segunda parte: problemas regionales de colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05capi04.pdf ·...

26
Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

Upload: others

Post on 06-Jul-2020

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

Segunda Parte:Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

Page 2: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio
Page 3: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

105

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

Solamente entre 1995 y 2003 el país conoció de proyectos de Ley Orgá-nica de Ordenamiento Territorial, el último de los cuales es objeto dedebate actualmente en el parlamento, sin que ello, como ha ocurrido

con los anteriores, permita inferir que será sancionado, pero más aún, quepueda resolver adecuadamente la problemática estructural de la organizaciónespacial para el cumplimiento de las funciones de la política de Estado enmateria territorial y por supuesto, en una planificación orientada a la reduc-ción de los desequilibrios espaciales del desarrollo. Todo lo anterior ratificaque no será posible un proceso de regionalización mientras ésta no tengacomo referente la existencia de un proyecto territorial nacional y mientras laconformación regional deba obedecer a las lógicas espaciales que dicta la apli-cación de modelos económicos impuestos por potencias imperialistas.

IntroducciónCon nosotros vienen los recuerdos y las experiencias de una larga

historia de lucha y de resistencia. Echamos mano de nuestras identidades yde nuestras culturas para enfrentar las amenazas que ha traído cada época.

Este camino no ha sido fácil. Desde la conquista y sin descanso, laarrogancia, el egoísmo, la ignorancia y el irrespeto, disfrazados de distintas

maneras, han caído sobre nosotros con engaños y mentiras, con falsaspromesas, con el poder de armas cada vez más sofisticadas y mortales y con

Región: O el retorno del debate sobre la cuestiónnacional en los países dependientes1

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO 2

M. Sc. En Geografía.Investigador Invitado del

Centro de Estudios Regionales de la Universidad del Tolima

Page 4: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

106

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

instituciones, normas y leyes que nos traen miseria, explotación, dolor ysometimiento.

Cada vez que llegan a atropellarnos aseguran que es por nuestro bien. Encada época hemos tenido que descubrir el engaño, unirnos y organizarnospara defendernos. Siempre nos sirvió volver a las raíces, echar mano de la

sabiduría de contenida en nuestras memorias colectivas, escuchar a losmayores y acercarnos a la naturaleza para hacernos parte de la vida y

defendernos defendiéndola. En cada época tuvimos que aprender a resistir yhacerlo de una manera diferente de acuerdo con el desafío que enfrentamos.

Venimos marchando desde lejos, desde hace mucho tiempo, por elcamino de la historia. Los últimos pasos que nos trajeron a este Congreso

itinerante de los Pueblos, son la etapa más reciente de esa larga historia,pero también establecen el comienzo de un nuevo camino que hemos

decidido recorrer. Con las 60.000 personas que marchamos hasta Cali y porotros caminos del país, marcharon nuestros recuerdos, nuestros ancestros,

los luchadores que abrieron el camino antes y también muchas más mujeresy hombres en muchos lugares dentro y fuera de Colombia, que han

reconocido el peligro, sufren el dolor y se levantan a marchar para pervivir ycrear un mundo posible y necesario. El desafío que impone esta nuevaépoca es grande. Tal vez el mayor que hayamos tenido que enfrentar en

nuestra historia. (Mandato Indígena Popular. 18 de septiembre de 2004.Plaza de San Francisco, Cali, Colombia).

Un teatro colmado de expectativas alrededor de una reconformación delas entidades territoriales en Colombia se inauguró con la promulgación dela Constitución Política de 1991, generando un primer escenario en la Co-misión de Ordenamiento Territorial-COT, que funcionaría durante los años1992, 1993 y 1994, promulgando la propuesta de conformación de ochoregiones, bajo la denominación telúrica de “nuevo mapa de Colombia”.

Los últimos quince años de la vida política nacional han estado marcadospor el resurgimiento de la cuestión regional, la cual muestra un pesado lastrede argumentaciones, consejas y acechanzas desde el ejercicio mismo de lapolítica parlamentaria, el derecho constitucional y la administración pública,con una menor presencia de la intervención técnica y académica, la cual enprimera instancia ha procedido de la función del IGAC, del DNP e inclusodel Ministerio del Medio Ambiente en sus ya varias versiones; en segundainstancia, sin que no se haya producido, ha sido muy limitada la reflexiónacadémica sobre el asunto y consecuentemente igual su impacto en el debatenacional sobre el asunto.

Otro aspecto llamativo de la discusión sobre la cuestión regional, se centraen la ambivalente fluctuación entre escenarios nacionales y regionales, siendo

Page 5: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

107

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

los segundos los privilegiados, precisamente por corresponder a este nivel lamayor preocupación por su resolución, pero además, porque ello parece serconsecuente con la tradición de la disputa por el control territorial que simul-táneamente puja por imponerse en los estrados del legislativo colombiano.

El sesgo ya anotado, del parlamentarismo, el derecho constitucional y lasvisiones administrativistas del territorio, fuertemente fundamentadas en lasmetodologías del ordenamiento territorial, como política instrumental deEstado, solamente permiten observar la reedición de un camino bastantediscutible en la determinación de la gobernabilidad puesta en el territorioconcreto de la reconocida diversidad étnica y geográfica del país.

Que ello es así se puede rastrear en la lectura de los textos, la mayoría deellos extensos, de los proyectos de Ley Orgánica propuestos, con la excep-ción del radicado en julio de 2003, que posa de exageradamente pragmático.En realidad este último tiene menos texto pero es tan pragmático comotodos los anteriores, pues asume que el problema de la organización territo-rial del Estado debe responder a las exigencias maximalistas del modelo eco-nómico neoliberal y las minimalistas del reconocimiento de los procesosculturales que construyen nuestras realidades territorializadas regionales.

Académicos y técnicos corremos el riesgo de perdernos en la barahúndadiscursiva que convirtió el nuevo ordenamiento constitucional del país en lamás larga tragi-comedia que mantiene cautivo a un auditorio más bien esca-so y que avergonzaría a pueblos dignos del mundo que realmente hubieranalcanzado una mayoría política de edad.

El autor ha rastreado durante las últimas cuatro décadas más de una dece-na de propuestas técnicas y académicas para la regionalización del país3 , to-das las cuales antecedieron con creces y argumentos las propuestas que a par-tir de 1991 han hecho más o menos explícitas los sectores políticos y gremiales,todas ellas sin excepción, marcadas por lógicas estrictamente polítiqueras oeconomicistas y con un profundo desprecio por los procesos sociales que hancaracterizado a los territorios que las mismas involucran.

Destacado en el terreno de las propuestas técnicas fue durante las décadasde los 60 a los 80 el trabajo del Instituto Geográfico Agustín Codazzi, asícomo su apoyo y acompañamiento a la Comisión de Ordenamiento Terri-torial, en el período 1992 a 1994. En esta misma línea se puede apreciar eltrabajo de Ángel Massiris desde la Escuela de Postgrado en Geografía-EPG,fruto del Convenio UPTC-IGAC. También ha sido persistente la presenciade la Sociedad Geográfica de Colombia en la defensa de la existencia de lasregiones naturales como una opción para la regionalización del país, más allá

Page 6: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

108

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

de si compartimos o no su validez actual. Paradójicamente, pobre ha sido lapresencia de la Geografía como disciplina en este debate teórico nacional ysolamente a partir del año 2000, con ocasión del XVI Congreso Colombia-no de Geografía, realizado en Cali, el asunto es objeto de interés explícito,retomado luego en el XVII Congreso de Pasto y durante los dos ciclos deConferencias de Geografía en la Universidad Nacional de Colombia.

