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Marzo de 2018

Cinco claves en hidratación Memoria de resultados

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ÍNDICE

Justificación ................................................................................................................. 2

Desarrollo de la campaña ............................................................................................ 3

Objetivos de la campaña ............................................................................................. 4

Materiales de la campaña ............................................................................................ 4

Resultados de la encuesta sobre hábitos de hidratación .............................................. 5

Objetivos ............................................................................................................... 5

Material y métodos ............................................................................................... 5

Resultados ............................................................................................................. 6

Conclusiones ......................................................................................................... 14

Anexo. Encuesta sobre hábitos de hidratación ............................................................ 16


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JUSTIFICACIÓN

El agua es un nutriente esencial, ya que ejerce múltiples funciones en el organismo, tanto como

componente estructural fundamental, como medio en el que se llevan a cabo las diferentes

reacciones enzimáticas de las células, sin olvidar su función de transporte ni su papel en la

termorregulación.

En términos generales podemos decir que casi dos tercios del peso de una persona es agua. Una

persona de 70 Kg contendría alrededor de 38 l de agua, de los cuales 23 a 26 litros

corresponderían al líquido intracelular, 7,5 l al intercelular y cerca de 4 l al volumen intravascular

de la sangre. No obstante, el contenido corporal de agua varía en función de la edad, de manera

que en el nacimiento es de aproximadamente un 80%, y va disminuyendo a lo largo de la vida

hasta alcanzar el 65% en la vejez.

En nuestro organismo no existe un mecanismo eficiente de almacenamiento de agua, por lo

que debemos aportar constantemente líquidos para mantener los niveles estables y compensar

las pérdidas que se producen a través de la orina, el sudor o la respiración. En nuestra dieta, del

total de agua que ingerimos, cerca de un 20%‐30% es suministrado por alimentos sólidos,

mientras que el resto, un 70%‐80% es aportado por líquidos y bebidas.

Son múltiples los factores que inciden sobre las necesidades de ingesta de líquidos. Los más

trascendentes son el nivel de actividad física y las condiciones climáticas. De tal forma, en

condiciones extremas de calor y desempeño de ejercicio físico intenso, las necesidades hídricas

diarias pueden incrementarse de forma significativa, siendo aconsejable en ocasiones consumir

bebidas con electrolitos (sodio, potasio, cloro).

Un estado óptimo de hidratación es fundamental para alcanzar un buen estado de salud y

bienestar. Una disminución ligera de los niveles de hidratación puede determinar trastornos

que van desde dolores de cabeza, disminución en el rendimiento físico y mental, confusión,

calambres musculares, deterioro del funcionamiento renal y, en casos de deshidratación

severa, incluso provocar la muerte.


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La sed no es un indicador fiable de la necesidad de ingerir líquidos, ya que aparece cuando se

produce un aumento del 2 al 3% de la osmolalidad extracelular, es decir, cuando ya se está

ligeramente deshidratado. Por tanto, hay que insistir en que la hidratación debe ser siempre

constante, y no limitarse en exclusiva a cuando aparezca la sed.

Es necesario por tanto que la población conozca las pautas para una adecuada hidratación,

tanto en las cantidades a consumir como en la forma de hidratarse. Además debe prestarse

especial atención a los grupos de población que tienen mayor riesgo de sufrir una

deshidratación durante el verano, como son mujeres embarazadas, niños pequeños, ancianos

y personas que realizan ejercicio físico o una actividad laboral expuestos a temperaturas altas.

El farmacéutico ejerce un papel fundamental para informar a la población de la importancia de

estar adecuadamente hidratados, e indicar los requisitos diarios de hidratación de cada usuario.

Por este motivo, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, a través de su

Vocalía Nacional de Farmacéuticos en la Alimentación, lleva a cabo anualmente desde el año

2009 y durante los meses de mayor calor una campaña para incidir en la importancia de la

hidratación, la campaña “Cinco claves en hidratación”.

