciodelimitado por el objeto artstico, que se asemeja ms al espacio de interaccin o dilogo que produce unmedio de comunicacin por la proximidad de sus simulacros explicativos de la realidad.

    La esttica relacional, que tan acertadamente describe Bourriaud (2006), tiene ahora que ver con losentornos tecnolgicamente construidos para la relacin entre las personas. Hemos pasado de un artesituacionista que buscaba la construccin de situaciones, donde la relacin entre las personas era debida aun ambiente creado por imgenes, a unos entornos virtuales, donde el ideal parece ser el mismo, basadoen la figura del intercambio.

    La tecnologa de contenidos depende de las condiciones generales de la creatividad social, mientras que elarte inventa modos de vida o posee la habilidad de concienciar sobre el estado de los comportamientossociales contemporneos y ofrecer a travs de la imaginacin otras posibilidades futuras. El mismoterico Bourriaud sostiene que la influencia de la tecnologa sobre el arte que le es contemporneo seejerce dentro de los lmites que ella misma establece entre lo real y lo imaginario (2006, p. 87).

    Internet y el inconsciente

    A nuestro parecer existe una estrecha relacin entre el ideal que mueve el arte procesual ( ) yProcesual Artlas nuevas formas mediticas. Sin una evolucin de las vanguardias artsticas del siglo XX a las nuevasmanifestaciones artsticas de la transvanguardia, hubiese sido imposible explicar la presencia de laposmodernidad en las formas actuales de consumo meditico. Desde nuestro juicio, Jackson Pollock esuna clave para la comprensin de este fenmeno. Su idea de la obra de arte como rito que deja una huelladel mismo proceso de creacin ayuda a comprender los mecanismos internos de la produccin decontenidos generados por usuarios de las nuevas tecnologas.

    Al desarrollarse Internet como un canal de difusin abierto, no solo a cualquier individuo, sino tambin acualquier contenido visual, hemos conseguido superar las expectativas de la exhibicin comercial.Benjamin estableca entre las funciones sociales ms importantes del cine el equilibrio entre el hombre ylas mquinas. La cmara de cine no solo era relevante en cuanto a lo que el hombre deseaba captar consus imgenes, sino tambin en lo que de lo filmado rescataba para la representacin de su propio entorno.La cmara de cine crea un rastro de huellas que facilita la comprensin de la existencia humana. Laconciencia intencional de la cmara supera la dimensin esttica de la obra de arte. Alcanza alinconsciente con la expansin del espacio producido por sus distintos objetivos o con la misma velocidadde filmacin. Fue Benjamin quien denomin el inconsciente ptico a estos sentidos ocultos en laproduccin y lectura de las imgenes.

    Lo mismo que los estereotipos, las distorsiones de sentido, los arquetipos o los prototipos que reproduceel cine afectan a la psicosis, a las alucinaciones y a los sueos del individuo, la comunidad puedeapropiarse de los modos de expresin del imaginario. Y lo dicho por Benjamin con referencia al cinepodramos extrapolarlo para explicar la inmensa produccin de fotografas, vdeos o textos publicados enInternet: el cine rompe con la verdad herclitea, ya no solo compartimos un mundo comn durante lavigilia, sino que a travs de las webcams y de su emisin abierta en red estamos compartiendo los sueosque cada cual tiene uno para s.

    Los contenidos de los canales de , o , de y de redes sociales, dondevideosharing webcasting webTV blogsse produce el cambalache de fotografas o vdeos personales, crean un fenmeno sociocomunicativo quepodra explicarse como un intercambio de sueos digitales o, sencillamente, como una manifestacin dela misma necesidad humana de mirar nuestro reflejo en un espejo expuesto al pblico .1

    La comunicacin y el intercambio de imgenes en la Red pueden tener una explicacin de ndolepsicoanaltica: la liberacin de la mente de tabes. Aqu deseamos introducir, aunque sea muybrevemente, la cuestin del inconsciente y su relacin con el arte. El intercambio de imgenes y otrasrepresentaciones secuelas de la creatividad social funciona en espacios electrnicos con una estructurasimilar a la descrita para el escenario del inconsciente humano. En algunas ocasiones, el de vdeoscollagepersonales en un portal web recuerda a los experimentos surrealistas de Salvador Dal, aplicando sumtodo de la creacin paranoica para plasmar la visin de un mundo onrico.