Llamar la atención acerca de la importancia crucial del tema regional en lareflexión geográfica ha sido parte persistente de nuestro trabajo durante décaday media, incluso desde antes de que se promulgara la Constitución de 1991, yla presente ponencia se propone ofrecer los elementos centrales que sobre estetrasegar hemos venido acumulando para compartir con los colegas de la disci-plina geográfica y otras disciplinas sociales participantes en este Ciclo.

Del regionalismo vulgar a la región en la cuestión nacionalDice Furtado (1992) que “… son muchos los indicios de la

evolución global orientada por la desarticulación de los sistemas económi-cos –(y territoriales agregamos nosotros)- nacionales que son sustituidos

por espacios contenidos en otros parámetros políticos y culturales”. Elproyecto globalizante hace énfasis en la creación de las regiones de los

grandes intereses hegemónicos internacionales, que se delimitan porexclusión a partir de su atractivo en un momento determinado para las

actividades económicas de las empresas trasnacionales, situación queinduce al aumento de las tensiones Interregionales, a la exacerbación derivalidades y a la formación de bolsas de excluidos y miserables, todo lo

cual amenaza con hacer inviable el país como proyecto nacional”(Montañez y Delgado 1998, 181)

Cierto es que el ideal de una sociedad comunista, tal como lo promulga-ran Marx y Engels en el Manifiesto Comunista de 1848, constituye la másalta y superior de las aspiraciones emancipatorias de todas las clases oprimi-das de la sociedad mundial y que entonces, sin clases sociales y sin barrerasespaciales, étnicas, religiosas y políticas, el ser humano habría alcanzado el“paraíso en la tierra”.

Cierto es también, como lo defendiera Lenin4 , precisamente en su obrasobre la Cuestión Nacional, que el Estado Socialista reclama su gobiernosobre la totalidad inalienada e inalienable del suelo patrio, sin permitir queningún actor interno o externo sustraiga siquiera un centímetro de éste. Elsuelo patrio, el territorio de la “patria socialista”, estaba concebido como latotalidad absoluta de la extensión de tierras sobre la cual el pueblo ruso teníaunidad nacional y reclamaba identidad del proyecto político socialista.

Page 7: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

109

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

A la cuestión nacional remitía Lenin la consideración de la diversidad deétnias, dialectos y prácticas culturales, sin cuya cabal comprensión y adecua-do tratamiento no sería posible asumir el reto de construir la gran naciónsocialista por la cual tantas décadas y vidas del pueblo ruso se habían sacrifi-cado, ni su defensa consecuente ante las apertrechadas naciones opresoras nitampoco ante los chauvinismos internos y externos, expresados en naciona-lismos burgueses y pequeñoburgueses, que negaban, por un lado, el derechoa la plena autodeterminación nacional de las naciones oprimidas para mante-ner sus posturas de dependencia vergonzante ante los imperios, y por otrolado, levantaban las banderas de un falso nacionalismo que negaba el carácterinternacional de las políticas imperialistas, sirviendo a los intereses de las cla-ses dominantes de los países dependientes.

Un aspecto relevante de la historia de la conformación de la ex URSS,relacionado de manera concreta con el cumplimiento del papel de la estruc-tura del Estado en las funciones de la planificación, es precisamente la deter-minación de la regionalización o estatalización subnacional, centrada en elpropósito de reducir de manera sistemática los desequilibrios espaciales deldesarrollo, a través de la puesta en práctica de los reconocidos planesquinquenales de desarrollo, cuyas enseñanzas serían tomadas décadas másadelante por los propios países occidentales para conformar su andamiajeplanificador estatal5 .

Quizá el pensamiento de Lenin no haya sido fielmente interpretado porsus sucesores, y la historia rusa muestra hechos contrarios en todo sentido, locual explica en buena medida los sucesos secesionistas que han sacudido coninusitada violencia el forzado “Estado Socialista” de la ex URSS desde lacaída del Muro de Berlín a finales de la década de los 80.

Un tratamiento particularmente novedoso en la cuestión nacional, fue eladoptado por Mao Tse Tung6 en el proceso de conformación de la Repúbli-ca Popular China, constituida a partir de la más vasta diversidad de naciona-lidades, concluyentes todas, a excepción del Tibet, en la unidad nacional chi-na, recientemente fortalecida con el retorno de Hong Kong, ex coloniabritánica, y pendiente por resolver aún la cuestión taiwanesa, alimentada porla centenaria ingerencia norteamericana y europea en los asuntos internos dela patria de Mao.

En el lado del mundo capitalista, no son desconocidas las metasreunificadoras que con desesperación buscaron y conquistaron Bismark, Hitlery los líderes alemanes orientales y occidentales de la década de los 80 para lareunificación de Alemania, entre la primera y segunda guerra mundial y des-

Page 8: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

110

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

pués de la caída del Muro de Berlín, respectivamente; tampoco la ferocidadcon que Inglaterra ha defendido su Comunidad Británica de Naciones y larepresión a los movimientos irlandeses; o la respuesta contundente que endefensa de la unidad nacional han adelantado España e Italia, con respecto alos movimientos independentistas vasco y de la padania, respectivamente.

Contrasta de manera palmaria, el llamado de algunos sectores despista-dos de la izquierda mundial, acerca de la no vigencia de la cuestión nacional,con la fuerza que la defensa de la unidad territorial nacional y los “espaciosvitales” despojados a otras naciones tiene desde los propios países imperialistasdel pasado y del presente. ¿Cómo puede entonces explicarse que mientras laspotencias occidentales alimentan el desmembramiento de la ex URSS, deYugoslavia y de la unidad palestina, se aferren más que nunca a la defensa amuerte de su propio territorio, manteniendo en su mira la expansión territo-rial y la neocolonización, tal como lo practican Estados Unidos e Inglaterracon Guantánamo y Las Malvinas, respectivamente?

Sin duda el asunto está precisamente en el rescate que para la discusiónglobal tiene la cuestión nacional, en el centro de la cual sigue siendo recurren-te el cambiante mapa de unidades nacionales bajo la influencia de centrosimperiales de poder y en ausencia de movimientos antiimperialistas de carác-ter y ámbito internacionalista, como los que se presentaron durante las déca-das de los 40, los 50 y los 60 del Siglo XX, y de los cuales surgirían lasrepúblicas populares de China, Corea del Norte, Albania, Vietnam, Laos,Camboya, además de Cuba.

Es tal la convicción que tienen los agentes imperialistas sobre la consis-tencia de su nación, la indivisibilidad de su territorio y la levedad de las na-ciones ajenas, que las frases siguientes del Ministro de Trabajo de Clinton nopueden ser más expresivas:

Estamos pasando por una transformación que modificara el sentido dela economía en el siglo (XXI).

No existirán productos ni tecnologías nacionales, ni siquiera industriasnacionales. Ya no habrá economías nacionales, al menos tal como concebimos hoy

la idea. Lo único que persistirá dentro de las fronteras nacionales será lapoblación que compone un país.

Lo bienes fundamentales de una nación serán la capacidad y destreza desus ciudadanos.

La principal misión política de una nación consistirá en manejarse conla fuerzas centrifugas de la economía mundial que romperán la ataduras que

mantiene unidos a los ciudadanos(Robert Reich. Ministro de Trabajo de Bill Clinton).