Este año la campaña ha contado con la colaboración de Aquarius, Coca‐Cola Iberia y Font‐Activ

Forte.

DESARROLLO DE LA CAMPAÑA

La campaña se ha llevado a cabo entre los meses de junio a septiembre de 2017, participando

de forma voluntaria y gratuita todas aquellas farmacias comunitarias interesadas.

Los farmacéuticos han tenido a su disposición un informe técnico “Pautas de hidratación con

bebidas con sales minerales” que recogía los principales puntos en los que hay que prestar

especial atención, en función de la edad del usuario y su situación fisiológica, de forma que el

farmacéutico pudiera hacer recomendaciones individualizadas sobre hidratación en base a las

características personales del usuario.


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Los farmacéuticos comunitarios informaron durante la campaña a los usuarios acerca de las

necesidades de consumo de líquidos, para lo cual se podían apoyar en un folleto con cinco

consejos para garantizar una buena hidratación.

Igualmente se grabó un videocomunicado con una serie de mensajes para informar sobre la

forma de hidratarse, y que fue difundido a través de los diferentes medios de comunicación del

Consejo General.

Finalmente se llevó a cabo un estudio desde las farmacias comunitarias para conocer los

hábitos de hidratación de una serie de usuarios seleccionados al azar, para lo cual se elaboró

una encuesta por parte del Comité Científico de la Vocalía Nacional de Alimentación, y cuyos

datos se presentan en este informe.

OBJETIVOS DE LA CAMPAÑA

− Informar a los farmacéuticos sobre las necesidades diarias de líquidos en función de la

persona y de su situación fisiológica.

− Concienciar a la población general en la importancia que tiene la hidratación para el

mantenimiento de un buen estado de salud en general, y para la prevención y/o control de

enfermedades.

− Conocer los hábitos de hidratación de los usuarios de la farmacia comunitaria mediante una

encuesta realizada por los farmacéuticos.

MATERIALES DE LA CAMPAÑA

− Informe técnico “Pautas de hidratación con bebidas con sales minerales”, disponible en el

espacio web de la campaña en www.portalfarma.com.

− Folleto para usuarios.


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− Videocomunicado con consejos en hidratación.

− Encuesta a usuarios.

RESULTADOS DE LA ENCUESTA SOBRE HÁBITOS DE HIDRATACIÓN

Objetivos

− Conocer los hábitos de hidratación de los usuarios de la farmacia comunitaria.

− Identificar personas que pudieran tener una hidratación inadecuada.

Material y métodos

Se llevó a cabo una breve encuesta entre los usuarios de las farmacias comunitarias por parte

de los farmacéuticos. La recogida de datos fue anónima en todo momento, tanto del usuario

encuestado como del farmacéutico encuestador, y la participación en el estudio fue voluntaria.

La encuesta se incluye como anexo de este informe.

Una vez recogidos los datos, los farmacéuticos grababan las respuestas recibidas en un

cuestionario on‐line disponible en www.portalfarma.com.

Los farmacéuticos participantes en el estudio dispusieron desde el 15 de junio al 15 de

septiembre de 2017 para realizar las encuestas a la población e introducir los datos recogidos

en el cuestionario on‐line. Se recogieron un total de 1.079 encuestas en este periodo.

Una vez recopilada toda la información, la base de datos fue analizada por parte el Consejo

General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.


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Resultados

De las 1.079 personas encuestadas, el 37,07% fueron hombres y el 62,93% mujeres. La edad

media de los encuestados fue de 49,69 años.

Se desgranan a continuación las respuestas dadas por los usuarios a cada una de las preguntas:

Se preguntó al usuario las razones que él consideraba fundamentales para hidratarse, dándole

seis posibles opciones de las que el usuario podría elegir una o varias. Las opciones fueron

Porque tengo sed; Porque tengo una enfermedad y me beneficia; Porque debo cuidarme;

Porque quiero cuidar mi piel; Porque tomo un medicamento que me hace beber más; Para

recuperarme después del ejercicio. Los resultados se incluyen en la imagen 1.

