Esto es un relato, sobre un hombre despreciable, Marco y sobre un mujer

maltratada, Juana.

Cuando eran jóvenes, Marco y Juana, eran muy buenos amigos, ambos se

gustaban, pero ninguno lo sabía.

Se hicieron más mayores y empezaron a salir, se trataban bien y se querían

mucho.

Pero, transcurrido un tiempo, Marco cada vez iba estando menos tiempo con

Juana, le iba prohibiendo ver a sus amigas. Llegó un momento en el que Marco

estaba con sus amigos por ahí fuera y Juana se quedaba sola en casa. La

empezó a maltratar y le solía decir: “¡Si no eres mía, no serás de nadie!”

Todo se fue agravando, hasta que un día, en una discusión, Marco mató a

Juana. Fue a la cárcel.

Y sus amigos sólo le repetían:

No dejes escapar lo que puedes perder,

aprecia lo que tienes antes de que sea tarde, joder

no supiste valorar lo que tuviste

has de saber: si no hubieses hecho el idiota, todo sería igual que ayer.

Marco se corrompió y lo acabó perdiendo todo.