Page 9: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

111

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

Tal es la esencia económica de la globalización actual y tal el papelasignado a los pueblos del mundo dependiente, los únicos que en ausenciade sus propios Estados Nacionales, siguen siendo inermes ante la arremeti-da de las “fuerzas centrífugas” que aquí se indica por parte del señor Reich yque han marcado el comportamiento histórico de los imperios en todoslos tiempos.

Vuelve entonces a ser pertinente retomar la discusión sobre la cuestiónnacional, en el marco de un nuevo escenario del fenómeno globalizador, demanera que se desentrañe la compleja imbricación entre los territorios y lasdinámicas económicas, políticas y culturales; entre lo internacional y lo na-cional; entre lo internacional globalizado y lo nacional-regional y; por su-puesto, entre lo extraño y lo propio en la justa valoración de aquello externoque sirva a lo propio nacional y aquello externo que resulta nocivo a lo pro-pio y que por lo tanto atenta contra el futuro de lo nacional y de nuestranacionalidad.

El debate sobre la cuestión nacional se torna no solo en crucial, desde elpunto de vista de la territorialidad sino de la vigencia del derecho de lospueblos a la misma, tal como lo defienden con dignidad los pueblos nativosancestrales de todo el continente americano, incluidos los pueblos nativosancestrales de Colombia, y tal como lo hacen explícito al mundo en su Man-dato Indígena Popular, que antecede la introducción de esta ponencia.

Tal es el peso específico, histórico e innegable del territorio, que los agen-tes imperialistas, como el Ministro de Trabajo de Clinton, citado páginasatrás, debe reconocer, paradójicamente, que “Lo único que persistirá dentro delas fronteras nacionales será la población que compone un país”, la cual, agrega-mos, solo puede existir como la inquebrantable unidad dialéctica sociedad-naturaleza, es decir, como territorio.

La irracionalidad de la configuracion de las entidadesterritoriales: O la aplicación consecuente de una lógica funcionala los modelos de gobernabilidad en el país.

Desde la Geografía crítica hemos venido sosteniendo que la no solucióna los problemas de una adecuada organización territorial en Colombia, estri-ba en una razón causal de tipo estructural, pues nunca existió un proyectoterritorial nacional ni tampoco un propósito explícito de construir el EstadoNación moderno.

A la tarea inconclusa del Estado Nación, la asaltó no solo la tempranaexistencia de una oligarquía atada a los proyectos neocoloniales británico y

Page 10: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

112

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

estadounidense sino el desprecio por el territorio que fungía como soportede una gobernabilidad siempre difusa y discutiblemente legítima. De tiem-po en tiempo estas oligarquías apátridas permitieron con obsecuencia y sinvergüenza alguna, la pérdida de territorio nacional en provecho de pretensio-nes imperiales de Washington (1903 Panamá), e incluso de países vecinos:Venezuela, Perú, Brasil y Ecuador, con lo cual la extensión territorial colom-biana se redujo en millones de kilómetros cuadrados de extensión continen-tal y marítima.

El proyecto moderno de la unidad en la triada Territorio-Estado- Na-ción, al no ser concluido, dejó en consecuencia inconclusa la tarea históricade reconocimiento integral de las tres funciones básicas y fundantes de todarepública moderna: 1) La unidad territorial; 2) La función de gobernabilidaddel Estado sobre la totalidad del territorio y; 3) El reconocimiento efectivode la diversidad cultural de la nación, expresada en sus múltiples realidadesregionales. En consecuencia, también, no podría defenderse que en algúnmomento de la historia nacional se haya contado con un proyecto que arti-cule estas funciones básicas, lo cual explica la ausencia recurrente de un marcode política estatal estratégica que oriente el desarrollo nacional, que no puedeser sino la expresión territorializada del cumplimiento de la función socialdel Estado. Con certeza Montañez y Delgado expresan que “La hipótesiscentral consiste en reconocer la importancia que una determinada concep-ción territorial puede tener para la articulación o desarticulación de un Pro-yecto Nacional y específicamente, de un Plan de Desarrollo de la Nación(Montañez y Delgado 1998, 178). Plan que, agregamos ahora, supere lapoco seria práctica de formular “planes de desarrollo” nacional que tienen lavigencia de un periodo presidencial.

No es extraño entonces que la determinación de la configuración espa-cial de los departamentos y municipios, durante toda la existencia de laRepública, hayan estado signados por la medida vulgar de los cotos de cazaelectoral, tal como durante el período colonial sería la medida vulgar de losestimativos de la riqueza en minerales y población nativa. Pero igualmente,así como durante la colonia la Corona premiaba a los conquistadores conlas “mercedes de tierras”, gracias a las cuales el imperio se hacía extenso, fuepráctica también de los gobiernos republicanos pagar a sus militares y go-bernantes, con la adjudicación de tierras y con la delimitación de tierras ypueblos bajo su dominio. Tal proceso fue el vivido durante finales del Si-glo XIX, cuando a cada triunfo de las fuerzas de la regeneración, los gobier-nos de la República Conservadora premiaban a los Estados ganadores con

Page 11: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

113

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

la anexión de tierras que a su vez provocaban el desmembramiento de losEstados perdedores de las guerras. Un ejemplo patético de ello es ladesmembración paulatina del Estado Soberano del Tolima, a favor de losEstados de Antioquia y Cundinamarca.

A estas prácticas han estado adscritas, con una clara intencionalidad polí-tica, las también recurrentes prácticas de las jerarquías eclesiásticas católicas,comprometidas en el mismo proceso de desmembración del Estado Sobera-no del Tolima, al lado de la República Conservadora. El hecho es concreto, elmayor activista de la segregación del Departamento del Tolima, reducto delEstado, creado en 1886 por la Constitución de Caro y Núñez, fue el primerobispo de la diócesis de Garzón, Monseñor Esteban Rojas, cuya argumenta-ción central estaba en la cruzada santa de los “fieles” contra las satanizadasprédicas del liberalismo anticlerical de mediados del Siglo XIX. No por azarel Tolima actual se reconocería como bastión de ideologías liberales, mien-tras al sur, el actual Huila, como un bastión del conservatismo históricocolombiano.

Episodios relativamente cercanos a estos condujeron a las rupturas delas unidades departamentales del gran Santander, con un Santander liberal,al sur, y un Santander conservador, o Norte de Santander, al norte. O laruptura de complejas razones económicas, políticas y religiosas del antiguoGran Caldas, cuya cepa ultra conservadora se conservó en Manizales y elactual Caldas, mientras los reductos liberales y no reconocidos como “no-bles” se quedarían con Risaralda y Quindío, mientras de paso el manejo dela Federación Nacional de Cafeteros pasaría de manos de Caldas a las deAntioquia7 .

Por supuesto las condiciones de la configuración de las unidades territo-riales han cambiado y hoy por hoy, las lógicas que guían la aplicación delmodelo económico neoliberal global se imponen, supeditando todas las de-más razones y lógicas en el territorio, pues a los bastiones “ganadores” de lasguerras civiles del Siglo XIX los han reemplazado los proyectos económicosde las “regiones ganadoras” bajo el reinado del modelo globalizador actual, alcual se supeditan funcionalmente las capillas políticas históricas, cuya peren-nidad se debe precisamente a su capacidad para transmutarse en provecho delas políticas externas, de las cuales han sido siempre obsecuentes aliadas yvergonzantes testaferros.