Imagen 1. Motivo por el que el usuario suele beber

El 76,36% de los encuestados consumían siempre las mismas bebidas, mientras que el 23,64%

consumían diferentes tipos de bebidas.


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Imagen 2. El usuario toma siempre las mismas bebidas

Con respecto al consumo diario de líquidos, el 27,36% afirmaba consumir menos de 1,5 l de

líquidos diarios, el 51,13% entre 1,5 y 2 l, y el 21,51% más de 2 l diarios. Analizando los datos por

sexo, los varones encuestados parecían presentar un consumo algo superior al de las mujeres,

especialmente entre aquellos usuarios que bebían más de 2 l diarios (30,13% varones vs. 16,39%

mujeres).

Imagen 3. Consumo diario de líquidos por sexo

En el análisis del consumo de líquidos por edad, se comprobó que las personas a partir de 65

años presentaban unos consumos mucho menores que los encuestados más jóvenes.


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Imagen 4. Consumo diario de líquidos por edad

El 20,09% de los usuarios había perdido la sensación de sed.

Imagen 5. El usuario ha perdido la sensación de sed

El 62,26% de los usuarios encuestados decía tener siempre a mano una botella o un vaso con

algún líquido.


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Imagen 6. El usuario tiene cerca siempre un vaso o una botella de líquido

Al 22,28% de los usuarios encuestados le preocupaba beber más debido a la necesidad de tener

que ir a menudo al baño.

Imagen 7. Al usuario le preocupa beber más por tener que ir a menudo al baño

A la inmensa mayoría de los usuarios encuestados (95,52%) les parecía muy importante estar

bien hidratado, mientras que al 4,48% este hecho no les parecía significativo.


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Imagen 8. Al usuario le parece importante estar bien hidratado

El 83,51% de los usuarios encuestados se siente bien informado sobre cómo hidratarse,

mientras que el 16,49% piensa que debería recibir más información.

Imagen 9. El usuario se siente bien informado sobre cómo hidratarse

El 81,01% de los usuarios encuestados se siente bien hidratado, mientras que el 18,99% opina

que podría mejorar su hidratación.


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Imagen 10. El usuario se siente bien hidratado

Casi la totalidad de los usuarios encuestados (96,53%) consideran que el farmacéutico es un

profesional que puede informarles sobre cómo hidratarse, mientras que el 3,47% consideraban

que éste no era papel del farmacéutico.

Imagen 11. El usuario cree que el farmacéutico puede aconsejarle en hidratación

Solo el 56,88% de los encuestados beben sin esperar a tener sed, como suele recomendarse,

mientras que 43,12% no bebe líquidos hasta que no siente sed.


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Imagen 12. El usuario bebe sin esperar a tener sed

El 12,17% de los encuestados no incrementaban su consumo de líquidos en situaciones como

calor o sequedad ambiental.

Imagen 13. El usuario bebe más líquidos en caso de situaciones como calor o sequedad ambiental

Solo el 30,57% de los encuestados consumían bebidas con sales minerales en caso de ejercicio

físico con sudoración intensa.


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Imagen 14. El usuario consume bebidas con sales minerales en caso de ejercicio físico con sudoración abundante

El 88,45% de los encuestados tenían en consideración las recomendaciones que el farmacéutico

les hacía sobre cómo hidratarse.

Imagen 15. El usuario tiene en consideración las recomendaciones de su farmacéutico en hidratación


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Conclusiones

En general, las personas encuestadas (95,52%) eran conscientes de la importancia que tenía

una adecuada hidratación para su salud, y la gran mayoría consideraba que estaba bien

hidratada (81,01%) y que tenía buena información sobre cómo hidratarse (83,51%).

Con respecto a las pautas de hidratación de los usuarios, se observó que el 76,36% decían beber

siempre las mismas bebidas. No se recogieron datos sobre qué bebidas consumían los usuarios

habitualmente.

