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ESPECIALIZACIÓN: A veces cuando la gente escucha que estás estudiando un posgrado piensan que eres de otro planeta. Pero la realidad es que cada día es más frecuente seguir programas de este tipo para especializarse en algún área o formarse en investigación. Soy ingeniera civil industrial de la Universidad de Santiago y cursé el Magíster en Ciencias de la Ingeniería, mención Ingeniería Industrial en el mismo plantel. Este último me permitió conocer un nuevo ámbito en el que podía aplicar la ingeniería y generar aportes, tanto académicos como industriales. También me dio la oportunidad de realizar una pasantía de seis meses en Francia y obtener un doble diploma de máster con la Université de Lorraine, gracias a los convenios existentes entre ambas instituciones. Debo destacar que en la Universidad de Santiago existe la posibilidad de cursar el Máster en Ciencias de la Ingeniería en paralelo los últimos años de la licenciatura, lo cual exige un mayor esfuerzo a cambio de una ganancia de tiempo en la obtención de un título de posgrado, además de una gran satisfacción. Si bien en el máster se profundizan temas presentes en la ingeniería, no es más de lo mismo. Aprendes a tener una visión global e integradora de las asignaturas y de la ingeniería. También existe una mayor interacción con los profesores, porque las clases son más personalizadas. Aprendes, además, cómo investigar y dar a conocer tus resultados, ya sea en revistas científicas o en conferencias. Y no solo aprendes de los profesores. Existe un laboratorio destinado al trabajo en investigación que permite compartir con estudiantes que se especializan en otros temas de investigación de diversas áreas, generando espacios de trabajo colaborativo y de retroalimentación. Desde 2014, me estoy dedicando plenamente a la investigación.Ese año comencé a estudiar un Doctorado en Ingeniería en Sistemas Industriales sobre la cadena de abastecimiento de biorrefinerías en la Université de Lorraine con el apoyo de Becas Chile. En este tiempo he entendido que la investigación no tiene por qué ser siempre teórica y que existen muchos campos de aplicación. Solo basta observar a países como Alemania o Francia, que dedican una gran cantidad de recursos a la investigación para el desarrollo industrial. Depende de nosotros llegar hasta esa etapa y no quedarnos solo en la teoría. Chile necesita investigadores que creen nuevas metodologías, tecnologías, servicios y productos, que desarrollen la industria y aporten en el crecimiento de nuestro país. Esta institución imparte, en estos momentos, 41 magísteres en distintas áreas del saber. Estos también se caracterizan por su flexibilidad y por su interés por la internacionalización. Pertinencia y calidad, dos cualidades de los magísteres de la Universidad de Santiago Esta es una iniciativa conjunta de la Universidad de Santiago de Chile y “El Mercurio” para potenciar la formación de posgrados en el país. 27 DE NOVIEMBRE DE 2016 POSGRADOS Atreverse a dar el salto ANDREA ESPINOZA, ingeniera civil industrial, magíster en Ciencias de la Ingeniería, mención Ingeniería Industrial U. de Santiago. En su compromiso con la for- mación de capital humano que aporte al desarrollo del país, la Universidad de Santiago de Chile se ha preocupado de desarrollar una amplia oferta de posgrados, que no solo se enfoca en los pro- gramas de doctorado, sino tam- bién en los magísteres. En la actualidad, esta casa de estudios imparte 41 magísteres en distintas disciplinas. El 66% de estos son de carácter profesional y el 44% son académicos. Cuenta el director de Posgrado de este plantel, el Dr. Juan Mi- guel Sepúlveda Salas, que una de las principales características de estos programas es la pertinen- cia. Por eso permanentemente están evaluando cuáles son las áreas en que el país necesita más especialistas para desarrollar magísteres acordes a esos reque- rimientos. TRABAJO POR LA CALIDAD De la mano de eso —asegu- ra— la calidad es otro factor pri- mordial. “Cada