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El socio que hoy vamos a recordarfue una persona polifacética. Sulabor y su influencia se extendie-ron por varias actividades tan di-

versas como el deporte, la empresa o lapolítica. Nuestro socio es Carlos Padrós yRubió.

Al igual que otros socios cuya memo-ria hemos traído a las páginas de

nuestra revista, Don Carlos Padrós fuepionero en algunas de sus iniciativas.En la actualidad su personalidad ha lo-grado más reconocimiento que a lo lar-go de toda la vida.

La principal labor por la que CarlosPadrós es conocido, es por su gran

capacidad organizativa y visión de futu-ro en el mundo deportivo, y especial-mente del fútbol en España, deporte delque fue promotor madrileño, nacional einternacional. Carlos Padrós fue uno delos iniciadores y tercer Presidente delReal Madrid Club de Fútbol, creador dela Copa del Rey, de la Federación Espa-ñola de Fútbol y de la FIFA (FederaciónInternacional de Fútbol Asociado).

Para situarlo en su tiempo, debemos re-trotraernos a finales del siglo XIX y

principios del Siglo XX. En aquellosaños comienza a reconocerse la importan-cia que tenía la práctica deportiva comoparte integral de la formación personal yacadémica, aceptándose que no sólo sedebe desarrollar el intelecto, sino tambiénel físico.

Así lo entendía la Institución Libre deEnseñanza, y sus directivos como Gi-

ner de los Ríos, y numerosos alumnos ymaestros que trajeron a España la prácti-ca del foot-ball, después de haber estudia-do en prestigiosos colleges ingleses comoEton o Cambridge, donde se cursaban lacarrera de Derecho o la ingeniería de Mi-nas.

Ala labor intelectual, se sumaba lapráctica de este deporte por las tripu-

laciones e industrias inglesas que se asen-taron en nuestro país; como ejemplo, cite-mos las minas de Riotinto, de aquí que elprimer club español fuera el Huelva Re-creation Club, fundado el 23 de diciembrede 1889. Por otra parte los numerososviajes que los hijos de comerciantes espa-ñoles realizaban al extranjero para for-marse y hacer nuevos negocios, aumenta-

ron, en algunos casos, la afición por el de-porte, como es el caso de Carlos Padrós.

El propio Carlos Padrós escribió unartículo en la publicación Gran Vida,

en junio de 1903, en el que aconsejaba lapráctica del fútbol y enumeraba las bon-dades que conllevaba: “Se juega al aire li-bre, en pleno campo, aprovechando loque a torrentes nos prodiga la naturalezapara fortalecer nuestra salud: aire y luz...se lucha con noble emulación por la victo-ria... la inteligencia es un factor que ha deacompañar a la agilidad y fuerza muscu-lar, reúne, en una palabra, cuanto se pre-cisa para que este sport resulte útil y agra-dable”.

Este artículo y otros parecidos fueronescritos, en su día, por nuestro conso-

cio Carlos Padrós, comerciante de telas,nacido el 9 de noviembre de 1870, en Sa-rriá (Barcelona). Don Carlos era hijo deltambién comerciante de telas barcelonésTimoteo Padrós Parals, y de Paula RubióQueraltó, nacida en Vilafranca del Pene-dés, casados en la basílica de Santa Maríadel Mar de Barcelona, el 14 de diciembrede 1861. El matrimonio Padrós Rubió tu-vo ocho hijos. De ellos destacamos, por su

proximidad afectiva y vital, a Juan, naci-do en 1869, primer presidente oficial delReal Madrid y con quién su hermanoCarlos llevó a cabo muchos de sus pro-yectos.

En 1876, la familia Padrós Rubiócambió la ubicación de su negocio

en la calle Del Call, en Barcelona, a lamadrileña calle de Alcalá nº 48, esqui-na con Cedaceros 1 y 3. Allí abrió “AlCapricho”, una boutique que tuvo unéxito enorme en la capital de Espa-ña,y fue cuna asociativa de los funda-dores-jugadores del Real Madrid.

En España la práctica deportiva es-taba muy limitada al tenis (Lawn

Tennis) y al polo. En 1897 aparece elprimer equipo madrileño, el Foot-ball

Sky, que jugaba en los altos de Mon-cloa. Aproximadamente en 1900 Julián

Palacios, los hermanos Padrós, Pedro Pa-rages y Adolfo Meléndez y otros jugado-res dejan el Sky y crean el Madrid F.C.,siendo Julián Palacios el primer capitán,delantero y presidente oficioso del Club.