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  • No podemos obviar las afirmaciones de Jung sobre este aspecto. Las fantasas son hechos o realidades quepertenecen al mundo interior. Un puente, una catedral, un automvil o un satlite fueron primero fantasasen la mente de un diseador que pasaron de imgenes mentales a objetos fsicos y observables. Estasfantasas son propias del pensamiento humano, no de las mquinas, como pretenden confundirnos algunasmetforas explicativas del cibermundo. Por otro lado, la tecnificacin que experimenta nuestrainconsciencia s es un descubrimiento. La psique se comporta como se esperara en un mundo sin tabes olimitaciones sociales. Y este comportamiento inconsciente se reproduce y podemos observarlo en la RedInternet en numerosos ejemplos donde la privacidad se expone sin lmites alcanzando la intimidad.

    Sobre la libre creatividad de los usuarios en la Red

    Las videograbaciones personales emitidas por Internet reproducen numerosos arquetipos del inconscientecolectivo. Desde el mito de Edipo a la figuracin de los hroes, los arquetipos en Internet son prcticostanto para la libertad de exhibicin de los deseos como para estructurar modelos de conducta ycomportamientos con los otros usuarios de este medio de comunicacin.

    Los individuos conectados en una red de intercambios viven una introversin progresiva, ya que en vezde ser las influencias ambientales las que van configurando su persona, por el contrario, estn msinfluidos por el factor subjetivo . Si son individuos equilibrados lo exterior o lo subjetivo le afecta de la2misma manera, pero en el caso de que una orientacin predomine sobre la otra, encontramos perfiles depersonas distintas.

    La intuicin es una gua tanto en la interpretacin como en la creacin del inconsciente. Cuando elindividuo vive en un estado primitivo, como es el caso del incipiente y novedoso mundo virtual, laintuicin adquiere un valor relevante. Es probable que alrededor del internauta sucedan muchos hechosimpredecibles. Frente a ellos, necesitar la intuicin para obtener ms sentido que si se conduce por lapercepcin sobre un escenario artificial.

    La intuicin es una va de conocimiento distinta de la experiencia. La persona con elevado grado deintuicin en Internet sera, en trminos de Jung, un introvertido intuitivo. No es una experienciaperceptiva la que ofrece sentido a lo que nos sucede durante la inmersin en los entornos virtuales.

    Por el contrario, realmente dependemos de la intuicin y esta es incompatible con la experiencia. Cuandosabemos de los casos de adolescentes que confunden la experiencia del mundo virtual con el mundo real(comportamientos o conductas que imitan de videojuegos), estamos frente a un problema de incapacidadde diferenciacin entre el mundo consciente y el inconsciente. En estos casos, los individuosexperimentan una disociacin que les impide enfrentarse a los obstculos difciles, desagradables oinconvenientes de la vida, provocando seguramente decepcin o frustracin. En estos casos, el individuoes un estorbo para s mismo, que pierde la conciencia sobre sus hechos y los confunde con los sueos.

    El estudio es ms complejo cuando los sueos pertenecen a un inconsciente colectivo y este es tan ampliocomo posibilita la conexin mundial a travs de Internet. El intercambio de factores subjetivos es tanenorme que a primera vista resultara imposible su estudio sicosemitico. No obstante, aflora launiversalidad de los arquetipos y de los mitos, que solo cambian en pequeos detalles, pero que realmentenarran las mismas historias aunque estemos en lugares distintos del mundo. Esto podra argumentarseperfectamente a travs de los estudios antropolgicos que van desde Claude Levi-Strauss a Marvin Harrisy en los que no vamos a profundizar en este artculo. El arte digital se nutre de las posibilidades creativasque ofrecen esas estructuras universales.