uno de nuestros programas debe contar con el respaldo necesario en términos de infraestructura, cuerpo de pro- fesores y planes de estudio para asegurar que los estudiantes cum- plirán sus objetivos de formación. En este sentido, la acreditación es relevante. A la fecha, nueve de nuestros magísteres están acredi- tados por la Comisión Nacional de Acreditación y los demás se en- cuentran en proceso de autoeva- luación para analizar su situación actual y avanzar hacia futuros procesos formales de acredita- ción. Estas autoevaluaciones re- currentes tienen gran importancia, sobre todo en estos días en que el conocimiento se renueva tan rápidamente que hay que estar atento para estar al día con lo que viene”, explica el director. Relacionada con la pertinencia y la calidad de los magísteres, el Dr. Sepúlveda señala que la fle- xibilidad es una cualidad que hoy en día cumple un papel preponde- rante en el desarrollo exitoso de estos programas. Dice que, sobre todo en los magísteres profesio- nales, donde los estudiantes re- quieren que los planes de estudio estén bien planteados para poder combinar bien las actividades la- borales con las académicas. OPCIÓN DE ARTICULAR GRADOS ACADÉMICOS En este contexto, la articula- ción también surge como una posibilidad muy apreciada por los alumnos, pues les otorga la po- sibilidad de combinar de manera más eficiente la obtención de dos grados. “Esto se está dando con muy buenos resultados en Inge- niería, donde los estudiantes de pregrado pueden terminar con un grado de magíster en un tiempo más reducido. Quienes siguen un doctorado en esta área también tienen posibilidades de optar a salidas intermedias, que resultan ser muy beneficiosas para los que por un motivo u otro no pueden proseguir con sus estudios. Todos esto requiere de un cuidadoso proceso de armonización curricu- lar”, agrega. INTERNACIONALIZACIÓN La internacionalización no queda de lado en la oferta de magísteres de la Universidad de Santiago de Chile. Son varios los programas que ofrecen doble títu- lo con instituciones de educación superior en el extranjero y cada vez son más los académicos que llegan cada semestre a dictar cur- sos especiales a los estudiantes. “En este terreno, uno de los objetivos de la Universidad de Santiago es convertirse en un plantel atractivo para los profesio- nales de la región que estén en busca de especialización. Y los resultados han sido muy auspicio- sos. Hoy un buen porcentaje de nuestros estudiantes provienen de otros países atraídos por el prestigio de nuestra universidad, aportando también a los estu- diantes locales nuevas miradas a los temas en discusión. Para que cada vez sean más los estudian- tes foráneos que elijan nuestros programas, la Universidad de San- tiago está trabajando junto a la Vi- cerrectoría de Apoyo al Estudiante en entregar un mayor respaldo a quienes llegan, lo que se traduce en mejores servicios y programas de apoyo”, señala. Junto a eso, el director de Pos- grado cuenta que la universidad ofrece ayudas en financiamiento para que los estudiantes de ma- gíster puedan asistir a seminarios o congresos fuera de Santiago, presentar sus trabajos en otras organizaciones o realizar investi- gaciones. Por otra parte, la universidad a través de su Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Inno- vación y las facultades proveen de servicios e instancias especial- mente pensadas para el apoyo a la innovación y el emprendimiento basado en los resultados de las investigaciones que puedan reali- zar los estudiantes de posgrado, tanto de doctorado como de ma- gíster. PATRICIO BAEZA DR. JUAN MIGUEL SEPÚLVEDA SALAS, director de Posgrado de la Universidad de Santiago de Chile. “Chile necesita investigadores que creen nuevas metodologías, tecnologías, servicios y productos, que desarrollen la industria y aporten en el crecimiento de nuestro país”. El 66% de los programas de magíster que imparte esta casa de estudios son de carácter profesional, mientras el 44% restante es científico. PATRICIO BAEZA PATRICIO BAEZA