El fútbol como sport, era una aficiónnueva que practicaban grupos de

amigos en descampados. Hay que hacer-se cargo de la situación. A principios delsiglo XX, ver a un grupo de jóvenes co-rriendo en pantalón corto y camiseta de-trás de un balón, era considerado comoalgo anecdótico, escandaloso, y las más delas veces, hilarante. Mucha gente se acer-caba a ver aquel deporte como un espec-táculo, como una novedad sin futuro, quea muchos luego les cautivó.

El Madrid pasó de jugar en Moncloa,al campo de Estrada, entre Velázquez

y Lista, y de aquí, en 1902, a un campojunto a la antigua plaza de Toros (hoy Pa-lacio de los Deportes de la Comunidad deMadrid, en Goya). Los propios jugadorestuvieron que cavar una zanja en torno alcampo, para evitar que los bueyes y ca-rros con escombros interrumpieran lospartidos. Ellos “vallaban” con una cuerdael recinto, y llevaban y ponían las porte-rías (las redes no aparecieron hasta 1903).

En este momento la intervención de losPadrós, se volvió más activa y decisi-

va. Todas las fuentes destacan el papel

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Carlos Padrós y Rubio

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primordial que desempeñó Carlos Padrósen esta etapa, en la que va transformadoencuentros de amigos con un balón, enuna asociación con una base para el futu-ro, estableciendo criterios y normas parasu posterior desarrollo y crecimiento.

La boutique “Al Capricho” se convirtiópronto en centro de operaciones, ya

que Julián Palacios tenía múltiples ocu-paciones, aunque siguió colaborando des-de su imprenta.

Tras varias reuniones, el seis de marzode 1902, en la trastienda del comer-

cio, eligen la primera Junta Directiva,presidida por Juan Padrós, y establecenel reglamento del Club –primero de suclase en España -, la uniformidad: Panta-lón y camisa blanca, medias y gorra azu-les, y banda morada con el escudo de Ma-drid. Acababa de nacer el MadridFootball Club, definido como “sociedadcivil particular denominada Madrid Fo-otball-Club con objeto de fomentar basesprogresivas la afición al juego llamadoFottball Asociation”. El 22 de abril de1902 fue registrado legalmente como aso-ciación, siendo su sede el local de “Al Ca-pricho” en Alcalá 48 y Cedaceros 1 y 3.

En estas reuniones, el jugador-entrena-dor británico Arthur Johnson esta-

bleció unas consignas para poder practi-car mejor el fútbol: 1.- Elección del jefe deequipo antes del partido, para evitar char-las y discusiones posteriores. 2.- Jugarsiempre en el mismo puesto. 3.- Cuandola pelota salga del campo, traerla lo antesposible, y así evitar partidos de tres horasen los que los jugadores, principalmente,charlan y fuman. 4.- “Combination”.

Johnson se quejaba de excesode individualismo.

Según nuestras fuentes, Car-los Padrós decidió que su

hermano ocupara la presiden-cia y, así, él podría encargarsedel fomento y organización delfútbol, mediante la creación yformación de asociaciones re-gionales y campeonatos.

En los siguientes años, Car-los Padrós dio numerosas

muestras de su carácter em-prendedor y de su voluntadirreductible de llevar a cabo susobjetivos. El primero de ellos, era la pro-yección del nuevo deporte, y planteó lasfiestas con motivo de la mayoría de edadde Alfonso XIII, como momento ideal depublicidad. Así se gestó la primera com-petición a nivel nacional, disputada desdeel 13 de mayo de 1902, con participacióndel Vizcaya, Barcelona, Español de Bar-celona, el New de Madrid y el Madrid fo-otball club. El torneo se disputó en los te-rrenos del hipódromo (actuales NuevosMinisterios), cedidos por la Sociedad deFomento de la Cría Caballar y en el queresultó vencedor el Vizcaya, el 15 de ma-yo. El partido fue arbitrado por nuestrosocio Don Carlos Padrós.

Este primer torneo fue una muestra delpoder organizativo de Padrós, y mo-

delo de futuros torneos. Padrós mandabaa los clubes las bases de los campeonatosy les invitaba a participar. Supo llamar laatención de la prensa, que se convirtió po-co a poco en un apoyo fundamental parael fútbol. Otro gran apoyo fue la familiareal, que acudía a los partidos, donabatrofeos y fomentaba su práctica. En 1903,Alfonso XIII donó una copa de plata parael campeón. Así surgía el torneo de la Co-pa del Rey, organizado por el MadridF.C..