Así pues, lo que para nosotros aparece como descabellado en materia de laconfiguración territorial, para quienes han ostentado el poder político, econó-mico y político real, no resulta más que en continuidad y consecuencia.

Page 12: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

114

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

El problema de la regionalización: O las causas estructurales quesubyacen la cuestión regional en Colombia

Como corresponde a un país con ausencia de política de Estado en mate-ria territorial, el gobierno de Colombia promulgó primero una ley estatutariadeterminando de manera recortada el ordenamiento territorial municipal, enpresumible consecuencia con el proceso de descentralización municipal, es-bozado de manera clara con la reforma constitucional de 1968 y acelerado demanera contundente con la reforma de 1989 y la Constitución de 1991.

Sin siquiera atender las recomendaciones encargadas a la Comisión deOrdenamiento Territorial-COT y su propuesta de regiones, contenida en elInforme final de la misma, entregado al gobierno nacional en diciembre de1994, éste volvió a caer en el redil de las fuerzas cambiantes del parlamento,el “nuevo parlamento”, a cuyo interior se mueven los intereses de los gruposde presión regional que desde entonces han garantizado que ninguno de losproyectos de Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial salgan airosos de losdebates respectivos, excepto el interés del grupo de presión que se manifiestaen la Mesa Regional Bogotá-Cundinamarca, apoyado en un artículo transi-torio que primero se coló como gigantesco mico en el proyecto de ReformaPolítica de 2003 y luego aparece tal cual en el texto del proyecto que actual-mente se debate en el parlamento, haciendo expedita la creación de la RegiónCentral, conformada por el Distrito Capital, el Departamento de Cundina-marca y los demás departamentos vecinos que consideren pertinente su par-ticipación en la misma.

Infructuosas han sido hasta hoy las numerosas reuniones, los otros tantosforos y talleres que han tenido como propósito alimentar la discusión nacio-nal sobre la regionalización, y de paso, alentar propuestas concretas acerca dela conformación de bloques regionales, cuya configuración ha sido tan cam-biante como cambiante la composición de los grupos que han asumido suliderazgo. Además de los eventos que para el efecto han sido convocados porlas comisiones del Senado y la Cámara de Representantes, en diferentes aun-que escasas ciudades del país, se recuerdan los eventos que por interés desectores gremiales han sido convocados en Antioquia, Valle del Cauca y EjeCafetero; los eventos convocados por sectores gubernamentales, academia ygremios en el Tolima, Huila, Caquetá y Cauca; los eventos convocados porFESCOL en Bogotá, etc., etc.

En el fondo del asunto prevalece una actitud displicente de los sectorespolítico, técnico y gremial, con respecto a las causas estructurales que subyacenla cuestión regional, las cuales se encuentran precisamente en la ausencia del

Page 13: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

115

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

proyecto territorial nacional, resultado a su vez del tipo de democracia yestilo de gobierno que ha prevalecido durante el régimen republicanooligárquico colombiano por ya casi dos centurias.

Si se acepta el hecho que la planificación constituye una función exclusi-va del Estado, debe reconocerse igualmente que la definición de una políticaorgánica de ordenamiento territorial, que confluya en una determinadaregionalización del territorio nacional, solo puede provenir del mismo. Sinembargo la regionalización supone la existencia primera de una estructuraconsolidada de Estado, lo que explica en cierta forma porqué se produjo unaregionalización de facto en Chile, justamente bajo la dictadura militar dePinochet, o porqué, con una tradición de solidez relativa, se produjeron lasregionalizaciones estatales de Brasil y Venezuela; o porqué se produjo, sindiscusión aparente ni atenuantes, la regionalización en Cuba, una vez triunfóla revolución de 1959.

El dilema oligarquía premoderna o Estado burgués moderno, pesa comoun lastre que no ha permitido el acceso del país a formas de gobernabilidad quesean ajenas a aquellas en las cuales las prácticas centenarias del clientelismo,reemplazan la acción política civilizada de las clases sociales. Incluso, muy apesar del llanto del club de amigos de la neoliberal Constitución de 1991, bajoel supuesto imperio de la “democracia participativa” la corrupción y la degrada-ción de la política legal o lícita, parecen más agresivos y descarados que bajo elmodelo supuestamente reemplazado de la “democracia representativa”.

Las formas territorializadas de la política tradicional, es decir, los departa-mentos y los municipios, y dentro de éstos los corregimientos, las comunas,las veredas y los barrios, son como la Geografía crítica ha sentenciado, sola-mente espacios de poder, en un ajedrezado tablero en el que se mueven lasfichas de las componendas del poder político real que pugna, solo con invita-dos de las clases dominantes y recién aceptados actores de centro izquierda, porla conducción del Estado y la completa e inefable cooptación del gobierno.

Si las lógicas neoeconómicas, esgrimidas de manera agresivamente contun-dente por las gremios de Antioquia, Valle y el Eje Cafetero; pero también por laMesa Regional Bogotá-Cundinamarca, se imponen, el país no presenciará másque una reedición de actos irracionales en su configuración territorial, con ladiferencia que éstas nuevas formas regionales, lideradas por la lógica actual de las“regiones ganadoras”, y por lo tanto funcionales al modelo económico neoliberal,convoca a los desprestigiados sectores políticos, e incluso gremiales, siempre ycuando la nueva propuesta no amenace sus tradicionales cotos de caza electoral nisus pingües negocios con los poderes políticos y económicos centrales.

Page 14: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

116

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

A diferencia del caso anterior, el país ha observado como durante dosdécadas ya, los políticos de la costa Caribe colombiana fueron los únicos encomprender el papel del territorio como instrumento para la negociación delpoder político real, más allá de la supuesta y poco defendible unidad culturalde esta territorialidad nacional. Una compleja imbricación entre una creaciónpolítica del departamento, que lo unge como referente simbólico, interiorizadoen el imaginario colectivo en todos los departamentos caribeños, no logra serdesalojada por una creación nueva, la de la “región Caribe”, que complemen-ta de manera indiscutible este primer imaginario colectivo.

Fue eso lo que se consolidó en el primer CORPES creado en el país, peroque no encontró una comunidad política tan cerrada en su propósito buro-crático, como en el Caribe. Ni siquiera lo lograrían los CORPES de laOrinoquia y la Amazonia, que pese a su relativa identidad socio ambiental,no disponen de una sociedad regional suficientemente identificada simbólicani políticamente. Mucho menos el CORPES de Occidente, cruzado por lahistórica disputa entre los intereses de las elites regionales de Antioquia yValle del Cauca.

Lo que si puede advertirse, es que aparecen recurrentes los centrospolarizadores de la organización espacial en el país, sobre todo durante lasegunda mitad del Siglo XX. En un ejercicio retrospectivo acerca de las ideasy/o propuestas de organización de bloques regionales en Colombia, entre1969 y 2003, se aprecia una clara permanencia de algunos centros de fuerteinfluencia, a cuyo alrededor forman de tiempo en tiempo los departamentosde menor desarrollo económico.

Más de cincuenta ordenamientos, argumentados o no, han desfilado porlos diferentes eventos regionales y nacionales en los que se ha discutido lacuestión regional. Sin embargo, solamente quince (15) ciudades aparecencomo centros ordenadores en todo este cúmulo de formaciones y algunosdepartamentos aparecen colocados en uno o más ordenamientos, mostrandode paso la presencia real de una cierta indefinición en su adscripción a uno uotro bloque. Los departamentos que muestran una condición de este últimotipo son Huila, Tolima, Chocó, Arauca, Casanare y Putumayo, lo cual losaproxima a la categoría de “espacios intersticiales”, argumentada por Bianchi(1993), pero aquí en una extensión mucho mayor.