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  • EspEcialización:

    A veces cuando la gente escucha que estás estudiando un posgrado piensan que eres de otro planeta. Pero la realidad es que cada día es más frecuente seguir programas de este tipo para especializarse en algún área o formarse en investigación.

    Soy ingeniera civil industrial de la Universidad de Santiago y cursé el Magíster en Ciencias de la Ingeniería, mención Ingeniería Industrial en el mismo plantel. Este último me permitió conocer un nuevo ámbito en el que podía aplicar la ingeniería y generar aportes, tanto académicos como industriales. También me dio la oportunidad de realizar una pasantía de seis meses en Francia y obtener un doble diploma de máster con la Université de Lorraine, gracias a los convenios existentes entre ambas instituciones.

    Debo destacar que en la Universidad de Santiago existe la posibilidad de cursar el Máster en Ciencias de la Ingeniería en paralelo los últimos años de la licenciatura, lo cual exige un mayor esfuerzo a cambio de una ganancia de tiempo en la obtención de un título de posgrado, además de una gran satisfacción.

    Si bien en el máster se profundizan temas presentes en la ingeniería, no es más de lo mismo. Aprendes a tener una visión global e integradora de las asignaturas y de la ingeniería. También existe una mayor interacción con los profesores, porque las clases son más personalizadas. Aprendes, además, cómo investigar y dar a conocer tus resultados, ya sea en revistas científicas o en conferencias. Y no solo aprendes de los profesores. Existe un laboratorio destinado al trabajo en investigación que permite compartir con estudiantes que se especializan en otros temas de investigación de diversas áreas, generando espacios de trabajo colaborativo y de retroalimentación.

    Desde 2014, me estoy dedicando plenamente a la investigación.Ese año comencé a estudiar un Doctorado en Ingeniería en Sistemas Industriales sobre la cadena de abastecimiento de biorrefinerías en la Université de Lorraine con el apoyo de Becas Chile. En este tiempo he entendido que la investigación no tiene por qué ser siempre teórica y que existen muchos campos de aplicación. Solo basta observar a países como Alemania o Francia, que dedican una gran cantidad de recursos a la investigación para el desarrollo industrial. Depende de nosotros llegar hasta esa etapa y no quedarnos solo en la teoría.

    Chile necesita investigadores que creen nuevas metodologías, tecnologías, servicios y productos, que desarrollen la industria y aporten en el crecimiento de nuestro país.

    Esta institución imparte, en estos momentos, 41 magísteres en distintas áreas del saber.

    Estos también se caracterizan por su flexibilidad y por su interés por la internacionalización.

    Pertinencia y calidad, dos cualidades de los magísteres de la Universidad de Santiago

    Esta es una iniciativa conjunta de la Universidad de Santiago de Chile y “El Mercurio” para potenciar la formación de posgrados en el país.

    27 DE novIEMBrE DE 2016

    POSGRADOS

    Atreversea dar el salto

    AnDReA eSPinOzA, ingeniera civil industrial, magíster en Ciencias de la Ingeniería, mención Ingeniería Industrial U. de Santiago.

    En su compromiso con la for-mación de capital humano que aporte al desarrollo del país, la Universidad de Santiago de Chile se ha preocupado de desarrollar una amplia oferta de posgrados, que no solo se enfoca en los pro-gramas de doctorado, sino tam-bién en los magísteres.

    En la actualidad, esta casa de estudios imparte 41 magísteres en distintas disciplinas. El 66% de estos son de carácter profesional y el 44% son académicos.

    Cuenta el director de Posgrado de este plantel, el Dr. Juan Mi-guel Sepúlveda Salas, que una de las principales características de estos programas es la pertinen-cia. Por eso permanentemente están evaluando cuáles son las áreas en que el país necesita más especialistas para desarrollar magísteres acordes a esos reque-rimientos.