    La relacin entre el arte y el nuevo espritu meditico: entre la apropiacin y la esttica pblica

    Abandonando el camino recorrido, continuaremos sobre las nuevas relaciones entre arte y tecnologa,estableciendo un nuevo dualismo metafrico en trminos cibernticos similar a la conciencia einconsciencia que apuntamos antes: nos referimos a la diferencia que distinguimos entre un mundo depresentacin real de los objetos frente a un mundo de apropiacin a travs de la virtualizacin orecreacin de realidades mediante modelos (Penny, 1997).

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  • En plena posmodernidad, la apropiacin permite al artista aduearse del mundo a travs de susrepresentaciones, estructuras semiticas o nuevos escenarios para la accin. La apropiacin se funda en elintercambio, que es la misma lgica en la que se apoya el xito de Internet. Segn Penny, el artista nopuede deshacerse de la propia ideologa que arrastra la prctica con ordenadores.

    La tecnologa impone un modelo determinista y mecanicista de comprensin de aquellos escenarios queno son precisamente mecnicos. Esto no es una reflexin aislada. Tambin Ippolito (1997) insiste en unamecanizacin de la esttica a travs del uso de bases de datos que almacenen los gustos de losconsumidores o espectadores. Ippolito llega ms lejos en sus reflexiones y se plantea las posibilidades deun arte gentico interactivo, desarrollado por prtesis-algoritmos que renan las subjetividades quepueda invocar cada usuario a travs de su imaginacin. De la literatura consultada parece dilucidarse unenorme inters artstico por la transmaterialidad de las subjetividades a partir de agentes inteligentes, esdecir, ordenadores con un pensamiento similar al humano.

    Da la impresin desde la lectura profunda que tras la renuncia a la materialidad de la obra de arte desde elobjetualismo y con la idealizacin del arte conceptual y contextual, parece que el arte posmoderno esconsciente de que no tiene un discurso slido donde apoyarse y que sus obras se volatilizan en lamaterialidad efmera de la organizacin de una exposicin y las estrategias de mercado diseadas porhbiles comisarios. Esta debilidad manifiesta del arte abre las dudas sobre si realmente las tecnologasjuegan neutralmente en la construccin de la obra del artista. El arte se considera a s mismo muy frgil yteme que la tecnologa desborde el significado de la obra con su peso ideolgico.

    Este miedo comienza en la virtualidad informtica que acta sobre la obra de arte desde la fisicalidad, esdecir, como un medio que otorga cualidades fsicas a la obra en un mundo en el que solo existen lasformas (las apariencias). Sobre ello sostiene acertadamente Harrison (1997) que el artista comienza atrabajar la pintura sobre un plano de dos dimensiones; la escultura se trabaja en tres dimensiones a travsde la relacin espacio/objeto; y ahora, los artistas que utilizan la tecnologa digital trabajan en las cuatrodimensiones del ciberespacio, que concierne al espacio/objeto en relacin con el tiempo. Para estableceresta ltima relacin, Harrison defiende el uso de los hipermedios, como el medio idneo que es capaz deestructurar conceptos y enlazarlos a travs de la Red de Internet. Adems, como los anteriores autorescitados, sostiene la importancia que tiene el medio para emular el funcionamiento de la mente humana:Una verdadera red de hipermedios debera borrar los lmites de la interconexin ordenador-ser humanohasta hacerlos invisibles, y por tanto nos conducira a la sntesis de la dicotoma ser humano-ordenador(1997, p. 59).

    El debate sobre el arte contemporneo y su confianza en las posibilidades creativas de las nuevastecnologas de la comunicacin podra sintetizarse en los siguientes puntos:

    Desde la cultura posmoderna se ha afirmado la crisis de los grandes metarrelatos, incluyendo tambinal arte. Pese a esta renovacin de la idea posmoderna de crisis del arte, lo mismo se sostuvo en la obra deHegel (1827), y adems esta tradicin hegeliana se ha revitalizado siempre que hemos visto alteradas lascondiciones tecnolgicas de los procesos creativos tanto en la pintura como en la escultura y, actualmente,por intervencin de los medios digitales (Haynes, 1997, p. 76). De ello deducimos que se extiende unaidea equivocada de lo que significa la crisis en el arte y que tiene que ver con una aceptacin o rechazo delos medios digitales de expresin, que permiten la presentacin de contenidos y la opcin del artista deintroducir en sus creaciones estas nuevas tcnicas.