Los centros ordenadores no corresponden ya solamente a los que la lógi-ca funcional convencional privilegia, otorgando a los centros nacionales ymetropolitanos un papel territorialmente hegemónico sino que incorporacentros ordenadores de orden menor a aquellos, que tienen un papel funcio-

Page 15: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

117

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

nal vinculante en la unidad descrita. Tal es el caso de centros ordenadoresterritoriales como Leticia, Villavicencio, Barrancabermeja, Ibagué, Neiva,Pasto, Popayán, Santa Marta y Buenaventura. De esta manera, otra forma dever la regionalización, precisamente a partir de lo producido hasta hoy, muestraun total de 15 regiones, con sus respectivos centros ordenadores, como loilustra la tabla 1.

Lo anterior es consecuente con la presencia recurrente de estos quincecentros ordenadores en los diferentes bloques regionales propuestos. En estecaso, el ejercicio consistió en la agrupación de los bloques regionales según elnúmero de veces que sus departamentos conformantes aparecen en los 56casos indicados. Se observa que los bloques regionales aparecen en una escalaque va de una a ocho presencias, sin que se presenten en los rangos de 4, 5 y7 veces, respectivamente. En la última fila del cuadro 1 se indica la presenciade las Entidades Territoriales Indígenas-ETI, las cuales continúan aún pordefinirse.

El ejercicio muestra que los centros metropolitanos de Bogotá y Caliregistran ocho presencias, frente a seis de Barranquilla, Bucaramanga yMedellín; tres para Ibagué, Neiva y Pereira; dos para Villavicencio,Barrancabermeja y Popayán y; solamente uno para Manizales, Santa Marta,Florencia, Buenaventura y Pasto.

La tabla 2 muestra la conformación de las quince (15) unidades regiona-les derivadas de los ordenamientos anteriores, vista en función del númerode regiones, Centros ordenadores, jerarquía y departamentos adscritos. Elesquema parece en extremo sencillo, pero podría contribuir a reducir losruidos cuando se trata de elaborar complicadas fórmulas para tratar de pro-bar el funcionamiento socio territorial en función de modelos pesadamentepositivistas.

Si se tratara de observar el orden jerárquico que modelos rango tamañohan establecido para el sistema urbano colombiano, resulta claro que Cali,que aparece en jerarquía inferior a Medellín, asciende al segundo orden, mien-tras se conserva el orden Barranquilla-Bucaramanga, pero desaparecen orde-nes jerárquicos en los que aparecían ciudades como Cartagena y Cúcuta, cen-tros que están supeditados por Barranquilla y Bucaramanga, respectivamente.El asunto es que el orden jerárquico resultante deriva del papel que los cen-tros parecen tener con respecto a áreas concretas en las cuales operan comoordenadores.

Un hecho particular se presenta en el caso Pasto-Popayán, cuya capacidadfuncional se ha venido equilibrando durante la última década, al punto que

Page 16: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

118

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

Tabla 1. Bloques regionales propuestos y centros ordenadores

Nº BLOQUE REGIONAL CentroOrdenador

1 Caribe: Córdoba, Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Atlántico, Guajira, BarranquillaSan Andrés y Providencia

2 Nororiental: Norte de Santander y Santander Bucaramanga3 Noroccidente: Antioquia, Chocó, Caldas, Risaralda y Quindío Medellín4 Suroccidente: Valle del Cauca, Cauca y Nariño Cali5 Amazonia: Amazonas, Caquetá, Putumayo, Vaupés, Guainía y Guaviare Florencia6 Orinoquia: Meta, Vichada, Casanare y Arauca Villavicencio7 Central: Boyacá y Cundinamarca Bogotá8 Andina Sur: Huila y Tolima Ibagué9 Nororiental: Norte de Santander, Santander, Arauca y Casanare Bucaramanga10 Central: Chocó, Risaralda, Quindío, Caldas y Valle del Cauca Cali11 Magdalena Medio: Antioquia, Caldas, Cundinamarca, Boyacá, Santander, Barrancabermeja

Cesar, Sucre, Magdalena y Bolívar12 Sur: Putumayo, Nariño, Cauca, Caquetá, Huila y Tolima Indefinido13 Surcolombiana: Huila, Caquetá, Putumayo, Nariño, Cauca Cali

y Valle del Cauca14 Central: Boyacá, Casanare, Meta y Cundinamarca Bogotá15 Alto Magdalena: Tolima, Huila, Occidente de Cundinamarca, Ibagué-Neiva

Oriente de Caldas, Puerto Boyacá16 Occidente: Nariño, Cauca, V. del Cauca, Quindío, Risaralda, Caldas, Medellín

Ant., Chocó, Córdoba, Santander y N. de S.17 Sur Sur: Putumayo, Nariño y Cauca. Pasto18 Sur norte: Tolima, Huila, Caquetá Indefinido19 Central: Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Meta, Tolima Bogotá20 Centro Occidente: Risaralda, Chocó, Quindío, Caldas Pereira21 Eje Cafetero: Norte del Valle, Risaralda, Quindío, Caldas, Tolima Pereira22 Litoral Pacífico: Chocó, Occidente del Valle del Cauca, Occidente del Buenaventura

Cauca y Occidente de Nariño23 Córdoba, Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Atlántico, Guajira, Barranquilla

San Andrés y Providencia (Lebret, 1958)24 Chocó, Antioquia, (Lebret 1958) Medellín25 Valle del Cauca, Caldas, Risaralda, Quindío (Lebret 1958) Cali26 Cauca, Nariño, Putumayo, Caquetá, Guaviare, Vaupés, Guainía, Popayán

Amazonas (Lebret 1958)27 Cundinamarca, Boyacá, Meta, Tolima, Huila, Casanare, Vichada Bogotá

(Lebret 1958)28 Santander, Norte de Santander (Lebret 1958) Bucaramanga29 Costa Atlántica: Córdoba, Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Atlántico, Barranquilla

Guajira, San Andrés y Providencia (DNP 1969)30 Noroccidental: Chocó, Antioquia (DNP 1969) Medellín

Page 17: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

119

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

31 Central Occidental: Caldas, Risaralda, Quindío (DNP 1969) Pereira32 Sur Occidental: Valle del Cauca, Cauca, Nariño (DNP 1969) Cali33 Magdalena Medio: Caldas, Antioquia, Bolívar, Cesar, Santander, Barrancabermeja

Cundinamarca, Boyacá (DNP 1969)34 Nor Oriental: Norte de Santander, Santander (DNP 1969) Bucaramanga35 Central: Boyacá, Cundinamarca, Tolima, (DNP 1969) Bogotá36 Sur Central: Huila, Putumayo (DNP 1969) Neiva37 Nororiental. Magdalena, Cesar, Guajira (DNP 1976) Santa Marta38 Noroccidental: Atlántico, Magdalena, Bolívar, Córdoba (DNP 1976) Barranquilla39 Antioqueña: Antioquia, Chocó (DNP 1976) Medellín40 Occidental: Valle del Cauca, Cauca, Nariño (DNP 1976) Cali41 Oriental: Norte de Santander, Santander, Arauca, Casanare (DNP 1976) Bucaramanga42 Centro Occidental: Huila, Caquetá, Putumayo (DNP 1976) Neiva43 Central: Cundinamarca, Boyacá, Meta (DNP 1976) Bogotá44 Caldense: Caldas, Risaralda, Quindío, Tolima (DNP 1976) Manizales45 Santanderes: Norte de Santander, Santander (Bernal 1979) Bucaramanga46 Cundiboyacense: Boyacá, Cundinamarca (Bernal 1979) Bogotá47 Tolima Grande: Tolima, Huila (Bernal 1979) Ibagué48 Suroeste: Cauca, Nariño (Bernal 1979) Popayán49 Occidente: Valle del Cauca, Caldas, Risaralda, Quindío (Bernal 1979) Cali50 Noroeste: Chocó, Antioquia (Bernal 1979) Medellín51 Caribe: Córdoba, Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Guajira, Atlántico Barranquilla