El siguiente paso organi-zativo de Padrós, fue la

creación de la Unión Madri-leña de Clubes en 1902, ydel primer torneo regionalmadrileño, disputado en1903, del que saldría el equi-po que disputaría la Copa

del Rey, con los otros campeones regiona-les. De este torneo regional, el Archivodel Casino de Madrid, conserva una cartade Juan Padrós, en la que invita a los so-cios a los encuentros. Llama la atenciónque Juan Padrós firmó como Vicepresi-dente, y no queda claro quien era el Presi-dente.

Otro hito deportivo de Carlos Padrós,fue la inscripción del Madrid Foot-

ball Club, como una de las entidades fun-dadoras de la FIFA, en su primera reu-nión en mayo de 1904, en París. CarlosPadrós, envió a ella, como delegado delClub, en representación del fútbol espa-ñol, a André Espir, junto con Francia,Holanda, Bélgica, Suiza, Suecia y Dina-marca.

Entre 1904 y 1908, Carlos Padrós pre-sidió el Real Madrid, y su objetivo fue

potenciar la estructura de club. Fruto desu trabajo fueron las victorias consecuti-vas en los campeonatos de España y deMadrid entre 1905 y 1907, así como elprimer encuentro de fútbol internacionaldisputado en España en 1906. Con moti-vo de la visita del Presidente francés Lou-bet, Carlos Padrós invitó al Galia C.F.,campeón francés.

En enero de 1908 dejó el Real Ma-drid, y fue nombrado Presidente ho-

norario.

Su última aportación al fútbol nacional,fue su contribución al nacimiento de la

Federación Española de Fútbol. El 14 deoctubre de 1909, el Madrid, a través de laintervención de Padrós, se reúne con va-rios clubs, con el objetivo de organizar loscampeonatos de España y los colegios deárbitros. Años después, su mediación conAlfonso XIII, fue decisiva para que el reydiera el título de “Real” a la federación en1913, y así superar la primera crisis de laentidad.

Tras estos años de febril actividad, Car-los Padrós dejó el mundo del fútbol,

Carlos Padrós y Rubio...viene de página anterior

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A la izquierda y arriba, dosinstantáneas del Madrid FootballClub.

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un tanto desengañado. Dejó en él pruebasde su talento organizativo, así como suapoyo económico. Resaltamos su finan-ciación de los equipos, del futuro campodel Real Madrid en O´Donnell, de las me-dallas de oro de los campeonatos de Es-paña, que él personalmente encargaba enLondres, o de los banquetes que pagaba alos jugadores tras las competiciones quedisputaban.

Se ha definido a Padrós como un hom-bre de carácter recto, meticuloso, muy

decidido, pero intransigente, seco, y a ve-ces soberbio. Llama la atención que nun-ca pudo jugar al fútbol, debido a una coje-ra, producida por una parálisis sufrida enla infancia. Quizás, por esta razón se vol-có en la faceta organizativa.

En el año de 1910, el 25 de febrero, DonCarlos Padrós ingresó como socio del

Casino de Madrid, presentado por el nota-rio Francisco Moragas, socio eminenteque prestó numerosos servicios de aseso-ría legal a nuestra sociedad de manera de-sinteresada. No es difícil pensar los nume-rosos contactos que Padrós tendría consocios del Casino, debido a la localizaciónde su establecimiento comercial y a su po-sición social. Entre estos socios, segura-mente, figuraría el Marqués de Valdete-rrazo, socio también fundador del RealMadrid, y que en 1903, cambió de clubpara fundar el futuro Atlético de Madrid.

Tras los años dedicados al deporte,Carlos Padrós se centró en la promo-

ción e innovación en la agricultura.

En sus nueve fincas de San Lorenzo deEl Escorial (Madrid), probó nuevos

cultivos, e intentó industrializar la activi-dad agraria. Como resultado de sus traba-jos, creó fábricas de aceite en los pueblosjienenses de Martos y Fuensanta, y el reyAlfonso XIII, le otorgó la Gran Cruz de laOrden Civil del Mérito Agrícola.

Como refrendo a su actividad agrícola,fue nombrado Presidente del Centro

de Estudios Agro-sociales, Presidente dela Confederación Española PatronalAgrícola, y Vicepresidente de la Asocia-ción de Agricultores. También fue Vocaldel Consejo Superior de Fomento.