    La relacin entre arte y tecnologa no queda muy clara desde la teora crtica de la cultura. Existe lasospecha de que la tecnologa pueda imprimir su ideologa colonizadora sobre el arte de culturas msdbiles, ya que se trata de un producto de las sociedades capitalistas. Mientras que al arte se le supone unavocacin universal y por tanto, con un discurso abierto a todos en las mismas condiciones de recepcin,la tecnologa impone un orden propio de las sociedades tecnificadas que no respeta otras identidadesculturales. De la apropiacin, tcnica creativa del arte posmoderno, pasaramos a hablar de domesticacino colonizacin (Fernndez, 1999, p. 64). El arte, con el uso de las tecnologas digitales, impone una

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  • esttica concreta, se infiltra en los relatos que componen las historias culturales de las sociedadesprovocando hibridaciones no deseadas y creando redes de dominio que adulteran el sentido democrticode un ciberespacio colaborativo.

    Desde una perspectiva ms bondadosa, encontramos cmo la tecnologa de la comunicacin facilitanuevas manifestaciones del arte pblico a travs de la produccin de entornos de intercambio entreartistas y espectadores. Dunn y Leeson (1997, pp. 31-36) exploran las posibilidades comunicativas deaquellos proyectos que estudian y ponen a prueba nuevas metodologas. Estos proyectos utilizanprogramas educativos, recursos multidisciplinares y las nuevas tecnologas de la comunicacin,vinculando comunidades, centros educativos e instituciones acadmicas.

    El arte, junto a la tecnologa empleada como instrumento social, considera como nuevo objetivo laexploracin interdisciplinar de nuestro entorno, nuestra cultura y las distintas modalidades decomunicacin. Estos estudios no discriminan los nuevos espacios donde se desarrollan el potencial socialcreativo, emplendose espacios fsicos, simblicos o virtuales.

    La secuela de la apropiacin popular de los medios del arte

    Sobra explicar la repercusin que ha tenido la afirmacin de Marshall MacLuhan sobre la condicintecnolgica de la comunicacin: el medio es el mensaje. La actualidad de esta premisa condiciona todavateoras sobre la comunicacin digital. Sin embargo, el sentido de esta proposicin ya se anticipaba desdeel entorno del arte. A principios del siglo XX, el poeta Italiano Filippo Tommaso Marinetti adelantaba lamisma premisa para su tiempo en : Marinetti pensaba que la mente humanaDestruccin de la sintaxisestaba influida por el telgrafo, el telfono, el gramfono, el tren, la bicicleta, el coche y otros medios decomunicacin, transporte e informacin; curiosamente, hablaba de la comunicacin en estos trminosexactos (Hallensleben, 1999, p. 165).

    Se deberan revisar los postulados creados alrededor de la esttica de las vanguardias, pues es muyprobable que encontrramos numerosas propuestas relacionadas con la explicacin actual de laposmodernidad meditica. En este sentido, la obra de Walter Benjamin cobra una especial importancia, yaque podra considerarse una bisagra entre la modernidad y la posmodernidad, entre la defensa de lacultura democrtica de los medios y el rechazo a la vulgaridad en la creatividad social que consume unaproduccin masiva, amorfa, impersonal y sin rasgos que pueda catalogarla entre otras manifestaciones delarte. Este es un debate que alcanza nuestros das y que an no ha terminado.

    En la opinin crtica de Adorno (1991), la estandarizacin del arte es resultado de un proceso deindustrializacin alcanzado mediante las tecnologas de comunicacin. La radio, el cine, la televisin, laindustria discogrfica o la industria videogrfica transforman el ritmo de los barrios obreros en losespectculos modernos. De esta forma, en la actualidad nos presenta a Miley Cyrus (Disney Channel

    ) bailando y cantando en un concierto para el pblico infantil con la coreografa de losHanna Montananegros raperos de los barrios marginales de Nueva York. De una msica que presume de su origenmarginal y residual, la industria Disney ha hecho un producto que consumen los nios y los padres de unaclase mucho ms acomodada del mismo pas.