(Bernal 1979)52 Caribe: Córdoba, Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, Guajira, Atlántico Barranquilla

(IGAC 1986)53 Occidente: Chocó, Valle del Cauca, Cauca, Nariño (IGAC 1986) Cali54 Andina: N. de S., Santander, Boyacá, C/marca, Antioquia, Caldas, Bogotá

Risaralda, Quindío, Tolima, Huila (IGAC 1986)55 Orinoquia: Arauca, Casanare, Vichada, Meta (IGAC 1986) Villavicencio56 Amazonia: Putumayo, Caquetá, Guaviare, Guainía, Vaupés,

Amazonas (IGAC 1986) Florencia57 Entidades Territoriales Indígenas: Por definir

Page 18: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

120

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

Pasto muestra hoy una dinámica mayor a la de la centenaria capital caucana;un caso similar, ya indiscutible, es el relacionado con la emergencia funcionalde Pereira, que en la actualidad sobrepasa la capacidad de Manizales, ciudadque hasta hace menos de una década se preciaba de ser el corazón de la vidaeconómica, social y cultural del Eje Cafetero; es evidente igualmente la emer-sión de Florencia como centro ordenador amazónico; de Barrancabermejacon relación al Magdalena Medio; o de Villavicencio con respecto a laOrinoquia. Llama la atención la presencia de Santa Marta, que en algúnmomento, y no sin razones concretas empíricamente visibles en el aparente-mente homogéneo bloque Caribe, aparece como ordenador funcional de losdepartamentos de Magdalena, Cesar y Guajira.

Un hecho nuevo, sobre el cual se adelanta un proceso intensivo durantelos últimos cinco años de manera sistemática, es el relacionado con la pro-moción de la Región del Litoral Pacífico Colombiano, liderada por la Fede-ración de Municipios del Litoral Pacífico Colombiano-FEDEMPACÏFICO,con sede en Buenaventura. Se trata de la emergencia del deseo justificado delas comunidades afrodescendientes, históricamente marginadas y excluidasde los beneficios reales de los procesos de acumulación, progreso y desarrolloeconómico que lideran los grupos dominantes del Valle del Cauca, Cauca yAntioquia. Como ninguna otra región en el país, el Pacífico expresa la pre-sencia clara de la etnia afrodescendiente, que representa más del 70% de supoblación total, seguida por la población mestiza e indígena.

La gráfica 1 muestra, de manera esquemática, la disposición de las unida-des regionales resultantes en el país. Como se observa, la unidad liderada porSanta Marta se inserta en el bloque mayor Caribe; la unidad liderada porBuenaventura se inserta en el bloque mayor Pacífico; el Magdalena Medio,liderado por Barrancabermeja, se inserta entre los bloques mayores del Cari-be, Nororiente, Noroccidente, Central y Eje Cafetero. Una condición simi-lar se presenta en el caso del Alto Magdalena, caso en el cual el Tolima sedesprende de la región mayor, central, y el Huila de la región Centro sur, quecomparte en propuestas con Caquetá y Putumayo, departamento éste últi-mo que es más definidamente amazónico.

Solamente como un ejercicio más en la búsqueda de aproximaciones alos reordenamientos regionales en Colombia, se optó por aplicar al registrode las 56 agrupaciones indicadas en el cuadro 1, el modelo Pathfinder8. “Elalgoritmo Pathfinder se aproxima mucho a una escala multidimensional, enla que sus hallazgos están basados en parte en la teoría de los grafos. Enesencia, el algoritmo procesa una relación de proximidad, la cual describe la

Page 19: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

121

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

Tabl

a 2.

Rec

urre

ncia

ord

enad

ora

regi

onal

segú

n re

gion

es y

cen

tros

ord

enad

ores

R1

R2

R3

R6

R8

Cal

dens

e: C

alda

s, R

isara

lda,

Ara

uca,

Cas

anar

e,To

lima,

Hui

laC

arib

e: C

órdo

ba, S

ucre

,B

oyac

á y

Cun

dina

mar

caQ

uind

ío, T

olim

aV

icha

da, M

eta

Ibag

uéB

olív

ar, M

agda

lena

, Ces

ar,Bog

otá

Man

izales

Villavicen

cio

Atlá

ntic

o, G

uajir

a,Sa

n A

ndré

s y P

rovi

denc

iaBarranq

uilla

Mag

dale

na, C

esar

, Gua

jira

Mag

dale

na M

edio

:H

uila

, Caq

uetá

,N

oror

ient

al: N

orte

de

Cho

có, V

alle

del

Cau

ca,

Santa M

arta

Ant

ioqu

ia, C

alda

s,Pu

tum

ayo

Sant

ande

r y S

anta

nder

Cau

caC

undi

nam

arca

, Boy

acá,

Neiva

Buc

aram

anga

Cali

Sant

ande

r, C

esar

, Suc

re,

Mag

dale

na y

Bol

ívar

Barranc

abermeja

Am

azon

ia: P

utum

ayo,

Cau

ca, N

ariñ

oE

je C

afet

ero:

Nor

teA

ntio

quia

, Cho

có, C

alda

s,C

aque

tá, G

uavi

are,

Gua

inía

,Po

payá

nde

l Val

le, R

isar

alda

,R

isar

alda

y Q

uind

íoV

aupé

s, A

maz

onas

Qui

ndío

, Cal

das,

Tolim

aM

edellín

Floren

cia

Pereira

Sur S

ur: P

utum

ayo,

Nar

iño

y C

auca

Pasto

Lito

ral P

acífi

co:

Cho

có, O

ccid

ente

del

Val

lede

l Cau

ca, O

ccid

ente

del

Cau

ca, O

ccid

ente

de N

ariñ

o.Bue

naventur

aR

= R

ecur

renc

ia se

gún

núm

ero

de p

rese

ncia

de

depa

rtam

ento

s y c

entr

os o

rden

ador

es.

Page 20: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

122

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

Tabl

a 3.

Cen

tros

Ord

enad

ores

segú

n de

part

amen

tos a

dscr

itos

y re

gion

es re

sulta

ntes

NÚM

ERO

CENTRO

JERAR-

DEPA

RTAM

ENTOS ADSC

RIT

OS

REGIÓ

NQUÍA

1.C

entr

alB

OG

OT

Á1

Bog

otá,

Boy

acá,

Met

a, C

undi

nam

arca

, Tol

ima

2.Pa

cífic

o Su

rC

ALI

1V

alle

del

Cau

ca, C

auca

, Nar

iño

3.Pa

cífic

o N

orte

ME

DE

LLÍN

2A

ntio

quia

, Cho

có4.