En 1934, redactó un proyecto de ley decrédito agrícola, en el que se fomenta-

ba la unión de patronos y obreros en lasHermandades Rurales, apoyados porcréditos blandos para crear riqueza y evi-tar el desempleo agrario.

Otra actividad a la que se dedicó fue lapolítica. Apadrinado por el Conde

de Romanones, ingresó en el partido libe-ral y fue proclamado diputado a Cortes,

los años 1912, 1914 y 1916, por el distritode Mataró.

Como en otras facetas de su vida, Car-los Padrós trabajó de manera con-

cienzuda desde su escaño, en defensa deMataró y por cuestiones agrarias y de in-terés general.

Famosas fueron sus intervenciones en1914 sobre la importancia como ferti-

lizante de las sales potásicas y su trata-miento industrial, y su discurso del 10 denoviembre de 1916, en el que realizó unadisertación sobre el abusivo precio que te-nía la gasolina en España respecto a Eu-ropa, y lo que esto suponía para el retrasode la economía nacional. Su argumenta-ción fue espléndida y terminó con estaspalabras: “No voy á cometer la ridiculezde pretender demostrar á los Sres. Dipu-tados la importancia que tiene en la vidamoderna la rapidez de los transportes. Sies posible que alguien suponga que la uti-lidad de la gasolina queda limitada al usode los automóviles para pasear y lucirsepor las calles de Madrid, y que esa es larazón que me mueve á hacer estas mani-festaciones, yo fío en la cultura de losSres. Diputados, que, sin duda alguna, re-conocerán el gran interés que tiene parala industria y para la agricultura el abara-tamiento de este producto.”

Respecto a Mataró, la ciudad le nom-bró hijo adoptivo, debido a su inter-

vención a favor de su distrito, pero sobretodo por su decisiva actuación para ter-minar las obras del desvío de cauces enla población, que solía quedar anegada odestruida parcialmente por las inunda-ciones. Padrós consiguió la financiacióndel estado y la finalización de las obras(iniciadas en 1835), que fueron inaugu-radas el 29 de octubre de 1916 con el res-paldo de toda la ciudad. Actualmenteuna de las principales avenidas de Mata-ró lleva su nombre, al igual que el estadiomunicipal, inaugurado el 25 de diciem-bre de 1935.

Al igual que ocurrió con muchas perso-nas, la Guerra Civil truncó la carrera

y la vida de nuestro socio. Fue detenido yconducido al Retiro, donde se le hizo unsimulacro de fusilamiento, de aquí fue lle-vado al cine del Círculo de Bellas Artes,donde nadie se quiso hacer cargo de él, ypor su propio pie se marchó. De aquí pa-só a una pensión con su mujer Luz Quin-tana Trasler y su hija Blanca (tuvo tres hi-jos más que estaban en San Sebastián), yluego a la embajada de Polonia, consi-guiendo un salvoconducto con destino aMarsella y luego a San Sebastián.

Asu regreso a Madrid, su casa estabatotalmente saqueada. Este hecho y el

fallecimiento de su hija Blanca en 1943,provocó un decaimiento físico y anímicoque hizo grave mella en Don Carlos Pa-drós.

Don Carlos Padrós se dio de baja ennuestra sociedad el uno de noviem-

bre de 1948, debido a sus problemas físi-cos, que le impedían acudir a nuestra sedesocial.

Su salud se fue deteriorando hasta falle-cer el 30 de diciembre de 1950. A su

funeral, celebrado el 4 de enero de 1951,acudieron muchas personas, entre ellasdos destacados presidentes madridistas:Santiago Bernabéu y Luis de Carlos, aun-que el olvido del club fue patente hasta lacelebración del centenario, en que se vol-vió a honrar su memoria.

Andrés Bayonas

Fuentes– Archivo del Casino de Madrid.– Juan Carlos Pasamontes. Todos los je-

fes de la Casa Blanca, 2003.– Archivo del Congreso de los Diputa-

dos.– Eduardo González Calleja. Historia del

Real Madrid, 1902 – 2002. La entidad,los socios, el madridismo. 2002

– Ángel Bahamonde Magro. El Real Ma-drid en la Historia de España, 2002

– http://elmundodeporte.elmundo.es/el-mundodeporte/especiales/2002/02/cen-tenario/1902.html

– Carlos Padrós. Proyecto de ley de cré-dito agrícola. 1934

– Real Federación Española de Fútbol,1913-1988. 1988

– Diario La Vanguardia.– Blanco y Negro.

Saluda de Padrós al Presidente del Casino,invitándole a un partido de fútbol.

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