La principal causa que los usuarios esgrimían para beber era la sensación de sed (43,23% de los

encuestados), seguida por el convencimiento de la importancia que tiene la hidratación para el

cuidado de la salud (27,30%) y la recuperación tras realizar ejercicio físico (11,72%).

El 20,09% de las personas del estudio indicaban que habían perdido la sensación de sed, y el

22,28% indicaban que les preocupaba beber porque esto aumentaba la frecuencia con la que

iban al baño.

El 62,26% de los encuestados decían tener siempre a mano un vaso o una botella con agua, y el

56,88% bebía sin esperar a tener sed.

Cuando se preguntó acerca de los consumos diarios de líquidos, el 27,36% afirmaban consumir

menos de 1,5 l diarios, lo que está lejos de las recomendaciones diarias de consumo. No

obstante, no se preguntó en relación a los consumos de alimentos ricos en agua, como pueden

ser las frutas y verduras.

Los varones parecían presentar mayores cifras de hidratación, con un 30,13% de varones que

bebían más de 2 l diarios de líquidos frente al 16,39% de mujeres. Por el contrario, el 23,29% de

los varones bebían menos de 1,5 l diarios, frente al 29,77% de las mujeres. Hay que tener en

cuenta que las mujeres, por regla general, parecen presentar mayores consumos de frutas y

verduras que los varones, tal y como se ha observado en distintos estudios que se han realizado

desde el Consejo General de Farmacéuticos.


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Por otra parte, estudiando el consumo de líquidos por edades, pudo observarse que las

personas encuestadas a partir de 65 años solían mostrar un consumo mucho menor que otros

encuestados más jóvenes. Así, por ejemplo, el 47,04% de los mayores de 65 años decían

consumir menos de 1,5 l diarios de líquidos, y sólo el 11,46% consumían más de 2 l.

Un aspecto a tener en cuenta era que el 12,17% de las personas encuestadas afirmaban que no

aumentaban el consumo diario de líquidos en caso de situaciones como calor o sequedad

ambiental.

En relación a la hidratación durante el ejercicio se observó que una parte muy importante de los

encuestados (69,43%) no consumían bebidas con sales minerales al realizar ejercicio.

Por último, el farmacéutico era considerado en general como un profesional sanitario que

podría contribuir a mejorar la información de la población en hidratación. De tal manera, la

inmensa mayoría de los encuestados (96,53%) creía que el farmacéutico comunitario podría

aconsejarle en hidratación, y el 88,45% de los encuestados dice tener en cuenta las

recomendaciones del farmacéutico en hidratación.


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Anexo. Encuesta sobre hábitos de hidratación

Sexo Hombre Mujer Código postal Edad

Motivo por el que suele beber

Porque tengo sed Porque tengo una enfermedad y me beneficia

Porque debo cuidarme

Porque quiero cuidar mi piel Porque tomo un medicamento que me hace beber más

Para recuperarme después del ejercicio

¿Toma siempre las mismas bebidas? Sí No

¿Cuánto líquido bebe al día? Menos de 1,5 l Entre 1,5 y 2 l Más de 2 l

¿Ha perdido la sensación de sed? Sí No

¿Tiene cerca siempre un vaso o una botella de líquido? Sí No

¿Le parece importante estar bien hidratado? Sí No

¿Le preocupa beber más por tener que ir a menudo al baño? Sí No

¿Se siente bien informado sobre cómo hidratarse? Sí No

¿Se siente bien hidratado? Sí No

¿Cree que el farmacéutico puede aconsejarle en hidratación? Sí No

¿Bebe sin esperar a tener sed? Sí No

¿Bebe más líquidos en caso de situaciones como calor o sequedad ambiental? Sí No

¿En caso de ejercicio físico con sudoración abundante, consume bebidas con sales minerales? Sí No

¿Tiene en consideración las recomendaciones de su farmacéutico en hidratación? Sí No

Con la colaboración de:

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