Car

ibe

BA

RR

AN

QU

ILLA

2C

órdo

ba, S

ucre

, Bol

ívar

, Mag

dale

na, C

esar

, Atlá

ntic

o, G

uajir

a, S

an A

ndré

sy

Prov

iden

cia

5.N

oror

ient

eB

UC

AR

AM

AN

GA

2N

orte

de

Sant

ande

r, Sa

ntan

der,

( Más

: Ara

uca,

Cas

anar

e)6.

Cen

tro

Sur o

IBA

GU

É3

Tolim

a, H

uila

(Más

: Occ

iden

te d

e C

undi

nam

arca

, Ori

ente

de

Cal

das,

Pue

rto

Alto

Mag

dale

naB

oyac

á, In

zá y

Bel

alcá

zar)

7.C

entr

o Su

rN

EIV

A3

Hui

la, C

aque

tá, P

utum

ayo

Am

azon

ia8.

Cen

tral

PER

EIR

A3

Nor

te d

el V

alle

, Ris

aral

da, Q

uind

ío, C

alda

s, C

hocó

9.O

rinoq

uia

VIL

LAV

ICE

NC

IO4

Met

a, C

asan

are,

Ara

uca,

Vic

hada

10.C

entr

o Su

rPO

PAYÁ

N-P

AST

O4

Cau

ca, N

ariñ

o, P

utum

ayo

Am

azon

ia11

.Mag

dale

naB

AR

RA

NC

AB

ERM

EJA

4Su

r de

Bol

ívar

, Sur

orie

nte

antio

queñ

o, O

rien

te C

alde

nse,

Pue

rto

Boy

acá,

Med

ioSu

rocc

iden

te d

e C

undi

nam

arca

, Occ

iden

te d

e Sa

ntan

der,

Sur d

e C

esar

.12

. Eje

Caf

eter

oM

AN

IZA

LES

5C

alda

s, R

isara

lda,

Qui

ndío

(Más

: Occ

iden

te d

el T

olim

a y

nort

e del

Val

le d

el C

auca

)13

.Car

ibe

Nor

teSA

NT

A M

AR

TA

5M

agda

lena

, Ces

ar, G

uajir

a14

.Am

azon

iaFL

OR

EN

CIA

5C

aque

tá, G

uavi

are,

Gua

inía

, Vau

pés,

Am

azon

ia, P

utum

ayo

15.L

itora

l Pac

ífico

BU

EN

AVE

NT

UR

A5

Cho

có, O

ccid

ente

del

Val

le d

el C

auca

, Occ

iden

te d

el C

auca

, Occ

iden

te d

e N

ariñ

o

Page 21: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

123

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

distancia y proximidad de asociación entre todos los elementos listados porlos expertos en el respectivo dominio. El resultado de un análisis Pathfinderes una representación estructurada de un conjunto de interrelaciones de to-dos los elementos del dominio en cuestión. Cada concepto es representadocomo un nodo, y la presencia de un vínculo entre dos nodos indica que laproximidad o su interrelación se encuentra por encima de un valor mínimo.El vínculo más corto entre dos nodos, el más cerrado en términos de surelacionamiento en la representación conceptual de los expertos en el domi-nio”9. Para el caso, se acudió a la relación de los 32 departamentos colombia-nos, más el Distrito Capital, Bogotá, estableciendo solamente el número deveces que aparecen vinculados en una misma propuesta regional. De maneraque se trabajó con una matriz de doble entrada de 33 columnas por 33 filas,en cuyos cuadrantes de intersección se encuentra el número de veces queestos se interrelacionan.

Al procesar la matriz, el modelo arroja una configuración, gráfica 2, en laque al invertir el sentido de la misma, se obtiene una aproximación a laconfiguración espacial real del territorio colombiano, con los diferentesagrupamientos regionales identificados, pero al mismo tiempo los vacíosfuncionales entre los centros ordenadores y entre las regiones mismas.

Para verificar la pertinencia del ejercicio, se aplicó la prueba de coheren-cia, “… la cual refleja la consistencia de los datos. La coherencia de un con-junto de datos de proximidad está basada sobre el presupuesto de que elreracionamiento entre un par de ítems puede ser predecido por las relacionesde los ítems con los otros ítems en el conjunto”10. En efecto, la coherencia enel ejercicio se sitúa en 0.84, lo cual, según las condiciones para la aplicacióndel modelo, es concordante con la métrica que usa, que es la métrica deMinkoswsky, según la cual, la distancia entre dos nodos no conectados direc-tamente es calculada y, en este caso, corresponde solamente al análisis dedatos de proximidad, es decir, del número de veces que los departamentosaparecen relacionados o acompañados entre sí.

Se identifican las siguientes agrupaciones regionales, con sus respectivosnodos, o departamentos que los conforman:

1 Caribe: Córdoba, Bolívar, Sucre, Guajira, Magdalena, Cesar, San An-drés y Providencia y Atlántico.

2 Eje Cafetero: Caldas, Risaralda y Quindío.3 Amazonia: Caquetá, Amazonas, Guaviare, Guainía, Putumayo y

Vaupés.

Page 22: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

124

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

4 Nororiente: Norte de Santander, Santander, Casanare, Arauca, Vichada.5 Orinoquia: Arauca, Casanare, Meta, Vichada6 Central: Bogotá, Meta, Boyacá, Cundinamarca, Huila y Tolima.7 Central Sur: Tolima, Huila, Caquetá8 Sur: Valle del Cauca, Cauca, Nariño9 Pacífico Norte: Antioquia, Chocó

Figura 1. Las aristas de un modelo regional para armar

1A: Bogotá 1B: Cali2A: Medellín 2B: Bucaramanga 2C: Barranquilla3A: Manizales 3B: Ibagué 3C: Neiva4A: Villavicencio 4B: Pasto-Popayán 4C: Barrancabermeja5A: Buenaventura 5B: Florencia 5C: Leticia 5D: Santa Marta

Page 23: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

125

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

Aún así, desprovisto de la recurrente pesada carga de variables cuantitativasque acompañan los modelos funcionales, la aplicación del Modelo Pathfinderno permita observar la presencia de agrupaciones como las que se proponenalrededor de centros ordenadores como Buenaventura, Barrancabermeja,Florencia, y Santa Marta, dado que las relaciones se establecen con base enunidades departamentales, lo que sugiere la necesidad de buscar aplicacionesque permitan la inclusión de relaciones más detalladas entre los centros ordena-dores y sus respectivas áreas de interrelación, más que de influencia.

De todas maneras el modelo si permite identificar puntos de tensiónevidentes, como los que se manifiestan en la relación santanderes, Arauca,Casanare; o la discontinuidad funcional observada entre Antioquia, Córdo-ba, Chocó, que se vincula al vector Antioquia-Córdoba, que ha estado pre-sente en las tentativas de las propuestas antioqueñas de sustraer a éste últimodepartamento, lo cual crearía un verdadero cisma en el regionalismo Caribe.Otros dos puntos de tensión, que corresponden a la realidad colombiana,son los generados en los conjuntos Cauca, Valle del Cauca, Nariño y Tolima,Huila, Caquetá, respectivamente, dada la presencia de otros agrupamientosque compiten allí en la convocatoria de estos mismos departamentos.