    De la aparicin de la estandarizacin cultural en los medios de comunicacin es responsable la burguesarefinada de las sociedades industriales, propietaria de los medios. La mercantilizacin de la programacinde los medios masivos y la conquista de audiencia facilita la filtracin de los contenidos mediocres. Todolo contrario a lo que podra pensarse, una cultura democrtica no tiene que ver con la tosquedad.Precisamente su refinamiento proviene de la tradicin, del tiempo, de las races de los ritos y de suvinculacin a los mitos en los casos de la cultura popular o de la bsqueda incesante de las posibilidadesde explotacin artstica de la tecnologa, como es el caso del cine, del arte videogrfico, del artemultimedia o de la produccin de videojuegos.Lo multitudinario ha sido descalificado por la cultura burguesa. El arte y sus estilos han corrido paralelosa la sociedad y sus clases. Y del mismo modo que han existido acuerdos entre las clases sociales, hemoscontemplado la unin de varios estilos de distinto origen en el arte. En esas fusiones, la tecnologa haabandonado la propiedad exclusiva de una clase social determinada. Los estilos se han mezclado cuando

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  • las tecnologas se han liberado y han sido accesibles a todos. Esta perspectiva crtica de una tecnologa dela creatividad es natural siempre que entendamos que la cultura consisti una vez en un estilo que daforma a toda realidad externa.

    Creacin meditica y arte

    As tambin opina Spengler, que termina esta reflexin concretando que era el espritu joven de lomultitudinario en las civilizaciones primitivas lo que sola aadirle un sentimiento csmico a larepresentacin. Tras el perfeccionamiento del lenguaje de formas es precisamente cuando cambia elsignificado de la cultura y pasa a ser un lenguaje de formas lleno de la ms profunda necesidad simblica(Spengler, 2007). La cultura vive momentos de esplendor a travs de un mundo que se forma por eltrabajo de artistas maduros: la delicadeza del arte egipcio, la perfeccin del templo jnico, el desarrollo dela escultura, el perfeccionamiento de la mezquita, la evolucin del Renacimiento europeo desde laarquitectura de Miguel ngel a la pintura de Rafael o Tiziano, alcanzando el siglo XVII con Rembrandt ola msica de Enrique Schtz. De este maravilloso mundo hemos conseguido la perfeccin de un lenguajepreespiritualizado de las formas. Ello fue posible a travs de la fuerza creadora de los estilos.

    Spengler reemplaza la nocin de cultura moderna por el concepto de civilizacin. Ahora la cultura notiene forma interior. El arte en las grandes ciudades es una costumbre, un deporte, un lujo, un excitante(Spengler, 2007, p. 103). Los estilos se ponen de moda y cambian velozmente; estn vacos de todocontenido simblico.

    En este mundo desespiritualizado, la creacin meditica se vaca de simbolismo comunitario. Frente alarte se abren dos posibilidades de creacin: la primera es una va destructiva, que funda la filosofanihilista y que denuncia la enfermedad del cuerpo social; la segunda va es constructiva, se sostiene en laTeora Crtica y es el camino a la cultura esplendorosa. La crtica de Max Horkheimer (2000) mantieneque el arte es la salida a la carencia de espiritualidad en la sociedad moderna. Y es que los smbolos queunan a los pueblos frente al destino csmico son ahora casi siempre el lujo, la cultura ociosa y laostentacin.

    La creacin meditica a diferencia del arte ha supuesto un proceso de cosificacin de los sentimientos dela vida, de las emociones arriesgadas y de la sustitucin del alma por una racionalidad instrumental quedomina la sociedad materialista. Horkheimer insista sobre el problema acentuado de una sociedad cuyosindividuos solo alimentan la sed de objetos y no sienten necesidad de revitalizar el espritu y los grandesideales. En una sociedad de masas es normal la pobreza creativa de los medios, pues si a nadie yapreocupa la espiritualidad del arte (en los trminos de Wassily Kandinsky), solo nos queda elespectculo o el discurso fantasmal de las apariencias.