    Trabajo por la calidad

    De la mano de eso —asegu-ra— la calidad es otro factor pri-mordial. “Cada uno de nuestros programas debe contar con el respaldo necesario en términos de infraestructura, cuerpo de pro-fesores y planes de estudio para asegurar que los estudiantes cum-plirán sus objetivos de formación. En este sentido, la acreditación es relevante. A la fecha, nueve de nuestros magísteres están acredi-tados por la Comisión Nacional de Acreditación y los demás se en-cuentran en proceso de autoeva-luación para analizar su situación actual y avanzar hacia futuros procesos formales de acredita-ción. Estas autoevaluaciones re-currentes tienen gran importancia, sobre todo en estos días en que el conocimiento se renueva tan rápidamente que hay que estar atento para estar al día con lo que viene”, explica el director.

    Relacionada con la pertinencia y la calidad de los magísteres, el Dr. Sepúlveda señala que la fle-xibilidad es una cualidad que hoy en día cumple un papel preponde-rante en el desarrollo exitoso de estos programas. Dice que, sobre todo en los magísteres profesio-nales, donde los estudiantes re-quieren que los planes de estudio estén bien planteados para poder combinar bien las actividades la-borales con las académicas.

    opción de arTicular grados académicos

    En este contexto, la articula-ción también surge como una posibilidad muy apreciada por los alumnos, pues les otorga la po-sibilidad de combinar de manera más eficiente la obtención de dos grados. “Esto se está dando con muy buenos resultados en Inge-niería, donde los estudiantes de

    pregrado pueden terminar con un grado de magíster en un tiempo más reducido. Quienes siguen un doctorado en esta área también tienen posibilidades de optar a salidas intermedias, que resultan ser muy beneficiosas para los que por un motivo u otro no pueden proseguir con sus estudios. Todos esto requiere de un cuidadoso proceso de armonización curricu-lar”, agrega.

    inTernacionalización

    La internacionalización no queda de lado en la oferta de magísteres de la Universidad de Santiago de Chile. Son varios los programas que ofrecen doble títu-lo con instituciones de educación superior en el extranjero y cada vez son más los académicos que

    llegan cada semestre a dictar cur-sos especiales a los estudiantes.

    “En este terreno, uno de los objetivos de la Universidad de Santiago es convertirse en un plantel atractivo para los profesio-nales de la región que estén en busca de especialización. Y los resultados han sido muy auspicio-sos. Hoy un buen porcentaje de nuestros estudiantes provienen de otros países atraídos por el prestigio de nuestra universidad, aportando también a los estu-diantes locales nuevas miradas a los temas en discusión. Para que cada vez sean más los estudian-tes foráneos que elijan nuestros programas, la Universidad de San-tiago está trabajando junto a la Vi-cerrectoría de Apoyo al Estudiante en entregar un mayor respaldo a quienes llegan, lo que se traduce

    en mejores servicios y programas de apoyo”, señala.

    Junto a eso, el director de Pos-grado cuenta que la universidad ofrece ayudas en financiamiento para que los estudiantes de ma-gíster puedan asistir a seminarios o congresos fuera de Santiago, presentar sus trabajos en otras organizaciones o realizar investi-gaciones.

    Por otra parte, la universidad a través de su Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo e Inno-vación y las facultades proveen de servicios e instancias especial-mente pensadas para el apoyo a la innovación y el emprendimiento basado en los resultados de las investigaciones que puedan reali-zar los estudiantes de posgrado, tanto de doctorado como de ma-gíster.

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    DR. JuAn MiGuel SePúlveDA SAlAS,director de Posgrado de la Universidad de Santiago de Chile.

    “Chile necesita investigadores que creen nuevas metodologías, tecnologías, servicios y productos, que desarrollen la industria y aporten en el crecimiento de nuestro país”.

    El 66% de los programas de magíster que imparte esta casa de estudios son de carácter profesional, mientras el 44% restante es científico.

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