¿Hacia dónde va la regionalización en colombia?Por el ambiente que se percibe en la discusión actual sobre el asunto, en

los estrados parlamentarios y en los escenarios corporativos, acompañadosestos últimos por sectores intelectuales afectos a los experimentos adminis-trativos alternativos que se dan en el Distrito Capital en la actualidad, peropoco diferenciados de los propósitos de administraciones anteriores y menosaún criticados, la presente legislatura podría dejar pasar el recurrente debatejurídico, enrarecido por la atmósfera fiscalista, disfrazada en el debate de com-petencias, de los viejos y nuevos reformadores de derecha y de centro izquier-da, para finalmente lograr que se aborte el proyecto de Ley Orgánica deOrdenamiento Territorial.

La razón de fondo no parece en realidad tan confusa, se trata del triunfodel departamentalismo y de los argumentos proglobalizadores del discursoque habla con lujo de detalles y exceso retórico y figurado, de “regiones gana-doras” y “regiones perdedoras”, que es el mismo que resulta más funcional almodelo neoliberal y que, a diferencia de lo que se argumenta en contrariopor el nacionalismo burgués y uno que otro izquierdista despistado, no ga-rantiza la defensa de la territorialidad nacional ni mucho menos de la cons-trucción de nación ni de un proyecto territorial nacional.

Page 24: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

126

Región: O el retorno del debate sobre la cuestión nacional en los países dependientes

No es que sea infortunado que no se produzca la Ley Orgánica de Orde-namiento Territorial, al contrario, siendo consecuentes con la necesidad dedefender la tarea de construcción del proyecto territorial nacional, el paísdeberá esperar la generación de otras condiciones políticas, en las que la socie-dad colombiana pueda superar las causas estructurales que en el pasado ypresente, e incluso en el futuro inmediato, han impedido asumir un reto detal magnitud y exigencia.

El recorrido realizado para el análisis de las recurrentes propuestas de or-ganización regional en Colombia, inspirado más en las tareas pendientes deconstrucción de una sociedad de nueva democracia que en los remedos ac-tuales de regionalización, estarán alimentadas por toda la reflexión que aquíse relata, y a la cual sin duda podrá contribuir de manera vigorosa la Geogra-fía Colombiana, desde su desarrollo teórico, pero sin duda también desde suquehacer práctico en los escenarios de la discusión política y técnica.

Figura 2. La configuración regional colombiana vista desde el modelo Pathfinder.

Page 25: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

127

MIGUEL ANTONIO ESPINOSA RICO

BibliografíaBianchi, Laurent. 1993. La Cuestión Regional en Colombia: El caso de los

Espacios Intersticiales. Bogotá. Universidad de los Andes. Documentode Trabajo.

Espinosa, Miguel Antonio. 1997. Región: De La Teoría A La ConstrucciónSocial". Ibagué. Atlas, editorial. 1997. ISBN: 958-96097-1-6

Espinosa, Miguel Antonio. 1997. Regionalización y Ordenamiento Territo-rial: O la encrucijada del Proyecto Territorial Nacional. Santafe de Bogo-tá, D.C. En: BOLETÍN, Revista de la Sociedad Geográfica de Colom-bia, No. 133 de octubre de 2002. ISSN: 0037-8577

Espinosa, Miguel Antonio. 2000. Región y Ordenamiento Territorial: de laDesorientación Teórica al Sofisma Técnico. En: XVI CONGRESO CO-LOMBIANO DE GEOGRAFÍA "Por La Construcción De Un ProyectoTerritorial Nacional". Cali, Agosto De 2000. Universidad Del Valle, Ed.

Lenin, Ilich Vladimir Obras Completas. Ediciones en Lenguas Extranjeras.Pekín, 1971

Mao Tse Tung. 1968. Obras Escogidas. Pekín. Ediciones en Lenguas Extranjeras.Montañez, Gustavo Y Delgado, Ovidio. 1998 El Proyecto Territorial Na-

cional. En: Trocha Nacional Ciudadana. Bogotá, D.C. Intergráficas. Ed.Popov, P. I. ; Litoshenko, L. N. et al. 1972. Metodología de la Planificación.

Aportes soviéticos a la planificación. Madrid. Talleres Gráficos Monta-ña, Ed.

SCHAVANEVELDT, W. Roger. 1990. Pathfinder Associative Networks.Studies in Knowledge Organization. Norwood, New Jersey. AblexPubdlishing Corporation, Ed.

www.syukhtun.com/KAG_pathfinder.htm

Notas1 Ponencia presentada al 2° Ciclo Anual de Conferencias de Geografía REGIÓN, ESPACIOY TERRITORIO. Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Ciencias Humanas,Departamento de Geografía. Santa fe de Bogotá, D.C. 28 – 29 de Octubre de 2004.2 Grupos YUMA y ARLI de Investigación sobre la Cuestión Regional en el Alto y MedioMagdalena. Investigador Invitado del Centro de Estudios Regionales de la Universidad delTolima, CERE-UT.3 Ver entre otros: 1) Región de la Teoría a la Construcción Social (1997), 2) Regionalización yOrdenamiento Territorial: O la encrucijada del Proyecto Territorial Nacional. Santa fe de Bogotá,D.C. En: BOLETÍN, Revista de la Sociedad Geográfica de Colombia, No. 133 de octubre de2002. 3) Región y Ordenamiento Territorial: De la desorientación teórica al sofisma técnico. En:XVI CONGRESO COLOMBIANO DE GEOGRAFÍA "Por la construcción de un proyectoterritorial nacional". Cali, agosto de 2000. Universidad del Valle, Ed.

Page 26: Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de … › 1534 › 6 › 05CAPI04.pdf · 2011-02-09 · Segunda Parte: Problemas regionales de Colombia: casos de estudio

4 Vladimir Ilich Lenin. Obras Completas. Ediciones en Lenguas Extranjeras. Pekín, 1971.5 Popov, I.P.; Litoshenko, N.I. (1972), Metodología de la Planificación. Aportaciones soviéticas.Madrid. Talleres Gráficas Montaña, Ed.6 Mao Tse Tung (1968), Obras Escogidas. Pekín. Ediciones en Lenguas Extranjeras.7 Es ya conocido el tragicómico episodio en el cual, al amparo aparente de las disputas entre laspequeñas oligarquías de Manizales, Pereira y Armenia, las poderosas oligarquías de Antioquiay el Valle del Cauca, propiciaron el toque final para la desmembración del Gran Caldas,formalizada en 1966, con la creación de los nuevos departamentos de Risaralda y Quindío.Hasta 1965 Caldas era el primer productor nacional de café y conducía, a su voluntadmayoritaria, la Federación Nacional de Cafeteros que era el mayor grupo económico del país,mientras Antioquia y Valle ocupaban el segundo y tercer puesto, respectivamente. A partir dela creación de los nuevos departamentos de Risaralda y Quindío, Antioquia pasó a ocupar elprimer puesto en la producción nacional, Valle el segundo y Caldas apenas el tercero. Elhecho de fondo, ocultado por mucho tiempo, fue la jugada maestra que puso en manos deAntioquia el manejo hegemónico del gremio cafetero por el resto de décadas a partir delepisodio comentado.8 Ver: Schavaneveldt, W. Roger (1990), Pathfinder Associative Networks. Studies in KnowledgeOrganization. Norwood, New Jersey. Ablex Publishing Corporation, Ed.9 Ver: www.syukhtun.com/KAG_pathfinder.htm10 Ver: Schavaneveldt, W. Roger (1990), Pathfinder Associative Networks. Studies inKnowledge Organization. Norwood, New Jersey. Ablex Publishing Corporation, Ed.(Capítulo 1).