    En el discurso de los medios falta conviccin. El relato periodstico, como cualquier ficcin de consumo,de usar y tirar, se deshace y desmorona. Concebida como accin en la lejana que no obliga a nada, comodinamismo prctico que contina en la tradicin del mando, ordenando lo que debemos hacer y remediar.La televisin cuenta la historia desde el ms blanco vaco, sin la presencia mnima de un tomo dedevocin terica o sencillamente, de compasin fustica (de entrega o sacrificio, dice Spengler) e incluso,por qu no, de compasin mgico-cristiana. En el discurso de los medios es imposible la riqueza de lossentimientos distintos.

    El discurso del arte es ms reaccionario y menos conformista. El arte combate este vaco dando a lastecnologas nuevas posibilidades. Peter Campus, Bruce Nauman y Dan Graham van a utilizar los circuitoscerrados de televisin para reconfigurar la ideologa de la identidad a partir de la naturaleza tecnolgicadel medio, que le permite tender puentes entre el espectculo y el espectador y jugar artsticamente connociones como la descomposicin, el reconocimiento, la identificacin y la reconstruccin: Lasposibilidades de la tecnologa del vdeo causaron un enorme impacto en Campus cuando vea emisionesde la NASA por televisin, en las que videocmaras teledirigidas grababan en directo eventos comopaseos por la Luna o lanzamientos de cohetes espaciales. La fascinacin de Campus por la capacidad queposee la televisin de acortar distancias tan inmensas, de proporcionar informacin en directo nada menosque desde la Luna, podra indicar una obsesin por lo instantneo, y un canto no ya a la aldea global alestilo MacLuhan sino a una aldea interplanetaria. Sin embargo, fueron ms bien las consecuencias del

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  • distanciamiento que enmascara esta aparente instantaneidad las que llegaron a ser una de las cuestionesclave que aborda Campus (Joselit, 2000, p. 49).

    Los medios de comunicacin arrastran una paz estatutaria, como queran los estoicos, un ethos sinvoluntad. El neobarroquismo televisivo aparece llenando de moral popular el discurso meditico. La vidase exhibe desde la frialdad en los informativos, pero estos no alcanzan jams la solemnidad de la moral enla tragedia, en la que se comprende el peso de la vida. Nunca alcanzan a Shakespeare, Cervantes,Quevedo o Esquilo, porque del conocimiento de la miseria y de la tristeza sale el sentimiento de orgullopara sobrellevarla.

    Una nueva creatividad artstica

    Ambos discursos, el de los medios y el del arte, empleando las mismas tecnologas no arrastran igualsentido ideolgico. La televisin sirvi de crisol para una realidad postmoderna. Claro est que hoy es elcanal principal de transmisin de cultura e ideologa. (Lovejoy, 1990, p. 261). Quizs por ello, latelevisin ms racional se eleva desde la experimentacin, practicando nuevos gneros ms prximos alarte desde la ficcin ( es una serie cmica norteamericana, creada por Christopher Lloyd yModern FamilySteven Levitan, considerada como un falso documental) o las nuevas formas narrativas audiovisuales,como son los trabajos de Jonathan Glazer, Stphane Sednaoui o Mark Romanek, con dos vdeosmusicales seleccionados por el MOMA de Nueva York: , de Nine Inch Nails, o Perfect Drugs Bedtime

    , de Madonna.Story

    De nuevo, frente a la ineptitud meditica, el arte digital resuelve desde las posibilidades tecnolgicas. Lanocin de espacio es recapacitada por una sutileza exquisita en el arte, imposible de reproducir por eldiscurso meditico. Para trabajar sobre una metafsica de la telepresencia o de la existencia electrnica,tenemos artistas como Jennifer Ringley, que emplean las personales y la emisin a travs dewebcamsInternet. Para esta artista, este modo de comunicacin genera un nuevo significado del espacio social,donde lo privado expuesto en pblico y la interaccin comienzan desde alguien que est siendo visto.Las webcams sacan a la luz cuestiones relacionadas con la vigilancia, la comunidad, los ciborgs, elespacio domstico, la intimidad, la pornografa y la auto-imagen. Son un tipo de prctica artstica con uncontexto histrico artstico, y guardan correlacin con la produccin de documentales, el autorretrato y elperformance. (Knight, 2000, p. 21). El control sobre la obra de arte se desarrolla tanto a nivel deproduccin como a nivel de distribucin a travs de Internet.

    Ms all, el arte se atreve a extender su existencia artificial a travs de la Red, constituyendo a partir deun lenguaje condicionado por la tecnologa, la expresin del cuerpo en la figura del en unacyborgpeligrosa fantasa que equipara la piel metlica con la carne. Con esta metfora, el arte ha practicado ladenuncia de la explotacin del cuerpo como otro objeto de la sociedad de consumo, en particular elcuerpo femenino y desde el tecnofeminismo (vanse los textos de Judy Wajcman). En resumen, lo queafirmamos es que el arte es capaz de contrarrestar el efecto de la ideologa innata en la propia naturalezatecnolgica del medio y resaltar el autntico sentido de la obra.

    A modo de conclusin

    La obra de arte en la posmodernidad se ha servido de las posibilidades digitales de multiplicacin decopias. Desde el vdeo, la fotocopiadora, el ordenador, sin olvidar la fotografa digital, los dispositivos sehan hecho esenciales para la reproduccin digital ilimitada de la obra de arte desde matrices numricas.

    La apropiacin popular ha empleado esta cualidad para que las imgenes mediticas se transformen ennuevos iconos digitales que hacen referencia al pasado y a una cultura familiar e integrada en el consumode masas. Mediante la apropiacin, la obra adquiere un nuevo significado social, un nuevo valor y unnuevo uso. Con el empleo de la iconografa meditica, el artista posmoderno disea la estrategia que lepermite cambiar el significado de su obra, modificando el contexto de su trabajo. Los artistas hantransfigurado la nocin aceptada del arte a partir de la crtica de determinados convencionalismos, comoes lo original y la originalidad (la singularidad) que han dominado la consideracin de la obra de arte.Esto ha sido posible por una tecnologa de la multiplicacin y de la diseminacin.

    Revista TELOS (Cuadernos de Comunicacin e Innovacin) | ISSN: 0213-084X| pp. 8/10 |Abril - Junio 2012 | www.telos.esEditada por Fundacin Telefnica - Gran Va, 28 - 28013 Madrid

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  • En la posmodernidad, arte y medios han consolidado redes de comunicacin que integran estructurasabiertas para ofrecer intereses plurales a los espectadores. Es precisamente esta metfora de la Red la quepermite una apertura del arte a nuevas experiencias que en ocasiones acaban en paradojas. Ladiseminacin digital ha hecho de Internet una institucin del arte burgus (la ltima invencin de losmuseos o las galeras virtuales con acceso en red) que contiene a su vez ideales contraburgueses,subculturales y revolucionarios. Despus del movimiento dad, las vanguardias no han tenido audienciasmasivas hasta la aparicin de las tecnologas digitales. Quizs porque era necesario el carcterexperimental en la aproximacin al medio, sin un riguroso plan educativo de preparacin, como se haencontrado la obra de arte en otros periodos de su historia.

    Agradecimientos

    Deseamos mostrar nuestro agradecimiento a la Galera de Arte Rafael Ortiz de Sevilla, por su inestimableayuda, no solo al alojar el proyecto-exposicin en su espacio, sino por los consejos expertos queHi, Q!nos ofreci Rafael Ortiz, basados en su gran experiencia.

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    1 Debo esta idea a Miguel Nieto cuando preparbamos nuestro videoperfomance. 2 EntindaseNotascomo Jung lo explica: lo subjetivo es la influencia del inconsciente sobre lo consciente.

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